Quinto domingo de Cuaresma

Transcripción

Quinto domingo de Cuaresma
Quinto domingo de Cuaresma
Salmo 51:10 –12 — Una oración
para la purificación
Ten piedad de mí, Oh Dios, por tu bondad
por tu inmensa compasión, borra mi culpa.
Lava del todo mi delito
y limpia mi pecado.
Crea en mí, oh Dios, un corazón puro,
renueva en mi interior un espíritu firme.
No me arrojes lejos de tu presencia
ni me quites tu santo Espíritu.
Devuélveme la alegría de tu salvación,
afiánzame con espíritu generoso.
Te lo pedimos en nombre de Cristo
nuestro Señor. Amén.
Domingo 25 de marzo de 2012
Una petición complicada
Lecturas del día: Jeremías 31:31– 34; Salmo 51:3 – 4, 12 –13,
14 –15 (12a); Hebreos 5:7– 9; Juan 12:20 – 33. “Señor queremos ver a Jesús” (Juan 12:21); una petición muy sencilla
pero con muchas implicaciones. ¿Qué motivó a los griegos a
pedir a Felipe este favor? ¿Habrían escuchado de los
milagros de Jesús? ¿Estarían interesados en su poder temporal y dispuesto a estar cerca a una persona de influencia?
Y, ¿qué queremos que Jesús haga por nosotros?
¿Queremos encontrarlo en las cosas y circunstancias más
ordinarias de nuestra vida? ¿Nos mueve el poder de su amor
o nuestro instinto de preservarnos haciendo lo “correcto” en
esta vida y ser recompensados en la próxima?
Dependiendo de la motivación de quien busca, la respuesta de Jesús puede ser desalentadora o convincente. Al
principio de su pasión dice: “ha llegado la hora”. En ocasiones anteriores, como Caná, su hora no había llegado. Ahora
es inminente. Aunque perturbado y aún vulnerable, hará lo
que necesita hacer y cumplirá la misión para la cual nació.
Los expertos en la Biblia dicen que la respuesta de Jesús
a las interrogantes de los indagadores griegos es una indicación de su misión eventual a un mundo más allá del
judaísmo. Es también una misión que el mundo nunca había
visto antes. Se describe aún mejor con una comparación
muy sencilla y profunda. Cuando el grano de trigo cae a la
tierra, empieza a desintegrase. Rápidamente se convierte en
un recipiente vacío. Pero de la cáscara emerge vida nueva.
No se sabe cómo respondieron los contemporáneos de Jesús
a esta comparación. No obstante, lo más importante es reconocer de qué manera estamos respondiendo nosotros mismos.
Esta semana en el hogar
bración del Bautismo, la Confirmación y la Eucaristía en la
Vigilia Pascual. Dé la bienvenida a quienes buscan en su
parroquia, honrando su búsqueda.
Lunes 26 de marzo
Solemnidad de la Anunciación del Señor Jueves 29 de marzo
Lecturas del día: Isaías 7:10 –14; 8:10; Salmo 115:1– 2, 3 – 4, Identidad firmemente enraizada
15 –16 (1ab); Hebreos 10:4 –10; Lucas 1:26 – 38. Para celebrar
el anuncio de Gabriel a María, lea el relato de la Anunciación
de Lucas. Dibuje la escena que imagina o dramatícela con
niños; rece el Angelus, una oración basada en el relato del
Evangelio y aprenda su historia en (www.ourcatholicprayers.
com). Vuele un cometa, símbolo del Espíritu Santo o entone
un himno mariano.
Martes 27 de marzo
¿Quién eres?
Lecturas del día: Números 21:4 – 9; Salmo 145:10 –11, 12 –13ab,
21 (Aleluya); Juan 8:21– 30. Como en el Evangelio de hoy,
usted puede preguntarle a Jesús: “¿Quién eres?” Escriba
acerca de esta pregunta: ¿quién fue Jesús para usted en su
niñez? ¿En su adolescencia? ¿De joven adulto? ¿Qué tal
ahora? ¿Cómo ha cambiado su idea de Él? Concluya con la
oración de Jesús, ya que es también cierto de su relación con
Dios: “el que me envió está conmigo y no me deja solo, porque yo hago siempre lo que le agrada”.
Miércoles 28 de marzo
Aquellos que buscan, entonces y ahora
Lecturas del día: Daniel 3:14 – 20, 91– 92, 95; Salmo 122:1– 2,
3 – 4ab, 4cd – 5 (Aleluya); Juan 8:31– 42. En el Evangelio de
hoy, Jesús invita a aquellos que buscan tentativamente a que
continúen su búsqueda de Él, a ‘permanecer en Él’. Hoy día,
la gente sigue buscando. Algunos se preparan para el bautizo
y se les llama “catecúmenos”. Algunos ya están bautizados,
pero quieren iniciarse plenamente en la Iglesia Católica, y se
les llama “candidatos”. Después del Rito de Elección, celebrado Primer Domingo de Cuaresma, los catecúmenos son
llamados “elegidos,” porque han sido escogidos para la cele-
Lecturas del día: Génesis 17:3 – 9; Salmo 96:1– 2a, 2b – 3, 10 (3);
Juan 8:51– 59. Jesús raramente se perturba cuando lo critican,
aún cuando es acusado de estar endemoniado. Nosotros también debemos reconocer que la gente puede criticar nuestras
ideas y opiniones, pero no pueden tocar nuestra identidad
más profunda en Cristo. Puede que no seamos populares al
defender la vida, al resolver problemas pacíficamente o al ser
buenos administradores de la creación, pero no habrá crítica
que rompa nuestra profunda intimidad con Dios.
Viernes 30 de marzo
Planeando la próxima semana
Lecturas del día: Jeremías 20:10 –13; Salmo 57:8 – 9, 10, 12
(10a); Juan 10:31– 42. La tensión escala en el Evangelio a
medida que los enemigos de Jesús tratan de apedrearlo, acusarlo de blasfemia y arrestarlo. Jesús les ruega que compartan su divinidad y reconozcan sus buenas obras. Algunos
creen, otros se resisten. ¿Cómo podría un observador saber
que ésta es la semana más importante de su año? ¿Podría
dedicar más tiempo al silencio, la adoración, lectura espiritual y participación litúrgica?
Sábado 31 de marzo
El final se acerca
Lecturas del día: Ezequiel 37:21– 28; Salmo 100:1b – 2, 3, 5
(2a); Juan 11:45 – 56. En el Evangelio de hoy nos damos
cuenta que en los últimos días de su vida, Jesús se aleja de la
gente con sus discípulos. ¿Qué pasó entonces? ¿Realmente
tuvo Jesús dificultad con la traición y dolor que le esperaba?
¿Trataron sus discípulos de convencerlo de que buscara un
final diferente? ¿Continuaron con sus esperanzas de que
derrocara la ocupación romana? Usted, qué hubiera hecho?
© 2011 Liturgy Training Publications. 1-800-933-1800. Escrito por Kathy Coffey. Ilustrado
por Paula Wiggins. Los textos bíblicos corresponden a la Biblia de Nuestro Pueblo. Ediciones
Mensajero, 2006. Texto reproducido con los debidos permisos. Derechos reservados. Permiso
de publicación concedido por la Arquidiócesis de Chicago el 1 de octubre de 2011.
Recursos reproducibles para Cuaresma-Triduo Pascual-Pascua 2012

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