Observatorio de Competitividad y Clusters

Transcripción

Observatorio de Competitividad y Clusters
Instituto de Competitividad
Algunas reflexiones sobre la medición de la competitividad a nivel
subnacional
Luis Silveira*
Entre el 2 y el 4 de setiembre pasado participamos, como representantes del Instituto de
Competitividad de la Universidad Católica del Uruguay, de la tercera reunión del Grupo de
trabajo /Expertos de la Red Interamericana de Competitividad en competitividad subnacional
(GTECS), que se realizó en la ciudad de Buenos Aires (Argentina). Dicha reunión reunió a más
de 50 especialistas en temas de competitividad e innovación de diversos países de
Iberoamérica.
El GTECS tiene como objetivo promover la competitividad de los países de la región mediante
el intercambio de experiencias internacionales sobre competitividad subnacional y el
conocimiento sobre las diferentes metodologías en la elaboración de reportes, mediciones y
agendas de competitividad a nivel de las provincias, estados, sub-regiones o ciudades.
Uno de los temas que se trataron en esos dos días de intensas discusiones estuvo centrado en
los índices de medición de la competitividad subnacional, es decir de las diversas regiones que
componen un país determinado.
Esto debido a que, en diversos países de América Latina se ha detectado en los últimos años la
necesidad de medir la competitividad a nivel de las regiones, especialmente en los países más
grandes como Brasil, Argentina, México o Colombia. Para muchos investigadores, medir la
competitividad subnacional es un requisito fundamental para poder enfrentar la actual
competencia global. Sin embargo, expresan que debe quedar muy claro que la medición de
competitividad regional no es una forma de competencia estéril entre las regiones, sino una
herramienta para el desarrollo de las mismas.
Pero para medir la competitividad, algunos índices se basan en su propia definición de
competitividad, en cambio otros utilizan definiciones que han sido elaboradas por diversos
organismos internacionales como puede ser el World Economic Forum, el Banco Mundial y
otros.
Un ejemplo que nos pareció muy interesante, fue la presentación del Índice de Competitividad
de los Estados Mexicanos (ICEM), elaborado por la Escuela de Gobierno y Transformación
1
Pública del TEC de Monterrey1. Para este centro de investigación la competitividad se entiende
como: “el medio ambiente creado en una economía de mercado (ya sea una nación, región o
cualquier ámbito geográfico) el cual es resiliente y suficientemente atractivo para localizar,
incubar y desarrollar actividades económicas exitosas e innovadoras, entendiendo por éstas,
las actividades que atraen talento e inversión que generan riqueza, permitiendo a sus
habitantes alcanzar un nivel de bienestar sostenible”.
En base a esa definición, los investigadores del TEC entienden que los índices de
competitividad regional deberían considerar algunas tendencias globales. Entre ellas, las
siguientes:
La vinculación de la competitividad al desarrollo sostenible ya que la presión sobre los
recursos naturales y los altos niveles de contaminación han cambiado la forma de ver
el desarrollo económico, demostrando que la tecnología puede incrementar la
capacidad de carga del planeta.
La capacidad de adaptación y recuperación ante shocks externos. Es decir, ver y
potenciar a las regiones como difusoras de resiliencia.
La Innovación y conocimiento como impulsores de sistemas regionales de innovación
que se traduzcan en crecimiento regional y competitividad.
Los ecosistemas de emprendimiento que permitan la creación de empresas de alto
valor agregado, alto contenido tecnológico y productividad, como drivers de la
competitividad regional.
En cuanto al objetivo de estos indicadores regionales, los investigadores del TEC entienden que
en definitiva las mediciones de competitividad deben orientar la definición de políticas
públicas y el establecimiento de “agendas de competitividad” para los gobiernos subnacionales
que obedezcan a:
La detección de las causas subyacente a los problemas de competitividad en la gestión.
Las competencias administrativas y legales de los gobiernos subnacionales.
La mejora de procesos, procedimientos, es decir la optimización de acciones
estratégicas para la competitividad.
Teniendo como marco teórico lo anterior, el Índice de Competitividad de los Estados
Mexicanos (ICEM) toma en cuenta los pilares clásicos de desempeño económico, eficiencia de
negocios, infraestructura y eficiencia gubernamental, e incorpora cuatro nuevos: desarrollo
sostenible, incentivo a la innovación y al emprendimiento, y la resiliencia. Estos nuevos pilares,
se consideran que cada vez van a ser más importantes para el desarrollo competitivo de una
región y por lo tanto tiene que seguirse muy de cerca su evolución.
1 El Instituto Tecnológico de Monterrey (TEC) es una de las universidades con mayor reconocimiento académico y está situada en
la mayoría de los rankings como una de las mejores 100 del mundo. Es reconocida como la mejor escuela de negocios de México y
de Latinoamérica. Su página web es www.itesm.mx
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El esquema de desarrollo del índice se muestra en la figura 1:
Figura 1
Fuente: ICEM, TEC Monterrey
Esta experiencia de medición de la competitividad de regiones mexicanas, a pesar de tratarse
de un país grande, puede ser trasladada a diferentes regiones, incluso de países pequeños.
Creemos que intentar medir el desarrollo sostenible, la capacidad de innovación de las firmas,
la resiliencia de la región y el emprendimiento, es tan importante como lo era hasta ahora el
desempeño económico, el nivel de la infraestructura, la eficiencia de las empresas y la
eficiencia gubernamental.
Dado que los problemas medioambientales, sociales y económicos están íntimamente
interrelacionados y afectan a todas las regiones, dónde Uruguay no es la excepción, sería
interesante pensar en construir un indicador similar, para medir la competitividad de los
departamentos que conforman el país y que incluya todos los pilares mencionados, no tanto
para saber su lugar en un posible ranking, sino para identificar de manera más precisa las
razones de su posición relativa.
17 de setiembre de 2015
* Luis Silveira
Investigador del Instituto de Competitividad de la Universidad Católica del Uruguay
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