Descargue la Memoria Visual de la exposición

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Ana perdió su hijo de veintiún años hace tres
meses. Al contrario de lo que dice la policía,
ella no cree que él estaba involucrado con
una de las Maras.
Juan se retiró de la pandilla Dieciocho
cuando se dividieron. Él podía vivir con
la imagen de la Mara Salvatrucha como
enemigo, pero no con que mataran a
antiguos amigos.
Cesar* sobrevivió a siete heridas de bala
luego de un ataque de la MS13, con veinte
años de edad es miembro activo del Barrio
18.
William* lleva el símbolo de la “Mara
Salvatrucha”escrito en la frente. Para él,
salir de su barrio significa un riesgo de
perder la vida.
Nahún murió. Con treinta años de edad,
no pudo o no quiso pagar el aumento de la
extorsión.
Todos ellos viven o vivieron en exceso de
violencia en El Salvador. Donde la extorsión,
las disputas territoriales y otras actividades
entre ambas bandas enemigas, Mara
Salvatrucha y Barrio Dieciocho terminan
en violencia y muerte.
Mi trabajo “Viviendo con la Violencia” (Mit
der Gewalt leben) muestra desde diferentes
perspectivas las condiciones de vida en las
comunidades de San Salvador.
* nombre cambiado / Name geändert
Durante enero y febrero 2014 estuve
tomando fotografías en San Salvador y
conociendo personas que viven entre la
violencia. Entre ellos había miembros
de las pandillas, quienes han sido
responsabilizados en gran parte por esa
violencia. Es comprensible que los más
jóvenes de las comunidades tengan cierta
fascinación por ellos. Entran con fuerza
y confianza, controlan gran parte del país
y crean una identidad con sus tatuajes. A
pesar del peligro, parece que ser miembro
de una de estas pandillas, es a menudo
la única alternativa para los jóvenes sin
perspectivas. Hablé también con víctimas
y fui a lugares donde ocurrieron crímenes,
con el fin de documentar esta situación
inaguantable en El Salvador y mostrarla en
esta exposición.
La violencia está presente en El Salvador
pero no lo controla todo. Las comunidades
no se comparan con una zona de guerra
forrada de cadáveres y a pesar de su
pobreza extrema, los que viven allí saben
cómo ayudarse y organizar su vida
cotidiana. Aunque, en un abrir y cerrar de
ojos, pueden ser arrebatados del día a día
con otro de los tantos acontecimientos de
violencia y muerte. Hace falta seguridad.
Ana aus einem der Comunidades
genannten Slumviertel in Mejicanos
verlor vor drei Monaten ihren 21-jährien
Sohn. Im Gegensatz zur Polizei glaubt sie
nicht, dass er in Verbindung zu einer der
rivalisierenden Gangs (Barrio Dieciocho und
Mara Salvatrucha ) stand, die die Kontrolle
über viele Gebiete El Salvadors ausüben.
Juan ist aus der Barrio Dieciocho
(18) ausgestiegen als sie sich in zwei
Lager spaltete. Mit dem Feindbild der
gegnerischen Mara Salvatrucha (MS 13)
konnte er umgehen. Dass sich jetzt auch
vormalige Freunde gegenseitig töten, ist
ihm zu viel.
Cesar* hat einen Angriff der MS 13 mit
sieben Schusswunden überlebt. Er ist 20
Jahre alt und aktives Mitglied der 18.
William* trägt den Schriftzug „Mara
Salvatrucha“ auf seiner Stirn. Jedes
Verlassen seines eigenen Viertels bedeutet
für ihn Lebensgefahr.
Nahún ist tot. Der 30-Jährige Kassierer
in einem Bus konnte oder wollte eine
Erhöhung seiner Schutzgeldsumme nicht
zahlen.
Sie alle leben oder lebten mit der exzessiven
Gewalt in El Salvador, wo Erpressungen,
Territorialkämpfe und andere Aktivitäten
der beiden verfeindeten Gangs Mara
Salvatrucha und Barrio Dieciocho mit
letzter Konsequenz ausgetragen werden
und in tödlicher Gewalt münden.
Die Fotoarbeit „Viviendo con la Violencia“
(Mit der Gewalt leben) ist im Januar und
Februar 2014 in San Salvador und seinen
Satelitenstädten entstanden und zeigt die
Lebensumstände in den Comunidades
San Salvadors aus unterschiedlichen
Perspektiven.
Sie
portraitiert
Gangmitglieder,
die
für einen großen Anteil dieser Gewalt
verantwortlich gemacht werden. Diese üben
auf viele Jugendliche in den Comunidades
dennoch eine verständliche Faszination
aus. Sie treten stark und selbstbewusst
auf, kontrollieren weite Teile des Landes
und stiften mit ihren Tattoos Identität. Für
Jugendliche ohne Perspektive scheint die
Mitgliedschaft in einer der Gangs oft die
einzig verbleibende Alternative zu sein,
obwohl sie mit einem Leben in der Illegalität
und mit ständiger Lebensgefahr verbunden
ist.
Die Arbeit räumt aber auch den Opfern
Platz ein. Bilder von Tatorten und
Hinterbliebenen, Portraits von Opfern
und ihrer Lebensrealität verdeutlichen
die unerträgliche Situation in El Salvador,
dokumentieren aber auch hoffnungsvolle
Momente. Denn in den Comunidades gibt
es trotz der allgegenwärtigen Gewalt ein
funktionierendes soziales Gefüge.
Die Gewalt ist präsent in El Salvador, aber
sie kontrolliert nicht alles. Die Comunidades
gleichen keinem Kriegsgebiet, dass von
Leichen gepflastert ist. Die Menschen
die dort leben, wissen sich trotz meist
extremer Armut zu helfen und gestalten
ihr alltägliches Leben. Doch alle sind sich
darüber im Klaren, dass sie jederzeit durch
einen erneuten Vorfall von oft tödlicher
Gewalt aus diesem Alltag herausgerissen
werden können. Sicherheit fehlt.
Mejicanos 2014
José*, 9 años
José vive en un área que es controlada por la Mara Salvatrucha. Su delimitación territorial es mostrada a través de Graffiti.
José y su madre venden pan frente a la Universidad de El Salvador.
*nombre cambiado
Mejicanos 2014
Tomás Antonio, 17 años
Edwin Alexander, 15 años
Tomás Antonio fue impactado gravemente por balas en su estómago y rostro en el año 2006 y murió dos días después en el hospital.
Su hermano menor fue testigo del ataque y buscó matar a los responsables en venganza.
Un día dejó su hogar y hasta la fecha no se ha visto de nuevo. Su ropa fue encontrada ocho meses después.
Mejicanos 2014
El cementerio de Mejicanos.
Mejicanos 2014
Ana Julia
Ana es dueña de una una pequeña tortillería. Su hijo José fue baleado el 12.11.2013 frente a su casa.
Ella rechaza la idea que su hijo esté relacionado con las pandillas.
A pesar que fue maltratado por la Policía antes que muriera atribuyéndole pertenencia al Barrio 18.
Mejicanos 2014
Nahún, 30 años
El jóven cobrador de la ruta 33b no quiso o no pudo pagar el incremento a la extorsión. Se presume fue asesinado por miembros del Barrio 18.
Mejicanos 2014
En una escuela de Mejicanos.
Mejicanos 2014
Alberto, 12 años
En la tortillería de su madre, Alberto está lesionado cortando un garrafón.
Mejicanos 2014
Una madre y sus tres hijos, frente a su casa en Mejicanos
Mejicanos 2014
Vista de la Zona Montreal en Mejicanos / San Salvador en la distancia.
San Martín 2014
Cesar*, 20 años.
Cesar recorrió el mismo camino a su trabajo que el de todos los dias. El 03.03.2013 miembros de la Mara Salvatrucha lo
emboscaron y le dispararon.
Él sobrevivió a siete disparos de bala. Cesar es miembro del Barrio 18.
*nombre cambiado
San Martín 2014
Cesar*, 20 años.
Cesar recorrió el mismo camino a su trabajo que el de todos los dias. El 03.03.2013 miembros de la Mara Salvatrucha lo
emboscaron y le dispararon.
Él sobrevivió a siete disparos de bala. Cesar es miembro del Barrio 18.
*nombre cambiado
San Martín 2014
Julio*, 23 años.
Miembro del Barrio 18.
*nombre cambiado
San Martín 2014
Un miembro del Barrio 18 fumando marihuana.
Mejicanos 2014
Reclamo de delimitación territorial
Miembros de la Mara Salvatrucha pintan su insignia MS en un tanque de abastencimiento de agua en lo alto de la Zona Montreal en Mejicanos.
La marca puede verse desde todas las posiciones en el área y es una impresionante señal de la presencia de la mara.
Mejicanos 2014
Vista de la Zona Montreal en Mejicanos.
Mejicanos 2014
William*, 33 años
Miembro de la Mara Salvatrucha.
Los tatuajes de la Mara Salvatrucha en su frente aseguran su pertenecia a la mara. Cada vez que él se aleja de su territorio de control, su vida corre peligro.
*nombre cambiado
Mejicanos 2014
Pedro*, 29 años
Miembro de la Mara Salvatrucha.
Sus tatuajes MS (Mara Salvatrucha) crean identidad y muestran que él es miembro de esta mara. Tiene tatuado una lápida en
su brazo en memoria de un amigo asesinado.
*nombre cambiado
Mejicanos 2014
Pedro*, 29 años
Miembro de la Mara Salvatrucha.
Sus tatuajes MS (Mara Salvatrucha) crean identidad y muestran que él es miembro de esta mara. Tiene tatuado una lápida en
su brazo en memoria de un amigo asesinado.
*nombre cambiado
Mejicanos 2014
Javier*, 39
Miembro de la Mara Salvatrucha.
*nombre cambiado
Mejicanos 2014
Javier*, 39 años
Miembro de la Mara Salvatrucha.
Actualmente está trabajando en una panadería producto de un proyecto del SSPAS. El objetivo de éste proyecto, es otorgar a éstas personas, una oportunidad laboral que
les genere ingresos sin estar vinculado a actividades ilegales.
*nombre cambiado
Mejicanos 2014
Un hombre anciano observa a la Policía trabajar en una escena del crimen.
Mejicanos 2014
Una familia observa trabajar a la Policía en una escena del crimen.
San Martín 2014
Un hombre anciano en la comunidad las Champas.
Los pandilleros usan la red productiva local. En las comunidades, ellos son bien conocidos y sus actividades a menudo son
aceptadas debido a que forman parte de las familias locales.
San Salvador 2014
Juan, 30 años
Cuando Juan tenia 11 años de edad, entró en contacto con el Barrio 18 por primera vez.
El tenía claro el concepto del enemigo; „Mara Salvatrucha“ y concretó actos de violencia.
En el 2010 el Barrio 18 se dividió en dos grupos enemigos. Matar a viejos compañeros no es nada de lo que Juan quiere hacer,
por ello decidió dejar la pandilla.
Desde que se salió de la pandilla, estuvo en prisión en tres ocasiones, fue incriminado por tres testigos, y a causa de uno de
sus tatuajes fue presentado por la Policía en los medios como un líder de la clica.
San Martín 2014
Cesar*, 20 años.
Cesar recorrió el mismo camino a su trabajo que el de todos los dias. El 03.03.2013 miembros de la Mara Salvatrucha lo
emboscaron y le dispararon.
Él sobrevivió a siete disparos de bala. Cesar es miembro del Barrio 18.
*nombre cambiado