ALEXIS LEYVA (KCHO) - Biblioteca Digital de la ULA

Transcripción

ALEXIS LEYVA (KCHO) - Biblioteca Digital de la ULA
ALEXIS LEYVA (KCHO)
Nace en Cuba, en la isla de la juventud, la Habana.
Estudia artes plásticas en la universidad de la habana, obteniendo el titulo de
licenciado, representa a la nueva ola de artistas jóvenes de su país, formó parte
de grupo “Los hijos de Guillermo Tell” que en los noventa visitan nuestro país
en la ciudad capital. Es considerado como de los artistas jóvenes mas destacados y polémico dentro del contexto del arte contemporáneo. Ha participado en
diferentes exposiciones colectivas e individuales, asi como también en salones
y bienales reconocidas como la bienal de la Habana en Cuba, la bienal de Sao
Paulo, Brasil y la bienal de Corea del Sur. Kcho ha sido merecedor de diversos
reconocimientos, tanto en su país como fuera de el.
SU TEMATICA
Su tema se centra en la historia tanto de su país como la de su continente y
demás continentes, pues la historia en fin es una; su preocupación se va a
ge-
nerar en base a las personas que se desplazan de su territorio a otro, con la idea
de mejorar sus condiciones de vida y dejando todo atrás; sus raíces su cultura, su
familiares y sus amigos, su patria. Esta forma parte de la realidad y cotidianidad
de los barrios y sectores populares cubanos. También en otros países de Latinoamérica en donde muchas personas deciden emigrar hacia el norte. La obra
de Kcho toca abiertamente el tema de los “balseros” de su país, que se desplazan
hacia los Estados Unidos, con la idea de “mejorar” su vida, temática que por de
mas ha generado polémica y crítica, se ha prestado a especulaciones tanto de
un bando como de otro, ha sido tildado de desertor por un lado y por otro se le ha
considerado de pertenecer a la seguridad nacional. El artista expresa que Cuba
por ser una isla y sus limites territoriales son hacia el mar por ende en su historia
éste siempre va a estar presente, lo que entra o sale de cuba siempre ha sido por
el mar, su tema por lo tanto va a estar cargado del recuerdo y la nostalgia.
TECNICA
Kcho siempre ha trabajado a partir de bocetos o dibujos, en los cuales proyecta sus ideas para luego materializarlas tridimensionalmente en esculturas e
instalaciones, se vale de la utilización de objetos cotidianos que va acumulando
y recolectando de las calles, orilla del mar, de visitas a los muelles y lugares de
chatarra . Estos objetos llevan las marcas del paso del tiempo, de lo viejo, o desgastado, por lo general pueden ser cualquiera pero predominan los remos, lan-
chas, kayak, balsas, botellas, trozos de madera, metal, juegos de muebles como:
sillas, mesas, espejos, relojes, juguetes, utensilios del hogar, piezas de motores
de barcos, juegos de baños, púas de pez espada, peroles de plástico, latón, o
cualquier material de desecho arrastrado por el mar u objeto encontrado.
Trabaja con los materiales usados por la energía concentrada que emana de
ellos, pues para Kcho contienen mucha luz. Trabaja con desechos, porque estos
ya han tenido una vida pasada. Estos materiales tienen una historia anterior, que
para el en sus piezas se concentra toda esa energía. Esto ha sido fundamental
en su obra.
MARIO ABREU
Nació en Turmero, estado Aragua, un 22 de Agosto del año 1919. Parte de
su infancia la pasó al lado de su madrina Amelia Borges, inclinada a la magia y al
culto de los santos populares. Hecho que viene a marcar al artista y posteriormente se observará en su obra.
Sobre los “Objetos mágicos”, Mario Abreu confirma:
“Busco a través de las ordenaciones plásticas y de los contrasentidos, y en
las oposiciones de fuerzas, develar el acto mágico, sacrificando los estados complacientes para crear fuerzas vivas y de esta manera animar los objetos, en ello
aporto la evidencia de mi propia demarcación en la geografía física y psíquica, no
cerrándome las puertas al universo y aceptando mi alienación activa, ni evadiendo
mi realidad”.
Los “Objetos mágicos” de Mario Abreu se revelan para el arte venezolano
contemporáneo como una de las más logradas síntesis, no sólo como obra del
artista, sino como uno de los trabajos que mas se acerca a las realidades culturales propias de su país, testimonio fiel del mestizaje cultural americano. Obviamente influenciado de alguna manera por la corriente dadaísta o la propuesta de
Duchamp al igual que los artistas Arman Fernández, Rober Roaushnberg, de igual
modo influenciados, pero que en el caso de Mario Abreu tiene su sello personal
que afianza nuestros valores, rescatándolos del olvido y de la poca atención
prestada por otros artistas con respecto a estos temas. Marta Traba afirmó algo
similar cuando entró en contacto con los objetos de Abreu, que le parecieron lúdicos y más “divertidos” que los de Arman. Ella agregó: “Creo que hay una confusión
respecto a este venezolano situado por fuera de las corrientes dominantes y de
los grupos de presión artística. La gran confusión empieza cuando se desestima a
lo largo de los años un trabajo evidentemente original y representativo de las fuerzas y valores culturales que se mueven soterradamente en el país, tras su fachada
tecnológica y petrolera”
El “Objeto mágico”, para Mario Abreu, no es únicamente un producto de una
reflexión estética, pues es parte fundamental del entorno vivenciad de su infancia;
que luego viene a expresar con esa carga evocatoria, poética y ritual, cargando
su propuesta de una profunda espiritualidad y contenidos vitales y políticos. Con
ellos logra aclarar su papel de artista hechicero: “Su puente entre lo oculto y lo
popular”. Su obra se contrapone a lo convencional o a las búsquedas realizadas
por otros artistas venezolanos, se hace evidente una actitud desafiante, en comparación a los lineamientos copiados por otros.
FRANCO CONTRERAS
Nace en Las Piedras, estado Mérida, en 1953. Realiza estudios de arte y de
filosofía en nuestra Universidad de los Andes , donde se desempeña como profesor de la materia expresión tridimensional hasta el año 2004 en la escuela de
artes visuales y diseño grafico. Ha realizado seis exposiciones bajo el nombre de
“Obra Primera”, pues para él cada exposición siempre es un comienzo. También
ha participado en diferentes salones de arte nacionales y fuera del país.
OBRA PRIMERA
“Por la quebrada de Matías para arriba, cogíamos a buscar leña. Otras veces
llegábamos casi hasta donde Don Rufo y entonces, carretera abajo comenzábamos a arrastrar los ganchos de guamo; y cuando no había guamo, el chispioso
podía ser.
Siempre fue así los primeros años, con mis hermanos o con Ernesto y Manuel
en la Bellaca, porque el fogón pedía y pedía y no había posibilidades de negarle
nada; a menos que uno se acostara sin comer ese día.
Pero las gallinas y los cochinos se salían y antes que se perdieran había que
hacerles el corral. Entonces, otra vez para el monte haciéndose cercas trancaban
las apetencias de andar de los animales. Con las varas venían las piedras para
trancar y los bejucos o cabuyas para amarrar.
Mi padre tenia la maravillosa habilidad de verle a todo una segunda y tercera
posibilidad, de buscarle a cada piedra y a cada palo el preciso acomodo; el más
útil y el más placentero.
Por allí me fui metiendo y poco a poco encontrando la presencia de miles de
relaciones de espacio, líneas, vacíos y situaciones que casi mudas e imperceptibles se guardaban en poderosa existencia. Mi casa estaba llena de la huella evidentísima de mis padres que casi todo lo habían como levantado del suelo porque
todo estaba allí desde siempre. Todos éramos como una misma cosa, la cosa de
la vida y del mundo. Como uno solo. Y el arte de lo que he podio entender, se
trata de eso, de la manera particular de ver y representar ese mundo que afuera y
adentro nos sigue conmoviendo” . Franco Contreras.
Su propuesta va a mostrarnos la vida en el campo, el hombre y su cercanía
con el entorno natural, las montañas, el trabajo de la tierra, el trabajo con los animales, el trabajo en colectivo, la familia, las historias y los cuentos de las aldeas y
los poblados campesinos, la alegría, la tristeza, la nostalgia, la soledad provocada por la neblina en los días grises que se siente en las regiones andinas, quizás
sea esta nuestra versión de Pedro Páramo vista desde la perspectiva venezolana,
expresada a través del medio tridimensional. Parte de la identidad latinoamericana es acentuada en la obra de Franco a través de sus recuerdos de infancia
proyectados en sus trabajos. La utilización de objetos encontrados forman parte
de la materialización de los mismos, en algunos casos intervenidos o transformados según las ideas del artista, los objetos de franco también manejan una
estética de desgaste o envejecimiento natural de las superficies de los materiales
u objetos, que nos remiten al pasado o al recuerdo
Los objetos utilizados van desde la recolección de palos, trozos y partes de
maderas de variadas formas y tamaños. Pedazos de metales, láminas de latón,
objetos como sillas, bancos para sentarse, botellones, recipientes de plástico,
animales de plástico en miniatura, metros de mecate, alambre y muchos otros.
CAPÍTULO III
SEMIOTICA DEL
OBJETO
Etimológicamente proviene del griego objetum que significa arrojado contra,
cosa que existe fuera de nosotros, cosa, colocada delante. El objeto es el producto resultado de la civilización industrial o por el Homo Faber, elemento móvil y artificial del mundo circundante, fabricado por el hombre, accesible a la percepción
y destacable en su entorno, hecho a escala del hombre y es totalmente manipulable y subsiste a través del tiempo con una gratitud de permanencia.
El objeto no es natural, no se hablará de una piedra, de una vaca o de un
árbol como de un objeto, sino más bien de una cosa, una piedra no se le considera como objeto más que cuando se le promueve a la categoría de pisa-papel, un
átomo o un microbio no son objetos más que por un esfuerzo de la racionalidad;
pero más allá de la percepción vienen a ser solo objetos de estudio.
El hombre desde sus inicios ha creado diferentes objetos y utensilios que lo
han acompañado a través del tiempo facilitándole las diferentes actividades que
éste ha desempeñado. Quizá en un inicio los objetos se encontraban en comunión con la naturaleza, y su manufactura estaba armonizada con su entorno. Los
materiales con los cuales se realizaban pertenecían al espacio natural, y éstos
eran aprovechados según la forma de la materia lo que en algunos casos definía
la forma del objeto a construir.
Por lo general estos materiales eran barro, madera y piedras. Pero el hombre
desarrolla otras actitudes y mejora los procesos de elaboración de materiales,
descubre los metales y las facultades de alearlos entre sí, aumentando de este
modo los diferentes diseños de objetos. Se observa a través de la historia que
las diferentes culturas como la Maya, Egipcia, Griega o durante períodos históricos como en el Renacimiento, los objetos llevan marcas o estilos estéticos que
definen estas épocas.
Hay dos puntos de la historia en donde la producción de objetos van de la
mano con otros acontecimientos que van a cambiar el curso de la humanidad. La
primera es la revolución industrial, que sin duda marca un inicio, pues no solo se
trata del desarrollo industrial sino también económico. Nos encontramos con una
segunda revolución industrial y tecnológica en los años 20 y 40, que valiéndose
de los medios de comunicación dirigidos a las masas, se desarrolla lo que hoy se
denomina sociedades de consumo, en el cual la producción en serie de objetos
de todos los géneros, inundan las casas comerciales y lógicamente desde nuestros hogares hasta nuestros sitios de trabajo o estudio, a través de los métodos
aplicados de publicidad. De esta manera, el hombre ha creado un universo objetual en el cual nos encontramos inmersos.
DE LA VIDA DEL
OBJETO
A partir de la observación de los objetos en el marco de la sociedad de la
abundancia desde el punto de vista de su impacto sobre el individuo y estudiando
detalladamente los mecanismos de la presencia y permanencia del objeto en el
individuo, consideraremos de nuevo la presencia del objeto en el ser, situándola
en el transcurso de la vida en la relación objeto-individuo:
- El deseo: época prenatal de lo imaginario.
- La adquisición: nacimiento, fenómeno del objeto para el sujeto.
- El descubrir: como personalizar con.
- El amar: descubrimiento de virtudes y vicios funcionales.
- La habitación: retroceso al último plano psicológico.
- El mantenimiento: servicio prestado ritualmente.
- Sustitución: el juicio final.
Desarrollamos brevemente estos períodos:
1) EL DESEO
Éste se mostrará a partir de formas variables que dependerán de aspectos
temporales y psíquicos:
A) EL DESEO PROLONGADO
Éste desemboca en la catarsis provocada por la adquisición o posición que
aumenta progresivamente en función del tiempo. Ejemplo: adquirir un frigorífico.
B) LA NECESIDAD
Función permanente que presenta fluctuaciones accidentales en el curso de
las vicisitudes de la vida, pero que siempre se va a encontrar presente.
C) EL DESEO IMPULSIVO
Éste viene a producirse a través de un impulso pasajero que se apacigua con
el olvido, pero que puede volverse a generar en función de ocasiones exteriores.
Puede admitirse que la función del olvido es exponencial y se caracteriza
por una constante del tiempo. Cabe resaltar que el deseo se puede materializar,
debe encontrar el momento adecuado de satisfacerse dentro del plazo marcado
por esa constante del tiempo, buena parte del mercado de consumo en especial
las vitrinas de las tiendas juega con estas funciones impulsivas, buscando satisfacerlas insertándolas en la memorización para lo cual es preciso traspasar el
umbral de decrecimiento más o menos rápido en el olvido, lo que significa que
si la motivación no se renueva, se desvanece totalmente, pero por otra parte se
dice de estos impulsos que aunque desaparezcan rápidamente son mutuamente
acumulativos y por esto cada impulso conserva un valor residual, que cuando se
repasen nuevamente en la memoria puede quedar definitivamente inscritos en
la mente hasta atribuirle valores de necesidad. En la psicología urbana, este fenómeno se aplica constantemente a la disposición de objetos “deseables” en las
vitrinas comerciales en las calles o centros de comercio.
2) LA ADQUISICIÓN
Esta es la catarsis del deseo, que se cumple a través de la obtención del
objeto sacado del universo de los objetos (la tienda) al plano personal. Tiene una
gran carga emocional, es un punto sin retorno que la elección de un objeto representa la renuncia a otras alternativas posibles.
La más notable en el proceso de la vida del objeto es que el máximo placer
del consumidor está en el instante en que el contacto es aún indirecto y lejano de
la compra, el placer que éste emana se distribuye en las tres (3) primeras fases
del deseo, más en la segunda es en donde se ama lo que no se conoce y está
por descubrir, en la que se produce un fenómeno interesante provocado por el
impulso, conocimiento psicológico utilizado por las empresas de publicidad, que
siempre enfatizará en el acto emotivo de la compra.
3) DESCUBRIR AL OBJETO
Aquí el objeto ya se encuentra en las manos de su dueño, empaquetado
completamente nuevo, preparado para ser descubierto al romper su envoltura, se
deshace el embalaje, se descubre el contenido, se logra una aprehensión cognoscitiva.
4) AMAR EL OBJETO
La posesión del objeto entra a un plano corroído o atenuado por el descubrimiento progresivo de los defectos del mismo, la inadecuación entre las propiedades y la suma de cualidades que se le atribuye a una imagen idealizada. Por otra
parte podemos decir que este mecanismo proporciona una definición psicológica
de lo que se podría llamar objeto perfecto; ésta es utilizada por los especialistas
del marketing quienes elaboran una lista de las probabilidades o cualidades, ordenadas por frecuencias decrecientes que una población consumidora atribuye
o exige de un objeto creando una “descripción ideal” tal y como la quieren los
ciudadanos de una sociedad de consumo.
5) HABITUARSE AL OBJETO
Una vez poseído, éste es explorado y examinado pasando a un proceso de
habituación, se produce una especie de depredación cognoscitiva, éste forma
parte integrante de un mundo circundante, es neutro; sólo volverá a existir por su
propia ausencia (accidente, rotura, desaparición, etc.), que se dará por la utilización y su participación en la vida cotidiana.
6) MANTENIMIENTO DEL OBJETO
El objeto puede continuar existiendo e imponer su prevalencia atrayendo de
nuevo al sujeto en el momento en que se le repara, es decir cuando el objeto
exige atención, pues éste puede presentar enfermedad y el sujeto en un acto
positivo daría una esperanza de vida, que va en función de la altura del individuo,
del precio relativo del objeto, etc., y en función de que las reparaciones proporcionen una duración superior al tiempo más o menos estipulado del objeto no se
verá como un reproche de vida, sino todo lo contrario pues generará un ahorro en
varios sentidos.
7) VER MORIR A UN OBJETO
Por último, el objeto se impone al ser reemplazado y enjuiciado, puede morir
de olvido que en este caso no es sustituido y quizá éste represente su muerte
definitiva, también puede morir o desaparecer por la ruptura del mismo bien, sea
por olvido o por accidente este pasará al cuarto de los chécheres o basureros por
ende este será cementerio de los objetos o su destino final.

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