Un camino para involucrarse en la conservación de la

Transcripción

Un camino para involucrarse en la conservación de la
LAS
AREAS
DE
CONSERVACIÓN
PRO
PRIVADA
-
ACP
NATURALEZ A
LAS ÁREAS DE CONSERVACIÓN
PRIVADA EN EL PERÚ
Un camino para involucrarse en la
conservación de la naturaleza
Lima - 2004
Las áreas de conservación privada en el Perú
Un camino para involucrarse en la conservación de la naturaleza
En la elaboración del presente libro, se contó con el auspicio de la Embajada de Finlandia y el firme
respaldo de Mikko Pyhälä, persona muy comprometida con la conservación de la naturaleza.
Redacción y edición:
Leonidas Suasnabar
Oscar Franco
Juan Borja
Supervisión y revisión de contenidos:
Jorge Ugaz Gómez
Colaboración:
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César Laura
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Fotografías:
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Las áreas de conservación
privada en el Perú
Un camino para involucrarse en la
conservación de la naturaleza
Las Areas de Conservación Privada - ACP
PRÓLOGO
Tan importante como la conciencia conservacionista, es la evolución
en el tiempo de sus puntos de vista y sus discursos. Cuando en los
años sesenta se extiende masivamente el alerta acerca del estado de
los recursos naturales del planeta, se generaliza un discurso
“parquista”, centrado en la necesidad perentoria de establecer áreas
naturales en las que la actividad humana no tenga ninguna injerencia,
en el entendido de que no hay especie más depredadora que el
hombre. El tiempo y las circunstancias han determinado que esta
visión haya variado y que hoy el consenso vaya por el lado de la
sostenibilidad antes que por la exclusión del ser humano. Nociones
como las de aprovechamiento racional y manejo de recursos, están
consiguiendo más a favor de la protección y conservación, que las
alarmas surgidas en laboratorios distantes de la pobreza y la
discriminación, que en países como el nuestro, son las causas más
profundas de la canibalización de la naturaleza.
Cuanto más se avanza en esta línea, mayores oportunidades surgen
para que las personas tengan capacidad de iniciativa directa en el
tema medio ambiental. En el Perú los proyectos de manejo de
recursos aparecieron al interior de ciertas áreas protegidas donde las
actividades de uso indirecto son factibles. Luego se avanzó,
creándose sub sistemas añadidos al SINANPE, que facultan este
manejo en ámbitos municipales y regionales. Hoy se despliega una
nueva opción, la del Área de Conservación Privada, que no solamente
desprejuicia el que la actividad privada sea per se un agente
amenazador y voraz, sino que abre oportunidades para que nuevos
territorios se sumen a los ya categorizados como ámbitos de
conservación y protección, de manera que estas contribuyan al
desarrollo local de empresas y comunidades, en vez de apartarlas del
proceso.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
El primer caso de un Área de Conservación Privada está en Chaparrí,
en los bosques secos de Lambayeque. Allí ya se ha acotado la
factibilidad de este diseño. Chaparrí protege el ecosistema a la vez
que contribuye al repoblamiento de especies como el oso andino y la
pava aliblanca, mediante una gestión privada asociada a los distritos y
comunidades próximos. Quién vaya a Chaparrí percibirá de
inmediato cómo los pobladores de Chongoyape se siente
concernidos en una visión a futuro tanto como en una estrategia
concreta para emplear correctamente sus recursos. El turismo de
observación de naturaleza, pronto habrá de anotar en Chaparrí el
elemento que demuestre la factibilidad del diseño.
Hay que saludar con entusiasmo la aparición de "Las áreas de
conservación privada en el Perú" Un camino para involucrarse
en la conservación de la naturaleza”, elaborado por
PRONATURALEZA con apoyo de la Embajada de Finlandia y The
Nature Conservancy. Estamos ante el primer intento de difundir la
gestión privada de áreas protegidas. El valor del trabajo de
PRONATURALEZA tiene ese mérito, y otro adicional: se trata de
un manual claro y útil destinado a extender este tipo de manejo, que
puede hacer de cada persona responsable, un gestor de la lucha
contra la pobreza mediante la conservación de nuestros recursos
naturales.
Rafo León
Noviembre, 2004
Las Areas de Conservación Privada - ACP
INDICE
Introducción
Pag.
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I. Las Áreas de Conservación Privada (ACP)
Beneficios de un ACP
Elementos para la definición de un ACP
Definicion de un ACP como área natural protegida
Proceso de reconocimiento de un ACP
Otros tramites y aspectos burocráticos de la gestión de un ACP
Apuntes sobre la gestión de un ACP
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II. Chaparrí: un modelo para la conservación privada
Descripción del área
Zonificación del área
Amenazas y problemas al interior del ecosistema de Chaparrí
Importancia del área de conservación privada Chaparrí.
Esfuerzos de conservación en Chaparri
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III. Iniciativas y Potencialidades para la conservación privada en el Perú
KCOSÑIPATA
Iniciativas privadas en Kcosñipata
Las ACP y su relación con la Reserva de Biosfera del Manu
Relación de predios que pueden acceder a ACP
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BOSQUE DE ZARATE, sobreviviente de los andes.
Descripción del área
Principales amenazas al área
Importancia de la conservación de los bosques de Zarate
BOSQUE DE CUYAS
Descripción del área
Amenazas para el bosque de Cuyas
Importancia del bosque de Cuyas
Posibilidades y esfuerzos de conservación
Bosques de polylepis, el último refugio - “el caso del ABRA MÁLAGA”
Pag.
Descripción del área
Amenazas al ecosistema de abra Málaga
Esfuerzos de conservación de abra Málaga
Medidas de mitigación
Descripción técnica del género polylepis y su importancia
El arrayán (myrcianthes ferreyrae). LOMAS DE TAIMARA: su último hogar
Descripción del área
Historial del área y amenazas actuales
Importancia de las lomas de taimara
Esfuerzos de conservación y medidas a tomar
Descripción técnica del arrayán
Humedales de PUERTO VIEJO
Descripción del área
Importancia de los humedales de Puerto Viejo
Amenazas para el humedal
Esfuerzos de conservación propuestas para el humedal
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El Manglar de SAN PEDRO DE VICE
Descripción del área
Amenazas para el manglar
Importancia del manglar
Posibilidades y esfuerzos de conservación
IV. Opciones para conservar la naturaleza en tierras públicas
“Bosque de Sho´llet” / El Pajonal Oxapampa
Las Montañas del “Yanachaga - Mirador”/ Pozuzo
ANEXOS
-Bibliografía
-Glosario
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Las Areas de Conservación Privada - ACP
PRESENTACION
En el mundo de la conservación existen, cada vez más diversas
formas de proteger espacios naturales de importancia ecológica. De
estas, una de las más alentadoras y la que en la última década ha
venido siendo impulsada con mayor entusiasmo es la constitución de
áreas de conservación privada, que tiene a su favor el no depender del
aparato gubernamental y responder a las iniciativas particulares, así
como la posibilidad de gestionar su propio financiamiento o lograrlo
de terceros. Experiencias de otros países, manifiestan su constitución
como un complemento exitoso a las áreas protegidas por el Estado;
países como Costa Rica, Chile, México, Colombia e incluso algunos
países de África ya han comprobado los éxitos de esta estrategia
como contribución a la institucionalidad conservacionista.
PRESENTACIÓN
Es interesante además, constatar que el caso peruano refleja en su
historia cotidiana diversas experiencias de conservación en las que de
una u otra manera, la sociedad civil estuvo involucrada activamente
en el establecimiento y manejo de áreas protegidas. Aún sin ser parte
de un sistema formal de conservación, los espacios naturales han sido
manejados por años en base a criterios de sostenibilidad y
conservación de la diversidad biológica en estas iniciativas.
Desde que el 6 de abril del 2004 el Instituto Nacional de Recursos
Naturales, dio las pautas para el establecimiento oficial de Áreas de
Conservación Privada vía Resolución Jefatural 059-2004-INRENA,
se abrió una nueva gama de opciones para la supervivencia y
desarrollo de los espacios naturales en el país. Hoy es factible para un
empresario, comunidad indígena o campesina, organización privada
y, en general cualquier persona natural o jurídica privada que
sustente los valores naturales de su predio, lograr el reconocimiento
del mismo, como área de conservación privada.
En el marco de esta nueva figura legal, el propietario puede realizar
actividades que resulten compatibles con la conservación del sitio,
como pueden ser, la investigación, educación ambiental, ecoturismo,
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recolección de productos no maderables, manejo de fauna, entre
otros. Todo esto es propuesto y establecido directamente por el
propietario al elaborar su Plan Maestro, el cual a su vez contemplará
la duración del compromiso de conservación. Por otro lado a los
propietarios, hoy también se les abre la posibilidad de solicitar apoyo
técnico y financiero a terceros (ONGs, instituciones dedicadas a la
conservación, fuentes cooperantes, etc.), y obtener asistencia técnica
del INRENA para los trabajos de conservación que realicen
(ecoturismo, venta de productos del bosque o "econegocio" con una
mejor imagen o marca, que respeta y protege la naturaleza).
Definitivamente esta es una opción en la que las comunidades
campesinas y nativas de nuestro país, pueden encontrar una
excelente oportunidad de uso para sus áreas naturales.
Con este nuevo esquema de manejo de áreas naturales, el Perú se
aventura a ser parte de esta innovadora solución, que pretende
conservar nuestros recursos naturales y usarlos sosteniblemente. Es
justo reconocer la gran labor de organizaciones como la Sociedad
Peruana de Derecho Ambiental, quiénes a través de la difusión de los
instrumentos legales y oportunidades existentes, vienen
encaminando la iniciativa para la Conservación Privada y Comunal, la
misma que hoy impulsa la participación de la sociedad civil en el
establecimiento y la gestión de áreas para la conservación. También
queremos reconocer y agradecer a The Nature Conservancy TNC /
AID
Programa Parques en Peligro, organización con vasta
experiencia en áreas de conservación privada en su país de origen,
cuya colaboración también ha hecho posible la difusión de estas
nuevas opciones.
El libro “Las áreas de conservación privada en el Perú”- Un camino
para involucrarse en la conservación de la naturaleza; pretende difundir
y aclarar algunas definiciones sobre un área de conservación privada
como área natural protegida, sus beneficios, el proceso de
reconocimiento, los trámites y aspectos burocráticos de la gestión.
Asimismo, transmite las potencialidades de la primera de las áreas de
conservación ya reconocidas, Chaparrí, como un modelo para la
conservación privada incluyendo los esfuerzos y las potencialidades
de nuevas áreas que merecen ser conservadas y que están a la espera
de ser tomadas en cuenta.
Para terminar, vale decir que pronto esperamos diseñar una base de
datos al respecto, que permita identificar propiedades de interés para
la conservación, y los actores involucrados. Esto, con el fin de reunir
en la medida de lo posible a los propietarios interesados, impulsando
y consolidando una red funcional y sólida de áreas privadas para la
conservación de la naturaleza en el país.
Agradecemos en forma especial, a la Embajada de Finlandia en el
Perú por su valiosa contribución institucional y por su compromiso
con una labor que promueve la conservación de las áreas naturales, la
cual hizo posible, además el Taller de Áreas de Conservación Local,
“Comunidades y Conservación”, realizado el 28 de febrero del 2002,
evento del cual se recogió la iniciativa para elaborar la presente
publicación, que hoy nos complacemos en poner a disposición de la
sociedad peruana y la comunidad conservacionista.
Jorge Ugaz
Lima, Noviembre de 2004
Las Areas de Conservación Privada - ACP
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La última década nos muestra una tendencia a nivel mundial, de
reconocimiento y de significativo incremento de las iniciativas
privadas para la conservación de la naturaleza y la diversidad
biológica que alberga. Asimismo las políticas para la conservación de
sitios y los recursos naturales, reconocen cada vez mas la importancia
y la necesidad de sostenerlas en el involucramiento y participación
activa de la sociedad civil. Frente a esta corriente de gestión de la
diversidad biológica, la nueva legislación en el Perú, está motivando
y apostando por formalizar, impulsar y desarrollar la participación
privada y comunal. Esa, es una excelente oportunidad para poder
encaminarnos hacia un modelo de desarrollo que sí apueste por su
gente y sus recursos naturales.
INTRODUCCIÓN
El Sistema Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado
Peruano SINANPE, determina 9 categorías de manejo para las áreas
nacionales; estas se complementan con los subsistemas de nivel
regional y municipal, así como con el reconocimiento que brinda el
Estado a las áreas de conservación privadas. Aplicando el todavía
reciente marco legal, ha sido posible establecer una primera Área de
Conservación Privada: Chaparrí, que constituye una iniciativa
pionera en el Perú y que abre las posibilidades para trabajar
formalmente en conservación en predios privados, tomando el
Estado un nuevo rol de regulador-promotor-controlador del sistema.
Potencialmente las Áreas de Conservación Privada (ACP)
incrementarán la cobertura de áreas protegidas a nivel nacional, y
complementarán al SINANPE; es más permitirán el sostenimiento
de las prácticas tradicionales en el uso de la tierra y los recursos
naturales, proveerán servicios ambientales y sociales, mediante la
protección de recursos de los usuarios, la conservación de recursos
genéticos y la educación ambiental. Esta opción permite un enlace
entre la conservación y actividades que generan ingresos
económicos, en la medida que es posible promover actividades de
Las Areas de Conservación Privada - ACP
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uso indirecto como recreación, ecoturismo y forestería. Además en el
caso que sean establecidas en zonas de amortiguamiento brindan el
potencial de incrementar la capacidad de manejo de las áreas
protegidas por el Estado, abriendo un abanico de posibilidades para
alianzas entre los organismos públicos y las organizaciones no
gubernamentales.
Las Áreas de Conservación Privada son ya una realidad en el Perú,
como el mencionado caso de Chaparrí, y existe también un
sinnúmero de iniciativas y de propuestas de ellas; asimismo existe un
gran interés y demanda por establecer áreas de conservación
municipal y regional a lo largo de nuestro territorio. Todo ello es el
reflejo no sólo del mayor nivel de conciencia por la conservación de la
naturaleza en diferentes estamentos de nuestra sociedad, sino que
también de algún modo reflejan la estrecha vinculación del hombre
peruano con la naturaleza. A modo de ejemplo, en el presente libro
estamos incluyendo algunas de las iniciativas ya en marcha o a nivel
de propuestas que existen en el país y que esperamos sean un
ejemplo a imitar. Finalmente como podemos notar en algunas de las
iniciativas que presentamos, las Áreas de Conservación Privada
constituyen una herramienta sumamente poderosa para asegurar la
conservación de sitios de muy alto valor biológico.
El Área de Conservación Privada Chaparrí (34 413 ha) protege
formaciones de bosque seco y permite implementar actividades de
desarrollo sostenible, tanto de uso indirecto como turismo y
artesanía, como de uso directo mediante un coto de caza. Es un
primer modelo participativo - autónomo de manejo comunal privado
que va mostrando beneficios para el ecosistema y para la economía de
la comunidad campesina “Santa Catalina de Chongoyape”Lambayeque. El Área de Conservación Privada de Chaparrí es
extraordinariamente rica en especies endémicas del Perú, casi un
tercio de sus vertebrados son únicos en el mundo. Cuenta con
alrededor de 150 especies de aves (29 son endémicas y 3 están en
peligro de extinción. La pava aliblanca es su especie más
representativa; también se puede observar al puma, ocelote, gato
andino, oso de anteojos, venado cola blanca, pudú, y al zorro de
Sechura; en vegetales destaca el tomate silvestre (Lycopersicon spp.).
Además de poseer restos arqueológicos (canales de riego, fardos
funerarios, templos, petroglifos y cerámica) con influencia de
diferentes culturas preincas Moche, Sicán, Chimú y Chavín.
Nuevas opciones pueden encontrarse en los predios para
conservación y ecoturismo de Kcosñipata Cusco, territorios aledaños
a la Reserva de Biosfera del Manu, con diferentes e interesantes
ejemplos de conservación privada, manejados por organizaciones
privadas de conservación y empresas de turismo, en lugares como
San Pedro y Pillahuata. En esta zona se reportan 39 especies de
mamíferos, varias nuevas de roedores y más de 255 especies de aves.
En esta parte de las Yungas Peruanas se ha encontrado una diversidad
de orquídeas (200 especies sólo en Pillahuata, predio propiedad de
ProNaturaleza). En esta ecorregión hay alrededor de 20 000 especies
de plantas únicas en el planeta. Lo cuál motiva iniciativas como las de
ACCA (Asociación para la Conservación de la Cuenca Amazónica),
ProNaturaleza, ACSS (Asociación para la Conservación de la Selva
Sur), MNT (Manu Nature Tours) y Municipalidad de Paucartambo,
que trabajan sobre superficies que van desde las 168 ha hasta las 3 800
ha. Este proceso está permitiendo usar tierras para conservar
diversidad biológica y ecoturismo, reduciendo de esta forma la tala de
bosques que se hacía antes para su conversión en agricultura.
“El Bosque de Zarate” (1 600 ha.) ubicado en la serranía de la
vertiente occidental de los Andes centrales, valle lateral del río
Rímac, San Bartolomé-Huarochirí. Lima; alberga una vegetación
arbustiva y herbácea muy variada entre los 2 800 y 3 200 msnm y,
posee especies nuevas para la ciencia ( Myrcianthes quinqueloba y
Barnadesia blakeana).
Las Areas de Conservación Privada - ACP
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“El Bosque de Cuyas” (600 ha.) está ubicado a unos 5 Km de la
ciudad de Ayabaca-Piura. Este bosque se encuentra dentro de
una formación de bosques montañosos de gran valor científico
(2 200 a 2 900 msnm), que en mas del 90% de su cobertura original,
que se extendía por los Andes de Ecuador y Colombia, han sido
transformados a agricultura. Por esa razón están considerados como
una de las formaciones vegetales más amenazadas del mundo y de
máxima prioridad global de conservación. Allí se han registrado más
de 110 especies de aves (entre ellas la Pava Barbada y el Quetzal
Cabecidorado).
“El bosque de Polylepis de Abra Málaga” (12,5 ha.) ubicado a
90 Km de la ciudad de Cusco (faldas del nevado Kosñiriti entre los
3 600 y 4 200 msnm), es un área de relictos en endemismo y en
peligro de extinción. Allí, se encuentran pequeños fragmentos de
bosques de Polylepis, último refugio de tres especies de aves
(Anairetes alpinus, Leptasthenura xenothorax y Cinclodes aricomae) en
situación crítica que dependen de estos parches para sobrevivir.
“Las lomas de Taimara”- Arequipa (10 000 ha.) es el remanente más
grande de un ecosistema único en el mundo, que se presenta dentro
de una de las zonas más áridas del planeta. Las lomas de Taimara
poseen una alta tasa de endemismos, allí se ha reportado 4 especies
de plantas: Myrcianthes ferreyrae, Nolana inflata, Nolana aticoana,
Pygmaeocereus familiaris; y dos especies animales: Calomys sp. y una
nueva especie de alacrán, Orobothriurus sp.). En el caso del Arrayán
(Myrcianthes ferreyrae) que es una especie de árbol, alberga a la única
muestra en el mundo de esta especie, con unas cuantas decenas de
individuos, lo cual habla de su gran importancia
“Los humedales de Puerto Viejo”- Lima (350 ha.) es el punto medio
entre los pantanos de Villa y la Bahía de Paracas. Es usado por muchas
aves como sitio de descanso y alimentación (conexión del corredor
biológico del Pacífico Sur). Resalta por su belleza paisajística y
porque contribuye a la regulación del ciclo hidrológico; puede
constituirse en un área para el turismo de observación de aves, allí
puede implementarse programas similares a Pantanos de Villa.
“Manglares de San Pedro de Vice”-Piura (400 ha.) formación especial
de la costa occidental sudamericana, tiene vital importancia (refugio
y alimentación) para las aves acuáticas, mamíferos, anfibios, reptiles,
peces e invertebrados, muchos de los cuales se encuentran en peligro
de extinción. Su conservación puede brindar enormes beneficios
económicos a la población a través de la pesca, acuicultura, y
ecoturismo.
Como intentamos mostrar de una manera muy didáctica en el
presente libro, ahora ya es posible invertir en la conservación de
tierras privadas porque se ha facilitado los pasos legales para
conseguirlo, la gestión empieza con una solicitud, y se sigue con el
proceso de inspección, aprobación, entendimiento, reconocimiento,
Registro Público, hasta lograr la aprobación del Plan Maestro; de ahí
en adelante su administración y manejo se realiza de acuerdo a los
programas y prioridades que están enunciadas en este Plan, y su
proyección se da acorde a las características particulares de cada ACP
y a las condiciones políticas, sociales y económicas que se dan en el
país.
Esto quiere decir que ha llegado el momento de ver a la conservación
privada y comunal, como una excelente oportunidad, para mejorar la
cobertura de conservación de diversidad biológica en el país, de esta
forma haremos posible que sus actores directos, adquieran seguridad
jurídica, para obtener beneficios de la tierra, y tengan seguridad
alimentaria y provisión de servicios ambientales.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
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I
I. Las Áreas de
Conservación Privada
¿Qué son, para qué sirven, cómo se hacen?
En su definición más simple, un Área de Conservación
Privada es una propiedad, o parte de ella, que a
solicitud del propietario, obtiene ese reconocimiento
por parte del Estado peruano, debido a sus valores
naturales, ambientales, paisajísticos u otros similares.
Para que el Estado otorgue este reconocimiento, la
propiedad debe cumplir con ciertos requisitos y el
dueño debe adquirir ciertos compromisos por un
período determinado de tiempo. Pero antes de
explicar con más detalles, cosa que haremos más
adelante, veamos primero qué beneficios puede traer a
un propietario, obtener dicho reconocimiento. Antes
que nada, está claro que un propietario no necesita que
su predio sea declarado Área de Conservación Privada
para conservar sus valores naturales, y cualquiera que
lo desee puede conservar las tierras de su propiedad.
Es parte del ejercicio de los derechos de propiedad
que la ley garantiza. Es más, la conservación en tierras
privadas se viene haciendo de muchas maneras desde
hace centurias en el Perú y sin ningún reconocimiento
legal u oficial. Entonces, ¿para que querría alguien que
el Estado declarase un Área de Conservación Privada
(ACP) en su propiedad?
Las Areas de Conservación Privada - ACP
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1. BENEFICIOS DE UN ACP
El primer y quizá mayor servicio que
cumple un ACP, es la oficialización del
hecho de que los valores naturales de un
predio se encuentran protegidos por su
dueño. Puede parecer que sólo hemos
repetido la definición con otras palabras,
pero queremos hacer explícito lo que
significa obtener un reconocimiento por el
Estado. Es adquirir carácter oficial. Y la ley
lo ha convertido en un derecho. Si yo,
propietario, que protejo o deseo proteger
las tierras de mi propiedad, estoy
interesado en que se oficialice la condición
de mi predio de encontrarse protegido,
puedo, entonces, solicitar que mi predio, o
parte de él, sea declarado Área de
Conservación Privada.
Los beneficios de adquirir carácter oficial
son, básicamente, dos: dejar firmemente
establecido frente a terceros de la seriedad
de nuestras intenciones de conservación y
obtener un reconocimiento al valor
biológico o ecológico del área; y dado el
caso animar o disuadir, también a terceros,
potenciales interesados en la propiedad,
de sus expectativas sobre la misma.
Convencer a terceros
Respecto al primer beneficio, el tercero a
convencer puede ser una organización
privada (ONG) de conservación, una
empresa o una entidad bancaria (caso de
un propietario interesado en conseguir
fondos, recursos humanos o apoyo
técnico); visitantes potenciales (caso de
una empresa ecoturística); potenciales
compradores de terrenos en una
urbanización semi rural, con respecto a
que tal o cual zona permanecerá inalterada
(caso de una constructora); la opinión
pública o la población de una localidad,
con respecto a que los valores naturales de
tal o cual área no serán destruidos (caso de
una compañía minera).
El poder de convencimiento que brinda
un título de ACP reposa no solo en la
“garantía” de seriedad o calidad que
puede ofrecer la oficialización, sino,
también, en los compromisos reales, y por
escrito, que el propietario asume frente al
Estado y que éste pone como requisitos
p a r a o t o rg a r e l r e c o n o c i m i e n t o .
Básicamente, estos compromisos tienen
que hacer con lo que el propietario puede
y no puede hacer en el ACP por un mínimo
de diez años (esto se verá en detalle más
adelante).
Seguridad jurídica
Con respecto al segundo punto, lo que
sucede es que el título de ACP, en la
práctica, puede ser usado para defender no
sólo los valores naturales del área, sino para
reforzar la seguridad jurídica misma de la
propiedad. Y en un país como el Perú, en
donde la legalidad en general y la
propiedad en particular son todavía
atropelladas, un exceso de seguridad
jurídica nunca está demás.
El título de ACP brinda esta seguridad
jurídica extra, básicamente, porque
implica respaldo oficial, pero también
porque las obligaciones de hacer y no
hacer quedan inscritas en Registros
Públicos, en la ficha de nuestra propiedad.
Asimismo, hay una considerable
exposición pública, gracias a que el
reconocimiento se hace por Resolución
Ministerial, se publica en el diario El
Peruano, se publica en los mapas oficiales
del INRENA y se inscribe en un registro y
un catastro oficiales, que también lleva el
INRENA, todo lo cual, para resumirlo en
jerga jurídica, “consolida la titularidad de
la propiedad frente a eventuales
pretensiones de terceros, fortaleciendo su
defensa legal” (Solano y Cerdán, 2004).
Carga vinculante
Otro beneficio que puede ser muy
atractivo para un propietario interesado en
asegurar la preservación de su propiedad
en el largo plazo, es que el reconocimiento
de una ACP es inherente al predio, no al
propietario. Y por tanto, en caso de
transferirse la propiedad, sea por venta,
herencia o cualquier otra modalidad, el
reconocimiento subsiste
independientemente de quién sea el
dueño, por el tiempo acordado con el
Estado cuando se creó el ACP, que por
cierto puede ser a perpetuidad. Es lo que
en derecho se conoce como carga
vinculante.
Asistencia técnica
Finalmente, están los beneficios directos
que la Intendencia de Areas Naturales
Protegidas del Instituto Nacional de
Recursos Naturales
INRENA debe
procurar brindar al propietario de un ACP.
El principal es la capacitación y asistencia
técnica para orientar la gestión del ACP;
los alcances y características de esta
asistencia se definen en cada caso
particular entre la Intendencia y el
propietario, y un funcionario de enlace
específico es nombrado para cumplir con
este rol. La Intendencia también tiene el
deber de brindar, a solicitud del
propietario, el respaldo necesario para
solicitar apoyo técnico y financiero de
terceros, como ONGs y otras instituciones
dedicadas a la conservación, fuentes
cooperantes nacionales e internacionales,
etc. Por último, está el compromiso de la
Intendencia de difundir la existencia del
ACP en los documentos que emita, lo que
podría beneficiarla en la promoción de sus
actividades, sean económicas o no.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
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2. ELEMENTOS PARA LA
DEFINICIÓN DE UN ACP
Retomemos la definición de ACP que
dábamos al principio. Ella contiene los
elementos básicos: propiedad privada,
valores naturales, solicitud del propietario
y reconocimiento del Estado. Ahora
profundicemos más en cada uno de ellos, y
veamos otros.
basta con presentar un titulo de
propiedad, sino un Certificado Registral
Inmobiliario (CRI) y copias de la partida
registral del predio, expedidas por la Zona
Registral correspondiente. Además de la
propiedad del predio (la titularidad), estos
documentos deben demostrar que no
posee cargas o gravámenes ni es materia de
procesos judiciales pendientes.
Valores de la propiedad
Propiedad privada
Con respecto a la propiedad privada
llamada predio en jerga jurídica, ésta no se
refiere únicamente a la propiedad de un
individuo o una empresa, sino también a la
de comunidades campesinas,
comunidades nativas o cualquier otra
forma colectiva de propiedad reconocida
por la ley. Todas estas formas de propiedad
son considerada “privadas” para los
efectos de la normatividad sobre ACPs. Y
cada vez que decimos “propietario”,
estamos refiriéndonos tanto al propietario
individual como al propietario comunal, es
decir, la comunidad campesina o nativa.
El valor más importante por el cual una
propiedad es juzgada para determinar si se
la debe reconocer como ACP o no, es el
natural o biológico. El valor natural se
refiere a las formas de vida nativas u
oriundas que ocurren en el sitio, lo cual
incluye especies vegetales, especies
animales, ecosistemas, en suma, todo lo
que se conoce como biodiversidad. En ese
sentido, cuanto más cerca se encuentre el
sitio de las condiciones naturales
originales, tanto más valioso será. Su valor
también será mayor en la medida en que,
entre estas formas de vida, se encuentren
especies o ecosistemas en peligro.
Un aspecto importante de la propiedad
desde el punto de vista de la normatividad
sobre ACPs, es que el propietario debe ser
capaz de acreditar sin lugar a dudas que él
es el dueño y que está debidamente
saneada. Para ello, es preciso que esté
inscrita en Registros Públicos, pues no
La normatividad, sin embargo, es explícita
al señalar que una propiedad puede ser
reconocida como ACP no solo por sus
valores naturales o biológicos, sino
también por sus valores ambientales,
paisajísticos u otros similares; y que estos
valores pueden estar relacionados no sólo
con la conservación de la diversidad
biológica, sino también con la
investigación científica, la educación, el
ecoturismo y el uso “compatible” de los
ecosistemas naturales.
El valor ambiental de un sitio se refiere a
su capacidad de proveer servicios
ambientales a su entorno, tales como agua
limpia, aire puro, control de la erosión, etc.
Los valores ambientales y naturales
pueden estar estrechamente relacionados
en algunos casos, pero esto no siempre es
así. Por ejemplo, una plantación de
especies exóticas puede ser de gran valor
ambiental, pero de escaso valor biológico;
y, viceversa, un ecosistema desértico
puede ser de gran importancia biológica,
pero de escaso interés ambiental.
Priorización: predios ubicados en áreas
que garantizan la provisión de servicios
ambientales a centros poblados o
actividades productivas.
Valores y rol del Estado
Para el Estado, resulta de la mayor
importancia relacionar (articular) a las
ACP con su propia misión de conservar los
valores naturales, paisajísticos y
ambientales del país. Desde el punto de
vista del propietario, esto significa que el
valor de su propiedad es hasta cierto punto
relativo, es decir que no depende
exclusivamente de sus valores absolutos o
intrínsecos que son los que hemos visto
hasta ahora sino también de los valores de
su contexto, ajenos a la propiedad en sí.
El Estado toma en cuenta dos tipos de
contexto para determinar la importancia
relativa de una propiedad: el contexto
geográfico inmediato, es decir la zona en
que se encuentra ubicada la propiedad; y
el contexto conceptual que el propio
Estado (es decir, la Intendencia de Areas
Naturales Protegidas del INRENA)
utiliza en la ejecución de su tarea de
conservación.
En el primer caso, el contexto es
relevante, básicamente, en la medida en
que el ACP propuesta se encuentre cerca
de un área natural protegida por el Estado.
Es un deber fundamental de la IANP velar
por la viabilidad de las áreas naturales
protegidas, así como de las poblaciones
animales y vegetales que se encuentran
protegidas por éstas. En ese sentido, un
área biológicamente pobre, una plantación
de café bajo sombra por ejemplo, puede
poseer una gran importancia natural
debido a que colinda con un parque
nacional, o a que forma parte de un espacio
de tránsito empleado por alguna especie
entre dos o más áreas protegidas (los
llamados corredores biológicos). Por sí
mismo, el cafetal quizá no sea lo
suficientemente valioso para ser
reconocido como ACP, pero su ubicación
Las Areas de Conservación Privada - ACP
20
21
estratégica lo puede convertir en una pieza
clave de la integridad del parque o de la
preservación de una especie, y bajo ciertas
condiciones, posible merecedor, del
reconocimiento estatal como ACP.
La normatividad resalta este hecho
señalando que se priorizará el
reconocimiento de las propiedades
“ubicadas en las zonas de
amortiguamiento de las áreas naturales
protegidas”, y de aquellas que “cumplan
una función de conectividad, ayudando a
configurar corredores biológicos”.
En el segundo caso, la IANP emplea
principalmente dos marcos conceptuales
para juzgar el valor de un ACP propuesta:
el Sistema Nacional de Areas Naturales
Protegidas por el Estado (SINANPE) y el
mapa oficial de Zonas Prioritarias para la
Conservación de la Diversidad Biológica.
El Sistema Nacional de Areas Naturales
Protegidas por el Estado, o SINANPE, es
el conjunto de parques, reservas y
santuarios nacionales, entre otras
categorías de protección, que el Estado
central administra a lo largo del territorio
nacional. La importancia del SINANPE
es tal, que la normatividad define a las
ACP como las propiedades privadas que,
poseyendo cualesquiera de los valores
señalados, “contribuyen a complementar
la cobertura del SINANPE”.
1
“Contribuir a complementar su
cobertura” significa aportar en la
conservación de especies, ecosistemas,
paisajes y otros objetos de interés del
sistema1, en especial aquellos que no se
encuentran “cubiertas” por él, o al menos
no lo suficiente. Desde el punto de vista
del SINANPE, una solicitud de creación
de ACP en una ecorregión en donde ya
existen varios parques y reservas del
Estado probablemente no sea tan
interesante como una propuesta de
creación de un ACP en una ecorregión que
no cuenta con ningún área protegida.
En la evaluación de esta “contribución” al
SINANPE también pueden entrar a tallar
otros criterios, como el grado de amenaza
sobre los ecosistemas y el número de
especies en peligro. El mapa de Zonas
Prioritarias para la Conservación de la
Diversidad Biológica incorpora todos estos
criterios, y es señalado también en la
normatividad como otra herramienta
oficial para ligar los valores de un ACP al
trabajo y misión del Estado. El mapa,
igualmente, indica qué zonas prioritarias
se encuentran cubiertas por el SINANPE,
cuáles no, y cuáles lo están de modo
insuficiente. La normatividad señala que
se priorizará el reconocimiento de las
propiedades “ubicadas en zonas
calificadas como prioritarias para la
conservación de la diversidad biológica”.
Los intereses del SINANPE, si bien se centran en la biodiversidad, son variados, algo que de algún modo se refleja en la diversidad de categorías. Ver lista de categorías de
áreas naturales protegidas.
Rol de la ACP en zonas contiguas a ANPE
Los casos de Manu y Yanachaga son ejemplos claros de las tendencias y del potencial de las áreas de
conservación privadas en nuestro país, al cual se suma todas las otras opciones que establece nuestra
legislación para la protección de áreas naturales.
En la Reserva de Biosfera del Manu y a lo largo de la ruta de acceso por carretera desde el Cusco, se han
ido estableciendo una serie de áreas con los objetivos del proteger la naturaleza, como de contar con
áreas apropiadas para la práctica del turismo a la naturaleza. De hecho esto está teniendo un efecto en
revertir procesos destructivos y de deforestación originados en la expansión de la agricultura migratoria.
De esta manera el uso que se da a esta parte del territorio es totalmente compatible con su aptitud y
vocación natural, dado que en su gran mayoría se trata de tierras de protección.
Ya desde 1989 ProNaturaleza, gracias a la iniciativa y gestión inicial de Hugo Pepper y Mario Ortiz de
Zevallos, adquirió un fundo de 433ha. que desde entonces se encuentra protegido y ahora en proceso
de reconocimiento como ACP. Asimismo, otras organizaciones y empresas han ido adquiriendo
propiedades, como es el caso de Selva Sur, 3 800 ha. y más recientemente ACCA que ha adquirido una
importante extensión en la Comunidad Campesina de Queros.
De esta manera el gran Parque Nacional del Manu cuenta en este sector con una importante extensión
de protección adicional, en una formación que en el resto del país está sometido a fuerte presión
antrópica. Por otro lado, las empresas turísticas, se benefician por el atractivo que significa el nombre del
Manu y en este caso están en posibilidad de ofertar un producto a precios más accesibles. Todo lo cual
definitivamente tiene un impacto benéfico y directo en la conservación de la diversidad biológica y en
promover actividades productivas sostenibles.
La situación en torno al complejo de áreas protegidas del Parque Nacional Yanachaga-Chemillén,
Reserva Comunal Yanesha y Bosque de Protección San Matías-San Carlos esta evolucionando de un
modo similar. En esta región, donde la presión de colonización ha sido intensa y de más larga data, fuera
Voluntad del propietario y renuncia a
derechos de uso
La voluntad del propietario de proteger
sus tierras es el corazón de las ACP. Es con
base a su libre decisión de conservar sus
tierras que se ha construido todo el
esquema legal que se intenta desarrollar
en estas páginas.
La voluntad del propietario de conservar
en estado natural sus tierras, puede verse
como una renuncia a ciertos derechos de
desarrollo o de uso de la tierra, que el
propietario posee.
La legislación expresa que: el
reconocimiento como ACP implica ciertas
condiciones especiales de uso de la
propiedad. Estas condiciones especiales
Las Areas de Conservación Privada - ACP
22
23
deben inscribirse en la forma de cargas en
los Registros Públicos (ver más adelante).
El tipo y grado de renuncia de los derechos
de uso de la tierra se fijan en cada caso
entre el propietario y el INRENA. En
algún caso, por ejemplo, la voluntad de
conservar los valores naturales de la
propiedad puede llevar a renunciar al
derecho de cazar; en otro caso, la voluntad
de conservar el valor paisajístico de la
propiedad puede llevar a limitar el número
de edificaciones, a una cada cinco
hectáreas.
Si la renuncia es a perpetuidad o temporal,
y por cuanto tiempo en el segundo caso, es
otra decisión que debe tomar el
propietario, si bien la legislación exige un
tiempo mínimo.
Condiciones y reconocimiento del
Estado
Para que el estado conceda el
reconocimiento de ACP no basta que la
propiedad tenga los valores necesarios o
que el dueño este dispuesto a renunciar a
sus derechos de desarrollo. El Estado
exige primero que el propietario someta su
propiedad a un compromiso doble:
ajustarse a un plan de manejo del área (a
ser elaborado y presentado por el
propietario) y por un período mínimo de
diez años.
Esto es básicamente con el fin de ordenar
y dar seriedad a estos reconocimientos, y
que no se de la figura que el propietario
hace lo que sea, en un ACP, de modo que la
desnaturalice. Pero tambien sirve para
desanimar a quienes podrían usar el titulo
de ACP nada mas para vender, o para
enmascarar otros intereses; un mero título.
Potencial y tendencias de las ACP.
A pesar de la creciente cobertura geográfica de las ANP que alcanza ya el 8% de la superficie terrestre
(Green and Paine, 1999) y que en el caso peruano llega casi al 13%, las necesidades de acciones para
asegurar la conservación de la diversidad biológica, siguen siendo sumamente grandes. Y es claro que
enfrentamos una situación de limitación en la capacidad de los estados para asumir el manejo de éstas
áreas. Esta situación es más grave en los países menos desarrollados, que son justamente los depositarios
de la mayor biodiversidad del planeta. Esta es una de las razones por las cuales es importante impulsar
activamente una mayor participación privada en la gestión de las áreas protegidas y en desarrollar figuras
como las áreas de conservación privada.
El plan de manejo es la expresión de la
voluntad del propietario plasmada de
abstenerse de desarrollar sus tierras y la
gestión que realizará en su predio (el que
hacer y no hacer). Sólo que está más
ordenado, por escrito, y cuenta con la
anuencia y revisión técnica del Estado, y
sirve también para fijar metas y objetivos
mensurables.
3. DEFINICIÓN DE UN ACP
COMO ÁREA NATURAL
PROTEGIDA
A partir de lo mencionado, podemos
definir al Área de Conservación Privada
como un área natural protegida que se
establece oficialmente sobre una
propiedad, o parte de él, y cuyos valores
naturales, paisajísticos, ambientales u
otros similares el propietario se
compromete a mantener ante el Estado,
de acuerdo a un plan de manejo y por un
plazo mínimo de diez años renovables.
Oficialmente, toda ACP complementa al
Sistema Nacional de Áreas Naturales
Protegidas por el Estado (SINANPE).
En los últimos años el número de reservas privadas en Latinoamérica se ha incrementado
significativamente, en particular en Chile, Costa Rica, Brasil, Colombia y Ecuador. Consultando con
diversas fuentes de información encontramos que al año 2001 en estos cinco países existían 494 áreas de
conservación privadas con una extensión de un millón de hectáreas.
De acuerdo a Brown y Mitchell (1999), la contribución de las ACP puede ser resumida de la siguiente
manera.
(
Incrementan la cobertura de áreas protegidas a nivel nacional, complementando los sistemas
nacionales de ANP.
(
Sostienen usos tradicionales del uso de la tierra y los recursos naturales. Los cuales tienen un gran
valor demostrativo.
(
Proveen servicios ambientales y sociales tales como la protección de recursos de usuarios,
4. PROCESO DE
RECONOCIMIENTO DE UN
ACP
Para efectos del reconocimiento de una
propiedad, o parte de ella, como ACP, la
voluntad de un propietario empieza a ser
significativa desde el momento en que el
propietario se acerca a INRENA y entrega
su solicitud de reconocimiento. Este
trámite culmina cuando el Estado otorga el
reconocimiento como ACP mediante una
Resolución Ministerial del Sector de
Agricultura.
El trámite de reconocimiento de un ACP
2
es gratuito. Y es obligación del INRENA
garantizar el otorgamiento de
reconocimiento a aquellas áreas que
califiquen de acuerdo a lo señalado en la
legislación. A continuación se listan los
pasos (legales) que deben seguirse para
2
establecer un ACP .
La solicitud.- El propietario de un predio
que desee el reconocimiento como ACP
del mismo, o de parte de él, deberá
presentar a la Intendencia una solicitud de
reconocimiento total o parcial (para ver
qué documentos deben componer la
solicitud, ver recuadro 1).
La presentación de un Plan Maestro no es parte propiamente dicha del proceso de reconocimiento, pues no es un requisito para obtener el reconocimiento del Estado; pero
ha sido incluida porque, de no presentarlo el propietario, o de no ser aprobado el que presenta por INRENA, el reconocimiento como ACP es retirado.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
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25
La solicitud de reconocimiento
La Carta de Entendimiento
Una solicitud simple ante la Intendencia de Áreas Naturales Protegidas es el paso inicial para lograr el
reconocimiento como ACP. En esta solicitud debe manifestarse en forma expresa si el reconocimiento que se desea
es perpetuo o temporal, y si es sobre el área total o parcial del predio.
Las condiciones especiales de uso determinan obligaciones de hacer y de no hacer en la totalidad o
parte del predio, y son determinadas conjuntamente por la Intendencia y el propietario en base a la
solicitud que presenta el propietario. Para ello, ambas partes suscribirán una Carta de Entendimiento
Junto a la solicitud se deben adjuntar la siguiente documentación:
a)
b)
c)
Certificado Registral Inmobiliario (CRI) y copias literales actualizadas de la partida registral del predio. Estos
documentos son expedidos por la Zona Registral correspondiente, y sirven para acreditar la propiedad del
predio, así como la ausencia de cargas, gravámenes o procesos pendientes.
Declaración Jurada del solicitante en la que se compromete a cumplir con las directivas técnicas y
normativas que regulan a las áreas de conservación privadas. En el Anexo II de la RJ 09 puede
encontrarse un formato para esto.
Breve informe técnico respecto a las características y valores de la propiedad, así como de las
actividades de conservación y de aquellas complementarias, económicas y no económicas, que se
desarrollarían en el área de conservación privada así como en el resto de la propiedad, en caso de
solicitarse el reconocimiento parcial del predio. Máximo diez páginas. Es preciso incluir fotografías. La
normatividad ha previsto un formato de acuerdo al cual debe presentarse el informe. No es preciso
seguirlo al pie de la letra, pero el contenido si debe respetarse.
Inspección ocular.- La inspección ocular
del predio no es obligatoria ni necesaria en
todos los casos, y solo se realizará en
aquellos casos en que el INRENA lo crea
necesario con el fin de constatar la
exactitud o la viabilidad de lo solicitado. El
costo de dicha inspección deberá ser
cubierto por el solicitante.
Aprobación de la solicitud.- Luego de la
evaluación correspondiente de la solicitud
presentada, para lo cual tiene un plazo de
treinta (30) días.
Carta de Entendimiento.- De ser
positivo el resultado de la evaluación, la
Intendencia y el propietario suscribirán
una Carta de Entendimiento, en donde se
detallarán las obligaciones y derechos
respecto de la futura ACP a que
secomprometen las partes en forma
conjunta. La solicitud presentada por el
propietario constituye la base de los
acuerdos de la Carta de Entendimiento.
Reconocimiento del ACP mediante
Resolución Ministerial.- Una vez
suscrita la Carta de Entendimiento, el
INRENA deberá proponer al Despacho
del Ministerio de Agricultura el
reconocimiento de la propiedad, o parte de
ella, como área de conservación privada, el
mismo que se otorga mediante la
expedición de la Resolución Ministerial
respectiva. Dicha resolución contendrá
una lista de los acuerdos y obligaciones
firmados en la Carta de Entendimiento, en
Como mínimo, la Carta de Entendimiento debe contener:
a)
Una enumeración detallada de las obligaciones de hacer y de no hacer de cargo del
propietario, indicando las que serán
materia de inscripción en los Registros Públicos.
b)
En caso las cargas se localicen en parte del predio, se deberá acompañar un plano y memoria
descriptiva que detallen la
ubicación de las porciones del predio que corresponda.
c)
Los alcances de la asistencia técnica de cargo de la autoridad competente.
d)
La determinación del arbitraje en caso de conflictos en materia civil.
e)
El procedimiento para realizar la supervisión a través de inspecciones por el INRENA.
f)
El derecho del propietario a solicitar unilateralmente el levantamiento de las cargas al predio a
que se refiere el artículo siguiente, al cumplimiento del plazo de vigencia del área de conservación
privada, el cual se empieza a computar desde
el día de promulgación de la resolución ministerial
de reconocimiento del área de conservación privada.
especial las obligaciones de no hacer que
son materia de inscripción en los Registros
Públicos.
Inscripción de obligaciones ante
Registros Públicos.- Luego de recibir el
reconocimiento de su propiedad como
ACP, el propietario debe inscribir en
Registros Públicos las obligaciones a las
que se ha comprometido en la Carta de
Entendimiento con el INRENA. La
resolución ministerial es el instrumento
público legal que le permite hacer esto.
Dicha resolución ministerial sólo
empezará a surtir sus efectos para el
propietario (ante el INRENA) luego de
que éste remita al INRENA un
documento emitido por Registros
Públicos en donde conste la inscripción de
las cargas acordadas.
Presentación del Plan Maestro.- El
propietario del predio reconocido como
área de conservación privada está obligado
a presentar un plan de manejo del ACP,
conocido como Plan Maestro, dentro de
los noventa (90) días contados desde la
fecha de la publicación de la resolución
ministerial de reconocimiento.
Aprobación del Plan Maestro.- El Plan
Maestro deberá ser aprobado mediante
resolución de la Intendencia dentro de los
treinta (30) días contados desde la fecha de
su presentación. En caso de existir alguna
observación al Plan Maestro presentado, la
Intendencia devolverá el expediente al
propietario del predio, quien tiene hasta
Las Areas de Conservación Privada - ACP
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27
30 (treinta) días contados desde la fecha de
recepción del expediente, para efectuar
las subsanaciones y/o correcciones
pertinentes. El reconocimiento otorgado
caduca en caso de que el propietario no
cumpla con subsanar, en el plazo otorgado,
las observaciones formuladas al Plan
Maestro.
FORMATO RECOMENDADO POR LA NORMATIVIDAD PARA EL INFORME TECNICO
II.
INTRODUCCIÓN
III.
ANTECEDENTES DEL PREDIO
IV.
UBICACIÓN Y EXTENSIÓN DEL PREDIO. Indicar la ubicación física de la propiedad, superficie y
características de
acceso.
V.
DIAGNOSTICO AMBIENTAL DEL PREDIO. Indicar principales características del predio, incluyendo
características físicas, biológicas, socioeconómicas y culturales. Hacer especial énfasis en las
características de la cobertura vegetal y
del uso que se le da.
VI.
TENENCIA DE TIERRAS. Indicar claramente quién es el propietario del predio.
VII.
IMPORTANCIA DEL ÁREA. Indicar los valores biológicos, ambientales, científicos, turísticos o
culturales por los cuales se desea que el predio sea reconocido como ACP.
VIII.
OBJETIVO DE CREACIÓN. Indicar los objetivos principales y secundarios de la futura ACP.
IX.
PROPUESTA DE DELIMITACION. Señalar los límites del ACP propuesta, una memoria descriptiva de
dichos límites y sus coordenadas en UTM. También se debe presentar una propuesta preliminar de
zonificación del área.
X.
VIABILIDAD DE LA GESTION. Indicar las posibles formas y/o fuentes de financiamiento para las
actividades a
desarrollar en la futura ACP.
XI.
CONCLUSIONES
XII.
ANEXOS: Fotografías, mapas, gráficos y otros.
5. OTROS TRÁMITES Y
ASPECTOS BUROCRATICOS
DE LA GESTIÓN DE UN ACP
de alguna oficina del Estado o tienen
alguna importante consecuencia legal.
Todo eso está contenido en esta sección.
Aparte del reconocimiento, hay algunas
cosas más que implican algún trámite o
notificación al INRENA, y sobre las que el
propietario debería estar alerta. También
hay otros aspectos de la gestión de un ACP
que no implican necesariamente papeleo,
pero sí implican plazos, o la intervención
Administrador
Si el propietario desea designar como
administrador a una persona que no sea él
mismo, debe comunicar esta decisión a la
IANP-INRENA por escrito y dentro de
los treinta (30) días contados a partir de la
publicación de la resolución ministerial
que reconoce al predio como ACP. Si el
propietario no señala un administrador, se
presume que el administrador es el propio
propietario. En caso de remoción y
designación de un nuevo administrador, el
propietario deberá comunicarlo a la
Intendencia dentro de los quince (15) días
siguientes de dicha designación.
Plan Maestro
Todos los años, el propietario deberá
presentar una Declaración Jurada Anual
respecto a los avances en el cumplimiento
de lo establecido en el Plan Maestro. Esta
declaración jurada debe ser presentada
dentro de los treinta (30) días siguientes al
vencimiento de cada año, computados a
partir de la fecha de aprobación del Plan
Maestro.
Al término del tiempo de vigencia del Plan
Maestro, que es de cinco (5) años, éste
debe ser renovado siguiendo el mismo
proceso de presentación y aprobación
señalado en la sección de la solicitud.
Cumplimiento del plazo y renovación
del reconocimiento
El plazo de vigencia de un ACP se
empieza a computar desde el día de
promulgación de la resolución ministerial
de reconocimiento del ACP.
En caso de que el propietario no desee
renovar el reconocimiento otorgado, podrá
solicitar directa y unilateralmente a los
Registros Públicos el levantamiento de las
cargas del predio.
En caso de que sí desee renovar el
reconocimiento otorgado, el propietario
podrá solicitar al INRENA la renovación
del reconocimiento de la propiedad como
ACP hasta treinta (30) días antes de su
vencimiento. Para este fin, el propietario
remitirá una solicitud a la Intendencia
manifestando su voluntad de renovar el
reconocimiento, e indicando el plazo que
solicita. En caso de no indicar el plazo, se
entenderá que solicita renovación de
reconocimiento por el mismo plazo
concedido originalmente. En cualquier
caso el plazo no podrá ser inferior a diez
(10) años. La renovación del plazo se
otorga por una nueva resolución
ministerial.
Registro y catastro oficiales
La IANP está en la obligación de llevar un
Registro y Catastro Oficiales de las Áreas
de Conservación Privadas Reconocidas.
Cada ACP poseerá en este registro una
ficha en donde se señalará: a) Ubicación y
características del predio, incluyendo
mapa de ubicación; b) Nombre del
propietario y administrador; c) Nombre
del funcionario de enlace por la
Intendencia; d) Las condiciones
especiales de uso establecidas en la Carta
de Entendimiento; e) Resolución
Las Areas de Conservación Privada - ACP
28
29
Ministerial de reconocimiento del ACP; f)
Resolución de aprobación del Plan
Maestro; y g) El tiempo de vigencia del
reconocimiento del ACP.
La IANP deberá entregar al propietario
una copia de esta ficha, la cual se
constituye en el Certificado del Área de
Conservación Privada.
Cargas y Registros Públicos
Las condiciones especiales de uso de la
propiedad -las obligaciones de no hacerconstituyen lo que en derecho se llama
una carga para la propiedad, y como tal
deben inscribirse en los Registros
Públicos, en el rubro de cargas y
gravámenes de la partida registral
correspondiente al predio.
Al respecto, hay varias cosas que es
importante que sepa:
!Una vez inscritas las cargas, el
registrador público no puede inscribir
ningún acto o contrato cuyo contenido
contravenga las cargas inscritas al amparo
de esta norma.
!Las cargas al predio no pueden ser
modificadas o levantadas antes del
cumplimiento del plazo establecido para
el ACP, ni a solicitud del propietario ni
aunque por incumplimiento de sus
compromisos, la propiedad pierda la
categoría de ACP. Esto solo es posible
cuando la Carta de Entendimiento
firmada entre el propietario y el
INRENA contenga un acuerdo en ese
sentido, y en ese caso, la modificación o el
levantamiento deberá hacerse mediante
la expedición de una nueva resolución
ministerial. Esto vale tanto para las áreas
de carácter temporal como perpetuo.
!El propietario tiene derecho a solicitar
unilateralmente el levantamiento de las
cargas al predio al término del plazo de
vigencia del ACP.
!Esta carga es vinculante tanto para el
propietario que las impuso como para los
subsiguientes adquirientes del predio.
Esto significa que aún cuando la
propiedad sea vendida o traspasada, las
obligaciones de no hacer o cargos son de
obligatorio cumplimiento para el nuevo
propietario.
Pérdida de reconocimiento
Son causales para la pérdida del
reconocimiento otorgado:
!El no presentar el Plan Maestro para su
aprobación por la IANP, o no subsanar las
observaciones formuladas dentro de los
plazos establecidos.
!El incumplimiento reiterado o grave del
Plan Maestro y de las condiciones
especiales de uso acordadas en la Carta de
Entendimiento.
!Realizar actividades no contempladas
en el Plan Maestro, sin autorización o
justificación posterior al INRENA.
!No presentar la Declaración Jurada
Anual por dos periodos consecutivos.
!Renuncia expresa del propietario.
!El vencimiento del plazo de vigencia,
sin presentar una nueva solicitud de
renovación.
En todos los casos menos el último, la
pérdida del reconocimiento es declarada
por Resolución Ministerial del Sector
Agricultura a propuesta del Jefe del
INRENA.
6. APUNTES SOBRE LA
GESTIÓN DE UN ACP
Plan Maestro
La gestión de un ACP debe realizarse en
base a un plan de manejo elaborado por el
propietario y aprobado por la IANP. En
general, un plan de manejo tiene por
objeto definir los usos permitidos y no
permitidos del espacio y los recursos en un
área determinada.
Lo mejor de un plan es que debe ser un
reflejo de los intereses y objetivos del
propietario, siempre y cuando caigan
dentro de lo establecido por la
normatividad. Se elabora en base al
informe técnico incluido en la solicitud,
que ya contiene varios de los temas del
plan. También, debe ser coherente con la
Carta de Entendimiento.
El nombre oficial del plan de manejo de
las ACP es Plan Maestro, que es también
como se denominan los planes de manejo
de las áreas naturales protegidas por el
Estado. Pero a diferencia de éstos, el Plan
Maestro de un ACP puede ser un
documento sencillo, basado en
información documental y práctica, no
requieren de una gran extensión ni
tampoco un nivel de detalle exhaustivo en
lo científico o técnico.
Como mínimo, un Plan Maestro debe
contener:
!Información sobre las condiciones
actuales del predio o ACP, en especial en
lo referente a sus valores naturales o
ecológicos, paisajísticos, ambientales,
etc.; desde luego, no tiene que hacer
referencia a todos los valores posibles del
área, sino solo a aquellos que son
relevantes para los objetivos del área. Las
“condiciones actuales” también pueden
incluir información sobre uso actual y
pasado de la tierra, amenazas, otros
elementos que sustenten la importancia
del área, etc. Es lo que se conoce como
información de línea base.
!Información cartográfica (mapas) y
fotográfica del predio.
!Propuesta de uso del suelo y de los
recursos presentes, económicos y no
económicos.
!Propuesta de zonificación del predio.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
30
31
El Plan Maestro de un ACP tiene una
vigencia de cinco (5) años.
de uso que se les dará y a las normas por las
que se regirán se denomina zonificación.
Zonificación
No todo el espacio de un ACP tiene que
estar sujeto a los mismos patrones de uso o
a las mismas normas de hacer o no hacer.
Diferentes espacios de una misma ACP
pueden estar sometidos a diferentes reglas
y tipos de uso. Por ejemplo, mientras en
una parte del ACP puede permitirse la
extracción de fauna silvestre, en otra las
actividades humanas de todo tipo pueden
estar prohibidas, y otra tercera puede estar
dedicada al turismo. Cada uno de estos
tres espacios tendrá un fin diferente, y un
conjunto diferente de normas regulará las
diferentes actividades previstas. A esta
división del espacio de acuerdo a los tipos
La zonificación del ACP es uno de los
elementos del Plan Maestro que la
normatividad considera básicos.
Su
establecimiento debe ser coherente con
los acuerdos de hacer y no hacer a que
hayan llegado el dueño y el Estado en la
Carta de Entendimiento, y debe tomar en
cuenta la extensión del área, sus valores
biológicos, paisajísticas, ambientales u
otros relevantes, y los usos previstos.
Es recomendable que el propietario
utilice el mismo esquema que el Estado
emplea para la zonificación de las ANPs
(ver recuadro 3).
Tipología de zonificación
La tipología oficial empleada por el INRENA para zonificar las áreas naturales protegidas por el Estado,
puede ser utilizada también por el propietario de un ACP. Está compuesta de siete diferentes tipos de
zonas que cubren un amplio abanico de usos posibles y normas de hacer y no hacer. Desde luego, no
es preciso que las use todas, sino que más bien debe escoger aquellas que mejor se ajusten a los valores
del área y a sus propios objetivos. Tampoco tiene que aplicarlas tal cual, sin modificaciones. Su
aplicación ni siquiera es un requisito de la normatividad, es sólo una propuesta a tomar en cuenta,
aunque una propuesta útil, por cierto, y que facilitaría, asimismo, la comunicación con el INRENA, en la
medida en que se usa el mismo lenguaje. A continuación se ofrece una versión adaptada del Art. 23º
de la Ley de Áreas Naturales Protegidas.
Zona de Protección Estricta (ZPE)
Son los espacios del área natural protegida que todavía poseen ecosistemas poco o nada intervenidos,
o que poseen especies o formaciones vegetales únicas, raras o frágiles que requieren estar libres de la
influencia del hombre. En la ZPE no se permite ninguna actividad humana, excepto el manejo que
pueda contribuir a mejorar la situación de las especies silvestres y el monitoreo ambiental. La
investigación científica está permitida sólo en casos excepcionales.
Sigue.....
Zona Silvestre (S)
Son aquellos espacios que han sufrido poca o nula intervención humana, pero que son menos
vulnerables a la acción del hombre que las áreas incluidas en la ZPE. Aquí, además de la investigación
científica, se pueden desarrollar actividades educativas y de recreación, pero sin levantar infraestructura
permanente.
Zona de Uso Turístico y Recreativo (T)
Se trata de espacios que por su naturaleza y rasgos paisajísticos, permiten un uso recreativo compatible
con los objetivos del área natural protegida. Aquí, además de las actividades educativas y la
investigación, se permite la construcción de infraestructura de servicios necesarios para el acceso,
estadía y disfrute de los visitantes, como rutas de acceso carrozables, albergues y uso de vehículos
motorizados. Las actividades turísticas y de recreación también pueden llevarse a cabo dentro de la ZS,
la ZUE y la ZR, con las limitaciones propias de cada zona.
Zona de Aprovechamiento Directo (AD)
Los espacios en donde está permitido hacer uso directo de la flora y/o la fauna silvestre (léase, caza,
pesca, recolección, etc.). Se permiten actividades para la educación, investigación y recreación. No
todas las categorías de áreas naturales protegidas por el Estado permiten el establecimiento de AD.
Zona de Uso Especial (UE)
Está conformada por los espacios ocupados por asentamientos humanos existentes al momento de
establecerse el área natural protegida o en los que, por razones especiales, tiene lugar algún tipo de uso
agrícola, pecuario, agrosilvopastoril u otras actividades que implican la transformación del ecosistema
original.
Zona de Recuperación (REC)
Esta es una categoría transitoria que se aplica a áreas que han sufrido daños importantes y requieren por
ello de un manejo especial para recuperar su calidad y estabilidad ambiental. Luego de la finalización
de este proceso se le asignará la zonificación que le corresponda de acuerdo a su naturaleza y a los
objetivos del área.
Función del Administrador del ACP
El propietario podrá designar como
administrador del área a una tercera
persona o institución. En este caso, el
administrador se constituye en la persona
de enlace a nombre del propietario para las
coordinaciones con la intendencia. En
caso que el propietario no señale un
administrador conforme al presente
artículo, se presume que el administrador
es el propio propietario.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
33
II.
Chaparrí:
Chaparrí:
Un modelo para la
conservación privada
Oso de Anteojos
Pocas veces se ha llevado a cabo en el Perú un proyecto
de conservación, como el realizado a propia decisión,
por la comunidad campesina “Santa Catalina de
Chongoyape”; de las 39 812,6 hectáreas que poseen,
han decidido destinar 34 413 (86% de su territorio)
para proteger el bosque seco e implementar
actividades de desarrollo, de una manera sostenible.
De esta manera, los comuneros han empezado a poner
fin a su larga dependencia de una agricultura de
pequeña escala, la cual no cubría sus necesidades; por
lo que optaron por este proyecto que consideran
beneficioso no sólo para el ecosistema, sino también,
para la economía de la gente, pudiendo constituirse
hoy como un modelo de manejo comunal privado
participativo - autónomo, y servir de este modo para
difundir los conceptos de auto-gestión y conservación
en las comunidades aledañas y el resto del Perú.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
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Comunidad Campesina “Santa Catalina
de Chongoyape”. Su área se extiende
desde el distrito de Chongoyape,
provincia de Chiclayo, departamento de
Lambayeque, hasta los distritos de Llama
y Miracosta, provincia de Chota,
departamento de Cajamarca, entre los
6o28'39'' 6o53' S y 79o16'58'' 79o30'50'' O.
Superficie
El Área de Conservación Privada Chaparrí
abarca una superficie de 34 412 hectáreas,
las cuales se ubican en su totalidad dentro
de los territorios de la Comunidad
Campesina “Santa Catalina de
Chongoyape”.
Chaparrí por su ubicación geográfica en el
llamado Centro de Endemismo
Tumbesino se distingue como un área
extraordinariamente rica en especies
endémicas, entre ellas el zorro de
Sechura, y muchas otras que se
encuentran en peligro de extinción, tales
como el oso de anteojos (Tremarctos
ornatus), la pava aliblanca (Penelope
albipennis), y el cóndor andino (Vultur
gryphus), aparte de estar dentro de uno de
los más grandes remanentes de bosques
secos del mundo. Posee, así mismo,
variedades silvestres de diversos cultivos,
como el tomate (Lycopersicum spp.), la cual
constituye una fuente de variabilidad
genética para el futuro. Junto con esto, un
plan de manejo permitirá preservar el
agua, la cual es usada en agricultura.
Además de los valores ecológicos, el área
de Chaparrí es de suma importancia por
los restos arqueológicos de diferentes
culturas preincas que se asentaron en la
zona.
Limites
Por el norte: con el fundo Mayascón
Mochumí Viejo, la comunidad campesina
San José de Yaque y terrenos eriazos de
Las Pampas.
Por el sur: con terrenos eriazos del
Estado y los fundos La Ramada, Udima,
Cayalti y Pampa Grande.
Por el este: con el fundo Las Pampas.
Por el oeste: con el reservorio Tinajones
y la comunidad campesina Santa Lucía de
Ferreñafe.
1. DESCRIPCIÓN DEL AREA
Ubicación
El territorio de Chaparrí, pertenece a la
ecorregión del Bosque Seco Ecuatorial y
se encuentra dentro de las tierras de la
Aspectos socioeconómicos
Las tierras de Chaparrí eran antiguamente
de propiedad municipal y en parte
estaban incluidas dentro de los territorios
de algunas de las grandes haciendas
existentes desde el inicio de la república.
La gente llevaba antiguamente su ganado
a pastar a la zona, por lo que pagaba un
cupo al municipio. Durante el gobierno
militar se llevó a cabo la reforma agraria,
que desintegró las antiguas haciendas.
Esto originó un cambio en la tenencia de
las tierras. Producto de esto, a las
cooperativas, les fueron otorgadas las
mejores tierras, con agua y mayor
desarrollo técnico, mientras que a las
comunidades campesinas les dieron las
tierras más pobres, ubicadas en cerros y
bosques, es decir, todo lo que no se podía
irrigar. Es así que nace la comunidad
Santa Catalina de Chongoyape.
La comunidad está formada por 4 200
habitantes, siendo en total 500 familias.
Según el censo de l993, el distrito de
Chongoyape contaba con una población
de 17 324 habitantes, de los cuales 4 448
vivían en la zona rural.
El área de conservación mantiene una
población de comuneros dedicados a una
ganadería de vacunos y caprinos a
pequeña escala y una muy incipiente
producción agrícola (arroz y maíz). De las
42 412 ha. que posee la comunidad de
Santa Catalina, sólo se pueden sembrar
aproximadamente unas 1 000 ha. con una
excelente disponibilidad de agua.
La comunidad campesina “Santa Catalina
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de Chongoyape” esta dividida en tres
sectores:
Primer sector: Comprende los poblados
de Wadigton, Bocatoma, Montería,
Tablazos, Huanabal, Carniche Alto y
Carniche Bajo.
Segundo sector: Comprende el poblado
de Algarrobal.
Tercer sector: Comprende los poblados
de Cerillos, Majín, El Cuello, Paredones,
Overazal, Las Colmenas, Tierras Blancas,
Juan Ríos, Tinajones, Piedra Parada,
Yaipón y Huaca Blanca.
El nombre de Chaparrí proviene del cerro
del mismo nombre, el cual domina el área
y es uno de los más importantes dentro del
mundo “shamánico”. La población local
lo considera un “apu” o montaña sagrada
y, es de allí, de donde se extraen plantas
para muchos rituales llevados a cabo por
los curanderos. En parte, gracias al temor
que inspira Chaparrí al ser considerada
una montaña sagrada o mágica, es que el
área no ha sido invadida.
Fisiografía
El territorio de Chaparrí es atravesado por
el río Chancay, en cuyas orillas y al interior
del área de conservación, hay una zona
agrícola. Esta se extiende desde los 150
hasta los 1 533 msnm (cerro El Alumbral),
destacándose igualmente, las cumbres del
cerro Chaparrí (1 346 msnm), Los Bravos
(1 350 msnm) y Querguer (1 250 msnm).
Representatividad a nivel de
ecosistemas
Su ámbito incluye al Bosque Ralo
Caducifolio y al Bosque Semi-denso
Caducifolio. En cuanto a Regiones
Ecológicas (Zamora, 1996 en FANPE
GTZ - INRENA), el área corresponde a
Matorral Desértico y Bosques Secos.
Siguiendo el criterio de provincias
biogeográficas, Chaparrí pertenece a la
provincia del Desierto Pacifico Tropical y
de los Andes Meridionales Tropicales.
El paisaje está conformado por cerros y
pampas. La parte más baja del ÁCP es casi
desértica, mientras que las altas están
conformadas por bosques más densos (H.
Plenge com. pers, 2004).
Según el mapa ecológico de la ONERN
(1976), esta ACP posee cuatro zonas de
vida: Matorral Desértico
Tropical,
Matorral Desértico Premontano Tropical,
Monte Espinoso - Premontano Tropical y
Desierto Preárido - Premontano Tropical
(F. Angulo, 2004).
Suelos
De acuerdo a la clasificación de suelos por
su capacidad de uso mayor (ONERN,
1982), la región corresponde a X-P3-c(t):
tierras de protección con zonas aptas para
pastos temporales, con capacidad
agroecológica baja y limitada por el clima.
Predominan los suelos delgados de
naturaleza litosólica y regosoles de
naturaleza arenosa, sobre todo en las
zonas más altas (F. Angulo, 2004).
Clima
El clima es característico del bosque seco,
con presencia de una mayor humedad
durante el verano y un periodo seco entre
los meses de mayo a diciembre.
Los rangos medios de temperatura de la
región varían entre 28,2 Co (máxima) y
14,7 Co (mínima). El factor climático más
determinante es la precipitación, la cual
muestra una marcada estacionalidad entre
los periodos húmedos de enero a abril y
los periodos secos. La precipitación media
anual es de alrededor de 100 mm y más del
80 % de este valor se registra durante la
estación húmeda, y durante el resto del
año se presentan condiciones extremas de
aridez (F. Angulo, 2004). El Niño origina
el aumento de la temperatura (+2 Co) y de
las precipitaciones (10 veces) en el
departamento de Lambayeque.
Hidrología
El área de Chaparrí, casi en su totalidad se
encuentra dentro de la cuenca del río
Chancay, perteneciendo el resto, a la
cuenca del río Zaña (margen izquierda del
río Chancay). Una parte del recurso
hídrico, desemboca al reservorio de
Tinajones (F. Angulo, 2004).
ACP Chaparrí
Vegetación
El ACP Chaparrí se encuentra en el límite
sur de la prolongación del Bosque Seco
Ecuatorial. Hasta el momento se han
identificado 52 especies arbóreas,
arbustivas y herbáceas, que representan
29 familias, pudiendo clasificarse su
cobertura vegetal en:
El Chaparral: Se localiza en áreas planas y
de pendiente suave. La vegetación está
compuesta por especies arbustivas y
dispersas, formando islas de vegetación
sobre un suelo rocoso y/o árido. Las
especies más representativas son el overo
(Cordia lutea) y el vichayo (Capparis
avicennifolia).
El bosque arbustivo: Está compuesto por
especies arbustivas y arbóreas. Se
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encuentra en áreas planas y de pendiente
suave, así como de pendiente
pronunciada, pero con mayor humedad
que El Chaparral. Las principales
especies son, además de las del Chaparral,
el algarrobo (Prosopis pallida), el sapote
(Capparis angulata) y el canaquil
(Cercidium praecox).
El bosque arbóreo o denso: Compuesto por
especies de porte arbóreo. Se extiende en
las partes altas de las cadenas montañosas,
pudiendo pasar de un bosque
semihomogéneo (4 especies) a un bosque
heterogéneo (12 especies). Las especies
más representativas son, también de las
que componen el bosque arbustivo, el
hualtaco (Loxopterigium huasango), el palo
santo (Bursera graveolens), el pasallo
(Eriotheca ruizii), el angolo (Pithecellobium
multiflorum) y el charán (Caesalpinea
paipai).
El bosque de galería: Se encuentra
adyacente a los cursos de agua, sean
permanentes o estacionales. Atraviesa los
tres tipos anteriores de paisajes y sus
transiciones. Su flora se compone de
especies arbóreas como el chaquiro
(Pithecellobium excelsum), higuerón (Ficus
padifolia) y el cerecillo (Muntingia
calabura), junto con especies arbustivas.
Hay que destacar que el bosque de galería
es el hábitat más importante para la fauna,
ya que da alimento, cobertura y agua en la
época en la cual, el resto de vegetación se
encuentra en latencia, al mismo tiempo,
ayuda a mantener el flujo de agua durante
todo el año (información extraída de F.
Angulo, 2004).
Antiguamente había áreas boscosas en la
pampa, un poco más abiertas que en las
partes superiores, sobre todo en las
depresiones, con especies como
algarrobos, sapotes, pero que fueron
desapareciendo por la tala indiscriminada
y la presencia de aserraderos, hasta
convertirse en zonas arbustivas y
chaparrales. En las partes altas la
humedad proveniente de las nieblas es
capturada por la vegetación, lo que
permite una mayor densidad de árboles
(H.Plenge y R. Williams com. pers, 2004).
Asimismo, el tipo de suelo permite una
mayor captación de agua en las partes
altas, a diferencia de las zonas bajas,
donde es difícil que las raíces lleguen a
una adecuada profundidad; también se
ve favorecido por el periodo de lluvia que
se da de octubre a mayo.
Fauna
Mamíferos
Hasta el momento se han registrado 14
especies (12 familias), de las cuales dos
han sido categorizadas por la legislación
peruana como “en vías de extinción”: el
oso de anteojos (Tremarctos ornatus) y el
gato montés (Oncifelis sp.), una especie
poco estudiada y cuya población del norte
del Perú podría tratarse de una subespecie
o especie separada de Oncifelis colocolo,
basados en las características anatómicas
(es mucho más pequeño y con pelaje
mucho más corto). En cuanto al oso
h o r m i g u e r o n o r t e ñ o ( Ta m a n d u a
mexicana), este se encuentra en “Situación
vulnerable”. Se debe mencionar que
hacen falta más estudios de los mamíferos
menores (Chiroptera y Rodentia). Se dice,
así mismo, que todavía se observan
algunos sajinos y pumas (H. Plenge com.
pers, 2004). Un dato, sin duda alguna, de
sumo valor para la ciencia, es la del
hallazgo de un puercoespín
semiarborícola, que se cree es una nueva
especie y del cual hay ya, un ejemplar en
el Museo de Historia Natural de San
Marcos (R.Williams com. pers, 2004).
Sin duda, el animal símbolo de la
conservación en Chaparrí es el oso de
anteojos. Esta Área de Conservación
posee más del 30% del hábitat que ocupa
esta especie y el 20% de las áreas
protegidas donde está presente; se
encuentra amenazado por la pérdida de su
hábitat y la cacería, tanto dentro como
fuera de las ANPs. Su población, dispersa
y en bajos números, abarca desde el
desierto costero a 250 msnm, a través de
bosques y pastizales, hasta las partes más
altas de la cordillera a 4 750 msnm. En el
Comuneros Chaparrí
lado amazónico, se han hallado individuos
en altitudes tan bajas como los 550 msnm.
Aparte del puma (Puma concolor), el oso es
la otra especie que explota una gran
diversidad de hábitats. Los osos de
Chaparrí pueden movilizarse en
gradientes de 2 700 m de elevación, donde
se incluyen páramos y bosques húmedos.
Berni Peyton ha encontrado semillas de
chirimoya en el excremento de los osos en
el bosque seco de Chaparrí y
Laquipampa, lo que nos da una señal de
su alta movilidad, ya que estas semillas
son sólo halladas en las partes más altas de
Lambayeque o Cajamarca. Hasta los años
cuarenta se cazaban osos cerca de este
territorio.
En Perú, se estima que la población actual
de guanacos es de unos 5 000 ejemplares.
Su límite de distribución está a unos 300
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km al sureste de Chaparrí. Afirman,
aunque no hay pruebas de ello, que en
Jayanca, Túcume, Zaña y Chongoyape,
era común ver grandes grupos de
camélidos y que posteriormente, los
grupos remanentes, sobre todo aquellos
que no habían sido domesticados, como el
guanaco, se refugiaron en las partes altas
de la cordillera. El guanaco esta en la
actualidad clasificado como una especie
“en vías de extinción”. Debido a esto se
ha pensado ejecutar un programa de
reintroducción y repoblamiento de
guanacos dentro de esta Área de
Conservación, bajo el supuesto que la
costa norte del Perú, aún mantiene la
cobertura vegetal necesaria para soportar
una población de los mismos. Gracias a un
convenio suscrito entre los comuneros de
Santa Catalina y la Comisión Nacional de
Camélidos Sudamericanos (CONACS) el
guanaco será reintroducido en la reserva
de la comunidad.
Se ha pensado usar el venado cola blanca
(Odocoileus virginianus) para la caza
deportiva y de este modo, generar
ingresos para la comunidad. Al iniciar el
proyecto de conservación, era muy difícil
observar algún ejemplar, ahora se les
puede ver, en algunos puntos cerca de las
instalaciones, en grupos de 8 a 10
individuos tomando agua en la época de
sequía. Además la presencia de
depredadores como pumas, es un
indicador del aumento de la población de
venados.
Al mismo tiempo, recibieron del
zoológico de Lima 26 venados para ayudar
en la recuperación de la población.
(R.Williams com. pers, 2004).
En cuanto al zorro, H. Plenge ideó un
modo novedoso de alimentar a estos
animales y al mismo tiempo reforestar el
bosque. Para esto, esparce las semillas de
acacia con la ayuda de su camioneta, las
cuales son consumidas posteriormente
por los zorros, los cuales las eliminan en
sus excretas (Tui de Roy, 2002).
Reptiles y anfibios
Al interior del ACP Chaparrí se han
hallado 19 especies de reptiles y 3 de
anfibios. Podemos mencionar a la boa de
costa o macanche (Boa constrictor ortonii),
que es una subespecie endémica del
Bosque Seco Ecuatorial Peruano. Se
encuentra amenazada por la expansión
agrícola, pérdida de hábitat y cacería (se
usa su carne, grasa y piel); por esto, está
considerada por la legislación peruana en
“situación rara”. Otras especies
endémicas del Bosque Seco Ecuatorial,
que están dentro del ACP, son el capón
colorado (Plesiomicrolophus koepckeorum) y
la sancarranca o cascabel (Bothrops
barnetti). Las especies más comunes en el
ACP son el capón (Microlophus occipitalis),
la iguana de tierra (Callopistes
flavipunctatus), el azulejo (Dicrodon
guttulatum), el saltojo (Phyllodactylus
reissii) y la serpiente corredora
(Mastigodryas heathii). En el futuro se
t i e ne pl a ne a do i m pl e m e nt a r un
herpetario.
Aves
Hasta el momento se han registrado 107
especies de aves dentro del ACP
Chaparrí, de las cuales 26 son endémicas
de la región Tumbesina, que se extiende
entre el noroeste de Perú y sudoeste de
Ecuador. De estas, 3 especies son
endémicas del Perú. Vale la pena
mencionar que las partes altas no han sido
exhaustivamente evaluadas.
Cinco especies registradas dentro de
Chaparrí, figuran como amenazadas por
Birdlife/IUCN: la pava aliblanca (Penelope
albipennis), la paloma de alas rojas
(Leptotila verreauxi), el atrapamoscas de
Tumbes (Ochthoeca salvini), el cortarramas
peruano (Phytotoma raimondii) y el loro
cabeza roja (Aratinga erythrogenys). Hace
30 o 40 años se podían ver enormes
bandadas de loros cabeza roja, ahora se
ven apenas decenas. Además, hay
especies de importancia local y en
situación vulnerable como la bandurria
(Theresticus melanopis) y el cóndor andino
(Vultur gryphus). Dentro de estas aves, hay
que resaltar de modo especial a la pava
aliblanca, la cual fue registrada por
primera vez en 1877 y declarada en
extinción décadas después.
Posteriormente, fue redescubierta en
1977, por el conservacionista peruano
Gustavo del Solar y su colega John P.
O'Neill, de la Universidad Estatal de
Louisiana (Estados Unidos). El interés en
esta ave, radica en que sólo se le encuentra
en el bosque seco del noreste del Perú
(Lambayeque y Piura). En cuanto a la
biología del ave, se sabe que ésta se
reproduce una vez al año y pone sólo dos
huevos. En la actualidad, la población
cuenta con muy pocos individuos (no
supera los 350 ejemplares), debido, entre
otras causas, a la caza indiscriminada, su
lenta reproducción y al ataque de sus
tradicionales depredadores (boas, gatos
monteses, zorros, gavilanes, águilas y
otros).
El bosque seco ecuatorial es el único
ecosistema en donde están presentes al
mismo tiempo, el cóndor andino (Vultur
gryphus) y el cóndor real (Sarcoramphus
papa), llamado también cóndor de la
selva. Hace unas cuatro décadas atrás,
estas dos especies eran comunes en
Chaparrí, pues existían grandes manadas
de burros cimarrones que sostenían a las
poblaciones locales. Lamentablemente,
estas manadas fueron exterminadas por el
establecimiento de una fábrica de
embutidos en la cercana ciudad de
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Chiclayo y poco a poco, los cóndores
disminuyeron en número hasta volverse
muy raros.
Dentro del plan de recuperación de las
poblaciones de cóndores, se les está
proveyendo de carroña de cetáceos y
pinnípedos, la cual es traída de una
distancia de 80 km, así como de ganado,
para suplementar la dieta, habiéndose
establecido que con una dotación cada dos
semanas es suficiente para mantener a las
poblaciones de cóndores. Se tiene, así
mismo, planeado hacer un centro de
rehabilitación de aves de presa
(Información extraída de F. Angulo,
2004). A diferencia de Arequipa, donde
los turistas tienen que viajar por muchas
horas desde su llegada para poder
observar cóndores, en Chiclayo la
distancia es mucho menor, además de
poder apreciarse dos especies en la misma
área (H.Plenge com. pers, 2004)
También, tenemos a la bandurria
(Theresticus melanopis), de la cual existen
poblaciones aparte de Perú, en Bolivia,
Ecuador y Chile. En el caso de Perú está
presente en el ecosistema de bosque seco.
Se calcula que existe en Chaparrí una
población de 20 a 30 individuos, los cuales
se movilizan en el bosque de algarrobo.
Probablemente la bandurria de bosque
seco sea una especie única.
Anteriormente, se podían apreciar
enormes bandadas, cuando se remojaba el
maíz. Existen registros recientes en
Lambayeque en el bosque de Pomac,
sobre todo cerca a zonas húmedas.
comprende el área que se encuentra
enmarcada entre la Zona de Protección
Estricta, los límites perimétricos del ACP,
la Zona de Uso Especial, la Zona Histórico
Cultural y la Zona de Recuperación.
2. ZONIFICACIÓN DEL ÁREA
De acuerdo a la capacidad de uso mayor
de los suelos, la región de Chaparrí posee
tierras aptas para protección, que reúnen
las condiciones mínimas requeridas para
cultivo, pastoreo, producción forestal y
además, posee tierras aptas para pastos.
El área ha sido dividida en:
Zona de Protección Estricta (PE):
Corresponde a las partes altas de los cerros
(a partir de los 600 msnm) que rodean al
área. Estos cerros son los siguientes:
Chaparrí, Pavas, Fila del Campana,
Ya i p ó n , Q u e rg u e r, A g u a Ve r d e ,
Chamusquina, Caña Brava, Azul
Calabozo, Blanco, Caña Brava II, Los
Bravos, Las Palomitas, Alumbral, Pampa
Grande, Boca del Tigre, Mal Paso y Pozo
Negro.
Zona Silvestre (S): Se ubica en la parte
norte del ACP. Se divide en 2 sectores: El
sector oeste (I) que comprende el área
que se encuentra enmarcada entre la Zona
de Protección Estricta, los límites
perimétricos del ACP y la línea de los 400
msnm que demarca la Zona de
Recuperación. El sector este (II)
Zona de Uso Turístico y Recreativo
(TR): Se encuentra en la zona del
Reservorio de Tinajones y las áreas
adyacentes a la orilla de éste. Allí se
planea construir un albergue, al igual que
en el sector Chaparrí.
Zona de Aprovechamiento Directo
(AD): Se localiza en la parte sur del ACP,
correspondiente al sector La Montería.
Acá se planea crear un coto de caza de
venado cola blanca, “Odocoileus
virginianus”.
Zona de Uso Especial (UE): También
se le llama Zona de amortiguamiento. Se
ubica en la parte central del ACP y
comprende los asentamientos humanos,
las áreas agrícolas y ganaderas más una
franja de expansión.
Zona de Recuperación (R): Se
encuentra en la Pampa de Chaparrí, muy
impactada por la ganadería y extracción de
madera. Acá se ha reforestado con
algarrobo (Prosopis sp.), al mismo tiempo,
se ha hecho un ordenamiento ganadero.
Zona Histórico
Cultural (HC):
Comprende los cerros Mulato, Raca
Rumi, Muro Incaico, andenes al frente del
cerro Chaparrí, el sector Pampa Grande y
el cerro Mal Paso.
3. AMENAZAS Y PROBLEMAS
AL INTERIOR DEL
ECOSISTEMA DE CHAPARRÍ
Antes de que la gente tomara conciencia
de que eran dueños del área; Chaparrí era
un sitio tradicional de caza deportiva,
entre las principales amenazas que tenía
su bosque, podemos mencionar la
extracción de leña en forma desmedida y
la caza furtiva. Ambas actividades eran
facilitadas por la accesibilidad desde la
ciudad de Chiclayo, siendo necesario un
estricto control de las entradas y salidas. A
esto, hay que sumar que el área no contaba
con una infraestructura vial, con
señalización y sistema de comunicaciones
que permitía un mejor control y
vigilancia. Solo en la época de lluvias, en
especial cuando se presentaba el evento
de El Niño, el acceso al área se tornaba
casi imposible.
Durante mucho tiempo la gente entró al
área a talar, e incluso se llegaron a instalar
aserraderos. Sacaban leña en grandes
cantidades, sin darle ningún tipo de
retribución económica a la comunidad. Se
depredaba sobre todo algarrobos y
hualtacos, los cuales eran usados para
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hacer postes y cercos. El hualtaco era
usado para hacer parquet. Igualmente, se
extraía palo santo y pasayo, para hacer
cajones de frutas. También se producía
leña y carbón, parte de ella era llevada a
Lima, Chiclayo y Trujillo, para ser
vendidas a las pollerías, mientras que el
sapote lo usan para hacer artesanías
(azucareros, trompos y boleros). Estas
acciones estaban ocasionando la
deforestación de las cabeceras de las
cuencas hidrográficas y traía consigo la
contaminación de los ríos por los huaycos.
Todo esto era un problema que ni los
guardaparques, ni comuneros tuvieron
facultades legales para detener a los
infractores, algo que ha cambiado hace un
tiempo, sin embargo la legislación sigue
siendo muy débil para sancionar estos
delitos.
Hasta hoy existe una mina, que está
adentro de la reserva, cerca de la quebrada
“La Montería”, de donde se extrae
baritina (sulfato de bario) que tiene
diversos usos industriales (F. Angulo,
2004). Además hay denuncios mineros
que están en trámite, lo cual es motivo de
preocupación, ya que la actividad minera
viene acompañada de ofrecimientos
(escuelas, postas médicas, puestos de
trabajo) que pueden pesar más que la
motivación conservacionista (R.Williams
com. pers). La amenaza número uno, de
acuerdo al propio Plenge, es la
explotación de oro. Existen diferentes
denuncios mineros, uno de los cuales ha
pasado a la etapa de exploración.
En cuanto a la ganadería, hay personas
ajenas que hacen uso de las tierras de la
comunidad, sin pagar un solo centavo.
Anteriormente habían unas 6 000 cabezas
de ganados, de las cuales sólo unas 100
eran de la comunidad. Hoy en toda la
reserva hay aproximadamente unas 3 000
cabezas de ganado. El pastoreo extensivo
de ganado caprino y vacuno evita la
regeneración del bosque. Asimismo,
muchas de las quemas son iniciadas por
las fogatas de los ganaderos y cazadores.
Todos los problemas mencionados se han
estando dando por el crecimiento
demográfico, la misma que tiende a
expandir la zona urbana hacia la zona de
amortiguamiento del área protegida
(extraído de F. Angulo, 2004). En gran
medida estos problemas, se han originado
por el bajo nivel educativo de los
comuneros.
4. IMPORTANCIA DEL ÁREA
DE CONSERVACIÓN PRIVADA
CHAPARRÍ.
Al estar ubicado relativamente cerca al
Santuario Histórico del Bosque de Pomac
(5 887,38 ha.) y la Zona Reservada de
Laquipampa (11 346,90 ha.), Chaparrí
constituye un nexo para la formación de
un corredor biológico (F. Angulo, 2004).
La idea es conectar los territorios de la
Reserva Ecológica de Chaparrí con las
áreas protegidas de Cutervo,
Chancaybaños, Pagaibamba,
Laquipampa y Batangrande, a través de
los territorios de las comunidades
campesinas vecinas que han manifestado
su interés en convertirse en nuevas
reservas ecológicas de carácter privado,
entre ellas: Tocmoche, Yaque, Miracosta y
recientemente Santa Lucía de Ferreñafe.
Existe la idea que el corredor abarque las 6
cuencas que hay en Lambayeque, es
decir: Saña, Chancay, La Leche, Motupe,
Olmos y Cascajal; entre Chancay, La
Leche, Laquipampa y Pomac son un
mínimo de 200 000 ha. para conservar
como áreas privadas (H.Plenge com.
pers).
Casi un tercio de las especies de
vertebrados que habitan acá, no son
hallados en otro lugar del mundo, siendo
por ende Chaparrí, un área
extraordinariamente rica en especies
endémicas. Cuenta con alrededor de 150
especies de aves, de las cuales 29 son
endémicas al bosque seco y 3 se
encuentran en peligro, teniendo a la pava
aliblanca como la especie más
representativa. Dentro de los mamíferos,
se puede observar al puma, ocelote, gato
andino, oso de anteojos, venado cola
blanca, pudú, y al zorro de Sechura. Entre
los reptiles, se encuentran cinco especies
endémicas y una en peligro. La
importancia de elevar esta zona a Área de
Conservación Privada, es que permitirá la
protección de estas especies, algunas de
las cuales son símbolos de la conservación,
tales como la pava aliblanca (Penelope
albipennis), el oso de anteojos (Tremarctos
ornatus) y el cóndor andino (Vultur
gryphus).
Otra razón por la cual esta área es de
importancia, es que permitirá preservar el
agua. Dado que se mantiene la cubierta
vegetal. Asimismo entre los recursos
genéticos que posee Chaparrí, destacan 3
especies silvestres de tomates
(Lycopersicon spp.) y una gama de frutales
nativos, tales como el cerezo cimarrón y el
ciruelo. Además, hay una gran variedad de
cactus.
El Área de Conservación Privada
permitirá que Santa Catalina de
Chongoyape se convierta en un modelo
de manejo sostenible, y ejemplo para
otras comunidades (es la primera área
protegida de Perú que ha sido donada por
una comunidad). En este sentido, las
comunidades vecinas de Santa Lucía y
Yaque han expresado su deseo de incluir
sus bosques en el área protegida, con lo
que se podría establecer un corredor de
cien mil hectáreas para el oso de anteojos y
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otras especies (Rumbos del Perú #34);
servirá así mismo para que la comunidad
nacional e internacional se de cuenta del
derecho de las comunidades a tomar sus
propias determinaciones en cuanto al
manejo de su territorio.
a la fase V de la cultura Moche. La cultura
Moche estableció su capital en Pampa
Grande. La cultura Sicán se desarrolló en
esta área en tiempos del horizonte medio
(700 1200 a.C.). En el intermedio tardío
(1200 1460 d. C.) se da la fase final de la
cultura Lambayeque o Sicán, siendo la
región dominada por la cultura Chimú.
Los principales centros arqueológicos son
los canales Raca Rumi I y II, que eran
utilizados para irrigación, el Cerro Raca
Rumi donde se han hallado fardos
funerarios finamente adornados, el Cerro
Malpaso al oeste de Chongoyape, Pampa
Grande donde hay un amplio
asentamiento humano con templos, y el
Cerro la Montería al este de Pampa
Grande. A éstos, hay que sumar los
petroglifos del cerro Mulato, donde
igualmente se han descubierto
construcciones de adobe y piezas de
cerámica con influencia Chavín.
La importancia de Chaparrí radica
también, en el modo en que se ha llevado
a cabo el proyecto, en el cual los
comuneros han estado involucrados
desde el principio y donde las decisiones
han sido tomadas de una manera
autónoma. Hay en la actualidad, un
cambio en la mentalidad de los
comuneros, quienes han podido apreciar
la diferencia con la anterior situación en la
que entraban los cazadores, leñadores,
abigeos y ganaderos. Desde que se
empezó a trabajar en el área, se ha logrado
pagar aproximadamente 4 000 jornales.
Hay además, otras fuentes de ingreso,
como las artesanías, el algarrobo y la miel.
Se podrá, así mismo, optimizar el uso de la
tierra, e implementar otros proyectos
como la instalación de un coto de caza.
5. ESFUERZOS DE
CONSERVACIÓN EN
CHAPARRI
Además de los valores ecológicos, el área
es de suma importancia por sus valores
culturales. En el horizonte temprano
(4500 2000 a.C.), se han hallado restos en
Chongoyape y Pampa Grande con una
fuerte influencia de la cultura Chavín.
Para el intermedio temprano (550 700
d.C.) se han hallado restos pertenecientes
Desde hace algún tiempo la comunidad
de Santa Catalina de Chongoyape
empezó a cambiar el uso indiscriminado
de los recursos naturales por un manejo
organizado y sostenible del ecosistema,
tomando diversas iniciativas, tales como
empezar a asentar denuncias contra los
que cometan delitos ecológicos, el
nombramiento de guardaparques
voluntarios, la prohibición total de la
cacería ilegal, la cual ha sido reemplazada
por la cacería regulada de venados, el
cambio de la tala indiscriminada de los
bosques (practicada por las familias para
usar la madera como combustible y
material de construcción) por la
recolección de leños caídos y favorecer la
fauna para la dispersión de semillas de
algarrobo como medio de reforestación, lo
cual ha ayudado a que el bosque se
empiece a recuperar. De las 42 412 ha. que
poseen, la reserva abarca 34 412 y 1 000 ha.
han sido separadas para agricultura y el
resto para otros tipos de proyectos
El gestor de todos estos cambios fue
Heinz Plenge, reconocido fotógrafo de
vida silvestre, quién retorno a Chaparrí en
el año 1998 y halla que en el área, se
habían establecido aserraderos y también
cazaban sin ningún tipo de restricción, por
lo que era sumamente difícil observar
algún animal. Por lo que decide hacer algo
por conservar lo que quedaba. Con el
tiempo se volvió el nexo necesario entre
los campesinos y las
instituciones
interesadas en el tema (extraído del diario
El Peruano, 2002). Al inicio las
conversaciones fueron bastantes difíciles,
ya que en año 1998 la comunidad le había
vendido 2 700 ha. a una mina, la cual les
había dicho que iban a hacer un proyecto
de reforestación, junto con pozos para
sacar agua que podría utilizar la
comunidad para sembrar maíz; bajo esas
condiciones es que le vendieron las
tierras, posteriormente hicieron pozas de
relaves mineros, esto generó desconfianza
en cualquier proyecto posterior. Para el
mismo Plenge fue difícil, ya que no tenía
la seguridad de que posteriormente otra
directiva decidiera variar la línea de
trabajo que venía realizando, incluso,
anteriormente algunos dirigentes habían
vendido partes boscosas a aserraderos.
Una muestra de lo difícil que es trabajar
con la comunidad fue comprender que
parte de la cultura de las comunidades es
el esperar que se brinden servicios gratis.
Además, este tipo de iniciativas iba en
contra de muchos intereses particulares,
como el de los traficantes de tierras,
invasores, taladores, mineros y abigeos
que forman su hato con cabezas robadas.
Para tener una seguridad de la
continuidad del trabajo, los dirigentes
invitaron a Plenge a ser comunero, por lo
que tenía derecho a un pedazo de tierra,
algo a lo cual declinó, y en su lugar
adquirió 100 ha. las cuales ha dedicado a
conservar. Tanto él como la comunidad
han dado de su propio dinero para sacar
adelante los diferentes proyectos. Las
conversaciones se iniciaron en 1998 y
duraron hasta mediados de 1999. En ese
año, Klaus Rutger consiguió 500 dólares
para poder desarrollar talleres con las
Las Areas de Conservación Privada - ACP
CHAPARRI
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comunidades sobre la pava aliblanca, y
fue Heinz Plenge quien los organizó,
tanto con Chaparrí como Laquipampa.
La calificación como Área de
Conservación Privada tomó tres años de
duros papeleos y trámites burocráticos
que en vez de facilitar las cosas, las
dilataron. El 27 de diciembre de 2001, el
Ministerio de Agricultura promulgó el
decreto supremo que creó la primera
Área de Conservación Privada del Perú.
Hoy el gobierno regional busca
promover la conservación por medio de
incentivos para las comunidades
campesinas que quieran sumar sus
territorios al corredor biológico; los
incentivos consisten en ayudar a
legalizar los títulos y sanear las
propiedades.
En Chaparrí se está desarrollando planes
de rehabilitación y reintroducción de
especies de fauna amenazadas y en
peligro de extinción, como el oso de
anteojos (Tremarctos ornatus), la pava
aliblanca (Penelope albipennis) y el cóndor
andino (Vultur gryphus). Estos planes
cuentan con el apoyo de instituciones
como INRENA, CONACS, Fundación
Backus Pro Fauna, Asociación Naylamp,
Asociación Cracidae, Universidad
Nacional Pedro Ruiz Gallo, Embajada
de Finlandia, Zoológico de San Diego
(EE.UU.) y la participación de
ecologistas como el propio Heinz
Plenge, Bernard Peyton, Álvaro del
Campo y el biólogo Manuel Apaza.
El afán de la comunidad por conservar
sus osos, ha despertado el interés de
especialistas en el tema, como los
doctores Lydia Kolter, Harry Reynolds,
Gordon Warburton, Bruce McLellan y
Bernard Peyton. El oso de anteojos es un
indicador casi perfecto de la salud de un
ecosistema y su presencia cerca de
centros poblados también sirve para
medir el grado de conflicto entre el
poblador rural y el hábitat.
Este trabajo con los osos se inició con una
osa que vivía al cuidado de una familia en
Oxapampa (Selva Central); para esto, se
instaló un cerco eléctrico. En Chaparrí se
ha dado refugio a osos provenientes de
confiscaciones, sean de particulares o de
circos, habiéndose ya liberado una
hembra de modo exitoso e incluso, se ha
observado una hembra con crías en el
campo. Paralelamente a esto, se llevan a
cabo estudios sobre la conducta de los
osos: uso estacional de hábitats, tamaño
del territorio que utilizan, migraciones
entre el páramo/bosque nublado y el
bosque seco/desierto, buscando
establecer las características meta
poblacionales de los osos andinos (Perú,
sur de Ecuador y norte de Bolivia). Se
necesita reducir la depredación de
productos agrícolas por parte de los osos,
ya que la reacción de los comuneros es
matarlos. Parte de la solución es usar
cercos eléctricos y obligar al ganado a
que pastoree en áreas que no se ubiquen
dentro del territorio de los osos
(información extraída de F. Angulo,
2004). Científicos de Canadá, USA,
Inglaterra, Alemania, y Perú han
entrenado dos docenas de
guardaparques provisionales. En esta
ACP y sus alrededores los osos ya no son
perseguidos desde hace 3 años.
Otro de los ejemplos, del interés de la
comunidad por conservar su fauna, es el
zoocriadero Bárbara D'Achille y el
Programa de Reintroducción de la Pava
Aliblanca, el cual se ha llevado a cabo en
convenio con el INRENA, la comunidad
de Santa Catalina de Chongoyape y el
auspicio de la fundación Backus ProFauna en Vías de Extinción. El
zoocriadero se ubica en Olmos y es
producto del trabajo de Gustavo del
Solar. Cuenta con seis aviarios que
albergan 60 jaulas. En Chaparrí se han
liberado ya 16 individuos entre
septiembre y octubre del 2001. Como
área de reintroducción se han
considerado los bosques secos
adyacentes al cerro Pavas y al cerro
Chaparrí. La población de este foco
estuvo conectada con la población de
pavas de Laquipampa, Casupe y Caña
Brava. Al extinguirse la población de
Chaparrí, las dos últimas poblaciones,
que son a su vez las más sureñas que se
conocen, han quedado aisladas. Al
introducir pavas en esta Área de
Conservación, se pueden conectar las
tres poblaciones mencionadas
anteriormente, formando un corredor,
donde se podrá dar un intercambio de
individuos. En la quebrada Caña Brava y
en la Zona Reservada Laquipampa se
han hallado pavas aliblancas silvestres.
Los objetivos de la reintroducción en el
ACP son devolver a la comunidad un
recurso con el que contaron
anteriormente e incrementar el flujo de
turismo, así como introducir una nueva
carga genética en las poblaciones
aledañas. El Consejo Regional de
Cultura y Turismo de Lambayeque
elabora un proyecto para declarar de
manera oficial a la pava aliblanca como
Ave Nacional del Perú (extraído del
diario Oficial El Peruano, 2002 y F.
Angulo, 2004). El proyecto de
reintroducción es apoyado con fondos de
la Asociación Cracidae Perú y es dirigido
por el Ing. Forestal Fernando Angulo. Se
espera que en las áreas que no están tan
intervenidas, las aves se dispersen, en
especial en la época lluviosa, mientras
que en la época seca se refugien en las
quebradas. Las aves se alimentan sobre
todo de los cerezos que hay en los
esteros. La comunidad construyó una
trocha vigilada hasta el área donde están
Las Areas de Conservación Privada - ACP
CHAPARRI
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las pavas aliblancas (H.Plenge com.
Pers). El área sur de las partes altas es
una de las zonas favoritas por los
cazadores.
Por otro lado con fondos del PNUD se
implementa un reglamento de pastoreo
para ganado vacuno. De ahora en
adelante se deberá pagar para ingresar
ganado en las tierras de la comunidad.
En el futuro se espera que la actividad
del rodeo sea un atractivo turístico más.
(H.Plenge com. pers.). Se han sembrado
árboles con riego por goteo. El
ecoturismo ha demostrado un buen
potencial en esta área y gracias al aporte
del Programa de las Naciones Unidas
para el Desarrollo (PNUD), se esta
realizando un plan de manejo
ecoturístico junto con el establecimiento
de un coto de caza de venados
científicamente manejado. Hoy se
permite un máximo de 30 personas por
día y no se permiten más de 1 000
personas por año (H.Plenge com. pers).
El dinero que genere la entrada a la
reserva irá a un fondo, el cual será usado
del siguiente modo: 40% para reinvertir
en la misma reserva (pago a los
guardaparques, mantenimiento de
caminos, mantenimiento de animales en
cautiverio), 20% para apoyo a las
escuelas de la comunidad,
especialmente a los sectores que están
cerca del área piloto, 20% para apoyo a
las postas médicas, 10% para apoyar a
algún sector que no está dentro del área
piloto, pero que es de la comunidad y
solamente un 10% irá para la parte
administrativa. Se han establecido 3
rutas: la ruta del oso, la ruta de la
huachuma y la ruta de pavas, además del
mirador desde donde se aprecia Chaparrí
en toda su magnitud (H.Plenge com.
pers.). Hay un grupo de comuneros que
vienen siendo capacitados por
especialistas en avifauna y otros temas
como turismo, para ser calificados como
guías turisticos locales. Todavía no
existen permisos para camping con
permisos recreacionales, sólo se dan en
casos de trabajos científicos. Existe la
modalidad de campamento cuando se
hacen pasantías de algunas
universidades o por intercambio con
otros guardaparques o gente de
comunidades campesinas para
intercambiar experiencias. La ruta de la
Huachuma (o de San Pedro): allí se ha
construido una pequeña casa donde los
visitantes pueden observar como se
hacen algunos rituales tradicionales,
como el de pago a los “apus”, donde se
lleva agua desde el mar hacia los cerros
para que llueva.
La ruta de Tabas es más especializada y
está dirigida para aquellos interesados en
la avifauna, allí existe una estación
biológica. En la actualidad existe un
grupo de personas de la comunidad que
trabaja artesanías y juguetería. También se
han dictado diferentes talleres para la
comunidad, profesores y alumnos. Aparte
de conservar, todos los proyectos han
servido para generar puestos de trabajo
para la comunidad, a diferencia de la
situación anterior, con los ganaderos,
taladores, cazadores y otros, en que
además de degradar el ecosistema, la
comunidad no recibía un solo centavo. Las
tres fuentes potenciales y estables de
ingresos son el ecoturismo, la ganadería
reglamentada y el coto de caza. A partir de
todo el trabajo conjunto y los talleres se ha
notado un cambio en la mentalidad de los
comuneros, quienes han asumido su rol de
propietarios y por ende se preocupan por
mantener y conservar el área.
A todo lo mencionado, hay que sumar los
aportes del gobierno, que le otorgó a la
comunidad los derechos del agua,
mientras que él ejercito construyó una
carretera de 11 km de largo a la estación de
campo. Aparte de esto la compañía
minera, propiedad de BHP Billiton, donó
a Santa Catalina las 2 400 ha. que
compraron anteriormente. Por otra parte
un grupo de pintores, denominados
Artistas por la Naturaleza, estuvo en
Chaparrí retratando la flora y fauna y parte
del producto de las ventas de sus obras ha
servido para sacar adelante estos
proyectos.
“Gracias a todos estos esfuerzos, los osos y venados que eran raramente vistos,
ahora son apreciables en las laderas de Chaparrí”.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
KCOSÑIPATA
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III. Iniciativas y Potencialidades para
la conservación privada en el Perú
Kcosñipata
Kcosñipata
La iniciativa grupal reportada en el valle del río
Kcosñipata, es un modelo importante de conservación
privada. Durante los últimos años, varios predios del
área han sido adquiridos por ONGs y empresas de
turismo; de manera que se han dado importantes pasos
para la conservación del territorio aledaño a la Reserva
de Biosfera del Manu, el cual en este ámbito ha ido
pasando a manos del sector privado, permitiendo una
forma de uso de la tierra que es compatible con la
vocación y la capacidad de uso de los mismos (tierras
para conservar diversidad biológica y tierras para
ecoturismo). De esta manera y como es lo usual en el
resto de la amazonia alta del país, así se evita
actividades de tala de bosques para su conversión en la
agricultura. Esta situación de iniciativas de
conservación privada, pone en evidencia el gran
potencial para la participación privada, en el área que
abarca los bosques naturales de la ladera oriental de los
andes; entre el Parque Nacional del Manu, al Oeste y
la Zona reservada Amarakaeri al Este.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
KCOSÑIPATA
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terreno de la CC Sunchubamba, ubicada
en la cabecera del río Kcosñipata,
tributario del río Alto Madre de Dios. El
terreno comprado se encuentra en la parte
alta de la denominada “Zona de Uso
Múltiple Amazónica” de la Reserva de
Biosfera del Manu (RBM), y a pocos
kilómetros del Parque Nacional del Manu.
Recientemente también adquirió el fundo
“Esperanza”, ubicado al pie de carretera y
que se encuentra inmediatamente por
encima de Pillahuata, predio de propiedad
de ProNaturaleza.
Políticamente, esta área se ubica en el
distrito de Kcosñipata (abarcando en el sur
una parte del distrito de Paucartambo),
provincia de Paucartambo, departamento
de Cusco. Consta de un territorio de
142 500 ha. y se ubica entre los 12º 58´29” y
13º20´6´´ S y 71º36´44´´ y 71º6´2´´ O, desde
los 1 000 hasta los 3 800 msnm, en las
microcuencas de los ríos Kcosñipata,
Queros y Rocomayo, afluentes del río Alto
Madre de Dios, en la parte alta de la
porción sur occidental de la Amazonía
peruana. El interés en el área radica en las
oportunidades del sector privado para la
conservación del área, su ubicación
colindante al Parque Nacional del Manu y
que por supuesto el área no tiene ningún
tipo de protección oficial.
1. INICIATIVAS PRIVADAS EN
KCOSÑIPATA
Las organizaciones que han invertido en el
área, adquiriendo o rentando terrenos y
algunas de las iniciativas planteadas, tanto
privadas, como de autoridades y
organizaciones locales son los que se
indican a continuación:
La Asociación para la Conservación
de la Cuenca Amazónica (ACCA):
Adquirió una importante extensión de
ProNaturaleza: En el año 1992
ProNaturaleza respondiendo a iniciativa
de los promotores de ecoturismo y
conservación, Señores Hugo Pepper y
Mario Ortiz de Zevallos, adquirió el fundo
Pillahuata, que colinda con el Parque
Nacional Manu, a una altura de 2 600
msnm en la cuenca alta del río Kcosñipata,
justo en el límite del bosque de nubes. El
fundo Pillahuata se encuentra en la
margen izquierda del río Kcosñipata, entre
el fundo Esperanza y el Morro Leguía,
abarcando 433 ha. Este predio antes de ser
adquirido estaba dedicado a la producción
agrícola y ganadera en su mayor extensión
y desde entonces se ha permitido la
regeneración y recuperación de la
vegetación nativa. Esta puede ser
considerada como la experiencia pionera
de adquisición de tierras con fines de
conservación de la diversidad biológica.
Por su ubicación en el límite entre el
bosque de nubes y los bosques
achaparrados altoandinos ofrece un gran
potencial para estudios científicos e
investigaciones; a su buen estado de
conservación se suma su fácil acceso desde
la ciudad de Cusco.
La Asociación de Conservación Selva
Sur: Esta organización se ha convertido en
el propietario del mayor número de
predios en la zona. Sus terrenos ocupan la
margen derecha del río Kcosñipata desde
Acjanaco hasta San Pedro, los que compró
de la CC Sunchubamba en 1995. Ocupa
también, bajo cesión de uso, la Reserva
Las Areas de Conservación Privada - ACP
KCOSÑIPATA
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Privada Bosque Nublado, la que abarca la
mayor parte de la margen izquierda del río,
desde Pillahuata hasta San Pedro. Además
ha comprado, de los moradores del
asentamiento Chontachaca, todos los
predios privados que les pertenecían en
las márgenes del río; en total son 3 800 ha
aproximadamente.
La empresa de turismo Manu Nature
Tours es dueña de 168 ha. ubicadas en la
quebrada Unión, en la margen izquierda
del río, arriba de San Pedro, colindante por
tres sectores con la concesión de Selva Sur.
La Municipalidad de Paucartambo ha
propuesto nuevas áreas, una de ellas sería
el Área Cultural y Ambiental Protegida en
Q`ueros, al sur del área; además de la
propuesta del área de Conservación
Municipal, la cual abarca los bosques
nublados en terrenos de libre
disponibilidad, en el sector oriental del
área, hasta el límite provincial.
Entre las iniciativas de conservación está
la del área de Conservación Regional
Pusharo, la cual ha sido gestionada por el
comité local de gestión de la RBM con
apoyo de ProNaturaleza en concertación
con las comunidades y propietarios de la
zona. Una vez que se apruebe, este grupo
de áreas contribuirá a la protección del
límite sur oriental del Parque Nacional
Manu.
Hospedaje - Pillahuata
Una evidencia del potencial de áreas
privadas de conservación para el desarrollo
de actividades de turismo a la naturaleza
(en el proceso que se viene presentando
en la zona con la instalación de diferentes
empresas que operan en la zona), estos se
ven favorecidos por la vecindad al Parque
Nacional del Manu y su relativa cercanía y
acceso por carretera desde Cusco.
En la actualidad existen los siguientes
hospedajes en la zona:
!P i l l a h u a t a : p r o p i e d a d d e
ProNaturaleza.
!Manu Cloud Forest Lodge: en la quebrada
Unión y propiedad de Manu Nature
Tours.
!Cock of the Rock Lodge: en San Pedro,
propiedad de Selva Sur.
!Aventuras Ecológicas Manu, Peru
Discovery y Pillahuata Tours: con tres
albergues en San Pedro en terrenos
alquilados y operados por las mismas
empresas.
La distribución de la tierra en la zona es:
!Terrenos del Estado: 108 069 ha.
(75,85%)
!Terrenos Comunales: 11 349 ha. (7,97%)
!Terrenos de ONG y empresas de turismo
: 7 467 ha. (5,24%)
!Predios privados: 15 598 ha. (10,95%)
2. LAS ACP Y SU RELACION
CON LA RESERVA DE
BIOSFERA DEL MANU
Las iniciativas de conservación en el área
datan de la declaración de la Zona de
Reserva de Manu y su categorización en
1973 como Parque Nacional con 1 556 000
ha. En 1977 se establece la Reserva de
Biosfera del Manu con un área núcleo, el
Parque Nacional del Manu, una zona de
amortiguamiento, la zona reservada del
Manu y una zona de transición o
Las Areas de Conservación Privada - ACP
KCOSÑIPATA
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de influencia de las comunidades nativas,
al este del Parque hasta el sector Colorado
de la cuenca del río Madre de Dios.
Asimismo se ha creado la Zona Reservada
Alto Purús, que abarca más de 5 millones
de hectáreas al norte del Parque Nacional
del Manu. Todas estas iniciativas se
aproximan cada vez más a una visión
ecorregional de la conservación.
El área es de paisajes agrestes, con
impenetrables bosques en terrenos muy
empinados, y casi sin acceso, a excepción
de la carretera Acjanaco - Chontachaca. En
este ámbito el clima es extremadamente
lluvioso, con un promedio de 3 500 mm al
año en las partes bajas y hasta 6 000 mm o
más en las partes altas. El área se
encuentra casi deshabitada, a excepción
de predios privados cerca de la carretera.
cooperación; esta última se ha ampliado
para abarcar toda la cuenca del río Alto
Madre de Dios (fuera del Parque
Nacional) en la llamada "Zona de Uso
Múltiple Amazónica", así como una "Zona
de Uso Múltiple Andina" en la parte
colindante al límite andino del sector sur
occidental del Parque. Posteriormente se
creó la Reserva del Estado a favor de las
poblaciones nómades Nahua y
Kugapakori.
En el año 2000 el Estado declaró la Zona
Reservada Amarakaeri que protege el área
El Parque Nacional del Manu protege
diferentes paisajes naturales, que van
desde praderas altoandinas a más de 4 000
msnm. hasta la llanura amazónica a 300
msnm, con grandes extensiones de
bosque tropical húmedo. Esta posee 13
zonas de vida y 46 de las 162 especies de
animales en peligro de extinción en el
Perú (Rodríguez, 1996 en Halliday, 2001).
De acuerdo al sistema de Provincias
Biogeográficas, desarrollado por el CDC
UNALM, el área de estudio pertenece a la
Yunga Subtropical, con una extensión de
44 548 Km2.
Según el sistema de Regiones Ecológicas
de Zamora, pertenece a la región Bosques
Pluviales (Bosques de neblina), con una
extensión de 62 000 Km2. Finalmente de
acuerdo a la clasificación de la WWF, el
área forma parte de la Ecorregión de
Yungas Peruanas, con una extensión de
188 735 Km2, que a su vez pertenece a los
Bosques Húmedos Tropicales de los
Andes Centrales. Esta ecorregión es
equivalente a las dos Provincias
Biogeográficas - Yunga Subtropical y
Yunga Tropical, con una extensión total
combinada de 214 804 Km2.
La biodiversidad de las Yungas Peruanas
es identificada como una de las
Ecorregiones Global 200. Así mismo, es
uno de los 25 hotspots de Conservación
Internacional. De acuerdo al análisis que
hizo Conservación Internacional (CI) se
concluyó que los Andes Tropicales
superan a casi todos los demás hotspots en
términos de diversidad y endemismos,
cubriendo el 15% del total de plantas
vasculares del mundo. Hay alrededor de
20 000 especies de plantas que no se hallan
en ninguna otra parte del mundo, solo en
esta ecorregión.
En San Pedro y Pillahuata hay
aproximadamente 39 especies de
mamíferos, y quizá varias nuevas de
roedores. En cuanto a aves hay un total de
255 especies y un número no determinado
en Pillahuata. La zona es importante,
también, por su diversidad de orquídeas,
con unas 200 especies sólo en Pillahuata
(Moscoso, 1998)
A más de la biodiversidad de la zona, el
área es de importancia por formar parte de
la zona de amortiguamiento del Parque
Nacional el Manu, con el que colinda. Casi
toda la franja limítrofe entre Acjanaco y
Chontachaca ya se encuentra en
propiedad de organizaciones dedicadas a
la conservación y ecoturismo.
Otro aspecto, por el cual es importante el
Las Areas de Conservación Privada - ACP
KCOSÑIPATA
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3. RELACION DE PREDIOS QUE PUEDEN ACCEDER A ACP
*Los propietarios privados en el sector sur (alto andino) de Kcosñipata son:
Nombre
GC Cico
CC Parpacalla
Anexo Huaysampilla
Parte de la CC Sunchubamba
CC Callipata
CC Ticacancha
CC Sanminarcos de Espinguni
CC Ccachupata
CC Pucara
GC Marcachea
CC Queros Andino
CC Jajahuana
Esperanza
Clase de propietario
Grupo Campesino
Comunidad Campesina
Anexo CC Ccachupata
Comunidad campesina
Comunidad campesina
Comunidad campesina
Comunidad campesina
Comunidad campesina
Comunidad campesina
Grupo Campesino
Comunidad campesina
Comunidad campesina
Predio privado
Relación al área de estudio
Colindante
Parcialmente dentro del área
Dentro del área
Parcialmente dentro del área
Dentro del área
Dentro del área
Colindante
Colindante
Colindante
Colindante
Colindante
Colindante
Dentro del área
*Propietarios privados, en el sector norte (amazónico) de Kcosñipata son:
área es que funciona como corredor
biológico. El área forma parte del gran
Corredor Ecológico Vilcabamba Amboró.
Las principales amenazas del sitio son la
deforestación intensa, la conversión
agrícola y la extracción forestal, la
ganadería, la cual no es apropiada para la
zona, debido a sus fuertes pendientes.
Igualmente, hay quema de pastos y
bosques en el sector alto andino, lo cual
puede afectar los bosques en el límite sur
del área. Existen moderadas presiones de
colonización a lo largo del límite norte del
área, salvo en los sectores San Pedro y
Queros, donde la presencia de la
comunidad campesina sirve como freno.
Una de las principales especies extraídas
es el aliso (Alnus jorullensis), también hay
captura ilegal de insectos (mariposas).
Estos problemas se agravan por la
construcción de vías y la colonización.
Existe la propuesta de la municipalidad de
Paucartambo para la construcción de una
nueva carretera entre Paucartambo y
Huaypetue, la cual pasaría por la zona
norte del área.
La región es considerada por el Banco
Mundial como de prioridad I para la
conservación.
Nombre
Queros
Chontachaca
Trabajo
Estari
Proyecto Sbaluyoc
Pampa Azul
Lastenia
Cerro Azul
Pilcomayo
Parte de Queros
Clase de propietario
Comunidad nativa
Predios privados
Predios privados
Predios privados
Predios privados
Asentamiento rural
Predios privados
Predios privados
Predios privados
Asentamiento rural
Relación al área de estudio
Parcialmente dentro del área
Parcialmente dentro del área
Parcialmente dentro del área
Parcialmente dentro del área
Parcialmente dentro del área
Parcialmente dentro del área
Parcialmente dentro del área
Parcialmente dentro del área
Parcialmente dentro del área
Parcialmente dentro del área
Las Areas de Conservación Privada - ACP
BOSQUE DE ZARATE
63
Bosque
Bosque
de
Zárate,
de Zarate,
sobreviviente de los Andes.
"...quedé solo en medio de un bosque. El bosque ya no me reconocía.
El bosque se estremece soñando con los grandes animales que lo recorrían.
El bosque cierra sus párpados y me encierra.
En la casa de madera sueño con los pájaros
Que anidaron alguna vez en este bosque."
*Fragmentos de "Cosas vistas" y "XX" de Jorge Teillier
ANTECEDENTES
H. W. y M. Koepcke fueron los primeros en dar a
conocer esta zona y se debe a ellos su nombre. M.
Koepcke menciona que los locales se referían a esta
zona como Monte de Zárate o Montal de Zárate. Ellos
mismos sugirieron en 1964 la creación del Parque
Nacional Bosque de Zarate (N. Valencia e I. Franke,
1980). Cabe mencionar que de acuerdo a testimonios
de los campesinos el verdadero nombre del bosque es
"Huarhuainga", palabra quechua que significa
"Bosque del Inca" (Diario Expreso).
Ferreira que publicó en 1978 un catálogo de especies
vegetales, recomienda que el bosque sea considerado
como una Unidad de Conservación (Hondermann,
1988). N. Valencia e I. Franke en 1980, agregaron 42
especies de flora al catálogo, e incluyen vertebrados e
invertebrados, una zonación y mención de restos
arqueológicos. Demandan también que sea
considerado como Unidad de Conservación.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
BOSQUE DE ZARATE
64
65
Cano y Valencia el Bosque de Zarate
pertenece a los denominados Bosques
Nublados Secos, los que se encuentran en
las vertientes occidentales de los andes,
entre los 2 500 y 3 200 msnm de altitud. Se
caracterizan por una alta humedad así
como una alta frecuencia de nieblas
durante los meses de verano (Diciembre Marzo) y por su sequedad en invierno.
1. DESCRIPCIÓN DEL AREA
Ubicación
El bosque de Zarate se encuentra ubicado
en la serranía esteparia de la vertiente
occidental de los Andes Centrales, en la
Provincia de Huarochiri, distrito de San
Bartolomé, departamento de Lima, entre
las coordenadas geográficas 11º55´ - 11º56'
Latitud Sur y 76º28' - 76º29' Longitud
Oeste, en un valle lateral del río Rímac. El
bosque se ubica entre los 2 800 y 3 200
msnm. en la ladera de la margen derecha
del río Seco (Ferreyra; N. Valencia e I.
Franke, 1980; M. Koepcke, 1954). La
franja de árboles con espacios abiertos
tiene un área de casi 1,3 Km2 y su área de
mayor densidad abarca unas 400 ha. Si se
incluye las zonas ralas, el área es de 1 600
ha. (N. Valencia e I. Franke, 1980,
Hondermann, 1988 ).
Condiciones climáticas
Según la clasificación de Holdridge, el
bosque de Zárate pertenece a la de Zona
de Vida o asociación climática denominada
estepa espinosa montano bajo tropical (ee
- MBT) (Mavila, 2003). Como mencionan
Los bosques de Zarate pueden ser
considerados como una prolongación de la
sección húmeda de la zona templada
establecida por Chapman quién fue el
primero en clasificar y denominar los
bosques montanos andinos para el
Ecuador y el norte del Perú (M. Koepcke,
1954), la cual se caracteriza por su alta
precipitación y humedad, y se ubica en
zonas altitudinales de las regiones
montañosas.
Valencia y Franke
mencionan que los Koepcke consideran
que esta "prolongación" viene a ser el
equivalente ecológico (bosque
oligotermo, de clima templado y con
especies de hojas coriáceas) de la zona
boscosa alta del norte del Perú en latitudes
más allá de los 7º.
Al estar, el bosque, enclavado en los
Andes, las precipitaciones se dan desde el
mes de Noviembre y se prolongan hasta
inicios de Mayo, teniendo una mayor
intensidad en los meses de Febrero y
Marzo. Se presentan acompañadas por
neblinas que ascienden desde la Costa
(Ferreira, 1978).
La contribución de agua por las nieblas
durante la época de lluvia y su efecto en la
disminución de la radiación solar directa
crean condiciones de temperatura que
ayudan al desarrollo de la vegetación
existente en las laderas, ya que provoca
un aumento en la humedad disponible la
cual es
absorbida por las plantas
(Valencia, 1992).
La precipitación presenta una gradiente
de aumento con la altitud. En la parte baja
(1 500 msnm) hay una precipitación de 170
mm anuales, incrementándose a los 2 860
msnm (zona del bosque) a 360 mm. de
acuerdo a datos citados por Valencia.
La temperatura presenta una gradiente de
disminución con la altitud. La
temperatura media anual estimada para la
parte baja (1 900 msnm) es de 15,3ºC y
para la parte media (bosque) a los 2 860
msnm es de 11,8ºC. (N. Valencia; A. Cano,
1990).
Los bosques de Zarate se hallan
determinados por factores medio
ambientales bastante peculiares. En un
perfil altitudinal que va desde los 2 400 a
los 3 200 msnm podemos apreciar
comunidades herbáceas, arbustivas y
arbóreas (Ferreyra). En cuanto a la actual
Las Areas de Conservación Privada - ACP
BOSQUE DE ZARATE
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67
distribución de los bosques nublados
secos en forma de manchas ha habido
cierta discusión, siendo la incógnita
planteada si se debe a la acción del hombre
o a las condiciones climáticas. En cuanto a
esto Valencia menciona que lo más
probable es que sea por lo último,
considerando la orientación de las laderas
(SSW y SW), ya que es en esta orientación
en la que se presentan las mejores
condiciones de humedad y por tanto los
bosques. (N. Valencia, 1992).
Características edafológicas
La pendiente del área supera el 50%. Los
suelos presentan afloramientos rocosos del
volcánico terciario y que originan suelos
coluviales. Para el caso de Gatero los
suelos son ligeramente ácidos, con alto
contenido de fósforo y potasio, textura
franco arenosa y con un contenido de
materia orgánica de 9,7% (Hondermann
1988).
El agua es escasa en la ladera. Las fuentes
de agua provienen del río Seco, de los
riachuelos que desembocan en este río y
algunos manantiales (Valencia y Franke,
1980).
-Flora
El Bosque de Zarate, a decir de N.
Valencia e I. Franke es el bosque ralo
perennifolio más austral de las Vertientes
Occidentales de los Andes. La vegetación
es intercalada presentando espacios
abiertos, pudiéndose encontrar árboles
desde los 2 500 hasta los 3 600 msnm (la
zona conocida como bosque abarca desde
los 2 800 hasta los 3 200 msnm).
Por su ubicación tan peculiar los bosques
de Zarate son considerados una especie de
relicto de los Andes occidentales del
Centro (Ferreira, 1978). Hay que anotar
que estos llamados relictos se encuentran
desde el extremo norte del Perú hasta el
grado 13 de latitud, sobre todo en
pendientes elevadas (Valencia, 1992)
Valencia y Franke (1980) clasifican la
ladera del bosque de Zarate en:
!Zona de cactáceas (1 800 1 950 msnm).
!Zona de Carica y Jathropa (1 950 2 350
msnm).
!Zona de Croton (2 350 2 600 msnm). M.
Koepcke (1958) considera esta zona como
Estepa Arbustiva Caducifolia. Valencia y
Franke en 1980, observan el predominio
de Croton en la vegetación.
!Zona de arbustos espinosos (2 600 2 700
msnm).
!Bosque (2 700 3 200 msnm).
!Zona alta de arbustos espinosos (3 200
y 3 400 msnm).
!Puna (sobre los 3 400 msnm).
Por otro lado los pobladores dividen la
ladera derecha del río Seco en zonas
(Valencia, Franke 1990):
!Chunaca.- Pequeña colina a 1 930 msnm
que sirve de campamento de pastores.
!Mital.- Predomina la Carica candicans
con un campamento a 2 250 msnm.
!Molle.- Presencia de "molle" (Schinus
molle). Hay un campamento a 2 335 msnm
!Pascana.- Parte baja de la Quebrada
Cheqta. Hay un campamento a 2 650
msnm.
!Esquina Grande.- Loma prominente a
2 790 msnm.
!Quebrada Zarate.- Es la quebrada más
profunda de la zona.
!Gatero.- Zona de mayor densidad del
bosque.
!Gigantón.- Zona densa, presencia del
c a c t u s " G i g a n t ó n " ( Tr i c h o c e r e u s
peruvianus). Hay varios campamentos de
pastores.
!Camal.- Lugar donde el ganado se
desbarranca con frecuencia.
!Pampa Zárate.- Hay un campamento de
pastores a 3 000 msnm.
!Muralla.- Zona en la cima de la ladera
con un campamento a 3 120 msnm.
!Julcas.- Con elevadas puntas rocosas.
!Pescado.- En la parte superior de la
ladera a 4 200 msnm.
!Pacha Grande.- Salto de agua a 3 600
msnm. donde se puede apreciar al
"cóndor" (Vultur gryphus).
!Ventanilla.- Prominencia en la cima de la
ladera, de donde se ve todo el valle del
Rímac.
Los bosques nublados secos presentan
árboles con hojas duras y también
abundantes epífitas, siendo dominantes
dentro del paisaje los árboles retorcidos y
las plantas herbáceas, estas últimas
durante la época húmeda (Valencia, 1992).
Hay que recordar que a mayor altitud hay
una disminución de la humedad debido a
la menor presión del vapor de agua y por
ende las plantas tienen menos de donde
absorber; es por esto que a mayores alturas
las plantas han adaptado sus hojas
reduciendo su área foliar.
Aquí también se ubica la vegetación más
abundante entre los 2 600 y 3 300 msnm y
los estratos arbóreos del dosel medio y
superior, estas alcanzan alturas entre los 8
a 11 m. y se hallan en asociación con
arbustos espinosos, herbáceas,
enredaderas, epífitas, líquenes y musgos.
El periodo de floración se inicia entre
mayo y junio, acabando con la semillación
de noviembre a enero. (Hondermann,
1988).
En la zona de Gatero las principales
especies arbóreas son Myrcianthes
quinqueloba ("guayabillo"), Escallonia
Las Areas de Conservación Privada - ACP
BOSQUE DE ZARATE
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resinosa ("chachacomo"), Oreopanax
oroyanus ("calo"), Prunus rígida
("duraznillo"). Otras especies presentes
son la Tillandsia latifolia, la cual es una
epífita de la familia Bromeliaceae,
helechos como el culantrillo - Adiantum
digitatum, líquenes y musgos como Usnea
barabata y Neckera jamesonii,
respectivamente.
ejemplares de esta especie, algo que no
logró en otros meses. En 1954 escribió
sobre la existencia de otras especies tales
como Puma (Felis concolor),
venado
(Odocoileus virginianus peruvianus) - el cual
ya no se encuentra en el bosque, vizcacha
(Lagidium sp.). Así mismo dice haber visto
huellas de Dusicyon sp. ("zorro") y
Conepatus sp. ("Zorrino").
La mayor diversidad florística en la zona
de Gatero se debe a su ubicación central,
altitud media y fisiografía de menor
pendiente con respecto a toda la ladera lo
que condiciona una mayor humedad y
disponibilidad de nutrientes. Valencia
indica, que las especies arbóreas del
bosque de Zárate tienen una reducida o
nula regeneración natural, siguiendo una
gradiente latitudinal (Mavila, 2003).
J. Chávez (1987) escribe que en el bosque
se puede ver a la perdiz (Nothoprocta
pentlandi oustaleti) durante todo el año.
-Fauna
El Bosque de Zarate posee una fauna
dentro de la que se destacan las aves (72
especies de acuerdo a Franke 1994), con la
presencia de especies tales como Zaratorni
stresemanni, un Cotingido estudiado por
M. Koepcke, quien la denomino así por la
localidad tipo (Zarate) y por el Dr.
Stresemann quien reconoció la diferencia
genérica y específica de este Cotingido.
M. Koepcke menciona que fue durante los
meses de Octubre cuando observó
-Restos arqueológicos
Existen restos arqueológicos en todo el
valle y en el mismo bosque de Zarate, en
los cuales el material predominante es la
piedra. La época de construcción no ha
sido determinada y los restos se hallan en
un estado de conservación muy destruido
(Valencia y Franke,1980)
2. PRINCIPALES AMENAZAS
AL AREA
El bosque de Zarate es un bosque
pequeño en el cual el desequilibrio de las
interacciones finas que lo estructuran
puede ser de efectos impredecibles. (L.
Salinas, M. Samamé e I. Franke, 1999). Es
decir, debido al pequeño tamaño del
bosque, las especies que en él habitan han
llegado a desarrollar interacciones
altamente específicas (sea entre animales
o animales - plantas), las cuales se pueden
ver alteradas por factores externos, en
especial la intervención antropogénica.
Dentro de estos factores debemos
mencionar:
Sobrepastoreo
Se sabe por tradición que antiguamente se
sembraba papa y se pastoreaba ganado
vacuno (N. Valencia e I. Franke, 1980) en
la parte superior del bosque (a 3 000
msnm). Como se sabe los pobladores de
las comunidades aledañas viven de la
producción de leche y quesos, por lo que
alquilan las tierras del bosque a los
comuneros de San Bartolomé, quienes son
los dueños del bosque de Zárate. Las
cabras y los vacunos provocan daño, no
sólo al comer los brotes, si no además al
pisotear las plantas, lo cual conlleva a la
erosión. El sobrepastoreo nos lleva, aparte
de la erosión, a una pérdida de área,
productividad, biodiversidad y belleza
paisajística (Mavila, 2003).
Los pastores realizan migraciones
altitudinales según la época del año.
Durante los meses de Enero a Marzo
(meses húmedos) se desplazan a los
lugares más bajos del valle donde llueve
menos, acá pastan mayormente caprinos
debido a la menor vegetación. Luego, en
los meses de Abril o Mayo, ocupan las
zonas de alturas medias, donde se
encuentra el bosque, pastando allí los
vacunos, los cuales son llevados luego a
zonas más altas y es recién allí cuando se
permite el ingreso de los caprinos. Hay
que señalar que las cabras al tener acceso a
lugares inaccesibles causan un gran daño a
la vegetación, mientras que las vacas
causan lo hacen por el pisoteo del pasto
(Valencia, 1992).
Tala
En cuanto a la tala para leña, el "quishuar"
(Buddleia incana) ha sido la especie más
utilizada, por esto se encuentra
practicamente extinguida. Otras especies
utilizadas por su madera son el "duraznillo"
y "chachacomo" (Hondermann, 1988).
¿Acción destructiva del hombre o
simplemente la mano de la propia
naturaleza?
El tipo de distribución de los pueblos nos
indica que se ubican en altitudes
semejantes a los bosques nublados secos
de la vertiente occidental, de donde,
podría pensarse que el hombre ha sido el
principal agente de perturbación y que ha
llevado a la fragmentación de estos. Sin
embargo hay otros investigadores como
Weberbauer, Troll, Koepcke, Hueck y
Walter que consideran que la distribución
Las Areas de Conservación Privada - ACP
BOSQUE DE ZARATE
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actual se debe a condiciones climáticas,
sobre todo debido a la mayor humedad en
las pendientes, ya que por su orientación
SSW y SW, captan la humedad
proveniente de las nieblas. (Valencia,
1992). Sin embargo, el mismo autor
conjetura que no se puede descartar la
acción destructora del hombre como uno
de los factores que ha alterado los bosques.
3. IMPORTANCIA DE LA
CONSERVACIÓN DE LOS
BOSQUES DE ZARATE
¿Por qué debemos proteger los
bosques de Zarate ?
Los bosques de Zarate son importantes
debido a que albergan una vegetación en
especial arbustiva y herbácea que es muy
variada. Incluso se han hallado especies
nuevas para la ciencia ( como el árbol
Myrcianthes quinqueloba de la familia
Myrtaceae y Barnadesia blakeana de la
familia Asteraceae)
Aparte de la flora, debemos destacar la
fauna, donde sobresalen las aves, tal es el
caso de Zaratornis stresemanni y Cranioleuca
antisiensis zaratensis. En cuanto a
invertebrados se han hallado nuevas
especies para la ciencia, como los
miriápodos Rhinocricus zaratensis,
Catharosoma mamillatum, Newportia
ignorata y Epinannolene flagellosa (Valencia
y Franke 1980). El aislamiento del bosque
pudo haber llevado a la aparición de
especies endémicas, pero para tener
seguridad de esto, hacen falta más
estudios ( Valencia y Franke, 1980).
Los bosques montanos cumplen
diferentes roles (Mavila, 2003):
!Regular el régimen hídrico.
!Mejorar la calidad del agua.
!Controlar los procesos erosivos.
!Regular los microclimas.
!Ser fuente de madera y otros productos
forestales.
Además de esto hay que agregar algo
obvio, pero que vale la pena mencionarse la belleza intrínseca del bosque. Por más
pequeño que sea este bosque, su
importancia no ha ni debe de medirse por
su extensión, si no por la muchas veces
ignorada riqueza que oculta en las
relaciones que han establecido sus pocos
habitantes, desde sus pequeños líquenes
hasta Zaratornis, relaciones que pasan
desapercibidas para la mayoría de
nosotros, pero que les han permitido
sobrevivir en este fragmento de tierra.
¿Qué medidas deben tomarse?
Entre los esfuerzos de conservación
destacan los planteamientos de Hans y
María Koepcke, quienes sugirieron en
1964 la creación de un Parque Nacional en
el Bosque de Zarate. Ferreira en 1978
recomienda establecer una Unidad de
Conservación en el Bosque de Zárate y
Valencia y Franke en 1980 demandan que
sea considerado como Unidad de
Conservación.
Mavila en su tesis del 2003 propone un
plan de investigaciones para el bosque de
Zárate, entre cuyos puntos menciona:
!Hacer el monitoreo de la regeneración
natural del estrato arbóreo.
!Hacer el estudio de las condiciones de
sitio (características ecológicas de cada
zona).
!Llevar a cabo pruebas de reforestación
en el bosque.
!Realizar un estudio de capacidad de
carga para pastoreo.
!Realizar un estudio dendrocronológico
del bosque.
!Elaborar una base de datos digitalizada
(SIG) de la cuenca del río Seco.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
BOSQUE DE CUYAS
73
Bosque
Bosque
de
Cuyas
de Cuyas
Los bosques de neblina de las vertientes occidentales
de los andes son uno de los ecosistemas que han
sufrido una mayor modificación de su paisaje. Estos
bosques se caracterizan por la cobertura de nubes al
nivel de la vegetación, lo que permite una captación
directa del agua. Los árboles se caracterizan por ser de
poca altura y por tener troncos densos, nudosos y
torcidos, con copas tupidas, compactas y hojas
pequeñas, gruesas y duras. Igualmente tienen una alta
proporción de biomasa en forma de epífitas (líquenes,
musgos, helechos y bromelias) además de lianas y
plantas trepadoras.
“Sin regulación cada miembro de la comunidad busca satisfacer sus necesidades al máximo y
con recursos limitados, y como es un terreno común, esto conduce a su deterioro”
(Hardin, 1968)
Estos bosques de neblina están ubicados en la lista de
los ecosistemas más amenazados del mundo, tanto así
que el New York Botanical Garden ha indicado que el
90% de los bosques montañosos de los andes del norte
han desaparecido.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
BOSQUE DE CUYAS
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75
especies:
desde México hasta Argentina
!Pava Barbada (Penelope barbata) cuyo
status es vulnerable. Esta ave frugívora, es
endémica de los bosques de neblina del
sur del Ecuador y Norte del Perú. Se
encuentra amenazada por la caza y por la
destrucción de su hábitat. También se le
puede encontrar en el bosque de Los
Molinos.
!Colibrí Pico Espada: (Ensifera ensifera)
De los 320 tipos de colibríes tiene el pico
más largo (12 cm)
!Paloma Ventriocrácea (Leptotila
ochraceiventris) Su status es vulnerable.
Fue registrada en el año 1993 en el
bosque, pero no ha sido reconfirmada.
Probablemente se haya visto afectada por
la alteración causada por la presencia del
ganado que forrajea las plantas y arbustos
donde pasa su tiempo.
1. DESCRIPCIÓN DEL BOSQUE
DE CUYAS
Ubicación
Cuyas esta ubicado a unos 5 kilómetros al
noroeste de la ciudad de Ayabaca, en el
departamento de Piura. El bosque se
encuentra en una montaña, entre los 2 200
y los 2 900 msnm.
El bosque ha sido influenciado por el
hombre (extracción de madera, presencia
de chacras y pastoreo de ganado), sin
embargo hay parches de bosque primario
en las áreas de mayor pendiente, el resto
ha sido reemplazado por un bosque enano,
matorral o por pasto de ganado. Se
encuentra próximo al bosque de “Los
Molinos” (de unas 400 ha.), estando
ambos bosques separados por el cerro
Yantuma (Flanagan y Vellinga, 2000).
!Perico Caretirrojo (Aratinga erythrogenys)
Es casi amenazada, especie endémica de
la región de Tumbes. En Cuyas se ha
observado una bandada de 25 a 30
individuos, mas no se le conoce como
propia del bosque.
Extensión
La extensión del bosque es de unas 600
ha. de las cuales 60 son propiedad de la
Municipalidad Provincial de Ayabaca.
!Amazona Nuqieescamosa (Amazona
mercenaria) Fue registrada por Flanagan
en 1998, siendo la única vez que ha sido
vista en el área. Pudiera ser que visite el
bosque para alimentarse de las frutas.
Aves
Se han identificado 110 especies de aves
en el bosque, destacando las siguientes
!Búho Estigio (Asio stygius) Es muy raro y
poco conocido, su distribución abarca
!Rascahojas Cuellirrufa (Syndactyla
ruficollis) Su status es vulnerable, es
endémico de la región Tumbesina.
!Batará de Chapman (Thamnophilus
zarumae) Especie endémica de la región
Tumbesina
!Hormiguero Cabecigris (Myrmeciza
griseiceps) Su status es vulnerable
!Gralarita Pechirojizo (Grallaricula
ferrugineipectus) Existe la duda sobre si es
una o son varias subespecies. Esta(s)
especie(s) se considera(n) amenazada(s)
ya que su distribución y población son
muy pequeñas, por lo que la conservación
de esta área es muy importante.
!Tirano de Loja (Zimmerius flavidifrons)
Especie endémica al sur del Ecuador y
Norte de Perú
!Mosquero Coronidorado (Myiodynastes
chrysocephalus) Su registro ha sido el
primero en la vertiente occidental del
Perú
!Hemispingo de Piura (Hemispingus
Las Areas de Conservación Privada - ACP
BOSQUE DE CUYAS
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piurae) Especie endémica del sur del
Ecuador y del Norte del Perú
!Picolete Ecuatoriano (Picumnus sclateri)
Se le vio a 1 900 msnm lo cual es un dato
interesante, ya que sólo había sido visto
hasta los 1 400 msnm.
2. AMENAZAS PARA EL BOSQUE
DE CUYAS
La extracción de madera es evidente en el
bosque de los Molinos donde hay un
aserradero rústico, además de la
depredación sufrida por parte de los
mismos lugareños.
3. IMPORTANCIA DEL BOSQUE DE
CUYAS
El bosque se ubica en una montaña aislada
de la cordillera, lo cual ha sido un factor
importante en la biogeografía de la zona.
A pesar de este aislamiento es difícil
explicar cómo es que se registra especies
como la Pava Barbada y el Quetzal
Cabecidorado; mientras que por otro lado
hay muchas especies propias del bosque
de neblina que no se encuentran en este
bosque. Es este conjunto de interrogantes
que hacen que este bosque sea de un gran
valor científico. Las 110 especies de aves
registradas en el bosque de Cuyas
representan el 6% de todas las aves del
país.
La importancia principal es sin duda que
este territorio alberga varias poblaciones
en peligro de extinción, siendo esta área
de suma importancia para la conservación
de estas especies.
Si consideramos al Bosque de Cuyas y al
Bosque “Los Molinos” como una sola
Unidad de Conservación, ambas áreas
podrían constituirse en un área importante
para la conservación y capaz de sostener
poblaciones más grandes.
Algo muy importante de resaltar es su
diversidad de orquídeas, lo cual ha
conllevado a su depredación así como la
extracción de suelo orgánico, provocando
la erosión del suelo y la sedimentación de
los cuerpos de agua.
4. POSIBILIDADES Y ESFUERZOS
DE CONSERVACIÓN
Lo que se debe hacer es intentar aumentar
la extensión del bosque ya que las 60 ha.
en propiedad de la municipalidad no
representan una unidad de suficiente
tamaño para mantener la diversidad de
especies. Para esto se debe hacer un
levantamiento de información sobre los
actuales dueños de los terrenos. La
municipalidad ha puesto en marcha un
vivero de orquídeas, lo siendo importante
resulta insuficiente en el sentido que la
necesidad de una acción de mayor alcance
para asegurar la conservación de este
bosque en primer lugar y para la
recuperación de zonas que fueron
deforestadas.
En los últimos años son diferentes
organizaciones los que han mostrado
interés por apoyar la conservación de estos
importantísimos relictos de bosques,
dándose el caso de ProNaturaleza por
encargo de CARE-Perú elaboró bajo un
proceso participativo, un primer plan de
manejo para el bosque de Cuyas, el mismo
que considera una serie de pasos para su
gestión.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
EL CASO DEL ABRA MALAGA
79
Bosques de Polylepis,
el último refugio
“El“El
caso
casodel
del
Abra
Málaga”
Abra
Málaga”
Constantino Aucca Chutas
“La pérdida de los bosques no sólo significa una pérdida de
biodiversidad si no además un descenso en la prosperidad de la gente que
habita allí, quienes antiguamente se solían beneficiar de valores directos e
indirectos de los bosques de Polylepis”
(Fjeldsa, 2002)
Tres especies de aves, en situación crítica, encuentran
en los pequeños fragmentos de bosques de Polylepis de
los andes peruanos, su último refugio. Anairetes alpinus,
Leptasthenura xenothorax y Cinclodes aricomae dependen
de estos parches para sobrevivir. Parte de estos relictos
se encuentran ubicados en la parte media de la cuenca
del río Vilcanota, abarcando un área que se extiende
desde el bosque de Maqui-Maqui en el distrito y
provincia de Calca, hasta el bosque de Abra Málaga, en
el distrito de Ollantaytambo, provincia de Urubamba,
departamento de Cusco.La gran amenaza para estos
parches es, sin duda, la presión ejercida por las
comunidades campesinas, las cuáles hacen uso del
bosque como fuente de leña y de alimento para su
ganado, así como para la ampliación de tierras agrícolas.
Como contraparte a esta situación, han surgido
iniciativas esperanzadoras, como la llevada a cabo en
Abra Málaga, la cual constituye un ejemplo de
sinergismo entre la conservación y el trabajo social.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
EL CASO DEL ABRA MALAGA
80
81
180 personas. La tierra es de propiedad
comunal e individual y el uso que se le da a
la tierra es 50% silvopastoril, 35% agrícola
y 15% forestal (ECOAN).
Clima
La zona se encuentra cubierta de nubes y
neblina la mayor parte del tiempo. Incluso
en la estación seca el bosque nuboso
permanece frío y húmedo. Por encima de
los 4 000 msnm la situación es muy
diferente, con una intensa radiación solar
en el día y frío en la noche.
1. DESCRIPCION DEL AREA
Ubicación
El bosque de Abra Málaga se localiza en el
departamento de Cuzco, provincia de
Urubamba y distrito de Ollantaytambo
(13º08 S y 72º19 O), entre los 3 600 y 4 200
msnm, a 90 kilómetros de la ciudad de
Cusco y a las faldas del nevado Kosñiriti
(Verónica), junto a la carretera Cusco
Quillabamba, abarcando una superficie de
12,5 hectáreas.
Límites
Limita por el este con las comunidades
campesinas de Willoc y Patacancha, por el
noroeste con el centro poblado de
Carrizales, y por el oeste y sur con el
poblado de Phiri. La zona presenta una
cadena de nevados, siendo el más
importante el nevado Verónica, conocido
localmente como Kosñiriti, así como un
conjunto de lagunillas en las que se
observa con frecuencia al Theristicus
branickii, Anas flavirostris y Anas
specularioides.
Vegetación y fauna
La especie dominante del bosque entre
los 3 600 y 3 900 msnm es Polylepis
racemosa, mientras que entre los 3 900 a
4 450 msnm domina Polylepis pepei
Macbride (queuña). Algo peculiar es que a
los 3 850 msnm de altura sólo se ha hallado
un individuo de Polylepis sericea
(información de ECOAN). La familia
Asteraceae es la que posee el mayor
número de especies con 32, lo que
constituye el 33,3% del total registrado.
Otros grupos importantes son las poáceas
(ichu), gentianáceas, solanáceas,
cariofiláceas, ericáceas y briofitas
(ECOAN).El bosque, de acuerdo al tipo
de vegetación, se divide en tres zonas:
Aspectos socioeconómicos
El bosque de Abra Málaga cuenta con una
población de 40 familias, siendo en total
.-Peñas: Es la parte seca del Abra. En esta
área se encuentran especies de aves
endémicas, tales como Poospiza caesar,
Cranioleuca albicapilla, Aglaeactis
castelnaudii, Asthenes ottonis, Asthenes
virgata. Dentro de la flora cabe destacar las
Ericaceae y Compositae. Hay también
pastizales y pequeñas parcelas de
ganaderos
.-El Paso: Esta área ha sido degradada por
la presencia de las comunidades cercanas,
que usan el bosque para extraer leña. Se
encuentran aves como Cinclodes aricomae,
Anairetes alpinus, Leptasthenura xenothorax
y Leptasthenura yanacensis
.-Canchayoc: Se ubica en el lado
húmedo del Abra. Los grupos de
vegetación más importantes son Gnosis,
Polylepis, Miconia, Brachyotum, Clusia y
Chusquea (bambú). De las especies de
fauna que se pueden observar acá,
destacan las aves, tales como Hemispingus
parodii, Northoprocta kalinowski y
Leptosittaca branickii. La importancia de
esta zona radica en que no ha sido
sobrepastoreada, lo cual la vuelve un
hábitat ideal para especies como Asthenes
virgata (que se conoce sólo del Perú) y
Asthenes urubambensis, otra especie
endémica. Se han observado dos a tres
parejas del raro Gallinago imperialis. El
Anairetes agraphia de distribución
geográfica limitada está en la zona
también. Los mamíferos que pueden
encontrarse acá son el oso de anteojos
(Tremarctos ornatus) y el venado (Mazama
Las Areas de Conservación Privada - ACP
EL CASO DEL ABRA MALAGA
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83
chunyi). Por debajo de esta zona del
bosque, el suelo se encuentra altamente
degradado.
En Abra Málaga, además de las aves,
podemos encontrar mamíferos como el
puma (Felis concolor), la vizcacha (Lagidium
peruvianum), algunos murciélagos y
roedores (Acodon sp), la taruca
(Hippocamelus antisensis) que se encuentra
presente en la zona de Las Peñas y que
está amenazada por la caza furtiva, el
venado de cola blanca (Odocoileus
virginianus) y el gato andino (Felis jacobita).
Dentro del bosque sobreviven más de 40
especies de aves, de las cuales el 67% son
endémicas de Perú y el 57% se encuentran
en la lista roja de especies. Dentro de las
especies más destacadas figuran:
Cinclodes (excelsior) aricomae.
En el área sólo se han registrado 3 parejas
Esta especie es especialista del bosque de
Polylepis y necesita de la presencia del
musgo, ya que es allí donde encuentra su
alimento. Al abrirse el bosque, el musgo
desaparece. Es una de las especies en
mayor riesgo (Engblom, 2002).
Leptasthenura xenothorax.
Especie endémica de los bosques de
Polylepis de Cusco y Apurímac y que se
moviliza en grupos mixtos. Puede habitar
en parches bastantes pequeños y
próximos.
Anairetes alpinus.
Se moviliza junto con Leptasthenura
xenothorax. Anidan juntos en las ramas de
Polylepis spp. y Gynoxis spp. Es una especie
común sólo en Cuzco y Apurímac. Se
mueve en grupos de tres aves, a veces con
otras especies. Parece preferir los bosques
de Polylepis por encima de los 4 000 msnm.
Se calcula que hay 20 a 30 individuos en
Abra Málaga.No se han documentado
extinciones globales de aves en esta área,
pero aproximadamente siete especies
dependientes de Polylepis están
clasificadas como en peligro, cinco como
vulnerables y nueve como amenazadas
(Birdlife 2000 en Fjeldsa).
2. AMENAZAS AL
ECOSISTEMA DE ABRA
MÁLAGA
Estudios recientes de paleobotánica
revelan que esta área se hallaba más
deteriorada que hoy, hace 3 000 años, pero
se recuperó hace 500 o 1 000 años, por
medio de un mejor uso de la tierra, para
luego deteriorarse nuevamente con la
llegada de los españoles y las nuevas
especies animales. De un modo general,
de acuerdo a los datos de Fjeldsa, la más
seria pérdida de biodiversidad, tomó lugar
en el hábitat de la puna húmeda, seguida
por la de los valles de Junín y Ayacucho.
En este último caso, la vegetación
“natural” casi no existe (ha sido
reemplazada por vegetación de puna y
arbustos de Baccharis, Colletia, y de
Dodonea en los valles superiores), y
algunas áreas están seriamente
erosionadas (Fjeldsa, 2002).
La deforestación en Abra Málaga se ha
dado más que nada por presión humana; a
saber - el pastoreo (ovinos, vacunos,
caballos, burros, llamas, alpacas) sin
ningún tipo de control, la tala y la
agricultura, la cual por el tipo de suelo que
posee esta zona conlleva a la erosión y a
posteriores deslizamientos. Al ser
achaparrados y doblados, los árboles de
Polylepis son vistos como de poca
importancia, excepto para quemarlos,
usarlos como carbón y para hacer vallas
(Fjeldsa, 2002). Para el agricultor andino la
inclusión de árboles en las actividades
agrícolas no trae ninguna ventaja
reconocible en el corto plazo (Kessler,
1995 en I. Hensen, 2002).
3. ESFUERZOS DE
CONSERVACIÓN DE ABRA
MÁLAGA
Entre los esfuerzos de conservación hay
que destacar el llevado a cabo por la
Asociación Ecosistemas Andinos
ECOAN, que gracias al apoyo financiero
de American Bird Conservancy, Fish and
Wild Life, Accao Ambiental y Ventureco,
ha ejecutado las siguientes acciones en
Abra Málaga:
!Evaluación de los bosques de Polylepis
(dasometría, flora acompañante,
ornitofauna, mapeo de los bosques y
diagnostico socio-económico de la
población aledaña al bosque).
!Forestación y reforestación con la instalación de 17 500 plantones de Polylepis
racemosa, Polylepis incana, y 2 500
plantones de eucalipto (Eucalyptus
globulus).
!Donación de leña durante 15 meses, a
36 familias de la comunidad de Abra
Málaga Ttastayoc, desde octubre del 2001
a febrero del 2003.
!Donación de 1 000 palos (1,5 m. de
altura x 3,5 pulgadas de diámetro), para
cerco para animales en la comunidad de
Abra Málaga - Ttastayoc.
!Donación de 36 cocinillas de arcilla
durante 2 años consecutivos (2002-2003).
!Seguimiento y monitoreo permanente
de las poblaciones de avifauna.
!Seguimiento y evaluación de la
fertilización (foliar y granular), evaluación
de los niveles de prendimiento y
Las Areas de Conservación Privada - ACP
EL CASO DEL ABRA MALAGA
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85
crecimiento de las plantaciones realizadas.
Asimismo han logrado que el acceso a
ciertas áreas del bosque sea restringido.
!Construcción de un salón comunal e
implementación de un programa de
educación ambiental.
!Apoyo en el proceso de titulación de las
tierras comunales.
A más de Abra Málaga, ECOAN, dirigida
por Constantino Aucca Chutas,
ha
trabajado en otras áreas de los andes
peruanos, como en Calca, donde 38
familias de la comunidad de CanchaCancha fueron beneficiadas, en
Urubamba se trabajó junto con 172
familias de la comunidad de Huacahuasi,
mientras que en Lares se hizo lo mismo
con 38 familias de la comunidad de
Quishuarani, habiendo logrado disminuir
la tala de árboles y aumentado la cobertura
vegetal por medio de la donación de
cocinas de arcilla, siembra de 4 000
plantones de queuña en Quishuarani y
5 000 plantones de eucalipto, además de
haber realizado estudios de las
poblaciones de aves.
Del mismo modo debemos mencionar los
estudios llevados a cabo por ECOAN
sobre el estado de conservación de
Leptasthenura xenothorax, Anairetes alpinus
y Cinclodes aricomae en los bosques de
Polylepis (Queuñas) de la Cordillera de
Apurímac, en los distritos de Abancay y
Lambrana, en Abancay. Gracias a este
proyecto se han beneficiado 8 familias del
distrito de Abancay, 3 de Lawani y 46 de
Chua.
Finalmente tenemos el proyecto de
conservación de los bosques de Polylepis
en la Cordillera de Vilcanota, que se llevó a
cabo en el distrito de Ollantaytambo,
beneficiándose a la comunidad campesina
de Pallata y Willoc con un total de 70 y 180
familias, respectivamente. En este lugar
se incrementó la cobertura vegetal de los
bosques y se llevó a cabo un programa de
sensibilización sobre la importancia de su
conservación.
Debido a la importancia que se ha ido
reconociendo los bosques de Polylepis, en
el año 2000 se llevó a cabo la Primera
Conferencia Internacional de Ecología y
Conservación de bosques de Polylepis, en
Bolivia.
4. MEDIDAS DE MITIGACION
Las medidas que se tomen han de estar
destinadas a disminuir la tala de los árboles
de Polylepis spp, dentro de un plan que
involucre a las poblaciones aledañas, en el
caso de Abra Málaga, la población de
Tastayoc.
Se debe incentivar la reforestación con
especies nativas. Las plantaciones de
especies exóticas no tienen valor desde la
perspectiva de la biodiversidad (Hjarsen,
1999 en Fjeldsa, 2002) y al mismo tiempo
agravan el problema de la degradación del
suelo. Una opción es tomar ventaja de las
sucesiones de vegetación naturales y hacer
acuerdos con las comunidades locales
sobre la regulación de la quema en laderas
que no sean necesarias para producción
(Fjeldsa, 2002).
Cualquier plan de reforestación debe
plantearse un número alcanzable por año,
y debe llevarse a cabo con Polylepis
racemosa y Polylepis incana. A esto, hay que
agregar que se debe buscar el reemplazo
de la leña por otros combustibles, como el
kerosene o la madera de Eucalyptus, el cual
puede ser sembrado en algunas zonas
determinadas. Se debe incorporar y
propagar Polylepis pepei en la modalidad de
brinzales. En cuanto a la quema debe
preguntarse si es que esta favorece al
rebrote de la vegetación o si más bien
empobrece el suelo, destruyendo incluso
los brotes, además deberá llevarse a cabo
sólo en áreas focalizadas, con un plan (que
puede ser quinquenal) y que evite su uso
indiscriminado.
En lo que se refiere al pastoreo de los
animales, debe plantearse el uso de cercos,
y en caso sea demasiado costoso, se puede
hacer un plan de manejo que incluya la
rotación de los campos de pastoreo y el
establecimiento de vedas en algunas
áreas. En zonas que se hallen demasiado
degradadas se debe sembrar pastos que no
tengan grandes requerimientos. Schad
(1995) demostró que es mejor mantener a
los animales en corrales y alimentarlos con
pastos y leguminosas. De este modo se
reduce la erosión del suelo, aparte se
retorna el excremento de los animales, con
lo que el suelo se recupera. Un gran
número de especies andinas en peligro
parecen beneficiarse de la vegetación
inicial de las sucesiones, donde la
competencia es baja (Kessler,1999).
El ecoturismo debe llevarse a cabo de un
modo coordinado entre las comunidades y
las agencias de turismo, de modo que se
genere un ingreso para los comuneros y se
evite un daño a la flora o a la avifauna.
Un factor de suma importancia para lograr
cualquier objetivo de conservación, es el
involucrar a las comunidades que hacen
uso del bosque, al final serán ellas quienes
tengan la última palabra. Se deben buscar
alternativas adecuadas, que no sean sólo
medidas prohibitivas en cuanto al uso del
bosque, si no opciones que les generen
ingresos, y así mismo se deben usar
algunos condicionantes, que ya han sido
usados en otras áreas rurales, como por
ejemplo el que todos aquellos
Las Areas de Conservación Privada - ACP
EL CASO DEL ABRA MALAGA
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beneficiados con estos programas se
comprometan a disminuir su consumo de
bebidas alcohólicas, un problema
arraigado en la zona. Es necesario tomar en
cuenta las estructuras sociales y buscar
fortalecerlas donde sea necesario (el Ayni,
por ejemplo). Fjeldsa menciona que la
protección desde el punto de vista legal no
tiene mucha probabilidad de éxito, si no
que tiene más significancia el enseñar a los
pobladores sobre la importancia de los
queñoales, hacerles ver que proveen
plantas como el ullucu silvestre y otros
tubérculos, que son fuente de medicina y
también retienen el agua. Dice,
igualmente, que la extinción de muchas
aves raras podría evitarse si se protegen
localidades pequeñas y específicas.
Para lograr una adecuada protección de los
restos de Polylepis se necesitan esfuerzos
extras de conservación en las montañas
alrededor de Abancay y en las cordilleras
de Vilcabamba y Vilcanota en Cuzco, para
proteger a las poblaciones existentes de
Cinclodes aricomae, Leptasthenura
xenothorax, Asthenes virgata, Scytalopus sp.,
Anairetes alpinus y Atlapetes forbesi (Fjeldsa,
2002), igualmente algunos bosques de
Polylepis deberían ser puestos bajo
protección como un todo, evitando
cualquier intervención humana (I.
Hensen, 2002).
5. DESCRIPCIÓN TÉCNICA
DEL GÉNERO POLYLEPIS Y SU
IMPORTANCIA
El género Polylepis fue descrito por
primera vez por Ruiz y Pavon en 1794 (I.
Hensen, 2002) y es sólo en recientes años,
como afirma Kessler, que se ha empezado
a prestar atención al problema de la
extinción de sus bosques. Este género de
la familia Rosaceae contiene 20 especies
(S.K.Herzog y J.Cahill, 2002) y es
endémico de los altos andes de
Sudamérica. Aparte del género Polylepis
en sí, se conoce poco de la distribución y
endemismo de la flora que acompaña a
estos bosques (E. Fernández y B. Stahl,
2002).
El género Polylepis se distribuye desde el
sur de Venezuela hasta el centro de
Argentina (Bitter, 1911; Simpson, 1979,
1986; Kessler, 1995; en Kessler, 2002). Las
diferentes especies del género se han
adaptado a una variedad de hábitats, que
varían desde los ecosistemas de bosques
nubosos perhúmedos hasta la puna
desértica del altiplano, pudiendo estar
presentes en lugares adyacentes a valles
secos con vegetación xérica (Cactus,
Prosopis, y Acacia), o por encima de los
bosques nubosos del Amazonas en las
laderas orientales de los andes (E. Yensen
y T. Tarifa, 2002).
Se han encontrado parches de Polylepis por
encima de la línea de bosque. Esta
situación que originalmente fue descrita
por Raimondi (1874), Weberbauer (1907,
1911, 1930), Herzog (1923) y Troll (1929),
fue pensada como un patrón natural, ya
que la planta se encuentra presente en
pequeñas áreas especiales como peñas,
laderas desnudas, suelo rocoso, al pie de
los nevados o en la vecindad de
asentamientos humanos. Se creyó
entonces, que la distribución era
determinada por factores microclimáticos,
tales como temperaturas locales más altas
o condiciones más húmedas (Kessler,
2002).
Fjeldsa (1992), menciona por su parte, que
en los páramos y punas de los andes,
existen pequeños bosques esparcidos en
parches, los cuales se encuentran aislados
de los bosques continuos de la ceja de
selva, hallándoseles incluso a los 5 000
msnm, siendo el grupo dominante los
árboles del género Polylepis (queñoa),
mezclados con los de los géneros Gynoxys,
Buddleia, Escallonia o de la especie Puya
raimondii y otros arbustos.
A mediados del siglo pasado, Ellenberg
propuso que la causa de la distribución era
el impacto humano (quema, pastoreo,
tala), siendo los fragmentos actuales
remanentes de bosques más grandes y,
que además, una vasta zona de las estepas
andinas corresponde a un hábitat
modificado antropogénicamente.
De acuerdo a Kessler, otro punto de vista
equivocado, es que los bosques fueron
destruidos por tala y extracción de madera,
esto sumado a que los opositores de
Ellenberg dicen que es imposible que el
hombre haya destruido áreas tan extensas.
Sin embargo, hay que tener en cuenta, que
el principal factor que puede ocasionar un
gran daño, es el fuego. Incluso las
sociedades de cazadores recolectores, con
una baja densidad de población, pueden
destruir grandes áreas de bosque por
medio del uso del fuego para la caza. Un
ejemplo de esto se dio en la Patagonia,
donde luego del exterminio de los
indígenas que usaban el fuego para cazar a
los guanacos, la población de Polylepis se
recuperó considerablemente. En los altos
andes hay evidencia de la presencia de
sociedades cazadoras recolectoras del
holoceno temprano (hace unos diez mil
años). Posteriormente, las culturas
preincas domesticaron los camélidos, lo
cual causó un sobrepastoreo y erosión del
suelo (Bowman, 1974; Earls, 1976; van der
Hammen y Noldus, 1985; en M. Kessler,
2002). De este modo se pudieron destruir
los bosques de Polylepis. Sin embargo, es
evidente, que la extracción para leña y
producción de carbón juega un rol en la
destrucción de este género, en especial en
zonas con una baja cobertura de bosque y
Las Areas de Conservación Privada - ACP
EL CASO DEL ABRA MALAGA
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una alta población humana. La pregunta
es ¿cuánto? ha sido destruido y ¿cuánto? ha
sido naturalmente deforestado. Es
igualmente, difícil distinguir las
disturbancias naturales de las humanas.
En resumen, de acuerdo a Kessler, la
distribución de Polylepis no puede ser
explicada por factores naturales y es
fuertemente determinada por miles de
años de actividad humana (M. Kessler,
2002).
Basados en análisis de mapas e imágenes
de satélites, Fjeldsa y Kessler (1996)
estimaron que los bosques de Polylepis
cubren en la actualidad, un poco más
2
de 1 000 km en Perú, estando la mayoría
de fragmentos muy dispersos y que
persisten debido a que se ubican en
lugares muy difíciles de acceder. En las
partes húmedas de los andes, donde los
bosques de Polylepis pueden ser densos y
tener individuos de 20 m. de altura, queda
menos del 1% de la cobertura potencial
(Kessler, 2002).
Se cree que el 95% de la cubierta húmeda
original ha sido eliminada en Perú, cuya
mayor parte de vegetación sobre los 3 500
msnm. en el pasado estaba constituida por
Polylepis, el cual se encontraba a alturas tan
bajas como los 2 800 msnm. (Fjeldsa y
Kessler, 1996 en A.J. Chepstow Lusty,
1998).
Factores que limitan el rango de distribución de
Polylepis
temporales y a los suelos salinos (Kessler,
1995).
Fjeldsa (1987) y Jordan (1983) sugieren
que algunas especies de Polylepis tienen
una amplia tolerancia ecológica, llegando a
crecer en los bordes del altiplano andino y
al interior de algunas zonas de la puna,
dentro de pajonales uniformes y zonas
semidesérticas. Los queñoales (como se
llama vulgarmente al Polylepis) más
húmedos y con mayor cobertura de musgo
se hallan en un suelo profundo y fértil, con
una alta diversidad de hierbas, arbustos y
enredaderas, además de una gran variedad
de insectos (Fjeldsa, 1992).
Muchas plantas de páramo y puna como
los Polylepis muestran adaptaciones a la
radiación solar, sequía estacional, noches
heladas, o periodos con nieve, hallándose
áreas boscosas a 500 o 1 000 msnm. sobre la
línea de árboles, a menudo ocultas en las
quebradas, peñas, o terrazas rocosas muy
paradas (Troll, 1959; Koepcke, 1961; en
Fjeldsa, 2002).
El límite de aridez de Polylepis
corresponde a unos 100 mm de
precipitación anual promedio (dato
obtenido entre los 4 500 4 900 msnm en el
norte de Chile, sudeste de Bolivia y norte
de Argentina) (Kessler, 1995). La mayoría
de los bosques del norte y de los andes
centrales con más de 500 mm de
precipitación anual promedio, son lo
suficientemente húmedos para permitir el
crecimiento de Polylepis (Kessler, 2002).
Polylepis tiene además un límite de
humedad, estando ausente de montañas
muy húmedas, como en los andes
orientales del Perú, Ecuador, Bolivia y en
los andes occidentales de Colombia. Se ha
sugerido que es intolerante a los charcos
Basados en los límites ecológicos
encontrados para todas las especies de
Polylepis, Fjeldsa y Kessler (1996),
sugirieron que antiguamente el género
cubría extensas áreas en el norte y centro
del Perú y sobre las colinas alrededor de la
bahía del lago Titicaca.
Avifauna asociada a Polylepis
Al parecer de Fjeldsa, la especialización
(adaptación de las aves a los árboles de
Polylepis) de las aves, se dio en los valles
semi-húmedos, que quedaron aislados por
el hielo durante las glaciaciones
pleistocénicas (congelamiento de
extensas masas de tierra durante el
pleistoceno). Las especies que se hallan
muy asociadas a bosques de Polylepis /
Gynoxis son encontradas exclusivamente
en Perú y Bolivia. Las aves especialistas de
los queñoales tienen como regla general
una distribución fragmentada y restringida
(Fjeldsa, 1992). Una vez que las aves se
especializaron para vivir en altura, se
distribuyeron por el altiplano y algunas
poblaciones quedaron atrapadas dentro de
los bosques, en el interior de la puna
(Vuilleumier en Fjeldsa, 1992). Hay 214
especies de aves asociadas libremente (no
dependen exclusivamente) a Polylepis y
que son ubicadas principalmente en Perú
y Bolivia, en áreas con lluvias moderadas
por efecto de las nieblas y que presentan
una complejidad topográfica alta, mientras
que 51 especies tienen un nivel mayor de
asociación a Polylepis (una dependencia
moderadamente alta) y muestran un
patrón más restringido, es decir se
movilizan menos; con muy pocas especies
en el norte de Perú e incluso con menos
especies a lo largo de las laderas de los
andes de Perú y Bolivia. Los números más
grandes de especies de aves son hallados
en la parte alta del valle de Marañón y de la
Cordillera Blanca en dirección hacia la
Cordillera Occidental de Lima, así como
en los valles montanos de Apurímac y
Cuzco, y a lo largo del lado norte de
Cochabamba.
Las 14 especies especialistas (exclusivas)
de Polylepis tienen dos picos absolutos
poblacionales (mayor densidad de
población), uno en la Cordillera Blanca y
otro en Apurímac / Cuzco. Este patrón
muy agregado o restringido, sugiere que
fue sólo en estas dos zonas, que los
Las Areas de Conservación Privada - ACP
EL CASO DEL ABRA MALAGA
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bosques de Polylepis estaban lo
suficientemente aislados de otros tipos de
bosques en el pasado, lo cual permitió una
especialización. Esto se pudo dar durante
los periodos glaciares del Pleistoceno
(ciclos desde hace 1,8 millones de años
hasta hace diez mil años), cuando muchas
cordilleras estaban cubiertas de hielo y las
zonas con Polylepis se encontraban aisladas
del bosque nuboso del este, en la región de
los valles interandinos (en Apurímac /
Cuzco y el valle superior del Marañón), o
entre la cordillera glaciar occidental y el
desierto costero de Perú (Fjeldsa, 1993).
Los 14 especialistas genuinos, que sólo
son raramente registrados lejos de Polylepis
son: Chalcostigma stanleyi, Upucerthia
serrana, Cinclodes aricomae, Leptasthenura
pileata, Leptasthenura xenothorax,
Leptasthenura yanacensis, Asthenes
(dorbignyi) arequipae, Grallaria andicola,
Anairetes alpinus, Poospiza alticola,
Poospiza garleppi, Xenodacnis parina,
Oreomanes fraseri, y Carduelis crassirostris
(Fjeldsa, 2002). El valor máximo de
endemismos se descubre en el lado sur de
la cordillera de Vilcabamba, entre Abancay
y Machu Picchu.
La relación entre endemismo y
estabilidad ecológica y climática, implica
que las áreas endémicas deben ser relictos
que sobrevivieron sólo en lugares donde
las condiciones medioambientales eran
predecibles año a año. Parece que los picos
de endemismos se ubican a menudo
adyacentes a áreas que han estado
densamente pobladas por humanos
durante milenios.
Como dato, se menciona, que en
queñuales mayores a 5 ha. y barrancos con
franjas de matorral se pueden encontrar 35
a 40 especies de aves. Ya sea en queñuales
grandes, áridos y arbustivos, así como en
pequeños y aislados, se hallan al menos 25
especies de aves. La clave es la calidad del
hábitat, más que el tamaño y aislamiento.
N. Collar considera en peligro de
extinción a las siguientes aves adaptadas a
los queñuales: Nothoprocta taczanowskii,
Metallura baroni, Cinclodes (excelsior)
aricomae, Zaratornis stresemanni, Anairetes
alpinus, Conirostrum tamarugense, Saltator
rufiventris, Poospiza garleppi, Poospiza
rubecula y Poospiza alticola. Todas estas
especies son endémicas y restringidas a
pequeñas áreas (Fjeldsa, 1992).
Importancia y beneficios de conservar
los bosques de Polylepis
Las áreas de endemismos, como los
bosques de Polylepis de Abra Málaga,
deben ser áreas prioritarias para la
conservación, ya que coinciden con zonas
ecológicamente estables, donde las
comunidades bióticas han permanecido
en el lugar por largos periodos de tiempo,
incluso durante los pasados cambios
climáticos. Las áreas estables, que han
servido como refugio durante los cambios
climáticos pasados, deben ser capaces de
resistir los cambios futuros (E. Yensen y T.
Tarifa, 2002).
Hay varias razones por la que los bosques
de Polylepis deben ser conservados:
Son relictos de un tipo de vegetación que
se ubicaba ampliamente distribuida a lo
largo de los andes, y que constituye el
hábitat de varias especies en peligro de
extinción.
La estructura de los árboles de Polylepis
(nanófilos), con muchas envolturas
foliares viejas y con corteza gruesa, áspera
y muy laminada, la que permite proveer de
diferentes nichos alimentarios a las aves
(Fjeldsa, 1992). Fjeldsa menciona que son
más de 100 las especies de aves que
acuden a los “queñuales”, entre visitantes
y oportunistas (e.g., el colibrí de ceja de
selva) y aproximadamente entre 15 a 20 los
especialistas. Además, están las aves de las
zonas adyacentes, que van a alimentarse
en los límites de los queñuales, en el
interior de bosques más abiertos,
pudiendo usar las copas densas de los
árboles como refugio (reposo y anidación).
Las aves de hábitats abiertos de la puna,
bajan a los valles adyacentes en periodos
fríos, y las especialistas se quedan en los
queñuales, pudiendo realizar migraciones
al interior del bosque. Casi nunca se han
visto individuos de Leptasthenura
xenothorax, Anairetes alpinus y Oreomanes
fraseri fuera de los queñuales, lo cual nos
hace pensar en la importancia de conservar
estos fragmentos. La mayor diversidad de
aves se encuentra en las partes húmedas
de la puna, donde hay una gran
abundancia de Polylepis con epífitos.
En el caso de los mamíferos, especies
como el Puma concolor (puma), Tremarctos
ornatus (oso de anteojos), Pseudalopex
culpaeus (zorro), e Hippocamelus antisensis
(taruca), usan el bosque como lugar de
alimentación y para ocultarse (Azurduy y
Velez, 2001; Tarifa y Yensen, 2001 en E.
Yensen y T. Tarifa, 2002). El valor de
Polylepis como hábitat para pequeños
mamíferos, parece estar relacionado al tipo
de cobertura de suelo, y un bosque en
buena condición puede proveer alimento
y refugio, y de este modo aumentar las
poblaciones de mamíferos pequeños.
Los bosques de Polylepis son un gran
banco de recursos genéticos, como el caso
de las papas silvestres (Hijmans y
Spooner, 2001 en Fjeldsa, 2002), las cuales
puede tener el potencial para lograr la
resistencia a heladas de los cultivos de
tubérculos. Los excelentes suelos,
especialmente en los bosques más
Las Areas de Conservación Privada - ACP
EL CASO DEL ABRA MALAGA
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conservados y húmedos de Polylepis, son
una buena base para la agricultura a
pequeña escala, donde los cultivos al
interior del bosque son protegidos contra
el viento y la helada (Fjeldsa, 2002).
Los bosques de Polylepis pueden ser el
centro de endemismos de varios
parentales de cultivos andinos, como
Ullucus tuberosus (ullucu), el cual sólo se
encuentra en un bosque de Polylepis
ubicado en Cuzco, camino a Abancay
(Fjeldsa y Kessler, 1996 en A.J. Chepstow
Lusty, 1998).
También, hay que agregar que los bosques
de Polylepis proveen un amplio rango de
plantas para uso medicinal (Hensen, 1991
en Fjeldsa, 2002). Las hojas de Polylepis
son usadas en medicina contra la tos,
reumatismo, y artrosis (Girault, 1984 y
Killeen, 1993 en I. Loayza, L. Vilaseca, D.
Lorenzo, E. Dellacassa, 2002), además la
resina se dice efectiva contra las
enfermedades urinarias (De Lucca y
Zalles, 1992 en I. Loayza, L. Vilaseca, D.
Lorenzo, E. Dellacassa, 2002) y como
expectorante (Montalvo en E. Yensen y T.
Tarifa, 2002).
Los árboles de Polylepis necesitan agua,
pero a diferencia del eucalipto, generan a
su vez agua, ya que a menudo crecen en
laderas envueltas de niebla y gracias a su
densa estructura foliar microfílica pueden
succionar el agua de la atmósfera (Troll,
1959 en Fjeldsa, 2002). El agua es
almacenada, entonces, en el suelo fértil
que típicamente se forma en los bosques
densos y maduros de Polylepis. A menudo
se hallan bofedalesy pozos con agua limpia
debajo de los bosques de Polylepis. Hay
alguna especie de consenso, en cuanto a
que los queñuales ayudan a mantener la
humedad y, que la pérdida de esta
vegetación aunada a la siembra de
Eucalyptus lleva a la sequía (Mariscal y
Rist, 1999 en Fjeldsa, 2002). Los bosques
de Polylepis crean su propio microclima,
retardan la escorrentía, y mantienen la
capa de agua (Fjeldsa, 1995 en E. Yensen y
T. Tarifa, 2002).
Como mencionan Mariscal y Rist (1999),
otro beneficio de los bosques es que los
árboles generan un suelo fértil y profundo.
La hojarasca de Polylepis se descompone
rápidamente para formar suelo. Donde
han desaparecido los árboles, el suelo
aparece compactado, seco y delgado. Se ha
logrado el crecimiento de avena y cebada
cerca de Polylepis incana. Los árboles de
Buddleia coriacea y Polylepis incana
aumentan la materia orgánica en el suelo e
incrementan el rendimiento de avena y
cebada plantados al interior, en dos a seis
veces (Casanova y Castro, 1988 en E.
Yensen y T. Tarifa, 2002).
El nivel de vida de las comunidades puede
ser mejorado al permitir que la vegetación
se regenere en áreas adyacentes a estas. La
densa vegetación de Polylepis en los riscos
y laderas empinadas, es exactamente lo
que las comunidades necesitan para tener
una reserva asegurada de agua y para
protegerse de los deslizamientos de tierras
(huaycos). Los encargados de los
proyectos deben considerar si los
incentivos, para usar la tierra de modo que
se permita la regeneración de la
vegetación natural, son más baratos (en el
largo plazo) que hacer continuas
reparaciones de pistas, o traer agua de
reservas lejanas. (Fjeldsa, 2002).
Las Areas de Conservación Privada - ACP
LOMAS DE TAIMARA
95
El Arrayán
(Myrcianthes ferreyrae).
Lomas de
de
Lomas
Taimara:
Taimara:
su último hogar
Las lomas son formaciones vegetales propias de la
costa Peruana, las cuales surgen pero alterando la
monotonía del desierto, durante la llegada de las
nieblas de invierno. La garúa, una lluvia suave típica
de la costa, es causada por la interacción de factores
como la presencia de la Corriente de Humboldt de
aguas frías, los vientos alisios, la ocurrencia del
anticiclón del Pacífico y la presencia de la Cordillera de
los Andes. En el verano la humedad se evapora, y el
desierto se muestra tal como lo conocemos. Durante el
invierno, que dura de Junio a Noviembre, la tierra
costera está ligeramente más fría que los vientos
cargados de humedad al cruzar sobre la corriente fría se
condensan y forman las neblinas, que traen el frío y la
humedad necesaria para que rebrote la vida en medio
de la aridez. Cuando la niebla colisiona con las colinas
costeras, la temperatura disminuye un poco más,
pudiendo caer una ligera garúa. Dependiendo de la
cantidad de humedad traída por la garúa, y las
ocurrencias aisladas de lluvias, los límites de las lomas
varían de año a año.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
LOMAS DE TAIMARA
96
97
de la costa, desde el grado 6 hacia el sur,
esté cubierta de nubes durante el
invierno. En este lugar, donde las nubes
con una altura de 400 a 1 000 msnm tocan
los cerros, existe una neblina persistente
que da origen a una flora rica que es la base
de las comunidades vitales de las Lomas.
Se distinguen dos tipos básicos de Lomas:
Lomas arenosas y Lomas rocosas.
Las lomas son las únicas comunidades
vitales de la costa centro y sur que tienen
un marcado cambio de estación. En el
verano aparecen como un desierto, en el
invierno como un jardín de flores y en la
primavera se parecen a estepas (Aguilar,
1985).
El Desierto Peruano es una franja
estrecha de hábitat superárido, confinado
a la costa y, que se extiende por casi 2 000
km (5°-18° S), cubriendo
aproximadamente 140 000 km² o el
equivalente al 11% del Perú.
Este desierto presenta una unidad
geomorfológica característica constituida
por un conjunto de cerros, colinas y lomas
bajas, así como por ramales de la porción
inferior del flanco occidental andino, los
cuales irrumpen en el mar. Al principio se
decía que la Costa Peruana era un desierto
con una vegetación muy pobre que
consistía en las lomas, con una mayoría de
especies anuales y de un bioma en el norte
formado por especies de algarrobo, sapote
y otras de menor cuantía. En la actualidad,
gracias a los logros obtenidos en los
últimos 30 años se tiene otro concepto.
Con las exploraciones relativamente
recientes, en toda la Costa, se han
descubierto numerosas especies;
demostrándose también que la mayor
parte de las especies de estructura
herbácea son perennes y que sólo una
minoría forma el estrato anual, cuyo ciclo
vegetativo se cumple en un año o menos.
La influencia de la corriente marina del
Perú es la que ocasiona que la mayor parte
En El Perú hay 40 localidades en el
desierto que soportan vegetación,
incluyendo las islas de Las Viejas, San
Gallán y San Lorenzo. El área actual
cubierta por vegetación, incluso durante
periodos de humedad optima y máximo
desarrollo, es probablemente inferior a
2 000 km².
Las lomas constituyen biocenosis
particulares que se presentan entre los 9°
a 18° de latitud sur. Son una zona
ecológica típica del Perú y están definidas
por la presencia de estribaciones andinas
cercanas al mar que no pasan de los 1 200
msnm, con condiciones ecológicas
especiales, que determinan una presencia
de flora periódica y peculiar en el contexto
nacional. Desde el punto de vista
ecológico constituyen una "biocenosis
terrestre cercana al mar" o una "biocenosis
de vegetación de neblina".
1. DESCRIPCIÓN DEL ÁREA
Ubicación
Las lomas de Taimara y Atiquipa se
encuentran entre los 74°18'55"-74°24'49"
de Longitud Oeste y 15°42'42"15°50'00"
de Latitud Sur, en el distrito de Atiquipa,
provincia de Caravelí, departamento de
Arequipa. Estos van desde el litoral
marítimo a 0 msnm, hasta las elevaciones
del cerro Cahuamarca, a 1 297 msnm,
abarcando una extensión de 15 km tierra
adentro del litoral.
En 1999, la comunidad de Atiquipa tenía
una población de 513 habitantes, quienes
son dueños de 17 625 ha, incluyendo
10 000 del núcleo de las lomas. La
población está distribuida en 3
asentamientos: Atiquipa, Santa Rosa y
Agua Salada. Las poblaciones de Santa
Rosa y Agua Salada se dedican a la
recolección de leña y tara, así como la
crianza de caprinos o chivos, mientras que
la población de Atiquipa se dedica a la
agricultura. La tierra es de propiedad
colectiva, excepto 70 ha. de tierra agrícola,
que son de uso individual.
Las lomas se ubican dentro de lo que se
conoce como la Ecorregión Desértica de
Las Areas de Conservación Privada - ACP
LOMAS DE TAIMARA
98
99
Sechura, una banda que se extiende a lo
largo de las costas de Perú y Chile. Es una
de las áreas más secas del planeta, donde,
aparte de los pequeños ríos que fluyen
desde los andes, las lomas son la única
fuente de agua. Durante años normales
cubren unas 10 000 ha. mas, durante el
evento del Niño su superficie se amplió a
30 000.
El complejo de lomas en la parte sur del
Perú está formado por Acari, Tanaca, y
Aquino, pero ahí no hay arrayán. De
acuerdo a lo que refieren investigadores
como Ramón Ferreyra, antes había una
banda continua de vegetación entre los
400 y 800 metros de altura
La cobertura vegetal varía entre un 50 a
75% del área, se observa una baja
densidad de flora, la cual se caracteriza por
la presencia de la especie arbórea,
Myrcianthes ferreyrae, (arrayán) la cual es
endémica. Aparte de ésta especie, hay
escasos individuos de Caesalpinea spinosa,
Acacia macracantha y Carica candicans;
entre las especies arbustivas, podemos
encontrar la Grindelia glutinosa, la cual
domina las áreas de laderas y lomadas
donde no existe arrayán, además están
presentes el Croton ruizianus, Nicotiana
paniculata, Duranta armata, Senecio
mollendensis y Heliotropium lanceolatum; las
especies herbáceas que podemos
encontrar son Argemone mexicana,
Hypericum silenoides, Mimosa albida,
Nolana spatulata, Salvia tubiflora, entre
otras.
Suelos
Los suelos son arcillosos y ligeramente
pedregosos. El relieve topográfico es
accidentado, con presencia de laderas de
fuerte gradiente. Es el único sitio en la
costa con un suelo tipo potsol, el cual es
considerado un buen suelo agrícola. En
algunos sitios de Atiquipa el potsol tiene
un potencial de 50 - 60 centímetros; luego
del cual hay arcilla que forma una especie
de esponja, que llega hasta los 4 a 5 metros
de profundidad.
3. HISTORIAL DEL ÁREA Y
AMENAZAS ACTUALES
Hasta el siglo pasado las lomas de
A t i q u i p a y Ta i m a r a c u b r í a n
aproximadamente 45 000 ha., de las cuales
el bosque comprendía más de 15 000 ha.
siendo la superficie agrícola de 2 600 ha.
Hasta mediados del siglo XX, los
habitantes locales emplearon una
estrategia efectiva de manejo comunal,
maximizando el uso del agua y la tierra.
Los bosques de mayor elevación eran
protegidos, y el agua derivada de la niebla
era encausada por medio de canales de
irrigación para proveer de agua a la tierra
cultivada en los pisos inferiores. Se llevó a
cabo la técnica de agricultura en terrazas y
multicultivos, así como un manejo
familiar y tradicional de los recursos.
Entre la década del 50 y 60 del siglo
pasado los pobladores empezaron a notar
que el bosque se estaba muriendo.
Mencionan que hubieron “lluvias
calientes”. Hay quienes han conjeturado
que en esa década comenzó la actividad
de la refinadora de cobre Southern al sur,
sin embargo la distancia es de unos 300
km Los patriarcas
que quedan en
Atiquipa recuerdan con mucha nostalgia
cuando iban a recolectar el fruto del
arrayán.
El sobrepastoreo y la tala han reducido las
lomas boscosas en 90% (hasta 1 500 ha.) y
las lomas herbáceas en un 75% (hasta
8 000 hectáreas ). Ferreyra (1953) mencionaba que en pocos lugares la
vegetación de lomas llegaba hasta el mar,
como acontecía en Atico y Chala.
El agua es usada sin la intervención de
ninguna entidad estatal, al contrario de lo
que sucede en el resto del país. lo que
lleva a la explotación de otros recursos.
Árboles tales como el chiri-chiri,
huarango, arrayán y cascarilla, los cuales
son los principales recolectores de agua
están desapareciendo de los últimos
parches. Este proceso acelerado de
degradación ha removido muchas
especies de plantas nativas, reduciendo la
humedad captada de la niebla y por ende
disminuyendo la productividad del
ecosistema de lomas y la disponibilidad
de agua para la agricultura. La comunidad
sigue siendo pobre, en la actualidad se
siembran olivos y cultivos de
susbsistencia (papa, camote, maíz, frutas,
cereales y vegetales). Por la falta de agua
las tierras agrícolas se han visto reducidas
a sólo 70 ha. A estos problemas se debe
sumar el sobrepastoreo por vacunos y
cabras. La reducción de la cobertura
vegetal ha conllevado a que haya menos
agua fresca para beber. Plantas endémicas
tales como Myrcianthes ferreyrae; Nolana
spathulata, Nolana aticoana, Nolana
volcanica, Nolana pilosa, Nolana
spergularoides, Malesherbia arequipensis,
Viguira weberbaueri, Croton alnifolius,
Nicotina paniculata, Tiquila simulans,
Verbena clavata, y Pygmaeocereus familiaris
están en peligro de desaparecer del área,
al igual que variedades silvestres
Las Areas de Conservación Privada - ACP
LOMAS DE TAIMARA
100
101
(Solanum, Lycopersicum, Cucumis y
Passiflora ) y especies restringidas como
Solana weissiana, Gaya sp. y
Quinchamalium lomae (extraído del GEF).
4. IMPORTANCIA DE LAS
LOMAS DE TAIMARA
Taimara es el remanente más grande de
Myrcianthes ferreyrae, donde quedan unas
50 ha., mientras que en las lomas de
Atiquipa quedan 4 parches de arrayán de
menos de 1 ha cada uno.
A esto hay que añadir que las lomas de
Taimara y Atiquipa son las únicas que
presentan un bosque relicto de tara
(Caesalpinea spinosa) de extensión
apreciable (unas 1 500 ha.), las cuales
tienen agua permanente en los
manantiales ubicados en las principales
quebradas.
Debajo del bosque de arrayán, entre
los 1 200 y 1 800 pies sobre nivel del mar,
las lomas consisten primariamente de
arbustos y hierbas, muchos de los cuales
son raros y se encuentran en peligro de
extinción: Nicotiana knightiana, un
pariente del tabaco doméstico y una
fuente potencial de germoplasma
resistente a los virus, hongos y nemátodos;
Monnina arenicola, una hierba endémica
de las lomas; y una especie que no ha sido
todavía descrita (hierba leñosa con
botones amarillos naranjas).
Las lomas de Atiquipa y Taimara son los
remanentes más grandes de un
ecosistema único, conformando uno de
los componentes más importantes de uno
de los desiertos más secos del mundo. Las
lomas de Atiquipa y Taimara contienen
hábitats específicos que no se hallan en
ningún otro lugar del mundo. Su tamaño y
aislamiento biogeográfico por más de cien
kilómetros de desierto, han hecho que las
lomas de Taimara y Atiquipa posean la
mayor tasa de endemismos (38 especies) y
diversidad de este tipo de ecosistemas,
incluyendo 6 especies que no existen en
ningún otro lugar (a decir 4 especies de
plantas: Myrcianthes ferreyrae, Nolana
inflata, Nolana aticoana, Pygmaeocereus
familiaris; y dos especies animales:
Calomys sp. y una nueva especie de
alacrán, Orobothriurus sp.), así como
adaptaciones e interacciones bastante
p
eculiares, tanto de la fauna como de la
flora.
Las lomas de Atiquipa y Taimara abarcan
unas 10 000 ha. en años normales y más de
30 000 en años húmedos o con presencia
del evento del Niño. Son las únicas que
presentan un bosque relicto de tara
(Caesalpinea spinosa), de unas 1 500 ha. En
estas lomas se han encontrado 240
especies de plantas distribuidas en 147
géneros y 50 familias, con 44 endemismos.
Destacan las de Nolana, Caesalpinea,
Duranta, Citharexylum, Carica,
Heliotropium, Croton, Myrcianthes y
Malesherbia. Además hay 103 especies
distribuidas en 83 géneros y 44 familias,
con 22 especies de vertebrados
endémicos. Son las únicas lomas en las
que se presenta el arrayán (Myrcianthes
ferreyrae) que es un árbol endémico de las
lomas de Atiquipa y Taimara. En la
actualidad sólo quedan en Atiquipa 4
parches de arrayán de menos de 1 ha cada
uno, y otro de unas 50 ha. en las lomas de
Taimara. En las lomas se ha encontrado
un roedor del género Calomys, que es una
nueva especie para la ciencia, además una
especie de alacrán Orobothriurus sp,
relacionado con Orobothriurus alticola,
Orobothriurus paessleri y Orobothriurus
curvidigitus (Ochoa y Acosta, 2002); al
parecer ambas especies son endémicas.
Así mismo se puede encontrar al crustáceo
de agua dulce Pseudotelphusa, el cual
tiene una distribución rarísima, ya que se
le ubica en Cajamarca y de allí se produce
un salto geográfico hasta Atiquipa.
Las lomas de Atiquipa y Taimara
contienen igualmente una importante
agrobiodiversidad. El área ha soportado la
ocupación humana por casi 6 000 años y
contiene muchas variedades de cultivos
tales como papa (Solanum spp.), tomate
(Lycopersicum spp.), ají (Capsicum spp.),
calabaza (Cucurbita spp. y Cyclanthera
pedata), camote (Ipomoea batatas),
granadilla (Passiflora spp.) y achira (Canna
edulis), pudiendo tener también parientes
silvestres desconocidos de estos cultivos.
Las lomas de Atiquipa y Taimara han sido
un centro de domesticación de especies
para la agricultura, y de
aprovisionamiento de proteínas de origen
animal a través de la caza de la fauna
silvestre y por su cercanía al mar, de la
pesca de especies marinas. El ecosistema
funcionaba eficientemente: los bosques
captaban aguas de las neblinas, que
formaban manantiales de los cuales
nacían arroyos que corrían por las
quebradas de Parcanajón, Yactapara,
Infiernillo, etc., y proporcionaban agua
para la superficie cultivada de la
comunidad. La estrategia de
complementación de pisos altitudinales
era apropiada, logrando articular el litoral
(0 a 50 msnm), las lomas herbáceas (200400 msnm), el bosque de lomas (700-1 200
msnm) y la zona de neblina (400-1 200
msnm). Hubo un desarrollo de áreas
agrícolas, de 50 a 400 msnm, con sistemas
de riego, y un sistema de asentamientos
administrativos, religiosos y de vivienda,
adecuadamente distribuidos. Esta
complementariedad altitudinal estaba en
función a la búsqueda del equilibrio
ambiental de las lomas. En Atiquipa, al
igual que en el resto de las lomas costeras,
la conquista española cambió el estilo de
uso de los recursos.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
LOMAS DE TAIMARA
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103
Quedan solo tres bosques de Myrcianthes
ferreyrae en el mundo, siendo el de las
lomas de Taimara el más grande (Shirley
Keel). Ningún otro bosque de lomas tiene
más de 100 ha.
Las lomas son ecosistemas únicos
originados por la niebla; son ubicados a lo
largo de la costa del Perú y del norte de
Chile. En todo el mundo quedan solo
100 000 ha. de lomas, siendo las más
grandes y diversas las de Atiquipa y
Ta i m a r a . L a s l o m a s d e b e n s u s
características a diferentes factores, tales
como su ubicación, altitud, presencia de
vientos. Aparte del valor ecológico, hay
que agregar el valor cultural de las lomas,
donde se han hallado restos
arqueológicos.
5. ESFUERZOS DE CONSEVACIÓN Y MEDIDAS A TOMAR
Las lomas de Taimara son propiedad de la
familia Ruiz Pacheco, quién estaría
dispuesto a transferir la propiedad para
quienes pudieran interesarse en su
protección. El comité ejecutivo de la
comunidad rural de Atiquipa ha tomado
algunas medidas para mejorar el manejo
de los recursos, tales como un control del
sobrepastoreo, restringiendo el pastoreo
en las áreas bajas y áreas altas
seleccionadas; un control de la
deforestación restringiendo la saca de leña
y limitando la extracción de agua fresca de
áreas a las que tienen acceso los pastores,
de modo tal que se permita la
regeneración de las plantas.
Se debe, así mismo promover el uso de
nuevas tecnologías tales como sistemas
atrapanieblas, que ya ha sido probado y
sistemas de irrigación presurizados.
6. DESCRIPCIÓN TÉCNICA
DEL ARRAYAN
ciertos pozos.
La municipalidad de Atiquipa y el comité
ejecutivo, con el apoyo del 80% de los
residentes de la comunidad han ingresado
a un programa de conservación, apoyados
por diversas instituciones (IRECA,
UNSA, REDA, ILDER , y PNUD, NGS,
la Comunidad Europea, la Embajada del
Reino Unido).
Lo que busca el proyecto es producir un
aumento del 25% del área actual de las
lomas boscosas, así como producir un
manejo silvicultural sostenible.
Para lograr estos objetivos se debe
resembrar con especies nativas: arrayán
(Myrcianthes ferreyrae), divi-divi
(Caesalpinea spinosa), cascarilla (Remijia
peruviana Standley), chamo cruz (Cestrum
auriculatum), huarango (Acacia
macracantha) y algarrobo (Hymenaea
courbaril). Esto debe ir acompañado de
otras medidas como la instalación de un
cerco y vigilancia de guardaparques en las
Existen 40 especies, de las cuales en el
Perú hay 21. Myrcianthes ferreyrae,
“arrayán”, solamente se encuentra en
Chala, en las lomas de Atiquipa, lomas de
Taimara y lomas de Chala viejo.
El género Myrcianthes constituye un paleo
endemismo que en el pasado formaba una
franja continua entre los 500 y 2 000
msnm; con una estructura de dosel
continuo, lo cual es algo excepcional en un
desierto. El género tiene 2 especies en el
Perú, el Myrcianthes de Chala, que
parece ser que, hace al menos unos 20 000
años ha sido el único bolsón. El último
parche que queda es el de Taimara, siendo
el único sitio donde se encuentran 40 a 50
árboles por ha. en el mejor de los casos.
El arrayán tiene semillas recalcitrantes,
las cuales son difíciles de propagar. Deben
sembrarse inmediatamente se observe
que estén maduras. El fruto es como una
uva y adentro tiene una semilla parecida a
una pequeña nuez, tiene dos lóbulos y de
cada uno de ellos salen dos embriones,
pero al final sólo se establece una plántula.
El porcentaje de germinación es de 20 a
30%, lo que explica porque no hay
regeneración continua, es decir, produce
muchas semillas pero con baja viabilidad.
Si a esto se aúna el pastoreo se puede
entender el grado de deterioro de este
ecosistema (com. pers. de Percy Jiménez).
Este bosque ha quedado reducido a
relictos de Arrayán, en otra época fue
dominante y abundante en la zona, pero
ahora se encuentra en proceso de
desaparición pues a lo largo de ésta
formación se pueden contar cerca de 250
individuos, la mayoría viejos, con ramas
muy débiles; se aprecia también el doble y
hasta el triple de árboles caídos y secos por
acciones desconocidas o "tocones" de
algunos que han sido cortados. En otras
épocas los frutos de éste árbol eran
recogidos y consumidos por los lugareños.
El arrayán tiene un gran potencial de uso,
pues además de ser un buen captador
natural de agua de las neblinas, produce
abundantes y agradables frutos que
pueden ser usados para consumo directo o
para fabricar licores y mermeladas,
asimismo en sus hojas alberga esencias
aromáticas y aceites que pueden tener
aplicaciones cosméticas y farmacéuticas.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
HUMEDALES DE PUERTO VIEJO
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Humedales
Humedales
dePuertoViejo
dePuertoViejo
La costa peruana se extiende por 3 079,5 kilómetros de
extensos desiertos y valles, bañados por las aguas del
océano Pacífico y la proveniente de los ríos y lagunas.
Es así que en algunas zonas se forman los llamados
Humedales, que no vienen a ser sino producto de la
afloración de aguas subterráneas que muchas veces se
mezclan con las aguas de la mar. Dentro de éstos se
destacan por su importancia los Manglares de Tumbes,
el Estuario de Virrilá, las Lagunas del Medio Mundo,
los Pantanos de Villa, los Pantanos de Puerto Viejo, la
Reserva Nacional de Paracas y las Lagunas de Mejía.
La importancia de los pantanos de Puerto Viejo, al
igual que el resto de ecosistemas similares, radica en
que proveen de hábitats permanentes a muchas aves,
así como de estaciones de descanso y alimentación
para algunas aves migratorias.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
HUMEDALES DE PUERTO VIEJO
106
107
dulce, menores de 8 hectáreas,
pantanosa, zona cenagosa).
zona
El CDC-UNALM, considera a los
pantanos y humedales de la Costa Central
y Sur como una comunidad lacustre
salobre, así como un humedal emergente
persistente (laguna costera salobre con
totoral).
Historial del área
Durante la época prehispánica el área
estuvo ocupada por los pobladores de la
zona cercana de Chilca. Durante este
periodo, los humedales se constituyeron
como una especie de estuario, de modo
que sus habitantes implementaron pozas
para retener a los peces.
1. DESCRIPCIÓN DEL AREA
Ubicación
Los humedales de Puerto Viejo se
localizan al sur del departamento de
Lima, en el distrito de San Antonio,
provincia de Cañete, entre los kilómetros
69 y 71 de la Panamericana Sur. Sus
coordenadas geográficas son 77º35'20'' O y
11º11' 26'' S.
La extensión de los humedales de Puerto
Viejo es de aproximadamente 350 ha.
Clasificación
En el mapa ecológico del Perú (ONERN
1976), los humedales se encuentran
dentro de la llamada Zona de vida de
Desierto Desecado Subtropical. De
acuerdo a Udvardy (1975), Puerto Viejo
pertenece a la Provincia Biogeográfica del
Desierto Pacifico.
Según la clasificación de Humedales de la
Convención RAMSAR, Puerto Viejo
pertenece a un Humedal Costero de tipo
07 (lagunas y bañados costeros de agua
salobre ó salada) y 13 (lagunas de agua
Durante el siglo XX, hubieron intentos de
usar la zona como área de cultivo,
intentando para esto, aprovechar los
gramadales, finalmente esto no prosperó,
debido probablemente a la salinidad de los
suelos.
En la actualidad, debido al crecimiento
demográfico, las poblaciones se han ido
desplazando cada vez más al sur, ya sea en
busquedas de vivienda o de
esparcimiento. Esto ha llevado a que este
tipo de ecosistemas se vean rodeados de
construcciones, lo que los ha puesto en
peligro.
Tenencia de tierras
El humedal es de propiedad privada y
estatal. Abarca los distritos de San Antonio
y Chilca en Cañete.
Hidrología
El área consta de un espejo de agua que
constituye el núcleo y de alrededor de
otros 7 espejos permanentes o temporales
(A. Tello, com. pers. 2004).
Los humedales de Puerto Viejo se
encuentran influenciados por el nivel de la
napa freática, la cual se eleva durante los
meses de invierno. Su ciclo hidrológico es
común con el del río Mala (que recarga los
flujos) y los canales de irrigación de San
Andrés, de donde se infiltra el agua del
subsuelo. El humedal ve disminuido su
caudal durante los meses de verano
(Diciembre a Marzo) y llega a su máximo
nivel durante el mes de Julio.
El área de influencia del humedal abarca
la cuenca del río Mala y las áreas de cultivo
de San Andrés, que originan el régimen
hidrológico en el humedal. Se sabe que en
épocas pasadas el mar ingresaba a la zona al
haber elevaciones de la marea. (A. Tello,
com. pers. 2004).
Clima
Sigue el mismo patrón de la costa central
del Perú. Las precipitaciones totales
mensuales llegan a un promedio anual de
Las Areas de Conservación Privada - ACP
HUMEDALES DE PUERTO VIEJO
108
109
por microalgas y macrofitas. Dentro de las
macrofitas hay plantas sumergidas como
las de la familia Charophyta, Ruppiaceae,
y Potamogetonaceae , flotantes
(Lemnaceae) y anfibias (Typhaceae o
totorales, Cyperaceae o juncales, y
Scrophulariaceae).
Fauna
Mamíferos
Entre los mamíferos se puede observar el
zorro costeño (Pseudalopes sechurae),
especie que baja de los cerros aledaños
para alimentarse en los pantanos.
60 mm. La temperatura media anual es de
19,0 grados Celsius y la humedad relativa
fluctúa entre 85 y 99%.
(Distichlis espicata). Hay algunas
suculentas, como la patita de alacrán
(Salicornia fruticosa), la
verdolaga
(Sesuvium protulacastrum).
El Totoral
Acá se encuentran especies hidrófilas. Las
especies que lo conforman son las totoras
(Thipha angustifolia) y (Schoenoplectum
californicus) y el junco ( Scirpus
americanus).
Aves
Los datos acá presentados fueron
obtenidos por Alejandro Tello y Gunnar
Engblom entre 1996 y 2002. Se han
registrado 108 especies, distribuidas en 37
familias. El total de las especies
representa el 35% de las aves registradas
para el departamento de Lima y el 6% de
las aves registradas para el Perú.
La vegetación acuática está constituida
Como fauna propiamente endémica del
Flora
La flora es xerohalófila. Entre las
comunidades vegetales presentes en el
humedal podemos mencionar:
El Gramadal
Compuesto por especies halófilas. La
especie indicadora es la grama salada
Peces
Se hallan Aequidens ruvulatus (Mojarra),
Cichlasoma nigrofasciatum (Mojarra),
Oreochromis niloticus (Tilapia), Tilapia
rendalli (Tilapia), Mugil cephalus ( Lisa),
Poecilia sp, (Mollis), y
Xiphophorus
maculatus (Platys).
país se encuentra el Minero peruano
Geositta peruviana y alrededor de 5 o 6 aves
endémicas de la corriente fría de
Humboldt (A. Tello, com. pers. 2004).
Hay que mencionar que 57 son especies
residentes, que se reproducen en la zona o
ambientes cercanos, mientras que 51 son
migratorias provenientes de la parte
altoandina, así como del Norte de América
y del sur del continente. El ecosistema
alberga durante Diciembre y Abril
especies migratorias (Hirundo rustica,
Sterna elegans, Numenius
phaeopus,
Phalaropus tricolor, Tringa flavipes.
Las especies residentes que mantienen un
importante número de individuos son
Podiceps major, Oxyura ferruginea, Nicticorax
nicticorax, y Fulica ardesiaca .Se debe
igualmente mencionar a algunas aves
playeras y del valle aledaño al humedal: el
Marisquero (Cinclodes Taczanowskii)
endémico del país, el Pingüino de
Humboldt (Spheniscus humboldti), la
Chuita (Phalacrocorax gaimardi), y el
Cuclillo Piquioscuro (Coccyzus
melacoryphus), raro para la región .
De los datos obtenidos se puede concluir
que hay:
29 especies que son residentes del
humedal y que se reproducen allí mismo.
Podemos mencionar a los zambullidores
Las Areas de Conservación Privada - ACP
HUMEDALES DE PUERTO VIEJO
110
111
(Podiceps major, Rollandia rolland,
Podilymbus podiceps) y las garzas (Egretta
caerulea).
subártica de Norteamérica, y realiza un
viaje de más de 25 000 km. (A. Tello, com.
pers. 2004).
27 especies que son residentes, que se
reproducen cerca y se movilizan poco,
como los cormoranes (Phalacrocorax
olivaceus), piqueros (Sula variegata),
pelícanos (Pelecanus thagus), y gavilanes
como el Parabuteo unicinctus, el cual es
muy raro.
Un dato bastante esperanzador es que la
Parihuana (Phoenicopterus chilensis) ha
aumentado su número (llegando en 1999 a
un total de 45 individuos), coincidiendo
con la prohibición de la caza deportiva en
la zona. Esta especie es una de las
indicadoras del estado del ecosistema.
17 especies migratorias que provienen de
las zonas altoandinas, como los flamencos
(Phoenicopterus chilensis), garzas (Egretta
alba, Egretta thula), ibis (Plegadis ridgwayi),
aguiluchos como el Buteo polyosoma, que
es muy poco común y, semilleros como
Sporophila peruviana, el cual es también
muy poco común.
2 especies migratorias que provienen de la
parte sur del continente (la gaviota Larus
modestus y el gaviotin Sterna
hirundo).
27 especies migratorias que provienen del
norte de América, como por ejemplo los
falaropos (Phalaropus tricolor, Phalaropus
fulicaria que es poco común) y los playeros
(Tringa flavipes).
Una de las aves migratorias que realiza el
recorrido mas largo es el Chorlo ártico
Pluvialis squatarola, que anida en la región
2. IMPORTANCIA DE LOS
HUMEDALES DE PUERTO
VIEJO
Dentro del ecosistema costero - desértico,
el humedal se constituye como un
elemento de conexión del corredor
biológico del Pacífico Sur. No sólo es
hábitat permanente de muchas aves, sino
que es usado por otras como sitio de
descanso y alimentación, siendo el punto
medio entre los pantanos de Villa y la
Bahía de Paracas. Además de su
importancia para las aves, se debe tener en
cuenta su importancia para el ciclo
hidrológico.
Aparte de los criterios ecológicos, se debe
resaltar la belleza paisajística del humedal,
el cual, con un manejo adecuado, puede
constituirse en un área para el turismo de
observación de aves. Al estar ubicada cerca
de Lima, puede constituirse en un sitio
para instalar un Plan Piloto de Educación
Ambiental, similar al llevado a cabo en los
pantanos de Villa, dirigido a estudiantes
de la capital, así como de los distritos
aledaños.
3. AMENAZAS PARA EL
HUMEDAL
Uno de los problemas que afronta el área
es la invasión por grupos de familias. Esto
se ha dado en la parte norte del humedal
(15 ha.). A esto hay que sumar un plan de
expansión urbana, que incluye áreas para
turismo y recreación; se vienen
construyendo tres balnearios (Las Gramas,
Canarias y Las Lagunas). Además hay
actividades agrícolas al sureste del humedal, el
cual es acompañado en menor escala por el
pastoreo de ganado ovino y caprino al interior
del área. El ganado vacuno pastorea en los
gramadales (A. Tello, com. pers. 2004). Los
totorales y juncos son usados para
artesanías.
4. ESFUERZOS DE CONSERVACIÓN PROPUESTAS PARA EL
HUMEDAL
En la actualidad se están realizando los
trámites para que los humedales sean
considerados como un Área de
Conservación Privada. Como se menciona
en el expediente técnico, se debe hacer un
saneamiento legal de la zona.
El grupo de trabajo está conformado por la
Asociación Incaspiza, vecinos del área e
INRENA. Lo que se busca es que sea
declarada Área de Conservación Privada,
180 de las 340 ha. que abarca el humedal
(A. Tello, com. pers. 2004).
En el expediente técnico presentado a
INRENA se ha propuesto zonificar el
humedal (las 180 ha.) en tres áreas.
!Zona de uso turístico y recreativo
!Zona de aprovechamiento directo
!Zona silvestre
Se ha instalado un circuito para visitantes,
un mirador y un salón para educación
ambiental.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
MANGLAR DE SAN PEDRO DE VICE
113
Manglar de
de
Manglar
SanPedro
deVice
SanPedro deVice
Los manglares en América se distribuyen desde los
Estados Unidos en el Norte, hasta Brasil y Perú en el
Sur. En esta franja de distribución se localizan los
manglares de San Pedro, ubicado en el departamento
de Piura, provincia de Sechura, distrito de Vice, que
conjuntamente con el estuario de Virrilá y las lagunas
de Ramón y Ñapique constituyen los principales
ambientes acuáticos del departamento (Pulido et. al
1992). Estos manglares son una formación especial
por constituir el límite sur de la distribución de los
manglares en la costa occidental sudamericana
(Rodríguez et. al 1998).
En este ecosistema se puede verificar, en distintas
épocas del año, la presencia de diferentes especies de
aves entre residentes y migratorias. A la fecha se ha
determinado que aquí existen 62 especies de aves, que
se distribuyen en 29 familias y ocupan los distintos
hábitats donde realizan actividades principalmente
alimenticias.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
MANGLAR DE SAN PEDRO DE VICE
114
115
Estos manglares se desarrollan en
estuarios y brindan enormes beneficios
económicos a la población a través de la
pesca, acuicultura, oportunidad para
actividades recreativas, entre otros (Pulido
et. al 1992). Es más estos ecosistemas son
de vital importancia para las aves
acuáticas, mamíferos, anfibios, reptiles,
peces e invertebrados, muchos de los
cuales se encuentran en peligro de
extinción (Pulido et. al 1992)
La
productividad es un aspecto importante
dentro de este sistema ecológico, pues
aquí se reutiliza abundante materia en
forma de detritos, venida como parte de
los ríos y proveniente del bosque mismo
(hojas que caen y son transformadas en
detritos) (Vegas, 1980).
El manglar de San Pedro es muy
importante porque constituye un lugar
que proporciona refugio y alimentación a
una rica y variada fauna, principalmente
aves, y encierra una belleza paisajística
que puede ser utilizada en beneficio de la
conservación a través del ecoturismo.
Como sabemos el ecoturismo es
considerado generalmente, como una
poderosa herramienta para la conservación
de hábitats prístinos (Holle, 1994).
1. DESCRIPCIÓN DEL ÁREA
Ubicación
El Área de Conservación Municipal
“Manglares San Pedro de Vice”, se ubica
en la provincia de Sechura, Departamento
de Piura (5º 30' 5º 34' latitud sur y 80º 52'
80º 54' longitud oeste).
Extensión
La extensión del manglar es de unas 400
ha. (8 km. de largo y 0,5 km. de ancho).
Zonas de Vida
El manglar corresponde al desierto
superárido-tropical, donde la
biotemperatura media anual es de 24 Cº, el
promedio de precipitación total por año es
variable entre 62,5 y 125 mm y el
promedio de evapotranspiración potencial
total por año varia entre 16 y 32 veces de su
precipitación, ubicando a esta zona de vida
en la provincia: SUPERÁRIDO.
Bosque del manglar
Se presume que en épocas prehistóricas
los manglares del norte peruano se habrían
extendido hasta la zona de Sechura
(Olsson, 1924-1932; Frizzel, 1946;
Hoffstetter, 1954 y Koepke, 1956).
Las investigaciones de Wilder Rodríguez
A.; Ronald Marcial-Ramos y Robert
Barrionuevo García entre 1995 - 1997
identificaron el biotopo del gramadal, el
biotopo del manglar y el biotopo de la
playa arenosa.
En este manglar hoy se puede caracterizar
tres tipos de bosque:
Bosque de Mangle: corresponde al bosque
propiamente dicho, aquí predomina
Avicennia germinans y Laguncularia
racemosa. Nace en el lado sur a
aproximadamente 10 km de la bocana y se
extiende al norte has 2 km
aproximadamente antes de la bocana.
Zona de Gramadal: corresponde a la cara
externa del bosque de mangle, aquí se
encuentran algunos “algarrobos” (Prosopis
pallida) y “faiques” (Acacia macracantha)
entre otros.
Totoral: corresponde a una pequeña área
dentro del canal de marea donde
predomina la “totora”.
Fauna
Los estudios realizados en el manglar San
Pedro de Vice referidas principalmente a
aves, nos reportan 37 especies de aves en
Febrero de 1993 (Guillén y Jhancke,
1994), 44 especies de aves entre 1995 y
1998 (Rodríguez et al 1998) y 59 especies
de aves entre 1995 y 1999 (Chávez et al
2000). Rodríguez et al (1998) también
hace referencia a dos especies de
mamíferos, una especie de reptil, 23
especies de peces (19 marinos y 4 de aguas
continentales), 11 especies de crustáceos y
una especie de molusco.
Estos estudios de registro de variedad de
especies de aves, han determinado que la
fecha (1993 1999) se hayan reportado en
total 65 especies de aves entre residentes y
migratorias; las que utilizan el manglar
para alimentarse y descansar
tranquilamente, llegando algunas a
reproducirse; incluso, hay especies que se
encuentran amenazadas como es el caso
de “gaviotin elegante” (Sterna elegans) y el
“gaviotin peruano” (Sterna lorata); peor
aún, algunas especies que se registraron
entre 1993 y 1998 no han vuelto a
registrarse en este lugar, un ejemplo es el
ave conocida como “pico de espátula”
(Platalea ajaja), que actualmente se ve en
l o s m a n g l a r e s d e Tu m b e s .
Las Areas de Conservación Privada - ACP
MANGLAR DE SAN PEDRO DE VICE
116
117
Probablemente el incremento de
actividades humanas como la pesca
artesanal en forma eventual y algunos
intentos de prácticas de acuicultura de
langostinos que no tuvieron éxito, sean los
responsables.
Este ecosistema también permite la
subsistencia de mamíferos como el “zorro
costeño” (Pseudalopex sechurae),
“zarigüeyas” (Didelphys paraguayensis),
“Zorrillos” (Conepatus semistriatus),
reptiles, insectos y 32 especies de plantas
fanerógamas.
Algunos animales
provienen del bosque seco aledaño
(algarrobal) al manglar y que también esta
comprendido dentro del Área de
Conservación, la mayor presión que
soporta es la destrucción por la extracción
de madera para leña por parte de gente
inescrupulosa, dejando sin hábitat a
muchas especies de aves endémicas del
bosque seco que se encuentran
amenazadas.
2. AMENAZAS PARA EL
MANGLAR
El problema más grave que se presenta
dentro de ésta área de conservación es la
presencia de gente que eventualmente
ingresa al manglar sin conocer el manejo
artesanal de la extracción de larvas de
langostino y de pesca, y como
consecuencia de ello se esta destruyendo
el bosque de mangle. Estas personas
extraen larvas de langostino y peces en
forma indiscriminada para luego
comercializarlos, matando juveniles que
no son aptos para el consumo todavía.
Esta destrucción progresiva esta
deteriorando el ecosistema y por
consiguiente reduciendo el hábitat y
alimento de la fauna que mantiene el
equilibrio ecológico de este lugar. Lo
mismo ocurre en el caso de los algarrobales
que están siendo mermados por la
extracción de leña para madera.
servidas que provienen de desagües de la
ciudad y agroquímicos vía drenaje de
tierras agrícolas del valle del Bajo Piura
que también están afectando. Aparte los
turistas y visitantes a la zona, así como los
pescadores artesanales en general,
eventualmente también contaminan el
estuario del manglar al arrojar residuos
sólidos: basuras, desechos, comidas, así
como las valvas de las conchas que son
extraídas dentro y fuera del estuario. Ello
evidentemente afecta el paisaje, por la
contaminación escénica del camino y de
las playas que conducen al manglar.
Asimismo, la contaminación por el ruido
causado por motos acuáticas, genera un
impacto negativo sobre el ecosistema dado
que afecta a las aves.
En esta área es evidente la
sobreexplotación de los recursos
hidrobiológicos tales como: lisas,
langostinos, cangrejos, camarones, jaibas,
concha navaja, concha “piojosa”, concha
“
palabrita” y otros; causando depredación,
porque el aprovechamiento no ha sido
normado, ni se han fijado vedas,
prohibiciones, o tamaños mínimos de
extracción. Por otro lado en la pesca
artesanal y de extracción, se viene
utilizado técnicas de explotación que
implica cerrar la "bocana" (entrada de agua
de mar al estuario) para disminuir el nivel
del agua y de esa forma sobreexplotan
cangrejos, camarones, langostinos, jaivas,
etc.
3. IMPORTANCIA DEL
MANGLAR
Otra amenaza es la contaminación de las
aguas del río Piura y del Sechura; aguas
Todos los manglares son considerados
como productores primarios más
Existen pocos trabajos de investigación de
los recursos de esta zona y ninguno sobre
el estado de conservación, por lo que urge
realizar estudios científicos, que
involucren el análisis con índices de
diversidad, uso de hábitat, distribución
espacial y temporal de las especies, para
tener un mejor panorama de la dinámica
ecológica del manglar y poder determinar
el manejo sostenido de este ecosistema.
importantes del planeta, y
permanentemente están contribuyendo a
fijar sedimentos, con los que evitan la
erosión. Por tanto, el manglar a diferencia
de la mayoría de los ecosistemas
tropicales, es un sistema abierto al flujo de
la materia y energía, ya que importa
nutrientes y exporta materia orgánica en
un ciclo contínuo.
Por otro lado, aunque los manglares sirven
de alimento directo a muy pocas especies
de animales, su función en el
mantenimiento de la comunidad biológica
es fundamental, pues las raíces de mangle
sirven como soporte y refugio a una gran
Las Areas de Conservación Privada - ACP
MANGLAR DE SAN PEDRO DE VICE
118
119
cantidad de organismos acuáticos y las
porciones aéreas son lugares de refugio,
alimentación, reposo y anidamiento para
una numerosa y variada avifauna.
Las especies de mangle registrados aquí
corresponden a Avicennia germinans
“mangle negro, mangle saldado, o Heli” y
el “mangle blanco o mangle hembra”
Laguncularia racemosa.
Este ecosistema es también importante
porque protege tanto especies de flora,
como fauna de importancia económica, a la
vez que resulta un medio de sustento para
habitantes de la costa, así como un lugar
donde la acuicultura puede desarrollarse
en forma armónica y bien concebido, se
convierte en un terreno apropiado para el
desarrollo ecoturístico.
A escala internacional el Área de
Conservación de San Pedro de Vice,
resulta ser un ecosistema importante, por
que constituye el límite sur de la
distribución de los manglares en la costa
del pacífico, no existiendo más manglares
al sur de éste.
4. POSIBILIDADES Y
ESFUERZOS DE
CONSERVACIÓN
El Consejo Distrital de Vice, Provincia de
Sechura-Piura, decretó mediante
Resolución Municipal Nº 094-2000-MDV
como Área de Conservación Municipal el
manglar de San Pedro de Vice, con el
objetivo de conservar el único ecosistema
de mangle que existe en el Departamento
de Piura.
A la fecha se han realizado algunas
actividades en procura de la conservación
de los manglares de San Pedro, los mismos
que consistieron en reuniones anuales y
que son dirigidos al desarrollo científico
por parte de la Universidad Nacional de
Piura y UDEP, las ONGs Pro Aves-Perú y
ProNaturaleza.
Destacamos que se
desarrolló un seminario organizado por
Perú y Ecuador con la participación de
autoridades e instituciones relacionadas al
tema de ambos países (Ecuador:
Ministerio del Medio Ambiente; ONGs
J A M B E L I , N AT U R A ;
Perú:
Universidad de Piura y ProNaturaleza).
Se ha avanzado con la zonificación del
área, siguiendo los criterios empleados en
los manglares de Tumbes (Peña, 1976).
Las divisiones ha emplear son:
!Ambiente terrestre
!Gramadal
!Ecotono entre el gramadal y el manglar
!Manglar propiamente dicho
!Estero de agua permanente
!Bocana de arena
Finalmente las instituciones involucradas
mantienen sus intenciones por
inventariar la biodiversidad del Área, e
implementar un programa de monitoreo
efectivo de la misma; se hace necesario
delimitarla y zonificarla. Y con la finalidad
de sensibilizar a la comunidad de Sechura,
urge elaborar y ejecutar un programa de
Educación Ambiental. No menos
importante es la capacitación, por lo que
ya debe implementarse: cursos de
capacitación para profesores de escuelas
de la localidad y para guardaparques del
Área. Paralelamente debe manejarse la
capacitación para guías de ecoturismo e
interpretación ambiental; incluyendo
además programas de difusión y
promoción basados en la conservación del
manglar y en algún momento declarar al
manglar como símbolo de la riqueza
ecológica de la provincia de Sechura.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
BOSQUE DE SHO´LLET
121
IV. Opciones para conservar
la naturaleza en tierras públicas
“BosquededeSho´llet”
Sho´llet”
“Bosque
El Pajonal-Oxapampa
Los bosques nublados de Sho´llet antes conocido
como “El Pajonal” muestran un paisaje con una
vegetación que configuran un mosaico compuesto por
fragmentos de bosques primarios y secundarios que se
caracterizan por presentar complejos de vegetación
únicos y especies de flora y fauna endémicas. Un
hecho en particular es que esta vegetación capta
humedad atmosférica por encima de las
precipitaciones normales y gracias a su composición de
árboles, arbustos, epifitas, musgos, líquenes, y
orquídeas es que intercepta la humedad del ambiente.
Hoy esta área se encuentra amenazada por la presión
antropogénica y se hace necesario tomar acciones
inmediatas para su conservación y así evitar la
conversión de estos ecosistemas, en pastizales y en
parcelas de cultivos agrícolas.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
BOSQUE DE SHO´LLET
122
123
1. DESCRIPCIÓN DEL AREA
Ubicación
El Bosque Sho´llet se encuentra a unos 16
kilómetros al norte de la ciudad de Villa
Rica, en las nacientes de las quebradas
denominadas Canal de Piedra y Santa
Cruz, ubicados en los distritos de Villa
Rica y Oxapampa, provincia de
Oxapampa, departamento de Pasco. Esta
área se localiza en la zona conocida por los
lugareños como el “Pajonal”, entre los
2 000 y los 2 800 msnm.
Extensión
El bosque tiene una superficie de 1 412,6
ha. Lo que se conoce como “Pajonal” es
una porción de vegetación de gramíneas
propia de altitudes mayores;
predominando en el paisaje la vegetación
arbustivo-arbóreo con helechos y asociado
con epífitas.
Fauna y Flora
3. IMPORTANCIA DEL BOSQUE
Por la información proporcionada por los
colindantes al bosque, se sabe de la
presencia de las siguientes especies: mono
choro (Lagothrix lagothricha), oso de
anteojos (Tremarctos ornatus), venado
colorado (Mazama americana), gallito de
las rocas (Rupicola peruviana), pava de
monte, gallineta, caracoles ardillas,
mariposas, entre otras.
El bosque de Sho´llet alberga una
importante muestra representativa de
Bosques montanos y Bosque achaparrados
con vegetación esclerófila. Esta
particularidad, sumado a su cercanía al
Parque Nacional Yanachaga - Chemillén,
contribuye significativamente al
establecimiento de una importante área
complementaria de conservación.
En flora destacan: musgos, líquenes,
orquídeas, helechos arbóreos, bromelias,
ulcumano, diablo fuerte, cedro de altura,
nogal y abundantes especies de la familia
Lauraceae conocidas localmente como
robles.
4. POSIBILIDADES Y
ESFUERZOS DE
CONSERVACIÓN
2. AMENAZAS AL AREA
La construcción de la carretera que une
Oxapampa con Villa Rica, la misma que
cruza el Área de Conservación, ha
generado las siguientes amenazas:
!Rozo y quema para la instalación de
cultivos tradicionales (maíz y
rocoto).
!Extracción de productos diferentes a la
madera (especialmente orquídeas)
!Tala y extracción forestal maderable
(para cajonería)
!Además del uso del suelo incompatible
con su vocación natural.
Está en proceso de convertirse en Área de
Conservación Municipal por iniciativa de
un grupo de pobladores, los mismos que
fueron respaldados por la Municipalidad
Distrital de Villa Rica y la Municipalidad
Provincial de Oxapampa.
Participan diferentes instituciones como;
PRO NATURALEZA, PROTERRA,
Gobierno Regional Pasco, Municipalidad
Provincial de Oxapampa, Municipalidad
Distrital de Villa Rica, Proyecto Especial
de Titulación de Tierras y Catastro Rural
(PETT) entre otras organizaciones
locales.
En octubre del 2004 la zona propuesta ha
sido declarada por la Municipalidad
Provincial de Oxapampa, como: Área de
Conservación Municipal Zona Reservada
“El Bosque de Sho´llet”, habiéndose
identificado los objetivos siguientes:
1- C o n s e r v a r l a b i o d i v e r s i d a d y
belleza paisajística de una muestra
de bosque achaparrado (o
esclerófilo) dentro de la propuesta
de Reserva de Biosfera de la Selva
Central (RBSC).
2- Mantener la capacidad de captación y
regulación hídrica que brinda el
Bosque de Sho´ l l et (servi c i os
ambientales)
3- Funcionar como herramienta para el
desarrollo progresivo de una cultura de
conservación y constituir una opción
de recreación y práctica de ecoturismo
de la RBSC.
La mencionada ordenanza municipal
contempla en sus artículos lo siguiente:
Artículo cuarto. Queda prohibido el
establecimiento de nuevos asentamientos
humanos dentro del Área de Conservación
Las Areas de Conservación Privada - ACP
BOSQUE DE SHO´LLET
124
125
Municipal Zona Reservada “El Bosque de
Sho´llet”, así como el otorgamiento de
nuevos derechos que impliquen el
aprovechamiento directo de recursos
naturales, o la extensión o renovación de la
vigencia de los ya existentes.
Articulo cinco. Constituir una Comisión
encargada de la formulación de la
propuesta de ordenación territorial para la
categorización definitiva del Área de
Conservación Municipal Zona Reservada
“El Bosque de Sho´llet”, que estará
integrada por:
!Un representante de la Municipalidad
Provincial de Oxapampa, quien la
presidirá;
!Un representante de la Municipalidad
Distrital de Villa Rica
!Un Representante de la intendencia de
Áreas naturales protegidas
(IANPINRENA)
!Un representante de
PRONATURALEZA;
!Un representante de PROTERRA;
!Un Representante del Proyecto
Especial de Titulación de Tierras y
Catastro Rural OPER Pasco.
Artículo seis. La Comisión constituida
en el Artículo 5º de la presente Ordenanza,
se instalará dentro de los diez (10) días
siguientes a la publicación del presente
dispositivo legal, teniendo a su cargo la
elaboración de los estudios
complementarios, así como la
implementación del proceso participativo
de consulta a la población local para evaluar
la categorización definitiva del Área de
conservación Municipal Zona Reservada
“El Bosque de Sho´llet”, de acuerdo a lo
establecido en el Artículo 43º del
Reglamento de la Ley de Áreas Naturales
Protegidas, aprobado por D.S. Nº 038-2001AG; debiendo alcanzar a la Municipalidad
Provincial de Oxapampa los estudios
complementarios, el estudio técnico y la
propuesta de categorización
correspondiente, en un plazo no mayor a
seis (6) meses contados desde el día
siguiente de la publicación del presente
dispositivo legal.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
LAS MONTAÑAS DEL YANACHAGA - MIRADOR
127
LasMontañas
Montañas del
del
Las
“Yanachaga- -Mirador”
Mirador”
“Yanachaga
Pozuzo
Pozuzo
Es un área de bosques fragmentados, propuesto para
su conservación por parte de la Municipalidad Distrital
de Pozuzo mediante Resolución Municipal Nº 05
MDP-99. Dicha resolución tiene como finalidad
conservar los bosques que cubren el divortiun aquarum
de la cuenca alta del río Pozuzo por su margen derecha,
de cuyos flancos nacen fuentes de agua que fluyen
tanto hacia el río Pozuzo así como al valle del Palcazú.
Los bosques, a pesar de su condición de área de
protección, vienen siendo afectados por la extracción
ilegal de madera y por presiones tradicionales de
agricultura y ganadería cada vez más intensivos. Por
ello urge tomar medidas que permitan proteger esta
zona incorporándola al sistema, como un área de
conservación formalmente reconocida y establecer
mecanismos de financiamiento para su adecuada
gestión.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
LAS MONTAÑAS DEL YANACHAGA - MIRADOR
128
129
Actualmente, el Proyecto Especial de
Titulación de Tierras (PETT) esta
trabajando la definición de los límites del
área, para determinar la superficie. Acción
muy importante que va permitir
consolidar el diagnóstico del potencial de
recursos naturales del bosque Sho´llet en
un área ya definida y así preparar y
continuar con la gestión del expediente
para su reconocimiento oficial.
Sumándose a este esfuerzo,
PRONATURALEZA a viene convocando a las diferentes instituciones y
organizaciones locales, para participar en
talleres que permitan generar conciencia
conservacionista sobre los valores
ecológicos y la importancia de conservar el
área.
1. DESCRIPCIÓN
Ubicación
El área se ubica al nor-este del distrito de
Pozuzo y comprende la margen derecha,
parte superior de la cuenca del río Pozuzo.
El límite por el norte es el cerro Schacher
(conocido también como la Huanca) cerca
al Codo de Pozuzo; por el sur con el Parque
Nacional Yanachaga Chemillén. La forma
final (aún no definida) comprende una
franja aproximada de dos kilómetros de
ancho cuyo eje longitudinal sigue la cresta
o divisoria de aguas (divortium aquarum)
de la cordillera Yanachaga
Extensión
Tiene una superficie aproximada de
10 000 ha.
Flora
La vegetación del paisaje general del
ámbito se caracteriza por presentar un
mosaico compuesto de bosques primarios
(monterreales), bosques secundarios
(calpares o purmas), pastizales, parcelas de
cultivos anuales de pan llevar (maíz, yuca,
arroz, plátano, etc.).
Los bosques primarios están distribuidos
principalmente como fragmentos que
cubren laderas empinadas y cumbres de
cerros, así como protección de quebradas y
áreas de reserva dentro de los fundos. Los
bosques secundarios o calpares se ubican
dentro de los fundos como terrenos en
descanso (barbecho) que luego son usados
para la práctica de la agricultura de
subsistencia o para ampliar la superficie de
pastos.
Las partes altas, por encima de los 1 500
msnm, esta cubierto de formaciones
vegetales sumamente frágiles, con flora y
fauna aun no estudiadas.
Las
comunidades boscosas allí presentes lo
componen los bosques denominados
nublados o montanos que protegen tanto
la vertiente oriental así como la occidental
(ríos y quebradas que vierten sus aguas al
Río Pozuzo y hacia la vertiente oriental).
Los bosques montanos se caracterizan por
presentar complejos de vegetación únicos
por la presencia persistente o frecuente de
nubes en movimiento. Esta vegetación
capta humedad atmosférica por encima o
más allá de las precipitaciones normales
gracias a la interceptación por la presencia
de árboles, arbustos, epifitas, musgos,
líquenes, orquídeas.
La flora del ámbito es muy diversa. A nivel
de componente arbóreo, a partir de
individuos de 10 cm de diámetro, esta
conformada por la presencia de más de 250
especies. A su vez, por la presencia de
bosques nublados, se espera una alta
diversidad de orquídeas, musgos,
bromelias, etc. Como referencia citaremos
que en Pozuzo, en lugares con
intervención antrópica se ha reportado
alrededor de 150 especies de orquídeas.
Fauna
La fauna silvestre de Pozuzo es muy
diversa; aunque, como en el caso de flora,
las poblaciones de animales se han visto
reducidas por la destrucción de sus
hábitats y por la presión de la caza. No se
cuenta con estudios sistematizados e
intensivos, pero la información recopilada
a través de observaciones de campo y
encuestas a pobladores, así como estudios
practicados en algunos sectores, revelan la
presencia de un número importante de
especies. A nivel del distrito de Pozuzo, se
han reportado la presencia de 105 especies
entre mamíferos (excepto murciélagos) y
aves, 38 especies de ofidios (07 venenosas
y 31 no venenosas), 41 especies de
murciélagos.
2. AMENAZAS PARA EL AREA
!Rozo y quema para la instalación pastos
y cultivos de pan llevar
!Tala y extracción forestal maderable
!Uso del suelo incompatible con su
vocación natural.
Las Areas de Conservación Privada - ACP
130
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3. IMPORTANCIA DEL AREA
El área alberga una importante muestra
representativa de bosques montanos. Esta
particularidad, sumado a su cercanía al
Parque Nacional Yanachaga Chemillén,
permite el establecimiento de una
importante área complementaria de
conservación en la zona de
amortiguamiento de la futura Reserva de
Biosfera.
4. POSIBILIDADES Y
ESFUERZOS DE
CONSERVACIÓN
El primer esfuerzo para conservar el área,
fue iniciativa de la
Municipalidad
Distrital de Pozuzo con el respaldo de la
ONG PROTERRA, al promulgar la
Resolución Municipal Nº 05 en el año de
1999, declarando la zona de interés para la
conservación.
Desde este año, instituciones como el
Programa de Desarrollo Alternativo en las
Áreas de Pozuzo Palcazú (PRODAPP),
PRONATURALEZA y el Proyecto
Especial de Titulación de Tierras y
Catastro Rural - Pasco, han iniciado
algunos trabajos preliminares, cuyo primer
esfuerzo están orientados a la delimitación
del área y la elaboración del expediente
para el reconocimiento oficial por parte del
INRENA IANP.
* El caso de Sho`llet y el YanachagaMirador son dos áreas complementarias al
Parque Nacional Yanachaga-Chemillén y
son parte de la propuesta de Reserva de
Biosfera Selva Central (RBSC),
actualmente están siendo promocionadas
por ProNaturaleza con apoyo de The
Nature Conservancy (TNC).

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