Por qué necesitamos orar
Transcripción
Por qué necesitamos orar
Jorge Himitian www.jorgehimitian.com Sitio oficial ¿POR QUÉ NECESITAMOS ORAR? Silvia Himitian La oración es una necesidad en todo tiempo: ¿Está alguno entre vosotros afligido? Haga oración. ¿Está alguno alegre? Cante alabanzas. (Santiago 5.13) LA ORACIÓN ES UN ESPACIO DE ENCUENTRO - No depende de las palabras, del mucho hablar. Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. (Salmo 37.7) No te des prisa con tu boca, ni tu corazón se apresure a proferir palabra delante de Dios; porque Dios está en el cielo, y tú sobre la tierra; por tanto, sean pocas tus palabras (Eclesiastés 5.2). - Es una actitud. Tiene que ver con entrar a la presencia para estar en comunión con él. Se trata de una disponibilidad de espíritu que no acaba en el momento en que nos levantamos de nuestro recogimiento para continuar con las actividades del día (no «colgar el teléfono»). Orad sin cesar (1 Tesalonicenses 5.17). - Debe haber un ida y vuelta. Le hablamos a Dios y él nos habla. Muchas veces él no nos habla en palabras, sino que produce una operación interior en nuestro espíritu. El Señor nos ministra lo que necesitamos. Es importante permanecer en su presencia en silencio tanto como lo es elevar oraciones. He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo (Apocalipsis 3.20). ¿Por qué necesitamos orar? – Silvia Himitian pág. 1 Jorge Himitian www.jorgehimitian.com Sitio oficial LA ORACIÓN ES UN OASIS EN EL DESIERTO INTERCESIÓN - Podemos transformar nuestros temores en oración. (Eso hace huir al enemigo, porque le arrebatamos el arma del temor de las manos). Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias (Filipenses 4.6). - Podemos interceder por los hermanos. Así que Pedro estaba custodiado en la cárcel; pero la iglesia hacía sin cesar oración a Dios por él (Hechos 12.5). - Podemos interceder por todos los hombres y en especial por los que gobiernan. Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres; por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad. Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador, el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad (2 Timoteo 2.1-4). En la oración podemos: - Perseverar juntos Todos éstos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus hermanos (Hechos 1.14) - Perdonar Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas (Marcos 11.5). ¿Por qué necesitamos orar? – Silvia Himitian pág. 2 Jorge Himitian www.jorgehimitian.com Sitio oficial - Ser fortalecidos Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios. (Hechos 4.31) ...mira sus amenazas, y concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu palabra... (v.29) ...alzaron unánimes la voz a Dios... (v.24) “No temáis, manada pequeña, porque a vuestro Padre le ha placido daros el reino” (Lucas 12.32) Entonces Jehová le dijo (a Abraham): Por cuanto el clamor contra Sodoma y Gomorra se aumenta más y más, y el pecado de ellos se ha agravado en extremo, descenderé ahora, y veré si han consumado su obra según el clamor que ha venido hasta mí; y si no, lo sabré (Génesis 18.20-21). Y se apartaron los varones y fueron hacia Sodoma; pero Abraham estaba aún delante de Jehová. Y se acercó Abraham y dijo: ¿Destruirán también al justo con el impío?... ¿no perdonarás ... por amor a los cincuenta justos... por amor a los cuarenta ..., a los treinta ..., a los veinte..., a los diez?.. Entonces Jehová hizo llover sobre Sodoma y sobre Gomorra azufre y fuego de parte de Jehová desde los cielos; y destruyó las ciudades, y toda aquella llanura, con todos los moradores de aquellas ciudades, y el fruto de la tierra ... cuando destruyó Dios las ciudades de la llanura, Dios se acordó de Abraham, y envió fuera a Lot de en medio de la destrucción, al asolar las ciudades donde Lot estaba. (Tomado de Génesis 18 y 19). ¿Por qué necesitamos orar? – Silvia Himitian pág. 3