Mascuulinidad des: un e gay estudio d ys de la e de relaci escena g
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Mascuulinidad des: un e gay estudio d ys de la e de relaci escena g
Universidad de Sann Andrés D Departamen nto de Cienccias Socialees Licenciatu ura en Com municación Mascuulinidad des: un estudio e d relaciones de género entre vaarones de gayys de la escena e g porteeña. gay Autoor: Lucas Mariani L Legajo: 201337 Mentora: Paula Maagariños oria, Mayo 2014. 2 Victo 1 Índice: Introducción: ........................................................................................................................................ 3 El debate sobre masculinidades: un marco teórico. ............................................................................. 6 Género: ............................................................................................................................................. 9 Los términos ‘homosexual’ y ‘gay’: .............................................................................................. 12 Masculinidades: ............................................................................................................................. 13 Hipótesis: ....................................................................................................................................... 17 Descripción de casos: ......................................................................................................................... 19 Análisis: ............................................................................................................................................. 22 La masculinidad gay hegemónica: ................................................................................................. 22 Reconocer, permitir y legitimar: .................................................................................................... 23 Una hipótesis secundaria:............................................................................................................... 25 Mostrase: el cuerpo como producto comercial y el rechazo como moneda: ................................. 26 Eyeliner: Prejuicios y un comentario sobre interseccionalidad: .................................................... 28 Rugbier: un elemento de representación de masculinidad heterosexual: ...................................... 29 Ambiente gay: espacio ritualístico: ................................................................................................ 30 Conclusiones: ..................................................................................................................................... 34 Referencias: ........................................................................................................................................ 36 Anexo I:.............................................................................................................................................. 38 Anexo II: ............................................................................................................................................ 75 2 Introducción: Este trabajo de graduación trata sobre las masculinidades de varones gays en dos fiestas nocturnas de la Ciudad de Buenos Aires. Es un estudio observacional y analítico sobre las relaciones de género que se desarrollan entre los varones y sus implicancias. Mi objetivo inicial era lograr describir de la manera más adecuada posible cómo es ser gay en este país y qué significa ser gay en este país. Dada la extensión y ambición de dicho objetivo, decidí enfocarme de manera exclusiva en dos espacios específicos, dos fiestas nocturnas, o boliches, de la ciudad más extensa del país. Enfocarme exclusivamente en fiestas responde a razones metodológicas prácticas, y a que se trata de espacios en los que la interacción entre varones gay puede ser observada. Esto no significa que las conclusiones a las que arribo o las observaciones que hago describan de manera exhaustiva las prácticas, representaciones y subjetividades de los varones gay en la sociedad argentina en general, o incluso de la Ciudad de Buenos Aires y sus alrededores. Sin embargo, creo que lo que sucede en estas fiestas ayuda a expandir lo que se sabe y se entiende sobre ser varón y gay en esta sociedad. Creo que es una adición útil a este corpus de conocimiento. El problema que me dispuse a tratar fue la articulación de las relaciones de género entre varones gays en estas dos fiestas, y el objetivo era detallar la construcción y reconstrucción de masculinidades tanto hegemónicas como subordinadas. R. W. Connell, socióloga australiana, desarrolló el concepto de masculinidad hegemónica, el cual será central a este trabajo. Como se explicará más adelante con más detalle, masculinidad no es un objeto de análisis fácil de abordar. Un enfoque que se centre en una caracterización simple no necesariamente permitiría apreciar las formas en que se constituyen las masculinidades de estos varones, por lo cual un abordaje adecuado debe centrarse en las relaciones de género entre varones y la red de poder que emerge. Así, se construyen masculinidades que son mantenidas como hegemónicas, que tienen una legitimidad 3 cultural y social, y masculinidades subordinadas, entre otras. Por lo tanto, mi enfoque se centró en el aspecto de género, el cual problematizo extensamente en la sección del marco teórico. Las fiestas elegidas son Rheo y Eyeliner. ¿Por qué estas y no otras? La elección fue un tanto azarosa, en respecto a que mi criterio para elegir se basó en mis conocimientos previos de la escena gay nocturna porteña. Hay muchas fiestas y boliches gays en la ciudad, pero las dos que elegí tienen en común que generalmente son destinos para personas adolescentes y jóvenes, y sentí que esto funcionaba como un denominador común razonable desde el cual partir. Yo he ido muchas veces a Rheo en los últimos años, y durante mi experiencia noté y observé muchas cosas que me generaban malestar e incomodidad en respecto a discursos de género que yo definía como machistas y homofóbicos, lo cual es una aparente contradicción. Esto motivó la elección del tema del trabajo y mi elección de Rheo como caso analítico. Por otro lado, elegí Eyeliner porque sentí que representaba un espacio contrapuesto a Rheo, que marcaba una fuerte diferencia en su capacidad para tolerar y celebrar muchos tipos de cuerpos y formas de usarlos. El lema de Eyeliner es, efectivamente, “Podés ser como quieras”1, un lema que encauza el discurso de libertad y tolerancia en cuanto a orientación sexual y a formas de expresar masculinidades y femineidades. Una de mis críticas, y que tomó la forma de una hipótesis de partida, es que Rheo se configura como un espacio menos tolerante de los cuerpos, la orientación sexual y el género. Dado que mi meta era comprender cómo en estos espacios diferenciados pueden ser observadas prácticas, interacciones, actitudes y posicionamientos de los asistentes, apliqué métodos cualitativos, específicamente la observación participante y la entrevista en profundidad. Llevé a cabo seis entrevistas en profundidad con varones que se identificaban como gays y que eran participantes regulares de las fiestas. Tres eran habitués de Eyeliner y tres de Rheo. Generalmente no hubo candidatos que eran participantes de ambas, pero en algunos casos los entrevistados habían ido alguna vez a la otra fiesta. Además de las entrevistas también hice observación participante. Fui dos veces a Eyeliner en modo de observador (además de las veces que fui como participante del 1 El lema cortado de una imagen de un flyer se puede encontrar en el Anexo II 4 mismo modo que cualquier otra persona ahí) y dos a Rheo (de nuevo, Rheo es un lugar al que voy regularmente acompañado y acompañando a mi círculo social). La elección de fiestas como casos a analizar se debió a una serie de cuestiones prácticas. Estos espacios son de acceso público (contra el pago de una entrada); funcionan con regularidad, lo que permitiría la observación sistemática en el tiempo. Además, que se trate de fiestas orientadas específicamente a un público masculino gay las convierte en un espacio óptimo para la observación de actitudes. La estructura de este trabajo es la siguiente: primero se encontrará el marco teórico, donde los conceptos de género y relaciones de género son explicados. Se hará una aclaración sobre los términos ‘homosexual’ y ‘gay’, junto a una observación sobre el problema epistemológico del concepto de orientación sexual. Finalmente, esta sección se cerrará luego de describir extensamente los conceptos de masculinidad hegemónica y las masculinidades que se generan en relación a ella. El estado de la cuestión hará una revisión de los distintos abordajes mediante los cuales se trató de problematizar el género y la masculinidad. Seguirá una descripción de los casos, las fiestas Eyeliner y Rheo. La sección de análisis está dividida en siete capítulos, mediante los cuales se ilustrarán las representaciones de masculinidad que actúan en ambos espacios. Se tratará la existencia o inexistencia de una matriz jerárquica de estatus, los significados asignados por los entrevistados a lo masculino y lo femenino, y se explorarán las posibilidades de entender a estas fiestas como comunidades. 5 El debate sobre masculinidades: un marco teórico. En esta sección haré un resumen de los principales conocimientos organizados sobre la masculinidad que emergieron durante el siglo XX. Hay un claro progreso de ideas y conocimiento que comienza con el psicoanálisis y culmina en un marco post-estructuralista donde se entiende a las masculinidades como distintas configuraciones de prácticas (Connell, 1995, p. 44). Se podría decir que las masculinidades comenzaron a ser estudiadas por Freud, quien rompió con la idea de masculinidad como un ‘objeto natural’, y se preguntó por su composición. Freud entendió que “la sexualidad y el género no estaban fijados por la naturaleza, sino que eran construidos mediante un largo y conflictivo proceso”2 (Connell, 1995, p. 9). Freud no se preguntó específicamente qué era la masculinidad, pero el concepto fue un tema que permeó mucho de su trabajo (Connell, 1995, p. 8). Una observación importante fue la de separar género del cuerpo, a pesar de que no lo puso en esos términos exactos. Freud, estudiando personas homosexuales, evidenció que algunos “hombres invertidos” mantenían rasgos de lo que él observaba como masculinidad, concluyendo que la masculinidad adulta era un proceso complejo. Asimismo, el método que desarrolló, el psicoanálisis, fue extremadamente útil para demostrar que la masculinidad existía en una contradicción permanente con la femineidad, y así, que la masculinidad nunca existía en estado puro (Connell, 1995, p. 10). Jung, tomando el psicoanálisis como marco teórico, postuló que el género resultaba de dos tipos de identidades: la persona y el ánima (Connell, 1995, p. 12). La primera era la identidad construida en transacción con el medio social, y la segunda la identidad formada en el inconsciente. Para él, había una presencia femenina en el ánima de los hombres, volviendo a la idea de que la masculinidad no era una esencia pura, sino que existía en una situación de tensión (Connell, 1995, p. 12). Sin embargo, el análisis de Jung resultó ser muy “esquemático y especulativo” (Connell, 1995, p. 13), ya que él se basaba en arquetipos que debían existir como “verdades sin tiempo” 2 Todas las traducciones de inglés al español son propias. 6 (Connell, 1995, p. 12). Hoy en día, la objeción que le haríamos es que su análisis no permite estudiar el cambio que sufren las masculinidades en un espacio social ya que él adopta la idea de una polaridad entre la masculinidad y la feminidad, una postura esencialista (Bonder, 1998.) Durante la década de 1930 surge el concepto del rol sexual masculino (“male sex role”), donde “ser hombre o mujer significa poner en práctica una serie de expectativas que están vinculadas con un sexo – el rol sexual” (Connell, 1995, p. 22). Según esta corriente, la masculinidad es la expresión del rol sexual masculino internalizado, y como las normas del rol son hechos sociales, aprendizajes de cómo uno debe actuar, estas normas pueden ser sujetas a cambios en el tiempo (Connnell, 1995, p. 23). La teoría de los roles trató de elucidar cuáles eran los roles e identidades respectivas de cada género. Como explica Bonder (1998), esta teoría “afirmaba que la sociedad tiene un libreto que debe ser aprendido y que ese aprendizaje garantiza la reproducción de un orden de género sin fisuras” (p. 2). Pero esta concepción de género no permite explicar las variaciones entre individuos de un mismo género, lo cual crea un gran problema. Todo esto lleva a una teoría demasiado rígida, estructurada bajo la polarización de dos categorías dentro del género, la masculina y la femenina. Según Connell (1995) “esto lleva a un error en la percepción de la realidad social, exagerando las diferencias entre hombre y mujer, oscureciendo las estructuras de raza, clase y sexualidad” (p. 26). Kimmel, sociólogo norteamericano especializado en estudios de género, hace énfasis en este punto, argumentando que las diferencias entre géneros que se observan en la vida cotidiana, generalmente no son diferencias de género, sino “diferencias que son el resultado de estar en diferentes posiciones o en diferentes arenas, (…) y son estas posiciones las que provocan los comportamientos que vemos como consecuencias del género” (Kimmel, 2000, p.11). El error está en pretender encontrar un denominador común, en pensar que la masculinidad es un objeto de estudio estable. David Gilmore (1990), por ejemplo, intentó responder la pregunta “¿Hay un arquetipo global de masculinidad?” (Connell, 1995, p. 32), pero para Connell sus conclusiones son imprecisas ya que “muestran la futilidad de tratar de producir una ciencia positivista de masculinidad mediante generalizaciones transculturales.” (Connell, 1995, p.33). Lo 7 que no quiere decir que la etnografía no pueda estudiar masculinidades (Connell, 1995, p.33). De hecho este trabajo se basa en herramientas etnometodológicas. Pero para que la etnografía pueda ser una herramienta útil en el estudio de género, tiene que “reconocer las relaciones sociales que son las condiciones para producir conocimiento etnográfico (Connell, 1995, p.33). Tiene que tener en cuenta las relaciones de género. De hecho, es la sociología el campo que mejor logró separarse del marco teórico de la teoría de roles sexuales (Connell, 1995, p. 34). En el estudio sociológico moderno, “el género no está fijado antes de la interacción social, sino que es construido en la interacción” (Connell, 1995, p. 35), una idea que será parte del concepto de género de este trabajo. Asimismo, Connell (1995) propone que partiendo de la idea que el género, y por consiguiente, la masculinidad se construyen mediante relaciones sociales, es imprescindible tener en cuenta los diferentes tipos de relaciones sociales y las instituciones que afectan estas relaciones. La construcción de una masculinidad de una persona de clase media está necesariamente intervenida por las condiciones sociales de dicha clase social. Sin embargo, también está reconocido que diferentes masculinidades se forman en el mismo contexto cultural o institucional. Estas revelaciones llevaron a la creación de la idea de masculinidad hegemónica. Connell explica que “reconocer una diversidad en las masculinidades no es suficiente. También tenemos que reconocer las relaciones entre diferentes tipos de masculinidades: relaciones de alianza, dominación y subordinación…. Hay políticas de género dentro de la masculinidad” (Connell, 1995, p. 37). Esto dicho, es importante aclarar que hablar de masculinidades múltiples, no implica hablar de múltiples tipologías de masculinidades: “Es esencial reconocer el dinamismo de las relaciones mediante las cuales el género es constituido” (Connell, 1995, p. 38). Una masculinidad está en relación a otras permanentemente, lo que significa que está en permanente cambio. No es posible examinar estas relaciones mediante un modelo determinístico. Entonces lo que queda por definir con mayor exactitud es el objeto de estudio en los estudios de masculinidades. En este trabajo, siguiendo a Connell, se entiende al género desde una 8 perspectiva relacional: “la masculinidad y la feminidad son conceptos inherentemente relacionales, que tienen un significado en relación uno con el otro, como una demarcación social y una oposición cultural” (Connell, 1995, p. 43). Por ende, el objeto de conocimiento de la masculinidad son las relaciones de género. Estas relaciones solo pueden ser estudiadas teniendo en cuenta su historia, y reconociendo que “su creación y recreación es un proceso político afectando el balance de intereses en una sociedad y la dirección del cambio social”, por lo que las “masculinidades serían configuraciones de prácticas estructuradas mediante relaciones de género” (Connell, 1995, p. 44). El estudio de estas relaciones lleva a entender la red de poder que existe ya sea entre varones y mujeres, o entre varones, como es el objetivo de este trabajo. Género: El eje principal que utilizará este trabajo son las relaciones de género. Para explicar este concepto, primero es necesario abordar el concepto de género. El abordaje tradicional se centra en la dicotomía entre ‘género' y 'sexo', el primer concepto refiriéndose a los “aspectos psicosocioculturales asignados a varones y mujeres por su medio social” y el segundo a “las características anatomofisiológicas que distinguen al macho y la hembra de la especia humana” (Bonder, 1998, p. 1). La teoría de roles, comentada previamente, hacía uso de estos conceptos para tratar de elucidar cuáles eran los roles e identidades respectivas de cada género. Los aportes de Judith Butler, reconocida escritora y filósofa estadounidense, son útiles en este punto. Ella toma los conceptos de ‘sexo’ y ‘género' y cuestiona su utilidad. Butler plantea que no hay ninguna razón para asumir que hay solamente dos géneros, y que la “presunción de un sistema binario de género retiene implícitamente la creencia en una relación mimética de género a sexo donde género refleja a sexo o es por el contrario, restringido por él” (Butler, 1990, p. 66). En esencia, lo que logra es desligar ‘género' de ‘sexo’, lo cual produce que ‘género' deje de referirse únicamente a un cuerpo perteneciente al macho de la especie o a un cuerpo de la hembra de la 9 especie, y permite la posibilidad de que género pueda dejar de referirse solamente a las características biológicas de los cuerpos. Así, género es puramente una forma de identidad, y esa identidad puede estar construida en base a muchas variables diferentes. Un ejemplo que concierne a este trabajo es pensar al género como una identidad gay específica, el varón gay como género, el varón gay que juega al rugby como género, el varón gay que se tiñe el pelo de algún color artificial y rechaza la concepción culturalmente dominante de masculinidad como género. Las posibilidades son infinitas, o por lo menos, ‘género’ ahora es ajustable en base a las variaciones que encontramos entre individuos de un mismo ‘sexo', lo cual es indispensable si el objetivo es observar, describir y analizar a individuos bajo la lupa de las masculinidades como objeto de análisis. A su vez, Butler cuestiona el origen del discurso que rodea al concepto de sexo como algo natural y dado. “Si el carácter inmutable de sexo es cuestionado, tal vez este constructo llamado ‘sexo' está construido culturalmente al igual que género” (Butler, 1990, p. 7). Esto pone en evidencia al concepto de ‘sexo’, y lo revela como una categoría “en-genderizada”, es decir, una categoría imbuida por características de género construidas culturalmente. “Como resultado, género no se refiere a cultura, como sexo se refiere a lo natural; género también es el medio discursivo/cultural mediante el cual 'un sexo natural' se produce y se establece como ‘prediscursivo’” (Butler, 1990, p.7). En palabras simples, primero se necesitó un concepto binario de género para luego crear una categoría binaria de sexo. ‘Sexo' es un producto cultural, atravesado y construido por las características atribuidas a ‘género'. Bonder, luego de hacer un repaso por las concepciones contemporáneas de género y sus respectivos problemas epistemológicos, concluye que “cualquiera de las posiciones […] coinciden hoy en hoy- en admitir que el género no es una propiedad de los sujetos ni un constructo fijo y terminado, condenado a una perpetua repetición” (Bonder, 1998). Su punto es que no hay un concepto de género conclusivo, sino que es uno que muta constantemente, y está atravesado por su objeto de análisis (cuando éste es usado como categoría de análisis). 10 Entonces, al trabajar sobre relaciones de género en un contexto de investigación, lo que se analiza son las relaciones sociales entre sujetos que se posicionan en el espacio no solo como varones o mujeres, sino como varones gays, mujeres lesbianas, chicos o chicas trans, queers o cual sea el discurso que el individuo expresa. Siguiendo la intuición de Butler de que el género puede ser un constructo no binario, se entienden a los conceptos de lo masculino y femenino como respuestas a un sistema binario que considerado en este trabajo como no legítimo ya que no son útiles para describir y representar lo que sucede en la realidad. Lo masculino y lo femenino son conceptos que parten exclusivamente de una concepción binaria de género. Si dejamos a ésta de lado, la conclusión lógica es que el binario masculino/femenino sea igualmente cuestionado y desafiado. Entonces, ¿qué es lo masculino o femenino? Este interrogante atravesará todo este trabajo, pero lo esencial es entender que lo masculino/femenino no puede ser tratado como objeto de análisis independientemente de las prácticas y subjetividades vinculadas y de las relaciones sociales en las que se imbrican, y hay que entenderlo como algo que no está ligado al cuerpo de los hombres en el caso de la masculinidad, o al cuerpo de las mujeres en el caso de la femineidad. Por ejemplo, uno podría hacer un trabajo observacional y hacer una lista de todos los comportamientos que tienen los hombres y rotular a esa lista como “lo masculino”. Sería imposible lograr una lista exhaustiva y por otro lado, se presentaría una dificultad en la clasificación de los comportamientos observados. Bajo esta concepción, lo masculino, 'lo que hacen los hombres’, sería una lista casi eterna que incorporaría muchas, sino todas, las cosas que también hacen las mujeres (Kimmel, 2000). Entonces, para investigar lo masculino o lo femenino, hay que poner el foco en las relaciones de género y cómo estas se expresan en las interacciones entre los sujetos. Es acá donde surge lo masculino o lo femenino, ya que es en el intercambio social donde distintos comportamientos o elementos son interpretados por otros como masculinos o femeninos. Nuevamente, estamos hablando de constructos sociales catalogados y entendidos bajo una categoría binaria. A pesar de esta carencia, su utilidad reside en 11 alumbrar los procesos mediante los cuales distintos individuos actúan a través de ellos para expresarlos o desafiarlos mediante sus discursos y sus cuerpos. A su vez, Butler desarrolla el concepto de performatividad, el cual es esencial para comprender la manera mediante la cual el género atraviesa a un individuo, ya sea voluntaria o involuntariamente. La performatividad se basa principalmente en el trabajo de Michel Foucault, quien desarrolló la temática de poder como algo del discurso y a su vez, productivo, como algo que constituye a sujetos (Gilbert, Powell, 2007, p. 194). Como explica Butler (1993) “Los actos performativos son formas de discurso autoritativo; la mayoría de estos, son, por ejemplo, declaraciones que, en su enunciación, también performan una cierta acción y ejercen un poder” (p. 225) . El poder de un acto performativo yace en la repetición de un discurso para producir “el fenómeno que lo regula y lo restringe” (Butler, 1993, p. 2). Esta concepción de poder explica enormemente el alcance del género como fuerza producida por sujetos y que, a su vez, los regula. Usaré este concepto de relaciones de género para crear un mapa de representaciones de identidad de varones gays en dos fiestas nocturnas de la ciudad de Buenos Aires. Las relaciones de género que deberé analizar para poder observar las formas de masculinidades que existen en estas dos fiestas en las que se encauzará este trabajo, son relaciones entre los individuos que actúan en esas fiestas y también con las representaciones de masculinidad de individuos fuera de las fiestas. Es decir, mi objetivo será describir lo que los hombres gays en estos dos espacios nocturnos ven en otros y en sí mismos. Los términos ‘homosexual’ y ‘gay’: Los términos ‘gay' y ‘homosexual’ no son necesariamente intercambiables. Cada uno está cargado de un significado similar al del otro, pero diferentes personas los interpretan de manera distinta. Por un lado, estas palabras hacen referencia a la orientación sexual de una persona, pero también se pueden interpretar como refiriéndose a una identidad. Al hablar de identidad suele 12 usarse la palabra ‘gay’, mientras que ‘homosexual’ puede tener una connotación negativa más “clínica” (Entrevistado #1, Eyeliner). La palabra ‘gay' también puede ser interpretada como negativa (como propone un entrevistado, está viene de su uso en inglés significando “divertido, alegre”, lo cual él considera peyorativo y reductivo (Entrevistado #1, Eyeliner)). Pero para simplificar, en este trabajo, ignoraré el término 'homosexual' y usaré el término 'gay' para referirme a hombres que se sienten atraídos sexual y románticamente por otros hombres. Esta concepción da por sentado una orientación sexual fija y no cambiante, bajo la cual se entiende que un individuo solo se siente atraído sexualmente por las personas de su mismo sexo. Esta manera de abordar la idea de ‘orientación sexual’ es insuficiente para describir las experiencias y subjetividades de muchos individuos (Chauncey, 1994, p. 13), por lo tanto, por ‘gay’ me referiré a un varón quien generalmente o la mayor parte del tiempo, se siente atraído por otros varones, pero dejando abierta la posibilidad de que pueda sentir atracción sexual por mujeres. Esta deficiencia a la que me refiero parte por asumir que el concepto de orientación sexual solo deja lugar a categorías estructuradas de deseo, y al mismo tiempo, solo admite una concepción binaria de género: a un hombre solo le gustan las mujeres o los hombres (o ambos) y a una mujer solo le gustan las mujeres o los hombres (o ambos). La concepción que usamos comúnmente en nuestra sociedad occidental no deja lugar a configuraciones de deseo que no están estructuradas alrededor de una categoría binaria de género. Si, como sugiere Butler, que pensar en el género varón como algo vinculado intrínsecamente al cuerpo del macho de la especie humana es falaz, entonces el concepto de orientación sexual también debe ser revisado. Sin embargo, dicha empresa significaría producir un trabajo adicional. Por lo tanto, me restringiré meramente a señalar el problema conceptual, y al mencionar el término ‘gay' estaré haciendo referencia a la conceptualización mencionada arriba. Masculinidades: 13 Para describir y analizar las relaciones de género, o más específicamente, las relaciones entre masculinidades de los varones en estos espacios, primero es esencial llegar a una definición operativa de masculinidad. Para alcanzar este objetivo usaré, por un lado, el concepto de representación tal como lo trabaja Norma Fuller (2000), quien lo define como “las categorías internalizadas mediante las cuales el sujeto procesa la información recibida y mediante las cuales se interpreta a sí mismo y al mundo a su alrededor”. Esta herramienta es útil ya que ayuda a ilustrar cómo las ideas de lo que significa ser hombre operan a través de las relaciones entre varones. Usando dicho concepto, distintas masculinidades se entienden como una serie de categorías. Hablar de categorías puede resultar confuso ya que una masculinidad ciertamente no es algo estático (y el término ‘categorías’ puede interpretarse de esta forma), y se produce y se reproduce permanentemente en un espacio social. De todas maneras, a pesar de sus limitaciones, hablar de representaciones como lo plantea Fuller, ya que pone al sujeto en el centro y permite analizar lo que este observa y siente que sucede a su alrededor. Dado que este trabajo toma los testimonios de varones gays en el espacio social de las fiestas, hablar de representaciones de masculinidades parece adecuado. Por otro lado, otro concepto esencial de este trabajo es el de masculinidad hegemónica, desarrollado por R. W. Connell. Esta autora define a la masculinidad hegemónica como “la configuración de prácticas de género que caracteriza la respuesta actualmente aceptada al problema de la legitimidad del patriarcado, la cual garantiza la posición dominante del hombre y la subordinación de la mujer” (Connell, 1995, p. 77). El concepto de Connell entiende por masculinidad a “una identidad de género colectiva y no un atributo natural” (Morrell, 1998, p. 607). No hay una masculinidad natural, sino una serie de masculinidades, que son “configuraciones de práctica generadas en situaciones particulares dentro de una estructura cambiante de relaciones” (Connell, 1995, p. 81). Al decir que no hay una masculinidad natural, se entiende que no hay una forma de masculinidad esencialista, una perspectiva analítica que Connell rechaza (Carrigan, Connell, Lee, 1985). Al hablar de una masculinidad esencialista, me refiero a una masculinidad 14 innata con la que los hombres nacen, o es intrínseca a todos los varones. Pensar en términos de una masculinidad de ese tipo es limitante por muchas razones. Por ejemplo, no podríamos pensar en variaciones entre hombres (o mujeres) ya que todos compartirían la misma masculinidad (y excluiría a todas las mujeres), y nos toparíamos contra una pared al tratar de analizar qué sucede con los hombres que no expresan los valores que supuestamente le son innatos. “Masculinidad no es una entidad fija integrada en los cuerpos o identidades de una persona. Masculinidades son configuraciones de práctica logradas en acción social y, por ende, pueden diferir de acuerdo a las relaciones de género particulares de un entorno social” (Connell, Messerschmidt, 2005, p. 835). No existe una esencia masculina (o femenina) que construye a los hombres (o mujeres), sino, relaciones de género. Connell (1995) rechaza el uso de tipologías al hablar de masculinidades (las considera reduccionistas), y en su lugar, ofrece el concepto de configuración de prácticas de género. Una forma de posicionarse frente a la masculinidad; una forma de pensar, considerar y experimentar una masculinidad en relación a otros es una configuración de prácticas de género. Es importante enfatizar que la masculinidad hegemónica se establece no en base a números, a la cantidad de hombres que encarnan esta masculinidad, sino en base a dominación cultural; una masculinidad hegemónica es la forma de ser masculino que domina en una sociedad o espacio. Ervin Goffman, refiriéndose a la sociedad de Estados Unidos, explica que “solo hay un hombre completa y desvergonzadamente hombre en Estados Unidos: joven, casado, blanco, urbano, norteño, heterosexual, Protestante, padre, con educación universitaria, empleado, con buena cara, altura y peso, y con un expediente reciente en deportes” (1963, p. 128) . La configuración que encauza a la representación de masculinidad más valorada por los miembros de una sociedad es la hegemónica, y es a partir y en relación a ésta que podemos observar y analizar otras masculinidades puestas en relación con ésta. En un principio, Connell categorizó las distintas formas de masculinidad en hegemónica, cómplice, subordinada y marginal. Masculinidad cómplice hace referencia al hecho de que “la mayoría de los hombres sacan provecho de la hegemonía, ya que se benefician del dividendo 15 patriarcal, la ventaja que los hombres ganan de la subordinación general de la mujer” (Connell, 1995, p. 79). Está claro que ni todos ni la mayoría de los hombres practican una masculinidad hegemónica absoluta, pero a pesar de esto, es cierto que se benefician de su existencia. La masculinidad cómplice permite una configuración de relaciones de género donde los hombres no asumen los riesgos de “estar en las primeras filas de las tropas del patriarcado” pero se benefician pasivamente de su existencia. La masculinidad subordinada emerge en las relaciones de género entre varones donde un grupo de varones es excluido culturalmente del privilegio de ser considerado propiamente masculino. El ejemplo que ilustra Connell para explicarla es "la dominación de los hombres heterosexuales y la subordinación de los hombres homosexuales” (1995, p. 78) la cual se evidencia en cuanto a prácticas materiales "como exclusión política y cultural, abuso cultural, violencia legal, violencia callejera, discriminación económica y boicots personales” (1995, p. 78). Una masculinidad subordinada es justamente aquella que posiciona a algunos hombres en el fondo de la jerarquía de género entre hombres. En último lugar Connell provee otro tipo de relación entre masculinidades, una de marginación/autorización, para describir lo que sucede en la interacción entre género y otras variables sociales como la raza y la clase social. Cuando una raza o clase social tiene más legitimidad que otras en una cultura, las masculinidades de hombres que pertenecen a las clases o razas subordinas se ven afectadas y la relación con otras masculinidades sufre un impacto. Connell explica que “Marginación siempre es relativa a la autorización de la masculinidad hegemónica del grupo dominante” (1995, p. 80) ejemplificando con el caso de deportistas estadounidenses afrodescendientes que gozan de un estatus hegemónico respecto de su masculinidad, pero que ese estatus no se traspasa a estadounidenses afrodescendientes en general. Connell aplica estos conceptos sobre un marco más amplio que el de este trabajo. Ella, en un principio, lo aplica sobre una sociedad determinada, luego, en una revisión posterior del concepto, incluye distintos niveles geográficos: lo local (interacciones cara a cara de familias, 16 organizaciones y comunidades inmediatas), lo regional (cultura y estado-nación) y lo global (políticas globales y medios transnacionales) (Connell, Messerschmidt, 2005, p. 849). En este trabajo se utilizarán estos conceptos para describir las relaciones de género que ocurren entre varones en un espacio extremadamente local, dos fiestas nocturnas. Esto implica un desplazamiento en cuanto al espacio analítico donde Connell aplica los conceptos, adecuándolos a los espacios en cuestión. Existen relaciones entre los tres niveles ya que lo que sucede en un nivel global tiene impacto en niveles regionales y locales, y en algunos casos, viceversa. Tener en cuenta este marco teórico es indispensable para no caer en la falacia que asume que cada espacio analítico está escindido y actúa de manera totalmente independiente de los espacios sociales que lo rodean y lo incluyen en forma de niveles “jerárquicos" inferiores (Connell, Messerschmidt, 2005, p. 860). Los modelos de masculinidad hegemónica que actúan a nivel global influyen y dan forma a modelos que actúan a niveles regionales que actúan en forma de normas culturales. Las dos fiestas que se estudiarán en este trabajo serán tomadas como espacios locales (según el esquema de Connell), lo cual implica un acercamiento algo exagerado ya que lo local implica un espacio más abarcador. Pero tomar a estos espacios nocturnos como categoría analítica, como lo local, permite conectarlos con el orden de género que actúa a nivel regional. En este trabajo se intentará un análisis de este tipo, asumiendo que el orden de género intrínseco en las fiestas en cuestión es influido por el orden de género que se desarrolla en la ciudad, en el país, en Latinoamérica. Hipótesis: Por lo tanto, como hipótesis, propongo lo siguiente: En Rheo, las relaciones de género se dan entre varones que intentan exhibir rasgos de masculinidad reflejados en la masculinidad hegemónica, y en Eyeliner, los dejan de lado para asumir un género no anclado en la dominación cultural de la masculinidad hegemónica. 17 Esta hipótesis podría verse como demasiado amplia o ambigua, pero mi creencia es que es apropiada para lograr mi objetivo, uno de observación y descripción. Mi intención es describir el orden de género que se desarrolla en las fiestas y tratar de elucidar ciertos elementos que hacen a este orden uno en particular: una jerarquía de legitimidad entre varones gays, la homofobia como herramienta de exclusión en espacios supuestamente inclusivos, la intolerancia a la femineidad, la figura del macho reconfigurada dentro de un espacio exclusivamente gay. 18 Descripción de casos: Las dos fiestas son La Eyeliner y Rheo. Estos dos espacios podrían ser considerados boliches más que fiestas, pero prefiero usar el término fiestas ya que a veces se llevan a cabo en distintos espacios físicos, y este término permite discutir lo que sucede en el espacio sin vincularlo de manera determinante al lugar físico en donde se lleva a cabo. Boliches se referiría más a un espacio físico donde se lleva a cabo el mismo tipo de evento nocturno y diferencia por ser permanente, o como describe un entrevistado “vengo de una generación donde el boliche era boliche y tenía un nombre, y no iba mutando tanto como ahora” (Entrevistado #1, Eyeliner). Rheo es parte de un grupo de fiestas organizadas por un grupo de personas. Se lleva a cabo en un espacio que es parte de Crobar3 (sobre las calles Paseo de la Infanta y Dorrego), y mantiene similitudes con las otras fiestas del grupo, Human y Dorothy (el público suele ser el mismo). La Eyeliner generalmente se hace en Sarmiento 1272, “el salón real”, aunque a veces se hace en Chacabuco 947, San Telmo. La variación de espacios físicos influye pero no de manera determinante, ya que a pesar de que cada lugar tiene una construcción espacial particular, ésta espacialidad no genera cambios en la manera en que la gente se relaciona entre sí. Las relaciones de género que se producen no varían por el cambio de local. Lo que hace que Eyeliner se distinga de Rheo (y de otros espacios gays) es el ambiente de inclusión que promueve, tanto entre el público de la fiesta, y entre el público y el staff. Como explica un entrevistado, “No son los típicos patovicas: les podés hacer chistes, está todo bien” (Entrevistado #2, Eyeliner). Rheo se diferencia por ofrecer un espacio “VIP" para ingresar al cual uno necesita un precinto otorgado con un miembro del staff o abonando un valor adicional. Eyeliner no ofrece ningún espacio adicional. Todos los consumidores pueden así acceder a todos los espacios de la fiesta por igual. 3 Crobar es un lugar de eventos donde se celebran distintas fiestas nocturnas. 19 El público de ambas fiestas es notablemente distinto en cuanto a diversidad socioeconómica. Es importante estudiar esta arista, que hace referencia a la interseccionalidad (Bonder, 1998) de las clases sociales en la construcción de las relaciones de género, pero no es un desarrollo que se llevará a cabo en este trabajo, ya que implicaría una investigación aparte. Meramente, me restringiré a resaltarlo brevemente, ya que ignorarlo completamente no sería adecuado. El público de Rheo tiende a ser de clase media/media alta, mientras que en Eyeliner el público generalmente es de clases más bajas. Este hecho se evidencia particularmente por los precios de las bebidas. Por ejemplo, una cerveza en Rheo (al momento de la escritura) cuesta 50 o 60 pesos, dependiendo la marca, mientras que en Eyeliner el precio baja a 20 pesos4. Este dato también impacta sobre la vestimenta: en Rheo los sujetos suelen vestirse con ropa cara, de marca. La representación social de la masculinidad atraviesa e impacta sobre los valores que estos individuos mantienen o pretenden mantener. Tener plata para vestirse “bien" es algo que se va a mostrar y en base a lo cual los individuos esperan ser juzgados, ya que la masculinidad es algo que está en juego permanentemente, y dichos esfuerzos tienen que ser constantes. Un entrevistado dice, “A nivel indumentaria veo mucha producción, calidades” (Entrevistado #5, Rheo). Camisas, jeans, bufandas, gorros: vestirse como 'chico bien' requiere un esfuerzo de preparación e implica una intención que guarda un vínculo con la representación de masculinidad que actúa a través de uno, a un poder que algunos poseen y otros no. En Eyeliner, lo que resalta son las “ondas diferentes (…). No se peinan todos igual, ni quieren parecerse” (Entrevistado #1, Eyeliner). Como lo describe un entrevistado, “tenés de todo; tenés los típicos chabones que van con los expansores en el oído, mucho tatuaje, skaters, de todo tipo de tribu urbana. Tribus urbanas que en el otro lugar ni los mirarían o les darían vuelta la cara, van a Eyeliner” (Entrevistado #3, Eyeliner). Otro entrevistado también notó esta conglomeración de tribus urbanas, mencionando “emo, floger, rolinga, cumbieros, eso es lo bueno, la variedad del boliche. Pelos de todos colores, ropa colorinche” (Entrevistado #1, Eyeliner). Si los 4 Foto del menú de tragos, en anexo II. 20 individuos de Rheo van a mostrarse a otros para ser deseados, en Eyeliner van a mostrarse para sí mismos. 21 Análisis: La masculinidad gay hegemónica: Como se mencionó anteriormente, Connell postula diferentes formas de posicionarse frente a la Zmasculinidad, y al hablar de varones gays siempre se habla de una masculinidad subordinada. Esto no resulta suficiente para el análisis que se desarrolla en este trabajo. Los conceptos de masculinidad hegemónica y subordinada son utilizados para describir lo que sucede dentro de este ambiente gay específico, y las relaciones entre los varones en este espacio en particular, por lo cual, bajo esta línea de análisis, ser un varón gay no implica necesariamente estar en una situación de subordinación. En las observaciones en Rheo se puede describir a un grupo de varones que performan una masculinidad que es vista como más legítima que otra, y mi postura es que esto es una forma de masculinidad hegemónica. En Rheo, a pesar de ser un ambiente habitado completamente por hombres gays es posible identificar una representación de masculinidad que ocupa un lugar superior de legitimidad, expresada por el hombre “normal, masculino, que no parezca puto” (Entrevistado #6, Rheo). Como contraposición a esta figura del hombre 'normal', se podría pensar en 'la loca’ como figura que simboliza a la masculinidad subordinada, ya que según los testimonios de los entrevistados, actuar de manera afeminada o con rasgos típicamente asociados a lo femenino "los hace menos hombres” (Entrevistado #6, Rheo). Esto es un desvío del concepto de Connell ya que ella describe la masculinidad hegemónica en términos sociales y culturales más amplios (Connell, 1995, p. 78), pero considero que es un desvío adecuado ya que nos permite dilucidar el desbalance de poder en las relaciones exclusivas entre estos varones gays. Sino, sería muy fácil asumir que por ser gay un varón siempre se encuentra en una relación de subordinación frente a todos los varones no gays, y esto es lo que estoy tratando de evitar. Diferentes espacios y situaciones sociales permiten que se generen distintas formas de relaciones de género. De hecho, Connell en su revisión del concepto admite como “tanto la incorporación y opresión pueden ocurrir simultáneamente”(Connell, Masserschmidt, 2005 p. 22 848) y ejemplifica recurriendo a las masculinidades gays en los centros urbanos occidentales, donde personas gays pueden tener experiencias de “violencia homofóbica y denigración cultural a tolerancia, celebración cultural y representación política” (Connell, Masserschmidt, 2005 p. 848). Mi postura es que es válido pensar en relaciones de hegemonía y subordinación en este espacio específico. No es la hegemonía en los términos que plantea Connell. Pero en Rheo hay un movimiento hacia la mimetización con lo hegemónico, a pesar de que en el espacio social más amplio se posicionan bajo una red de poder que los encuentra subordinados. Así, se podría pensar esto como una masculinidad cómplice, ya que reproduce la legitimidad de la hegemónica sin necesariamente corporizarla en un espacio social más amplio. Reconocer, permitir y legitimar: Las operaciones que observo en estas fiestas se podrían catalogar en tres ejes: reconocer/ no reconocer, permitir/ no permitir y legitimar/ no legitimar. A grandes rasgos, este sería el orden inicial de la estructura que utilizaré para analizar las configuraciones de práctica que develan las dos formas de representación de masculinidades: en palabras simples, una que se funda en la masculinidad hegemónica heterosexual, y una que desafía dicha hegemonía y se construye en base de protesta. Cuando uso la palabra 'protesta', estoy haciendo referencia al marco teórico que propone Connell, pero no a su definición particular de ‘masculinidad de protesta’. Como se citó anteriormente, para Connell una masculinidad de protesta refiere a la interseccionalidad de las etnias y las clases social con las representaciones de masculinidad hegemónica regional. En este caso, yo reconfiguraré este término para referirme a una representación de masculinidad que desafía las normas y valores sociales que se le adscriben a la forma más legítima de performar masculinidad. A continuación describiré dos formas de representación de masculinidad, construidas a partir de lo expresado por los entrevistados. Estas formas de representación se alinean a los espacios 23 nocturnos, es decir, dentro de cada fiesta opera una representación de masculinidad clara, descriptible y distinta a la representación de masculinidad que opera en el otro boliche. Eyeliner se destaca por reconocer la posibilidad de distintas masculinidades actuando simultáneamente en un mismo espacio sin que esto implique una separación en niveles jerárquicos de legitimidad. “No hay una presión de practicar alguna forma de género en particular” (Entrevistado #2, Eyeliner). Es decir, no hay una forma de posicionarse frente a la masculinidad que, ante los ojos de los demás, signifique que uno es más o menos hombre que otro. En Eyeliner, el género es algo que se interpreta de manera desestructurada, sin intenciones de catalogar o designar, y ciertamente sin intenciones de denigrar o juzgar: “No le dan importancia a lo femenino, masculino; van con un concepto de inclusión” (Entrevistado #3, Eyeliner), explica un entrevistado. Esto marca una condición fundamental de este espacio, y ayuda a explicar la naturaleza de las relaciones de género que se desarrollan en él. El ambiente que se genera es uno donde los individuos pueden expresarse libremente, siguiendo sus convicciones personales y sensibilidades internas, y no respondiendo a un orden de género normativo, algo que se ilustra en que “la fiesta no impulsa vestirse de determinada forma” (Entrevistado #2, Eyeliner). La representación de masculinidad bajo la cual se manejan los integrantes de esta fiesta reconoce pero al mismo tiempo rechaza los valores que exige la masculinidad hegemónica. En contraposición, en Rheo, ser hombre implica que “no parezca puto” (Entrevistado #6, Rheo). Acá se habla de una única manera de ‘ser' hombre, y al mismo tiempo, que esta es la más válida. En esta aparente contradicción, se reconoce la materialidad de los cuerpos para adscribir un género varón, pero se reserva lo masculino para aquellos que performan una masculinidad normativa, que rechazan todo lo que podría entenderse como femenino. En cuanto a lo performativo, 'ser hombre' es algo muy acotado y delimitado dentro de un rango de patrones y actitudes. Para muchos, la hombría entabla no actuar como 'una loca', una figura a la que los entrevistados acuden para expresar sus opiniones sobre lo que implica ser masculino. 'La loca' 24 encarna dentro de Rheo al varón gay que performa una femineidad en su corporalidad, “la típica mariquita” (Entrevistado #5, Rheo). (Es un concepto usado con fines despectivos, y en Rheo ocupa un lugar de no privilegio. Los entrevistados de la Eyeliner no usan el concepto, pero lo reconocen como uno establecido y lo mencionan para criticar su uso peyorativo). Claramente, en este espacio actúa un falogocentrismo latente (Butler, 1990, pp. 12-13), postulando a lo femenino como algo intrínsecamente inferior a lo masculino. El entrevistado Y, refiriendo a “las locas” afirma que “esas personas están un poco abajo. En Rheo trato de vincularme con gente como yo” (Entrevistado #5, Rheo). Así, Rheo se distingue por la construcción de una matriz de estratificación, donde algunos individuos tienen un estatus superior o inferior, y el criterio que determina quién está en qué categoría es definido por su habilidad para reproducir un género masculino adaptado a la masculinidad hegemónica heterosexual regional. Él que expresa características de “loca" ocupa un lugar inferior ante aquellos que performan esta masculinidad, y se autodefinen dentro de una categoría de masculinidad legítima dentro del espacio. Una hipótesis secundaria: Lo anteriormente dicho me insta a proponer una hipótesis secundaria. Hay una intención por parte de la mayoría de los varones de Rheo de construir una masculinidad homofóbica, de reproducir una masculinidad heterosexual que reafirma lo femenino como algo inferior y de menor validez, y reproduce la masculinidad hegemónica. ¿Qué sucede cuando un varón gay que frecuenta el ambiente gay se refiere a una drag queen como “un puto de mierda”? ¿O cuando cuestiona el derecho de esa persona a estar presente entre “nosotros”? El proceso discursivo en este caso señala a un acercamiento a la masculinidad hegemónica heterosexual, a la que permea en la sociedad en general, no la que surge específicamente en Rheo. Idealmente los espacios de sociabilidad gay son espacios de inclusión donde aquellos que son marginados en su vida cotidiana pueden encontrar una suerte de refugio (Ridge, Plummer y 25 Peasley, 2006, p. 502). Eyeliner es un espacio “donde se sienten identificados, menos atacados, y buscan pertenecer, como todos, que buscamos pertenecer a algo” (Entrevistado #1, Eyeliner). Sin embargo, Rheo no se construye de esta manera. En esta fiesta muchos varones asumen una identidad de rechazo a lo diferente. De la misma manera que una acción homofóbica del hombre heterosexual tiene el fin de desligitimar y degradar, en Rheo existe la misma tendencia contra las personas que expresan un género diferente al hegemónico masculino. Entonces las drag queen y las personas trans son atacadas por varones gays con el mismo discurso de rechazo que muchos varones gays sufren en su vida cotidiana. En el proceso, estos varones gays se posicionan como varones masculinos con la autoridad para sentenciar y excluir, y en esa exclusión definirse a sí mismos como los poseedores de la masculinidad más legítima. La lógica sería que como la masculinidad hegemónica relega a los varones gays a una posición de subordinación frente a los varones heterosexuales, un grupo de varones gays reproduce esta dinámica y se posicionan en un lugar de hegemonía 'pidiendo prestado’ los elementos discursivos de rechazo. Mostrase: el cuerpo como producto comercial y el rechazo como moneda: Es fácil entrar a Rheo y notar una homogeneidad en los estilos de sus clientes. Como sentencian los entrevistados, los varones que van a Rheo se distinguen por ser más “normales” (Entrevistado #4, Rheo), y es difícil encontrar individuos que se animen a apartarse de las normas que rigen en este discurso. El uso de la palabra “normales" para describir un grupo de individuos y dejar por fuera a otros es de importancia para analizar. “Normales" refiere fuertemente a aquello que es legítimo y aceptado, aquello que no puede ser cuestionado. Al hablar de los “normales" se hace una referencia implícita a la masculinidad hegemónica heterosexual, a los varones que se comportan y lucen de acuerdo a las reglas estructuradas y definidas sobre cómo se tiene que comportar y cómo tiene que lucir un hombre masculino. 26 En Rheo, la vestimenta y aspecto físico no pretenden diferenciar sino asimilar: ropa de marca usada bajo el mismo régimen estilístico logra crear un ambiente donde la gran mayoría de los individuos pueden reconocerse en los otros. Como menciona un entrevistado, se aprecia la rigidez y la intención de establecer su procedencia social. Son individuos “de la FADU, UCA, San Andrés…” y sus estilos de vestimenta enfatizan el estatus social que conllevan estas instituciones. Funciona como un símbolo de legitimidad, en el sentido de que el poder adquisitivo mantiene una relación con la representación de masculinidad dominante. La figura del macho proveedor, del hombre que tiene el poder de mantener económicamente a otros, es parte de la representación de masculinidad en este ambiente. En Rheo la masculinidad que disfruta de mayor legitimidad está vinculada al poder adquisitivo, y se evidencia en los estilos de vestirse. En Rheo se mira, se observa y se mide. Los entrevistados de este espacio hicieron mucho énfasis en la práctica de “mostrase”, en demostrar su valor mediante elementos superficiales y corporales. Se muestran para que otros examinen si son merecedores de su apreciación. Acá hay un componente comercial, donde los cuerpos son productos y las miradas, consumidores. La metáfora del cuerpo como producto comercial encaja con una realidad del ambiente gay, que estos espacios son espacios de comercialización: estas fiestas no son simplemente espacios donde varones gays entablan relaciones sociales, sino que son comercios con un fin financiero, de generar ingresos monetarios. Como comercio, éste se construye con el fin de lograr la adhesión de sus miembros, de generar clientes. Así, la fiesta se establece como un espacio particular de manera tal que sus miembros predominantes se sientan a gusto, en base a sus preferencias y estilos. Esto, en el caso de Rheo, implica generar un ambiente que permita la exclusión. Esta exclusión es parte irremediable de su construcción como marca. Está exclusión se expresa en la visión de los entrevistados de los varones “normales”, con “perfil más lindo, más musculoso” (Entrevistado #5, Rheo). Nuevamente, se enfatiza la forma de ser hombre que es vista como más deseable, más legítima, y que crea bordes que algunos pueden 27 cruzar y otros no. En Rheo lo masculino solo puede tomar una forma. A pesar de que esa forma incluya diversos elementos, todos ellos se rigen bajo el mismo discurso, uno de rechazo. La referencia a la vestimenta es una alusión a las marcas corporales que la masculinidad hegemónica exige de sus integrantes. Los estilos de vestimenta de los varones que van a Rheo y los que van a Eyeliner son marcadamente distintos. Puntualmente, en Eyeliner predomina un estilo alternativo, marcado por su desinterés en ajustarse a convenciones típicas de vestimenta. La vestimenta no tiene como eje al poder adquisitivo. La vestimenta en este espacio hace referencia a una libertad de expresión. Se corporeiza un estilo construido en contraposición a lo que la hegemonía cultural exige. Si Rheo se destaca por un discurso de exclusión, Eyeliner se destaca por uno de inclusión. El lema de Eyeliner, “Podés ser como quieras” define discursivamente cómo se construye el espacio y cuál es su objetivo. Es un lugar de descanso, donde las normas bajo las cuales uno es juzgado normalmente se suspenden. Eyeliner: Prejuicios y un comentario sobre interseccionalidad: En Eyeliner el discurso es sumamente distinto, y las relaciones entre los hombres se rigen bajo otras variantes. Mientras que en Rheo los prejuicios de tinte homofóbico son un marcador fundamental de la escena social que se desarrolla, en Eyeliner “no hay tanto prejuicio” (Entrevistado #1, Eyeliner). Lo que no quiere decir que no los haya. Distintos entrevistados reportaron haber sido testigos de comentarios xenofóbicos, por ejemplo, en una instancia, contra individuos oriundos de Bolivia: “Yo escuché una mina que decía ‘acá vienen muchos bolivianos’” (Entrevistado #1, Eyeliner). Pero en esta coyuntura es importante hacer una aclaración sobre el lugar de la raza, la etnia, la procedencia social y la geográfica. Las relaciones de género siempre están atravesadas por otras instituciones que las regulan (Bonder, 1998). En particular “la masculinidad hegemónica es poderosamente estructurada por relaciones de clase” (Noble, Poynting, Tabar, 1999, p. 60). Este trabajo no hace foco en este proceso, pero para un análisis completo de las 28 relaciones de género en estos dos espacios de fiesta deberían estar incluidos ya que lo que la masculinidad hegemónica genera, está en parte articulado por estas variables. Es imprescindible que un trabajo posterior investigue “las intersecciones de estructura de clase y las relaciones sociales de etnicidad con las relaciones de género en las cuales formas particulares de masculinidad se construyen y reconstruyen”(Noble, Poynting, Tabar, 1999, p. 60). Rugbier: un elemento de representación de masculinidad heterosexual: Hablando sobre qué significa ser hombre, un entrevistado dice: “Me da la imagen de hombres, pero con diferentes características. No se me viene a la cabeza un grupo de rugbiers” (Entrevistado #2, Eyeliner). La imagen del rugbier brotó en múltiples ocasiones para hacer referencia a la figura hegemónica del varón. Un rugbier es un jugador de Rugby, un deporte de contacto de prominencia en Argentina, marcado por un “grado mayor de violencia relativo a otros deportes de contacto” (Branz, 2010, p. 6) y es además un “fuerte símbolo de clase social en Argentina” (Branz, 2010, p. 7), luego de que el fútbol sea reapropiado por las clases populares (Branz, 2010, p. 7). En los discursos de los entrevistados esta figura es importante. El rugbier es un modelo de masculinidad que domina culturalmente, y lo que es y no es masculino es afectado por esta figura. En Argentina, el Rugby ocupa un lugar de importancia en el imaginario colectivo cultural, segundo solo al lugar que ocupa el fútbol en la arena deportiva. El fútbol es “una expresión de masculinidad poderosa de las capacidades y potencial nacional” ya que "fue mediante el fútbol que la Argentina se convirtió en un actor importante en la historia moderna del deporte” (Archetti, 1999, p. 15). Es un deporte de hombres, de hombres heterosexuales, musculosos y salvajes, de 'hombres masculinos’ que "exaltan una performance corporal” (Archetti, 1999, p. 18). En Eyeliner los rugbiers no están presentes, pero el papel que juega su figura sí. Las formas de posicionarse frente a la masculinidad que uno encuentra en Eyeliner están construidas, de alguna manera, en 29 contraposición a esta figura: se rechazan la violencia y los músculos como elementos que confieren masculinidad. Los músculos y la violencia que encarnan al deporte no son discursos que se reproducen en las relaciones entre los varones de la Eyeliner, ya que no son valorados y son dejados de lado. La vestimenta no funciona para resaltar rasgos físicos típicamente considerados masculinos, sino que resalta lo contrario. En Rheo la situación se invierte, y los valores culturales asociados al deporte toman un papel distinto. En mis observaciones noté que los varones de Rheo hicieron varios comentarios que posicionaban al rugbier como altamente atractivo y deseable, representante de lo masculino. Ambiente gay: espacio ritualístico: El ambiente gay, dentro del cual existen las fiestas Rheo y Eyeliner, podría entenderse como un espacio ritualístico, “inmersión y renovación mediante un estado (de trance)” (Ridge, Plummer y Peasley, 2006, p. 503): para Ridge, Plummer y Peasley, es un espacio de transición homofílico donde se llevan a cabo rituales que validan la masculinidad, “e inician a jóvenes varones en diferentes caminos de ser varón, incluyendo maneras de lidiar con la vida por fuera de las puertas de lugares gay” (Ridge, Plummer y Peasley, 2006, p. 503). Los autores dan por sentado que dentro del espacio gay la homofobia se suspende, por lo que el ambiente gay funciona como un refugio donde individuos que sufren marginación social pueden sentir que pertenecen. Yo no estoy de acuerdo con esta postura como representativa de los que sucede en Rheo, ya que observo un espacio donde aquellos que pueden sentir que pertenecen son los que mejor se adecuan a una performance de masculinidad normativa. De todas maneras las observaciones de Ridge, Plummer y Peasley son de utilidad para investigar las diferencias entre las dos fiestas, ya que una se define por la proposición de inclusión, mientras que la otra se define por la reproducción de la hegemonía heterosexual. 30 Eyeliner por el contrario es, efectivamente, un ejemplo de un espacio homofílico donde individuos pueden refugiarse de una homofobia externa (la que se origina en la sociedad, en contraposición a la interna, la cual se refiere a sentimientos negativos propias hacía la propia identidad). Como dijeron varios de los entrevistados y algunas personas con las que conversé dentro de Eyeliner, una de las razones por la que ellos disfrutan estar en esa fiesta es porque se sienten cómodos: "Porque la gente es mas amigable, hablarles, o tal vez empezar una charla no en el sentido de levantarte a una persona, pero para romper el hielo, algo más social, más ameno. Me siento cómodo ahí” (Entrevistado #3, Eyeliner). Otro atribuye esa comodidad a que “no hay una presión (…) de ser de determinada forma” (Entrevistado #2, Eyeliner). Eyeliner, en comparación a los otros boliches o fiestas del llamado ambiente gay “es uno de los más relajados,(…) no invasivo (…) y la gente es más amigable” (Entrevistado #2, Eyeliner). Eyeliner puede funcionar, entonces, como un espacio social alternativo al que habitan cotidianamente, donde su identidad es causa de celebración, no de estigma. Para ejemplificar “Una trans va a Rheo y lo verían como una cosa medio medio, ´acá no pertenecés´; en cambio, en la Eyeliner, sería una persona más” (Entrevistado #3, Eyeliner). Rheo, entonces, se construye de una manera contradictoria: es un lugar exclusivo para varones gays, donde no existe la amenaza de la presencia homofóbica heterosexual, pero no obstante, está presente la homofobia por parte de un grupo de varones gays quienes performan una masculinidad reflejada en la hegemónica heterosexual. Ciertamente, aunque parezca contradictorio no es el único caso. Julia Serano, en su libro “Excluded: Making Feminists and Queer Movements more Inclusive"5, relata cuán común es que mujeres trans sean excluidas de espacios activistas feministas habitado principalmente por mujeres cisgénero6. La justificación de dicha exclusión es que “las mujeres trans puedan traer con ellas ‘energía masculina’ al espacio” (Serano, 2013, p. 27). Es una tendencia que responde a una corriente feminista de las décadas ’70 y ’80 que planteaba que las 5 6 Serano, J. (2013). Excluded: Making Feminist and Queer Movements More Inclusive. Berkeley, California: Seal Press. “…activistas comúnmente usan la palabra cisgénero como sinónimo de no-transgénero" (Serano, 2013, p. 19). 31 personas transexuales “propagaban estereotipos sexistas y objetivaban a la mujer por intentar poseer cuerpos femeninos” (Serano, 2013, p. 23), lo cual llevó a que mujeres trans sean excluidas de espacios de mujeres y lesbianas. Es un argumento de tinte sexista, ya que es una forma de discriminación aplicado singularmente a personas cuyo género al nacer fue el de hombre, pero ahora el género que eligen es el de mujer. Los hombres trans se salvan de este ataque, ya que “nacieron y fueron criados como mujeres” (Serano, 2013, p. 23), y a pesar de corporeizar una identidad de hombre, son bienvenidos por su estatus de ‘mujer biológica’. Serano resume el doble estándar que sufren las mujeres trans diciendo que “Si actuás de manera dulce y recatada, se te acusa de reproducir los ideales patriarcales de pasividad femenina, pero si tomás una posición por tus derechos y hacés que tu voz de escuche, se te desestima por ejercer tu privilegio y autoridad masculina” (2013, p. 29). Todos estos ejemplos y casos hacen referencia a la idea de comunidad, un concepto problemático ya que “refiere a un grupo de personas que comparten características en común, pero el rango de características compartidas que pueden formar la base de una comunidad es extremadamente amplia” (Holt, 2011, p. 857). Identificarse como gay no implica necesariamente ser parte de la comunidad gay. Puntualmente, hay distintas dimensiones a veces en disputa sobre qué implica ser parte de dicha comunidad, como lo político, lo sexual, lo social y lo identitario. Dowsett, haciendo una investigación con hombres gays y bisexuales en Sydney, Australia, encontró que “algunos hombres adoptaron las dimensiones sociales, sexuales y políticas de la vida gay, mientras que otros adoptaron lo social y lo sexual, pero no estaban interesados en lo político (…) Dowsett notó que un sentimiento de pertenencia a la comunidad gay no era un resultado de ser gay, sino que había que hacer un esfuerzo para alinearse con la comunidad gay, como sea que ésta se imaginaba” (Citado en Holt, 2011, p. 859). Dado que muchos varones tienen posiciones encontradas acerca de lo que significa ser parte de la comunidad gay, Holt propone hablar de ‘comunidades personales’ para “capturar las maneras en que hombres gays se relacionan entre sí” (2011, p. 860). ‘Comunidades personales’ se define como “la red informal de amigos, familiares, 32 parejas y colegas con quien un individuo se siente conectado y cercano, y con quien un individuo siente un sentimiento de pertenencia, solidaridad y apoyo” (Holt, 2011, p. 860). Esta definición me parece acertada para observar la relación institucional que se genera entre los individuos y el espacio en cuestión, especialmente la Eyeliner. Esta fiesta se posiciona dentro del universo de la escena gay, como un lugar particularmente inclusivo que no permite el estigma de “ser una loca” o comportarse de una manera no normativamente masculina, que Rheo incorpora. Los varones gays que son parte de esta fiesta la valoran como un espacio único y hablan de un sentimiento de pertenencia, no a la comunidad gay en general, pero pertenencia a la Eyeliner. En distintas ocasiones los entrevistados declararon sentir desagrado de la gente que va cuando hay canilla libre (se paga una entrada única y uno puede adquirir todos los tragos que quiera sin pagar un adicional) porque “va mucha gente y yo me hago amigo del lugar, y para mí es ‘no vengas acá si no venís nunca' y llenás el lugar” (Entrevistado #1, Eyeliner). Esta confesión demuestra una adhesión al espacio y a sus compañeros que van por el ambiente que este ofrece, y no solo porque hay bebidas baratas: “Se satura de gente que va por el trago barato y no por el tema de vamos a divertirnos, vamos a joder” (Entrevistado #1, Eyeliner). Mi interpretación es que los entrevistados lo ve como una violación al espacio y a los valores que promueve la fiesta, como una transgresión contra las personas que van a la fiesta para disfrutar y ser parte de esa comunidad específica. 33 Conclusiones: Este trabajo se basó en reconfigurar el esquema teórico que postula Connell, de masculinidades hegemónicas, cómplices y subordinadas, para aplicarlo en un espacio exclusivamente gay y así poder problematizar las relaciones de género entre los varones que habitan estos dos espacios. Mediante este proceso se pudo delinear una matriz de relaciones de género donde, en Rheo, lo legítimamente masculino estaba atravesado por concepciones normativas heterosexuales, y en Eyeliner, lo legítimamente masculino era desafiado para alcanzar un espacio donde ‘ser masculino’ no implicaba situarse en una relación de poder frente a lo ‘no masculino’. Este trabajo involucró un desvío estructural del concepto de masculinidad hegemónica que ideó Connell. Su conceptualización sobre las masculinidades se orienta a vislumbrar las relaciones de género en un marco social y cultural amplio, que contiene al grupo específico trabajado aquí. Para poder llevar a cabo un análisis de las relaciones de género en las dos fiestas fue necesario romper con la estructura con la que trabaja la autora. Así, se logró evidenciar una relación de hegemonía y subordinación dentro de las fiestas. Es importante repetir que, a pesar de esta relación de inequidad entre los sujetos de Rheo, todos se sitúan dentro de una matriz que los posiciona como subordinados a la masculinidad hegemónica. Pero al mismo tiempo y al interior de un espacio predominantemente gay, exhiben una posición que se alinea con la masculinidad hegemónica. Se puede interpretar que se trata de una transposición permitida dado que están en un espacio sin varones heterosexuales que cuestionen esa posición hegemónica. La hipótesis inicial proponía que, en Rheo, las relaciones de género se dan entre varones que exhiben rasgos culturalmente aceptados de masculinidad, y en Eyeliner, los dejan de lado para asumir un género no anclado en la dominación cultural de la masculinidad hegemónica. Yo creo que las relaciones de género responden a este esquema, creando, a grandes rasgos, un espacio homofóbico y uno homofílico. Una adición posterior a la hipótesis postulaba que la masculinidad que los sujetos construyen en Rheo tiene un tinte homofóbico, al mantener una relación mimética con la masculinidad hegemónica tal cual la plantea Connell. 34 El ambiente de Rheo se rige por una estructura de competencia basada en la normas culturales que se construyen a partir de lo que es representado como válido y legítimo: quién es el más lindo, quién está mejor vestido, quién es menos femenino, quién podría ser considerado heterosexual. En Eyeliner no hay competencia, es un lugar donde distintas personas pueden ir para disfrutar de la fiesta sin la presión de la mirada del otro. Existe para dar un respiro y aislar a los individuos de la mirada hegemónica, heterosexual y falogocentrista. Para evidenciar las diferentes representaciones de masculinidad, me remití a la construcción de los regímenes estilísticos de los sujetos, a la importancia que atribuyen a la procedencia social, e hice énfasis en la importancia de la exclusión o inclusión como herramientas discursivas que permiten la reproducción de las relaciones de género en cada fiesta. Identifiqué a la figura del rugbier como ejemplo de la corporeización de los valores de la masculinidad hegemónica y cómo influye esta figura en las representaciones de masculinidad. Finalmente, hice un breve recorrido sobre la idea de comunidad gay (algo que me pareció indispensable dado la temática del trabajo), y cuestioné cuán útil es hablar de comunidad como categoría analítica. El resultado fue meramente un vistazo de como se construyen y reconstruyen estas relaciones de género. Otros trabajos posteriores deberán incrementar la cantidad de casos estudiados para analizar si las relaciones de género que describo se reproducen en otros ambientes gays de la ciudad de Buenos Aires, en el resto del país, o inclusive en el resto de América Latina. Y como se mencionó anteriormente, es esencial incluir variables como la clase social, la etnia, la procedencia geográfica y la edad, para poder investigar más profundamente los elementos que influyen en las construcciones de masculinidad. 35 Referencias: • Archetti, E. P. (1999). Masculinities: Football, Polo and the Tango in Argentina. Oxford: Berg. • Bonder, G. (1998). Género y subjetividad: avatares de una relación no evidente. En Montecino, S., Obach, A. (Ed), Género y epistemología: mujeres y disciplina. Santiago: LOM ediciones. • Branz, J. B. (2010). Abordajes sobre la práctica del rugby: significados culturales en torno a la construcción de masculinidad. En Cachorro, G., Salazar, C. (Ed.), Educación Física Argenmex: temas y posiciones. La Plata: Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, Universidad Nacional de La Plata. Recuperado de http://www.argenmex.fahce.unlp.edu.ar/3.deporte-y-sociedad/10.-abordajes-sobre-la-practica-del-rugby-significados-culturales-en-torno-ala-construccion-de-masculinidad • Butler, J. (1990). Gender trouble. New York: Routledge. • Butler, J. (1993). Bodies that matter: on the discursive limits of sex. New York: Routledge. • Carrigan, T., Connell, R. W., y Lee, J. (1985). Towards a new sociology of masculinity. Theory and Society, 14(5), pp. 551-604. • Chauncey, G. (1994). 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Dentro de cada uno: identificar a 4 personas. 2 que se adecuan al régimen del espacio y 2 que no. En total 8 entrevistados. Esta guía de pautas está diseñada para 2 instancias. La primera es un acercamiento inicial en los boliches. La segunda instancia es la entrevista en profundidad fuera del boliche. ———————————————————————— Guía de pautas A (en boliche / identificación de candidatos apropiados) • Observación de disposiciones espaciales: Cómo es el espacio, cómo está dividido, qué sucede en cada espacio, cómo interactúan las personas en ellos. Puntos concretos a observar: • Representación visual de los hombres en el boliche. • Representación performativa de los hombres en el boliche: Qué están haciendo? Entrada a campo: 1. Reconocimiento y descripción exhaustiva del lay-out del local: (armar croquis/plano del lay-out) a. Accesos: desde calle, circuito de acceso, cantidad de puertas o entradas (descripción) b. Barras: localización, oferta. Tipo de barra c. Pistas: características (atención a la amplitud o no del espacio. ¿Qué tipo de posicionamiento de los cuerpos favorece?) d. Iluminación. (Observar también qué construcción de espacio propone. Pensarla en términos retóricos. Situar a los cuerpos en esa construcción de espacio) e. Música (también retórica.) Géneros, estilos. Volumen. f. Temperatura. 38 g. Otras zonas/servicios 2. Reconocimiento y registro de: a. Señalización orientadora de servicios/espacios/oferta de bebidas b. Decoración/ Material gráfico (si hay): tipo, tamaño, ubicación, contenidos. c. Pasar por una mirada que reconstruya el espacio en clave semiótica: qué tematiza? Qué idea de mundo propone? Enunciativa: cómo se posiciona el boliche como enunciación? Cómo es el contrato que propone?qué enunciatario/s construye (cómo es, cómo está el público que el espacio construye? Qué rasgos retóricos se pueden identificar? Entonces: qué tipo de masculinidad está proponiendo el espacio? 3. Registro de primeras impresiones: a. Impronta general del local. Clima. b. Composición de los actores: i. empleados: actitud, ritmo, confortabilidad, semblante. ii. público: estilo, ritmo, confortabilidad aparente. Tipos de clientes: grandes/jóvenes, rasgos estilísticos, actitud (expentante, curiosa, interesada, distante, de difrute, de “exhibición”) c. Escena que construyen los actores: características, ritmo. Descripción de la escena y la performance que se opera. Cantidad de escenarios aparente. Observación/Intervención: Ejes: 1. Impronta del local - Escena construida 2. Presentación de los actores: 3. a. empleados b. público (caracterización del perfil, actitudes y acciones) Características de la performance: a. fluidez y dinámica 39 b. 4. operaciones según actor: quedarse/estar, moverse/sentido del movimiento Interacciones: hablar, socializar. Entender qué es lo que uno hace en este espacio. Qué es lo que los que lo frecuentan vienen a hacer. Están parados en pose? Están bailando? Están levantando? Están discutiendo? Es un espacio intelectual? Hay intenciones de activismo? Interacciones y prácticas que se llevan a cabo: a. Descripción de las interacciones entre actores: grupos armados, individuos, entable de relaciones, cómo? Cómo se ven los actores? (cómodos, tensos, ganadores, tímidos?) quiénes? En qué se nota? (esto sirve para ir acotando a quién vas a interpelar) b. Prácticas/tipo de prácticas según actor/entre actores INTERVENCIONES (mini-entrevistas necesarias para la comprensión e identificación de sujetos que pueden ser posibles entrevistados). Principalmente ante dos tipos de situaciones: 1. Las prácticas/situaciones/actitudes repetitivas: lo cristalizado. 2. Las prácticas/situaciones/actitudes anómalas/originales. Búsqueda de puntos de quiebre de prácticas cristalizadas. 1) Establecer identidad: Serie de preguntas para establecer cuan útil es el candidato para este trabajo. La frecuencia con la que van al boliche, si se consideran el tipo de persona que va al boliche. Te sentís parte? —> estás cómodo? te sentís que estás entre los tuyos? Te identificas con la gente que hay acá? Tener en cuenta que estoy buscando dos tipos de candidatos: uno que encaje en lo que representa el boliche y uno que no. A tener en cuenta: estas categorías no van a estar tan diferenciadas. Esto es un objetivo maleable. En la práctica puedo buscar candidatos fuera de los boliches, vía internet, y dado que esta diferencia no es tan clara, no es necesario tener que encontrar candidatos que encuadren necesariamente en este esquema. Es posible que el esquema no exista. 2) Concepciones abstractas del boliche. Esta sección tiene el objetivo de generar una idea básica del tipo de espacio que es el boliche. Definir las percepciones que tienen los candidatos del lugar en concreto. Son preguntas abiertas para generar una descripción general del lugar. 40 Quiénes son las personas que vienen a este boliche? Quiénes son las que NO vienen? Cómo/cuál es el público? Es heterogéneo/homogéneo? ¿En qué lo notan? 3) Masculinidades: la audiencia Un primer paso es identificar qué tipos de hombres gay vienen al boliche. Diferentes estilos, mas que tipos. Usar ‘tipos de hombres/gays’ coloquialmente. Permitirle al entrevistado que describa los tipos de gays que vienen. Cuáles son las características que los representan? Guía de pautas B (en entrevista) Está sección tiene un diseño no linear, estructurada alrededor de ciertos ejes conceptuales. El objetivo de este trabajo es identificar el efecto que tiene el boliche sobre las prácticas de género de los hombres gays, (si es que efectivamente hay un efecto), por lo tanto dichos ejes conceptuales se remiten repetidamente a este espacio en particular. Género: Averiguar cuáles son sus perspectivas sobre el género en general, y cómo lo relacionan en cuanto a la orientación sexual, la homosexualidad, a la sexualidad en general, al campo de prácticas sexuales entre hombres. Entender dónde caen las opiniones en esta red. Su opinión sobre la relación entre orientación sexual y prácticas de género: incide la orientación sexual en las prácticas de género? Masculinidades: Este eje conceptual es el más importante de la entrevista. Vía Connell, planteo que las masculinidades son prácticas de género, y en esta instancia quiero investigar cómo y cuáles son las prácticas que se dan dentro del boliche. Los hombres actúan diferente dentro del boliche que fuera? Sentís que hay reglas que hay que seguir? Cuáles son estas reglas? Estas preguntas tienen el objetivo de dilucidar qué sucede con los estereotipos de masculinidad dentro del boliche: si el boliche logra fortalecerlos, o si, por el contrario, actúa para desmantelarlos. Cuando me refiero a ‘estereotipos’, me refiero a aquello que emana de la ‘masculinidad hegemónica’, esas formas de ser, de actuar, que adscriben status y legitimidad a formas de ser masculino que subvierten la feminidad. Por ende, cuando hablo de masculinidades, también estoy hablando de femineidades. Identificación: Este eje hace énfasis en la identidad personal de los entrevistados como contrapartida de las identidades de los otros en el boliche. Cómo se identifican ellos? Se 41 consideran hombres? ¿qué significa “ser hombre”? ¿Qué se entiende? Qué aspectos son relevantes dentro de este “ser hombre”? ¿Cuáles menos, sin tanta importancia? ¿en qué se expresa el “ser hombre”? ¿qué se espera de un hombre? Quiénes lo esperan? Estás de acuerdo? Cambian según quiénes estén cerca o con quién estés interactuando? Pensás que esa idea sobre el “ser hombre” tuvo algún tipo de efecto en tu vida? Positivo? Negativo? En qué se aspectos? Se consideran masculinos? Cómo afecta ser gay a estas concepciones? (Atención a cuestiones vinculadas a la orientación sexual y las cuestiones culturales derivadas, formas de ser, desafíos, lo que se espera y lo que esperan) ‘Ser gay’ es muy ambiguo, por lo que indagando más profundamente, un objetivo es identificar distintas maneras de ser hombre siento gay, y qué nivel de aprobación les adscribe el entrevistado. Cómo ven lo femenino en este lugar? La figura del ‘pasivo’ es un buen eje para analizar las percepciones respecto a lo femenino en estos ambientes. Cuál es la postura de los entrevistados frente a él? Lo rechazan o lo avalan? Qué adjetivos usan para describirlo? 42 Transcripciones de entrevistas: E: Entrevistado L: Entrevistador Entrevistas Eyeliner: Entrevistado A: L: Hace cuánto tiempo vas a Eyeliner? Cuándo fue la primera vez que fuiste? E: Empecé en el 2012. Me llevó un amigo, que siempre se enteran de fiestas. Yo no investigo mucho. Conozco varios lugares, pero tengo amigos que son más chicos que yo, y andan en la onda. L: Están más pendientes de lo que hay. Cuando vas a Eyeliner, siempre vas en grupo? E: Si, a este lugar nunca fui solo. L: Con qué frecuencia vas? E: A casi todas las fiestas. Salvo cuando no hay. Voy siempre con mis amigos. L: Cómo vivís la audiencia de la fiesta? Quiénes son las personas que van a la Eyeliner? E: Lo que pasa es que es muy variado. Hay mucha variedad. Yo tengo más de 30 años, vengo de una generación que el boliche era boliche y tenía un nombre y no iba mutando tanto como ahora. No eran fiestas. Eran boliches. Eyeliner comparado con otros boliches, tienen un público de gente más pendeja, van de 18 a treinta y pico de años. La mayoría son más pendejos, en comparación a Rheo, por ejemplo. L: Pregunto más por el lado de tu idea de la persona que va a la Eyeliner. Cuando vas a Eyeliner, qué sentís que estás viendo? 43 E: Primero veo gente más relajada. Gente que explota más el lado de fiesta, el lado divertido. No están tan rígidos, como en otros lugares, pensando en otras características. Veo que se toma mucho, hacen canillas libres. La birra no es muy cara. Terminan muy alegre, enfiestándose. L: Yo noté que el alcohol es mucho más barato que en Human y en Rheo, por ejemplo. Yo fui con mis amigos el otro día a Eyeliner, y ellos no son de ir a este estilo de lugar. Y les encantó, cuando nos fuimos dijeron ‘queremos volver’. E: Ellos no tienen ningún tipo de prejuicio con el lugar? L: Bueno, es así, vinieron 3 amigos, 2 ni en pedo tienen prejuicio. El tercero, él si es más de ir a Human, Rheo. Él se siente más parte en esos lugares. Yo cuando voy a Human, me quiero pegar un tiro, me quiero ir. No me identifico con la gente que va ahí. Me siento mal. Me aburro. Tengo que estar muy en pedo, y me pasa que me enojo con mi amigo porque él me deja y se va a buscar pibes, y yo me quedo solo. E: Yo las veces que voy me divierto mucho. Nosotros hacemos previa y tomamos en el boliche. Así que imaginate como terminamos. L: De la previa al boliche van en remís? E: Nosotros tenemos un amigo que tiene auto. Hacemos previa en la casa de él. Él nos lleva. somos un grupo de 4 o 5 personas. Como acá en zona norte no hay nada. A veces vamos a la Bipole, en San Telmo. Pero es parecida a la Eyeliner. L: En qué sentido es parecida? E: Va un poco la misma gente. Pasan pop, Britney, Lady gaga. En Eyeliner a lo sumo llegaban a poner regatón, cumbia. Vienen bandas a vences, tipo cumbia queer, esas. Bipole no lleva bandas, por ahora. Es todo música. Pero tienen una onda parecida. Es la onda relajada, bebida barata, se cagan todos de risa. Eyeliner, por ejemplo, cuando hace canilla libre no me gusta, porque va mucha gente y yo me hago amigo del lugar, y para mi es ‘no vengas acá si no venís nunca, y llenás el lugar’. Para mi dicen canilla libre y no se puede caminar. Se están aprovechando del lugar. No si por eso cerraron el otro día. Decían que había muchos menores, que estaba colapsado. Se pone feo. 44 No se puede andar y Eyeliner tiene un tema de muchas quejas. Yo por ejemplo me quejé del tema de los baños. Cuando se llena de gente se hacen colas terribles y los baños no se pueden mantener. Porque no lo pueden cortar. Es un descontrol de gente. Esa es la parte mala que yo siempre critiqué. Cola para los bolsos, Colas para pedir tragos. Cola para todo. L: Algo que me gustó en la Eyeliner es que había muchas chicas. En la Eyeliner era mitad y mitad, lo cual es raro para boliches gays. De todos los varones que van, cómo los describirías? En cómo se visten? En tu imaginario, cómo los ves? E: La mayoría son chicos, como te decían, de entre 18 y veintipico de años. En apariencia son muy chicos. Para mi son chicos. Tienen ondas diferentes. No es que se visten con la misma ropa todos. No se peinan todos igual, ni que quieren parecerse. Es como si vos vieras a alguien de diferentes tribus urbanas: emo, floger, rolinga, cumbieros, eso es lo bueno, la variedad del boliche. Pelos de todos colores, ropa colorinche, son muy liberales en el tema de vestirse. Yo los veo y digo, dónde se visten estos chicos? Porque no salen de sus casas vestidos así. Creo que se visten en la fiesta, o en algún Mcdonald’s cerca. En el lugar, no da para mucho prejuicio. Vos vas como querés y nadie te está mirando. Nadie te va a decir, 'che que te pusiste?'. L: No hay un ambiente de apuntar el dedo? E: No, es más, te dicen que buen color, o que buena campera, que lindo tatuaje, en un momento hacían tatuajes en el lugar. L: En términos de masculinidades, cómo ves lo que pasa en la fiesta? Yo cuando te digo masculinidades, qué se te viene a la mente? E: Me da la imagen de hombres, pero siendo diferentes características. No se me viene a la cabeza un grupo de rugbiers. No gays. L: Claro, yo no hablo de una masculinidad más legítima que otra. Por ejemplo, si yo te dijese de la masculinidad de los chicos que van a la fiesta, o la masculinidad de las chicas que van a la fiestaE: Ah, se puede hablar de la masculinidad de las chicas? L: Para mi, si. 45 E: La de los chicos es variada, en que no hay tantos prejuicios. Digo no tanto porque no sé que no hay, siempre hay, el prejuicio cero no existe. Yo he escuchado en la fila gente diciendo ‘ai, mirá esa’. Pero es entre amigos y uno escucha. Yo escuché una chica que decía ‘acá vienen muchos bolivianos’. Después en cuestión de características de los varones, hay de todo. L: Vos pensás que en otros boliches no se permitiría eso? esa variabilidad? E: No, no se ve. En Rheo no se ve tanto. Son todos muy machotes, del músculo. Por ejemplo, la Eyeliner van un par pero los contás con los dedos de las manos. Un amigo es machote, pero dicen que son héteros. No solamente van sino que los vimos comerse a tipos y siguen diciendo que son héteros. L: Vos pensás que están mintiendo, o que realmente se identifican con heterosexuales? E: No son heterosexuales. L: Eso es interesante. Yo creo que hay algunos que se identifican como heterosexuales, que el hecho de coger con hombres no sienten que dejan de ser heterosexuales por eso, no dejan de sentir que dejan de pertenecer al grupo de heterosexuales. Nosotros tenemos una idea de heterosexualidad, pero capaz el otro tiene una idea diferente. Capaz no está mintiendo, está usando un concepto que capaz es medio border. E: Es que yo te estoy hablando de pibes como yo, que vamos hace mucho tiempo, que los vemos todos los sábados, que si bien podrían decir que son bisexuales, o no sé, me gusta cualquier cosa. Nosotros hemos preguntado, los hemos encarado y dicen ‘no, a mi me gustan las minas’ y obvio no les vas a decir nada. Que el sienta lo que quiera sentir. Hay de eso, tampoco sé los términos para clasificarlos. Esta la típica loca que se desata, he conocido pibes que empezaron yendo maquillados, después se pusieron tacos, peluca y terminaron siendo travestis, transexuales, o como se les diga hoy en día. En mi época eran todos iguales. L: Hoy hay muchos términos diferentes y todo depende de como se identifica esa persona. Vos mencionaste que hay gente que se cambia y se pone la ropa en algún lugar cerca. Vos sentís que hay gente que actúa diferente cuando esta adentro que cuando está afuera? 46 E: Si, muy diferente. Cuando está en la puerta del lugar ya actúa muy diferente. Es como que entran a un mundo donde se sienten identificados, menos atacados y buscan pertenecer, como todos, que buscamos pertenecer a algo. Yo siento que antes de entrar ya están totalmente, es que no me los imagino siendo así en su vida diaria. Yo no veo tanta gente así en la calle. Dónde están de día? somos todos vampiros? qué nos pasa? L: Ves reglas dentro de la fiesta? Reglas en el sentido de maneras de actuar, esto se permite, eso no se permite? Reglas que entienden las personas que son habitúes del lugar. Suponete una situación de levante. Vos estas acá y ves un pibe que te querés chapar. Hay algo escrito en ese tipo de rituales? E: No, desde ese lugar no. L: Vos dirías que la Eyeliner es un lugar de levante? E: Si, es un lugar para divertirse. si te querés levantar a alguien, vas y levantás. Hay una cosa de estar relajado, o chupado, o fumado, te permite no tener que encarar, ves a alguien que te gusta, se gustan y listo. No es que 'decile a ese chico que tal cosa…’ no hay tanto de eso. A veces, pasa con los tipos que se hacen los machotes y te dicen, andá y preguntale si es o no es. Te llegan a confundir. Ves pibes que van trabado que no habla con nadie, y decís ‘qué hacés ahí? vas a un boliche hétero y te comés a todas las minas que quieras'. Mandan un amigo/amiga para preguntarle si es gay, hétero. Pero después cuando ves un pibe que tiene tus mismos códigos, es como que no tenés eso de voy a hacer algo para levantármelo. En tema de comportamiento, este tema de la joda, cuando ya marca su máxima expresión, a veces te molesta como se comportan, porque como son chicos, se comportan de manera muy descontrolada. Algunas veces se han peleado. Más que todo minas, no sé porque. Pero pasa porque como hay más consumo de alcohol, llegan estos problemas. L: Ahora un par de preguntas sobre vos más en particular. Vos cómo te identificas? E: Si me tuviese que describir- te digo, la palabra gay no me gusta pero es la palabra que se usa. Me parece sumamente despectiva, hasta la palabra homosexual no me gusta. No me gustan los términos, porque si bien son necesarios. Puedo llegar a aceptar la palabra homosexual, porque es 47 una palabra ‘científica’, la más neutra posible. Pero la palabra gay es lo más despectivo que hay. Porque gay significa divertido, alegre. Me da la impresión que la palabra la invento algún machista, alguna asociación machista, religiosa, de ver al gay que va a fiesta y hace reír a todos y es el payaso. No me entra en la cabeza el término. Hoy en día creo que nadie le da bola a lo que significa realmente. L: Vos cómo redefinirías el concepto? Qué significa para vos ser gay? E: Es que para mi ser gay es una palabra contenta. Para mí la orientación sexual directamente no existe. No me entra en la cabeza que nos estemos definiendo en base a quien te gusta, una heladera, un mono. Yo llegue a una instancia que a mi nada me conmueve a lo que una persona puede llegar a desear, pero yo también heredé muchos prejuicios, conociendo gente, estudiando, teniendo varias experiencias, yo me saque de la cabeza el prejuicio. Vos podés venir con una pollera, un bigote, un sombrero, y siempre vas a ser vos. El cerebro no lo podés disfrazar. L: Vos sentís que hay alguna relación entre orientación sexual y el género? Entre ser varón/mujer con estar atraído a personas. E: La orientación sexual es una decisión personal sujeta a- influida por factores socioculturales. Yo puedo decir que me gustan los hombres porque no tengo ningún prejuicio, pero si yo busco una persona que tiene un prejuicio y te está diciendo que le gustan las mujeres, y yo me creo el cuento, y realmente a esa persona no le gustan. Si se define heterosexual, yo voy a estar diciendo que es heterosexual, pero dentro de la persona hay otra cosa diferente que solo él/ella lo sabe. La orientación sexual es eso, cada uno tiene algo que lo está explorando, o lo tiene guardado o libera. Es algo muy personal. El tema del género es algo más complicado. Ahí entra un tema que tiene que ver con lo biológico, no solo con lo psicológico, con lo que una persona quiere o no hacer con su sexualidad, entra gente que tiene que nació con problemas en los miembros, o no desarrollados. L: Como que no encuadra con la definición científica de un cuerpo de varón o un cuerpo de mujer. 48 E: Es como que no sé si es propio del ser Humano. Me parece que sí. No hay un problema con los animales. o capaz sí. ‘Problema’, por llamarle cuestión. Pero en el ser Humano siento que hay mucha más variantes. No es el general, son casos muy específicos. L: En un momento mencionaste que veías chicos que iban a la Eyeliner, que un día iban maquillados y terminaban siendo travestis. Esos chicos que son gays, eventualmente terminaron yendo identificados como mujeres, vos sentís que los gays son más propensos a ese tipo de cosas? E: Identificarse como mujeres? querer sentirse mujeres? Digamos que nosotros tenemos un lado femenino muy desarrollado, por eso nos gustan las personas del mismo sexo. L: Qué es ese lado femenino? E: El lado femenino, vamos a lo primitivo, ese que habla la mayoría de la gente, biológicamente esta el macho y la hembra, biológicamente, en los animales y en las personas, pero en los seres Humanos tenemos más variantes que se desarrollaron por diferentes cuestiones. Pero en el varón homosexual, hay un lado femenino que también se mete y está, aunque alguien diga que no o lo niegue, siempre está. L: Vos tenés en cuenta como una esencia o lo masculino como una esencia. Vos creés que desear a un hombre es algo femenino? E: Tiene que ver con la esencia femenina, en su mayoría. No a todas las mujeres les gustan los hombres, ni a todos los hombres les gustan las mujeres, por lo tanto no podríamos decir que es exclusivo de la femineidad que a nosotros nos gusten los hombres, pero culturalmente si. Por eso existen los prejuicios. Por eso en su mayoría a los hombres les atraen las mujeres y a las mujeres los hombres. L: Vos sentís que en la Eyeliner los hombres pueden desplegar su femineidad? E: Pueden explorar más, se sienten más libres de explorarla. Con menos miedo que los rechacen. También es una cuestión de gusto ese tema. Yo veo que se ataca mucho al que no sigue esos parámetros, si o si hay que ser femenino o hay que hablar agudo, es como que sino no entra en lo que seria la homosexualidad. Creo que puede haber homosexualidad en diferentes grados, 49 diferentes variantes. Así como te hablaba de estas personas que niegan, su realidad es que ellos quieren ser así y es una elección de cada uno. L: Vos pensás que los hombres en la Eyeliner son más femeninos en general? E: Si, son de neutros a femeninos. Estamos hablando de que no usan el estereotipo del macho rugbier. pero tienen esas características más marcadas. ——— Entrevistado B: E: Algunos tienen rasgos mas destacados de lo femenino, pero para mi eso no cambia nada. L: A qué te referís con lo femenino? E: En realidad yo no estoy de acuerdo con esa concepción de homosexualidad, porque me parece que en una relación homosexual se pueden trasladar muchos aspectos machistas en una relación gay que no necesariamente tiene que ver con el rol de activo/pasivo, sino que tiene que ver con destacar aspectos que supuestamente son de la mujer que tampoco es así. L: Lo pasivo no señala a la mujer, está separado? E: Exactamente. Además, por eso es una concepción machista. Porque ser histérico, o determinados rasgos que supuestamente son de la mujer. Eso es una concepción machista en la homosexualidad. L: Vos te sentís cómodo en la Eyeliner? o en otros boliches gays? E: Si, me siento cómodo. He ido a otros boliches, pero en la Eyeliner me siento más cómodo, es otro ambiente. Primero, es uno de los boliches que más vi héteros, y eso me parece genial. Y después me parece que no hay una presión, igual a veces si, pero la fiesta no impulsa vestirse de determinada forma o ser de determinada forma. De hecho, el slogan es “vení como querés”. Pero me parece que es uno de los más relajados, empezando por la seguridad. No son los típicos patovicas. Si estás en la puerta, les podés hacer chistes, está todo bien. Igual en ningún boliche gay 50 vi que reboten por como uno está vestido, como pasa en los boliches héteros. Eso está bueno. Pero es cierto que hay algunos boliches que hay una presión de vestirse de determinada forma, etc. L: Esta concepción machista que mencionabas antes de como tiene que ser el hombre, de roles, de como tiene que ser el hombre o la mujer, vos sentís que hay una relación entre orientación sexual y concepciones de género? Por ejemplo, hay muchas personas que piensan que si sos gay es porque tenés algo femenino adentro tuyo, como que ven una correlación ahí. E: Si, yo creo que hay una presión, en las telenovelas que incluyen personas gays siempre hay una caricaturización de lo que le gusta a uno, eso, rasgos que son femeninos puestos dentro de uno en la pareja de dos hombres. Para mi, se traslada al machismo que hay en la sociedad. Ser gay no te salva de ser machista. Hay un montón de aspectos machistas de la sociedad trasladados a una relación homosexual. L: Vos sentís que los hombres que van a la Eyeliner actúan diferente cuando están afuera de la Eyeliner o cuando van a otros boliches? en que sentido? E: Si, igual eso no es solo en un ambiente gay. Todos estamos en un espacio de fiesta, no actuamos como actuamos en el trabajo. Igual siempre hay algunos que exacerban más algunos rasgos que después los ves en otro lugar y nada que ver. L: Suponete, la Eyeliner te permite acentuar los rasgos que afuera del ambiente los disminuirías? E: Si, pero para mi lo harías inconsciente. Yo me saco más bailando en un ambiente gay. Supuestamente los organizadores de la Eyeliner dicen que no es un boliche, es una fiesta. Y hacen cosas para que parezca una fiesta, como cortar la música. Igual lo que paso el otro día no fue apropósito. Pero hacen cosas para que parezca más relajado, agregar bandas, agregar el castillo inflable. Uno se relaja mas. L: Sentís que hay reglas o códigos dentro de la Eyeliner? E: Si, en todos los lugares hay códigos. En la Eyeliner, por ejemplo, el que está ortiva, en general, pierde, porque todos están re buena onda. Podés terminar excluido si vas así. L: Sentís que hay estereotipos dentro de la Eyeliner? 51 E: Si, porque la Eyeliner no es una burbuja, es un lugar que puede promover ciertas cosas pero no es una burbuja. Los estereotipos mas sociales, si te vestís de determinada forma perteneces a determinada banda urbana, o cosas así. Yo he escuchado cosas que dicen amigos como ‘este es re wachiturro’, en base a como se visten. L: Es muy heterogéneo, hay muchas ondas diferentes. E: Exactamente, pero no hegemoniza algo en particular. La música por ejemplo, tampoco hegemoniza. L: Cuando vas a la Eyeliner, vos bailás? E: Si. L: Cómo la describirías a la fiesta? Es un lugar mas para ir a mirar a pibes? Conseguir chongo? O estar con tus amigos? Pasar bien el rato. E: Para mí es mas para pasar bien el rato con gente divertida, pero lo cierto es que uno puede ir para cualquier cosa. Pero el lugar no te baja linea. L: Cómo definirías ser hombre? E: En principio, que no tiene que ver con la orientación sexual. Podés ser gay y ser hombre, no tiene nada que ver. Después, me parece que es lo mismo que ser mujer. Con ciertos aspectos más físicos diferentes. No siento que ser hombre signifique tener que actuar de tal manera. L: Qué seria algo masculino? E: Es que para mi no existe el concepto, o no debería existir. Te puedo decir lo que nos venden como masculino: no llorar, no ser sensible, pero yo no estoy de acuerdo. L: A qué otros lugares vas a bailar? E: He ido a puerca y america y fiesta jolie. L: Comparado con la puerca, qué diferencias notas? E: Una de las más importantes es que note que sorprendió es que no te tocaban el culo en la puerca. En la Eyeliner tampoco es invasivo, es el ambiente. En la puerca te meten los estereotipos desde un principio: flaco musculoso, bailar bien. 52 L: Esta gente es consciente de los estereotipos? E: Yo creo que no. Creo que si se los charlas si, pero en el día a día no. Pero en Eyeliner esas reglas están mucho menos impuestas. L: Sentís que hay un esfuerzo de la gente que organiza la fiesta para que la gente se sienta cómoda, o es un efecto de la gente que va? E: Yo creo que la Eyeliner tiene eso, que están menos impuestos entonces la gente se apropia del lugar de otra forma. Es una construcción colectiva. Igual tiene sus cosas: es un negocio, la gente de la Eyeliner quieren ganar plata. pero es menos implícito. L: Veo que tenés tus posturas más definidas. E: Puede ser porque milito. En el PCR, partido comunista revolucionario. L: Hay militantes en la Eyeliner? E: Si, un montón. No sé si en los organizadores, pero hay mucha afinidad política dentro del público. ——— Entrevistado C: L: Vos como definís la Eyeliner? Qué se te viene a la cabeza? E: La gente lo pinta como algo que van y es todo libre, que vale cualquier cosa. L: Sentís que eso se cumple? E: Yo tengo 31, conozco todo tipo de lugares. En Eyeliner el alcohol es barato y la gente va a descontrolar un poco mas, sin caretaje, en el sentido de que no está presente la parte económica. Va gente de un nivel socioeconómico un poco mas bajo. Pero siento que es un lugar de moda y en el futuro va a venir otro lugar de moda para remplazarlo. L: Vos hablás de que la gente no es careta. Cómo es el publico de la fiesta? 53 E: Yo veo como gente mas desprejuiciada y no esta pendiente del tema económico. Lo sexual esta presente en los dos lugares, pero veo que te avanzan y no tienen problema con qué dirán. L: El tema estético? E: Hay onda muy alternativas, si lo comparo por ejemplo con otro tipo de lugares. Ho hay tanto cuerpo gimnasio, no les preocupa el tema de la ropa como algo de posicionamiento económico, sino como identificación de un grupo social: mucho tatuaje, mucho más color, más urbano. L: Vos estás de novio ahora? E: Yo estoy saliendo ahora por ejemplo. L: Claro, vos cuando vas que vas a hacer ahí? vas a divertirte? vas a levantar? con qué objetivos vas? E: La situación económica hoy en día esta jodida, y es más barato salir a Eyeliner, y es mas divertido. L: Por qué es divertido? E: Porque la gente es mas amigable, hablarles, o tal vez empezar una charla no en el sentido de levantarte a una persona, pero para romper el hielo, algo más social, más ameno. Me siento cómodo ahí. Rheo no me gusta. Uno por el precio de las bebidas. Para eso, me parece que no se justifica. Es expulsivo porque la gente esta muy consiente de la parte económica. Tal ve es gente que no tiene plata. Ahí hay un mensaje: vos sos bienvenido pero después para divertirte tenés que poner plata. Otra cosa que me jode mucho es el tema de la diferenciación de los VIPs: me parece una ridiculez que haya. Es como un mini country privado adentro del boliche. L: Vos cuando vas a Rheo por qué vas? vas con tus amigos? E: La última vez que fui fue hace como un año. L: Pasando más a genero. Para vos qué significa ser gay? E: Yo lo veo por como son las cosas: un hombre que le gusta otro hombre. que le gusta romántica/amorosamente, no es solo el plano carnal. L: Vos sentís que hay una relación entre ser hombre y ser gay? 54 E: Me parece totalmente compatible. Me da un poco de risa eso que la gente piense que ser gay significa actuar de tal o cual manera. Eso de que tenemos algo de femenino, algo de delicadeza, me parece una visión bastante machista del tema. Yo tengo muchos colegas, yo trabajo en un ambiente recontra machista y excluyente con todo el concepto de lo femenino y yo tengo una adaptación perfecta. Trabajo en una cárcel. Me quede pensando un poco de que tiene que haber algo de porque el gay tiene una sensibilidad un poco con respecto a las artes, por la cantidad de artistas que se inclinan por gente del mismo sexo. Es algo que me deja pensando. L: Vos cómo definís la masculinidad o la femineidad? Porque necesitamos el concepto de género? para qué sirve? E: Mira, yo veo la diferencia hombre mujer a través de la genitalidad. L: Y una persona trans, por ejemplo, se identifica de un género pero tiene genitalidad de otro. E: Eso es diferente. Género es diferente a sexo. El género es una construcción más social, más cultural. El sexo es genitalidad. L: Una persona transexual puede tener un genero y un sexo distinto. E: Claro. L: Vos cuando hablás de los artistas, sentís que hay una correlación. Pero vos sentís que ser gay incide en como vos te mostrás al mundo en tus practicas cotidianas? E: Me parecen prácticas diferentes. El plano sexual siempre la vida de uno no esta separada en lo sexual, lo cultural, etc. todo se relaciona entre si un poco. Pero es algo que siempre pensé porque gran cantidad de artistas la mayoría son. No creo que el hecho de que te guste un hombre o una mujer, que eso sea un determinante en voy a ser peluquero o chofer de colectivo. Yo creo que el tipo de persona, porque la sociedad ahora cambio mucho. Capaz antes la orientación sexual si era un determinante de ciertas cosas, al gay afeminado salí así, tiene que ser peluquero o lo que sea. Y la lesbiana tiene que tener una agencia de remises por decirte algo. Yo creo que hoy en día, por suerte la sociedad maduró bastante, más que nada en lugares urbanos. Yo conozco mucha gente del interior que termina viniendose para acá, que se están escapando de algo, del prejuicio. 55 L: Vos sentís que el prejuicio fuerza a algunas personas a actuar de cierta forma u otra? E: Me parece que… yo no te digo que por esta ley que sacaron porque la sociedad va madurando ciertas cosas, mas allá de la ley. Como que se desmitificó el concepto de la mariquita o la tortillera camionero que hoy en día uno se refiere así y se ríe, pero en su momento era una cosa muy jodida. L: Entonces en lugares donde todavía están esos estereotipos, la gente los adopta, consiente o inconscientemente? E: No los adoptan, yo creo que se sienten denigradas en ese sentido. Ademas hoy en día, vivimos en una época donde esté internet y la forma de conectarse es diferente. L: Volviendo al espacio de la Eyeliner, vos sentís que los hombres que van ahí actúan diferente cuando están adentro que cuando están afuera? E: No, yo creo que no. Es gente de ambiente que se conocen unos con otros. Por ejemplo, el sábado están ahí pero el día anterior fueron a la fiesta bipole. Gente que se conoce, que al vivir en una ciudad tan grande y tan inclusiva, porque buenos aires es bastante amigable, a pesar de todo y de todo lo que digan, con todo este tema. Comparado con ciudades como Santiago, que todavía está en un siglo pasado. L: Suponete, en la Eyeliner, vos sentís que hay reglas? En el sentido de que, si vos venís acá, entendé de que se trata el lugar. E: Siento que hay reglas que están en el denominador común de la gente. No te vas a poner a tener sexo en el medio del boliche o te vas a poner en bolas. Igual yo creo que no te dirían nada si te pones en bolas en la Eyeliner. Pero es una regla en el consiente de la gente, que dice hasta acá llegó mi límite. Pero la gente que tiene algún complejo, o va a criticar, no se va a sentir integrada y se va a terminar yendo sola. L: Ellos tiene un lema, que es: “Vení como quieras”. Vos sentís que se cumple? E: Yo creo que si. Dentro de todo, igual es un lugar de moda. Yo me acuerdo hace 10 años, yo tengo 30 años, en ese momento, el lugar que era la Eyeliner que todo el mundo iba era Amerika. 56 Hacían lo mismo. Comparado con palacio alsina, que sería Rheo ahora. Y ahora Amerika es prácticamente un lugar hétero y palacio alsina no existe. Y después surgió la Plop, puerca, y bueno. L: Vos fuiste a la pPlop, Ambar, esas? E: Si, fui, ahora no me gustan tanto, pero iba. No me gustan porque se popularizó bastante. Se hizo bastante popular pero cuando se satura de gente que va por el trago barato y no por el tema de vamos a divertirnos, vamos a joder. Ahí se distorsiona mucho. Cuando se popularizan demasiado los lugares, pierden algo. A mi un lugar que me gusta que no esta tan publicitado es la whip. L: Vos sentís que hay un estereotipo que va a la Eyeliner? Un tipo de gente particular que va ahí? E: Si, yo creo que si. En todos los lugares siempre hay un estereotipo de persona, el lugar siempre apunta a un público. Si no te ajustan al estereotipo de ellos, si no pagás, no te vestís así, no te vamos a mirar y si querés entrar pagá, querés VIP, pagá. En cambio en este lugar, tenés de todo, tenés los típicos chabones que van con los expansores del oído, mucho tatuaje, skaters, de todo tipo de tribu urbana. Tribus urbanas que al otro lugar ni los mirarían o les darían vuelta la cara, van ahí. L: Yo al principio te preguntaba tus ideas de ser hombre. Vos te identificás como hombre y eso pasa por una cuestión de genitalidad. Entonces esta por un lado lo hombre y lo ser masculino. Vos pensás que puede haber mujeres masculinas y hombres femeninos, por ende, lo masculino no está pegado al hombre. Entonces que sería lo masculino? E: Que pregunta rara. Como defino lo masculino. Yo creo que lo femenino en si lo determina cada persona, un poco también. Está muy ligado el género al sexo, por la construcción social, pero creo que son cosas que van de la mano, pero creo que es un concepto muy personal. L: Vos sentís que lo femenino en la Eyeliner está bienvenido, celebrado? E: Yo creo que ellos van más allá, yo creo que ellos no le dan importancia a lo femenino, masculino, van más allá de eso, van con un concepto de inclusión. Igual, una trans va a Rheo y lo verían como una cosa medio medio, de acá no pertenecés. En cambio en la Eyeliner, sería una persona más. Va más allá de lo personal de cada persona a lo colectivo. 57 ———— ———— Entrevistas Rheo: Entrevistado X: L: Contame cuán seguido vas a Rheo, en general. E: Todos los fines de semana. L: Porqué vas a Rheo? E: Por lo general me siento más cómodo en ese lugar. L: Qué tiene Rheo de particular? Qué te hace sentir bien de Rheo? E: Por lo general, hay pibes más lindos que en otros lugares si bien sé que es más divertido Plop y todo eso, en Rheo termina siendo más un club, que de por si terminás conociéndote con la gente que va. L: Vos terminás eligiendo un lugar que no te divierte tanto pero vas ahí por que va la gente que conocés, y eso es lo que buscás. E: Aparte, lo que tiene es que hay un momento de la noche que podés ir a bailar, y otro que podés ir afuera a los sillones que podés ir a charlar con gente que conocés que capaz si bien es más divertido Plop porque siempre bailás, no podés hacer eso de charlar ahí. L: Esa imagen que tenés vos del típico pibe que va a Rheo, cómo es ese pibe? Podés explayarte todo lo que quieras. E: Hay un par de tipo de pibes diferente, pero con esos no te terminás relacionando. Por lo general, termina habiendo un grupo de pibes que termina siendo más de un ghetto. Es un contexto más conocido para uno que ir a un lugar más heterogéneo. Son chicos de tu facultad o de una facultad conocida, o si empezás a hablar siempre tenés gente conocida en común. De la FADU, de la UCA, 58 de San Andrés, hay un estándar más normal de gente que va a ese lugar, que sabés que van a ese lugar. Mis amigos fueron 2 veces a Plop y no les gustó. Los pibes que van a Rheo son pibes que se cuidan más, capaz, le dan mas importancia a la ropa que se están poniendo. A Rheo no vas de bermuda y musculosa. Das la impresión que estás muy desestructurado en un lugar que no es muy desestructurado. De por si, es como irte de vacaciones a punta del este o mar del plata, que la gente que va a punta va a mostrar y la gente que va a mardel plata les chupa más un huevo. L: La gente que va a Rheo va a mostrar? E: A mostrarSE, porque cuando estás parado charlando te da la posibilidad de ponerte a mirar más a las personas. L: Entonces hay reglas, códigos, como vestirse. Cómo sería otra regla? E: Por lo general, en Plop si vas y estás medio borracho te chapás a alguien si o si. En Rheo, si conocés el ambiente no lo hacés. Capaz lo hacés cuando sos nuevo, pero después no porque como siempre te encontrás con gente que conocés, siempre se terminan enterando lo que estás haciendo. Y al gay le gusta mucho el gossip, el chisme. Entonces en la semana todos se enteran que hiciste el fin de semana pasado. Si vos te levantás a alguien en Rheo por lo general, a lo que llegás es a sentarte en el sillon y pasarse teléfonos, pero no te re chapas matándote como harías en Plop. L: Entonces es un público más heterogéneo u homogéneo? E: Antes era más homogéneo, ahora capaz se empezó a mezclar un poco. Igual tampoco tanto. L: Quiénes son las personas que se agregaron al espacio? E: O sea, nunca hablé con ellos, pero son chicos que capaz les gusta la electrónica, que los vería más yendo a bailar a Pacha. L: De qué edad son? E: Hay pibes de 22, como también hay gente más grande. Eso tiene Rheo, va mucha gente re grande, en otros lugares mucho menos. Están los típicos pibes bolados que nunca van a madurar y se levantan pendejos. Que espero que no me pase cuando tenga 35. L: Vos hablás de pibes lindos, de universidades privadas, o clase media/alta. 59 E: Algo que lo diferencia de Plop es que hay una cultura que vendría a ser que en Plop es de ir y bailar y cagarte de risa, y en Rheo hay una subcultura de este gay pseudo famoso, boludo, conocido por todos porque te hace entrar y te da precintos para el VIP. Entonces hay mucha gente que se cree lo más por tener contactos y conseguir VIPs. Hay gente que se cree tanto el que lo da que quien lo consigue. Terminan siendo semi estrellitas, que entrás a se Facebook y tienen miles de amigos. Creo que de alguna manera el gay se lo toma mucho mas enserio salir e ir a bailar. Mis amigas van a Jet, por ejemplo y van siempre ahí, pero no creo que Jet las esté condicionando, pero el gay pero ir siempre a Rheo o la Plop, te condiciona. Te convertís en un chico Rheo, o un chico Plop. Pasa a ser parte de tu identidad. me pasa que a veces voy a Plop y algún pibe que ponele que conozco se me acerca y me dice: no estás en Rheo, relajate. Como que aunque no te dés cuenta estás en una pose que capaz vos no sentís que estás pero los demás la sienten. L: Vos cuando vas a Rheo, vos bailás, estás con tus amigos en la parte relajada, vos como ves a la gente en general? Van a hacer lo mismo que vos? E: Hay un grupo pequeño que baila, y otro grupo que está entre ellos tomando y hablando. La mayoría va a socializar, hablar entre ellos y otros grupos de grupos. Termina pasando que terminás conociendo gente de otros grupos y terminás teniendo preboliches con gente de otros grupos. Porque capaz te gustó uno y lo querés ver en el pre. Es un intento de levante, es parte de eso. Es un levante más organizado. L: Ahora pasamos a preguntas más de género. Vos creés en los estereotipos de los gays? E: Si, creo que hay gente que cree tanto en eso que te lo terminás creyendo vos. Un amigo me dijo cuando empecé a salir, que ser gay se aprende. Hay cosas culturales, que cuando vamos a pre todos sabemos y nos reímos del mismo chiste. La gente que va a Rheo es gente de zona norte, y se están contentos de ser identificables de zona norte. Creo que la gente que va a Rheo se siente orgullosa de ser identificable de ir a Rheo. Yo creo que lo que pasa a veces en Rheo es el síndrome mcdonald’s en el mundo, como que a veces vos te vas de viaje a Beijín, lo que sea, y te da paja ir a comer a un lugar que no conocés, no sabés que esperar. Entonces vas a mcdonald’s porque sabés lo que es. 60 entendés a lo que voy? Voy a Rheo y son todos de San Isidro, Recoleta, todos los barrios pudientes de buenos aires. Y además te corrigen cosas a veces, como que no te permiten desviarte de esa cosa. Por ejemplo, hace poco hablando con uno yo digo "chabones", y el pibe me corrige y me dice: "nosotros no decimos chabones". y yo le digo, "porque me incluís a mi dentro de nosotros?" yo no soy un nosotros. L: Porqué vos lo representás a él, o él siento que vos lo representás. E: Pero eso es raro, uno se termina identificando con imágenes, con estereotipos, que son sociales, mas que económicas, son sociales. Socialmente podés estar identificado con un grupo que no estés identificado socialmente. Ahí hay mucha gente que le pasa eso. Porque también hay mucha gente del interior que va a Rheo, y se identifican con un grupo a pesar que muchos en ese grupo no los consideren como que pertenecen en el. L: Con qué se identifican ellos? E: Se identifican más con grupo de su facultad, y terminan teniendo determinadas cosas, como que van a comer a tal lugar, se juntan en le "pain quotidien". Me parece una pelotudés. Mi vida gay consta capaz de un grupo gay que no es tan grande, que no vivimos muy cerca. Pero cuando ellos salen con sus grupos gays, las cosas que hacen en la semana, siempre están en un ghetto, siempre están entre gays. Yo al vivir más lejos, yo me relaciono con gente de mi club, amigos míos del colegio, y ellos no, solo se relacionan entre ellos. E esta teoría mía es que muchos gays les terminó pasando que cuando tuviste que decir que eras gay, muchos sintieron la necesidad de alejarse de sus grupos de amigos de toda la vida. Por ejemplo, ubicás a XXXX? que él vive por acá, mis amigas son de su club de toda la vida. XXX es gay desde que tiene 17, gay de salir, que lo conocía todo el mundo, y mis amigas se enteraron primero que yo era gay antes que él. Y mis amigas se enteraron cuando XXX y yo teníamos 23. Él se paso años y las minas nunca supieron, le perdieron el rastro por 4 años, no aparecía. Aparecía en cumpleaños. Como que tenía vida aparte. Tenía 2 facebooks. Eso es algo muy común que les pasa a los gays. Muchos chicos como que se reinventan de nuevo. Y empezaron a negar a sus grupos por miedo al rechazo. Yo lo digo porque a mi me pasó. Es un 61 cambio gigante para ellos y a muchos les cuesta así como cambiar de vida. Yo por ejemplo, la primera vez que estuve, onda estar estar, con un pibe me largué a llorar. Porque se me vino a la cabeza, que iba a estar dentro de un par de años, iba a estar con un perrito, de esos chiquititos. Mirá si tenía eso metido en la cabeza. Iba a tener uno de esos perros chiquitos blancos caminando re loca por la calle de la mano con un pibe por Palermo. Tenía ese estereotipo. Y cuando empecé a salir con gays pensé que mis amigos iban a tener ese estereotipo de mi. Y hubo un tiempo largo, tipo meses, que amigos que veía 4 veces por semana, los empecé a ver menos hasta que los dejé de ver. Y me mandaban mensajes y estaban preocupados. Y lo que me pasaba era que me daba vergüenza contarles que estaba saliendo y que era gay. Y creo que a su vez, como yo los negué pero después pude contarles y todos me aceptaron, lo viví muy rápido. Empezar a salir con pibes y empezar a salir a bailar y poder decirles a mis amigos y a mi familia. Fue todo en un año. Pero a otros se les hace mas extenso. Y cuando tardás más, como que forman un grupo desde cero. Que es un grupo al que le podés contar cosas que a tu grupo de siempre no les podés contar. Y como que va más allá de ser amigos o no. Es algo más profundo, son como familias. L: Vos hablabas de cuando empezaste a involucrarte con otras personas que eran gays, ese estereotipo ahora cambió, a qué? E: Ahora siento que hay muchos estereotipos de gays. Tantos como de heterosexuales. Y yo sigo cifrado por mi visión de como me crié. Por ejemplo, en el laburo, hubo un conflicto con una persona que vino a hacer una consulta, y se puso loco y se puso a decirme “puto de mierda” y yo sabía que no era porque el me identificó como gay y por eso uso ese insultó, usó esa frase porque quería herirme, y yo sentí un poco mi hombría atacada. Ósea a mi también me pasa, yo también sigo teniendo esos estereotipos y percibía que estaba tratando de atacarme por ese lado y sentí que me estaba diciendo que yo era menos hombre que él. L: Vos sentís que ser gay involucra un cambio o una serie de prácticas específicas para los gays? Vos sentís que si fueses heterosexual tu forma de ser, tu personalidad sería diferente? E: Si, porque era diferente hace 2 años. De por si, me visto diferente. 62 L: Porqué lo cambiaste? E: Lo cambié sin querer, sin darme cuenta. Antes por ejemplo no usaba chupines. Pero es una boludés identificar el chupín con lo homosexual, porque hay heterosexuales que los usan. L: Pero las modas cambian también. Hace un par de años los heterosexuales tampoco se ponían chupines y ahora es súper común. E: Antes capaz no importaba qué me ponía. Me parece que antes me chupaba un huevo cómo me vestía, y ahora si le doy importancia. L: Qué opinás vos de esta idea en la sociedad que ser gay significa menos hombre? E: Estoy totalmente en contra y me da bronca cuando algunas personas sacan a la luz esa idea. Piensan eso porque son ignorantes. Me pasa en mi trabajo, son todos chicos de nuestra edad (24) y yo los vivo jodiendo con cosas pero en joda, por ejemplo cuando pasan los chicos les digo que lindo que estas, y jodas así, pero son chistes que empezaron ellos en joda a partir de su propio miedo a la homosexualidad y terminaron quedando. Pasa mucho que cuando sos gay todos los heterosexuales quieren que vos les digas quién es gay, como si vos supieras. L: Estas ideas que tenés vos, sentís que están representadas en la gente de Rheo? Decís que piensan como vos? E: Yo siento que dentro del mundo gay se bastardea mucho a los pasivos. El pasivo ya está estereotipado. Dicen que la loca es pasiva. Y muchas veces se relaciona la masculinidad con el rol sexual. L: Porqué sentís que la gente de Rheo bastardea a los pasivos? Qué están tratando de hacer con eso? E: Porque también vienen de una sociedad más machista, más patriarcas. Son todos pibes que se criaron en familias súper católicas, donde el hombre es el que manda y la mujer es la que sirve, la que esta en la casa y la que lava los platos. y de alguna manera lo terminan relacionando al rol sexual. Yo no lo considero así. como hay gente pro feminista, yo soy pro-pasivista. 63 los hombres que van a Rheo van a cuidar su imagen de hombres masculinos. hay menos sulfura porque hay algo en riesgo que quieren proteger. ——— Entrevistado Y: L: Cuándo fue la última vez que fuiste a Rheo? Cada cuánto vas? E: El sábado pasado. Voy todas las semanas, todos los findes. L: Con quién vas? E: Con amigos, grupos de la facultad y amigos que conocí por internet o por aplicaciones obvias del género (grindr). L: Cómo es la juntada? Hacen pres? Se encuentran allá? E: Variado, por lo general nos juntamos en algún lugar tipo previa, sea casa o bar. L: Vos te sentís comodo en Rheo? Qué tiene Rheo de particular que hace que vos te sientas cómodo? E: Siento que tiene, van perfiles de hombres que me gustaría conocer. Me parece que tiene a nivel onda, o estilo, me identifico más con eso. L: Cómo describirías a estos hombres que te gustaría conocer? E: Por lo general me gustan más grandes. Ideal sería 28 años. No se si me interesa a nivel económico, pero si que sea grande y tenga cierto estilo, como la vida más armada. No es que voy a Rheo a conocer a alguien, pero inconscientemente vas buscando conocer a alguien. Siento que hay mas chance de encontrar a alguien que me gusta en Rheo que en otros lugares. L: Cuándo vas a otros lados, cómo vas? E: Voy con otra mentalidad, a cagarme de risa con amigos. Y ponele que conozco a alguien sé que no va a pasar más que eso. 64 L: Vos cuando estas en Rheo, que vas a hacer puntualmente? Vas a hablar, a sentarte a hablar con amigos? Vas a mirar pibes, a encararlos? E: No, encarar nunca fui a encarar a nadie en mi vida. Siempre me encararon a mi. Me daría mucha vergüenza. Voy por lo general ya de previa voy que vine tomando y sigo tomando. Voy a estar con mis amigos. Y obviamente mirás o buscás algo. Mi idea es que trato de mentalisarme, siento que cuanto más buscás algo menos te sucede. Pero estoy atento de que si alguien me mira estoy atento para ver si me gusta o no me gusta. En Eyeliner eso no se me pasa por la cabeza. A Eyeliner fui una sola vez. También voy a Plop, que lo veo más como Eyeliner. L: Hablando de la gente que va a Rheo que no sos vos, que pensás que van hacer ellos? Con que mentalidad van? Van con tu actitud? E: Siento que hay gente para todo. Hay un grupo que son los típicos que van de levante, y gente que no. Yo creo que cuando uno va a un boliche va a hacer sociales siempre. L: Vos creés que hay estilos particulares en Rheo? De gente… E: Veo perfiles, gente más modelos, gente que va a mostrarse. Hablando de tipologías de gay, ese perfil más lindo, más musculosos. Todos tienen en común esas características físicas que te resaltan, que son lindos. L: Ves algo en común en la gente? E: A nivel indumentaria veo mucha producción, calidades. L: Cuándo vas a Rheo estas en el VIP o estás abajo? E: Prefiero estar con la gente abajo afuera. Pero en general tengo precinto, igual no siempre. De última si lo quiero lo pago. Pero en general no lo pido porque no me gusta el VIP. Pero hay veces que me consiguen y vamos todos. L: Porqué no te gusta el VIP? E: Me parece totalmente al pedo. Me ponen incómodo esa cosa de VIP selecto. Pero capaz es más por temas personales. Siento que todo fluye mejor abajo. 65 L: Vos te identificás como gay, no? Tenés 22 años. Todos saben que sos gay? E: Si, no pienso en eso ahora. Ya no. Hace 2 años que empecé a salir, pero no salía tanto. Muy de vez en cuando. El año pasado fue como más explosivo. Igual la relación con mis amigos héteros, de antes no cambió. Sigue siendo la misma relación de siempre. Me re aceptaron. L: Vos sentiste alguna vez por ejemplo, esta relación que la gente hace en cuanto a la masculinidad y ser gay. Eso es algo que vos pensás o es algo que te afecta? E: Mirá, yo tengo el prejuicio que por estudiar indumentaria debería ser tipo loca, entendés? menos masculino que otros. Es un conflicto que tuve cuando decidí cambiar de carrera. Y hoy en día cuando me relaciono con un chico es algo que no entienden, es algo que me lo cuestionan. Es un preconcepto que la sociedad instaló hace mucho tiempo. Entre los gays no creo que soy discriminado, pero tienen esa idea de que tengo que ser de tal manera, la típica mariquita. Es un rol establecido, que creo que yo no soy así. A lo mejor si y no me doy cuenta. L: Los gays que actúan de manera femenina, porque sería? E: Es algo psicológica, identificación con los padres, algún conflicto. Por ejemplo, yo tengo una hermano mellizo, y en el colegio él era tipo el malo, y yo siempre tuve la obligación de como estar a la par de él. Siempre me pregunto qué hubiese hecho si no lo hubiese tenido como hermano, si no hubiese tenido que identificarme con él. Capaz sería una loca. Eso me lo cuestioné bastante. L: Porque en el ambiente gay está mucho de eso, esta la figura de “la loca”. Sentís que puede haber locas heterosexuales? Esa esa femineidad puede ser adoptada por los héteros? o es algo particular de los gays? E: Creo que es en el ambiente gay. L: Hablando de las personas trans, los hombres que deciden convertirse mujeres, vos decís que eso está afectado por ser gay? E: No creo. No es algo en lo que pienso mucho. L: Cómo ves el espacio de “las locas” en Rheo? 66 E: Es un subgrupo. no lo veo relegado, está, se mueve mucho entre ellos. Es lo que yo veo, percibo. No lo sé igual. L: Vos sentís que hay un tema de status ahí? E: Ponele que si, pero no se si es tan así. Capaz la persona loca no lo siente así. Capaz piensa que es lo mejor del boliche y el resto son un desastre. Desde mi percepción, siento que esas personas están un poco abajo. Yo en mi carrera estoy con personas demasiado locas, a mi me generan un poco de rechazo. Capaz porque me toca algo a mi. No es rechazo: no es que no te hablo, te aíslo, pero capaz no tener relación con vos. A mi me pasa eso con ese tipo de persona. L: Entonces cuando vas a Rheo, sentís que estás con los tuyos, digamos. E: Si, trato de vincularme con gente como yo. L: Vos sentís que la gente que va a Rheo es igual adentro que afuera? O que algo activa algo dentro de ellas? E: Para mi, actúan igual adentro que afuera. Obvio que para mi, siento que la gente se libera más, pero porque es un boliche. L: Vos sentis que hay reglas implícitas en Rheo? Cómo que si vos venís acá, se entiende que tenés que venir de tal manera, etc.? E: Obvio, si vas a un lugar así. Uno siempre va a caretearla, es como entrar a la cancha. Uno siempre va a vender un producto y ese producto es uno. Todos ahí están jugando, todos son productos. Yo te digo, capaz suena raro, pero a mi también me gusta jugar a ese juego a veces. Es un juego superficial de ir ahí, mostrarse, esperar a que alguien te diga algo lindo. O sea, yo siempre fui un pibe de devoto, muy de barrio, con los pibes héteros del barrio. Acá ese juego ni existe. L: Vos sentís esa presión de que si voy ahí, la gente va a esperar algo de mi. E: No se si la gente espera algo de mi, pero yo querer generar algo. L: Esa presión de algún lado viene. Te la predisponen. Vos dirías si o no a la pregunta de vos sentís que el hecho de como la gente va a ese lugar y qué hace la gente en ese lugar condiciona cómo vas vos y qué hacés vos ahí? 67 E: Creo que no. Creo que la gente me condiciona en cualquier lugar. Creo que me comporto bastante igual. ——— Entrevistado Z: L: Cuándo fue la última vez que fuiste a Rheo? Cada cuánto vas? E: Hace 2 semanas. Si puedo voy todos los fines de semana. Sino, fin de semana por medio. Me gusta. L: Si vas a otro boliche, cuál es? E: Tiene que ser alguno de los que organizan estas fiestas. Rheo o Human. Human me gusta más. Pareciera que es otra música. L: Con quién vas? E: Con un grupo de amigos. L: De dónde los conocés? E: Conocí a uno. Y ese me integró a su grupo de amigos. L: Hacen salidas que no sea a Rheo, Human? Los ves en la semana? E: Hacemos salidas entre semana. Por ejemplo, los jueves, nos reunimos a comer y quedamos para el fin de semana. Previamente antes de salir a bailar hacemos el preboliche, con alguna comida o directamente… L: Cuando vas a Rheo, tomás alcohol? E: Si, me gusta vodka con naranja, champagne. L: Cuando vas a Rheo, qué vas a hacer puntualmente? Vas a divertirte con amigos, a levantar pibes? E: Me gusta estar hasta cierta hora estar con mis amigos, después me gusta quedarme solo y mirar. L: Qué hacés cuando estás mirando? 68 E: Me fijo mucho en la persona. Mirando a la persona como que sabés cómo es. Le analizo desde la sonrisa hasta como baila. Soy de los que encaro. Voy y le hablo. Siempre termino dándome cuenta. No me gusta quedarme con que veo si me mira. L: Ese encare, cómo se produce? E: Amigable. "hola como estás". "qué tal la estas pasando". generalmente recibo distintas reacciones. Mitad buenas y mitad malas. La mayoría de las veces termina siendo algo buena onda y nada más. L: Cuál sería tu objetivo? E: Mi objetivo es saber si me siento a gusto. Pasarnos números, conocernos, pero muy poco se da. L: Vos estás con tus amigos pero cuando vas a buscar a un pibe vas con el objetivo de conseguir un numero, y después decís chau nos vemos otro día? o terminan chapando ahí? Te lo llevas a tu casa? E: Se puede dar de todo. Yo no me cierro a nada. Pero lo ideal sería que si la persona me calienta, entonces si, llevármelo a casa. L: Y después es una cosa de una sola noche? o generar contacto y seguir viéndose? E: Muchas veces nos fijamos qué paso esa noche y si hay algo que no nos gustó, lo terminamos ahí. A veces suelo dar otra oportunidad. Si veo que la otra persona respondió. L: Estos pibes que vas a encarar, cómo es ese pibe que te gusta para encarar? Cómo lo describirías? E: Un tipo normal, masculino. L: Qué significa normal masculino? E: Que no parezca puto. L: Y un puto para vos como sería? Estás hablando de "la loca"? E: Si, la vestimenta. Me gusta que se vistan sport elegante, no se como decirlo. No tengo drama con la edad. Sobre todo me dijo en tipos con perfil bajo, personas que no son conocidas dentro del ambiente. No me gusta porque están los del ambiente en el VIP y que se yo. Me di cuenta por que ya me metí, no me gustó y me salí, de conocerlos. Porque todos están, todos se conocen entre si, estás en la boca de ellos. De que estuviste con este, con el otro. Hay mucho chusmerío. Prefiero 69 personas con perfil bajo, pero a la vez esas personas tienen que tener una actitud, una chispa, no es alguien normal que se queda con algo. Tiene que ser alguien que aspire a cosas. L: Qué te guste físicamente no es suficiente. Te tiene que parecer interesante. E: Si, que haga actividades, que tenga un día entretenido. Si estoy trabajando, en el gimnasio, leyendo. No me gusta que me cuenten en el chat que están viendo tele. No me guste que esté tirando en la cama. L: Más allá de los pibes que te gustan a vos, que vas a mirar, cómo sentís que es el perfil de las persona que va a Rheo en general? E: Hay de todo, lo que menos hay es lo que me gusta. De pronto aparece esta aplicación Tinder y noto caras nuevas que me gusta más. Ya tuve algunas citas. Uso Grindr también pero me doy cuenta la diferencia. Grindr es para garchar, Tinder se puede dar algo más. Se ve gente más sana. Igual yo no soy ningún santo, digamos. L: También usas Grindr, más allá del propósito, vos le sacás el provecho a Grindr. E: Sisi, de hecho he sacado amigos para ir a jugar al tenis, por ejemplo. No todo es garche. Pasa que tiene que ser mutuo. Si no es mutuo, la otra persona se puede fijar mucho en vos y vos no en ella y… L: Entonces, cómo ves a la gente que va a Rheo? Son gente que ves en Grindr o gente que ves en Tinder? E: Y la mayoría que sale todos los fines de semana como yo. Gente que las ves siempre y sabés como son y les vas haciendo una equis. No me gusta la gente que veo siempre en boliche. L: Pero se te ocurre alguna descripción para esas personas? E: Va gente linda a Rheo. No fui a otros boliches pero porque me dijeron "no vayas a este lugar o a este otro. son feos, no te van a gustar". Yo confío que en Rheo está la gente más linda. Pero me gustaría ir alguna vez por cultura general. L: A qué otro boliche fuiste alguna vez? 70 E: A Amerika fui una vez en mi vida. A Dorothy, pero es lo mismo que Rheo. Después fiestas privadas. Me gustaría ir a fiestas héteros y yo no me animo ir solo. L: Qué es lo que te tienta de boliches héteros? E: Porque también quiero relacionarme con esa gente. No quiero que sea todo gay. L: Pero si vas a un boliche hétero no vas con la idea de conocer a alguien o chaparte a alguien? E: No, no voy con esa intención. Pero se ha dado alguna vez que fui. Como que encontrás gente a veces. En realidad, a veces si voy con la intención de conocer a alguien, se puede dar. Hay mucha gente que no sale, que no pisan el boliche gay. L: Vos encarás en boliches héteros? E: Sabés que casi me animo la última vez, pero no. Después vi que el chico se acercaba a una mina. L: Te da cosa el rechazo? E: Como que de pronto sentí que pasaba algo y después no. Me confundí. L: Entonces en Rheo te sentís cómodo? E: Sisi, yo me siento como en casa. de hecho puedo ir solo. La última vez fui solo, pero fue porque ninguno de mis amigos salió. L: Qué tiene Rheo de particular que a vos te hace sentir cómodo? E: Que ya conozco mucha gente, entonces llego y saludo y como que es imposible quedarme totalmente solo. Hay gente buena onda. L: Vos sentís que cuando vas a Rheo, te trata de levantar? te mira y se acerca a vos? E: A veces no se me acerca nadie. Capaz yo no doy el lugar. Con mi actitud, mi postura. No me fijo en la gente que no me gusta. L: Cuando hablás de postura, a qué te referís? E: Que estoy aquí, que estoy allá, que no dejo que nadie se me acerque por todo lo que me muevo en el boliche. L: Los chicos que vos ves y te gustan, qué tipo de postura es esa? 71 E: Sus movimientos masculinos, su imagen de masculinidad. Quizás conversando notás sus expresiones. Soy observador. A veces llega un momento que digo no me gusta nadie, y entonces me voy temprano, tipo 4 de la mañana. L: Cómo describirías a esa gente que no son los pibes que te gustan? E: Hay gente media boluda, mucha gente linda que por la forma de ser, gente que alguna vez te saludó y no te saludó nunca más. Gente careta. Gente que fue mala onda. Gente que te mira tanto que ya no te gusta como te mira. Rechazo. Te puede causar rechazo si te mira tanto. Que te mira con deseo. Las miradas te dicen mucho y te incomodan. Gente que no sabe medirse. Igual a veces me molesta su presencia, porque no cambian, siguen siendo las mismas personas. Igual yo ni me meto. Ni les converso. L: Esos pibes que no te gustan, puntualmente pensás en los pibes que no te gustan. Qué tienen ellos que te causa rechazo? Tienen algo en común? E: Actitudes, notás en su forma de acercamiento, que son maleducados, mala onda. Gente que de pronto viene y te empuja y no se disculpa. Gente que se hace la estrella. Puede ser alguien muy lindo, o una loca. L: Vos sentís que hay algo en el medio entre masculino y loca? O son dos polos opuestos? E: Mirá yo incluso tengo amigos que son medio amanerados y los quiero y los abrazo como hermanos. Pero es gente buena. Al igual que hay gente linda y son tarados. Como que de pronto te puede atraer alguien por los ojos, pero lo empezás a conocer por el chat o cuando te pasás el whatsapp, te das cuenta si la persona te hace sentir a gusto, si ambos ponen de su parte y no es algo forzado. L: Vos sentís que la gente que va a Rheo va a hacer lo mismo que vos? E: Me acuerdo que a mi ex lo llevé a este boliche, estaba empezando también a llevar una vida gay, y se siento muy incómodo por las miradas de la gente. Él no las conocía, como el gay llega y te mira fijamente. A mi me llamó la atención. L: Pero la gente que va a Rheo en general. 72 E: Hay gente que está en su mundo y con sus amigos. Hay gente que va directamente a marchar por garchar, a buscar pibes para eso. Cosa que yo no puedo. Veo gente que va a pasarla bien, despreocupada. no le importa quien entra o quien sale. L: Vos a veces te sentís no relajado? E: Si, me puede pasar que voy en plan de conquista y no estoy muy pendiente. A veces me excedo con el alcohol y hago papelones. Por ejemplo, cuando voy y le agarro el culo a alguien. L: Vos sentís que hay una relación entre la masculinidad y la femineidad en los hombres que son gays? E: Si, esta esa cosa no? Yo antes de asumirme como gay tenía ese miedo, que termine siendo el peluquero. No siento que ese estereotipo sea de verdad. L: Los hombres que actúan de manera femenina o afeminada, cómo los ves? qué te hacen sentir? E: Es un estilo, que a mi personalmente no me atrae. Siento que los hace menos hombres, y eso no me atrae. Como que de pronto digo quiero caminar por la calle y presentárselo a mis amigos o familia, y no podría. L: Vos sentís que te van a juzgar? E: No, no los juzgas, como te dije tengo amigos así. Pero yo no estaría con alguien así. Me sentiría incómodo, porque de pronto si alguien me ve no quiero que piensan que soy gay por esa persona. Pasa que el que es amanerado, grita “soy pasivo!”. L: Vos decís que los hacen menos hombres, porqué? En qué pensás cuando hablás de eso? E: El hombre tiene que ser hombre. L: Y que significa ser hombre? E: Masculino. Yo me he encontrado con gente que pensé que eran masculinos por fotos y me encuentro con algo que… yo por eso pregunto, pero no es nada cómodo. Imaginate, que vas a responder? si, no.. vas a decir siempre que si. Las veces que me he reunido con gente así, no he podido tener sexo, y le digo “no puedo tener sexo”. L: Vos porqué pensás que no te gusta? 73 E: Por lo que tengo en la mente. Quizás esto es ahora, quizás más adelante es diferente. L: Vos sentís que los chicos que actúan de manera afeminada, lo hacen porque son gays? o más allá de eso? E: Yo creo que también viene del tema que yo me siento versátil. Me gusta ponerla pero también que me la pongan. Y no me gustaría que me la ponga alguien amanerado. Porque no lo siento hombre. L: Vos te sentirías mal que una persona que vos considerás menos hombre, que se imponga físicamente sobre vos? E: Si, claro. Quizás, estuve con algún amanerado siendo activo. De pasivo no sería nunca con una persona así. Igual yo no me siento menos hombre o menos masculino cuando soy pasivo. Pero no me gustaría que una loca sea activo conmigo. No me inspira. L: Qué es lo que te gusta de ser pasivo? E: Me gusta que la persona sea de mi estatura o más alta. Me atrae mucho el tema que la persona haga deporte, que tenga algo de músculo. Me calienta. Que tenga un cuerpo atlético. L: Vos sentís que la gente te consideraría menos hombre por salir con una persona amanerada? E: Pasa que quizás esa persona te calentó en el momento y estuviste una sola noche con esa persona, pero sabés que no podrías perfilar una relación con esa persona. Pienso en como me gustaría caminar por la calle por esa persona y sentirme a gusto. Es difícil. 74 Anexo II: 1) 2) 75