SEIS ORDENADORES PASARÁN EL TEST DE TURING PARA
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SEIS ORDENADORES PASARÁN EL TEST DE TURING PARA
De NotiWEB-Madrid SEIS ORDENADORES PASARÁN EL TEST DE TURING PARA COMPROBAR SI «PIENSAN» Un día los ordenadores podrán mantener una conversación con nosotros como si aparentemente fueran otra persona. Quizás ese día ya ha llegado. El próximo domingo, seis programas informáticos de inteligencia artificial serán sometidos al test de Turing. Si durante cinco minutos alguno de los ordenadores que apliquen los programas genera un diálogo por escrito que no pueda distinguirse del que sería propio de una persona, se marcará un hito. FUENTE | ABC Periódico Electrónico S.A. 08/10/2008 Por Emili J. BLASCO Pasar la prueba, que tiene lugar anualmente desde hace casi veinte años, significaría que la «mente» de los ordenadores ha dejado atrás su infancia para entrar en la madurez, fruto de los grandes progresos que en el campo de la inteligencia artificial se han realizado los últimos años. Según el científico Kevin Warwick, el momento de superar el test de Turing está muy cercano y bien podría ocurrir el próximo domingo en la Universidad de Reading, donde tendrá lugar la convocatoria del Premio Loebner para Inteligencia Artificial. El test fue creado a mediados del siglo pasado por el matemático británico Alan Turing con el fin de probar la capacidad de un ordenador para pensar independientemente, tal como lo haría un ser humano, de forma que por la secuencia lógica de sus respuestas engañe a quienes lo juzgan y les convenza de que han sido dictadas por una persona. Turing había ayudado a descifrar los códigos secretos del Ejército alemán durante la Segunda Guerra Mundial, y publicó su propuesta en 1950 en la revista «Mind». EXAMEN A TRES BANDAS El domingo se pondrán a prueba seis programas de inteligencia artificial. A estas «entidades conversadoras artificiales» se les ha bautizado con los nombres de Alice, Brother Jerome, Elbot, Eugene Gootsman, Jabberwacky y Ultra Hal. Quienes les examinen se sentarán a un teclado, delante de una pantalla de ordenador dividida en dos, en la que mantendrán simultáneamente conversaciones con otros dos participantes. Uno de ellos será una persona, que no estará a la vista ni será conocida por el interrogador, el otro será un ordenador. Si en una conversación por escrito sobre cualquier tema este último consigue burlar durante cinco minutos a quien le examina, haciéndole creer que la máquina es la que produce el otro diálogo, entonces se dará por superada la prueba. Sería la primera vez que esto ocurre. Desde 1990, el Premio Loebner para Inteligencia Artificial ofrece una medalla de oro de 18 quilates y 100.000 dólares a quienes diseñen un programa que supere el test de Turing. Aún no ha sucedido, pero «las máquinas están cada vez más cerca», advierte Warwick. De tener éxito, se trataría de un salto similar al dado por el supercomputador Deep Blue de IBM en 1997 al derrotar al campeón mundial de ajedrez Garry Kasparov. Además, generaría preguntas de gran calado como la posibilidad de que los ordenadores tengan conciencia y, de ser así, la autoridad moral de un humano para «desenchufarlo».