Contax G2 ¿genialidad o Locura?

Contax G2 ¿genialidad o Locura?
En 1994 la corporación Kyocera revive una tradición ya olvidada para la casa Contax
con el lanzamiento de una cámara moderna de telémetro, la Contax G1, una cámara que
representa una auténtica revolución en el clásico mundo de las cámaras de telémetro
siendo la primera cámara de telémetro AF jamás fabricada. Dos años mas tarde (1996)
se introduce la Contax G2 mejorando el rango de velocidades (de una máxima de
1/2000 a 1/6000), una mejora de la velocidad de sincro (de 1/100 a 1/200), un sistema
de arrastre mas rápido (de 2fps a 4fps) y una mejora sustancial del sistema de enfoque
añadiendo un sistema de enfoque activo por infrarrojos además del pasivo por contraste.
Ambas cámaras son de telémetro AF (enfoque automático) con objetivos
intercambiables, compactas y de alta calidad. A continuación tratare solo de la G2 y de
los objetivos de 28 45 y 90mm ya que representa el material con el que tengo
experiencia.
Lo primero que debemos reconocer es que la G2 es una cámara orientada al fotógrafo –
consumidor con cierto poder adquisitivo, el kit base de cuerpo más el 45mm ronda un
precio de 2000 , razón por la que muchas veces se la ha encasillado como una cámara
compacta “pija” o de lujo. Esto nos indica en cierta medida lo revolucionaria que ha
sido esta cámara. Básicamente esta cámara se plantea como la antítesis de la Leica M6
(la oferta de Leica contemporánea a la serie G de Contax), todo lo que tiene esta cámara
es lo contrario de lo que tienen las Leica, salvo la excelente calidad óptica.
Las cámaras de telémetro de objetivos intercambiables desde sus inicios han seguido el
modelo Leica donde se podía simplemente diferenciar entre las cámaras Leica y las que
querían ser como Leica, algunas con más éxito que otras. Las cámaras de telémetro de
óptica fija tampoco se alejaban mucho más del modelo básico de las Leica M. Por lo
tanto la Contax G1 y consecuentemente la Contax G2 suponen el primer cambio radical
en este tipo de cámaras, cambio por el cual a muchos les cuesta aceptarlas como de
cámaras de telémetro y no como una compacta más de óptica intercambiable, se podría
decir que es casi como la cámara bastarda del mundo del telémetro.
La cámara
El cuerpo de la Contax G2 es prácticamente del mismo tamaño que del de una Leica M,
13.8cm de ancho, 8cm de alto y 3.5cm de grosor (con un engrosamiento de la
empuñadura de 0.8cm por delante y 0.5cm por detrás, además de 1.2cm que sobresale el
visor por detrás). El acabado de la cámara puede ser tanto en titanio como en negro, yo
dispongo de la versión en titanio y de este metal tan solo tiene el color, a lo sumo una
ligera capa, pero no esta fabricada con titanio propiamente dicho (varios rayones y
golpes lo demuestran). La sensación general del cuerpo de cámara es buena, se siente
sólido en las manos y con una densidad adecuada para poder sujetar la cámara con
comodidad y evitar trepidaciones. Cabe mencionar que en referencia a una Leica M la
Contax G2 resulta un tanto más abultada en la mano.
Los controles son igualmente sólidos y fáciles de manejar con un posicionamiento
ergonómico muy bien logrado. El control de velocidades, horquillado, compensación de
exposición, enfoque y encendido se encuentran entre el índice y el pulgar derechos, el
control sobre el avance de la película, ISO y temporizador sobre el pulgar izquierdo.
Para quien tenga las manos muy grandes puede resultar un paquete bastante complicado
de manipular y un poco engorroso dadas las pequeñas dimensiones de la cámara. La
cámara como es de suponer, es electrónica y requiere de 2 pilas CR2 de litio de 3V que
se agotan sensiblemente antes que las tradicionales pilas de botón de una Leica, que
solo activan el fotómetro. Tiene 2 pantallas LCD externas (una es el contador de
exposiciones, la otra es el indicador de distancia y demás datos), hay un tercer LCD
interno en el visor.
El Enfoque
Como ya he dicho, se trata de una cámara por telémetro AF. Un telémetro es un
dispositivo que permite medir la distancia a un objeto. En la fotografía se utiliza para
enfocar los rayos de luz procedentes de un objeto sobre el plano de la película. Con este
fin, tanto la imagen partida en una cámara reflex como la superposición de imágenes de
una cámara de telémetro se pueden considerar sistemas telemétricos, sin embargo se
considera en la jerga fotográfica como telémetro al de superposición de imágenes de las
cámaras, tal como indica su nombre, de telémetro.
El sistema de telémetro de la Contax G1 y G2 no es por coincidencia de imágenes, sino
por diferencia de contraste como el de las cámaras reflex AF, donde hay 2 CCD que
triangulan al objeto desde 2 puntos distintos por lo que se llama enfoque por detección
de fase: un CCD se acerca por detrás del punto de enfoque y otro por delante de este
punto. En las Contax G, en vez de hacerlo a través del objetivo como en las reflex, lo
hace cada CCD con una ventan propia, donde un sistema óptico amplia su base efectiva
“plegando la luz” por reflexión. Este sistema se denomina de AF pasivo ya que solo se
utiliza la luz que procede de la escena, es un sistema muy fiable pero que falla bastante
con la falta de contraste. Por esta razón la G2 además del sistema de AF pasivo
incorpora un sistema activo por infrarrojos que emite una señal IR que al rebotar del
objeto marca un ángulo determinado y así triangula la distancia al objeto. Este sistema
puede enfocar de forma muy precisa incluso en plena oscuridad, pero su eficacia se
limita a unos pocos metros (4m).
También existe la opción del enfoque manual, pero no como lo concebimos
tradicionalmente. En vez de girar un tambor en el cuerpo del objetivo se enfoca
mediante una rueda de enfoque, colocando el objeto a enfocar entre 2 corchetes que se
ven en el visor (los mismos que utiliza el AF). En el LCD se muestra una escala que nos
indica en cuanto discrepa la distancia actual del punto real de enfoque, no es mas que un
AF que lo vamos calibrando nosotros, el valor en si se mide de la misma forma y
nosotros no tenemos mas remedio que fiarnos. Por tanto el enfoque manual resulta entre
ridículo y frustrante, resultando útil tan solo cuando sacamos fotos a infinito (para evitar
errores fijamos el enfoque a infinito y ya nos despreocupamos) o cuando se utiliza una
distancia de enfoque hiperfocal fija.
Uno de los problemas y critica mas fuerte contra este sistema de enfoque es la falta de
confirmación real de enfoque. En un telémetro tradicional tampoco se puede comprobar
el enfoque a tiempo real, sin embargo sí podemos ver 2 imágenes que están
superpuestas o no. Estas 2 imágenes varían en distancia según vamos manipulando el
anillo de enfoque y eso nos da una sensación de causalidad entre lo que hacemos
nosotros y lo que ocurre en el visor. Con las Contax G esto no ocurre, el enfoque se
realiza por un sistema que no controlamos ni vemos como funciona, simplemente nos
informa que el objeto esta enfocado y esto genera cierta incertidumbre sobre si esta o no
esta enfocado.
Para utilizar el sistema de enfoque en la G2 he adoptado una formula con la que suelo
obtener un buen enfoque en la gran mayoría de los casos de forma ágil y rápida. El
selector de modo de enfoque se sitúa en enfoque continuo, de tal forma que presionando
el botón de disparo hasta la mitad el enfoque se va actualizando de forma continua,
presionamos hasta el final en el momento que queremos tomar la foto. Si el objeto que
queremos fotografiar es estacionario, podemos utilizar el botón de bloqueo de enfoque,
situado en la parte posterior y que cae directamente debajo del pulgar derecho. De esta
forma enfocamos, bloqueamos el enfoque, reencuadramos y tomamos la foto; evitando
el retraso entre que apretamos el botón y hasta que se expone la película que suele darse
cuando simplemente apretamos el botón y tenemos que esperar a que enfoque antes de
tomar la foto (esta es otra de las principales criticas a este sistema). Bloqueando el
enfoque con anterioridad nos permite presionar el disparador y exponer la película en el
momento justo que deseamos captar sin ningún retardo. Con esta configuración
tenemos la ventaja añadida de no tener que cambiar el selector de AF, sino que para el
enfoque continuo utilizamos el botón del disparador, y para enfoque de servo único el
de bloqueo de enfoque.
El visor
El visor de esta cámara es uno de sus puntos más negativos y a la vez uno de los más
interesantes. Comparado con un visor de telémetro normal, el visor de las Contax G,
resulta minúsculo, proclive a los reflejos y oscuro, todo lo contrario de un visor de
líneas brillantes habitual en casi cualquier cámara de telémetro. Este es un punto en
contra de esta cámara bastante importante ya que una de las ventajas de las cámaras de
telémetro es justamente un buen visor, grande, cómodo y luminoso, el de las Contax G
no lo es.
Sin embargo este visor tiene una gran ventaja que compensa la molestia y poca
luminosidad del visor; El visor se adapta a la focal del objetivo que lleva montada la
cámara. Con esto nos referimos a que la ampliación del visor literalmente cambia según
la longitud focal de la óptica, en vez de tener una ampliación fija con recuadros
luminosos que se encienden u ocultan según la focal seleccionada. Canon ya utilizaba
un sistema parecido en algunas de sus cámaras de telémetro, sin embargo Contax lo ha
llevado a un nivel mucho más eficaz ya que no son posiciones discretas de varias
focales sino que el visor tiene una adaptación continua, lo que facilito la producción del
primer objetivo zoom para una cámara de telémetro. Este sistema no cuenta con
recuadros brillantes, por lo que solo se ve lo que encuadras y nada fuera de eso como se
puede ver por ejemplo con un visor más tradicional y que nos permite prever elementos
que estén a punto de entrar en la escena.
La mayor ventaja de este sistema se aprecia con el Sonnar 90mm F2.8, donde vemos la
imagen ampliada equivalente a lo que se ve con un objetivo de 90mm en vez de ver un
recuadro minúsculo de difícil composición y enfoque. Con el 45mm F2 también vemos
una imagen clara que llena el visor en vez del recuadro de 50mm típico de una Leica
(0.72x) que aproximadamente cubre la mitad del visor (para poder acomodar las líneas
de 28mm). El visor en posición de 28mm resulta mostrar una imagen ligeramente
inferior a la cobertura del objetivo mismo, aproximadamente el 90% de la imagen.
Entre otras ventajas del visor esta la corrección del error de paralelaje mediante
mascaras de forma bastante efectiva aunque no con demasiada elegancia, las mascaras
se las ve saltar de una posición a otra (no como en Leica donde el desplazamiento se
hace de forma progresiva y sin saltos. Esto es principalmente por la naturaleza del
sistema de enfoque de las Contax G que es capaz de saltar de un punto a otro sin pasar
por los puntos intermedios de enfoque).
El visor también dispone de un panel de cristal líquido que indica la velocidad, marcas
de sobre y subexposición, y una escala con distancias de enfoque con una marca que
indica la posición de enfoque actual. Esta escala sirve de cierta forma para confirmar el
enfoque, pero solo a grandes rasgos, no indica discrepancias de pocos centímetros. Por
otro lado esta escala es una ayuda importante a la hora de trabajar con un flash manual
ya que nos marca directamente la distancia al objeto, con lo cual, sabiendo el numero
guía del flash podemos fijar el diafragma de forma casi instantánea. Desgraciada e
incomprensiblemente el diafragma seleccionado NO aparece en el visor, ni el numero
de fotograma en el que estamos, 2 datos importantes y de los que la cámara dispone
(hay un contador externo y el respaldo opcional es capaz de grabar el diafragma en los
datos de la foto) por lo que no se comprende su omisión en el visor.
El obturador, velocidades y exposición
La cámara dispone de un obturador de láminas de recorrido vertical con unas
velocidades comprendidas entre 16seg y 1/6000 del segundo en modo de prioridad de
apertura y entre 4seg y 1/4000 en modo manual, la velocidad de sincro esta fijada en
1/200. La combinación de sonidos del obturador junto al motor (para ser un motor tan
potente de hasta 4fps resulta extremadamente silencioso) genera un ruido un tanto
peculiar que puede llegar a ser irritante sin llegar a ser demasiado fuerte, sino más bien
por su tono algo agudo. Este sonido junto al zumbido del sistema de enfoque ha
supuesto otra de las críticas que mas se hacen acerca de estas cámaras, ya que la
fotografía con cámaras de telémetro siempre se caracterizo por su discreción. No se
puede negar que el ruido de la cámara es peculiar, pero en una situación de calle normal
con los ruidos del tráfico y personas habituales suele pasar desapercibido, no así en
situaciones mas criticas. En Internet se ha escrito mucho acerca de esto y he de admitir
que muchas veces se exagera la molestia de estos sonidos.
El fotómetro es de preponderancia central bastante normal que mide de una granja gris
pintada sobre las láminas del obturador. Por mi experiencia puedo comentar que tanto
las velocidades en si como el fotómetro resultan altamente exactos y de una fiabilidad
envidiable. Para la utilización del Hologon 16mm F8 hay un sensor externo ya que la
célula interna se ve bloqueada por el cuerpo del objetivo dentro de la cámara.
Los objetivos
Los objetivos para las Contax G los fabrica Carl Zeiss en Japón con sus diseños
clásicos: Hologon, Biogon, Planar, Sonnar y Vario Sonnar. 16mm F8 Hologon; 21mm
F2.8 Biogon*; 28mm F2.8 Biogon; 35mm F2 Planar*; 45mm F2 Planar; 90mm F2.8
Sonnar; 35-70 F3.5~5.6 Vario Sonnar**
* Para utilizar en la Contax G1 hay que actualizar el ROM de la cámara con las tablas
de enfoque de los objetivos. Una vez actualizado el ROM, la cámara lleva una pegatina
verde en su base. Esta actualización se hace de forma gratuita por el servicio técnico de
Contax.
** Este objetivo no se puede utilizar en la Contax G1.
Estos son los únicos objetivos disponibles para el sistema G de Contax. No hay
versiones diferentes, ni posibilidad de aperturas máximas más luminosas. La selección
es efectivamente limitada en comparación con otras marcas. Esta limitación se hace
especialmente patente comparada con Leica que dispone de varias versiones de cada
óptica, además de tener las mismas longitudes focales con diferentes aperturas
máximas. Con la introducción de la Contax G2 se introducen los objetivos de 21mm y
35mm, para los cuales hay que actualizar la Contax G1. En 1999 se introduce el primer
objetivo zoom real para una cámara de telémetro, su rendimiento no parece ser tan
bueno como el de las ópticas fijas, pero tampoco es mal objetivo.
Sobre la calidad de estas ópticas se ha escrito mucho, principalmente comparándolas
con las ópticas de Leica, su más directa competidora sobre el mercado de cámaras de
calidad. Personalmente he podido utilizar ópticas de ambos sistemas y no creo que se
puede estipular una diferencia significativa de calidad entre ambas, he encontrado que
ambos sistemas de ópticas son de calidad superlativa. Creo que plantear la elección del
sistema basándose únicamente en su calidad óptica es un error, ya que la forma de
funcionamiento, cualidades, y prestaciones de cada sistema son tan distintas uno de otro
que condicionan mucho mas la elección de un sistema Leica M o Contax G que si las
ópticas de uno son un poco mejor que las de otro.
Las ópticas están montadas sobre cuerpos de titanio, como la cámara, supongo que
serán simplemente “sensación” titanio. Con un aro de diafragmas muy firme y con los
clicks bien definidos. Hasta ahí las buenas noticias, las malas son muy malas. No hay
aro de enfoque; para que el enfoque sea mas rápido y preciso se ha prescindido de un
aro de enfoque, de ahí que el enfoque manual se haga mediante una rueda de forma
electrónica. Para un usuario que esta acostumbrado al aro de enfoque esto resulta MUY
desagradable y antinatural este nuevo sistema. El segundo gran fallo de los objetivos es
la falta de escalas de profundidad de campo, comprensible ya que no hay aros de
enfoque tampoco. No hubiese estado mal un botón de distancia hiperfocal ya que el
ROM de la cámara contiene todas las tablas de enfoque de cada objetivo. El montaje de
los objetivos tampoco tiene desperdicio, en vez de girar el objetivo en si para montarlo
en la cámara, hay que encajar el objetivo en su correcta posición y girar una sección
intermedia en el cuerpo del objetivo. Esto hace que el cambio sea un poco mas lento,
necesitando embocar la bayoneta y el anclaje del AF y luego girar la sección media del
objetivo, el intercambio rápido de ópticas no es tan rápido
El enfoque del objetivo se coloca en su correcto lugar al disparar aunque ya se haya
enfocado y se vuelve a retraer una vez tomada la fotografía. Esto genera un retraso a la
hora de disparar y ruido del movimiento adelante y atrás del objetivo, se soluciona
presionando el botón de bloqueo de enfoque que mantiene el objetivo en posición de
enfoque de forma constante o presionando el disparador rápidamente en menos de 1
segundo desde que se toma la foto. Por otro lado, casi todos los objetivos tienen una
rosca de filtro de 46mm (salvo el 16 y 21mm) lo que facilita encontrar tapas y filtros
para usar e intercambiar entre los objetivos. También hay una serie de parasoles que no
se incluyen con los objetivos (salvo el 16mm) y no son baratos, cosa incomprensible en
una cámara de esta categoría que no vengan de serie con los objetivos.
El objetivo de 16mm merece una mención especial ya que es la primera vez desde hace
muchos años que Carl Zeiss reintroduce esta óptica, anteriormente disponible en
montura M de Leica, que hoy en día no es mas que un articulo de colección y su precio
es prohibitivo. Este nuevo Hologon representa por primera vez en mucho tiempo la
posibilidad de utilizar un objetivo de gran cobertura y altísima calidad óptica a un
precio razonable, es el único objetivo del sistema que no es AF. También existe un
adaptador para utilizar objetivos de Contax reflex en las Contax G, pero sin AF ni
confirmación de enfoque.
El sistema Contax G
El sistema Contax G se compone de 2 cuerpos de cámara, 7 objetivos y 2 flashes
además de los accesorios disponibles como estuches, respaldos, etc. La última
introducción se realizo en 1999 con el 35-70 Vario Sonnar. Desde 1999 este se
considera un sistema “muerto”. A pesar que se han barajado distintas especulaciones
como la presentación de una G3 de película con prestaciones mejoradas, una G3 digital
compatible con los objetivos actuales, objetivos nuevos y luminosos, etc. La realidad es
que no se ha presentado nada más y Contax no parece inspirar mucha confianza acerca
del futuro de este sistema, cosa que ha provocado una impresionante bajada de precios
de las cámaras y objetivos, representando una alternativa significativamente más barata
que Leica.
Por tanto el que se introduzca en este sistema de cámara debe tener en cuenta que se
trata de un sistema relativamente cerrado, con opciones limitadas a la hora de selección
de ópticas. Esto no resta de la impresionante calidad de imagen, manejo y rendimiento
que se obtiene con esta pequeña cámara. Visto desde una perspectiva mas humorística
se puede decir que es fácil saciar nuestros deseos de comprar material, ya que una vez
que tienes los 7 objetivos, 2 cámaras y flashes ya no queda nada mas que comprar.
Contax G y Leica M
Como es normal, tratándose de la elite de las cámaras fotográficas actuales, la
comparación entre las cámaras de Leica y Contax es inevitable. Mas que la diferencia
en prestaciones ópticas hay diferencias conceptuales de los propios sistemas.
El sistema Leica M, diseñado en los años 50 comenzando en el 1954 con la mítica Leica
M3 es un sistema que se basa en la simplicidad y excelencia mecánica. Solo incluye lo
fundamental considerando lo demás como accesorio y no esencial para la toma
fotográfica. A pesar de los avatares que ha sufrido Leica a lo largo de los años su
filosofía parece continuar en la misma línea introduciendo mejoras tecnológicas de
forma espaciada y cautelosa. La ultima, un modo de exposición con prioridad a la
abertura en la M7, unos 30 años mas tarde que las demás marcas.
El sistema de Contax G se diseña y lanza en pleno auge del mercado de cámaras reflex
AF, donde el fotógrafo de a pie ha incorporado ya a su estilo de trabajo los motores, el
AF, las pilas, etc. Por lo que ambas cámaras están diferenciadas no solo por sus estilos
sino por 40 años de evolución del panorama fotográfico. A continuación veremos las
características principales y más salientes de la G2 y la M6TTL donde veremos
claramente como se pueden tratar de tesis y antítesis en casi todos sus aspectos. La
comparación no se realiza con la M7 ya que esta rompe con la línea mas tradicionalista
de Leica, introduciendo el primer y único obturador electrónico de Leica en mas de 70
años de producción de cámaras de telémetro (no así en las cámaras de serie R, cuyas
bases de cuerpo estaban diseñados por Minolta hasta la R8).
Criterio
Contax G2
Leica M6TTL
Construcción
Aleación de
aluminio con
paneles externos
de titanio,
montura de acero
inoxidable
Aleación de
aluminio con
paneles
externos de
zinc y bronce,
montura de
latón cromada.
Visor
Enfoque
De tipo galileo
para focales de 28
a 90mm con ajuste
automático de
campo de visión y
ampliación. Con
visores opcionales
para otras
longitudes.
Visor de líneas
brillantes
indicadoras de
cobertura,
ampliación fija,
para focales de
28 a 135mm.
Con visores
opcionales para
otras
longitudes.
Telémetro AF
externo, activo y
pasivo.
Manual,
girando el
tambor del
objetivo. Por
telémetro de
coincidencia.
Carga manual
por la parte
inferior de la
Carga automática, cámara, avance
por palanca
motor de
manual,
fotograma único,
Avance Película
rebobinado por
2fps, 4fps.
palanca
Rebobinado
manual.
automático.
Opción de
winder y
motor.
Exposición
múltiple
Si
No
Temporizador
Si
No
Objetivos
Mas de un
centenar de
objetivos, tanto
de Leica como
6 objetivos AF
de otras
intercambiables y
marcas, en
1 Manual (16/8,
montura M y
21/2.8, 28/2.8,
rosca, como
35/2, 45/2, 90/2.8, para visoflex,
incluyendo
35-70/3.5~5.6)
focales desde
12mm y super
teleobjetivos
para visoflex.
Selectiva por
Preponderada al
un fotodiodo de
centro por un
silicona que
Medición de la
fotodiodo de
mide de un
luz
silicona que mide
circulo pegado
de una franja gris
en la primera
sobre el obturador
cortinilla.
Obturador
Mecánico de
Electrónico de
seda engomada
laminas con un
con un rango
rango de
de velocidades
velocidades entre
entre 1seg y
16seg y 1/6000
1/1000
Flash
TTL con sincro a TTL con sincro
1/200
a 1/50
Alimentación
2 pilas botón
PX76/SR44, no
opera el
2 pilas CR2 de
litio, no opera sin fotómetro sin
pilas, el
pilas.
obturador es
mecánico.
Contax G2 en la Práctica
A la hora de sacar fotos la Contax G2 resulta ser una cámara muy ágil y fiable. El
sistema de enfoque es muy exacto y fácil de utilizar, de la misma forma que utilizaba el
AF de la Nikon F90 o F4, se apunta al objeto a enfocar, se bloquea el enfoque y se
reencuadra la foto. Con el 90mm a plena apertura y a mínima distancia de enfoque a
veces pueden surgirnos dudas acerca de la exactitud del enfoque ya que la profundidad
de campo es mínima y no tenemos forma de comprobar si ha enfocado sobre las gafas
de la persona o sobre el ojo. Es una situación incierta que con una Leica tampoco se
tiene tan claro, ya que los detalles dentro del telémetro son mínimos, simplemente
tenemos que aceptar la poca idoneidad de este tipo de cámaras con teleobjetivos. Existe
el truco de enfocar sobre el propio corchete, al parecer tiene mas exactitud.
Con el 28mm a veces también surgen algunas incomodidades, como el uso del enfoque
hiperfocal, que requiere pasar a enfoque manual. El visor suele dar un poco menos de
cobertura de lo que realmente muestra el objetivo de 28mm, sin embargo no esta mal
sacar un poquito mas de lo que se ve.
En general, la cámara resulta muy cómoda, el cuerpo de cámara con los 3 objetivos
pesan poco mas que 1.2 kilogramos. El color dorado de la cámara ayuda a pasarla
desapercibida ante la gente, parece una cámara compacta mas de estas que llevan los
turistas; si además vamos con pantalones cortos y camiseta chillona, pasamos como
turistas sin ningún problema y la gente ni se inmuta viéndonos con la cámara en mano.
Los controles en si están muy bien situados con el botón de bloqueo de enfoque justo
debajo del pulgar y el de disparo debajo del índice. De esta forma con el pulgar se
enfoca y el índice dispara la cámara.
La calidad óptica de los objetivos me resulta satisfactoria con unas características muy
interesantes: una separación tonal muy amplia sin sacrificar el contraste, muy buena
resolución, buena resistencia a los reflejos y un bokeh muy suave y agradable. Como en
la mayoría de los objetivos los mejores resultados se obtienen diafragmando un poco,
con una imagen muy tridimensional, sin embargo son perfectamente utilizables a plena
apertura. Mi gusto personal se inclina más hacia los objetivos de Contax que a los
objetivos Leica que he tenido la ocasión de usar, simplemente los noto más naturales.
Las pilas aun no se han convertido en un problema, el consumo no es muy alto y aun
cuando indica que las baterías están bajas quedan un par de carretes de gracia. El único
inconveniente es que las funciones especiales se resetean al cambiar las pilas, por lo que
hay que volver a configurarlas (son solo 5). Sin embargo no deja de ser una cámara
urbana, que dada la situación se pueda conseguir pilas fácilmente.
En definitiva resulta una cámara muy ágil, fácil de usar y de transportar, versátil e
intuitiva. Creo que el “bajo” precio que tiene ahora, especialmente en el mercado de
ocasión refuerza aun más sus ventajas. Solo una puntualización, Esta cámara no es un
sustituto de Leica, sino un complemento. Quien se decida por una Contax G2 como
alternativa a comprar una Leica, puede no estar del todo contento con su elección, si se
quiere una Leica mejor ahorrar un poco más y adquirir la Leica.
Diego K.