EL PAIS 15 de febrero de 2008 Francia reconoce su ayuda militar al

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EL PAIS 15 de febrero de 2008 Francia reconoce su ayuda militar al
EL PAIS
15 de febrero de 2008
Francia reconoce su ayuda militar al presidente de Chad
La reforma del Ejército francés prima el despliegue de tropas en África
J. M. MARTÍ FONT - París.- El Ministerio de Defensa francés reconoció ayer lo que era un
secreto a voces: que las tropas galas estacionadas en Yamena ayudaron al presidente de
Chad, Idriss Déby, contra las fuerzas rebeldes que intentaron derrocarle hace dos semanas.
"Los medios franceses participaron en el traslado de municiones destinadas a las fuerzas
chadianas ", fue el eufemismo usado por el portavoz ministerial Laurent Teisseire en un intento
de minimizar una intervención que, según numerosos indicios, fue mucho más allá.
El anuncio, a mediados de enero, de que Francia se dispone a abrir una base militar en
los Emiratos Árabes, en el estratégico estrecho de Ormuz -la primera permanente fuera de su
territorio que abre desde el fin del periodo colonial-, marcaba un punto de inflexión en el diseño
de la estrategia militar de París.
Pero la crisis de Chad ha vuelto a resituar las prioridades francesas en materia de
Defensa; África reclama de nuevo toda la atención del Elíseo, que se ve obligado a reabrir el
viejo catálogo de prácticas intervencionistas en sus antiguas colonias, donde conserva
importantes intereses económicos y estratégicos. Y financieramente, París no puede pagarse
al mismo tiempo una presencia militar que le permita ejercer de gran potencia.
En este sentido, Étiene de Durand, especialista en temas estratégicos y militares del
Instituto Francés de Relaciones Internacionales (IFRI), señalaba a este periódico que la futura
base de Abu Dabhi, situada frente a las costas de Irán, no trae consigo un cambio significativo.
"Forma parte de una relación preexistente entre Francia y los Emiratos", señalaba. Reconocía,
eso sí, que se trata de una "señal" que se envía a Teherán y que la decisión tiene básicamente
un contenido político, más que militar.
El problema de fondo de la presencia militar francesa en el mundo "es financiero, no
político", señala De Durand. Francia destina un 1,7% de su PIB a Defensa, una cifra superior a
la de cualquier otro país europeo a excepción del Reino Unido. El de España se sitúa en torno
al 1,2%.
El presidente Nicolas Sarkozy pretende una reforma a fondo de sus Fuerzas Armadas.
El ministro de Defensa, el centrista Herve Morin, tiene previsto presentar el Libro Blanco sobre
la reforma a mediados de marzo. Y en los cuarteles hay cierta inquietud, especialmente por lo
que puede significar de reducción de efectivos. El Ejército de Tierra cuenta actualmente con
120.000 hombres, y contrata cada año 15.000 soldados. Los cálculos que se hacen en función
de la reducción general del número de empleados públicos en Francia configuran una horquilla
de entre 20.000 y 70.000, según los sindicatos. Morin la consideró "extravagante".
En las Fuerzas Aéreas se quejan de la escasez de medios. En cuanto a la Marina, la
reforma ya se hizo hace tiempo. Queda por decidir la cuestión del segundo portaaviones, un
tema que formó parte de la campaña electoral. El único portaaviones francés, el Charles de
Gaulle, debe entrar ahora en el dique seco para labores de mantenimiento.

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