Influencia de Factores Ecológicos sobre la Densidad

Transcripción

Influencia de Factores Ecológicos sobre la Densidad
B o letín (le P r o d u c c i ó n A n im a l /
(2) M ayo 19fi3
Influencia de Factores Ecológicos sobre la Densidad
Ganadera.
T h e influence of ecological factors on the livestock density
Francesco di Castri #
Ernst R. H á je k
*
Carlos W in c k le r
**
In stitu to de H igiene y Fom ento
de la Producción A nim al
U niversidad de Chile.
La explotación ga na d e ra constituye u n p r o ­
blem a e x tre m a d a m en te complejo, d e n tro del
cual la po blación anim a l no es sino u n ele­
m e n to q u e no p u e d e tomarse en cuenta ais­
ladam ente. Sólo u n análisis global de los fac­
tores físicos y biológicos del ecosistema agro­
pecuario p u ed e p e rm itir alcanzar soluciones
integrales.
E n n uestro medio, c ua nd o se enfocan p r o ­
blemas ganaderos, falta p o r lo general una
visión de c o n ju n to en q u e factores clim áti­
cos, edáficos y vegetacionales se engloben es­
trech am ente con los p ro p ia m e n te pecuarios;
está p o r ejem plo m uy d ifu n d id a u n a la m e n ­
table tend en cia de m ir a r el “complejo sue­
l o ” se p a ra d a m en te del “com plejo g a n a d o ”,
sin considerar qu e existe interacción entre
ambos.
P o r estas razones, se ha estimado de inte ­
rés p resen tar este trabajo, de tipo sim plem en­
te intro du ctorio, delineand o algunos aspectos
ecológicos q u e inciden sobre la carga ga n a ­
dera.
* Sección Ecología Anim al.
** M eniürista Sección Ecología A nim al.
P a ra este estudio se h a n tom ado en cuen­
ta el clima, el suelo, el tipo de vegetación
na tu ra l y la densidad poblacional h u m a n a
de cada provincia, d a n d o relativam ente más
énfasis a los elementos climáticos, ya que
ellos son directa o in directam ente responsa­
bles de la estructura edáfica, de las caracte­
rísticas vegetacionales y tam bién de las varia­
ciones en la vida anim al (di Castri & H ájek,
1961).
R esulta conveniente definir el significado
qu e al té rm ino de carga gan ad era se a tr ib u ­
ye en el presente trabajo: Carga o densidad
ganadera es el n ú m e ro de animales domés­
ticos, expresado en U nidades Animales
(U. A.) u otra form a equivalente, q u e exis­
te p o r u n id a d de superficie (hectárea). Se
hab la de densidad ecológica (económica, es­
pecífica o relativa) al considerar sólo la su­
perficie efectivamente utilizada p o r el ga­
nado, es decir, con presencia de pastos y fo­
rrajeras; de densidad absoluta (o bruta), si
se calcula la superficie total de la zona estu­
diada, a u n incluyendo terrenos sin ex plota­
ción pecuaria.
El p ro blem a de la carga ganadera está
muy in tim a m e n te relacionado con el de la
Boletín d e P ro d u c c i ó n A n im al 1 (2) M ay o 1963
88
producción forrajera, ya q u e es u n a forma
ile expresar esta ú ltim a en función del n ú ­
m ero de animales q u e ella p ueda m antener,
vale decir, la capacidad de pastoreo.
f>ajo este p u n t o de vista, la densidad g a n a ­
dera no es sino un m étodo p a ra d ete rm in ar
el re n d im ie n to del ecosistema agropecuario;
el a nim al es sin d u d a el indicador más im ­
portante, ya q u e el pasto constituye un ele­
m e n to esencial sólo p o r representar el ali­
m en to p a ra el ganado.
Es interesante tra ta r de situar la ubicación
de la densidad ganad era d e n tro del com ple­
jo de los otros m étodos destinados a estable­
cer los ren dim ientos pecuarios, ya q u e el
pro b le m a de la de te rm ina c ión objetiva de
la p ro d u c tiv id a d de este ecosistema y su ca­
racterización con lines comparativos es ac­
tu a lm e n te confuso y lia recibido enfoques
m uy heterogéneos. Nos parece que los m é ­
todos utilizados en estudios ecológicos sobre
Jos rendim ientos de ecosistemas terrestres y
acuáticos (O dum , 1959), deberían aplicarse
ta m bié n en ganadería, pues perm itirían
a d o p ta r un p u n to de vista u n ita rio y a u m e n ­
tarían las posibilidades de extraer conclusio­
nes ele síntesis de un a serie de datos disper­
sos.
t o n estas premisas, el re n d im ie n to de un
ecosistema agropecuario p o d ría evaluarse, si­
guien do los tres conceptos básicos de la eco­
logía cuantitativa, por:
a. N úm eros o densidad
b. Pesos o biomasa
c. Energía o pro d u c tiv id a d
Ya se ha visto que la densidad es el n ú ­
mero de individuos p o r u nida d ele superlicic. L a biomasa p ued e delinirse como el p e­
so de sustancia viviente po r u n id a d de su per­
ficie. La prod uctividad o ritm o de p ro d u c ­
ción, en q u e se introd uce el concepto de tiem ­
po, es la can tid a d de substancia (o de en e r­
gía o de protoplasm a) pro d u c id a por u n id a d
de superficie en u n a u n id a d ele tiempo; por
ejemplo, g /m - / d í a .
Al aplicar estos conceptos a ecosistemas
agropecuarios, es necesario tener presente
qu e su estructura trófica es m uy simple, va
qu e la prin cipal cadena de alim entación está
com puesta po r dos eslabones o niveles tró ­
ficos: el de las plantas verdes o productores
y el ile los animales domésticos o transfor­
madores.
De acuerdo a los principios que rigen las
cadenas ecológicas, es posible evaluar el r e n ­
d im iento global de u n ecosistema, analizan­
do cualquiera de los niveles tróficos; en esta
circunstancia, las forrajeras o el ganado. En
el p rim er caso, se evidenciará ia p ro d u c tiv i­
d ad prim aria; en el segundo, la pro d u ctiv i­
dad secundaria (O dum , 1959).
Por los antecedentes anterio rm en te expues­
tos, los rendim ienots de una c om unidad agro­
pecuaria, integrada p o r forrajeras y ganado,
p o d rá n valorarse p o r el análisis de cualquie
ra de los pun to s enunciados en el siguiente
esquema:
D ensidad
["Forrajeras
<¡
i G anad o
Forrajeras
biom asa
-s
G anado
j Forrajeras
Productividad
| G an ad o
De estos puntos, los de m ayor validez b io ­
lógica se refieren a la productividad, pero la
densidad anim al es un m étodo muy em p lea­
do por ia facilidad de expresarlo.
Se analizará brevem ente la aplicabilidad
en ciencias pecuarias de los elementos ex­
puestos en el esquema anterior; hasta el m o ­
mento, algunos han sido utilizados con cier­
ta frecuencia sólo en investigaciones p ara va­
lorar las pasturas (Mott, 1957).
a.
Densidad. La determ inación de la d e n ­
sidad de las plantas forrajeras es un m étodo
de fácil aplicación m e d ia n te simple técnica
de muestreo al azar, pero tiene sólo relativa
validez, ya que no considera la calidad y el
desarrollo de las plantas. Sin embargo, se em ­
plea a veces en investigaciones fitosociológicas.
T a m b ié n el n ú m e ro absoluto de animales
por u n id a d de superficie es de escasa u tili­
dad, al no tener en cu en ta el ta m añ o in d i­
vidual. Para obviar este inconveniente y p o­
der conseguir datos comparables de densidad
])! C A S T R I . K. ct al — Factores t e o ló g ic o s y D e n s i d a d G a n a d e r a .
se h a rec u rrid o a los sistemas, m uy em p lea­
dos en ganadería, de Jas Unidades Anim ales
(Carslaw, 1957; C O R F O , 1951, 1961).
T o d o s estos métodos (Unidades Animales,
U nidades Animales Homogéneas, etc.) tienen
el o bjeto de redu cir a u n d e n o m in a d o r co­
m ú n los datos num éricos de las diferentes
especies, e incluso de las distintas edades; es­
to se consigue m u ltip lic a n d o el n ú m e ro de
animales de cada especie o edad p o r u n coe­
ficiente específico. La sum a de los resultados
parciales así obtenidos p a ra cada especie p r o ­
porciona las U nidades Animales Totales, las
q u e se relacionan con la superficie en hec­
táreas p a ra el cálculo de la densidad o carga
ganadera.
E n tre estos métodos, ha sido in te n sa m e n ­
te utilizado en Chile p ara la planificación
g a na d e ra el de las U nidades Animales H o ­
mogéneas (C O R F O , 1954).
b. Uiomasa. La determ inación de la biomasa de las forrajeras (cosecha o “standing
biomass” o “stan ding c ro p ”) es u n cálculo
m uy em plead o en los estudios agronómicos
y los resultados c o m ú n m e n te se expresan en
térm inos de m a te ria seca p o r u n id a d de su­
perficie (kg/há.). O tras veces se establece el
peso de un p rinc ip io n u tritiv o del herbaje
p o r u n id a d de superficie (Mott, 1957).
L a biomasa del ganado, es decir, el peso
vivo de animales domésticos que una unidad
de superficie de p a stu ra p ued e m antener, d e ­
bería considerarse m u c ho más fre cu e n tem e n ­
te en zootecnia, pues este cálculo tiene m a ­
yor validez qu e el simple estudio de la d e n ­
sidad. Al expresar las densidades en “u n id a ­
des a nim ales”, n o se hace sino acercarse a va­
lores q u e algo a r b itra ria m e n te corresponden
a los de biomasa. E n efecto, la utilización de
equivalencias o coeficientes perm ite evaluar
a p a rtir del n ú m e ro de animales, el peso
a p ro x im a d o q u e ellos representan po r u n i ­
dad de superficie.
c. Productividad. L a p ro du ctiv id ad del
p rim e r nivel trófico, el de las forrajeras,
p u ed e medirse en sustancia / u nida d de su­
perficie / día o bien, p o r la expresión de la
energía q u e esta substancia representa, en
calorías / u n id a d de superficie / día. En
Ecología vegetal, es m uy utilizada también
la determ inación de la clorofila p o r u nidad
de superficie (O dum , 1959), basándose sobre
el hecho de q u e ésta constituye el elemento
f u n dam en tal para la síntesis de n ueva subs­
tancia orgánica.
Sin embargo, las técnicas q u e en la actúa
Iidad se recom iendan p referen tem ente para
el estudio del re n d im ie n to de las praderas
son las q u e consideran la prod uctiv id ad del
ganado. Sólo en esta forma, los resultados
pod rán p o n d e ra r muchas variables in h e re n ­
tes al animal, como son ¡a digestibilidad, la
palatabilidad, el grado de consumo, la resis­
tencia al pastoreo directo, etc. Para estos e n ­
sayos de pastoreo, las unidades de m edida
más utilizadas son las siguientes:
1. Ganancia de peso (o producción de le­
che)/ p o r anim al / p o r día.
2. N ú m ero d e días-animal / po r u nidad
de superficie, es decir, n ú m e ro de a n i­
males qu e u n a u n id a d de superficie de
pastura m a n tu v o p o r día.
3. Producto / p o r u n id a d de superficie,
q u e se calcula m u ltip lic a n d o el a u m e n ­
to diario individual po r los días-animal.
1. R e nd im ie nto del total de principios
nutritivos digestibles totales (P.N .D .T.)
(Mott, 1957).
A pesar de q u e en este tra b a jo sólo se han
calculado densidades sobre la base de las
Unidades Animales Homogéneas, se ha esti­
m ado o p o rtu n o entregar esta breve revisión
crítica de los otros métodos de medida, ya que
son necesarios p a ra co m pren der a fondo el
concepto de la “densidad ó p tim a ”, es decir,
el principio de ajustar el nú m e ro de a n im a ­
les por u n id a d de superficie en el óp tim o de
intensidad de pastoreo, de m an e ra q u e las
condiciones sean las más convenientes tanto
para el anim al como para la pastura.
Cabe destacar finalm ente qu e todos los m é­
todos considerados son cuantitativos, d ado
q u e se refieren a u n id a d de superficie y no
a rendim ientos individuales (métodos cuali­
tativos).
M A T E R IA L Y M ETODOS
Los datos sobre el n ú m e ro de animales de
las distintas especies y la existencia d e pas­
tos y forrajeras p o r provincia, presentados
en el cuadro N ° 1, corresponden al I I I C en ­
so Nacionáil Agrícola-G anadero (M inisterio
de Economía, 1955).
En el c uadro N ° 2 aparecen los datos so­
bre superficie territorial de cada provincia
y der.:;idad poblacional hu m an a.
90
B o letín d e P ro d u c ció n A nim a! /
C u a d r o
(2) M ayo Jí)(>3
N?
1
D istribución de (¿añado, Pastos y Forrajeras p or Provincia
C A N T ID A D DE G A N A D O P O R ESPECIE
pa stos
Y
FORRAJ KRAS
PROVINCIAS
Bovinos
Ovinos
E qu in os
Has.
T arapacá
3.198
57.117
2.055
7.461
86.246
7.936
207.444,0
Antolagasta
1.482
27.125
2.641
5,133
2.882
3.803
2.316,8
Atac■ama
18.118
15.557
2.347
20.221
■136
8.073
21.349,5
C o qu im bo
90.529
228.568
19.016
451.005
•1
49.082
1.036.674,3
Aconcagua
50.258
55.609
8.166
23.583
46
14,501
200.047,9
Valparaíso
57.792
57.221
8.927
11.101
37
16.232
128.575,6
170.517
311.646
36.057
24.94 3
(¡3
44.126
697.175,3
O ’Higgins
80.706
25.971
25.828
10.895
190
23.135
95.976,8
Colchagua
73.881
235.517
20.444
17.988
271
24.651
315.940,8
Curicó
45.264
86.681
18.330
14.017
37
14.523
142.647,7
T a lc a
75.805
138.120
16.007
9.933
42
24.768
336.197,1
M aulé
35.805
71.417
13.332
5.300
120
10.567
183.852,5
Linares
80.588
80.560
30.432
14.815
442
26.174
256.187,6
N u b le
136.017
228.266
66.315
46.715
326
37.143
522.825,5
Concepción
52.974
20.512
20.153
3.036
25
12.267
167.395,8
Arauco
66.112
27.748
15.622
4.388
23
6.552
184.487,8
Bío-Bío
104.192
71.222
28.313
21.448
73
22.547
382.345,4
Ma lleco
132.678
101.327
43.657
32.649
69
18.656
536.097,5
C autín
340.921
338.947
138.164
61.624
597
55.667
634.040,3
Valdivia
291.720
171.781
53.271
86.395
314
25.319
538.190,9
O sorno
207.716
109.741
45.384
44.792
190
14.084
297.186,1
L la n q u ih u c
180.611
125.070
50.598
26.068
675
15.667
278.542,2
Chiloc
83.657
147.023
31.497
3.075
44
14.080
175.742,7
Aysén
94.238
576.957
5.084
8.582
----
24.305
680.722,0
Magallanes
36.734
2.476.790
2.579
147
----
19.170
2.796.604,4
2.511.576
5.786.526
704.552
955.614
93.155
Santiago
TOTAL
Porcinos
Caprinos A uquénidos
533.061 10.818.566,5
1)1 CAS I R J, F. ct al — 1-a i lo res E cológicos y D en sid ad G a n a d e ra .
C u a d r o
N?
91
2
Superficie territorial, meses clesfavorubles y densidad poblacional h u m ana por Provincias
PR O V IN C IA
SU PE R FIC IE T E R R IT O R IA L
Km-’.
T arapacá
A ntofagasta
A tacam a
C oq uim b o
Aconcagua
Valparaíso
Santiago
O ’H iggins
Colchagua
Curicó
T a lc a
M aulé
Linares
N u b le
Concepción
A rauco
Bío-Bío
Malleco
C a u tín
Valdivia
Osorno
I.la n q u ih u e
Chiloc
Aysén
Magallanes
55.287
123.063
79.883
39.889
10.201
4.818
17.412
7.112
8.430
5.737
9.(540
5.626
9.820
14.211
5.701
5.75(5
11.248
14.277
17.370
20.934
9.083
18.407
23.44(5
88.984
135.418
MESES
DESFAVORABLES
DENSIDAD PO BLA CIONA L
H U M A N A P O R Km-’.
12,00
12,00
12,00
9,(i 1
8,00
7,71
8,25
7,75
7,50
7,00
7,00
(5,25
0,00
5,00
4,83
2,83
3,50
4,(50
2,(5(5
2,33
3,50
3,00
3,37
6,64
8,62
Caprinos
Equinos
Porcinos
A uq urnidos
Las densidades absolutas
0,78 provincia se calcularon según las siguientes
0,20
fórmulas:
Para la transform ación en U nidades A n i­
males Hom ogéneas se utilizaron los siguien­
tes coeficientes, adoptados en el P lan de Des­
a rrollo G a n a d e ro (C O R F O , 1954, 1961):
Vacunos
Quinos
x
x
D ensidad
absoluta
=
Densidad ecológica
=
2,231
1,802
1,203
7,888
15,098
121,11(5
123,984
37,900
18,890
18,709
21,625
15,398
17,875
21,226
86,613
15,072
11,756
13,401
25,224
13,652
14,747
9,127
5,155
0,354
0,489
x 0,20
x 1,00
x 0,16
x 0,67
y ecológicas pot
Unidades Animales H om ogéneas Totales
-------------------------------------------------------------------Superficie total de la provincia en hectáreas.
U nidades Animales Homogéneas T otales
--------------------------------------------------------------------Superficie de pastos y forrajeras de la pro v in ­
cia en hectáreas.
Los datos ecológicos para el estudio de las
relaciones con la densidad ganadera, se obtu, ,
•
r '
vieron de las siguientes fuentes:
Datos climáticos (Fuenzalida, 1950)
Datos edafológicos (Díaz, 1958)
...
,
„ ■i
Datos htoecograhcos según Reiche v Stc” fa
”
'
fíen (Almeyda y Sáez, 1958)
B olelín de P ro d u c c ió n A n im a l /
El n úm e ro de meses desfavorables po r p r o ­
vincia se c o m putó según el m étod o de di
Castri, H ájek y A studillo (1962) , sobre la
base del índice de de M a rto n n e y de la p o ­
tencialidad vegetativa; p ara este efecto, se
consideró que cada dos meses semifavorables
equivalían a un mes desfavorable. Para cada
provincia, se sum ó el nú m e ro de meses des­
favorables de cada Estación Meteorológica v
se o btu v ie ro n las medias q u e aparecen en la
segunda colum na del C u a d ro N9 2.
Se calcularon las siguiente, correlaciones
entre;
a. Densidad g a na d era absoluta y ecológi­
ca.
b. N ú m e ro de meses desfavorables poi
provincia y densidad ganadera absoluta.
C u a d r o
(2)
Mayo lí)í);í
c. N ú m e ro de meses desfavorables po r p r o ­
vincia y densidad ganadera ecológica.
d. N ú m e ro de meses desfavorables por re­
giones agropecuarias del Program a Nacional
de Desarrollo G anadero 19(51-1970 (CO RFO ,
1961) y densidad ecológica.
e. Densidad ganadera absoluta y densidad
poblaciona! h um ana.
Se calcularon además las siguientes regre­
siones:
a. N úm ero de meses desfavorables por p ro ­
vincia en densidad ga na d e ra absoluta de las
25 provincias chilenas.
I). N úm ero de meses desfavorables por
provincia en densidad ganadera absoluta de
las 25 provincias chilenas y de la Isla de Pas­
cua.
N”
3
Distribución de las Unidades Animales Hom ogéneas por especie y por Provincia
Uni d. An i m.
Provincias
Bovinos
T a ra p a c á
A ntolagasta
A tacam a
C o q u im b o
Aconcagua
Valparaíso
San! iago
O ’Higgins
Colchagua
Cu rico
T a lc a
M a u lé
Linares
N u b le
Concepción
Arauco
Bío-Bío
Malleco
C a u tín
Valdivia
Osorno
L la n q u ih u e
Chiloé
Aysén
Magallanes
O
2.191,4 1
1.155,96
14.132,01
70.612,62
39.201,2!
45.077,76
133.02(5,66
62.950,68
57.627,18
35.305,92
59.127.90
27.927,90
62.858,64
106.093,26
41.319,72
51.567,3(5
81.269,76
103.488,84
265.920,72
227.541,60
162.018,18
140.899,98
65.252,46
73.505,64
28.652,52
T o ta l
Ovinos
1 1.423,40
5.425,00
3.11 1,10
45.713,60
1 1.121.80
11.4 44,80
62.329,20
5.194,20
47.103,40
17.336,20
27.624,00
14.289,40
16.112,00
45.6.53,20
4.102,40
5.549,60
11.214,40
20.265,40
67.789,40
34.356,20
21.918,20
25.014.00
29.104,60
115.391,40
495.358,00
Porcinos
328,80
422,56
375,52
3.017,36
1.354,56
1.428,32
5.769,12
4.132,48
3.271,04
2.932,80
2.561,12
2.133,1 2
4,869,12
10.610,10
3.224,18
2.499,52
4.530,08
6.985,12
22.106,21
8.523.84
7.261,4!
8.095,68
5.039,52
813,14
412,64
Caprinos .A uquénidos
1.492,20
1.086,60
4.014,20
90.201,00
4.716,60
2.220,20
1.988,60
2.179,00
3.597,60
2.803,40
1.986,60
1.060,00
2.963,00
9.313,00
607,20
877,60
4.289,00
6.529,80
12.324,80
17.279,00
8.958.40
5.213,60
615,00
1.716,40
29,40
1.959.029,28 1.157.305,20 112.728,32 191.122,80
57.784,82
1.930,9)
292 12
2,68
30,82
24,79
42,2!
127,30
183,58
24,79
28,14
80,40
296,11
218,42
16,75
15,11
48,91
46,23
399,99
210,38
127,30
452,23
29,48
E quinos
Homogéneas
Totales
7.936,00
3.803,00
8.073,00
49.082,00
11,501,00
16.232,00
44,126,00
23.135,00
24.654,00
14.523,00
24.768,00
10.567,00
26.174,00
37.143,00
12.267,00
6.552,00
22.547,00
18.656,00
55.667,00
25.349,00
14.081,00
15.667,00
14.080,00
24.305,00
19.170,00
81.459,66
13.824,06
30.028,28
258.659,26
70.926,02
76.427,87
250.281,79
97.718,66
136.436,80
72.926,11
116.095,76
56.057,82
11.3.272,90
209.061,28
61.537,55
67.061,49
126.929,75
155.971,39
424.208,15
313.260,02
214.397,82
195.342,51
114.421,06
215.731,88
543.622,56
62.413,85 533.061,00
4.015.860,45
---------------
DI C A S T R I , F. ct al — Factores Ecológicos y D ens idad G an ad e ra..
R E S U L T A D O S Y D ISC U SIO N
El C u ad ro N? l’> consigna la distribución
por provincia de las U nidades Animales H o ­
mogéneas correspondientes a cada especie,
además de las U nidades Animales H om og é­
neas T otales (IJ. A. H. T .) . D ado qu e el m é­
todo em pleado otorga a cada especie mi coe­
ficiente de im portancia, sirviendo en cierto
m od o p a ra hom ogencizar las distintas can­
tidades, este cuadro perm ite deducir pa ta
cada provincia la explotación pecuaria de
mayor trascendencia.
Los bovinos m a n tie n e n el prim er puesto
en la mayoría de las provincias, con relación
al n ú m e ro de U nidades Animales H o m o g é ­
neas; hacen excepción las de Antofagasta,
Aysén y Magallanes, en qu e los ovinos ocu­
pan el p rim e r lugar; la de T a ra p a cá , que ve
la dom in ancia de los auquénidos; y la de C o­
q uim b o, en q u e los caprinos constituyen n e­
tam ente la especie más im po rtante.
. Los bovinos tienen su vértice de m ayor c an ­
tidad de U. A. H. en las provincias de C au ­
tín y Valdivia; los ovinos en Magallanes y
Aysén; los porcinos en C a u tín y Ñ u ble; los ca­
prinos en C o q u im b o y Valdivia; los a u q u é ­
nidos en T a ra p a cá y Antofagasta; y los e q u i­
nos en C a u tín y Coquim bo, en esta últim a
provincia po r la influencia de m ulares y as­
nales. Puede aparecer ex trañ a la fuerte con­
centración de caprinos en Valdivia; sin des­
cartar la posibilidad de algún p equ eñ o error
en la recolección de los datos del I I I Censo,
no debe olvidarse la gran utilización de esta
especie en la provincia citada, como c o n tra ­
lor biológico de la zarzamora y de otras m a ­
lezas.
Las
cantidades
totales
93
Ñ uble; todas ellas superan las 200.000 U. A.
H. Las provincias de m eno r im portancia son
las de Antofagasta y Atacama, debido al cli­
ma desértico.
Los resultados expuestos a n teriorm ente se­
rían n atu ra lm e n te distintos, si en vez de las
Unidades Animales Homogéneas se hubiese
considerado la cantidad absoluta de ganado
por especie.
El C u adro N'-’ J muestra las densidades
absolutas y ecológicas por hectárea en cada
provincia. Es necesario señalar in m e d iata ­
m ente que los resultados sobre densidad eco­
lógica son muy poco atendibles, en especial
los que se refieren a las provincias de A n to ­
fagasta y Atacama. Esto se d e b e 'a q u e la e x ­
tensión de pastos y forrajeras, lencuestada
en el III Censo Agropecuario, no es por lo
general sino u n a parte de la superficie efec­
tivamente ocupada p o r pastoreos p e rm a n e n ­
tes u ocasionales. T o d a s las cifras anotadas a
propósito de la densidad ecológica son por
lo tanto superiores a la realidad, en mayor
o m enor medida.
De todas maneras, las densidades ecológi­
cas más elevadas se presentan en la zona que
va desde la provincia de C a u tín hasta la de
Cliiloé. En la zona central, la m ayor d e nsi­
dad se observa en O'Higgins.
Las densidades ecológicas menores corres­
p o n d en a Magallanes p o r el factor lim ita n ­
te del frío, a C oq uim b o po r el factor lim ita n ­
te de la aridez y a Malleco, p ro bablem ente
por el avance de los fenómenos erosivos.
hornogeneizadas
m u e stra n q u e la especie bovina es sensible­
m en te la más im p o rta n te en el país, seguida
Más fidedignos son seguramente los resul­
tados de la carga ganadera absoluta, ya que
de ovinos, equinos, caprinos, porcinos y auquénidos.
en su cálculo ha intervenido u n a sola posi­
bilidad de error, el n ú m e ro total de an im a ­
les p o r provincia, m ientras la superficie te­
Si se observa el total de las Unidades A n i ­
males H om ogéneas por provincia, se com­
p ru e b a q u e las provincias chilenas de m a ­
yor im p orta n c ia ganadera son, en orden de­
creciente, las de Magallanes, Cautín, V aldi­
via, C oquim bo, Santiago, Aysen, Osorno v
rritorial total no está sujeta evidentem ente
a dudas.
T a m b ié n por la densidad absoluta se cuen­
tan entre las provincias más favorecidas C au­
tín y Osorno. Sin embargo, las homologías
B o le tín d e P ro d u c c i ó n A n im a l /
94
(2)
Mayo líl<¡3
incluso negativo, a u n cuando no significati­
vo (r = — 0,334).
entre los dos tipos de densidades parecen bas­
tan te escasas, lo q u e pe rm itiría ded ucir que
el m arg en de e rro r en la superficie ocupada
po r forrajeras debe ser bastante elevado; el
Por estas razones se ha estimado o p o rtu n o
considerar preferentem ente la densidad a b ­
soluta en el análisis efectuado p ara eviden­
ciar las posibles dependencias ecológicas.
coeficiente de correlación entre d ensidad a b ­
soluta y ecológica en las 25 provincias fue
C u a d r o
D istribu ción de la D ensidad G a n a d e ra
N?
4
Absoluta y Ecológica p o r Provincia
Provincias
D ensidad G a n ad e ra
A bsoluta p o r H á.
D ensidad G anad era
Ecológica p o r H á.
Tarapacá
A ntofagasta
A tacam a
C o q u im b o
Aconcagua
V alparaíso
Santiago
O ’Higgins
C olchagua
Curicó
T a lc a
M au lé
Linares
Ñ u b le
Concepción
Arauco
Bío-Bío
Malleco
C a u tín
V aldivia
O sorno
L la n q u ih u e
Chiloé
Aysén
Magallanes
0,014
0,001
0,003
0,064
0,069
0,158
0,147
0,137
0,153
0,127
0,120
0,099
0,115
0,147
0,107
0,116
0,112
0,109
0,244
0,153
0,214
0,106
0,018
0,024
0,040
0,392
5,996
1,406
0,250
0,354
0,594
0,358
1,018
0,431
0,511
0,345
0,304
0,442
0,399
0,367
0,363
0,331
0,290
0,669
0,582
0,721
0,701
0,651
0,316
0,194
absoluta.
ganadera
la densidad
con
ecológicos
factores
algunos
de
Relación
Xí
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Boletín de P ro du c ció n A n im al /
En el cuadro N ‘<* 5, se esquem atizan las r e ­
laciones de algunos factores ecológicos con
la carga ganadera. Las siete zonas en que se
h a d ividido el país corresponden a unidades
regionales d e n tro de las cuales la densidad
ganadera absoluta es relativam ente hom ogé­
nea; en efecto, salvo entre la tercera y cuarta
zona, la división entre los distintos grupos de
provincias es m uy manifiesta, ya que incluso
la densidad m á x im a de u n a zona es inferior
a la densidad m ín im a de la zona adyacente,
caracterizada p o r u n a densidad m ed ia más
elevada.
' 1 . - ;i ;
R esulta interesante com pro bar las grandes
homologías existentes con las seis regiones
agropecuarias de la C O R F O (1961) y con
las divisiones biogeográficas de Reiche y
Steffen (Almeyda y Saez, 1958) .
En el p rim e r caso, la única diferencia es
e n e la q u in ta región de la C O R F O se subdividió en nuestro tra b a jo en dos zonas de
características m uy distintas en cuan to a d e n ­
sidad ganadera, si bien homologas desde el
p u n to de vista ecológico. En el segundo caso,
las diferencias consisten e n qu e se re u n ie ro n
en u n único g ru p o las zonas definidas por
R eiche y Steffen como “de las estepas frías”
y “de las prad e ra s” ; además, la zona de los
bosques se ha debido subd iv id ir en dos.
Respecto a este cuadro, es conveniente h a ­
cer algunos alcances; la zona q u e va desde
V alparaíso a T a lc a presenta m últiples simi­
litudes ecológicas con aquella que se e xtien­
de desde M aulé a Malleco, no sólo de tipo
climático y edáfico, sino tam bién vegetacional, ya que m atorrales y parques podrían
reunirse en u n a única clase de form ación ve
getal, la de la sabana; tampoco son m uy cla­
ros los límites e n tre las dos zonas desde el
p u n to de vista de la densidad ganadera, pol­
lo q u e no sería av e n tu ra d o considerarlas co­
mo un solo complejo ecológico-pecuario.
T a m b ié n la zona de C a u tín a Osorno es
ex trem a d a m en te semejante, por los factores
ecológicos principales, con la que c o m p re n ­
de L la n q u ih u e y Chiloé; sin embargo, la
densidad ganadera es ex tre m a d a m en te más
baja en la segunda; esto se debe tal vez a que
g ra n parte de estas dos provincias, en espe­
cial Chiloé continental, no ha sido todavía
e xp lo tada desde el p u n to de vista pecuario
en forma correspondiente a sus posibilidades.
Parece lógico p resum ir qu e la densidad a b ­
soluta de L la n q u ih u e y Chiloé podría alcan­
(2) M ayo 19(i3
zar, después de u n adecuado fom ento p e cua­
rio, cifras p o r lo m enos cercanas a las de la
zona de C a u tín a Osorno.
Llama p a rticu la rm en te la atención la n o ­
table h om ogeneidad en cuan to a densidad
animal absoluta de las provincias que p r e ­
sentan semejantes condiciones climáticas y
aú n más. parecidas clases de form ación ve­
getal natural.
Cabe destacar que a la formación climax
de sabana corresponde, como en la mayoría
de los países, u n a explotación m ix ta de b o ­
vinos y ovinos; a la form ación de estepas
frías y cálidas, u n a utilización prevalente de
ovinos; y a la de bosques, la explotación b o ­
vina.
Dada la dificultad de expresar en form a
num érica la mayoría de los factores ecológi­
cos, ha sido posible correlacionar ú n ic a m e n ­
te las condiciones climáticas con la densidad
ganadera. P o r lo demás, ya se ha señalado
que el clima constituye el com ponente eco­
lógico de m ayor im portancia, pues de él d e ­
penden fu n d a m e n ta lm e n te las características
edáficas y vegetacionales.
Para esta correlación, se han utilizado los
meses desfavorables, calculados m edian te un a
técnica de superposición de diagramas, so­
bre la base de los meses áridos y de los m e­
ses fríos (di Castri et al., 1962) .
Además de las 25 provincias chilenas se ha
considerado la Isla de Pascua, la única zona
del territorio que, desde el p u n to de vista
climático, no presenta meses desfavorables
(Cuadro N<? 6) . Es necesario indicar qu e en
esta Isla la densidad absoluta es e x tra o rd in a ­
riam ente elevada por dos razones p rin c ip a ­
les: en p rim er lugar, la casi to talidad de la
Isla está realm ente ocupada p o r los a n im a ­
les domésticos, po r lo que en este caso d e n ­
sidad absoluta y densidad ecológica son sen­
siblemente iguales; en segundo lugar, existe
en esta Isla un claro fenóm eno de sobrepoblación ganadera con consecuente sobrepastoreo, que han causado ya evidentes procesos
erosivos.
La correlación entre el n ú m e ro de meses
desfavorables de cada provincia y la densi­
dad g an adera absoluta es inversa y a lta m e n ­
te significativa (1%<>), tanto considerando
sólo las 25 provincias chilenas (r = —■ 0,6-1) ,
(¡uno tam bién incluyendo la Isla de Pascua
(r
- 0,65) .
1)1 C A S T R I , F. el a! — Facto res Ecológicos y D ens idad G a n a d e r a .
C uadro N? 6
Isla de Pascua
Superficie
N d e
territorial
(km-)
:
meses desfavorables
N ‘.> (*)
Especie
0
U. A. 11.
1.846
7.324
1.82!
102
2.367
36.619
1.821
635
Bovina
O vina
E q u in a
Porcina
: 181
(*) D atos al 31 12-1900, proporcionados por el Dr.
Luis Pérez.
Unidades A n im a le s H om ogéneas Totales-,
11.096
D ensidad Ganadera Absoluta: 0,603
P a ra ob te n e r u n a estimación de la d e p e n ­
dencia de la carga g a na de ra con respecto a
los meses desfavorables, se procedió a calcu­
lar el valor de las ecuaciones de regresión.
Estas indicaron que, a m e d id a qu e la varia­
ble in d e p e n d ie n te
(meses desfavorables)
aum enta, la variable de p e n d ie n te (densidad
ganadera) disminuye.
Meses
desfavorables
--------i n c lu id a
is l a
de P t s c u *
--------E x c lu id a i s t a d e P a s e u *
Figura N 1-* ].—Regresión de la densidad ganadera a b ­
soluta en el núm ero de meses deslavóla bies por p ro ­
vincia, incluida y ex (lu id a I;! a de Pascua.
97
La figura
1 representa las dos rectas de
la regresión de la densidad ganadera en los
meses desfavorables. La distribución de las
observaciones es bastante homogénea, con las
únicas excepciones de la Isla de Pascua y de
la provincia de Chiloé, por las razones a n ­
te riorm ente expuestas: en el prim er caso,
sobrepoblación; en el segundo, subpoblación.
La gran mayoría de las observaciones está
com prendida entre 3 y 8 meses desfavorables,
que son los límites climáticos de gran parte
del territorio chileno, y entre densidades ab­
solutas que varían de 0.100 a 0.160.Son éstas
las condiciones climáticas y pecuarias qu e ca­
racterizan con bastante u n ifo rm id a d la zona,
central de Chile, desde la provincia de Val­
paraíso a la de Malleco; esta área correspon­
de a la clase de formación climax de la sa­
bana.
Las rectas de regresión dem uestran clara­
mente qu e el clima ejerce una im p o rta n te
acción deiim itadora tam bién sobre la densi­
dad y la naturaleza de las poblaciones de
animales domésticos.
Se ha calculado tam bién la correlación e n­
tre el nú m e ro de meses desfavorables por p r o ­
vincia y la densidad ganadera ecológica. El
resultado no fue significativo (r = — 0,082),
lo que se debe a que la superficie de forrajeras
y pastos, vale decir, el am b iente realmente
ocupado por los animales domésticos, no ha
sido encuestada en su totalidad en el I I i
Censo Agropecuario, resultando densidades to­
talm ente arbitrarias en numerosas provincias.
Se ha querido, además, evidenciar la posi­
ble dependencia climática de las densidades
ecológicas que aparecen en el Program a de
Desarrollo G anad ero de la C O R F O (Cuadro
N? 7) ; la existencia de pasturas, consignada
en este Program a, h a sido deducida ajustando los datos del Censo con un a serie de esti­
maciones, en especial basándose en el m o n ­
to de las semillas forrajeras, vendidas anual
m ente en el país.
El núm ero de meses desfavorables corres­
pondientes a cada región de la C O R F O , ne­
cesario para esta correlación, ha sido o b te n i­
do calculando la m edia de los meses desfa­
vorables de todas las Estaciones M eteorológi­
cas que existen en cada u n a de estas zonas.
Esta correlación dio u n resultado no signi­
ficativo ( r = — 0,075) y sensiblemente igual
al de la correlación anterior sobre densidades
ecológicas.
B oletín do P ro d u c ció n A n im al l
(2) M ayo I!)(»;>
C u ad ro N c) 7
D ensidad ganadera ecológica y meses desfavorables en las Regiones Agropecuarias del Programa Nacional de Desarrollo G an adero 1961.1970.
R egiones
I
TI
III
IV
V
VI
Densidad ganadera
ecológica (*)
Aleses desfavorables (**)
R egión:
T a r a pa c í a
Atacama
0.17
11.95
Región:
C o q u im b o y
Aconcagua
0.25
8.93
R eg ió n :
V alparaíso a
T alca
0,16
7.85
Región:
M aulé a
Malleco
0.30
4.58
Región:
C a u tín a
Chiloé
0.35
3.00
Región:
Avsén y
Magallanes
0.21
7.72
( * ) Según C O R F O (1961).
(##) Según di Castri, H a je k
(1962).
& Astudillo
Se realizó fin alm ente otra correlación e n ­
tre la densidad g anadera absoluta por h e c tá ­
rea y la densidad poblacional h u m a n a . En
esta ocasión, el estadígrafo ( r = —0,0056) in­
dicó qu e no existe n in g u n a correlación entre
las dos variables analizadas. Esto puede de­
berse, entre otras razones, al hecho de haber
considerado en nuestro cálculo a la población
u rb a n a y rural, correspondiendo los índices
más elevados de densidad h u m a n a a las p ro ­
vincias de Valparaíso, Santiago y Concepción,
en las qu e la carga anim al absoluta no tiene
valores particu larnrente satisfactorios. Incidentalm ente, esto dem uestra u n a vez más la
falta de correspondencia en Chile entre los
centros de producción pecuaria y los centros
de consumo.
1)1 C A S T R I, 1\ el a! — F acto res lx o lógicos y D e n sid a d G an a d e ra ..
RESUMEN
Los autores discuten la posición del m éto­
do de la densidad o carga ganadera d e n tro de
las otras técnicas utilizadas para d eterm in ar
el re n d im ie n to de los ecosistemas agropecua­
rios.
Sobre la base de los datos del 3IT Censo N a ­
cional A grícola-G anadero y m ed ia n te el cálcu­
lo de las U n id ades Animales Homogéneas
(U.A.H.) , se analiza la distribución y la im ­
portancia relativa por provincia de las dis­
tintas especies animales.
Para cada provincia se de te rm in a n las d e n ­
sidades ganaderas absolutas y ecológicas. En
consideración de qu e la extensión de pastos
y forrajeras encuestada en el I I I Censo A gro­
pecuario es m uy incom pleta, deben estim ar­
se poco atendibles los resultados sobre d e n ­
sidad ecológica. N o existe además correlación
entre densidad absoluta y ecológica en las
25 provincias de Chile.
Se evidencian y esquematizan las d e p en ­
dencias e n tre factores ecológicos de tip o cli­
mático, edáfico y vegctacional, y la carga ga
naciera. Se subdivide el país en siete zonas
ecológicas que corresponden a unidades re
gionales d e n tro de las cuales la densidad ga­
na d e ra absoluta es relativam ente homogénea.
Es p a rtic u la rm en te n otab le la hom ogenei­
dad, en cuanto a densidad absoluta, de las
99
provincias qu e presentan parecidas clases de
formación vegetal natural. La densidad a b ­
soluta m áxim a corresponde a la zona biogeográlica de los bosques, seguida de las de sa­
banas, estepas cálidas, estepas frías y desier­
tos.
Existe correlación inversa, significativa ai
1 "/(id, entre el nú m ero de meses desfavora­
bles por provincia y la densidad ganadera
absoluta. La línea de regresión indica que,
a medida que la variable in d epend ien te (me­
ses desfavorables) aum enta, la variable d e ­
pendiente (densidad animal) disminuye.
La densidad absoluta más elevada se pre­
senta en la Isla de Pascua con 0.603 U.A.H.
por hectárea y 0 meses desfovorables. En
Chile continental, la densidad más favora­
ble se observa, en Cautín, con 0.244 U.A.H.
por hectárea y 2.66 meses desfavorables; la
m ín im a en la provincia de Antolagasta, con
0.001 U.A.H. por hectárea y 12 meses desfa­
vorables. La gran m ayoría de las observacio­
nes está com prendida entre 3 y 8 meses des­
favorables, con densidades absolutas qu e va­
rían de 0.100 a 0.160.
N o hay correlación entre el n ú m e ro de m e­
ses desfavorables por provincia o por región
agropecuaria de la C O R F O y la densidad
ganadera ecológica.
N o existe tam poco n in g u n a correlación e n ­
tre la densidad ganadera absoluta por h e c tá ­
rea y la densidad población hu m an a.
Sumrnary
T h e authors discuss the relative im portance of the m e th o d of livestock density in relation w ith the o th e r tcchniques for determining the productivity of agricultura! ccosystems.
Basecl on d a ta from the I II Agricultura!
Census (1955) a n d by means of the calculus
of the H om ogeneous A n im a l Units, the distrib u tio n p e r province of the different a n i­
mal spccies is analyzed.
For each province the absolute a n d ecological livestock densities have been determined.
Considering th a t the in form ation on the ex­
tern of pastures o b ta in e d in the I II Census
is very incompletc, little credit can be given
to the results on ecological density. Furthermore, no correlation exists between absolute
and ecological density in the 25 chilean provinccs.
T h e reiationship between ecological factors, such as climate, soil and vegetation, and
the livestock density is b ro u g h t into evidence
a n d oullined. T h e country is subdivided in
seven ecological zones w hich correspond to
regional units w ith a relatively hom ogeneous
livestock density w ithin them.
Regard in g the absolute density, the homogeneity of the provinces w ith the same n a t u ­
ral vegetation form ation is parlictdarly noliceable. T h e m axim al absolute density corresponds to the biogeographical area of forests,
l'ollowed by those of savannes, calid steppes,
cold steppes an d deserts.
A highly significant negative correlation
100
tto le lín d e P ro d u c ció n A n im al /
ex ¡sis between thc n u m b e r of unfavorable
molí i lis per prnvince and the absolule livcsiock density. T h e regression linc shows tliat,
when thc n u m b e r of unfavorable m onths ¡li­
neases, an im al density dccreascs.
T h e highest absoluto density is observed in
Isla de Pascua (Easter Island) w ith 0.603
Homogeneous Anim al U nits per he rta re and
/e ro unfavorable months. Tn thc continental
Chile, thc niost favorable density is observed
in the province of Cautil], with 0.214 Homogeneous A nim al U nits an d 2.66 unfavorable
inonfhs; thc lowest one in the provincc of
Antofagasta with 0.001 H om ogeneous Animal
Units and 12 unfavorable monlhs. Most ol the
(2) M ayo 19(58
observations are ])laeed between 3 and 8 u n ­
lavorable monlhs, with absoluto densitics going from 0.100 to 0.1 (10.
No correlation exists between the unfavo­
rable m o nlhs per province a n d the ccolog'ical
livestock density. Considering the agricultu­
ra! regions in which C O R F O (Corporación
de Fomento, Chile) has divided the country,
no correlation was observecl between the u n ­
favorable m o nths of these regions an d the
ecological livestock density.
Also, no correlation exists between the a b ­
soluto livestock density per hectare and the
h u m a n populalio n density.
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