Estimadas y estimados colegas:

Estimadas y estimados colegas:
Han transcurrido cuatro años desde que fuera electa para representar a nuestras Ciencias en el
Directorio del CONICET. Frente al nuevo llamado de elecciones para cubrir ese cargo, he tomado la
difícil decisión de volver a presentar mi candidatura. Cabe a cada una, a cada uno de ustedes,
justipreciar mi desempeño durante ese lapso, pero permítanme la inmodestia de resumir los que creo
fueron los principios nodales a los que me atuve: honestidad, pluralidad, equidad y defensa de la
contribución de nuestras disciplinas y de su significado en el sistema científico. No tengo dudas de que
ha habido errores en la tarea, pero puedo asegurarles con íntima convicción, que ninguno ha sido de
mala fe. Me honra haber impulsado iniciativas que han incrementado la equidad en diversas
dimensiones, contando con la sensibilidad del Directorio que adoptó resoluciones de gran repercusión,
especialmente en materia de igualdad de género.
Desearía puntualizar, como un balance sucinto, algunas medidas decididas por el Directorio durante el
lapso de mi gestión:
1. Se consolidó el acuerdo según el cual ninguna de las Grandes Áreas puede disponer de más del 25%
de la distribución de los cargos en la CIC y en el sistema de Becas a fin de tornar igualitaria la
oportunidad de la producción científica en todo el arco del conocimiento.
2. De igual manera, se robusteció la decisión del Directorio de destinar, como una medida de “acción
positiva”, el 25% de las vacantes para ingresar a la CIC y para acceder al sistema de Becas, a las áreas
geográficas con índices precarios de desarrollo científico y tecnológico. Vale consignar que los criterios
de selección resultan de la combinación de la evaluación de los perfiles y desempeños académicos de
las/os postulantes, y del cotejo con los índices de la relación número de investigadores/ becarios.
3. Se incrementaron de modo exponencial las Unidades Ejecutoras de doble dependencia
correspondientes a nuestra Área, ya que hasta 2010 sólo se contaba con 5 (cinco). En su enorme
mayoría correspondía a las otras ciencias. Su importancia reside, entre otras cosas, en que ha
favorecido la institucionalización de grupos de investigación consolidados así como de formación
reciente, el vínculo con las universidades u otras instituciones, además de contribuir a su funcionamiento
periódico a través de aportes regulares. Véase el siguiente cuadro:
Número de Unidades Ejecutoras de doble dependencia correspondientes a la Gran Área de
Ciencias Sociales y Humanidades, según institución y año de creación
Institución
Año 2010
UBA
1
I.RAVIGNANI
2
IDACOR
IDH
U.N. Córdoba
U.N.Río Negro
Año 2012
1
IIEP
1
INVELEC
1
INCUAPA
1
IGHECS
1
IDES
IDES
U.N. de Salta
U. N. del Sur
U. N. de Tucumán
Total
Año 2013
1
IIDYPCA
U-N. Tucumán
U.N.Centro Pcia de Bs As
Año 2011
1
ICSOH
1
IIESS
1
INVELEC
4
4
1
3
1
4. En consonancia con el Plan Estratégico del Ministerio de Ciencia y Tecnología, se han relevado poco
más de una treintena de problemas estratégicos cuya resolución significa ampliar las posibilidades de
desarrollo tecnológico-económico y social. Las oportunidades de investigar estos temas se ofrecen tanto
para quienes postulan el ingreso a la CIC como para quienes desean obtener una Beca Posdoctoral.
Nuestra Área tiene, de modo directo, tres problemas a escudriñar: inclusión social, economía social y
hábitat social.
5. Se puso en marcha una contundente política destinada a articular el conocimiento científico con las
necesidades de desarrollo tecnológico y social de modo que redunde en beneficios esenciales para
mejorar la calidad de vida de nuestras poblaciones. De este modo, Vinculación Tecnológica ha pasado
a tener una expresión gravitante en el complejo mapa de la aplicación del conocimiento científico. Las
Ciencias Sociales y Humanas han tenido una notable participación en la transferencia de conocimiento
–en verdad, son las que mayor número de asesorías, consultorías, etc. realizan- y deben continuar
siendo partícipes de los procesos de vinculación.
6. Se crearon 7 (siete) CIT –Centros de Investigación y Transferencia– en áreas regionales con notable
déficit de desarrollo científico y tecnológico. En buena parte de éstos, se han integrado
investigadores/as de nuestras disciplinas pues se trata de ofrecer intervenciones que mejoren las
condiciones sociales y económicas.
7. Se decidió una medida de especial trascendencia al establecer subsidios planos para quienes no
resultan beneficiados con las adjudicaciones de Proyectos PIP.
8. El Directorio, comprendiendo las diferencias de oportunidades entre las científicas mujeres y los
varones, estableció el derecho a aplazar por un año los informes correspondientes de la CIC con motivo
de alumbramiento o de adopciones, ocurrido en el periodo. Esto ha permitido mejorar las condiciones de
producción de las mujeres científicas comprendidas en estas circunstancias.
9. De la misma manera, el Directorio resolvió aplazamientos de edades para las postulantes en
condición de maternidad, tanto para el ingreso a la CIC como para el acceso al sistema de Becas. La
norma expresa que se hará excepción de edad en uno, dos y tres años de acuerdo al número de
hijos/as que se tenga (uno, dos y tres respectivamente).
10. Por primera vez en la historia del CONICET, el número de varones y de mujeres no difiere en
ninguna de las categorías de la CIC. Desde el nivel de Asistente al de Superior hay igualdad numérica
entre científicos y científicas. Sin duda, no se trata sólo del efecto de las medidas tomadas –sería
completamente erróneo atribuirle esa capacidad determinante puesto que debe pensarse en la
combinación de factores tales como el incremento de la visibilidad de la inequidad de género en la
comunidad científica y el aumento de derechos, especialmente los que tienden a erradicar todas las
formas de violencia de género.
Habría otras cuestiones para señalar, de corte por cierto más operativo pero no menos importantes,
decididas por el Directorio, tales como:
a-El incremento del número de miembros de las Comisiones asesoras respetando el principio de
pluralidad epistemológica, ideológica, política, de género y geográfica.
b-La creación de Comisiones ad hoc para Ingresos. Esta medida respondió a la enorme carga de tareas
que tenían las Comisiones evaluadoras, quienes a partir de la medida sólo dictaminan sobre
promociones, informes y proyectos de investigación PIP.
c-La separación de algunas disciplinas de los agregados anteriores, a fin de facilitar los procesos de
evaluación debido a los modos de producción y de publicación que le son específicos.
Para ser justa con este balance, debo decir que no he obtenido consenso para crear Comisiones
Evaluadoras Interdisciplinarias. He formulado al menos 5 perfiles de tales comisiones, y las he
propuesto a modo de ensayo, y es de esperar que habrá suficiente acuerdo entre los miembros del
Directorio si resulto nuevamente electa. Con base en esta experiencia, en los aciertos y dificultades
habidos, propongo a nuestra comunidad científica el siguiente Programa.
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PROGRAMA CANDIDATURA DRA. DORA BARRANCOS
OBJETIVOS
1 – Continuar sosteniendo el sistema científico de excelencia académica con equidad entre las diversas
disciplinas y ramas del conocimiento, y asegurar la transparencia y la pluralidad teórica, ideológica y
política de quienes integran el organismo.
2 – Facilitar y fortalecer el debate sobre el sistema de evaluaciones del CONICET, especialmente del
concerniente a nuestras disciplinas. Han surgido múltiples expresiones críticas que deben ser tenidas en
cuenta sin perder de vista la necesidad inexorable de mantener el principio de calidad intrínseca de la
producción, tanto como la de los medios de circulación.
3 – Contribuir a la equidad en todas las dimensiones y asegurar posibilidades de ingreso a la CIC y al
sistema de Becas a las y los postulantes de los segmentos sociales y geográficos menos favorecidos.
4 – Propiciar la participación de nuestros conocimientos en las acciones de vinculación tecnológica y
tornar más plásticos los encauzamientos hacia los procesos de evaluación de quienes optan por la
investigación aplicada. Asegurar debidamente la valoración de las producciones de quienes realizan
tareas vinculantes de alta calidad.
ACCIONES PRINCIPALES
1 – Establecer nuevas “medidas de acción positiva” sobre la base de la calidad académica, a fin de
garantizar las oportunidades de acceso a la Carrera del Investigador Científico y a las Becas. Es
necesario instrumentar mecanismos que permitan la inclusión de candidatos/as de bajo recursos y de
muy buen desempeño académico.
2 - Proponer nuevamente la investigación inter y transdisciplinaria creando ámbitos de evaluación
específicos para quienes investigan con la perspectiva de establecer puentes interpretativos entre
diversas disciplinas. Es una medida pendiente no obstante algunos diseños ya previstos.
3 – Revisar y readecuar las formas de evaluación basadas en la efectiva calidad de la producción
académica. Tal como se ha expresado en los objetivos, son necesarias medidas que conciten un gran
acuerdo. Está en funcionamiento una Comisión ad hoc que debe recoger toda la opinión fundada sobre
la cuestión. La evaluación en nuestras Ciencias sigue siendo una cuestión dilemática que requiere
responsabilidad y razonabilidad y sobre todo, el mayor consenso.
4 – Intervenir activamente para encaminar la inserción laboral de la masa doctoral que está siendo
formada por el sistema universitario con recursos del CONICET. La propuesta requerirá de una
articulación más amplia con Universidades nacionales e internacionales así como con organismos
públicos y de la sociedad civil de manera que la CIC sea una más de las opciones de los recursos
humanos formados, pero no la única. Se cuenta con diversas iniciativas, pero todavía hacen falta
instrumentaciones facilitadoras para reunir a quienes poseen formación doctoral con otras
oportunidades laborales.
5– Seguir sosteniendo la ampliación del grupo de profesionales como el de técnicos de la Carrera de
Personal de Apoyo a la investigación debido al significado estratégico de su colaboración.
6– Expandir las Unidades Ejecutoras de doble dependencia con el ritmo actual de crecimiento. Están en
estudio actualmente nuevas Unidades correspondientes a Universidades Nacionales. Fortalecer a las
Unidades Ejecutoras de doble dependencia ya creadas de modo que pueda asegurárseles el más
adecuado cumplimiento de sus objetivos. Incrementar las Unidades Asociadas y los Grupos vinculados.
7 – Continuar vigorizando a los organismos propios del CONICET, y de modo particular el CAICYT,
referencia en el campo de la clasificación de índices bibliográficos confiables y que ya ha sido
debidamente institucionalizado.
8 – Velar por el incremento de las partidas presupuestarias del CONICET.
9 – Continuar con el proceso de convenios nacionales e internacionales que tienen directa vinculación
con nuestras disciplinas. Algunos de los nuevos convenios tienen que ver con la investigación en torno
de derechos humanos, sociales y personalísimos (de identidad). Incrementar los convenios con otras
áreas gubernamentales a fin de indagar problemáticas sociales, del trabajo, etc. Facilitar la visibilidad de
tales convenios de modo que pueda haber una amplia participación de investigadores/as.
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10 – Profundizar la articulación con el ANSES para facilitar tanto los procesos de jubilación como las
comunicaciones relacionadas con aspectos retributivos.
11 – Contribuir a la divulgación del conocimiento científico. Es de gran significado la difusión de los
aportes de las y los investigadores con los objetivos principales de mejorar los vínculos con nuestras
respectivas comunidades, aumentar las capacidades de transferencia de nuestras disciplinas y
propender a una sociedad más integrada social y culturalmente.
En la certeza de que gran parte de nuestra comunidad científica acuerda centralmente con estas
propuestas, y que comparte el principio de aumentar la calidad científica de nuestras disciplinas con
mayor equidad y pluralidad, invito a acompañar con su voto mi postulación para estas elecciones
Buenos Aires, febrero de 2014
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