Catálogo de Josefina Robirosa. Contiene 56 páginas. - No

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Catálogo de Josefina Robirosa. Contiene 56 páginas. - No
Josefina Robirosa
6 de septiembre al 14 de octubre de 2012
Sala Cronopios, Centro Cultural Recoleta
Buenos Aires
Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires
Jefe de Gobierno: Mauricio Macri
Vicejefa de Gobierno: María Eugenia Vidal
Ministro de Cultura: Hernán Lombardi
Director General del Centro Cultural Recoleta: Claudio Patricio Massetti
Director Operativo de Programación y Curaduría: Elio Kapszuk
Director Operativo de Gestión de Operaciones: Carlos Villoldo
Director Operativo de Infraestructura y Funcionamiento Edilicio: Eduardo Tapia
Subdirectora Operativa de Investigación, Creación y Capacitación: Silvia Sánchez
Curador y Asesor de Artes Visuales: Renato Rita
Asesora General de Dirección General: María Rita C. de Fernández Madero
Asociación Amigos del Centro Cultural Recoleta
Comisión Directiva: Magdalena Cordero, Alejandro Corres, Nora Hojman, Marlise Jozami
Josefina Robirosa es una de las maestras del arte contemporáneo en la Argentina. Desde el Ministerio de Cultura de la Ciudad
de Buenos Aires celebramos una nueva exposición de esta artista que ha desafiado permanentemente su poder de creación a
lo largo de una extensa y reconocida trayectoria que se inicia en la década del 50.
Con la humildad de los grandes nombres, Robirosa nunca se ató a ningún movimiento o grupo, su personalísima obra todavía
sorprende. Su pintura es su mundo, Josefina Robirosa es una de esas artistas que profundiza sobre el camino y lo hace desde
una fuerte creencia a partir de lo vivido, de lo propio como un sello inconfundible.
Dice Robirosa que pinta para buscar, para ver y quienes miramos su obra sentimos el desafío de descifrar ese mensaje oculto
entre las luces, los distintos materiales, las transparencias y las texturas en sus telas y su construcción.
Su primera etapa estuvo signada por la abstracción y el dibujo sobre papel; el equilibrio y el misterio parecen definir su pintura posterior.
El arte de Robirosa es estímulo visual y emocional, siempre cambiante pero esencialmente el mismo.
Hernán Lombardi
Ministro de Cultura
Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires
Conocí a Josefina Robirosa en el año 2000; entonces yo dirigía el Palais de Glace y ella había sido designada jurado del
Salón Nacional por el voto de los artistas, junto con Eduardo
Medici. Aquel jurado se completaba con la designación de
Julio Le Parc, Antonio Seguí y Clorindo Testa por parte de
la Secretaría de Cultura. Desde el primer momento quedé
fuertemente impactado por la personalidad abierta y comunicativa de Robirosa, expresando con claridad sus opiniones
y volcando el caudal de sus conocimientos, que respondía a
sus intuiciones y a su extensa experiencia en el arte.
Hoy, ante su muestra especialmente preparada para la
sala Cronopios, vuelvo a encontrar -ahora en las obras- la
marca de su irreductible singularidad, que ha crecido hasta
volverse paradigmática.
Iniciada en la mitad del siglo en la que el arte emprendía
nuevas aventuras, la trayectoria de Robirosa -no obstante los profundos cambios operados en sus imágenes- podría describirse como un ahondar en su propio imaginario,
siempre en constante transfiguración. Si observamos su
vínculo profundo con la naturaleza, es fácil advertir que la
artista, teniendo el follaje como un bajo continuo, ha establecido intrincadas abstracciones y deliberadas topologías
en su profundo diálogo ininterrumpido con el paisaje.
Por otra parte, las obras más recientes, esos magníficos
pájaros tridimensionales que cuelgan como móviles dispuestos a volar, tienen un cierto parentesco con las primeras abstracciones líricas con las que la artista inició su
camino, pero con más vuelo y gran impacto visual.
Presentar a Josefina en el Centro Cultural Recoleta, es
un honor y también un placer por su creatividad símbolo
de mujer perseverante y del trabajo continuo en el camino
del arte.
Claudio Patricio Massetti
Director General
Centro Cultural Recoleta
Josefina Robirosa pinta, es alta, acaba de cumplir ochenta
años y dice todo lo que piensa. Son cuatro atributos que
nos pueden ayudar a reconocerla. Es curioso como se le
da forma a la identidad, es una suma entre lo dado y las
elecciones que uno hace, lo que se recibe como herencia
cultural y genética y qué crea uno con ello. Qué es lo que
decidimos olvidar y qué recordar y cuánto se está dispuesto
a honrar en acciones los valores que nos nutrieron.
Esta muestra de Robirosa nos acerca una instalación
pensada y realizada especialmente para la sala Cronopios,
se trata de pinturas en forma de pájaros; muchos pájaros
tridimensionales se hacen cargo del espacio generando
una presencia simbólica de todos los significados que la
cultura de distintas geografías le ha dado a estas criaturas:
la vida, la muerte, los sueños, los malos y buenos augurios, el espíritu, la valentía, la recuperación de la dignidad
y también la esperanza.
La primera vez que Josefina pintó estas aves fue para un
proyecto familiar. Me contó que cuando era chica y falleció su abuelo su familia se dividió en disputas y por eso
hace algunos años, cuando se dio la oportunidad, propuso
armar un restaurante donde todas las generaciones de su
familia, hijos y nietos sean partícipes: Ahí nacieron los pájaros, como testigos de la reparación que puede producir
un acto del corazón.
Que la poesía se transforme en letra o pincelada, en papel o tela es solo una circunstancia. Al entrar en la sala
encontrarán un texto de cuatro renglones, donde ella comparte la misión de sus pájaros y su compromiso como artista testigo de su tiempo. El contenido me remitió a dos
poemas que siempre me habían gustado, pero que no se
me habían unido en el pensamiento, de dos poetas indispensables para nuestra identidad: Julio Cortázar y Alejandra
Pizarnik. Entonces estos textos se intercalaron, una forma
de “remix” poético, donde no es difícil reconocer la voz
de cada uno pero tampoco su vuelo armonioso (o no) que
produce el conjunto:
“Imaginaba celebrar la vida con un símbolo perfecto: el vuelo
de los pájaros.
Pero uno de ellos que vive su luto reclamó poder encarnar la
impotencia que acompaña nuestros días. Los testigos de su
actitud apoyamos su rotundo derecho a optar entre la voz y
el silencio.”
“Ahora escribo pájaros.
No los veo venir, no los elijo, de golpe están ahí, son esto,
una bandada de palabras
posándose una a una en los alambres de la pagina,
chirriando, picoteando, lluvia de alas
y yo sin pan para darles, solamente dejándolos venir…”
“Señor
La jaula se ha vuelto pájaro
Que haré con el miedo.”
Sean todos bienvenidos a esta muestra, contundencia de la
fuerza de voluntad de una idea y su materialización.
Elio Kapszuk
Director Operativo de Programación y Curaduría
Centro Cultural Recoleta
“¡Gratitud del vuelo!… El prolongarse del vasto deseo es tal,
y de tal poder, que a veces les imprime ese ladeo del ala,
visible en el fondo de las noches australes sobre el armazón
desfalleciente de la Cruz del Sur…”
Pájaros, Saint-John Perse
La umbrosa voluptuosidad del bosque es la enigmática escena que rige un importante período de las construcciones
icónicas de Josefina Robirosa. Súbitamente, como ante el
estampido seco del arma del cazador, un desbande impetuoso de pájaros cubre el ámbito de la Sala Cronopios
del CCR. Detenidos en la simbólica ficción, bosques y pájaros, medio y consecuencia, lugar y fenómeno, donde la
vida se nutre con milenaria asistencia están los árboles
que nos sobreviven y los pájaros que nos alientan, desde
el águila de visión telescópica al cegato kiwi de nocturnas
preferencias.
No es ausente al onírico empeño el difuso habitante del
bote ensimismado con el agreste contexto.
De esta manera diseña Robirosa el campo óptico que le
instila la memoria del campo, memoria hechizada de aromas y formas caprichosas donde creció su estirpe.
Este desbande epifánico que nos dedica Josefina no olvida que el pájaro negro conserva su talla agorera en la deseada travesía triunfal.
Renato Rita
Curador y Asesor de Artes Visuales
Centro Cultural Recoleta
Bandas cromáticas emergen con fuerza en la
década del 60. Progresiones y líneas diseñan formas
geométricas, siluetas difusas o figuras humanas de
colores vibrantes nos intoroducen al universo de
la artista...
Josefina siente al arte como una experiencia humana
de libertad donde el propio mundo interior se
despliega sin represiones ni racionalizaciones vanas.
Pintar fluyendo sin tiempo y sin restricciones
materiales convierte al hecho artístico en una
experiencia meditativa que lanza a Josefina en un
camino muy propio tramado por su intransferible
experiencia vital.
Sin título, 1972
Óleo sobre tela. 70 x 70 cm.
Colección Fundación arteBA
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Forasteros II, 1969
Óleo sobre tela. 150 x 150 cm
Colección Albright Knox Gallery
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Sin título, 1969
Óleo sobre tela. 40 x 30 cm
12
Sin título, 1968
Óleo sobre tela. 100 x 100 cm.
13
Sin título, 1968
Óleo sobre tela. 95 x 84 cm.
14
Pintura II, 1968
Óleo sobre tela. 50 x 40 cm
Colección Blanton Museum of Art
15
Sin título, 1968
Técnica mixta sobre papel. 32 x 42 cm
Página opuesta:
Espacio, 1968
Óleo sobre tela. 146 x 113 cm
Colección Banco Ciudad
Páginas 18-19:
Sin título, 1968
Acrílico sobre dos planchas de acero inoxidable,
montadas sobre bastidor de madera. 220,2 x 401 cm
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Esferas, 2012
Pintura sobre resina poliéster. 75 cm de diámetro cada una
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Sin título, 2010
Técnica mixta sobre tela. 41 x 41cm
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Sin título, 2010
Técnica mixta sobre tela. 41 x 41cm
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Sin título, 2010
Técnica mixta sobre tela. 61 x 102 cm
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Sin título, 2010
Técnica mixta sobre tela. 102 x 145cm
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Imaginaba celebrar la vida con un símbolo perfecto:
el vuelo de los pájaros. Pero uno de ellos que vive su luto
reclamó poder encarnar la impotencia que acompaña
nuestros días. Los testigos de su actitud apoyamos su
rotundo derecho a optar entre la voz o el silencio.
JR
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La pintura es para quien pinta un sendero abierto hacia
su inconsciente… Alguna vez me señalaron que mis
bosques se asemejaban a cerebros y que reflejaban el
movimiento de mi vida interior.
Al principio estas zonas frondosas tenían una entrada
que podía vislumbrarse desde arriba: se trataba de una
cavidad oscura que reflejaba la propia incertidumbre
respecto de mi existencia. Pero progresivamente se
sucedieron cambios en mi vida que atrajeron luz y
entonces empecé a dejar horizontes de apertura hacia
lo luminoso.
Un día me invitaron a una exposición en la Biblioteca
Nacional para recordar el Día de la Tolerancia donde
concreté estas imágenes en las que la oscuridad dio
lugar a la apertura de múltiples horizontes de luz,
dando cuenta de la diversidad humana a través de
muchos arbolitos con su sombra y se llamó Cada uno
tiene su luz.
JR
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Sin título, 1978
Acrílico sobre tela. 60 × 60 cm
40
Sin título, 1978-79
Óleo sobre tela. 100 × 130,5 cm
41
Sin título, 1993
Técnica mixta sobre papel. 100 × 70 cm
42
Sin título, 1995
Acrílico sobre tela. 100 × 100 cm
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Cadena de árboles, 1996
Óleo sobre tela. 120 x 120 cm
Colección Banco Ciudad
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Cada uno tiene su luz, 1995
Óleo sobre tela. 130 x 160 cm
Colección Ana María Chiesa
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Luz pleagada, 1987-1998
Óleo sobre tela. 130 x 160 cm
Página opuesta:
El agua y su garganta II, 1996
Acrílico sobre tela. 220 ×170 cm
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Sin título, 2006
Acrílico sobre tela. 40 x 60 cm
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Yo pinto.
Desde hace años, desde que era chica, desde que era
distinta a como soy ahora, durante todo el tiempo que
estuve construyendo esto que soy, esto que pinto.
Para mí, esta pintura que saco de mi casa, de mi taller,
esta pintura que cuelgo delante de la gente, no es
mi ropa.
Ni siquiera mi piel o mi cabeza.
Mi pintura soy yo y esto suena tan simple que no sé si
debo decirlo.
Pero debo decirlo para que se entienda por qué no
puedo hablar de mi pintura.
Sería como pararme delante de la gente a hablar de
mí y esa tarea me llevaría otros 34 años con sus días
y sus noches y uno nunca sabe bien algunos días y no
hablemos de los sueños.
Además, sería otro oficio.
Además, está el pudor.
También está mi pintura colgada de las paredes, de los
techos.
Cuando uno está seguro, no hay pudor que valga.
Me llamo Josefina Robirosa. Soy Josefina Robirosa.
Mi pintura se llama como yo.
Yo soy esta pintura y que Dios me ayude.
JR
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Nace en Buenos Aires, Argentina en 1932. Estudio pintura
1987 Galería Época, Santiago de Chile, Chile.
con Héctor Basaldúa.
1987 Instituto Ítalo-latinoamericano, Roma, Italia.
1988 Pekín, China.
Exposiciones colectivas en el exterior
1958 Museo de Arte Moderno, Montevideo, Uruguay.
1989 Fondo Monetario Internacional, Washington DC, EUA;
Bacardi Art Gallery, Miami, EUA.
1961 Museo de Arte Moderno, Río de Janeiro, Brasil.
1990 Ergane Gallery, Nueva York, EUA.
1964 Bienal de Lima, Perú.
1992 Ergane Gallery, Nueva York, EUA.
1968 Casa de la Cultura Ecuatoriana, Quito, Ecuador.
1991 Latin Art Gallery, Nogoya, Japón.
1970 Albright – Knox Art Gallery, Buffalo, EUA.
1994 Hong Kong Visual Arts Centre, China.
1971 Camden Arts Centre, Londres, Inglaterra; Kunsthalle,
1996 Museo Cuevas, México.
Basilea, Suiza; Galerie Christoph Durr, Múnich,
Alemania.
1972 Rheinisches Landesmuseum, Bonn, Kunsthaus,
Hamburgo, Alemania.
1997 Buenos Aires – Montreal, American Club, Tokyo,
Japón; Galería Lilian Rodríguez, Montreal, Canadá.
1999 New Art Barcelona, España.
2002 FIFA, World Cup, Korea, Japón.
1977 Center For Interamerican Relations, Nueva York, EUA.
1979 Washington World Gallery, EUA.
Exposiciones individuales
1980 Museo Metropolitano de Arte de Tokyo, Japón;
1957 Museo Municipal de Bellas Artes Genaro Pérez,
Museo Municipal de Kyoto, Japón; Museo de Arte
Córdoba, Argentina.
Contemporaneo, Fukui, Japón; Museo de Arte
1959 Galería Bonino, Buenos Aires, Argentina.
Contemporaneo de la Prefectura de Kanagawa,
1961 Galería Bonino, Buenos Aires, Argentina.
Kamakura, Japón; Exposición “El dibujo en la
1964 Galería Bonino, Buenos Aires, Argentina.
Argentina”, España.
1967 Galería Bonino, Buenos Aires, Argentina.
1981 Centro Cultural Cantev, Caracas, Venezuela; Centro
1975 Galería Bonino, Buenos Aires, Argentina.
Cultural Villa de Madrid, España.
1978 Galería Bonino, Buenos Aires, Argentina.
1983 Galería Wiener Secession, Viena, Austria.
1963 Galería North, Buenos Aires, Argentina.
1984 Museo de América, Madrid, España; Maison de
1966 Kiko Galleries, Texas, EUA.
L’Amerique Latine, París, Francia; Museo de Arte
1981 Galería Rubbers, Buenos Aires, Argentina.
Moderno de San Pablo, Brasil; Academia Nacional
1999 Galería Rubbers, Buenos Aires, Argentina.
de Bellas Artes, Berlín, Alemania; Museo de Artes
2001 Galería Rubbers, Buenos Aires, Argentina.
Plásticas, Uruguay.
2004 Galería Rubbers, Buenos Aires, Argentina.
1985 Moscú, URSS.
2005 Galería Rubbers, Buenos Aires, Argentina.
1986 Museo Nacional de Artes Plásticas, Montevideo,
2006 Galería Rubbers, Buenos Aires, Argentina.
Uruguay.
1986 Galería Época, Santiago de Chile, Chile.
1982 Union Carbide, Buenos Aires, Argentina.
1984 Galería Ruth Benzacar, Buenos Aires, Argentina.
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1987 Galería Ruth Benzacar, Buenos Aires, Argentina.
1990 Galería Ruth Benzacar, Buenos Aires, Argentina.
1991 Galería Ruth Benzacar, Buenos Aires, Argentina.
1994 Galería Ruth Benzacar, Buenos Aires, Argentina.
1996 Galería Ruth Benzacar, Buenos Aires, Argentina.
1989 Banco Tornquist, Buenos Aires, Argentina.
1998 Museo de Bellas Artes, Buenos Aires, Argentina.
2002 Centro Cultural Recoleta, Buenos Aires, Argentina.
2012 Centro Cultural Recoleta, Buenos Aires, Argentina.
Sus obras figuran en
Museo Nacional de Bellas Artes, Buenos Aires, Argentina;
Museo de Arte Moderno, Buenos Aires, Argentina; Colección
Banco Ciudad, Buenos Aires, Argentina; Museo Tres Arroyos,
Buenos Aires, Argentina; Museo Genaro Pérez, Córdoba,
Argentina; Museo de la Universidad de Neuquén, Neuquén,
Argentina; Colección ITT, Colección Chase Manhattan, Nueva
York, EUA; Colección Albright Knox, Buffalo, EUA; Colección
Neiman Marcus, Texas, EUA; Colección Heini Thyssen, Suiza
y colecciones privadas de Buenos Aires, Europa y Estados
Unidos.
Josefina Robirosa en el Centro Cultural Recoleta
Diseño de Montaje: Gustavo Vázquez Ocampo
Artes Visuales: Responsable Verónica Otero
Productora: Natalia Prieto
Infraestructura y Funcionamiento Edilicio:
Responsable José Luis Fariña
Iluminación: Enzo Cuenca, Gabriel Marola, José Montero,
Roberto Orellana, Walter Roldán.
Realización Escenográfica: José Barrios, Marcelo Benítez,
Berlamino Escobar
Diseño Gráfico: Marius Riveiro Villar
Comunicación y Relaciones Institucionales:
Responsable Marisela Oberto
Coordinación Editorial: Ileana Stofenmacher
Comunicaciones Institucionales y Programación de
Fin de Semana: Susana Seoane
Coordinación de Visitas Guiadas: Inés Agazzi
Prensa: Carolina Ortú, Lucía Hernández, Facundo Galán
Sitio Web: Erika Hoffmann
Montaje: Responsable Horacio Vega
Martín Labonia, Arturo Aguilera, Miguel Viceconte,
Hernán César, Adrián Borda, Sebastián Carballeira,
Walter Blanco Cartagena, Rodolfo Martínez
Coordinación de Escenarios y Espacios de Arte:
Jorge Doliszniak
Sonido, grabación y video: Juan Carlos Solowej,
Claudio Deplante, Daniel De Lorenzi, Andrés Robledo
Coordinación de Recursos Humanos: Elsa García
Colaboraciones: María Cristina Olivieri, María del Carmen
La Macchia, Marta Rivera, Juliana Barbone,
Alicia Rodríguez, Raúl Santana.
Auxiliares de Sala: Coordinadora General Stella Casal
Silvia Carrizo, Claudio Amato Ruiz, Leandro Escobar,
Matías Machello, Valeria Mosquera, Fernanda Antonucci,
Mario Cigno, Alicia Iruretagoyena, Cristian Michaud,
Ramona Moya, Andrea Paolini, Gabriela Pasaragua,
Vanesa Soto.
Esta exposición se realizó con la colaboración de todo el personal del Centro Cultural Recoleta. Gracias a todos.
Se terminó de imprimir en septiembre de 2012
en Talleres Trama, Garro 3160/70, ciudad de Buenos Aires

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