relatos - Colegio El Taller

Concurso de relatos con dibujo
4º B de primaria.
Curso 2008-2009
1
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LA PESCA RADICAL
La pesca radical es un programa de la
tele en el que sale cómo los pescadores
con sus barcos grandes salen a pescar
cangrejos reales y cangrejos de las
nieves durante quince días.
EL ZOO
Marta vivía en Londres con su madre, su
padre y su hermano. Su madre se
llamaba Patricia, su padre, Alberto y su
hermano, Alejandro. Alejando sólo tenía
seis años y Marta diez. Se llevaban
cuatro años. Para Marta eso era como
veinte años.
A ella le gustaba mucho el Zoo, así que
un día decidió ir con sus padres y su
hermano.
Preguntó Marta:
– ¿Puedo ir al zoo?
– Claro -contestó mamá- pero con unas
condiciones: que te comas toda la
comida y que te portes bien.
– Vale, mami, trato hecho.
Marta estaba muy contenta de ir al zoo,
quedaba sólo a media hora. Marta
empieza a vestirse, peinarse y ponerse
Salen desde un pequeño pueblo que hay
en Alaska en el que hace mucho frío y
las olas son muy grandes.
Los pescadores preparan el cebo y los
meten en una jaulas grandes con redes
que se llaman nasas.
Entonces los cangrejos se meten dentro
y no pueden salir, después los
pescadores sacan las nasas del agua y
cogen los cangrejos para meterlos en la
bodega del barco.
En cada nasa pueden ir hasta 200
cangrejos.
Los pescadores lo pasan muy mal porque
este trabajo es muy duro.
Javier Alarcón
los zapatos. Ya llegó la hora del zoo,
bueno, sacaron las entradas, y andando,
ya estaban en el zoo.
– Mira, mami, un elefante, ¡qué bonito!
Y también un mono. ¡Qué chuli!.
Se lo pasaron muy bien.
Lucía Buendía
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MI ABUELO PEPE
CRIADOR DE PERROS
Mi abuelo Antonio tiene una huerta. Le
da de comer a las gallinas, a los conejos
y a los perros.
Tiene once perros, le dieron tres
pequeños, después le dieron cinco, y ya
tenía diecinueve
Vendió seis y ahora está criando
catorce y está muy contento porque le
gustan los animales.
José A. Cantero
Mi abuelo empezó en la huerta. Tenía
muchos bancales. Cuando se hizo mayor
fue vendiendo y vendiendo hasta que
paró de vender y se quedó con dos.
Siguió plantando, y eran todos de
melocotones, hasta que pararon de
crecer los melocotones porque faltaba
agua y no se podía regar. Entonces los
quemó y los vendió porque mi abuela se
puso enferma.
Víctor Dólera
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LOS DUENDES ENAMORADOS
HUILI QUIERE VOLAR
Erase una vez un niño que se llamaba
Huili, él era azul, con mucho pelo.
Un día en un helado le salió un premio,
era un tick para montar en un cohete. Él
insistió a su padre y le dijo que sí.
Entonces fue al cohete, cuando despegó
, estaba ya en el espacio, vio su planeta
que era de color azul, y vio un planeta
que ponía “Planeta Tierra”, entonces
Huili con su cohete se fue a ese planeta.
Huili quería hacer amigos, entonces vio
a una niña y le dijo: “ ¿Quieres ser mi
amiga?, pero la niña se asustó.
Lo mismo dijo a otro niño y también se
asustó.
Oyó a varios niños reírse y jugar... y
Huili dijo:
– No os vayáis, sólo quiero ser vuestro
amigo y si os vais me iré a mi casa
triste.
Entonces Huili se fue a su casa muy
contento.
Esto es un día de sol en el bosque, había
una duendecita que se llama Yésica,
tenía el pelo marrón, los ojos azules...
Y había otro duende que se llamaba
Iván, tiene el pelo marrón como Yésica,
los ojos marrones y le gusta llevar una
corona...
No se conocían.
Yésica estaba dando un paseo e Iván
buscando trabajo. Pasaron unos días y
Yésica también empezó a buscar
trabajo.
Vino un hada buscando dos empleados.
Se enteraron Yésica e Iván. El hada los
contrató. Lo que sabían es que el hada
es mala.
Iván y Yésica se enamoraron, pero el
hada los descubrió y cuando se iban a
dar un beso el hada lo impidió. Al final,
Iván y Yésica descubrieron que era mala
y se querían ir del trabajo pero ella no
quiso.
Los duendes hicieron todo lo posible
para irse y lo consiguieron al cabo de
cinco días.
El hada los buscaba y mientras tanto
ellos estaban preparando una trampa.
Al final, cayó en la trampa y se hizo un
hada buena y Yésica e Iván fueron
novios.
Adriana Domínguez
Ana Gálvez
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Y colorín, colorado, este cuento no ha
acabado. El perro fue a pedirle pienso al
amo y le dio un buen cubo de pienso
rico.
Esta vez sí se ha terminado.
María García
EL PERRO HAMBRIENTO Y EL
BURRO
Era una mañana corriente y un burro
comiendo, corriente.
El burro está solo y aburrido. Pasaron
cinco minutos y vino un extraño
compañero. El burro preguntó:
– Hola, ¿cómo te llamas?
– Esnupi , ¿ y tú? -contestó el perro.
– Felipe.
– ¿Qué haces aquí? -preguntó el
burro.
– No lo sé -dijo el perro.
– ¿Por qué dices que no lo sabes? volvió a preguntar el burro.
– Porque estoy hambriento -dijo el
perro.
– ¿Es que tus padres no te dan de
comer? -dijo el burro.
Un poco triste el perro dijo “no tengo
papás. Entonces el burro le dijo:
–
–
–
–
–
–
EL ABETO SIN TRONCO
Erase una vez un abeto que vivía en un
hermoso bosque. Un día vinieron unos
leñadores, cortaron varios troncos y se
los llevaron. Al día siguiente empezó a
nevar.
A la semana siguiente vinieron otra vez
los leñadores , lo cortaron y se lo
Quédate conmigo a comer rica
hierba.
Es que yo no como hierba -dijo el
perro.
Entonces, ¿qué comes?
Pienso -contestó el perro.
El burro dijo, pues dile a mi amo que
te dé pienso, él tiene mucho, pon
cara de hambriento y te dará un
poco.
Pero, seremos amigos -dijo el perro.
Claro que sí, seremos amigos.
llevaron a la ciudad. Allí lo vendieron a
un tendero.
A la mañana siguiente una familia se lo
llevó a su casa y lo plantaron.
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Empezaron a ponerle adornos por todas
partes, pero empezó a secarse.
vinieron las dos con un montón de
perros abandonados.
Natalia los llevó a su casa y los arregló.
Al cabo de diez días que los tuvo en su
casa los regaló a conocidos.
Cuando
terminó
la
navidad
lo
trasplantaron a una granja de árboles y
volvieron sus hojas verdes, y colorín,
colorado, este cuento se ha acabado.
Juan I. García
Ana Gomariz
EL COLEGIO
En el patio me gusta jugar al
baloncesto, al pilla-pilla.
Es muy chulo el baloncesto y hacer
educación física, porque parece el
recreo.
Es muy chulo el Voley, aunque soy un
manta y no he vuelto a jugar.
Me gusta el frontón porque a veces
quedo primero y a veces último.
NATALIA Y SUS PERROS
Erase una vez una niña que se llamaba
Natalia que fue a pasear con sus dos
perros Chula y Killa.
Miró a otro lado de ellos y después,
cuando volvió a mirarlos, ya no estaban.
Fue a buscarlos a un bosque que había
cerca y no los encontró, pero encontró
una casita de duende. Entró a ver si
estaban ahí, pero no estaban. La casita
era pequeña y estaba sucia.
Cuando salió ya era de noche. Volvió a su
casa y se lo contó a sus padres.
Cogieron la linterna y se fueron a
buscarlos.
Antonio González
Cuando ya volvían a casa, Natalia oyó un
ladrido. Natalia sabía que era el de Killa,
y después oyó otro que era el de Chula y
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EL PERRO ABANDONADO
Erase una vez una gata llamada Cremita,
su dueña se llamaba Fresa.
Una noche, cuando se iban a acostar,
Fresa y Cremita oyeron un ladrido.
Fresa salió a ver qué pasaba. Cremita se
asustó y Fresa vio a un cachorro de
color azul.
Fresa le dijo al cachorro que entrara,
se lo quedó y lo llamó Rody. Rody era
juguetón y cariñoso.
Cremita sintió envidia porque Fresa lo
mimaba más que a ella.
Cremita llevó a Rody a un bosque
oscuro. Rody y Cremita jugaron al
escondite. Cremita se perdió y Rody la
encontró. Se perdieron los dos.
Fresa con Tomy, su amigo, los ayudaron
y se fueron los cuatro a tomar un
chocolate caliente.
Después Cremita perdonó a Rody y Rody
la perdonó a ella.
Al día siguiente se fueron de excursión
juntos y colorín colorado, este cuento
se ha acabado.
EL GIGANTE COBARDE
Había una vez un gigante que era muy
cobarde. Un día fue al mago del castillo
de Nunca Jamás pero fue a su amigo
Pico Pato.
Pico Pato era un tipo muy gruñón pero
muy amable que se fue con él.
Tenían que pasar por muchos sitios.
Primero fue el bosque del Terror. Había
un malvado monstruo de mil ojos. El
gigante cobarde se fue corriendo y le
hicieron una trampa y lo atraparon.
Luego pasaron pro el vertedero
apestoso, había mucha peste. Pico Pato
se desmayó, el gigante salió corriendo
con mucho miedo y con Pico Pato en los
brazos.
Llegaron al volcán de lava humeante,
había una contraseña secreta. Pico Pato,
que era muy listo, la descifró. Pudieron
pasar por el volcán y llegaron al castillo
de Nunca Jamás.
Miriam Guzmán
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El mago les dio el Valentín, pero el
monstruo de mil ojos volvió, esta vez
muy enfadado, echando humo. El gigante
le pegó un puñetazo y lo derrotó... y
¡Victoria!.
Pedro M- Hurtado
militar le dio al que salvaba al mundo, le
dio, los dos se murieron pero salvó al
mundo.
Darío Hidalgo
EL DRAGÓN AZUL Y VERDE
EL MONSTRUO GIGANTE
Erase una vez un monstruo que era
gigante y vinieron los ejércitos de todo
el mundo .
El monstruo se comió a un militar, pero
no se murió. El militar llevaba una
pistola y estaba dentro de la barriga
Un día, un dragón verde y azul volaba
por el cielo de Molina de Segura
buscando su huevo y lo tenía un genio.
Pero un genio malvado le robó el huevo y
le hizo un experimento.
Uno de sus experimentos fue ponerlo al
calor y el huevo se abrió.
Sólo podía hacer una cosa, encerrarlo
en una jaula anti fuego.
El dragón olió su rastro y fue a por él y
también lo encerró en una jaula anti
fuego.
Y superSamuel lo rescató.
del monstruo.
El monstruo tenía dos corazones, uno lo
mataba y otro salvaba al mundo. El
Samuel Lorca
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LOS HERMANOS QUE SE ODIAN
Había una vez unos hermanos que se
peleaban constantemente, se pegaban,
se tiraban juguetes, se chinchaban...
un día sus padres dijeron:
– Vamos al dentista a revisarnos la
boca.
Los hermanos estaban de acuerdo en no
ir al dentista, los dos se escondieron para
no ir.
Sus padres en realidad tenían para ir al
circo que era lo que más les gustaba.
Cuando se escondieron uno, sin querer, le
dio una patada al otro y empezaron a
pelearse otra vez.
Sus padres les encontraron debajo de la
cama.
Cuando les encontraron les dijeron que
era una broma, que no iban a llevarlos al
dentista si no al circo.
Cuando fueron al circo empezaron a
llevarse bien.
¡QUÉ DIFERENCIAS!
Erase una vez una niña llamada Ana que
vivía en un palacio con su hermana María
y sus padres. El padre se llamaba Juan y
su madre Sandra.
De repente se quedaron sin dinero y
tuvieron que viajar a Canadá y hacerse
una casa en Canadá.
Se compraron una casa en Canadá pero
no era lo mismo que su palacio y, de
repente, se volvieron ricos y se fueron a
su palacio.
Y colorín, colorado, este cuento se ha
acabado.
Almudena Lozano
Carmen Lozano
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TOMATES ENAMORADOS
Este era un tomate que no era como los
demás, era verde y estaba podrido,
entonces, nadie quería estar con él
porque todos eran rojos y perfectos.
Un gran día, el tomate verde se
encontró con una tomatita super guapa,
y la tomatita le dijo al tomate verde y
podrido, “¿Qué te pasa?”. Y el tomate le
dice, “nada, es que nadie me quiere
porque soy verde y estoy podrido.
Entonces la tomatita le dice, “ a mí me
pareces un tomate muy rico y
bondadoso, que lo sepas”. Y el tomate,
“pues tú eres muy guapa y la tomatita
más buena del mundo entero. ¿qué tal si
salimos mañana al cine y vemos una
película.
LA MONEDA RULANTE
Había una vez un niño que tenía una
moneda y se le cayó. Entonces fue por
las alcantarillas y se fue para una tienda
en la que había un vagabundo y se
compró un bocadillo.
La de la tienda cogió la moneda, pero se
le cayó y ruló tanto que llegó al
aeropuerto y entró en un avión que
aterrizó en China. Un chino se la
encontró y le dijo al rey:
-Esta moneda la podemos sustituir por
el Yen.
Pero el rey dijo, “No”.
Entonces la tiró, llegó al aeropuerto y
se montó en un avión que iba a España.
Un español le dijo al rey:
-¿La usamos como nuestra moneda?
-Sí, ya es oficial, se llama EURO
-contestó el rey.
Fijaos, un niño inventa una moneda y ya
es nuestra moneda más usada... el euro.
Pero no la gasten, estamos en crisis.
La tomatita le dice, “por mí encantada”,
y desde ese día el tomate podrido se
sintió el más bonito y perfecto del
mundo entero.
Jesús Martínez
Laura Marí
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Mª JOSÉ UNA NIÑA HUÉRFANA
EL ATAQUE DE LOS TOMATES
Erase un padre viudo que vivía con su
hija Mª José.
Un día conoció a una mujer rica que
tenía otra hija llamada Adriana. La
mujer se llamaba Roberta. Por fuera era
muy simpática pero por dentro tenía mal
corazón y Adriana era muy egoísta y mal
educada y hacía lo que quería y cuando
quería.
Un día se casaron. Dos días después el
padre murió y Mª José se quedó muy
triste pero su madrastra y Adriana no
lloraban ni nada, ni se entristecieron y
se aprovecharon de Mª José.
Su cama era para Adriana, su ropa era
de Adriana... y la vestían con harapos.
Diez días después vino la policía y
obligaron a Roberta y Adriana a que
fueran amables con Mª José y ya fue
feliz.
Había un mercado en el que se vendía
solamente verduras.
Los tomates cuando casi nadie los veía
se caían de los puestos y empezaban a
andar con unas minúsculas patitas y
entraban en las casas en las que había
niños para comerse los peluches y las
medicinas.
Sólo se lo hacían a los que no les
gustaban los tomates.
Un grupo de niños que iban siempre al
mercado, a escondidas, espiaban a los
tomates.
Ellos se llamaban:
Sonia, su padre era fontanero y tenía
muchas llaves inglesas.
Alejandro, su madre era costurera y
tenía muchas agujas.
Alicia tenía un padre que era carpintero
y tenía muchos martillos.
Manuel, era el mayor, tenía una madre
oftalmóloga y operaba a la gente con
láser.
María Mondéjar
Esta banda de chicos se hacía llamar “La
pandilla del Ketchup”
y todos cogieron los aparatos de los
padres y las madres y, al mercado
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siguiente se los tiraron a los tomates.
Sonia les tiraba llaves inglesas,
Alejandro les clavaba agujas, Alicia los
aplastaba con los martillos y Manuel les
disparaba rayos láser.
La pandilla del Ketchup al completo fue
expresamente al huerto donde se
cultivaban los tomates y le dijeron a los
que plantaban que no los plantara más.
Y, a partir de ese día, los niños estaban
sanos y contentos porque tenían
peluches.
La tortuga sacó el Fixo y la liebre cogió
la lana y el castor se la pegó.
Fueron al bosque y ya ninguno se reía de
ella.
Julia Riquelme
CAPERUCITA, EL LEÓN Y EL LOBO
Erase una vez Caperucita, estaba en su
casa y le dice su mamá:
– Ve y llévale ala abuela estas frutas y
estas galletas. Y se fue.
Su abuela vivía al otro lado del bosque
y fue por allí y detrás de un árbol o un
arbusto estaba el lobo que fue detrás
de ella y la pilló y le dijo:
– ¿Dónde vas?
– A casa de mi abuela.
– ¿Dónde?
– Al otro lado del bosque.
Y le dijo el lobo a Caperucita:
– Te vas por ese camino y yo me voy
por el otro.
– Vale, uno por uno y otro por otro
-dijo Caperucita. Y se fueron.
El lobo se fue y se encontró con el león
y discutieron y le dijo el lobo al león
“vete tú a casa de la abuela”. Le
preguntó el león que dónde estaba y el
lobo le explicó que al otro lado del
bosque.
Rocío Ogáyar
LA LIEBRE SIN RABO
Erase una vez una liebre, una tortuga y
un castor. Se conocieron en una charca
bebiendo agua, pero había un problema,
que la liebre no tenía rabito y tenían
que buscar una solución.
Al castor se le ocurrió que le podían
pegar una bola de lana blanca para que
no se rieran de ella.
Para encontrar la bola de lana tenían
que cruzar todo el bosque y se fueron a
por la lana. Al cruzar el río, la liebre no
sabía nadar y entonces el castor cortó
un árbol. Cruzaron el río sin problemas,
cruzaron el bosque sin problemas y
llegaron.
Llegó el león y tiró a la abuela al bosque
donde estaba el lobo y éste se la comió.
El león se acostó y vino Caperucita y se
encontró con su abuela y le dijo:
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–
¡Qué orejas y ojos más grandes
que volaba y su padre magia en una caja.
Mina se puso contentísima pero le
faltaban amigos y amigas. Con magia
podía ir ahora al cole volando.
Como ahora tenía magia, las otras hadas
se hicieron amigas todas.
Y colorín, colorado, este cuento se ha
acabado.
tienes! Y se dio cuenta que era un
león, llamó a su madre y su madre
llamó a un policía y le mató.
El lobo se había comido a la abuela y se
volvieron sin la abuela.
Colorín, colorado, este cuento se ha
acabado.
Bárbara Tomás
LA MUÑECA CON PELO ROSA
Era una muñeca que tenía el pelo rosa.
Su historia empieza aquí:
Un día que era mi cumpleaños invité a
una amiga, me trajo un muñeco precioso,
pero al abrir el segundo regalo vi a las
veinte ovejas. Era una muñeca horrible,
no se le podía decir otra cosa. Tenía una
cara feísima por no decir horrible.
Tenía un vestido rojo, con minifalda y
por supuesto llevaba sus bragas lilas.
Vamos que no le pegaban las bragas de
color lila. Unas piernas larguísimas, pero
no era una Bratz.
Cuando nos tomamos la tarta seguía
viendo las veinte ovejas, y la tarta tenía
una Barbie, pero yo veía la muñeca más
horrible del mundo, porque ni cuando
era pequeñita tuve una muñeca como
esa.
Cuanto terminamos de cantar el
cumpleaños feliz me quedé un poco
pillada al soplar las velas.
Francisco J. Rosauro
EL HADA MINA Y SU MAGIA
Había una vez un hada que se llamaba
Mina, tenía una mascota, una mariquita
que se llamaba Mari.
Las otras hadas se reían de Mina porque
no tenía magia. Al día siguiente Mina no
sabía que era su cumpleaños.
Su madre le regaló un poni de verdad
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Y, por fin, se acabó el cumpleaños.
Llegué a mi casa, mi madre sacó los
regalos de la bolsa y vi a la muñeca. Por
la noche me fui a dormir y me puse a
soñar con la muñeca. Me desperté y
-Yo soy más blanco. Y el otro le dijo:
-Pues no, que yo soy más blanco que tú.
Pancho y sus padres volvieron del
parque y Pancho se puso a escribir
sobre uno de los folios, y cuando lo
pintó, todos los demás le decían:
-Qué feo que eres, y estás manchado.
Luego Pancho cogió a los nueve folios no
pintados y los echó al fuego, y el folio
pintado dijo, “más vale ser feo y útil que
ser guapo e inútil y ser echado al fuego.
eché a la muñeca al pasillo, me acosté.
Al día siguiente me desperté, abrí la
puerta y vi a la muñeca bajando por las
escaleras, vi otra vez las veinte ovejas,
y, bueno, al final tuve que tirar la
muñeca a la basura.
Andra Tutu
EL FOLIO FEO Y ÚTIL
Erase una vez un niño llamado Pancho,
era rubio y con ojos azules.
Un día, por la tarde, su madre lo mandó
a comprar diez folios. Él fue a
comprarlos, llegó a casa y dejó los folios
en su mesa.
Pancho se fue al parque con su padre
Juan pe y su madre Fina, y mientras, los
folios hablaron.
Uno le dijo al otro:
Carmen Vidal
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