De qué hablamos cuando decimos ciudadanía

De qué hablamos cuando decimos ciudadanía

¿De qué hablamos cuando decimos ciudadanía?
Oficina del Plan Joven
Área de Igualdad y Ciudadanía
Diputación de Barcelona
En el momento de reflexionar sobre juventud y ciudadanía se nos plantean
preguntas de muy diversa índole.
¿De que estamos hablando cuando nos planteamos la necesidad de acciones
para favorecer el acceso a una plena ciudadanía ? Nos refererimos a ámbitos
de trabajo que afectan exclusivamente a la formación en valores,
o nos
planteamos también la necesidad de trabajar en programas que actúen sobre
aspectos de carácter estructural que faciliten los elementos necesarios para
conseguir esa plena ciudadanía mas allá de los valores, vivienda, trabajo,
formación, salud…….De hecho es una incógnita si la sociedad se propone
facilitar los elementos y condiciones necesarias para conseguir esta plena
ciudadanía .
Otro aspectos que se debería garantizar desde el entorno social se refiere a los
valores dominantes ¿Nuestra sociedad practica los valores ciudadanos que
después exige a los jóvenes? ¿Tenemos un entorno social que facilita y
practica el ejercicio de esa plena ciudadanía a la que hacemos alusión?
Seguramente podemos mejorar muchos de estos aspectos que hasta ahora
hemos planteamos.
Nos preguntamos, de que forma aprenden nuestros niños y jóvenes a ser
ciudadanos y de que manera interviene el entorno en este proceso de
formación. La incógnita que se nos plantea es si podemos dar las herramientas
para que las personas jóvenes puedan adquirir una plena ciudadanía donde se
le respeten sus derechos mientras cumple con sus deberes en un entorno no
siempre amable o receptivo y a menudo nada edificante.
En este sentido la clara apuesta municipal va en la línea de favorecer el
ejercicio real de una ciudadanía activa por parte de los jóvenes. Estas
intervenciones pretenden dar los recursos necesarios para los valores
democráticos se ejerzan desde una autonomía personal real. El entorno social
no puede reclamar una actuación comprometida y activa de los jóvenes en pro
de la ciudadanía democrática y comprometida mientras les niega los recursos
mínimos para que adquieran autonomía personal y puedan ser individuos y
ciudadanos en toda su extensión.
Desde el ámbito de gestión de las políticas de juventud siempre hemos tenido
claro que hemos de trabajar en el sentido de dar herramientas a los jóvenes
que les facilite esta plena integración social mientras se apoya y respeta su
momento vital. Es, naturalmente, un momento crucial en su desarrollo como
persona y en la formación de los valores propios de una ciudadanía
democrática.
Desde esta perspectiva es innegable la importancia del espacio local, el
espacio social y territorial próximo del que participamos las personas, en el
desarrollo de una ciudadanía activa y en este sentido los ayuntamientos,
conscientes de ello, han hecho siempre una apuesta decidida. Los gobiernos
municipales de la provincia de Barcelona hace ya años que vienen trabajando
en los diferentes ámbitos que, a nuestro criterio han de facilitar esta formación
personal
dentro de un proceso dinámico, moldeable y siempre plural y
respetuoso con el grupo y con la individualidad.
Los programas que se han puesto en funcionamiento para facilitar el derecho a
la autonomía personal de los jóvenes atestiguan esta inquietud. Actualmente
algunos municipios ya disponen de programas o servicios para facilitar la
emancipación que trabajan aspectos tan cruciales para la trayectoria personal
de los jóvenes como son la formación, el trabajo, la vivienda o la salud.
También se han generado programas que facilitan la participación de las
personas jóvenes en la ciudadanía activa y la vida cívica ofreciendo espacios
de expresión y de intervención social o de participación en grupos o colectivos
con inquietudes concretas, haciéndose ellos mismos protagonistas y actores de
estas acciones. Los procesos de elaboración de los Planes Locales de
Juventud han sido muy a menudo escuelas de valores, de compromiso y de
búsqueda de un objetivo común colectivo. La intervención y dinamización en
los centros de secundaria, en el ámbito extraescolar o en el espacio publico
conllevan un importante trabajo en valores y son, sin duda otra escuela de
ciudadanía….y como estos, tantos otros programas que se han generado
desde el mundo local.
En nuestro caso es importante remarcar el papel formativo que han
desarrollado en Cataluña las múltiples redes sociales y asociativas que existen
históricamente y que han representado una verdadera escuela de ciudadanía
para muchas generaciones. Es esta una riqueza que debemos preservar.
Desde el mundo local tenemos la firme voluntad de seguir trabajando en estas
líneas para favorecer una plena ciudadanía en igualdad de oportunidades y
condiciones para todos los jóvenes. Debemos generar las herramientas
necesarias para que el conjunto de la sociedad y la propia administración abra
canales de participación y de capacitación para y con los jóvenes. Sin olvidar
que formamos parte de una sociedad que debe ser globalmente formadora y
que ha de promover la ciudadanía plena de todos y cada uno de sus miembros.
Oficina del Plan Joven
Área de Igualdad y Ciudadanía
Diputación de Barcelona