Elisa Castel
Transcripción
Elisa Castel
Escuela de Lenguas Bíblicas, Clásicas y Orientales de la Facultad de Teología de Valencia Sección Egipcio Apertura del curso 2015-2016 CONFERENCIA Los templos de Sethy I y Ramsés II en Abidos Elisa Castel Asociación Española de Egiptología Miembro del Consejo Académico del Seminario Permanente de Historia y Filosofía de las Religiones de la Universidad UACJ 1 de octubre de 2015 a las 18:00 hs UCV- Sede San Juan y San Vicente (Salón de actos) C/ Jorge Juan nº 18 - 46004 Valencia ENTRADA LIBRE El extenso yacimiento de Abidos, de unos de 13 km2, fue capital del Nomo 8º del Alto Egipto y el lugar donde en el periodo Predinástico floreció el núcleo principal de la importante y avanzada cultura Amratiense o Nagada I, cuyos restos materiales dan fe de excelentes manifestaciones artísticas. El yacimiento tuvo uso durante un periodo muy largo de la historia pues incluso conserva restos de la dinastía XXX, lo que indica el fervor y la importancia de Abidos a lo largo de la historia. Pero tanto sus impresionantes tumbas tinitas con sus templos asociados, como los restos del Reino Antiguo o las construcciones funerarias del Reino Medio quedan eclipsadas ante la magnificencia del templo que durante del Reino Nuevo Sethy I edificó aquí. Conocido como Menmaatra feliz en Abidos el templo funerario del rey Sethy I tiene una planta en forma de “L” inversa y acoge algunos de los relieves más bellos y elegantes de los realizados en el Valle del Nilo, esculpidos y pintados por los mejores artesanos de la época. Los detalles de sus muros nos permiten admirar con precisión la joyería, el vestuario o las coronas y también los pasajes del importante culto diario. El santuario está estructurado en una zona principal de culto, donde en la parte más interna y sagrada se situaron siete capillas en lugar de una sola, como era habitual en los templos egipcios. En ellas se veneró a la triada osiriaca, al dios solar Ra, al propio Sethy deificado y fusionado al dios del Más Allá, al menfita Ptah y al tebano Amón; los principales dioses del panteón de aquel momento histórico, reuniendo y quizá podíamos decir dejando constancia, de la multiplicidad de divinidades del Valle del Nilo, aunque acentuando el culto osiriaco, el cual tiene sus propias e íntimas dependencias. Junto a este complejo sagrado se halla el Osirieium, un edificio inspirado en modelos antiguos en el que se ha creído identificar el cenotafio del rey. Es un ejemplo insólito concebido por Sethy I, diseñado para quedar bajo tierra, para hundirse en los dominios de Osiris, con el que Sethy deseaba fundirse. Y se decoró con enigmáticos libros funerarios más propios de una tumba que de un templo. Y se le dotó de canales para que parcialmente quedara sumergido por las creadoras aguas primordiales, origen de todo lo creado y fuente de renacimiento eterno. Como no podía ser de otro modo, Ramsés II, siguiendo el ejemplo de su padre Sethy, eligió Abidos para fundar un exquisito templo funerario, más pequeño que el de su padre que aún hoy conserva una excelente policromía. En él se grabó otra de la famosas Listas Reales de Abidos, la cual podemos admirar hoy en el Museo Británico.