Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central Roncesvalles
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Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central Roncesvalles
EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL RONCESVALLES - TOLlMA HÉCTOR SALGADO LÓPEZ Profesor Asistente Facultad de Ciencias de la Educación Universidad del Tolima Fundación de Investigaciones Arqueológicas Nacionales Banco de la República Universidad delTolima Fondo Mixto de Cultura delTolima Santafé de Bogotá, o.e.19gB Carátula: Loma con platafonll:ls de vivielllb l'.~c:d()Il:1da" (Finca La Cr;l1lja) FUNDAC!ON DE INVESTIC;AC!ONES ARQUEOLO(;ICAS NACIONALES. No. (,{, IlANCO DE LA REI'UIlUCA EXPLORAC!ONES ARQUEOL()(;ICAS EN LA COIUJILLERA CENTRAL RONCES VALLES TOUMA Primcra Ediciún, 199H © l')I)X 1-Il'lTCJH S,\IJ.'\I)() LOI'!.? Armada digital o: impresión Edilor:l CU;I(blllpr Ltda. lel. L(1) E·m:til: guada(!1 ("oI1.lo:k("OllU:Olll.o20 S;lIl!afl' d~' l'Iogol:i, n,c.. Collllnhi;\ (j, NK Pri1l1",d :lIld madr in Colomhia / Imprr"o \'11<'.-11') "11 <.,)iomhia CONTENIDO Pág. FECHAS DE RADIOCARBONO AGRADECIMIENTOS PARTICIPANTES . INTRODUCCIÓN .. 7 . .. 9 II 13 Capitulo 1 LAREGIÓN l. Localización Geográfica 2. El medio Natural...................................... 3. Geología y Geomorfología 4. Economía Regional 15 15 15 18 IS Capítulo II ANTECEDENTES ARQUEOLÓGICOS. L La ,Zona Plana del Valle del Magdalena y la Vertiente Occcidental de la Cordillera Oriental 2. La Cordillera Central en el Tolima y Regiones Adyacentes. 21 22 25 Capítulo III METODOLOGÍA 1. Campo l. \. Reconocimiento y Prospección 1.2. Excavaciones 2. Laboratorio 2.1. Análisis de los Materiales Ce.ámicos y Liticos 2.2. Otras Mues"as........................ 3. Informe final 27 27 27 28 29 29 30 31 Capítulo IV LA EXPLORACIÓN ARQUEOLÓGICA 1. La Exploración................. 1.1. Rosales, Londres y Siberia 1.2. Buenos Aires 1.3. La Granja \A. El Jordán \.5. Patio Bonito y El Reflejo 33 33 35 37 37 40 40 6 EXPLORACIONES ARQUEOLÓCICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL Capítulo V EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS... l. Fisiografía General de la Región de Roncesvalles 2. Excavaciones en Sitios de Asentamientos :.1. Buenos Aires .. 2.2. La Granja 2.3. El Jordán...... 2.4. Patio Bonito 43 43 44 44 52 61 84 Capítulo VI LOS MATERW..ES ARQUEOLÓGICOS 1. La Cerámica. 1.1. Criterios Metodológicos .. 1.2. Cerámica Formativa ..... 1.3. Comparación de los Grupos Cerámicos del Período Tardío . 2. El Material Lítico . 89 89 89 . 90 . 93 108 Capítlll0 VII PAUTAS DE ASENTAMIENTO PREHISPÁNlCAS EN LA CORDILLERA CENTRAL DEL TOLIMA... 113 ANEXO I Descripción Formal y Técnica de los Grupos Cerámicos del Sistema A1farew de Roncesvalles -Tolima A. P"iodo FOtmativo. 8 Pedodo -¡,,,dio 125 125 127 ANEXO 2 Estudio Palinológico 133 . ANEXO 3 Análisis Fisicoquímicos de Suelos Indice de Figuras Indice de Fotografías lndice de Láminas.. . BIBLIOGRAFÍA 145 149 \59 161 . . . . 163 FECHAS DE RADlüCARBüNü TARDlO Beta - 111973 ',erra"'..1 1020 ~ (¡Oa.p. HjO - ( ()JO 1- 990 e1.e. La Granja PlatilfoTma 3 1030 :!: 60 a.p. H60 - l 92() J- 980 el.e. La Gr:lllja I R.A 1: 100-115011 Beta - 113703 U.E.3: 40 - 50 CIll FORMATIVO Beta - 116763 El Jordán lcrraz3 I U.E.14: I\O-130cm 2850 :t 50 a.p. 850 -[ 900 J- 950 El Jordán "¡(rraza I 9760 ± 160 a.p. 7650 -[ 7HIO J -7970 ".c. PRECERAMICO Beta - 116764 a.e. U.E.14: 110 - 130 cm Bcta-111972 El lordán 'Iúr¡,,:a I U.E. 10: \OO-12Ucll1 12910:!:: 603.1" 10900-L 10960 1- II020a.e. 10 EXPLORACIONES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL lO a los profesores César Vc1andia Jagua y Manuel León Cuartas, quienes siempre han imaginado un musco universitario que lidere la investigación arqueológica regional; por lo cual impulsaron el inicio de este trabajo. De igual manera, queremos reconocer el interés, por divulgar los resultados. demostrado por los profesores de la Universidad del Tolima, Luis Fernando Rozo (Comité de Investigaciones) y César AuguslO Zambrano (Fondo Mixto) y su gestión, en dichos organismos. para la aprobación de los apoyos económicos de la publicación. Aparte de las personas que se mencionan en la lista de participantes, se agradece el esfuerzo demostrado por Gloria Rivera en las labores de laboratorio; Martha l3arrero y Ricardo Rivera en la digitación del manuscrito. Así lnismo, un especial agradecimiento para la arqueÓloga Alba Nclly Gómez por su decidido apoyo e interés en la elaboración y redacción del texto. Nuestros agradecimientos también son para el colega Camilo Rodríguez. por enseñarnos los materiales cerámicos,:, permitirnos consultar sus diarios de campo y los estudios de la cerámica no publicados, de las investigaciones que adelantó en Chaparral y Herrera (Tolima). Por último, nuestra gratitud se hace extensiva a la comunidad de Roncesvallcs; en especial al párroco Oscar Fernández, a la profesora Aleyda Gómez Torres, su esposo Jorge Murillo y a Samuel Castai\eda porque con su cooperación y apoyo se mejoró nuestra estadía en campo; a los propietarios de los predios (Isabel Castro, lnna Galindo, Julio Peláez y Ncftalí jiméncz) por permitirnos adelantar las excavaciones. AGRADECIMIENTOS La realización de la presente investigación arqueológica no hubiera sido posible sin los aportes financieros de ciertas instituciones y la colaboración de un grupo de personas que brindaron su apoyo: a todas ellas hacemos llegar nuestra más sincera gratitud. La Universidad del Tolima, a través de la Facultad de Ciencias de la Educación y del Musco Antropológico, proporcionó personal, equipos e instalaciones; además facilitó el tiempo necesario para adelantar las labores invcstigativas. El Comité Central de Investigaciones, asumió parte de los costos del proyecto. La Fundación de Investigaciones Arqueológicas Nacionales FlAN del Banco de la República, también proporcionó recursos económicos para adelantar el proyecto. Igualmente, el Fondo Mixto para la Promoción de la Cultura y las Artes del Departamento del Tolima ayudó a financiar la investigación. Igualmente. agradecemos a los Doctores Luis Duque Gómez, Director Ejecutivo de la flAN; Lucía Durán Pinilla, Directora del Comité Central de Investigaciones, Universidad del Tolima y José Eusebio Suárez Gaitán, Director durante ese período del Fondo Mixto, por considerar y creer en la propuesta de investigación; por apoyar a la FlAN, en la edición del presente libro, a través de la aprobación de partidas económicas tendientes a cofinanciar la publicación. A las actuales y anteriores directivas de la Universidad del Tolima, especialmente a la Doctora Sandra Amaya por brindar la oportunidad para el desarrollo de la investigación arqueológica en la institución. También, presentamos un especial reconocimien- 10 EXPLORACIONES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL to a los profesores César Velandia Jagua y Manuel León Cuartas, quienes siempre han imaginado un musco universitario que lidere la investigación arqueológica regional; por lo cual impulsaron el inicio de este trabajo. De igual manera, queremos reconocer el interés, por divulgar los resultados, demostrado por los profesores de la Universidad del Tolima, Luis Fernando ROLO (Comité de Investigaciones) y César Augusto Zambrano (Fondo Mixto) y su gestión, en dichos organismos, para la aprobación de los apoyos económicos de la publicación. Aparte de las personas que se mencionan en la lista de parti~ cipantes, se agradece el esfuerLo demostrado por Gloria Rivera en las labores de laboratorio; Martha Barrero y Ricardo Rivera en la digitación del manuscrito. Así mismo, un especial agradecimiento para la arqueóloga Alba Nelly GómeL por su decidido apoyo e interés en la elaboración y redacción del texto. Nuestros agradecimientos también son para el colega Camilo Rodríguez, por enseí1arnos los materiales cerámicos y perm.itirnos consultar sus diarios de campo y los estudios de la cerámica no publicados, de las investigaciones que adelantó en Chaparral y Herrera (Tolima). Por último, nuestra gratitud se hace extensiva a la comunidad de Roncesvalles; en especial al párroco Oscar Fernández, a la profesora Aleyda Gómez Torres, su esposo Jorge Murillo y a Samuel Castaiicda porque con su cooperación y apoyo se meioró nuestra estadía en campo; a los propietarios de los predios (Isabel Castro, Irma Calindo, Julio Peláez y Ncftalí Jiménez) por permitirnos adelantar las excavaciones. PARTICIPANTES DlREcrOR Héctor Salgado López EQUIPO EN CAMPO JhOll)' Carvajal PETROGRAFÍA Javier Rojas TOPOGRAFÍA Diana 'facora Alba N~lly Gómez Manha Barrero Ricardo Rivera Gloria Rivera Catalina Díaz (Temporada 1998) DIBUJANTE César 13onill.<1 José Ledesman Díaz GUAQUERO Hugo Alberto Momenegro V ANALISTA DE SISTEMAS Fidel Claudia Silva A. AUXIlJARES EN lABORATORIO DlGITACION DE TEXroS Martha Barrero Ricardo Rivera Gloria Rivera Martha Isabel Barrero Ricardo Rivera Walter Cataii.o Catalina Díaz Jimena Bustos ANÁLISIS DE RADIOCARBONO Beta Analytic Ine.. Florida IDENTlflCAClON DE PAISA· JES E INTERPRETACiÓN DE SUELOS Pedro José Botero PAL1NOLOGÍA Alexis Jaramillo Gustavo Lozano C. Camilo A. Escobar FOTOGRAFÍAS Héctor Salgado L Jhony Carvajal Alba Nelly Gómez OBREROS Rubén Sanabria Ferney Uribe Jesús Hern:índez CONDucrORES Hernán GÓmez. Samue\ Castaneda Margarita Delgado INTRODUCCIÓN La hisLOria prchispánica de los grupos humanos que habitaron la cordillera Central, en el actual departamcllLO del Tolima, es muy comple¡a al igual que las relaciones culturales que establecieron con otras áreas del suroccidcntc colombiano. La gran altura de la cordillera no fue un obstáculo para la comunicación entre los valles cálidos del Magdalena, Callea y las vertientes andinas, permitiendo el intercambIo y el establecimiento de diversos patrones de asentamiento. A partir de 1996 la Universidad del Tolirna, a través del Musco Antropológico, inició el desarrollo de un programa de investigación arqueológica regional, cuyo primer proyecto fue realizado en el municipio de Roncesvallcs - Tolima y sus resultados se describen cn la prcsente publicación. El propósito general fue el de localizar, identificar y evaluar los recursos arqueológicos de la zona escogida, por medio de prospección arqueológica y de excavaciones parciales en los sitios más representativos. La información obtenida ayuda a incrementar el conocimiensobre la dinámica cultural de las sociedades prehispánicas que habitaron las vertientes y zonas altas de la cordillera Central, en esta región del Tolima y son un aporte significativo tendiente a superar el nivel descriptivo que, a partir de rasgos estilísticos (tanto en cerámica como en orfebrería, etc), ha caracterizado el esta· blecimiento de relaciones culturales prehispánicas entre la región tolimense y otras áreas arqueológicas del suroccidenle colombiano, como: San Agustín, Quimbaya, valle medio del río Cauca y Calima. to 14 EXPLORACIONES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL En su conjunto, los hallazgos arqueológicos de RoncesvallesTolima contribuyen al estudio del proceso histórico regional. prehispánico del suroccidente colombiano. En los yacimientos investi~ gados se identificaron ocupaciones aborígenes que amplían la secuencia cultural y cronológica prehispánica del Tolima, desde finales del Pleistoceno y Holoceno Temprano (XIII a X milenios a.p.), al formativo tardío (siglo IX a.c.) y hasta los desarrollos prehispánicos tardíos de los siglos IX a XII después de Cristo. Las evidencias encontradas y los estudios especiales (suelos y polen), aportan nueva información sobre las antiguas pautas de asentamiento, manejo y aprovechamiento del medio ambiente. Asimismo, se pudo ampliar y complementar la distribución espacial de formas y decoraciones cerámicas de la ocupación mas tardía en la cordillera Central y posibles relaciones con la vertiente occidental de la misma cordillera (región Quimbaya) y valle del Magdalena, al norte del departamento del Tolima, incluyendo las estribaciones de la cordillera Oriental. Investigaciones arqueológicas, con un enfoque regional, como la presente, proporcionan importante información que ayuda a mejorar nuestro conocimiento del pasado prehispánico de la zona, a través de la reconstrucción de un proceso histórico, con una dimensión temporal, de más de diez mil años de historia precolombina en el departamento del Tolima. Igualmente, son un aporte tendiente a desmitificar las imágenes impuestas por la historiografía tradicional, referente a un pasado prehispánico cuya antigüedad se remonta al período de la conquista y colonia espailola; época en la cual surgieron representaciones fantásticas para, justificar el exterminio de los habitantes aborígenes (léase Pijaos y otras parcialidades), de la cordillera Central en el Tolima y que todavía perduran en el imaginario colectivo. Capítulo 1 LA REGIÓN l. LOCALIZACIÓN GEOGRÁFICA La región obieto de la presente investigación está situada en la parte alta, vertiente oriental de la cordillera Central, en el depru1amemo del Tolima y pertenece jurisdicdonalmente al municipio de Roncesvalles. cuya cabecera municipal está ubicada a los 4° O1' de Latitud Norte y 75° 32' de Longitud Oeste (ICAC 1980, 1386), (Foto 1). El municipio de Roncesvalles se ubica al suroeste del depJrtamento del Tolima, limitando por el norte con las municipalidades de Rovira y Cajamarca, por el oriente con Rovira ~' San Antonio, por el sur San Antonio, Chaparral y al occidente con los departamentos del Valle del Callea y Quindío (ICAe 1980: 1386; Palanca 1995, 33j, (Fig. 1). 2. EL MEDIO NATURAL El territorio de Roncesvalles en toda su extensión es montaiioso y tiene un área de 778 Km 2 • distribuidos entre los pisos térmicos: Medio 103 Km 1 (13.2%), Frío 361 Km 1 (46.4%) v Páramo 3 14 Km 1 (40.4%). (ICAC 1980, 1386, Castañeda 1982). . El área objeto de estudio arqueológico s610 ha comprendido el piso bioclimático frío. que corresponde con el típico Bosque de Niebla yen él se distinguen dos biozonas o formaciones vegetales. La primera de ellas es el Bosque Húmedo Montano Bajo (BH-MB), que se distribuye entre los 2000 y 3000 msnm; se caracteriza por una biolemperatura entre los 12 y los 18°(, un promedio anual de lluvias entre 1000 Y2000 mm anuales. La segunda formación. presente en la 16 EX¡'LORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL !· , ·, ! ':1 i ! 1 ,• ··•• i, , • o ~ i~ LA REGlÓN 17 zona explorada, es el Bosque muy Húmedo Montano Bajo (Bmh-MB), que se localiza entre el área de Páramo y la anterior formación, en una franja altitudinal que varía de 1900 a 2900 msnm con temperaturas que van de 12 a ISoC y una lluviosidad anual de 2000 a 4000 mm (Palanca 1995: 34 a 39; Espinal y Montenegro; 1963), (Fig, :n· La Topografía varía desde lomas onduladas con suave relieve y cimas planas, hasta montañas escarpadas con fuertes pendientes. La vegetación nativa ha sido fuertemente intervenida y se le halla ubicada en reductos, dentro de las áreas agropecuarias y en zonas de difícil acceso, donde se observan variadas especies arbóreas entre las cuales sobresalen los robledales (Quereus Humboldtii) y la palma de cera (Ceroxylon Quindiuense) o árbol nacional, que le dan un contraste muy característico al paisaje de la región de Roncesvalle.~. Paisaje que tiende a desaparecer debido al uso indiscriminado de la palma de cera, dado que se usa para hacer cercas, canales de agua, construcciones de viviendas, encierros para ganado y huertos, alinderamiemos de casas en poblados y encierros de patios, pero sobre todo la explotación de cera, utilizada como fuente de energía, para el consumo de los habitantes de la región. (Polanco 1995: 23-40). Roncesvalles junto con otros municipios del Tolima en la vertiente oriental de la cordillera Central como: Ibagué. Cajamarca, Rovira v Santa Isabel, son portadores de reservas del árbol nacional denominado palma de cera, las cuales constituyen una riqueza de biodiversidad tan especial que constituyen patrimonio de carácter universal, de ahí lo importante de su preservación. (Palanca 1995: 23AO). L.o'l vegetación nativa, puede alcanzar alturas elevadas con riqueza de especies, lo que genera una biodiversidad tanto en la flora como en la fauna existentes; las zonas no alteradas aun cuentan con especies variadas de líquenes, orquídeas, musgos. bromelias y aráeeas, que ere· cen entremezcladas con el bosque. (Espinal y Montene,gro 1963; Palanca 1995). Las áreas despejadas de bosque natural se aprovechan en su mayoría con potreros de pasto para una ganadería extensiva de muy baja productividad en detrimento de la zona forestal. En el Tolima solo el 30% de las tierras de cordillera, que corresponden <l bosques nalivos, son aptas para la agricultura y la ganadería (Corpes 1986: 55). EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENT1~AL 18 3. GEOLOGÍA YGEOMORFOLOGÍA La geología de la región la constituyen grandes núcleos de rocas ígneas y metamórficas recubiertas por mantos de cenizas volcánicas pertenecientes a los períodos geológicos Triásico - Jurásico y Cretáceo; los sedimentos del Cuaternario están representados por diversos depósitos de aluviones recientes (IGAC 1988). Los suelos son bien drenados, profundos y con alta fertilidad (Castañeda 1982). Geográficamente sobresalen los Páramos de Barragán y Cumbarco, el alto de Tribuna, el cerro Argelia, la cuchilla del Valle, el caií.Ón de la India y la depresión de la Yerbabuena, paso natural montaúoso, por dond.e desciende el río Cucuana y que ha permitido la comunicación con la vertiente occidental de la cordillera Central (Barragán y Santa Lucía, en el departamento del Valle del Cauca y Pijao en el Quindío), (ICAC 1980, 1386, Casta"eda 1982). Roncesvalles pertenece a la red hidrográfica del sur del Tolima (cuencél del río Saldai'l.a); los principales alluentes son el Cucuana, Cucuanita, ChUí, San Marcos y otras corrientes menores (Castaiieda 1985). 4. ECONOMÍA REGIONAL Roncesvalles al igual que la mayoría de los municipios del Tolima, que están ubicados en las partes mas altas de la cordillera Central, no tienen mayor relevancia en el desarrollo económico del departamento; en comparación con los del Valle del Magdalena donde se observa un notable crecimiento de la agricultura industrial mecanizada. Esta diferenciación es debida a la falta de vías de comunicación, procesos descentralizadores y cambios en los programas políticos (Espinosa et al. 1996,136). La base económica de ésta región es la ganadería y en segundo renglón se encuentra el cultivo de papa el cual se utiliza para la rotación de potreros; además existen otros cultivos transitorios como frijol, maíz, algunas frutas, legumbres y hortalizas que no son muy representativas en la economía de la región (Cúl-pes 1986:4 7). LA REGlÓN 19 Este panorama econ6mico podría cambiar gracias a la tendencia de" ." transformaci6n de los sectores privados, público y político para continuar el desarrollo econ6mico y social del Tolima, que en el marco de la apertura econ6mica, tiende a consolidarse mediante la integraci6n regional con los departamentos de Caldas, Quindío y Huila" (Espinosa et al. 1996: 135). Existen otras perspectivas de crecimiento econ6mico para la región como es la apertura de la carretera Roncesvalles - Buga. Esta vía comunicará el Tolima con el valle del Cauca y hará parte esencial de la troncal del pacífico: Villavicencio - Bogotá - Buenaventura; también servirá para unir al occidente colombiano, de una forma mas directa, con el mercado venezolano, Capítulo Il ANTECEDENTES ARQUEOLÓGICOS Debido a S\.I privilegiada posición geográfica el departamento del Tolima es una región de suma importancia para contribuir a comprender los desarrollos prehispánicos de otras áreas culturales como el Valle del Magdalena y el suroccidente colombiano. Sin embargo, en el contexto regional, es una de las zonas menos estudiadas arqueológicamente. En general, la investigación arqueológica en el Tolima ha sido de carácter puntual, esporádica y sl¡ieta más a critcrios personales que institucionales. Las investigaciones arqueológicas en el actual departamento del Tolima y en regiones periféricas, se iniciaron en la década de los cuarenta. Los investigadores Gerardo Reichel-Dolmatoff y Alicia Dussán, en su trabajo de campo en el valle del río Magdalena resaltaron la importancia de la dispersión espacial de urnas funerarias a lo largo de dicho valle. En Arrancaplumas (Honda - Tolima) identificaron vasijas fitomorfas y decoración aplicada en forma de racimo de "chupas", (un fruto silvestre de la región) (1944); posteriormente, Reichel-Dolmatoff (1986) relacionó esta cerámica con la tradición Zambrano (costa Caribe colombiana) y la ubicó dentro de la etapa Formativa tardía; también relacionó este tipo de cerámica con la cordillera Oriental (Guaduas, Tocaima y la Sabana de Bogotá), específicamente con el tipo Mosquera Rojo Inciso y la fase Machali1la de la costa pacífica ecuatoriana. En el municipio del Espinal (Tolima), los investigadores Julio Cesar Cubillos y Víctor Bedoya (1954) llevaron a cabo excavaciones en un sitio de enterramiento; luego de analizar los materiales, concluyeron que algunas características de forma y decoración de esta cerámica se relacionaban con otros estilos de las riberas del río Magdalena, especialmente los localizados entre el sitio la Jabonera y Puerto Wilches (Santander). 22 EXPLORACIONES ANQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL En 1976 Marianne Cardale realiza excavaciones en el nordeste de la población de Pubenza, (Tocaima - Cundinamarca); dentro del material destacó la presencia de tres tipos cerámicos: Pubenza Rojo Bailado, Pubenza Policromo y la cerámica con impresión de estera y propone que dichos estilos pueden pertenecer a una tradición que se desarrolló entre el 'Yalle del Magdalena y la parte suroccidental de la Sabana de Bogotá (Cardale 1976). A finales de esta década Gonzalo Correal realizó una prospección a lo largo del río Magdalena ubicando sitios del período precerámico y propone la existencia de una tradición de Chopper para dicha región (Correal 1977). A partir de la década de 1980 la Fundación de Investigaciones Arqueológicas Nacionales - FlAN - del Banco de la República ha venido auspiciando una serie de prospecciones y excavaciones (en su mayor parte trabajos de grado), en diferentes partes del Tolima y en zonas circunvecinas con lo cual se ha dado un nuevo énfasis a la arqueología regional y se ha generado un mejor conocimiento acerca de la historia prehispánica de dos áreas específicas: L. La zona plana del valle del Magdalena y la vertiente ocddental de la cordillera Oriental Los arqueólogos Castaño y Dávila (1984) efectuaron excavaciones en los sitios Mayacas y Colorados (Puerto Salgar - Cundinamarca); excavaron pisos de vivienda, basureros, talleres líticos, cementerios nucleados, etc., datados en el siglo XII d.C. Con relación al material cerámico, identificaron un complejo Alfarero Tardío que denominaron Colorados, el cuál se caracteriza por su función doméstica y funeraria y una decoración con motivos aplicados - modelados, incisa intermitente, incisa simple, digital corrugada y excisa. Fernando Ávila (J 985) realizó una prospección arqueológica en las márgenes del río Venadillo (Tolima), en el municipio del mismo nombre. El análisis del material cerámico le permitió establecer relaciones con la cerámica de Pubenza, Mayacas y Colorados, Espinal yel horizonte de urnas funerarias del Valle del Magdalena. En la misma época Cecilia de Hernández adelantÓ exploraciones y excavaciones en jurisdicción de Armero - Tolima; ubica los materiales como pertenecientes al formativo tardío (1978). ANTECEDENTES ARQUEOLóGICOS 23 En el municipio de Guaduas (Cundinamarca), las arqueólogas Cecilia de Hernández y Carmen Cáccres (1989) excavaron un basurero (sitio Guaduero) el cual tiene dos dataciones, una por radiocarbono (siglo 1Il a.e.) y otra por termoluminiscencia (siglo V d. C.). Dentro del material cerámico recuperado identificaron cuatro tipos cerámicos: Guaduero Liso, Guaduero Aplicado, Guaduero Pintado V Guaduero Inciso. El Guaduero Aplicado se caracterizó por vasijas con decoración aplicada en forma de cresta (son los mismos en forma de racimos de "chupas" descritas por Reichel-Dolmatoff y Dussán), concha y botón. Trabajos más recientes como los de Peña (1991), Mendoza y Quiazua (1990) han hecho más evidentes las relaciones culturales que existieron entre los grupos que habitaron el Valle del Magdalena y el altiplano Oriental a lo largo de la cuenca del río Bogotá. Desde 1989 Arturo Cifuentes ha realizado una serie de investigaciones en los alrededores del municipio de Honda. Los reconocimientoS, prospecciones y excavaciones en ambas márgenes del río Magdalena, le han permitido identificar dos períodos diferentes caracterizados por su material cerámico: El Formativo Tardío (en Arrancaplumas yel río Sabandija) y el período tardío cercano a la Conquista (quebrada El Perico), (Cifuentes 1989, 1991, 1993). En Arrancaplumas obtuvo una fecha del siglo I a.e. e identificó dos grupos cerámicos denominados A y B. El grupo A presentó similitudes en formas y disei'los con la cerámica de Guaduero y, especialmente, con el tipo Guaduero Aplicado: Platos planos, macizos, platos pandas, cazuelas, bases trípodes. copas y vasijas aquilladas (con bordes evertidos y apliques en forma de concha y cresta), botellones. apliques y figurinas (Cifuentes 1991,1993). El grupo B se caracterizó por diseños acanalados en forma de espiral y apliques mamilares, formas como cuencos hemisféricos. vasijas campaniformes, cazuelas y ollas subglobulares o con hombro. Según dicho investigador, este material guarda relación con la cerámica de Zambrano y Malambo (bajo Magdalena). Además comparte características con el tipo Guaduero Inciso (Cifuentes 1991, 1993). En el río Sabandija (hacienda Bremen, la cerámica corresponde a la fase media (siglos IX a. e. a 11 d. e.) del Período Herrera de la 24 EXPLORACIONES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL Sabana de Bogotá (Formativo Tardío), específicamente a los tipos Mosquera Roca Triturada, Zipaquirá Desgrasante Tiesto y Mosquera Rojo Inciso. También se encontró cerámica del tipo Guaduero Liso (Cifucntes 1993). En síntesis, Cifuentes propone que el grupo A cs originario de la Sabana de Bogotá y de sus estribaciones hacia el Valle del Magdalena. Con respecto al tipo Mosquera Rojo Inciso considera que "pucde proceder de otra región arqueológica, como es el sur del AllO Magdalena, donde existe una cerámica similar que pertenece al período Formativo (1100-200 a. C)". (Cifuentes 199350). Las investigaciones más recientes realizadas por Cifuemes (1994) en el municipio del Guama - Tolima, específicameme en la vereda L'\ Chamba, le permitieron excavar un sitio cerámico (fechado en 1640 d. C.). Tecnológicamente identificó dos grupos cerámicos denominados Chamba Rojo Pulido y Chamba Café Presionado; este último es similar al tipo cerámico Chaparral Café Presionado. descrito por Chacín (1991, 1995) en la cordillera Centrai (Chaparral), el cual se caracteriza por tener decoración presionada triangular sobre el hombro y el labio de algunas formas cerámicas (Cifuentes 1994). En el departamento del Tolima a panir de la década de los 90, se han adelantado estudios arqueológicos de rescate, financiados por el estado y empresas privadas, buscando cubrir extensas Meas geográfi. cas para llevar a Cabo proyectos de extensión eléCtrica y redes de hi· drocarburos. Entre ellos se destaca la prospección del corredor proyectado para el Gasoducto Centro - Oriente, por toda la zona del Valle medio del ño Magdalena, entre Gualanday (Tolima) y Barrancabermeja (Sanlande<), (ICAN - ECOPETROL 1995). A panir de dicha exploración se excavó el sitio Pipintá 11. locali· zado en cercanías a la confluencia de los ríos Guarinó y Magdalena (la Dorada-Caldas). Fueron encontrados dos pisos de ocupación: en el primero la cerámica es tardía (siglo VII d.C.) '! presenta las mismas características de la alfarería del complejo Colorados. El material de la primera ocupación tiene relación con la de los gnlpos formativos A y B descritOs para Arrancaplumas - Honda (Gómez y Correcha 1995). OtrO sitio excavado recientemente fue San Felipe, localizado en cercanías de Mariquita. El material cerámico penencce al período for- ANTECEDENTES ARQUEOLÓGICOS 25 mativo y se relaciona estrechamente con los estilos alfareros identificados en la región de Honda - La Dorada y con la cerámica tardía de la cordillera Central (Salgado et al. 1997). 2. La cordillera Central en el Tolima y regiones adyacentes Los resultados de las investigaciones realizadas en la zona cordillerana del Tolima indican la presencia de dos grandes períodos de ocupación prehispánica a saber; El precerámico todavía poco documentado; los datos cronológicos lo ubican entre el Holoceno Temprano y Medio (VIII - VI milenio a.p.) y podría alcanzar edades del Pleistoceno Terminal. Presenta una tecnología lítica simple relacionada con la tradición precerámica propuesta para otras zonas del Suroccidente (Calima y el Valle Medio del río Cauca), seii.alando adaptaciones tempranas a las vertientes de las cordilleras andinas de Colombia (INClVA 1995,1996; INTEGRAL 1995; INVIAS 1996; Munera s.L; Muneraet al. 1998; Rodríguez 1989, 1991, 1995 Y 1997; Salgado 1989 y 1995; Gnecco v Salgado 1989). El segundo período corresponde a sociedades agroalfareras que se asentaron en la región; los datos cronológicos indican la presencia de grupos agrícolas y cerámicos a partir del Siglo IV d. C. hasta los siglos XVI y XVII de nuestra era (Cubillos 1945; Rodríguez 1989. 1990 Y 1991; Chacín 1995; Cifuentes 1994). Sin embargo, se desconoce en qué momento se inició est.a ocupación y es de suponer que la misma comenzó en el primer milenio antes de Cristo. Los arqueólogos que han trabajado recientemente en la zona reconocen dos estilos alfareros con materiales cerámicos, supuestamente relacionados. El primero de ellos, ha sido propuesto por Rodríguez (1989,1990 Y 1991) para la región de Herrera y Chaparral y está asociado a fechas del siglo IV d.e. El segundo se ha documentado a partir de las excavaciones realizadas en la región de Chaparral por Cubillos (1945), Rodríguez (1989, 1991), Chacín (1991, 19(5) Y Cifuentes (1994); cuenta con fechas tardías que 10 sitúan entre los siglos XV y XVI d.e. Para Chacín, la cerámica se caracteriza por una decoración presionada triangular denominada, Chaparral Café Presionado o Chamba Café Presionado (según C¡fuentes). Tradicionalmente estos materiales culturales han sido asignados como pertenecientes a la et- 26 EXPLORACIONES ARQUEOLÚGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL nia Pijao, lo cual no deja de ser una hipótesis que espera ser confrontada a través de investigación etnohistórica y arqueológica en la zona. En la región del sur del Tolima también se ha documentado la presencia de un estilo de metalurgia y una cerámica (unas pocas vasijas enteras y bordes de cuencos) que presentan semejanzas estilísticas y tecnológicas con la orfebrería y la alfarería de la ocupación YOtOCO de la región Calima, en la cordillera Occidental y Valle del río Cauca (Cubillos 1945; Rodcóguez 1989 y 1991; Chacin 1995). Hacia la parte media de la cordillera Central, Amold Tovar (1981) adelantó exploraciones y excavaciones en el caií.Ón del río Anaime (Cajamarca - Tolima). Por sus características técnicas y estilísticas (pasta, formas, decoración, tratamiento, etc.) la muestra cerámica recolectada pertenece al período tardío; sin embargo la fecha de radiocarbono (11I milenio a.c.) asociada a dichos materiales no corresponde con ellos y debe hacer parte de un evento naturaL Para la década de los 90 en la zona central de la cordillera hay un incremento de tesis de grado, de diferentes universidades. Alvaro Osmio (1992), adelanta exploraciones en el Líbano· Tolima '! Fernando Ruiz (1994) prospecta la vertiente oriental de la cordillera en el parque de Los Nevados; estos trabajos describen palitas de asentamiento prehispánicas y materiales arqueológicos de la ocupación tardía en ambas vertientes de la cordillera. Recientemente Daniel Ramírez (1996), explora la cuenca alta del río Combeima, tesis que junto con la de Barrero, Ramírez y Rivera (J 997), también adelantada en el municipio de Ibagué (sitio La Martinica, montaiías que circundan el valle de Las Lanzas), señalan la existencia en la región de pautas de asentamiento y de materiales cerámicos que corresponden con la ocupación tardía de la cordillera Central en el Tolima; así como la presencia de cerámic;:¡ relacion;:¡da con los estilos del Cauca Medio (Quimbaya Tardío), de la otra ver· tiente cordillerana. Capítulo IJI METODOLOGÍA La metodología utilizada para el desarrollo de la investigación tuvo en cuenta tres fases de trabajo: Campo, laboratorio e informe final. Para este efecto se contÓ con un equipo humano conformado por: un investigador Principal, un asistente de investigación, un arqueólogo, tres auxiliares en campo, un guaquero y estudiantes del Depanamentode Ciencias Sociales (FaOlltad de Ciencia..c; de la Educación. Universidad del Tolinla). l. CAMPO 1.1. Reconocimientoy Prospección Con el fin de dar inicio, en el museo antropoló~ico de la Universidad del Tolima, a un programa de investigación arqueológica en la cordillera Central (departamento del Tolima), se realizó un reconocimiento arqueológico en los municipios de San Amonio de Calarma y Roncesvalles, durante el mes de octubre de 1995. En San Antonio se tuvO conocimiento de un sitio en donde, al constmir unos estanques para cultivos piscicolas, aparederon una serie de elementos arqueológicos. Fue posible resellar una industria lítica en cuarzo conformada por desechos de talla y numerosos cantos irregulares sin modificaciones humanas; también se recogieron unos pocos descchos yun núcleo lascado en Chcrt (Fig. 32: 3), pero sin duda el artefacto más sobresaliente fue el que encontraron los moradores del lugar; se trata de una azada o instntmento con doble acanaladura de enmangamiento. Este tipo de artefacto sc ha convenido cn un indicador matcrial de ocupaciones precerámicas tempranas en variados ambientes del suroccidente colombiano (Ver Fig. 31 e Indice de figuras). Este reporte se hace a manera de antecedente pam futuros trabajos en la zona. 28 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL En general el reconocimiento permitió identificar un mayor potencial arqueológico en la jurisdicción de Roncesvalles; área que fue escogida para adelantar el presente proyecto. La prospección se llevó a cabo en tres temporadas de campo, durante los meses de Julio - Agosto de 1996, Noviembre - Diciembre del mismo ailo y Agosto de 1997. La exploración se realizó teniendo en cuenta las cuencas hidrográficas y zonas aledailas de los ríos Cucuana y Cucuanita, en veredas cercanas a la cabecera municipal. El procedimiento utilizado consistió en recorridos generales en vehículo y a caballo, permitiendo seleccionar algunos predios que posteriormente fueron caminados detenidamente. Los procedimientos técnicos que se adelantaron en cada posible sitio comprendieron recolecciones superficiales, pozos de sondeo, de prueba y sondeos con barreno y mediacaila. 1.2. Excavaciones Del resultado de la prospección se identificaron v excavaron sitios de asentamiento prehispánico en terrenos de las fincas: - Patio Bonito: Dos rasgos arqueológicos. - Buenos Aires: Un corte de 3 x 1 In, un r<l.~g() arqueológico y una tumba. - La Granja: Tres cortes desde 1 x 2 m h¡l.~ta I x 5 In Y un rasgo arqueológico. - El Jordán: Quince cortes desde 1 x I m hast<l 1 x 3 m y un rasgo arqueológico. Todas las excavaciones se realizaron en plataformas v terrazas de vivienda, se procuro excavar áreas donde los sondeos indicaron mayor presencia de materiales culturales (bordes y caída de las terrazas); igualmente, se excavaron pozos de diferentes formas y tamaños que contenían una mayor presencia de actividad antrópica (rasgos arqueológicos). Los trabajos en El Jordán consistieron en una serie de trincheras que cortaron el sitio sobre su eje central, desde la parte posterior hasta su caída final en el frente de la plataforma. En todos los sitios el proceso de excavación se realizó en niveles convencionales de lOó 20 cm de acuerdo a la presencia de materiales culturales y siempre teniendo en cuenta los cambios estratigráficos naturales o los producidas por actividades humanas. Al final de los METODOLOGíA 29 horizontes culturales se profundizaron las excavaciones hasta los suelos parentales, con el fin de conocer mejor los procesos de formación de cada sitio. Los materiales arqueológicos fueron debidamente empacados y rotulados al igual que las mueS1HS de carbón, suelos (para el análisis de polen). Se realizaron levantamientos topográficos detallados de los sitios donde se efectuaron las excavaciones. Toda la información obtenida fue registrada en diarios de campo formularios, dibujos a diferentes escalas y fotografías que ilustran los diferentes procesos de prospección v. excavación. En general la fase de . campo tuvo una duración de sesenta y cinco días. 2. LABORATORIO Al finalizar cada temporada de campo inmediatamente se realizó la correspondiente etapa de laboratorio con el\iropósito de procesar y analizar los materiales y no dejar acumulado este trabajo para el final del proyecto. L..'l fase de laboratorio contó con un grupo de apoyo conformado por auxiliares. monitores, dibujante. analista de sistemas y especialistas en diferentes áreas relacionadas con la presente investigación. 2.1. Auálisis de los Materiales Cerámicos y Líticos La totalidad de los materiales obtenidos fueron inicialmente lavados. Una vez concluido el proceso de lavado y secado se procedió a marcar todos los elementos con un código que consistió en las iniciales del municipio (Roncesvalles === R C), más un número único y consecutivo para cada elemento, para un total de 3694 elementos, arqueológicos (3021 fragmentos cerámicos y 673 líticos). Cada uno fue registrado en un libro de inventario donde se hizo una breve descripción del mismo. Una vez finalizada la marcación e inventario. se procedió a realizar el estudio y clasificación de los materiales. Para la cenímica se establecieron grupos a partir de un rasgo sobresaliente como es el color del bailo (Llanos y Duran 1983; Salgado 1986 y 1989). Para el análisis de 30 EXPLORACIONES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL la cerámica también se tuvieron en cuenta las características técnicas de la pasta (desgrasame. textura y cocción); el tratamiento superficial <hrrado de erosión, pulido. manchas de hollín); orientación de los bordes. reconstrucción de formas de vasijas y técnicas decorativas; espesor de las paredes y diámetros. Para lal propósit.o se diseñó una ficha en la cual se consignó toda la información descrita anteriormente. jllntO con los datos de procedencia de cada elemento. L'\ información de las fichas fue procesada en una base de datos (Microsoft Access). El análisis de estos datos en la base. en general, permitió establecer los rangos de mayor popularidad en el color del baño. formas. decoraciones etc., para los gmpos cerámicos establecidos. Los artefactos líticos se clasificaron siguiendo algunos parámetros ya establecidos tales como: materia prima y categoría morfo-funcional (Correal y Van der Hammen 1977: Correal 1979, 1990: López 1991). 2.2. Otras Muestras 2.2.1. Carból/ Vegetal Las muestras de carbón provienen de las diferentes excavaciones y de los suelos procesados en laboratorio por medio de flotación. Este carbón fue cuidadosamente limpiado. seleccionado y rotulado. Se diseñó un formulario donde se consignó tOda la información de las muestras de carbón obtenidas en excavación y flotamiento: número de muestra, sitio, procedencia, tipo de muestra, litros de suelo flotndos, peso y análisis a realizar. 2.2.2. SI/e/os Se tomaron muestras de suelos para tres tipos de análisis diferentes. El primer lipa fue el estudio de cnracterizaci6n de suelos v fósforo total. En los sitos excavados también se recoleCtaron suelos para ser flotados y obtener más muestras de carbón y restos botánicos. El tercer tipo de muestra fue utilizado para el análisis palinológico. METODOLoclA 31 2.2.3. Macrorestos Dentro de las muestras de suelos flotados se recuperaron granos y fragmentos de tusas de maíz; las cuales fueron limpiadas mecánicamente y con xilol, posteriormente se consolidaron con paraloid. 3. INFORME FINAL En la fase final de la investigación se integraron todos los estudios especiales (paisajes, suelos, polen y radiocarbono), junto con los datos arqueológicos; una vez condensada y analizada toda la información, se redactó el informe final. Capítulo IV LA EXPLORACIÓN ARQUEOLÓGICA l. U\ EXPLORACiÓN El objetivo general del proyecto era el de localizar y evaluar los recursos arqueológicos de la región de Roncesvalles, con el propósito de obtener información que se pudiera relacionar con la historia cultural de las sociedades prehispánicas que habitaron las vertientes de la cordillera Central, en el actual departamento del Tolima. Por lo tanto, a nivel metodológico se realizaron una serie de prospecciones con el fin de localizar sitios arqueológicos y posteriormente adelantar excavaciones parciales en los asentamientos más representativos. En cada posible sitio arqueológico se hicieron recolecciones superficiales de materiales cerámicos y líticos (si eran observados en superficie) y pozos de sondeo, a través de todo el sitio, para determin<lr el tamaii.o del mismo, la estratigrafía, la densidad y profundidad cultural del asentamiento. Con el propósito de generar los resultados de terreno se efectuaron cuatro temporadas de campo, la primera de quince días de prospección (entre julio y agosto de 1996), la segunda de veinte días de prospección y excavaciones (entre noviembre y diciembre del mismo afiO), la tercera de veinte días (en agosto de (997) y diez días en febrero de 1998 con el fin de desarrollar las últimas excavaciones. Inicialmente, se realizó un recorrido en vehículo con el fin de hacer un reconocimiento general del paisaje de la región y observar las posibilidades arqueológicas del mismo para determinar. con tina mayor aproximación, en qué áreas se debería centrar el trabajo de campo; razón por la cual se adelantó un reconocimiento de la cuenca del río Cucuana a lo largo de su angosto valle y del suave callón que forma hasta la depresión de L.... Yerbabuena a unos 3700 msnm, en los límites con el Valle del Cauca. 34 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL Fulu l. Panorámica dc la cabccera municipal de Roncesl'alles, Tolima. Folo 2. Vista panorámica de la clIenea del río Cucuana. LA EXPLORACIÓN ARQUEOLÓGICA 35 En general, La Yerbabuena es una zona con un paisaje de tierra fría y de páramo donde no fue posible determinar rasgos arqueológicos sobre el terreno (Tambos), sin embargo por sus suaves características topográficas es una ruta natural que fácilmente permite la comunicación entre los dos lados de la cordillera Central (Foto 2). De la misma forma se recorrieron parte de las veredas San José, San Marcos y Oinamarca, tomando el carreteable que de Roncesvalles conduce al corregimiento de Sama Helena. Se recolectaron materiales superficiales (cerámica y líticos), en terrenos removidos por actividades agrícolas actuales, en las fincas Orinoco, Curubera y Holanda. Al inspeccionar la topografía y el paisaie de las veredas recorridas fue posible observar, sobre las lomas, áreas planas con probabilidades de contener restos materiales de asentamientos precolombinos. Finalmente, se visitaron las veredas El Diamante V El Mirador (localizadas al noreste de la cabecera municipal), regiórl donde el río Cucuana se empieza a encañonar profundamente y las lomas presentan un relieve mucho más inclinado, al igual que una transición a un área fisiográfica de clima medio. Las posibilidades arqueológicas en esta parte fueron muy pocas, por el paisaje tan accidentado. Una vez finalizados los recorridos antes descritos Vdebido a dificultades de orden público y logístico, se decidió que ló mas prudente sería desarrollar los trabajos de exploración arqueológica en inmediaciones de la cabecera municipal de Roncesvalles, en diferentes predios que pertenecen a la cuenca alta de los ríos Cucuana y Cucuanita (Fig. 1). A continuación se presentan los diferentes predios que se prospectaron (Fotos I y 2). 1.1. Rosales, Londresy Siberia La prospección arqueológica se centró al norte de la población, sobre una serie de lomas altas que bordean el pequeilo valle v cañón del río Cucuana; la topografía se caracteriza por ser desde suave hasta bastante quebrada. El primer predio explorado fue Rosales, antigua hacienda, hoy repartida en parcelas. Sobre las cimas y costados de las lomas, entre los 2.460 y 2.600 msnm, se observaron agrupaciones de áreas planas, desafortunadamente alteradas por labores agrícolas en las cuales no fue posible adelantar lrabaios arqueológicos (Foto 3). Inmediatamente al noreste de Rosales se encuentran las haciendas Londres y Siberia, las cuales también fueron objeto de una detenida explor;.ción arqueológica. E1Hre los 2.480 y 2.700 msnm se obser- 36 EXPLORACIONES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL Foto J. Relicve de lomas con cimas planas (Haclcndas Rosales)' Londres}. Folo 4. Paisajc de alta montaña en la haclcnda La :::'Ibcrla LA EXPLORACIÓN ARQUEOLóGICA 37 varan, sobre las lomas, agrupaciones de plataformas artificiales de regular tamailo y terraZ<ls nmurales muy grandes (algunas con un área mayor a los 1500 m~); varios de estos sitios conservan uno o más huécos grandes de antiguas actividades de guaquería. En general, sobresalen por la ausencia de un estrato o capa cultural sobre el área plana y de rellenos sobre los costados, indicando que su función debió ser para actividades agrícolas o funerarias (Foto 4). 1.2. Buenos Aires Posteriormente, los trabajos de prospección continuaron en la finca Buenos Aires, donde se exploró una loma cuyo filo más alto se encuentra a una altura de 2.450 msnm, lugar donde se ubicó una gran terraza de forma semiovalada (terraza uno). Las diferentes pruebas realizadas indican que es le sitio fue modificado con cortes y rellenos artificiales, conservándose un horizonte con elementos culturales sobre el borde de la terraza. Descendiendo esta loma se encuentra un conjullto de 19 plataformas o tambos de menor tamallo, formando un patrón de asentamiento disperso; de este grupo se sondearon ocho wmbos (en total se realizaron 147 pozos de prueba en tod<l la 10m<l). Los sondeos realizados en la parte baja de la loma sCllalaron que en esa zona también se realizaron modificaciones a la topografía natural, para acondicionar el sitio como área habitacional (terraza dos, Figs. 2 y 3; Foto 5). 1.3. La Granja La prospeCCión arqueológica continuó en la finca La Granja, predio adyacente a Buenos Aires (vereda San Marcos), Sobre el filo más alto de una extensa loma que baja al río Cucuana (2470 a 2360 msnm), se identificó un patrón de asentamiento indígena ,:onformado por grandes plataformas artificiales (en algunas hay huecos producto del saqueo de los sepulcros) v en la zolla de alturas medias se distribuyen tambos o plataformas de menor tamai\o (ocho en total). Se prospeetaron detenidamente cuatro de ellos, de los cuales sobresale el codificado con el número tres por su gran I.amailo (712 ll1~de superficie), por una pared posterior mayor a los 5 m de altur;\ y por su buen estado de preservación (Figs, 2 y 8; Fotos 6, 11 Y 12). En general este yaCimiento fue seleccionado para realizar varios cortes arqueológicos con el fin de poder documentar el período de construcción del mismo, por medio de cronología absoluta y tratar de buscar ocupaciones más antiguas. 38 EXPLORACIONES ARQUEOLÓCICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL r , z -- ..... ,. , n ,ue ~ut:.. eo.~'.elo." L ""lIIUS e el"'" •~ • u,,,, ""QUroI.o _ L'.U ,,~ "!O ".l<J&u RONCESVALLES-TOLIMA ~1'IOIIl.I'l. II:MIIlAl. lIe"L":· _ • ___ e"MlNO ~c,,=_o a•• ·_"..o • e.osU . ,~ :.tS _ . . 'c_.... '·b.nCh Figurll Z. LA EXPLORACIÓN ARQUEOLlx;ICA 39 40 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL 1.4. El Jordáll El lindero entre las fincas La Granja y El Jordán carla una serie de cuatro planes o terrazas dispuestas sobre el filo de la loma (Figs. 2 y 8), en algunas hay huecos de gran tamaií.o que corresponden a las tumbas saqueadas a comienzos de este siglo. Es importante resaltar el trabajo de ingeniería y remoción de tierra hacia el frente de las terrazas, el cual permite observar el corte de la pared trasera que en algunos casos alcanza alturas superiores a los 4 m (Figs. 2 y 8; Foto 6). Sobre el costado oriental, a una distancia de 33 metros de este grupo de grandes espacios modificados se localizó otra terraza de gran tamaño (codificada con el número uno). Fue sometida a una rigurosa prospección. Se practicaron pozos y sondeos con mediacai'ía, los cuales permitieron observar la estratigrafía y la forma C0l110 un relleno artificial cubrió parte del borde y del área plana del sitio. Por su buen estado de conservación y por la gruesa capa de relleno (70 a SO cm de profundidad), este sitio se seleccionó para adelantar excavaciones parciales, por medio de cortes de diferentes tamaií.os (Fotos 14 a 16). La parte baja de esta terraza es una loma de pendientes suaves, en la cual se observan pequeií.os y medianos sitios de vivienda esparcidos sobre los diferentes filos; varios de ellos se sometieron a sondeos los cuales no reportaron horizontes culturales bien conservados. 1.5. Patio BOllitoy El Reflejo También, fue objeto de prospección la finca Patio Bonito, un pequeño predio localizado en inmediaciones del casco urbano, al noroeste del mismo; en este lugar se realizó una recolección superficial de materiales cerámicos con características burdas, revueltos con tiestos delgados y finos, lo mismo que evidencias de guaquería en la parte mas alta y central del sitio, área donde se adelantaron excavaciones arqueológicas. Otra de las fincas visitadas en cercanías del área urbana fue el Reflejo, en la vereda Cucuanita; se registró una tumba guaqueada, de la cual se recuperaron dos dijes en concha marina y un fragmenlo de cristal de roca (Fig. 30: 5 y 6). Se realizó una prospección con pozos de sondeo y una recolección superficial en un potrero recién arado. Este sector presenta una lopografía de pequeií.<ls lomas COll cimas planas, donde no fue posible localizar mas tumbas. LA EXPLORACIÓN ARQUEOLóGICA 41 ;..; -" "o ~ - "" ""N O ""• O ~ e E ~ ~ ,"íC •o "" ~ " 5 " ~ o o :¡: > o ~ ""OO JO o ;; "§ o '§'" O "o ~ ~ •e O O ~ "" o E " ~ " ~ O O ~ 42 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL .~ I ! I . .'O~ t . -. t;l7J ". ~.- . ---~'-.~, • -. -- .