DEL SOL. El dios de nuestros padres

Transcripción

DEL SOL. El dios de nuestros padres
Trece Barras
REVISTA MENSUAL DEL REAL BETIS BALOMPIÉ Nº7 / Octubre de 2014
UN GRANDE DEL
FÚTBOL MUNDIAL QUE
CAMBIÓ PARA SIEMPRE
NUESTRA HISTORIA.
“YO LE HE DADO
MUCHO AL BETIS, PERO
EL BETIS ME HA
DEVUELTO MÁS A MÍ”
El dios de nuestros padres
60 años del debut de Luis del Sol con el Real Betis Balompié (1954-2014)
trece barras / 2
SUMARIO
03/ 60 años de
un mito. Luis
del Sol repasa
su leyenda con
Tomás Furest.
14/ Es domingo y 28/ Vestuario.
juega Del Sol. La
Sevilla y el Betis
de los 50, por
Luis Carlos Peris.
33/ Grande entre 38/ Regreso a
los grandes. Luis casa. Cejudo
Recuerdos de
Rogelio, Pachín, del Sol, el socio vuelve a
de Di Stéfano, por Heliópolis con
Santamaría,
Leoncini y López . Alfredo Relaño. toda la ilusión.
43/ Pedro
Buenaventura.
“Nuestro objetivo
es crear un perfil
de jugador Betis”.
Trece Barras
36/ El Betis de la Memoria. Beltrán Pérez y su Gordillo.
54/ RC24. Descárgate la foto firmada de tu ídolo.
50/ RBB Féminas. Beíta, jugadora y entrenadora
56/ RRSS. Los jugadores suman followers en el Betis.
59/ La Historia material. La mesa de Benito Villamarín .
62/ Cómo nos ven. César Sánchez, redactor jefe de ‘Panenka’.
Revista mensual del Real Betis Balompié
Publicación oficial del Club
Dirección:
Julio Jiménez Heras
Diseño y maquetación:
Sebastián Marín
Colaboran en este número:
Tomás Furest, Luis Carlos Peris, Alfredo Relaño, Beltrán Pérez,
Benito Rivero Villamarín y César Sánchez..
Archivo fotográfico:
ABC de Sevilla, As, El Coreo de Andalucía y Marca.
Para publicidad en la revista:
[email protected]
SUMARIO
Luis
Del
Sol,
nacido para ser
Betis
El 17 de octubre se cumplen
60 años de su debut con el
primer equipo.
“He logrado muchos títulos
con el Real Madrid y la
Juventus, pero ganar un
partido con el Betis tiene
para mí un sabor especial”
DEL SOL. El dios de nuestros padres
Tomás Furest
Reportaje gráfico: Paco Puentes
l próximo 17 de
octubre se cumplirán 60 años
del debut con el
primer equipo
del Real Betis Balompié de Luis Del Sol Cascajares
(Arcos del Jalón, Soria, 1935), para
muchos el mejor futbolista de cuantos han defendido el escudo de las
trece barras. Él, sin embargo, le
resta importancia a su impecable
trayectoria, al ascenso a Primera
conseguido en la temporada 195758 después de quince durísimos
años en Segunda y en Tercera. Fue
entonces cuando se forjó la leyenda
del “Manquepierda”, ese grito senequista de fidelidad y rebeldía compatible con el hambre insaciable de
triunfos de un futbolista al que en
Madrid llamaban el Di Stéfano del
Betis antes de que recalara en el
Bernabéu en abril de 1960 para ganar ese mismo año la quinta Copa
de Europa y la Copa IntercontinenSUMARIO
E
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tal. Después sumó dos Ligas (1961
y 1962) y una Copa de España ante
el Sevilla (1962). La Juventus pagó
40 millones de pesetas –la cifra más
alta desembolsada hasta entonces
por un futbolista- para incorporarlo
a sus filas y en Turín permaneció
durante ocho años para añadir a su
palmarés dos nuevos títulos, Liga y
Copa, convirtiéndose en ídolo de la
afición ‘bianconera’, que en 2012 lo
eligió entre los 50 mejores jugadores de la historia del club, formando parte del Paseo de la Fama junto
a nombres ilustres como Anastasi,
Baggio, Boniperti, Buffon, Bettega,
Capello, Del Piero, Platiní o Zidane.
Del Sol jugó dos Mundiales (Chile
SUMARIO
1962 e Inglaterra 1966) y se proclamó campeón de Europa con España en 1964, pero reconoce que
“en la selección no disfruté mucho
porque se empeñaban en que jugara pegado a la banda”. Curiosamente, para él siempre han tenido
un sabor muy especial los triunfos
conseguidos con la camiseta verdiblanca, como el 2-4 ante el Sevilla
en la inauguración oficial del Sánchez Pizjuán. Tal vez por ello volvió al Betis en la temporada 72-73
tras jugar 10 años en Italia, rechazando una oferta de su amigo Di
Stéfano, que entrenaba al Valencia.
Se retiró con 38 años pero siguió
durante muchos más ligado al Betis
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como secretario técnico y entrenador, logrando el ascenso a Primera
en 2001.
Del Sol no le da mucha importancia
a los títulos; valora mucho más la
amistad, la entrega, el compromiso,
y cuando visita el Betis Tour Experience, en el que, como es lógico,
ocupa un lugar destacadísimo junto
a otros mitos como Gordillo, Esnaola, Rogelio o Cardeñosa, demuestra
su tremenda grandeza, su generosidad sin límites, deteniéndose ante
el espacio dedicado a su añorado
amigo Portu para reflexionar en
voz alta: ¨Nadie como él, que jugó
con el Betis en Primera, Segunda y
Tercera, se merece ocupar aquí un
lugar destacado. Lo dio todo por
el Betis, nunca se escondió, y para
mí tiene mucha más importancia
que todos los títulos que hayamos
podido conseguir otros”.
El padre del mito era ferroviario y
cambiaba con frecuencia de destino, de ahí que Luis naciera circunstancialmente en tierras sorianas,
donde Bonifacio trabajaba como
maquinista. Sin embargo, pronto
se trasladaron a Sevilla y se instalaron en el barrio de San Jerónimo.
Allí aprendió a jugar al fútbol casi
SUMARIO
al mismo tiempo que daba sus primeros pasos. Era tal su pasión por
el balompié que se resistía a fichar
por el Betis a pesar de la insistencia de su amigo Manuel Cruz, que
militaba en el amateur verdiblanco.
Había días que jugaba tres o cuatro
partidos, con el Alegría, el equipo
de su barrio, el Andalucía, de la
Alameda, y el Betis, hasta que el
gran Pepe Valera lo convenció: “Yo
jugaba con todos pero no me quería comprometer con ninguno porque temía que no me dejaran hacerlo a todas horas, que era lo que
me gustaba. Pero un día acompañé a mi amigo Cruz a la secretaría
para que firmara una convocatoria. Estaban allí Pepe Valera y
Antonio Quijano y entre los tres
me convencieron. Tenía yo dieciséis años y desde entonces para mí
el Betis ha sido el club de mi vida,
aunque haya jugado en otros”.
Se enrola en los juveniles, jugando
como extremo izquierda, pero destaca tanto por su calidad y fuerza
que con 18 años lo cede el Betis
al Utrera, que jugaba en Tercera y
estaba a punto de descender. Luis
sonríe al recordar aquella época:
“Me lo pasé muy bien. Pasaba a
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los rivales de dos en dos y marqué
muchos goles. Nos salvamos y volví al Betis, que había ascendido a
Segunda”.
Recuerda que la primera vez que
se puso la camiseta del Betis fue en
un amistoso en Villanueva del Río
y Minas con chavales de los escalafones inferiores y del amateur,
pero con el primer equipo debuta
en un amistoso el 28 de marzo de
1954 en El Puerto de Santamaría en
un once formado por Estévez; Carrasco, Fausto, Sánchez; Eugenio,
Benito; Moruca, Álvarez, González,
Enrique y Del Sol. Es en la temporada 54-55 cuando Paco Gómez
lo incorpora a la primera plantilla.
SUMARIO
Estaba trabajando entonces en la
ISA como oficial ajustador y pide
un año de excedencia por si una
lesión truncaba su carrera, “aunque
yo estaba convencido de que iba a
triunfar en el fútbol”, dice Del Sol,
que debuta en partido oficial en Badajoz el 17 de octubre de 1954 con
derrota por 1-0. Jugó el Betis ese
día con González; Portu, Barinaga,
Cifuentes; Óscar, Aumesquet; Del
Sol, Guerrero, Cabrera, Hurtado y
Flores.
“A pesar de estar muy contento
por mi debut, salí del campo con
mal sabor de boca porque yo sólo
pensaba en ganar. Me daba igual
el rival o el estadio”, dice Del Sol,
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que esa temporada jugó 23 partidos de Liga y marcó 6 goles.
Se hizo con un puesto de titular
y pronto alcanzó la capitanía,
luchando por un ascenso a Primera que llegaría el 25 de mayo
de 1958. El Betis jugaba en San
Fernando con Menéndez; Portu, Santos, Isidro; Valderas, Loli;
Lasa, Paqui, Vila, Rodri y Del
Sol. Necesitaba un punto para
lograr su objetivo, pero a pocos
minutos para el final perdía por
2-1. Entonces apareció el ‘Gordito del Empalme’, que era como
se le conocía en los ambientes
futbolísticos, para lograr el gol
del empate. “Imagínate –dice- la
alegría que sentí. Ese gol nos
llevaba otra vez a Primera, que
era el sueño de todos los béticos. Estábamos convencidos de
que esa temporada íbamos a ascender porque éramos una piña.
Lo celebramos con nuestra gente
una semana después ganándole al Jerez Deportivo por tres a
cero en Heliópolis y marqué el
primer gol. Esa temporada había llegado Antonio Barrios al
Betis y me dio libertad absoluta
para moverme por todo el camSUMARIO
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po. Disfruté mucho porque a mí lo
que me gustaba era estar en contacto con el balón. Desde entonces
jugué casi siempre de interior”.
Triunfo histórico en el
Sánchez Pizjuán
Recuerda la gran fiesta que hubo
para celebrar el ascenso, las miles de personas que acompañaron
al equipo hasta el Ayuntamiento,
las caras de felicidad de los aficionados, que cuatro meses después
volverían a echarse a la calle para
celebrar el triunfo del Betis ante el
Sevilla, en la inauguración oficial
del Sánchez Pizjuán, el 21 de septiembre de 1958. Con un lleno hasta la bandera, por el Sevilla jugaron
Cardoso; Santín, Campanal, Maraver; Ruiz Sosa, Pepín; Antoniet,
Diéguez, Gómez, Arza y Szalay,
mientras que el Betis lo hizo con
Otero; Valderas, Ríos, Portu; Isidro,
Paqui; Castaño, Aspeitia, Kuzman,
Areta y Del Sol, que pasaría a la
historia al marcar el primer gol del
partido con un durísimo disparo
desde lejos. Szalay, de penalti, y
Diéguez pusieron al Sevilla por delante antes del descanso, pero en la
segunda parte sólo hubo un equi-
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po en el campo, el Real Betis, que
logró el triunfo con dos tantos de
Kuzman y uno de Areta. No había
mejor manera de celebrar la vuelta
a Primera.
A Del Sol siempre se le han dado
muy bien los partidos ante el eterno
rival, primero como jugador y después como entrenador, y vuelve a
demostrar su grandeza al reconocer
que “en el campo no tenía amigos,
pero fuera me llevaba muy bien
con casi todos los del Sevilla, en
especial con Juan Arza, al que admiraba muchísimo. Me encantaba
verlo jugar. A los dos nos gustaba
dar espectáculo. Ese día lo dimos
nosotros e hicimos felices a los béticos, que habían sufrido mucho en
los años anteriores”.
La charla con Del Sol la interrumpen constantemente compañeros
y amigos que llegan para darle un
abrazo cuando se enteran de que
está en el estadio. Gordillo, Cañas,
el Curita, el presidente, Manuel
Domínguez Platas, y el director
general, Federico Martínez Feria,
charlan con él, mientras que desde Italia lo llama Leoncini, con el
que compartió vestuario en la Juventus durante muchos años y que
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es el mejor de los muchos amigos
que ha dejado en Turín. Del Sol le
dice con orgullo que la Ciudad Deportiva del Betis lleva su nombre y
Leoncini, con el que habla casi todas las semanas, le recuerda que en
Italia sigue siendo un ídolo. Allí llegó en el verano de 1962, pero antes
triunfó por todo lo alto en el Real
Madrid, que pagó 6’5 millones de
pesetas, más los traspasos de Martín Esperanza, Pallarés y Lloréns.
El amigo de
Di Stéfano
Hacía mucho tiempo que el Real
Madrid lo quería. Di Stéfano se lo
pedía constantemente a Bernabéu.
Era tal la devoción que la ‘Saeta
Rubia’ sentía por el bético que lo
invitaron a jugar un amistoso que
el Real Madrid disputó contra el
Santos de Pelé en homenaje a Miguel Muñoz el 17 de junio de 1959.
Lo había olvidado Del Sol, pero
se lo recuerda Manolo Rodríguez,
historiador del equipo verdiblanco. También jugó ese partido como
invitado Gainza, que estaba a punto de retirarse. Solo unos meses
después, Antonio Calderón y Raimundo Saporta llegaban a Sevilla
DEL SOL. El dios de nuestros padres
para ficharlo. El Betis disputaba un
amistoso contra el Tenerife y a Del
Sol lo hacen jugar a pesar de estar
lesionado. No le explican los motivos, pero después del partido Villamarín le pide que vaya a su casa.
¨Yo no sabía lo que pasaba. Fui
dispuesto a pedirle que me pagara
lo que me debía porque me quería
casar. Lo hablé con Mari, que entonces era mi novia y que había
venido al partido conmigo porque
no iba a jugar. Cuando la mujer
de Villamarín me dijo que sentía
mucho que me fuera, no entendía
nada, hasta que apareció don Benito y me comentó que me traspasaban al Madrid, que me fuera a
mi casa y no se lo dijera nadie. Al
día siguiente me llamaron y volé
a Madrid. En el aeropuerto me vio
un amigo y la noticia corrió como
la pólvora por Sevilla”, asegura
Del Sol, quien reconoce que ¨no
me costó ningún trabajo adaptarme al Real Madrid. Los conocía a
casi todos de la selección –siendo
jugador del Betis fue convocado
varias veces, aunque no llegó a
debutar- y al llegar allí se acercó
don Santiago Bernabeú y le dijo
a Di Stéfano que se había salido
SUMARIO
con las suyas, que ya tenía allí a
su amigo. Alfredo llevaba mucho
tiempo diciéndome que tenía que
fichar por el Real Madrid. Nos entendíamos muy bien en el campo y
fuera”.
Debuta ante el Barcelona en las
semifinales de la Copa de Europa
en un equipo formado por Domínguez, Marquitos, Santamaría, Pachín, Vidal, Antonio Ruiz, Herrera,
Del Sol, Di Stéfano, Puskas y Gento. Ganan 3-1 y Del Sol se convierte
en titular indiscutible en un equipo
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que conquista su quinta Copa de Europa consecutiva y
que asombra al mundo. La Juventus lo quiere, el Madrid necesita dinero para terminar su ciudad deportiva
y lo traspasa a pesar de las protestas de la afición en
1962. En Italia vive 10 años maravillosos, ocho en la
‘Vecchia Signora’ y dos en la Roma, pero la tierra tira
mucho y vuelve al Betis para jugar su último año como
profesional en el equipo de sus amores. Sufre mucho
porque se van a Segunda y reconoce que ese año “tuve
diferencias con Szusza y con algunos compañeros
porque nos estábamos jugando la vida y a algunos
parecía que les daba igual. En un campo hay que salir a morir siempre, y más por el Betis. Así se lo dije
a mis compañeros cuando íbamos para el campo en
SUMARIO
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Castellón. Teníamos un buen equipo, la base del que ganaría la Copa
en 1977, pero tal vez algunos eran
demasiado jóvenes. Le he dado muchas vueltas a ese descenso y no le
encuentro explicación”.
Años después se sacaría la espinita
que tenía clavada al conseguir como
entrenador del Betis el ascenso a Primera en 2001 tras sustituir a Fernando Vázquez en el banquillo a falta
de 13 jornadas. El Betis ganó 0-2 en
Jaén y Del Sol, que ya había entrenado al equipo de sus amores en las
últimas jornadas de la temporada
85-86 y durante toda la 86-87, volvió
a la secretaría técnica, pero ni en los
despachos ni en los banquillos fue
nunca plenamente feliz porque es y
seguirá siendo mientras viva futbolista, uno de los más grandes.
El Betis por encima
de todo
A pesar de que sus mayores éxitos
deportivos los consiguió en el Real
Madrid y la Juventus, tiene claras
sus preferencias: ¨El Betis es para
mí lo más grande. Lo que yo he vivido aquí no lo he vivido en ninguna parte. El Betis fue el que me dio
a conocer y le estaré eternamente
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agradecido. Ganar un partido con el
Betis es algo especial para mí; y las
derrotas las sufro mucho más. Los
sentimientos no tienen nada que ver
ni con el dinero ni con los títulos. Le
estoy muy agradecido al Real Madrid y
a la Juventus, que conmigo se comportaron de diez, pero el Betis es el Betis.
Ésta es mi casa, aquí he sido feliz. La
Ciudad Deportiva lleva mi nombre. Yo
le he dado mucho al Betis, pero el Betis me ha devuelto mucho más”.
Pisa el césped, recuerda a Adolfito
arreglando las botas, a los compañeros
que se han quedado por el camino, los
últimos Antonio Benítez y Sebastián
Alabanda, y mira esas gradas vacías
que muchas veces se llenaron solo para
verlo a él, que es historia viva del Betis.
Los recuerdos se le agolpan y no puede
ni quiere esconder sus emociones. Sesenta años ya desde que debutó con el
primer equipo y algunos más desde que
Pepe Valera y Manuel Cruz le hicieron
ver que había nacido para disfrutar y
sufrir en verdiblanco. Y ahí está, pensando en celebrar dentro de unos meses
otro ascenso pero reconociendo que “la
Segunda es muy complicada. Al Betis
le quieren ganar todos porque el Betis,
esté donde esté, es muy grande”.
Y tú, Luis, y tú.
SUMARIO
i
DEL SOL. El dios de nuestros padres
i Estampitas de los jugadores del Real Betis Balompié de la temporada
1959-60, sexto clasificado en Primera División.
SUMARIO
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Luis Carlos Peris
Publicado en ‘Relatos en verdiblanco’. Almuzara, 2007.
stamos en
una Sevilla surcada por las
vías del
tranvía,
decorada de escaparates a
los que aún no ha llegado
el neón y la semana se hace
eterna en los días sin solución de continuidad que
conforman la carrera hacia
el domingo en el colegio
que los Hermanos Maristas
tienen en la calle San Pablo,
junto al compás de la Magdalena. El séptimo día tarda
una eternidad en llegar, ya
que las clases no terminan
hasta bien entrada la tarde
del sábado, bueno, hasta las
primeras horas de la noche
del sábado y la dichosa semanita parece no tener fin.
E
Casi nada,
es domingo y juega
Del Sol
SUMARIO
Y en aquella ciudad tan
provinciana e intimista, de
círculos tan herméticos y en
la que todos conocen a casi
todos, el fútbol vive en un
desequilibrio que ya hasta
parecía una especie de equilibrio inestable. A la sazón,
ser bético no era fácil, pero
que nada fácil, que hasta
los hermanos maristas, casi
todos navarros, habían tomado partido por el equipo
de su paisano Juan Arza, el
gran icono futbolístico en
aquella Sevilla de tranvías
que no llegaban nunca, de
relojes aparentemente parados y de escaparates opacos.
También quedaba mucha
huella, demasiada, de la
posguerra. Estamos en una
triste época en la que ser
DEL SOL. El dios de nuestros padres
del Betis estaba muy mal visto por
los que habían impuesto un orden
nuevo en la España única, grande
y libre; una España que ni era tan
grande y en la que, por supuesto, se
gozaba de libertad, pero de una libertad sui géneris en la que se podía
elegir entre leer el Marca o no, pero
poco más. Una España reaccionaria,
de obediencia incondicional al mando, y en ese ecuador de los cincuenta ejercer de bético era tan complicado como ingrato. Además, las
diferencia existentes, con la cruda
realidad de un equipo de la ciudad
en Primera y el otro recién ascendido de Tercera, que eran abismales. Y
es que podía pasar que amaneciese
el lunes con la tragedia fatal de que
el equipo propio había perdido en
Andújar con el Iliturgi, el I-li-tur-gi,
y que a la misma hora le hubiese
dado sopas con honda el otro equipo de la ciudad al Real Madrid de
Alfredo di Stéfano, nada más y nada
menos que al Madrid, un equipo
sobrenatural y auténticamente galáctico que estaba germinando justo
en aquellos tiempos su indudable
supremacía continental.
Complicada cuestión la que tenía
que sobrellevar nuestro protagonisSUMARIO
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i El tran-
vía, medio
de transporte habitual en
la Sevilla
de los años
50.
ta, digamos que de nombre Miguel, un niño
del barrio de San Vicente con tendencia a
la Puerta Real que había mamado Betis en
su casa y que tampoco iba a desviarse de la
querencia natural por una mera cuestión de
coyuntura, ya que la ascensión tendría que
ocurrir algún día, ¿o es que alguien podría
dudar de que el Betis iba a volver por donde
solía andar antes que otros muy cercanos lo
lograsen? Sería quizá más tarde que pronto, pero seguro estaba aquel chiquillo de que
las cosas volverían a ser como le contaba su
padre que habían sido antes de que el país
se liase a tiros en la mayor barbarie ocurrida
entre hermanos. Que por aquellos tiempos
entonces prebélicos también llamados de la
República, el Betis era tan grande que hasta
i Un
i Alineaciones de un Betis-Iliturgi en Tercera
con Portu, único jugador que pasó con el Betis
por las tres categorías.
marcador
de goleada verdiblanca
en casa.
El visitante se
colocaba
en primer lugar.
DEL SOL. El dios de nuestros padres
había sido campeón de Liga y subcampeón de Copa a la vez que había alcanzado la División de Honor
antes que ningún otro a este lado de
Despeñaperros según se mira desde
el centro de todas las Españas en
aquella España tan única, tan grande y tan poco libre.
Y en estos menesteres de sordidez
estábamos cuando iba a surgir un
futbolista milagro, quizá el futbolista más prodigioso que haya aparecido en esta Sevilla nuestra, Luis Del
Sol Cascajares. Debutó una tarde de
octubre en Tetuán formando un auténtico laberinto que a Sevilla llegó
por el siempre moroso teletipo del
boca a boca, para que el Betis ganase al primer equipo del Protectorado, el Atlético de Tetuán. Y ese suceso se iba a combinar con que ese
mismo domingo el otro equipo de
la ciudad, la hegemónica tropa que
entrenaba Helenio Herrera y presidía Sánchez Pizjuán, Ramón para
sus correligionarios, había perdido
en casa con el modestísimo Alavés.
Ese conjunto de coincidencias hizo
que aquel lunes fuese todo muy
distinto y que el talante de nuestro
Miguelito cuando hace su entrada
en el colegio no fuese, precisamente,
SUMARIO
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propio de lunes. Entró el chiquillo
como gustándose, cargando la suerte y con el cuerpo pidiéndole coles,
como si en vez de tragarse el cáliz
que significaba un lunes de colegio
estuviese haciendo el paseíllo de su
vida en una muy particular y muy
verde Maestranza que te quiero
verde.
Acababa de nacer un ídolo inconmensurable, un futbolista irrepetible que en adelante propiciaría que
el domingo que jugase el Betis en
casa fuese como un domingo doble,
más domingo que nunca. Es domingo y juega Del Sol iba a convertirse en una especie de ilusionante
plataforma de lanzamiento para un
gran día que hasta amanecía antes de lo previsto, también para un
i Crónica del ABC del partido de Luis del Sol con el
i Una de las primeras fichas
de Del Sol con el Betis.
Real Betis disputado en Tetuán en octubre de 1954.
DEL SOL. El dios de nuestros padres
lucía rayado en verde, blanco y
verde. En esta Sevilla de tiempo
aparentemente inamovible y muy
pocas prisas sólo Juanito Arza,
Marcelo Campanal, Ramoní, Busto, Guillamón, Doménech o Pepillo tienen predicamento, no hay
sitio para nadie que no profese esa
Alineación del Betis contra el Xerez religión que hasta osan decir sus
prosélitos que es la única verdadeperteneciente a la Liga de1956.
ra. Una distancia enorme la existente entre equipos que habían sido
argumento en el que ya no era ninrivales de verdad desde la cuna.
guna utopía pensar en que la larga
Ahora, ese Betis que fue el primer
travesía del desierto tenía decididaandaluz en subir a Primera, en jugar
mente fijada su fecha de caducidad
una final de Copa y en ganar una
y que la tierra de promisión estaba a
Liga, se consumía en los avernos
la vuelta de la esquina. Atrás quedamás inhabitables sólo alentado por
rían Larache, Utrera, Andújar, Manel manque pierda fatalistamente
zanares, Tomelloso, Valdepeñas, La
entusiasta de una afición única que
Línea, Jaén, Algeciras, Úbeda, Jerez,
jamás iba a dejarlo solo… pero en
Ceuta, Tánger, Almendralejo, Cáesto apareció Del Sol, Luis Del Sol
ceres, Badajoz, Mérida, Puente Gey Cascajares por parte de su madre
nil… Demasiadas muescas de sordipara lo que guste mandar y para
dez en una canana que parece que
que se hiciese la luz de la ilusión.
no va a terminar de agotar sus baLa irrupción del Gordito del Empallas, pero no hay mal que cien años
me al final de la Palmera hizo que
dure… ni cuerpo que lo resista.
el bético recobrase muchas de las
Había transcurrido un tiempo exganas de vivir que se le habían ido
cesivamente largo, con demasiados
quedando tiradas en las cunetas
futbolistas que no tenían tirón alde un desierto que se iba haciendo
guno bajo la enseña entrañable del
insoportablemente interminable. Ya
camisolín de loneta y botones que
SUMARIO
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i
i Luis del Sol, luciendo la casaca verdiblan-
ca. Por aquellos años figuraba en el pecho el
escudo circular con la corona.
DEL SOL. El dios de nuestros padres
i Victoria bética en el Torneo To-
rre del Oro.
ese futbolista chaparro, con un físico compuesto de nervio y hueso y
que se movía alentado por dos motores que funcionaban a propulsión
a chorro donde el resto de los mortales tienen simplemente pulmones,
ya había encandilado al personal en
un trofeo Torre del Oro. El Torre del
Oro fue el primer trofeo de verano
que se jugó en España con luz artificial y que se programaba cada mes
de julio en el Campo del Puerto,
justo donde hoy se alza el Seminario, lindando con la Palmera, por el
ecuador del camino que lleva al santuario de los béticos.
Cada quince días iba aumentando
la concurrencia en el Stadium de la
Exposición, como si las catacumbas
estuviesen despoblándose. Todos
van al conjuro de ese pelotero que
viste el camisolín número once para
que el fútbol rústico de la categoría
vaya arrumbándose para combinar
SUMARIO
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el arabesco con el esfuerzo, la caCada quince días
rrera con el regate y la finta con la
Xerro
et fuga. Igeniba
aumentando
la
concurrencia
en el
intentona corajuda y con éxito para
debit et aut untur?
Stadium
la Exquitarle el balón al contrario. Toro
Quiatur?de
Dicillum
posición,
como
en rodeo propio y torazo en el ajeaut officae
ea si
las catacumbas
no, Del Sol se ha curtido en campos
sam, ut exernam
estuviesen
despode mucha polvareda, primero con el
faciende Todos
omnis van
blándose.
Andalucía en la Forestal, el potrero
dolum
aute
alquodit
conjuro
de ese
que los ferroviarios utilizan en la
pelotero
queet
viste
vidigendae
qui
eloccupti
camisolín
númeBarqueta, y más tarde con el Utrera
ulpa
est
roetonce
para
que
en el campo sito en el colegio saleacimi,
serum
el fútbol rústico de
siano de dicha localidad. Y con ese
sit,
officienim
eos
la
categoría
vaya
aprendizaje, a Del Sol le resbalan las
parciet quiste-para
arrumbándose
intenciones de cuantos tuercebotas
mAximus,
que
combinar
elad
arabesDel
Sol
y
Beato,
en
se cruzan en su camino, hasta el
co
con el esfuerzo,
inctempora
incia la
el ISA.
punto de que más de uno se va en
carrera
conpe
eldem
regate
cumquis
et
yrem
la finta
con la incamilla prácticamente hemipléjico.
fuga.
tentona corajuda...
Es lo que le pasaría a Gorospe, lateral del Alavés, cuando en un amago
de Luis quiso acudir a dos sitios a la
vez para que los lumbares dijesen
basta y la osamenta le crujiese de
forma tan dolorosa como ridícula.
Ya Miguelito, el personaje de esta
historia de beticismo contumaz y a
contracorriente, ese niño de colegio
sevillano que le temía al lunes como
a una vara verde, se ha venido arriba. Es otro tiempo el que amanece
Colegio de los Salesianos, donde juy lo mejor es que lo hace sin vuelta
gaba el Utrera en el que militó Luis del
atrás; Del Sol resulta ser un espectáSol.
culo por sí mismo y aunque el Betis
i
i
DEL SOL. El dios de nuestros padres
no termina de relanzarse en busca
de la tierra prometida, el mero hecho de haberle visto el domingo
hace que se pueda sostener el lunes
un principio de discusión con los
que hasta entonces ejercían el más
sobrado de los soliloquios y la más
insufrible de las suficiencias. Y en
el recreo, en ese patio enlosado que
da la calle San Pablo y en el que a la
cancha de baloncesto la frisa una de
las primeras pistas de hockey de la
ciudad, el caballito de Juan Arza va
dejándole sitio en el corazón de los
niños a la finta de Luis Del Sol. Una
finta la de Del Sol única a la hora de
desbordar rivales en esos partidos
de todos contra todos en los que
nuestro protagonista, ese niño que
ya no estaba tan harto de estar harto, tiene la pelota en sus pies durante tanto tiempo como el que más.
Nuestro niño bético, con todo lo que
sepa a Betis incrustado en la masa
de la sangre, ya no tiene únicamente
a Kubala y a Di Stéfano como exclusivos ídolos de su infancia. Una contrariedad grande que Luis Del Sol
aún no salga en las estampitas y en
el equipo de platillos se hacen imposibles él y ese Betis que no termina
de escapar del infierno infamante
SUMARIO
trece barras / 19
i Plantilla del Real Betis Balompié de la temporada 1957-58.
de la Segunda División. Las cosas
siguen pintando prosaicas, apenas
hay lugar para la lírica, y hasta se
abre la veda entre los tuercebotas
más significados de dicho submundo para la caza del genio bético.
Un día es Pantaleón el del Mestalla el que llega a Heliópolis con la
orden de dar cuenta del brillante
futbolista, otro es uno del España
de Tánger que tiene como religión
única la de que pase el balón o el
contrario, nunca los dos, y cuando
le forma la que le forma a Toni el
del Oviedo, ya sabe nuestro joven
bético de la Puerta Real que su
nuevo ídolo está capacitado para
gestas mucho más principales para
bien de todos, especialmente para
esa legión de béticos que aguarda
con impaciencia la tierra de promisión.
Castaño, Areta, Vila, Sobrado y Del
Sol es la delantera con la que el
Betis afronta de la mano de Antonio Barrios la más fiable Operación
Retorno y Miguelito, nuestro joven
protagonista, ya discutirá en igualdad de condiciones cuando cierto
lunes, a la vuelta de un partido en
Jerez, se hace lenguas explicándole
a los que quieran escucharle que
Barrios, el entrenador que hará
el milagro de pegarle el definitivo
corte de mangas a la larga pesadilla, ha rescatado a Del Sol de la
banda para incrustarlo en el centro
del campo. A partir de ese domingo de enero de 1958 en el desaparecido estadio Domecq de Jerez
Castaño,
Areta, Vila,
Sobrado y
Del Sol es
la delantera
con la que el
Betis afronta
de la mano
de Antonio
Barrios la
más fiable
Operación
Retorno...
DEL SOL. El dios de nuestros padres
trece barras / 20
i A la izquierda, un clásico futbolín. Arriba, Zárraga, Kopa y Marsal.
de la Frontera, jamás Luis Del
Sol va a volver a ser extremo
izquierdo para convertirse en
figura grande de los centrocampistas españoles aun no habiendo pisado todavía los campos de
la Primera División.
Cómo presumía ya de futbolista
propio nuestro joven bético…
En aquel tiempo, el Real Madrid
llegaba a Sevilla en la mañana
del sábado tras haber hecho el
viaje en coche cama durante
toda la madrugada desde la madrileña estación de Atocha a la
de Plaza de Armas para plantar
el cuartel general en el hotel
Colón, aledaño al colegio de los
Maristas. En una de estas vísperas de partido del Madrid en
Nervión, nuestro niño, recién
SUMARIO
salido ya de noche del colegio,
fue con unos compañeros a
jugar al futbolín en el cercano
Billares Sevilla, sito en la Plaza
de la Magdalena. La sorpresa
fue tremenda, ya que se disponían a echar una partida tres
jugadores del Madrid, tres de
esos futbolistas que salían a
diario en el Marca. Kopa, Marsal
y Zárraga se aparecían ante los
ojos desorbitados de Miguelito;
como sólo eran tres pidieron un
cuarto jugador y allá que fue él
con toda la ilusión del mundo
a jugar con aquellos ídolos que
ya eran campeones de Europa,
pero lo cierto es que la fidelidad
del chaval era tan grande que
todos acabaron hablando de
cierto jugador del Betis que se
llamaba Luis Del Sol y que con
el tiempo compartiría vestuario
con alguno de ellos en el gran
coliseo madridista de la Castellana.
Pero a pesar de que al final de
la Palmera cada vez acudía más
gente al señuelo brillante de Del
Sol, a pesar de que cada dos
domingos había motivos más
que suficientes para el lunes sacar pecho en el colegio, el Betis
continuaba su dolorosamente
larga travesía de un desierto al
que no se le veía fin. El Madrid,
el Barcelona, el Valencia o aquel
Atlético de Bilbao que era el
segundo equipo de casi todos
los españoles por aquel entonces, sólo venían una vez al año
a Sevilla y, por supuesto, ni se
asomaban por la Palmera, por
ese final de la Palmera donde el
Betis de Pepe Valera o de Carlos
Iturraspe seguía enfrentándose
a equipos de nulo pedigrí y de
nombres prosaicos a más no poder. Eran rivales, casi todos, de
pueblo, unos equipos de pueblo
que los compañeros del otro
equipo de la ciudad esgrimían
para quitarle importancia a lo
que Del Sol realizaba a lo largo
y ancho de la cancha todos los
domingos, absolutamente todos
los domingos.
Iban cayendo tacos de almanaque y, gran noticia que convulsionó a Miguelito y a su entorno, Del Sol se convertía en el
primer futbolista de Segunda
que era convocado para el equi-
DEL SOL. El dios de nuestros padres
i Luis del Sol, con la selección
española.
po nacional. Entonces, el recién
nombrado seleccionador, Manolo
Meana, dispuso que hubiese una selección alternativa a la absoluta, la
selección B, para que los jóvenes talentos fuesen tomando cuerpo en las
lides internacionales. Del Sol, junto
a los sevillistas Campanal, Valero y
Pepillo, integró un equipo que jugó
unos amistosos en Grecia y en Egipto. Después de veinte largos años, el
Betis volvía a contar para el equipo
nacional y eso que aún continuaba
en Segunda. Tras las internacionalidades de Lecue, Areso y Aedo, Luis
Del Sol vestía la roja aunque fuese
en el equipo B, qué más daba si
SUMARIO
hasta entonces cualquier cosa así
era inimaginable. Y aunque también ganaba el Sevilla ese partido
por superioridad numérica, el mero
hecho de que un futbolista del Betis saliese ya en letras de tipografía
destacada en el Marca era motivo
más que suficiente como para sostener una discusión de fútbol con los
que continuaban mirando al Betis
con desprecio y muy por encima del
hombro.
Partidos de fútbol, clases, algo de
baloncesto, clases, una partida de
pelota a mano en el frontón que
los maristas más navarros habían
ordenado construir en un rincón
del patio, más clases, ejercicios espirituales en la vecina iglesia de la
Magdalena para acostarse en el convencimiento de que el infierno esperaba, el infierno de verdad y no ese
de la Segunda División del que el
Betis estaba intentando huir sin éxito ni se sabe ya desde cuándo. Era
así el día, la semana, el mes, todo el
curso de este niño bético que tenía
a Del Sol como universo cuando los
libros lo permitían. Tras lo de Jerez,
el Betis cogía carrerilla hacia la tierra prometida, nadie podía pararlo
ya y fue, precisamente ante ese Je-
trece barras / 21
rez de Juan Araújo en la jornada final, cuando el equipo bético celebraba la fiesta mayor jamás celebrada en
esta ciudad, el retorno del Real Betis Balompié, ese Betis
presidido por Benito Villamarín, entrenado por Antonio
Barrios y con un profeta en la yerba llamado Luis Del
Sol, a la Primera División.
Castaño, Sobrado, Vila, Areta y Del Sol para el recuerdo, pero nadie como este último para este niño ya no
tan niño, Miguel ya para todos, que ha de examinarse
de Reválida de Cuarto un día después de la gran celebración del ascenso. Las cosas empiezan a tomar un
cariz muy distinto, ha salido el sol y cuando ve la luz el
calendario de Liga, Miguel ve, lleno de alegría, como el
nombre de su equipo del alma figura de igual a igual,
en el mismo plano que Real Madrid, Barcelona, Valencia, Atlético de Madrid y de Bilbao, Español, Real Socie-
i Plantilla del Real Betis Balompié de la temporada
1957-58, antes del inolvidable encuentro con el Xerez CD.
DEL SOL. El dios de nuestros padres
dad, Sevilla… Y la mirada anhelante
en busca de la fecha soñada, ¿cuándo con el Sevilla? Fantástico, qué
pronto, a la segunda jornada, el 21
de septiembre de 1958 en todos los
calendarios para confluir en Eduardo Dato sin número, ahora van a
ver cómo es de verdad Luis Del Sol,
ya se van a enterar cómo es el gallo
de pelea de ese muchacho de los
maristas, cómo se las gasta ese futbolista grandioso que ha quemado
mucha parte de su vida en campos de polvareda para que, al fin,
aparezca con luz propia en el gran
escaparate del fútbol, la Primera
División… y con el Betis, de verde,
blanco y verde con el Betis.
Todos los presagios se quedan pequeños y la ilusión que supone ver
a Del Sol en el gran escaparate va
a convertirse en una explosión de
júbilo. La segunda jornada está ahí,
pero nunca antes que la primera, y
es con el Granada de Carlos Gomes,
un portero portugués que hará que
sus colegas abandonen los jerseys
chillones para imitarle y embutirse
en negro desde los pies al cuello.
Dos goles del húngaro Kuszman
propician la primera victoria del Betis en su retorno a Primera y en una
SUMARIO
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i Los béticos tomaron el campo al acabar el Be-
tis-Xerez. La fiesta por el regreso a Primera.
i Luis del Sol,
en una de
sus clásicas
imágenes en
verdiblanco.
El equipo ya
no lleva camisolín, sino
camiseta, y el
escudo recupera el triángulo y las
barras.
semana… la tierra de promisión más
auténtica, a estrenar el estadio que
acaba de construir el Sevilla al lado
del viejo Nervión. Y qué semana,
qué nervios, qué larga se iba haciendo mientras se convertía en un misterio insondable dónde había concentrado el Betis a sus jugadores sin
que el periodismo de la época aclarase cuál había sido el lugar elegido
por el omnímodo Benito Villamarín
para recluir a su equipo con vistas a
la gran gesta tanto tiempo soñada.
Todo llega en esta vida, incluso la
arribada a la tierra prometida, que
esa tarde del 21 de septiembre de
1958 se ubica en Nervión, justo por
el tercio medio de una arteria llamada Eduardo Dato y que tiene un
bulevar como medianera por el que
discurre la vía del tranvía que llega
hasta la Gran Plaza. Domingo último
de aquel verano, calor, luminoso día
y Sevilla de fiesta porque toda, no
media como era habitual hasta entonces, tiene motivos para el gozo.
Estreno oficial de un estadio que es
copia a escala de Chamartín y llenazo en el inconcluso recinto cuando
los capitanes del Sevilla y del Betis
se reencuentran tras quince años sin
saludarse. Testifica el navarro Daniel
DEL SOL. El dios de nuestros padres
i Los capita-
nes Juan Arza
y Luis del Sol
se abrazan antes del primer
partido oficial
en el Sánchez
Pizjuán. Una
fiesta en verdiblanco con
una fecha
para la historia: 21 de
septiembre de
1958.
i Los cuatro goles al Sevilla, vistos por Andrés Mar-
tínez de León.
SUMARIO
trece barras / 23
Zariquiegui el abrazo de Juanito
Arza y de Luis Del Sol mientas a
nuestro personaje se le llenan los
ojos de lágrimas viendo como llora
su padre, ambos de pie en la tribuna
que da a Eduardo Dato, la de Gol
Sur.
“Mira, papá, allí está Villamarín,
en la última fila de Preferencia, cerca de nosotros”, le decía Miguel a
su padre con los ojos como platos,
como queriéndose beber por las
pupilas todo lo que daba de sí aquella tarde tan extraordinaria del reencuentro con tantas y tantas cosas.
Y, efectivamente, el padre de Miguel
comprobaba que en esa localidad,
muy lejos del palco presidencial,
estaba don Benito vestido con traje
azul junto a su mujer y unos matrimonios amigos entre los que no podía faltar Antonio Picchi. Ahora sólo
faltaba que la pelota echase a rodar
para que se enterasen todos como
se las gasta Luis Del Sol. “Papá ¿y
tú crees que ese Ríos, el defensa
central nuevo, será bueno?”. “Creo
que sí, pues Andrés me ha dicho
que lo ha visto en los entrenamientos y que vale mucho”. Andrés era,
claro, Andrés Aranda, santo y seña
del beticismo de los días más difíci-
les, de los años más largos, y amigo
inseparable, por cierto, del padre de
Miguel.
La inquietud se desbocaba de forma
definitiva muy pronto, justo a los
dos minutos de juego Del Sol iba a
coger el balón en la línea divisoria
de ambos terrenos, oteó el horizonte, condujo unos metros y viendo
que nadie la pedía, que ningún compañero se desmarcaba, se decidió a
tirar y el balón entró como un rayo
en aquella portería recién estrenada
de Gol Sur, la portería donde Miguel
estaba con su padre. Los sentimientos se dispararon, las lágrimas del
padre ya no eran las únicas en aquel
espacio lleno de béticos, todos se
abrazaban como posesos y aunque
quedaba mucho por jugarse, quien
da primero da dos veces y aquel gol
de Luis Del Sol en la última tarde de
verano del 58 significaba tanto que
bien pudiera decirse que fue el gol
por antonomasia en la vida de muchos miles de aficionados al fútbol
que profesaban ya por entonces la
hermosísima fe verde, blanca y verde del Real Betis Balompié.
La tarde se remató como bien sabido es, rotundamente tintada en
verde que te quiero verde. El Sevilla
DEL SOL. El dios de nuestros padres
trece barras / 24
i A la izquierda,
el marcador final
en el Sánchez
Pizjuán. A la
derecha, un once
con letras de oro:
Otero, Valderas,
Ríos, Isidro, Paqui
y Portu; agachados:
Castaño, Azpeitia,
Kuszman, Areta y
Del Sol.
le daba la vuelta al marcador
al filo del descanso, pero Pepe
Kuszman en dos ocasiones y
Esteban Areta en otra dejaron
la cosa en un 2-4 que sonaba como sabía, a gloria pura.
Y Miguel se fue con su padre
Eduardo Dato abajo, sin prisa
alguna, saboreando cada jugada, volviendo a vivir ese partido
con el que tantas noches se había soñado. “Hay que ver, papá,
cómo es de bueno ese Ríos, ¿y
el segundo tiempo que ha hecho
Portu marcando a Szalay? Cómo
complicó el partido Valderas
con el penalti que hizo tan inoportuno y tan absurdo; Isidro
estuvo mejor cuando Barrios
lo pasó a lateral izquierdo para
SUMARIO
que Portu marcase al húngaro,
¿verdad? Y Kuszman, qué bueno
es, ya lleva cuatro goles en dos
partidos, qué buen fichaje”. Y el
padre asentía y cada estaba vez
más cerca la Puerta de la Carne
para rematar una de las etapas
que componían la ruta hacia la
Puerta Real.
Había amanecido definitivamente para la religión de las trece
barras, al domingo siguiente
llegaba a Heliópolis el Atlético
de Bilbao para que nuevamente
se enfocase con alborozo la llegada de este nuevo día en que
también jugaba Del Sol. Y hay
que ver la que le montó a Orúe,
cuatro a cero al descanso en el
debut de un delantero memora-
ble pero que sólo duró un año
de verdiblanco, Wilson Moreira,
cómo se desgañitaba Carmelo
llamando a gente que le defendiesen de aquel temporal llamado Betis, qué mal lo pasó Gainza con Portu… Fue el día que
el Betis ya no vistió camisolín
de loneta, sino elástica, que era
lo que ya se llevaba en todo el
fútbol, que el camisolín se retiró
de la circulación como reliquia
sagrada tras el 2-4 del domingo
anterior en evitación de alguna
maniobra desmañada o, peor
aún, sacrílega.
Del Sol, Del Sol, Del Sol como
icono indiscutible de todo bético
que se preciase. Del Sol formaba
un lío cada domingo, pero hubo
un último día, un día tan amargo que Miguel estuvo a punto
de hacer lo que otros muchos
hicieron, romper en pedazos
el carné del Betis. ¿El carné del
Betis a pedazos? Sí, el carné del
Betis en mil pedazos porque
Benito Villamarín había vendido
a Luis Del Sol al Real Madrid.
Corrían los primeros días de
abril del 60 y tras un partidazo
en que Del Sol se enfrentó prácticamente solo al Barcelona impresionante de Helenio Herrera,
Villamarín lo traspasaba al Real
Madrid tras declarar el día anterior que no sólo no lo vendería,
sino que andaba buscando a ver
dónde había otro Del Sol para
ficharlo.
DEL SOL. El dios de nuestros padres
Y aquella tarde en que a Del Sol
se le cayeron las rayas verdes de
la camiseta, a Miguel se le cayó el
mundo encima, pero fue incapaz
de romper el carné del Betis; cómo
iba él, que había mamado Betis en
su casa del barrio de San Vicente,
a romper lo que tanto quería. Días
después, Del Sol debutaba en el Real
Madrid en una semifinal de Copa de
Europa contra el Barcelona. Se despidió del Betis con el Barça y debutaba en el Madrid también contra
aquel grandísimo Barça, todopoderoso Barça de Luis Suárez, Kubala,
Eulogio Martínez, Ramallets, Kocsis,
Czibor, Villaverde, Evaristo, Segarra,
Gensana…
¿Pero otra vez Del Sol? Se preguntaba Helenio Herrera en el banquillo
del Bernabéu viendo cómo el ex
bético arrasaba a toda su poderosa
escuadra. En quince días había tenido que sufrir a Del Sol dos veces
y aún quedaba otra, la de la vuelta
en el Camp Nou, que resultaría aún
más dolorosa que la anterior.
Ya sin rayas la camiseta de Del Sol,
la admiración que despertaba en Miguel era la misma, pero el fervor había disminuido considerablemente.
Aquella semifinal de Copa de EuroSUMARIO
trece barras / 25
pa la vivió él por la radio y cuando
los elogios de Matías Prats eran dedicados a Luis, la alegría se fundía
en rabia por la maldita hora en que
don Benito había decidido quitarle las rayas verdes a la camiseta de
un futbolista grandioso, el mejor de
todos, llamado Luis del Sol. A partir
de ahí, el domingo amanecía siendo
domingo, pero sin Del Sol era otra
cosa muy distinta, bien distinta, extraordinariamente distinta, ya era un
domingo sin más, nada más que un
domingo cualquiera. Y es que la camiseta de Luis Del Sol se había quedado sin rayas. Doce años después
volvían las rayas verdes a la camiseta del gran ídolo, pero ya estábamos
ante una historia muy distinta.
i El gran Madrid liderado por Alfredo Di Stéfano.
i
i A la izquierda, el Real Madrid de Del Sol levanta la quinta Copa de Europa
del club blanco. A la derecha, Luis con la camiseta merengue.
DEL SOL. El dios de nuestros padres
SUMARIO
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DEL SOL. El dios de nuestros padres
SUMARIO
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DEL SOL. El dios de nuestros padres
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Rogelio: “Luis del Sol era
el ídolo de la afición del Betis”
Es otro de los ídolos de la historia bética, uno de los cinco
grandes. Rogelio, casi un
chiquillo, llega al Betis en el
57, cuando Del Sol ya era la
referencia del equipo. “Luis
era un monstruo, tenía unas
condiciones enormes, física
y técnicamente. Era el ídolo
de la afición del Betis y en
aquella plantilla tenía una
gran personalidad. Esa misma
personalidad que le permitió
triunfar en un Real Madrid
con Di Stéfano, Gento, Pus-
SUMARIO
kas… eso no está al alcance
de cualquiera”. Luis regresaría
de la Roma al Betis en la temporada 1972-73. No fue un año
fácil para el equipo, que acabaría descendiendo. “Aquel año
descendimos y fue una temporada muy difícil. Luis venía
de la Roma y estaba el beticismo ilusionado, pero el año
no nos salió”. Al igual que Del
Sol, Rogelio lo ha sido prácticamente todo en el Real Betis
Balompié, dentro y fuera de los
terrenos de juegos. “Llegué en
el 57 y me fui en el 2000, yo
creo que es algo”, señala Rogelio, santo y seña del Real Betis
Balompié.
DEL SOL. El dios de nuestros padres
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Pachín: “Luis fue fundamental en la
conquista de la quinta Copa de Europa”
Enríque Pérez ‘Pachín’
compartió vestuarios y títulos
con Del Sol en el Real Madrid
del 60 al 62. “Luis es muy recordado en el Real Madrid.
Llegó del Betis con un cartel
muy importante. Yo me medí
a él jugando en Osasuna y él
en el Betis y era un jugador
muy muy completo, un centrocampista absoluto, aunque
en el Betis jugaba por la derecha. Técnicamente era bue-
SUMARIO
nísimo, con un gran regate y
corría por todo el campo”. Y
junto a todos ellos, Di Stéfano. “Alfredo estaba encantado con él y le tenía que estar
agradecido eternamente, le
quitaba mucho trabajo. Al
Real Madrid llegó y ya era
titular indiscutible, al igual
que lo fue después en la selección. Fue fundamental en la
conquista de la quinta Copa
de Europa”. Pachín llegaría a
jugar en el Betis en el 68. “Los
recuerdos de mi temporada en
el Betis no fueron muy buenos. Teníamos mejor plantilla
que equipo, pero nos quedamos en Segunda. A muchos
de mis compañeros le gustaba
más hacer un caño que marcar un gol. Y eso no es bueno
en el fútbol”. Y un deseo para
la efemérides de su amigo Luis
del Sol. “Que estos 60 años los
disfrute con su familia y que
tengamos salud para pasar
muchos más”.
DEL SOL. El dios de nuestros padres
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Santamaría: “En vez de dos
pulmones tenía 18, era un espectáculo”
tante a su llegada a Chamartín,
no necesitó la llamada adaptación. “Llegó al Real Madrid y
se integró perfectamente, logrando pronto la titularidad.
Trabajaba tanto que compartía el esfuerzo de todos.
Era un equipo que iba a una.
Aunque Alfredo tenía más
prestigio que ninguno, corría
y trabajaba como el que más.
En aquel equipo había quien
dirigía atrás y quien dirigía
adelante y sólo cabía ganar”.
Tras triunfar en Chamartín, Del
Sol hizo un carrerón en Italia y
Grande de Nacional de Monregresó a retirarse en su casa.
tevideo, del Real Madrid y de
las selecciones uruguaya y es- “Se tuvo que ir del Real Mapañola. José Emilio San- drid por un asunto económico
tamaría fue compañero y es del club y fue figura grande
amigo de Del Sol. “Luis es una en Italia. Regresó al Betis porque era muy bético. Tenía un
persona extraordinaria, alegre, risueño, con una mentali- grupo de seis o siete amigos
dad muy limpia. Como futbo- magníficos y todos eran muy
béticos. Si hay un homenaje
lista era fabuloso. En vez de
dos pulmones tenía 18, era un merecido es éste y me alegro
mucho por él, por mi amigo
espectáculo, una maravilla”.
Luis”.
Del Sol pronto se hizo impor-
SUMARIO
DEL SOL. El dios de nuestros padres
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Leoncini: “Sigue siendo una leyenda
para los tifosi de la Juventus”
al año siguiente ya se vino a
Italia. Era un centrocampista sin una mancha negra en
todo el partido. Física y técnicamente era óptimo, y muy
tenaz contra el contrario”. Se
forjaba así la leyenda de Settepulmoni, que da nombre a una
de las estrellas amarillas que
rodean el Juventus Stadium.
“Era agónico y leal, con una
entrega a los compañeros que
no se veía. En Italia entraban
Gianfranco Leoncini fue entonces 50.000 personas en
compañero de Luis del Sol du- los campos y si íbamos fuera éramos 11 contra 50.000.
rante toda su época en la Juventus. Compartía el centro del Teníamos que ser uno en el
ataque y en la defensa y Luis
campo con él y forjaron una
amistad que se mantiene muy nunca cometía un fallo. Por
eso sigue siendo una leyenda
viva. “Es más que un amipara los tifosi de la Juventus”.
go para mí. Una semana me
Y el gran Leo de la Vecchia
llama él y otra le llamo yo,
Signora no puede estar más ortenemos un contacto permanente”. La llegada al Comuna- gulloso de su amigo Luis. “Que
la ciudad deportiva del Betis
le se forjó en los tres partidos
tenga su nombre es sólo una
de la eliminatoria de Copa de
Europa Juventus-Real Madrid. muestra de lo grande que fue
Del Sol”.
“La Juventus lo vio claro y
SUMARIO
DEL SOL. El dios de nuestros padres
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Javier López: “Compartir el vestuario
con Luis del Sol fue un privilegio”
no iba con el pecho inflado
y parecía mentira lo cercano
que era con lo que había sido
en el fútbol”. De las características futbolísticas del mito de
San Jerónimo recuerda especialmente el regate. “Tenía un
movimiento de cintura especial, muy bonito y coordinado, que se llevaba al rival por
delante”. Aquel año no fue fácil para el Betis. La ilusión por
la llegada de Del Sol a Heliópolis se vio truncada por un descenso. “Fue una temporada
En la vuelta de Luis del Sol al que no fue fácil. Antes de ir
Real Betis Balompié en la 72- a jugar contra el Real Madrid
allí le dio un pisotón Bios73 coincidió con un joven
Javier López. “Para noso- ca en el entrenamiento y no
tros fue un boom que regresa- pudo jugar el partido. Para él
fue un borrón en su carrera,
ra Del Sol al Betis. Yo coleccionaba a Luis en los cromos pero la experiencia que nos
aportó sí fue satisfactoria”.
y era un ídolo para todos los
Un Del Sol con una dimensión
chavales de España, cuando
se fue a la Juventus fue todo mundial: “En el Real Madrid
un acontecimiento. Compartir de Di Stéfano y Puskas no
el vestuario con él fue un pri- estaba eclipsado. Y eso ya es
decir mucho”.
vilegio. Vino un tío normal,
SUMARIO
DEL SOL. El dios de nuestros padres
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Luis del Sol, el socio de Di Stéfano
a primera vez que oí hablar de Del
Sol fue como parte de una alineación imposible, ocurrente y procaz,
que corría entre los niños a finales
de los cincuenta, y enlazaba nombres un poco a lo loco, hasta completar un significado chusco y chingo. Teré; Ponte Braga, Verde; Bueno, Manolín; Murillo, Pinto,
Losco, Jones, Del Sol. O sea: Teré: ponte
braga verde; bueno, Manolín. Y después,
como relato aislado o complementario,
según se quiera ver, ‘Murillo pintó los cojones del sol’.
Ni Murillo, el gran pintor de Purísimas y
arrapiezos sevillanos, ni don Luis del Sol
Cascajares merecían estar en nuestras torpes lenguas. Ni los demás, claro. Pero yo
aún recuerdo aquello y cómo alguien me
explicaba que Del Sol era de los varios que
coincidían en su puesto. Del Sol era, en
efecto, extremo izquierda, como se decía
antes. No extremo izquierdo: extremo izquierda. Jugaba en el Betis.
SUMARIO
L
Alfredo Relaño
Director de AS
Así que cuando saltó al Madrid, ya tenía yo noticias
de él. Compuso una delantera sensacional, Canario
(o Herrera, muerto prematuramente), él, Di Stéfano,
Puskas y Gento. Esos fueron los que le metieron siete
al Eintracht en Glasgow y luego cinco (ese día jugó
Herrera, y no Canario) al Peñarol en el Bernabéu.
El madridista le quiso mucho. Jugó muy bien, reunió
todo lo que el aficionado al Madrid desea.
Era, como Di Stéfano, mitad artista y mitad guerrero. Tenía una técnica superior
y era incansable. Pena que entrando los
sesenta el Madrid se viera en apuros económicos, como les pasó al Barça y al Atlético. Entonces el dinero estaba en Italia.
Luis Suárez, estrella del Barça y Balón de
Oro de 1960, se fue al Inter al término de
la 60-61. Un año más tarde le tocó salir a
Luis Del Sol, con gran pena para Di Stéfano. Primero se le traspasó al Torino, pero
un movimiento de protesta en la ciudad
porque el equipo gastara tanto dinero teniendo desatendidas a las familias de los
jugadores estrellados en Superga en el 49,
DEL SOL. El dios de nuestros padres
echó la operación para atrás. Hubo
un cambio de agujas y Del Sol acabó
en la Juventus. Mejor para él, pienso.
El Torino, poco después, haría lo que
no hizo meses antes, y acabaría contratando a Peiró, del Atlético.
Allí, en Italia, bautizaron a Del Sol
como ‘Siete Pulmones’, por su resistencia, y aquí entendimos bien que
lo hicieran. En cierto modo le perdimos, pero siguió en la memoria de
los madridistas. Tengo muy presente
un partido Atlético-Juventus, de Copa
de Ferias, jugado en el Bernabéu en
años en que el Metropolitano estaba
decrépito y el Atlético manejó la idea
de jugar sus partidos en Chamartín.
La presencia de Del Sol en la Juve
fue lo bastante para que el madridista se entregara al equipo italiano, y
el proyecto de compartir estadio se
esfumó.
Más adelante volvió al Betis. Por allí
sigue. Por Madrid se le ve poco. Pero
los viejos aficionados sacan a relucir
su nombre con frecuencia. Di Stéfano
le llamaba “mi compadre”. Fue, pienso, el único interior que pudo compensarle la ausencia de Rial. Jugó
poco en el Madrid, pero representó
exactamente lo que el Madrid quiere
ser.
SUMARIO
i
trece barras / 34
EL BETIS DE LA MEMORIA
“Las cosas
trece barras / 36
chiquititas
son las más grandes”.
Beltrán Pérez García
Delegado de Participación Ciudadana
del Ayuntamiento de Sevilla
sí toreaba
con voz suave el maestro
Curro Romero, el día
que recogió
el Premio Taurino del Ayuntamiento de Sevilla en el Salón
Colón de la Casa Grande, casi
pidiendo disculpas por haber
sido distinguido.
Aquella tarde, el Faraón de Camas nos regaló una trasposición de su toreo a palabras que
dibujaban naturales de natural
majestad, verónicas de grandeza ignorada y desplantes al
relumbrón del éxito impostor.
Aquella tarde, las palabras del
SUMARIO
A
Maestro sonaban a susurros de
capote acariciando el albero, y
sus silencios, al compás ahogado del galope de Rafael Gordillo por la banda izquierda del
Villamarín.
Las marcas que nuestro Glorioso ha dejado en el alma y en la
memoria de cualquier bético,
además de indelebles, llegan a
ser infinitas puesto que no quedan grabadas a golpe de goles,
copas o victorias. El alma y la
memoria de un bético se forja
al fuego del éxito soñado, al
golpe del martillo de la realidad y al humo de las ilusiones
que se evaporan hundidas en
el agua del fracaso o de la des-
EL BETIS DE LA MEMORIA
trece barras / 37
plantan en el regadío del éxito. Esa tarde
la fórmula –éxito y fracaso, dolor y placer,
ilusión y decepción- volvió a repartir felicidad entre decenas de miles de aficionados,
que con las lágrimas asomando a los ojos,
empujadas por la tristeza a su vez veían al
eterno “3” –a su querido Rafael- marcharse
tras haber recorrido los caminos del éxito
hasta donde nunca antes un hijo del Villamarín había llegado.
Alegría y tristeza a partes iguales, aunque
siempre, con el ánimo decantado hacía la
alegría. La alegría de ser Béticos.
Hoy día, muchos años después, quien tiene la suerte de conocer a esa leyenda viva
del Beticismo que es Rafael Gordillo, al
hablar con él, observar sus gestos y verlo
Beltrán Pérez, a la izquierda, celebra con unos amigos la clasificación copera del sonreír siempre, puede por un momento ceBetis tras eliminar al FC Barcelona el 3 de febrero de 1994.
rrar los ojos y volver a esa tarde en la que
incluso se pedía –una vez retirado- su conpedida. Por eso sabemos apurar la copa de vía puedo ver unas medias tan bajas que
se confundían con la hierba, una mano en vocatoria por el seleccionador nacional de
la alegría de los buenos momentos, con la
turno; volver al galope desgarbado de las
avidez de quien no sabe cuándo podrá vol- la cadera y la cabeza gacha por el peso de
una corona de la que sólo los grandes rehú- grandes tardes de beticismo y volver a esa
ver a beber de ella o si te la arrancaran de
forma de ser que si hubiese que definirla,
yen, cuando todos insisten en que la luzlas manos a medio sorbo.
podría, definirse de…. puramente Bética.
Cerrando los ojos y haciendo correr las ma- can.
Porque Rafael Gordillo es tal y como toreaAquel día se despedía Rafael Gordillo denecillas del reloj en sentido inverso, pueba en su banda al natural, porque Curro
jando un vacío de hielo en el Betis y en el
do llegar a oír el rugido de la afición que
corazón de su fiel afición. Esa tarde se mez- Romero habla como torea, porque Rafael es
rebosaba de los graderíos del Villamarín,
Curro, porque Curro es el Betis y porque el
rogándole a un Vendaval que no dejase de claron los elementos esenciales que comBetis es el Betis, digan lo que digan el Betis
soplar azotando las defensas de los equipos ponen la tierra seca, donde el verde crece
es el más grande... porque las cosas chiquicon vigor incomprendido y envidiado por
rivales.
Entre miles de insignias verdiblancas, toda- aquéllos que sólo ven crecer sus frutos si se titas son las más grandes.
SUMARIO
i
i
Cejudo: De ‘Rosi’ a la peña
bética ‘El Membrillo’
trece barras / 38
Se marchó entre lágrimas sabiendo que
su camino y el del Betis debían separarse.
Quería ser futbolista y con 23 años un
filial no era su lugar. Ceuta, Las Palmas,
Pamplona... Lo tenía tan claro que fue
allí donde podía seguir creciendo y tras
un periplo de 3565 kilómetros ha vuelto
a Heliópolis con más de un centenar de
partidos en Primera y siendo el ejemplo
más claro para los canteranos de que
querer es poder.
SUMARIO
ENTREVISTA / CEJUDO
trece barras / 39
Mercedes Torrecillas
Reportaje gráfico: Paco Puentes
lvaro Cejudo ha vuelto
a casa. Y lo
ha hecho en
las duras. En
las maduras
todo es más fácil, pero al interior diestro de Puente Genil
nunca le pesaron los retos. Por
eso, después de haberse labrado una sólida carrera lejos del
Villamarín y teniendo opciones
de haber seguido jugando en
Primera no se lo pensó. “Era
el momento. Yo no quería
venir al Betis estando ya de
vuelta, por eso rechacé ofertas económicas superiores o
para jugar en Primera”. Ha
mandado el corazón. En su
fuero interno siempre mantuvo
la esperanza de vestir de nuevo la camiseta que se enfundó
por primera vez un día de la
primavera del 99 con apenas
14 años… y por sorpresa. “Me
acuerdo perfectamente. Mi
padre me dijo que echara el
macuto de entrenar al coche y
yo pensaba que me llevaba a
SUMARIO
Á
i Álvaro Cejudo, rodeado de un círculo, en el equipo cadete
del Real Betis, entrenado por Paco Millán, el responsable de
que viniera a Heliópolis.
mi equipo de entonces, el San
Fermín-Puente Genil. Pero
cuando vi que cogíamos la
carretera para Sevilla me di
cuenta que íbamos a otro sitio. Fue entonces cuando me
dijo que Paco Millán había
llamado y que querían que
viniera a entrenar aquí”.
Así comenzó el ‘romance’ entre Álvaro Cejudo y el Real
Betis. Probó con el Infantil de
segundo año varios días y en
verano se incorporó al Cadete.
“Al principio seguimos viviendo en Puente Genil y mi
padre y mi tío me traían un
par de días a la semana a los
entrenamientos y luego a los
partidos”, recuerda. Francisco
Cejudo, el padre de Álvaro,
siempre ha sabido guiar a su
hijo, sabía que con esfuerzo
podría llegar y de ahí que decidiese trasladarse con toda la
familia a Sevilla ampliando el
área geográfica de su negocio.
El entonces chaval de 14 años
no olvidará nunca sus primeros pasos en Heliópolis.
“Ahora veo las instalaciones
y el cambio es brutal. En mi
época todos los niños jugábamos en campos de albero
y los caminos eran de tierra.
Recuerdo la que se montaba
al entrar los coches… Cuando
llegabas a División de Honor
y jugabas en césped… ahí ya
te decías: estoy más cerca de
llegar”.
De aquellos primeros años
tiene un partido grabado: “En
el segundo año de Cadete fuimos campeones de Andalucía
por primera vez en Almería
ENTREVISTA / CEJUDO
trece barras / 40
i Celebración de una victoria bética.
con Javi Blanco de entrenador”. La cantera siempre fue
para él como una gran familia,
en la que, como no podía ser
de otra forma, ocupa un lugar
muy especial Rosi (la dueña
de la tiendecita de la calle Tajo
que ha sido el lugar de reunión de los canteranos desde
hace décadas). “Allí coincidíamos todos, los pequeños,
los grandes, los entrenadores.
Cuando nos mudamos a Sevilla yo cogía el autobús para
venir a entrenar con Diego
Segura y Parra, después nos
íbamos a Rosi y llegaba a
casa a las 11 de la noche”.
SUMARIO
Fueron tiempos muy felices
para Álvaro, en los que disfrutó y aprendió. Paco Millán,
Javi Blanco, Currito, Paqueca,
José Luis Mena, Valenzuela,
Parra, Pedro Buenaventura y
Chaparro. Cejudo recita de
carrerilla todos los técnicos
que tuvo durante los nueve
años de formación en la cantera del Real Betis Balompié. A
todos ellos les está agradecido
por haberle inculcado unos
valores. Para él, los que definen al jugador de cantera del
Betis están claro: “La base del
beticismo es la humildad, el
trabajo en el día a día. Es la
única forma de disfrutar”.
Cejudo asegura haber visto
calidad a raudales entre los
cientos de jugadores con los
que compartió escalafones
inferiores o a los que vio jugar
y entrenar. “Veía a Joaquín,
que estaba en el División de
Honor y también me acuerdo
de Antoñito, que era buenísimo, Tati Maldonado… He
visto a muchos más, muy
buenos jugadores, algunos de
ellos mejores que futbolistas
que han llegado a Primera,
pero por una cuestión u otra
no han llegado tan alto. Hay
cosas que cuestan más, hay
ENTREVISTA / CEJUDO
que cuidarse, entrenar bien
y además tener esa pizca de
suerte…”, reconoce.
Consciente de que muchos
compañeros no han tenido esa
fortuna, el cordobés se siente un privilegiado. Pero en su
caso a la suerte le acompañó
mucho tesón, tener las ideas
muy claras y moverse siempre
anteponiendo los criterios deportivos a cualquier otro interés. Por eso acabó marchándose. Se le pone la carne de
gallina cuando le recordamos
lo mucho que lloró cuando en
la soledad de casa meditaba
la decisión. Y es que la procesión en aquel momento iba
por dentro. Acababa de lograr
el ascenso a Segunda B con el
primer filial, entonces entrenado por Chaparro. “Éramos
un grupito muy bueno. Jugamos la promoción con el Reus
y nunca olvidaré el primer
partido. Fue la única vez que
jugué en el Villamarín y fue
muy especial. Ganamos 2-0,
marcamos Carlos Valverde y
yo. En la vuelta quedamos
1-2”, también con protagonisSUMARIO
trece barras / 41
i Cejudo, en un Betis donde jugaban los dos hermanos melli-
zos Andreu: el defensa Juan Alberto (Melli) y el portero Víctor Manuel.
mo para el extremo que puso
un centro que remató a gol
Juande.
La euforia del ascenso y el
hecho de haberse proclamado máximo goleador del Betis
B con 10 tantos (temporada
2006-07) no alteró el camino que había decidido emprender. “Tenía 23 años y no
podía seguir en el filial. Ya
llevaba un tiempo ayudando
también a mi padre en su empresa y tenía que tomar una
decisión. Había hablado con
el Club, pero ellos no cambiaban su idea y yo tenía que
avanzar. Aquel Betis era el
Betis de Champions, tenía a
Joaquín, Oliveira, era el Betis
que podía tener a Denilson…
Yo quería sentir el fútbol de
verdad y en un filial no es lo
mismo”. Por eso, cuando vio
que en casa no podía seguir
subiendo peldaños y después
de derramar muchas lágrimas
le dijo sí al Ceuta. Iba a militar en Segunda B, pero “era
fútbol profesional y me la jugué”. José Enrique Díaz puso
mucho interés en incorporar-
ENTREVISTA / CEJUDO
lo al club caballa, donde
cuajó una buena campaña
y de hecho tuvo opciones
de ascenso hasta el último
partido. De allí se marchó
a Las Palmas, “porque
Diego Quintero, mi entrenador del Ceuta se fue de
segundo con Kresic”. En
el equipo canario también
trabajó a las órdenes de
Paco Jémez, “un fenómeno” y siguió creciendo.
De Las Palmas retornó a
la península, pero mucho
más al norte de Sevilla.
“Yo acababa contrato en
junio y ya hubo algo con el Betis, pero en
enero me fichó Osasuna”. En Pamplona
se curtió aún más. “Allí tienen las ideas
muy claras, todo lo que envuelve al club
es como una familia porque saben de su
posición y de lo complicado que es competir con otros clubes dado el nivel económico que hay de mitad de tabla hacia
arriba. Por eso, allí tienen claro que hay
que trabajar, apretar y correr mucho”.
Su filosofía pasa por aprovechar el día a
día y quizá ésa haya sido la clave de su
regreso: “Yo pensaba, ojalá. Esa posibilidad apareció alguna vez pero nunca
fue factible hasta ahora. Yo tenía esa
espinita clavada. Además tengo mucha
SUMARIO
gente bética a mi alrededor y yo quería
que fuese ahora que sé que puedo rendir
bien”. Se ruboriza al contarlo pero cuando
se le pregunta qué tiene el Betis tan diferente a los demás clubes acaba por relatar
un detalle: “Recuerdo estar en Pamplona,
en casa con mi mujer viendo la Voz Kids.
Salió una niña a cantar (Judit) y cuando
la eliminaron, pese a lo mal que debió
pasarlo, lo que le sale es un ‘Viva el Betis’. Me emocioné. El Betis es mucho más
que eso, pero eso sólo pasa en el Betis.
En ese momento le dije a mi mujer: ‘Tenemos que volver a allí’”.
El verano ha sido duro pero poco a poco
espera recuperar su mejor nivel. “En los
trece barras / 42
primeros partidos tenía la
adrenalina por las nubes
y eso suplía, pero la verdad es que no he hecho
pretemporada y la situación era complicada sin
saber si mi equipo iba a
desaparecer. Sé que me
queda coger ritmo y en
ello estoy”, comenta Cejudo, al que no le faltan apoyos.
Diego Segura, Parra, Migue
(el hermano de Arzu), los
dos Melli, Juande, Arana, Parra, Raúl González.
Compañeros han tenido
muchos y muy buenos. Con la mayoría
mantiene el contacto. Organizan alguna
reunión en verano y han creado la ‘Peña
Bética El Membrillo’. De momento sólo es
un grupo de whatsapp, pero quién sabe si
acabará siendo una peña de exjugadores
béticos de cantera.
Precisamente a todos los que ahora vienen
por detrás, Álvaro Cejudo sólo se atreve a
darles un consejo: “Es muy difícil llegar
al primer equipo, pero si no se desaniman y tienen ilusión les será más fácil.
Yo he llegado de una manera un tanto
extraña. Quién me lo iba a decir a mí
cuando salí con 23 años… pero lo he
conseguido”.
i
CANTERA
trece barras / 43
Pedro Buenaventura:
“Nuestro objetivo es crear un
perfil de ‘jugador Betis’ y educar
en la competición”
Pedro Buenaventura cumple su cuarto mes al frente de la cantera del Real Betis Balompié. Con más
de 25 años de experiencia en los banquillos y en la
dirección deportiva de 15 clubes, regresa a nuestro
Club con un firme propósito: Consolidar un modelo
propio
SUMARIO
CANTERA
-¿Qué supone para Pedro Buenaventura ser director deportivo de
la cantera del Real Betis?
-El mayor reto de mi carrera deportiva, con la responsabilidad añadida de dirigir un amplio equipo de
trabajo con el objetivo principal
de diseñar y consolidar un modelo
propio con el sello del Real Betis.
En las primeras conversaciones que
mantengo con miembros del Consejo hay una plena coincidencia de
sus ideas con las que yo defiendo.
-¿Cómo ha sido su desembarco?
-El Club consideró que la dirección
deportiva anterior encabezada por
Luis Fradua y yo debíamos establecer un periodo de transición en el
que yo pudiera recibir toda la información del trabajo que se estaba
realizando. Esto se produjo durante
el mes de junio. Durante este tiempo analizamos el trabajo realizado,
decidimos mantener lo que consideramos que se ajustaba a nuestras
ideas e iniciamos nuestro trabajo. A
partir de ese momento se incorporaron los miembros de mi equipo y
desde entonces las prioridades propias del inicio de la nueva temporada han marcado nuestro día día.
Ahora es cuando de verdad estamos
SUMARIO
trece barras / 44
poniendo en marcha nuestras propuestas.
-El nuevo organigrama ya está
constituido. ¿Cuál es su diseño y
por qué?
-Está constituido por cinco áreas
específicas: captación, análisis del
rendimiento, porteros, etapas y social. Hemos mantenido parte de la
estructura, añadiendo dos nuevas
áreas, la del análisis de rendimiento
y la social. Además, hemos modificado el funcionamiento del área de
captación. También se está potenciando la representación institucional de nuestra Cantera, una labor
que encabeza Juan García Soriano.
-¿Cuáles son las funciones de las
dos nuevas áreas?
-Contamos con Pedro Píriz, que es
profesor titular de la Universidad de
Sevilla de las asignaturas Entrenamiento Deportivo I-II y Prácticas de
Rendimiento Deportivo en el departamento de Educación Física y Deporte. Él es nuestro responsable del
análisis del rendimiento deportivo:
diseña, controla y analiza todo lo
referente al entrenamiento y la competición. Asimismo, hemos creado
el área social para que haya un canal directo y permanente entre las
CANTERA
familias de los jugadores y el propio
Club.
-En cuanto al área de Captación,
¿qué novedades incluye?
-La primera es la de tener una persona responsable de toda la estructura (José Luis Mena). Hemos
considerado que nuestro proceso de
captación debe estar estandarizado
poniendo mucho más énfasis en
el control de las zonas geográficas
más cercanas. Para el buen funcionamiento de esta área contamos
con una amplia red de ojeadores
internos y externos.
SUMARIO
trece barras / 45
-Es una tendencia actual tratar
de implantar un modelo de juego común en la cantera, ¿tiene en
mente proponer uno para el Real
Betis?
-Esta pregunta ha generado y seguirá generando mucho debate y los
técnicos nunca nos ponemos del
todo de acuerdo. En nuestro caso
consideramos que más importante
que el modelo de juego es educar
en la competición y crear un perfil
de ‘jugador Betis’. Nuestro futbolista
deberá conjugar el talento y la competitividad.
-¿Cuáles son los objetivos establecidos para
cada una de las etapas?
-Empecemos por los más pequeños.
Claramente hay que diferenciar entre las etapas más formativas y las que se acercan más al
rendimiento. En nuestros equipos de Fútbol-7 e
infantiles no debemos considerar los resultados
deportivos como un objetivo expreso, aunque,
por lógica, si tenemos buenos jugadores los
equipos suelen ganar. En esas edades el proceso formativo es algo mucho más amplio e importante. Atendemos aspectos técnico-tácticos
básicos acercándonos constantemente a situaciones reales de juego. Fomentamos que nuestros niños disfruten del juego a través del talento sin olvidar la parte competitiva.
Pasamos a la siguiente etapa
En la etapa de desarrollo empezamos a establecer algunos objetivos competitivos más concretos. Resumiendo
mucho, enseñamos a nuestros jóvenes jugadores que
además del talento individual debemos mejorar los
aspectos colectivos del juego. La propia competición les
va demandando manejar mejor los fundamentos tácticos en defensa y en ataque.
-Llegamos a los equipos mayores, en concreto División de Honor Juvenil y Betis B
-Como hablamos de los equipos más cercanos a nuestro objetivo final debemos ser exigentes, tanto en el
proceso de selección de los jugadores que llegan a estos
equipos como en su rendimiento individual y colectivo.
Nuestro Club demanda que los jugadores que formen
estos equipos estén preparados para poder dar el último
CANTERA
salto. Todas las personas que trabajamos con estos jugadores debemos
orientarlos sobre el ámbito profesional que pretenden alcanzar.
Yo considero que nuestro equipo
de División de Honor Juvenil debe
pelear por la consecución de los
campeonatos. Y en cuanto al Betis
B, no me gusta caer en el conformismo de apostar sólo por la permanencia. Este equipo tiene que
aprender a competir en la Segunda
división B sin límite clasificatorio.
Los jugadores que ya están en esta
etapa deben asumir que el primer
equipo los puede necesitar en cualquier momento y ello requiere una
exigente preparación y conocer su
oficio.
No podemos olvidar tampoco que
nuestro equipo Sénior Femenino
tiene un objetivo claramente marcado para esta temporada, que es el
ascenso.
Merino, Capi, Jaime, Poli, Chano,
Juanito, Bornes, Salva, Arzu, Dani.
Ha crecido el número de técnicos
que han sido jugadores del primer
equipo y, en muchos casos, formados en la cantera verdiblanca…
Primero, indicar que siguen trabajando con nosotros el 80% de los
SUMARIO
trece barras / 46
Las vivencias de los técnicos, preparadores físicos y
responsables de las diferentes áreas que actualmente constituyen la estructura de cantera del Real Betis
Balompié pueden simbolizarse numéricamente en
los siguientes datos:
128 temporadas como jugadores de la cantera
111 temporadas como técnicos de la cantera
66 temporadas como futbolistas del primer equipo
5 capitanes de la primera plantilla
4 temporadas como técnicos del primer equipo
técnicos de la etapa anterior. Lo que
sí ha habido son bastantes modificaciones en cuanto a las funciones
de los mismos. José Luis Mena,
Gustavo Sánchez y Manolo Alba
han dejado de entrenar para ser
coordinadores-responsables y sólo
se han marchado cuatro primeros
entrenadores.
Respecto a los técnicos, yo añadiría a todos esos nombres los de
Pedro Morilla, Tadeo, Caro, León,
Pedro Muñoz, López Bernal, Alberto Martín, Emilio Fajardo, Agustín
Bizcocho, Rafa Ríos etc., que también se criaron futbolísticamente en
la cantera del Betis. Consideramos
que todos ellos tienen la suficiente
preparación para inculcar nuestros
valores.
-Para que el proyecto pueda seguir
creciendo, ¿qué necesitaría la cantera?
-Valoramos positivamente la inversión que se está haciendo desde el
Club en la mejora de la Ciudad Deportiva, aunque todos soñamos y
anhelamos la posibilidad de contar
con más campos. Y por encima de
todo, lo que dará valor a nuestro
trabajo es llenar el Betis de jugadores formados en nuestros equipos.
i
CANTERA
trece barras / 47
- Pedro Buenaventura, director deportivo de cantera.
- Juan García Soriano, representación institucional.
El nuevo organigrama diseñado para la cantera del Real Betis Ba- - Pedro Tomás G. Píriz, responsable área análisis rendimiento.
- José Luis Mena, responsable área captación.
lompié cuenta con cinco áreas específicas que van desde la captación hasta lo social, al frente de las cuales se encuentran profe- - Antonio Blanco, ojeador etapa competición.
- José Francisco Wanceulen, ojeador etapa formación.
sionales cualificados que, desde sus respectivos ámbitos, aúnan
- José Luis Moreno, coordinador de etapas.
esfuerzos para alcanzar una finalidad principal: proyectar juga- Gustavo Sánchez, coordinador fútbol-11.
dores para la primera plantilla del Club. En cualquier caso, tan
- Manuel Alba, coordinador fútbol-7.
importante como el fin es el proceso, en el que se busca el crecimiento continuo de cada uno de los futbolistas a nivel deportivo y - David Relaño, responsable área de porteros.
- María del Mar Fernández, responsable fútbol femenino.
personal.
ORGANIGRAMA TÉCNICO DE LA CANTERA
SUMARIO
CANTERA
SUMARIO
trece barras / 48
BEÍTA,
UN REFUERZO
CON DOBLE
RESPONSABILIDAD
La extremeña Beatriz Parra
firmó este pasado verano
con el RBB Féminas como
futbolista del primer equipo
y entrenadora del Infantil
femenino. Ha comenzado
la temporada como un tiro,
marcando cuatro goles en
tres partidos.
FÚTBOL FEMENINO
trece barras / 51
David Ligero
Reportaje fotográfico: David Ligero
eatriz Parra Salas (Beíta), nació
el 31 de Julio de
1987 en la capital extremeña de
Badajoz aunque
pasó la mayor parte de su infancia
en Almendralejo, lugar de residencia de gran parte de su familia.
Parte fundamental en este nuevo
Betis también en femenino, la entrenadora y coordinadora de RBB
Féminas, María Pry, ha confiado en
ella como refuerzo de lujo en una
doble tarea. A sus 27 años de edad,
la extremeña puede considerarse
una veterana en nuestro deporte pero con una ilusión renovada
gracias a los nuevos retos que se
le presentan. Como futbolista del
primer equipo, aportará templanza
e inteligencia en los momentos de
nerviosismo además de calidad y
peligro en los últimos metros. Como
entrenadora del Infantil femenino,
Beíta -con titulación de nivel 2-, tratará de aleccionar a las más jóvenes
con su experiencia y conocimienSUMARIO
B
i Beita, en la reciente victoria por 9-0 ante el Nervión.
to, además de servir como claro ejemplo por
su condición de futbolista del primer plantel.
Con tan solo 8 añitos, Bea cambió los toques
de balón en una plazoleta por el albero de los
terrenos de juego. Ahora lleva casi 19 años en
la práctica de este deporte a todos los niveles.
-¿Cómo ha sido su evolución deportiva?
-Los primeros recuerdos que tengo son en
la calle con los amigos, ellos tienen mucha
culpa de que hoy pueda hacer esta entrevista. Empecé jugando de delantera en el Guadalupe, el equipo de mi colegio, hasta que
la Federación me lo permitió. Pasaron un
par de años hasta que firmé por un equipo
femenino, y mientras tanto me dediqué al
tenis. Firmé en Mérida por la Antigua, club
en el que milité durante siete temporadas
como extremo izquierdo. Por aquel entonces
era pequeña y tenía velocidad. No recuerdo
exactamente la temporada, pero con 14 años
debuté en Primera División. Después fui a
Olivenza, donde conseguimos hacer tres muy
buenas temporadas en Segunda y donde comencé a jugar de mediocentro o mediapunta.
Después fui al Sevilla, donde he militado cinco temporadas. Me costó mucho adaptarme a
FÚTBOL FEMENINO
la categoría, al ritmo de competición y a
los entrenamientos. Aprendí a competir
de verdad para finalmente recalar aquí
con vosotros, en el Real Betis Balompié,
un nuevo e ilusionante reto para mí.
-Lleva casi cinco años compatibilizando la práctica del futbol con los estudios lejos de su tierra y su familia.
¿Qué tal se lleva?
-Buff.... regular. Las dos últimas temporadas con el Olivenza no sabría decir
dónde pasaba más tiempo si en
Sevilla, en Badajoz o en el autobús.
Decantarme por un equipo aquí en
Sevilla me ha alejado más de mi familia, de mi vida en Badajoz y ha hecho
que me pierda muchos momentos, pero
fue mi decisión y estoy aquí porque
quiero, aquí soy feliz.
-¿Cómo es el día a día de Beíta?
-Pues esta temporada de momento tranquila. Me dedico al fútbol tanto en el
RRB Féminas como en la escuela de fútbol WPI, en la que llevo dos equipos: un
iniciación y un Benjamín. El resto del
día me busco la vida con mi profesión
como nutricionista que es lo que espero
que algún día no muy lejano me dé de
comer.
-Considerada uno de los mejores refuerzos del Betis para esta nueva temporada. ¿Qué cree que se espera de
SUMARIO
trece barras / 52
usted? y ¿qué puede ofrecer Beíta al
Betis?
-A parte de elevar la media de edad del
equipo, supongo que aportar mis cualidades a esta más que ilusionante plantilla. Con respecto a mi aportación, te
diría que veteranía, pero aún me llaman
Beíta y no me gusta esa palabra. Al final
de temporada se podrá sacar una conclusión al respecto.
-Después de algo más de dos meses
como futbolista y uno como entrenadora en el RBB Féminas. ¿Cuáles son
sus primeras impresiones?
-Con respecto al primer equipo, como
he dicho en la pregunta anterior, me
entusiasma la plantilla. Creo que el
nivel técnico de las jugadoras es muy
bueno. Con las infantiles estoy ilusionada. Me ha sorprendido mucho su disciplina y sus ganas. Da igual lo cansada
que esté ese día porque me transmiten
mucha energía.Con respecto al club,
me muestro bastante sorprendida por
el trato tan cercano y natural de toda la
familia bética.
-¿Ascenso con el primer equipo o ganar la Liga con el Infantil féminas?
-Eso ni se pregunta, pero ambos, por
supuesto.
-#aLa3LaVencida, es el hastag elegido
para esta temporada 2014-15 en las re-
trece barras / 53
i En
la imagen de arriba, Beita en un entrenamiento. En la foto inferior, celebración de su gol
ante el Algaidas.
SUMARIO
des sociales del RBB Féminas como frase de motivación en este tercer año en
la división de plata del
FutFem español. ¿Cree
que será el año definitivo para el ascenso?
Aunque sabemos que
es el objetivo que tenemos marcado, creo
que es pronto para hablar
del ascenso. Queda mucho camino
y siempre he creído que lo bonito
no es el final, sino el camino, por
lo tanto vamos a disfrutar de él.
-En la temporada 2011-12, Beíta
ascendió a la Primera División
con el Sevilla, con María Pry
como entrenadora. ¿Conoce las
claves del éxito? ¿Qué similitud
ve en este equipo con el de aquel
entonces?
-Ojalá. Si aquel año acertamos con
la clave, te diría que fueron la honestidad, el compañerismo, la alegría y todo lo que disfrutábamos de
cada momento que compartíamos,
ésa fue nuestra clave. Con respecto
a la similitud de ambas plantillas,
te diría que poca, aunque en este
nuevo proyecto en el Betis estamos
algunas de las de entonces. Aquella
plantilla era algo más veterana en
la media de edad. Si conseguimos
que este grupo adquiera todos esos
factores al máximo, el éxito no solo
será una posibilidad, sino una realidad.
Trece mini preguntas como
trece barras tiene nuestro escudo:
-Beíta: Perseverancia.
-Un color: El rojo (de la selección
española).
-Una comida: Los huevos fritos
con patatas, en honor a mi padre.
-Un número: Ahora, el 12.
-Fútbol: Vida.
-Betis: Oportunidad.
-Un ídolo/a: Deportivo, Steven Gerrard. No deportivo, mi madre y su
forma de pensar.
-Un hobby: El fútbol.
-FutFem: Una realidad.
-Un sueño: Tener a mi familia más
cerca.
-Una realidad: El fútbol femenino
en segundo plano.
-Una canción: Cualquiera de los
Beatles.
-Un partido: El del ascenso con mi
anterior equipo.
i
trece barras / 54
Descárgate aquí la foto de tu jugador favorito: Con el 24... Rubén Castro.
SUMARIO
REDES SOCIALES
trece barras / 56
vine.co/
ti
realbetisoficial
albe
e
r
@
ie
omp
l
a
b
s
RBetisO
ficial
@RBetisOficial realbetisbalomp
ieoficial
@realbetis_en
@HeliopolisRBB
La afición que nos hace grandes
Laura L. Reyna
l Real Betis Balompié siempre ha demostrado ser su afición, una afición
tan grande como leal, que ha llevado
el “manquepierda” por bandera desde
siempre. Nosotros, que hemos vivido y
respirado Betis desde que tenemos uso
de razón lo vemos con naturalidad, pero a veces nos olvidamos de lo sorprendente que es para alguien de fuera.
E
Dani Pacheco: “He notado una gran subida
en mi perfil de Twitter. Además, he recibido
muchísimos mensajes de ánimo y de apoyo,
lo que me ha hecho ver la exigencia de un
Club tan grande”
SUMARIO
Este es el caso de Piccini, que en la entrevista que le
hicimos en el número anterior de Trece Barras aseguró
que había podido comprobar el beticismo a través de sus
perfiles en Twitter o Instagram: “Las redes sociales me
han servido para confirmar aún más lo que supone ser
del Real Betis. Antes de fichar tenía 1.800 seguidores y
en tres días se convirtieron en 7.000”.
No obstante, no ha sido el único, y otros como Dani Pacheco, Molinero o Dani Giménez han podido comprobarlo también. “He notado una gran subida en mi perfil de
REDES SOCIALES
realbetis
b
trece barras / 57
alompie
oficial @RBetisOficial
@realbetis_en
@HeliopolisRBB
Piccini: “Las redes sociales me
han servido para confirmar aún
más lo que supone ser del Real
Betis”.
Twitter. Además, he recibido muchísimos mensajes de ánimo y de apoyo, lo
que me ha hecho ver la exigencia de un
Club tan grande”, comenta Dani Pacheco, quien ya tenía una gran cantidad de
seguidores en esta red social.
Junto con él, Dani Giménez también
ha sentido esta fiebre bética pero desde
una red social muy diferente, Facebook:
“Ahora tengo el doble de seguidores de
los que tenía antes y ya tengo el tope de
SUMARIO
vine.co/
RBetisO
ficial
amigos, por lo que no me deja aceptar a más gente. Lo cierto es que no
soy muy activo, pero lo tengo abierto
porque me gusta interactuar con el
aficionado. La pena es que es imposible contestarle a todos, pese a que
de vez en cuando saco tiempo para
responder mensajes”, comenta el portero bético.
Molinero, por su parte, nos cuenta
lo siguiente: “Twitter es la red social
que más uso y al llegar al Club tuve
Molinero: “Twitter es la
red social que más uso y
al llegar al Club tuve una
subida del triple”.
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una subida del triple. No escribo mucho aunque sí leo y estoy encantado
con el recibimiento que me han dado.
Aparte de este aumento, me llegaron
muchísimos mensajes de apoyo. Así
me di cuenta de que había llegado a
un Club muy grande con mucha gente
detrás”.
Un ejemplo más del alcance del beticismo por las nuevas tecnologías, donde el Club tiene perfiles en Facebook,
Twitter, Instagram, Vine, Youtube y
Tuenti. ¿Te unes a nosotros?
i
Dani Giménez: “Ahora tengo
el doble de seguidores de los
que tenía antes y ya tengo el
tope de amigos”.
LA HISTORIA MATERIAL
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La mesa de Benito Villamarín
i tuviera que exponer lo que representa esta mesa en
la historia de nuestro Club, muchos
conceptos aparecen en mi mente, pero hay uno
que prevalece sobre los demás: el
Espíritu del Betis.
Y para expresar con claridad a lo
que me refiero, la mejor muestra
de lo que significa este concepto,
la hizo en 1.959 el poeta Guillermo Muñiz Liáñez tras el histórico
ascenso del Real Betis Balompié a
la Primera División tras deambu-
s
Objeto: La mesa de trabajo del presidente
Benito Villamarín en el Real Betis Balompié.
Propiedad: Real Betis Balompié.
Ubicación: Sala de juntas del Estadio Benito
Villamarín.
SUMARIO
Benito Rivero Villamarín
LA HISTORIA MATERIAL
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lar durante 15 años por los campos de Segunda y Tercera división.
“Los jugadores de un Club, forman deportivo frente, cuerpo móvil del equipo, que
lucha fogoso siempre, porque es bonito
ganar, y es amargo, si se pierde y en el terreno de juego, se hace por ver si se vence,
si bien, también hace falta, ¡mucha falta!,
el factor suerte.
Con ímpetu desmedido, y contra adversas
corrientes, que por derecho propio, que
muchas veces se tiene, por avivar de alegría los colores blanco y verde, paso a paso
y palco a palco, con ilusión permanente,
hemos visto los arranques, ¡los equilibrios del Betis!, por la empinada montaña,
cúspide a la que se asciende, cuando van
todos fundidos, y al que les manda, obedecen.
Ahora bien: todo en la vida, su claro secreto tiene, complemento indispensable, que
entre cortinas se mueve, y que se llama El
Espíritu, sin el cual miles de veces, nada
es un hombre en el mundo, por mucho
que luche y sueñe.
Derecho, ¡mucho derecho! para triunfar
tenía el Betis, porque lo merece el nombre,
y Sevilla lo merece y exprimiendo los anhelos, con voluntad transparente llegó, por
fin, a la meta, y es forzoso convencerse,
que el valor que es positivo, por matemáticas leyes, llega donde se propone, contra
SUMARIO
los muchos reveses, que en el camino se
encuentran, y en donde menos se esperen.
Benito Villamarín, la juventud sonriente,
el jugador invisible, que hace más de lo
que puede, marcó los “tantos” triunfales,
que en cada pecho se meten, siendo el
ánimo constante, la actividad diligente, el
optimismo continuo, el transformador de
débiles, el íntimo locutor de sus simpáticas
huestes, y en fin, en una palabra, ¡el perfecto presidente! imperturbable en su sitio,
cuando lo “negro” sucede.
Benito Villamarín en hombros fue de la
gente, como el torero en su triunfo, después de burlar la suerte, y en el semblante
velado, por la emoción que sintiese, llevaba marcado el sello, ¡brillo de honor en
sus sienes!.
¡Victoria de jugadores que cumplieron sus
deberes, que en su descanso, orgullosos,
tienen la paz que merecen, Pero que dirán
“a unas”, porque la verdad comprenden,
que fue el motor impulsivo su mágico presidente. Mágico como la fuerza, que acaso del Cielo viene, que Dios manda a los
hombres que en su batalla flaquecen! Benito Villamarín tiene otro nombre solemne, premiando así sus desvelos, que hará
que su celo aumente…
Benito Villamarín, (para que todos se enteren), Se llamará desde ahora: ¡El Espíritu
del Betis!
i
CÓMO NOS VEN
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Cuando fuimos el Betis
César Sánchez
Redactor jefe de ‘Panenka’
ebía correr el mes de mayo de 1995.
Hacinados en un autocar, un grupo
de adolescentes de extrarradio nos
dirigíamos a un lugar del que lo ignorábamos todo, viviendo el pasaje más
cercano que tuvimos la mayoría a un
día normal en la vida de un futbolista profesional.
La escena no era infrecuente, pero sí lo éramos sus
protagonistas. En nuestro club de barrio, los viajes
para disputar torneos en el extranjero eran habituales, pero quedaban reservados a los equipos que más
despuntaban. Para aquellos que, a pesar de nuestra
ilusión, no jugábamos más que un papel de relleno en
el día a día de la entidad, ese tipo de
bicocas quedaban fuera de nuestro alcance. Pero vericuetos del destino que
todavía ignoro conjuraron en nuestro
favor y, ese año, los representantes del
club en el torneo de Marignane, ciudad dormitorio a las afueras de Marsella, seríamos nosotros, un conjunto
hecho de retazos que por apellido lucía una letramás cercana a la ‘Z’ que a
la ‘A’.
SUMARIO
D
“Muchos de
nosotros
éramos hijos
y nietos de
andaluces
que la
inmigración
había llevado
a Cataluña”.
La experiencia tenía múltiples caramelos: ir de viaje
con tus amigos al extranjero, medirte contra equipos
desconocidos, jugar en un terreno de juego de césped
natural, vivir en casas particulares de los chicos del
club anfitrión, etc...
Y ahí estábamos, cantando y riendo en el autocar. No
se por qué, pero a mí lo que más ilusión me hacía de
todo era el viaje de ida en autocar. La ilusión irrefrenable de 16 niños jugando a ser futbolistas explotaba
en ese lugar minúsculo y de gran resonancia creando
una atmósfera única. Ahora compadezco al chófer y a
los adultos que nos acompañaban. De hecho, la gran
mayoría volvimos afónicos del viaje con tanto alboroto. Canciones propias del club, clásicos de excursión infantil y algún que
otro improperio para llamar la atención eran el repertorio habitual, hasta
que de algún lugar salió un cántico
que nos cautivó.
“Soy del Betis / lo llevo en mi pensamiento / desde que era chiquitillo /
voy los domingos a verlo...”
El por qué ese estribillo se convirtió
en el himno de aquellos días tiene
CÓMO NOS VEN
SUMARIO
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múltiples factores. Muchos de nosotros éramos
hijos y nietos de andaluces que la inmigración
había llevado a Cataluña, así que el vínculo con
el sur todavía estaba muy presente. Tras Barça,
Madrid y Español, probablemente el verdiblanco era el conjunto con más seguidores en Barcelona y alrededores (imagino que debe seguir
siéndolo). Además, aquel año, el Betis era el
conjunto de moda. Tras tres cursos en segunda, había regresado a la élite como un trueno
de la mano de Serra Ferrer. Los Jaro, Roberto
Ríos, Alexis, Cuéllar o Sabas eran como nosotros, aquellos con los que nadie contaba y que
estaban muy cerca de emularnos y conseguir un
billete para Europa. Y para colmo, mientras desgastábamos esas estrofas pegadizas, íbamos superando rondas en el torneo sin encajar ningún
gol. A imagen y semejanza de nuestro querido
Betis, también nosotros defendíamos mejor que
nadie y superábamos a rivales supuestamente
superiores.
Guiños del destino, volvimos a casa con el tercer puesto (perdimos por penalties en semifinales) y la portería a cero, el mismo lugar que
ocuparon los verdiblancos al final de la temporada. En el momento posterior a la eliminación,
el mundo se nos vino encima por unos instantes. Pero alguien combinó el nombre de nuestro
club con el famoso ‘manque pierda’ y de golpe
nos devolvió la sonrisa.
Durante aquellos días, estuvimos totalmente
‘betizados’. Y, 20 años después, algo de aquel
sentimiento todavía perdura en mí.
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