Guía de la Excursión geológica a la región de Siquisique, estado Lara
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Guía de la Excursión geológica a la región de Siquisique, estado Lara
GEOLOGÍA DE LA REGIÓN DE SIQUISIQUE, ESTADO LARA (GUÍA ILUSTRADA PARA EXCURSIÓN GEOLÓGICA Y CURSO DE GEOLOGÍA DE CAMPO. INCLUYE MATERIAL DE ESTUDIO) Franco URBANI Caracas, Marzo 2006 1 INTEVEP Preimpreso. Tiene aceptación preliminar para ser publicado en el boletín Geos No. 39 (UCV, Caracas) GEOLOGÍA DE LA REGIÓN DE SIQUISIQUE, ESTADO LARA. (GUÍA ILUSTRADA PARA EXCURSIÓN GEOLÓGICA Y CURSO DE GEOLOGÍA DE CAMPO. INCLUYE MATERIAL PARA ESTUDIO Y DISCUSIÓN) Franco URBANI Geólogo, PhD Índice Guía Ubicación Organización del trabajo de campo Trabajos previos Contexto geológico general Material ilustrativo para ser utilizado y discutido en la excursión Paradas de las excursiones preparatorias Bibliografía Apéndice 1: Igneous rocks of the Siquisique region, state of Lara. COMPAÑÍA SHELL VENEZUELA (1965) DE Apéndice 2: Excursión a la region de Duaca-Barquisimeto-Bobare. BELLIZZIA & RODRÍGUEZ (1966). Apéndice 3: Las ofiolitas de Siquisique y Río Tocuyo y su relación con la falla de Oca. BELLIZZIA et al. (1972). 2 1. UBICACIÓN El área de estudio se encuentra en la Sierra de Baragua al norte del estado Lara. Se accede a través de la carretera nacional Barquisimeto – Churuguara. Cerca de Santa Inés se toma una carretera que lleva hacia el Oeste, pasando por el pueblo de Aguada Grande hasta llegar a Siquisique (donde nos alojaremos en una posada) (Fig. 1). 50 km Fig. 1. Mapas de ubicación. Fuente: httpp://www.encarta.com El círculo rojo de abajo indica la zona de estudio 3 2. ORGANIZACIÓN DEL TRABAJO DE CAMPO Materiales y equipos necesarios para el trabajo de campo: Cosas indispensables por equipo: Cada grupo separadamente deberá llevar lo siguiente: brújula geológica, metro "carpintero", libreta de campo, lápices, ácido clorhídrico al 10%. Bolsa plástica transparente tamaño carta para meter los mapas y que estos no se maltraten. Kit de primeros auxilios. Mapas: 1) Mapa topográfico del IGVSB a escala 1:25.000 (la zona de trabajo se encuentra entre Los Algodones, Qda. Las Petacas y el caserío de Urucure, al unos 10 km al O y NO de Siquisique, estado Lara. 2) Mapa geológico C-5-C a escala 1:50.000 de la Creole Petroleum Corporation (CPC 1960). Otras cosas sugeridas: Si el día no esta nublado la zona puede ser muy caliente, por ello se sugiere que cada persona individualmente lleve un morral contentivo de un mínimo de 1 ½ L agua por persona (o más según las necesidades individuales). Además: crema protectora solar, comida para el mediodía y machete con funda (por si acaso y uno por grupo). Ropa: pantalones largos, botas, gorro o sombrero. El instructor sugiere camisa mangas largas, pero muchas personas no las toleran en zonas calientes. Materiales para dibujo por grupo (para el trabajo en la posada): 2 hojas carta de papel milimetrado, 4 hojas carta de papel de dibujo (tipo albanene). Transportador, escalímetro, unos 5 creyones distintos, calculadora con funciones de seno y coseno (o tablas de seno y coseno separadas), lápices, gomas, sacapuntas. Preparación previa de los asistentes Estudiar la literatura de los anexos a esta guía, así como el trabajo de BARTOK et al. (1985) y la parte correspondiente a Los Algodones de la tesis doctoral de STEPHAN (1982). Igualmente leer las entradas en el "Código Geológico de las Cuencas Petrolíferas de Venezuela" (o "Código Scherer") (www.pdvsa.com/lexico) de las siguientes unidades: Barquisimeto, Bobare, Carorita, Matatere, Castillo, Agua Negra, Capadare, Cerro Pelado y Agua Clara ACTIVIDADES A REALIZAR El trabajo consiste en un breve entrenamiento general en geología de superficie. Se realizarán observaciones en afloramientos de rocas sedimentarias, considerando los aspectos sedimentológicos, estratigráficos y estructurales. Igualmente se observarán rocas ígneas (gabro y basalto-diabasa). 4 CRONOGRAMA Lunes: Viaje Caracas – Siquisique. Con explicaciones geológicas a través de la ruta. Martes: Excursión guiada: Zona de Los Algodones. Miércoles: Excursión guiada: Afloramientos de Matatere. Visita al Mene de la Quebrada del Petróleo y otras dos quebradas con olor a hidrocarburos. Ver también otros afloramientos, zonas de fallas, etc. Jueves: Cada grupo realizará una sección geológica de sitios distintos a ser asignados en la zona de Los Algodones. Viernes: Levantamiento de una columna estratigráfica con interpretación tentativa de ambientes sedimentarios. Sábado: Regreso a Caracas. 3. TRABAJOS PREVIOS Hay diversos trabajos inéditos realizados en el contexto de las exploraciones petroleras de las décadas de los años 1940´s a los 60’s, entre ellos resaltan aquellos liderizados por Otto Renz. La empresa Creole Petroleum Corporation, envía al campo cuadrillas liderizadas por C. B. WHEELER y Charlie C. JEFFERSON, quienes culminan sus informes en los anos 1958 y 1960, respectivamente. Ambos tuvieron el apoyo de la fotogeología previa de K. ROHR en 1949. Con estos trabajos, posteriormente se compila el conocido mapa C-5-C de 1962 (CPC 1962). La Compañía Shell de Venezuela realiza en forma corporativa la primera publicación formal sobre el área, con motivo a una excursión geológica guiada por el geólogo Gustavo Coronel en el ámbito de la Asociación Venezolana de Geología, Minería y Petróleo (ver anexo 1). Este trabajo incluye el mapa geológico mas detallado de la zona de Los Algodones (CSV 1965). BELLIZZIA et al. (1972) publica un resumen referente a los afloramientos de las rocas ígneas del norte de Siquisique (ver anexo 3). STEPHAN (1982 + publicaciones previas y posteriores) realiza un estudio en la zona de Los Algodones, cartografiando una unidad volcanosedimentaria, siempre asociada a una unidad ígnea (gabro + diabasa). Estas a su vez se encuentran en contacto tectónico (fallas de corrimiento) con el flysh de la Formación Matatere. Los aspectos más relevantes de este trabajo son resumidos por BELLIZZIA (1986). Este autor ubica a la Formación Matatere (III) como parte del Complejo Tectónico-Sedimentario Lara, mientras que las otras unidades mencionadas las incluye en su Unidad Siquisique-Río Tocuyo, como parte de la Napa de Tinaco-Tinaquillo. BARTOK et al. (1985) presenta un trabajo -en parte basado en informes previos de la empresa Shell-, donde sintetiza los aspectos más relevantes de la geología de la región, su importancia para el entendimiento de la evolución tectónica del norte de Venezuela. Realiza nuevos aportes paleontológicos (Amonites) del Jurásico Medio, que corresponden a las rocas sedimentarias marinas pre-Cretácicas más antiguas de la región centro-norte del país. BELLIZZIA (1986) resume la información de STEPHAN (1982) y adicionalmente propone algunos nombre de unidades, como Unidad Siquisique para las rocas volcánico-plutónicas, y Asociación Los Algodones para volcánico-sedimentarias. Un esquema de las unidades cartografiadas en Los Algodones, aparece en la Tabla 1. 5 Tabla 1. Unidades cartografiadas en la zona de Los Algodones, Lara. CPC (1962 Aluvión (Qal) Terrazas (Qpt) Fm. Castillo, Oligoceno – Mioceno (Tmoct) Fm. Trujillo (TPET) Eoceno (E) - - - Miembro caliza (Tpetc) - Ígneas (ig) Oligoceno (Ol) - Fm. Trujillo, - CSV (1965) STEPHAN (1982) Aluvión reciente (Qal) Terrazas (Qt) Fm. Luna (Kl) (mayoritaria) + Gr. Cogollo (sin diferenciar) (Kc) + Fm. Río Negro (?) (Kn) Complejo intrusivo gabroide (Gb) Ofiolitas extrusivas (Ex) Este trabajo - Aluvión (Cuaternario) - Terrazas (Cuaternario) Formación Castillo Fm. Castillo (Oligoceno a Mioceno temprano) Complejo TectónicoEstratigráfico Lara. Complejo Tectónico-Estratigráfico Lara - Fm. Matatere III - Fm. Matatere III (Eoceno med.-Sup.) (Eoceno med.-Sup.) Napa de TinacoTinaquillo. Unidad ígneo- Súper-Asociación Ígnea-sedimentaria Río sedimentaria de Tocuyo (Jurásico-Cretácico) Siquisique - Río Tocuyo * Asociación Volcanosedimentaria Los * Asociación volcánicoAlgodones sedimentaria - Secuencia superior (facies “La Luna”). - “Formación La Luna” (K Tardío) CenomanienseTuroniense - Secuencia inferior - Volcanosedimentarias de Cerro Regal (Neocomiense sup. a (K Temprano) Albiense) * “Suela” de esquisto con * Complejo Tectónico Las Petacas bloques (“suela de corrimiento”) * Asociación volcánico* Asociación Ígnea Siquisique (Jurásico) plutonica Gabro - Gabro Diabasa - Diabasa - Basalto Nombres geográficos en amarillo fueron propuestos por BELLIZZIA (1986. Ver Fig. 9). 4. CONTEXTO GEOLÓGICO GENERAL Síntesis siguiendo a STEPHAN (1982) y BELLIZZIA (1986) En la región de Siquisique aparecen diversos cuerpos de material alóctono de rocas ígneas oceánicas. Se presentan como afloramientos aislados cerca del límite de los estados Lara y Falcón; se extienden desde el valle del Río Tocuyo y afluentes al norte de la población de Siquisique, hasta la región de Yumare, al norte del río Aroa. Estos afloramientos han sido agrupados en dos grandes unidades (STEPHAN 1985): Una unidad “ofiolítica” desmembrada de edad Jurásico-Cretácico y una unidad volcanosedimentaria Cretácica. - La primera pudiera ocupar una posición comparable con el Complejo Ofiolítico de Loma de Hierro. Aquí aflora en el valle del Río Tocuyo y afluentes al norte de la población de Siquisique. - La segunda aflora bien en la región de Los Algodones, y también está presente en afloramientos aislados en toda la región comprendida entre Churuguara y Siquisique, 6 especialmente a lo largo del Río Tocuyo y sus tributarios en el margen norte. En la región de Los Algodones, las rocas Cretácicas comprenden dos secuencias: una corresponde al Cretácico Temprano y la otra al Tardío. En Los Algodones las rocas del Mesozoico, están corridas sobre la Formación Matatere (III), y todo ello a su vez cubierto discordantemente por rocas del Oligo-Mioceno de la Formación Castillo (pero hacia Puente Limón está cubierto por la Formación Capadare). Hacia el sur estas unidades están limitadas por la prominente la falla de Los Algodones. Las unidades las describiremos de más viejas a más jóvenes utilizando el esquema y nomenclatura propuesta en la Tabla 1, con los detalles descriptivos e interpretativos de STEPHAN (1982). 1. Súper-Asociación ígneo-sedimentaria Río Tocuyo (Jurásico-Cretácico) 1.1. Asociación Ígnea Siquisique (unidad volcánico-plutónica) Esta asociación esta integrada por dos litodemos: 1.1.1. Gabro. Esta unidad de tiene composición homogénea y los afloramientos frescos son muy raros, se presentan alterados a pumpellita, clorita, epidoto y calcita. Presentan la variedad troctolita con textura de cúmulos, formados por plagioclasa, menor proporción de clinopiroxeno diopsídico y espinela rica en cromo, que se presentan como pequeños fenocristales bajo la forma de intercúmulos. También se presentan otras variedades de gabro, relativamente ricas en sílice. Fue identificado un anfíbol representado por hastingsita de origen primario en la periferia de los cristales de clinopiroxeno. 1.1.2. Diabasa (o basalto). Esta unidad está en contacto de falla con el gabro y es intrusivo en la secuencia volcánico-sedimentaria bajo la forma de sills; aunque espilitizada, se presenta menos alterada que el gabro. Se distinguen tres tipos de diabasa-basalto: hacia el oeste se presenta algo brechada con textura parecidas a almohadillas y contiene reliquias recristalizadas de rocas carbonáticas; hacia el sur, ocurren como diques que atraviesan la masa gabroide; la otra variedad corresponde a una brecha explosiva con fragmentos que pueden alcanzar hasta 3 m de diámetro, donde son frecuentes algunos clastos carbonáticos. El estudio geoquímico de muestras de basalto indica una afinidad tectónica de toleíta oceánica (MORB) (LOUBET et al. 1985, GIUNTA et al. 2002), al igual que las Volcánicas de Tiara, pero distinta a las rocas equivalentes de la zona de Tinaquillo. Las relaciones gabro-diabasa muestran claramente la posteridad de esta última, indicada por los diques de diabasa que atraviesan la masa gabroide. Los vínculos entre la diabasa y la unidad volcánico-sedimentaria, son generalmente tectónicos; aunque también se presentan sills de diabasa en la secuencia volcánico-sedimentaria, los cuales son comagmáticos: sin-sedimentario submarino (asociación volcánico-sedimentaria) y sub-volcánico (cuerpo principal de diabasas). El contacto entre la unidad volcánico-sedimentaria y el gabro es tectónico. Las observaciones de campo y las edades K-Ar permiten interpretar que la secuencia volcano-sedimentaria es la cobertura discordante del macizo gabroide (STEPHAN 1982). 7 Con las dataciones 40K/40Ar de STEPHAN (1982), se distinguen dos episodios magmáticos; el mas antiguo 136 ± 15 Ma [Jurásico Tardío (Tithoniense) - Cretácico Temprano (Aptiense)], corresponde al gabro, y el más reciente de 105 ± 10 Ma [Cretácico (Albiense-Cenomaniense)], corresponde a la diabasa-basalto; esta edad isotópica esta en concordancia con la información bioestratigráfica comprendida entre el Hauteriviense inferior, + 140 Ma y el CenomanienseTuroniense + 94 Ma, compatible con el grado de incertidumbre de las edades K/Ar. El intervalo de las edades K/Ar es de 151 y 95 Ma, que corresponde aproximadamente al TithonienseTuroniense. Esta unidad se presenta como olistolitos y escamas tectónicas esparcidas al oeste y norte de la población de Siquisique, especialmente en la zona de Los Algodones. Según las interpretaciones de STEPHAN (1982), la unidad difiere del concepto original de "ofiolitas de Siquisique" y "ofiolitas de Siquisique-Río Tocuyo", descritas por CSV (1975) y BELLIZZIA et al. (1972), respectivamente, en el sentido de asignarla ahora a su Napa Tinaco Tinaquillo. En esta nueva interpretación es necesario encontrar el significado geodinámico de estas rocas, hoy dispersas en la región considerada. Es posible que esta secuencia Jurásica-Cretácica represente fragmentos de corteza oceánica tethysiana, incorporados a la cadena montañosa del norte de Venezuela, en una posición comparable al Complejo Ofiolítico Loma de Hierro [si bien las edades disponibles no parecen corresponder, ya que aquellas de Loma de Hierro son del Cretácico]. Sea cual sea la interpretación sobre su origen, su presencia en la parte norte de la región de Barquisimeto, es de gran importancia paleogeográfica y paleotectónica y por lo tanto merece un estudio más detallado, lo cual ya se encuentra en marcha con dos zonas de Trabajos Especiales de Grado del Departamento de Geología de la UCV, a través del proyecto GEODINOS (FUNVISIS-FONACIT). 1.2. Asociación Volcanosedimentaria Los Algodones (unidad volcánico-sedimentaria). Para esta unidad STEPHAN (1982) presentó una columna generalizada y conceptual (Fig. 9), que incluye: 1.2.1. Volcanosedimentarias de Cerro Regal. Esta corresponde a la sección inferior de la Asociación (Fig. 9), constituida por lutita a veces silícea finamente laminada, caliza, chert, arenisca micácea, coladas de basalto almohadillado, sills de diabasa, carbonatos detríticos, caliza micrítica con globigerinas y radiolarios, caliza bioclástica con abundantes fragmentos de rudistas (Barremiense-Albiense) y conglomerado con fragmentos de ftanita, granito, gneis, esquisto micáceo, riolita y riodacita. Son frecuentes los cuerpos de conglomerado holo-cuarcífero y los constituidos por cuarzo y chert. Las coladas de lava exhiben estructura micro-ofítica y almohadillas de pequena dimensión; la plagioclasa est altamente albitizada y alterada y constituye un 40% de la roca y el piroxeno se identifica como augita. 1.2.2. “Formación La Luna”? Esta secuencia superior (Fig. 9) es carbonática-margosa, con raras ocurrencias detríticas y silíceas, desprovista de lava. Se asemeja a la Formación La Luna. Se menciona el hallazgo de amonites característicos de la Formación La Luna (Cenomaniense-Turoniense-Coniaciense); también es frecuente en este intervalo un nivel rico en Hedbergella, acompañado de algunos especimenes de Rotalipora del CenomanienseTuroniense. Algunas muestras presentan una gran abundancia de radiolarios. A diferencia de la 8 Formación La Luna clásica de Los Andes y Perijá, no presenta concreciones, ni muestra olor a petróleo, si bien en algunas muestras de caliza se observan pequenas cavidades con gotas de petróleo seco. Esta asociación en su sección inferior está corrida sobre la Formación Matatere (III), estando entre las dos unidades una cuna del Complejo Tectónico Las Petacas o "suela de corrimiento", que se describe a continuación. 1.3. Complejo Tectónico Las Petacas (“suela de corrimiento” de STEPHAN 1982) Esta es una unidad de roca muy cizallada de aspecto filítico-pizarrozo, ubicada mayormente en la parte superior de la Quebrada Las Petacas (Fig. 7), que representa la "suela de corrimiento" de la secuencia volcánico-sedimentaria. Está caracterizada por pelitas cizalladas (brillante y con aspecto astilloso y pizarroso) con abundantes olistolitos de chert negro finamente laminado, lava maciza almohadillada, arenisca micáceo-feldespática, conglomerados de cuarzo, de chert y también únicamente con cristales de cuarzo lechoso (holocuarcífero). La unidad está en contacto tectónico con las dos unidades que la rodean: las Volcanosedimentarias de Cerro Regal hacia el noroeste y la Formación Matatere al sureste. J.-F. Stephan recolecta fragmentos de arenisca sueltos en superficie, contentivos de calcos de amonites. La fauna fue estudiada por THIELUOY (1982), clasificándola en dos grupos: - El primero, comprende Pedioceras caquesense, Pedioceras cf. apollinaria, "Falloticeras" cf. fallociosum, Paraspiticeras depressum, y Crioceratites sp. - Otro grupo contiene Olcostephanus sp. ind. juv. Rogersites ? sp., Acantholissonia sp., "Pseudofabrella" cf. colombiana. Las dos asociaciones faunales están separadas cronoestratigráficamente, correspondiendo la primera al Barremiense inferior y la segunda, con ubicación más precisa, al Hauteriviense inferior. Esta fauna no había sido descrita previamente en formaciones del Cretácico de Venezuela, pero si en la Formación Moina y el Grupo Yuruma, del para-autóctono de la Península de la Guajira, Colombia, por O. Renz. Según STEPHAN (1982) esta unidad puede representar una fase tectónica de la unidad volcánico-sedimentaria inferior o un evento tectónico-sedimentario que determine una resedimentación, adicionalmente afectada por fuertes efectos tectónicos de parte de esa unidad durante la fase de corrimientos. 2. Formación Matatere En la zona de estudio aflora ampliamente una secuencia terrígena correspondiente a la parte superior de la Formación Matatere, que STEPHAN (1982) denomina Matatere III y asigna al Eoceno inferior y medio. La unidad está formada por rocas pelíticas con olistolitos, también se presentan capas de arenisca y conglomerado grueso guijarroso. Los bloques (olistolitos), algunos hasta de 50 cm de diámetro, están constituidos por gneis anfibólico, esquisto micáceo, cuarcita, granito, cuarzo lechoso, caliza (Paleoceno-Eoceno inferior, con Ranikothalia, algas y corales), caliza micrítica (con algunos especimenes de Orbitolina concava texana del Aptiense superior Albiense medio y rudistas recristalizadas). También ocurren algunos raros olistolitos de lava almohadillada de hasta de 2 m de diámetro, cementados por material ferruginoso y ocasionalmente chert. En la quebrada Las Petacas, O. Renz en 1948 y posteriormente P. Bartok en 1978, ubicaron bloques sueltos de lava almohadillada y en los sedimentos inter-almohadillas recolectaron ejemplares de amonites, que fueron identificados (BARTOK et al. 1985) como: ¿Stephanoceras (Skirroceras) cf. macrum, ¿Emileia ex. gr. multiformis et quenstedti, y Parkinsonia sp. Esta 9 fauna es indicativa del Bajociense (Jurásico Medio -176 a 172 Ma-). Debido a la ubicación de estos bloques, su única explicación es que provienen de olistolitos originalmente contenidos en Matarere III. Esta fauna corresponde a los sedimentos marinos del Mesozoico, más antiguos conocidos de la región centro-norte de Venezuela. Los olistolitos y guijarros de conglomerado encontrados en Matatere III constituidos en parte de granito, ortogneis, diorita cuarcífera, gneis anfibólico, granodiorita, esquisto micáceo, posiblemente son vestigios esparcidos en el área provenientes de la meteorización y fragmentación de un basamento o zócalo Precámbrico o Paleozoico, semejante al Complejo El Tinaco y/o Complejo de Yumare, lo cual justifica la interpretación de la asociación Los Algodones como una cobertura volcánico-sedimentaria de un presunto basamento de naturaleza continental, hoy inexistente. 3. Formación Castillo De acuerdo a la descripción original, la Formación se caracteriza por una secuencia litológica altamente variable, lateral y verticalmente y por la presencia de gruesas capas de arenisca y conglomerado. En el área tipo, la parte inferior de la Formación muestra un predominio de limolita y arcilla, de color gris, compacta, masiva; la lutita es físile, marrón oscuro, carbonácea, con delgadas capas de carbón; la arenisca es de grano medio a grueso, con estratificación cruzada y se presentan en capas de 1 a 40 m de espesor. La parte superior de la unidad se caracteriza por el predominio de arenisca y conglomerado. Esta arenisca es similar a la de la parte inferior, pero contiene delgados lentes de conglomerado con guijarros de cuarzo blanco, cuarzo ahumado y arenisca carbonática, cementada generalmente por óxidos de hierro; la limolita y arcilla en esta parte de la Formación es arenosa, gris, amarilla, roja o púrpura y localmente carbonácea (Tomado de “Codigo Scherer”). 10 5. MATERIAL ILUSTRATIVO PARA SER UTILIZADO Y DISCUTIDO EN LA EXCURSIÓN Y EL CURSO Fig. 2. Mapa geológico regional. Nótese la distribución de las rocas ígneas (Mo) muy cerca de la terminación norte del área de afloramientos de la Formación Matatere (Tmat. Marrón), hacia el contacto discordante con las suprayacentes unidades Oligo-Miocenas (color gris azulado). Tomado de HACKLEY et al. (2005). Escala: Ancho de la imagen 45 km. 11 Fig. 3. Modelo digital de elevación. Tomado de GARRITY et al. (2004). Abajo la misma imagen mostrando la Falla de Los Algodones (rojo) y la zona de Los Algodones, principal objetivo de la excursión (círculo anaranjado). Escala: Ancho de la imagen 45 km. 12 Fig. 4a. Mapa geológico de CPC (1962). Escala: Ancho de la imagen 15 km. 14 13 12 Fig. 4b. Mapa geológico de CPC (1962). Escala: Ancho de la imagen 10 km. 13 11 10 Fig. 4c. Mapa geológico de CPC (1962). Escala: Ancho de la imagen 5,5 km. 19 18 20 Fig. 4d. Mapa geológico de CPC (1962). Escala: Ancho de la imagen 17 km. 14 18 Fig. 4e. Mapa geológico de CPC (1962). Escala: Ancho de la imagen 7,5 km. Fig. 5a. Mapa geológico de la zona de Los Algodones. Tomado de CSV (1965). Escala: Cuadricula de 1 km. 15 8 7 9 6 4 5 3 2 11 10 1 Fig. 5b. Mapa geológico de la zona de Los Algodones. Tomado de CSV (1965). Escala: Cuadricula de 1 km. 16 B A Fig. 5c. Mapa geológico de la zona de Los Algodones. Tomado de CSV (1965). Escala: Cuadricula de 1 km. 15 B 17 Fig. 6a. Mapa geológico generalizado de la región de Barquisimeto. La flecha roja muestra a la falla de Los Algodones. Tomado de STEPHAN (1982). Leyenda en la próxima página. 18 Fig. 6b. Leyenda del mapa geológico generalizado de la región de Barquisimeto. Tomado de STEPHAN (1982). 19 Fig. 7. Mapa geológico de la zona de Los Algodones. Versión en español por BELLIZZIA (1986) del original en francés de STEPHAN (1982) 20 Fig. 8. Secciones geológicas de la ladera norte de la quebrada Las Petacas. Arriba: La unidad de "suela de corrimiento". Abajo: La unidad volcánico-sedimentaria. Versión en español por BELLIZZIA (1986) del original en francés de STEPHAN (1982) 21 Fig. 9. Columna estratigráfica generalizada e idealizada de las unidades volcánico-plutónica y volcánico-sedimentaria de la zona de Los Algodones. Versión en español por BELLIZZIA (1986) del original en francés de STEPHAN (1982). 22 16 17 Fig. 10. Detalle de la zona de afloramientos de la "Suela de corrimiento". Tomado de STEPHAN (1982). 23 15.3 15.2 15.1 Fig. 10. Corte geológico a lo largo del viejo camino a Urucure. Tomado de STEPHAN (1982). 24 6. PARADAS DE LAS EXCURSIONES PREPARATORIAS 6.1. Región de Barquisimeto – Siquisique. Durante el recorrido en vehículo desde Barquisimeto y Siquisique se sugiere que los instructores realicen algunas paradas siguiendo la guía de excursión de BELLIZZIA & RODRÍGUEZ (1966. Ver Anexo 2) 6.2. Región de Los Algodones. En esta sección se presentarán breves descripciones e ilustraciones de las diversas paradas. Éstas se ubican en los mapas geológicos que se acompañan. Nota a los instructores: Esta es sólo una lista de localidades posiobles, por consiguiente no se entrará en detalles sobre las diversas cosas interesantes observables en los afloramientos. DÍA 1 (será un día fuerte) Parada 1. Sill de Diabasa en la unidad volcánica-sedimentaria (Ubicación en la Fig. 11b) Desde la última casa al oeste de Los Algodones, se camina por la margen derecha de una quebrada seca (por encima de una terraza aluvional), se sube por la ladera hasta alcanzar el trazado de la vieja carretera de tierra entre Siquisique y Baragua. En esta primera parte los afloramientos son muy pobres, pero conviene que se aprenda a reconocer las diferentes unidades así estén muy meteorizadas, dado que esa es una de las características de las zonas tropicales y prácticamente algo en que los geólogos de superficie tienen que tratar en el día a día. Parada 2. Contacto entre la “Formación La Luna” y el Gabro (Ubicación en la Fig. 11b) Primeramente se camina por afloramientos pobres de la “Formación La Luna” y unos metros más adelante se ubica un afloramiento de gabro. Tratar de deducir la ubicación exacta del contacto y su naturaleza. Formación Castillo. Discordante por encima de Gabro y Diabasa. DiabasaBasalto Gabro. Vista hacia el norte desde la Parada 1. 25 Sitio del contacto parcialmente cubierto entre la "Formación La Luna" y el Gabro. Afloramiento tectonizado del gabro ubicado entre las paradas 2 y 3. 26 Ruinas de la vieja carretera Siquisique –Baragua Parada 3. “Formación la Luna” afectada por fallas (Ubicación en la Fig. 11b) Continuando por el viejo trazado de la carretera, se siguen observando afloramientos de gabro, hasta que después de una gran curva aparecen nuevamente buenos afloramientos de la “Formación La Luna”, si bien afectados por varias fallas. Describir la unidad y los diversos tipos de roca: discutir sobre las semejanzas y diferencias con la Formación La Luna cl’asica de los Andes y Perijá. Tratar de encontrar el patrón y tipo de fallamiento. Vista desde el este de la parada 3. (LC) 27 Detalle del afloramiento de la "Formación La Luna" (LC). Abajo: falla y pliegues de arrastre. 28 Pliegue de arrastre. Parada 4. Contacto tectónico visible entre la unidad de Gabro y la “Formación la Luna” (Ubicación en la Fig. 11b) Continuar por el viejo camino observando los afloramientos de la Luna, hasta unos 300 m más adelante y allí bajar con cuidado por la ladera, hasta el fondo de la quebrada que se encuentra hacia el norte. Ya en el cause seco de la quebrada, hay grandes bloques de arenisca y los afloramientos son del tipo “La Luna”, pero después de cierto recorrido aparece el gabro. Devuélvase si es necesario, hasta ubicar un pequeño afloramiento de aproximadamente 2 x 1 m al pie de la margen derecha, donde exactamente se puede poner el dedo sobre el contacto de falla entre las dos unidades. Favor NO martillarlo ni tomar muestras, ya que es muy pequeño y es uno de los pocos sitios donde este contacto es muy bien visible entre ambas unidades. Vea las direcciones de las estrías y trate de determinar el tipo y movimiento de esta falla. 29 "FORMACIÓN LA LUNA" GABRO Contacto entre la "Formación La Luna" y el gabro. 30 Parada 5. Cuerpo de Gabro con estratificación "cumulus" (Ubicación en la Fig. 11b) Desde la parada anterior descender la quebrada seca y verán afloramientos de gabro de grano grueso, con una burda estratificación producida por diferenciación gravitatoria (cumulus). Estratificación cumulus en gabro de grano grueso. (LC) 31 Parada 6. Diques de Diabasa en el Gabro (Ubicación en la Fig. 11b) Desde la parada anterior continuar descendiendo por el cauce de la quebrada hasta encontrar otra pequeña quebrada que viene desde la margen izquierda. Ascender por ella y continuará viendo buenos afloramientos de gabro, inclusive hay abundantes vetas de calcita. Después de ascender unos 100 m, cuando encuentre una vía adecuada suba hasta la cumbre de la fila en dirección hacia el Este (margen izquierda. Luego continuar caminando por la propia fila hacia mayores alturas, hasta que encontrará un cuerpo tabular de color marrón que corresponde al dique de diabasa. Observe sus texturas y note las diferencias con el gabro. Arriba: Fila en el cuerpo de gabro. Abajo: Cuerpo tabular de diabasa. (LC) 32 Parada 7. Terrazas (Ubicación en la Fig. 11b) Desde el dique de diabasa de la parada anterior, mire hacia el oeste y podrá observar una serie de terrazas colgadas. Éstas se encuentran cartografiadas en el mapa de CSV (1965). Discutir y tratar de interpretar como se formaron y que hacen allí a esa elevación. . Terraza (LC) 33 Parada 8. Contacto discordante de la Formación Castillo sobre el Gabro (Ubicación en la Fig. 11b). Continuar el ascenso por la cresta de la fila llegar hasta donde aparece la primera capa de conglomerado de la Formación Castillo, notará que por debajo se encuentra el gabro muy meteorizado. Arriba: Observe la capa del conglomerado basal de la Formación Castillo, que reposa sobre el gabro. Abajo: Notar el color verde del gabro meteorizado. (LC) 34 Parada 9. Cuerpo principal de Diabasa (Ubicación en la Fig. 11b) Después de la discordancia anterior inicie el descenso, pero tomando la cresta que conduce en dirección SE (ver foto abajo). Desde allí verá una quebrada que ya visualmente se verifica como el contacto entre el Gabro (colores verdosos muy claros) y el cuerpo mayor de Diabasa-basalto (marrón). Siga bajando hasta cierto punto en que considere seguro para llegar al cauce de la quebrada. Una vez en ella, ascender por unos 150 m y de allí hacia el Este hay algunos pequeños drenajes donde esta expuesto el contacto de falla entre la Diabasa y el Gabro. Luego ya sea por la misma quebrada o por las filas adyacentes -bastante desprovistas de vegetación- regrese hasta llegar al punto de partida. Diabasa Gabro 35 Parada 10. Discordancia entre las formaciones Matatere y Castillo (Ubicación en figuras 10c y 11 b). Desde Los Algodones continuando por la carretera actual asfaltada hacia Baragua, hay excelentes afloramientos donde se observa la Formación Matatere cubierta por la Formación Castillo, en forma de una clara discordancia angular. Esta es una discordancia mencionada en muchas oportunidades de la literatura geológica. Detallar los cambios litológicos, medir los rumbos y buzamientos de ambas partes para definir espacialmente la verdadera angularidad entre ambas formaciones. Caminar a lo largo del camino unos 200 m para observar diversas fallas. Arriba: Discordancia vista en la cumbre de uno de los cerros al sur de Los Algodones. Abajo: La misma discordancia en el talud sur de la carretera Siquisique – Baragua. 36 Arriba: Detalle de la discordancia angular. Abajo: Otro talud con afloramientos de la Formación Castillo, complejamente fallado (con fallas normales e inversas). Cada grupo escogerá una parte del talud y tratara de entender el mecanismo de las fallas y su orden relativo. 37 Parada 11. Falla de Los Algodones (Ubicación en figuras 10c y 11 b). Después de la discordancia, continuar por la carretera en dirección de Baragua, hasta un abra en la carretera con taludes a ambos lados. En ese sitio preciso pasa la traza de la falla de Los Algodones. Esta es una falla con gran extensión que pasa también al norte de Siquisique (ver su traza en las figuras 3, 10b y 12a. Regionalmente se reconoce como una falla transcurrente destral. Expresión geomorfológica de la falla de Los Algodones. 38 En el talud norte (arriba a la derecha) aparecen rocas tipo "La Luna" muy meteorizadas con algunos bloques sueltos de rocas ígneas. En el talud sur se aprecian planos de falla donde se puede determinar la dirección y sentido de las estrías, por consiguiente el movimiento de la falla (arriba a la izquierda). En los planos de falla hay depósitos secundarios de yeso que muestran estrías (ver abajo). 39 DÍA 2 (será un día más suave) Parada 12. Falla en la Formación Castillo (Ubicación en figura 10b). Se estacionan los vehículos en el vado de la quebrada. Observar las colinas al sur y claramente se ve la dislocación de los rumbos y buzamientos de los estratos de la Formación Castillo, indicativos de una zona de falla. Caminar por la margen derecha de la quebrada y se pueden observar pliegues de arrastre. Vista general del lugar. Pliegues de arrastre. 40 Parada 13. Afloramientos de la Formación Castillo (Ubicación en figura 10b). Desde el cauce de la quebrada seca de la parada anterior, continuar caminando por la carretera en dirección oeste. Allí se observará en el talud de la carretera diversos afloramientos de la Formación Castillo. Notar las estructuras sedimentarias y el fallamiento. Talud con afloramientos de la Formación Castillo. Bioturbación en la base de una capa de arenisca de la Formación Castillo. 41 Formación Castillo. Nótese la falla inversa. 42 Parada 14. Afloramiento de la Formación Matatere (III) (Ubicación en figura 10b). Buenos afloramientos de sedimentos tipo flysch típicos de ambientes turbidíticos. Se llegan a observar algunos pequeños olistolitos. Observe la presencia de un clivaje que cruza las capas oblicuamente. ¿Puede de ello deducir la posición de las capas con respecto a algún pliegue mayor? 43 En los sedimentos tipo flysch es común encontrar varios tipos de ichnofósiles. Paradas 15. Complejo Tectónico Las Petacas (Ubicación en figura 11c). Desde el caserío de Los Algodones (“A” en la Fig. 11c) se avanza aguas arriba por el cauce de la quebrada Las Petacas hasta llegar el sitio identificado como “B”. Desde allí se continuará por el trazado del viejo camino de recuas que comunicaba el caserío de Los Algodones con Panamá de Urucure. En esta zona aflora el Complejo Tectónico Las Petacas. A lo largo del camino se observarán las distintas litologías descritas en la sección geológica realizada por STEPHAN (1982) (ver figs. 13, 16 y 17) Nótese las diferencias entre los mapas geológicos en esta zona, donde la CSV (1965, ver Fig. 11c) cartografía como La Luna, Río Negro y extrusivas, mientras que STEPHAN (1982, ver figs. 13, 16 y 17) la cartografía como una unidad tectónica de “suela de corrimiento”. En este camino seguiremos la sección de STEPHAN (reproducida en la fig. 17): 15.1. Primero pasamos por una ladera con gran cantidad de fragmentos de arenisca procedentes de un afloramiento disgregado. Allí podrán eventualmente encontrarse amonites (ver Fig. 17). 44 15.2. El camino cruza en dos lugares a rocas volcánicas intercaladas con las sedimentarias. Bloque de chert rojizo incluido en basalto y mencionado por STEPHAN (ver Fig. 17). 45 15.3. Finalmente se llega a la Formación Castillo que cubre discordantemente al Complejo Tectónico Las Petacas (ver Fig. 17) Paradas 16. Complejo Tectónico Las Petacas (Ubicación en figura 16). En pequeños afloramientos ubicados al pie de la margen derecha de la quebrada, pueden observarse las características de la Unidad, que difiere notablemente a las rocas de la “Formación La Luna” vistas el día anterior. Nótese la matriz arcillosa con aspecto brillante y astilloso, que envuelve bloques de diversas litologías. 46 Paradas 17. Observación de olistolitos sueltos originalmente contenidos en la Formación Matatere (Ubicación en figura 16). Gran bloque que muestra superficies con estrías de falla Bloque de conglomerado con fragmentos sedimentarios y volcánicos. El canto indicado por la punta de la piqueta corresponde a una riolita. 47 Bloque de lava basáltica con estructuras de almohadilla poco visibles. En bloques de este tipo RENZ (1949) y BARTOK et al. (1985), en el material sedimentario intersticial a las almohadillas encontraron ejemplares de amonites del Jurásico Medio. Parada 18. Mene de la Quebrada El Petróleo. Valle de Urucure. (Ubicación en Figura 10d y 10e) Después de culminar la visita a la quebrada Las Petacas, se toma la carretera principal Siquisique – Baragua. Al llegar al caserío Saladillo, se abandona la carretera principal y se toma la carretera que sigue hacia al este hacia el valle de Urucure. Se cruzan dos vados de sendas quebradas (usualmente secas). Preguntar por el Fundo Santa Ana. Desde la casa de la propiedad se remonta la quebrada, hasta encontrar un pequeño pozo de agua, sobre el cual se depositan gotas de petróleo. En caso de que la quebrada este seca, el petróleo se verá manando del afloramiento de arenisca. Según el mapa de CPC (1960), el afloramiento corresponde a la Formación Cerro Pelado. Describir el afloramiento, e igualmente caminar un poco hacia arriba y hacia abajo, luego comparar con la descripción formal de esta unidad. ¿Considera usted que efectivamente está en la Formación Cerro Pelado? 48 Mene de la Quebrada El Petróleo 49 Petróleo sobre el agua y fragmento de arenisca impregnada. 50 18. Localidad con rocas con olor a petróleo (Ubicación en Figura 10d) Panorama general de la zona. Abajo afloramiento de la Formación Agua Clara con olor a petróleo. 51 19. Localidad con rocas con olor a petróleo (Ubicación en Figura 10d) 52 6. ACTIVIDADES PARA LOS DÍAS SUCESIVOS Durante los dos días sucesivos a cada grupo se le asignará una zona estrecha orientada en dirección norte-sur, en la zona de Los Algodones. Allí realizarán un corte geológico y se levantara una sección estratigráfica de algunas de las unidades sedimentarias allí aflorantes. 7. BIBLIOGRAFÍA Material para bajar del Código Geológico: textos de las formaciones Capadare, Agua Clara, Cerro Pelado, Castillo, Matatere y La Luna. APPLEGATE A. V. 1953. Geological reconnaissance of Southern Falcón and Northern Lara and oil seeps of Falcón and Northern Lara. PDVSA, Informe EPCL-04227. BARTOK P. E., O. RENZ & G. E. G. WESTERMANN. 1985. The Siquisique ophiolites, Northern Lara State, Venezuela: A discussion on their Middle Jurassic ammonites and tectonic implications. Geological Society of America Bulletin 1985 96: 1050-1055. BELLIZZIA A. 1986. Sistema montañoso del Caribe. Una cordillera alóctona en la parte norte de America del Sur. Memoria VI Congreso Geológico Venezolano, Soc. Venezolana Geólogos, Caracas 1985, 10: 6657-6836. BELLIZZIA A., D.;RODRÍGUEZ G. & M. GRATEROL. 1972. Ofiolitas de Siquisique y Río Tocuyo y sus relaciones con la falla de Oca, Venezuela. Memorias VI Conferencia Geológica del Caribe, Porlamar, p. 182-183 CPC - CREOLE PETROLEUM CORP. 1962. Mapa C-5-C Geología de superficie. 1:50.000, inédito. [Compilado con información geológica de C. B. WHEELER de 1958 y fotogeológica de K. ROHR de 1949]. CSV - COMPAÑÍA SHELL DE VENEZUELA. 1965. Igneous rocks of the Siquisique region, State Lara. Asociación Venezolana de Geología, Minería y Petróleo, Boletín Informativo 8 (10): 286-306. STEPHAN J.-F. 1982. Evolution géodynamique du domaine Caraïbe, Andes et Chaine Caraïbe sur la transversdale de Barquisimeto (Vénézuéla). Univ. Pierre et Marie Curie (Paris VI). These doctorat d´etat. 512 p. THIELUOY J. P. 1982. La faune d´Amonites recoltee a Los Algodones. En STEPHAN (1982: 491495). 53 ANEXO 1 EXCURSIÓN A LA ZONA DE SIQUISIQUE, ESTADO LARA Boletín Informativo Asociación Venezolana de Geología, Minería y Petróleo, 8(10): 2866-306, Oct. 1965 Descargado del Código Geológico IGNEOUS ROCKS OF THE SIQUISIQUE REGION, STATE OF LARA by Compañía Shell de Venezuela Resumen Rocas de afloramientos existentes en la región de Siquisique del Estado Lara fueron investigadas petrográficamente por medio de secciones delgadas y fragmentos. Como complemento a los estudios mineralógicos, en algunos casos se realizaron con éxito análisis de rayos X. De acuerdo con los resultados obtenidos, las rocas se clasifican en cuatro grupos diferentes, a saber: 1. Ofilolitas (serpentinitas, espilitas y gabros) 2. Rocas mixtas calco-ofiolíticas (rocas de contacto entre sedimentos carbonáticos y ofiolitas) 3. Posibles tobas a rocas tobáceas (tobas con material sedimentario) 4. Rocas sedimentarias (cuarcitas, ftanitas, radiolaritas y conglomerados heterogéneos) Las ofiolitas efusivas a subefusivas fueron (subsecuentemente, quizás) albitizadas (espilitizadas) y en parte carbonatizadas, mientras que los gabros intrusivos sufrieron prenitización. La asociación de espilita, serpentinita, gabro y ftanita (incluyendo radiolarita) ha sido observada en muchas zonas deformadas orogenéticamente. En los Alpes Suizos, dicha asociación caracteriza a algunas secciones entre las napas orientales inferiores a penínicas superiores, y especificamente a zonas situadas fuera del gran geosinclinal penínico central. Según las observaciones de campo, al parecer la intrusión del complejo gabroico dentro de los sedimentos tuvo lugar en épocas del Cretáceo Superior, aunque existe la posibilidad de que la actividad volcánica continuó hasta el Paleoceno. Summary Thin sections and rock fragments of outcrop samples from the Siquisique region, State of Lara, were petrographically investigated. In addition to microscopical studies, X-ray analysis was successfully carried out in several cases. The investigation led to the subdivision of the samples into four groups of rocks, as follows: 1. Ophiolites (serpentinites, spilites and gabbros) 2. Ophiolite limestone compound rocks (contact rocks between ophiolites and carbonatic sediments) 3. Questionable tuffs to tuffites (tuffs containing sedimentary material) 4. Sedimentary rocks (quartsites, cherts, radiolarites and heterogeneous conglomerates) The effusive to subeffusive ophiolites were (probably subsequently) albitized (spilitized) and partly carbonatized, whereas the intrusive gabbros underwent prehnitization. The observed rock association of spilite, serpentinite, gabbro and chert (including radiolarite) has been described from mapy orogenes. In the Swiss Alps, it is described from some parts of the lower east alpine to upper penninic nappes, and specifically from areas which have been situated outside the central penninic main geosyncline. According to field observations, the intrusion of the gabbroic complex into the sediments apparently took place in Upper Cretaceous time, although it could well be that volcanic activity extended into the Paleocene. Introduction This report covers principally the results of a petrographical study of outcrop samples from the Siquisique region (Fig. 1), in the northern part of the State of Lara carried out in 1957 on behalf of Compañía Shell de Venezuela by Mr. J. Schilling and Prof E. Niggli of the University of Bern, Switzerland, to whom appreciative recognition is expressed for allowing the release of the present account. The translation of the text, originally written in German, was carried out by R. Blaser. The specimens were collected by G.R. Coronel and E. J. C. Kiewiet de Jonge during a geological survey of the Los Algodones and Las Tinajitas areas in the Siquisique region (Figs. 2 and 3) between May and June, 1956. The accompanying schematic section (Fig, 4) show the most important stratigraphic and structural relationships across the region. Particulars on thin sections of rock samples examined are given in Table I. G. Feo-Codecido slightly modified the accompanying illustrations and edited the manuscript. 54 Regional Geology (Extracted from Coronel and Kiewiet de Jonge´s private report) Stratigraphic outline The rock exposures in this region range from Lower Cretaceous to Quaternary in age. In addition, allochthonous fragments of gneissic and schistose rocks have been found occasionally along some streams, as well as enclosed by 55 Lower Tertiary shales; these metamorphics presumably make up the pre-Cretaceous basement complex, which is not exposed. The oldest outcropping unit appears to be a quartz pebble conglomerate, no more than 100 meters thick, which is referred to in this report as belonging tentatively to the Lower Cretaceous Río Negro Formation. Under this assumption, this unit is followed, stratigraphically, by a 20-meter interval of sandy limestones with smaller Foraminifera and Mollusca typical of Cogollo limestones of Aptian-Albian age. These rocks are conformably overlain by a rhythmic sequence as much as 150 meters thick of carbonaceous shale, dense limestone and black chert bands, with abundant Radiolaria unidentifiable smaller Foraminifera and ammonite fragments, all of which strongly resemble the Upper Cretaceous La Luna Formation elsewhere in Western Venezuela. Basic igneous intrusive rocks, predominantly of gabbroic nature, and associated basaltic to andesitic extrusives are found in the Cretaceous section described above. These rocks appear to belong to a single igneous body, the slight variations in composition being due to magmatic differentiation at the time of emplacement. In addition, the volcanic types are thought to represent extrusive flows of submarine origin. Evidence of contact metamorphism related to the intrusion of the gabbroic body has been observed in some Upper Cretaceous strata (e.g., along the Los Algodones Baragua road, where samples Cr-25 and 26 were taken), but in general the contacts are badly exposed due to weathering and little can be said about their nature; on the other hand, most localities suggest a tectonic contact (e.g., at the locality of sample Cr-16). North of Cerro El Regal, diabase tongues extend into the gabbro mass (sample Kw588), which clearly indicates a younger age for the diabasic extrusives. The top of the lava flows is generally characterized by a thin cover of tuffites. No sediments of Paleocene age have been enaountered in situ, but only boulders of fossiliferous Paleocene limestones enclosed by Lower Tertiary shales (e.g., sample Kw-613). Eocene deposits are moderately exposed throughout the region, where they are seen to occur in fault contact with Cretaceous rocks. These deposits consist mainly of a thick series of shales with sandstone intercalations; the shales are boulder hearing at several localities (samples Kw-523, 524 and 525), the blocks consisting of pre-Cretaceous metamorphic, cretaceous and Paleocene rocks. Exposures of mottled clays and fossiliferous Limestones of Oligocene age occur extensively throughout the region, unconformably overlying all older rocks. Tectonics The Los Algodones area is characterized by two main faults; that is, the northwest-southeast trending Algodones fault, quite evident in the field, and the southwest-northeast trending Petacas fault, which is offset at several places by minor northwest-southeast faults. The Algodones fault separates the Oligocene on the aouth from the Upper Cretaceous on the north, whereas the Petacas fault separates the Eocene on the nauth from the Upper Cretaceous on the north. In both cases, the northern block has been pushed upwards in relation to the southern block. The predominant feature of the Las Tinajitas area is the southwest-northeast striking Guacoas fault, which separates Eocene deposite on the south from Upper Cretaceous rocks on the north. In this case also, the northern block has been uplifted. Petrography (by J. Schilling and E. Niggli, private report date 27/10/57) General Statements The inveatigation of the thin sections led to a subdivision of the rocks into four groups, as follows: 1. Ophiolites (serpentinites, spilites and gabbros) 2. Ophiolite-limestone compound rocks (contact rocks between ophiolites and carbonatic sediments) 3. Questionabla tuffs to tuffites (tuffos containing sedimentary material) 4. Sedimentary rocks (quartzites, cherts, radiolarites and hetorogeneous conglomerates) One representative rock type from each of these groups will be described below. The sedimentary rocks will be dealt with briefly later. 56 Fig. 4 57 Serpentinite Macroscopic description: The serpentinites are green-black to brown-green, massive and very dense rocks, with rough fracture surface showing no preferred fracture directions. On wet fracture, the heterogeneous structure of the rocks can be recognized. Besides the deeply colored matrix of the serpentinite, light-green irregularly bounded inclusions of cherts of up to 1 cm. in diameter can be observed, and these are alsoirregularly distributed throughout the wole rock. Microscopic description: Under the microscope, the rock is tipically reticulare. Sporadically, pyroxenes of up to ½ cm. in diameter can be recognized; their transformation into serpentine has, however, progressed to such a degree that their further determination is impossible. The serpentinite contains disseminated grains of picotite, which however often appear opaque (even under parallel nicols) because they are covered by an extremely fine film of ore. Interpretation: The inclusions of chert indicate that the intrusion of the ultrabasic magma took place after the sedimentation and lithification of these rocks, because the inclusions have very sharp boundaries and consist of quartz only. Allochthonous material, which could be of igneous origin (e.g., chlorite), is missing. Such is not necessarily the case, however, with regard to other inclusions of chert in ophiolites; this is discussed below. Spilite Two different varietis of spilites can be distinguished, as follows: a. Carbonatized spilites (samples Kw-371, 372, 521), and b. Chlorite-albite spilites (samples Kw-340, 378, 379, 552). Carbonatized Spilite Macroscopic description: These are very fine grined rocks; the grain size averaging ca. 1/10 mm. The color is grey-green. A fine net of veinlets filled with calcite and quartz traverses the rocks in all directions and gives it a very heterogeneous brecciated apparance. Microscopic description: Under the microscope, albite, chlorite, titanite, epidote, ore, calcite and quartz are recognizable. Calcite, chlorite, epidote and ore (supposedly limonite) form an intersertal matrix, in which are present idiomorphic laths of carbonatized albite and roundish porphyroblasts of chlorite. The chemical composition of the albites was determined on the universal stage according to the method of Reinhard (1931) and also by determination of the maximum extinction. Values of 3% An (=albite) were obtained by the former, and values of 5% An (=albite) were arrived at by the latter method. The albite twinning law is predominant, but larger plagioclases are also twinned on the pericline law. Sporadically, pseudomorphs of calcite after pyroxene can be observed. Calcite is seen not only in the intersertal matrix and in the carbonatized plagioclases, but also occurs together with quartz as cement of the individual rock fragments. The carbonatization appears to originate from the filled cracks, since the spilites which are not brecciated show no carbonatization. Due to the small number of samples no final conclusion on this point can be made. Chlorite-Albite Spilite Macroscopic description: Macroscopically, these rocks are of a gray-green color, similar to the carbonatized spilites. They are very dense, homogeneous and fine grained. Rod-shaped plagiolases and roundish grains of epidote can be observed in a blackgreen matrix. The length of the laths of plagioclase is cat 0.3 mm., whereas the grains of epidote hardly exceed 0.1 mm. in diameter. These chlorite-albite spilites can be distinguished from the carbonatized spilites by the absence of brecciated structure. Microscopic description: The mineral constituents are chlorite, albite, epidote, ore, calcite and quartz. Chlorite, epidote and ore together form a coherent matrix, in which idiomorphic laths of albite and xenoblasts of calcite are distributed. The albite laths are arranged in a more or less radiating pattern. The plagioclases are twinned on the albite law; however, each lath generally consists of only two or three individual crystals. 58 Due to the high degree of decomposition, an exact determination of the composition of the plagioclases is not easily obtained. The investigation on the universal stage, with the application of Reinhard's (1931) method, let to an exact value of 3% An (=albite) in one case only. Other less exact determinations indicated contents of anorthite between 3% and 10%. Chlorite is only found in the intersertal matrix; porphyroblasts such as were observed in the carbonatized spilites are missing. Calcite is observed in veinlets and also in irregular patches. The dimensions of these patches, however, barely exceed the length of the plagiclase laths. Under strong magnification the subsequent formation of fine needle-shaped crystals, supposed to consist of actinolite, can be recognized at the contact between calcite and chlorite. Quartz occurs either in veinlets or in inclusions of chert which show diffuse boundaries; because of this, the inclusions of cherts can only in rare cases be recognized macroscopically. These inclusions also contain a certain amount of chlorite. The quartz and the chlorite of the inclusion were determined by X-ray analysis. Interpretation: The diffuse boundaries of the inclusions of chert indicate the possibility that the intrusion of the spilites occurred into a silica mud, which at that time was not yet consolidated. The chlorite could have been introduced into the silica mud during the intrusion of the spilites, on the other hand, it could have been present in the sediment before the intrusion of the spilites, as a product of older reworked ophiolites. It cannot be decided which of these two possibilities is more likely to be the case. Gabbro These rocks form the bulk of the ophiolites. Macroscopic description: With the naked eye, only grey plagioclase and hornblende can be recognized. The grain size of both the light and the dark minerals is up to 1 cm. The individual mineral grains are, however, divided into fragments, the size of which does not exceed 2 mm. The boundaries of the grains are jagged and torn up due to mechanical stress. The dark constituents were arranged in layers by cataclasis. The rocks are traversed by a close net of fine ultramylonites, which gives the superficial impression that the rocks are of much finer grain than is actually the case. Microscopic description: The effects of strong mechanical stress are also seen under the microscope (porphyroclasts of plagioclases and hornblende swim in the finer grained matrix of hornblende, chlorite and plagioclase). The clastic to mylonitic structure is, however, often masked by post-tectonical formation of prehnite. The mineral association is plagioclase, hornblende (partly in form of uralite), chlorite, serpentine, ore, calcite and prehnite. The plagioclases are twinned on the pericline and albite laws and they have a dirty and cloudy appearance due to incipient prehnitization and carbonatization. The twin-lamellae are often bent and displaced against each other along fracture planes. The investigation carried out on the universal stage with the method of Reinhard indicated a content of 22% to 28% anorthite for the plagioclase of the strongly prehnitized gabbros; for plagioclases of only slightly prehnitized rocks a content of 30% to 37% anorthite was found. The originally existing content of An may well, however, have been higher, which justifies the term "gabbro" for these rocks. The hornblende is represented in a slightly greenish and very fibrous variety, which does not show any pleochroism. The individual fibres are torn into small parts-by cataclasis, yet their original connection in the grains is still recognizable. The hornblente may well be derived from primary pyroxene. Occasionally, the hornblende is serpentinized or chloritized; pseudomorpha of calcite after hornblende are also present. The carbonatization appears to originate from calcitic patches (or from cracke, which are filled with calcite). Prehnita in stem-like form occurs together with calcite in healed up cracks. Tha prehnite was identified by means of the determination of its optical refraction on uncovered thin sections. For this purpose a set of Cargill liquids was applied. The rock is often completely pretnitized, the prehnitization starting from the cracks which are healed up by this mineral. In this case only isolated relics of fibrous hornblende or of carbonatized plagioclase, occurring embedded in a coarse-grained matrix of radially arranged prehnite, can be observed. An X-ray powder diagram of such a prehnitized rock shows no other lines than those characteristic for prehnite. Interpretation: By means of the prehnitization the rock may completely loose its mylonitic structure. The prehnitization can, therefore, be attributed to a metamorphosis closely connected with the crushing of these rocks, since the processes the recrystallization originate at the cracks. Since the cracks may be very young, at any rate younger than the final 59 crystallization of the original gabbros, it is hardly possible that the prehnitization of these rocks is caused by means of autometamorphosis. The prehnitization is a general phenomenon of the gabbros in the Siquisique region, some 90% of all of the investigated gabbros being partly or totally prehnitized. Ophiolite-limestone compound rocks The intrusion of the gabbros into lime-bearing country rocks led to the formation of typical compound rocks. Tectonical origin of part of these compound rocks must, however, not be excluded; analogies with ophicalcites exist. Macroscopic description: Macroscopically two different constituents can be recognized in the compound rocks, namely igneous components and limestone. The limestone occurs within the dark-green igneous rock in form of up to 5 mm. thick, slightly undulated, more or less parallel bands. These may coalesce and form a layer of up to 1.5 cm. thickness, which after some centimeters aplits again into various bands. The igneous rock between these banda forms spindle-shaped lenses up to 3 cm. in length. If the igneous portions have roundish boundaries they are surrounded by halos of limestone, which are somewhat coarset grained aa compare, with the limeatone of the banda and which are at the limit of macroscopical visibility. In some instances the otherwise smooth igneous/sediment contacts may be fractured by subsequent stress and particles of up to 2 mm. in size produced. The separation of layers of either sedimentary or igneous material may thus be lost and the individual fragments occur in a completely chaotic, indentated intergrowth. The discrimination of such brecciated compound rocks from brecciated ophiolites is then not always possible. Microscopic description: Under the microscope, the components of igneous rocks show broken plagioclases, intensively perforated and corroded by calcite, which are embedded in a fine grained matrix of chlorite and serpentine. Occasionally, however, hypidiomorphically crystalized and comparatively undistorted portione of gabbro, whose dark constituents are completely chloritized, are observed between the bands of limestone. The plagioclases are twinned on the albite and, sometimes, on the pericline law. Often they are carbonatized, so that the determination on the universal stage gave only inexact values of 25% to 30% anorthite. Along stringers of the igneous rock or at the margine of subrounded igneous components the calcite forms xenoblastic beads. Limestones, which contain great quantitiec of chlorite-bearing chert material, may also form compound rocks at the contact with the ophiolites. The precise genetic interpretation of the described compound rocks is not an easy task and cannot be attempted with a few samples. Contact phenomens were not observed in the cherts and radiolarites. Tuffs of Tuffites She pyroclastic nature of these rocks could not be proven with certainty. They may also represent sediments with components of igneous rocks. Two varietes, which are separated by their internal structure, can be distinguished: a. Crystal tuff to tuffite, and b. "Lithic tuffite", whith occure together with the ophiolites. Crystal Tuff to Tuffite Macroscopic description: Macroscopically, white to reddish grains of feldspar of up to 1 mm. can be recognized, which are baked together by finely distributed limonite of violet appearance. The rock is interwoven by a network of fine cracks filled by red limonite. The weathored rock, therefore, shows a reddish color. The "tuffite" is slightly bedded, but the limonite veinlets exaggerate the impression of bedding. Microscopic description: Under the microscope also, the rock shows the structure of a crystal tuffite; that is, big fragments of plagioclase and roundish grains of calcite are embedded in a fine-grained matrix consisting of elongated plagioclase laths, the whole being cemented together by a peculiar matrix (glass?). The fragments of plagioclase are twinned on the albite law. The measurements on the universal stage gave as a result the composition of an acid andesite with 30% to 35% anorthite. Partly, tho plagioclases aro slightly sericitized or kaolinized. Some individual crystals of plagioclase are often covered by a thin film of limonite. The grains of calcite, too, are often surrounded by a mantle of limonite, so that they appear almost opaque. 60 Besides limonite, calcite also takes part in the filling material of the cracks. It is not feasible to decide with certainty if the rock represents a tuff, in the proper sense, or if we are dealing with a tuffite. The particles of calcite point to the latter possibility. "Lithic Tuffite" These tuffites are composed of clastic material, which contains fragments of igneous and sedimentary rocks and, additionally, some fragments of crystals. Macroscopic description: Macroscopically, roundish to elliptical grains of igneous rocks (up to 9 mm.) and white to light-gray grains of feldepar (up to 1 mm.) can be recognited. Irregularly terminated orange-red grains of dolomite (up to 3 mm.) and occasional greenish chert fragments are equally distributed within the rocks. The rock, thus, acquires a very heterogeneous green-orange-red sprinkled appearance. Bedding can only vaguely be guessed at. Microscopic description: On microscopical inspection, it can be recognized that the fragments of igneous rocks and the sedimentary grains are cemented together by a matrix, which consists of a fine grained substratum of plagioclase laths and which also contains big fragments of corroded plagioclase in the form of skeletal crystals. The composition of the plagioclase which is contained in the matrix has been determined on the universal stage, as follows: 35% to 38% anorthite = andesine Partly, the grains o, igneous rocks are of the same composition as the matrix itself (i.e., bigger grains of plagioclase occur in a fine grained matrix); however, grains of carbonatized spilites, which again contains inclusions of chert, also occur. The sedimentary particles, which take part in the composition of these tuffites, are of a variable composition. In most cases, however, they consist of orange-red grains of dolomite. These dolomite grains are composed of rhombohedra, which mostly appear opaque due to a brown limonitic cover. The identification of the dolomite was, therefore, achieved by means of X-ray analysis. In addition to the above fragments, chlorite-bearing chert particles and coarse grained quartzites (containing indentated quartz grains and sericite) are also present. Sediments It has been mentioned already that the ophiolites occur in association with radiolarites and cherts. In principle, two types of sedimentary rocks can be distinguished, as follows: a. Rocks, such as radiolarites, quartzites with components of chert, cherts and fine conglomerates composed of chert and dolomite. b. Sediments, which besides the above named rock-types also contain components of igneous origin. To this group belong the cherts, pellets containing chlorite and a conglomerate containing fragments of crinoids, pellet limestone, chert and spilite. The aspect of the sediments is very diversified; generally the macroscopical discrimination of dark colored radiolarites or radiolaria-bearing cherts from spilites is quite difficult. Relationship of the magmatic activity with sedimentation: comparison with similar rock provinces The following remarks are based exclusively on our investigation on thin sections and rock fragments. They shall be given here with all reservation; specific petrographical field investigations would be indispensable in order to arrive at definite conclusions. Intrusion-or extrusion? The serpentinites and gabbros quite certainly solidified intrusively (plutonically or subvolcanically). The sharply bounded inclusions of chert and the compound rocks which originated at the contact of igneous with sedimentary material are in favor of this opinion. The spilites, however, probably intruded into not yet consolidated silica mud, so that submarine - effusive to subeffusive solidification can be assumed. The few samples of uncertain tuffs do not allow any further statements; they may very well represent submarine tuffites (i.e., redeposited tuffs). The association We are dealing here with the classical association of spilite, gabbro, serpentinite and radiolarites (cherts) included, which has been observed from many-orogenes (see, e.g., the statements made by J.F. Turner and Verhoogen, 1951). 61 This association is of an ophiolitic character. In many provinces of this kind, rocks rich in magnanese are found. It would be of interest to investigate the existing rock samples of sedimentary origin from the Siquisique region in this respect. Spilites of a submarine origin often show pillow structures, which are not always easily recognizable in the field. It would be, of great interest to know if such pillow lavas occur in the Siquisique region*. The small rock chips which are at our disposal do not allow any statement concerning this question. Steinmann (1927) interpreted this rock association as characteristic for an abyssal environment. According to this author ophiolitic magmas would have intruded into the deep marine troughs via tectonical planes. Since the time of E. Davis (1918), the abyssal formation of the radiolarites is doubted by most geologists and petrologists. The abundant growth of silica organisms could also be explainet by assuming an inorganic supply of silicic acid, which would be associated with the emplacement of the ophiolites. The problem was discussed in detail by H. Grunau (1946). In the Swiss Alps a similar rock association is known from some parts of the lower east alpine and penninic nappes (e.g., from the so-called "Aroser Schuppenzone"). There, this special ophiolitic association is not found in the central main geosyncline, but in marginal troughs. The ophiolites which occur in the main geosyncline have other characteristics; spilites are missing there. A special genetic problem is given by the high sodium content of the spilites. A copious literature deals with this question. Hydromagmatic solidification, or autometamorphosis, or supply of sodium out of the sea water, or secondary metamorphosis by circulating waters (containing CO2) have been mentioned as possibilities. P. Eskola (1946) was able to show, by means of experiments, that a "spilite reaction" possibly can proceed as follows: Na2CO3 + CaAl2O8 + 4 SiO2 = CaCO3 + NaAlSi3O8 The formation of our carbonatized spilites could, for example, be reconstructed as follows: The rocks were fractured by tectonical stress; in the cracks sodium-carbonate solutions were circulating, displacing the calcium of the plagioclases and replacing it by sodium. Part of the calcium carbonate, originating as a result of this process, cemented the fissures of the rock, whereas the remaining part of it is still present in the plagioclases in the form of a carbonatic impregnation. The prehnitization of the gabbros, also, may be explained by assuming a similar post-tectonical hydrothermal alteration. TABLE I - Particulars on thin sections of rocks from the Siquisique region (arranged according to their classification into tock groups) Samples collected by: G. R. Coronel and E. J. C. Kiewiet de Jonge (Explor. Dept., C.S.V.). This section study by: J. Schilling and E. Niggli (Mineralogical-Petrographical Institute, Universit of Bern, Switzerland) SAMPLE NO. FIELD TERM Cr-8 Igneous Kw-390 Kw-378 Kw-552 Kw-340 Kw-371 Kw-373 " Igneous contact rock Ign. + sedim. Ign. + chert inclusions Igneous " Kw-379 Kw-521 Ign. + sedim. Porphyritic bas. ign. Kw-310 Kw-309 Kw-345 Schist Igneous " Kw-350 " Dw-351 " Kw-361 Kw-368 " " LOCALITY Los Algodones) area ) ) Q. La Vaca ) " " " ) Los Algodones) Q. La Mocha ) Q. La Vaca ) " " " ) ) " " " ) Q. Las ) Petacas ) Q. Chorrerón ) " " ) Camino ) La Vaca ) Q. Las ) Palomas ) ) Q. La Cueva ) ) " " " ) Q. El Tigrito) 62 ROCK TYPE Serpentiniti Spilite Prehnitized gabbro MINERAL COMPOSITION Serpentine, quartz, picotite, relics of pyroxene. Chlorite, albite, calcite, epidote, titanite, quartz, limonite. Plagioclase, hornblende, uralite, chlorite, prehnite, calcite, quartz, ore. Kw-369 Kw-365 Kw-437 Kw-542 Kw-545 Kw-547 " " " Igneous " " Cr-21 " Cr-11 " Kw-588 " " " " " " " Q. La Mocha C° El Pegal " " " N. of C° El Regal E. of C° El Regal Kw-388 Kw-389 Kw-556 Ign./chert " " Hornblende gabbro Kw-561 Kw-313 Cr-16 " Lst./ign. Igneous Kw-318 " Kw-427 Kw-436 " " " ) ) ) ) ) ) ) ) ) ) Q. Las ) Petacas ) Prehnitized ) gabbro N. of C° ) El Regal ) Q. La Vaca ) " " " ) Los Algodones) -Baragua road) " " ) Q. Chorrerón ) N. branch of ) Q. Paganas ) ) Q. Chorrerón ) Gabbro ) " " ) Q. La Mocha ) Plagioclase, hornblende, uralite, chlorite, prehnite, calcite, quartz, ore. Plagioclase, chlorite, hornblende, serpentine, calcite, ore. Kw-538 Sed. rock with ign. Los Algodones- "Lithic Urucure tuffite" trail Plagioclase, glass, débris of chert, dolomites. Cr-43 Volcanic rock N. of Los Algodones Baragua road Plagioclase, chlorite, calcite, glass. Kw-312 Kw-317 Kw-393 Contact rock Igneous/shale Ign./contact rock Cr-22 Igneous Cr-36 Cr-35 Diabase on top of gabbro Bas. ign. at contact Q. Chorrerón ) " " ) Q. La Torta ) ) Ophiolite) limestone N. branch of ) compound rock Q. Paganas ) Los Algodones) -Baragua road) " " ) Kw-618 Diabase on gabbro Kw-601 Lst. + ign. grains E. of Q. La Vaca Conglomerate Fragments of fossil of spilite and of chert. Pellet limestone. Cr-10 Igneous Los Algodones area Radiolarite Fossils: Spumellaria and Nassellaria. Kw-602 Bas. igneous E. of Q. La Vaca Radiolarite Components of dolomite. Fossils: Spumellaria. " " 63 Crystal tuffite Plagioclase, chlorite, calcite, partly components of chert. Chert Cr-3 Lst./ign. Los Algodones area Quartzite-limestone-dolomite breccia Kw-320 Igneous Q. Recoveco Quartzite Cr-33 Black shales + thin S. of Los Algodones -Baragua road Organic sediment with spicules of spongia and with spumellaria with organic pigment. Cr-23 Igneous Los Algodones Baragua road Chert breccia Quartz, calcite, muscovite, zircon, components of chert. Bibliografía Davis, E., 1918. The Radiolarian Cherts of the Franciscan Group. University of California Publications. Bulletin of the Department of Geology. Eskola, P., 1946. Kristalle und Gesteine. Springer Vorlag Wien. Gerth, H., 1936. Die Bedeutung des Magmas in der Orogenese der südamerikanischen Kordillere. Geologische Rundschau, Vol. 27, Heft 1. Gerth, H., 1955. Der geologische Bau der südamerikanischen Kordillere. Gebrüder Bornträger, Berlín - Nikolassee. Grunau, H., 1946. Die Vergesellschaftung von Radiolariten und Ophiolithen in den Schweizer Alpen. Ecl. Geol. Helv. Vol. 39, Nr. 2. Reinhard, M., 1931. Universaldrehtischmethoden. Wepf & Cie. Verlag, Basel. Steinmann, G., 1927. Die ophiolithischen Zonen in den mediterranen Kettengebirhen. Compte Rendu 14e Congrés Geologique International 1926. Gráficas Reunidas, Madrid. Turner, F. J. y J. Verhoogen, 1951. Igneous and Metamorphic Petrology, New York. Winchell, A., 1951. Elements of Optical Mineralogy, Part II, Fourth Ed. John Wiley & Sons, Inc. New York. Chapman & Hall, Ltd. London. See also: Südamerikaheft, Geologische Rundschau. Vol. 45, Heft 3, 1957. * Note: pillow lavas were, in fact, reported during the field survey (private communication from G. Coronel to G. Feo Codecido). 64 ANEXO 2 [Como se pasará por parte de la ruta de la excursión siguiente, se anexa el texto para un mejor entendimiento] Descargado del Código Geológico EXCURSION A LA REGION DE DUACA-BARQUISIMETO-BOBARE Por Alirio Bellizzia G. y Domingo Rodríguez G. Asociación Venezolana de Geología, Minería y Petróleo, Guía N° 4, 12 y 13 de Febrero de 1966. Introducción El estudio geológico de esta zona ha sido de gran interés por ser la región de convergencia de los sistemas orogénicos de los Andes y Cordillera de la Costa. A esta circunstancia, y al hecho de estar ubicado en el borde oriental del llamado "Surco de Barquisimeto", se debe en gran parte su complejidad tectónica y estratigráfica. Aunque en los últimos años se han publicado algunos buenos trabajos que han contribuido a esclarecer su historia geológica, muchos de sus problemas tectónicos se encuentran todavía en etapa de controversia. En la región afloran rocas metamórficas, ígneas y una espesa sección de rocas del Cretáceo, Paleoceno-Eoceno y Terciario Superior. El discutido problema de los deslizamientos submarinos en pequena escala durante el Cretáceo Superior y Terciario Inferior en el Estado Lara, ha sido tratado en publicaciones recientes y aceptado por la mayoría de los geólogos. En cambio para explicar la presencia de grandes masas alóctonas de rocas cretáceas, algunas de varios kilómetros de longitud, se han propuesto diversas interpretaciones: bloques de fallas, corrimientos de ángulo pequeño (napas), islas, diapirismo, plegamiento isoclinal y más modernamente deslizamientos por gravedad durante la sedimentación de una espesa sección de turbiditas en el Surco de Barquisimeto en tiempos del Paleoceno-Eoceno. Otro de los problemas en que surgen discrepancias es el de la edad de la Formación Bobare, espesa secuencia de areniscas y lutitas que forman la serranía del mismo nombre. Se extiende hacia el norte hasta el valle de la Quebrada Urama, y pasa lateralmente hacia el este a los clásticos y calizas cristalinas de la Formación Mamey metamorfizada, llegando hacia el oeste hasta el valle de las Quebradas Urama y Matatere. Esta formación no contiene fósiles por lo cual su edad no se ha podido establecer. A veces se presenta asociada a masas y bloques del Cretáceo Inferior y Superior y por esa razón algunos geólogos la consideran como del Cretáceo Inferior, explicando la presencia de las masas del Cretáceo por fallamiento, plegamiento o como remanentes erosionados. Otros la consideran del Terciario Inferior; interpretan esa asociación a veces caótica, como bloques deslizados durante la sedimentación del Terciario Inferior y consideran esta unidad como equivalente nerítico de los depósitos de aguas profundas de la facies de "flysch" del Paleoceno-Eoceno. Para comprender los problemas estratigráficos y tectónicos de la región es indispensable estudiar las relaciones de esta secuencia con las rocas metamórficas de la región de Duaca, cuya composición, con algunos variantes, es semejante a la de las rocas de la Formación Bobare. Los aspectos tectónicos y sedimentarios en la región de Barquisimeto-Bobare-Quibor-Duaca, serán los puntos más resaltantes a estudiar y discutir brevemente en esta excursión de dos días, que con toda certeza contribuirá a un mejor conocimiento del área. El problema que aquí se presenta forma parte de un estudio geológico detallada del Estado Yaracuy y parte de los Estados Lara, Falcón, Carabobo y Cojedes, emprendido por la Dirección de Geología en el año 1958. A. Bellizzia inició los Trabajos de Campo en 1958 en la Serranía de San Felipe. Posteriormente se unió al grupo el geólogo Domingo Rodrúguez G. y finalmente Elías Zambrano. Actualmente los trabajos continuan entre la Serranía de Tucuragua al sur de Nirgua y los contrafuertes de la Serranía de San Carlos, a fin de enlazarlo con los estudios de Bushman, Menéndez y Mackenzie en el área comprendida entre Acarigua-Tinaquillo-El Pao, y dejar de esta manera enlazados los trabajos geológicos de la zona occidental con los de la oriental. En esta excursión, de acuerdo a la disponibilidad del tiempo, se han seleccionado zonas críticas cuya visita y análisis darán una idea generalizada de los difíciles problemas tectónicos de esta zona. Deseamos expresar nuestro agradecimiento a la Asociación Venezolana de Geología, Minería y Petróleo por haber brindado la oportunidad de preparar esta excursión y al Director de Geología, Alberto Vivas R., del Ministerio de Minas e Hidrocarburos por haber autorizado y prestado todas las facilidades para su realización; a los colegas Clemente González de Juana, Amos Salvador y Sebastián Bell, con quienes memos discutido algunos de los problemas tectónicos del área; a Nelly Pimentel y Alfredo Sabater por su colaboración en la preparación de las ilustraciones; a Cecilia Petzall por la lectura del manuscrito. 65 Aspectos Fisiográficos: Desde el punto de vista orográfico la porción central del Estado Lara es región de confluencia de los sistemas andino, coriano y Cordillera de la Costa. El sistema andino está representado por las Sierras de Barbacoas y Portuguesa, que pueden considerarse como las últimas estribaciones de los Andes, con alturas inferiores a los 3.000 metros. El sistema coriano comprende el Estado Falcón y parte norte del Estado Lara; en éste ultimo está representado por las Sierras de Baragua, Matatere y Bobare, con altura máxima de unos 1.400 metros. El tramo occidental de la Cordillera de la Costa (Serranía de Aroa) termina en el Estado Lara en la población de Duaca, con alturas máximas del orden de 1.700 metros. La Serranía de Bobare está separada de la Serranía de Aroa por la depresión de Barquisimeto-Duaca-San José. La depresión de Barquisimeto-Carora o depresión central del Estado Lara, que cubre unos 4.000 kilómetros cuadrados de superficie, es la confluencia de los sistemas andino-coriano y del caribe y se encuentra comprendida entre Carora, El Tocuyo, Barquisimeto y Sarare. En la región de Carora alcanza su mayor desarrollo; hacia 66 Barquisimeto continua en forma menos precisa, dominada por una morfología de colinas redondeadas de poca a mediana altura y constituída por rocas del Cretáceo y Terciario. En Barquisimeto la depresión se ensancha un poco y aparecen nuevamente terrazas cuaternarias que se prolongan al suroeste hacia Quibor; hacia el este continja en la depresión del Río Yaracuy. La depresión Barquisimeto-Carora es muy irregular, con planadas, terrazas, colinas y "guadi"; la altura es muy variable, entre los 425 metros en Carora y 566 metros en Barquisimeto. Hacia el norte pasa insensiblemente al sistema coriano: las colinas y lomas se transforman en sierras y las depresiones en valles. Al norte de Barquisimeto la separación se hace precisa y por el sur la demarcación con los Andes es aun más nítida. Barquisimeto, a unos 560 metros sobre el nivel del mar, es una terraza con suave declive hacia el norte y este. Las colinas de los alrededores de Barquisimeto soportan escasa vegetación xerófila. Las serranías de Bobare y Matatere están cubiertas por arbustos y monte bajo; hacia el noroeste la Serranía de Aroa soporta selvas espesas, tipo de vegetación que predomina también en las elevadas zonas montañosas al sur de Barquisimeto. La precipitación anual de la región de Barquisimeto es de unos 750 mm. anuales, en los valles de Quíbor y Bobare de unos 580 mm. anuales y en las regiones montañosas pasa de los 1,200 mm. anuales. Las cuencas hidrográficas más importantes de la región son las hoyas de los ríos Turbio y Sarare al sur; hacia el norte la de los ríos Duaca y Bobare, afluente el primero del río Aroa y el segundo del río Urama. Las otras dos grandes cuencas de importancia son las de los ríos Aroa y Yaracuy, al noroeste y este respectivamente. En la zona hay evidencia de levantamientos recientes como son las numerosas terrazas aluvionales en la vecindad de Barquisimeto, los abanicos aluvionales disectados y la presencia de sedimentos cuaternarios con cantos semiredondeados, que se encuentran tanto en la cima como en las laderas de muchas colinas. Estratigrafía El área de barquisimeto es de gran complejidad estructural y por lo mismo no es siempre posible estudiar la secuencia estratigráfica en orden cronológico. No obstante, se presenta un breve resumen de las unidades que se encuentran cerca o que afloran en las zonas que se visitarán en esta excursión y que están intimamente relacionadas con los problemas de la región de Barquisimeto. Pre-Cretáceo: La unidad más antigua de las rocas metamorficas afloran en la región de Yaritagua y se compone de gneises porfiroblásticos, augengneises, gneises anfibólico-granatíferos y esquistos cuarzo-micáceo-feldespáticos, conocidos en la literatura como Formación Yaritagua, por cuyas características petrológicas y posición estratigráfica sería equivalente a las formaciones Peña de Mora y las Brisas de la región central de la Cordillera de la Costa. Suprayacente a la Formación Yaritagua y en posición estratigráfica normal, reposa una secuencia de calizas cristalinas, mármoles, esquistos cuarzo-micáceo-feldespáticos, esquistos cuarzo-micáceo-feldespático-grafitosos, esquistos gneísico-cuarzo-feldespáticos y anfibolitas granatíferas. Ese conjunto litológico se ha considerado correlacionable con la Formación Antimano de la región de Caracas, pero con un mayor desarrollo en el Estado Yaracuy. Este conjunto ha sido denominado Formación Nirgua en nuestros estudios regionales, e incluye las calizas cristalinas de Río Abajo que afloran en la región de Yaritagua (Bushman, 1959-1965). Concordantemente sobre la Formación Nirgua yace una espesa sección de esquistos calcáreo-grafitosos, filitas grafitosas, calizas cristalinas macizas, calizas laminadas grafitosas, esquistos verdes y esquistos calcáreo-micáceo cuarzosos. A la secuencia calcárea se encuentran asociados los yacimientos de piritas cupríferas del distrito minero de Aroa. La Serranía de Aroa se compone esencialmente de estas rocas, por lo cual han sido denominadas Formación Aroa, la cual se considera equivalente a la Formación Las Mercedes del Grupo Caracas. La sección de calizas y esquistos calcáreos de la Formación Los Cristales de Bushman queda incluída en esta formación. Formación Mamey: La unidad cubre en aparente concordancia la Formación Aroa y aflora al norte de Yaritagua y al este de Duaca. Su mejor sección se halla en las quebradas Mamey y Nonavana. Se compone esencialmente de esquistos cuarzomicáceo-sericíticos, esquistos calcáreos, filitas grafitosas, meta-conglomerados, meta-areniscas calcáreas y calizas laminadas. En los alrededores de Duaca en la localidad Tumaque, cerca de la base de la formación se encuentra una espesa sección de ca lizas macizas puras, cristalinas y de carácter biohermal, que son utilizadas por la Compañía Venezolana de Cementos para la fabricación de cemento blanco. Las unidades características de la formación son los esquistos cuarzo-sericíticos y los meta-conglomerados, cuyos fragmentos muestran efectos cataclásticos, de fracturamientos y estiramiento producidos durante el metamorfismo. También se observan micro y macro-brechas con fragmentos líticos de calizas y filitas en una matriz arcillosacalcárea. Los componentes principales de las meta-areniscas y meta-conglomerados son cuarzo y feldespatos esencialmente potásicos en una matriz o cemento arcilloso-calcáreo. La formación se puede considerar como producto de una sedimentación nerítica relacionada a probable levantamiento epirogénico de la Serranía de Aroa. 67 Estas rocas podrían compararse litológicamente con las formaciones Chuspita descrita por Seiders (1965) en la región de Caucagua-Guatire, Tucutunemo de la región central de la Cordillera de la Costa (Shagam, 1960) y Araure, Agua Blanca y Cojedes en la región comprendida entre Acarigua y San Carlos, descritos por Renz y Short (1960). La Formación Los Cristales (Bushman, 1959, 1965), correspondería a las formaciones Aroa y Mamey y, debe conservarse su uso para aquellas zonas donde no sea posible separarla en estas dos últimas unidades. Formación Bobare: 68 La Formación Mamey cambia aparentemente hacia el oeste y en forma gradacional a la Formación Bobare; la ausencia de calizas, aumento progresivo de clásticos arenáceos y una disminución progresiva del metamorfismo hasta hacerse imperceptible en la Serraní de Bobare, marcan la zona de transición de estas dos formaciones. La Formación Bobare se compone esencialmente de arenIscas cuarzosas oscuras, gris claro y crema, de textura variable que va desde grano muy grueso, a veces conglomerático hasta grano fino, predominando las de grano medio. Las areniscas son duras, densas y con textura en parte sacaroide. Los granos poseen bordes sub-angulares y sub-redondeados, constituídos por cuarzo, micas y pequeñas cantidades de feldespatos, el cemento es silíceo y a veces calcáreo o ferruginoso. Algunas poseen algo de matriz arcillosa y es frecuente observar láminas o escamas de lutitas y perdigones de arcilla. Las areniscas se presentan en capas delgadas variando a capas macizas que sobrepasan los tres metros de espesor; presentan superficies de estratificación generalmente onduladas y algunas exhiben marcas de base no muy bien desarrolladas y gradación incipiente. No se observan marcas de oleaje, estratificación de corrientes, ni estratificación cruzada. Las areniscas cuarzosas frescas son de color gris, gris azuloso, gris oscuro y algunas de color crema; en superficies meteorizadas, predominan los tonos rojizo, amarillento y marrón. Interestratificadas con las areniscas se encuentran lutitas filíticas y limolitas bien laminadas de color negro. Una característica de la formación es la presencia de lutitas de color gris claro o crema, muy semejantes según Bushman, a las llamadas "lutitas caoliníticas" del Cretáceo Inferior en la localidad de Barbacoas. Una determinación por Rayos X efectuada por M. Rivero en una muestra de lutita de la región de Algari al norte de Barquisimeto dió una composición ilítica (65%) y no caolinítica como hasta ahora se había considerado. Para los fines de comparación un estudio realizado por el mismo autor en las lutitas y arcillas del Cretáceo y Eoceno en la región de los Andes, han puesto de manifiesto una composición ilítica en las muestras del Cretáceo Inferior Andino. La Formación Bobare constituye la serranía de su nombre, sus afloramientos no son muy abundantes en las quebradas, las filas y sus laderas se presentan cubiertas por bloques de areniscas. No se han encontrado fósiles ni polen en la Formación Bobare, que permita una determinación de su edad. La ausencia de fósiles y marcas de oleaje, así como las características litológicas, gradación en pequeña escala, desarrollo de algunas estructuras o marcas de base, sugieren un ambiente sedimentario de plataforma inestable con transportes esporádicos por corrientes de turbiedad. Es necesario destacar las grandes semejanzas litológicas y petrográficas que existen entre esta unidad y gran parte de la Formación Morán. Ya Bushman en 1959 habta observado este hecho y en su informe sobre la región de Barquisimeto no pudo establecer diferencias básicas entre la Formación Morán y la parte arenácea de la Formación Carorita del Cretáceo Inferior. Los suscritos en numerosas visitas de reconocimiento a las áreas de afloramientos de la Formación Morán entre Barquisimeto y El Tocuyo comprobaron una vez más esta gran semejanza litológica. Por provenir la mayoría de la fauna descrita por Von der Osten y Zozaya (1957) de las lutitas de El Tocuyo y no del miembro arenáceo de Botucal, la edad de este miembro no está aún bien establecida. Por estas circunstancias hay que considerar la posibilidad que la Formación Morán constituya un complejo caótico que incluye además del Terciario Inferior tipo Matatere, mantos y bloques alóctonos de la Formación Barquisimeto, calizas del Cretáceo Inferior y rocas de la Formación Aguardiente. También podría darse el caso que la Formación Bobare y las Areniscas de Botucal representen en realidad el equivalente nerítico en el Surco de Barquisimeto de las facies de aguas profundas del Terciario Inferior. Los afloramientos actuales de estas unidades muy cerca de los bordes del surco justificaría esta última interpretación. Formación Carorita: En el área de Barquisimeto la Formación Carorita (descrita por Bushman, 1959, 1965), representa un bloque alóctono de la Formación Mamey, de unos ocho kilómetros de longitud y unos 3,5 kilómetros de ancho. La Formación Carorita consiste esencialmente de calizas arenáceas feldespáticas de grano grueso que forman capas macizas; los horizontes delgados se presentan bien foliados. Las areniscas y conglomerados calcáreos están frecuentemente gradados; los conglomerados son lenticulares y a veces forman verdaderas brechas interformacionales con fragmentos de calizas de más de 20 centímetros de largo. Interestratificada en sus capas se encuentran calizas negras muy puras semejantes a la Caliza de Tumaque, pero en menor proporción. El resto de la formación está representada por lutitas filíticas, margas laminadas y lutitas calcáreas. Las calizas son de color gris, gris azuloso y gris oscuro y cuando meteorizan se tornan gris verdoso o verde oliva y en su superficie se destacan los granos de cuarzo. Al microscopio algunas calizas presentan la estructura de "perdigón" típica de las calizas del Cretáceo Inferior. Algunas de las calizas arenosas y areniscas calcáreas conglomeráticas exhiben gradación y muestran, como las lutitas, un desarrollo incompleto de foliación. Las lutitas y margas están bien laminadas pero algunas son escamosas y bastante blandas con colores de meteorización blanquecino, rojizo pardo, lavanda y amarillento y pueden confundirse fácilmente con rocas de composición 69 semejante de la Formación Barquisimeto. El espesor de esta formación en el área de Barquisimeto se estima en unos 500 metros. Cerca del caserío de Carorita Arriba, se presenta un conglomerado calcáreo grueso, a veces guijarroso, con fragmentos líticos de calizas, cuarzo y chert negro, denominada por Coronel y Renz (1950) Formación La Osa (Cretáceo Superior-Paleoceno) y la consideran como un bloque alóctono en los sedimentos del Terciario Inferior. Bushman (1959), informa de la presencia de amonitas no enrolladas en las calizas de la Formación Carorita que R. Imlay, al examinarlas, identificó como especímenes de Idiohamites y Pseudoheligoceras, del Albiense Superior. Coronel y Renz mencionan Orbitolina y Neotrocholina en las calizas de Carorita que indican también edad Albiense. En varias localidades los suscritos han encontrado especies de amonitas no enrolladas, semejantes a las descritas por Bushman. En un estudio de muestras de Carorita, Bermúdez menciona fragmentos de Orbitolina y algas calcáreas. La litología y los fósiles de la Formación Carorita sugieren sedimentos neríticos de aguas claras y someras. Las formaciones La Osa y Caliza Azul en el área de Carorita se consideran en este informe como parte de la Formación Carorita y no como unidades separadas como lo proponen Coronel y Renz (1960). Formación Barquisimeto: La Formación Barquisimeto fué descrita por Bushman (1959, 1965) para designar una espesa sección de calizas, lutitas, margas, lutitas silíceas y chert que aflora en los alrededores de Barquisimeto. Las calizas son más frecuentes en la parte inferior de la formación y se pueden distinguir dos tipos: uno que se presenta en capas gruesas y el otro que aparece en capas delgadas de carácter lenticular. Las concreciones calcáreas no son tan comunes como en su equivalente la Formación La Luna en la Serranía de Trujillo. Las calizas son carbonáceas, y laminadas y presentan un alto porcentaje de arcilla y limo en su composición. Las lutitas silíceas y chert meteorizan en color gris claro y crema, son laminadas y se separan en hojas delgadas y quebradizas. Las lutitas calcáreas y las margas meteorizan en tonos rojizos, amarillentos, lavanda, blanquecinos y purpura. Es notable el contraste entre los afloramientos frescos de la Formación Barquisimeto, en los que predomina el color negro y las rocas meteorizadas, que exhiben gran variabilidad en sus colores de meteorización. Los cherts y lutitas silíceas son más frecuentes en la parte superior de la formación. La Formación Barure descrita por Bushman (1959, 1965) se incluye en este informe en la parte superior silícea de la Formación Barquisimeto. Esta unidad exhibe grandes semejanzas con las formaciones Paracotos y Mucaria de la Cordillera de la Costa y Serranía del Interior. Una de las características de esta formación en los alrededores de Barquisimeto es la presencia de porfiroblastos de pumpellita que sugieren un grado bajo de metamorfismo. La pumpellita necesita para su información altas presiones confinantes e imfluencia térmica subordinada. También puede formarse en zonas de fuerte cizallamiento acompañadas de temperaturas bajas. Esta última posibilidad es quizás la más aplicable a la presencia de este mineral en esta región. En los alrededores de Barquisimeto, la formación es muy escasa en fósiles. Bushman informa la presencia de Guembelina globulosa (Ehrenberg), Guembelina cretácea (d'Orbigny) y Globigerinella escheri clavata Bronnimann, que indican una edad equivalente a la de la Formación La Luna. Coronel y Renz, señalan la presencia de un amonita del género Mamites y Bermúdez, en muestras recogidas por los autores, informa sobre la presencia de Globigerina sp., Guembelina sp., Globotruncana sp., radiolarios y restos de macrofósiles no identificables. Los conjuntos faunales conocidos hasta ahora en la Formación Barquisimeto indican una edad Cenomaniense-Turoniense, que podría incluir parte del Albiense Superior hasta el Maestrichtiense. Bushman menciona como hecho interesante, en las regiones de Barquisimeto y Barbacoas, la presencia de calizas del tipo cogollo en la Formación Barquisimeto y La Luna respectivamente. Este hecho podría interpretarse como olistromas del Grupo Cogollo en estas últimas unidades, o que la Formación Barquisimeto se extendió hasta el Albiense Superior, y por lo tanto podría representar en tiempo, la sedimentación de las formaciones Capacho-La Luna-Colón en las áreas mencionadas. Von der Osten y Zozaya (1957) presentan una extensa lista de microfósiles de su Formación Cazadero sinónima de la Formación Barquisimeto cuya edad es Turoniense-Coniaciense, pudiendo alcanzar el Maestrichtiense-Daniense. El ambiente sedimentario de la Formación Barquisimeto es de aguas profundas, como lo indica una fauna predominantemente pelágica, ausencia de formas bentónicas y una litología que sugieren condiciones euxínicas de sedimentación. Formación Matatere: Los sedimentos del Paleoceno y Eoceno no se encuentran muy bien representados en los alrededores de Barquisimeto. Los mejores afloramientos se presentan en los ríos y quebradas que disectan la Serranía de Matatere. Existen buenos afloramientos en el Río Urama y en las quebradas Matatere y Cambural, por lo que se han 70 considerado apropiado usar el nombre de Formación Matatere para designar esta espesa secuencia de turbiditas asociada a varios horizontes de capas de peñones. En esta unidad estaría incluída la "capa de Peñones de Pavia" descrita por Bushman, el Terciario no diferenciado en facies de "flysch" de Coronel y Renz (1960) y parte de la Formación Morán de Von der Osten y Zozaya (1959) y Bushman (1959, 1960). No se incluyen las areniscas cuarcíticas de la Formación Morán (Areniscas de Botucal) por presentar estas otras condiciones de sedimentación y tener más afinidad con las areniscas del Terciario Inferior andino. La Formación Matatere es la unidad más característica del Surco de Barquisimeto, puede correlacionarse con la Formación Guárico del frente montañoso de la Serranía del Interior y con las capas de Río Guache descritas por Von der Osten y Zozaya (1957) en el frente montañoso entre Acarigua y Guanare. Las tres unidades presentan las mismas condiciones de sedimentación y tectonismo. La Formación Matatere se compone de una espesa sección de turbiditas representadas por areniscas que varían desde areniscas impuras líticas a areniscas impuras feldespáticas, con varios horizontes de areniscas conglomeráticas y conglomerados líticos. Las areniscas y conglomerados se componen de cuarzo, feldespatos y micas y fragmentos líticos de composición variable representados por calizas, filitas, esquistos, cuarcitas, lutitas y en menor proporción por rocas volcánicas básicas y gneises. Es interesante destacar que la proporción de fragmentos líticos de volcánicas básicas aumenta hacia el norte, y al sur de Siquisique la formación contiene un porcentaje muy alto de estos fragmentos relativamente frescos. Estas rocas con alto porcentaje de volcánicas básicas son grauvacas típicas. La matriz arcillosa, a veces arcilloso-calcárea, constituye el 10-25% de la roca por volumen. Las areniscas se presentan generalmente en capas delgadas, aunque pueden alcanzar espesores de hasta más de 2 metros. Son de color gris verdoso o marrón, presentando al meteorizar el típico aspecto de "sal y pimienta". Las areniscas son generalmente de grano medio y muestran pobre escogimiento y predominio de granos sub-angulares y angulares. El porcentaje por volumen de las areniscas varía del 25% al 35% de la secuencia. Las areniscas exhiben buena gradación y marcas de base tales como calcos de flujo, de carga, de deslizamiento, pliegues en voluta, estructuras de desgarre y deslizamiento, típicas de secuencias turbidíticas. También es frecuente encontrar en las areniscas, perdigones de arcillas, láminas y escamas de filitas y lutitas, así mismo característicos de este tipo de sedimentos. Las lutitas son generalmente limolíticas o arenáceas, cuando frescas son de color negro y metforizadas predomina el color verdoso o marrón. La estratificación de las lutitas es muy irregular y por el escaso espaciamiento de las fracturas y el desarrollo de un clivaje oblicuo, se origina una fragmentación en lápices. Al sur de la carretera Barquisimeto-Quíbor las lutitas de El Tocuyo de la Formación Morán se presentan mejor estratificadas y en la parte inferior desarrollan buena laminación. La presencia de olistromas en el Surco de Barquisimeto durante la senlientación del Paleoceno-Eoceno ha sido ampliamente discutida por varios autores. El análisis sobre este tópico se reserva para el capítulo sobre tectonismo y sedimentación. Los bloques deslizados en la Formación Matatere varían en tamaño desde peñones hasta verdaderos bloques montañosos. Los bloques son de la Formación Barquisimeto y del Cretáceo Inferior, de areniscas y rocas graníticas y gneísicas, estas últimas muy abundantes al norte de Bucarito. Al sur del Alto de Siquisique se presentan olistromas de rocas volcánicas básicas. En la sección Paleoceno-Eoceno se encuentran varios horizontes de capas de bloques. Las lutitas no son fosilíferas; esta misma observación fué hecha con anterioridad por Bushman después de haber hecho lavar centenares de muestras con resultados negativos en el área de Barquisimeto. En una de las muestras recogidas por los suscritos, Bermúdez identificó Cribrostomoides trinitatiensis Cushman y Jarvis, Cyclammina elegans Cushman y Jarvis, Glomospira sp. y Haplophragmoides excavata Cushman y Waters, que corresponden al Paleoceno. Bushman describe algunos macrofósiles en su Formación Morán que podrían representar una edad desde el Cretáceo Superior hasta el Eoceno. Por lo contrario en la regjón de El Tocuyo-Bobare, Von der Osten y Zozaya encontraron que su Formación Morán es muy fosilífera y contiene una microfauna variable de foraminíferos, que coloca a su Formación Morán desde el Daniense hasta el Eoceno Medio. 71 72 Las condiciones sedimentarias de la Formación Matatere son semejantes a la facies de "flysch" europeo y su sedimentación se atribuye en gran parte a corrientes de turbiedad. La presencia de grandes espesores de turbiditas asociados a fenómenos de deslizamientos submarinos por efectos de gravedad, es una característica del Surco de Barquisimeto y juega un papel de primordial importancia en la tectónica y mecánica de transporte del alóctono. La presencia de olistromos de rocas metamórficas y volcánicas sugiere levantamientos epirogénicos de las áreas limitrofes del surco o una fuerte erosión submarina. El desarrollo de calizas arrecifales es la evidencia de levantamientos en el Paleoceno en el área de El Tocuyo y Carora. En la región estudiada no se encuentran calizas arrecifales, sino delgadas capas esporádicas de calizas pelágicas. Se estima un espesor que sobrepasa los 3.000 metros para esta formación. Tectonismo y Sedimentación Los hechos tectónicos observados en el Surco de Barquisimeto han sido interpretados de maneras considerablemente diferentes. No hay hasta el presente una hipótesis sobre el desarrollo y tectonismo del surco que tenga una acepción general. Quizás, como dice el Profesor Merla al referirse a la tectónica de Los Apeninos, que "la impresión final que un geólogo visitante tiene de la geología apenínica es una de gran confusión, pero que es conveniente destacar que la causa principal de la dificultad, si no de la confusión, estriba en Los Apeninos mismos, más bien que en la mente de los investigadores". Sin entrar en mucho detalle, podemos tratar de resumir los diferentes puntos de vista sobre la tectónica y sedimentación del Surco de Barquisimeto en tres hipótesis: 1) Autoctonía - algunos autores como Rod y Maync (1954), interpretando algunas zonas como la del Cerro Sabana en los alrededores de Carora, consideran a las lutitas del Terciario como de edad Cretácea y a los bloques como parte de la secuencia interestratificada normalmente en la sección. Otros autores han tratado de explicar los mismos hechos por la mecánica de diapirismo, fallamiento e islas del Cretáceo durante la sedimentacion del Terciario Inferior. Esta teoría ha sido descartada ya por la mayoría de los profesionales de la geología conocedores del área. 2) Aloctonía según el modelo de napas - por napas se entiende un manto rocoso que avanza como una sola unidad, siendo el traslado tectónico por gravedad o compresión cortical. Von der Osten y Zozaya (1957) informan sobre la presencia de grandes mantos de corrimientos de rocas cretáceas sobre rocas del Terciario Inferior, en la zona comprendida entre Barquisimeto y Quíbor, que se presentan hoy día fragmentados a causa de la erosión; algunos de 73 estos remanentes alcanzan varios kilómetros de longitud. A causa del plegamiento del plano de falla y la poca distorsión observada por los autores citados en las capas tanto corridas como sobrecorridas, no les fué posible determinar la dirección exacta de los corrimientos; sin embargo, la inclinación general del plano de falla parece ser noroeste. Tales corrimentos se debieron a compresión cortical desde el noroeste. Hoy día Von der Osten (comunicación personal), da mayor importancia a la gravedad para explicarlos. 3) Aloctonía según el modelo de deslizamientos de bloques y mantos de grava - esta última teoría es la que cuenta con el apoyo de la mayoría de los geólogos para explicar las relaciones caóticas de las unidades del Cretáceo y Paleoceno-Eoceno en el Surco de Barquisimeto. Esta teoría estructural, desarrollada en los últimos 25 años bajo la influencia de la escuela italiana para explicar la tectónica caótica de Los Apeninos, ha tenido que luchar vigorosamente para desplazar los conceptos antiguos de compresión cortical, fuertemente atrincherados en la literatura. Diversos autores, entre ellos Bucher (1952), en una breve visita al Estado Lara, tuvo la oportunidad de estudiar algunas zonas críticas, Bucher las interpretó como "bloques exóticos''' que habían alcanzado su posición actual por deslizamientos submarinos relacionados con una orogénesis intra-Senoniense. Las evidencias actuales fijan una edad Terciario Inferior para las lutitas en las cuales se encuentran embebidos los bloques. Renz et al. (1955), en su interesante trabajo sobre deslizamientos submarinos durante el Terciario Inferior en los alrededores de Carora, demarca el llamado "Surco de Barquisimeto'' e informa sobre la presencia de grandes deslizamientos submarinos, algunos de más de 1 kilómetro de longitud y que fueron separadas por la ruptura de escarpados submarinos, causados por movimientos verticales en los bordes del surco. Las masas y bloques fueron trasladados por gravedad hacia el centro del mismo, habiendo viajado, algunos de ellos, más de 30 kilómetros. Hacia el noro-este de Carora, además de los bloques de rocas del Cretáceo Inferior y Superior, menciona la presencia de olistromas de rocas graníticas y gneísicas. Evanoff et al. (1950) describen la presencia de deslizamientos submarinos durante el Paleoceno entre Carora y Barquisimeto, especialmente en el área de Puente Torres. Bushman (1959, 1960, 1965), refiere la existencia de deslizamientos submarinos durante el Cretáceo Superior y Terciario Inferior en el área de Barquisimeto y Carora. Metz (1960) hace referencia a deslizamientos submarinos en el frente montañoso entre los ríos Boconó y Guache. En esta zona la situación es tan caótica que el autor la ha denominado "Complejo de Morador", donde es frecuente encontrar lutitas de la Formación La Luna, del Paleoceno y Eoceno Inferior, mezcladas con bloques de calizas con rudistas del Cretáceo Inferior, concreciones elipsoidales de la Formación La Luna, bloques de calizas y cherts de la Formación La Luna, calizas del Paleoceno y rocas ígneas y metamórficas. Esta asociación caótica es una de las pocas localidades descritas en venezuela que podría compararse al llamado "Alóctono", en Los Apeninos, que incluye la llamada "Argille Scagliosa'' ("arcilla escamosa") y los bloques de rocas de edades diferentes incluídas en ella. En el área descrita por Metz y bien conocida de los suscritos, incluye en el Complejo de Morador varias formaciones no bien definidas, como Villanueva, Los Cristales, Capas de Río Guache y La Luna. El "Complejo" ha sido corrido hacia el sur sobre sedimentos del Terciario Superior; el límite norte del Complejo, es la falla de Boconó. Renz (1960) describe deslizamientos submarinos en el área de El Tocuyo y opina que parte del manto alóctono provino probablemente de un alto estructural constituído por rocas cretáceas y pre-Cretáceas en la región de Siquisique, Estado Falcón. Un punto interesante en este informe es la descripción, en la zona de Curazaito al norte de El Tocuyo, de deslizamientos que incluyen toda la sección cretácea derrumbada hacia el surco, como lo indica la presencia de masas alóctonas del Cretáceo Superior, corridas sobre clásticos basales del Cretáceo Inferior autóctono. Kugler (1953) informa también sobre la presencia de bloques alóctonos en formaciones del Paleoceno y Mioceno de Trinidad y al comentar las relaciones de los Morros de San Juan (Estado Guárico), los interpreta como bloques alóctonos en el Paleoceno. Oxburgh (1965), Menéndez (1965) y Bushman (1962) describen la presencia de bloques exóticos tanto en el Paleoceno-Eoceno como en las formaciones Mucaria y Paracotos en el frente montañoso entre Acarigua y El Pao. En la Formación Guárico del Terciario Inferior, que aflora en el frente de montañas de la Serranía del Interior, se presentan bloques y masas alóctonas desde el área de El Tinaco hasta la región de Uchire. En la zona de Barquisimeto el problema se complica, no por la presencja en sí de bloques desljzados en el Terciario Inferior, sino por la discrepancia que existe con respecto a la edad de la Formación Bobare. Esta unidad la hemos considerado como Cretáceo Inferjor por las razones siguientes: a) la Formación Mamey, unidad metamorfizada que aflora en la región de Duaca, pasa aparentemente en forma gradual y lateral a la Formación Bobare; b) las características litológicas y el ambiente sedimentario presentan pronunciadas diferencias entre esta unidad y las turbiditas del Terciario Inferior (Matatere); c) hacia el sur las unidades de Mamey y Bobare se extienden hasta la región de Acarigua-Agua Blanca-San Rafael de Onoto recibiendo en sus áreas de afloramientos nombres diversos: Los Cristales, Araure, Agua Blanca y Cojedes; d) en la Cordillera de la Costa es un hecho comprobado que el Grupo 74 75 Caracas cierra su ciclo sedimentario con unidades litológicas semejantes a las de Mamey y Bobare: Chuspita en la región central del Estado Miranda (Seiders, 1965) y Guinimita en la Península de Paria (González de Juana et al., 1965); e) en los mapas isópacos de la región de Lara Central, Los Andes y Zulia, que A. Bellizzia tuvo oportunidad de analizar en las oficinas de la Creole Petroleum Corporation por gentileza de A. Salvador, es evidente que las unidades del Cretáceo Inferior aumentan en espesor hacia el este, en tanto que los sedimentos del Terciario Inferior tipo Misoa-Trujillo, disminuyen en esa dirección hasta desaparecer en la región de Barquisimeto; y f) las investigaciones mediante difracción de Rayos X, efectuadas por M. Rivero (1965) en arcillas y lutitas del Cretáceo y Eoceno andino ponen de manifiesto una composición ilítica para las lutitas del Cretáceo Inferior. Esta composición fué determinada por el mismo autor en muestras de arcillas blancas suministradas por los suscritos, procedentes de Algari, al norte de Barquisimeto. Contrariamente a lo antes expuesto, Coronel y Renz (1960) y Renz (1960) consideran una edad diferente para la Formación Bobare y la interpretan como el equivalente nerítico de los sedimentos de tipo "flysch'' del Paleoceno del Surco de Barquisimeto. Argumentan en favor de su tesis la semejanza litológica con el Terciario Inferior-Andino y el hecho que en los cerros de Algari, la secuencia de Areniscas de Bobare cubren la Formación Barquisimeto; esta relación fue interpretada por Bushman como un anticlinal volcado; estudios posteriores han demostrado que esta última opinión no es factible por no presentar la sección caracteres de volcamiento como lo demuestra la gradación normal de las areniscas. Los suscritos lo interpretaron como un corrimiento de estratificación debido a compresión cortical o por gravedad. Posteriormente Coronel (1963), en un análisis de la geología de la región de Barquisimeto; analiza nuevamente el problema, sugiriendo que la Formación Bobare debe ser por lo menos más jóven que los fósiles redepositados del horizonte calcáreo de la Formación Carorita. En el mismo informe, al considerar la posición estructural regional de las areniscas cuarcíticas, que aparentemente suprayacen a las formaciones Barquisimeto y Carorita en la Serranía de Bobare, Coronel observa en las fotos aéreas cavernas de solución que indican la presencia de calizas subyacentes del tipo Carorita; también se refiere a la presencia de afloramientos de la Formación Barquisimeto embutidos en las areniscas cuarcíticas de Bobare. En nuestros estudios detallados de campo de la Serranía de Bobare se localizaron los afloramientos señalados por Coronel y los datos recogidos nos han permitido interpretar los afloramientos de Carorita, como olistromas de esa unidad en la Formación Bobare y con respecto a los bloques de la Formación Barquisimeto incluídos en la Formación Bobare, se pueden interpretar de dos maneras: 1) como mantos caóticos de deslizamiento que incluyen los sedimentos del Terciario Inferior y olistromas de unidades más viejas que se movieron por gravedad en períodos sucesivos hacia el este quizás hasta el paralelo de Duaca. Posteriormente durante el plegamiento las masas alóctonas parcialmente erosionadas fueron incorporadas tectónicamente, imprimiéndole a la zona el aspecto caótico hoy observado. Es de interés hacer mención en este punto que segun Dallmus (comunicación personal), en algunas perforaciones efectuadas en el valle de Barquisimeto-Duaca, al norte de la Fábrica Venezolana de Cemento, se han encontrado rocas del Terciario Inferior con bloques de Barquisimeto debajo de la cubierta cuaternaria; 2) la otra alternativa, sería el considerarlas como remanentes de las formaciones Matatere y Barquisimeto, ya que la mayoría de las masas se presentan con estratificación paralela a la de la Formación Bobare y en los casos cuando estas unidades poseen orientación distinta, se podrían interpretar por fallamiento rotacional o deslizamientos modernos. Bushman (1965) explica por fallamientos estas mismas relaciones en la región de río abajo. No hay que descartar la posibilidad que la Formación Bobare fuese en realidad más jóven que la Formación Barquisimeto, en cuyo caso la explicación para estas relaciones caóticas se simplificaría notablemente al interpretar las mismas por deslizamientos submarinos por gravedad. Una vez analizados los aspectos regionales sobre deslizamientos submarinos, pasaremos ahora a los tópicos de tectónica y metamorfismo. Según las ideas actualmente aceptadas sobre el metamorfismo de la Cordillera de la Costa, se ha considerado, como hipótesis de trabajo, que los sedimentos que forman la Cordillera de la Costa sufrieron un metamorfismo cuyo grado dependió más de la profundidad de la zona, donde prevalecieron condiciones térmicas anormales durante el Cretáceo, que de episodios discontinuos de metamorfismo diastrófico se parados por períodos de levantamiento y erosión. Al final de este proceso ocurrieron levantamientos epirogénicos con posible formación de islas al norte. Estos levantamientos estuvieron acompañados de fallamiento, dando origen a un cuadro paleogeográfico favorable para que se iniciaran los deslizamientos submarinos en el Surco de Barquisimeto, en las postrimerías del Cretáceo Superior y comienzos del Terciario Inferior. La presencia en el borde oriental del surco, de rocas metamorfizadas de la Formación Barquisimeto y Carorita se interpreta como bloques alóctonos y mantos de deslizamientos provenientes de la Serranía de Aroa al este y del "Alto de Siquisique'' al norte, donde también afloran rocas cretáceas, volcánicas y metamórficas. La Cordillera de Trujillo al oeste, sería la fuente natural de suministro del material alóctono para la región occidental del surco. 76 Con posterioridad a estos episodios epirogénicos y de transporte por gravedad, las montañas fueron sometidas a compresión cortical desde el noroeste. La edad de esta orogénesis puede situarse entre el Eoceno Superior y el Mioceno como está indicado en el flanco sur de Cerro Misión (Estado Falcón) por una discordancia angular entre la Formación Casupal del Oligoceno y las rocas metamórficas. Analizando los conceptos tectónicos en un sentido restringido a la zona que visitaremos durante esta excursión, se destacan los siguientes hechos: a) la Falla de Barquisimeto representa uno de los elementos estructurales más importantes de la zona y ha sido ampliamente discutida por Rod (1956, 1957), Von der Osten y Zozaya (1957) y Bushman (1959, 1965). Esta falla se conoce en la literatura bajo diferentes denominaciones: Barquisimeto, Sarare y Boconó, siendo ésta última la de mayor aceptación. La falla es del tipo de desgarradura o transcurrente dextral con desplazamientos horizontales de más de 30 kilómetros. en los valles de los ríos Turbio y Yaracuy, aunque la falla se encuentra cubierta en parte por los sedimentos cuaternarios, es nuestro criterio que el movimiento dominante fué vertical y no horizontal. A conclusiones similares han llegado González de Juana (comunicación personal) en el área de El Tocuyo, Dallmus (comunicación personal) en la zona de Barquisimeto y El Tocuyo y Shagam (comunicación personal) en el valle del río Chama. El rumbo de la Falla de Boconó es de N55° a N70°E; y a lo largo de ella hay desarrollo de una ancha zona de cataclasis, puesta en evidencia por intenso brechamiento, trituración y presencia de bloques exóticos de diferentes unidades geológicas. La falla se extiende desde los Andes meridionales hasta el Mar Caribe. En la región de los andes, Shagam la considera como una geofractura tipo "keystone". El amplio valle del Yaracuy originado por el paso de la falla de Boconó se ha interpretado en este trabajo como un valle de "rift". Es posible que esta falla haya pasado por varios períodos de actividad desde el Cretáceo hasta nuestros días, como lo demuestran los terremotos que se han efectuado en el área, de los cuales el mas reciente ocurrió en 1950. En la zona además de esta falla principal se observan fallas normales, muchas de ellas relacionadas con ajustes posteriores ocurridos como consecuencia de los deslizamientos submarinos; también se observaron fallas transcurrentes en varias direcciones con rumbo dominante nor-noroeste. El rumbo general de las capas es nor-este con buzamiento al norte; el plegamiento isoclinal y fallamiento han causado repetición notable de la sección y por todas partes se observa evidencia de traslado tectónico hacia el sur. Muchos de los corrimientos son del tipo de estratificación y pueden estar relacionados tanto con la gravedad como con compresión del tipo orogénico. Los más importantes son: el de Loma de León, que ha producido el cabalgamiento de la Formación Barquisimeto sobre las formaciones Matatere y Bobare; el corrimiento de El Cojo o de Las Minas, donde la Formación Carorita está corrida sobre Barquisimeto y el de Algari, donde la Formación Matatere cabalga sobre Barquisimeto y Carorita. En opinión de Bushman, hubo simultaneidad en el plegamiento y fallamiento, como lo demuestra en pequeña escala el hecho de que la mayoría de las capas competentes ha sido corrida hacia el sur en un modo imbricado. En las rocas 77 que han desarrollado foliación, ésta es paralela a la estratificación. Los plegamientos cruzados y el clivaje que corta los ejes de los pliegues, sugieren que la región ha sido sometida a más de un período de compresión ya sea del tipo orogénico o por gravedad. Las capas competentes exhiben fracturas y diaclasas en varias direcciones y las incompetentes desarrollan clivaje, plegamiento no-armónico y pliegues de flujo, caracteres estos que sugieren un estado aún plástico de las unidades para el momento de la de Formación. Los deslizamientos por gravedad han debido jugar un papel de primerísima importancia en esta etapa de deformación. Los grandes valles de Quíbor y Duaca podrían tener un origen tectónico, o podrían ser el resultado del arreglo caótico producido por los deslizamientos submarinos ya analizados. Posteriormente por procesos de erosión diferencial en las rocas duras y blandas desarrollar esa fisiografía de "Lomos de Camello" característica de la parte central del Estado Lara. Las terrazas y abanicos aluvionales disectados a niveles más altos que los valles que los circundan indican levantamientos recientes. Programa de Excursiones Tiempo: 15 minutos 12 de febrero de 1966 Afloramientos de areniscas gris oscuro y lutitas de la El primer día de excursión visitaremos la región Formación Bobare. La litología es semejante de la norte, este y noreste de Barquisimeto. en el Mapa No. sección arenácea de la Formación Morán que 1 está señalada la ruta a seguir y las estaciones veremos mañana. principales. Si el tiempo lo permite podremos hacer paradas adicionales ya seleccionadas. La salida para Estación No. 4 Río Abajo el campo está prevista para las 7:30 a.m. Tiempo: 20 minutos Contacto entre las formaciones Bobare y Estación No. 1 Barquisimeto. Se observan las relaciones Carretera Barquisimeto-Carorita Arriba aparentemente concordantes entre estas unidades. Un Tiempo: 30 minutos poco más adelante se ve en el lecho del río excelentes En la quebrada a la derecha de la estación puede afloramientos de calizas y lutitas de la Formación observarse una parte de la secuencia de la Formación Barquisimeto. Barquisimeto, representada por lutitas silíceas, chert, lutitas, margas y capas delgadas de calizas. Se Estación No. 4 Río Abajo aprecian los diferentes tonos de meteorización de la Tiempo: 10 minutos Formación Barquisimeto. En los flancos de los cerros Corta parada para observar afloramientos de chert Hornitos y Las Minas se puede estudiar el contacto muy fracturados de la Formación Barquisimeto. entre las formaciones Barquisimeto y Carorita. Los afloramientos de la Formación Carorita están Estación No. 5 Río Abajo representados por conglomerados calcáreos, calizas Tiempo: 15 minutos arenáceas, lutitas y margas. Las capas exhiben Lutitas de la Formación Matatere. Note el color gris foliación y algunas están gradadas. Hay calizas puras verdoso de los afloramientos meteorizados y la forma cristalinas color negro semejantes a los horizontes de característica de fracturamiento en lápices. Hay calizas que veremos en la Estación No. 2. La algunos guijarros de rocas gneísicas incluídos en las interpretación estructural para el contacto Caroritalutitas y en la quebrada aguas arriba se observan Barquisimeto es de un corrimiento de estratificación. algunos bloques de calizas del Cretáceo. Entre esta Estación No. 2 parada y la siguiente se verán numerosos bloques Caserío Carorita Arriba alóctonos de calizas del Cretáceo, embutidos en las Tiempo: 30 minutos lutitas de la Formación Matatere. Al noroeste se En esta parada podremos analizar el corrimiento de puede apreciar un gran bloque de la Formación Algari, donde la Formación Bobare cabalga las Barquisimeto en relación discordante con la formaciones Barquisimeto y Carorita. Buenos estratificación de la Formación Matatere. afloramientos de los conglomerados de La Osa, "Caliza Azul" y Areniscas de Bobare. Las relaciones Estación No. 6 Río Abajo tectónicas de esta zona están en controversia. Tiempo: 20 minutos Bushman la interpretó como un anticlinal volcado; Esta localidad es una de las más interesantes. Se Coronel y Renz como un contacto de deslizamiento y observan las relaciones caóticas entre las calizas y nosotros como un corrimiento de estratificación. lutitas de la Formación Barquisimeto y las areniscas de la Formación Bobare. Estación No. 3 Río Abajo 78 Afloramientos plegados y fallados de la Formación Bobare. Indicios de transporte tectónico hacia el sur. Se pueden ver lutitas cremas blanquecinas, típicas de la Formación Bobare. Estación No. 12 Carretera Barquisimeto-Bobare Localidad: Alto de Pavía Tiempo: 30 minutos Sección tipo de las "Capas de Bloques de Pavía". Se ven numerosos bloques de calizas embutidas en las lutitas del Paleoceno. Más al este, en la carretera, buenos afloramientos de la Formación Barquisimeto. Fin de la gira y regreso a Barquisimeto. 13 de febrero de 1966 El programa para este medio día de excursión incluye una corta gira por la carretera Barquisimeto-San Miguel. El regreso se hará siguiendo la vía de la Quebrada Seca. En esta travesía los excursionistas podrán analizar uno de los grandes mantos de corrimientos de la Formación Barquisimeto cabalgando sobre la Formación Morán y en Quebrada Seca una "ventana'' de la Formación Morán. En San Miguel se apreciará una vista panorámica de la gran Falla de Boconó. En el Mapa No. 2 está marcada la ruta y las estaciones principales. A partir de este punto seguiremos la carretera de tierra que saliendo de río abajo pasa por el caserío de Algarí para unirse a la carretera BarquisimetoBobare. Durante esta corta travesía los excursionistas tendrán la oportunidad de ver a ambos lados de la ruta afloramientos de las formaciones Bobare, Barquisimeto y Matatere en arreglos caóticos. En el cerro Salto de León se observan algunos pliegues no armónicos en la Formación Barquisimeto. Almuerzo Se tiene previsto una parada de una hora para almorzar en el Restaurant "Don Carlos" a pocos kilómetros de la unión de la carretera de Bobare con la troncal Barquisimeto-Carora (ver mapa de localización, fig. 2). Estación No. 7 Carretera a Bobare Tiempo: 15 minutos Buenos afloramientos de areniscas "sal y pimienta", y lutitas de la Formación Matatere. Se puede apreciar la diferencia entre estas areniscas y las del tipo cuarzoso de la Formación Matatere. El afloramiento muestra intenso cizallamiento y evidencias de traslado tectónico hacia el sur. Estación No. 8 Carretera a Bobare Tiempo: 15 minutos Afloramientos de la Formación Matatere con bloques exóticos de calizas y rocas gneísicas. Entre esta estación y la siguiente podremos ver afloramientos de las formaciones Barquisimeto, Bobare y Matatere y sus relaciones caóticas. Estación No. 9 Carretera a Bobare Tiempo: 15 minutos Excelente afloramiento de areniscas gris oscuro de la Formación Bobare. Entre este punto y el caserío de Bobare se observa a la izquierda una gran masa de la Formación Barquisimeto aparentemente embutida en la Formación Bobare. Si el tiempo lo permite después de visitar la Estación No. 11, tendremos la oportunidad de apreciar de cerca este bloque y analizar sus relaciones con las formaciones Bobare y Matatere en la quebrada El Cartero, al este del pueblo de Bobare. Estación No. 10 Carretera Bobare-Copeyal Tiempo: 20 minutos Olistroma de la Formación Carorita en Bobare. Las calizas han suministrado algunas amonitas del Cretáceo Inferior. Esta estación y la siguiente están fuera del Mapa Geológico No. 1. Aparecen marcadas en el mapa de localización para referencia de los excursionistas. Estación No. 11 Carretera Bobare-Copeyal Salida para el campo: 7:30 a.m. Estación No. 1 Carretera a San Miguel Tiempo: 20 minutos Borde norte del corrimiento. Contacto aparentemente concordante de las formaciones Barquisimeto-Morán. Excelente vista panorámica del valle de QuíborBarquisimeto y la Serranía de Trujillo al oeste. Entre esta estación y la siguiente se observan en la carretera buenos afloramientos de las Lutitas de Morán; y a la izquierda pliegues no armónicos en la Formación Barquisimeto que indican transporte tectónico hacia el sur. Estación No. 2 Carretera a San Miguel Tiempo: 30 minutos Vista panorámica de la Falla de Boconó. Note el contraste fisiográfico entre las rocas metamórficas al sur y las sedimentarias al norte separadas por la Falla de Boconó. Estación No. 3 Quebrada Seca Tiempo: 15 minutos Buenos afloramientos de calizas negras, lutitas y chert de la Formación Barquisimeto. Estación No. 4 Quebrada Seca Tiempo: 15 minutos Zona de contacto entre las formaciones Barquisimeto y Morán. Afloramientos de areniscas gris oscuro de la 79 Formación Morán. Aprecie la semejanza litológica con las areniscas de la Formación Bobare. Los afloramientos desde esta estación hasta la No. 7 en una "ventana" de la Formación Morán en el lecho de la quebrada. En las vertientes del valle afloramientos de la Formación Barquisimeto. Estación No. 5 Quebrada Seca Tiempo: 15 minutos Excelentes afloramientos de areniscas masivas gris oscuro y lutitas de la Formación Morán. Estación No. 6 Quebrada Seca Tiempo: 15 minutos Zona de falla, excelentes afloramientos de areniscas y lutitas de la Formación Morán. Estación No. 7 Quebrada Seca Tiempo: 20 minutos Contacto entre las formaciones Barquisimeto y Morán. Fin de la excursión y regreso a Barquisimeto. 80 Referencias Alberding, H., 1957. Application of principles of wrench fault tectonics of moody and hill to northern South America. Geol. 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