El fotógrafo como cazador de imágenes

Transcripción

El fotógrafo como cazador de imágenes
El fotógrafo como cazador de imágenes
Por Rosa Olivares
“La sombra es por definición lo impreciso, preludio de lo ambiguo en su concepto de
indefinido, imposible de decir, imposible de tocar. No es por lo tanto, la sombra, un
personaje habitual en la historia de las Bellas Artes, su presencia está en el mundo de lo
simbólico y no de lo representado... Solamente a partir de las vanguardias, la sombra
aparece en las imágenes, y es la fotografía clásica la que saca un juego excelente de su
presencia, alargando las figuras que ya no están en el recuadro, duplicando las
presencias, dotando de misterio un paisaje urbano... Pero más allá de la plasmación
directa de la sombra como figura, o su falsificación con juegos de luces, la fotografía
actual se mueve en un territorio nuevo, en una zona intermedia entre la realidad y lo
inexistente.
La fotografía es cada vez más un lenguaje artístico que camina por el terreno de lo
simbólico, que deja un territorio más amplio a la duda, a la incertidumbre, a lo que el
espectador puede aportar con su subjetividad. En definitiva, la fotografía ha empezado a
dejar de fotografiar el cuerpo para centrarse cada vez más en la sombra...
El fotógrafo es como un cazador de imágenes, un auténtico brujo que crea mundos
paralelos con personajes extraídos de nuestra realidad”.
Texto perteneciente al catálogo de la muestra “Cazadores de sombras”.

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