La Tabacalera. Red Lavapies Hoy en día, si las grandes ciudades

La Tabacalera. Red Lavapies
Hoy en día, si las grandes ciudades quieren conseguir papeles relevantes en la jerarquía económica
de la red global deben venderse a sí mismas como una marca: por ejemplo, la marca-Barcelona
garantiza al inversor y al consumidor (turista, etc.) una experiencia de „modernidad", „
multiculturalidad", „tolerancia", „sostenibilidad", „paz".
Pero, ¿la ciudad que se vuelve imagen de sí misma ofrece experiencias auténticas o una
representación de las verdaderas vivencias, un espectáculo? ¿se trata de imágenes que hablan de una
ciudad o de imágenes que disimulan procesos de especulación salvaje, insostenibilidad y
deshumanización creciente?
Madrid se maquilla para seducir al Comité Olímpico y hacerse con la organización de los
JJOO de 2012. El Plan Gallardón promete una „revitalización del centro urbano" que asume
completamente el modelo Barcelona como ideal (Plan PERCU): está previsto un „
rejuvenecimiento" de los barrios del centro que aspira a atraer como un imán consumo juvenil y
energías creativas.
¿Qué significan para la ciudad ambos procesos? ¿un nuevo esfuerzo de inversión pública para fines
privados de constructoras, promotores e inmobiliarias? ¿cómo se llevarán a cabo? ¿excluyendo
radicalmente a los habitantes de cualquier poder de decisión sobre el espacio en el que viven
(llegando incluso a la expulsión de vecinos, como ha ocurrido tantísimas veces con motivo de
macroeventos por todo el globo? ¿a costa de convertir en imagen-espectáculo la vida en barrios
como Lavapiés, obviando las realidades menos presentables (ausencia de recursos y equipamientos,
problemas graves de vivienda, neutralización de los espacios públicos democráticos,
invisibilización de población „sin papeles", etc.)?
Existe en Lavapiés un edificio enorme, antiguo lugar de trabajo de las conocidas „cigarreras" (que
tanto influyeron en la forma de vida callejera y bulliciosa de Lavapiés). Se trata de la Fábrica de
Tabacos, situada en la calle Embajadores. Desde hace muchísimo tiempo, las vecinas y los
vecinos de Lavapiés exigen el espacio para el barrio, como lugar de encuentro, sede de recursos,
alojamiento de centros sociales, etc. El Ministerio de Cultura anuncia ahora la creación de dos
museos en el interior del edificio, un proyecto confeccionado completamente a espaldas de la
sociedad civil, sus necesidades y deseos.
El destino de Tabacalera es la piedra de toque que medirá el contenido efectivo de los proyectos
sobre Madrid diseñados por la administración: ¿estamos frente a ideas que pretenden crear una
ciudad-marca, una ciudad-espectáculo, ciega por completo a los usos de la ciudad que hacen sus
habitantes, interesada sólo en atraer dinero de turistas e inversores, en llenar los bolsillos de
promotores y constructoras? ¿es así como el presidente Zapatero pretende cumplir su promesa de „
no fallar‰ a la ciudadanía activa que desalojó al anterior gobierno del poder, precisamente por su
sordera y arrogancia?
Una red amplísima y muy heterogénea de vecinos y vecinas, colectivos y asociaciones ha propuesto
a la administración un debate ciudadano, democrático y abierto, sobre los usos y el destino del
edificio. Los objetivos principales para este debate son dos: en primer lugar, construir participación
real. Nos hemos empeñado en que el último gran espacio de propiedad pública de este barrio no sea
adjudicado a un uso cualquiera sin atender a las voces y a las necesidades de sus habitantes y
personas vinculadas afectiva y efectivamente al mismo. En este sentido, asentar en el territorio el
proceso de decisión sobre este espacio, vinculando para ello a gentes diversas (que imaginen
colectivamente usos posibles, conexiones entre sus potencialidades y las formas de nuestra vida con
sus carencias), transformará la forma habitual de decidir cómo deben vivir los demás, sin los demás.
El segundo objetivo se deduce del primero: abrir la Fábrica de Tabacos para albergar los debates
significa inmediatamente expresar en voz alta la tremenda necesidad de un Centro Social
Autogestionado en Lavapiés, ya no sólo para los residentes activos en este barrio (las personas que
viven y las que construyen en él sus relaciones), sino también la misma ciudadanía madrileña,
cruelmente despojada de espacios públicos de encuentro, reflexión y cooperación a lo largo y ancho
de la ciudad.
Actualmente, hemos mantenido ya conversaciones con el propio Ministerio, solicitando de la
institución que asuma este proceso participativo ciudadano y contribuya al mismo abriendo el
espacio para un mejor conocimiento de éste por parte de la ciudadanía; permitiendo asimismo que
se produzcan los diversos actos públicos relacionados con el debate en el contexto de la Fabrica de
Tabacos. A día de hoy esperamos todavía una respuesta.