RESPIRAR LA VIDA (Un cuadro imaginativo de la Divina Madre y

Transcripción

RESPIRAR LA VIDA (Un cuadro imaginativo de la Divina Madre y
RESPIRAR LA VIDA
(Un cuadro imaginativo de la Divina Madre y una alma)
Ven, siéntate a mi lado y si quieres junta las manos en tu regazo, en señal de
recogimiento.
Aprovecha esta oportunidad para estar juntos, para contemplar, para meditar como lo
hacen las personas serenas, quizá como lo hacían tus abuelos. ¿Recuerdas? Al final de
las faenas diarias simplemente se sentaban en alguna banca del corredor de la casa en
silenciosa compañía, por un rato. Pienso que con sus pensamientos se comunicaban,
porque no recuerdo que se expresaran muchas palabras, pero a mí me confiaban su vida
y su alma.
Te invito a que, en silencio abras tu corazón y respires,
con todos tus sentidos, la Vida que te rodea.
Mantén la suficiente resolución para permanecer
conmigo en ese silencio interior, abierta al
diálogo que pueda surgir. No es necesario
llenar el silencio con palabras, sino con la
presencia mutua.
Puedes si quieres contarme de tu vida, de tus
alegrías, de tus preocupaciones, afanes o de
alguna otra cosa. Pero también puedes solamente
quedarte aquí en silencio, absorbiendo la vida que te
rodea.
Al rato puedes percibir que empiezo a poner en tus pensamientos algunas palabras o
ideas, y si lo deseas, puedes considerarlas.
Profundiza en ellas, son mi respuesta amorosa para tu alma receptiva. Respira la vida. Si
estas palabras tienen el sello del amor, la concordia, la armonía, el respeto, la solución
liberadora para todos, el valor, la ofrenda de sí y el esfuerzo común e interdependiente, es
señal de que provienen de Mí.
Solo te recuerdo: haz vida las comprensiones importantes que tengas, si no, te irías con
las manos vacías luego de este tiempo de respiración de la vida y de unión conmigo.
Vete en paz cuando quieras, pero vuelve pronto.
La Divina Madre.

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