Fig. 1 Para el ataque y control de incendios de gran envergadura y

Fig. 1 Para el ataque y control de incendios de gran envergadura y

Fig. 1
Para el ataque y control de incendios de gran envergadura y/o enviar chorros a gran distancia, se utilizan equipos denominados monitores, los que permiten que con escaso personal se pueda manejar grandes caudales y las fuerzas derivadas de estos.
Como monitor se define todo equipo mecánico que descargue un chorro de al menos
1500 lpm (400 gpm). Es una poderosa arma dentro del arsenal bomberil para el control de
incendios y como toda arma, debe ser operada de manera responsable.1
Es de imaginar que un chorro de esas características tiene el potencial de causar daños
de consideración o mortales si son utilizados sin el adecuado conocimiento de las leyes
de la física que operan sobre el.
Fuerzas que actúan al descargar un chorro
Como ejemplo, un chorro de 4.000 lpm tiene una potencia de mas de 140 HP, esto es
producto de la citada masa saliendo a una velocidad de 120 kph como es el caso de una
boquilla de 2” (5,08 cm) a una presión de 5,5 bares (80 psi).
Esa potencia de impacto puede ser utilizada ventajosamente para eliminar algún obstáculo que dificulte el envío de un chorro, romper un vidrio, botar una pared, etc.
Con los datos anteriores, también podemos deducir que un chorro de esas características,
dirigido a una persona puede provocar graves lesiones o tener fatales consecuencias.
El lado oscuro de la fuerza descrita, es la reacción, esta se encuentra definida en las leyes de la física como; toda acción produce una fuerza de igual magnitud y de dirección
contraria.
Un ejemplo de ello es el culatazo que se produce en las armas de fuego al dispararlas o el
medio por el cual un cohete se desplaza al expulsar gases hacia atrás.
En el caso de la mayoría de los pitones neblineros o cachotas2, están diseñados para entregar su caudal a 7 bares (100 psi), incluyendo los de monitores, en todos estos, la reacción producida en chorro directo equivale (en kgs) a un 6% de los lpm enviados. Es decir,
si arrojamos un caudal de 2.000 lpm (500 gpm) la reacción será de 120 kg,
Para mantener esa fuerza bajo control, los distintos fabricantes de los monitores recomiendan utilizarlo anclado y como seguridad adicional, le incluyen una traba, para recordarle al operador que debe evitar que el ángulo de descarga sea bajado de 35° sobre la
horizontal si el aparato no está anclado.
Fig. 2
En ocasiones, esa traba (foto 2) puede estar en malas condiciones o bien sencillamente el
operador del monitor desconoce su utilidad y baja el chorro a menos de 35° con graves
consecuencias.
Fig. 3
No es bueno para la salud un monitor de 25 kg saltando por todos lados y con una fuerza
de 120 kgs o más, rompiendo todo lo que encuentra a su paso.
La Fig. 3 es bastante explícita como advertencia adicional.
Cuando el ángulo de descarga es de 35° o más, la mayor parte de la reacción es desviada al suelo, con lo que se logra que el monitor permanezca estable en su ubicación, independiente del caudal arrojado y reacción producida.
Al instalar el monitor, siempre se debe corregir la o las líneas que lo alimentan de manera
que al menos 3 metros de estas, estén alineadas con la dirección del chorro para ayudar
a absorber parte de la reacción (Fig. 4)
Fig. 4
Uso bajo los 35° sobre la horizontal
En caso de tener que dirigir el chorro a un objetivo ubicado a menos de 35°, se debe anclar el monitor a un objeto sólido o a una estaca mediante un cordín, para que de esta
manera su desplazamiento libre sea impedido tal como se ve en las figuras 5,6 y en la
foto que encabeza este artículo. Siempre dejar tensado el cordín entre el monitor y su
anclaje.
Fig. 5
Fig. 6
El anclaje abierto, como el de la Fig 1 permite una mayor estabilidad para las raras ocasiones en que se deba describir con el chorro un amplio arco horizontal (ronza), su desventaja es que es menos rápido de realizar que el anclaje simple de las Figs 5, 6 y 7.
Fig. 7
En caso de emergencia
Si ocurriera que un monitor no anclado, pierde estabilidad por un alza repentina de presión/caudal o un vehículo pasó sobre la línea de alimentación, etc, el operador del mismo
debe estar atento a corregir esa situación ya sea mediante un rápido alzado del ángulo de
descarga, llevar el chorro a niebla o alejarse velozmente a prudente distancia (bombero
que se salva sirve para otro incendio), o una mezcla de todas las anteriores.
Accesorios necesarios para un anclaje seguro del monitor (fig 5)
Dos cordines o cintas tubulares de unos 3 mts. x 10 mm, con gancho o mosquetón c/ una.
Dos estacas de 10 mm x 30 cms.
Combo o hacha de cabeza plana de 4 a 6 lbs.
Bolso de transporte para accesorios.
Estos elementos deben ser de uso exclusivo del monitor y mantenidos junto a aquel.
Uso estratégico/ táctico
El uso normal de los monitores será en incendios de gran envergadura y que deben ser
combatidos de manera defensiva, es decir desde fuera del área de colapso de la estructura. Ocasionalmente podrán ser utilizados también de manera ofensiva, o sea en ataques
interiores.
Para detalles de su uso tanto estratégico como táctico, ver el capítulo de Cálculo y Aplicación de Caudales en Incendios Estructurales o contactar a [email protected]
En resumen, los monitores, como todo equipo que sepamos manejar en forma correcta
nos dará un servicio seguro y eficiente, los accidentes siempre están esperando algún
descuido.
E
El autor; Jaime Núñez Sotomayor es Técnico en Construcción y Analista de Riesgos Industriales.
Fue bombero por más de 20 años en el Cuerpo de Bomberos de Viña del Mar, ocupando entre
otros, los cargos de Insp. Gral de Capacitación e Insp. Gral. de Material Menor.
Bibliografía
-Revista Fire Command, Junio 1986, Larry Stevens “Safe handling of master streams”
-“Force required to move portable master streams”, Task Force Tips, 1994
E
Publicado por www.bomba18.cl @ 2004
1
En demasiadas ocasiones se ve a “monitores” con boquillas de baja descarga, “ para cuidar el agua”, esos deben ser considerados como
pitones estacionarios en el caso de estar en una base portátil o como pitones móviles si están montados en un carro. No son monitores.
2
En algunos Cuerpos, se denomina genéricamente cachota dentro de la jerga bomberil a los pitones neblineros, nombre preferible a denominarlos a todos por una marca específica como AKRON.