Número 77 - Escuela de Psicología Social de Montevideo
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Número 77 - Escuela de Psicología Social de Montevideo
Año 8 • Nº 77 • Abril de 2006 • $ 4.- El hombre inteligente encuentra casi todo ridículo, el hombre sensible casi nada. Goethe “El trabajo de quitar el yo” Actualidad de Macedonio Fernández / Noelia Billi Sobre “La Lotería en Babilonia”, de Jorge Luis Borges Suerte de existir / Marcelo Percia Azar manipulado, una terapéutica / Adriana Zambrini 77 24 de marzo: otros modos de hacer historia / Denise Najmanovich Implicancias psicológicas de la migración / Liliana Ferrero La metáfora, sin metáfora, de Cromañón / Colectivo Situaciones Director Director Román Mazzilli Secretario de redacción Walter Vargas Redacción Luis Gruss, Patricia Mercado, Denise Najmanovich, Daniel Seghezzo Publicidad María Eugenia Conde Colaboran en esta edición Adriana Zambrini, Marcelo Percia, Liliana Ferrero, Noelia Billi, Colectivo Situaciones, Alejandro Romero, Enrique Guinsberg, Patricia Garrote, Fernando Castelli, Susi Reich, Marcelo Miceli, Betania Crespo, Fernando Vico, Rosana Carballo. Ilustraciónes: Redacción y Publicidad Conesa 473 P.B. “B” (1426) Capital - Argentina Tel/fax: (54-11) 4553-1226 E-mail: [email protected] Website: www.campogrupal.com Impresión: Genesis S.A. Distribución: Motorpsico (Capital) Campo Grupal es una publicación de Ediciones Presencia. Una terapéutica Azar manipulado en el encuentro Adriana Zambrini [email protected] ¿ Cómo usar del azar para aumentar nuestra potencia de actuar? No es la mezcla de cuerpos lo que produce el encuentro, sino el acoplamiento de las sensaciones que se dan en esa mezcla. La sensación, que es vibración del cuerpo sin órganos, deviene resonancia en el abrazo de los cuerpos. Se vibra en soledad, se resuena en el encuentro. Resonar es alteridad y ritmo compuesto, complejidad. Un ritmo nunca definitivamente pautado, que cae permanentemente de afectación en afectación en el movimiento de una realidad siempre cambiante. Lo accidental y lo circunstancial van tejiendo una sutil trama de nudos y deslizamientos. Una multiplicidad de gestos, sonidos, palabras, miradas...cuerpos que se afectan y se alejan en una danza variada. En la densidad misma del espacio intangible, una espesura...una liviandad...una rispidez...una ráfaga de caos que impide llenarlo todo por completo. Una incompletud que no es carencia ni ausencia, sino movimiento aleatorio, lo impredecible que libera lugares que el discurso o el gesto repetido intentan avasallar. Aire en donde los bailarines hacen del encuentro un desvío a lo interminable. Una apuesta al infinito, hasta la variación final de una distancia. Los cuerpos se alejan...vibran rítmicamente...algo sucedió. Nos encontramos... le propongo al paciente tomar las imágenes visuales del relato para que vayan surgiendo las figuras de la ficción reactiva, la expresión de la potencia capturada. Un mal encuentro se manifiesta entre dos contrincantes: por un lado el déspota sometedor y el sometido provistos ambos de un mismo régimen de signos cerrado, estratificado y posesivo, sostenido por el personaje de la ficción reactiva que opera como aparato de captura. Victima-victimario, perdedor-ganador, poderoso-cobarde, heroico-temeroso, por qué no loco..., la lista de los rostros ancestrales del cautiverio es larga. Variedad de modos de captura que se apoderan de la existencia, sencillamente “piden la vida” a cambio de una identidad reaseguradora. Suscripciones Por 11 ediciones anuales: Argentina: $ 55.América Latina: u$s 50.Otros países: u$s 60.- CURSOS •"PSIC. TRANSPERSONAL. UNA VÍA DE ACCESO A LA ESPIRITUALIDAD" •"PSICODRAMA. SUPERVISIÓN Y PERFECCIONAMIENTO" •"COMPROMISO, EFICACIA Y CUIDADO DEL TANATÓLOGO" •"LA RUTA DE LA CREACIÓN. DESBLOQUEOS Y APLICACIONES" •“YOGA. HATHA ASHTANGA” Juegos interminables, bien pautados por agenciamientos que priorizan la dominación y la servidumbre por sobre la libertad. Un baile de fantasmas que pueblan una sociedad de yo anestesiados, seducidos por hilachas de poder ilusorio. El otro contrincante: el deseo, la potencia-deseo que insiste en perseverar en la existencia. El deseo detenido, poseído, una maquina de guerra desactivada y puesta al servicio de una esclavitud voluntaria. Dos fuerzas que se oponen, se enfrentan en una lucha desigual a vida o sometimiento. Las circunstancias estratificadas ofrecen la seguridad de lo mismo, la paz a cualquier precio. El hombre, ese grado de potencia que somos, tiene dos alternativas: se entrega o utiliza la fuerza revolucionaria de su deseo. El nivel de captura determinará la contienda. El enfrentamiento es cuerpo a cuerpo, la captura es mucha y organizada; la potencia-deseo es ligera, veloz y se pierde con facilidad en los múltiples rostros que la sociedad le ofrece. Mucha soledad y la insistencia de vivir. ¿Binarizar el juego y ofrendar la vida en una pelea desigual? No: saber huir. “En un hombre libre, pues, la huida a tiempo revela igual firmeza que la lucha; o sea, que el hombre libre elige la huida con la misma presencia o firmeza de ánimo que el combate.” (Spinoza, Ética, iv, corolario) Hacer huir las fuerzas de las trampas del miedo, de la seguridad de una paz a cualquier precio, de las verdades únicas, de las intensidades siempre rígidas de lo mismo. Las armas: la ligereza, las descodificaciones de lo único por los sentidos múltiples, los valores altos contra las reglas de juego de lo dado... Apoyarse en el movimiento de desdramatización que barre con los límites de las certezas, inventar nuevos sentidos que desestabilicen las complejidades dadas de una realidad cambiante y móvil. Sustituir los enfrentamientos por la conversación, dejarse afectar por los signos que rasgan el mundo de la representación y liberan el lenguaje. Hacer intervenir el azar como la tirada fatal que reúne los fragmentos y “libera al destino de la necesidad”, parafraseando a Nietzsche. Volvamos al relato inicial del paciente, siempre intencional y figurativo. Pero el azar siempre interviene como acto, desde el deseo que puja por recuperar el devenir interrumpido. Desde las fuerzas de desterritorialización, la materia movimiento del cuerpo sin órganos imprime intermitentemente su ritmo. Como terapeuta intervengo al azar, lanzo marcas verbales que van a integrar el conjunto. Preguntas, gestos, ideas que van surgiendo al azar, para descentrar el relato de una captura que toma a la potencia-deseo por rehén. Desformalizar las líneas rígidas a través de la sorpresa, el humor como deconstrucción de la solemnidad, la confirmación del peligro para desbaratar su condición irremisible; gritar el peligro de la captura, desenmascarar los rostros de la dominación y la servi- ASISTENCIA GRUPAL •PSICODRAMA TERAPÉUTICO P/ARTISTAS •PSICODRAMA TERAPÉUTICO P/ADULTOS •ACOMPAÑAMIENTO Y ORIENTACIÓN A NIÑOS Y FAMILIAS EN DUELO MEDITACIÓN - CONFERENCIAS Informes e Inscripción: Güemes 3950-Buenos Aires Tel.: 4831-3738 de 14 a 19 hs. [email protected] Campo Grupal / 2 Bien puede haber puñalada sin lisonja, mas pocas veces hay lisonja sin puñalada. Quevedo dumbre a los significantes únicos, en fin, ejercer entre ambos un contrapoder. Una micropolítica frente a la macropolítica de lo establecido, entrando en los clichés del otro, pero sabiendo salir de ellos. Experimentar, sabiendo que un individuo no convive solo con aquellos con quienes comparte su deseo de libertad, con quienes concuerda e incrementan mutuamente su potencia; sino que por el contrario, debe convivir con otros individuos gobernados por un pensamiento supersticioso y sentimientos de envidia e impotencia. Ante esto nos advierte Spinoza que el límite de la adaptación necesaria está dado por el grado de transformación en nosotros; nunca se debe pasar el límite que nos lleve a la pasividad y a la servidumbre extrema. No acomodarse a un orden que inhiba la potencia-deseo, utilizar de las fuerzas libres de ésta para la confrontación en los resquicios de la multiplicidad, que no es el enfrentamiento de lo binario. Para confrontar con la servidumbre, hay que dejar entrar el azar con su efecto deconstructor y luego manipularlo, como sugiere Bacon, para preservar lo necesario de la figuración e imprimirle un movimiento que le modifique el ritmo y la mecánica al pensamiento y la acción. Un nuevo complejo de afectos que se oponga a la fluctuación anímica que actúa al azar de los encuentros, por el solo poder de la fortuna. Resonar entre ambos para adueñarnos de nuestro poder de afectar y ser afectados. Hacer cuerpo solidario en la alteridad. Todo accidente es incluido y utilizado. No hay acting, solo actos. Seminario de introducción al contexto no - verbal Agosto 19 y 20 (Sábado y Domingo). Full inmersion. 18 horas. Dictado y coordinado: Prof. Dr. Rolando Benenzon Las formas de estructuración de los códigos no - verbales y los procesos de comunicación y salutogénicos más allá de las palabras. Descubrimiento de la propia identidad corpórea - sonora - no verbal y su interrelación en grupo. La trans temporalidad y trans espacialidad. El cuerpo como instrumento mediador y de monitoreo. Certificados avalados por los Centros Benenzon de España, Italia y Bélgica. Informes, reserva de vacantes e inscripción Fundación Benenzon de Musicoterapia Email: [email protected] [email protected] Teléfono: 4702 -6366 Web: www.fundacionbenenzon.net Secretaria: de Lunes a vienres de 14 a 20 horas Comprender que se sale del juego dominante no por certezas, sino por las marcas hechas al azar. En esto consiste el acto terapéutico como hecho estético y ético. Si funciona es porque se ha podido arrancar del complejo vital del paciente, el estado figurativo del relato para construir una figura-idea expresiva de la potencia-deseo. El elemento figurativo no se puede eliminar por completo, se conserva algo de él. Lo suficiente para dar cabida a lo figural y al percepto. Una ética de la razón y una ética de los afectos. Hay un segundo elemento figurativo-conceptual: lo que acontece entre el terapeuta y el paciente en el encuentro terapéutico, la multiplicidad de afectaciones que van componiendo ese tercer cuerpo, el cuerpo terapéutico. Entre las dos figuraciones: la conservada y la encontrada se ha producido un cambio de naturaleza. Media entre ambas un cómo hacer. Para esto la primera figuración de ideas y sensaciones ha sido desorganizada y deformada por líneas libres de expresión y luego reinsertada nuevamente al conjunto. Hay producción de sentidos nuevos. Se ha experimentado. Las representaciones encontradas y recreadas, ya no se asemejan a las representaciones iniciales. El azar ha desbordado la intencionalidad inicial y el efecto de resonancia entre ambos produjo otra territorialidad móvil y transitoria. Un encuentro-acontecimiento. Spinoza piensa que útil es todo aquello que aumenta nuestra potencia de actuar y de pensar, en tanto es útil para la conservación de la naturaleza de la que somos una parte inseparable. 39 años CENTRO DE INVESTIGACION Y ASESORAMIENTO EN PSICOLOGIA Presidenta: Dra. María Rosa Nodar Secretaria: Lic. Susana Bricht Directora: Lic. Norma Haber Vicedirectora: Lic. Graciela Kachanovsky Inscripción 2006 PRÁCTICA CLÍNICA RENTADA Residencia en práctica clínica Formación de Psicoterapeutas / Duración 2 1/2 años -Taller intensivo semanal de formación clínica -Observación, atención rentada y supervisión de pacientes: niños, adolescentes, adultos, parejas y familias -Orientación e investigación bibliográfica con base informatizada de datos -Seminarios de actualización -Pasantías en la institución -Presentaciones en Cámara Gesell Informes e inscripción en Secretaría de lunes a viernes de 8 a 21 hs. Charcas 4729 Tel/Fax: 4773-8336 4777-4058 [email protected] [email protected] www.fundacionciap.org.ar mensajes: 4824-8860 INSTITUTO ALDEBARAN C-215 [email protected] 4581-9047 CONGRESO DE PSICOLOGIA SOCIAL Mar del Plata Agosto 2006 Lic. Felipa María de Abajo PSICODRAMA Resolución rápida de conflictos Individual - Grupal ¿Por qué me relaciono con la persona equivocada? ¿Cómo construir un vínculo placentero y gratificante? 4702-4847 15-4417-0049 CambiArte El arte del cambio CPCC Centro de Psicoterapia Cognitiva para el Cambio Trastornos de ansiedad -Depresión -Crisis vitales -Tratamientos individuales y grupales -Parejas y familias Terapia de grupo para trastornos de ansiedad y ataque de pánico Inicio abril de 2006 Informes: 4824-1064 15-5756-9173 15-5261-8841 Una desgracia va siempre pisando las ropas de otra: tan inmediatas caminan. Shakespeare Campo Grupal / 3 Memoria, osadía y vitalidad Alejandro Romero [email protected] Alejandro Rozitchner despotrica contra los llamados a la memoria. Su argumento es simple: la memoria es un valor conservador, reaccionario; son más importantes valores como la osadía, la creatividad y el espíritu de aventura. “Memoria y Vitalidad son opuestas”, dice: o una o la otra. Lo demás, agrega, “son idioteces” Pero... No hay mayor idiotez que afirmar que hay que elegir entre la memoria y la vitalidad. Y esto, más allá de los empalagosos excesos de la retórica del recuerdo, que, por otra parte, no es lo mismo que la memoria. De hecho, lo que nos incitan a conservar en estos días es EL RECUERDO de los hechos atroces de la dictadura. Lo que nos dicen es que desconfiemos de la vocación de olvidar y borrar a la que nos invitan por otros lados. Que desconfiemos por una razón muy sencilla: porque las secuelas vivientes de lo que pasó nos siguen condicionando. Porque lo que hoy somos todavía sigue marcado por lo que fué y lo que fuimos. Si Alejandro Rozitchner protesta tan airado contra la valorización de la memoria, es precisamente PORQUE le contrapone de modo lineal y excluyente otros valores, magníficos valores y necesarísimos, por otra parte, como la osadía, la creatividad y el atrevimiento. Valores que se llenan de un contenido vital cuando no se niega el recuerdo del origen aún activo de buena parte de lo peor que nos pasa todavía hoy, y que nos seguirá pasando por un tiempo, mientras creamos otras realidades. Si Alejandro Rozitchner tiene que despotricar con tanta altanería contra la memoria es quizás porque para conservar su vitalidad, su alegría de vivir y su espíritu de aventura NECESITA NEGAR lo que el recuerdo trae consigo: el terror, el horror, el dolor, la escición, la agresión, la guerra, el desprecio de la vida del otro, del diferente. No neguemos, ni nos entreguemos a los ritos funerarios de la memoria como si ello fueran garantía de salvación. Sin atrevimiento, osadía, espíritu de aventura y creatividad no hay presente, vida, alegría ni futuro posible. Pero sin memoria tampoco hay presente, ni deseo, ni siquiera hay realidad. Empezaremos siempre de nuevo los mismos actos, pronunciaremos siempre las mismas palabras, descubriremos de nuevo cada vez los mismos deseos, nos volveremos a despertar a la vida una y otra y otra vez en el mismo punto que siempre se hundirá nuevamente en la nada. Es decir, por mucha osadía, vitalidad y creatividad que haya, sin memoria estamos condenados a la repetición, tanto como sin osadía y creatividad estamos condenados a la conservación. De modo que escindir la vitalidad y la memoria, es el colmo de la estupidez. Como subordinar cualquiera de las dos a la otra es siempre una marca de hipocresía, miedo o resignación. Mis disculpas, Alejandro, pero es así. Campo Grupal / 4 POLIFONIAS 24 de marzo: otros modos de hacer la historia Denise Najmanovich [email protected] H e vivido este 24 de Marzo en que se cumplieron 30 años del golpe de un modo polifónico con múltiples emociones, sensaciones, pensamientos. Dispares y variables en el tiempo. Desde la alegría inmensa al llegar a la concentración y vivir otra vez la sensación de encuentro, de espacio público vital y compartido, hasta la tristeza inevitable de saber que estamos aquí también este año, para decir en voz alta que no olvidamos, que todavía es arduo el camino por recorrer, que los desaparecidos aún no tienen sepultura, que los archivos aún están cautivos, que muchos niños aún no se han reunido con su familia, que los genocidas aún no han tenido el castigo merecido. También sentía la satisfacción de saber que es mucho lo que se ha conseguido desde las ya tan lejanas manifestaciones en contra de la Ley de Autoaministía que en las que participé en los tiempos de la dictadura. He participado en casi todas las marchas del 24 de Marzo desde que se iniciaron y he visto con satisfacción cómo se hacían cada vez más masivas y también más diversas. Esta vez me encontré con ríos de gentes, algunos marchando, algunos esperando, algunos en silencio, otros cantando. No faltaron las murgas, ni tampoco los grupos de teatro que armaron su escenario en una esquina de la marcha. Cada tanto interrumpía la marcha por el encuentro con algún amigo o conocido de distintas eras geológicas de mi vida. También he visto con preocupación creciente como se iban imponiendo consignas que poco tenían que ver con los derechos humanos y cómo iban apareciendo y copando espacio diversas organizaciones que llevaban sus columnas férreamente acordonadas (¿o acorraladas?). Cuando cruzamos la Avenida 9 de Julio escuchamos unos cánticos de un grupo que vociferaba a voz en cuello y megáfono en mano: “LOS MUERTOS SON NUESTROS”. Algo me fastidió inmensamente pero no tuve tiempo de saber qué. Yo estaba muy conmovida porque unos metros antes me había cruzado con el que fue mi gran amigo de la adolescencia y primera juventud y nuestras miradas se abrazaron a la distancia. Con él compartí los primeros bailes, los primeros sinsabores, las dudas, noches eternas de conversaciones, la efervescencia de la militancia, las corridas en las marchas, y también la noche aciaga del 24 de Marzo del 76. Aún en plena dictadura, en los duros tiempos de la masacre y el silencio seguimos insistiendo juntos en un proyecto revolucionario que suponíamos conduciría a un mundo mejor (que vagas me resultan hoy E.I.P. —Equipo Interdisciplinario PA S O PSICODRAMA G R U PA L Y C R E ATIVIDAD Superv. Dr. Eduardo -Tato- Pavlovsky Coord.: Lic. Silvia Schverdfinger y equipo ACTIVIDADES 2006 ¥ Cursos de formaci n en PSICODRAMA Y COORDINACION GRUPA L - TEATRO ESPONTA N E O Con integrantes de LA C O M B I N A D A - TEATRO DE TEXTO • Laboratorio quincenal para coordinadores grupales • Seminarios Teóricos por docentes de "PLIEGUES" • Talleres vivenciales de Psicodrama y Creatividad estas palabras). Destaco el suponíamos, porque en los discursos políticos –que sólo hablan el lenguaje de la certeza- la suposición suele estar totalmente ausente, tanto en aquel tiempo como ahora. Cuando la política, es decir el arte de la convivencia en la polis, deja de ser responsabilidad de todos para constituirse en una actividad profesional y estructurarse en aparatos desaparece la primera persona para dar lugar a un plural anónimo un “nosotros” vacío y abstracto (y por lo tanto e irresponsable). Es por eso que he elegido la primera persona para esta polifonía, porque no usurpo la palabra de nadie, ni reniego de la responsabilidad de lo que digo. Hacia finales de los 70 yo estaba cada vez más descreída, algunos posiciones me resultaban completamente absurdas, algunas actitudes francamente suicidas, y los modos autoritarios eran para mí cada vez más evidentes y asfixiantes. Podría describir mi situación como parcialmente lúcida y, al mismo tiempo, parcialmente entregada a la imposibilidad de encontrar otra ¿salida? ¿alternativa? ¿mirada sobre mi misma? ¿sentido a este mundo?. Me llevó largos, que parecían interminables, años de pensamiento, de estudio, de elaboración y búsqueda conjunta con otros amigos y compañeros poder decidirme a abandonar la militancia. Este hecho se describía desde adentro diciendo que la compañera “se fundió” o “se quebró”. La disidencia pura y llana era simplemente inconcebible. Sin embargo, mi alejamiento nada tuvo que ver con dejar de soñar o de trabajar (ahora el verbo “militar” me suena demasiado a militar como para utilizarlo sin erizarme toda) por lo que considero correcto, deseable, pero que se que el hecho de que yo lo considere no implica que sea correcto o deseable para todos. No hay UN mundo mejor para todos, y lo que prefería ayer no es necesariamente lo que afirmo hoy. Ya en el 78 había abandonado todo “compromiso ideológico-partidario”, aunque no el activismo. Dije Nunca Más a cualquier forma de contrato totalitario de por vida, ya sea político, personal o económico. La militancia de mi amigo que seguía en el partido era cada vez más riesgosa para todos los que lo rodeábamos. Decidí que seguiría viéndolo igual, que la dictadura no me iba a elegir los amigos. Ya en ese tiempo empecé a pensar que la única frontera que podía separarme de alguien era la de la ética. La apuesta salió bien. 30 años después estábamos allí, “cantando al sol como la cigarra”. Muchas cosas nos unen aún hoy, muchas más nos separaron, pero en ese momento y en ese cruce de miradas sentí todo el afecto, la historia compartida, la adolescencia, los sueños que antes nos unían y algunos que todavía nos unen (los de hoy tienen mucho más que ver con el espanto). La marcha siguió. A la altura de Perú la columna de HIJOS se detiene, parece que ya no se puede avanzar, la plaza está llena, suponemos. Intentamos ir por la vereda. Me encuentro a una amiga que me dice que no vaya por ahí, que hay hasta mini avalanchas, que hay gente volviendo y empujando. Supongo que se debe a la inmensa cantidad de personas que se unió este año: hay gente de los barrios, centros de estudiantes, murgas, partidos políticos (casi todos de izquierda), columnas por profesiones (abogados, periodistas, médicos), por el origen de sus muertos (desaparecidos de origen japonés con su cartel, los vascos con el suyo), están también los motoqueros y los gays, y un sin fin de “sueltos”. Hoy la calle es de todos, pensé. Finalmente pude llegar hasta la plaza desviándome por Diagonal. A lo lejos se escucha un discurso por altoparlantes, nadie prestaba atención, no se entendía nada y no creo que ni yo ni la gran mayoría de los que veníamos, los de siempre y lo que lo hacían por primera vez, estuvieran interesados en los discursos. Vi algunos movimientos extraños, pero no les presté demasiada atención. Luego de varias horas de marchar estaba cansada y preferí volver a casa. Cuando llegamos, decidí ver por Internet la información sobre la marcha antes de irme a dormir. Así me enteré de lo que ocurrió en el palco, de las disidencias entre distintos grupos que no habían firmado el documento con los que sí lo habían firmado. Sentí una mezcla de rabia, de dolor, de estupor. Algo en mí lo presentía desde que escuché esa frase fatídica. “LOS MUERTOS SON NUESTROS”. En su momento no pude reaccionar, pero ahora desde es- - GRUPOS TERAPEUTICOS - CONVENIOS CON INSTITUCIONES Y EMPRESAS - Entrevistas explicativas y de admisi n sin cargo. Informes: 4962-4583 Secret. Liliana [email protected] [email protected] w w w.psicodramagrupal.com.ar La burla es el relámpago de la calumnia. Proverbio chino tas polifonías quisiera gritar: los MUERTOS NO TIENEN DUEÑO. Es indigno y perverso apropiarse de ellos, decir que son los desaparecidos los que dirían esto o aquello. Es repugnante no sólo poner palabras en sus bocas sino autonombrarse sus voceros. Los desaparecidos no son una masa homogénea, son 30.000 personas que vivieron vidas diferentes, que lucharon por cosas muy distintas, muchos ni siquiera lucharon. No hubo UNA lucha sino MUCHAS, y no faltaron los enfrentamiento, incluso violentos. Es necesario decirlo en voz alta y sin eufemismo LOS DESAPARECIDOS NO HABLAN POR BOCA DE NADIE y apropiarse de su voz es una infamia. Cada uno habla por sí y debe hacerse responsable. El discurso de los aparatos, sean los que sean, es siempre un discurso totalitario, pues el cuerpo que lo emite no admite diversidad, ni variación, ni modulación, sólo la disciplina y el acatamiento. En ese momento pensé nuevamente en mi amigo de la adolescencia, supe que podía unirnos un afecto nostálgico, una simpatía en cierto canal, pero que los que nos separó no fue sólo el azar sino que entre nosotros se alzó una barrera ética insuperable. Para mí la vida, los valores, no son negociables, no son una excusa para llegar a la revolución, un mero medio para otro fin. Como lo dijo la dirigente de Abuelas Estela Carlotto fue “una estafa al dolor”. Pero esta estafa no es de ahora, sólo que esta vez se hizo visible. Su invisibilidad se debe que muchos quieren ejercer e imponer a los demás una memoria parcial. Una memoria que elude volver a pensar los proyectos políticos de la militancia setentista, como si el tan remanido “pensamiento crítico” se detuviera en sus fronteras, como si fuera imposible querer y trabajar para construir otro tipo de sociedad y buscar otros modos de vivir y convivir diferentes a los que enarbolamos en aquel tiempo. La gran estafa es tratar de imponer al otro una única opción, apropiarse del espacio de todos y llenarlo con TODAS las consignas habidas y por haber, no importa quienes ni cuantos estén de acuerdo. Se exige una adhesión total o el silencio. El que no está de acuerdo inmediatamente es caratulado de traidor, de escupir sobre la memoria, de cobarde, de miope. Muchos no lo han querido o no han podido verlo hasta ahora porque el discurso mayoritario se inclinó hacia la zona de menor riesgo: la crítica o el espanto ante el terrorismo de estado. La repetición incansable y a veces incluso morbosa del horror. De este modo, evitamos encontrarnos con la zona tal vez más dolorosa, la de la propia responsabilidad. 30 años puede ser el tiempo necesario para habilitar esta reflexión, que no concibo como una mera autocrítica, sino como una profunda reelaboración de los modos de existencia, de las ideas, de las prácticas, de los estilos organizativos, de los proyectos. Y, si algo he aprendido, es que debemos renunciar de antemano a los acuerdos totales, a los sistemas ideológicos de todo tipo pues no hay acuerdos totales salvo los que se imponen a sangre y fuego y esos, por supuesto, no son acuerdos. Ya las consignas de la marcha, con las que acordaron todas las organizaciones convocantes, incluidos los que no quisieron firmar el documento del escándalo, eran para mí excesivas y divisionistas: mezclaban los desaparecidos con el Alca y la guerra de Irak. No es que estas cosas no tengan relación (la tienen, todo puede relacionarse con todo), pero hay (por lo menos para mí) prioridades, pertinencias, relevancias. Es más, por mi parte acuerdo con ellas, pero NO FUE ESE EL MOTIVO QUE ME LLEVO A LA PLAZA, al igual que otros miles y no quiero que me endosen consigas. Quiero que se respete también a los que no están entre las organizaciones convocantes, porque la PLAZA NO ES DE NADIE, sino de TODOS. La marcha no es de los organizadores, ellos no son sus dueños, apenas sí sus promotores (y no está demás recordar que en la épocas más duras los organizadores eran bien pocos y muchos de los que íbamos y vamos nunca necesitamos una convocatoria) El 24 siempre fue para mí, y seguirá siendo, como para muchos, y hasta me atrevo a pensar que probablemente para la mayoría, un momento de recuerdo y de lucha por el NUNCA MÁS. Mezclarlo con el medio boleto estudiantil (varias columnas cantaban esta consigna), con el ALCA o con los yanquis en Irak, no hace más que dividir y expulsar. Si el 24 de Marzo es un día para la memoria a mi gusto deberíamos incluir URGENTEMENTE, la memoria de nuestras propias equivocaciones, que no fueron meros “errores tácticos”, ni “defectos de evaluación” así como no fueron “excesos” represivos el genocidio que liquidó a casi toda una generación Ni la democracia ni los derechos humanos fueron banderas de la izquierda, ni de la marxista ni de la peronista. Nuestros desaparecidos lucharon bajo otras banderas: la dictadura del proletariado o la patria socialista. Los derechos humanos eran considerados sensiblería burguesa y la única democracia concebible era el “centralismo democrático” que es a la democracia como la música militar es a la música. Sin duda este 24 fue multitudinario y polifónico, no faltaron tampoco los ruidos, ni los truenos. Seguimos “cantando al sol como la cigarra”. No es poco, pero no estaría mal que también abriéramos las puertas a una reelaboración de nuestros “ideales” y a la creación de nuevos sentidos, de nuevos modos de hacer política que no puedan ser tragados por los aparatos políticos de ningún signo. El 24 recordar a nuestros muertos puede ser un práctica vital, desde una memoria que no se limita al recuerdo, que no se estanca en los archivos, sino que pregunta, construye, deshace mitos, y produce sentidos. Esa es la forma que elijo, pero no es la única. También hay otros 24 en que los medios quieren hacer gala de corrección política, en que los partidos ejercen la bochornosa costumbre intentar acaparar lo más posible los lugares de poder, y los organizadores confunden (nada ingenuamente) su rol de patrocinadores con el de propietarios de la memoria y del espacio. Estamos vivos y honrar a nuestros muertos no es apropiarnos de ellos, ni repetir sus dichos, ni caminar nuevamente por sus caminos, sino seguir creando, pensando, buscando y no confundir la memoria con un mausoleo, ni con un museo. El espacio público y el pasado, el presente y el futuro de nuestra sociedad ha sido y será tejido en común y a todos nos toca pensar y crear otros modos de hacer la historia, de encontrarnos y de vivir los antagonismos. CENTRO PARA LA PERSONA Consultoría Psicológica Terapias Psicocorporales Niños - Adolescentes - Adultos Grupos de reflexión: Desarrollo Personal Pareja y Familia Directora: Clor. María Angélica Familume 15-5249-9363 4812-9106 [email protected] Juego-Creatividad Cursos Anuales ¥ El Juego y Los Juegos ¥ Facilitador de Juego ¥ Playgrounds y Espacios de Juego ¥ Ludotecas y Construcci n de Juegos y Juguetes ¥ Creatividad y Desarrollo Personal ¥ Talleres de Juego y Expresi n ¥ Conducci n de Grupos especializada y t cnicas l dicas y expresivas Escuela de Terapia Escénica Abierta la inscripción 2006 en Capital y Zona Oeste. Comienzan en Abril Modalidad una vez por mes en d a s bado Virrey del Pino 2714 Capital estudio inés moreno Telefax: 4785-3273 [email protected] Diplomatura Universitaria Psicodrama y Corporeidad Frecuencia mensual Informes e inscripción: telefax: 4775-3135/5424 E-mail: [email protected] www.mascarainstituto.com.ar INSTITUTO DE LA M ASCARA Lic. Elina Matoso - Dr. Mario Buchbinder Cambia de placeres, pero no cambies de amigos. Voltaire Campo Grupal / 5 POR H (humores O PORgrupales)G Experiencia compleja Implicancias psicológicas de la migración Walter Vargas [email protected] Cuentan que cuando Oscar Wilde llegó por primera vez a Nueva York un periodista quiso participarlo del copioso entusiasmo emanado de la reciente invención del teléfono. “¿Ve, míster Wilde? Usted habla por acá y lo escuchan del otro lado del hilo”. Wilde miró el aparato, miró al periodista, volvió a mirar el aparato, y respondió: “¿Hablar? ¿Hablar con quién?” Si pensamos que reponemos un episodio sucedido hacia finales del siglo XIX podemos concluir que Wilde ya había captado en profundidad la amenaza de ciertos advenimientos y que, si por obra de algún hechizo regresara hoy a echar un vistazo, lo espantaría comprobar hasta qué punto la pulsión comunicante está naturalizada como suprema medida de lo moderno y, por ende, de lo virtuoso. Los hombres, digámoslo, somos caudal de innúmeros manantiales. Nos distinguimos por la animalidad política que supo observar Aristóteles, por la indubitable necesidad de cuidado amoroso que tan bien examinó Freud, por la impronta simbólica que propició algunas imperdibles páginas de Cassirer, etcétera, pero en cualquier caso todos los caminos nos conducirán al imperativo gregario. Nos constituimos como frutos del rebaño, hacia el rebaño tendemos, en el rebaño perseveramos, y por acción u omisión somos condición indispensable de las maravillas gregarias y partícipes necesarios de los crímenes gregarios. De manera que no se incurrará aquí en la puerilidad de postular el regreso a presuntos paraísos insulares. Mas tampoco, por cierto, será cuestión de tirar papel picado sin beneficio de carnaval. Decenas de diarios, en papel u on line, noticiarios de aquí y de allá en canales de cable y en radios AM y FM nos mantienen conectados, informados, actualizados, pero insatisfechos con haber saturado nuestras dosis de civilidad sucumbimos al empacho del correo virtual, del teléfono de línea y del teléfono celular, adminículo fabuloso y tenebroso que cierra las cuentas del desvelo más íntimo y más negado: el incesante acoso de la muerte galopando sobre los jardines de la ilusoria completud. ¿No es curioso que aferrados al aparatito con fondo de Novena Sinfonía sintamos que la muerte jamás podrá alcanzarnos porque a lo más la muerte es una abstracción que anda haciendo lo suyo por ahí? ¿No es curioso que un titilante verdor nos haga sentir protegidos aun en esos confines del alma donde no somos sino criaturas en manos del misterio? Liliana Ferrero [email protected] L a migración es una experiencia compleja, tanto para aquel que nunca ha emigrado y está encarando una migración, como para aquel que ya lo ha hecho y para el que debe quedarse y despedir al que se va. ¿Qué significa emigrar e inmigrar? Emigrar significa “dejar una persona, familia o habitante de un país su propia patria con ánimo de domiciliarse en otro país” e inmigrar “llegar a un país para domiciliarse en él los que estaban domiciliados en otro”. Esto nos dice el diccionario. Migrar incluye ambos significados. Por qué se migra o por qué no y en calidad de qué se lo hace, son elementos que marcan cómo se llega a “domiciliarse en otro país” y no comprenden solamente una significación material, sino que engloban y quizás resaltan, toda la situación psicológica, afectiva, que conllevan estas decisiones, para aquellos que se van y para aquellos que se quedan. Desde nuestro punto de vista, el psicoanalítico, entendemos que la migración implica en todos los casos vivir una situación de crisis en lo personal y en lo familiar, ya que comporta muchos cambios tanto en la realidad externa, concreta, como así también en la realidad interna, psíquica, de quien la sufre, sea éste el que se va o el que se queda. Es la propia identidad la que está en juego, el propio sentirse uno mismo en todo momento y lugar, el poder percibirse diferente de los demás y compartir con ellos una misma realidad social en las diferentes circunstancias de la vida. Cuando hablamos de cambios nos interesa destacar las consecuencias psicológicas que esos cambios comportan, los sentimientos que ellos conllevan que pueden ser entre otros, miedo, ansiedad, rabia, tristeza, dolor por todo lo que se deja, la necesidad de sentir que nada cambie, que todo cambio es un esfuerzo enorme. También para aquel que se queda y debe despedir al que parte, la situación no le es fácil: la migración le comporta sentimientos en relación a esta despedida, sentimientos que estarán en relación a la fuerza del vínculo que lo liga al que parte. Resulta difícil pensar que todos estos sentimientos derivados de esta experiencia puedan ser resueltos en breve tiempo. Y aquí nos Ricardo Vergara/Ediciones NOVEDAD ABRIL 2006 Repensar las Psicoterapias - Psicoterapias Vol 2 - 176 pag. $ 22.Presentaci n: Martes 16 de mayo 19 hs. Cabrera 4849, (y Armenia) Entrada Libre Escriben: Dra. Susana Morán de Giudice, Adriana Rossini, Lic. Mariana Gancedo, Lic. Alicia H. Contursi, Lic. Martín Córdoba, Dra. Aída Bello Canto, Dra. Grizel Salomón, Lic. Graciela Piperno, Dr. Pablo Solvey, Lic. Marta Tesari, Dra. Raquel C. Ferrazzano de Solvey, Lic. Marisa Ordoñez, Lic. Claudia Herschcovich, Lic. Armando Scharovsky, Estela Lidia Có, Lic. Gloria Loresi Imaz, Lic. Cristina Perrucci. podríamos extender a hacernos una pregunta: de qué manera la falta de comprensión del significado profundo que los mismos tienen para cada uno, puede incidir en inducir a tomar la decisión más adecuada, o en el hacer pensar que es la mejor manera de resolver los conflictos sin dejar ver si se trata de una decisión que responde a un deseo real de cambio o a una huida ante una situación atemorizadora, sea ésta externa a nosotros o interna. Creemos que el tener la posibilidad de pensar en ellos, reflexionar sobre los mismos, hará más factible la posibilidad de sobrellevarlos con mayor sostén interno o tomar la decisión más acorde con uno mismo. Y para aquel que se queda poder continuar con su proyecto de vida a pesar de la pérdida. Es así que cuando el cambio es vivido como una situación frustrante, el duelo por todo lo que se pierde es sentido como imposible de superar. Y sabemos, por nuestras experiencias clínicas, que las enfermedades psicosomáticas no están ausentes de estos movimientos psicológicos complejos. Lo mismo puede suceder cuando el cambio es vivido pensando que lo que se deja no es valioso y que lo que se encontrará sin duda sí lo será, o sea poner “todo lo malo aquí, lo bueno allá”. Si, como dijimos, las profundas problemáticas que la experiencia migratoria conlleva para la vida psíquica, han podido ser elaboradas -y esto es válido tanto para aquél que se va como para aquél que se queda- esta experiencia puede dar lugar a una nueva situación vital creativa, una buena adaptación a lo nuevo, con la consiguiente integración a la nueva cultura, y enriquecimiento emocional para el que la vive. En momentos como éstos, en los cuales el tema de la migración es de actualidad, ya sea en la Argentina como ha sido algún tiempo atrás, así como en otras partes del mundo, se hace necesario tener en cuenta la importancia de la reflexión acerca de esta experiencia, la elaboración de todos los sentimientos en ella involucrados para evitar que el dolor –inherente de por sí en una experiencia de esta índole- resulte insoportable e inabordable, producto de una decisión tomada sobre la base de temores y conflictos ya existentes no suficientemente conocidos y que se apoyarán con seguridad en situaciones de la realidad. Creemos útil acercar a la comunidad nuestra tarea de reflexionar acerca de estos temas, de estos problemas, a los efectos que el que piensa en migrar y aquel que deba quedarse, pueda sentirse apoyado, ayudado y aliviado. Poder hablar de sus problemas y penas con otros que sufren la misma situación de crisis es de gran ayuda para lograr los pasos de la elaboración que le llevarán a decidir y, eventualmente, a aceptar su nueva realidad. El objetivo es no sólo apuntalar la salud reviendo situaciones que llevan a sufrir, sino brindar la oportunidad de sentirse con más posibilidades de que las cosas vayan mejor en lo que se está haciendo. Pensamos, a modo de conclusión, que la migración es una situación emocional que necesita ser tenida en cuenta ya que implica una recreación e intensificación de los temores y angustias siempre presentes en nuestra mente, debido a las situaciones de desamparo y pérdida a las cuales tiene que hacer frente el que deja su país de origen para establecerse en otro, aquel que debe decidirlo y aquel que debe despedir al que parte. Informes: 4776-4234 y 155-763-4072 www.rvediciones.com.ar Email: [email protected] Director General: Dr. Eduardo “Tato” Pavlovsky Coordinadora Institucional: Lic. María Carolina Pavlovsky Nuevo Espacio GRUPOS PSICODRAMA Y CREATIVIDAD CURSOS DE COORDINACION GRUPA L Y PSICODRAMA entrevista de admisi n sin cargo. Otras actividades: ¥ Terapia grupal psicodram tica ¥ Taller de danza teatro ¥ Taller de teatro ¥ Curso de lectura de G. Deleuze Informes: 4778-0195 Campo Grupal / 6 [email protected] No diga que tiene amor quien no tiene atrevimiento. Calderón Sobre “La Lotería en Babilonia”, de Jorge Luis Borges Suerte de existir Marcelo Percia [email protected] L a lotería en Babilonia, que Borges escribe alrededor de 1940, ayuda a pensar el problema del deseo surcado por la diferencia. El lugar del otro como mudanza o fuga de sí. El semejante como destino, interferencia, desvío, negativa, peligro, milagro, goce. El vivir como existencia infusionada de caos. El caos como asunto en el que habla el deseo, la diferencia, la otredad. El relato presenta la existencia como albur. La civilización como conjugado de acciones recíprocas, como entramado que escupe consecuencias inimaginadas. Piensa la sociedad como acontecer irónico de elecciones y accidentes humanos. La historia como paisaje de un juego imperfecto. No sabemos, no podemos saber, qué nos depara el destino. La vida ofrecida a la dicha, al disgusto, a la nada. La utopía de una cosmología del azar.2 Todo ocurre en Babilonia. La ciudad de los jardines colgantes ubicada en la orilla izquierda del río Eufrates, mencionada -veintitrés siglos antes de nuestra era- por su aglomeración, riquezas, murallas gigantescas. Un hombre narra vicisitudes de su vida, sus muchas existencias, las circunstancias de sus noches. Han sido en su cuerpo las caricias de todas las manos y los interminables ultrajes. Explica: “Debo esa variedad casi atroz a una institución que otras repúblicas ignoran o que obra en ellas de un modo imperfecto y secreto: la lotería”. La variación de sí casi una crueldad. Estados del alma dictados por la suerte. Identidades que mudan en cada jugada. La imagen propia como gracia accidental. Cada ser vivo una ausencia disponible abandonada a la alteridad. La humanidad como imperfección del azar. O dice enseguida: “Soy de un país vertiginoso donde la lotería es parte principal de la realidad”. Un territorio en el que sus habitantes han conocido la incertidumbre no sólo como angustia dudosa por lo que vendrá, sino como experiencia de desposesión de sí. Como exceso de otredad. Una nave está por zarpar. El relator tiene prisa. Su padre refería que, en los comienzos, “los barberos despachaban por monedas de cobre rectángulos de hueso o pergaminos adornados de símbolos. En pleno día se verificaba un sorteo: los agraciados recibían, sin otra corroboración del azar, monedas acuñadas de plata. El procedimiento era elemental, como ven ustedes. Naturalmente, esas loterías fracasaron. Su virtud moral era nula. No se dirigían a todas las facultades del hombre: únicamente a su esperanza”. Confiados a la suerte de dos lugares fijos. La fortuna como decisión elemental de algo que se afirma o se niega. Un mecanismo sencillo regido según dos consecuencias básicas: ganar o perder monedas. La decepción de lo simple. El entusiasmo derrotado por las alternativas previsibles. El azar como consumación de una opción restringida no hace zozobrar. El acaso pierde su fuerza hipotética, su visión no intencionada de lo inesperado. La anticipación reductora de los posibles disuelve el estado de ventura: la indecisión de las cosas que han de venir. El deseo languidece sin contrariedad. “Ante la indiferencia pública, los mercaderes que fundaron esas loterías venales, comenzaron a perder dinero. Alguien ensayó una reforma: la interpolación de unas pocas suertes adversas en el censo de números favorables. Mediante esa reforma, los compradores de rectángulos numerados corrían el doble albur de ganar una suma y de pagar una multa a veces cuantiosa. Ese leve peligro (por cada treinta números favorables había un número aciago) despertó, como es natural, el interés del público.”. Una lotería no puede perder dinero. Hay que renovar el interés. La adversidad es un artificio que doblega la indiferencia de la gente. A la desdicha de comprar un número sin ganar nada, se agrega la pena de tener que pagar. El deseo, sofocado, sin más riesgo que la incorrespondencia, ¿se enciende con el revés, la tensión, el infortunio? El leve peligro ¿arranca la costra de tedio que envuelve al alma? La probabilidad de una desgracia anima a la pasión. La desventura es una fuente exis- tencial. Pero ¿cuánta borrasca, contingencia, amenaza, soporta un cuerpo? ¿Qué peso el de la levedad? ¿Qué brisa de inminencia la del deseo? “Los babilonios se entregaron al juego. El que no adquiría suertes era considerado un pusilánime, un apocado. Con el tiempo ese desdén justificado se duplicó. Era despreciado el que no jugaba, pero también eran despreciados los perdedores que abonaban la multa. La Compañía (así empezó a llamársela entonces) tuvo que velar por los ganadores, que no podían cobrar los premios si faltaba en las cajas el importe casi total de las multas. Entabló una demanda a los perdedores: el juez los condenó a pagar la multa original y las costas o a unos días de cárcel. Todos optaron por la cárcel, para defraudar a la Compañía. De esa bravata de unos pocos nace el todopoder de la Compañía: su valor eclesiástico, metafísico”. Se abandonan, otra vez, a las suertes. Muchos juegan porque tienen ganas, otros bajo presión, sospechados de un espíritu encogido, cobarde, poco emprendedor. El desaire colectivo se impone sobre el deseo. El sometimiento, a veces, es preferible al rechazo, la humillación, la vergüenza. Esa presión intangible impone conductas no esperadas. Sabemos de ciertos escándalos humanos. Los desvíos de las conveniencias sociales. Travesuras que amenazan un estado de cosas. La arrogancia de los que desconocen lo pactado como peligro repetido. Entonces, la emergencia de una Autoridad para asegurar el cumplimiento de un compromiso. Circunstancia que hace necesario un poder total, sagrado, sutil. Asistimos a la naturalización irónica de la Compañía. El comienzo de un nombre mayúsculo que vela por los ganadores. A través de la evolución de ese fetiche de acatamiento colectivo, Borges esboza el destino probable de un todopoder: el control que cuanto más extendido más evanescente, el absoluto que cuanto más abarca más se descompleta, la devoción que cuanto más reverencia exige más se ridiculiza. Conjetura desenlaces para ese fundamento que proclama la necesidad de perfección. El fracaso como una de las cualidades de ese orden imperioso. La imposibilidad de Dios no sólo como reticencia o defecto de la razón, sino como entonación de la tragedia humana. “Poco después, los informes de los sorteos omitieron las enumeraciones de multas y se limitaron a publicar los días de prisión que designaba cada número adverso. Ese laconismo, casi inadvertido en su tiempo, fue de importancia capital. Fue la primera aparición en la lotería de elementos no pecuniarios”. La costumbre se compone de olvidos, distracciones, descuidos. Una pequeña inclinación a la brevedad puede cambiar la historia. Irrumpe una circunstancia inesperada. Se establece un sistema de cambio no regido sólo por piezas de plata. La previsibilidad calculada en monedas queda contaminada por un castigo que no se mide en dinero: ausentar una vida, encadenar un cuerpo, encerrar un movimiento, recluir una mirada. El juego se desliza hacia un sistema de correspondencias que escapa de la exclusiva regulación de la moneda. Cuestiona, sin buscarlo, la función de ese significante como equivalente universal. El dinero deja de ser la única referencia de intercambio. Se inicia, diría Marx, la disolución de un mundo hasta el momento sometido a ese nivelador radical que borra las diferencias. Ese desvío, inadvertido, esparce una multitud de combinaciones caprichosas. “Nadie ignora que el pueblo de Babilonia es muy devoto de la lógica, y aun de la simetría. Era incoherente que los números faustos se computaran en redondas monedas y los infaustos en días y noches de cárcel. Algunos moralistas razonaron que la posesión de monedas no siempre determina la felicidad y que otras formas de la dicha son quizá más directas”. El dinero subordina la multiplicidad de la existencia. Traza una gramática uniforme para las diferencias. Difunde, bajo su tutela, la ficción de un beneficio justo para el conjunto. Incluso se ofrece como medida de dicha y desdicha. El dinero es una forma indirecta de felicidad susceptible de intercambio. Entonces, ¿qué curso posible para una alegría igual para todos, sin ese ordenador mayor, sin ese rodeo purificador, sin esa brújula universal? La moneda es un símbolo de contención y restricción metafísica. Si la cosa escapa de esas fauces estrechas, la vida estalla como infinito Las riñas de los amantes son renovación del amor. Terencio PSICODRAMA Esquizodrama Multiplicación dramática Cursos introductorios Palermo - Lomas de Zamora Mar del Plata Taller informativo Instituto Sembrar 26 de abril 18 hs. Coordinación: Emilce Quarleri 4383-9171 / 4772-2610 [email protected] Conducci n Cursos Anuales •Conducción de Grupos especializada en técnicas lúdicas y expresivas •Armado y Conducción de Proyectos •Entrenamiento Roles Directivos Comienzan en Abril Se dictarán una vez por semana y también un sábado por mes estudio inés moreno Virrey del Pino 2714 Capital Telefax: 4785-3273 [email protected] Desde hace 29 a os: "Un lugar para vivenciar, pensar, crear, crecer como personas como profesionales." Campo Grupal / 7 Suerte de existir posible de un mundo imprevisible. Amantes de las correspondencias exactas, las simetrías de los espejos, las proporciones justas, los babilonios inventan (más allá del dinero) la cosmología existencial del Azar. El relato de Borges anticipa un problema que desvela a psicoanalistas: sin un significante regulador ¿qué vale la felicidad o el infortunio para cada cual? Lacan sabe leer en Marx que la espesa potencia del deseo vive confinada en los engaños y virtudes del dinero. Entiende que esa condición fetiche afecta a todos los objetos que cautivan a la criatura humana. La lotería en Babilonia permite pensar el exceso de sentido que se libera cuando se rompen los muros de la equivalencia monetaria. La heterogeneidad desprendida de ese objeto unificador. “Otra inquietud cundía en los barrios bajos. Los miembros del colegio sacerdotal multiplicaban las puestas y gozaban de todas las vicisitudes del terror y de la esperanza; los pobres (con envidia razonable e inevitable) se sabían excluidos de ese vaivén, notoriamente delicioso. El justo anhelo de que todos, pobres y ricos, participasen por igual en la lotería, inspiró una indignada agitación, cuya memoria no han desdibujado los años. Algunos obstinados no comprendieron (o simularon no comprender) que se trataba de un orden nuevo, de una etapa histórica necesaria (...) Hubo disturbios, hubo efusiones lamentables de sangre: pero la gente babilónica impuso finalmente su voluntad, contra la oposición de los ricos. El pueblo consiguió con plenitud sus fines generosos. En primer término logró que la Compañía aceptara la suma del poder público. (Esa unificación era necesaria, dada la vastedad y complejidad de las nuevas operaciones). En segundo término, logró que la lotería fuera secreta, gratuita y general. Quedó abolida la venta mercenaria de suertes. Ya iniciado en los misterios de Bel, todo hombre libre automáticamente participaba en los sorteos sagrados, que se efectuaban en los laberintos del dios cada sesenta noches y que determinaban su destino hasta el otro ejercicio”. La inquietud del azar se extiende, respira en todo el espacio, se propaga en todas las conciencias, sortea las fronteras sociales. La intensa vida no disimulada de los tocados por la lotería provoca envidia en los excluidos, justificado enojo por la desigualdad, inevitable agitación de los condenados a una fatalidad sin azar. Comienza la revuelta de los que se saben fuera del juego. El grito de los exceptuados de ese delicioso vaivén. Los desaparecidos de las sacudidas de la suerte. Los privados de ese punto preciso en que cada cuerpo se sabe razón de peso de una oscilación incierta. Así llega, entonces, la abolición de la suerte mercenaria. La igualdad de todos ante la ley del azar como plenitud posible de la frágil existencia humana. Como conquista civilizadora sobre las racionalidades de guerra. El nuevo orden del azar como una historia sin identidades seguras, sin posiciones definitivas. La existencia como repentina desposesión que iguala a todas las criaturas vivientes.3 “Las consecuencias eran incalculables. Una jugada feliz podía motivar su elevación al concilio de magos o la prisión de un enemigo (notorio o íntimo) o el encontrar, en la pacífica tiniebla del cuarto, la mujer que empieza a inquietarnos o que no esperábamos rever; una jugada adversa: la mutilación, la variada infamia, la muerte. A veces, un sólo hecho -el tabernario asesinato de C, la apoteosis misteriosa de B- era la solución genial de treinta o cuarenta sorteos. Combinar las jugadas era difícil; pero hay que recordar que los individuos de la Compañía eran (y son) todopoderosos y astutos. En muchos casos el conocimiento de que ciertas felicidades eran simple fábrica del azar, hubiera aminorado su virtud; para eludir ese inconveniente, los agentes de la Compañía usaban de las sugestiones y de la magia. Sus pasos, sus manejos, eran secretos. Para indagar las íntimas esperanzas y los íntimos terrores de cada cual, disponían de astrólogos y de espías. Había ciertos leones de piedra, había una letrina sagrada llamada Qaphqa, había una grieta en un polvoriento acueducto que, según opinión general, daban a la Compañía; las personas malignas o benévolas depositaban delaciones en esos sitios. Un archivo alfabético recogía esas noticias de variable veracidad”. ¿Cómo calcular consecuencias de una jugada feliz o una suerte adversa sin la ilusión de equivalencia que ofrece la moneda? ¿Cómo medir las íntimas esperanzas o los terrores secretos de cada cuál? Sin el soporte unificador del dinero o el poder homogeneizante del mercado, la felicidad desbarata, con sus caprichos, cualquier orden. La dicha es para unos reconocimiento o confirmación de superioridad; para otros, una competencia mínima con el vecino; para algunos, un amor en los comienzos; para los de más allá, el guiño secreto de dios. O la infelicidad es el desprecio de un semejante, o la enfermedad, o una ausencia, o la muerte. Borges no olvida que cada hecho de una vida es caída de un Campo Grupal / 8 acontecimiento que conjuga innumerables jugadas. Sabe que un mundo así no podría existir sin refinados poderes o sin astucias maestras. Advierte que la dicha como simple fábrica del azar o emprendimiento solitario de la voluntad es inconveniente para la felicidad. La felicidad no puede o no quiere mirarse sólo en el espejo del azar o en el de la voluntad. Con el puro azar ocurre lo mismo que con la pura voluntad: el deseo se aburre. El abuso de lo imponderable debilita la potencia deseante que necesita creer, también, en la perseverancia de un espíritu propio. Sin cierta omnipotencia de la identidad no se agrandarían nunca los pequeños e inútiles actos humanos. Una reserva mágica de la que se nutre el amor, pero también el odio. La obra del azar se completa con actos de sugestión y de magia, con predicciones de los astros y trabajo de espías. Se practica la delación de intimidades. Pero no como cacería de existencias acusadas de delitos, sino como chisme necesario de una vida asediada por las muchas formas que adquiere la falta de sentido. La omisión del dinero como meta exclusiva del juego, pone a la vista las suertes fantasiosas de placer entre los babilonios. La variedad de lo que gusta o disgusta a cada habitante de esa aglomeración. Se advierte un nudo que discuten psicoanalistas: que los afectos, emociones, sentimientos, que componen formas de dicha y desdicha, no son sin la afectación de eso que Lacan llama goce. La promesa de felicidad como consecuencia pura del azar ofende al deseo. Igual que lo ofusca la idea de satisfacción como voluntad de descarga o disminución de tensiones. La Compañía comprende que el deseo clama por un enredo de sentido. ¿La Compañía como memoria social acumulada? ¿Como catálogo imposible de un archivo de sueños y pesadillas? ¿Burocracia de la felicidad y el horror? ¿Manual estadístico personalizado de dichas, desvíos, malestares? La magnitud de la idea hizo necesarias piezas doctrinarias, multiplicidad de reglas, una teoría de los juegos. Veamos una de las conjeturas: “Si la lotería es una intensificación del azar, una periódica infusión del caos en el cosmos ¿no convendría que el azar interviniera en todas las etapas del sorteo y no en una sola? ¿No es irrisorio que el azar dicte la muerte de alguien y que las circunstancias de esa muerte -la reserva, la publicidad, el plazo de una hora o de un siglo- no estén sujetas al azar? Esos escrúpulos tan justos provocaron al fin una considerable reforma, cuyas complejidades (agravadas por un ejercicio de siglos) no entienden sino algunos especialistas pero intentaré resumir, siquiera de modo simbólico. ¿Aumentar el azar? Decisión de alterar todos los ritmos de las cosas. ¿Despedida obligada tras cada intervalo regular en una vida? Llamado de lo incidental. ¿Clamor de ocurrencias? Más desarreglo líquido en el mundo. ¿Agregado de fluido accidental en su mecánica tediosa? Caos, no como desorden o confusión, sino como renovado impulso hacia lo otro. Deseo no acontecido. ¿Crimen de lo establecido? Lapsus del universo. Azar estremecido en todas partes. Avance de su contravención intencionada no sólo como beneficio o percance de una jugada, sino como presencia insidiosa en detalles, en movimientos mínimos, en suspiros inadvertidos. La suerte abarcando cada acto. Potencia plena y minuciosa de sus trabajos invisibles. Todas las caras de lo dado envueltas en el perfume de una flor de naranjo. Imaginemos un primer sorteo, que dicta la muerte de un hombre. Para su cumplimiento se procede a un otro sorteo, que propone (digamos) nueve ejecutores posibles. De esos ejecutores, cuatro pueden iniciar un tercer sorteo que dirá el nombre del verdugo, dos pueden reemplazar la orden adversa por una orden feliz (el encuentro de un tesoro, digamos), otro exacerbará la muerte (es decir la hará infame o la enriquecerá de torturas), otros pueden negarse a cumplirla... Tal es el esquema simbólico. En la realidad el número de sorteos es infinito. Ninguna decisión es final, todas se ramifican en otras”. Todo comienza con una primera jugada azarosa. Una consecuencia que se descompone tras el movimiento inicial. El fallo de una acción. Una sentencia de muerte por decir un caso. Para obrar de acuerdo a la inspiración total de la suerte, se realiza un nuevo llamado que desencadena diferentes posibilidades. Decisión dislocada en un precipitado de otras muchas soluciones alternativas. La vida como interludio que desplaza infinitamente el momento en que se cumple la sentencia inicial. Estallido de los estados, las maneras, los modos, las formas. Desacato de la acción única. Frenesí de elecciones probables. Audacia que desborda la opción. La cuestión de los otros. Conexiones humanas disyuntivas. Pluralidad contaminante de muchas conductas. Concurrencia de lo incompatible. Variaciones de las diferencias. Desvíos, torceduras, exageraciones, negativas. Esquema de reacciones, avatares, circunstancias humanas. Diversidad que no se completa. Los otros como existencia interferencial. El sorteo como fuga del cálculo previsto. Habilidad que posterga lo definitivo. Final que no se suspende, que se extiende ilimitado. Deriva, rumbo de viento, sentido de agua. Abatimiento del acto solitario. Soledad visitada por innumerables acciones ajenas. “Los ignorantes suponen que infinitos sorteos requieren un tiempo infinito; en realidad basta que el tiempo sea infinitamente subdivisible, como lo enseña la famosa parábola del Certamen con la Tortuga”. Este párrafo cautiva a Deleuze (1969) en la décima serie Del juego ideal. Escribe: “La pregunta fundamental que nos propone este texto es: ¿Cuál es este tiempo que no precisa ser infinito, sino solamente infinitamente subdivisible’?”. Borges (1934), que alguna vez imagina enhebrar una biografía del infinito, se refiere en diferentes ocasiones a la paradoja de la perpetua carrera de Aquiles y la tortuga, inventada por Zenón de Elea, discípulo de Parménides. Tras menciona reiteradas visitas al argumento y sus muchas refutaciones, recuerda la historia así: “Aquiles corre diez veces más ligero que la tortuga y le da una ventaja de diez metros. Aquiles corre esos diez metros, la tortuga corre uno; Aquiles corre ese metro, la tortuga corre un centímetro; Aquiles corre ese centímetro, la tortuga un milímetro; Aquiles Piesligeros el milímetro, la tortuga un décimo de milímetro y así infinitamente, sin alcanzarla...”. La idea de que un ilimitado número de subdivisiones, cada vez más minúsculas, puede efectuarse con lo que es limitado, le interesa como disolución metódica. Borges elogia el infinito como concepto corruptor, inquietante, desatinador, que nos viene de los griegos, que se narra de muchas formas en la literatura de Kafka. Pero ¿qué dice este infinito de azar? ¿Tiempo sin límites? ¿Golpeteo del reloj eterno? ¿Signo matemático que tiene la forma de un ocho acostado? Infinito, también, como dominio de lo infinitivo. Potencia impersonal que expresa todas las acciones. El presente, instante ilimitado; por venir que no cesa, pasado que retorna. La muerte no como meta que se alcanza sino como borde que nos arroja a las suertes del tiempo. La idea de Borges hace recordar la proposición 6.4311 de Wittgenstein dice: “La muerte no es un acontecimiento de la vida. No se vive la muerte. Si por eternidad se entiende, no una duración temporal infinita, sino intemporalidad, entonces vive eternamente quien vive en el presente...”. Muerte como acontecimiento que funda temporalidad. El morir como límite de la representación que vuelve infinito el instante. Tiempo, signo desencadenado, trama de un lenguaje consistente. Azar como eternidad conjugada en el presente. La suerte echada es suerte arrojada, lanzada, en espera decidida de lo venidero. Pero también es suerte que retorna tras la expulsión de las capturas causales. Incluso suerte en posición horizontal tumbada en condiciones de soñarse como línea infinita.4 “También hay sorteos impersonales, de propósito indefinido: uno decreta que se arroje a las aguas del Eufrates un zafiro de Taprobana; otro que desde el techo de una torre se suelte un pájaro; otro que cada siglo se retire (o se añada) un grano de arena de los innumerables que hay en la playa. Las consecuencias son, a veces, terribles”. Introducción de lo aleatorio. Suertes diseminadas para nadie. Acciones arrojadas sin destino. Disponibilidad de una causa, un efecto no evocado, una potencia sin meta. Aspiraciones que vagan indeterminadas. Cristal de color azul, gorrión que se suelta, partícula que no puede ser mirada. El azar tiende amarras en los aires del sentido. Tibieza y espanto de una erótica de lo inútil, innecesario, prescindible. “Bajo el influjo bienhechor de la Compañía, nuestras costumbres están saturadas de azar. El comprador de una docena de ánforas de vino damasceno no se maravillará si una de ellas encierra un talismán o una víbora; el escribano que redacta un contrato no deja casi nunca de introducir algún dato erróneo; yo mismo, en esta apresurada declaración, he falseado algún esplendor, alguna atrocidad. Quizá, también, alguna misteriosa monotonía...”. La Compañía como estado benefactor de los babilonios. Historia de su fluido bondadoso. El movimiento de su marea protectora. La segregación del bien como abrigo, amparo, condena. El llenado azaroso como establecido triunfante. La plena incertidumbre como rutina automática. El prodigio del asombro absorbido por los arraigos de la costumbre. La extrañeza aquerenciada como tradición viciosa. Hasta los notarios introducen datos adulterados. La paradoja de esa vida completada por el azar A la mujer casta, Dios le basta. Refrán es que también incluye secretas zonas de monotonía causal, insondables dominios de la necesidad, primitivas suspensiones de lo aleatorio, místicos desprecios de la variación. “Por lo demás, nada tan contaminado de ficción como la historia de la Compañía...Un documento paleográfico, exhumado en un templo, puede ser obra del sorteo de ayer o de un sorteo secular. No se publica un libro sin alguna divergencia entre cada uno de los ejemplares. Los escribas prestan juramento secreto de omitir, de interponer, de variar. También se ejerce la mentira indirecta. La Compañía, con modestia divina elude toda publicidad. Sus agentes, como es natural, son secretos; las órdenes que imparte continuamente (quizá incesantemente) no difieren de las que prodigan los impostores. Además ¿quién podrá jactarse de ser un mero impostor? El ebrio que improvisa un mandato absurdo, el soñador que se despierta de golpe y ahoga con las manos a la mujer que duerme a su lado ¿no ejecutan, acaso, una secreta decisión de la Compañía?”. Pasaje de la lotería como un mínimo juego de azar localizado, confinado a una estrecha zona de la esperanza, a la vida como juego metafísico de combinaciones infinitas. El juego como metástasis ficcional. El conjunto de los actos atribuidos a la Compañía infectados de versiones fantasiosas. Los testimonios de su existencia certificados por fuentes arbitrarias. Volúmenes sagrados adulterados. Una gramática histórica de mentiras, omisiones, intercalaciones absurdas, variaciones molestas, imposturas indemostrables. El engaño como secreto público. Una existencia precipitada en el azar vive indecisa. No puede concluir razones sobre la consistencia, la voluntad, la responsabilidad de cada conducta babilónica. El hombre que ahoga con sus manos a la mujer que duerme a su lado ¿ejecuta infinitos mandatos? ¿Ese acto personal es consecuencia de indeterminaciones y determinaciones tan propias como ajenas? Sus manos estrechan el paso del aire en otro cuerpo dormido. El que ahoga a la mujer que duerme a su lado no gobierna del todo en el conglomerado de su libertad. El asunto del sentido irrumpe cuando cunde la fatiga causal. “Ese funcionamiento silencioso, comparable al de Dios, provoca toda suerte de conjeturas. Alguna abominablemente insinúa que hace ya siglos que no existe la Compañía y que el sacro desorden de nuestras vidas es puramente hereditario, tradicional; otra la juzga eterna y enseña que perdurará hasta la última noche, cuando el último dios anonade el mundo. Otra, declara que la Compañía es omnipotente, pero que sólo influye en cosas minúsculas: en el grito de un pájaro, en los matices de la herrumbre y del polvo, en los entresueños del alba. Otra, por boca de heresiarcas enmascarados, que no ha existido nunca y que no existirá. Otra, menos vil, razona que es indiferente afirmar o negar la realidad de la tenebrosa corporación, porque Babilonia no es otra cosa que un infinito juego de azares”. La lotería, no se presenta como cualidad o complemento congelado de un juego, sino como acción que conjuga modos de existencia. Se podría, tras el relato de Borges, formar el verbo babiloniar, convirtiendo la idea misma de Babilonia en una acción. Babiloniar como infinitivo receptivo de multiplicidad. Babiloniar como movimiento ensamblador de sorpresas. Babiloniar como modo de descomprimir la diversidad de lo posible. Las conjeturas borgeanas son formas de su ensayismo. Escritura hospitalaria con argumentos probables, horrorosos, audaces. Irreverencia con lo que se considera sagrado. Risa insinuada como asilo de la razón perpleja. La contextura conjetural no presenta sólo una opción por la literatura, sino, también, una forma de anarquismo metafísico, una premisa antidogmática, un combate contra la tentación totalitaria. La lotería en Babilonia no invoca, otra vez, el pesimismo oscuro de un perverso poder como se narra en otras literaturas.5 La lotería en Babilonia es una utopía lograda porque no esconde su máscara argumental. No se priva de decir que su relato no alcanza a capturar una potencia que lo excede. No presenta un proyecto que pretenda un marco institucional, pero no carece de la convicción aguerrida de la lucha contra ambiciones totalizadoras. El cuento de Borges es, también, un relato sobre las políticas de poder. La paradoja de una corporación del azar transporta un potencial crítico que se derrama fuera de toda premura conclusiva. La utopía de las suertes sugiere la idea de poder como aparato dudoso, irresuelto, tal vez inexistente. Poder como memoria de conflictividad, tensión, misterio. Borges sugiere que si el desorden de nuestras vidas no fuera sólo adherencia del pasado, mandato de insatisfacción o transmisión desprolija, podría ser también potencia deseante, diferencia infinita, otredad interminable. La pregunta por la existencia de la Compañía no se confunde del todo con la de la existencia de Dios, o la del Inconsciente, o la del gran Otro, o de la Matrix. Precipita una ficción que se anima a decir cómo sería el mundo anonadado sin un lenguaje que lo piense. O cómo sería un colectivo sin ese infinitivo decir que provoca sujetos innumerables. O especula con una omnipotencia que no se ejerce, confinada en lo mínimo, insignificante, inexpresable. Borges presenta su relato con la modestia del que cuenta algo indemostrable. Bibliografía Borges, Jorge Luis (1932). La perpetua carrera de Aquiles y la tortuga., en Discusiones. Editorial Alianza. Madrid, 1976. Borges, Jorge Luis (1932). Avatares de la tortuga., en Discusiones. Editorial Alianza. Madrid, 1976. Borges, Jorge Luis (1944). La lotería en Babilonia, en Ficciones. Editorial Alianza. Madrid, 1974. Casullo, Nicolás (1996). La sureña lucidez, en Borges. En La invención y la herencia. Cuadernos Arcis-Lom. Número 3: Filosofía y literatura en la obra de Borges. Arcis-Lom. Chile, 2000. De Brasi, Juan Carlos (1995). La monarquía causal. Inédito. Deleuze, Gilles (1969). Lógica del sentido. Editorial Paidós. Barcelona, 2001. Fernández, Macedonio. El zapallo que se hizo Cosmos. En Papeles de Recienvenido / Poemas. Relatos, Cuentos, Miscelánea. Centro Editor de América Latina. Buenos Aires, 1966. Ferrer, Christian (2002). Copartícipes secretos: Benjamin, Blanqui, Borges. En Blanqui, Auguste. La eternidad por los astros. Ediciones Colihue. Buenos Aires, 2002. Instituto de Investigaciones Grupales Dir: Graciela Jasiner Coordinación de Grupos • Programa de Capacitación con MultiRecursos Técnicos y Experiencia de Entrenamiento. González, Horacio (1996). Irrisoria ética borgeana. En La invención y la herencia. Cuadernos Arcis-Lom. Número 3: Filosofía y literatura en la obra de Borges. Arcis-Lom. Chile, 2000. Lacan, Jacques (1957-1958). Seminario V. Las formaciones del inconsciente. Inédito. Lacan, Jacques ((1958-59). Seminario VI. El deseo y su interpretación. Inédito. Marechal, Leopoldo. El panjuego de Xul Solar, un acto de amor. En Cuadernos de Mr. Crusoe Número 1 (artes, ciencias, ideas) O’Donnell, Mezza y Asociados S.A. Editores. Buenos Aires, 1967. Marx, Carlos. El Capital (Crítica de la economía política), Tomo 1. Fondo de Cultura Económica. México, 1973. Rubel, Maximilien (1970). Páginas escogidas de Marx para una ética socialista 1 y 2. Amorrortu Editores. Buenos Aires, 1974. Viñas, David (1996). Borges y Perón (1) y (2). En La invención y la herencia. Cuadernos Arcis-Lom. Número 3: Filosofía y literatura en la obra de Borges. Arcis-Lom. Chile, 2000. Wittgenstein, Ludwig (1918). Tractatus logico-philosophicus. Traducción Jacobo Muñoz e Isidoro Reguera. Alianza Editorial. Madrid, 1993. Notas 1- Suerte de existir duplica un relato de Borges que se cita casi completo. No es una glosa que supone que todo lo que se debería pensar ya está dicho en esa narración maravillosa. Ni pretende la intercalación de explicaciones que hagan inteligible esa escritura. La lotería en Babilonia no interesa como misterio que transporta oscuridades, secretos o claves a interpretar. Aunque intertextualidades, sugerencias, ambigüedades, son pulsos evidentes de su arquitectura. En este caso, la pasión y el gusto por el lugar del commentador forman parte de un ejercicio de espera. La obstinada demora en una palabra presente en una voz ajena como ocasión para la fuga de una idea. A veces, los pensamientos se emancipan por fricciones repentinas que se producen al pasar de un texto a otro. 2- En el prólogo para la edición de Ficciones, Borges describe este relato como una pieza fantástica no del todo inocente de simbolismo. ¿Alude a la sociedad argentina? Se podrá decir que Borges exagera la circunstancia de la suerte como expresión de su admiración por el cosmos europeo. O que participa de la serie discepoliana que se dice en Cambalache (“Que el mundo fue y será una porquería (lotería)...”). Esa protesta moral contra las mezclas, el desorden, las presencias irrespetuosas de las vidrieras. Pienso el texto como ficción utópica que vuelve risible el ideal de orden omnipotente, perfecto, completo; a la vez que evita el regodeo quejoso de la razón que se siente atropellada. 3- El relato presenta una de las invenciones utópicas más logradas del pensamiento. Borges más inclinado por las perspectivas irónicas de Macedonio Fernández (El zapallo que se hizo cosmos) y de Xul Solar (el panjuego), proyecta un mundo que recuerda ideas de Fourier, Blanqui, Swift, Marx. 4- Borges, en Avatares de la tortuga (1932) apunta que Nicolás de Cusa en “la circunferencia vio un polígono de un número infinito de ángulos y dejó escrito que una línea infinita sería una recta, sería un triángulo, sería un círculo, sería una esfera...”. 5- Pienso en 1984 de Orwell o en la novela del ruso Evgenij Zamyatin, Nosotros, escrita en 1920. En esta última, hombres y mujeres son identificados con números. El libro de las horas prescribe qué debe hacerse en cada circunstancia. Viven en casas de vidrio, se levantan simultáneamente, se lavan los dientes y comienzan a tomar el desayuno en el mismo momento. Hacen el amor cuando está indicado. La sociedad, por fin, alcanza un Estado Unificado. Un Benefactor protege a todos por igual. Los Guardianes se encargan de resolver cualquier problema. Un mundo casi perfecto. CERTAMEN TEORICO-TECNICO 2006 Para PSICOLOGOS SOCIALES, OPERADORES GRUPALES y ANALISTAS INSTITUCIONALES Rubro:TRABAJO DE CAMPO Relato y análisis de situaciones grupales, institucionales y/o comunitarias concretas, y las demandas, los diagnósticos, los artificios técnicos, las intervenciones y los proyectos en que el operador haya participado Frecuencia semanal: Martes 20.30hs o Miércoles 14.30hs. • Programa Intensivo de Capacitación con MultiRecursos Técnicos y Experiencia de Entrenamiento. El segundo Sábado de cada mes de 10 a 17hs. Ciclo: “Relatos de Experiencias en Grupos” 2da Mesa Redonda: Equipos de Trabajo Invitados: CN. Stella Maris Quiroga: Cátedra Equipos de Trabajo - Cs. Ec.- UBA . Lic. Fabián Jalife: Director de BMC Consultores Lic. Ricardo Pasik: LU-PAS Investigación de Mercados y Social. Tel: (011) 4833-7808 [email protected] Bases y condiciones: [email protected] Tel-Fax: 4433-4988 Fecha de cierre: 31 de mayo de 2006 o 8 de Sábad hs Abril 15 Guatemala 4334 Cap. Federal www.ingrupos.com.ar Ninguna cosa noble se hace sin el riesgo de un azar. Montaigne Auspician: ESCUELA PSICOANALITICA DE PSICOLOGIA SOCIAL, ESCUELA LACANIANA DE FORMACION EN PSICOANALISIS, EXPERIENCIAGRUPAL RIO DE SAVIA (Creatividad en Juego) FUNDACION MALAURIE CABANILLAS Campo Grupal / 9 DESDE MEXICO Enrique Guinsberg [email protected] Al escribirse estas líneas terminan en esta ciudad dos reuniones paralelas con igual tema y preocupacion pero objetivos muy distintos: el del agua, con la conciencia de que será el gran problema de un futuro muy cercano. Dos reuniones porque sobre esto pasa lo mismo que con tantas otras cosas: una es la oficial de representantes de los gobiernos de los países, y la otra la alternativa de organizaciones no gubernamentales y especialistas, que se oponen a la tendencia de la primera de privatizar el suministro de un líquido que ya falta en muchos lados. Tal vez los argentinos sepan bastante de esto. Si por un lado puede resultarle extraño que se hable de futura carencia de agua al ser la cuenca formada por Brasil, Paraguay y Argentina la de mayor cantidad de ese líquido en el mundo, y por tanto sin perspectivas de que se termine -aunque no debe olvidarse que hace tiempo ya se habla de que el agua será lo que hoy el petroleo, y podría haber guerras por ella-, por el otro justo en estos días se anula la privatización del suministro del agua tomada en la época de Menen por las consecuencias marcadamente negativas que trajo tal medida de claro cuño neoliberal, por lo que más de uno se sorprenderá que medida similar quiera tomarse en otros lados. Aunque sobren ejemplos, parece que muchos no quieren aprender de la experiencia... México está entre los países con problemas más graves de carencia de agua, y no sólo para el futuro sino ya en este presente. Muchos lugares carecen de ella, y en esta megaurbe existe una sobreexplotación de los mantos acuíferos, a más de que mucha tiene que traerse de lugares cada vez más lejanos. Pero, y esto es seguramente lo más grave ya hoy, muchos lugares no tienen siquiera la cantidad mínima requerida para las necesidades vitales, siendo ya una dura batalla su obtención, mientras los lugares de sectores acomodados no sólo están en una situación diferente sino que la desperdician de manera muy notoria y sin preocuparse por ello. ¿Qué esto no es nada nuevo sino la reproducción de algo muy conocido para tantas otras cosas? Sin duda, pero respecto al agua es muy distinto por lo que ella significa. Y las mentalidades neoliberales no encuentran otra “solución” que proponer no sólo tal privatización sino aumentar su precio -de hecho ambas cosas están vinculadas-, con la idea de que un costo mayor ayudaría a disminuir el desperdicio. Lo que en parte puede ser cierto, pero sólo para quienes tienen acceso al agua y no para quienes libran la mencionada batalla diaria. Aquí agua y electricidad están subvencionados desde hace muchas décadas, y se paga por ellas bastante menos de su precio real, algo que se ha usado como forma de evitar conflictos sociales. Y es real que ello que no se cuiden (como dejar las luces de una casa siempre prendidas), y que se requiere una concientización al respecto. Pero ¿adivine el lector quienes pagarán las consecuencias de las medidas privatizadoras que se proponen? “El trabajo de quitar el yo” Actualidad de Macedonio Fernández Noelia Bili [email protected] H ay escritores que nacen de espaldas: la vista y el corazón clavados en el pasado, la pluma demorada en hojas que ya no están –las únicas a las cuales reconocen algún valor. Otros, conciben la escritura cual soporte de sus representaciones de la “realidad”: entienden que sólo vale la pena referirse a lo existente, anclarse a la materialidad de lo que aparece ante los ojos. Ambos tienen en común la pretensión de conocer lo que “lo real” efectivamente es y, en consecuencia, creen poseer el derecho de juzgarlo desde el lugar privilegiado del Autor. Nada más lejano a Macedonio Fernández: si bien escribió incansablemente, el lugar del Escritor-Autor siempre le resultó algo pedante y ciertamente ridículo puesto que en él la escritura era un pathos: tomar el lapiz era una necesidad que se le imponía por fuera de su voluntad, y el resultado era un ejercicio de descentramiento de su Yo-Autor. Por ello nunca llegó a sentirse propietario de sus pensamientos y poca importancia le daba a su producción: perdió cuadernos de anotaciones en todas las pensiones que lo tuvieron como ignoto residente, desparramó pequeños y notables poemas en latas de bizcochos ajenas, en libros dejados al azar en una mesa de bar. Publicó escasamente, rechazando las más de las veces los ofrecimientos de sus queridos y renombrados amigos (Raúl Scalabrini Ortiz, Ramón Gomez de la Serna, Oliverio Girondo). En todos ellos la figura macedoniana inspiraba devoción y tentaba al plagio, como testimonian sus ilustres compañeros de tertulia: “La certidumbre de que el sábado, en una confitería del Once, oiríamos a Macedonio explicar qué ausencia o qué ilusión es el yo, bastaba, lo recuerdo muy bien, para justificar la semana.” Así era afectado un jovencísimo Jorge Luis Borges, confeso discípulo de Macedonio. Y si bien la impronta socrática es uno de sus rasgos más recordados, a él le resultaba mucho más efectivo mostrar el proceso del escribir, que el improbable lector viera el modo en que el lenguaje se configura a fin de dar forma a una Idea: ausencia de Autor y de Obra. De este modo se embarca nuestro pensador en un juego de presencias y ausencias que marcarán todo su vivir, oscilación que se ve reflejada en cada uno de los ámbitos en los que se desenvuelve. Pongamos por caso: de los innumerables banquetes y conferencias a los cuales era invitado por los animadores de las re- vistas literarias (Proa, Oral, Martín Fierro), Macedonio era el ausente “con aviso”: “No necesita explicación mi presencia aquí, señores, pues que ésta falta; y espero que seréis con ella indulgentes, considerando que no se ha producido... Notaréis que he cambiado novedosamente el texto usual de las personas que faltan. Ellas hasta hoy creyeron siempre que les urgía disculparse; sólo alguna muy inteligente llegó a dudar si era la presencia o la inasistencia la necesitada de ello”. Si no se tratara de Macedonio, este artículo hubiera empezado por establecer fecha y lugar de nacimiento, pero sucede que ni siquiera esta posibilidad nos deja el autor, quien se dedicó tenazmente al borramiento de su identidad civil y metafísica. Así pues, él recrea una y otra vez su venida a este mundo, lo cual lo transforma en un perpetuo “Recienvenido”. Mas atengámonos a las normas y elijamos uno de sus tantos nacimientos: “Nací tempranamente; en una sola orilla (aun no me he secado del todo) del Plata. Me encontraba en Buenos Aires a la sazón; era en 1875: fue el año de la revolución del 74... Pocas personas han empezado la vida tan jóvenes... Durante un minuto fui el americano de menos edad.” Para Macedonio nacer era una proeza que cada ser realizaba, pero tal vez lo más atractivo de estas consideraciones es que para él comenzar cualquier actividad implicaba un nuevo nacimiento, una subjetividad completamente nueva que se asoma al mundo y que comienza a descubrirlo otra vez (así se nace a Autor, a Abogado, a Metafísico). De este modo quería transmitir aquello que le acontecía permanentemente, y cuya posibilidad de expresión era para él casi lo único digno a lo cual podía dedicarse: el asombro-de-ser. Conociendo el gusto macedoniano por instituir la Nada como fundamento único del Universo (lo cual coincide con su falta absoluta de fundamentación metafísica), no resultará tan complicado notar hasta qué punto es insólito creer que el Ser es (que somos, que hay un mundo que existe). Problema cosmológico de larga data (¿dónde, cómo y cuándo comenzó a ser lo que es?), que ha atormentado a los espíritus meditabundos de todas las épocas, Macedonio lo resuelve negando que el Ser en verdad sea o, lo que es lo mismo, afirmando que el mundo sólo es un “almismo” de puros estados de conciencia, de afecciones inmateriales que no necesitan más que de lo ideal para existir. De aquí toma su sentido la estética macedoniana, Universidad Autónoma MetropolitanaXochimilco Campo Grupal / 10 Las mujeres... esas esfinges sin secretos. Oscar Wilde Carta al rector de la U.B.A. por la situación de Ana Fernández es decir, las teorías acerca de las técnicas y funciones del Arte. Sus teorías artísticas –impedidas de encontrar una forma acabada en razón de su permanente reelaboración– descalifican la percepción sensible, de la cual se valen todas las artes, a mera fuente de sensaciones en estado bruto, mientras que el arte puro –Belarte, según el neologismo macedoniano– encuentra su sola herramienta en la palabra y tiene por objetivo único generar la emoción conciencial que niega el Yo y el Mundo del lector. Como podrá imaginarse, “marear al Yo” mostrando su nada raigal no es una tarea fácil, mucho menos teniendo en cuenta que no sólo es inútil lo sensorial, sino también lo conceptual: es decir, de nada sirve anoticiarse teoréticamente de estas ideas, debido a lo cual Macedonio no considera que sus escritos metafísicos puedan alcanzar dicho resultado como sí es capaz la Novelística, básica Belarte conciencial: “Es muy sutil, muy paciente, el trabajo de quitar el yo, de desacomodar interiores, identidades. Sólo he logrado en mi obra escrita ocho o diez momentos en que, creo, dos o tres renglones conmueven la estabilidad, unidad de alguien, a veces, creo, la mismidad del lector. Y sin embargo pienso que la Literatura no existe porque no se ha dedicado únicamente a este Efecto de desidentificación, el único que justificaría su existencia y que sólo esta belarte puede elaborar.” Irrealizar el mundo instrumentando la imaginación que pone entre paréntesis la identidad consigo mismo, he aquí uno de los modos posibles de llevarnos al punto en que desistimos de ser alguien determinado y nos hacemos Uno con el mundo: misticismo idealista, es decir, fusión de todo en el seno de un continuo y eterno fluir de la conciencia universal. Macedonio se excusa, desiste del vivir que se regula por medio de las lógicas instituidas. Ni en sus intervenciones públicas ni en los intercambios epistolares con amigos abandona este incesante proceso de desmaterialización del mundo conocido instrumentando la paradoja. De allí el efecto irritante sobre el lector que busca historias verídicas o sentimentalismo, que quiere presenciar “vida”. Y es que para Macedonio nuestra vida no es en el fondo más real que la de un personaje literario, y por eso la función principal de la novelística es hacer que el Lector se de cuenta de que su “vida real” es una ficción, aunque más no sea por un instante que crea no vivir. Para ello también pueden implementarse otras técnicas, por ejemplo, aquella de la Humorística: “Se estaba produciendo una lluvia de día domingo con completa equivocación porque estábamos en martes, día de semana seco por excelencia. Pero con todo esto no estaba sucediendo nada: la orden de huelga de sucesos se cumplía” “Alguien dirá: ¡Pero Recienvenido, otra vez de cumpleaños! ¡Usted no se corrige!; ¡la experiencia no le sirve de nada! ¡A su edad cumpliendo años!... Otros juzgarán que el anuncio de mi próximo aniversario va encaminado a incitar a los cronistas sociales para recordarme con encomios. ‘Nadie como el Sr. R ha cumplido tan pronto los cincuenta años’; o bien: ‘A pesar de que esto le sucedía por primera vez cumplió su medio siglo el apreciado caballero como si siempre lo hubiera hecho’... En fin lo cierto es que nunca he cumplido tantos años en un solo día” Por medio del absurdo (o “milagro de irracionalidad”), se consigue desbaratar la fe en la racionalidad de la vida, en el ordenamiento prolijo del mundo que nos asfixia haciéndonos sentir que nada puede ser modificado porque todo está en el lugar correcto. La “Ilógica del Arte” rompe las seguridades del intelecto, pone en abismo la certeza de ser y nos hace partícipes de una experiencia liberadora, donde cualquier cosa puede suceder (incluso que Nada suceda) y no sólo lo que es lógico que acontezca. Macedonio es el desertor que abandona el mundo por aburrimiento, por ser todo demasiado previsible. Pero al no haber “otro mundo”, todas sus actividades habitan ese límite invisible que constituye el tránsito a la Nada, a la espera del venir de lo no-existente que, como tal, nunca se hará presente (ahí ya sería, por cierto, lo existente). Tal espera está lejos de ser pasiva, antes bien es necesaria la febril destitución del mundo, la instrumentación de lo paradójico y del absurdo, la conmoción de toda certeza. De modo que tampoco podríamos decir con certeza que Macedonio ha muerto, no estando siquiera seguros de que haya realmente existido. Tal vez pueda, todavía, reirse de nuestras ingenuas certidumbres y creencias en su próxima venida. Asociación Argentina de Medicina Integrativa Presidenta: Lic. Susi Reich ACTIVIDADES DESTACADAS PARA EL AÑO 2006: •MESA REDONDA "CONVERSACIONES SOBRE SALUD Y ESPIRITUALIDAD" Más allá de la empatía: actitud compasiva y amorosa del profesional Con la participación de S.S. DALAI LAMA y prestigiosos profesionales de Argentina Se realizará el día mayo 1º de 13 a 15 horas en la Sociedad Rural Argentina •El Terapeuta Familiar, Profesional Transdisciplinario •Presentación del libro "Salud Integral para el Siglo XXI" 2da. Jornada de A.A.M.I. Informes: Secretaría de 15 a 20 hs. Tel.: 4788-4929 4782-1722 e-mail: [email protected] www.aa-mi.com.ar 4784-9805 / [email protected] Encuentros semanales en Belgrano Un hombre no es sino lo que sabe. Bacon Dirigida por Lic. Adriana Piterbarg El 22 de marzo próximo pasado, la agrupación Psicólogos En Frente, Minoría en el Claustro de Graduados en el Consejo Directivo de la Facultad de Psicología, ingresó al Rectorado de la U.B.A. una carta dirigida a Jaim Etcheverry en la que numerosas personalidades académicas, profesionales, del ámbito de la cultura, etc., solicitan que en el Consejo Superior de la Universidad se reconsidere la situación de la Profesora Titular Plenaria Ana M. Fernández, quien ha sido destituida por el Consejo Directivo de la Facultad de Psicología de dicho honor académico. En el texto de la carta -a la que adhieren también asociaciones profesionales, agrupaciones estudiantiles y de graduadas/os de diversas universidades, sumando un total de 544 firmas del país y de Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, España, EEUU, Francia, Italia, México, Uruguay y Venezuelase advierte al C.S. respecto a los procedimientos por los cuales se priva a esta docente e investigadora de reconocida trayectoria nacional e internacional de una categoría legítimamente obtenida por concurso. Asimismo, se señala que estas maniobras atentan contra excelencia académica y vulneran seriamente la calidad de la Universidad Pública, privándola de su imprescindible pluralidad científica e ideológica. Algunas adhesiones fueron acompañadas de expresiones de apoyo; por razones de espacio se ha seleccionado la del Prof. Néstor García Canclini, antropólogo de gran prestigio internacional, radicado en México: Al Sr. Rector de la Universidad de Buenos Aires, Dr. Jaim Etcheverry y por su intermedio al Honorable Consejo Superior: Acabo de saber con enorme asombro, casi incredulidad, que el Consejo Directivo de la Facultad de Psicología retiró la designación de Prof. Titular Plenaria a la Prof. Ana María Fernández. Estoy entre los muchos colegas que conocemos desde hace más de tres décadas el destacadísimo desempeño docente y profesional de la Prof. Fernández, hemos leído y utilizado sus valiosas publicaciones y hemos podido aprovechar en las tareas universitarias sus contribuciones a la teoría y metodología de trabajo con grupos. Como alguien que ha escuchado en varias universidades argentinas y mexicanas el alto aprecio a su labor, me resulta inexplicable esta manifestación de maltrato al trabajo académico e intelectual de una universidad que debiera estar orgullosa de contar con una profesora tan estimada por colegas y estudiantes, y que tanto ha aportado, con admirable fidelidad a la universidad pública, al prestigio de varias instituciones de educación superior en Argentina y en otros países. Por tales razones, deseo manifestar mi solicitud de que ese Consejo Superior revea esta arbitraria e injusta decisión. Les envío un saludo cordial. Dr. Néstor García Canclini Profesor Distinguido de la Universidad Autónoma Metropolitana Investigador Nacional de Excelencia. Campo Grupal / 11 Salud y espiritualidad Susi Reich [email protected] Salud, espiritualidad dos temas fundamentales que atañen a la humanidad toda, con distintas acepciones se hace presente en las diferentes culturas del mundo. Desde la terminologia, podemos restringir “salud” al ámbito estrictamente médico, “espiritualidad” al religioso. Sin embargo la complejidad actual nos obliga a empujar límites, desdibujar fronteras e integrarnos con el objetivo de cumplir la ansiada meta: manejar acertadamente los desafíos, el estres cotidianos, las enfermedades y poder asi avanzar mejorando nuestra calidad de vida . Stress y depresión son los grandes desafíos actuales, tanto a nivel de prevención como de diagnostico y tratamiento. Una droga adecuada puede, a veces, paliar el sufrimiento, la psicoterapia también colabora, el hacer gimnasia, una correcta nutrición, un buen dormir paz interior. Son estas, metas regulativas kantianas, que no siempre se logran , dependiendo del medio socio cultural que nos toque, pudiendo en algunos casos hacerse inalcanzables. Pero acceder a estas tiene un punto de inicio, desde donde nos debemos para para comenzar el cambio. Aquellos que han escuchado al Dalai Lama en los últimos encuentros con neurocientíficos, médicos y psicólogos sabemos que sus palabras han sido inspiradoras de cambios y, si bien su conocimiento es de tradición milenaria, sus palabras son de una actualidad incontrastable. El ambito cientifico occidental abre hoy sus puertas a este conocimiento, no ya con una mirada curiosa, sino dispuesta la ciencia a dar pie a una nueva metodologia de trabajo, con una nueva conciencia del significado y aporte de nuestra profesiones. No podemos vivir sin stress pero podemos evitar muchas de las causas que nos llevan a él. Según el Dalai Lama en el mundo occidental siempre queremos cambiar las circunstancias y el contexto cuando es necesario primero conseguir la paz interior. ¿Como lo intrumentamos? Para Su Santidad el Dalai Lama el amor y la compasión bien entendidos son los pasos a seguir, y que van mucho mas alla de ser sentimientos. Estamos frente a un cambio filosofico y paradigmatico. Como psicóloga que aprendió a entender empáticamente al paciente propongo también trascender la empatía para intentar ser profesionales compasivos. Etimológicamente compasión viene del vocablo sim = con y pathos = pasión. Compasión es desear el bien del otro no solamente el otro cercano sino el de toda la humanidad. La red llegó hace rato La metáfora, sin metáfora, de Cromañón Colectivo Situaciones [email protected] H ace menos de un año publicamos junto a los compañeros de lavaca un cuaderno en torno a la experiencia de las presas de la Legislatura y las presas por los conflictos de Caleta Olivia. El texto estaba centrado en sus testimonios. Como parte de la discusión que fuimos desarrollando en ese momento surgió la imagen de un Agujero Negro como metáfora de la situación en la que un grupo de personas son condenadas a la total oscuridad como modo de desarmar las resistencias. A pocas semanas de haber sido publicado el cuaderno sucedió la tragedia de Cromañón. Desde el principio, y básicamente por la cantidad de amigos y parientes que estuvieron o pudieron haber estado allí, quedamos encerrados en una larga y angustiada interrogación: ¿cómo entender lo que sucedió? Tuvimos entonces la percepción de que aquella lógica que habíamos llamado Agujero Negro volvía a activarse. Pero esta vez no era el silencio, sino el palabrerío mediático lo que ocultaba la posibilidad de producir un testimonio vivo. Luego, cuando las primeras marchas empezaron a ocupar las calles de la ciudad, se hizo posible pensar de otro modo el asunto. Y nos fueron surgiendo preguntas más concretas. ¿Cromañón muestra estilos de vida que hasta ahora no habíamos considerado?, ¿cómo crear las condiciones para producir un testimonio a partir de las luchas desencadenadas por la tragedia?, ¿es posible que la fiesta sea ahora expropiada en nombre de la “seguridad”?, ¿surge un nuevo criterio de responsabilidad al interior de la elaboración de los rockeros, los “sobrevivientes”, las familias, los amigos? ¿Se percibe, a partir de Cromañón, un modo activo de lidiar con el dolor capaz de producir, en medio de tanta muerte, alguna luz? Los extractos que siguen surgieron de una larga conversación entre lavaca y el Colectivo Situaciones luego de haber leído todos los testimonios que se publican en este cuaderno. CS 1. “Los de Cromañón” ¿De quiénes hablamos cuando nombramos a los “afectados de Cromañón”? Parece, por los testimonios, que “de Cromañón” se es en diferentes modos o niveles: los pibes y pibas que sobrevivieron, sus amigos y familiares, las familias y amigos de los muertos y heridos, pero también quienes suelen ir pero ese día no fueron, más todos aquellos que han sentido que su colegio o su banda están permanentemente en estado-cromañón, es decir, al borde de una catástrofe por el sólo hecho de habitar unas condiciones de existencia ultraprecarias. Cromañon, entonces, es el nombre de una tragedia que se derrama por el cuerpo social descubriendo, a su paso, nuestra calidad de ciudadanos del capitalismo esencialmente trucho. www.varones.com.ar 2. Mirada fría Los testimonios revelan un sufrimiento que se inscribe en mecanismos sociales más generales: la “mirada fría”, el descubrimiento de la indiferencia social. No es sorprendente: ¿por qué iban a descubrirla antes? Y, sin embargo, es notable cómo este descubrimiento trae consigo otros tantos, como la constatación de que son muchos los que han conocido sufrimientos enormes y que al denunciarlos como injusticias han sentido esta frialdad en las miradas. El padecimiento da lugar a un replanteo. Se percibe hasta qué punto denunciar la tragedia como una injusticia vivida inscribe a quien lo hace en una cadena más amplia de luchas sociales. Así, al descubrir la frialdad de la mirada, se recorre, sin saberlo, un camino de iniciación de una experiencia directamente política. La nueva experiencia se pliega y alarga en un recorrido que muchos intentaron antes con diverso éxito. Esta transformación de la mirada es dolorosa porque implica re-vivir la indiferencia del pasado con una nueva vergüenza: la de haber aplicado a otros, alguna vez, esta misma frialdad. Algún testimonio dice: “los pibes no nos dan bola”. Otro chico continúa la reflexión: “lo entiendo, porque yo tampoco iba al Puente Pueyrredón”. La madre de Bru dice que ella “veía a esas Madres…” con distancia y cuando después llegaron sus marchas dijo: “ahora entiendo por qué las anteriores marcharon”. 3. Descubrir el cinismo Los familiares, amigos y compañeros de los desaparecidos de los ´70, particularmente las Madres, descubrieron que los asesinatos y desapariciones sufridas no fueron tragedias personales, sino fenómenos inscriptos en una lógica social perversa. La mirada fría es parte constitutiva de esa perversión. Entonces se suponía que el subversivo (el “pre” desaparecido) merecía, de algún modo, una sanción por los ímpetus y las modalidades de su desacato. Parte de la población aceptó el sacrificio. Si en los años ´70 la existencia de una cierta trama social permitió que el drama se produjera con el lenguaje de la lucha política, con actores claramente autoidentificados con la imagen del mundo que querían construir, décadas después, el Agujero Negro –la máquina sacrificial– devora vidas muy diferentes. Vidas que transcurren en un suelo muy distinto, tejido de precariedades varias. “Los de Cromañón” sufrirán otro modo de la frialdad, que precisamos comprender. Algunos de los sobrevivientes de los 70, por ejemplo, verán en ellos jóvenes despolitizados. Otros sospecharán que son las formas actuales de “ser joven” las culpables de lo ocurrido. Como si esos modos descuidados de vida actuales hubieran recibido un castigo bíblico por su manera amenazante de abandonar –o evidenciar la caída de– ciertos códigos sociales. Finalmente: ¿tienen derecho estas personas a ocupar las calles del modo en que lo hacen? Son existencias que deben ponerse por encima o afirmarse por debajo de estas miradas sancionadoras (hoy también culpabilizadas ante la tragedia), para permitirse el replanteo de lo sucedido y descubrir las fuerzas que operan, cada vez, produciendo el agujero oscuro. Sábado 22 de Abril del 2006 de 14 a 18 hs. Entusiasmo y pasión en el desempeño del rol profesional Coordina el Lic. Guillermo Augusto Vilaseca y equipo Con inscripción previa al 4804-5811 correo-e: [email protected] www.clinicagrupal.com.ar Duración 2 años “EL ARTE DE VIVIR EN PAZ” Lic. M. Cristina Martínez-Bouquet. 20 y 21 de mayo. “EL ARTE DE VIVIR EN PLENITUD” Dr. Pierre Weil. 24 y 25 de junio. “VOCACIÓN Y SENTIDO DE LA VIDA” Dr. Carlos Martínez-Bouquet. 15 y 16 de julio. Seminarios arancelados con inscripción previa. CÍRCULO HOLÍSTICO. Jueves de 16 a 17.30 hs. Inicia: 20 de abril. Informes e Inscripción: Güemes 3950 - Buenos Aires Tel.: 4831-3738 de 14 a 19 hs. [email protected] Campo Grupal / 12 La vanidad es un insaciable sexto sentido. Carlyle - Inicio: abril 4. “Hay que empezar a vivir” Hay una necesidad de salir muy rápidamente del tema del duelo. No se trata de olvidar la tragedia, sino de elaborarla a otra velocidad. Respecto de las formas de vivir el dolor en experiencias pasadas, aparece una diferencia fuerte. Una necesidad de “irse de ahí”. Como si el planeta-Cromañón tuviera un poder maléfico: amenaza a las vidas que allí fueron cercadas con no dejarlas escapar. Hay una sensación de asfixia en cada vuelta a esos sitios. Una de las chicas dice: “No voy al psicólogo porque es volver ahí. A partir de esto hay que empezar a vivir, ya no podemos seguir sobreviviendo”. Lo que convoca, entonces, no es la tragedia, sino la necesidad que le sigue: el intento por convertir una forma del dolor que liga y fija a la muerte por otra que se deslice hacia algún modo, no menos doloroso, de retomar las vidas. Muchas veces, en los testimonios, los pibes niegan nombrarse como sobrevivientes. Lo notable es cómo funciona esta suerte de politización desde el dolor que hace años se multiplica en Argentina. Una y otra vez emerge un enorme “saber hacer” disponible para el encuentro, la denuncia, la expresión, la convocatoria. La velocidad en que toma cuerpo todo esto es vertiginosa. No hay manual, pero esos modos de hacerse notar en la ciudad están al alcance de la mano, funcionan. 5. De adentro, de afuera Un testimonio se detiene en la diferencia entre las reacciones de dos policías distintos. Uno de ellos, tío de una de las chicas, se puso a sacar pibes del incendio. Otro, según cuentan, dijo que se rajaba... y se rajó. Más allá de toda consideración judicial, formal, esta distinción abre la posibilidad de pensar la cuestión de la responsabilidad tal como surge de los sucesos mismos de Cromañón. La piba dice: “Yo odio a los policías, son unos hijos de puta, pero mi tío que es policía vino y empezó a sacar chicos”. ¿Cabe extender este modo de razonar para considerar las formas en que músicos, empresarios, enfermeros, bomberos, legisladores y funcionarios actuaron antes, durante y después del desastre? ¿Y no cabe, acaso, extender este mismo criterio a quienes escriben y hablan sobre Cromañón? Cromañón nos muestra la existencia de una ética de la desesperación que pasa por el estar allí, y por el indudable heroísmo desplegado, pero también –y sobre todo– por aceptar que es en ese terreno desesperado donde se elaboran los modos de entender, sentir y actuar. 6 Vidas callejeras, cálculos cortos Cromañón plantea la cuestión de la muerte joven. Muertes que complementan vidas callejeras, sin horizonte largo, existencias repletas de posibilidades más o menos fragmentadas, con laburos de 14 horas. Aunque se quiera y se obedezca, los tiempos que quedan se hacen cortos. Si antiguamente se concebía la adolescencia como un período preparatorio para ingresar al mundo de la adultez, la paradójica situación actual vuelve a ese mundo inmediatamente accesible a la vez que lo descubre en su total inconsistencia. ¿A título de qué estas vidas de horizonte abreviado harían cálculos de largo plazo? Lo que para unas generaciones se vive como horror y amputación, para otras es punto de partida de un tiempo real de existencia. Cada cual se configura con la temporalidad que tiene a mano. Si se trata del tiempo de la fiesta, la fiesta se vuelve desesperada, porque la vida tiene ese tono. Y los cálculos son interiores a ese modo de ser del tiempo. Toda generación introduce un desacuerdo relativamente insoluble con las demás. Pero la modificación a la que nos toca asistir requiere mucha atención, mucha proximidad, porque amenaza con diluir las invariantes mismas que nos permitían hablar hasta ahora de “generaciones”. De hecho, la actual variación de los modos de vivir el tiempo y el espacio, así como el conjunto de los cálculos de vida implicados, surge de un agotamiento de los mecanismos tradicionales de asignar a cada quien un lugar y un futuro. ¿Cómo se realizan los cálculos vitales en un tiempo desreglado, en un espacio atravesado por fuerzas plásticas que posibilitan nuevas libertades pero también nuevas tiranías? Si el tiempo a calcular es el de lo que pasa “ahora”, antes del próximo cambio de pantalla, si todo cambio aparece como incalculable hasta que ocurre, entonces, el tiempo efectivo es el que está transcurriendo. El tiempo y el espacio del acto es el de un presente radical. La fiesta, así vivida, busca intensidad ya mismo. ¿Incluye este modo de la fiesta un cálculo sobre los cuidados, internamente establecidos, de esa diversión? Si las cosas se presentan así (“hasta que no te tocan, no te pasan”), esos cuidados parecen ser posibles sólo a condición de estar muy próximos a esa manera de diversión. Espacios en Palermo Soho 4831-6272 4832-5625 www.espaciosoler.com.ar Consultorios zona San Justo Consultorios por hora, día, semana o mes. Desde $ 5 la hora. Con o sin diván. A estrenar. Con recepcionista (sistema de video de seguridad en la recepción y hacia la calle) A tres cuadras de Catamarca y Arieta y a cinco de la Facultad de la Matanza 4441-7388 [email protected] 7 Criar a los adultos Los discursos que nos llegan de tiempos pretéritos cuentan historias de familias opresivas que reproducían el orden social, y de jóvenes que se rebelaban contra ambas instancias igualmente domesticadoras. Poco queda de estas opresiones y, por tanto, de aquellas rebeliones. Tanto la familia –o lo que pueda considerarse como tal– como el rock, por igual, son terrenos donde transcurren las propias vidas. La familia, sin embargo, ya no es la vía que garantiza la conexión de los jóvenes a una comunidad. Una inversión extraña parece haberse operado: son más bien los pibes quienes intentan inscribir a la familia en la realidad social. Da la impresión, incluso, de que son Córdoba y Pueyrredón Consultorios en alquiler A estrenar / Amplios y confortables Con y sin diván / Por hora-modulo-día Servicio de mensajería y secretaría Office para profesionales / Desde $ 4.- la hora Telefono: 4962-7094 PENSAMIENTO & VIDA Consultoría Filosófica Vivimos aferrados a opiniones y pautas establecidas que son incapaces de sostenernos. Abrirnos a nuevos modos de percibir, sentir es donde el pensar filosófico opera en el diario vivir como ejercicio de libertad disminuyendo las creencias consolidadas. Coordina: Claudio Vizental Tel: 4783-2795 [email protected] ATICO Cooperativa de Trabajo en Salud Mental Jornadas 20 aniversario: del 4 al 9 de Mayo. En el año 2006 la fundación anuncia la apertura del área clínica de hermanos. Desde el año 2000 trabajamos en la investigación de los vínculos fraternos, particularmente en las nuevas formas de organización familiar. Directora: Lic. Juana Droeven Demanet [email protected] Tel: 4827-3545 Participan: Eva Giberti, León Rozitchner, Silvia Bleichmar, Juan Carlos Volnovich, Beba Balvé, Alfredo Moffat, Enrique Carpintero, Reina Rodriguez Mesa (Cuba) y otros. Informes: TE. 4553-3800 El Estado soy yo. Luis XIV mail: [email protected] Campo Grupal / 13 TEATRIBUS El aliento Fernando Castelli [email protected] La libertad del espectador es uno de los elementos que distingue al teatro del cine. El teatro permite que la mirada se dirija donde quiera sin por eso salirse de la obra. El Aliento obliga al espectador a utilizar esta cualidad. Escenas múltiples que conviven en un solo tiempo sin jerarquizarse entre ellas. Por momentos no hay más remedio que elegir cuál se quiere ver o si se quiere ver unos segundos de cada una o escuchar una y mirar otra. A no desalentarse por que El Aliento tiene su historia. Dos grupos de actores, uno argentino y el otro ruso se juntan para filmar un película. Las desencuentros del lenguaje y los intentos todos fallidos de decodificarse entre ambos es uno de los motores desde donde avanza la obra. Estos desencuentros también ocurren en el interior de ambos grupos. Lo que interrumpe o resuelve un conflicto no es un argumento racional sino la alteración rítmica de un cuerpo. Los personajes que intentan explicar algo de lo que esta ocurriendo caen en el mismo ridículo que quieren explicar. La resolución es inexplicable, intempestiva e inesperada. El Aliento es una creación colectiva entre el director y los catorce actores que integran la compañía. Por esa razón, el nombre de la obra se debe no solo al esfuerzo de los personajes sino al proceso creativo de los actores que función tras función realizan diferentes modificaciones en el mismo, sin por eso abandonar el argumento, con la intención de seguir escarbando en su teatralidad. Para indagar más en este proceso recomiendo visitar su web www.elalientoteatro.com.ar TEATRO DEL ABASTO Humahuaca 3549 Cap. Fed Sábados 23 hs Reservar. Tel 4865-0014 Ficha técnica Autoría: Bernardo Cappa Actuan: Macarena Albalustri, Alejandro Alvarez, Diego Benedetto, Cynthia Yanina Canteros, Luis Contreras, Haydeé Del Carril, Javier Dubra, Vanina Falco, Valeria Franchi, Anibal Gulluni, Sebastián Mogordoy, Noelia Prieto, Carla Segalini, Valeria Zylberberg Producción general: Lucho Bordegaray Dirección: Bernardo Cappa Pastillas Vuelve Le Frigo, de Copy. Tercera temporada. Sala: El excéntrico de las 18. Lerma 420 Estreno: 4 de abril a las 23 IMPRO Seminario Cuerpo y Grupo. Coordina Lic. Patricia Mercado Taller abierto: La experiencia del color en la exploración del cuerpo. Martes 25 de abril de 20 a 22 hs. Actividad no arancelada. Vera 856-1B Cap.Fed. TE 4854-5732 Inscripción previa al taller e información del seminario: [email protected] Campo Grupal / 14 los pibes quienes crían a sus padres. Los “adultos” no pueden contarles lo que es la vida a los pibes, sino que las cosas se dan un poco al revés. Las preguntas con las que una generación revela progresivamente los sentidos del mundo a la que la continúa han cambiado de dirección y parecen ser los chicos los que saben algo más del presente. Esta situación transforma radicalmente el significado de la resistencia contracultural de las décadas pasadas. Todo lo anterior resultó especialmente evidente durante los conflictos que se sucedieron este año en quince colegios de Buenos Aires. Los pibes se movilizaron, debatieron, interpelaron y, finalmente, convocaron a los padres para que trabajen con y para ellos. Una escena repetida muestra a un pibe encarando al director de su escuela: “usted es un hijo de puta, no está poniendo el matafuego; usted es el director, yo soy un alumno”. Se trata de una imagen pos-cromañón: el vínculo entre los cuidados y la denuncia de las formas de destrucción propias del “capitalismo trucho”. La consigna “basta de corrupción, la gente no es basura” señaló una lógica de funcionamiento: hay corrupción, la gente es considerada basura. Que esto suceda en los colegios de la misma ciudad que fue sacudida por Cromañón habla por sí solo. De allí que haya algo cómico y patético en las propuestas que hablan de restituir la autoridad de los adultos y las instituciones, sin verificar la magnitud de lo que se ha roto. Sin registrar ese discurso implícito que dice: “vos no me podés enseñar nada que yo no sé. Y es más, yo sé algo que vos no sabés”. En el caso del colegio Mariano Acosta, los pibes terminaron haciendo la presentación judicial y la jueza les dio la razón. En la película Sexto sentido, un niño que puede ver a los muertos se relaciona con un psicólogo. Hacia el final, el psicólogo se da cuenta de que algo anda mal. El pibe sabe algo que él no percibe. Por fin averigua de qué se trata: el psicólogo mismo es uno de esos muertos con los que el pibe se relaciona. Buena parte de la sociedad se relaciona hoy con los pibes como el psicólogo de Sexto sentido: ya sin capacidad de ver la muerte, de rebelarse ante ella. Como si los pibes se estuvieran haciendo cargo de nuestras muertes no sabidas aún. 8 La resistencias en la Argentina trucha Cromañón revela una realidad cruda: la normalización de la que se habla hoy –tras la crisis del 2001– no pasa de ser un doblez en el capitalismo hiperprecario. Su propia trama jurídica, empresarial, mediática, política invita a la tragedia y la tragedia, a su vez, ilumina en todo su alcance la devastación. Cromañón es un momento concreto de ese modo de gestión de la existencia hiperprecaria. Hace largos años que vemos desplegarse una politización que surge ante la tragedia y Cromañón hace de espejo a todos los elementos de esa politización: aquella que surge en medio de la precariedad y, alcanzada por la catástrofe, se abre desde el dolor hacia lo público sin respetar las vías instituidas. La politización de lo íntimo indefine las reglas de juego y requiere una sensibilidad muy singular para evitar caer en el esquema de los medios. Se trata de un aprendizaje doloroso, que convierte su cercanía a la muerte en motivo de continuidad vital, y que debe afrontar, en su trayecto, la frialdad de las miradas y la complejidad política de las estrategias puestas en marcha por los otros, que consisten en fijar a las víctimas a su condición, en impedir la conversión, es decir, en con- validar el sacrificio. Este nuevo protagonismo que emerge del dolor posee una capacidad brutal de elaboración: aprende en corto tiempo el contenido trágico de la precariedad, experimenta la necesidad de convertir el dolor íntimo ligado a la muerte en un dolor colectivo, público, capaz de dar lugar a la lucha, y provoca una destitución de lo político estatal revelando el juego de un poder que simula cuidar la sociedad mientras derrocha sus posibilidades en roscas interminables. Que haya renacido en esas marchas el “¡Que se vayan todos!” señala este hartazgo desesperado y permite retomar la palabra y la calle. Se ha desarrollado, entonces, un “saber-hacer” de las resistencias en Argentina. De modo tal que, a pesar de que uno crea que nunca le va a tocar, cuando toca, se sabe qué hacer. Y no es que haya un grupo delimitado ofreciendo estos saberes: se ha formado algo así como un saber ambiente. En medio del luto generalizado, se propuso, en un momento, “vamos a hacer una muestra de fotos”, y en menos de tres meses la muestra ya estaba armada. Hoy en día la capacidad de acción de la gente que tendría que estar inmovilizada por el dolor resulta lo más potente de estos procesos. 9 Responsabilidad Estar adentro obliga. Claro que el estado, en la misma medida en que gestiona la trama precaria del capitalismo trucho y está él mismo tejido en ese material, ha quedado en falta. Esto puede enojar, pero no sorprender. Entre los testimonios se registra esta ambigüedad: de un lado se pide protección y, a la vez, existe un desconcierto general: “estamos desprotegidos, el Estado mata”. De uno y otro lado surge, entonces, la necesidad del desarrollo de una responsabilidad interior a las resistencias. En una charla, uno los rockeros retoma esta cuestión a partir de comentar la relación con los cumbieros. Según él, los únicos que no ayudaron en Cromañón fueron la policía y los de la cumbia. Parece que uno de éstos últimos les dijo: “gato, no saben prender bengalas”, a lo que siguió una previsible golpiza entre quienes se perciben como sectores enemigos. Pero más allá de la intención agresiva, parece que hay algo que escuchar allí: que para hacer la fiesta bien, es preciso aprender a cuidarse con formas y criterios propios. Como si la traducción amigable de ese insulto pudiera ser: “Si vas a hacer una fiesta, y la querés hacer a tu modo, entonces, tenés que hacerte cargo de ella a tu manera, que no supone que te cuiden de afuera”. De lo contrario, el discurso de la “seguridad” se hará cargo por medio de prohibiciones de la fiesta. El dilema planteado en términos de una opción entre “seguridad” y “tragedia” equivale a una restricción de la cultura de la fiesta por incapacidad de esta última para desarrollar una dimensión de “autocuidado”. 10 Siluetas colectivas: la red llegó hace rato Y bien, a pesar de todo, la fiesta sigue. Se la ve, por ejemplo, en el recital de La Renga. Existen canales de comunicación sólo visibles para los que se mueven. Resulta mucho menos perceptible y controlable que las redes organizadas visiblemente. Ni la vemos nosotros ni la ve el enemigo. Su inmaterialidad es su fuerza. No se sabe dónde está y posee una ductilidad plástica de despliegue y repliegue que le garantiza una larga salud. Para verla o para participar de ella la condición es ver el movimiento del que se nutre, participar de él. Si uno no se mueve, la red no se le aparece. Como si las redes fueran actitud, apta para disponer de recursos materiales, afectivos y simbólicos en cualquier punto, en el momento que se los requiera. Un capital de saberes-hacer cualificado por la multiplicidad de luchas desarrolladas. Esto, que constituye una vivencia para quienes están en procesos de politización, se torna invisible para quien está pasivo, por fuera. Cada testimonio parece confirmar la impresión del funcionamiento de esta red. Como si a partir de una tragedia, cada quien enfrentara la decisión de convertir su situación de víctima, de afectado, en nodo activo. Es la decisión tomada sobre una contingencia dolorosa más que el carácter de víctima en sí mismo, lo que activa la red. De hecho, la energía que circula por ella es, precisamente, muy activa. Todo esto fue muy claro en muchas de las marchas y actividades de Cromañón. Las vidas convocadas seguían la línea de las vidas perdidas. Sólo que para que esto ocurriera, para que este reconocimiento entre vidas surgiera, fue necesario que las vidas no se hubiesen reducido a meros individuos. La silueta de una vida, recompuesta por todos quienes formaban parte constitutiva de ella, nos entrega un cuerpo colectivo que testimonia lo que sucedía en torno a ese otro cuerpo cegado: tíos, compañeros de colegio, amigos del club, vecinos. Todo aquello que se prolonga por contigüidad sucesiva en esta silueta-red es esa trama sin la cual no sería posible la lucha. Olvidemos al ofendido, que come una sola injusticia. Pablo Neruda CINEFILIA AGENDA Cursos Anuales - Conducción de Grupos especializada en técnicas lúdicas y expresivas - Armado y Conducción de Proyectos - Entrenamiento Roles Directivos Comienzan en Abril Se dictarán una vez por semana y también un sábado por mes Informes e inscripción: Estudio Inés Moreno Virrey del Pino 2714, Capital 4785-3273 [email protected] Mesa Redonda Ciclo: “Relatos de Experiencias en Grupos” en el Instituto de Investigaciones Grupales que dirige Graciela Jasiner. “Equipos de Trabajo” el día Sábado 8 de Marzo a las 15hs. Invitados: CN. Stella Maris Quiroga, Cátedra Equipos de Trabajo Cs. Ec.- UBA; Lic. Fabián Jalife, Director de BMC Consultores y Lic. Ricardo Pasik, LU-PAS Investigación de Mercados y Social. Informes e inscripción: (011) 4833-7808 www.ingrupos.com.ar [email protected] Dalai Lama El 1º de Mayo a las 13 hs. en la Sociedad Rural de Palermo su Santidad el Dalai Lama presidirá la Mesa Redonda “Conversaciones sobre Salud y Espiritualidad”. Lo acompañarán el Dr. Héctor Fernández Alvarez, Psicólogo, Presidente de la Fundación Aigle; el Dr. Christian Plebst, Neuropsiquiatra Infantil de FLENI; el Filósofo Bernardo Nante de la Universidad del Salvador, el Ecólogo Miguel Grinberg y la Dra. Mónica Zuretti. Moderará la Mesa la Lic. Susi Reich, Presidenta de A.A.M.I. Informes: 4788-4929 4782-1722 Coordinación de Grupos Está abierta la inscripción al Programa de Capacitación en Coordinación de Grupos con MultiRecursos Técnicos y Experiencias de Entrenamiento que se dicta los Martes 20.30hs o Miércoles 14.30hs, en el Instituto de Investigaciones Grupales que dirige Graciela Jasiner. lInformes: 4833-7808 [email protected] www.ingrupos.com.ar Actividades 2006 en Grupal-Mente - Curso (presencial- a distancia) Multirecursos lúdicos y participativos para la coordinación grupal - Talleres: Un espacio de reflexion: Qué ves cuando te ves? Trabajamos las fantasias, temores y miedos que nos revela nuestro cuerpo frente al espejo. -Volver a empezar... Superar una separacion, es un trabajo doloroso pero necesario, y recorrerlo con otros nos facilita y alivia el camino. La propuesta es poder atravesar los miedos, las dudas y angustias que nos son comunes en esta situación. www.grupal-mente.com [email protected] [email protected] 155-479-9169 Cursos-talleres-seminarios 2006 Psicodrama Grupal y Creatividad supervisado por Tato Pavlovsky y coordinado por Silvia Schverdfinger. 4962-4583 [email protected] www.psicodramagrupal.com.ar Juego-Creatividad Cursos Anuales El Juego y Los Juegos - Facilitador de Juego - Playgrounds y Espacios de Juego - Ludotecas y Construcción de Juegos y Juguetes Creatividad y Desarrollo Personal -Talleres de Juego y Expresión Conducción de Grupos especializada y técnicas lúdicas y expresivas Comienzan en Abril Modalidad una vez por mes en día sábado Informes e inscripción: Estudio Inés Moreno Virrey del Pino 2714, Capital 4785-3273 [email protected] Capacitación para atención y estimulación de bebés y niños. Está abierta la inscripción al Programa de Capacitación para Atención y Estimulación de bebés y niños coordinado por Mariana Saidón. Informes e inscripción: 4983-5645 Mail: capacitaciones [email protected] Pág web: www.escuelababy.com.ar Escuela de desarrollos creadores - Su visión es ser potenciadora de búsquedas y actitudes creadoras para ofrecer espacios de producción social en los tiempos que vivimos. - Su misión es disponernos como transmisores y habilitadores de recursos creadores. - Su objetivo es ofrecer instancias de desarrollo de procesos creadores en sus propios campos de actividad. Duración: 2 años Quienes los dictan: Dr. Hector Fiorini - Prof. M. del Carmen Calvo Dra. Irene Pinasco - Lic. Gabriela Wagner - Dr. Rolando Benenzon - Lic. Alejandro Reisin Informes e inscripción: 4702-6366 de 14 a 20 hs. [email protected] - www.fundacionbenenozon.net Terapia Escénica: charlas y talleres gratuitos Grupo Ananké, Artes y Psicoterapias informa que está abierta aún la inscripción para el ciclo 2006 de su Escuela de Terapia Escénica. Al respecto habrá dos charlas informativas (con espacio de taller vivencial) los días : 6 de abril, en la nueva sede de Córdoba y Pueyrredon (Cap.Fed.), a las 20 hs, y el 8 de abril, a las 17 hs. en Haedo Norte, También informamos que continuan, los sábados por la tarde, los seminarios breves (de un día) “Introducción al esquizoanalisis: Una psicología de la afirmación” y “Mitos, arquetipos y personajes.” Informes e inscripción previa:M. De andrea (ex Artes ) 137 , tel.: 4443-8965 o 4659-4007 [email protected] Congreso de Psicologia Social Mar del Plata - agosto 2006 Instituto Aldebaran - Lic. Felipa María de Abajo [email protected] 4581-9047 Formación en psicodrama Inicio Abril. Quincenal. Los jueves Ciclo: Temas de psicodrama Inicio Abril. Quincenal. Los jueves. Taller de teatro orientado a la expresión y la comunicación. Inicio Abril. Jueves y viernes (Niños, Adolescentes y adultos) Grupos terapéuticos con dispositivo psicodramatico Lunes y Martes. Rivadavia 16217 dto 1 - Haedo- a 1 cuadra de la estación 4659-7954 - [email protected] Psicodrama Esquizodrama-multiplicación dramática. Curso-taller introductorio Palermo-Lomas de Zamora-Mar del Plata Taller informativo Palermo: Instituto “Sembrar” miércoles 26 de abril 18 a 20 hs. Coordinación: Emilce Quarleri. Docentes invitados. Informes e inscripción: 4772 2610 / 4383 9171 Cursos de entrenamiento - 2006 - Grupo de Investigación Dramática “Los Instantes en la Escena” - Grupo de Experimentación Corporal “Los Instantes en el Cuerpo” Coordinan: Claudio Mestre, Coordinador de Trabajo Corporal y Psicodramatista - Perico Lascano, Licenciado en Artes y Ciencias del Teatro. Informes e inscripción: Puesta en el alma Espacio de Investigación Escénico-Corporal [email protected] mensajes: 4824-8860 Psicodrama Grupal y Creatividad Psicodrama Grupal y Creatividad -de E.I.P. Equipo Interdisciplinario Paso- con la supervisión de Tato Pavlovsky y la coordinación de Silvia Schverdfinger y equipo. Entrevistas sin cargo para cursos 2006 sobre Psicodrama y Coordinación Grupal, Teatro Espontáneo con integrantes de La Combinada y Teatro de Texto . Informes al 4962-4583 [email protected] [email protected] Buenas noches, buena suerte Pasantias clínicas Primer cuatrimestre 2006 Clínica en adultos, nuños y adolescentes Inicio: Abril 2006 Duración: del 17/4 al 03/07de cursada: Mañana, tarde o noche Inscripción: Personalmente en la institución, a partir del Lunes 13 de marzo, de Lu a Vie de 10:00 a 20:00. Presentando alguno de los siguientes documentos: Matrícula, Titulo, Certificado de Título en trámite o Libreta Universitaria. Centro Dos Av. Pueyrredón 538 -1º “A” (1er cpo) - Capital Tel: 4961-2197 E-mail: [email protected] Visite nuestra página web: www.centrodos.com.ar Cacerías de brujas existieron siempre. Por ejemplo, en el siglo XVII, en Salem, Nueva Inglaterra, era mejor condenar a una negra esclava acusándola de practicar brujería antes que revelar algunos negociados ocultos. La Iglesia Congresional era sostenida por el diezmo de un pueblo temeroso del averno y desplegaba su poderío con todo esplendor. De paso, si acusabas a tu vecino de prácticas satánicas adquirías sus tierras a precio de ganga, una vez que el pobre imbécil fuera condenado a la hoguera. La Revolución Francesa y la Rusa, en sus respectivos momentos, también produjeron pánico debido a las persecuciones y la intolerancia. Aquél que no condenara con fervor el accionar de la República Francesa era acusado de Jacobino, que era algo así como un enemigo de la Patria. Hubo maccarthysmos antes de Maccarthy: la aparición del Ku Klux Klan, los mártires de Chicago, la condena de Sacco y Vanzetti y sobre todo, el temor al comunismo, ese bicho inmundo que iba a comerse a los niños junto con la propiedad privada. Repasemos: detrás de cada masacre está oculto el vil metal. Al poder no le gustan los movimientos revolucionarios y mucho menos aquellos que le tocan el bolsillo. Cuando se creó la Comisión de Actividades Antinorteamericanas no se hizo otra cosa que distraer al Congreso de asuntos más importantes. Corría el año 38 y el mundo era un hervidero. La caza de brujas bajo el lema de “combatir al peligro comunista” provocaba allanamientos y violaciones a la Constitución. Comenzaba la Guerra Fría. Doce años más tarde, Joseph Maccarthy retomaría esta idea del Comité. Este oscuro senador, bueno para nada, consiguió por casualidad saltar a la fama gracias a su mano dura, su hábil manipulación y su histrionismo. Hasta ese momento la persecución era de arriba hacia abajo, del poder de la clase alta hacia el pueblo. Con Maccarthy se volvió horizontal; fue el colmo cuando el hombre apareció con una lista negra en la que denunciaba como comunistas a distintas personalidades del Departamento de Estado, después de pasar por Hollywood y la TV. Cuando se metió con “el cuarto poder”, un tal Murrow, periodista, le presentó batalla, demostrando que los medios también tienen su peso y coincidiendo con que ni el gobierno ni el ejército soportaban más el accionar maccarthysta. Es como si le hubieran dicho: nos fuiste útil en un momento, pero el poder lo seguimos teniendo nosotros. Caza de brujas hubo siempre en la historia. Hoy, a 30 años de la peor “cacería anticomunista” que hubo en el país, recordamos a los caídos. Necesitaron hacer desaparecer a 30 mil inocentes para tapar la fuga de capitales más grande de la historia argentina y para adquirir una gigantesca deuda externa, préstamo que “estabilizaría al país” según los entendidos. Se devaluó el peso, se suspendió la actividad gremial, cayó la industria, y con el cierre de las fábricas se acrecentó la desocupación. Todo esto avalado por las cámaras empresariales, para el bien de la banca internacional y sobre todo por “la Paz”. Una serie de acontecimientos sociales, políticos, económicos (algunos conocidos y otros no tanto por el común de las gentes) suelen suceder mientras se cazan brujas. En Argentina para justificar la guerra (la venta de armas siempre es importante), para que nada se alterara en los círculos de poder, se necesitaron 30 mil inocentes. Grupos de Psicodrama, orientación en esquizoanálisis Deleuze-Guattari Abierta la inscripción 2006 a los: - Grupos intensivos de verano - Grupos anuales (inicio en abril) El trabajo será teórico práctico. Se trabajará a partir de textos de J. Moreno; G. Deleuze; F. Guattari, Foucault, Nietzsche, Spinosa, Simmel. Informes e inscripción: 4982-4655 [email protected] V Jornadas Internacionales Nietzsche - I Jornadas Internacionales Derrida Las jornadas se realizarán en Octubre de 2006 en el Centro Franco-Argentino de Altos Estudios. Se convoca a la presentación de ponencias y videos relacionados con el pensamiento de F. Nietzsche y J. Derrida. Bases, informes y presentación del material: [email protected] (sobre Derrida) y [email protected] (sobre Nietzsche) CambiArte, El arte del cambio El Centro de Psicoterapia Cognitiva para el Cambio anuncia la apertura del espacio de terapia grupal para trastornos de ansiedad y ataque de pánico. Informes: 4824-1064 15-5756-9173 15-5261-8841 Sistema Japonés de Armonización sin contacto Seminario dirigido sólo a terapéutas para lograr el equilibrio mental y emocional de sus pacientes durante la consulta. No se necesita tocar al paciente. Este es un método Budista japonés (sinérgico) donde se aprende el manejo de la energía natural del universo. Es una sabia convinación entre intesión, mente y corazón. Seminario de 3 horas dictado por Cristian Jorge, maestro de Reiki. Amenabar 1652. Tel. 4783-2535 o al 15-4491-4850 Danza teatro Está abierta la inscripción al curso anual de danza teatro, a cargo de la Lic. Carolina Pavlovsky, terapeuta corporal, bailarina,y coreógrafa. No se requieren conocimientos previos. Informes al 4778-0195 martes, miercoles y viernes de 11 a 18 hs. Escuela Psicoanalítica de Psicología Social Inscribe para la carrera de Psicología Social Psicoanalítica, los Cursos de Posgrado de Formación en Psicoanálisis, de Análisis Institucional, de Coordinación Psicoanalítica de Grupos Operativos, y el Taller de Técnicas Activas para Grupalistas. INFORMES: Echeverría 2806 1ºp, lunes, miércoles y viernes de 17 a 21, martes y jueves de 9 a 14, tel. 4706-2397 [email protected] www.psicosocial.com.ar Especialización en Atención de bebés y niños. Está abierta la inscripción al Ciclo anual de la Especialización en Atención y Estimulación de la Primera Infancia, coordinado por la Lic. Mariana Saidon. Informes: 4983-5645 /155-976-9911/ 4833-7808 – Palermo [email protected] www.escuelababy.com.ar Constelaciones Familiares (Método Hellinger) A través de uan constelación familiar se pueden econtrar las claves que llevaron al conflicto y hallar la solución del mismo. - 6 de mayo: zona Parque Centenrario - 13 de mayo: Casa Infinito Coordina: Lic. Leticia Cohen - 4983-2341 Las antipatías violentas son siempre sospechosas y revelan una secreta afinidad. William Hazlitt Patricia Garrote [email protected] Campo Grupal / 15 Lobos MAR DEL PLATA Luis Gruss [email protected] Lo peor es la noche de los lobos. Aúllan como si no supieran. Pero las pezuñas. Qué horror. Pensar que todavía guardo una foto junto a ellos. Estaba parado (un palo de lluvia) con ese calor. El mar reventaba de sueño. Tantas luces y la gente. Una masa de carne aprovechando el dramatismo de la última ola. No podían saber que era la última. Fui de inmediato al puerto. Más lejos aún. Pasando el faro. Más. Hasta el cielo donde caen los autos. Y toda esta amargura. Pero los lobos seguían. Pobre Alfonsina. Pensé. Pobre chica. Con las ganas que tengo de agua pura. La sal no resuelve nada. El circo tampoco. Pero la noche de los lobos es otra cosa. Hacía frío entonces. Y yo todavía sentía curiosidad: las redes usadas como cercos, los anzuelos gastados, todo ese medio mundo echado al mar. El mar. Un barco espera turno para entrar al puerto. El puerto. Y esos lobos en la noche de los lobos. Son de piedra. Cualquiera lo sabe. Aúllan como pobres gatitos. No debo hablar de ella ahora. Se la comieron los lobos y ahora vienen por mí. Corro. Desesperadamente corro por la rambla. Me tiran cornalitos, revistas viejas, putas al revés. Abro la sombrilla. El sol me crucifica. La arena sucia. Los guitarreros. Pero qué grandes son los duraznos. Y el verano en Punta Iglesias. No sé dónde estoy. Quizás ya sea tarde. Escucho pisadas de lobos en la nieve. Moscú. Cualquier playa es igual. En Moscú no hay olas. Las iguanas, los lobos, la noche, la nieve tibia. Lo peor es eso. Cuando no queda más que hacer. Y uno se sienta en la cuerda floja del raro equilibrista. Y cae. Abundancia Le dicen la feliz y nadie sabe por qué. Tal vez lo sepa Alfonsina Storni que eligió esa ciudad para matarse. O la gente que se divierte en la Bristol en medio de un caos generalizado. O los que van al puerto buscando mariscos y la ilusión de los barcos. La poesía sopla donde quiere. También en esa ciudad maravillosa y terrible. Un poco de todo esto dicen los peces banana en los textos que siguen. Cuando el mar se le mete en el cuerpo es una estaca dulce, dice. Una rueda que simula otros sueños. Nunca deseará que desaparezca o se ensucie. Hay algo de brillo en los bordes del sur. Pero de a poco se extingue con la forma del olvido. Crece la bruma y empaña algún retorno. Las marcas en la arena mojada son un rastro inútil que se diluye en cada ola. Mar de fondo. Un vaivén violento como la muerte se huele entre el otoño y el mundo. En el acantilado de rocas vainillas se perdió la tierra. Caen restos de antiguos animales marinos y lejos se intuye la espuma. Los músculos aturden y una transpiración desacostumbrada impide ver lo que supone el desierto. Entonces la busco. Grito. Pido saber qué es lo que se la lleva. Desde lejos nos parecemos. Como un perfil en la lluvia, como una intuición de las seis de la tarde. Entiendo demasiado bien a la sal entre los dientes. El mar lame los pies, aún si no están heridos. Las algas se aprovechan de mí. No conozco Mar del Plata. Betania Crespo [email protected] Puede levantarse con algas entre los dedos de los pies y el ardor de un parto. No conoce Mar del Plata. Algo recuerda tesoros que sobran en el mar. Son esos que se intuyen cuando las tormentas son sólo un miedo de veinte minutos o goteos adultos en la espuma. Encuadró alguna vez; mil piedras que caían de la marea y las embarcó en el resto de sol. Habla de los años nuevos que ahora se escaman en la piel. Habla de fantasmas que se acercan al fuego y vinieron de las bardas por equivocación. Escribe en un papel pegoteado. Cuando viene una ola es morirse. Que después hay arena por todas partes y restos de caracoles para descubrir entre la ropa o el pelo. Empuja una botella de plástico verde y flota esperando la corriente. En aquella costa tuvo buenos momentos, varias certezas y baños maría para la época convulsa. Levanta su pollera floreada y amasa la arena. Sentarse a mirar la distancia no es fácil. Hay que saber de qué se trata la soledad para no terminar siendo un retazo insomne. Hay que perder la ansiedad de los finales para ver lejos. Habrá un instante para que se revele la sangre o se inunde todo y desaparezcamos en medio de guerra y estupidez. Supone. Entonces el mar seguirá intacto. Todavía es poca la bruma. En la playa se aprende de respeto, de solemnes y de calmas. Se puede esperar para siempre o fugar en la dirección contraria. De a poco cierra los ojos y camina con la seguridad de algunos peces. Busca algo sin saberlo. Porque tal vez sea eso que siempre estuvo ahí: el azul gigante. Se olvida los zapatos en las piedras. El silencio abajo del mar es suyo. Inmenso, incapaz de ser alguna otra cosa. Entra gratis en una danza inmune a la luna. Da vueltas imaginando veranos sin salida. Tiene risa, y una necesidad varicosa de contagiarla. Abriendo los brazos es dueña de todos los giros del planeta. En sus codos se alojará siempre la madrugada. Una barca naranja corta la línea del cielo, tira redes, deja huellas. Ella saluda y grita algo parecido a la simpatía. Sigue bajando a la costa para tocar el agua con los dedos. Lo hace para despedirse. Nadie sabe qué agradece. Campo Grupal / 16 Blue Fernando Vico [email protected] Caminar descalzo por la playa vacía. El atardecer es inspirador. El cielo encapotado amenaza una tormenta. A lo lejos se ve a unos niños jugando, pero no hay que darles importancia. Sentarse a mirar las olas, el pasado. Escuchar frases que retumban con la pesadez de un dinosaurio moribundo. El viento debe ser insoportable. Encender un fósforo. Rescatar alguna escena de la infancia más remota, por ejemplo, el día en que un compañero de la escuela te pegó una paliza y tuvieron que llevarte al hospital. Intentar que vuelvan esas lágrimas. Pensar que todavía no pasó lo peor. Imaginar que tu compañero de escuela ahora está con ella. Ya es grande, pero igual tiene puesto un delantal blanco. Se ríe. Querés pegarle, aunque sabés que corrés el riesgo de terminar muerto. Tirar el fósforo. Caminar y sentir los pies sobre la despareja superficie de la arena. Intentar alguna metáfora al respecto. Entrar a un bar y pedir vino de la casa. No mirar el televisor ni preguntar cómo va el partido. Escribir que la distancia te sirvió para darte cuenta de muchas cosas. Tachar lo escrito. Mandarte un vaso de un tirón. Escribir que la distancia te sirvió para darte cuenta de tus errores. Escribir que se merecen una oportunidad y que nada en el mundo es tan potente como el amor que sentís. Leer y releer lo que está escrito. Terminar el pingüino y dar la vuelta tímidamente ante el grito de gol. Volver al hotel, caminando bajo la lluvia por el medio de la calle. Sentir que el agua purifica. Decidir que la carta será enviada al día siguiente a primera hora. Llegar mojado, recostarse, abrir un libro en cualquier página y leer una frase al azar. Por ejemplo: ”Lo que Julio quería decir era que la injusticia se había cometido con nosotros”. Detenerse en por qué fue elegida esa frase y no otra. Sacarse la ropa y mirarse, desnudo, al espejo. Preguntarse dónde está el alma. Prender la tele. Escuchar un debate sobre la posibilidades del crecimiento del comercio exterior. Cómo integrarse en un bloque regional con Brasil. Dormirse. A la mañana siguiente, ducharse, vestirse y releer por última vez la carta. ¿Nada es tan potente como el amor que sentís? Guardarla entre las páginas del libro y salir a desayunar. Conversar con el mozo del bar. Comentar algo sobre el partido. Comprar un boleto de vuelta. Hacerle una broma a la chica que vende el pasaje. Volver a la playa. Es una mañana de sol. Va este título o cualquier otro Marcelo Miceli [email protected] De cada novio obtuve algo. De lo que antes carecía, después lo tuve. Para que se entienda lo que intento decir debería demostrarlo con ejemplos. Que con Cristian Q. abandoné mi casa y que con Damián H. construí mi estima. Que con Nahuel incorporé la calma y que con Franco K., bueno, otras cosas. Puedo continuar con el listado y hacerlo como que no lo hago. Incluso puedo citar de cada amor que tuve tengo heridas para ir armando el relato con citas cancheras. También puedo envolver las ideas para que no parezcan ideas y armar así una estructura, por qué no una metáfora vampira, con costuras invisibles. Leí algunos cuentos de Clarice y la mención me permite justificar estas líneas deshilachadas, dirigiendo el mensaje solo a quienes la conocen. Podría haberla puesto con su apellido, y la pongo: Lispector, para ampliar los lectores y no hacerme la snob. Pero el ponerla y el no hacerlo determinan siempre algo. Cada decisión me lleva para uno u otro camino. Lo mismo que me ocurre con mis novios por usar, otra vez, esta palabra. Aquí podría extenderme sobre el uso del término novio, una o dos oraciones discursivas. Pero qué sentido tiene. Pero si pongo pero qué sentido tiene estoy simulando una imagen distinta a la que quiero simular cuando termino antes la oración. Así estoy: yendo y viniendo. Me subo a una idea y me bajo enseguida y en el movimiento vuelvo a subir. Salí con los chicos, los mencionados y otros, para que fueran ellos los que me llevaran. Pienso en el primero, en Cristian Q., y en su moto, que fue lo que me atrajo y lo que busqué en los demás. En cada novio busqué una moto. Una vez arriba, es difícil bajarse. Solo cuando se detiene. Ahora no tengo moto. Este es el pasaje entre un novio y el siguiente. Hace rato que dejé al último y no veo que haya nadie esperándome en la esquina. Es más tiempo del que estadísticamente, una larga y fea palabra, acostumbro a estar sin compañía. De cada cosa se puede hacer estadística, para llenar el tiempo. Cuando estoy sola, como ahora, el tiempo se llena de indecisiones, que si se quiere podría tomarse como una forma de decisión: me decido a estar indecisa. Pero eso no lo decido. ¿Quién puede sentirse bien yendo y frenando y volviendo y después para otro lado y otra vez lo mismo? Me vine al mar para despejar la cabeza, pero por el momento lo único que tengo es frío. Ilustraciones de Rosana Carballo Para una persona no violenta, todo el mundo es su familia. Gandhi [email protected]
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