+ La travesía del conocimiento. Leer para siempre

+ La travesía del conocimiento. Leer para siempre

 La travesía del conocimiento. Leer
para siempre
Descripción: Experiencia institucional de impacto
institucional y local que aporta claves para el desarrollo de
procesos de comprensión y producción textual.
Autores: Alcides y Carlos parra rojas. Institución
Educativa Departamental Tierra de Promisión (Neiva)
Hace 8 años venimos trabajando una experiencia que se consolidó como La
travesía del conocimiento. Leer para siempre. Estamos en la búsqueda de esa
tarea difícil, pero hermosa, de formar y de ganar lectores, cambiando el
esquema mental de los muchachos de la secundaria y la primaria sobre la
lectura.
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Los tipos de lector y de lectura
Hemos propuesto varias actividades para desarrollar la lectura: La primera la
hemos llamado “del lector mono al escritor niño”, en la cual trabajamos cinco
lectores fundamentales. El primero es el lector mono, porque toda lectura tiene
que ser admiración, asombro, interés y figurativamente, éstas son
características del mono. La segunda es tomada de las lecturas rumiantes de
Federico Nietzsche, y la hemos denominado “el lector vaca”, porque como toda
lectura no es plana, ni fácil, entonces en esa lectura hay que “rumiar” como lo
hace la vaca, como lo plantea el filósofo. Entonces hay que leer y releer. La
tercera lectura es la del “lector camello”: toda lectura es además tranquilidad,
trabajo y pasión y esas son características del camello.
Al fusionar esos 3 animales: el mono, la vaca, el camello, se llega a la
admiración, por consiguiente se llega al nivel de interpretación. Se pasa al
momento del “lector león”, que supone rebelión, crítica, enfrentamiento.
Entonces si se han desarrollado los 3 tipos anteriores, se ha tenido admiración,
interés, asombro, el estudiante llega a argumentar y por esa vía desarrolla la
capacidad de oponerse a lo leído, estando de acuerdo o en desacuerdo y
entonces siempre dando razones. De esta manera, se pasa de un porque si al
desarrollo de criterios argumentados a partir de los cuales se amplía el mundo
cultural del muchacho del sector popular, formando personas que ya aportan,
incluso que están disintiendo pero al mismo tiempo aportan nuevas ideas.
Y el último lector es el “lector niño”, porque la lectura tiene que ser creación,
admiración, e imaginación. Ahí se da un nuevo elemento o nivel de la lectura
que propone y desarrolla la parte expresiva. De esta manera se da un ciclo de
la lectura: se admira, se apropia, opone, se crea.
Los muchachos saben cuándo es lector mono, lector vaca o camello, cuando se
llega al lector león y cuando al lector niño. Incluso se han generado propuestas
de otros lectores desde las ciencias naturales, desde las sociales, desde las
matemáticas, desde la filosofía.
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“Solo quien lee algún día escribirá algo digno de ser leído”.
Este lema, escrito en la biblioteca- ludoteca de la Departamental Tierra de
Promisión, impulsa que al leer el muchacho aumente sus mundos culturales y
sus posibilidades de producir algún texto.
Al desarrollar las alternativas para leer y al escribir, en la institución se han
retomado los aportes del Proyecto Escuelas Que aprenden y los niveles del
lenguaje sintáctico, semántico y el pragmático en la comprensión de la
producción textual… Todo ello se fusiona con las ciencias del lenguaje a lo
largo de los planes que se han venido actualizando, y todo este conjunto
referentes repercute en el desarrollo de la creatividad del docente.
Alternativas múltiples para desarrollar la comunicación
En el proyecto se tienen otras actividades alternativas desde la música en
general, y desde la canción social en particular, con un buen contenido.
Mediante talleres de expresión que incluyen el componente musical y expresivo
corporal los estudiantes desarrollaron nuevas dimensiones de sentido y
comunicación, lo que ha repercutido manera positiva en su comportamiento, y
también en su desempeño académico.
Un elemento expresivo fundamental es la poesía. Con la poesía, una por
periodo, el muchacho la aprende y la declama y al hacerlo siente. Al aprender
de memoria la poesía, se producen sinapsis que hacen que el cerebro se
mueva de una manera diferente.
La otra actividad es la actividad del cine arte, sobre la cual hemos venido
intercambiando recursos en el proyecto Escuelas que Aprenden. Tenemos en la
institución una salita, con algunas condiciones mínimas; también trabajamos
una película de cine arte por periodo.
La institución cuenta textos escolares escritos por los autores de este artículo,
que son un conjunto de textos escolares agrupados en la serie Desarrollo de las
competencias comunicativas que se trabajan de 6º a 9º. Los dos últimos libros
de la serie se denominan Desarrollo de la comprensión lectora y se trabajan en
10º y 11º.
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Otra actividad que desarrolla el área es el juego del ajedrez. Cada 3 semanas
se tiene establecido un espacio para el "juego ciencia”, teniendo en cuenta que
mediante este juego el muchacho también aprende a leer, a pensar, a ser
sensato y razonar de manera lógica.
Además, el área trabaja de manera sistemática el grafiti y la caricatura con el
propósito de favorecer la comprensión y producción textual en un contexto
amplio que favorezcan la afectividad, el desarrollo del pensamiento, la
comunicación y la expresión. Algunas de estas actividades, se aprovecha la
dimensión política de estas estas modalidades con el propósito de desarrollar el
nivel crítico del estudiante, así como su sensibilidad social.
Uno de los propósitos del área, que logramos impulsar también dentro del
proyecto Escuelas que Aprenden como uno de los aportes que resultan del
intercambio entre los planteles, es que en cada periodo los estudiantes siempre
lean, escriban y produzcan textos orales y escritos. Desde el preescolar hasta
la media hay una obra literaria que se lee en cada periodo. Se trabaja desde el
lenguaje literario, incluyendo aspectos gramaticales, semánticos y sintácticos.
Leer el buen cine, la buena obra literaria, leer el ajedrez, hacer las lecturas,
recrear la música, recurrir al grafiti, la caricatura, el lenguaje icónico, todo eso
ha hecho que el área se dinamice, y la lengua castellana sea asumida y vivida
como un área muy dinámica y para nada aburrida.
Un proyecto lector institucional
Como todo cambio que inicia, comenzar no fue fácil. Iniciamos algunos
profesores de lengua castellana, coincidimos en muchos criterios con otros
compañeros del área y, poco a poco, con constancia y sin desalentarse,
logramos interesar otros compañeros y hoy podemos afirmar que los maestros
de la institución asumen que la lectura no es solo asunto del profesor de lengua
castellana, sino que es una condición del aprendizaje escolar en el que todos
debemos aportar. Los padres de familia también conocen el proyecto.
Años atrás, algunos docentes se quejaban: - “los muchachos no leen.” Fue
necesario preguntarnos: -¿qué no leen y por qué no leen?”, ¿qué estamos
haciendo para que lean? Hoy día en la institución educativa estamos logrando
que los estudiantes lean y especialmente, qué les guste lo que leen. Los
estudiantes son ahora muchachos más cultos, con un mundo cultural más
amplio. Han mejorado el vocabulario, se expresan y piensan mejor. En las
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pruebas Saber estos avances se han visto reflejados y tenemos buenos
puntajes.
El colegio recibe estudiantes cuya gran mayoría proviene de estratos 0, 1 y 2.
Sin embargo, gracias al proceso adelantado los padres de familia aportan a la
compra de ediciones rústicas de muy bajo precio. Sin ser lo deseable, también
ha sido necesario recurrir a fotocopias.
José Martí decía - “Injértese en nuestras republicas el mundo, pero el tronco
debe ser el de nuestras republicas”. Nos hemos orientado por esta consigna, y
tenemos en cuenta el canon universal. Es fundamental que los muchachos
sepan sobre el Quijote o sobre Cien años de soledad. Pero es inaudito que un
maestro huilense no se haya leído La Vorágine, nuestra insignia literaria. Pero
al mismo tiempo hay que considerar la abundante literatura juvenil de gran
calidad, los cientos de escritores jóvenes que la globalización nos trae.
Y un proyecto personal
Hace 4 años inicié con un grupo del sexto grado en procura de aplicar y
acompañar la propuesta. Eran grupos muy inquietos, que hemos ido formando.
Seguí con séptimo, pase a octavo y hoy tengo un noveno. La satisfacción es
muy grande, pues esos muchachos han leído 14 obras literarias. Se observa en
ellos un nivel cultural diferente: toman un libro y desde que lo cogen se les ve el
asombro, el entusiasmo de la lectura, el reconocimiento y manejo de las figuras
literarias, no se quedan en el simple hecho de la decodificación, se asombra de
los poemas, la prosa que leen.
Este esfuerzo por dar mejores aprendizajes a los estudiantes, requiere de “un
buen estado lector, si parafraseamos el buen estado físico que corresponde al
profesor de educación física. Si el maestro no es un buen lector verá limitada su
acción formativa. Borges decía: -Siempre imaginé que el paraíso de la
humanidad seria algún tipo de biblioteca”, y en nuestras casas hay una pieza
especial dedicada a las bibliotecas, y así se llama, la biblioteca, con un 80% de
los libros ojeados, leídos y releídos. ¿Cuál, querido lector, fue el último libro
que usted compró?
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