Prueba y tentación

LA PRUEBA Y LA TENTACIÓN.
Duración 25 min.
Gálatas 6:4, Santiago 1:3, Romanos 5:3-5, 1 Pedro 4:12-13, 1 Pedro 5:8, Santiago
1:13-15, 1 Corintios 10:13, Santiago 4:7
Objetivo: Que el creyente conozca los orígenes y el propósito de las pruebas y de la
tentación.
Introducción.
Es muy común escuchar de la gente el dicho “¡hay Dios mío! ¿Por qué me pones estas
tentaciones?” o pensamos que las pruebas en la vida son un castigo, o que estamos
pagando por las malas acciones de nuestros antepasados o de nuestros pecados.
Hay veces que nosotros confundimos las pruebas con la tentación, pensamos que ambas
vienen de parte de Dios. Pero no es así. Dios permite las pruebas, pues estas nos
ayudan a crecer y a madurar cuando salimos victoriosos de ellas, es como un examen de
evaluación (Gálatas 6:4). Es decir, las pruebas son para que nosotros veamos en que
andamos mal, y así corregirlo, las pruebas son para bien. Dios prueba nuestra fe ya que
esto nos produce paciencia. Las pruebas son para fortalecernos (Santiago 1:3).
Nosotros también podemos gozarnos en las pruebas (Romanos 5:3-5), (1 Pedro 4:1213), el gozo en la pruebas nos permitirá estar firmes.
En cambio la tentación no viene de parte de Dios, porque Dios no quiere que pequemos,
La Biblia dice que el diablo anda buscando a quien devorar. (1 Pedro 5:8). La
tentaciones son las asechanzas del diablo en las cuales busca que caigas en pecado y así
separarte de Dios (Santiago 1:13-15).
El diablo anda viendo a que hora tú descubres tu debilidad, para hacerte caer y separarte
de Dios. Pero Dios nos da la salida. (1 Corintios 10:13)
Y hasta nos dice como vencer. (Santiago 4:7).
Conclusión.
No volvamos atrás, sigamos adelante en el Señor, pues Él tiene propósitos gloriosos
para nuestras vidas es como nosotros esperamos ver a nuestros hijos realizados e
independientes o ¿a quien le gustaría que su hijo quedara de 8 años o menos para
siempre?, hagamos el propósito de vencer todos los días de nuestra vida.