Lea aquí el REPORTAJE Cuando no se puede ir en contra de la

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Lea aquí el REPORTAJE Cuando no se puede ir en contra de la
Diversidad sexual en Chile
Cuando no se puede ir
en contra de la naturaleza
Ser lesbiana en Chile es sinónimo de prejuicios y discriminación. Muchas lo notan desde pequeñas,
porque encuentran que hay algo ‘’raro’’ en ellas. Pero ese adjetivo impuesto por la sociedad ha
hecho que, para las mujeres lesbianas, sea más difícil aceptarse y, para qué decir, confesarse ante
otros. Pero no están solas, son varias las organizaciones en Chile que ofrecen ayuda y apoyo a
quienes se sienten desprotegidas.
Por Ángela Bielefeldt C.
Santiago, julio de 2015
Claudia Cordero (18), estudiante de la Universidad Diego Portales, asumió hace cinco años que era
lesbiana. “Fue un proceso lento. Desde los siete me di cuenta que me fijaba más en las mujeres.
Pensaba que no quería ser lesbiana y traté de evadir las cosas que sentía, hasta que ya no pude
más”, señala.
Como ella, son muchas las mujeres que pasan por esto de manera silenciosa y con temor a lo que
el resto pueda pensar. Lo peor, dice ella, es tener que contarlo. “Mi mamá se enteró porque una
vecina le contó que me había visto besándome con otra mujer. Se enojó porque no le había
contado, pero también porque no le parecía bien”, dice.
Karin Farías (18), estudiante de Calama, tuvo mejor suerte. “Cuando era chica mis amigas me
molestaban y me trataban mal cuando les decía que me gustaba una niña, y pensé que mi mamá
sería igual. Pero al contarle, ella me apoyó y hasta me confesó que ya se había dado cuenta”,
comenta.
Uno de los pocos estudios sobre lesbianismo realizados en Chile por el Centro Latinoamericano de
Sexualidad y Derechos Humanos el año 2008, señala que el 65 % de las 233 lesbianas encuestadas
confesó haber sufrido burlas, seguido del 58 % que dijo haber sido víctima de insultos y amenazas.
Según el último informe publicado en 2014 por la agrupación lésbica chilena Rompiendo el
Silencio, los espacios laborales son los lugares de máxima autocensura para la mayoría, mientras
que, de acuerdo a la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos, las mujeres están
expuestas a sufrir actos de violencia debido a la inequidad de género que existe en la sociedad.
Carla Oviedo (36), directora del Movilh Mujer, se acercó a la organización como víctima. “Llegué
hace ocho años muy mal psicológicamente. Yo trabajaba en la empresa ‘Nuts4Nuts’ y fui víctima
de discriminación por mi orientación sexual, hasta que terminaron desvinculándome sin ninguna
explicación. El Movilh me apoyó psicológica y jurídicamente”, recuerda.
Movilh Mujer continuamente revisa políticas públicas junto a los ministerios de Salud (Minsal), del
Trabajo y el Servicio Nacional de la Mujer (Sernam). Con el Minsal están elaborando una campaña
de educación y reproducción femenina. “Estamos haciendo políticas para visualizar la realidad de
las lesbianas y entregamos apoyo con psicólogos”, explica.
Oviedo dice que ha habido un cambio paulatino en la sociedad. “Antes era difícil ver a mujeres de
la mano y las denuncias no se hacían. A través del Movilh hemos ido educando a la gente para que
denuncien”, manifiesta la directora.
Desde el 2013 al 2014, según el último informe del Movilh, hubo un aumento del 65 % en las
denuncias por casos de discriminación. Según Oviedo, estas cifras se explicarían no porque haya
más discriminación, sino porque la gente se está educando y se está atreviendo a denunciar.
Que lo sepan cuando ya no haya que contarlo
Catalina Sanhueza (17), estudiante del Instituto Comercial Blas Cañas de Santiago, dice que desde
chica notó que era “así”, pero no lo quería aceptar. “Lo encontraba raro, porque en mi familia
siempre le dieron ese sentido. Me decía que no podía hacerle eso a mi familia. Vi cómo rechazaron
a mi hermano cuando dijo que era gay, entonces me negué aún más a la posibilidad de serlo”.
“Mi mamá lo sospechaba, pero yo siempre se lo niego. La última vez que peleamos porque llegué
tarde, me dijo que quizás con qué hueona andaba hueveando”, dice la estudiante, y agrega que no
ha pensado en contarlo y que quiere que lo sepan cuando ya no haya que decirlo. “Me carga que
los héteros no tengan que decir lo que son y los homo tenemos que estar dando explicaciones”,
comenta.
Para Teresa Solar (32), directora de proyectos de la Fundación País para Todos, “los problemas se
producen cuando te preguntan si estás casada, porque es ahí donde se trata de ‘asexuar’ a la
pareja para evitar prejuicios”.
En la Fundación País para Todos se preocupan de generar espacios inclusivos dentro de
organizaciones, para los grupos que han sido discriminados, como los LGBTI (Lesbianas, Gays,
Bisexuales, Transgéneros e Intersexuales). “Nos coordinamos con organizaciones para la
generación de programas de sensibilización y políticas inclusivas. En este momento, estamos
trabajando con BancoEstado, el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes y un par de empresas
privadas”, explica Solar.
Teresa Solar tiene pareja hace siete años, y el próximo siete de mayo contraerá el Acuerdo de
Unión Civil (AUC). La ley, que fue promulgada en abril pasado, crea el estado de conviviente civil
tanto para parejas homosexuales como heterosexuales, regula los bienes de los convivientes y
considera la relación de parentesco entre ellos y con sus familiares.
La incógnita, dice Solar, es que no está resuelto qué pasa con la tuición de los hijos. “A la fecha, lo
único que se sabe, es que desde el 22 de octubre se puede ir a pedir hora en el Registro Civil”,
señala.
Marina Reginato (19) y Mitzi González (30) se conocieron en Upac, un club deportivo de
cheerleader chileno, y ya llevan un año y cuatro meses juntas. Ambas asumieron que sentían
atracción por el mismo sexo cuando tenían 16 años, a pesar de que las dos tuvieron parejas del
sexo opuesto anteriormente.
En la casa de Reginato el tema ha sido complejo. ‘’Mi mamá lo descubrió porque me vio
besándome con una mujer. Lo tomó muy mal y me mandó al psicólogo. Pero con el tiempo ha ido
aceptándolo. Mi papá es muy conservador y no ha podido asimilarlo todavía’’, afirma.
Marina tiene una hermana gemela que es hétero. ‘’Mi hermana lo aceptó desde el principio,
porque me decía que mi felicidad era lo más importante. Mi hermano estuvo harto tiempo sin
hablarme, pero ya se le pasó’’, declara la deportista. En el círculo familiar de Mitzi pasa todo lo
contrario. ‘’A la Marina la adoran y siempre viene a la casa, pero yo he ido solo una vez a la de ella.
Su papá no me puede ni ver’’, dice González.
Ladys, camionas y al medio chilenas
En Chile, además de los diversos grupos oficiales que existen relacionados con la diversidad sexual,
son varias las páginas en Facebook vinculadas al tema. Ladys, camionas y al medio chilenas es una
de los que tiene más integrantes, con cerca de 14.000.
El grupo se define para mayores de 13 años y cualquiera puede mandar una solicitud y esperar ser
aceptada por las administradoras, todas jóvenes de alrededor de 20 años. En él, las chicas se
expresan, debaten y comparten sus números telefónicos.
Libet Contreras (22), estudiante de Chillán, decidió crear a fines de mayo de este año un grupo
para mujeres homosexuales. Lesbianas Chile +18 es el nombre de la página que ella y su pareja
administran. “Hice el grupo porque encontré que no había espacios para lesbianas mayores de
edad que buscan relaciones más serias. Todos los otros grupos están llenos de niñas inmaduras
que no saben lo que quieren”, explica.
Contreras y su pareja revisan los perfiles de las personas que piden unirse al grupo para que
cumplan con los únicos dos requisitos: ser mujer y tener más de 18 años. La página ya tiene 83
miembros y en ella se comparten historias, datos y contactos.
La periodista Erika Montecinos creó en 2002 el sitio RompiendoelSilencio.cl como una revista
digital dirigida a lesbianas. Frente a la inexistencia de medios tradicionales, optó por uno online. La
revista impresa pudo hacerse realidad en 2008 y se distribuyó en Chile, Argentina, Colombia y
México, hasta que dejó de circular en 2011.
Montecinos también es la directora de la agrupación lésbica Rompiendo el Silencio. “El nombre lo
escogí porque refleja el proceso de silencio que viven las lesbianas. Preferí la palabra rompiendo,
en vez de romper, porque este es un proceso progresivo y lento para muchas mujeres, no es de
sopetón”, dice su directora.
La agrupación se encuentra trabajando con el Minsal en relación a su campaña sobre los derechos
sexuales para la población LB (Lesbianas y Bisexuales). “En abril hicimos el lanzamiento de la
campaña ¡Torta, no seas pastel! Atina con el autocuidado y a la inauguración asistió también la
ministra del Sernam, la directora del Instituto Nacional de Derechos Humanos y las diputadas
Maya Fernández y Camila Vallejo”, cuenta Montecinos.
El objetivo es difundir material de autocuidado y guías de sugerencias para que funcionarios de la
salud pública brinden una adecuada atención a este grupo. El video de la iniciativa, donde
participan Camila Merino, hija de la actriz Tatiana Merino, y la ex chica reality Viviana Flores,
ambas asumidas públicamente como mujeres lesbianas, ya cuenta con casi 90 mil visitas.
El año pasado, la agrupación de Montecinos expuso en la Cámara de Diputados abogando por las
madres lesbianas y el reconocimiento de sus hijos, demanda que fue rechazada. “De todas
maneras, para nosotros fue algo histórico porque, por primera vez, se escuchaba a una
organización lésbica, pero en las redes sociales no aparece nada”, confiesa la directora.
“Recién TVN hará un reportaje sobre nuestro trabajo, pero la visibilidad hacia las mujeres
lesbianas es difícil porque ésta es una sociedad machista a la que le cuesta ver a la mujer
empoderada en su sexualidad. Prevalece la imagen de la mujer que se casa y tiene hijos”, explica
Montecinos.
Hoy, Rompiendo el Silencio prepara un proyecto sobre filiación para madres lesbianas y está
trabajando junto a otras colectividades para organizar el Día de la Visibilidad Lésbica con el apoyo
de la Red Nacional de Oficinas de Diversidad.
Providencia contra la discriminación
Lorena Monsalve es jefa del Departamento de Diversidad y No Discriminación de la Municipalidad
de Providencia, inaugurada el 2013. En esta comuna se ha diseñado un evento especial durante el
8 y 9 de julio de este año para generar actividades culturales, reflexivas y promotoras de la
visibilidad lésbica.
La fecha escogida tiene un motivo trágico. El 9 de julio de 1984, un día después de su cumpleaños
número 34, Mónica Briones falleció producto de los golpes en la cabeza que le propinó un hombre
en pleno centro de Santiago, mientras le gritaba: “¡Así te quería pillar, lesbiana!”.
Su violenta muerte dio origen a Ayuquelén, la primera organización lésbica del país. La agrupación
reclamaba que la muerte de Briones fue el primer crimen lesbofóbico en Chile, pese a que la
policía catalogó el hecho como un accidente, y el caso fue sobreseído por la justicia en 1995 sin
haber identificado culpables.
La Municipalidad de Providencia se enfoca en tres de los 19 casos de discriminación que se
establecen en la Ley Zamudio, siendo uno de ellos la diversidad sexual. “En la municipalidad
atendemos casos, hacemos promoción, trabajo cultural y territorial y celebramos semanas de
diversidad sexual. Nuestro gran proyecto es potenciar a la población civil y a las organizaciones
para que desarrollen sus acciones promoviendo la no discriminación”, afirma Monsalve.
No se puede negar la naturaleza
Ingrid Nilsen (26) es youtuber estadounidense hace seis años y tiene tres millones de suscripciones
en su canal online. El pasado 9 de junio declaró a sus seguidores que es lesbiana a través de un
vídeo que tituló Algo que quiero que sepas. En el video, que ya tiene casi cuatro millones de visitas,
Nilsen confiesa que desde que era pequeña sentía atracción por las mujeres.
“Crecí en un ambiente donde la homosexualidad no era aceptada (…) Sentí la necesidad de tomar
esa parte y ponerla en una gaveta porque buscaba aprobación (…) Estuve constantemente
distrayéndome saliendo con chicos y suprimiendo lo que realmente sentía, viviendo en esta
silenciosa e infeliz vida, hasta que esta parte de mí empezó a salir y no había nada que yo pudiera
hacer para detenerla”, dice.
Nilsen dice que la frase de una canción la convenció de que tenía que ser sincera consigo misma.
“Y ahora sé que no puedo negar mi naturaleza”, dice la canción. “Ahí me dije: merezco una vida
plena. Ésta soy yo y ésta es la vida que siempre viví en mi cabeza y ahora es real”, finaliza el video.
Edgardo Riveros, psicólogo clínico, explica que las diferentes orientaciones sexuales son un
potencial humano que cualquier persona puede tener. “Lo que pasa es que en el transcurso de la
vida, la cultura que nos rodea hace que a las personas les sea más difícil abrirse a descubrir su
orientación sexual. Es difícil descubrirlo y me alegro de que la gente lo pueda encontrar. No creo
que exista algo negativo o patológico”, concluye Riveros.
El próximo sábado 27 de junio a las 14 horas las lesbianas, así como también todos los que formen
parte de las siglas LGBTI, marcharán por el centro de Santiago para conmemorar por decimoquinto
año consecutivo el Día del Orgullo y de los Derechos Humanos de la Diversidad Sexual. El recorrido
comenzará en Plaza Italia y finalizará en las cercanías de la Torre Entel con un show que contará
con la participación de artistas como Villa Cariño.