Orson Welles sacrificó su carrera como actor para

Transcripción

Orson Welles sacrificó su carrera como actor para
El guionista de la película sobre Facebook
asegura: “Todo se ciñe a la verdad”
Aaron Sorkin lleva la vida de Mark Zuckerberg al cine sin contar
con su participación ● “Es un filme sobre pasiones humanas” Pág. 42
CULTURA
La Gaceta. Viernes, 15 de octubre de 2010. Número 6.601
José María Pou, actor y director
“Orson Welles sacrificó su carrera
como actor para rodar ‘El Quijote”
l El artista se traslada
a Madrid para dar vida
al director americano
l En la representación,
el actor “baja del pedestal
y humaniza” a su álter ego
l Ambos comparten
su “enorme curiosidad y
su capacidad de trabajo”
crítica cine
Vuelve
el mejor
Fincher
J. Muiña. Madrid
rirse indistintamente a José
María Pou o a Orson Welles. El
intérprete catalán engrandece
su figura en Su seguro servidor,
Orson Welles, donde interpreta
al director de Ciudadano Kane.
Antes de su estreno en el Teatro
Bellas Artes de Madrid, atiende
a LA GACETA. Pág. 45
Jerónimo José Martín.
Madrid
La última película de David
Fincher escrita por Aaron
Sorkin es mucho más que
una película sobre Facebook.
Se trata de una historia poderosa que propone uno de los
mejores análisis sociales del
deshumanizado momento
actual. Amistad, lealtad,
éxito y poder se dan cita en
una extraordinaria película
de excelente guión que ha
barrido en EE UU. Pág. 43
crítica cine
Lapidaciones
y miradas
fugitivas
Belén Ester Casas. Madrid
Borja Sánchez-Trillo
Actor de amplios registros e
innovador director artístico.
Estos calificativos podrían refe-
La verdad de Soraya M. (de
los productores de La Pasión)
se convierte en una película
cruda y terriblemente real
sobre la historia de una de las
primeras lapidaciones conocidas en Irán. Una mujer
acusada injustamente de
adulterio es la involuntaria
protagonista de una película
violentísima que removerá
conciencias. Pág. 42
Viernes, 15 de octubre de 2010
la GACETA 45
Cultura_Entrevista
José María Pou, actor y director
“Orson Welles no existiría
en el Hollywood actual”
El artista catalán se traslada a Madrid para
meterse en la piel del director de ‘Ciudadano Kane’
J. Muiña. Madrid
Primero en la piel de un
docente con Los chicos de
la historia y ahora dando
vida a uno de los maest ros del ci ne, Or son
Welles, en Su seguro servidor, Orson Welles, José
María Pou (Barcelona,
1944) continúa sentando
cátedra en el mundo de la
interpretación.
En la obra, estrenada el
30 de junio de 2008 en el
Teatro Romea de Barcelona y que hoy se estrena en
el Bellas Artes de Madrid,
Pou “baja del pedestal y
convierte en un ser humano” al director de Ciudadano Kane. De ahí que el
espectador descubra a un
Orson Welles “nada conocido”, como asegura a lo
largo de una entrevista
realizada en el hotel que
durante el próximo mes se
convertirá en su improvisado hogar.
La imagen brillante,
triunfadora y exuberante
formada en torno a la figura de este genio, capaz de
idear a los 22 años un revolucionario formato que
pasó a la posteridad como
La guerra de los mundos
y, dos años más tarde, de
firmar una joya del celuloide como Ciudadano
Kane, contrasta con una
personalidad llena de miedos y muy vulnerable.
Su carrera interpretativa se vio condicionada por
un hidalgo llamado Don
Quijote de la Mancha.
Ningún productor quiso
costearle la adaptación al
cine de la obra de Miguel
de Cervantes porque les
parecía una locura y, ante
eso, decidió producirla él
mismo. Esa decisión le
obligó a participar en diferentes “películas de mierda”, en palabras de Pou,
para costearse el rodaje.
A través de su vinculación con la obra y su pasión
por los toros, “nació un
amor sublime por España”, apunta un Pou convertido en todo un experto en la vida del genio americano. Merced a ese
estudio, ha atisbado puntos en común entre ambos.
“Como él, he sido un hombre que, desde joven, he
tenido una enorme curiosidad por todo y una gran
capacidad de trabajo”,
apunta con un cierto orgullo en su voz.
Borja Sánchez-Trillo
Su conocimiento del
intérprete y del medio le
hacen afirmar sin ambages
que “Welles no hubiera
existido en el Hollywood
actual”. “Sólo hubiese podido firmar una película
como Ciudadano Kane en
En la obra,
el actor “baja
del pedestal”
a su álter ego
el circuito independiente”,
añade. Pou, como su álter
ego, reniega de la industria
americana porque, como él
mismo afirma, entre ser
actor o estrella se decanta
por lo primero. Cuestión de
prioridades.

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