TEMAS: La Misiones y el Servicio UNA PALABRA CONTIGO

Transcripción

TEMAS: La Misiones y el Servicio UNA PALABRA CONTIGO
TEMAS: La Misiones y el Servicio
UNA PALABRA CONTIGO - Por Ron Hutchcraft
"El Problema de la Cosecha"
Mateo 9:36
Nuestro hijo mayor trabajó como misionero con los jóvenes en una tribu de nativos
estado unidenses en el suroeste. Durante sus primeros días allí terminó ayudando a un
hombre nativo a desmalezar su siembra de maíz. La tribu vive en un lugar donde es muy
difícil cultivar cualquier cosa. Quiero decir, el maíz es el cultivo más importante, pero no
crece fácil porque es un lugar donde sólo caen entre 10 y 12 pulgadas de lluvia al año.
Bueno, ellos allí han perfeccionado un método llamado la agricultura al seco. Eso implica
una gran cantidad de trabajo agotador. Una de las claves es desmalezar el huerto antes
de que la maleza le pueda arrebatar la preciosa humedad al maíz. Al final de una tarde
dura y calurosa le preguntó al agricultor, "¿Qué cantidad de maíz realmente va a poder
cosechar?" Y el hombre dijo: "Bueno, alrededor del 10%." A lo que mi hijo respondió
"Oh, vaya, después de todo este trabajo, eso no es mucho. ¿Por qué sucede eso?" Y él
dijo: "Bueno, te voy a decir donde pierdo la mayor parte de mi cosecha." La respuesta
fue sorprendente.
Soy Ron Hutchcraft, y hoy quiero tener UNA PALABRA CONTIGO acerca del tema
"El Problema de la Cosecha."
Nuestra palabra para hoy de la Palabra de Dios viene de Mateo capítulo 9, comenzando
en el versículo 36, en el Nuevo Testamento. Ah, por cierto, el agricultor le dijo a mi hijo
"Yo podría cosechar todo si sólo tuviera un poco más de trabajadores." Jesús conoce ese
sentimiento. La Biblia dice: "Al ver a las multitudes, tuvo compasión de ellas, porque
estaban agobiadas y desamparadas, como ovejas sin pastor. ‘La cosecha es abundante,
pero son pocos los obreros, les dijo a sus discípulos. Pídanle, por tanto, al Señor de la
cosecha que envíe obreros a su campo.'"
Jesús dijo: "la mies es mucha." Él ahí está hablando acerca de los perdidos; las personas
que no tienen a Cristo en sus vidas. Cuando hablo con los agricultores acerca de lo que
significa la palabra cosecha, ¿sabes cuál es la primera palabra que te van a decir? "Lista."
Sí, está lista. Eso es la cosecha. Estamos rodeados de gente perdida, entonces, ¿Quiénes
están listos para Jesús? La cosecha es abundante. Entonces tú dices: "Bueno, para mí,
ellos no parecen estar muy interesados en Jesús." Eso es simplemente porque ellos no
saben lo que Jesús puede hacer.
Las relaciones en estos días no pueden estar más rotas, más decepcionantes, más
frustrantes. La soledad nunca ha estado más desenfrenada, más incurable. Parece como
si el futuro nunca hubiera estado tan incierto. Las familias son difíciles. El dolor se ha
extendido. Allí hay un terreno fértil para el amor; la paz, la seguridad, el poder, la
curación que sólo Dios puede darte.
Ellos están listos, pero hay un problema. Los obreros son pocos. ¡Ese es el problema de
la cosecha! El problema no es la cosecha de los perdidos; ese no es el problema. El
problema es la apatía del pueblo de Dios. ¡No hay suficientes trabajadores!
Qué razón tan trágica para perder la cosecha; para que la gente caiga en una eternidad
sin Cristo. Pero en este momento Dios está tratando de enviar obreros a Su campo de
cosecha – tal vez eres tú.
Tal vez has llegado a sentirte preocupado con tus propias presiones y problemas. En los
días de Hageo, el profeta, dijo: "Porque mi casa (aquí Dios está hablando) está en ruinas,
mientras ustedes sólo se ocupan de la suya." ¿Podría ser que la agenda de Dios, el
pueblo perdido por quien Su hijo murió, se haya perdido en tu agenda?
¿Podría ser que no te sientes preparado para hablarle a la gente acerca de Él? Pero Dios
decidió que tú eres el único para ser Su representante personal en ese círculo de
personas. Él te va a dar las palabras. Él va a abrir las puertas. El tiempo es corto.
Mi corazón se quebrantó cuando me enteré de lo que el agricultor había dicho: "Yo
podría cosechar todo si sólo tuviera un poco más de trabajadores." No estamos
cosechando maíz. No, estamos cosechando la vida eterna, las almas que nunca mueren.
Te gustaría dar un paso adelante a esa tarea de hoy y decir: "Señor, puedes traer un
poco más, porque tienes un trabajador más."
Escribe A… UNA PALABRA CONTIGO APARTADO 2805 MIAMI FLORIDA 33265 ESTADOS
UNIDOS. O LLAMA GRATIS AL… 1 800 880 53 39.
Una Palabra Contigo de Ron Hutchcraft.
614-INT-7215(R)2092 "El Problema de La Cosecha" © 2014 Ronald P. Hutchcraft El permiso para distribuir este
material a través del correo electrónico, o a través de copias individuales, se concede automáticamente bajo la
condición de que sea utilizado con fines no comerciales y que no sea vendido. Para r eproducir transcripciones de
"Una Palabra Contigo" en cualquier otro formato, incluidos los sitios de Internet, se requiere el permiso por
escrito de Ron Hutchcraft.

Documentos relacionados