De la respiracion al contacto

De la respiración al Contacto
De la respiración al contacto
Aprendiendo de la práctica recurrente
Dijimos en muchas oportunidades que entendemos al coaching ontológico como una
disciplina en la que resulta vital “hacer contacto” para poder llevarla a cabo. Este
trabajo es un intento de abordar este desafío desde la práctica de la respiración. Más
adelante complementaremos este abordaje con nuevas y diversas metodologías de
aprendizaje.
Creemos que para in-corporar (hacer cuerpo) este tipo de competencias requeriremos
algo más que leer y reflexionar sobre una lectura: precisamos de un enfoque que
incluya el abordaje corporal para la transformación de prácticas en la gestión diaria.
De hecho el aprendizaje transformacional que deviene de una interacción de coaching
ontológico ocurre en la coherencia que somos de Cuerpo, Emocionalidad, Lenguaje y
Algo más (C.E.L.Am) en el marco de un cierto contexto.
Es por ello que te invitaremos a protagonizar el espacio y a explorar con nosotros a
través de una secuencia que te ofreceremos como guía y que desde ya te alentamos
a transitarla observando simplemente la experiencia que vas teniendo en el hacer.
La clave de este trabajo es realizar la experiencia y observar sin
juzgarla.
No hay nada en especial “que debería pasar”. Sólo hacer la experiencia y observar.
2
De la respiración al contacto
En qué consiste la experiencia
Es muy sencilla. Consiste en caminar primero por una habitación soltando el cuerpo y
entregándose al movimiento.
Para una mayor comprensión de lo que estamos refiriendo, reproduciremos un texto
de Osho sobre cómo relajar la respiración que fue extraído de su Libro Naranja.3
Siempre que tengas tiempo, sólo por unos pocos minutos relaja el sistema
respiratorio.
No es necesario relajar todo el tiempo.
Sentado en un tren, en un avión o en automóvil, nadie notará que
estás haciendo algo: tan sólo relaja el sistema respiratorio.
Deja que esté como cuando está funcionando en forma natural.
Entonces cierra tus ojos y observa la respiración entrando,
saliendo, entrando...
No te concentres, si te concentras creas problemas, porque
entonces todo se convierte en una distracción.
Si tratas de concentrarte sentado en el automóvil, entonces el
ruido del automóvil te distraerá.
La meditación no es concentración.
Es simplemente conciencia.
Simplemente te relajas y observas la respiración. En ese observar
nada es excluido. El auto está zumbando: perfectamente bien,
¡acéptalo!
El tráfico está pasando: eso está bien, es parte de la vida.
El ronquido de tu compañero de viaje a tu lado: ¡acéptalo!
Nada es rechazado.
3
De la respiración al contacto
4
De la respiración al contacto
Creemos que este texto facilitará el acceso a la relajación y al contacto para estar más
disponible para una interacción de coaching ontológico y para tu bien-estar en
general.
Es una muy buena oportunidad para sentirse protagonista del aprendizaje creando
cada persona las condiciones adecuadas para estar a gusto.
Creemos que el contacto acaece. No podemos forzarlo. De hecho cuanto más lo
forzamos, menos ocurre. Es una linda metáfora de lo que sucede en una interacción
de coaching ontológico. Reiteramos: cuanto más pretendamos forzarlo, menos
probabilidades de ocurrencia tendremos…
Quizás no sea una locura entender la disciplina del coaching ontológico como “el arte
de no hacer…”
5