visita del superior general de la compañía de jesús p. adolfo nicolás

Transcripción

visita del superior general de la compañía de jesús p. adolfo nicolás
VISITA DEL
SUPERIOR GENERAL
DE LA COMPAÑÍA DE JESÚS P. ADOLFO NICOLÁS SJ A LA PROVINCIA DE LOYOLA
Septiembre de 2011
1
ÍNDICE
Presentación/Aurkezpena P. Juan José Etxeberria SJ ............................. 5
CELEBRACIÓN DEL 125 ANIVERSARIO DE LA UNIVERSIDAD DE DEUSTO ...... 11
• Lección inaugural del curso académico 2011–2012 en la Universidad de Deusto,
pronunciada por Adolfo Nicolás SJ, Gran Canciller de la Universidad y Superior
General de la Compañía de Jesús, con motivo del 125 aniversario de la
Universidad de Deusto ............................................................................ 12
• Homilía de Msr. Ricardo Blázquez en la eucaristía de inauguración del
curso académico en la Universidad de Deusto ......................................... 25
ENCUENTRO CON COLABORADORAS/ES DE LAS OBRAS E INSTITUCIONES
DE LA PROVINCIA DE LOYOLA ..................................................................... 29
• Saludo del P. Provincial Juan José Etxeberria SJ ....................................... 30
• Semblanza del Prepósito General Adolfo Nicolás SJ realizada por el
Padre Jaime Oraá SJ .............................................................................39
• Respuestas del P. General Adolfo Nicolás SJ ............................................42
• Reacciones y llamadas percibidas por los colaboradores y colaboradoras
tras el Encuentro .................................................................................. 53
ENCUENTRO CON JESUITAS EN LA CELEBRACIÓN DE LOS JUBILEOS DE
JESUITAS DE LA PROVINCIA DE LOYOLA....................................................... 59
• Homilía del Padre General Adolfo Nicolás SJ en la eucaristía del Encuentro
con jesuitas de la Provincia de Loyola . ................................................... 60
PRESENTACIÓN
AURKEZPENA
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús Adiskide hori,
Eskuetan duzun argitalpenean Adolfo Nicolás SJ Lagundiko Preposito Generalak
2001ko irailaren 8tik 11ra Loiolako Probintziara egindako ikustaldiaren agiririk
esanguratsuenak dituzu.
Aita Adolfo Nicolás SJren ikustaldiak hiru une aipagarri izan zituen:
– Deustuko Unibertsitatearen 125. urtemugan ikasturte akademikoa inauguratu zuen irailaren 9 goizean. Ekitaldi horretako bi agiri dituzu: Valladolideko gotzain Ricardo Blázquezek Unibertsitateko Kapera Gotikoan emandako
Eukaristiako homilia eta Aita Adolfo Nicolás SJk, Unibertsitateko Kantziler
Handiak eta Jesusen Lagundiko Generalak ikasturtearen irekieran Unibertsitateko Paraninfoan emandako Lectio Inauguralis edo Inaugurazioko Lekzioa.
– Adolfo Nicolás SJk, Jesusen Lagundiko Preposito Generalak, Loiola Probintziako obra eta erakundeetako lankideekin irailaren 9 arratsaldean
izan zuen Topaketa. DUko Donostiako campuseko Loiola Centrumen izan
zen. Topaketa honetako lau agiri daude: ekitaldiaren aurkezpena, Loiola
Probintziako Nagusia nazienez neuk egiteko ohorea izan nuena; Nagusi
Generalaren profila, Deustuko Unibertsitateko errektore Aita Jaime Oraá
SJk egindakoa; Adolfo Nicolás SJ Generalaren parte hartzea, probintziako
obretatik aurrez igorri zitzaizkion galderen erantzunetan oinarritu zena; eta
topaketaren ondoren laguntzaile batzuek formulatutako deien eta erreakzioen bilduma bat.
– Jesuiten ospakizuna Loiolako Santutegian irailaren 10ean. Garate Anaiaren egunean jesuiten jubileuak ospatu ziren (50 eta 75 urte jesuita edota
apaiz lanetan) eta gure probintziako bi jesuitak azkeneko botoak eman zituzten: Aita Javier Castillo SJk eta Aita Jaime Badiola SJk. Basilikako eukaris-
6
Presentación n
tiaren buru Adolfo Nicolás SJ Jesusen Lagundiko Generala izan zen eta bere
homilia ere jarri dugu argitalpen honetan.
Testu hauekin batera argazki ugari ere bada erdiko orrialdeetan eta Aita Generalak gure artean egin zituen egun horien oroigarri eta lekuko dira. Gainera,
testu hauen xedea da jesuita, laiko, komunitate eta erakundeentzako inspirazio
eta lanerako iturri bihurtzea. Amaitzeko, argitalpen honen bidez eskerrak eman
nahi dizkiogu Adolfo Nicolás SJri egun horietan berarekin tratatu duten pertsona
guztiekin izandako eskuzabaltasunagatik eta adeitasunagatik.
Agur bero bat,
A. Juan Jose Etxeberria SJ
Probintziala
7
Presentación n
Estimado amigo,
La publicación que tienes entre tus manos recoge los documentos más significativos de la visita que el Prepósito General de la Compañía de Jesús Adolfo Nicolás
SJ realizó a la Provincia de Loyola entre el 8 y el 11 de septiembre de 2011.
La visita del P. Adolfo Nicolás SJ tuvo tres momentos destacados:
– La inauguración del curso académico de la Universidad de Deusto en su
125 Aniversario, la mañana del 9 de septiembre. De ella recogemos dos
documentos: la homilía pronunciada por el Arzobispo de Valladolid Monseñor Ricardo Blázquez en la Eucaristía celebrada en la Capilla Gótica de la
Universidad de Deusto; y la Lectio Inauguralis o Lección Inaugural impartida
por el P. Adolfo Nicolás SJ, Gran Canciller de la Universidad y Superior
General de la Compañía de Jesús en la solemne apertura académica del
curso, que tuvo lugar en el Paraninfo de la Universidad.
– El Encuentro que el Prepósito General de la Compañía de Jesús, Adolfo
Nicolás SJ, celebró con colaboradoras/es de las obras e instituciones de la
Provincia de Loyola, el mismo 9 de septiembre pero por la tarde. Tuvo lugar
en el Loiola Centrum del campus donostiarra de la UD. De este encuentro
recogemos cuatro documentos: la presentación al acto que tuve el placer
de hacer como Superior Provincial de Loyola; el perfil del Superior General
que trazó el Rector de la Universidad de Deusto, P. Jaime Oraá SJ; el texto
que recoge la intervención del Superior General Adolfo Nicolás SJ, que se
centró en respuestas a las preguntas que previamente se le habían remitido
desde las obras de la provincia; y una recopilación de reacciones y llamadas formuladas tras el encuentro por algunos asistentes.
– Celebraciones jesuitas en el Santuario de Loyola, el 10 de septiembre. En
la festividad del Hermano Gárate, se celebraron los jubileos de los jesuitas
9
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús (50 y 75 años como jesuitas y/o sacerdotes), y dos jesuitas de nuestra
provincia pronunciaron sus últimos votos: P. Javier Castillo SJ y P. Jaime
Badiola SJ. Presidió la eucaristía en la basílica el Superior General de la
Compañía de Jesús Adolfo Nicolás SJ, cuya homilía recogemos también en
esta publicación.
Estos textos, que acompañamos también con una amplia selección fotográfica en
las páginas centrales, sirven de recuerdo y testimonio de los días que el Padre
General pasó entre nosotros. Pero además, y muy especialmente, están llamados
por su contenido a convertirse en material de inspiración y trabajo para jesuitas,
laicos, comunidades e instituciones. Por último, sirva esta publicación también
como sencillo gesto de agradecimiento por la generosidad y amabilidad mostrada por el P. Adolfo Nicolás SJ hacia todas las personas con las que trató durante
aquellos días.
Con un saludo cordial,
P. Juan José Etxeberria SJ
Provincial
10
CELEBRACIÓN
DEL 125 ANIVERSARIO
DE LA UNIVERSIDAD DE DEUSTO
Lección inaugural
del curso académico 2011–2012
en la Universidad de Deusto, pronunciada por
Adolfo Nicolás SJ, Gran Canciller de la
Universidad y Superior General de la Compañía
de Jesús, con motivo del 125 aniversario de la
Universidad de Deusto
Bilbao, 9 de setiembre de 2011
Señor Arzobispo, Señor Lehendakari, Rector Magnífico, Señor Alcalde, Señor Diputado General, Autoridades, Ilustre Claustro, Señoras y Señores, amigos todos.
Nos congrega en este día la celebración de los 125 años de servicio de esta
Universidad de Deusto, a la que todos queremos. Y me alegro de poder compartir
con ustedes unas reflexiones en torno a la tarea que una Universidad de la Compañía de Jesús debe acometer, reflexiones que nacen desde la vivencia de tantos
años en los que la Compañía ha trabajado en el ámbito de la enseñanza superior
y también de mi propia experiencia universitaria en diversos países.
En este mismo foro, con ocasión del centenario de Deusto, mi predecesor el P.
Peter-Hans Kolvenbach formuló tres preguntas: ¿Qué debe hacer la Universidad
frente a los problemas que hoy afectan a la humanidad en el ámbito económico,
político, cultural y religioso?; ¿Tiene la Universidad capacidad de respuesta?; ¿Es
12
Celebración del 125 aniversario de la Universidad de Deusto. Lección inaugural n
hoy la Universidad una institución con capacidad creativa y configuradora de la
existencia humana o tiene que resignarse a ir a remolque de la historia...?
Estas preguntas siguen hoy vivas y nos interpelan no sólo como Universidad sino
como Universidad de la Iglesia.
Tomo como punto de partida de mi intervención vuestro lema histórico Sapientia
melior auro: La sabiduría vale más que el oro.
Retos y problemas del mundo de hoy
Los sabios, (religiosos, inspirados....) de todos los tiempos y todas las culturas han
buscado cómo mitigar el sufrimiento humano y social: el dolor, la violencia, la
guerra, la soledad, la falta de esperanza y de sentido...
Seguramente cada generación piensa que ha llegado a un momento decisivo de
la historia, pero lo cierto es que hoy los efectos de la violencia alcanzan una escala sin precedentes. La autodestrucción se esconde en el corazón de los mayores
avances. Vivimos la tierra solamente como un recurso con la consiguiente degradación medioambiental, y también las personas son con frecuencia consideradas
como mero recurso y fuente de riqueza, y se ven impulsadas por una necesidad
artificial hacia un consumo desaforado. Nuevas formas de esclavitud emergen en
las sociedades avanzadas1.
A nadie puede extrañar que surjan movimientos como los que recientemente están
convulsionando la sociedad en distintos lugares y bajo diferentes formas.
El avance del conocimiento, los descubrimientos científicos, las innovaciones tecnológicas representan un indudable logro de la humanidad; pero, a la vez que
sirven para mejorar muchos aspectos de la vida, contienen la semilla de nuevas
desigualdades y mayores diferencias.
Una educación puramente científico-técnica y racional no basta: si no desarrollamos algún tipo de revolución espiritual que pueda mantenernos al mismo nivel
que nuestro genio tecnológico, es muy improbable que consigamos un auténtico
progreso humano. Es claro que muchas de nuestras dificultades encubren una
crisis espiritual más profunda2.
1 Karen ARMSTRONG: La gran transformación, Paidós, Barcelona, 200
2 Karen ARMSTRONG: op.cit., introducción
13
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús Es verdad que hoy el mundo no nos lo pone fácil: la sabiduría no es moneda común
en nuestros mercados. En realidad no lo ha sido nunca. Son tres los tipos de persona
para las que siempre ha sido difícil abrirse camino en nuestro mundo: los santos, los
profetas y los sabios
Vivimos un momento de la historia en el que el sistema tiene que adaptarse a una
realidad nueva en prácticamente todos los frentes: antropológicos, culturales, sociales
y religiosos.
Por vez primera tenemos más información que capacidad para digerirla y procesarla. Lo que se vende no es sabiduría sino superficialidad: soluciones inmediatas,
explicaciones prefabricadas, cultura de usar y tirar, gracia barata…
Parece que nos queda lejos la época de los grandes sabios, la que el filósofo alemán
Karl Jaspers3 denominó la era axial, época en la que
“...en cuatro regiones distintas vieron la luz las grandes tradiciones mundiales que han continuado nutriendo la humanidad: el confucianismo y taoísmo
en China; hinduismo y budismo en la India; monoteísmo en Israel y racionalismo filosófico en Grecia (...) La era axial fue uno de los periodos más influyentes de los cambios intelectuales, psicológicos, filosóficos y religiosos de la
historia (...); no habrá nada comparable hasta la Gran Transformación Occidental que crearía nuestra propia modernidad científica y tecnológica”.4
La religión en estas grandes tradiciones de sabiduría se entendía como el respeto
sagrado a todos los seres y no como la creencia ortodoxa; tradiciones de sabiduría
que “constituyen un testimonio elocuente de unanimidad en la búsqueda espiritual
de la raza humana” y que se manifiesta en la práctica “en una espiritualidad de la
empatía y la compasión”.
No es ajena esta concepción a relevantes pensadores contemporáneos. Maslow5,
por ejemplo, coloca en lo alto de la realización humana la experiencia trascendente.
Certeramente lo expresa también hoy la psicología transpersonal, que inspirándose
en Plotino, afirma:
“Esto es algo que podemos advertir tanto en Oriente como en Occidente.
El camino de ascenso desde los muchos hasta el UNO es el camino de la
3 Karl JASPERS, Origen y meta de la historia, Altaya, Barcelona ,1995 (citado a través de
Armstrong)
4 Karen ARMSTRONG: op.cit., pag.14
5 Abrahan MASLOW: El hombre autorrealizado, Kairós , Barcelona, 1993 (10ª)
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Celebración del 125 aniversario de la Universidad de Deusto. Lección inaugural n
sabiduría, porque la sabiduría ve que detrás de todas las formas y la diversidad de fenómenos descansa el Uno, el Bien. El camino de descenso,
por su parte, es el camino de la compasión, porque el Uno se manifiesta
realmente como los muchos y, en consecuencia, todas las formas deben
ser tratadas con el mismo respeto y compasión”6
Esto nos indica que, a pesar de todo, la búsqueda no ha terminado: el ser humano tiende incansablemente al ideal de la “sabiduría”.
¿Pero qué entendemos por sabiduría?
El concepto de sabiduría ha tenido distintas acepciones a lo largo de la historia
ya desde Platón y Aristóteles: sabiduría para Platón era “la virtud superior”; para
Aristóteles, “la ciencia de los primeros principios”; después, se consideró sabio
no sólo al que sabe sino al hombre de “experiencia, prudente y juicioso”, y la
palabra sabiduría ha abarcado con el tiempo también una acepción religiosa: “el
conocedor de lo superior”.
¿Qué queremos decir entonces con el término sapientia de nuestro lema? Podríamos traducirlo como “un conocimiento superior, abarcante, profundo y transformador”. No sólo, por tanto, un conocimiento científico: un saber sobre algo,
sino un conocimiento que lleva a la persona a situarse en actitud de búsqueda
permanente ante los grandes interrogantes y, más aún, que lleva a la persona a
la empatía, a la compasión ante cualquier ser humano y a una actitud de respeto
a la naturaleza como don y, más todavía, al principio ignaciano Buscar y hallar
a Dios en todas las cosas.
¿Y cuál es la respuesta de la Universidad?
La Universidad lugar de búsqueda
La Universidad ha ocupado un lugar especial en esta búsqueda – el lugar del
eterno anhelo y la eterna búsqueda... abierto a todas las personas y a todos los
problemas-. En palabras de Benedicto XVI, en el encuentro tenido con jóvenes
profesores universitarios el pasado 19 de Agosto en El Escorial, “La Universidad
6
Ken WILBER: Breve historia de todas las cosas, Kairós, Barcelona, 1997, pág. 334
15
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús ha sido, y está llamada a ser, la casa donde se busca la verdad propia de la
persona humana”.
De modo especial en momentos de crisis, que son a la vez momentos de oportunidad, como los actuales, se espera de la Universidad que ayude a encontrar
soluciones para los retos de esta nueva sociedad en construcción. A ello obedece,
por ejemplo, la llamada de la Unión Europea y Estados Miembros para repensar
los fines y la naturaleza del conocimiento en una época de tránsito hacia lo que
se ha venido llamando la postmodernidad. Precisamente, la época actual recibe,
entre otros nombres, el de “Sociedad del conocimiento”.7
La Universidad está necesariamente en la encrucijada
Nos encontramos hoy en una encrucijada8: cómo armonizar el necesario desarrollo y la dimensión utilitaria del saber con la reflexión sobre los fines y el sentido;
con el conjunto de las dimensiones de la misma realidad que no se circunscriben
a la mera utilidad práctica. Cómo conseguir que la eficacia de los logros de la
Universidad tenga en cuenta la libertad de un pensamiento capaz de generar
nuevas visiones; un pensamiento que no convierta el corto plazo en el único valor;
que no anteponga los medios a los fines del saber; que no olvide que el saber
no debe convertirse en instrumento de poder, sino de servicio. Cómo armonizar
los crecientes requerimientos de las empresas y del mercado con la Universidad
entendida como lugar de búsqueda del conocimiento.
Coinciden varios analistas9 en que se está produciendo una transformación de la
Universidad.
De hecho, la universidad ha venido sufriendo una trasformación desde los albores
de la Edad Moderna, en los que paso a paso fue sustituyendo la “razón sapiencial”
por la “razón empírico-instrumental”. Se trata de una transformación que toma
forma en los siglos XIX y XX, cuando “se produjo una crisis y desplazamiento de
la metafísica, de la teología y de la ética como asuntos, si se quiere privados e
indiscernibles y dependientes únicamente de opciones individuales o sociales y…
en último término, desvinculadas de la misión universitaria como tal”10
7 M J. GARCÍA RUIZ: “Impacto de la globalización en la universidad europea del siglo XXI”,
Revista de Educación, 356, Septiembre-Diciembre 2011 (versión electrónica)
8 La propia encíclica Ex corde ecclesiae, en su número 7, ahonda en estos puntos
9 Vid. García Ruiz, op.cit.
10 Juan Antonio Senén de Frutos, La función de la universidad en el pensamiento de Ignacio
Ellacuría. Una visión desde nuestro contexto actual. FORUM DEUSTO, Bilbao.
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Celebración del 125 aniversario de la Universidad de Deusto. Lección inaugural n
Añádase a esta crisis la desmembración del saber en múltiples disciplinas, que
al separarse unas de otras, pierden su unidad originaria en la vida, la persona
y la sociedad.
En esta deriva, la universidad, de ser concebida como lugar de búsqueda del
conocimiento camina hacia una universidad casi en exclusiva profesionalizante.
El conocimiento ha dejado de ser un fin en sí mismo y se ha convertido en una
mercancía susceptible de ser vendida y comprada. Esto provoca la consiguiente
desvalorización de las disciplinas que tienen poco que ofrecer al mundo comercial. Además, el conocimiento actual se caracteriza por ser transdisciplinar, cambiante y socialmente adaptado a las necesidades y prioridades de la industria y
el mercado.
Por fortuna, la múltiple y profunda crisis cultural que la “razón técnico-científica”
excluyente ha contribuido a implantar en nuestro mundo globalizado, ha provocado una reacción cultural de largo alcance, en la que muchas voces se alzan para
denunciar los múltiples y funestos reduccionismos de la “razón moderna”. Esto es
lo que en un fino análisis enfatizaba el P. Peter-Hans Kolvenbach en su discurso a
esta Universidad de Deusto: “justamente el desafío de la universidad consiste en
orientarse, a través de lo racional (lo ‘empírico-instrumental’, diríamos nosotros)
hacia lo razonable (lo ‘sapiencial’, en nuestro lenguaje); en tomar, a través de
toda la investigación y de toda reflexión, como su verdadero objeto, al hombre
y su sociedad humana”11 En este horizonte tiene plena cabida la referencia que
venimos haciendo al conocimiento sapiencial: no es nostalgia de pasado ni querencia de viejas instancias normativas; es el regreso del Hijo Pródigo a su hogar
natural: por supuesto, desde contextos culturales y desde supuestos epistemológicos muy diferentes.
La Ética, las Humanidades y las Ciencias Sociales deberán tener mayor protagonismo en el diseño del modelo de sociedad para el siglo XXI, si no queremos
estar supeditados al dictado de la economía y el mercado, con el consiguiente
empobrecimiento moral y la creación de abismos cada vez mayores entre los
que tienen y los que no tienen. No quiere esto decir que las demás disciplinas
sean ajenas a la reflexión ética y a la pregunta sobre su contribución al progreso
moral.
Quizá podamos encontrar el equilibrio por medio de una “mejor ciencia y mayor
conciencia; mejor progreso y mayor humanidad”
11 En el centenario de la Universidad de Deusto” (1987). Discursos
universitarios,
n. 12
17
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús Una Universidad de la Compañía de Jesús ante los retos
que se nos presentan
La Iglesia, especialmente bajo la inspiración de Benedicto XVI, está intentando
decir una palabra pero no es escuchada, o, quizás, el mundo no es capaz ya de
escuchar el lenguaje de la Iglesia.
Todo esto hace de la Universidad una de las últimas esperanzas de sabiduría,
quizá un motor de búsqueda de verdad y de sentido. De nuevo en palabras de
Benedicto XVI en el citado discurso: “El camino hacia la verdad completa compromete al ser humano entero; es un camino de inteligencia y de amor, de razón
y de fe… Podemos buscarla y acercarnos a ella, pero no podemos poseerla del
todo, más bien es ella la que nos posee a nosotros y nos motiva.”
La encíclica Ex corde ecclesiae se refiere a la Universidad de la Iglesia con estas
bellas palabras:
“NACIDA DEL CORAZON de la Iglesia, la Universidad Católica se
inserta en el curso de la tradición que remonta al origen mismo de la
Universidad como institución, y se ha revelado siempre como un centro
incomparable de creatividad y de irradiación del saber para el bien de
la humanidad”.
Pienso que Ignacio vio esto con claridad y quiso preservar para los jesuitas el tesoro de las universidades; él había podido experimentarlo y deseó que todos los
jesuitas frecuentaran la universidad; optó por que abriésemos nuestras propias
universidades, incluso contra lo que anteriormente había sentido y pensado. Ha
sido y sigue siéndolo parte de una sagrada misión que los jesuitas han sentido
siempre como propia:
-
El buscar ellos mismos y guiar a otros en la búsqueda de la verdad
El descubrir la obra de Dios en toda realidad
La superación de la superficialidad.
La preparación de las personas para ese “Más”, el famoso magis que
ya nos hemos acostumbrado a escuchar
- El dar consistencia y profundidad al servicio que creemos poder prestar a nuestra doliente y agobiada realidad
En una fecha tan reciente como 2008, cuando llegué al final de una “vida de
inocencia” y me trasladé a Roma, la Compañía de Jesús en su conjunto, reunida
en Congregación General, volvió a subrayar una vez más su prioridad por la
“Profundidad del trabajo intelectual”, por prestar ayuda a la Iglesia y al mundo,
comprometiéndose en serio con el estudio y la investigación.
18
Celebración del 125 aniversario de la Universidad de Deusto. Lección inaugural n
Para la Compañía de Jesús, la Universidad juega un papel central y muy importante.
Hemos sido testigos de cómo los proyectos, aun los más creativos y originales, duran
muy poco y son, al parecer, muy vulnerables al paso del tiempo. Por eso la Congregación General 35 hizo un llamamiento para reforzar el apostolado intelectual
“como un medio privilegiado para que la Compañía pueda responder adecuadamente a la importante contribución intelectual que nos pide la Iglesia”. 12
Necesitamos el apoyo de la Universidad y su sabiduría, su capacidad de investigar
y profundizar, su dominio de la técnica, etc. para sostener nuestras restantes obras,
al servicio de la humanidad, especialmente de los pobres, y para afrontar los nuevos
retos de la globalización y la economía.
El año pasado en México tuvimos ocasión de intercambiar ideas sobre la necesidad
de hacer de la Universidad “un Proyecto Social”, usando palabras de nuestro añorado Padre Ignacio Ellacuría. Allí quedó claro que existe una voluntad renovada de
convertir estas palabras en realidad, de establecer conexiones con otras universidades y con otras empresas apostólicas (Colegios, Parroquias, Centros Sociales...) de
modo que podamos impregnar todas las instituciones en las que trabajamos con las
duras y dolorosas realidades de nuestro mundo y trabajemos juntos por llevar hasta
el corazón de estas realidades la mejor sabiduría que seamos capaces de generar,
procurando, junto a muchos otros, contribuir a aliviar el dolor y el sufrimiento de este
mundo nuestro.
La Congregación General 35, en el Decreto 3, nos indica13:
“La complejidad de los problemas que encaramos y la riqueza de las oportunidades que se nos ofrecen piden que nos comprometamos en tender puentes entre ricos y pobres, estableciendo vínculos en el terreno de la incidencia
política para la colaboración entre aquellos que ostentan el poder político y
aquellos que encuentran dificultades en hacer oír sus intereses. Nuestro apostolado intelectual nos proporciona una ayuda inestimable para establecer estos
puentes, ofreciéndonos nuevos modos de entender en profundidad los diversos
mecanismos e interconexiones de los problema actuales.”
Deusto ha trabajado sistemáticamente por lograr este tipo de sabiduría, por formar
personas comprometidas con la verdad, por una sociedad justa y por la profundidad
de un humanismo que no se agota en lo pragmático y en lo técnico.
12 Congregación General 35 de la Compañía de Jesús: Decreto 3, Desafíos para nuestra
misión hoy, nº 39- 3, Mensajero, Bilbao, 2008
13 Vid. supra, Nº 28
19
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús Sugerencias para llevar esto a la práctica
Propondría algunas sugerencias que pueden ayudar a llevar esto a la práctica,
aprovechando las múltiples oportunidades que nuestro tiempo nos ofrece:
1- Promover el equilibrio entre las disciplinas científico-técnicas y humanísticas, así como el equilibrio entre la búsqueda del conocimiento y la
satisfacción de las demandas del mercado.
2- Procurar que la extensión del conocimiento no produzca nuevas desigualdades y mayores abismos, e impulsar soluciones que sean aplicables a países y personas desfavorecidos.
3- Fomentar investigaciones que encuentren modelos más justos de economía y gobernanza, y aportar un pensamiento capaz de anticipar nuevas
visiones y caminos.
4- Lograr que el conocimiento sea transformador y fomentar en la academia, la sociedad y la opinión pública la asunción de principios éticos
irrenunciables.
5- Impulsar la escucha y el diálogo intercultural e interreligioso.
6- Favorecer las dimensiones más profundas del ser humano y el sentido
de trascendencia: la verdad, la bondad y la belleza.
7- Aplicar modelos de enseñanza-aprendizaje que fomenten el pensamiento autónomo y profundo, y ayuden a extraer verdadero conocimiento ante la avalancha de información a la que estamos sometidos.
8- Utilizar las oportunidades de las tecnologías de la comunicación para
difundir el conocimiento y extender la formación de manera más creativa
y participativa.
9- Ayudar a tomar conciencia de la responsabilidad social de la formación universitaria.
No será posible realizar esta tarea sin el empeño y la complicidad de todos los
actores, y sin pasión por el saber y por las personas.
Investigadores y docentes están llamados a ser auténticos maestros que estimulen
la apertura de la mente y acerquen a los estudiantes a las fuentes del conocimiento de forma a la vez rigurosa y creativa.
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Celebración del 125 aniversario de la Universidad de Deusto. Lección inaugural n
Permitidme recordar algunas de las actitudes y valores de los grandes maestros a
lo largo de la historia:
•
•
•
•
La humildad y la constancia
El aliento a los grandes deseos e ideales
La cercanía con los discípulos
El descubrimiento de lo mejor de cada persona, procurando
que ningún talento se malogre
• La enseñanza con el propio comportamiento y actitud
Historia y proyecto Deusto
Por fin, he de hacer una breve referencia a la Historia y Proyecto de esta Universidad, que el 25 de septiembre de 1886, abría sus puertas con 90 alumnos internos,
matriculados en Derecho, Derecho y Filosofía, y los cursos preparatorios para el
ingreso en las Escuelas de Ingeniería/Arquitectura; y lo hizo con unos planes de
estudios muy novedosos, exigentes y adaptados a las necesidades de su época.
Hoy, Deusto cuenta con las facultades de Derecho, Ciencias Económicas y Empresariales; Teología, Ingeniería, Psicología y Educación, y Ciencias Sociales y Humanas;
con dos campus: Bilbao y San Sebastián, y diversos Centros, Institutos, Cátedras y
Aulas. Y se ha extendido al otro lado de la ría –a través de la pasarela Padre Arrupe– con la reciente Biblioteca y Centro de recursos para docencia e investigación.
El trabajo ímprobo de la comunidad universitaria y el apoyo de toda la sociedad
han hecho posible esta historia, en la que a lo largo de los años han participado
cerca de 100.000 alumnos. Se ha basado en el impulso a la excelencia en todos
los ámbitos, el esfuerzo y rigor intelectual, la cercanía, seguimiento y apoyo a los
estudiantes para su desarrollo integral, la inspiración cristiana y el propósito de
procurar un mundo más justo.
No sería posible seguir ofreciendo un servicio a la altura de nuestro tiempo sin la
colaboración de múltiples agentes: Gobierno, Instituciones, Sociedad Civil, Antiguos
Alumnos, y, sobre todo, sin el compromiso de toda la Comunidad universitaria.
Me consta el empeño que ponéis en la formación técnica y profesional, humana,
cristiana, e ignaciana; solo así puede tener sentido esta Universidad con una oferta
libre y específica.
21
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús Quiero destacar tres aspectos de vuestra preocupación actual:
• Vuestra proyección internacional: el proyecto Tunning, (por poner un
ejemplo), pilotado por vuestra universidad, es algo más que una presencia protagonista en el establecimiento general del proyecto Bolonia: es el
testimonio de que, universitariamente, se puede romper la estrechez del
concepto de competencia como saber o saber-hacer (la razón técnicoinstrumental) para abrirla a la noción de competencia como saber-estar,
saber-ser, saber-convivir (quintaesencia de la razón sapiencial).
• Vuestra síntesis pedagógica: el Modelo Deusto de Formación amalgama el aprendizaje por competencias con el aprendizaje de y por valores
propio de la Compañía y de vuestra Universidad –expresión significativa
de un saber integrado (ciencia y sabiduría).
• Vuestra racionalidad política y administrativa: los diversos Planes Estratégicos que venís estableciendo últimamente, con los que pretendéis
domesticar la imprevisibilidad del futuro y dotarle de racionalidad son la
mejor garantía de excelencia y de calidad, sin las cuales ninguna universidad tiene la categoría de tal.
Las instituciones, y de modo especial las universitarias, no pueden vivir acomodadas y tienen que adelantarse a los tiempos siendo críticas con el presente y vigías
del porvenir.
No me detengo ahora en destacar vuestras preocupaciones y proyectos actuales
y paso a referirme a un horizonte más amplio:
Como todos sabéis, nos encontramos en un proceso que culminará con la formación de una Nueva Provincia de la Compañía de Jesús en España, que integrará
las actualmente existentes con el deseo de aportar un mejor servicio apostólico.
¿Qué supone esto para las Universidades y Centros Superiores de la Compañía
en España? Sin dudar, una espléndida oportunidad y una anhelada posibilidad.
Desde hace varias décadas, venís reuniéndoos los responsables de los diversos
Centros para reflexionar conjuntamente sobre los problemas de muchos y las aspiraciones de todos: primero en la FLECE (Federación Libre de Escuelas de Ciencias
Empresariales), luego en la COCESU (Comisión de Centros Superiores) y finalmente en UNIJÉS (Universidad-Jesuitas) habéis manifestado vuestra aspiración a
una mayor unión y colaboración.
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Celebración del 125 aniversario de la Universidad de Deusto. Lección inaugural n
Me llaman la atención varias expresiones de los documentos constituyentes de
UNIJÉS. En un documento bastante temprano – ya en 2002 - decíais que COCESU-UNIJES tiene por objetivo fundamental, “ir creando” :

una red capaz de generar y canalizar, con la convergencia de los
esfuerzos de todos, líneas comunes de pensamiento y acción

una única plataforma universitaria, en la que cada Centro, en el despliegue de las responsabilidades y servicios que le son y seguirán siendo
propios, encuentre orientación e impulso para el desarrollo de la Misión.
Y añadíais:
Es bien claro que sólo será posible afrontar las exigencias del plan propuesto
desde un foco común de impulso
desde un “alma familiar”
desde una conciencia común de “Uni-versidad jesuita” y de “Cuerpo universitario”, sobre la que cada Centro pueda definir, proyectar y
apoyar su Identidad y Misión, y
 desde la voluntad inequívoca de hacer visible y proyectar hacia fuera una común “imagen corporativa”.
Estoy seguro de que la constitución de la nueva provincia con el consiguiente único y común liderazgo en las dimensiones de Identidad y Misión hará posible el
deseado objetivo de abrir cauces operativos institucionalizados a este horizonte
de utopía.
La Universidad de Deusto, pionera en tantos aspectos e iniciativas, sin perder su
identidad, podrá realizar con ilusión renovada un proyecto común con el resto
de las Instituciones Universitarias de la Compañía de Jesús en España y con las
más de doscientas instituciones de enseñanza superior que la Compañía dirige
en todo el mundo14.
Todo esto pondrá la base para el desafío final que afrontamos como jesuitas y que
consiste en ampliar nuestro horizonte más allá de la Universidad en la dirección
de Dios.
14 En el encuentro de México se plantearon tareas que reclamarán por nuestra parte un
compromiso positivo y generoso. Se concretan sobre todo en conectar, crear redes, constituir
un “Comité asesor” nacional e internacional que eleve el nivel de todos nuestros trabajos al
servicio de la Iglesia y de la Compañía.
23
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús Termino haciendo mío, con veneración y respeto, el mensaje del Santo Padre a
los profesores Universitarios reunidos en El Escorial: “Os animo a no perder nunca sensibilidad e ilusión por la verdad; a no olvidar que la enseñanza no es una
escueta comunicación de contenidos, sino una formación de jóvenes a quienes
habéis de comprender y querer, en quienes debéis suscitar esa sed de verdad
que poseen en lo profundo y ese afán de superación, que yo uniría sin dudar al
MAGIS ignaciano que todos Ustedes conocen. Sed, continúa el Papa, para ellos
(los estudiantes) estímulo y fortaleza
Gracias a todos por vuestro apoyo y colaboración. Eskerrik asko eta zorionak.
(Muchas gracias y felicidades)
24
Homilía de Msr. Ricardo Blázquez
en la eucaristía de inauguración del
curso académico en la Universidad de Deusto
Bilbao, 9 de setiembre de 2011
Agradezco cordialmente la invitación que se me hizo para presidir hoy la celebración
eucarística de inauguración del curso en esta querida Universidad católica de Deusto.
Cerca y lejos llevo hondamente grabada en el corazón la estima de esta Universidad.
El que se cumplan este año los 125 del comienzo de su excelente servicio en Bilbao
a la Iglesia y a la sociedad subraya la significación de esta Solemne Apertura del
Curso Académico. He compartido y comparto las esperanzas, las satisfacciones y las
incertidumbres de esta Universidad. Saludo con particular afecto al Prepósito General
de la Compañía de Jesús. Mi saludo se extiende a toda la Comunidad Universitaria:
Rector Magnífico, autoridades académicas, profesores, estudiantes, personal no
docente, Consejo social de la Universidad; muestro mi respeto a las autoridades civiles.
Pablo, en la Carta a los Romanos, supone una solidaridad entre el universo y los
creyentes; son inseparables tanto en las tribulaciones causadas por el pecado del
hombre como en la esperanza de la “libertad gloriosa de los hijos de Dios” (Rom.
8, 21). Aunque el texto bíblico no se ciñe a una preocupación ecológica, podemos
también afirmar que la humanidad y el mundo como su hábitat están unidos: Hay
contaminación ambiental y de los espíritus, existe una desertización interior y otra
desertización geográfica; y hay un florecimiento humano que se traduce en el cuidado
y la belleza de la tierra. Dios ha encomendado al hombre el cultivo de la tierra y
la custodia de la creación, administrando este encargo con atención a todos los
contemporáneos y a las generaciones futuras.
El saludo de Jesús resucitado a los discípulos trasmite eficazmente la paz (cf. Jn. 20, 1923). También nosotros necesitamos la paz del Señor y el aliento del Espíritu Santo que
ahuyente nuestros miedos, que pueden proceder de la magnitud de las adversidades,
25
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús del futuro siempre insondable y de nuestras debilidades. Al comenzar el nuevo curso
académico invocamos al Espíritu Santo, que nos libere de nuestras inquietudes, ponga
serenidad en nuestro espíritu y nos dé fuerza para recorrer diariamente el camino
hacia el futuro desconocido que nunca escapa a la providencia de Dios.
Hace pocas semanas hemos celebrado la Jornada Mundial de la Juventud. En el
encuentro con profesores universitarios, tenido en El Escorial, señaló el Papa algunos
rasgos identificadores de la universidad, que me alegro de recordar y compartir con
todos en esta celebración. Son palabras impregnadas de la experiencia personal de
Benedicto XVI y de la reflexión continuada sobre esta institución básica de la sociedad,
que tuvo no por casualidad su origen histórico en el seno de la Iglesia.
“La universidad ha sido, y está llamada a ser siempre, la casa donde se busca la
verdad propia de la persona humana”. (La Iglesia desde el principio quiso cumplir
su misión recorriendo la vía de la verdad y practicando la caridad; formuló su fe en
discernimiento y diálogo con la filosofía del tiempo, y animada por el amor cristiano
los pobres recibieron acogida en su interior). “El camino hacia la verdad compromete
al hombre por entero: Es un camino de inteligencia y de amor, de la razón y de la
fe”. Porque, mientras dura nuestra peregrinación, no podemos poseer plenamente
la verdad y mucho menos dominarla, debe consiguientemente ser “en el ejercicio
intelectual y docente, la humildad una virtud indispensable” del hombre.
A los profesores, aludiendo el Papa a su experiencia de profesor universitario, les dice
como colega a colegas: “A veces se piensa que la misión de un profesor universitario
sea hoy exclusivamente la de formar profesionales competentes y eficaces que
satisfagan la demanda laboral en cada preciso momento. También se dice que lo
único que se debe privilegiar en la presente coyuntura es la mera capacitación técnica.
Ciertamente cunde en la actualidad esa visión utilitarista de la educación, también
universitaria”. Sin embargo, hay un “anhelo de algo más elevado que corresponde
a todas las dimensiones que constituyen al hombre”. El hombre, creado a imagen de
Dios, es la medida de la misión de los profesores.
“Los jóvenes necesitan auténticos maestros; personas abiertas a la verdad total
en las diferentes ramas del saber, sabiendo escuchar y viviendo en su interior ese
diálogo interdisciplinar; personas convencidas, sobre todo, de la capacidad humana
de avanzar en el camino hacia la verdad”. Anima el Papa a los profesores a no
perder nunca la sensibilidad y el amor a la verdad. Deben “comprender y querer a los
alumnos, en quienes deben suscitar esa sed de verdad que poseen en lo profundo y ese
afán de superación. Y confiadamente les pide: “Sed para ellos estímulo y fortaleza”.
Las palabras que termino de recordar merecen ser pensadas reposadamente. Son
palabras no sólo bellas sino también verdaderas sobre la misión de la universidad,
sobre la excelente tarea de los profesores y sobre el apasionante trabajo de los
estudiantes. No rebajemos su altura y dignidad.
26
Celebración del 125 aniversario de la Universidad de Deusto. Homilía n
Si verdad y bondad están unidas, también lo están el conocimiento y el amor. En ellos
hay un reflejo de la Verdad, de la Bondad y de la Hermosura que es Dios mismo.
Buscar la verdad es buscar a Dios (E. Stein), la “eterna verdad”; anhelar el bien
es amar al único Bueno (cf. Mc. 10, 18), la “verdadera caridad”; las huellas de la
belleza nos encaminan a la belleza de Dios, “hermosura tan antigua y tan nueva”
(San Agustín, Las Confesiones 7, 10, 16: “¡Oh eterna verdad, y verdadera caridad,
y amada eternidad!”). Dios no ha dejado a la humanidad sin signos de su presencia,
de su verdad y de su amor. A ejemplo de San Agustín, busquemos humildemente
la verdad, la abracemos con amor, nos dejemos iluminar y fortalecer por ella y la
comuniquemos generosamente. Si se diluyera la verdad, sobrevendría un marasmo
generalizado.
Los días de la Jornada Mundial de la Juventud, y particularmente la actitud y
comportamiento de los jóvenes, deben hacernos reflexionar a todos. Muchos se
sorprendieron de la capacidad de convocatoria de la Iglesia y del Papa. No sería
humanamente serio sofocar las preguntas que han suscitado esos cientos de miles
de jóvenes, ni dar por cerrada la cuestión que apresuradamente muchos habían
decidido: Dios no es relevante para los hombres y para la construcción del futuro, la
religión no tiene porvenir, la causa de la Iglesia está cerrada. Es necesario reconocer
la lealtad intelectual con que diversos observadores, a veces religiosamente distantes,
se han manifestado.
Los jóvenes, en condiciones incómodas (”mal comidos y mal dormidos”) han
participado intensa y alegremente en esa inmensa fiesta de la fe y de la esperanza
cristianas. No retaban a nadie, ya que las pendencias les eran ajenas. Se han
mostrado respetuosos como buenos ciudadanos; y la fe en Dios, el gozo, la oración,
la atención a las catequesis y predicación, la pertenencia a la Iglesia, la comunicación
entre los participantes ha permitido conocer a una juventud que dan confianza de
cara al futuro, en medio de nuestro mundo inmerso en mil crisis. Esos días “moverán
conciencias y sentimientos dormidos y olvidados en muchos y despertarán esa afinidad
al bien que late en todos. Este alarde de felicidad, tranquilidad y gratitud en un mundo
desquiciado se convierte en un acontecimiento extraordinario. La alegría genuina y
sencilla de una multitud semejante no puede dejar indiferente a nadie, por muy al
margen del mismo que pase estos días… Estos jóvenes, que no exigen derechos ni
venganzas, sino ofrecen compromiso y perdón, rompen todos los esquemas de quienes
habían proclamado extinta y enterrada a la Iglesia. Estos jóvenes demuestran que
precisamente ahora, cuando las ideologías redentoras sólo presentan un devastador
balance de desolación, soledad humana y angustia, existe la respuesta de la alegría y
la esperanza” (H. Tertsch). Eran normales y estaban contentos; no necesitaban ponerse
artificialmente alegres para mostrarse felices; el gozo se compartía y comunicaba con
naturalidad.
Y otra observadora penetrante (E. Uriarte), que no se distingue por sus manifestaciones
personales religiosas, ha llegado a pensar que podemos estar asistiendo a un punto
27
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús de inflexión en el debate político sobre el papel de la religión. No ha prosperado el
intento de deslegitimar el hecho religioso y, sobre todo el católico y el cristiano, como
incompatible con la democracia y la modernidad. El intento de muchos, a veces desde
diferentes formas de poder, de identificar la religión con el pasado, como algo ya
anacrónico y superado, más anclada en el antesdeayer que con posibilidades para
el mañana, debe ser revisado honradamente. El anhelo de Dios nunca muere en el
corazón de los hombres. El hecho religioso puede y tiene derecho a expresarse en
el espacio público sin forzarlo a recluirse en la sacristía y en la conciencia personal.
No se le debe negar su capacidad de participar en los debates de la sociedad y en
la conformación de la opinión pública, interviniendo con respeto, libertad, amor al
hombre y argumentos fundados.
Mario Vargas Llosa, que se reconoce a sí mismo como agnóstico, ha escrito que
“creyentes y no creyentes debemos alegrarnos del éxito de la visita del Papa a
Madrid. Mientras no tome el poder político, la religión no sólo es lícita, sino también
indispensable en una sociedad democrática”.
La Universidad de Deusto a lo largo de los 125 años de historia ha conocido situaciones
políticas, culturales y sociales muy diferentes. Ni el marco anterior confesional debió
impedirle ofrecer sus servicios a todos ni el actual ámbito aconfesional debe dificultarle
manifestar su identidad de Universidad de la Iglesia. Debe buscar siempre la verdad,
la excelencia y el servicio a la sociedad. No es de recibo tratar de imponer la fe y
causaría estupor que la dimensión religiosa fuera invisible. No es acertado el silencio
sobre lo esencial, ni porque la persona se autocensure ni porque ceda a la presión del
ambiente. ¿Por qué no nombrar la palabra santa de Dios también en público? A nadie
se puede marginar ni por pronunciarla ni por silenciarla.
El cardenal S. Rylko, Presidente del Pontificio Consejo para los Laicos, dio gracias
públicamente en Cuatro Vientos al Papa Benedicto XVI porque los jóvenes encuentran
en él un padre que los quiere y un maestro de la fe, «una guía segura que enseña
a no perder jamás de vista lo que es esencial para la vida: Dios, manifestado en el
rostro de su Hijo hecho hombre por nuestra salvación. Gracias, porque nos recuerda
incansablemente que “las cuentas sobre el hombre, sin Dios, no cuadran; y las cuentas
sobre el universo, sin Él, no cuadran”». Calculemos con sensatez la vida. Dios es la
roca sobre la cual podemos edificar sólidamente la casa que somos cada uno y la
casa de la humanidad.
Querido Prepósito General, respetada Comunidad Universitaria, agradezco la
oportunidad de participar con vosotros en la Solemne Apertura del Curso Académico.
Por intercesión del beato hermano F. Gárate, que desde la portería fue uno de los
más autorizados maestros de esta preclara Universidad, pido a Dios que os conceda
ser una “casa donde se busca la verdad”. “Santa María, sedes sapientiae, ora pro
nobis”.
28
ENCUENTRO
CON COLABORADORAS/ES
DE LAS OBRAS E INSTITUCIONES
DE LA PROVINCIA DE LOYOLA
SALUDO del P. Provincial
Juan José Etxeberria SJ
Donostia, 9 de septiembre de 2011
Arratsalde on. Buenas tardes
Me toca presentar este “encuentro del Prepósito General de la Compañía de
Jesús, Adolfo Nicolás SJ, con colaboradoras y colaboradores de las obras e instituciones de la Provincia de Loyola”. En primer lugar os doy la bienvenida a todas
y todos los que os habéis acercado a Donosti a este campus, y os agradezco
sinceramente que nos acompañéis.
Hoy es un día de fiesta, fiesta para los guipuzcoanos (porque celebramos hoy
el día de la Virgen de Arantzazu, por eso es fiesta laboral), y fiesta en especial
también para los de la Universidad de Deusto, pues hoy celebramos el 125 aniversario de la creación de la universidad.
Por eso está hoy con nosotros el Padre General. Creo que no suele ir a todos
los 125 aniversarios de todas las instituciones jesuitas del mundo. Por eso agradecemos en especial que haya querido estar hoy con nosotros aquí. El acto
principal, apertura solemne de curso, con la eucaristía del Espíritu Santo, ha sido
esta mañana en el campus de Bilbao. Y a ese acto solo para Deusto añadimos
esta tarde este acto, este encuentro, con personas de toda la provincia.
30
Encuentro con colaboradoras/es. Saludo del provincial n
Dentro de unos momentos, el rector de la universidad, el P. Jaime Oraá, hará una
presentación del P. Nicolás, que es también, por cargo, Canciller de la UD. Por
eso no voy yo a detenerme en su presentación.
Yo voy a referirme al hecho de habernos reunido aquí más de trescientas personas relacionadas con las obras e instituciones de la provincia. Hace algo más de
treinta años estuvo en este Campus el P. Arrupe. Por eso el P. Nicolás es entonces
el segundo Padre General que nos visita en este Campus. En aquel momento,
hace treinta y tantos años, no hubo un acto con colaboradores como tenemos hoy.
Son los signos de los tiempos.
Quizá alguno de los jesuitas más mayores estuvo presente aquí cuando estuvo
el padre Arrupe. Quizá Carlos Goena, Alfredo Tamayo, Isidro Rubio, Ignacio
Cacho, o José Mari Etxeberria, etc. Pero creo que serán pocos o muy pocos. Son
los signos de los tiempos, decía. Ahora (treinta y tantos años más tarde, con otra
Iglesia y otra Compañía de Jesús) hemos querido celebrar un encuentro abierto
con el Padre General con personas de toda la provincia.

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Este encuentro que tenemos hoy es único, o el primero de su género, en la historia
de nuestra provincia. Otras veces ha habido ya encuentros en la provincia entre
jesuitas y laicos. Hemos celebrado siete encuentros del Sujeto Apostólico Provincial. En cada ocasión, anualmente, participamos poco más de cien personas (no
caben más en el CEL). Por otro lado, cada sector, universidad, colegios, social o
pastoral, también tienen encuentros periódicos de colaboradores, cada vez con
dinámicas más elaboradas y pensadas y orientadas a incidir en la misión concreta. Pero todos juntos, es la primera vez.
Algunos sí habéis estado juntos en el plan de formación de la provincia en identidad y misión ignacianas, como ejemplo de iniciativa intersectorial (más allá de
personas de solo un sector). Este mes comienza el octavo grupo. Son ya más de
270 personas. Algunos habéis incluso ido a Roma y os habéis encontrado allí
con el P. General. Otros también os habéis visto, nos hemos visto, en el plan de
formación en liderazgo ignaciano. Este curso comenzará la segunda promoción.
Pero todos juntos, más de 300 personas, es la primera vez que nos vemos en
un encuentro así. Ha hecho falta que viniera el Padre General para hacer esta
convocatoria. Iremos aprendiendo nuevas formas de crear el Sujeto Apostólico
Provincial (aunque tengamos que ser cada vez más creativos y ver cómo organizarnos cuando la provincia se transforme en una entidad más grande tras el
proceso de integración de provincias).
31
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús Suele decirse que cuando el P. General visita alguna provincia jesuita en lugares
recónditos del mundo, como fruto de esa visita, suele haber un claro aumento de
ánimo y una renovación de la ilusión por seguir cada uno, jesuitas y laicos, comprometidos con su misión y vocación. Pues bueno, esta misma reunión, viéndoos a
todos aquí, creo ya es un resultado que es fruto de esta visita del Padre General.
En este encuentro, para presentar al Padre General quiénes sois, no voy a decir que
os presentéis todos diciendo vuestro nombre en voz alta, porque sería muy largo,
sino simplemente voy a citar las instituciones de las que venís. Creo que es bueno
recordar las instituciones de dónde venimos todos, todas las instituciones. Y eso por
ser la primera vez que tenemos un acto así. Para que lo conozca el Padre General,
y también para que os deis cuenta vosotros también de vuestra procedencia, su variedad y también la riqueza de presencias y plataformas que supone.
Por un lado, estáis personas del sector colegios:
Colegio san Ignacio, de Pamplona
San Ignacio ikastetxea, de Donostia
Instituto Politécnico Jesús Obrero, de Vitoria-Gasteiz
Colegio san Francisco Javier, de Tudela
Colegio nuestra señora de Begoña, de Bilbao
Escuela de Química y Electrónica, de Bilbao
San José Ikastetxea, de Durango
Por otro lado, del sector social:
Fundación Alboan, de Bilbao, Donostia, Pamplona y Vitoria
“Loiolaetxea” elkartea, de Donostia
Fundación Civil san Francisco Javier, y Centro Padre Lasa, de Tudela
Fundación social Ignacio Ellacuría, de Bilbao
Asociación de acogida “Jesuiten Etxea”, de Durango
Por otro lado, colaboradores de instituciones del sector pastoral:
Residencia San Ignacio, de Bilbao
Residencia Sagrado Corazón, de Donostia
Iglesia del colegio Indautxu
Iglesia del colegio de Pamplona
Santuario san Francisco Javier
Loiolako san Inazio Santutegia
Parroquia nuestra señora de Belén, de Bilbao
32
Encuentro con colaboradoras/es. Saludo del Provincial n
Parroquia nuestra señora de Lourdes, de Tudela
Arrupe Etxea
Ediciones Mensajero
Por otro lado, la Universidad de Deusto, con personas de sus dos campus, Bilbao
y Donostia.
Por otro lado, personas de la Curia Provincial.
Y también, personas que no son, digamos, colaboradores directos de obras
concretas, pero son colaboradores, bienhechores y amigos/as del conjunto de la
provincia, y que los hemos invitado desde la curia provincial.
Y, por último, un buen número de jesuitas de distintos lugares, incluido todo el
noviciado.
Hasta aquí este recorrido rápido por la provincia.
Además de la descripción de nuestros lugares de origen y de resaltar la novedad
de esta reunión, también creo que brevemente conviene señalar algo más, sobre
lo que podemos denominar, la “naturaleza” de este encuentro, o por qué estamos
aquí. En nuestro “proyecto de provincia”, que es el equivalente al “plan estratégico” de las distintas obras, hemos apuntado a tres líneas estratégicas como medios
para llevar adelante nuestra misión. Si recordáis, esas tres líneas son:
• personas para la misión
• instituciones para la misión
• intersectorialidad
Si nos preguntamos dentro de cuál de las tres líneas se puede enmarcar este acto
de hoy, este encuentro con el P. General, quizá la respuesta es difícil. O quizá la
respuesta es fácil: este acto tiene que ver con las tres líneas:
• “personas para la misión”. Las iniciativas de formación y acompañamiento tienen que ver con las personas. Este acto puede ser una iniciativa de formación (así lo esperamos de las respuestas del P. General). Y es
también una forma de acompañamiento: nos acompañamos unos a otros. Y
visualizamos una identidad y misión comunes.
33
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús Cuando hablamos de “personas para la misión” hablamos de jesuitas y
laicos, siguiendo lo que se plantea en nuestras últimas congregaciones generales, siguiendo las intuiciones del concilio Vaticano II, cuando hablaba
del pueblo de Dios.
En nuestros documentos no se habla de colaboración jesuitas y laicos (jesuitas y otros) como una estrategia de recursos humanos, sino más bien como
“una gracia de nuestro tiempo y una esperanza para el futuro” (CG 35).
Los jesuitas nos sentimos muy agradecidos por los pasos dados estos últimos
lustros por nuestra parte en cuanto a apertura a los laicos, y en cuanto a
compartir nuestro sentido de misión con los que habéis elegido trabajar
con nosotros. Y reconocemos que hemos sido enriquecidos por vosotros,
por la colaboración generosa, leal y competente de mujeres y hombres con
quienes compartimos misión.
• “instituciones para la misión”. La mayoría de las personas que estáis
aquí pertenecéis a obras e instituciones jesuitas. Sabéis que estamos estos
años renovando e impulsando la propia identidad y misión de cada obra.
Vuestra presencia aquí no es sólo en cuanto personas individuales, sino que
es también presencia en cuanto instituciones que quieren seguir unas líneas
de misión concretas.
• “intersectorialidad”. No hace falta mucha explicación. Si levantamos la
vista y miramos a todos los que llenamos este Loiola Centrum, podemos ver
que, como decía antes, estamos personas de muchas procedencias. Como
sabéis, en estos últimos años, la Compañía se plantea retos apostólicos
complejos, a largo plazo y, digamos, multidimensionales. La respuesta que
busca la SI no solo se logra a base de juntar provincias; o a base de juntar
obras de los mismos sectores; sino con acercamientos desde distintas perspectivas y apoyos mutuos desde distintas plataformas y sectores (el problema de la fe, la inmigración, los jóvenes, etc.). Esto que estamos haciendo
aquí es un acto “intersectorial”, con temas que nos afectan a todos y que
piden de todos una lectura y unos análisis compartidos.
Termino ya. Gracias por estar aquí, Padre General. Gracias a todos otra vez por
vuestra presencia. Y también agradezco a la Escolanía san Ignacio su participación
en este acto, por la nota de música y alegría que nos pone. Muchas gracias al colegio san Ignacio de Donostia.
Eskerrik asko baita ere Campus hontatik antolatu duzuenagatik gaurko ekitaldia
edukitzeko.
34
Semblanza del
Prepósito General Adolfo Nicolás SJ
realizada por el P. Jaime Oraá SJ
Donostia, 9 de septiembre de 2011
Es un gran honor y un gran placer para mí, a la vez que una gran responsabilidad
presentar al P. Adolfo Nicolás, trigésimo Superior General de la Compañía de
Jesús, y vigésimo noveno sucesor de San Ignacio de Loyola, ante este distinguido
auditorio.
Como decía otro célebre jesuita, Baltasar Gracián, “lo bueno si breve dos veces
bueno”; intentaré que sea así, aunque tenga el inconveniente de que siendo breve
se reduce la exposición de la rica personalidad y biografía del P. Nicolás. Pero lo
que todos hemos venido es a oirle a él, al P. General.
1. Breves rasgos biográficos
Palentino de origen, nacido en 1936 en Villamuriel de Cerrato en una familia
de cuatro hermanos varones, estudió en los colegios de jesuitas de Roquetas de
Mar y Areneros en Madrid, donde según dicen las buenas lenguas, fue dos veces
“Príncipe” del colegio.
Ingresa en la Compañía de Jesús en 1953 (por tanto a los 17 años), y ya en 1961
(a los 25 años) es destinado al Japón donde estudió teología y fue ordenado
sacerdote en 1967 (31 años).
39
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús Hizo el doctorado en Teología, en 1971 por tanto, después del Concilio Vaticano
II, en la Universidad Gregoriana de Roma, con una tesis dirigida, por el querido
y recordado Padre Juan Alfaro, gran teólogo, navarro (de Carcastillo), por tanto
de nuestra provincia de Loyola y de Javier, tesis que se tituló TEOLOGÍA DEL
PROGRESO, GENESIS Y DESARROLLO EN LOS TEÓLOGOS CATÓLICOS CONTEMPORÁNEOS, y que como no podía ser menos, está en la biblioteca de esta
universidad.
En el prólogo de la publicación, el Padre Nicolás agradece especialmente la ayuda que le prestó otro gran teólogo de la provincia, nuestro admirado Jon Sobrino,
superviviente de los asesinatos de la UCA, defensor de los derechos humanos, y
doctor honoris causa por nuestra Universidad.
Terminado el doctorado, vuelve a Japón como profesor de Teología Sistemática en
la Universidad Sophia de Tokio.
Posteriormente en 1978 es nombrado Director del Instituto de Pastoral de Manila
en Filipinas, centro de renovación conciliar en el continente asiático que tuvo y
tiene un enorme influjo en toda Asia.
Ocupó importantes cargos de gobierno: Elegido Provincial de Japón (como el
inolvidable P. Pedro Arrupe), dedicó cuatro años al trabajo con emigrantes.
Fue elegido en el año 2004 Moderador Presidente de la Conferencia de Provinciales de Asia Oriental y Oceanía.
Y el 19 de Enero del 2008, los 217 electores de la Congregación General 35, le
eligieron Superior General.
2. Algunos rasgos de su personalidad
De su biografía se puede intuir que Asia ha sido para el P. Nicolás, como él gusta
decir, un verdadero desafío en muchos aspectos.
El encuentro con un mundo distinto al europeo, pone en cuestión lo que hasta entonces le había parecido normal. Se impone la necesidad de reformular la fe ante
otras costumbres, otros modos de vida, otras culturas; la necesidad de aceptar la
diversidad se hace entonces imperiosa, y se considera la diversidad como una
manifestación del progreso.
40
Encuentro con colaboradoras/es. Semblanza del Prepósito General n
Se acrisola desde entonces la sensibilidad de un hombre dialogante y abierto,
constructor de puentes entre religiones y culturas. “Lo fundamental de nuestro diálogo, –son palabras suyas–, no deben ser las ideas, los sistemas, o los conceptos,
sino la gente. Ser persona es estar en diálogo permanente”. Confiesa: “mi identidad está definida por la comunicación con la gente”.
Con una gran capacidad de análisis crítico, es un hombre muy abierto.
De talante ecuménico, ni asiático ni europeo, de influencias mutuas de Oriente y
Occidente.
Algún jesuita que le conoce bien, dice que “entiende mucho de la cultura asiática,
pero está muy al día de la cultura europea”. Es un hombre muy comprometido
con el dialogo interreligioso (es un experto el budismo y el shintoismo). Ha sido
consejero en el Sínodo de obispos de Asia.
Por otra parte, el P. Nicolás es un hombre de honda conciencia social (quizá la
experiencia de cuatro años de trabajo con emigrantes, también le ayudó a ello,
así como el vivir en barrios pobres de Manila y Japón). Preocupado por las grandes problemas contemporáneos. Profundo y sencillo a la vez, es heredero de la
llaneza castellana.
Es propenso a la escucha y amigo de la transparencia, porque como aprendió en
Indonesia, con una espiritualidad transparente, lo bueno que llega se va comunicando a los demás, y lo malo que llega, pasa sin dejar rastro.
Termino: Querido P. Nicolás; como nuestro gran Ignacio de Loyola, Ud también
ha sido un peregrino por tierras y culturas.
Estoy seguro que también lo seguirá siendo en su despacho de Roma, porque
como Ud. dice y practica, “el ser peregrino es una actitud del corazón”.
Peregrino por los caminos del mundo, pero peregrino también y sobre todo, en
el Espíritu.
Muchas gracias, P. General por su venida.
41
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús RESPUESTAS
del Padre General Adolfo Nicolás SJ
Donostia, 9 de septiembre de 2011
1
Gobierno – Nueva provincia
Proceso de integración de provincias,
modelo de gobierno e intersectorialidad
R. Es una implantación paulatina que comenzó el año pasado 2010, con la
transferencia del sector de formación a la jurisdicción del Provincial de España,
pero que ya tenía una larga preparación en las décadas anteriores dada la colaboración grande y estrecha que había entre las Provincias. Precisamente en la
fecha de hoy, día 9, se trasfiere a la Provincia de España el sector de educación
primaria y secundaria, que implica 68 Centros Educativos, incluidos los 27 de la
Fundación SAFA en Andalucía y que llega a 74.000 alumnos. Y también hoy se
trasfiere el subsector de Pastoral Juvenil y colegial. Y en años sucesivas se trasferirán los otros: Universidades, sector social, pastoral…. En la previsión de que el
proceso concluya en el 2016, como fecha límite.
42
Encuentro con colaboradoras/es. Respuestas del Padre General n
No es una mera trasferencia jurídica. Todo se acompaña de un proyecto apostólico que cada sector debe preparar y que después deberá armonizar con los otros
sectores en el proyecto de cada plataforma apostólica territorial o local.
Los retos apostólicos y sociales son complejos y piden respuestas en sinergia. No
puede haber reinos de taifas, ni trasatlánticos que prescindan de otras embarcaciones sencillas… Todos se necesitan y se complementan, de forma que la riqueza
que cada sector significa, sea una dimensión transversal que está presente a la
hora de programar cada proyecto apostólico concreto… Queda, por tanto, mucho que hacer a los Superiores y Coordinadores para que el proceso sea creativo
y apostólico. No hay nada importante que funcione en automático. Prudencia,
sabiduría y discernimiento seguirán en el centro del proceso.
España va abriendo camino. Estoy muy agradecido a los Provinciales por la seriedad, apertura y creatividad con que han afrontado los retos de esta unificación.
Tanto que ya están siendo referencia e inspiración para otros procesos similares
actuales o posibles.
Dentro de poco también se hará público un documento dirigido a toda la Compañía que ha de ser de gran valor y repercusión: “Directrices para la renovación de
las Provincias y las estructuras”.
Una de las fuerzas de la Compañía, regalo de San Ignacio, ha sido siempre la
capacidad de superar nuestras diferencias a la luz de la común vocación. Es Cristo el que nos quiere a su servicio y unidos en la misma misión. Esto ha dado a la
Compañía capacidad de coordinación y de ir más allá de intereses particulares,
al servicio de los demás en el horizonte del Reino de Dios. Esto sigue siendo hoy
día una gran ayuda, y yo puedo dar testimonio de la libertad interior de nuestros
hombres a la hora de aceptar con alegría y dinamismo lo que la obediencia presenta como Voluntad de Dios.
Trabajo en red
R. Todos los sectores van teniendo experiencias muy concretas de trabajo en red.
El Secretariado social, la red de universidades… Es algo que se va consolidando
cada vez más y que nos supone un medio de gran valor para aprovechar y enriquecernos con nuestra real implantación universal.
43
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús 2
Misión compartida
Colaboración entre jesuitas y laicos. Participación de los laicos
en la misión y motivos que impulsan esta colaboración
R. Lo dije en la reunión de Rectores de Universidad en Méjico (abril 2010): “si los
jesuitas estuviéramos solos, miraríamos al futuro con dudosa esperanza. Pero con
la profesionalidad, el compromiso y la profundidad que tenemos en nuestros colaboradores laicos, podemos continuar soñando y marchar juntos hacia delante”.
No se trata de ningún oportunismo. Aunque no cabe duda que la escasez de
recursos personales ha contribuido al planteamiento de una reflexión en profundidad sobre “nuestra” misión aquí y ahora y a la formulación de nuestra opción, no
es menos cierto que una serie de datos avalan la afirmación de que esta decisión
no está determinada por la escasez de vocaciones y así lo quiso afirmar la CG34
en su último Decreto: “La participación y cooperación con otros en la misión, no
es una estrategia pragmática motivada por una disminución de efectivos, sino una
dimensión esencial de nuestro modo de proceder” (Decreto 26, nn. 16-17). Nos
diría en una charla que tuvo aquí en España el P. Kolvenbach, en el año 1999: “El
impulso del movimiento laical en la Iglesia no brotó de la angustia cuantitativa de
sus números decrecientes, sino de la alegría cuantitativa y teológica de descubrir
la hondura de la llamada a la santidad y a la misión que nace de la condición
de bautizado”.
En realidad el tema de la colaboración y del laicado se formula ya expresamente
en 1965, en la CG31 que elige General al P. Arrupe, un momento en el que la
Compañía se encontraba en plena expansión y aún no había comenzado la crisis
de los años 70, con su posterior disminución de efectivos.
Hablamos hoy con acierto de la misión como “Missio Dei”. Esto tiene consecuencias enormes. Si es la Misión de Dios, es Él que decide quiénes son sus colaboradores y qué planes van a tener futuro. No tenemos “misiones pequeñas”, hechas
a medida, sin horizontes. Lo que tenemos es más grande que nosotros y nuestras
posibilidades (Missio Dei), y por eso mismo totalmente abierto a la realidad, a los
demás y a la sorpresa. Queremos entender la misión como un concepto profundo
y teológico. Nosotros no poseemos la misión. La misión nos posee. Es el Señor
quien da la misión y quien llama, tanto a laicos como a jesuitas.
44
Encuentro con colaboradoras/es. Respuestas del Padre General n
Compartir es compartir una herencia espiritual y participar de una conciencia
común de servir la utopía del evangelio, más que cogestionar tareas o repartir
funciones. Se trata de apostar juntos, desde la vocación y responsabilidad de
creyentes y en tal apuesta cada uno debe asumir su papel, sabiendo que nos
situamos en una previa opción por esta Iglesia - Pueblo de Dios en la que unos
y otros nos acogemos en toda nuestra común identidad y en nuestra diferencia.
Se están dando pasos significativos, con buena voluntad, con positividad y sentido de búsqueda y también con algunas sombras. Tengo mucha esperanza en
el “Secretariado para la colaboración con los otros” que espero poder constituir
dentro de poco tiempo en la Curia General y que formará parte muy directa de
la estructura de gobierno de la Compañía…
Unos y otros tenemos que ser muy consecuentes con nuestras respectivas vocaciones… nos necesitamos mutuamente, para enriquecernos con nuestras especificidades, sin perder la identidad de la vocación religiosa y de la vocación laical.
Y sentir y gustar que estamos al servicio de la Iglesia. Esta es una clave para
concretar nuestra misión compartida.
Transmisión de la espiritualidad ignaciana a los laicos.
Inquietud sobre la continuidad del Plan de Formación en
Misión e Identidad Ignacianas existente en la Provincia de Loyola
R. A Dios gracias sé que en todas las provincias el tema de la formación del laicado tiene ya una base consolidada. Será cuestión de aprovechar la “sabiduría”
de tanta experiencia y de seguir avanzando con gran sensibilidad hacia lo que
son las características de cada zona….
3
Europa (y más allá)
Rol de los jesuitas, de la Compañía y de sus instituciones
en el contexto europeo de misión
R. La Conferencia de Provinciales está cada vez trabajando con un crecido sentido de responsabilidad compartida, en una Europa que es muy diversa, pero
que va presentado cada vez más rasgos comunes en sus problemas sociales y en
45
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús cultura secularizada. Hace años se trabajó un documento sobre “Nuestra misión
en Europa”, que ahora tiene que ser rehecho en su fundamentación teórica o
reflexiva y en sus respuestas prácticas.
El sentimiento más general es que nuestro rol es fundamentalmente animar a los
laicos, contribuir a la educación y ahondar en el Cristianismo más como experiencia que transforma a las personas, que como doctrina. Hay un sentimiento cada
vez mayor de la necesidad de redescubrir los dones que tiene cada uno y evitar
el que se sigan perdiendo.
Temas sociales prioritarios para la Compañía de Jesús en la sociedad europea actual, y colaboración de los laicos en esos temas
R. La emigración y sus consecuencias sociales, la repercusión de la crisis económica… Más que plantearse cómo pueden colaborar los laicos, habrá que plantearse como podemos juntos, como creyentes, como Iglesia, responder a los retos
graves y serios que arrastran las gentes que transitan por nuestras ciudades y
pueblos…
Son los retos de todos los tiempos. De todos los sabios, de todas las Religiones
y Sociedades: la Paz, la Guerra, el Hambre, la Pobreza, la falta de alegría y esperanza, el sentido…la Justicia. También La Vida Política como lugar de grandes
responsabilidades sociales.
Situación de la educación en Europa. ¿Cuál es la contribución que
deben hacer las instituciones ignacianas?
R. Preocupación de la Compañía de hoy en esta vieja y cansada Europa es el
suscitar que nuestras instituciones educativas, identificadas con una cultura liberadora de toda persona y de toda la persona, se configuren como plataformas
de cercanía entre la fe cristiana y los puntos nucleares de las culturas contemporáneas, convencidos de que nuestros valores son una palabra hoy necesaria. Y
así de paso interrogarnos si como Obras Educativas Ignacianas tenemos recursos
culturales para expresar la fe fuera de los ámbitos estrictamente eclesiales.
Necesitamos ofrecer una educación de calidad. Ha sido una constante de las
peticiones del Papa Benedicto XVI a la Congregación General 35. La misma dificultad de la misión, implica un firme propósito de prepararse con calidad, mucho
más allá de la mediocridad. Esto es el MAGIS de Ignacio.
46
Encuentro con colaboradoras/es. Respuestas del Padre General n
La Compañía de Jesús no puede pactar mínimos. El P. Arrupe y el documento “Características” hablan de “excelencia en la formación” y el P. Kolvenbach de “rigor
intelectual”. Son categorías de la espiritualidad ignaciana. El “magis” ignaciano se
entronca en la experiencia del hombre que ha entrado en contacto con un Dios que
no pone límites y una humanidad llamada a crecer y transformarse según el horizonte ilimitado del amor de Dios. Esta es la dinámica de los Ejercicios Espirituales.
Un Centro educativo de la Compañía deberá luchar para que cada alumno se
esfuerce por superar la mediocridad. Nuestras instituciones pueden y deben formar
gente académicamente excelente y profesionalmente competente y esto es parte de
la esencia misma del estilo educativo de la Compañía. Formar gente competente no
va contra la idea de una sociedad más solidaria. Hoy estamos convencidos de que
el compromiso por la justicia sólo resulta eficaz cuando comporta la transformación
de la cultura, ya que las raíces de la injusticia están incrustadas en las actitudes
culturales y en las estructuras económicas. Y esto supone preparación.
Esta superación de la mediocridad no se repentiza. Es preciso reflexionar, elaborar
teoría y pensamiento educativo, abrirse a diagnósticos y evaluaciones rigurosas. La
Compañía, de acuerdo con su irrenunciable papel educativo sapiencial y profético,
apostó y apuesta por:
– Despertar la conciencia de nuestros alumnos a una realidad global que se
extiende más allá de las fronteras de Europa y que exige un distinto modo de
actuar en el plano de la justicia. Despertar el deseo de aprender de otros, de
lo diferente, de lo distante. Y, al mismo tiempo, renunciar a la dictadura de la
cantidad y la moda.
– Promover un sano convencimiento de que el trabajo por la modificación de
las estructuras sociales vale la pena y por ello, potenciar la vocación política,
en el sentido más amplio del término, como forma de servir a la sociedad.
– Ayudar a redescubrir el gusto por las realidades que no son de mercado: valores, sentido del misterio humano, interpersonal y también divino
(como re-sensibilizar a la música callada, al silencio, a las dimensiones
más profundas de la realidad y el universo).
– En todo y siempre ahondar en la búsqueda de la verdad, a que nos ha
invitado Benedicto XVI en su reciente visita y encuentro con Jóvenes Profesores. Sabiendo que una parte importante será nuestra capacidad de
administrar la información al servicio de la verdad y no de la ideología o
la propaganda de cualquier cariz que sea.
47
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús La espiritualidad de los jóvenes en Europa
R. Por la mucha información que he recibido este año, deduzco que sufren las
consecuencias del ambiente de secularización en que viven; de la situación de la
familia, desestructurada y en la que los valores religioso tienen nulo o poco relieve. Ello les hace vulnerables. Por otra parte están apegados a un relativismo moral
y a la cultura de lo inmediato, con poca capacidad de cuestionamiento, con poca
o superficial formación religiosa… Predomina en ellos una imagen negativa de
la Iglesia. Se sienten muy distantes de la Jerarquía. Carecen de comunidades
cristianas de referencia.
Pero también tengo que decir que aquí cerca, en Loyola, he recibido un impacto
muy fuerte de los muchos valores positivos que encierran. Están llenos de creatividad y de ilusión. Buscan a Dios, en medio de su insatisfacción… etc. (algún eco
del encuentro con los jóvenes y del diálogo con ellos). Sensibles al corazón y a
la estética.
4
creyentes y no creyentes
Colaboración con personas no creyentes en las instituciones
de la Compañía de Jesús
R. Tenemos que superar el complejo de “mejores” que llevamos con nosotros. Si
realmente creemos en la Missio Dei y que los retos importantes son los grandes retos
de la Humanidad de todos los tiempos, tenemos que aceptar que “otros creyentes”
trabajen con nosotros y se sientan en casa. Tenemos la experiencia de Japón y
cómo a veces un Budista puede tener más corazón y más visión que un Cristiano.
Reconocer la necesidad de limpiar nuestro lenguaje de todo resabio de superioridad. Estamos tan acostumbrados a hablar de “educación jesuita” que ya no entendemos qué se dice cuando se habla de buena educación, educación de calidad,
etc. La visión y la experiencia de las personas son más influyentes que los sistemas.
Esto nos pide a nosotros una vuelta a la humildad, la realidad y el servicio.
Los problemas que tenemos que resolver juntos van más allá de las Iglesias y los
credos y es en esta redefinición de los problemas que nos encontraremos al mismo
nivel. Si nuestro compromiso es con la calidad, el MAGIS, la transformación de
nuestra sociedad… no tendremos problemas con los que no participan de nuestra
Iglesia, pero tienen el mismo corazón… y quizás la misma fe, o mejor aún. El
48
Encuentro con colaboradoras/es. Respuestas del Padre General n
“-ismo” no existe. Existen solamente personas, grupos… que hay que entender en
sus términos.
5
Fronteras
Las fronteras a las que somos llamados
R. La búsqueda de nuevas fronteras, nuestras planificaciones, nuestros Proyectos
Apostólicos, son para el servicio a la Iglesia. Desde la Iglesia universal, en la persona del Santo Padre, nos ha llegado una cálida invitación que ha hecho mella
en todos nosotros: No son los mares o las grandes distancias, los obstáculos que
desafían hoy a los heraldos del Evangelio, sino las fronteras que, debido a una
visión errónea o superficial de Dios y del hombre, acaban alzándose contra la
fe y el saber humano, la fe y la ciencia moderna, la fe y el compromiso por la
justicia. (Discurso, 21 de febrero de 2008). En la Gregoriana habló de Fe y
Ciencia, Otras Religiones, Secularidad, etc.
Estamos ante una invitación que al aceptarla con coraje, asumimos también la
posibilidad de equivocarnos y tener que corregirnos y pedir, de nuevo, perdón.
Hemos de correr el riesgo de sembrar mucho para recoger poco. Hay fronteras
ocultas e irrelevantes que nos sumergen en el anonimato. Hemos de pedir la gracia y el gozo de la fidelidad en un tiempo de escasa fecundidad. Nos sentimos
retratados en las palabras de Pedro: “Hemos estado toda la noche faenando
sin pescar nada; pero puesto que tú lo dices, echaré las redes”. (Lc. 5,5). No se
escoge a humo de pajas, sino después de un discernimiento serio en que se ve
todo lo que es posible ahora y se proyecta para el futuro.
Para nosotros, como jesuitas, las fronteras son ocasiones privilegiadas para
avanzar, son posibilidades que nos provocan en positivo y nos ayudan a crecer.
Tienen algo que las convierte en fascinante y atractivo. Son atalaya que nos
abre a horizontes nuevos, horizontes en los que se descubre de manera nueva
la realidad. Son lugar de encuentro con el misterio de Dios. Y siempre en el
horizonte del AMDG
Desde su propia dinámica histórica, la Compañía ha estado atenta a descubrir
fronteras y campos nuevos de misión y de presencia de la Iglesia. Por esto, me
parece que una de nuestras aportaciones indudables a la hora de expresar
nuestros objetivos apostólicos debe ser la mirada vigilante hacia las necesida
49
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús des pastorales o sociales que no están atendidas por otros, a las oportunidades
de evangelización, servicio y misión que se presentan allá en donde estamos,
a las nuevas necesidades que pueden estar surgiendo, con la evolución social
y los cambios socioculturales. Y hay unos criterios ignacianos para el discernimiento y la elección.
¿Debe priorizarse la acción o la sensibilización en
el apostolado social?
R. Sobre el priorizar o la acción directa o la sensibilización, quizás no sea lo
correcto plantearlo en términos de o/o. La Compañía por su especificidad y
tradición está más llamada a lo segundo. Pero esto no lo puede hacer desde
una torre de marfil aislada de la realidad. Por eso su compromiso decidido con
las personas y sus situaciones directas… campos de refugiados, presencia en
contextos marginales, etc.
La evangelización en el contexto de sociedades secularizadas
R. Creo que esto está ya respondido más arriba. La Compañía anheló siempre
que en sus Obras Apostólicas la espiritualidad ignaciana se hiciese palabra evangelizadora que ayudase a los alumnos a desarrollarse como personas. Como
ejemplo, en expresión del documento “Pedagogía Ignaciana”:“No queremos un
programa de indoctrinación que sofoque el espíritu, ni tampoco tratamos de organizar cursos teóricos especulativos y ajenos a la realidad”. Sin polarizaciones,
sin fundamentalismos, pero sin impedimentos. Lo dije en la ya aludida reunión de
Rectores de Universidades (México 2010) “La postura irracional del fundamentalismo distorsiona la fe y promueve la violencia en el mundo. La voz desdeñosa del
secularismo impide a la Iglesia ofrecer al mundo la solidaridad y los recursos de
la herencia histórica y teológica del catolicismo”.
6
Apostolado intelectual
El apostolado intelectual y la universidad jesuita
R. En primer lugar Apostolado Intelectual no quiere decir Trabajo Universitario únicamente. Lo que quiere decir es Hondura, estudio serio, búsqueda de conexiones,
50
Encuentro con colaboradoras/es. Respuestas del Padre General n
raíces, implicaciones para una inteligencia mejor y una práctica más responsable. Y esto se da en todos los campos: social, pastoral, educativo, espiritual, etc.
Ejemplos de apostolado intelectual son, dicho brevemente: Universidades; Reflexión con grupos de intelectuales, profesionales, dirigentes…; Reflexión filosófica o teológica; Reflexión sobre la realidad de un modo más amplio que una
Parroquia, un Colegio, Una Casa de Retiro, etc.
En este sentido una Universidad Jesuita tiene que ser fiel a su inspiración original
y contribuir al trabajo intelectual con los valores y las perspectivas que la fundaron: Cristianos e Ignacianos. Y para justificar una inversión de recursos humanos
y económicos de tal envergadura ha de mantener de una manera consistente y
creíble esta fidelidad original. Ha de contribuir también a los problemas de su
entorno con visión e investigación que ayuden a los pueblos a responder a los
retos de su tiempo.
7
Otros
La «fidelidad creativa»
R. Fidelidad Creativa: Simples reflexiones.
La Compañía de Jesús se fundó para servir a la Iglesia y la forma de hacerlo
es siendo creadores. Cada vez que en fidelidad a la Iglesia se ha avanzado
una visión de la realidad (como lo hicieron Mateo Ricci, De Nobili, K. Rahner, Teilhard…) en primera instancia parecía que se hacía alejándose de esa
fidelidad.
Sobre la afirmación de que «el que educa evangeliza y el que
evangeliza educa»
Esta expresión de educar y evangelizar, tengo noticia de que fue un lema
acuñado aquí en España por la FERE (Federación Española de religiosos de Enseñanza): “Educando evangelizamos”, ya hace varios años y que bajo su inspiración, en los últimos años de los 90, había fraguado con interés la idea del
Colegio Evangelizador como modo de ir asegurando el horizonte del entonces
mítico 2000. Fuera de este contexto y en términos absolutos no es verdad.
51
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús Para ello en las obras educativas se llevó a cabo una labor ingente en la dimensión Pastoral, con el subrayado de que el anuncio de la fe no es algo para-escolar, sino que tiene una entidad, que además de trasversal es progresiva, conforme
a una acción planificada de actividades que lleven, no sólo al conocimiento del
hecho religioso, sino a la vivencia de fe que une las propuestas del Evangelio con
las preguntas y las experiencia fundamentales, que nunca dejan de plantearse en
algún instante de la existencia.
52
Reacciones y llamadas
percibidas por los colaboradores
y colaboradoras tras el Encuentro
Muchas personas que participaron en el encuentro con el Padre
General nos remitieron por escrito sus impresiones. Recuperamos de entre esas líneas lo que las y los colaboradores perciben
como llamadas y retos, para ellos y para todos, tras la intervención del P. Nicolás.
“No perdemos la identidad si incluimos a otros, con otras creencias u otras sensibilidades”. Mediante esta inclusión se promueve la aportación de todos, mejora
la convivencia y nos enriquecemos todos.
Marian Aláez y Begoña Matellanes,
Universidad de Deusto, Bilbao
Bizi dugun momentuan, krisi ekonomikoaren aurrean, gogoeta eta ekintza
zehatzak pentsatu ahal izango genituzke antolamendu ezberdinetan: krisiaren
zergatiak, ezaugarriak, ondorioak; zein ekintza zehatz egin daitezke alor
hauetako bakoitzean.
Luzia Alberro,
Deustuko Unibertsitatea, Donostia
53
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús Hay que plantearse la siguiente cuestión: “¿cómo responder a los retos actuales y
reducir el sufrimiento?” Fomentar la acción política como forma de cambio. Hay
que buscar la verdad y tener deseo y hábito de investigar.
Esther Álvarez,
Universidad de Deusto, Bilbao
Estar abiertos a la sorpresa; el Espíritu sopla donde quiere. Fomentar la creatividad; para problemas nuevos se requieren nuevos caminos de intervención, con
optimismo. Gran importancia de la formación de las personas, con seriedad y
responsabilidad. Amplitud de miras, ver más allá de las posibles apariencias.
Beatriz Arana,
San Jose Ikastetxea, Durango
Berak esan zuena zen gazteak mezetara joaten direnean ez dutela beraiek nahi
dutenik entzuten edo bilatzen. Beraiengana iritsi behar dela, zer arazo dituzten
ikusi, nola pentsatzen duten, zer bilatzen duten… gazteak dauden lekuetara joan
behar dela, eskolak, unibertsitateak…
Ainhoa Aranguren,
Loiolako Santutegia
El apostolado intelectual no es exclusivo de la universidad. El apostolado intelectual
supone ir a lo profundo, supone la investigación sobre el trabajo realizado. No
debemos contentarnos con el sentido común sino que debemos llegar a lo profundo.
Amaia Arzamendi,
Colegio San Ignacio, Donostia
También me encantó del encuentro con el P. Nicolás la referencia a las fronteras
y a esa nueva perspectiva de entender las fronteras como “una ocasión que nos
ayuda a crecer”. Superar las fronteras en todos los ámbitos de la vida, ser misioneros en nuestro día a día, en nuestro entorno más próximo, con un concepto
realista, cercano y moderno de la Misión de Dios.
Fernando Asenjo,
Universidad de Deusto, Bilbao
Alguna de las frases las he apuntado para que no se me olviden: "nuestra identidad no está en pertenecer a la Compañía sino en nuestra espiritualidad"; "no es
54
Encuentro con colaboradoras/es. Reacciones y llamadas n
la misión de la Compañía, sino la misión de Dios (al referirse a la colaboración
de los laicos)”, etc.; se me olvidarán pero me queda el aroma.
Gema Bizcarrondo,
Deusto, Bilbao
Todavía resuenan unas palabras que tenían tinte de reto. La preparación. En una
sociedad en la que cada vez buscamos más respuestas y no nos vale con una
única solución rígida y dogmática, surgen nuevos puntos de relación y reflexión
que ofrecen caminos para encontrar soluciones. Las iglesias están perdiendo ese
papel y están siendo sustituidas por nuevos espacios donde gente preparada facilita esa búsqueda. La Universidad, centro de conocimiento, se está convirtiendo
en el nuevo foro. Colaboradores y Padres Jesuitas debemos estar cada vez más
y mejor preparados para responder a estas nuevas necesidades. Hoy no vale
cualquier respuesta. Preparación, reflexión crítica y lealtad.
Jesús Campo,
Colegio San Francisco Javier, Tudela
Misión compartida. Me sentí llamado a salir de mi propio interés, personal y
organizacional, para poder colaborar mejor (más transformadoramente), en el
horizonte común de transformar nuestra sociedad, espiritual, cultural, social y
económicamente.
Nacho Eguizábal,
Alboan, Bilbao
Sus palabras eran ante todo de esperanza, de positividad, de nuevos horizontes
en “mayor gloria de Dios”, y sobre todo de valentía para asumir el riesgo de
cometer equivocaciones y de aceptarlo con humildad.
Donna Fernández,
Universidad de Deusto, Bilbao
“Ser fieles para ayudar” es diferente que ser sumisos, estar callados, tener
que aceptar todo por decreto ley… sin miedo a consecuencias (a veces nos
darán una bofetada) pero no importa, sigo perteneciendo y sintiéndome parte
de ella.
Paz Gil,
Parroquia Nuestra Sra. de Lourdes, Tudela
55
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús Destacaría la fuerza y el equilibrio con el que explicó la fidelidad creativa. Esa fidelidad a Dios que hace romper los moldes hechos, soñar y crear algo nuevo pero desde lo más genuino de la escucha a Él, dispuestos a “aguantar“ lo que traiga como
coste, sin protagonismos y con gran confianza en Aquel que lo ha hecho nacer.
Julia González,
Universidad de Deusto, Bilbao
En palabras del P. Nicolás en el encuentro, se trata de “ahondar en un cristianismo que sea más vivencia que doctrina”. Los jóvenes están cansados de palabras,
quieren hechos. No quieren que les abrumemos con preciosos discursos sobre
nuestra identidad y misión, sobre la excelencia que buscamos, quieren ver que
hacemos lo que decimos y sólo después de comprobar que realmente hacemos lo
que decimos nos preguntarán por qué lo hacemos.
Santiago Larrazabal,
Universidad de Deusto, Bilbao
También captó mi interés todo lo relacionado con la creatividad, la innovación,
la búsqueda de nuevos caminos que ayuden a una evangelización fruto de la
experiencia personal y de la profunda formación. En este aspecto – innovación,
creatividad - creo que los colegios estamos muy dormidos y poco abiertos al cambio necesario. El rigor intelectual, la profundidad, la apuesta por no ser indulgente ni prepotente, el diagnóstico más certero de la posición real de la Iglesia en el
mundo actual; la humildad, que no está reñida para nada con la excelencia –en
realidad, la mejora–.
Eusebio Leandro,
Colegio san Ignacio, Pamplona
Nos parece muy valiente, pero esencial, lo que planteó referente a la necesidad
de la Iglesia de “repensarlo todo” en la liturgia, la moral, la forma de situarse
en el mundo, etc. para poder realmente dar respuesta a las preguntas hondas y
vitales del ser humano hoy, en esta sociedad compleja, puesto que las respuestas
y planteamientos que se daban antes no satisfacen a las personas, hoy más formadas y culturalmente diversas.
Loiolaetxea, Donostia
Del encuentro diría que ha servido para hacer sujeto apostólico: el vernos allí
los de las comunidades apostólicas y los de los cursillos de Loyola es otro grano
56
Encuentro con colaboradoras/es. Reacciones y llamadas n
de arena en la construcción de relaciones entre los que estamos en esas cosas.
Además el estar con el General nos hace presente la realidad de la Compañía
universal, más allá de nuestra obra o la provincia de Loyola, y también nos
recuerda la variedad de trabajos que desempeña la Compañía en la misma
provincia.
Pablo Martín,
San Jose Ikastetxea, Durango
Conseguir que en los ámbitos eclesiales cuando se hable del amor de Dios necesariamente se hable de la justicia, porque no se puede amar a Dios si no hay un compromiso real con la justicia, un compromiso de luchar contra la injusticia que devasta a tantos de nuestros hermanos, a tantos otros hijos de nuestro Dios amoroso.
Sergio Morella,
Alboan, Pamplona
Todos y todas somos líderes y ejercemos como tales de forma habitual, consciente
o inconscientemente. Pero se trata de un liderazgo que nace de adentro, se basa
en nuestro autoconocimiento y se manifiesta a través de nuestra manera de vivir,
de amar, aunque muchas veces nos pueda dar vértigo.
Eduardo Ochoa de Aspuru,
Instituto Politécnico Jesús Obrero, Vitoria-Gasteiz
Nos manifestó, también, la necesidad de apuntarse al cristianismo “de verdad”,
de realizarlo a pié de calle, profundizando en el servicio de la Fe, de la promoción de la Justicia, del diálogo permanente con la cultura, con otras religiosidades
y con el resto de la humanidad. Vigilando asimismo el planeta (la creación), en
cuanto al buen trato ambiental.
Víctor Mª Ortiz de Salido y Ganzábal,
Colegio Indautxu, Bilbao
El hecho de tener un adjetivo: cristiano, budista, mahometano, judío, católico…
no debe marcar fronteras. Hay que convivir para compartir mensajes, que pueden ser evangélicos y bíblicos y coránicos y budistas. Los occidentales movilizamos impulsivamente la razón, mientras que los orientales movilizan mejor sus
emociones, disfrutan, viven. Son culturas distintas, pero no incompatibles.
Manuel Poblete,
Universidad de Deusto, Bilbao
57
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús
En un mundo como el europeo, crecientemente alejado de cualquier forma de religión, pero sensible a muchos valores evangélicos (compasión, justicia, entrega,
amor…), tenemos los católicos un enorme reto: hacer comprensible nuestra forma
de pensar para la sociedad actual, es más, hacerla atractiva. Transmitir que el
evangelio no sólo no obstaculiza el avance hacia una sociedad mejor sino que
ayuda mucho en ese camino.
Loli Revuelta y Fernando Gómez-Bezares,
Universidad de Deusto, Bilbao
Una llamada, en definitiva, a sentirnos comunidad, a que los logros son de todos... a trabajar por todos. Sólo así no sólo seremos parte, sino que nos sentiremos parte de un proyecto que vale profundamente la pena. Alberto Sarasúa, Colegio Indautxu, Bilbao
No obstante, la colaboración estrecha entre los jesuitas y el laicado no significa
que cada uno se “mimetice” en el otro. Es necesario distinguir y fomentar ambas
identidades, que son complementarias pero no intercambiables. Hay labores que
son irremplazables si los jesuitas no las realizan (no solo la administración de
sacramentos). En mi opinión, la pérdida de identidad de la vida religiosa es una
de causas de la crisis vocacional, también en la Compañía de Jesús.
Borja Vivanco,
Universidad de Deusto, Bilbao
Priorizar las buenas relaciones humanas (ambiente de confianza y confiable) compaginándolas con la buena gestión, que no debe de sustituirlas. Que la eficacia
de los tiempos y tareas no impida la calidad del trato.
Inma Zudaire,
Instituto Politécnico Jesús Obrero, Vitoria-Gasteiz
58
ENCUENTRO CON JESUITAS
EN LA CELEBRACIÓN DE LOS
JUBILEOS DE JESUITAS
DE LA PROVINCIA DE LOYOLA
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús Homilía del Padre General Adolfo Nicolás SJ
en la eucaristía del Encuentro
con Jesuitas de la Provincia de Loyola
Santuario de Loyola, 10 de septiembre de 2011
Me gustaría poder hablar en vascuence, pero dos días no es suficiente para
aprenderlo…
La Fiesta de Francisco Garate creo que es sumamente adecuada a las celebraciones
que se acumulan hoy. En la primera lectura hemos oído que el Señor está a
la puerta y llama. Hay un famoso cuadro de un pintor inglés cuyo nombre no
recuerdo, en el que se ve a Jesús llamando a una puerta. Esa puerta no tiene
picaporte, no tiene modo de abrirla desde fuera, y por eso cuando el cuadro se
hizo público, los críticos ingleses enseguida notaron la falta y le criticaron: “Aquí
tenemos un gran pintor pero un poco distraído, que se ha olvidado poner el
picaporte”. A lo cual el pintor contesto: “No, no me he olvidado, pero la puerta
del corazón solamente se puede abrir desde dentro”. Creo que hay una verdad
muy profunda encerrada en esas palabras. La puerta del corazón solamente se
puede abrir desde dentro.
Eso también me ayuda a relativizar nuestro servicio desde Roma. Tenemos escritos
para todo: cartas, documentos, etc., pero la puerta se abre desde dentro, nunca
se puede abrir desde fuera y es desde dentro desde donde nosotros respondemos
o no respondemos a la llamada del Señor. Lo importante es que nuestra vida
60
Encuentro con jesuitas. Homilía n
prácticamente es esperar esa llamada del Señor. Toda nuestra vida es esperar el
momento en el que el Señor va a llamar a nuestra puerta, para estar dispuestos a
responder. Los que celebran el jubileo hoy con nosotros saben perfectamente que
50 años tanto de Compañía como de sacerdocio son 50 años de espera.
Cuando –imagino que por equivocación– me eligieron General, yo sentí que me
encontraba en un aeropuerto y oía la voz: “Última llamada, última llamada…”,
la última oportunidad de abrir la puerta. Pero yo estoy seguro que no hay que
esperar a que os elijan generales para eso, cada día es la última oportunidad,
porque no sabemos si mañana va a haber una llamada o no.
El Señor pasa por nuestras vidas de muchísimas maneras, todo depende del tipo
de sensibilidad que tengamos a la llamada del Señor: el Señor pasa en los pobres
y los que sufren, el Señor pasa en los que necesitan de nuestra sonrisa, de nuestra
aceptación, de nuestra acogida; el Señor pasa cada vez que acompañamos a
una persona. Por eso a la Iglesia le duelen tanto en el momento actual todas estas
cuestiones de abusos... Porque quiere decir que cuando el Señor ha pasado, en
lugar de abrir la puerta, la hemos cerrado para quedarnos con nosotros mismos.
Y el Señor pasa cada vez que sufrimos, o cada vez que el General nombra a un
superior incompetente: el Señor pasa. Hay una historia –que en la Curia la he
contado un par de veces, mi Asistente la conoce– que a mí me impresionó mucho,
de Rumi el famoso místico poeta musulmán persa del siglo XIII. La historia dice
que una vez un joven estudiante quería acudir a sus lecciones y ser dirigido por
el gran maestro Rumi. Por ello fue a su casa, y llamó a la puerta, y en lugar de
Rumi salió su mujer que parece tenía un carácter un poco difícil. Abrió la puerta
y le preguntó: “¿Qué quieres?”, “Vengo a ver si el maestro Rumi me acepta
como discípulo suyo”. La mujer que conocía a Rumi y todos sus defectos le dice:
“¿Discípulo de aquél holgazán que tengo ahí dentro? ¿Tú quieres aprender de
ese que no sirve para nada más que para estar sentado…?”. El joven se quedo
aterrado y en ese momento apareció Rumi detrás de su mujer: “¿Qué pasa?”.
El joven, con extrañeza y dignidad delante de Rumi, le dice: “Maestro estoy
asombrado de que usted haya escogido como esposa a una mujer… ¡así!”. Y
Rumi le responde: “Muchacho, no entiendes nada. Dios nos ha hecho a todos
espejos suyos, y me ha dado a esta mujer para sacar brillo al espejo”. No es
una historia feminista ni antifeminista. Podía ser al revés, exactamente lo mismo.
Para mí cuando leí esta historia, me inspiró, y también me dio un poco de tristeza,
porque no es frecuente oír a jesuitas decir: “Gracias por este mal superior que
nos ha dado”. Superiores que a veces vienen a sacar brillo a nuestros espejos.
Con frecuencia la solución a estas crisis es: “¿Por qué no se lo lleva a otra
61
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús comunidad?”. Y nosotros nos quedamos como espejos sucios. Pero se está
cómodo siendo espejo sucio.
Para Ignacio todo era paso del Señor, la herida en Pamplona y todas las dificultades
que se encontró después: con la Inquisición, con jesuitas, con Nicolás Bobadilla,
con cualquiera. Todo era paso del Señor. Yo creo que Loyola nos recuerda que
este paso del Señor se da continuamente. Es un paso que no tiene nada que ver
con las circunstancias, que pueden ser dolorosas, nos pueden molestar, pueden ir
contra lo que nosotros pensamos, pero allí se encuentra el Señor. El Apocalipsis,
que después de todo es un mensaje de futuro, nos recuerda que el Señor está
siempre a la puerta llamando.
Y esto nos lleva al H. Francisco Garate, que tanto tiene que enseñarnos sobre
lo que significa el paso del Señor. La vida de Garate fue escuchar a la puerta a
ver quién viene, y en ese quien viene ver la cara del Señor. Hay también textos
en la Biblia que afirman: lo mismo que estoy esperando la llamada del Señor
estoy buscando la cara del Señor en los demás, estoy buscando la faz del Señor.
Ignacio cree que todo es una oportunidad de encontrar a Dios en todas las cosas,
de ver la cara de Dios en todas las cosas. Garate en este sentido nos dice que en
cada estudiante podía ver la cara del Señor. Y nosotros sabemos que no todos los
estudiantes son la gloria encarnada, hay de todo. Encontrar a Dios en todas las
cosas es encontrar a Dios en lo que vemos y en lo que no vemos. En lo bello para
dar gracias; en lo que no es bello, en lo feo, para darle vida y transformarlo en
bello. Nada que viene a nuestro encuentro está lejos de la cara del Señor.
Los que celebran hoy el jubileo saben perfectamente que nuestra vida es esta
búsqueda también, vida consagrada a la búsqueda. Y los que pronuncian los
últimos votos nos dicen solemnemente hoy, que ellos también quieren entrar en
esta búsqueda de una manera definitiva, porque esta es la búsqueda que da
sentido a sus vidas.
Hay otra historia sufí que a mí me gusta. Es la del maestro que pregunta a sus
discípulos: “Vamos a ver, ¿cuándo termina la noche y empieza el día?”. Los
discípulos empiezan a pensar y en seguida uno levanta la mano: “Pues cuando
se empiezan a ver las siluetas de los edificios y las montañas”. El maestro dice:
“Mmmm…. ¡otro!”. Y otro dice: “Cuando se empieza a distinguir entre personas
que se mueven y árboles que no se mueven”. Y el maestro “Mmmmm… ¡otro!”. Y
ya por fin uno dice: “Cuando se ve la cara de otra persona y se ve un hermano
o una hermana, entonces ha empezado el día”. Y ahí el maestro se quedó
satisfecho. Cuando en los demás vemos a Cristo, a un hermano a una hermana,
entonces estamos en pleno día, entonces la luz de Dios está en medio de nosotros.
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Encuentro con jesuitas. Homilía n
Cuando el que llama no tiene la cara de las estampas sino la cara de nuestros
compañeros, la cara de los que sufren, de los que buscan compañía, de los que
se sienten solos.
El evangelio viene a resumir esta búsqueda en términos de servicio. Y viene a
resumir lo que fue la vida de Francisco Garate. Nuestra acogida del Señor en los
demás se presenta como un lavatorio de pies.
Hoy se habla de comunidad como misión, comunidad como algo mucho más
importante a cómo los jesuitas lo hemos pensado en el pasado. He buscado
en diccionarios y no encontré satisfacción hasta que leí un libro de Gerhard
Lohfink sobre comunidad en el Nuevo Testamento. Y lo primero que dice Lohfink
es que la palabra comunidad no está en el Nuevo Testamento, que no habla de
comunidad. Pero el Nuevo Testamento nos da cantidad de verbos que explican lo
que es la comunidad. Por eso en los diccionarios bíblicos la palabra comunidad
no se encuentra, ¡porque es que no está! Pero solamente en San Pablo sale más
de 80 veces “unos a otros”, esta expresión “unos a otros”; y todos los verbos
son activos, porque la comunidad no existe, es una abstracción, lo que existe
es la interacción, las personas, las actitudes, la acción que va de una persona a
otra cuando nos perdonamos, cuando nos aguantamos, cuando nos toleramos,
cuando nos edificamos unos a otros, cuando cantamos, cuando nos alegramos,
etc. Y solamente en Pablo hay más de 80 textos así. Esto es comunidad. Es lavar
los pies, es animar, es agradecer, es perdonar, es tolerar, es tener humor y alegrar
a los demás, esto es comunidad; y el evangelio está lleno de comunidad, pero en
términos activos.
Lavar los pies es tomar sobre nosotros las cargas de los demás –que diría San
Pablo– incluyendo sus pecados. Lo que hacía el Hermano Gárate con todos se
sigue haciendo entre nosotros de muchas maneras. Lavar los pies es perdonarnos
mutuamente, que es la llave para una vida en comunidad pacífica y alegre; lavar
los pies es continuar respetando a los demás como a Cristo aunque tengan los
pies sucios. En el budismo dicen: “La persona de fe tiene los pies en el barro
pero el corazón en el cielo”. Los pies sucios, pero el corazón va buscando la
verdad, la justicia, la belleza… Lavar los pies es hacer a todos sentirse en su
casa, sean emigrantes, sean refugiados, sea quien sea. Estamos en la casa del
padre y en la casa del padre no hay distinciones, y se lavan los pies con el mismo
entusiasmo, porque así estamos limpiando y dando brillo al espejo de Dios que
es esta persona con quien me encuentro.
Esto no sucede solamente con buena voluntad. Esto necesita dedicación, poner
el corazón en nuestra vocación, responder como han respondido Ignacio, Javier,
63
n Visita del Superior General de la Compañía de Jesús
como ha respondido Garate, como han respondido los grandes jesuitas que
tenemos en nuestra historia, y como nos recuerda este Santuario. Todo apóstol
tiene que lavar los pies del prójimo. En Japón cuando alguien deja la mafia,
“yákuza” la mafia japonesa que es muy dura, dicen “me lavo los pies”. Y encaja
perfectamente con el lavatorio de los pies. Pero no solamente mis pies, sino lavo
los pies de los demás, acepto a los demás como son y juntos vamos a caminar en
el camino del Señor.
Hoy pedimos por los votantes, para que entren en este camino de entrega total, de
crear comunidad haciendo comunidad, con verbos activos. Y en agradecimiento
por la vida de todos los que celebran el jubileo –los que están aquí y los que no
están aquí– que nos han mostrado cómo se puede caminar en el Señor buscando
su faz, y esperando la llamada que tarde o temprano llega siempre a nuestras
puertas.
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