258 - Compañía de Santa Teresa de Jesús
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258 - Compañía de Santa Teresa de Jesús
BOLETÍN INFORMATIVO STJ Junio-Julio 2012 Nº 258 89 89 Portada 90 Índice 91 Missió Metrópolis 94 I Encuentro de Equipos Directivos de la FET 97 Presentación Capítulo General. Provincia Virgen del Carmen 99 La Familia Teresiana buscando caminos 103 120 años de presencia en Yucatán-México 106 100 años de presencia teresiana en Brasil 108 La Provincia Ntra. Señora Aparecida en peregrinación 110 50 años de la Compañía en Colombia 113 50 años del Colegio Teresiano de Bogotá 116 Proyecto Mosaico Teresiano 117 Noticias Breves 120 Han entrado en la vida 127 Encomendamos en nuestras oraciones 90 “Missió Metrópolis” Proyecto de Nueva Evangelización promovido por Benedicto XVI Desde todas las parroquias se había anunciado: la Nueva Evangelización, promovida por Benedicto XVI, tiene una de sus manifestaciones en la Missió Metrópolis en la que participarán doce ciudades europeas. En el estado español, la designada ha sido Barcelona. Se trata de ir a las raíces de la pérdida de fe en las grandes ciudades y de volver a la esencia del Evangelio. No tanto a reformas de tipo litúrgico, dogmático o moral, sino a centrar todo el esfuerzo de esa Nueva evangelización en la misma novedad que supone el Evangelio como Buena Noticia. “Hemos hablado mucho de Iglesia -ha dicho el Cardenal Martínez Sistach- hablemos ahora de Jesús”. La Missió ha comenzado por repartir miles de libros, muy bien editados, del Evangelio de Marcos dividido en doce unidades; cada una de las cuales tiene una explicación previa, breve y sencilla. Y unas preguntas al final de cada unidad para reflexión y comentario en grupos. Se podían ir a buscar al Arzobispado gratuitamente. En nuestra Comunidad hemos repartido muchos. Llegó el día señalado para el lanzamiento. Era el domingo, 4 de marzo. El lugar del encuentro, emblemático: el Palau de la Música. Se habían entregado a las parroquias y a las Comunidades religiosas 2.000 invitaciones. Con ellas nos dirigimos nosotras al Palau de la Música con más de una hora de antelación, previendo la cola. En efecto, a esas horas ya llegaba a dos calles más abajo. Con un gran orden fuimos entrando todos y llenando la platea, los palcos y las tribunas. Y, a la hora en punto, comenzó la celebración. En el escenario, una orquesta de cámara y una coral. Un atrio en el centro y detrás cuatro sillas vacías que se irían ocupando por los locutores que darían lugar al texto íntegro del Evangelio de Marcos que se iba a proclamar solemnemente. 91 En primer lugar, el saludo del Cardenal que nos dirigió unas palabras breves pero sentidas encomendándonos a todos esa tarea de la Nueva Evangelización centrada en Jesús y su palabra. Y comenzó la lectura de Marcos. Puedo asegurar que esa lectura seguida y sosegada del texto completo, con voces y declamaciones de artistas y personalidades de la cultura, interrumpidas de vez en cuando por música o cantos, el cambio de locutores y el silencio impresionante del teatro, convertían el acto en una verdadera meditación de la Palabra. Un momento cumbre lo constituyó el final de la sexta unidad con las palabras de Jesús a sus discípulos: “Y vosotros, ¿Quién decís que soy?” Después de un breve silencio meditativo se fueron oyendo voces jóvenes que desde distintos puntos del teatro gritaban la misma pregunta: “Y vosotros, ¿quién decís que soy?” Yo, en aquel momento, sentí una emoción especial que luego he dejado plasmada en uno de mis artículos de Catalunya Cristiana: porque al salir, y volverme a encontrar con una realidad pobre, marginada, alejada de Dios… le dije en mi interior: “Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo, pero también eres, el que tiene hambre, el que tiene sed, el que no tiene casa, el que está enfermo, el que está en la cárcel”, porque así te definiste Tú. Y aquí te encuentro cada día. Al llegar a la Pasión, el panorama cambió. En lugar de un atril se colocaros tres. Y la pasión la proclamaron dos grandes locutores y un barítono catalán, muy conocido, que leyó la parte de Jesús. Una cruz de palo presidió la 92 lectura. Junto a los locutores iban apareciendo personajes de nuestras pasiones de Esparraguera o de Olesa, vestidos de la época y haciendo los gestos que correspondían a las palabras leídas. Y, por fin, otro momento de gran riqueza que arrancó muchos aplausos y puso en pie a todo el público: al llegar a las palabras de Jesús, “Dios mío, Dios mío, por qué me has abandonado”, el barítono lo cantó. Cuando parecía todo acabado, tras la muerte de Jesús, se iluminó el fondo de escenario y apareció una niña, como de unos diez años, con una túnica blanca y una frescura infantil que cautivaba. Con su voz limpia y clara leyó perfectamente todo el fragmento final de la resurrección y, cuando hablaba del ángel vestido de blanco que se les apareció a las mujeres a todos nos parecía verlo en la figura de esa niña. Las últimas palabras del Cardenal estuvieron llenas de emoción y al “enviarnos a proclamar por todo el mundo la Buena Noticia” que habíamos escuchado, el teatro en masa se levantó y aplaudió el acto durante unos diez minutos. Realmente esa tarde el Palau de la música se llenó hasta la bordes. Era una Iglesia en su mayoría de edad bastante avanzada, pero ¡era una Iglesia viva! Mª Victoria Molins, stj 93 Del 1 al 3 de febrero tuvo lugar en El Escorial (Madrid), el primer encuentro de Equipos Directivos de los 23 colegios que este curso, por primera vez, forman parte de la Fundación Escuela Teresiana. Convocados por el Equipo de Titularidad y con la presencia de la Presidenta de la Fundación, Mª Sales Vázquez, nos reunimos 124 participantes en el encuentro, haciéndose visible el lema que acompaña este curso a todas las Comunidades Educativas: “SOMOS MÁS,… más para aportar, para recibir,... para construir, para soñar…“ LA UNIÓN HACE LA FUERZA: SOMOS MÁS… DespuéDespués de más de dos años de intenso trabajo para la unificación y el diseño de la estructura que hoy ya sostiene a los Centros de España y teniendo como aliados el diálogo, el encuentro, la evaluación y la mejora continua de nuestros Colegios, la Fundación Escuela Teresiana es una realidad. Sí, somos más y en El Escorial nos encontramos los representantes de las Comunidades Educativas que les dan vida, 23 realidades distintas, cada una con su forma de ser y hacer. Durante los tres días de con-vivencia disfrutamos de un fabuloso ambiente, reconociéndonos en torno a un mismo proyecto educativo, el que inició Enrique de Ossó, y sabedores de que juntos iremos abriendo nuevos caminos y renovando nuestra escuela. Durante el encuentro se proyectaron de formas diferentes toda la riqueza y diversidad de los Centros, y son en ellas donde más nos reconocemos y más fuertes nos sentimos, donde nuestra identidad teresiana se hace presente con una misma visión del mundo, de la vida, de la educación, del misterio de Dios. 94 …SOMOS MÁS, una OPORTUNIDAD para CONSTRUIR… EEstos días de encuentro fueron en sí mismos motivo de celebración, de agradecimiento por la dedicación, por el esfuerzo y el trabajo bien hecho de tantos Equipos que responden día a día de los centros, una oportunidad para conocernos más, para en-REDarnos, para orar y cantar, para “cargar pilas”, para aprender y enseñar, para impulsarnos apoyándonos unos en otros. Además de otros contenidos, el elemento central e hilo conductor de las jornadas ha sido el renovado “Carácter Propio” que este curso la Fundación ha heredado de la Compañía. En los tiempos que nos está tocando vivir, en un planeta en crisis, en un mundo globalizado e impersonal, tan ruidoso pero tan llena de vacíos, nuestra Escuela recoge el testigo y renueva su compromiso. El pluralismo existente en nuestra sociedad, con sus múltiples concepciones de la persona, origina multitud de propuestas educativas que hacen necesario que nos definamos y expresemos con claridad los elementos esenciales de nuestra oferta educativa. Por ello en estos días de encuentro hemos reflexionado, nos hemos acercado al “Carácter Propio” de formas distintas, a través de presentaciones, talleres y con la música como protagonista principal para profundizar y sintonizar en la Identidad Teresiana. En el “Carácter Propio” se concretan los aspectos centrales de la misión de la Escuela Teresiana en la sociedad, la finalidad educativa que ilumina y llena de sentido la actividad diaria de todos los que trabajamos y vivimos en nuestras escuelas. Juntos somos más, y entre todos construimos, sumamos fuerzas. La idea de San Enrique será la que cimente y proyecte la “Familia Teresiana”, la que nos ayude a construir una Fundación viva, dinámica, evangelizadora. 95 …SOMOS MÁS, una OPORTUNIDAD para SOÑAR… En todo el encuentro pudimos percibir las ganas de buscar nuevos desafíos, de soñar. Pero soñar despiertos, soñar nuevos pro-yectos dando paso a la creatividad, al rigor, a las nuevas ideas. Se percibieron ganas de colaborar, de ser ambiciosos, de hacer realidad los sueños con el trabajo de todas las personas que formamos nuestros Centros, de continuar los sueños de muchas hermanas y seglares que tanto han aportado a ser lo que hoy somos y queremos ser. Partimos de nuestros sueños e intereses y estamos atentos a los de nuestros alumnos y sus familias, haciendo lo posible para ayudarles a que se hagan realidad. Soñamos una Escuela abierta a las realidades y necesidades de nuestra sociedad, sabiendo que tenemos ante nosotros la oportunidad para transformarla, para buscar la justicia y la paz como elementos esenciales, para vertebrar y capacitar a las personas a vivir desde dentro, con la experiencia de fe que nuestras comunidades educativas expresen y vivan. Después de estos días de encuentro quedaron renovados nuestros objetivos y nuestras fuerzas y aún quedó más claro nuestro horizonte, nuestra meta. Tal y como cantamos en el concierto de “Voces de Barro” de José y Kiko: “Todo por Jesús” que quiere decir que todo lo hacemos por Amor a Él, Él que nos acompaña a trabajar con otros y por los otros, Él que nos invita, como Enrique, a evangelizar educando, Él que nos anima a crear y ser Iglesia, a ser signos Suyos para transformar el mundo, porque con ÉL SÍ SOMOS MÁS, MUCHO MÁS… Fran Zazpe Profesor de Pamplona y miembro del Equipo Permanente de Pastoral de la FET 96 Tanto las Hermanas que llegaban de fuera de Santiago, como las que viven acá nos íbamos encontrando en la Residencia Universitaria con gestos de alegría por vernos de nuevo y con cara de expectación por lo que iba a significar este encuentro de Provincia. Una de las ventajas que tenemos en Chile es que, por ser pocas y no tener distancias demasiado alejadas, podemos reunirnos con relativa facilidad. Habíamos vivido los Capítulos Locales todas las Comunidades juntas en Santiago y la mayoría de las Hermanas habíamos participado en el Capítulo Provincial. Por eso, este encuentro iba a dar continuidad a lo que ya habíamos caminado como Provincia en el proceso capitular de la Compañía. Sin embargo, esta vez el encuentro se había proyectado en un lugar diferente. No en una sala de clase del Colegio, sino en un sector de la Residencia Universitaria más acogedor y cálido. En lugar de pupitres escolares, había en la sala mesas redondas, revestidas con paños alegres. Cada una tenía una vela, un díptico de color con el logo del Capítulo y tarjetas del mismo color con los nombres de las Hermanas que iban a configurar el grupo. A través de diversas dinámicas y metodologías fuimos recorriendo los distintos hitos del Capítulo. La intención fue que viviéramos en forma experiencial, aunque sintética, lo que se había vivido en Roma: Reflexiones sobre la Memoria: aspectos significativos y caminos de futuro, relacionándolos con las conclusiones de nuestro Capítulo Provincial. Iluminación. Lectura reflexiva de algunos párrafos sacados de las intervenciones de Toni Catalá en el Capítulo. De qué forma nos iluminan hoy y aquí. Ver luces, llamadas e invitaciones al leer el texto. Compartir en las mesas. 97 Elecciones. Era difícil que viviéramos la experiencia. Así que acogimos lo vivido que se nos hizo presente a través de algunos videos, fotografías, narraciones de las participantes. Documento Capitular. Presentación del documento. Lectura orada de la primera parte. Compartir resonancias. Las sendas, luces que nos aportan. De qué forma enriquecen nuestros caminos de futuro vitales como Provincia. Y qué es lo nuevo que nos abre, amplia horizontes… A medida que iba trascurriendo la jornada nos íbamos sintiendo parte de algo más grande que nosotras y que, al mismo tiempo, nos involucraba para hacerse realidad. Hubo una sintonía con lo que íbamos recibiendo que nos hacía acogerlo con la mejor de las disposiciones. El encuentro finalizó con la Eucaristía alrededor de una gran Mesa donde compartimos la Palabra, el Pan y los deseos de hacer vida toda esta riqueza que ha significado el Capítulo para la Compañía y para cada una de las Provincias. Al término de la Eucaristía se nos entregó una lámpara encendida a cada Comunidad para que la lleváramos a nuestros lugares y fuera memoria de lo que el Capítulo está significando en nuestra vida de cada día. Sabemos que hacerlo vida es más que vivir una jornada de dos días. Esperamos con ilusión la presencia de Toni Catalá que, en verano, nos ayudará a profundizar en la iluminación sobre "La Mesa compartida". Somos conscientes que hacer un camino significa ir recorriendo poco a poco cada senda que se nos ofrece y esperamos, con la Gracia de Dios y la fuerza del caminar juntas como Provincia, que iremos dando los pasos que nos ayuden a ello. 98 Provincia Ntra. Señora de Coromoto FAMILIA TERESIANA Buscando caminos de futuro 1. ¿Cómo nos situamos las hermanas ante este tema? En el Capítulo Provincial del año 1999 se invitó a un grupo de laicos de distintos estamentos y obras a dar su aporte, como laicos que compartían la misión, valorando su palabra y su vida. Como decisión de ese Capítulo se realizó un Congreso de la Familia Teresiana que nos ayudara a compartir más efectivamente el carisma para compartirlo más y organizarnos, juntos, mejor. En el año 2002 se comienza un proceso de reorganización más sistemático (Planificación Estratégica) ya que en la Provincia se desea y vislumbra un futuro de Familia Teresiana en Misión compartida. Así se plasmó en las Asambleas conjuntas, hermanas y laicos, con una visión de misión de futuro compartido: La imagen de la visión dice así: “Somos una familia integrada por una diversidad de miembros que caminamos unidos en el carisma y la misión. Vivimos experiencias de gozo en el compartir, propiciamos relaciones cercanas y fraternas, de acogida, escucha, respeto y sencillez entre nosotras, basadas en la comunicación, la apertura, el amor y confianza, con un marcado sentido de pertenencia, servicio, tolerancia, valoración y motivación que nos ayuden a alcanzar el proyecto de vida que Dios soñó para cada uno/a”. Se planificó una línea de acción que permitiera ir igualando las condiciones de hermanas y laicos en el conocimiento del carisma: “Fomentar y consolidar el carisma en cada miembro de la familia teresiana para fortalecer su proceso de identificación e integración”. Se comenzó a elaborar un plan de formación con participación de muchas personas. La situación inestable del país, entre otras razones, nos obligó a detener este proceso. Una opción de la Provincia ha sido la formación carismática de los laicos asumiendo el aspecto económico que ello implica. La formación proyectada desde la Provincia se vio afectada por la situación del país, pues muchas 99 personas –también de las más identificadas con el carisma- tuvieron que reacomodar sus opciones o incluso salir de Venezuela. Sin embargo, mantuvimos la participación posible (9 laicos/as) en los cursos del CIT de estos últimos años y en la IV ECAM en Río de Janeiro. La puesta en marcha de la Propuesta Educativa también ha propiciado la integración e identificación de los laicos en la misión. Sin embargo, un límite en la posibilidad de apropiación del carisma por parte de los laicos es que ellos pueden profundizar o investigar, más a o menos, de acuerdo a lo que nosotras, las hermanas, les proporcionamos. Lo acogen desde nuestra propia visión. Es muy incipiente la visión del carisma con sabor laico. Aún deben alimentarse con nuestra lectura de Compañía. 2. ¿Qué percibimos en la relación laicos/as hermanas? 100 Por parte de las hermanas, en general, hay una buena disposición a caminar en misión compartida y a delegar puestos de responsabilidad. Se va buscando que los distintos equipos, Provinciales y locales, estén formados por más laicos que hermanas. En ocasiones el individualismo y protagonismo que, a veces, nos caracteriza a las hermanas, no permite un trabajo en equipo efectivo (ni entre nosotras ni con los laicos) y dificulta la misión compartida. En los distintos centros los/as laicos/as permanecen y nosotras pasamos y participan en la medida que les damos participación y que nos entendemos personalmente con ellos. Se disfruta de los momentos de formación conjunta 3. ¿Qué líneas orientadoras de este proceso descubrimos para los próximos años? Necesitamos ir ampliando el nivel de participación en las decisiones cuando damos responsabilidades a los laicos Debemos estar claras en que, muchas veces, la participación de los laicos involucra necesariamente el ámbito económico. Debemos seguir trabajando en la búsqueda de nuevas formas de vinculación de los laicos. Seguir buscando formas apropiadas y eficientes para el voluntariado teresiano. Necesitamos con urgencia apostar por una formación más extensa, intensiva y abarcadora a los laicos y hermanas. La formación, reflexión y organización conjunta de laicos y hermanas nos ayuda a tener significados comunes desde experiencias de vida distintas y a construir una visión de futuro en común. Creo que sólo desde aquí podremos realizar una reorganización efectiva como familia teresiana. 4. ¿Qué acciones concretas se podrían poner en marcha? Lanzarnos más decididamente a experiencias de comunidades de vida, hermanas y laicos, que oran desde la Palabra y la vida y comparten la fe y la misión. Abrir la participación de laicos/as a los Capítulos Provinciales y Generales (al menos para algunos ámbitos, temas, etc.) 101 Yamisley Natera nos comenta: Este Encuentro ha sido un regalo de Dios. Nos hemos encontrado muchos y muchas teresianas de corazón, que caminamos en búsqueda, acompañándonos en nuestra misión. Les comparto mi reflexión. 1. ¿Cómo nos situamos los laicos de la Comp añía ante este tema? Hoy en día siento como laica que vivo la misión en forma compartida con las hermanas teresianas, estas han hecho un esfuerzo en conjunto para trasmitir y dar el carisma como un regalo, para quien lo quiera aceptar, conllevando esto también una responsabilidad para quien lo recibe, la de darlo en función de construir el reino de Jesús aquí y ahora respondiendo a los llamados que la sociedad nos hace. 2. ¿Que percibimos en la relación laicos/as y hermanas? Es una relación que cada día se ha ido profundizando mas, que hemos ido compartiendo vivencias, alegrías, tristezas, retos ... es decir, que nos hemos hecho familia, en todo el sentido de la palabra y eso es algo bien significativo y hermoso que vale la pena vivirlo y trasmitirlo. 3. ¿Que líneas ori entadoras de este pro ceso descubrimos para los próximos años? Trabajo en conjunto en todas las aéreas, en todos los ámbitos donde nos desenvolvemos llevando el carisma como alternativa de vida. 4. ¿Que acciones concretas se podrían poner en marcha? - Formar equipos dinamizadores entre hermanas y laicos.aaaaaaaaaaaa - Salir del ámbito educativo de nuestras obras e involucrar cada día a más personas en este estilo de vida, de ser teresiano, que para mí es amar y sentir como Jesús, siendo felices en nuestra misión. 102 Cumple 120 años la Compañía de Santa Teresa de Jesús en Yucatán y al dar gracias a Jesús y su Teresa por tan insigne beneficio, me mueve a darle nuevas gracias por tantos innumerables beneficios que le ha dispensado hasta el día de hoy. ¡Cuántas personas han subido al cielo por su medio! ¡Cuántas alabanzas y conocimiento y amor de Jesús, María, José y Teresa de Jesús se han repetido! ¡Cuántas tentaciones, cuántas contradicciones, cuántos combates se han vencido con su amor y gracia! Cf Carta de San Enrique de Ossó en la fiesta del Sagrado Corazón, 1894 El 27 de enero de 2012, fiesta de San Enrique de Ossó nos unimos a su gozosa acción de gracias, desde el cielo, por los 120 años de Hermanas las tere- sianas en MéridaYucatán. Junto con él repetimos “¡Gracias infinitas a Jesús y su Teresa por las gracias que hemos recibido y por las que hemos de recibir!” 1 Este articulo salió publicado en el Diario de Yucatán el 27 de enero del 2012 103 Al contemplar el paso de la historia, en tanto tiempo y espacio, no podemos menos que sentir en la propia carne un misterioso asombro y sobrecogimiento, como el que sintieron los pastores en Belén o los Magos de Oriente. Somos visitadas por la “entrañable misericordia de nuestro Dios”, porque sin su AMOR COMPASIVO sería imposible realizar la misión confiada. Experimentamos cada día, la enorme desproporción entre la llamada vocacional de colaborar con Jesús en la obra de la Redención del mundo, y la realidad de nuestras pobres personas. La misión es infinita y nosotras, como los apóstoles, ¡estamos llenas de limitaciones!, sin embargo, seguimos escuchando en nuestro interior la llamada a ser una prolongación de LA HUMANIDAD DE JESUS, una extensión de su CUERPO VIVO en el mundo, y concretamente en esta amada tierra yucateca. Son la oración, la enseñanza y el sacrificio nuestro ministerio, y a través de él queremos que muchas personas conozcan y amen más a Jesús. Es por esto, queridos lectores y lectoras que les pedimos se unan a nuestra acción de gracias, porque “Dios ha estado grande con nosotras y estamos alegres”. Muchas generaciones han pasado por nuestras aulas, y han aprendido lo importante que es abrirse a la trascendencia y dedicar al menos “quince minutos de oración diaria” para tener una relación personal con Jesús. Santa Teresa decía a sus amigos: “Tened quince minutos de oración diarios y Jesús os dará el cielo”. Niños y jóvenes saben por experiencia, que la entrega total (sacrificio) de AMOR, es lo único que nos hará felices y siguen así, las huellas de esta gran santa, que nos invita a tener “una santa osadía” entregando con fortaleza toda nuestra persona a Jesús de Nazareth. Y por último, el ministerio de la enseñanza, con el que queremos transformar la sociedad y que absorbe muchos de nuestros desvelos. Creemos que a través de la educación de niños y jóvenes se puede formar la Imagen de Jesús en sus mentes y corazones. San Enrique de Ossó exhortaba a los jóvenes formados en nuestros Colegios y grupos apostólicos: “De ustedes depende que la sociedad entera sea de Jesucristo”. 104 ¡Cuánta vida y trabajo hecho, y cuánto por hacer! ¡Tenemos una historia que recordar y contar, pero más que nada, tenemos una historia que construir! Y en esta coyuntura de celebración de los 120 años, con el calendario maya que anuncia el fin de una época y el inicio de otra, queremos con muchos yucatecos y yucatecas, sentarnos a la mesa juntos, sembrar esperanza, tejiendo la posibilidad de “otro mundo”, donde haya más justicia, donde todos sean respetados e incluidos, donde nos podamos enjugar las lágrimas unos a otros, un mundo donde la gente no muera de hambre y todos puedan saciar su sed con un poco de agua. ¡Soñamos con tiempos nuevos! Y por ellos “peleamos como fuertes hasta morir en la demanda” como dice Teresa. “Todos los que hemos recibido el espíritu teresiano somos herederos de los sueños, del fuego y la pasión de Teresa de Jesús y de Enrique de Ossó, de su audacia, realismo y humildad, de todo lo que les hizo fuertes y osados en sus respuestas. Ellos nos han contagiado que “el amor siempre está bullendo y pensando qué hará”… ¡YA ES TIEMPO DE CAMINAR!” (Doc. Capitular). Mª Rosaura González Casas, stj 105 100 ANOS DE PRESENÇA TERESIANA NO BRASIL UMA FESTA DE PAIXÃO, AMOR “ Va mos pra f es ta da vida ! É a f es ta do amo r! E O un i ver so s e a leg ra e s e en che d e co r. Ho j eDOAÇÃO. sou par t e d est e son ho qu e voc ê d eix ou . " Uma festa que jamais será esquecida. Um centenário de amor e paixão celebrado sob o manto sagrado da Mãe Aparecida, onde cada romeiro(a) teresiano(a), ao se envolver, pode imaginar como Santo Enrique de Ossó deveria se sentir divino, ao planejar e concretizar tantas peregrinações que realizou em sua vida. Os 100 anos de presença teresiana no Brasil foram uma oportunidade para celebrar a paixão evangelizadora por Jesus Cristo e a certeza de tê-Lo tornado conhecido e amado no coração em milhares de leigos (as) teresianos(as). A alegria e a fé já eram contagiantes mesmo nos encontros preparatórios, onde “entramos em contato com a realidade do nosso querido Santo Enrique” e percebemos o quanto ele foi sedento em espalhar pelo mundo o Carisma Teresiano. Fizemos a experiência de celebrar, em grande peregrinação, junto a Nossa Senhora Conceição Aparecida do Brasil e oferecer toda a vida, a missão com o desejo de que fique impregnado o “viva Jesus nos corações das famílias”. 106 A Romaria Teresiana ao Santuário de Aparecida foi realmente uma inspiração divina. É possível imaginar o percurso de cada caravana partindo dos vários pontos do Brasil: romeiros (as) cantando alegremente e cheios/as das melhores expectativas. E foi uma alegria sem tamanho o encontro dos diversos grupos. A recepção calorosa, os rostos extasiados e a certeza de cada coração, repetindo para si: que maravilha, sou parte deste Sonho e desta Família! E nesse clima de irmandade, Jesus Eucarístico veio ao nosso encontro, através da participação na Celebração Eucarística na Basílica, selando com uma benção especial o Centenário Teresiano. Oh! Quanta Alegria!!! No depoimento de alguns amigos (as) teresianos (as), é possível imaginar e sentir desde as entranhas, o que foi a celebração centenária: algo fascinante; um momento único; uma experiência de fé e de vida; grande felicidade e sonho realizado; um momento enriquecedor ao conhecer outros amigos (as) teresianos (as) na casa da Mãe Maria; perceber a presença de Jesus Cristo agindo na vida de cada um, de cada uma; renovação da fé; ou simplesmente a sabedoria de Deus em nossas vidas. Bom demais!!! Foi lindo poder ver a maravilha do amor transbordante que Deus fez e faz na vida dos seus. Cada um de nós, leigos (as) teresianos (as), carregamos gravado na mente e no coração a certeza de que somos responsáveis por continuar a missão teresiana de tornar Cristo conhecido e amado onde quer que estejamos sendo simplesmente cristãos autênticos ao estilo de Teresa. Voltamos e seguimos com a certeza de que a Família Teresiana deve continuar contagiando as pessoas com o projeto do Jesus Cristo e gritar com a própria vida: VIVA JESUS! MORRA O PECADO! Que mais encontros teresianos sejam realizados, no Brasil e no mundo, pois Jesus o quer, Enrique o quer, Teresa de Jesus o quer e nós também queremos. Fraternalmente, em nome dos amigos (as) teresianos(as) Claudiner Gonçalves Sous 107 Há eventos que surgem como estrelas radiosas. Nascem como fruto de uma grande ternura, de um profundo enamoramento, de uma vivênc ia plena de re alizações de amor... tomam corpo... aquecem, iluminam e irradiam dinamismo, alegria, comunicação, louvor, gratidão. Assim fo i naquele dia quando, em Porto Alegre, na Assemblé ia de 2010, a Província de Nossa Senhora Aparecida pre viu o encerramento do seu centenário aos pés da Mãe Aparecida. Nossos olhos começaram a brilhar de um modo especial, antegozando o encontro da família sob o olhar da Mãe. A gente suspeita e sabe - de fonte segura - que em toda essa euforia estava a herança da terna devoção de Teresa de Àvila à Maria e do carinho profundo de Enrique pela Mãe do Céu. A sucessão dos meses não poderia descortinar toda a vibração que o Encontro traria. Foi um tempo de muita gratidão pelos 100 anos de Presença Teresiana em Livramento, Itaqui, Brasil! Dezenas de Irmãs, de várias nacionalidades, muitas já falecidas, fize ram a história teresiana no solo bra sileiro, nas fronteiras com o Uruguai e a Argentina. Irmãs que geraram outras Teresas e Enriques na Família Teresiana que hoje se agiganta e começa a ter nova visibilidade. 108 A primeira semana de julho foi como o regorgitar de oração, preparativos, sentim entos múltip los, antevendo o grande Encontro. Caberia tanto em tão pouco tempo? Cada caravana teve seu ritmo, sua organização, suas características, mas certamente a rede de oração que se fez em direção a cada uma foi o mais belo poema que Enrique e Teresa puderam ouvir por estas terras... Com certeza, fomos um só coração e uma só alma. E o Encontro?!!! Haja c oração! Indizíve l. Laços de amizade, alegria, gratidão pela caminhada, certeza da ação da graça de De us em nossas vidas... Tudo nos dizia: Avante, Pro víncia! Estás começando! Jesus, que te fez Companhia nestes 100 anos, caminha contigo. Lança-te mar adentro ! Tens ainda uma longa jornada. Muitos estão à tua espera. Ora. Inova. Une forças. Estabelece laços. Olha para Enrique, Teresa e MARIA! Crê. Espera. Ama muito. Sem medida! Zilca Rodrigues Soares, stj 109 Finalizando el año 2011, un buen número de exalumnas del colegio Teresiano de Bogotá quiso aprovechar que estábamos la mayoría de las Hermanas de la Provincia reunidas en Asamblea y el 14 de diciembre nos invitaron a celebrar: En la finca de la Casa Provincial habían construido un surtidor de agua con la forma de un hermoso pozo, – este fue su regalo a la Provincia–. Alrededor de ese pozo se fueron congregando las personas de dos y tres generaciones relacionadas con la Compañía en estos 50 años. Allí se realizó la bendición del agua y aspersión al pueblo; no sin antes Martha Ahumada – antigua alumna, de las más antiguas – hiciera la ambientación y explicara los motivos que les sugirieron para que las ex alumnas teresianas representaran en ese pozo y el agua lo que tantas veces Teresa de Jesús les había sugerido en sus cuartos de hora. Desde allí se pasó a la Eucaristía en el Coliseo del Colegio también preparada por ellas, y muy participada. Habían hecho una síntesis de la historia del Colegio desde sus inicios y conseguido fotos bien interesantes. Con todo ello lograron un guion que fueron proyectando a continuación de la Eucaristía. Y como otro fruto de la proyección de la Provincia, un coro de 130 niños de 5 a 12 años del Centro comunitario Jesús Maestro, que se forman en dicha obra en el Barrio Ciudad Bolívar de Bogotá, presentaron un bello concierto de villancicos con la dirección de la Hna. Sabine de la comunidad Hermanas de Nazareth, que colabora con ellas. 110 Estas fueron las palabras de la Hna. Provincial María Helena Rivillas: “A la sombra de María crece y se desarrolla la Compañía” es una frase de nuestro Padre Enrique de Ossó que motivó las diferentes Fundaciones, entre ellas la de la Compañía en Colombia. La Hna. Eulalia Sagristá lo narra así: “ La salida de Cuba por la revolución facilitó el poder abrir esa fundación. Se repetía lo que otras veces había sucedido a la Compañía. “Si nos cerraban una puerta, el Señor nos habría otra”. Y “lo primero que salta a mi recuerdo, es la acogida que yo encontré en todos. Mi padre nos decía: “en todo hay algo bueno”, pero yo encontré algo muy bueno: “todas las puertas abiertas” . LasaaLas Hermanas durante estos 50 años, en comunidad de discípulas, hemos ido aprendiendo a conocer y amar a Jesús y a hacerle conocer y amar, conmovidas por la realidad que vive el pueblo colombiano, comprometidas desde nuestra fragilidad y posibilidades, desde una confianza ilimitada en el amor y la bondad de Dios y desde nuestra vocación de educadoras, con las situaciones que afectan a la vida y dignidad de las personas con las que hemos ido viviendo en Bogotá, Medellín, Envigado, Cali, Ibagué y Aguachica. Como mujeres consagradas convocadas por Dios a promover los intereses de Jesús para restaurar en Él todas las cosas, en compañía de otras y otros hemos ido caminando en la inserción entre los más pobres, en nueve fundaciones con que cuenta la Provincia: seis se encuentran atendiendo población afectada por la violencia, el desplazamiento forzado y la exclusión de los servicios básicos para vivir. Con ellas y ellos queremos seguir cada vez con más compromiso y dar un paso más, que será no sólo estar en medio de esta población, sino “dejarnos transformar por ellas y ellos” en mesa compartida porque “todavía queda sitio en la mesa del carisma para compartir y desplegar su fuerza” es la invitación del XVI Capítulo general que acabamos de vivir. 111 Las Teresianas hemos heredado los sueños, el fuego y la pasión de Teresa de Jesús y de Enrique de Ossó, su audacia, realismo y humildad, que los hizo fuertes y osados en sus respuestas. Ellos nos han contagiado que “el amor siempre está bullendo y pensando qué hará…” YA ES TIEMPO DE CAMINAR, EN MESA COMPARTIDA, por esas sendas y caminos que el Espíritu nos ha ido mostrando. Agradecemos desde lo más profundo de nuestro corazón a las personas que acompañaron los pasos para que la Compañía hoy pueda celebrar con una inmensa alegría estos 50 años de presencia en Colombia: 112 Gracias a las Hnas. Eulalia Sagristá e Isabel Gomis, las primeras Hermanas que establecieron todos los contactos para que la Compañía en Colombia fuera realidad hasta hoy. Y a la Comunidad del Colegio El Paraíso, CARACAS, pues ellas fueron las que afrontaron los primeros gastos y los muchos que surgieron después en la compra del terreno de la Autopista y en la construcción del Colegio. Agradecer los años que como una sola Provincia vivimos los logros y dificultades con nuestras Hermanas de Venezuela. A todas las Hermanas Fundadoras que, con las Hnas. Eladia Fernández y Piedad Benito (actualmente en la Provincia), han pasado por la Provincia, que han dejado huellas imborrables del Carisma Teresiano en Colombia, que se encuentran en otros países y algunas en el cielo. Al Vicario de Religiosas, Monseñor Angarita, e.p.d., a quien le debemos mucho. Al P. Farías, Presidente de la Conferencia de Religiosos/as de aquella época Al Párroco de la Iglesia de la Virgen de Chiquinquirá, parroquia a la que pertenecimos durante los primeros años Al P. Quintana, Jesuita que orientó mucho sobre la Escuela. A las Religiosas Esclavas del Sagrado Corazón donde nos hospedamos, hasta que llegaron las Hermanas que iban a formar la Comunidad. A los padres de familia, que nos “entregaban” sus hijas para que las educáramos y formáramos sin haber tenido ninguna trayectoria en Colombia. A Martha Ahumada y Martha Chiriví dos exalumnas que comparten misión con nosotras en Bogotá y quienes han puesto en juego todo el cariño y agradecimiento para que estemos hoy aquí agradeciendo la llegada y el arraigo de la Compañía en Colombia. A las comunidades Educativas de las Obras y Presencias en Colombia. Exalumnas y exalumnos. A todas las personas que comparten con nosotras la misión en diferentes campos. Cuando en 1961, las Hermanas de la Compañía de Santa Teresa de Jesús se vieron obligadas a abandonar Cuba y por consiguiente los colegios y obras teresianas que allí tenían, encontraron una nueva oportunidad: Colombia. Ya el Cardenal Luis Concha Córdoba había dado su permiso para que las religiosas teresianas iniciaran aquí su camino de Evangelización, pero faltaba ese empujoncito que Dios les estaba dando con su salida de las Antillas. El 12 de febrero de 1962, y cómo número cabalístico, con la compañía de doce Hermanas inició labores el Colegio Teresiano de Bogotá. Eran como esos 12 apóstoles a quiénes Jesús delegaba su ministerio de maestras. Y como no hay maestro sin alumno, 84 estudiantes, la mayoría niñas y unos cuantos niños confiaron en estas Hermanas. Los padres de familia estaban encantados por la cercanía de estas monjitas que hablaban con sus ces y sus zetas españolas y que se reían de las diferentes anécdotas que a diario vivían mientras iban conociendo la forma de hablar de los bogotanos y en general de los colombianos. Al finalizar el año, el número de niñas había aumentado y se hablaba de 111 estudiantes. El proceso se inició en una casa de la avenida Caracas con la calle 47, que aunque grande para una familia, era pequeña para el colegio, por eso las Hermanas tuvieron que vestir de dormitorio la casa en las 113 noches y vestirla de colegio en el día. Así transcurrió el primer año, con la inmensa colaboración de los padres de familia que aspiraban ver a sus hijas, algún día, graduarse como teresianas, pues el cariño de ellos hacia la comunidad iba in crescendo dado el don teresiano tan palpable en estas Hermanas: la acogida. Aquí vale recordar y agradecer que la primera niña que se matriculó, es hoy la Hna. Amparo Tarazona, stj. Así, durante ese primer año se llevaron a cabo varias actividades, con el fin de recoger fondos y poder comprar un terreno que facilitara una construcción cómoda. La visión futurista de la superiora de entonces, Madre Eulalia Sagristá, permitió la firma del contrato de compraventa del terreno el 15 de septiembre del mismo año, en la Autopista Norte con calle 152. Lugar que parecía lejano, y a donde, mientras se erigía el colegio, se llevaba a las estudiantes de paseo: todo un paseo desde la calle 47 con avenida Caracas hasta la calle 152. Al año siguiente, y ya con 200 estudiantes, iniciaron labores escolares con un colegio un poco más grande, pues se arrendó la casa contigua para acoger a todas aquellas familias que tocaban la puerta con el deseo de pertenecer a esta familia que empezaba a hacer historia en la sociedad bogotana. El 13 de julio de 1964 se llevó a cabo la ceremonia de bendición y colocación de la “primera piedra” en el terreno donde hoy se encuentra nuestro “COLEGIO TERESIANO DE BOGOTÁ”. Pero qué era lo nuevo que traían estas hermanas y que empezaba a atraer la atención de la gente y, como un imán, quienes las conocían quedaban prendados? Un CARISMA. El carisma teresiano con el que su fundador Enrique de Ossó, en 1876 hizo realidad su sueño de formar una comunidad de Hermanas que se dedicara a trabajar con los niños y las niñas por la conquista del mundo. Así, estas Monjitas del Colegio Teresiano iban cautivando con su alegría, su humildad, su interioridad y a las estudiantes les iban inculcando la oración como principio; por eso no faltaría un día en la vida de una teresiana o de un teresiano sin un “cuarto de hora de oración” al estilo de la Santa, para quien esta oración era un “estar a solas con Quien sabemos nos ama”. 114 Así, pues, no fue casualidad el que las Hermanas llegaran a Colombia, no fueron cosas del destino el que lograran instalarse dentro de nuestra sociedad. Ellas llegaron para quedarse porque Dios, en su infinita misericordia, envió a este país un rayo de su luz para iluminar, desde el carisma teresiano, una sociedad ávida de justicia, de amor, de calor humano, de paz. Sentadas, de izquierda a derecha: Josefina Goicoa Eulalia Sagristá Isabel Gomis De pie, de izquierda a derecha: Primera Comunidad 1962 Ausencia Miguel Carmen Aldai Piedad Benito Eladia Fernández Agustina Hergueta Josefina Ferrer Eva María Cuscó Julia Fojo Hipólita Lozano Gabriela Ospina Maritza Villacís Ligia Castaño Esperanza Montaña Martha Mejía Amparo Roig Ana María Zalba Eladia Fernández Marta Ramírez Mireya Sarrazola Rosa María Guardiola Marta Villada María Helena Rivillas Martha Ahumada Hermanas celebrando en el colegio de Bogotá. Febrero de 2012 Marta L. Villada 115 PROYECTO “MOSAICO TERESIANO” Desde Desde hace varios años, la PLATAFORMA STJ estamos acariciando una iniciativa MUSICAL, y nos parece que ya ha llegado el tiempo de ponerla en marcha. La ocasión es única: LA CELEBRACIÓN DEL V CENTENARIO DE LA SANTA. ¿De qué iniciativa estamos hablando…? Os contamos ahora este sueño… porque de soñar se trataba… En el sueño vimos a la Familia Teresiana de Enrique, vestida de diferentes colores, ritmos, idiomas, expresiones, voces… y todos sus miembros tenían un sonido en común: se llamaba TERESA. Poco a poco el sueño fue cobrando realidad, y un día escuchamos una voz: “¿Por qué no cantar, haciendo viva hoy a Teresa de Jesús…?” Era la voz del Profeta del amor. Y recogimos el reto. ¡Sí!, Teresa de Jesús sigue siendo “una mina por explotar”, y también era inspiración para cantar… Seguimos escuchando y la voz nos hablaba de diversidad, de riqueza intercultural… pero también de colaboración, de unión… ¡como si entre todos fuéramos a componer un MOSAICO con colores y sonidos teresianos! ¡Y pudiera quedar recogido en un C.D.! ¡EL SUEÑO SE PODÍA HACER REALIDAD! Y en esa realidad estamos: Cada Provincia está invitada a participar, CREANDO Y GRABANDO en su lugar de origen, una CANCIÓN de inspiración TERESIANA. De las 17 Provincias y una Delegación de la Compañía, ya hay 11 Provincias que tienen nombrado un ENLACE para gestionar la grabación. (Os invitamos al resto a estar representadas en este MOSAICO TERESIANO). En el sueño, esta grabación está hecha con los ritmos, las voces, los sonidos, la sensibilidad, el idioma de cada país, su estilo de cantar… y seguimos soñando despiertas con que así sea. Está previsto comenzar a recoger las canciones en septiembre de 2012. Compartimos con todos este sueño, que ya lleva camino de hacerse realidad. Y os pedimos apoyo para que los sonidos Teresianos se escuchen por muchos lugares del mundo. Plataforma STJ 116 NOTICIAS BREVES P R O F E S I Ó N T E M P O R AL - Hna. Alejandra Rea el 11 de marzo en León-México - Hna. Ileana Urutchet el 17 de marzo en Resistencia B O D AS D E O R O Octubre Día 11: - Hna. Ana Mª Cifrián - Hna. Mª Nieves Velasco - Hna. Mª Dolores Pérez - Hna. Rosario Toscano San Sebastián-Residencia de Hermanas Madrid-Casa Provincial Salamanca-Colegio Huelva-Colegio Día 13: - Hna. Begoña Gutiérrez - Hna. Carmen Díaz - Hna. Mª Blanca García - Hna. Mercedes Cavanna Zaragoza-Teresiano del Pilar Zaragoza-Teresiano del Pilar Madrid-Casa Provincial Provincia VE Las Palmas-Los Tarahales Día 15: - Hna. Blanca Sanz Tejero - Hna. Cândida Barros - Hna. Mª Izaskun Saizar - Hna. María Roca - Hna. Mª Carmen Martínez Cecina Arcos de Valdévez San Sebastián-Residencia de Hermanas Barcelona-Casa Provincial Tortosa- Residencia de Hermanas Día 16: - Hna. Concepción Martín Salamanca-Colegio 117 N O M B R AM I E N T O S d e H E R M AN AS S e c r e t a r i a G e n e r a l : Hna. Mª Teresa López Gago Provincia San José S e c r e t a r i a P r o v i n c i a l : Hna. Lourdes Seijas E c ó n o m a P r o v i n c i a l : Hna. Luiza Tessari D e l e g a d a d e E d u c a c i ó n : Hna. Lourdes Seijas Coordinadoras Locales: - Hna. Beatriz Oholeguy Hna. Lourdes Seijas Hna. Consuelo García Hna. Patricia Vaca Hna. Miriam Rugeiro Hna. Rosario Ríos Montevideo: Residencia San José Montevideo: Montserrat-Casabó Buenos Aires: Col. Sta. Teresa Santa Cruz: El Fortín Buenos Aires: Barracas-Montegrande Rocha: Colegio San José Provincia Nuestra Señora de Coromoto C o o r d i n a d o r a P r o v i n c i a l : Hna. Mª Rosa Castellanos C o n s e j e r a s : Hna. Zobeida Figuera ( Vicaria) Hna. Luzmila Velásquez Hna. Aída Boza Hna. Nieves Iriberri Provincia Nuestra Señora Reina C o o r d i n a d o r a P r o v i n c i a l : Hna. Teresa katumbu C o n s e j e r a s : Hna. Domingas Luzia (Vicaria) Hna. Teresa Kalende Hna. Cristina Valemela Hna. Madalena Ngeleya Coordinadora Local: - Hna. Teresa kalende 118 Lumbala Nguimbo P P Pr o vi nc ia Ma ría I nm a c ula da C C o o r d i n a d o r a P r o v i n c i a l : Hna. Mª Isabel da Rocha C H H H C o n s e j e r a s : Hna. Mª Amelia Caldas da S. Martins (Vicaria) Hna. Conceição Faria de Oliveira Hna. Mª da Conceição de S. Marques Hna. Alcinda Dias de Oliveira Provincia Padre Enrique de Ossó S e c r e t a r i a P r o v i n c i a l : Hna. Susana Serrato E c ó n o m a P r o v i n c i a l : Hna. Josefina L. de la Mora D e l e g a d a d e E d u c a c i ó n : Hna. Mª Guadalupe Flores Provincia Virgen de la Esperanza D e l e g a d a d e E d u c a c i ó n : Hna. Esther Medina Provincia Sagrado Corazón D e l e g a d a d e E d u c a c i ó n : Hna. Pilar Liso Provincia Santa María de Guadalupe Coordinadoras Locales: - Hna. Herlinda Bañuelos Hna. Mª Elena Villa Hna. Clemencia Martínez Hna. Lourdes García Hna. Mª Luisa Olvera Hna. Nicanor Álvarez América de Puebla Instituto Cultural Tizimín Sierrita Casa de Espiritualidad Oxeloco 119 Han entrado en la Vida HNA. LIDIA DEL NIÑO JESÚS FERRERO ZAPATERO Provincia del Pilar “Ya están pisando tus pies sus Umbrales”… Decíamos con gozo contenido en tu funeral, ante tu inesperada partida el día 10 de Enero de 2012. Al mismo tiempo imaginábamos tu cara de sorpresa ante el cambio de paisaje. ¡Llegaste, Lidia! ¡Y cómo no celebrar contigo que hayan terminado para ti los malos momentos de tu tramo final!… en los que tu forma de ser, tan espontánea y comunicativa, se sentía literalmente atada durante el día a la silla de ruedas y por la noche a la cama. En las Residencias- Enfermería se hace muy evidente que no es fácil asumir la imparable disminución de nuestras facultades. Vienen con frecuencia a la memoria las palabras de Jesús a Pedro: “Cuando eras joven, tú mismo te ceñías el vestido e ibas adonde querías; cuando seas mayor, extenderás los brazos y será otro quien te ceñirá y te conducirá adonde no quieras ir”. Te gustaba escuchar la canción de Fabiola, “Tengo una historia que contarte: quiero recordar cuando allá en el llano me encontré contigo, ahora que estamos aquí subiendo a la cumbre… mi pisada sobre la tuya”. Es una canción que explica muy bien todo lo que yo siento: Entré en la Compañía a los 16 años, en el Noviciado de Tortosa.- Después estuve seis años en el Colegio de Calahorra. Allí hice los votos perpetuos.- De mi experiencia en este primer destino recuerdo muchas cosas. Como dice la canción fue “el llano en el que Jesús me dio la mano de Esposo-Amigo”… Yo era entonces muy alegre y dicharachera, muy cuidadosa y amiga de ayudar en todo. Ahora es que no oigo lo que me dicen… Y es que la sordera aísla. No creas que es broma. En Pamplona estuve 17 años. Me acuerdo muchas veces de las Hermanas con las que conviví y trabajé. Siempre me gustaba echar una mano en el Colegio. En Pamplona me aficioné a leer…por eso ahora me veis siempre con revistas en la mano. Me gusta estar al día de lo que pasa en el mundo. Llegaste a la Residencia de San Sebastián en el verano del 2004. Tenías problemas de salud, pero te valías por ti misma y tu natural desenvoltura te llevaba a caerte con frecuencia; cosa a la que tú no dabas apenas importancia, aunque a nosotros 120 nos llevaba de cabeza. Cada caída tuya se convertía en un sainete que nos hacía reír a todas. Tu carácter sociable y comunicativo te hacía intervenir en la conversación con mucha gracia. Sin duda la caída más fuerte, en los últimos “pasos” de la danza que te ha tocado bailar en esta vida, ha sido la pérdida de la autonomía, el pasar a depender por completo y para todo de las personas que te cuidaban. Sabemos bien que es un reto que da vértigo, pero sólo tú sabes cómo fue este último dolor que precedió a tu experiencia cumbre: Todas hemos visto alguna vez en primavera un cerezo en flor que, de la noche a la mañana se cubre de blanco. Decenas de miles de flores se abren de repente. Nadie puede producir algo semejante, porque es un prorrumpir de la Vida misma… Cuando un bailarín abandona un paso para dar otro, sólo se trata de la continuación de la Danza… Terminamos con el final de la canción de Fabiola. ¡Va por ti, Lidia! “Estreno la locura. Soy la que Tú amas. ¡Aquí estoy! ¡GRACIAS porque soñé ser tuya para siempre!” HNA. ASUNCIÓN DE JESÚS EUCARISTÍA VALLEJOS JABALA Provincia Virgen de la Esperanza “Morir… no es cerrar los ojos porque llegó la noche final, sino bajar los párpados para no ser encandilados por la luz. No es cruzar las manos porque llegó el final de la tarea, sino descansar un poco porque pronto comienza la tarea definitiva. No es detener los pies porque se acabó el camino, sino darles un descanso para estar en pie mañana. No es callar la voz porque llegó el silencio para siempre, sino darle su descanso porque mañana hay que amanecer cantando. No es terminar el camino en la oscuridad final, sino cruzar el túnel hacia la Luz total. No es sufrir la última desilusión porque todo acaba, sino vivir la última esperanza porque todo empieza; no es morirse para siempre, sino comenzar a vivir de otra manera” En nuestra hermana Asunción Vallejos se hicieron realidad estos versos de José Luis Martín Descalzo. Poco a poco fue apagándose. Fue callando su voz y dejando de hablar progresivamente, pero no perdió su sonrisa. Detuvo sus pies en las últimas semanas, 121 ella que había caminado tanto en sus 103 años de vida, como el infatigable Javier, navarro igual que ella, a cuyo castillo iba todos los años con las alumnas del colegio de la C/ Goya de Madrid. Fue cerrando los ojos durante más tiempo en sus últimos días, hasta la noche en que comenzaba el día 7 de febrero de 2012. Se fue dormida en la oscuridad de la noche y despertó a la Luz total en la Casa del Padre. La tarde del día 6 cruzó sus manos sobre el pecho, no porque llegara el final de su tarea – “Pronto me iré de este mundo”, le había dicho al P. Bardón 10 días antes – sino en un amoroso gesto de abrazar al que amaba, al que había dado su vida, porque estaba dispuesta y preparada para el encuentro. Habían trabajado mucho esas manos en sus 82 años en la Compañía, en los colegios de Zaragoza –Teresiano del Pilar, Barcelona-C. Madre, Orán, Oviedo, Madrid-Goya, San Sebastián-Colegio, Madrid-Puebla y Madrid-Jesús Maestro. En algunos estuvo dos veces, siempre como excelente profesora. En el de la C/ Goya, en Madrid, durante 20 años, fue una institución hasta su jubilación. Así lo han mostrado sus antiguas alumnas a lo largo de los años, con visitas y mucho cariño, hasta el momento final. En la comunidad de Jesús Maestro, ya retirada, ha permanecido durante 35 años, hasta su muerte. No pararon, ni sus manos ni sus azules ojos. Leía muchísimo y así lo enseñó. Hasta el final mantuvo vivo su espíritu inquieto e interesado por saber del mundo día a día, por conocer la actualidad. Su fuerte temperamento navarro fue dulcificándose con el paso de los años. Fue mostrando, poco a poco, en su ancianidad, esos signos de ternura de quien ha vivido mucho, de quien se sabe necesitada, y agradece con un beso, una sonrisa, una caricia, una palabra, las muestras de cariño y atención de quienes se acercaban a ella. No querías palabras grandilocuentes a tu muerte, escribiste hace años, Asunción. No es cuestión de alargarnos, pero sí de manifestar públicamente nuestra gratitud a Dios por el regalo de haberte tenido tantos años con nosotras, especialmente para la hermana que te cuidó. Y nuestra gratitud a ti por tu fidelidad, tu oración – en los últimos días visible cada vez que te persignabas en silencio, o cuando intentabas comenzar algún salmo -, tu delicadeza, tu fortaleza, como hija de la gran Teresa y del hombre del “Todo por Jesús”. Fuiste siempre fuerte, y te marchaste débil, con la fortaleza de quien se sabe toda de Dios, con la misión cumplida. Gracias, Dios, por tu obra en nuestra hermana Asunción. Concédele tu Paz eterna y descanse en tu Amor para siempre. 122 HNA. INÉS RAQUEL DE JESÚS VEGA ÁLVAREZ Provincia Nuestra Señora de Coromoto El Señor llamó a Inés a su lado el día 27 de febrero de este año 2012, en la Comunidad de Hermanas del Colegio Teresiano El Paraíso, de Caracas. Había nacido en Camagüey (Cuba), el día 15 de noviembre de 1926. Estudió en el Colegio Teresiano de su ciudad, guardando muy buenos recuerdos de los primeros años de su vida; contaba muchas anécdotas de su época de colegiala teresiana y de su Camagüey querido. Entró al Noviciado de San Antonio, Texas, el año 1950. A lo largo de sus sesenta y dos años de Vida Religiosa, vivió y ejerció su apostolado en: Santa Clara, Guantánamo (Cuba), donde estuvo hasta el año 1961 en que, junto con las demás Hermanas, tuvo que salir hacia España, a causa de la revolución de Fidel Castro. Allí fue destinada a Madrid (Jesús Maestro, y luego en Asunción (Paraguay) y Santiago (Chile). Desde allí vino a Venezuela el año 1966, a la Comunidad de El Paraíso; a partir de 1970 su destino fue el Colegio Teresiano de La Castellana, también en Caracas, donde vivió hasta hace tres años, puesto que a raíz de su grave enfermedad, volvió a El Paraíso, donde está la Comunidad de Hermanas mayores y enfermas, junto a la del Colegio. Inés se distinguió por su gran amor a la Compañía; fue una mujer de fe profunda y de oración, muy espiritual; siempre irradió con mucha paz y un gran amor a Jesús, especialmente en la Eucaristía, pasando muchas horas delante del Sagrario. Su oración de petición, con frecuencia, era por la santificación de los Sacerdotes y el aumento de vocaciones al Sacerdocio y a la Vida Religiosa, especialmente para la Compañía y pedía por la perseverancia en la vocación de las Hermanas. Muy devota de la Virgen María, de manera particular bajo la advocación de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre, Patrona de su Cuba natal. Algo que la distinguía era su cariño, su bondad y su generosidad, además de su cercanía y amena conversación. Se mostraba siempre sonriente, amable, sencilla, comunicativa, sociable; muy dada a los demás y siempre disponible. Admiraba su cálida relación humana, la capacidad de relacionarse con las personas y estar pendiente de todo lo que les sucedía, aunque fuera de poca importancia y, esto, tanto en acontecimientos alegres como tristes. El Señor la dotó de cualidades personales adecuadas para ser Maestra por vocación y por convicción, formando a centenares de Alumnas en “virtud y en letras”. Poseía excelentes cualidades para cultivar y mantener amistades, sobre todo entre las ex alumnas, estando siempre pendiente de sus alegrías y tristezas. Fue muy querida y respetada por las alumnas, mamás y antiguas alumnas. 123 Trabajó con gran empeño y dedicación con el MTA-Comunidades, preparando las reuniones y retiros con mucho esmero. Por bastante tiempo dirigió un grupo de oración dedicado a la Rosa Mística, intercediendo por las personas que se encontraban enfermas, en especial las que tenían cáncer. Tuvo gran interés por la alfabetización de adultos, especialmente a través de los Cursos de IRFA (Instituto Radiofónico Fe y Alegría), con los cuales trabajaba hasta que llegaban al Sexto Grado, conquistando a muchas de sus exalumnas para esta noble misión. Siempre manifestó gran empeño, entusiasmo y amor por las Misiones, inculcándoselo a sus alumnas, sobre todo a través de la Infancia Misionera, acompañándoles a los Encuentros Nacionales; atrayendo, también, a las alumnas mayores y a las exalumnas para esta noble misión: con este apostolado disfrutaba mucho, lo mismo que con todo lo que hacía. Además de las Misiones, en todo momento mostró una preocupación afectiva y efectiva por los por los más pobres y necesitados… dedicando a ello lo mismo su trabajo que su tiempo, disfrutando. Semanalmente, preparaba un pequeño mercado para los trabajadores del Colegio, lo mismo hacia en Navidad. De la misma manera, siempre colaboró con Instituciones dedicadas a ancianos desatendidos y a niños abandonados. Para estas obras apostólicas y sociales necesitaba dinero, consiguiéndolo con los más variados medios, ya que poseía un "carisma negociante y productivoautogestionario", con venta de helados, tómbolas, rifas, peticiones directas a las personas y, además, visitando tiendas y negocios de personas conocidas. Su forma de hablar era con mucha rapidez, razón por la cual era necesario poner gran concentración-atención para "alcanzar" el ritmo de su celo apostólico, en lo que trataba de comunicar. Hasta que se quedó totalmente en cama, parecía que no pasaban los años por ella: las Hermanas y otras personas que la conocían desde hace más de cuarenta años que llegó a Venezuela, comentan que la veían siempre con el mismo aspecto de entonces, tanto física como espiritualmente y, lo mismo, en el entusiasmo que ponía en todo lo que organizaba y hacía. Sin embargo, el Señor la asemejó, en los últimos años de vida, a su Hijo en la cruz. Hacia el 2006 comenzó a tener los síntomas de la enfermedad -múltiples infartos cerebrales-, que fueron minando su capacidad de valerse por sí misma y de relacionarse con el mundo de forma adecuada. A veces no comprendía qué le estaba sucediendo o no se daba cuenta, pero, en otras, fue plenamente consciente del avance incontrolable de su enfermedad. Nunca hubo una queja aunque sí mucho dolor e impotencia. Se dejaba ayudar y siempre había una palabra de agradecimiento. Su vida se fue consumiendo lentamente como una vela: Desde el año 2008 quedó postrada en 124 una cama, con los músculos del cuerpo totalmente rígidos. Su máxima expresión era la de alguna frase o palabra coherente y gestos faciales que nos demostraban su presencia consciente en este mundo; sin embargo, siguió siendo tan agradecida y delicada como siempre: En medio de su sufrimiento, daba a entender que agradecía el calmante que se le aplicaba o cualquier cosa que se le hacía. Una Hermana ha dicho de ella, hablando de este tiempo: “Dios me regaló la dicha de compartir con ella un año de su enfermedad… callada… sin quejarse… edificante… acrisolada en el dolor”. Otra Hermana dice: “Se encontraba muy enferma, momentos en que vi en ella una delicada presencia del misterio de Dios tan genuino y tan real. Esta experiencia me hizo entrar en contacto con ella de una manera mucho más especial; fue palpar su entrega a Dios hasta las últimas consecuencias; fue oírle decir tantas palabras y a la vez nada: tener a un Cristo delante de mí era conducirme a Dios, ella me llevaba a orar”. Por fin, la vela de su vida se apagó silenciosamente. Todas las Hermanas que estuvimos cerca de ella en este tiempo, fuimos testigos hasta su muerte, de la presencia de un Cristo muy llagado, compartiendo la pasión de Jesús, en medio de la comunidad. Una exalumna escribió el día de su muerte: “Muchos años duró el reposo de la M. Inés, al final de su vida; pero su recuerdo para todas las Teresianas, especialmente para quienes compartimos su vida, como educadora y guía de nuestras hijas además de orientadora del MTA, nos deja vivencias muy agradables, pudiendo admirar en ella su entrega total a las misiones y a los pobres”. Descanse en paz nuestra querida Hermana Inés. HERMANA MARÍA LOURDES DEL NIÑO JESÚS HARTMANN MOMBACH Provincia San José La Hna. Lourdes llegó a esta Comunidad, que antes era el Noviciado de la Provincia, el 2 de marzo de 1957 y aquí permaneció hasta que en la noche del 21 de febrero de 2012, al Padre le pareció bien llevarla del todo consigo, cuando menos lo esperábamos. La vida de Lourdes fue desde siempre de una entrega total a Dios y a los hermanos. Todo lo que deseamos expresar son testimonios de hermanas de la Provincia, especialmente de las de su comunidad, de personas que convivieron día a día con ella cooperando en el cuidado de las hermanas enfermas, de sacerdotes, vecinos, etc. Era una mujer llena de Dios, fiel, piadosa, humilde, sencilla. Siempre dispuesta a ayudar y hacer el bien. Previsora, tenía el don de adivinar y adelantarse a lo que una 125 hermana, especialmente si estaba enferma, podía necesitar. Alegre, reservada, prudente, le podías confiar lo que fuera, jamás una crítica. Sumamente acogedora y atenta con todas sin excepción. Como todo Noviciado y luego Casa de paso, muchas eran las hermanas que pasaban por aquí, siempre sobre su cama ya preparada, encontraban la Bienvenida en nombre de la comunidad junto con algunas flores. Reflejaba una sabiduría que emanaba de su relación íntima y profunda con Dios, la irradiaba por medio de su paz, de su sonrisa, de su bondad, con esa presencia en todo, desde el no aparecer. Como lo expresó uno de nuestros Capellanes: “cuando la hermana Lourdes estaba nadie lo notaba, cuando se iba de visita familiar, todos deseando su regreso”. Profundamente eucarística, amante de la Virgen, de Nuestro Padre, de la Compañía. Su oración por la santidad de los sacerdotes nunca faltaba. Sabíamos dónde encontrarla cuando no estaba haciendo algún servicio, su lugar, la Capilla. Nació en San Pedro, Brasil, en un hogar donde los valores cristianos se vivían radicalmente. Fue la mayor de once hermanos, de los cuáles cinco, con ella, hermanas teresianas, dos jesuitas y los otros formaron sus respectivas familias. A los 15 años entró en el Noviciado, en ese tiempo la Provincia de San José la integraban: Brasil, Chile, Paraguay, Argentina y Uruguay. Permaneció siempre en nuestra Provincia. Estuvo unos años destinada en el Colegio de Buenos Aires, en el de Asunción de Paraguay, fue un corto tiempo a colaborar en la fundación del Noviciado en Brasil y regresó a esta Casa donde brindó sus servicios como enfermera, sacristana, ropera, enseñando a las novicias, portera y en lo que fuera preciso. Durante años llevó con entereza y en silencio la cruz de fuertes dolores de columna; para poder mantenerse en pie debía hacer uso de un corsé con varillas de hierro. Regresó de su visita familiar el 13 de febrero y el 17 por la noche tuvo que ser internada en un Sanatorio por problemas intestinales, complicándose todo con una embolia en el pulmón. Cuatro de sus hermanas de sangre pudieron acompañarla desde el día 20. Siempre lúcida hasta el último momento, regresó al Padre escuchando canciones a la Virgen a quien tanto amaba. Sabemos que está en Dios y por ello más presente que nunca en nuestra comunidad, a ella nos encomendamos. El vacío de su presencia física nos duele en el alma, pero la certeza de que YA ES PLENAMENTE FELIZ nos llena de paz y fortaleza. Damos gracias a Dios por ella y a ella por lo que fue para todos los que tuvimos la alegría de convivir a su lado. DESCANSEN EN PAZ NUESTRAS QUERIDAS HERMANAS 126 ENCOMENDAMOS EN NUESTRAS ORACIONES A: La madre de las Hermanas: - Isabel Olmedo (e.p.d.) Pilar Alliende Adelaida Morales Feliciana Cambovo Ángela Galeano España Santiago-Residencia Universitaria Provincia Padre Enrique de Ossó Viana-Casa Provincial NSR Biruaca-Venezuela El padre de las Hermanas: - Noemí Ferreira - Resurrección Baztán Caracas-La Castellana Tarragona-Colegio Una hermana de las Hermanas: - Liria y Celita Haefliger Catarina Napiñgala Sofía Arboleda Caro Maria Luci Bohn Regina Bimbi (e.p.d.) Porto Alegre-Casa Provincial e Itaquí Lwena-Angola Aguachica-Colombia Santana do Livramento Angola Un hermano de las Hermanas: - Carmen y Loudes Gómara Mª Celeste y Purificação Monteiro Adofina y Gema Stefani (e.p.d) Maria de Fátima Falcão Gouveia Emilia Nazer Pamplona-Ermitagaña Sto. Tirso y Fátima Itupiranga- Brasil Verim- Portugal Santiago- Residencia de Hermanas 127 COMPAÑÍA DE SANTA TERESA DE JESÚS Dirección General Vía Valcannuta 134 – 00166 Roma 128
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