Originales

Transcripción

Originales
Número 3 y 4
2005
INSER
C
IÓN SO
C
IAL
Volumen 30
Juan José Egea
REVISTA ESPAÑOLA DE DROGODEPENDENCIAS, 30 (3 y 4), 225 - 444 (2005)
REVISTA ESPAÑOLA
DE
DROGODEPENDENCIAS
20 años
del Plan Nacional Sobre Drogas
Monográfico
Financiado por:
REVISTA ESPAÑOLA DE DROGODEPENDENCIAS
Organo Oficial de la Asociación Española de Estudios en Drogodependencias
(AESED)
FUNDADOR
Emilio Bogani Miquel
DIRECTOR
Francesc Freixa i Sanfeliu
COMITÉ DE REDACCIÓN
María Álvarez; Enrique Cano; Leonor Cano; Mª. Dolores Ferrer;
Francisco Herrero; Rafael Herrero; Violeta Martí; Mercedes
Sánchez; Francisca Sayas; Enrique Soler; Francisco Verdú.
CONSEJO EDITORIAL
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de Madrid.
Bach i Bach, Lluís. Hospital Clínico Universitario de
Barcelona.
Civera Mollá, Cristina. Universidad de Valencia.
Comas Arnau, Domingo. Presidente del GID. Madrid.
Echeburúa Odriozola, Enrique. Universidad del País
Vasco.
Fañanás Saura, Lourdes. Universidad de Barcelona
García Merita, Mª Luisa. Universidad de Valencia.
García Riaño, Doroteo. Universidad de Valencia.
Guerri Sirera, Consuelo. Instituto de Investigaciones
Citológicas. Valencia.
Miñarro López, José. Universidad de Valencia.
Montoro González, Luís. Universidad de Valencia.
Pallardó Salcedo, Federico. Universidad de Valencia.
Rooney, James F. Universidad del Estado de Pennsylvania.
Sánchez-Turet, Miquel. Universidad de Barcelona.
Tortosa Gil, Francisco. Universidad de Valencia.
Vega Fuente, Amando. Universidad del País Vasco.
CORRESPONSALES
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Santamaria. Castellón: Helena Calvo Botella. CastillaLa Mancha: Carlos Alonso. Cuba: Ricardo GonzálezMenéndez. Euskadi: Javier Aizpiri. Galicia: Santa
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Teresa Robledo; Fernando Mansilla. Murcia: Juan Francisco
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CORRESPONDENCIA
Revista Española de Drogodependencias
Apartado Postal 477 - 46080 Valencia (España).
Tel.: 618 330 658 - Fax: 96 295 43 17
www.aesed.com
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ISSN: 0213-7615
Revista declarada de Utilidad Pública en virtud de
Orden de 25 de Febrero de 2004. BOE nº 72.
Edita: AESED, Núm. Reg.: 5.034, Generalitat Valenciana
Cuota de inscripción anual como socio: 60
(89 extranjero).
Publicación trimestral con 4 números al año. Aparece
por primera vez en 1976 como BOLETÍN DE ALCOHOLISMO Y TOXICOMANÍAS (número único) y sigue
como DROGALCOHOL. Fundada por el Servicio de
Alcoholismo y Toxicomanías del Hospital Psiquiátrico
Provincial de Bétera (Valencia). A partir de 1987 (vol. 12)
pasa a llamarse Revista Española de Drogodependencias
hasta el momento actual.
Indizada en Biological Abstracts, CDD-DDZ, CINDOC,
Indice Médico Español (IME), Pascal, REDOC, Toxibase
y Psicodoc.
Los autores interesados en publicar en Revista
Española de Drogodependencias puede enviar
sus trabajos, preferentemente por
e-mail:
[email protected] o al Apartado Postal
477 - 46080 Valencia (España).
Coordinador del Monográfico: Josep M. Suelves
30 (3 y 4) 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
225
N ormas de Publicación
REVISTA ESPAÑOLA DE DROGODEPENDENCIAS
tiene como objeto la difusión científica de trabajos de investigación relacionados con el alcoholismo y demás toxicomanías, incluyendo las adicciones no tóxicas.
Cada trabajo debe identificarse con alguno de los siguientes artículos científicos:
Revisión.Trabajo escrito para revisar varios artículos primarios ya publicados anteriormente. Estas revisiones pueden ser simplemente bibliográficas anotadas
en el campo de las drogodependencias, o estudios críticos e interpretativos de las obras publicadas en ese campo. Salvo en ediciones monográficas, sólo se
publica un artículo de revisión por numero. Su extensión comprenderá entre 10 y 50 páginas.
Original.Trabajo científico que describe resultados originales de investigación en el campo de las drogodependencias, de modo que su información permita
a otros colegas evaluar las observaciones, repetir los experimentos y evaluar si los datos justifican las conclusiones del autor. Se exige lógica, claridad y precisión
en su exposición. La extensión máxima recomendable debe ser de 20 paginas y contener los siguientes apartados: 1. Introducción; 2. Materiales y Método; 3.
Resultados; 4. Discusión; y 5. Referencias.
Comunicación breve. Trabajo escrito de forma breve con resultados definitivos o preliminares sobre trabajos de investigación sobre drogodependencias,
no da detalles sobre los experimentos o lo hace de forma muy resumida y las citas bibliográficas se reducen al mínimo. La extensión máxima será de 6 páginas,
10 citas bibliográficas y hasta 3 ilustraciones.
Carta al director. Comentario o crítica relacionada con los artículos aparecidos recientemente en la revista. Acoge también experiencias de interés en
drogodependencias, exposiciones clínicas muy breves, hipótesis, metodología, novedades terapéuticas, etc. No es necesario resumen ni palabras clave. Su extensión
máxima será de 2 hojas, una tabla o gráfica y hasta 5 citas bibliográficas.
PRESENTACIÓN DE LOS TRABAJOS
Salvo excepción expresa de la redacción, los trabajos nunca deberán superar las 50 paginas de texto tamaño DIN-A4, mecanografiado a doble espacio por
una sola cara, con márgenes a ambos lados y entre 30 y 35 líneas por página. Se otorgará prioridad de publicación a aquellos trabajos que sean inéditos y no
hayan estado sometidos a examen por otro medio gráfico, debiendo su autor indicar dicha condición en el envío.
Cada tabla, gráfico o fotografía deberá presentarse en hoja aparte, en tinta negra, numerado correlativamente, realizado con nitidez y claridad, indicando su
situación en el texto. Las dimensiones máximas serán de 9 x 12 cm. para las fotografías, y de 13 x 19 cm. para el resto de las ilustraciones.
Cada trabajo deberá acompañarse de un original en papel así como de su copia en soporte informático. El texto se procesará bajo PC en formato RTF,
Word Perfect, Microsoft Word o Write de Windows
La primera página debe comprender el título del trabajo, tanto en español como en inglés y francés, nombre de los autores, centro donde se ha realizado
el trabajo y la dirección completa del autor o autores (teléfono, fax, correo electrónico y centro de trabajo). Asimismo, se recomienda que adjunte una breve
reseña de su trayectoria profesional y científica.
La segunda hoja llevará el resumen del trabajo en español, inglés y francés, de extensión entre las 100 y 250 palabras. Debe comprenderse sin necesidad
de leer el trabajo completo e irá acompañado de 3 a 10 palabras clave para índices, también en los tres idiomas citados. En la tercera hoja comenzará el texto
del articulo.
Las referencias se harán siguiendo el sistema de nombre y año (sistema de Harvard). En el texto, figurarán autor y año de publicación (en el caso de
tres o más autores cabe citar el primer autor seguido de et al. pero en la bibliografía al final deben incluirse los nombres de todos ellos). Al final del artículo
se presentarán las citas en orden alfabético siguiendo estrictamente las siguientes normas: a) Para libros: autor(es), año de publicación entre paréntesis, titulo
completo de la obra en cursiva, ciudad de publicación y editorial. Ejemplo: Bogani, E. (1975). El alcoholismo, enfermedad social. Barcelona. Plaza & Janes. (b) Para
artículos de revista: autor(es), año de publicación, título del artículo, título completo de la revista en cursiva, volumen en cursiva y página inicial y final. Ejemplo
Fouquet, P (1967). Eloge de l’alcoolisme et naissance de l’Alcoologie. Alcool ou Santé, 82: 3-11.
Los trabajos se enviarán a Revista Española de Drogodependencias. Apartado 477. 46080 Valencia (España).
PROCESO DE ARBITRAJE
La Redacción acusará recibo de los trabajos enviados e informará al autor responsable acerca de su aceptación en el plazo máximo de tres meses desde la
fecha de recepción, reservándose el derecho a rechazar los originales que no juzgue apropiados y de proponer modificaciones de estos cuando lo considere
necesario. La Redacción no se hace responsable del material rechazado, una vez comunicada su decisión a los autores.
A excepción de la Editorial, las ideas y opiniones expresadas en los trabajos publicados son de responsabilidad exclusiva de los autores y no comprometen
las ideas, opiniones y política de la dirección de la revista. Por lo demás, se seguirán las normas jurídicas vigentes por lo que se refiere a los derechos de propiedad
intelectual y reproducción de los artículos.
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Revista Española
de
Drogodependencias
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MONOGRÁFICO. 20 AÑOS PLAN NACIONAL SOBRE DROGAS.
Presentación
Carmen Moya García............................................................................................................................................................................229
ORIGINALES
Drogodependencias: de la epidemiología a la intervención. Estrategias y oportunidades.
Josep M Suelves.......................................................................................................................................................................................231
Salud Pública y bebidas alcohólicas..
Francesc Freixa.........................................................................................................................................................................................243
La cultura del cannabis treinta años después... unas reflexiones personales.
Oriol RomanÍ. ..........................................................................................................................................................................................263
Indicadores sanitarios y sociales de la evolución de una cohorte de adictos a heroína: 1985-2000. Proyecto
EMETYST.
Xavier Sánchez-Carbonell, Marta Beranuy, Marina Forcén, Carles Virgili y Patricia Colomera.......................283
20 años de prevención familiar en España (1985-2005).
Emiliano Martín González................................................................................................................................................301
El nacimiento de la memoria escrita: descripción de las revistas pioneras en drogodependencias..
Leonor Cano, Enrique Cano, Mercedes Sánchez, Francesc Verdú...........................................................................322
Globalización y Derechos humanos: nuevos retos para los planes nacionales.
Amando Vega. ..........................................................................................................................................................................................340
Fuentes de información sobre drogodependencias en España: una visión histórica..
José del Val Carrasco...........................................................................................................................................................353
La prevención del consumo de drogas en España: evolución y propuestas para la reflexión.
Carlos Alonso Sanz..............................................................................................................................................................367
La legislación más relevante en materia de adicciones.
Mª. Elena Cobas Cobiella...................................................................................................................................................382
Internet y las nuevas tecnologías: evolución de la página Web del Instituto de estudio de las a d i c c i o n e s
www.lasdrogas.info.
Jesús A. Lacoste Marín........................................................................................................................................................400
SOCIEDAD
Veinte años de intervención en drogas: una perspectiva desde el Proyecto Hombre de Valencia.
Juan Manuel Ferrer Angulo, Angel Manuel Turbi Pinazo, Jose A. Rovira Rodas....................................................411
Las Asociaciones ante las drogas: a propósito de los 25 años de AGIPAD.
Amando Vega; Iñaki Martínez..........................................................................................................................................420
ANEXOS
Catalogo de Publicaciones Plan Nacional sobre Drogas (1985-2005). .................................................................435
indice de Autores 2004..........................................................................................................................................................................442
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Revista Española
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Drogodependencias
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MONOGRAPHIC: 20 Years PNSD
Presentation
Carmen Moya García............................................................... 229
ORIGINALS
Drug addiction: from epidemiology to intervention. Strategies and oportunities.
Josep M. Suelves.......................................................................... 231
Public health and alcoholic beverages.
Francesc Freixa............................................................................ 243
30 years of history of cannabis in Spain: sam personal
reflextions.
Oriol Romani................................................................................ 263
Sanitary and social indicators of the evolution of a cohort
of heroin addicts: 1985-2000. Project EMETYST.
Xavier Sánchez-Carbonell, Marta Beranuy, Marina Forcén,
Carles Virgili y Patricia Colomera. .................................. 283
20 years of familiar prevention in Spain (1985-2005).
Emiliano Martín........................................................................... 301
The birth of the written memory: description of the
pioneering magazines in drug addiction.
Leonor Cano; Enrique Cano, Mercedes Sánchez, Francesc
Verdú................................................................................................. 322
Globalización and Human rights: new challenges for the
national plans.
Amando Vega................................................................................ 340
Sources of information on drug addictions in Spain: an
historical vision.
José del Val Carrasco................................................................ 353
The prevention of the drug consumption in Spain: evolution
and proposals for the reflection.
Carlos Alonso Sanz................................................................... 367
The most relevant legislation for addictions.
Elena Cobas Cobiella. ............................................................ 382
Internet and new technologies: evolución of the web
page of the Institute for the study of addictions www.
lasdrogas.info.
Jesús A. Lacoste Marín............................................................. 400
SOCIETY
Twenty years of intervention in drugs: a perspective from
the Proyecto Hombre of Valencia.
Juan Manuel Ferrer Angulo, Angel Manuel Turbi Pinazo,
Jose A. Rovira Rodas................................................................. 411
The Associations in front of drugs: with regard to the 25
years of AGIPAD.
Amando Vega; Iñaki Martínez............................................... 420
ANNEXED
Catalogue of Publications National Plan on Drugs (19852005)................................................................................................. 435
Indice of Authors 2004................................................................. 442
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Revista Española
de
Drogodependencias
MONOGRAPHIQUE: 20 Années PNSD
Presentación
Carmen Moya García. ............................................................ 229
ORIGINAUX
Dépendantes de la drogue : de l’épidémiologie à l’intervention.
Stratégies et occasions.
Josep M Suelves ........................................................................ 231
Santé Publique et boissons alcoolisées.
Francesc Freixa............................................................................ 243
30 années d’histoire de la cannabis en Espagne: des reflexions
personelles
Oriol Romani. ............................................................................. 263
Indicateurs sanitaires et sociaux de l’évolution d’une cohorte
de partisans à héroïne : 1985-2000. projet EMETYST.
Xavier Sánchez-Carbonell, Marta Beranuy, Marina Forcén,
Carles Virgili y Patricia Colomera. ................................... 283
20 années de prévention familiale en Espagne (19852005).
Emiliano Martín. ......................................................................... 301
La naissance de la mémoire écrite: description des revues
pionnières dans des dépendantes de la drogue.
Leonor Cano; Enrique Cano, Mercedes Sánchez, Francesc
Verdú................................................................................................. 322
Globalisation et Droits humains : nouveaux défis pour les
plans nationaux.
Amando Vega................................................................................ 340
Sources d’information sur les dépendantes de la drogue en
Espagne : une vision historique.
José del Val Carrasco. .................................................................... 353
La prévention de la consommation de drogues en Espagne
: évolution et propositions pour la réflexion.
Carlos Alonso Sanz................................................................... 367
La législation la plus significative en matière de dépendances.
Elena Cobas Cobiella............................................................... 382
Internet et les nouvelles technologies : évolution de la
page Web de l’Institut d’étude des dépendances www.
lasdrogas.info
Jesus A Lacoste Marin.............................................................. 400
SOCIÉTÉ
Vingt années d’intervention dans des drogues : une perspective depuis le Projecto Hombre de Valencia.
Juan Manuel Ferrer Angulo, Angel Manuel Turbi Pinazo,
Jose A. Rovira Rodas................................................................. 411
Les Associations devant les drogues : à propos des 25 années
d’AGIPAD. Amando Vega; Iñaki Martínez...................... 420
ANNEXES
Catalogue de Publications Plan National sur les Drogues
(1985-2005).................................................................................. 435
Indice d’Auteurs 2004................................................................... 442
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P resentación
Con ocasión del Veinte Aniversario del Plan Nacional sobre Drogas que se cumple en julio de
2005, la Revista Española de Drogodependencias ha decidido reunir en un número monográfico
una serie de aportaciones que proporcionan distintas visiones sobre la evolución que en el sector
de las drogodependencias se ha operado en estos últimos veinte años. Se suma, de este modo,
la Revista a la iniciativa del Ministerio de Sanidad y Consumo que quiere presentar la efeméride
como una oportunidad de reflexión crítica para analizar con perspectiva, para aprender de la
experiencia y para orientar el futuro.
En 1985, la extensión del consumo de drogas ilegales, focalizado esencialmente en la heroína
como la sustancia paradigmática del mismo, había pasado a constituir una de las preocupaciones más relevantes (la primera preocupación) para la sociedad española que demandaba una
respuesta a un problema que entendía acuciante. En el imaginario social, los consumidores de
drogas se veían asociados a la delincuencia, la inseguridad ciudadana, la enfermedad y en último extremo la muerte. La situación de marginación en que se encontraban los “drogadictos”
producía escándalo social y se calificaba de pavoroso el hecho de la existencia de unos 80.000
heroinómanos en nuestro país. Y, además, había que considerar la íntima relación entre el consumo de heroína y la infección por VIH-SIDA.
El protagonismo del problema en la opinión pública y en los medios de comunicación se
trasladó al ámbito parlamentario. En 1984, se constituyó en el Senado una Comisión de Encuesta
sobre Droga, se sucedieron iniciativas, preguntas, proposiciones y tras el Debate sobre el Estado
de la Nación celebrado en el mes de octubre, el Congreso aprobó una serie de mociones, entre
las que se encontraba la elaboración de un Plan de Prevención contra la droga en el que se contemplara la reinserción social de los drogadictos. Respondiendo a este requerimiento, el Consejo
de Ministros constituyó un Grupo Interministerial en el que participaban los departamentos
directamente implicados y encomendó su coordinación al Ministerio de Sanidad y Consumo.
El 20 de marzo de 1985, el Consejo aprobó las líneas directrices del Plan Nacional sobre
Drogas, para el que había recabado la opinión de organizaciones sindicales, asociaciones profesionales, partidos políticos y entidades sociales, convocándose la primera Conferencia Sectorial
sobre Drogas en cuyo marco se elaboró el Plan finalmente aprobado el 24 de julio.
Resulta importante destacar el nivel de participación alcanzado en la elaboración y puesta en
funcionamiento del Plan Nacional sobre Drogas, al entender todos, como punto de partida, que
solo haciendo converger las actuaciones y esfuerzos que desarrollaban todas las Administraciones
Públicas, las Organizaciones no gubernamentales y los ciudadanos, con independencia de credos
o filiaciones políticas, podría resultar posible alcanzar resultados efectivos.
El Ministro Ernest Lluch, al presentar el Plan, resaltaba las tres pretensiones básicas a que
obedecía, un amplio consenso social, la aceptación técnica de manera que tuvieran cabida todas
las experiencias que contasen con aval científico y la habilitación de recursos que satisficieran
las demandas sociales y que respondiesen a la situación entonces planteada.
Estas pretensiones han marcado la trayectoria del Plan y continúan hoy plenamente vigentes.
Para tener éxito, el éxito que razonablemente pueda esperarse en un tema tan complejo y
espinoso como éste, es imprescindible el esfuerzo de todos los sectores sociales, es necesario
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Revista Española
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Drogodependencias
229
Presentación
que los programas y actividades desarrollados por las Administraciones y las entidades sociales
estén basados en un sólido conocimiento y formación técnica, y habrá que adaptar, modificar e
innovar los recursos habilitados en función de las nuevas necesidades y demandas sociales.
Desde 1985 los logros obtenidos han sido muchos. Hoy contamos con una red de atención a
las drogodependencias amplia, variada y con un alto nivel científico y profesional, se desarrollan
anualmente un gran número de programas de prevención en el ámbito familiar, escolar, comunitario o laboral, contamos con programas de apoyo a la inserción socio-laboral, hemos mejorado
nuestros instrumentos de conocimiento y se ha realizado un enorme esfuerzo presupuestario.
La propia consolidación del Plan Nacional sobre Drogas como estructura de coordinación de
la actuación sectorial de la Administración del Estado y las Comunidades Autónomas, la de los
Planes Autonómicos y Locales y la constitución de incontables organizaciones no gubernamentales que trabajan en el campo de las drogodependencias y canalizan la actividad de la sociedad
civil, dicen mucho sobre el éxito alcanzado.
Desde 1985 hasta hoy, los cambios producidos, no sólo en la situación y la respuesta al problema
del tráfico y del consumo de drogas han sido importantes. También se han producido cambios
muy profundos en nuestra sociedad y en la percepción que sus diferentes sectores tienen del
problema y lo que es más importante, la percepción que las personas de riesgo, especialmente
las más vulnerables, tienen del mismo.
La situación del fenómeno del consumo de drogas, en todas sus facetas, ha evolucionado en
estos años de tal manera que está requiriendo una profunda reflexión que, liderada por las Administraciones públicas, concite un gran debate profesional y social. Debemos profundizar en el
análisis y en la respuesta al problema consolidando y reforzando lo que en el origen y desarrollo
del Plan ha sido su mejor aval, la participación y colaboración de todos los sectores implicados
desde una perspectiva horizontal que permita cada cual implicarse según su responsabilidad
y compromiso. Debemos revisar nuestras formas de trabajo para adaptarnos a los cambios
operados, investigar más, seguir combinando compromiso, conocimiento técnico e imaginación,
explorando fórmulas de intervención renovadas y eficaces
La conmemoración del 20 Aniversario del Plan Nacional sobre Drogas se enmarca en un
esfuerzo de debate y reflexión conjunta, evidentemente no complacientes con lo ya hecho, sino
exigentes en la tarea que tenemos por delante. De ahí que solicitemos de todos una participación
rigurosa y comprometida, como la que hoy nos ofrece la Revista Española de Drogodependencias, con el objetivo del Plan de contribuir a una sociedad más libre y tolerante, sin ataduras a
sustancias que limitan la capacidad del ser humano para desarrollarse autónomamente.
Carmen Moya García
Delegada del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas
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O riginales.
Drogodependencias: de la epidemiología a la
intervención. Estrategias y oportunidades.
Josep M. Suelves
Departamento de Salud de la Generalidad de Cataluña y Departamento de Psiquiatría y Psicobiología Clínica
de la Universidad de Barcelona.
Resumen
El desarrollo en España del Plan Nacional sobre Drogas, ha supuesto la entrada en
funcionamiento de diferentes fuentes de información epidemiológica en relación al uso
de drogas y a los problemas relacionados con el uso de drogas. Desde 1987 se registra
información sobre las admisiones a tratamiento, los episodios urgentes, y la mortalidad
asociada al uso de drogas. Complementariamente, cada dos años se efectúa una encuesta
domiciliaria dirigida a la población general y una encuesta escolar para evaluar el uso de
drogas en la población general.
Los datos procedentes de estas fuentes de información, y los resultados de otros estudios, ponen de manifiesto que durante los últimos 20 años se ha reducido la incidencia
del uso problemático de heroína y el uso de la vía intravenosa entre los consumidores
de esta sustancia, ha aumentado el consumo de cannabis y de cocaína –especialmente
entre los adolescentes, y han aumentado los problemas sanitarios entre consumidores
de cocaína.
En el futuro, la epidemiología del abuso de drogas debería continuar avanzando para
mejorar nuestro conocimiento sobre los diferentes problemas de salud asociados al
uso de drogas (y no exclusivamente al uso de drogas ilegales), y proporcionar nuevas
evidencias en las que fundamentar las intervenciones asistenciales y preventivas.
Palabras Clave
Política sanitaria, Epidemiología, Sistemas de información, Estudios transversales, Abuso de
sustancias
Summary
The development in Spain of the National Plan on Drugs (Plan Nacional sobre Drogas),
favoured the implementation of different sources of epidemiological information regarCorrespondencia a:
Subdirección general de drogodependencias. Departamento de Salud.Travessera de les Corts,
159. 08028 Barcelona (España). Tel (+34) 93 227 29 00. Fax (+34) 93 227 29 74
e-mail: [email protected]
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4)2005
231-242. 2005
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Drogodependencias: de la epidemiología a la intervención. Estrategias y oportunidades.
ding drug use and problem drug use. Since 1987, information on drug related treatment
admissions, emergency room episodes and mortality have been recorded. Additionally,
a household survey and a school survey addressed to the general population are conducted every two years.
Data from these two sources of information, and results from other studies indicate that,
in the last 20 years, there has been a decrease in the incidence o problem heroin use
and intravenous administration of heroin, cannabis and cocaine use has been increased
–particularly among adolescents, and health problems are more frequent among cocaine
users.
In the future, drug abuse epidemiology should continue progressing to improve our
knowledge of all problems associated to drug use (not only illicit drug use), and to provide
new evidence in which therapeutic and preventive interventions must be based.
Key Words
Health policy, Epidemilogy, Information systems, Cross-sectional studies, Substance
Résumé
Le développement en Espagne du Plan National sur les Drogues, a supposé l’entrée en
fonctionnement de différentes sources d’information épidémiologique par rapport à
l’utilisation de drogues et aux problèmes en rapport avec l’utilisation de drogues. Depuis
1987 on enregistre une information sur les admissions à traitement, les épisodes urgents,
et la mortalité associée à l’utilisation de drogues. Complémentairement, chaque deux
ans on effectue une enquête domiciliaire visant à la population générale et une enquête
scolaire pour évaluer l’utilisation de drogues dans la population générale. Les données
de ces sources d’information, et les résultats d’autres études, mettent en évidence que
pendant les dernières 20 années a été réduite l’incidence de l’utilisation problématique
d’héroïne et l’utilisation de la voie intraveineuse entre les consommateurs de cette
substance, a augmenté la consommation de cannabis et de cocaïne - spécialement entre
les adolescents, et ont augmenté les problèmes sanitaires entre des consommateurs de
cocaïne. Dans le futur, l’épidémiologie de l’abus de drogues devrait continuer à avancer
pour améliorer notre connaissance sur les différents problèmes de santé associés à
l’utilisation de drogues (et non exclusivement à l’utilisation de drogues illégales), et fournir
de nouvelles preuves lesquelles fonder les interventions d’aide et préventives.
Most Clé
Politique sanitaire, Épidémiologie, Systèmes d’information, Études transversales, Abus
de substances
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Revista Española
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Drogodependencias
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Josep M. Suelves
La epidemiología del uso
de drogas en la España de
los ochenta
A finales de los años 1970, el consumo de
heroína comenzó a difundirse desde distintos
puntos de España, provocando una notable
alarma social debida principalmente a la participación de heroinómanos en actividades
delictivas (hurtos, robos con intimidación,
robos en farmacias, etc.) (Alvarez-Requejo et
al, 1999). Durante varios años, el interés de los
profesionales y las autoridades sanitarias por
los problemas derivados del uso de drogas
–tanto las drogas ilegales cuyo consumo comenzaba aumentar, como el alcohol e incluso
el tabaco- fue muy escaso. A pesar de ello, comenzó a surgir una respuesta asistencial ante
la demanda de los consumidores de heroína y
de sus familias, impulsada principalmente por
grupos de profesionales que contaban con el
apoyo de ayuntamientos y organizaciones sociales. Con el comienzo de la década de 1980,
una incipiente oferta terapéutica comenzó a
desarrollarse en diferentes lugares del país,
especialmente en algunas grandes ciudades
donde el consumo de drogas ilegales parece
haber crecido con mayor rapidez. El abordaje
terapéutico de los problemas derivados del
uso de drogas ilegales se basaba en gran medida en la experiencia un pequeño número de
profesionales que llevaban años desarrollando
programas de tratamiento del alcoholismo y
que, ante el manifiesto desinterés del resto
del sistema sanitario, se sintieron abocados a
intervenir desde otros ámbitos asistenciales
como los servicios sociales.
A lo largo de los años 1980, comenzaron
a conocerse algunas de las principales complicaciones sanitarias del uso de heroína por
vía parenteral. Al igual que los consumidores
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de opiáceos de otros países en los que el
uso de heroína se conocía anteriormente,
los heroinómanos españoles presentaban
una elevada mortalidad por sobredosis, una
complicación aguda influida por factores que
todavía no se conocen completamente(Brugal
et al, 1995; Camí y Domingo-Salvany, 1995).
Hoy se dispone de pruebas que indican que
la incidencia de sobredosis mortales aumentó notablemente en las principales ciudades
de España a partir de 1983, y afectó principalmente a los varones jóvenes, llegando a
representar el 11,1% de todas las muertes
en el grupo de edad de 15-39 años en 1988
(Sánchez et al, 1995). La infección por el HIV
también comenzó a extenderse de forma
muy rápida entre los consumidores de heroína
por vía parenteral españoles, de tal modo
que su prevalencia habría pasado de un 11%
en 1983, a un 47% en 1987 originando una
situación que algunos autores no dudaron en
calificar como desastrosa (Álvarez-Dardet y
Hernández, 1994).
El mayor conocimiento del impacto sanitario del uso de heroína fue sin duda justificación
suficiente para el establecimiento de una
estrategia de coordinación de la política en
materia de drogodependencias de las diferentes administraciones públicas españolas, que
se tradujo en 1985 en la aprobación de un
Plan Nacional sobre Drogas cuyo desarrollo
sería encomendado al Ministerio de Sanidad
y que supondría un rápido crecimiento de
los recursos destinados a la prevención y el
tratamiento de las drogodedependencias.
Sistemas de Información
Revista Española
de
Drogodependencias
233
Drogodependencias: de la epidemiología a la intervención. Estrategias y oportunidades.
sobre drogas
Lamentablemente, cuando en España se
puso en marcha el Plan Nacional sobre Drogas no se disponía de suficiente información
que permitiera conocer la magnitud y la
evolución de los problemas derivados del
uso de sustancias, las necesidades sanitarias
de las personas afectadas, ni la dimensión
de la actividad asistencial que comenzaba a
desarrollarse. Los sistemas de información
sanitaria existentes, como el Registro General
de Mortalidad, no parecían adecuados para
evaluar las principales complicaciones médicas
asociadas al uso de drogas (Brugal et al, 2004),
de manera que se hacía necesario disponer de
nuevos indicadores epidemiológicos.
Tras algunos trabajos preliminares, en 1987
234
Revista Española
de
Drogodependencias
entró en funcionamiento el Sistema Estatal
de Información sobre Toxicómanos (SEIT),
basado en tres indicadores indirectos del uso
problemático de opiáceos o de cocaína: el
indicador tratamiento, el indicador mortalidad
y el indicador urgencias. Cada uno de ellos se
diseñó para ser un registro individual, exhaustivo y continuo de los eventos considerados
en las áreas geográficas monitorizadas.
La elección de estos tres indicadores se
consideró justificada porque: a) Parecía más
fácil obtener datos de los servicios sanitarios
que de otras fuentes de más difícil acceso,
como la policía o la administración de justicia;
b) Otros sistemas de información, como los
derivados de los programas norteamericanos
Client-Oriented Data Acquisition Process
(CODAP) y Drug Abuse Warning Network
30 (3 y 4) 2005
Josep M. Suelves
(DAWN), habían utilizado indicadores similares para estudiar las tendencias en el abuso
de drogase (Roca J, Antó JM, 1987).
La decisión inicial de registrar exclusivamente problemas relacionados con el uso de opiáceos o cocaína se adoptó por varias razones:
a) La heroína era, junto con el alcohol, la droga
por la que se demandaba un mayor número
de tratamientos en centros especializados;
b) existía cierto interés en monitorizar los
problemas causados por el uso de metadona
y otros opiáceos; c) se preveía un aumento
de los problemas causados por el consumo
de cocaína, ya que España era considerada
una vía de entrada de cocaína procedente
de América Latina hacia el mercado europeo,
y porque las encuestas habían registrado ya
unos niveles de consumo importantes de esta
30 (3 y 4) 2005
sustancia; d) con la excepción del alcohol y el
tabaco, no había otras sustancias psicoactivas
por las que se demandara tratamiento en
centros especializados; y e) se disponía de
fuentes alternativas de información epidemiológica razonablemente validad y fiables para
monitorizar los problemas relacionados con
el uso de tabaco y alcohol.
Desde su entrada en funcionamiento en
1987, el sistema de información ha experimentado diferentes modificaciones. Así, en 1991
se incorporaron nuevas variables al indicador
tratamiento (como la vía de administración o
la realización previa de otros tratamientos),
y en 1996 se efectuaron algunos cambios
orientados principalmente a la ampliación de
la información recogida con el fin de incluir
cualquier droga psicoactiva (y no solamente
Revista Española
de
Drogodependencias
235
Drogodependencias: de la epidemiología a la intervención. Estrategias y oportunidades.
opiáceos y cocaína). La última modificación
que afectó a los indicadores tratamiento y
urgencias se realizó en el año 2003, y tuvo
como principal objetivo la adaptación a los
protocolos de notificación del Observatorio
Europeo sobre la Droga y la Toxicomanía. En
1998, los tres indicadores del SEIT pasaron a
integrarse en el Observatorio Español sobre
Drogas (OED)
Los principales resultados del análisis de los
datos sobre tratamiento, urgencias y mortalidad por drogas se publican actualmente en
formato electrónico (Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, 2003).
Las Figuras 1-3 son una muestra de esos datos,
que ilustran la evolución temporal de algunas
variables relacionadas con el uso problemático
de drogas.
236
Revista Española
de
Drogodependencias
Encuestas sobre uso de
drogas
En todo el mundo, diferentes países llevan
a cabo encuestas periódicas para investigar
el consumo de tabaco, alcohol y otras drogas entre los adolescentes, pero quizás sea
a los Estados Unidos donde las encuestas
sobre consumo de drogas se han venido
desarrollando con mayor rigor y continuidad.
Así, desde 1971 la administración de salud
norteamericana lleva a cabo anualmente una
encuesta sobre uso de drogas en una muestra
de domicilios estadounidenses (Substance
Abuse and Mental Health Services Administration, 2005). Como complemento de estas
encuestas, el estudio Monitoring the Future
investiga desde 1975 las tendencias de uso
30 (3 y 4) 2005
Josep M. Suelves
de diferentes drogas entre los alumnos de
educación secundaria norteamericanos (Johnston et al, 2005).
A principios de los años 1990. un grupo de
expertos en epidemiología inició, con el apoyo
del Consejo de Europa, un proyecto internacional de evaluación del consumo de drogas
parcialmente basado en la experiencia y los
instrumentos de medida del estudio Monitoring the Future. En 1995 se hizo la primera
encuesta del proyecto ESPAD (European
School Survey Project on Alcohol and Other
Drugs), en la que participó un grupo inicial de
25 países que ha ido ampliándose en ediciones
posteriores (Swedish Council for Information
on Alcohol and Other Drugs, 1999).
Desde 1994, la Delegación del Gobierno
para el Plan Nacional sobre Drogas lleva a
30 (3 y 4) 2005
cabo cada dos años una encuesta sobre drogas dirigida a los adolescentes escolarizados
de 14 a 18 años. La recogida de datos para
estas encuestas se basa en gran medida en la
utilización del cuestionario desarrollado para
el proyecto ESPAD.
Desde comienzos de los años 1980, se han
venido desarrollando en España encuestas
sobre uso de drogas dirigidas a la población
general (Dirección General de Acción Social,
1981; Navarro J et al, 1985),. Sin embargo,
muchos de estos trabajos –desarrollados
con el impulso de diferentes organismos de
la administración central y autonómica- no
han tenido una suficiente continuidad. Desde
1995, la Delegación del Gobierno para el
Plan Nacional sobre Drogas desarrolla una
encuesta domiciliaria que se repite cada 2
Revista Española
de
Drogodependencias
237
Drogodependencias: de la epidemiología a la intervención. Estrategias y oportunidades.
años (Delegación del Gobierno para el Plan
Nacional sobre Drogas, 2004).
Las Figuras 4 y 5 incluyen una síntesis de
algunos de los datos obtenidos por las diferentes encuestas desarrolladas en el marco
del Plan Nacional sobre Drogas.
Otras fuentes de
información
Además de los 3 indicadores de problemas
relacionados con el uso de drogas y de las
dos encuestas a que se refieren los apartados
precedentes, la Delegación del Gobierno para
el Plan Nacional sobre Drogas obtiene y/o
difunde datos de otras fuentes. En 1996 se
238
Revista Española
de
Drogodependencias
realizó por primera vez una encuesta dirigida
a una muestra de consumidores de drogas
en tratamiento con el objetivo de mejorar el
conocimiento sobre las características sociodemográficas de esta población, identificar
algunas de sus necesidades sociales y sanitarias,
evaluar ciertas prácticas de riesgo para la infección por VIH, y analizar el uso de servicios
de prevención y tratamiento (Delegación del
Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas,
1998). Aunque esta primera encuesta se centró exclusivamente en personas tratadas por
problemas relacionados con el uso de heroína,
la segunda encuesta a consumidores en tratamiento –sobre la quel no se han publicado
datos todavía- ha incluído casos tratados por
30 (3 y 4) 2005
Josep M. Suelves
heroína y también por cocaína.
Los informes del Observatorio Español sobre Drogas, que se publican con una periodicidad variable, suelen incluir datos relacionados
con la actividad policial y judicial relacionada
con las drogas ilegales, y también datos sobre
la producción y distribución de bebidas alcohólicas y productos del tabaco. Además de
ello, la memoria anual del Plan Nacional sobre
Drogas (Delegación del Gobierno para el Plan
Nacional sobre Drogas, 2005) incorpora datos
sobre la actividad preventiva y asistencial.
Discusión
El desarrollo del Plan Nacional sobre Drogas durante dos décadas ha hecho posible
disponer de nuevos instrumentos que permiten evaluar la magnitud de los problemas
asociados al uso de drogas ilegales, algunos
de los determinantes de esos problemas, y
la respuesta preventiva y asistencial que se
desarrolla en España.
Indudablemente, el mejor conocimiento de
estos problemas ha sido un factor decisivo que
ha hecho posible mejorar la oferta asistencial
en áreas como la prevención de las complicaciones derivadas del uso de drogas por vía parenteral o el tratamiento con metadona, que a
pesar de representar estrategias sanitarias bien
conocidas en los años 1980, no empezaron a
implantarse de forma generalizada hasta una
década más tarde.
A lo largo de estos 20 años, la investigación
epidemiológica ha puesto de manifiesto cambios importantes tanto en relación al consumo
de drogas como con respecto a los problemas sociales y sanitarios que este consumo
ocasiona. Así, algunos datos como los que se
muestran en la Figura 1, en la que se observa
una tendencia sostenida a la reducción del
30 (3 y 4) 2005
número de personas que solicitan tratamiento especializado, reciben atención sanitaria
urgente, o fallecen por causas relacionadas
con el uso de heroína, permiten pensar que
el número de consumidores de esta droga
dejó de aumentar en España a fines de la
década de 1980.
Los consumidores de heroína están sujetos
a graves riesgos que reducen muy significativamente su esperanza y calidad de vida
(Sánchez-Carbonell et al, 2005). El uso de la
vía parenteral ha sido –y continúa siendo- uno
de los más importantes factores de riesgo en
relación a la transmisión del VIH y otras enfermedades infecciosas, y también en relación a
la sobredosis (Brugal et al, 2002). Parece que,
por fortuna, la vía parenteral ha ido dejando
paso a otras vías de administración entre los
consumidores de heroína, un cambio muy
fácil de apreciar atendiendo a los datos que
se muestran en la Figura 2.
En la población general, y especialmente
entre los adolescentes españoles, se observa
un crecimiento sostenido del uso de drogas
como los derivados del cannabis y la cocaína,
tal como ponen de manifiesto los resultados
de las encuestas que se muestran en las Figuras 4 y 5. No se dispone de suficientes datos
que indiquen que el incremento del consumo
de cannabis esté provocando la aparición de
graves problemas sanitarios, pero sí se ha
observado un aumento muy importante de
los problemas asociados al uso de cocaína,
que causa cada año una mayor demanda de
tratamiento especializado y de atención sanitaria urgente (Suelves et al, 2001), tal como
se preveía a finales de los años 1980 (Camí
et al, 1987; Cami y Rodríguez, 1998).
La actividad derivada del funcionamiento
de los sistemas de infomación sobre drogas
drogas ha contribuido al desarrollo de numeRevista Española
de
Drogodependencias
239
Drogodependencias: de la epidemiología a la intervención. Estrategias y oportunidades.
rosos trabajos de investigación más amplios,
destinados a estudiar la morbi-mortalidad
de amplias cohortes de consumidores de
drogas (Ortí et al, 1996, Brugal et al, 2002),
realizar estimaciones de la prevalencia del
consumo problemático de opiáceos mediante
la aplicación de técnicas de captura-recaptura
(Domingo-Salvany et al, 1995; Domingo-Salvany et al, 1998), contribuir a la planificación,
gestión y evaluación de recursos preventivos y
asistenciales (Suelves, Colom, Martínez, 2003),
detectar cambios en los patrones de consumo
de ciertas drogas (de la Fuente et al, 1994;
Suelves et al, 2001), y servir de base para el
diseño de otros sistemas de información de
ámbito local, nacional o internacional l (Álvarez-Requejo et al, 1999;Suelves,2004).
¿Qué desafíos deberá afrontar la epidemiología del abuso de drogas en los próximos
años? Es posible que la investigación epidemiológica en relación a las drogas ilegales se
haya desarrollado demasiado al margen de las
investigaciones en relación a otras sustancias
cuyo consumo causa problemas muy graves
de salud pública (Freixa, 2005). Una cierta
disminución de la alarma social en relación al
uso de drogas ilegales podrá, quizá, contribuir
a diluir la excesiva distancia que a menudo
separa la investigación sobre estas sustancias
y sobre el alcohol y el tabaco, propiciando
también una mayor interés por cuestiones
un tanto abandonadas hasta ahora, como las
lesiones asociadas al uso de alcohol y otras
drogas (Plasència, 2002).
La investigación epidemiológica puede
contribuir a proporcionar evidencia sobre la
que fundamentar las intervenciones asistenciales y, muy especialmente, las intervenciones
orientadas a la promoción de la salud. Es
seguramente en el ámbito de la prevención
240
Revista Española
de
Drogodependencias
dónde menos trabajos de evaluación se han
efectuado, una insuficiencia que afecta tanto
a las actividades de educación para la salud
que se desarrollan en el marco escolar o de
la familia (Alonso, 2005; Martín, 2005) como a
diferentes acciones de carácter legal (Cobas,
2005).
Agradecimientos
El desarrollo de los diferentes trabajos
no habría sido posible sin la participación
de un amplio número de profesionales que
desde 1987 han participado en diferentes
procesos de notificación, procesamiento y
análisis de datos epidemiológicos desde los
centros de tratamiento, las comunidades y
ciudades autónomas, y los servicios centrales
de la Delegación del Gobierno para el Plan
Nacional sobre Drogas. Como incluir una lista
con todos sus nombres resultaría imposible,
sirvan estas líneas para expresarles mi sincero
agradecimiento.
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30 (3 y 4) 2005
Originales
Salud pública y bebidas alcohólicas
Francesc Freixa
Médico. Especialista: Psiquiatría y Neurología.
Experto en Alcohología y ToxicomaníasProf.
Master Drogodependencias Univ. de Barcelona y Valencia.
Resumen
Tras un breve paseo por la historia de la Medicina hasta llegar al período de la Ilustración y con ella al método científico en el curar, que en un principio se denomina higiene
después medicina preventiva y ya en el siglo XX atención primaria de salud, medicina
de familia o comunitaria, se analiza la influencia que el consumo de drogas y de alcohol
-de manera más exhaustiva- tienen en la salud pública.
Se pone de manifiesto que las políticas sanitarias tendrían que ir dirigidas a evaluar los
elevados costes sanitarios, sociales y económicos generados por el consumo de bebidas
alcohólicas.
Los efectos negativos sobre la salud, la expectativa de vida y las patologías asociadas, son
significativas en Europa y las estrategias para reducir daños del alcohol, tabaco y otras
drogas hacen necesarias medidas informativas de sensibilización, motivación y recursos
técnicos por los responsables en Salud Pública de los gobiernos y administraciones, y
así disminuir en un futuro la morbi-mortalidad.
Palabras Clave
Salud pública, alcohol, políticas sanitarias, bebidas alcohólicas, morbilidad, mortalidad,
medidas preventivas.
Summary
After a brief review of the history of the Medicine until reach the period of the Illustration and inside it the scientific method in curing, initially called hygiene, later preventive
medicine and yet in the XX century health primary attention, family medicine or communitarian medicine, the influence of the drug and alcohol consumption in the public
health is analyzed with exhaustiveness.
It is shown that the sanitary policies must be directed to evaluate the high sanitary, social
and economic costs generated by the consumption of alcoholic beverages.
The negative effects on the health, the life expectancy and the pathologies associated,
are significant in Europe and the strategies to reduce damages of alcohol, tobacco and
other drugs make necessary measures informative of sensibilización, technical motivaCorrespondencia a:
Francesc Freixa . C/Nicaragua, 61 –63 , 4º 1ª . 08029 BARCELONA. e-mail: [email protected]
3030(3(3y y4)4)2005
243-262. 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
243
Salud pública y bebidas alcohólicas
tion and resources by the people in charge in Public Health of the governments and
administrations, and thus to diminish in a future the morbi-mortality.
Key Words
Public health, alcohol, sanitary policies, spirits, morbidity, mortality, preventive measu-
Résumé
Après une brève promenade par l’histoire de la Médecine jusqu’à arriver à la période de
l’Illustration et avec elle à la méthode scientifique dans traiter, qui en principe est appelé
ensuite déjà hygiène médecine préventive et dans le siècle XX attention primaire santé,
médecine de famille ou communautaire, on analyse l’influence que la consommation de
drogues et d’alcool - de manière plus exhaustive - ont dans la santé publique.
On met en évidence que les politiques sanitaires devraient être dirigées à évaluer les
coûts sanitaires, sociaux et économiques importants produits par la consommation de
boissons alcoolisées.
Les effets négatifs sur la santé, l’espoir de vie et les pathologies associées, sont significatifs
en Europe et les stratégies pour réduire des dommages l’alcool, le tabac et autres drogues
fait de nécessaires mesures informatives sensibilisation, motivation et ressources techniques par les responsables en Santé Publique les gouvernements ou les administrations,
et ainsi diminuer dans un futur la morbi-mortalidad.
Most Clé
Santé publique, alcool, politiques sanitaires, boissons alcoolisées, morbidité, mortalité,
mesures préventives
No vamos desarrollar una historia de la
Medicina. Intentaremos resumir aproximadamente, el periodo que va desde la Ilustración
hasta la consolidación de la Salud Pública
como concepto y práctica. En el fondo relatar – someramente - el trabajoso paso de la
magia, de la brujería y de las “creencias” de
apariencia técnica hasta la introducción lenta,
inconstante y compleja del método científico técnico en todo el entorno del “Arte de
Curar” médico-quirúrgico.
Tuvo que superarse el período histórico
de la Edad Media que en Europa después de
la caída del Imperio Romano, representó un
244
Revista Española
de
Drogodependencias
retroceso en la organización de las ciudades
y en la incipiente tecnología de las comunicaciones, recuérdese las grandes vías romanas
o calzadas, los puentes, la rigurosa separación
entre las letrinas y el agua de boca, etc. y el
nacimiento de una red comercial que desapareció con la fragmentación del Imperio
y el predominio absoluto de una economía
de simple subsistencia, ligada a la agricultura
y a una ganadería muy localizada y limitada.
El proceso de crecimiento y recuperación
del comercio y la producción artesanal, así
como de la demografía fue un proceso lento
que evolucionó durante siglos. Prácticamente
desde el s. X / XI hasta el XVI, con un largo
30 (3 y 4) 2005
Francesc Freixa
trayecto de hambrunas, guerras, epidemias, inquisiciones, esclavos y supervivencia difícil para
todos y más para una mayoría de campesinos
o pastores, es decir de plebe.
Además la desaparición de los sistemas
higiénicos básicos greco – romanos, a la ausencia de alimentos insuficientes localmente,
la exploración terrestre a Oriente, la navegación del entorno africano, estos contactos
y contrariedades en las cosechas (fuego de
San Antonio, por ejemplo), originaron diversas
epidemias que diezmaron aun más la población que en un principio del período medieval
vació aun más las ciudades y se trasladó al
campo para sobrevivir con una agricultura
de subsistencia, a pesar de las servidumbres
y malos usos de la nobleza, que en el fondo
también intentaba vivir con la explotación
de los campesinos y de la plebe. El final de
esta larga etapa es el inicio de la navegación
atlántica.
Las grandes epidemias Medievales contribuyeron pues, a disminuir aun más drásticamente
los habitantes de las ciudades.
Lentamente fueron naciendo, las distintas
culturas y sociedades, dentro del concepto
del Antiguo Régimen: poder real absoluto y
teocrático, nobleza, comerciantes – artesanos,
pueblo llano y campesinos, que con el soporte
de la Iglesia Romana, mantuvieron los señoríos
que con mejor o peor suerte originaron los
distintos reinos.
El período del Renacimiento originó el
primer cambio en el dominio de la manera de
entender toda la realidad mediante una única
autoridad del Saber: los principios teocráticos
y la Iglesia romana. Se modificaron las maneras
de entender y comprender el mundo con el
redescubrimiento de los clásicos greco – latinos no basadas sus lecturas e interpretaciones
en la Autoridad de la Iglesia Romana y aparece
30 (3 y 4) 2005
el primer esbozo de conceptos y aplicaciones
prácticas, basadas en la experimentación y
observación, no en el mito de la Autoridad.
Una de las consecuencias a largo plazo 1 de la introducción del método científico en el
curar, fue tener instrumentos eficaces para la
Prevención de las grandes epidemias. En un
principio se le denominó Higiene, después
Medicina Preventiva y finalmente a todo el
conjunto de actividades dedicadas a conocer
las enfermedades en la población general y la
prevención de las mismas: Salud Pública. Que
engloba, por lo tanto, todos los conocimientos
que pueden relacionar la higiene personal, la
alimentación, el contacto con otras especies
animales (epizootias,...), con agentes físicos o
químicos (enfermedades laborales,...) la contaminación, la pureza de las aguas, etc. y que
son temas fundamentales en la Planificación
de un Sistema de Salud.
Todo el proceso se inicia con la Ilustración, el Enciclopedismo y finalmente con
el estallido de la Revolución Francesa. En el
fondo con la aceptación que la realidad se
puede entender mejor y controlarla mediante
la observación de los hechos y el uso de la
razón.
El intento de entender la realidad del mundo que nos rodea mediante los principios de
la observación y de la experimentación que
tantos aciertos consiguieron en el terreno de
la observación astronómica ( fundamental en
la navegación); la Tierra dejó de ser plana y el
centro del Universo como ejemplo; el agua
imprescindible para la vida se transformó
gracias a la Física en vapor y por lo tanto en
energía, con las primeras bombas movidas por
vapor, para el achique del agua en la minería y
después la aparición de las primeras máquinas
autónomas (locomotoras). Mediante la superación de la Alquimia por la Físico-Química los
minerales extraídos trabajosamente por los
Revista Española
de
Drogodependencias
245
Salud pública y bebidas alcohólicas
mineros fueron más fácilmente manipulados
y el cobre, el hierro, etc. y sus combinaciones
alcanzaron capacidades de resistencia y dureza
nunca alcanzados, en cantidades y calidades no
vistas jamás hasta el siglo XVII / XVIII, etc.
A su vez este progreso técnico científico
modificó las relaciones humanas, la industria
incipiente a finales del s. XVII pero especialmente en el s. XVIII propició una gran
movilidad de personas que abandonaron
una vida de subsistencia atada a la agricultura
y al pastoreo, a un sistema de vida nuevo
esencialmente urbano y proletario. Todo
este proceso se llevó a cabo no sin malestar
social, injusticias, revoluciones y epidemias
de enfermedades asociadas a la situación de
hacinacimiento urbano.
Evidentemente no todos los países, estados
o naciones tuvieron la misma evolución en
idéntico período de tiempo, Inglaterra fue
el primer país que inició la industrialización
casi paralelamente con Francia, otros países
europeos se incorporaron al proceso más
tardíamente, en nuestro caso las diferencias
entre distintas zonas de la Península Ibérica
fueron muy notables hasta mediados del siglo
XX y en la actualidad la llamada economía
de servicios (turismo, telecomunicaciones,
logística, etc.) es una forma de desarrollo
industrial, basado en principios muy alejados
de los conceptos de manufactura, producción
de maquinaria, minería, etc.
En el inicio del desarrollo y auge de la
industrialización, la acumulación de grandes
masas humanas ligadas a las fábricas y a las
explotaciones mineras conllevó la aparición de
epidemias y enfermedades fundamentalmente
infecto -contagiosas que hicieron necesario un
cambio en las maneras de convivir de todos
los ciudadanos. La tuberculosis, la viruela y las
enfermedades gastro -intestinales como la tifoidea, diversos brotes de cólera, el tifus exan-
246
Revista Española
de
Drogodependencias
themático, etc. iniciaron la moderna medicina
preventiva y el estudio de las características
de estas enfermedades infecto contagiosas y
la forma de evitarlas o prevenirlas. Las vacunas
por una parte, la higiene o limpieza personal,
la de la vivienda, etc. por otra y la separación
entre las aguas de boca y las de alcantarilla,
fueron el núcleo inicial de la Salud Pública.
Las inquietudes originadas por la mayor
incidencia y prevalencia de las enfermedades
en las personas que vivían más hacinadas, en
calles más estrechas y no soleadas, en aquellas
que tenían determinados trabajos, hicieron
evidente que tenía que existir una mejor manera de vivir de las clases más desprotegidas
y se inició un largo período de “reclamación” 2 de una mejor manera de vivir, de alimentarse
y fundamental: la extensión de la lecto-escritura a toda la población. 3 Es el período
constructivo y de mejora medioambiental
de la clase obrera que en Salud Pública se ha
adjetivado de etapa “social”, que ha evolucionado en los países de la actual Unión Europea
a la necesidad imperiosa de la planificación
sanitaria, a intentar un desarrollo social y
cultural que se corresponda a determinados
parámetros de funcionamiento económico
que signifique una auténtica igualdad de
oportunidades.
De la misma manera que la escuela primaria ideal tendría que ser pública y gratuita, 4 gracias a una redistribución justa de la renta
( acumulada mediante impuestos ajustados
a la realidad económica individualizada) la
Atención Primaria de Salud, la medicina de
Familia o Comunitaria, el saneamiento del
medio ambiente tendría que conllevar un
Servicio Salud integral y al alcance de todos
los ciudadanos.
Como en muchos aspectos de la convivencia, en el entorno social, las modificaciones
de la realidad no se ajustan siempre a los
30 (3 y 4) 2005
Francesc Freixa
conocimientos científicos, ni a los avances
tecnológicos, la economía de lo inmediato o
especulativa (lo que se denominó “el pelotazo” ) y los llamados por D. Jacinto Benavente
5 “Los intereses Creados”, modifican aquello
que podría o debería ser de otra manera.
Los problemas asociados al consumo de
substancias con riesgo de generar enfermedades, pueden ser alimentos ( es por ello
preciso el control veterinario, por ejemplo
en la carne de cerdo por la triquina o la de
ternera, recuérdese “las vacas locas”) o las
bebidas, etc. pero también por el consumo
por ejemplo de una substancia no necesaria
para la supervivencia pero enraizada en el
sistema económico de tal forma que llegó a
ser un Monopolio del propio Estado.Ya en los
inicios de su comercialización fue una materia
“estancada” por la propia Casa Real de Castilla en los puertos de Sevilla y Cádiz. En la
década de los años 20 del s. XX el estado creó
la “Compañía Arrendataria del Monopolio de
Tabacos”, la de fósforos y no en vano se llamó
a los comercios autorizados “estancos”.
El del tabaco es el ejemplo más patente
de que todos los saberes técnico – científicos sobre su potente riesgo sobre la salud
– conocidos clínicamente desde los años
30 / 40 del siglo XX - no han sido capaces
de evitar su promoción indirecta, en el siglo
XXI, mediante los recursos de la publicidad,
del patrocinio (sponsor) en las carreras de
automóviles, en revistas, en ciclismo y lo más
importante para una reflexión: la transmisión
del hábito por contagio de aprendizaje social
de adolescentes / jóvenes, al convivir entre
adultos fumadores.
Ello continua más patente y evidente, sabiendo que es una de las causas de enfermar
y morir, evitable.
Desgraciadamente la lentitud relativa de
30 (3 y 4) 2005
la evolución de las patologías asociadas al
consumo de tabaco, que aparecen entre los
35 / 45 años –según la precocidad del inicio
del consumo – y tienen su mayor prevalencia
e incidencia entre los 50 / 60 años, con mortalidad asociada a patología cardio – vascular
y en otros casos evolucionando a patologías
crónicas irreversibles como la Enfermedad
Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) que
constituyen una precoz reducción de la calidad
de vida (Pardell, H.1996) y de más sufrimiento
que el propio cáncer.
La exposición a las bebidas
alcohólilicas
En el caso de las bebidas alcohólicas (bs.
alcs.), hay que señalar la influencia directa sobre el aumento de las cantidades producidas
por la propia industrialización, no sólo en la
producción de cerveza o destilados; si no que
la industrialización al introducir la maquinaria
en la agricultura, modifica el cultivo de la vid
y la recolección de la uva; los avances de la
química favorecen la homogenización de la fabricación del vino. Esto origina nuevas formas
de comercialización, venta y promoción con
el soporte de las administraciones en especial
en las áreas productoras.
Las políticas sanitarias y de Salud Pública
tendrian que ir dirigidas a evaluar los elevados costes sanitarios, sociales y económicos,
generados por el consumo de bs.alcs. Dichas
bebidas son un factor de riesgo para la salud
física y se aumenta el riesgo en relación al
aumento de la cantidad y de la frecuencia de
la ingesta. Uno de los problemas llamativos es
que muchos de los conflictos consecuencia
del uso de bs.alcs., aparecen significativamente
en individuos no afectos de dependencia-adición al alcohol, sino en aquellas poblaciones
con consumos de riesgo o perjudiciales o
Revista Española
de
Drogodependencias
247
Salud pública y bebidas alcohólicas
“abusivos” según la terminología anglosajona.
(Kreitmam,N. 1986) (OMS 2000).
Además los paises supuestamente desarrollados, las intoxicaciones que precisan atención
sanitaria, se sitúan entre el 10 o 30% de todas
las oportunidades en que se consumen
bs.alcs. En los paises de la Comunidad Europea
el 25% de los hombres y el 10% de las mujeres
que consumen bs.alcs., presentan afectación
de la salud y efectos perjudiciales agudos.
Se ha estimado que entre el 3 y el 5% de
la población general en estos paises, presenta
dependencia - adicción a las bs.alcs. Existe
consenso en aceptar que la dependencia
– adicción se inicia con niveles moderados
de consumo y que puede aumentar lineal y
progresivamente, la cantidad consumida. El
riesgo de que grandes cantidades de alcohol
en cortos intervalos de tiempo, son también
un grave riesgo y adversidad para la salud,
pero no son , necesariamente un indicador
de mayor riesgo de dependencia – adicción,
pero si de un elevado riesgo porcentual de
morbi – mortalidad.
Naturalmente si aumenta la población expuesta a las bs. alcs., sea cual sea la cantidad
consumida y la frecuencia del consumo, el
aumento proporcional de exposición significa
un aumento proprcional de todos los riesgos.
(Rehm,J. et al. 2004; Room,R. et al.2005)
Los riesgos potenciales de las bebidas alcohólicas (sidra, cerveza, vino y licores) están
sobradamente evidenciados como un grave
conflicto de Salud Pública. Pero en nuestro
medio concreto 6 nadie ha podido hasta el
momento actual, realizar una actividad de
Prevención eficaz y que realmente contribuya
a concienciar a los usuarios de bs. alcs. de sus
múltiples riesgos potenciales, contrariamente
si se ha creado una socioconciencia de riesgo hacia el tabaco. (Piédrola, G. y cols. 1988;
248
Revista Española
de
Drogodependencias
Bach, Ll. 2000)
Continúan según los datos de la encuesta
de la percepción social en la población general ( Megías, E. y cols. 2.000) sin interpretarse
como “drogas” por determinados estratos de
la población, ni las bs. alcs., ni el tabaco, si bien
este último se acepta que puede ser dañino
para la salud.
El DGPNSD (OED,2003), permite elaborar
una evolución temporal del consumo de alcohol en España entre la población comprendida
de 15 a 25 años de edad, desde 1995 al 2001.
Es claro que el número de personas que habian consumido en 1995 y en el 2001 eran en
los ultimos 12 meses de cada uno de dichos
años, el 68’2 a 77’4, a su vez en los últimos
30 dias era de un 53’0 y un 63’8 y finalmente
el consumo diario pasaba de 14’6 a 15’3, a
pesar que por razones que desconocemos,
algunos estudios como el Icsa-Gallup 1980,
el Navarro,J. de 1984, el M.Agricultura 1998,
apuntaban a un descenso del consumo.
Contrariamente si consideramos el consumo de la población entre los 15 y 65 años, se
observa un aumento progresivo en todos los
años. En 1995 el grupo de hombres consumidores era de un 68’4% y en el 2001 era del
76’1%. En las mujeres en 1995, correspondia
el 38% y en el 2001 al 51’4%. Es importante
señalar que el crecimiento del consumo de
alcohol entre las mujeres de 15 a 19 años,
que de 37’7% de consumidoras en 1995,
pasa al 49’3 % en el 2001. Esta incorporación
de mujeres jóvenes al consumo de bs.alcs.
es un aspecto muy llamativo del cambio de
costumbres y rutinas de determinados hábitos sociales, en los últimos años. Todos los
datos nos indican que tanto para los hombres
como para las mujeres, las edades de mayor
consumo de bs.alcs. están comprendidas de
los 20 a los 30 años.
30 (3 y 4) 2005
Francesc Freixa
Por otra parte en la población juvenil, según el DGPND (OED 2003), existen nuevas
pautas o patrones de consumo de alcohol.
En la población juvenil, se caracterizan por
concentrarse en los fines de semana, fuera del
hogar y en contextos considerados de ocio y
todos los datos observacionales indican una
busca intencionada de la embriaguez, obtenida
con combinados y cerveza.
En la población general, en los dias laborables la bebida más consumida, sigue siendo el
vino, con un 11’5% y la cerveza con un 8’5%,
el patrón de consumo que se modifica los
fines de semana, aumentando el sonsumo de
cerveza un 22% y el de vino un 17’5%.
En su conjunto todos los datos indican un
aumento considerable de bs.alcs. durante los
fines de semana, tanto en la población general,
como en los grupos más jóvenes. Sigue aún
manteniéndose la costumbre sociocultural del
consumo diario de vino y añadir destilados o
licores, los fines de semana.
Si a ello añadimos las evidentes combinaciones con cannabis, psicofármacos y estimulantes,
incluyendo la cocaina, el riesgo potencial de
sociopatologias, aumenta proporcionalmente
a la exposición conjunta de las bs.alcs. y otras
substancias. Es importante señalar que todos
los datos indican que las mujeres adolescentes
(14-18 años) y jóvenes (19-24 años), han
contribuido a aumentar la población afectada
por los riesgos del consumo de las bs.alcs.
(Gómez-Moya,J.2005)
En las bs. alcs. el desarrollo evolutivo somático y cultural, con la escolarización, constituye
un período de especial interés, para perfilar
el riesgo potencial del inicio precoz del uso
de las bs. alcs. En la mayoría de casos el inicio
de las primeras libaciones alcohólicas se ha
realizado en el entorno familiar y evaluar las
actitudes familiares culturalmente positivas a
dicho uso, es una de los indicadores de des30 (3 y 4) 2005
conocimiento del riesgo y aun lo que es más
conflictivo, el convencimiento de que las bs.
alcs. “son buenas y sanas” (Rodríguez-Martos,
A.1976) (Mendoza, R.1994)
El desarrollo de las relaciones sociales, ajenas al medio familiar, en un contexto sociocultural positivo para las bs. alcs., la relación con
el otro sexo, el período del Servicio Militar, en
especial en los países que es o era obligatorio,
puede ser un período crucial para, dentro de
una situación de “normalidad”, aumentar la
ingesta y modificar la forma de percibir sus
efectos.
En la mujer el período de la adolescencia,
el noviazgo y el intento de la convivencia
en pareja o la boda, puede ser un período
crucial para la modificación de determinados
hábitos de ingesta de bs. alcs. (Gómez – Moya.
J. 2005)
Consideraciones
históricas sobre las
bs. alcs.,sus efectos
negativos sobre la Salud y
su abordaje terapéutico.
Un breve repaso a la historia de la medicina
en general y de la psiquiatría / psicología en
particular es muy aleccionador ( Cassinelli,
B.1942; Guerra, F. 1985, 1989) para la conceptualización y estudio de la evolución de
las distintas valoraciones de la embriaguez,
intoxicación, dependencia y toxicomanía
alcohólica.(Freixa, F.1999; Edwards,G.2000)
Hay que señalar que cuando la atención
psiquiátrica se integra en la medicina hospitalaria convencional y esta especialidad es una
actividad médica más en cualquier Hospital
General, con camas para ingresos psiquiátricos, los prejuicios médico-sociales respecto
a la “enfermedad mental” disminuyen y los
abordajes de los pacientes - entre ellos los
Revista Española
de
Drogodependencias
249
Salud pública y bebidas alcohólicas
“alcohólicos” – adquieren, aunque lentamente
y no en todos los contextos, características
técnicas.
A su vez la institución sin retorno, el manicomio, a mediados del siglo XX, también
intenta cambiar su perfil y asumir en sus
funciones el papel de Hospital Psiquiátrico.
La sanidad, globalmente, al profundizar en
los estudios de Salud Pública y Epidemiología
introduce en la clínica práctica la denominada «medicina social». Y con esta evolución
y cambio substancial, quedan patentes las
relaciones que existen entre las patologías
conductuales o psiquiátricas con el medio sociocultural, laboral (Megías, E. 1996; RodríguezMartos, A.1998) y el nivel de conocimientos,
e incluso la realidad político – económica y
las enfermedades.(McKeown, T. 1990; Porter,
R.1989)
Es cierto que estas modificaciones deseables, no están generalizadas más por
razones político-económicas, que por consideraciones de Salud Pública, Epidemiológicas,
etc. (Edwards, G. y cols. 1997; Cavanagh, J. &
Clairmonte, F. 1986)
En algunos países existe una ausencia, en
los curriculums de las facultades de medicina,
enfermería, psicología, escuelas de profesionales de los servicios sociales, etc. del abordaje
del alcoholismo, del tabaquismo o incluso de
otras drogodependencias, en contradicción,
en ocasiones, con los datos en Salud Pública
y Epidemiología, del propio país.
La Atención Primaria de
Salud y las bs. alcs.
Desde la perspectiva preventiva y de
Salud Pública es muy importante el intento
de abordar todos los conflictos de salud asociados al consumo de bs. alcs. en la Atención
Primaria de Salud. Dado que diversos estudios
250
Revista Española
de
Drogodependencias
han indicado que un grupo importante de
bebedores excesivos puede por lo menos
reducir el consumo de bs. alcs. (Kaner,EF.
et al. 1999; Cornuz,J. et al.2000; Aalto,M. et
al.2001) es imprescindible sensibilizar, motivar
y proporcionar preparación y recursos para
que la Atención Primaria, que es la puerta
de entrada al sistema sanitario pueda iniciar
el aconsejamiento y tratamiento de los conflictos de salud asociados al consumo de bs.
alcs. con la misma competencia y sensibilidad
que es capaz de hacerlo en las enfermedades
cardio – respiratorias que con tanta frecuencia se encuentran claramente asociadas al
tabaquismo.
Nadie considera un fracaso, en principio,
que el paciente continue con el hábito tabaquico apesar de sus patologias respiratorias,
dentro de ciertos límites, esta misma actitud es
deseable frente al bebedor con consumo aun
moderado. Con el bebedor con un consumo
de riesgo o inoportuno, perjudicial o “abusivo”
y con el paciente claramente afecto de la EAP
(dependencia – adicción a las bs. alcs.) con
o sin patologias orgánicas, el tratamiento depende de los recursos humanos y materiales
que disponga la Atención Primaria de Salud
y de la existencia de recursos asistenciales
especializados coordinados con Asistencia
Primaria.
Todos los datos actuales indican que si la
Atención Primaria esta motivada, entrenada
y con recursos sufiencientes, en especial de
tiempo, la intervención precoz o temprana,
con el aconsejamiento adecuado es factible,
preventiva y eficaz.. Hay que recordar pero,
como en el caso del tabaco que las medidas
preventivas más eficaces como nos recuerdan
Room,R y cols. (2005) son aquellas que ya
han sido puestas a prueba en otras latitudes;
estas han sido las politicas de gravamenes o
impuestos sobre las bebidas, las actuaciones
dirigidas eficazmente a una disminución objetiva y real de la disponibilidad , el etiquetaje
30 (3 y 4) 2005
Francesc Freixa
de advertencia y todas aquellas medidas juríco – legales dirigidas a evitar daños a terceros
estando bajo la influencia de las bs. alcs. sea
en accidentes de tránsito, de trabajo, violència
doméstica, tumultos callejeros, deporte espectáculo, fiestas populares multitudonárias, etc.
Los datos más recientes indican claramente
que las bs. alcs., como se ha indicado intervenien causalmente an más de 60 patologias
actualmente clasificadas y diagnosticadas
(Rehm,J. et al. 2003) es interesante señalar
que los cánceres de boca, faringe, esófago,
hígado y mama, estan en el listado de estas
patologias asociadas al consumo de bs,. alcs.
como la cardiopatía isquémica, el derrame
cerebral hemorágico e isquémico, más las
tradicionalmente acceptadas patologias hepáticas, la dependencia - adicció o EAP. Todos
estos datos se han obtenido aceptado que en
general “la exposición al alcohol se mide a la
baja y los trabajos presenta casi siempre un
cantidad insuficiente de personas” pero ello
no impide como los metanálisis estadísticos
han demostrado , que en el caso del cáncer
de mama, el aumento promedio de consumo incremeta proporcionalmente el riesgo
(Room,R.2.005)
Uno de los aspectos más importantes de
las actuales investigaciones, es que demuestran
un incremento de sufrir trastonos coronarios
graves en bebedores con pautas de beber
irregular aun que el volumen sea bajo si se
les compara con abstinentes (McElduff,P. et al.
1997; Murray, RP. 2002)
Pero la complejidad de las consecuencias
sobre la Salud de las bs. alcs. como se indicado
al intentar sensibilizar la Atención Primaria de
Salud no se agota en la EAP o dependencia
– adicció alcohólica, Hemström,O (2001),
en una investigación pocas veces citada en
los trabajos que recomiendan dosis bajas de
alcohol como “prevención” en el que estudia
30 (3 y 4) 2005
13 paises de la Europa Occidental, cita España
como un país donde “mayor consumo se
relaciona con una mayor incidencia de
cardiopatia coronaria”.
La conclusión más importante de todos
estos nuevos hallazgos esta en relación a que
el “consejo supuestamente preventivo” de
tomar una dosis baja de alcohol, vehiculazada
en una bebida alcohólica., no sólo tiene el
riesgo en un sujeto abstemio de iniciarlo en
la carrera de la dependencia – adicción alcohólicas (EAP) si no que incluso realmente no
sea preventivo, dada la necesidad de una una
regularidad en la ingesta de una baja cantidad,
que en muchas ocasiones no se cumple, en la
mayoria de la población general, ( aun más
en la Europa del Sur vitivinícola) dados los
aumentos porcentuales de fines de semana,
festivos, reuniones familiares, bodas, bautizos,
velatorios, etc.
Por otra parte, las características socioculturales del consumo y el entorno proalcohólico de la sociedad ha sido estudiado por
el Dr.Batel,P. de la Unidad de Tratamiento de
Alcohólicos del Hospital Beaujon de París.
Sus observaciones coinciden con los datos
de Edwards,G.( 1986,1987) Freixa,F (1996)
en que existe un grupo de bebedores, más
en los países vitivinícolas, que han adquirido
una tolerancia biofarmacológica al alcohol
por su manera iniciática y de uso de la bebida, dado que aumentan progresivamente las
cantidades en el curso de 5 / 10 años y no
presentan, aun, manifestaciones conductuales
– comportamentales y por lo tanto entorno
y el afectado consideran que su consumo es
moderado, al no detectarse embriaguez ni
manifiestar conductas alteradas evidentes.
“Estas personas que presentan un elevado
riesgo de enfermeda alcohólica hepática,
de polineuritis o de cáncer....son las que
deverian ser ayudadas y no aconsejadas a
Revista Española
de
Drogodependencias
251
Salud pública y bebidas alcohólicas
una moderación, que a criterio del Dr. Batel,
P. (2005) “es una supercheria condicionada
por intereses económicos” no de Salud
Pública.
Puesto que la adquisición de la conducta
de bebedor, de ingestión de bs. alcs., es un
comportamiento complejo en cuyo aprendizaje, factores cognitivos, socio-culturales,
el refuerzo de los efectos bioquímicos de
tipo neurobioquímico (neuroadaptación) y
los biometabólicos (hepáticos) consecuencia
directa de los efectos biofarmacológicos del
alcohol etílico o vínico, forman un constructo
complejo en el que técnicas simples – supuestamente terapéuticas - no son operativas,
recuérdese, en otro contexto, el film “La
naranja mecánica”.
De la misma manera que el aprendizaje
del beber, cuando no se refiere a la necesidad
fisiológica de la ingesta de agua, forma una
sucesiva superposición compleja y enmarañada de aprendizajes y conductas sociales
adaptativas; no sólo en las áreas vitivinícolas
sino en las de la cerveza y en los aguardientes
compartidos en sus distintas presentaciones
por todas las culturas (coñac, brandy, vodka,
tequila, ron, whisky, etc.), la ingestión de bs.
alcs. se pretende vender como «cultura» y
se asocia a un proceso antropológico supuestamente ancestral.
Todo este conjunto de exposición a las bs.
alcs. tiene pero consecuencias sobre la salud
en todas sus dimensiones: físico – somáticas,
personales, familiares y en el entorno social
y no sólo afectan ala población adulta trabajadora sino a todos los estratos i estatus de
la sociedad.
El proceso de enfermar, puede ser lento,
tanto en la adquisición de la conducta relacional anómala con las bs. alcs., como por las
dificultades en la identificación de la misma
252
Revista Española
de
Drogodependencias
por el propio afectado y sus allegados como se
ha indicado. La tipificación y la adquisición de
los rasgos de conductas considerados característicos de la enfermedad alcoholica primaria
o asíndrome de dependencia del alcohol
(EAP o SDA) se desarrollan de una manera
diacrónica, pero la expresión conductual no en
todos los ámbitos culturales y geográficos, es
sistemáticamente una embriaguez. En muchas
ocasiones sin embriaguez franca se puede
tipificar al paciente como «alcohólico clínico»,
finalmente el acontecimiento que motivará la
consulta será sincrónico.
Factores socioculturales
que condicionan
diagnóstico y tratamiento.
Un factor sociocultural, no baladí, de los
técnicos implicados en el abordaje y tratamiento de la enfermedad ha sido y continua
siendo a nuestro criterio, el calificativo de
«crónica» aplicado a la enfermedad alcohólica.
Es conocido, con relación a la estructura
de la atención sanitaria, que calificar a una
enfermedad y a un enfermo de «crónico»
condiciona un determinado nivel de desinterés, en ocasiones falta de atención hacia los
afectados y una evidente actitud de «nihilismo
terapéutico» y un interés ambivalente en la
investigación.
En todos los casos en lso que aparece el
consumo de bs. alcs. ello origina el rechazo de
un sujeto que no sabe «controlarse»; pero de
hecho muchos profesionales desconocen con
detenimiento, la gravedad de la vinculación
bioquímica que comporta el etanol concomitantemente a los factores socioculturales,
antropológicos y económicos que refuerzan
las conductas de uso de las bs. alcs. en contra-
30 (3 y 4) 2005
Francesc Freixa
dicción con la propia experiencia adversa
del usuario adicto. (Goldstein, A. 1995)
En el fondo, muchos profesioanles honestamente, piensan que no saben beber. Por
otra parte en el largo periplo de los alcohólicos, conceptualizados como “viciosos” –con
toda la carga moral que ello significa- en
la institución paradigmática de la psiquiatría
convencional hasta bien entrado el siglo XX,
el manicomio, en el que realmente ingresaban
con trastornos encefalopáticos finales, ya que
hasta Jellinek (1960), no se había intentado un
estudio del enfermo y de la enfermedad, que
hiciera entender la sociopatología asociada al
consumo de bs. alcs. con características de dependencia psicosocial,7 como una enfermedad
evolutiva, en la cual la abstinencia del tóxico,
podía significar el inicio de la curación, compensación o control de la EAP. En definitiva
la desaparición de los signos y síntomas que
motivaron en su día, la consulta.
La mayoría de alcohólicos, como buenos
toxicómanos, antes de cualquier consulta han
intentado tratarse «a su manera», es decir
intentando «espontáneamente» la adquisición
del autocontrol para conseguir “beber sin
síntomas”. Es significativo que los propios fracasos, la propia experiencia, no les han hecho
plantearse la supresión del tóxico.
En muchos casos la continuidad y la
progresión de la EAP, está condicionada
socioculturalmente, no solo por conductas
reiteradas de ingestión, sino por el «refuerzo»
del entorno, que al moralizar o psicologizar
en exclusiva, a la enfermedad, explica, justifica
o hace comprensible (?) la reiteración de la
ingesta, que paradójicamente el propio afectado no comprende ni entiende y por lo tanto
la padece o sufre.
En muchas ocasiones las crisis de ruptura
de pareja, los altercados familiares, la repercusión sobre los hijos, los conflictos laborales
30 (3 y 4) 2005
/ profesionales, etc. intentan resolverse con
un comportamiento que en los grupos de
discusión terapéutica (GDT) se califican
como «el desafío» o «el desplante» que es
propuesto por el afectado y aceptado por sus
allegados: el paciente se propone demostrar
que es capaz o de reducir drásticamente las
cantidades que bebe o de cesar temporalmente la ingesta, al lograrlo en un período de
semanas o meses, se hace evidente que no
es alcohólico (?).
Pero precisamente Jellinek en la pauta evolutiva de la EAP, muy útil para una entrevista
semi-estructurada de los pacientes y familiares
describe, esta eventualidad en el item. 14:
14.- Período de abstinencia. Un día o más,
incluso semanas o meses; absoluta o reducción
de la ingesta (dosificación).
- Bebe diariamente o ha estado algún
tiempo sin beber nada o bebien o menos?
(dosificación).
- Cuánto tiempo?
(Freixa, F. y cols.1988).
La capacidad de abstinencia total o la «dosificación» – temporal - es precisamente un
síntoma de la EAP en esta etapa.
La conservación de una capacidad de abstinencia, limitada en el tiempo, o de reducción
de las cantidades (“dosificación”) es una
trampa, pues al reiniciarse la ingesta, la reaparición de los síntomas, que en su momento
aconsejaron “parar” puede o ser lenta y progresiva, tanto por irse fraguando una situación
conflictiva – personal, relacional, social - como
de los signos o síntomas de organicidad o en
otras ocasiones, en especial si no es el primer
intento, se restablecen todos los signos y síntomas de las patologías de conducta y biológicas
con prontitud (horas o días).
Después de un tiempo de “dosificación”
o pseudoabstinencia, 8 en general de meses,
culminará con la aparición de una nueva
Revista Española
de
Drogodependencias
253
Salud pública y bebidas alcohólicas
crisis (conductual o somática), que nos resituará en la conflictividad de la cual se había
partido, aunque los motivos o los síntomas
aparentes, puedan ser otros. En general, en
esta situación, las manifestaciones leves de
abstinencia pueden estar presentes. (Jellinek,
E.M.1960) En otras ocasiones la reiniciación
de la ingesta, conlleva de manera inmmediata
a los niveles de conflicto iniciales (días y en
ocasiones horas).
Desgraciadamente, estos días, semanas o
meses de dosificación o de falsa abstinencia,
se repiten en diversas ocasiones en la historia
natural de la enfermedad y en cada intento
el periodo de «control» es mas corto y la
reiniciación de la ingesta más tempestuosa
y conflictiva.
En muchas ocasiones la crisis - ruptura que
motiva la consulta, resultado de un reinicio,
con pérdida de control inmediata o con un
progresivo deslizamiento (meses) aboca -en
ambos caso- a una situación aún más comprometida y compleja que la que motivó el
cese previo temporal de la ingesta.
A veces él reinicio de la ingesta significa una
agravación o empeoramiento evidente de algunas de las manifestaciones de “organicidad”
más alarmantes y llamativas de alguna de las
EAS. Si bien todos los datos observacionales
anteriores eran el resultado de la denominada
“experiencia clínica”, en un equipo multidisciplinar y del seguimiento continuado de casos,
las coincidencias con los aspectos globales del
estudio prospectivo de Vaillant, G. son muy
significativas, como veremos más adelante.
De hecho, la macroinvestigación “prospectiva” de Vaillant, con sus datos ha modificado
y cambiado muchos de los supuestos convencionales del abordaje y tratamiento de
la enfermedad alcohólica en determinados
contextos de USA.
Vaillant, había iniciado sus observaciones y
254
Revista Española
de
Drogodependencias
sus publicaciones novedosas antes, sorprendido por sus propios hallazgos, en 1982 escribe
un artículo, previo a la publicación del libro,
que se le publica en British J. Addiction, 78: 317
- 326. en 1983, y en el que, como nosotros
hemos insistido reiteradamente “nadie bebe
por que tiene problemas, todos tienen problemas por beber”, (“Is Alcoholism the cart
or the Horse to Sociopathy?) el hábilmente
señala que durante años se ha colocado el
carro delante del caballo, entendiendo que el
caballo es la bebida y el carro los conflictos y
problemas de una enfermedad que se origina
por la “exposición” y es en consecuencia una
“sociopatía”, como defendía el Dr. Bogani, en
la década de los años 60 / 70 del s.XX en
nuestro medio.
Que la afectación orgánica, aunque secundaria, es evidentemente el resultado de la
historia natural de la enfermedad, es decir de
la conducta de ingesta. Es algo comúnmente
aceptado.
Pero la complejidad del comportamiento
alcohólico, quedó evidenciada en las profundas divergencias detectadas, en los sistemas
convencionales de estudio retrospectivo
médico y contrariamente con un abordaje
en sentido inverso o prospectivo como el de
Vaillant (1983 - 1993).
Un estudio prospectivo,
nuevos datos para la
aproximación a la realidad
clínica.
Contestar como contesta Vaillant, G. (1983
–1993) en su «The Natural History of Alcoholism»(1983) «The Natural History of
Alcoholism.Revisited»(1993) es, avanzando
el trabajo pionero de Jellinek, centrado y definiendo el problema de los alcohólicos (SDA
30 (3 y 4) 2005
Francesc Freixa
o EAP) y de los «alcohólicos clínicos» no en el
marco de los prejuicios explicativos profesionales asociados a determinadas concepciones
culturales -positivas o negativas- sobre las
bs. alcs., Si no en el estudio de las diversas
variables significativas prospectivamente. Es
imposible, resumir la extensa obra de Vaillant,
pero tenemos que señalar, que al contestar, sistemáticamente, con el estudio prospectivo de
casos y el seguimiento de un grupo control
de “alcohólicos clínicos” a las cuestiones que
vamos a señalar sucesivamente, en la obra de
Vaillant, se modifican substancialmente determinados prejuicios de “escuela” referentes a la
complejidad del proceso terapéutico.
¿Síntoma o enfermedad?
Vaillant, G.E. y en relación con determinadas
observaciones de Griffith Edwards, (1982)
de los años 1980 a 1982 acepta que pueda
existir el SDA sin que la denominada «pérdida
de control» (loss of control) sea un criterio
necesario y absoluto. Señala, con especial
énfasis, que los sujetos en los que “la ingesta de bs.alcs. va de una manera sucesiva
condicionando sus comportamientos y la
ingesta se transforma en un «continuum»,
sean cuales sean las diferencias individuales, los consumidores - en estas condiciones - terminan finalmente en un «modelo
común» que hace difícil un diagnóstico
equivocado.”
Curiosamente se repite un contenido común de los G.D.T. de nuestro medio: «Nada se
parece más a un alcohólico que otro alcohólico, sea cual sea su trabajo / profesión, cultura,
nivel social, etc. mientras ingieren bs.alcs.»
Vaillant añade: «..una razón para definir el
alcoholismo como un desorden que afecta
a la propia vida...(es el resultado)...de la
30 (3 y 4) 2005
observación, documentada, en el estudio
prospectivo de que aquellos alcohólicos
que han conseguido una abstinencia estable no eran psicológicamente más sanos
que aquellos otros que han persistido
crónicamente en la ingesta». El estudio
prospectivo no permite, en ningún momento,
con significación estadística, indicar, afirmar o
sugerir que la relación con el alcohol sea un
síntoma de conflictos en los “estratos profundos de la personalidad”.
¿La enfermedad es progresiva?
Cuando el autor habla del seguimiento
realizado en una cohorte de 100 «alcohólicos clínicos», recuerda que sólo 24 seguían
bebiendo y viviendo, la mayoría de ellos
marginados (homeless), con ayudas sociales
y sucesivos reingresos, 67 habían muerto y
sólo los 16 abstemios habían aumentado su
calidad de vida y actividad personal.
Una vez desarrollado el alcoholismo y se
ha manifestado la supuesta predisposición;
en realidad se ha adquirido la condición
biometabólica de alcohólico es un desorden persistente y continuado, con idénticos
resultados para todos: muerte directa o indirecta relacionada con la ingestión de bs. alcs.
y mejoría con abstinencia.
Algunos bebedores, en especial los adolescentes y los jóvenes, pueden emplear las
bs. alcs. como alteradoras de la conciencia,
para obnubilarla o modificarla y ser capaces
de comportamientos fuera del marco de los
modelos socialmente admitidos. Muchos de
estos jóvenes bebedores sugieren el patrón
de «abuso de alcohol»; estadísticamente no
todos evolucionarán irremediablemente,
hacia el modelo «alcohólico clínico», aunque
epidemiológicamente sea el “riesgo atribuible”
más evidente.
Revista Española
de
Drogodependencias
255
Salud pública y bebidas alcohólicas
¿Existe una premorbilidad al etanol?
como intento erróneo de automedicación.
Los datos más significativos del estudio
prospectivo tanto de la muestra global
(n=600) divididos en universitarios privilegiados socialmente (n=200) como de obreros
(n=400) puede resumirse en:
En el estudio prospectivo de los universitarios (n=200) que desarrollan una EAP con o
sin EAS y que logran la abstinencia y la mantienen, este hecho no comporta depresión o
angustia, ni conflictos familiares, ni aislamiento
o marginación profesional o social (en el club,
en las actividades lúdicas,...) que sí eran las
características significativas y presentes cuando
existía la ingestión de bs.alcs. y expresión del
conflicto en los «universitarios».
«En la mayoría de futuros alcohólicos
no es posible demostrar, en términos de
estabilidad psicológica, que sean -significativamente- diferentes de futuros bebedores
asintomáticos...» «...al tener que descartar
infancias infelices, pertenecer a familias
multiproblema, depresión, ansiedad, como
causas de mayor peso en la etiología, no
querría - dice - negar la importancia de
estos factores en el alcoholismo, pero estos
son causa de empeoramiento en cualquier
enfermedad crónica».
La investigación prospectiva evidenció que
las variables a destacar eran:
La cultura de grupo con relación a las bs.
alcs. y la existencia de alcoholismo familiar,
eran significativas para el riesgo de ser, en un
futuro, alcohólico.
El antecedente familiar, con una familia
perfectamente estructurada; era un riesgo
estadístico de probabilidad cinco veces más
alta de ser alcohólico que en sujetos con
familia multiproblema.
Todas las variables estudiadas insisten en no
poder relacionar prospectivamente, las dificultades de relación con las bs.alcs. con la existencia de trastornos psicológicos previos.
¿Es peor el tratamiento que la enfermedad?
Es evidente, en el estudio de Vaillant, que
el seguimiento de los alcohólicos clínicos
(n=100) permite contestar que nunca. Al
parecer le fue difícil encontrar casos, estadísticamente significativos, que eligieran el alcohol
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Revista Española
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Drogodependencias
En el grupo de «alcohólicos clínicos» y en
los «obreros», la adaptación y la percepción
subjetiva de «felicidad» eran -estadísticamente- de una significancía evidente y sorprendente en el caso de los que permanecían
abstemios y aumenta aún más, si se compara
con los usuarios activos de las bs.alcs. en
ambos grupos.
«Cuando un grupo de alcohólicos en
remisión de su sintomatología, se compara
con alcohólicos en activo, sistemáticamente, la abstinencia aparece como una fuerte
e intensa asociación con la satisfacción
subjetiva y la adaptación social objetiva».
(Vaillant, G.E. 312p.)
“Aunque llegar a una mejor manera de
vivir, que la de antes de iniciarse el conflicto,
parece requerir años de convalecencia, no
meses, es necesario, que en los alcohólicos
recuperados la cualidad del reajuste social,
no se evalúe, con garantía, hasta que hayan
pasado, como mínimo los dos primeros
años de abstinencia”. (Vaillant, G.E. 313p.)
En el grupo de “obreros” (n=400), en un
número significativo de casos y a pesar de una
severa dependencia, la abstinencia se mantuvo
de una manera estable, después de una experiencia negativa grave e importante, en la que
se combinan factores emocionales y de gran
30 (3 y 4) 2005
Francesc Freixa
riesgo social (abandono del hogar y los hijos
por parte del cónyuge, despido y pérdida del
trabajo, problemática familiar, intervención policial - judicial por embriaguez, detención, etc.)
esta abstinencia considerada “espontánea”
- sin tratamiento - se comprobó con mayor
frecuencia en alcohólicos con graves trastornos sociales y más jóvenes (antes de los 40 -45
años), que en los “universitarios” privilegiados,
que habían sido seleccionados con el supuesto
de una buena “salud mental”.
¿Es posible el bebedor controlado?
“...los alcohólicos de mediana edad que
han precisado tratamiento de desintoxicación, que intentaron reiniciar la ingesta, se
encontraron con una situación análoga a
la de conducir un automóvil sin rueda de
recambio, el desastre generalizado es sólo
cuestión de tiempo”. (Vaillant,G.E.315p.)
Si un alcohólico ha llegado a establecer
con el uso de las bs.alcs. y sus efectos una
significativa relación comportamental y social,
es decir una potente “neuroadaptación” y
ha precisado tratamiento -como sucede con
el 95 - 98 % de nuestros clientes- “volver
a beber sin síntomas es la excepción, no
la regla”. Para confirmar estas experiencias
consúltese a Edwards, G. (1985) y a Pendery
y cols. (1982).
Pero tanto los usuarios “abusivos”, inoportunos o perjudiciales o los afectos de la enfermedad alcohólica primária, en todos los casos
los datos observacionales y los experimentos
controlados sugieren que las bs. alcs. son capaces de facilitar reacciones de inmediatez de
respuesta de tipo agresivo según condiciones
y circunstancias ambientales. Los datos experimentales sugieren una menor capacidad para
evaluar el riesgo y lo que psicopatología clásica
30 (3 y 4) 2005
se denomina “reducción o pérdida del juicio
crítico” . Diversos trabajos han sugerido que
los cambios en el nivel de cantidades consumidas en relación aun gradiente que va de sur a
norte – en Europa - indica que aumentar un
litro de alcohol absoluto “per capita” aumenta
la tasa de violencia sobre personas / homicidio
en casi más del doble tanto en el sur como
en el norte. (Shkolnikov,VM. et al.1997) Pero
el contexto del consumo, la habitualidad del
mismo y la tolerancia social proalcohólica, es
decir las pautas de ingesta, pueden condicionar
un mayor o menor riesgo de actos asociales
violentos. (Rehm,J.2004)
Medidas Preventivas
Como se ha intentado señalar en el curso
de este trabajo si bien la sensibilización, preparación técnica y motivación de la Atención
Primária de Salud es una de los principios
preventivos significativos al originar un aconsejamiento de reducción de cantidades y
frecuencia de las UB consumidas y a su vez
es una fuente de detección de casos con
patologias orgánicas claramente asociadas al
consumo de bs. alcs. y finalmente un mayor
nivel de diagnóstico de afectados por una
EAP o SDA e incluso uan detección de las
EAS (enfermedades alcohólicas secundarias)
claramente orgánicas o las múltiples patologias
asociadas al consumo; desgraciadamente es
un sistema de recogida de casos establecidos
y no un método eficaz que permita, de una
manera medible en el curso de 5 / 10 años
una sensible reducción de la exposición.
La educación y la información pública, de la
manera sesgada e incompleta que se realiza
en nuestro medio, es popular pero ineficaz,
dado que incluso lo es en paises con información y educación más realista y objetiva. Es
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de
Drogodependencias
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Salud pública y bebidas alcohólicas
importante conocer que todos los métodos
exclusivamente dirigidos a la población escolar,
como los relacionados con el tabaquismo,
no son duraderos. Ninguno ha demostrado
un efecto medible tres años después, incluso
en universitarios. (Foxcroft,DR. et al. 2003;
Wechsler,H. et al.2003)
Solo cuando los gobiernos han sido capaces
de contrarestar firmemente los esfuerzos de
la promoción, publicidad y esponsorización
de las bs. alcs. ha sido posible una reducción
medible de la exposición. (Casswell,S. et al.
1989)
Es el control real sobre los precios y el
riguroso cumplimiento de las medidas de
limitación de la disponibilidad (edades mínimas de compra / consumo) (Kuo,M. et al.
2003;Vuchinich, RE. et al. 1999) son acciones
realmente eficaces aun que políticamente
impopulares.
Además de los controles sobre los precios,
la restricción en la venta de bs. alcs. en determinadas zonas (estadios deportivos y sus
alrededores), control de horarios de venta y
el establecimiento de “licencias” para poder
vender bs. alcs. han demostardo ser medidas
eficaces, como señala Room,R.(2002) “és
irónico que la eficacia de estas medidas
se haya conocido a través de estudios
realizados cuando dichas medidas se han
debilitado o suprimido”
A modo de conclusión
Podríamos intentar explicitar que no existe
ninguna duda que factores psicosociales de
aprendizaje condicionados por el entorno
socioeconómico productivo o de mercado
facilitan o demoran el contacto con las bs. alcs.
que contiene en distinta proporción (grado)
una sustanacia , el alcohol etílico, vínico o
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de
Drogodependencias
etanol que los actuales conocimientos en neurociencias, permiten afirmar que mimetizan
en ocasiones y en otras alteran o modifican
el almacenamiento, la eliminación o la liberación de determinados neurotransmisores y
estas alteraciones afectan fundamentalmente
a las regiones cerebrales relacionadas con
la rapidez en los reflejos visuo – motores,
la motivación, las emociones y la memoria,
constituyendo entre todos estos factores los
rasgos de toxicidad, dependencia, tolerancia,
compulsión para el consumo a pesar de la
evidencia del prejuicio personal y del entorno.
(Goldstein, A. 1995). Las bebidas alcohólicas,
todas sin excepción, son capaces de alterar
y modificar el biometabolismo cerebral y
tambie´n de ser tóxicas para otros órganos
y sistemas..
La OMS insiste en la base neuroquímica
cerebral compleja de las patologías físicas,
conductuales y sociales asociadas al consumo.
(OMS, 2.004)
Señala que el tabaco y el alcohol contribuyeron con un 4’1 y un 4’0 por ciento a la carga
de “mala salud” en el año 2.000, mientras que
las drogas ilícitas contribuyeron en un 0’8 %.
Los efectos negativos sobre la salud, sobre
la expectativa de vida y las patologías asociadas, son significativas en Europa y las medidas
para reducir los daños del tabaco, del alcohol
y otras “drogas” tendrán que formar parte de
la respuesta en Salud Pública de la OMS y en
nuestro caso específicamente de la división
europea de Copenhague.
Tenemos que ser sensibles a los conocimientos nuevos en neurociencias y a la vez
las substancias “independientemente de su
condición jurídica, dado que utilizan mecanismos de acción similares en el cerebro,
pueden ser perjudiciales para la salud y
30 (3 y 4) 2005
Francesc Freixa
pueden provocar dependencia. Las repercusiones en Salud Pública son enormes y
requieren un planteamiento integral de
formulación de políticas y elaboración de
programas” (OMS, 2.004)
En último término ello significa, en nuestro
entorno inmediato, que las advertencias de
los riesgos del tabaco sobre la salud, tendrán
necesariamente que hacerse extensivos a
las bs. alcs. y como sucede con las “drogas”
ilícitas, pasar la responsabilidad del consumo,
no exclusivamente a los usuarios, dado que
los actuales conocimientos en neurociencias
permiten afirmar que también las bs. alcs.,
incluido el vino, tienen un riesgo potencial
adictivo y tóxico intrínseco.
Hay que recordar que las bs. alcs. además,
sin necesidad de dependencia adicción, pueden ser causa de muerte por intoxicación y
manejo de un automóvil, o de accidente de
trabajo, por ejemplo, sin que el usuario sea un
drogodependiente de bs. alcs.
El consumidor de bs. alcs. no tiene que
permanecer por más tiempo ignorante de los
riegos potenciales de dependencia – adicción
de la substancia en sí misma, y los restantes
riesgos sobre la salud, por la persistencia de
determinados intereses básicamente económicos.
Son los responsables en Salud Pública de
los Gobiernos o Administraciones los que
tienen que aplicar las medidas informativas:
sensibilización, motivación y recursos técnicos para la Atención Primaria de Salud, el
“etiquetaje de advertencia” semejantes a las
del tabaco, pero para las bebidas alcohólicas., el control de la publicidad, promoción
y esponsorización, control y cumplimientos de las edades mínimas de compra y
consumo, las modificaciones legislativas
30 (3 y 4) 2005
que permitan todas aquellas medidas jurídico – legales para la accidentabilidad de
tránsito , laboral y la violéncia asociada al
consumo de bebidas alcohólicas. Sólo estas
medidas con una aplicación progresiva
de las mismas, teniendo en cuenta que
las políticas sobre los precios son las más
efectivas a largo plazo, etc ... podrán en
un futuro disminuir la morbi –mortalidad
causada por el alcohol.
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30 (3 y 4) 2005
Originales
La cultura del cannabis treinta años después...
unas reflexiones personales.
Oriol Romaní
Antropólogo (URV; GRUP IGIA)
Resumen
En la primera parte del articulo se expone una síntesis de lo que fue la “cultura del hachís”,
que aglutinó a los jipis catalanes a finales de los sesenta, y que el autor estudió a principios
de los años ochenta. En el punto siguiente, se sintetizan los principales elementos de la
actual “cultura del cannabis” en España, haciendo hincapié en el movimiento social que
la sustenta.Y en la discusión posterior se constatan las discontinuidades y continuidades
entre ambos momentos históricos. Entre estas últimas, se subraya el ambivalente lugar
del cannabis, entre la normalización social y su uso como “pretexto represivo”, tanto
en el campo de la política como en el de la salud.
Palabras Clave
“cultura del cannabis”, movimiento social cannábico, política, jóvenes, consumo, riesgo,
salud.
Summary
The first section of this article presents an overview of the “hashish culture,” studied
by the author in the early 1980s, that united Catalan hippies during the late 1960s. The
next section reviews the main features of the contemporary “cannabis culture” in Spain,
emphasizing the social movement that supports it.The following discussion reveals both
the discontinuities and the continuities between these two historical moments. Of special
importance among the latter is the place occupied by cannabis, situated ambivalently
between social normalization and its use as a “pretext for repression” in both public
policy and public health.
Key Words
“cannabis culture”, cannabis social movement, policy, youth, drug consumption, risk,
public health
Correspondencia a:
[email protected]
30
30(3(3yy4)4)2005
263-282. 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
263
La cultura del cannabis treinta años después... unas reflexiones personales.
Résumé
Dans la première partie de cet article on expose une synthèse de ce qui fut la « culture
du hashish » qui agglutinait aux hippies catalans de la fin des anées soixante, et que
l’auteur avait étudié au commencement des anées quatre-vingt. Dans le suivant point,
on synthétise les principaux éléments de l’actuel « culture du chanvre » en Espagne,
insistant sur le mouvement social qui le sustente. Et dans la discussion postérieure, on
constate les discontinuïtés et les continuïtés qu’il y a les deux moments historiques. Entre
ces dernières on souligne l’ambivalente lieu du cannabis, entre la normalisation social
et son usage comme « prétexte répressif », tan dans le champ de la politique comme
dans le champ de la santé.
Most Clé
«culture du chanvre», mouvement social cannabique, politique, jeunes, consommation,
risque, santé.
“Taxista, porta’m al cel,
és que busco feina,
i potser al cel n’hi haurà...”
Taxista, Pau Riba (1967)
Introducción.
En septiembre de 1977 inicié mi andadura
de profesor universitario en el Departamento
de Antropología Cultural de la Universidad de
Barcelona, después de dos años de terminada
la carrera, en los que había trabajado, entre
otras cosas, de gerente de una compañía de
teatro (“popular i català”, eso sí) y de profesor
de historia en un instituto ocupado y autogestionado por profesores, alumnos, padres y
vecinos, experiencia intensa y bastante alucinante, por cierto. En aquel momento, cuando
me llamaron al mencionado Departamento,
tuve que realizar la tesis de licenciatura que no
había hecho antes, si quería tener perspectivas
dentro de la Academia, ya que mi contrato
de profesor ayudante era, en realidad, para
hacer el doctorado. Le estuve dando vueltas
a la cabeza y a lo largo del curso académico
1977-78 redacté mi “tesina” sobre “Droga i
consensus social”. Durante la carrera ya había
264
Revista Española
de
Drogodependencias
hecho un pequeño ensayo sobre la coca en el
Perú, y pensé en ampliarlo con una perspectiva
etno-histórica, a través de un repaso de los
Cronistas de Indias y documentos de épocas
posteriores, hasta la época contemporánea.
Y así lo hice; pero el problema que más me
interesaba, y que me inquietaba a partir de
otro mundo que no era precisamente el de
la Academia, era el de los significados de las
drogas, su manipulación política, en fin, su
relación con la hegemonía ideológica en distintas sociedades. Así que un colega y amigo
que ya estaba en la universidad me animó a
sistematizar mis experiencias y conocimientos en torno al hachís -los estilos de vida de
ciertos fumadores, las ideologías de las drogas,
etc.- como elemento comparativo que me
permitiera discutir teóricamente el rol de las
drogas en la lucha ideológica y en la elaboración del consenso en una sociedad. Cosa que
también hice: no sabía en aquel momento lo
importante que sería para mi vida académica
(y para mi vida en general, desde luego) haberme metido en semejante berenjenal! Dicen
que “la droga engancha”, y debe ser verdad:
han pasado 28 años desde entonces, y aquí
estoy, en una carrera académica y profesional
30 (3 y 4) 2005
Oriol Romaní
en la que este tema ha sido, hasta la fecha, el
eje principal de mi trabajo1 .
Empiezo contando esta historia en primera
persona, (además de por el hecho de que se
me ha invitado a participar en este monográfico como uno de los primeros estudiosos de
la cultura del cannabis entre nosotros) porque
creo que a casi todas las personas a las que entrevisté, con las que conviví durante períodos
determinados, a las que analicé en su vida cotidiana (en aquel momento y hasta ahora), es
decir, a aquellas que en la jerga antropológica
llamamos los informantes (aunque la corrección política esté dejando caer en desuso tal
vocablo) les ocurría lo mismo: no tenían gran
conciencia de estar “haciendo historia”, referido esto tanto al nivel de su historia particular
como de la historia colectiva. Y si es obvio
que la época juvenil es un período decisivo
en la vida de cada persona, quizás no lo sea
tanto que la actividad, tanto personal como
colectiva, de cualquiera pueda llegar a formar
parte de la historia de un grupo social, una
sociedad... Evidentemente, se requiere no sólo
la actividad de la persona o personas a las que
nos refiramos, sino también la presencia de
un estudioso que “dé fe” de aquella actividad,
y que la sitúe en un contexto que le permita
“convertirse en historia”. Al convertir unos
acontecimientos, unos procesos, en objeto de
estudio, los analizamos, por lo cual debemos
categorizar, y esto nos obliga a simplificar, a
cosificar de algún modo el flujo heteróclito,
complejo y contradictorio en que consiste
la vida. Si recuerdo aquí lo que, en definitiva,
forma parte del meollo de los problemas epistemológicos y metodológicos de las ciencias
sociales (y de la ciencia “tout court”), es para
iniciar esta vista atrás previniendo contra un
mal bastante común al afirmar que “cualquier
tiempo pasado fue mejor”, mitificándolo para
oponerlo al prosaico presente, contrastando
30 (3 y 4) 2005
así aquella pureza juvenil de la revolución
contracultural que de algún modo nuestros
jóvenes, en una especie de limbo ahistórico,
continuarían repitiendo (o, lo que no se sabe
si es peor, tendrían la osadía de no repetir),
a los intereses mezquinos y perversos de
unos adultos que, supuestamente, manejan la
historia... ¿quizás porque la han escrito?
La cuestión es que en este artículo, desde
mi punto de vista actual de adulto y de “experto en drogas” en que me ha convertido
el devenir histórico y las opciones personales
que dentro del contexto concreto de este
devenir he ido tomando, intentaré comentar
algunas de las continuidades y discontinuidades que creo más significativas de la cultura
del cannabis en los años 60- 70 y en la actualidad en nuestro país. Para poder hacer esto,
antes señalaré algunos aspectos centrales de
la “cultura del hachís” que estudié en mi tesis
de doctorado2 ; y algunas de las características
más sobresalientes de la actual “cultura del
cannabis”.
Los años sesenta: grifotas,
rockers y jipis3 El proceso de industrialización de los años
sesenta en España significó no sólo un cambio
de modelo económico, sino que fue también
el inicio de profundas transformaciones sociales, culturales y políticas. Si dicho proceso,
pues, con su relativo bienestar (por lo menos
en comparación con los duros años de la
posguerra) permitió legitimar y, por lo tanto,
Bromas aparte, creo que el tema drogas, como
“fenómeno social total” (Mauss) es una muy
buena lente para analizar nuestras sociedades
contemporáneas, tal como argumento en Romaní
(2001). Por otro lado, un resumen de la tesis de
licenciatura está en Romaní (1979).
1
Revista Española
de
Drogodependencias
265
La cultura del cannabis treinta años después... unas reflexiones personales.
alargar por unos años las condiciones políticas de la dictadura franquista, por otro lado
fue el inicio del fin de la misma, pues todas
aquellas transformaciones acabaron haciendo
imposible su continuidad.
En este contexto general de progresiva
complejización de la sociedad y diversificación
de sus grupos sociales es donde hay que situar
la cultura del cannabis del momento o, tal
como la conceptualizaba en la tesis, la “subcultura contracultural” de los jipis catalanes.
Ésta se configuró, principalmente, a partir de
tres corrientes distintas:
a) Los grifotas: hombres pertenecientes
a las capas más bajas de la sociedad, concentrados espacialmente sobre todo en el Barrio
Chino de Barcelona, que habían estado en
el Norte de África con la Legión Española
(además de haber estado en muchos casos
en otras legiones extranjeras), y que de allí habían importado una cierta cultura de la grifa
(forma de presentación de la marihuana), que
no sólo consumían sino que acostumbraba a
formar parte de su modus vivendi. Tanto la
progresiva retirada de las “plazas” españolas
del Norte de África, como las mayores posibilidades que ofrecía el desarrollismo de los
sesenta, fueron factores que influyeron en un
mayor retorno de los mismos a la Península
en aquellos años.4 b) Los rockers: sectores juveniles de clases
trabajadoras o medias que tenían en común
una determinada posición ante la vida, no
elaborada intelectualmente sino expresada
simbólicamente –música, indumentaria, estética, movimiento...- que manifestaba un claro
rechazo al modo de vida y a la sociedad gris
y estrecha que les había tocado vivir, y que
hallaba en el rock y su cultura –que ellos
contribuyeron a conformar- su vehículo de
expresión. Dicha cultura, aunque asomaba a
266
Revista Española
de
Drogodependencias
veces por la radio, estaba apenas en los inicios
tanto de su comercialización y masificación
como de su conciencia como movimiento
cultural. Algunos de estos rockers utilizaban la
grifa de tal manera que les ayudaba a conseguir el “tono” que acompañaba a su modo de
vida (la sala de juegos, el bar, el ligue, el grupito
musical... más allá del taller o la academia), y
a través de la cual contactaron con los otros
grupos que estamos viendo.
c) Los estudiantes: las movilizaciones estudiantiles de los sesentas implican, entre otras
cosas, la creación de unas vanguardias no sólo
políticas sino también culturales entre ellos.
En Barcelona, al año siguiente de las masivas
luchas que llevan a la consecución del Sindicato Democrático de Estudiantes, se llega a
una cierta situación de crisis (1967), en que
algunas de aquellas vanguardias no ven claras
alternativas de ciertos sectores estudiantiles
como la profesionalización política en ciernes, la lucha armada o la “proletarización”.
Quieren empezar a practicar en su vida cotidiana aquello por lo que teóricamente todos
estaban luchando, es decir, una vida digna de
ser vivida; lo que les lleva a interesarse por
la contracultura americana y de otros países
occidentales, algunas de cuyas formas ya se
habían utilizado en el movimiento estudiantil
(formas de lucha, canciones...), lo que coincide
con el descubrimiento de los canutos de grifa,
tanto a través de los mundos marginales de
las Ramblas, como de ciertos intelectuales de
la sala de fiestas Boccaccio, muy enteradillos
Del conjunto de la tesis doctoral, presentada en
septiembre de 1982, sólo se ha publicado un resumen
(Romaní, 1983).
3
El siguiente apartado está extraído de Romaní/
Sepúlveda (2004: 219-220)
4
Ver la historia de un clásico grifota en Romaní
(1983a), una de las historias de vida que formaban
parte de mi tesis de doctorado.
2
30 (3 y 4) 2005
Oriol Romaní
de lo que pasaba en California...
Alrededor del año 1968, la evolución de
estos grupos y los contactos entre ellos en
un determinado contexto sociocultural y ecológico producen algunos cambios cualitativos
que cuajan en la formación de unos nuevos
grupos, con unas características distintivas,
que serán las “culturas del hachís”. Si se destaca precisamente el hachís (y no la grifa o la
marihuana, por ejemplo) como el elemento
simbólico alrededor del cual se tejen estas
culturas juveniles es porque el hachís representa entonces una nueva elaboración de la
cannabis que descubren los jipis catalanes
que vienen de Holanda y de Oriente, que
los grifotas, por ejemplo, consideran como
una droga nueva, y que hará fortuna entre
estos grupos, quizás porque su manejo es
más discreto que el de la hierba (cosa a tener
en cuenta en un momento que empieza la
represión sobre aquellos asuntos), y por el
juego mental que posibilitaba.
La subcultura jipi-frik del momento, pues,
la forman unos grupos muy específicos, de
no más de unos centenares de personas, con
un cierto sentido de la solidaridad entre sus
miembros que, en el intento de vivir la vida
al instante y lo mejor posible, rompen con el
modelo de vida dominante para intentar otros,
tanto a nivel económico como social, ideológico y político, y que tienen en el uso del hachís
–asociado también al ácido, principalmente,
aunque la experimentación con cualquier
tipo de drogas formaba parte de su vida- un
elemento simbólico distintivo. Se ensayan
formas alternativas de actividad económica
–autoproducción, ar tesanías, cooperación,
intercambios interpersonales, importancia de
las actividades expresivas...- de relaciones personales y sociales –vida comunitaria, redes de
tipo mas voluntario que no impuestas desde
30 (3 y 4) 2005
el exterior, libertad sexual, estética, etc.- y de
actividad político-ideológica –importancia de
la espontaneidad, cuestionamiento de la política tradicional (incluyendo aquí la democrática
entonces clandestina), actitudes pacifistas,
ecologistas, planteamiento de las necesidades
“radicales” de los individuos. Aspectos que
luego se desarrollarán, entrando a formar
parte algunos de la normalidad cultural de
nuestra sociedad, y potenciando otras su alternatividad como reivindicaciones sectoriales
o movimientos político-culturales.
Estos grupos están relacionados con otros,
mucho mas minoritarios, de intelectuales o
profesionales (algunos jóvenes profesores
universitarios, arquitectos, cineastas...) que
aunque quizás de apariencia semejante a los
primeros, en cambio en otros aspectos no
rompieron con su vida anterior, sino que sus
contactos con el underground de más allá
de nuestras fronteras –americano, principalmente- fueron precisamente a través de sus
canales profesionales y sociales habituales,
cosa que les permitió presentarse como los
“portavoces de la nueva cultura”. Los consideré como otra subcultura, y los etiqueté como
los jipis de la “gauche divine”.
Sobre estos ambientes Anagrama ha publicado
recientemente el conjunto de artículos de Pau
Malvido en la revista Star de 1977, a partir de
los cuales yo orienté mi investigación (v. Malvido,
2004). También es de gran interés, por el tono de
los artículos, nada épico ni nostálgico, así como por
las fotos y otros documentos, el libro de Nazario et
al. (2004). Otras publicaciones mías que se refieren
de forma más o menos específica a la contracultura
autóctona serían, principalmente, Romaní 1985,
1985a y 1989. Además hay amplias referencias en
Romaní, 2004; y, significativamente, en estos últimos
años ha vuelto el interés por este aspecto específico
de mi trabajo, del que este mismo artículo podría ser
un ejemplo; ver también Romaní, 2002 y Romaní/
Sepúlveda, 2004.
5
Revista Española
de
Drogodependencias
267
La cultura del cannabis treinta años después... unas reflexiones personales.
Pero aquellos otros, los jipi-friks –que
fue en los que centré mi investigación- eran
bastante distintos a los del prototipo yanqui
o nórdico ya que, tanto por sus condiciones
materiales (muchos de estos vivían de ayudas
estatales, lo que entre nosotros era impensable!) como por el contexto socio-político
su vida era mas dura. Se reunían en pisos de
“enrollados” por donde pasaba cantidad de
gente y donde, bajo los efluvios del chocolate
y otras hierbas descubrían nuevas facetas
de la vida, de sus dobles o triples vidas que
muchos de ellos llevaron al principio: la del
“rollo”, la “normal” de trabajo o estudio, y la de
la militancia en grupos izquierdosos. Aunque
sus símbolos externos no fueran siempre muy
espectaculares, hay que tener en cuenta que
llevar según que melenas o vestimentas en
aquella época acostumbraba a ser “un punto”,
tanto a nivel familiar o laboral como de calle:
uno se distinguía, sin duda. Ello coexistió con
la peregrinación por el mundo, la vida más
o menos comunitaria –además de en los
pisos citados de Barcelona- en lugares como
Formentera, La Floresta o masías del interior
de Catalunya, la fermentación de actividades
principalmente de tipo comunicacional (sobre
todo música, dibujo –comix- y pintura, teatro,
literatura...) que luego saldrían al exterior, o
sus movilizaciones: del Recital del Grup de Folk
en La Ciutadella de Barcelona el mayo del 68,
al Festival de Música Progresiva de Granollers
de 1971, pasando por el de Musica Progresiva
del Iris, en Barcelona, coincidiendo con las
protestas por el juicio de Burgos en 1970...5 Los años noventa: el
cannabis otra vez.
Para conocer cual es la situación del cannabis en España actualmente disponemos de los
rigurosos e interesantes trabajos de Gamella
268
Revista Española
de
Drogodependencias
y Jiménez (2003 , 2005). En ellos presentan la
evolución ascendente del consumo de cannabis en España que se produjo, sobre todo,
en la década de los setenta, alcanzando un
primer punto álgido a inicios de los ochenta.
Posteriormente hubo una cierta recesión
(coincidiendo, curiosamente, con el momento
de máxima alarma social en torno a “la droga”
ligada a los problemas de la heroína), para
volver a subir a mediados de los noventa
hasta la situación actual en la que, realmente,
el consumo de cannabis tiene una significativa
presencia tanto en la sociedad española como
en la mayoría del resto del mundo.
Referiré sólo algún dato para hacernos una
idea aproximada del volumen del consumo.
Según la ONUDD (Oficina contra las Drogas
y el Delito de las Naciones Unidas), el cannabis es la primera droga ilícita consumida en
la mayoría de países del mundo. En el bienio
1998-2000 lo consumieron 147 millones de
personas, mientras que en el 2000-2001 eran
163 millones de personas los consumidores,
es decir, casi el 4% de la población mundial
(v. Naciones Unidas, 2003: 146-148). A nivel
español, comparando las Encuestas de Drogas
Se trata de una investigación cuyo informe final se
acabó de redactar en diciembre de 2004, por lo que
todavía no está publicada (Romaní 2004a).
7
Resultado de un repaso en internet en enero de
2005. De todos modos, habría que tener en cuenta
la distancia entre la realidad virtual y la otra, que
seguramente no se corresponderían, tal como ocurre
con el asociacionismo en general en nuestro país.
8
Usó, encargado de las notas y apéndices de la
edición española del libro de Matthews (2002) da la
dirección de 10 de ellas, así como de 11 asociaciones
cannábicas (pags. 251-256). Usó (1996), por cierto,
también ha contribuido a la historización del
cannabis, dentro de su historia de las drogas en la
España contemporánea.
9
Por ejemplo, Markez et al. (2002).
10
Una muy buena síntesis del actual debate en torno
al cannabis medicinal se puede ver en Duran (2005).
6
30 (3 y 4) 2005
Oriol Romaní
en Enseñanza Secundaria (14-18 años) de
1994 y 2004, la han consumido alguna vez
el 18% (1994) y el 36% (2004); consideran
que es fácil o muy fácil conseguir cannabis
el 43,3% (1994) y el 64% (2004); asimismo
los estudiantes entrevistados piensan que
es la droga ilegal cuyo consumo es menos
problemático. Por otra parte, en la Encuesta
Domiciliaria sobre abusos de drogas, realizada
a la población general entre 15-64 años del
año 2001, la había probado el 24,4% de la población; usos más frecuentes se encontraban
en la población de 16-34 años, un 17,3% de
la cual la había probado el último año; y un
22% de 14-18 años la había probado el último
mes. Mientras que en la misma encuesta, pero
del año 2003, los datos más subrayados por
la ministra de Sanidad al presentarla hacían
referencia a percepciones: el riesgo percibido
de su consumo diario había descendido desde
1997, en contraste con el aumento que en
el mismo período había habido respecto al
consumo diario de tabaco e hipnosedantes;
el 60% considera que el cannabis es la droga
ilegal más accesible; y el porcentaje de población que consideraba que el “problema de la
droga” era muy importante pasó del 53,6% en
1995 a 39% en 2003 (v. PNSD, 2004). Estos
datos son congruentes con lo que hemos
encontrado, a nivel más local, en una investigación sobre los jóvenes y la salud en Catalunya,
donde tanto a nivel estadístico como en una
muestra cualitativa de poco más de cincuenta
personas, la presencia del cannabis –muchas
veces de forma cotidiana- es notable6 .
Como era de suponer, el grueso de la
población española que fuma cannabis se
sitúa entre los 15-30 años de edad (los de
20-24 años en primer lugar, seguidos de
los de 15-20 y 25-30), pero el conjunto de
las cifras conocidas son un indicador de la
variedad de consumidores que hay en este
30 (3 y 4) 2005
momento en España: desde la edad, que
incluye a tres generaciones, hasta muchos
otros aspectos sociodemográficos como el
género, la clase o el territorio son muchas las
personas con distintas experiencias, intereses,
orientaciones ideológicas, etc. que, entre otras
cosas de su vida cotidiana, tienen un rasgo
en común que es el de consumir derivados
del cannabis. A lo largo de estos años, a partir
de sus experiencias concretas pero también
con muy distintas influencias, y unos más que
otros, han ido configurando una “cultura del
cannabis” que incluye racionalizaciones de
su uso, determinados tiempos y lugares para
hacerlo, rutinas y normas, etc., es decir, todo
un acervo de conocimientos que, además,
cuentan con un amplio y variado movimiento
social que les sirve de apoyo: 45 asociaciones7 de usuarios que reivindican su normalización;
gran cantidad de tiendas especializadas donde
encontrar desde semillas a toda la parafernalia que puede acompañar su consumo; dos
revistas periódicas, Cáñamo, surgida en el
seno del movimiento cannábico español, y
Yerba, que llegó posteriormente de la mano
de High Time; numerosas páginas web, con
sus correspondientes foros8 ; manifestaciones,
congresos, concursos, copas y mercadillos que
confluyen en encuentros periódicos en diversos puntos (normalmente bastante idílicos) de
España; grupos de profesionales que, desde
distintas instancias (algunas de ellas, públicas9 )
y posturas ideológicas proponen (y debaten,
en el mejor de los casos) alternativas a aspectos de la actual situación que se consideran
negativos; investigaciones e iniciativas para
implementar sus posibles usos medicinales,
como la reciente decisión de la Conselleria
de Salut del gobierno catalán de disponer
de cannabis para ciertas enfermedades en
4 hospitales y unas 60 farmacias de toda
Revista Española
de
Drogodependencias
269
La cultura del cannabis treinta años después... unas reflexiones personales.
Catalunya10 ; y hasta un partido político que
en las elecciones europeas de junio de 2004
obtuvo casi 54.000 votos... (ver la mayoría de
estos aspectos más desarrollados en Gamella
y Jimenez, 2003 y 2005).
Cuando, a principios de los setenta nos
fumábamos los primeros canutos, era difícil
imaginar la expansión del mercado que se
produciría alrededor de aquellas sustancias
prohibidas que, además, tenían un cierto halo
mágico; aunque, reconozcámoslo, entre los
grupos por los que yo me movía, como para
tantos otros, eran unas sustancias eminentemente lúdicas. Cuando, en la primera mitad
de los ochenta, un biólogo fumeta vino a
proponerme la realización de un proyecto de
investigación sobre la cannabis, aquello parecía
una locura; presentamos el proyecto, que tenía
una parte biológica y otra antropológica, a la
CIRIT, el organismo encargado de la investigación en Catalunya y, claro, no nos lo dieron
(¿quizás no era un buen proyecto?); y hay que
ver ahora las potentes investigaciones que, a
pesar de las trabas todavía existentes, se están
realizando en el ámbito de las ciencias “duras”.
Cuando, en la segunda mitad de la misma década, asistía de vez en cuando a las reuniones
–que normalmente se hacían en la librería
Makoki, ya en la plaza de St.Josep Oriol, y que
solían terminar en un bar de la calle Avinyócon libreros, el biólogo, algún abogado y otros
compañeros que se dedicaban a actividades
de lo más diverso, tampoco era fácil hacerse
una idea de que aquello que se estaba gestando -y que acabó siendo la ARSEC, la decana
de las asociaciones cannábicas-, se movería en
un mundo tan rico y complejo como el que
acabamos de esbozar.
Pero así es. En este momento, preconizar
una “unidad de los fumetas”, sea para glori-
270
Revista Española
de
Drogodependencias
ficar un movimiento que, por lo que yo veo,
está bastante renqueante, o para denunciar
la conjunción de oscuros intereses de unos
adultos que poco menos que, con sus discursos y sus negocios, tienen engañados a la
cándida juventud (Calafat et al., 2002, dixit!),
me parece de un simplismo y una superficialidad pasmosa; sobre todo cuando esta visión
se nos pretende hacer colar como científica.
Dentro del movimiento social cannábico hay,
como ya se ha dicho, distintas posiciones: hay
quien sólo quiere que le dejen fumar tranquilo,
quien mira más por el negocio, quien se dedica
más a la vida asociativa y la militancia política,
hay quien está organizado y quien no, quien
está en la F.A.C. (Federación de Asociaciones
Cannábicas) y quien no, hay conflictos entre
unos y otros sectores ... En palabras de Gamella y Jimenez (2005: 49) “Los vinculados a
este movimiento comparten una ideología
difusa que considera los derivados cannábicos como drogas naturales y benignas y su
uso como un derecho legítimo injustamente
reprimido. Apoyan la legalización de la producción y la venta de estas drogas y el fin del
sistema prohibicionista (...) No obstante, en
el movimiento cannábico, convergen tendencias y planteamientos diversos y no del todo
congruentes. De hecho este movimiento tiene
un claro carácter posmoderno en el sentido
de ser al tiempo, un nuevo movimiento social
Pensando en las últimas asambleas de la ARSEC
a las que he asistido, y en algún otro foro semejante,
disentiría en lo del “modo de vestir y comportarse”:
ciertamente, predomina un cierto “estilo”, pero
hay una amplia minoría de aspecto de lo más
convencional. Y aunque estoy de acuerdo con la
última frase, hay que señalar que también existe
quien está ahí... sin ser consumidor! Ciertamente,
estos se podrían contar con los dedos de la(s)
mano(s).
11
30 (3 y 4) 2005
Oriol Romaní
Fuente: PNSD, Control de la oferta (v. PNSD 2004a)
que busca cambiar aspectos de la realidad
social y cultural, un movimiento “de estilo”
que reivindica un cierto modo de vida y hasta
de vestir y comportarse buscando redefinir
identidades a partir de vinculaciones con un
elemento crucial de la experiencia cotidiana.
En algunos aspectos, sobre todo en su defensa
de un derecho que se considera primario y
fundamental, la “cultura cannábica” incorpora
elementos de los movimientos pro derechos
civiles. Pero sobre todo, estamos hablando de
una asociación de consumidores que buscan
mejores ofertas y condiciones de consumo
para un producto de uso diario”11 .
Cambios y continuidades:
política, salud , ciencia y
religión.
“Nos parece adecuado terminar este epígrafe con una extensa cita de Romaní, muy
válida ante el ‘boom’ actual de la cannabis
y los condicionantes ideológico- culturales
que la envuelven: ‘Prohibida por influencias
occidentales en la mayoría de sus culturas
tradicionales, ignorada mientras era cosa de
elites, perseguida cuando se masifica, pre30 (3 y 4) 2005
sentada como mas peligrosa que el alcohol
cuando en realidad no lo es, centro de unas
subculturas que se oponen al modo de vida
de la sociedad occidental,‘criminalizado’ por su
inclusión al tráfico de drogas... y actualmente,
mientras se tiende a su integración, aún es
útil a los grupos dominantes como pretexto
represivo: de ahí su ambivalente situación’”
(Obiols, 1981:364). Si no fuera porque en la
referencia está la fecha, creo que sería fácil
pensar que esto está escrito ahora y no a
principios de los ochenta, citando además
uno de los últimos párrafos de mi tesis de
licenciatura, todavía anterior (1978).
¿Tan poco han cambiado las cosas? ¿No será
esto mas bien un buen ejemplo de que los
significados de las percepciones, si no se sitúan
en su contexto histórico, pueden resultar enSobre estos aspectos ver, por lo menos, Conde
(1999) y Comas et al. (2003)
13
No hace falta decir que el ejemplo paradigmático
de ello sería la “lucha antiterorista” que Bush y los
otros peligrosos extremistas que gobiernan los EEUU
han estado aplicando en Irak: democracia a sangre
y fuego. ¿Se imaginan que nos hubieran aplicado
a nosotros la misma medicina para acabar con el
franquismo?
12
Revista Española
de
Drogodependencias
271
La cultura del cannabis treinta años después... unas reflexiones personales.
gañosos, por aparentemente similares? Al filo
de los años ochenta del siglo pasado hablar
de “boom” del cannabis, de masificación, de
integración... visto desde ahora puede parecer
extravagante. Pero, claro, estábamos al final de
la gran primera ola de aumento de su consumo, según hemos visto, lo cual, comparado
con la situación anterior y (dicho sea de paso),
teniendo la capacidad de extraer del análisis
de la situación las tendencias emergentes, nos
llevaba a hacer aquellas afirmaciones. Comparando la situación de finales de los setenta con
la actual, ya hemos visto la gran cantidad de
elementos de la situación que han cambiado.
Pero, ¿han cambiado todos? Pues creo que
no, que la ambivalencia del cannabis entre la
integración y la represión continúa vigente; lo
cual, sabiendo lo que sabemos ahora, y en una
democracia ya más madura, me parece más
preocupante, tanto desde el punto de vista
de la salud pública como de la “salud política”
de nuestra sociedad. En este sentido, lo que
se haga o deje de hacer respecto al cannabis
es mas que nunca la “piedra de toque” que
nos puede indicar, más allá de los discursos,
los vientos reales hacia los que se dirigen las
políticas públicas sobre drogas.
Empezando por la “salud política”, para
amplios sectores representados por los partidos que apoyan al gobierno socialista, o sea,
tanto dentro como fuera del movimiento
cannábico, está claro que el mantenimiento
de la Ley Orgánica 1/92 de Protección de
la Seguridad Ciudadana en sus términos actuales es un fraude. Esta ley, que se promulgó
respondiendo a un estado de alarma social
notable por “el problema de la droga” que
entonces, según las estadísticas, era una de
las primeras preocupaciones de los españoles
(y que se supone, debería haberse centrado
en los problemas relacionados con aquellas
272
Revista Española
de
Drogodependencias
drogas que causaban una mayor inseguridad,
como la heroína, sus redes de distribución y
los conflictos que ahí se producían, etc.) ha
sido aplicada de forma notoriamente sesgada
a jóvenes que, por su aspecto y/o por estar en
según que sitios y horas, resultaban “sospechosos”, con la excusa de haberles encontrado
en un lugar público, muchas veces en el fondo
de sus bolsillos y después de un exhaustivo
registro dudosamente legal, alguna “china” de
chocolate o un poco de hierba. Véanse los
propios datos oficiales:
¿Sospechosos de qué, estos jóvenes? No
se sabe muy bien, o por lo menos no se ha
dicho, pero a algunos debe de parecerles útil
tener una forma de control de la juventud en
momentos en que el paro juvenil es amplio,
en que la contratación temporal lo es mucho
mas, en que hay grandes dificultades de poder
obtener una vivienda y, por lo tanto, hacerse
un proyecto de vida adulto e independiente y
en que una parte fundamental de su identidad
se gesta en los entornos del ocio -además
de en relación con los factores estructurales
de trabajo, vivienda y grupo doméstico- con
sus claroscuros: si parece comprobado que
el ocio orientado por el consumo puede
Que en alguna ocasión esto no haya sido así, y
que por el trauma vivido se hayan podido evitar
males mayores, o bien que haya sido ocasión para
concienciar a los padres intensificando los vínculos
con ellos, (ya se sabe que a veces “dios escribe
con renglones torcidos”) no justifica la perversión
general y los problemas que provoca la aplicación de
esta ley.
15
Sobre el papel de los Centros en estas situaciones,
ver Borràs/ Sardà (2005), así como la referencia
que hay en la pag. 240 de Calafat et al. (2000). Y
sobre el cannabis y los adolescentes, ver el dossier
de la revista Cáñamo (V.V.A.A. 2004) y, sobre todo,
el buen artículo de Sedó (2004): dice cosas tan
sensatas y elementales que se nota que habla desde
la experiencia y el saber de la intervención a pie de
calle, y no sólo desde un despacho.
14
30 (3 y 4) 2005
Oriol Romaní
ser un elemento integrador, no deja de ser
cierto tampoco que el verse constreñidos
a estas formas de ocio consumista limita las
posibilidades de muchos sectores de jóvenes
y acaba “rebotándolos”12 .
Pero se trata de una de esas “utilidades
miopes” que, aparte de que puedan esconder intereses inconfesables, muchas veces
terminan alimentando el fuego que decían
querer apagar13 . Los jóvenes ven que se hace
un artero uso de la ley; y si a veces algunos
de ellos no se percibieran del asunto, es obligación de los adultos realmente demócratas
–y que piensan que la educación es algo más
que ir a la escuela- hacerles reflexionar sobre
ello, ya que se supone que toda democracia
debe basarse en ciudadanos con convicciones
firmes, capaces de controlar la tendencia al
abuso de todo gobernante, y de admitir el
reconocimiento del pluralismo cultural. Perciben una agresión a su intimidad por parte
de las fuerzas del orden; esto, lo viven además
como un agravio comparativo respecto a
otros usos de drogas que los adultos puedan
hacer en otros contextos... o lo que es peor, en
contextos tan “públicos” como los suyos. Las
consecuencias económicas, familiares y sociales que estas actuaciones policiales conllevan
acostumbran a ser también muy negativas14 :
normalmente aseguran el “mal rollo” con la
familia durante una buena temporada, con lo
cual se cercena la base para que adultos de
confianza puedan acompañar el crecimiento
de chicas y chicos en un período tan importante de sus vidas; además, para salvarse
de la multa, tienen que acudir a Centros de
Atención para Drogodependientes para que
les hagan un “tratamiento”, ocupando un
tiempo precioso y otros recursos escasos
para dedicarlos a la gente que realmente
tiene problemas con las drogas, y reforzan-
do su identificación entre estos centros, la
policía y todas las demás formas de control
“adulto”, con lo cual se dificulta la utilización
de estos mismos recursos en el momento
en que algunos de ellos tengan problemas de
verdad con las drogas (por ejemplo, después
de un uso intensivo de cannabis a lo largo de
la adolescencia, que está claro que los puede
producir); y se alimenta un rechazo a toda
forma de control. Claro que ya hay quien ha
utilizado los datos resultantes de ello para
advertir sobre la peligrosidad del cannabis:
“¿No veis como han subido las demandas de
atención por esta droga en los últimos años?”
Y si una extensión del uso –y su intensificación
en determinados grupos- puede lógicamente
hacer emerger problemas que antes no se
manifestaban, lo que me parece irresponsable
es mantener condiciones de “anormalidad”,
dificultar su “ normalización” si se quiere poder
hacer intervenciones eficaces entre los adoQue además, tiene otras perversiones, como la del
mayor crecimiento del porcentaje de extranjeros que
son denunciados, respecto a la población española.
Según los mismos datos del PNSD (2004a) éste
ha pasado del 4,44% del total de denuncias en
1999, al 9,14% en 2003, o sea que se ha doblado
en cinco años. Aquí habría que considerar el
aumento de población extranjera que ha habido
(pero no proporcional a esas cifras), quizás la
entrada de extranjeros pertenecientes a diversas
redes de distribución de drogas y otros negocios
ilícitos (y cuya existencia entre nosotros, entre el
millón aproximado de extranjeros descontrolados,
debería figurar en el haber de la Ley de Extranjería
vigente, por cierto)... Pero no se tendría que olvidar
la actuación selectiva de la policía contra los
“extranjeros sospechosos” que, al igual que en el
caso de los jóvenes, acaba confirmando aquello
que estas propias leyes discriminatorias ayudan a
crear, un estereotipo con varias utilidades para el
control social autoritario, tal como analizamos en un
trabajo reciente en el que se incluyó la observación
etnográfica realizada durante un año en la Pl. Real de
Barcelona (v. Romaní et al., 2003).
17 Ver al respecto, Romaní (2004): 60-69.
16
30 (3 y 4) 2005
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de
Drogodependencias
273
La cultura del cannabis treinta años después... unas reflexiones personales.
lescentes, que constituyen la franja de edad
de mas riesgo en relación al cannabis. A no
ser que, sabiéndolo o no, y a veces quizás con
las mejores intenciones del mundo, de lo que
se trate en el fondo para algunos personajes
(que no osaría tildar de profetas o sacerdotes,
maleando así el lenguaje que tenemos para
entendernos) sea de mantener el problema
para seguir siendo indispensables como
guardianes de la salud15 . Que, finalmente, el
mantenimiento de esta ley haya fortalecido
al movimiento cannábico, pues la resistencia
a la misma ha sido uno de los ejes sobre los
que se ha basado su desarrollo, no es ningún
consuelo.
Ya sería hora pues que el gobierno del
PSOE, de forma coherente con sus propias
demandas anteriores cuando estaba en la
oposición, de acuerdo con las promesas de
su programa electoral, y para no perder el
crédito acumulado en los meses iniciales de
su gestión entre la juventud y sectores demócratas y progresistas en general, abordara
la reforma (cuando no la derogación) de la
famosa Ley Orgánica 1/ 92 de Protección de
la Seguridad Ciudadana16 .
Hacia el final de los anteriores párrafos,
centrados en la intervención policial, me he
referido a otro aspecto, en el que ahora entraremos: me refiero a lo que en la literatura
de historia de la medicina, del higienismo y
semejantes se conoce como la “policía médica”, es decir, aquellas funciones de control del
sector sanitario –con los médicos organizados
como uno de sus principales agentes- sobre
determinados ámbitos de la vida social, de
forma autónoma o en estrecha relación con
otros dispositivos de control, como los de tipo
religioso o penal. No hay duda que el campo
de las drogas ha sido uno de ellos, a pesar de
que históricamente las articulaciones entre
274
Revista Española
de
Drogodependencias
los modelos de gestión médico-sanitarios y
jurídico-policiales de las drogas no hayan sido
siempre coherentes17 , cosa que estos últimos
años se ha manifestado en nuestro país por
los vaivenes del Plan Nacional Sobre Drogas
entre los ministerios del Interior y de Sanidad
donde, creo que felizmente, ha vuelto. Pues
bien, pareciera que una parte, por suerte
cada vez más minoritaria, de los profesionales
del sector sanitario continúan tratando el
llamado “problema del cannabis” sin haber
cambiado en absoluto el chip de hace veinte
años cuando, a pesar de las continuidades que
hemos analizado, también existen sustanciales
discontinuidades y cambios, como los referidos a cantidades, edades y tipos de consumos
y consumidores.
Como mínimo, las tan repetidas constataciones actuales sobre los niveles de consumo
de cannabis (y también de alcohol y tabaco
que, como se sabe, constituyen en España
la tríada de drogas más consumidas en las
franjas de edad jóvenes) deberían hacer
reflexionar sobre el fracaso de las políticas
de drogas mas influyentes aplicadas hasta
el momento, sobre todo en el ámbito de la
prevención. Pero, no, parece que el discurso
amedrentador y sesgado, aquél que recurre
al miedo, sólo habla de los aspectos negativos
de los efectos de las drogas y luego pretende
ser creído por los jóvenes, aquel que tiende
a proteger a las personas de sí mismas, aquel
cuya mano derecha ignora lo que hace la
izquierda, aquel cuya receta viene a ser “más
La Junta Internacional de Fiscalización de
Estupefacientes de las Naciones Unidas que, por lo
menos en el Informe Anual de 1997, y ante el evidente
fracaso de la política prohibicionista, proponía...
más prohibiciones, equiparando la libre discusión
de alternativas a esta política fracasada con la
“apología de la droga”!
18
30 (3 y 4) 2005
Oriol Romaní
de lo mismo”, sea inmune a la constatación
de dicho fracaso. Pero como éste es evidente,
entonces hay que atacar por otros frentes,
que acaban afectando las libertades básicas,
entre ellas las de expresión y de discusión o
la de asociación. En la “guerra a la droga”, sea
en la versión más moderada de este grupo
de profesionales, sea en la más extremista
que representaría la JIFE18 -y tal como ocurre
también el la “guerra al terrorismo”- parece
a veces que el sagrado e indiscutible objetivo
que se debe conseguir a toda costa hace olvidar objetivos más básicos de convivencia social
y de sobrevivencia como humanos. Claro que
la política anti-droga de la China de Mao fue
muy eficaz comparada con la de otros países
en su misma época, pero, ¿es éste el modelo
que queremos, y podemos, seguir?
Un ejemplo de estas posiciones profesionales, para que se me entienda mejor, lo encontraríamos en el tono general del, por otro
lado, ecléctico Informe sobre el Cannabis
2004, redactado por el Grupo de Estudios del
Cannabis del PNSD, o en el folleto titulado
Cannabis redactado por Amador Calafat
(2003) y colgado, como el anterior, en la pag.
web del PNSD (2004). En este segundo, se
afirman bastantes medias verdades, algunas
cosas sensatas, y otras muy demagógicas.
Como decir, por ejemplo, que el consumo
de cannabis va a producir un crecimiento de
las desigualdades y a favorecer procesos de
exclusión social; cosa que es, una vez más,
confundir causas con efectos. Es evidente que
las chicas y chicos de los sectores sociales
más desfavorecidos están en situaciones de
mayor vulnerabilidad, pero en lugar de señalar
siquiera algunos de los elementos causantes
de estas desigualdades como creo que aquí
se ha hecho un poco más arriba al mencionar
las dificultades de inserción de los jóvenes, no,
30 (3 y 4) 2005
la culpa es de”la droga”. Es decir, se continúa
con la demonización de la sustancia, ahora
con argumentos “más al día”, contribuyendo a
esconder algunas de las principales causas de
las desigualdades como la falta de unas verdaderas políticas públicas de apoyo a los sectores
más desfavorecidos (políticas educativas, de
apoyo a la familia, de garantía social básica, de
vivienda, etc.), o como las activas políticas impositivas y fiscales que, durante los gobiernos
del PP (y a imagen y semejanza de su modelo
Bush), contribuyeron a drenar los recursos de
la mayoría de la población hacia las minorías
más poderosas de nuestra sociedad. Con lo
cual, a los jóvenes que sufren unas condiciones
materiales y sociales de existencia más duras
que las de otros jóvenes, se les niegan por lo
menos dos cosas: al esconder las verdaderas
causas de su situación, unas posibles pautas
orientativas para salir de la misma; y además,
la posibilidad del recurso a ciertas “muletas
químicas” (que es una de las funciones de
los usos de drogas) para poder paliar, ni que
sea subjetivamente, el dolor de vivir. No me
extraña que las autoridades del PP estuvieran
encantadas con un folleto como este...
En otro momento afirma que hay que proteger a los adolescentes “del llamado consumo
responsable”. Cualquier persona que tenga
un mínimo conocimiento de cómo se desarrolla la adolescencia en nuestras sociedades
occidentales, sabe que la experimentación, el
probar con los límites es una de las características básicas y necesarias de este proceso
de ir separándose del seno materno familiar
y de hacerse adultos. Y está claro que, como
Ver, al respecto, los desastres que está produciendo
en la India la aplicación de la prohibición de los
usos tradicionales del opio y el cannabis, una vez
finalizada la moratoria contemplada en los tratados
internacionales sobre drogas, en Charles (2005).
19
Revista Española
de
Drogodependencias
275
La cultura del cannabis treinta años después... unas reflexiones personales.
mas retarden el inicio del consumo, mejor para
evitar posibles complicaciones. Pero si llega a la
situación de consumo, ¿como negarles la posibilidad y el papel que el consumo responsable
puede jugar en este momento de su vida? De
hecho, una gran mayoría lo hace así (si no,
dado el actual nivel de consumo, sí que nos
encontraríamos con problemas mucho más
generalizados), incluso en las actuales condiciones en las que muchas veces los adultos
que tendrían que estar cercanos (para tener
unas referencias cotidianas, para pelearse
con ellos, para un apoyo en un momento
dado...) no lo están tanto, porque los padres
tienen que estar todo el día trabajando (para
sobrevivir, en unos casos, o para llegar al nivel
de consumo que la competencia social exige,
en otros) y/ o están angustiados ante cuestiones como la de las drogas; los profesores
bastante liados están y, encima, con el prestigio
social por los suelos: “para qué la educación
y la cultura, si lo que importa es el dinero” (y
una de las vías a mano para conseguirlo es el
“trapicheo”, gracias a la ilegalidad del cannabis
y otras drogas). En ambos casos, y en la España de 2005, se trata de adultos que pueden
haber tenido o tener experiencias con drogas,
también ilegales, pero a los cuales el discurso
prohibicionista (o “proteccionista”, si se quiere,
para diferenciarlo de su versión más dura de
tipo penal) les ha privado, en general, de su
capacidad para enfrentarse a estos temas con
seguridad. A todo lo que habría que añadir que
los adolescentes se encuentran que apenas
existen otros recursos creíbles y cercanos
para ellos. Creo que es precisamente en la
línea de desarrollo de este tipo de recursos,
y de programas de educación de los adultos,
en el contexto de un trabajo comunitario,
en que se tendría que trabajar más, en lugar
de tratar a los adolescentes de incapaces
276
Revista Española
de
Drogodependencias
(“hay que protegerlos incluso del consumo
responsable”) y de ignorantes (hablando de
los efectos del cannabis como si todo fueran
riesgos cuando, si lo fuman, es porque consideran que obtienen unos beneficios). ¿Y luego
queremos que nos hagan caso?
Porque otro elemento interesante que nos
aportan los datos de las encuestas antes comentadas, es que realmente los adolescentes
y los jóvenes muestran unas percepciones
sobre la peligrosidad de las drogas que parecen bastante más ajustadas a la realidad
que las de algunos de estos burócratas de
la salud. ¿Acaso no es cierto que el cannabis
es la menos peligrosa de las drogas ilegales,
o que su uso es menos riesgoso que el del
tabaco o los hipnosedantes? Dejando aparte
el problema de como se formulan estas
cuestiones en las encuestas, está claro que
en toda la literatura científica existente hasta
el momento se asocian muchos más riesgos,
incluso mortales, a estos dos tipos de drogas
que no al cannabis, por cuya causa no se ha
registrado ni una sola muerte. Entonces, en
lugar de sermonear a los jóvenes desde la
palestra como si el cannabis fuera su gran
problema, ¿no sería mucho más inteligente
partir de sus conocimientos y experiencias,
del reconocimiento de los efectos positivos
que tiene el cannabis para ellos, para crear
una relación de confianza que nos permita
introducir otros elementos de reflexión, como
la manipulación del “mercado joven” –ya sea
de unos conocidos grandes almacenes, como
de los ámbitos de ilegalidad-, entre otros?
Hemos aprendido a través de múltiples
ejemplos que las regulaciones basadas en las
relaciones informales y cotidianas, en cultura
compartida, son mucho más efectivas que
las imposiciones normativas formales19 ¿No
sería mucho mejor establecer algún tipo de
30 (3 y 4) 2005
Oriol Romaní
regulación legal de las drogas actualmente
ilegales, precisamente para distanciar a los más
jóvenes de estos ámbitos de ilegalidad que
les ofrece la actual situación de descontrol
del mercado y brindarles así unos ámbitos
donde se puedan desarrollar sin los riesgos
actuales estas relaciones informales y, a través
de ellas, una “cultura positiva” de las drogas
que les dé una mayor seguridad en relación
a ellas? Aquí vendría a cuento el ejemplo del
auto-cultivo de marihuana: quizás en lugar de
denostarlo de entrada, deberíamos reconocer
que facilita esquivar el mercado negro para
comprar (aunque reconociendo al mismo
tiempo que, en algunos casos, puede contribuir al “mercado gris” de compra- venta entre
las redes sociales próximas), que exige una
cierta disciplina, unas habilidades, un tiempo
y una dedicación para cuidar las plantas, unos
intercambios sociales, de experiencias, conocimientos, etc. con otros cultivadores, es decir,
una relación no sólo centrada en el hecho
de compartir el porro; exige saber esperar
la gratificación, y disfrutar, por tanto, de algo
hecho por uno mismo, que se ha conseguido
con cierto trabajo personal y no sólo comprándolo en el mercado. ¿Es que todos estos
elementos no tienen ningún valor? En definitiva, una educación integral para el consumo
(en general, no sólo de drogas) parecería una
vía razonable, a medio plazo, para solventar
algunos problemas, pero seguramente estará
abocada al fracaso si al mismo tiempo no se
van modificando algunos elementos del entorno sociocultural.Y esto requiere un trabajo
social movilizador, no siempre fácil, con poco
reconocimiento profesional, ni del agrado de
ciertos grupos de poder; que, en cambio,
pueden utilizar ciertos discursos moralizantes como velo justificador de unas políticas
de fondo que, en realidad, están afectando
negativamente a la salud, tanto de los jóvenes
30 (3 y 4) 2005
como del conjunto de la sociedad.
Estas formas de analizar el tema que estoy
criticando, aparte de los posicionamientos
ideológicos más o menos oportunistas que
puedan existir, nos remiten a ciertos problemas teórico- metodológicos más de fondo
que me gustaría, por lo menos, mencionar. En
la mayoría de las grandes disciplinas existentes
ahora y aquí, la formación fundamental que
han recibido nuestros profesionales es la que
proviene de la formulación de la ciencia basada en el paradigma positivista, cuyas bases
filosóficas enunció Descartes en el S. XVIII y
que cuajó a lo largo del S. XIX en la biología
como referencia fundamental, que fue impregnando la medicina, la psiquiatría o las mismas
ciencias sociales, entre otras muchas. Hay tres
consecuencias de este modelo científico que
quiero subrayar en relación a las profesiones
derivadas de estas disciplinas: la distancia
entre el investigador y su objeto de estudio,
el desmenuzamiento del todo en par tes
autónomas que se trabajan como si tuvieran
entidad propia, y la exclusión de todo lo que
no sea la racionalidad de este modelo; las tres,
estrechamente ligadas a la instrumentalidad de
este tipo de saber.
Este es un tema muy vasto, del que sólo daré dos
referencias que pueden ayudar a ampliar lo aquí
apenas esbozado, como son los de Ibañez (1990),
donde se analiza la influencia de las nuevas teorías
científicas (complejidad, indeterminación, cuántica
etc.) en las ciencias sociales y la de Menéndez (1990),
más centrada en los determinantes socioculturales y
políticos de la biomedicina.
21 En alguno de ellos, como el libro colectivo que de
algún modo fue el manifiesto fundacional de Grup
Igia (Gonzalez et al., 1989) estas diferencias se
hacen explícitas, como cuando citamos a Escohotado
o Savater como representantes de una óptica más
“liberal” que se contrapone a la nuestra (que sería
más “socialdemócrata”, aunque al ser la nuestra, la
etiqueta allí no aparece).
20
Revista Española
de
Drogodependencias
277
La cultura del cannabis treinta años después... unas reflexiones personales.
Siendo consciente de que lo que estoy
diciendo es muy esquemático, no quiero dejar
de señalar que algunos de los problemas de
aprehensión de la realidad y de la intervención
en ella provienen, (más allá de las ideologías,
que también) de la influencia de este modo
de acercarse a la realidad social y humana.
Porque cuando estamos acercándonos a esta
realidad, vamos más allá de la pura instrumentalidad que, sin ninguna duda, es también
importante. Pero, claro, fundamentalmente
en profesiones socialmente muy asentadas
o prestigiosas, como la medicina, la empatía
no se contempla como un elemento crucial
de su actividad, contra lo que a veces afirme
un discurso humanista que muchas veces la
acompaña (precisamente porque es consciente de esta carencia). En todo caso, puede ser
un instrumento para que el médico, desde
su posición de saber, pueda influir mejor en
el enfermo, pero pocas veces un “ponerse
en lugar del otro para encontrar juntos una
salida”; y no por falta de voluntad, en muchas
ocasiones, sino porque desde los conocimientos y habilidades, como ya se ha dicho, hasta las
condiciones sociales de las prácticas médicas
lo hacen muy difícil.
Por lo que se refiere a los otros dos aspectos, el no estar entrenados en una visión
holística de la realidad, ni tener instrumentos
para operacionalizarla, dificultan en gran
manera el establecer los tipos de relaciones,
jerarquías entre ellas, etc. que se pueden establecer, por ejemplo, entre un determinado
consumo y la compleja trama de elementos
que lo condicionan y explican, o toda la serie
de concatenaciones e interrelaciones que,
en determinadas condiciones, se dan entre
desigualdad y mala salud o desigualdad y
violencia. Por esto, este tipo de enfoque se
ha privilegiado por par te de quien tiene
278
Revista Española
de
Drogodependencias
más poder –entre otras cosas, para financiar
investigaciones y/ o apoyar ONGs- porque
permite obviar las determinaciones políticas
y sociales de la salud o de otros fenómenos
básicos de nuestra vida, que podrían cuestionar su posición social. Finalmente, si tratamos
con fenómenos humanos y no con máquinas,
es muy difícil entender algo si dejamos “fuera
de pantalla” las pasiones, para resumir en una
sola palabra todos estos elementos no racionales mencionados antes. Por esto, en muchas
ocasiones, el arte nos enseña tanto o mas de
la naturaleza humana que ciertas aproximaciones científicas a la misma20 . De aquí que la
estrechez de las perspectivas criticadas, que
encima pretenden vendernos como científicas,
resulte a veces demasiado evidente.
Es lo que ocurre con el artículo de Calafat
et al (2000) en el que inicialmente se dice
que es “...fundamental desarrollar elementos
críticos desde fuera del campo de batalla,
alejándose de los dogmas; y esa es la posición
desde donde pretendemos realizar este estudio...” (236) y, a pesar de ello -¿o quizás por
ello, por pretender estar más allá del bien y del
mal?- acaba dogmatizando, una vez asumida la
ingenuidad (?) de la neutralidad de la ciencia,
como si de Darwin para acá no hubiera llovido nada. Donde se dice que “... la posición
ante el cannabis divide a la sociedad en dos
posturas encontradas...”, dos!, cuando es tal la
gradación de posiciones que a veces se hace
difícil hacer aproximaciones que no traicionen
la complejidad de esa realidad, tal como ellos
mismos reconocen un poco más adelante
y como se planteaba en la introducción de
este trabajo. Pero luego se insiste en “ambos
grupos” (en este caso, consumidores y no
consumidores) lo que quizás explique que se
confundan continuamente las posiciones que
defienden el derecho al consumo, o incluso
30 (3 y 4) 2005
Oriol Romaní
la búsqueda de alternativas al actual estatus
de las drogas y otras, sólo y únicamente con
la promoción de dicho consumo. Cuando
entran a analizar “los actores del movimiento
pro-cannabis” (pp.241-251) el planteamiento
parece atractivo, pero luego adolece de una
falta de sutileza bastante grande. Así, por
referirme a la parte que me toca “por alusiones”, al hablar de los “sacerdotes”, además de
atribuirnos una supuesta ideología de la generación del 68 (?), ponen en un mismo saco
a personas que podemos ser amigos pero
que, desde luego, tenemos posiciones teóricas
bastante distintas; tanto esto último como el
sinsentido de lo primero lo habrían podido
detectar con sólo molestarse en leer algunos
de nuestros textos21 . Pero si, como afirman,
somos sacerdotes que estamos dentro de una
misma jerarquía, aquí alguien es herético... ¿o es
que las jerarquías no funcionan tan bien como
en la “iglesia prohibicionista”, donde si uno
quiere conquistar o preservar ciertas prerrogativas episcopales -como la de ser el primer
firmante de todas las pastorales, por más que
se las hayan “currado” los subalternos, o de
ser el beneficiario de jugosas canonjías- debe
plegarse a ciertas exigencias de la “religión
revelada”, más allá de lo que en un momento
dado serían sus preferencias personales? Y
para finalizar, parece que no se hayan leído
ni lo que equivaldría a la Biblia Protestante
para esta iglesia, es decir, la revista Cáñamo,
cuando afirman, insultando a la inteligencia de
muchos consumidores (intencionadamente o
no, eso no lo sé) que “El cannabis está cargado de elementos simbólicos que crean en el
imaginario del consumidor la ilusión de que
fumando porros se convierte en un agente
de cambio social, en alguien con una actitud
alternativa que actúa a favor de una sociedad
más justa” (268).
30 (3 y 4) 2005
Bueno, prefiero que sean otros autores
los que hagan un balance global de este artículo, balance con el que estoy plenamente
de acuerdo: “Este análisis contiene muchos
elementos de interés pero su carácter abiertamente hostil al fenómeno estudiado le resta
bastante valor como intento de comprensión
de un movimiento social que, aún en sus
exageraciones o inexactitudes, responde a
percepciones y valores ampliamente compartidos por millones de jóvenes europeos.
El esfuerzo por comprender se pierde en
parte en el esfuerzo por denunciar, condenar
y denigrar. Se pasan por alto así, al menos dos
aspectos que resultan cruciales en el análisis
de este movimiento y la tradición en que se
basa. Primero su carácter popular, que surge
de abajo hacia arriba, es decir, que el aprecio
masivo por el cánnabis es previo a las asociaciones, publicaciones y tiendas de semillas y
revistas, por mucho que ambos se realimenten.
Segundo, que tratándose en gran medida de
un fenómeno de resistencia social, es imposible comprender su ideología y su estrategia sin
analizar el poder y la ideología a la que se enfrentan y que en la mayoría de los casos es aún
más manipuladora, arbitraria y mistificadora. Si
unos acuden a Walter Benjamin como santo
de su devoción por el cáñamo, recuérdese que
los prohibicionistas tienen entre sus “profetas”
a personajes como Harry Anslinger” (Gamella
y Jimenez, 2005: 50).
En fin, creo que ha quedado claro que el
cannabis continúa siendo un punto crucial en
las discusiones científicas, ideológicas y políticas alrededor de las drogas, su naturaleza y
su gestión social, seguramente porque implica
muchas cuestiones fundamentales del devenir
de nuestra sociedad y nuestra cultura, más allá
de las drogas mismas. Y aunque, en el fragor
Revista Española
de
Drogodependencias
279
La cultura del cannabis treinta años después... unas reflexiones personales.
de la batalla, todos podamos “desbarrar”,
me parece fundamental que se mantenga el
diálogo como método fundamental para ir
logrando aproximaciones que nos permitan
dejar planteado, por lo menos, un mundo
donde podamos vivir mejor, nosotros y los
que nos siguen22 .
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de las drogas, me permito recomendar la lectura -ni
que sea de las conclusiones-, de un libro colectivo
fruto de un seminario en el que participé, patrocinado
por instituciones tan poco “sospechosas” de “procannabismo” como la FCS (Fundación de Ciencias
de la Salud), la FAD y el PNSD (V.V.A.A., 2004 a).
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Drogodependencias
30 (3 y 4) 2005
Originales
Indicadores sanitarios y sociales de la evolución
de una cohorte de adictos a heroína: 1985-2000.
Proyecto EMETYST.
Xavier Sánchez-Carbonell, Marta Beranuy, Marina Forcén,
Carles Virgili y Patricia Colomera
Resumen
Facultat de Psicología, Ciències de l’Educació i de l’Esport Blanquerna.
Universitat Ramon Llull. Barcelona, España
Se pretende describir la evolución de una cohorte de 135 adictos a heroína desde los
diecisiete años transcurridos desde el inicio del tratamiento en 1985 hasta el 2002. Para
ello se consultaron los registros oficiales de mortalidad, sida, tuberculosis, readmisiones
a tratamiento e ingresos en prisión. A lo largo de los 17 años, 63 personas fallecieron,
59 fueron diagnosticadas de sida, 24 de tuberculosis, 84 reiniciaron tratamiento y 58
entraron en prisión. Estos datos muestran el deficiente estado de salud y la elevada
mortalidad de los adictos a heroína, en gran parte debido a la influencia del sida, subrayando las diferencias determinadas por el país de residencia La adicción a drogas es una
enfermedad con elevado riesgo de cronificación que genera numerosas complicaciones
infecciosas y sociales, con un coste social muy alto. Los indicadores sociales y sanitarios
tienden a estabilizarse, lo que parece confirmar la vieja teoría del proceso de maduración y estabilización de los procesos adictivos. También es posible que muchos adictos
consigan mantenerse al margen del deterioro causado por las enfermedades infecciosas
y de la marginalización que representa el ingreso en prisión.
Palabras Clave
Adicción a heroína, seguimiento, mortalidad, sida, tuberculosis, ingresos en prisión, Espa-
Summary
Cohorte of 135 addict ones to heroin is tried to describe the evolution of one from the
seventeen years passed from the beginning of the treatment in 1985 to the 2002. For
it the official registries of mortality were consulted, AIDS, tuberculosis, readmisiones to
treatment and income in prison. Throughout the 17 years, 63 people passed away, 59 were
diagnosed of AIDS, 24 of tuberculosis, 84 reinitiated treatment and 58 entered prison.
These data show to the deficient state of health and the high mortality of the addict
ones heroin, to a large extent due to the influence of AIDS, emphasizing the differences
Correspondencia a:
Dr. Xavier Sánchez-Carbonell - FPCEE Blanquerna - Císter, 34. 08022 Barcelona. España e-mail: [email protected] - Tel: 93 253 30 00
30 (3 y 4) 2005
283-300. 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
283
Indicadores sanitarios y sociales de la evolución de una cohorte de adictos a heroína...
determined by the residence country the addiction to drugs is a disease with high risk
of cronificación that generates numerous infectious and social complications, with very
high a social cost. The social and sanitary indicators tend to become stabilized, which
seems to confirm the old theory of the process of maturation and stabilization of the
addictive processes. Also it is possible that many addict ones are able to stay to the
margin of the deterioration caused by the infectious diseases and of the marginalización
that represents the enter prison.
Key Words
Addiction to heroin, pursuit, mortality, AIDS, tuberculosis, income in prison, Spain
Résumé
On prétend décrire l’évolution d’une cohorte de 135 partisans à héroïne depuis les dixsept années passées depuis le début du traitement en 1985 jusqu’au 2002. Pour cela on a
consulté les registres officiels mortalité, le SIDA, tuberculose, réadmissions à traitement
et recettes en prison. Tout au long des 17 années, 63 personnes sont décédées, 59 ont
été diagnostiqués du SIDA, 24 de tuberculose, 84 ont recommencé traitement et 58
sont entrés en prison. Ces données montrent le déficient état de santé et la mortalité
importante des partisans à héroïne, dans une grande partie étant donné l’influence du
SIDA, soulignant les différences déterminées par le pays de résidence la dépendance à
des drogues est une maladie avec un important risque de cronificación qui produit de
nombreuses complications infectieuses et sociales, avec un coût social très haut. Les
indicateurs sociaux et sanitaires tendent à se stabiliser, ce qui paraît confirmer la vieille
théorie du processus maturation et stabilisation des processus quis rend dépendant. Il
est aussi possible que beaucoup de partisans parviennent à être maintenus en marge
de la détérioration causée par les maladies infectieuses et de la marginalisation qu’il
représente la recette en prison.
Most Clé
Dépendance héroïne, à suivi, mortalité, le SIDA, la tuberculose, recettes en prison,
l’Espagne
El consumo de heroína en España aumentó
de forma espectacular en la década de los
ochenta. Las Comunidades Autónomas y la
Administración Central incrementaron los
recursos asistenciales: centros de dispensación de metadona, comunidades terapéuticas,
unidades de desintoxicación hospitalaria y
centros ambulatorios. Al incremento de los
284
Revista Española
de
Drogodependencias
recursos destinados al tratamiento de los
adictos correspondió un interés por conocer
el resultado del tratamiento y se iniciaron estudios de evaluación y seguimiento (Guardia,
Masip y Viladrich, 1988; Melgarejo et al., 1988).
El más conocido es el Estudio Multicéntrico de
Evaluación de Tratamientos y Seguimiento de
Toxicómanos (Proyecto EMETYST) cuya pri-
30 (3 y 4) 2005
Xavier Sánchez-Carbonell, Marta Beranuy, et al.
mera fase evaluó el impacto del tratamiento, a
los doce y veinticuatro meses, en una cohorte
de adictos a la heroína que inició tratamiento
entre marzo y julio de 1985, en 16 centros
especializados de España (Sanchez-Carbonell,
Brigos y Cami, 1989; Sanchez-Carbonell, Cami
y Brigos, 1988). El EMETYST observó una
reducción en el consumo de heroína, cannabis
y tranquilizantes, una mejora del estado psicológico y una disminución de las actividades
ilegales. Por el contrario el consumo de cocaína, alcohol y tabaco no experimentó cambios.
Tampoco aumentó el porcentaje de personas
que trabajaban o estudiaban y el estado legal,
medido por los juicios, detenciones y encarcelamientos, empeoró. A lo largo de los dos años
de seguimiento, el 26% ingresó en prisión por
lo menos una vez. Las mejorías observadas a
los 6 meses se mantuvieron a lo largo de los
2 años. Los pacientes que permanecieron más
de 90 días en tratamiento y los que carecían
de historia judicial previa presentaron una
mejor evolución global, siendo indiferentes
otras características demográficas y el hecho
de convivir o no con la familia. A los dos años
habían fallecido 7 de los 311 pacientes. En
conjunto, la evolución del grupo y la respuesta
al tratamiento estaba en la línea de lo observado en otros estudios, excepto que el 65%
convivía con la familia de origen.
Desde entonces han pasado más de quince
años; el seguimiento de esta misma cohorte
permitiría, por tanto, estudiar la historia natural
de la adicción a la heroína en España. Uno de
los problemas de los estudios de seguimiento
es localizar y entrevistar a los adictos: para
superar esta limitación en la segunda fase del
Proyecto EMETYST se decidió renunciar a la
entrevista personal en favor del seguimiento
mediante registros oficiales. De los miembros
de la cohorte inicial se escogió a los residentes
en Cataluña porque la mayoría de los adictos
30 (3 y 4) 2005
de la cohorte inicial residían en esta comunidad y porque los registros sanitarios están bien
desarrollados, lo que permite su utilización en
investigación. La mortalidad, las enfermedades
infecciosas y las recaídas son algunas de las
variables que se pueden estudiar mediante
registros oficiales.
El incremento de la mortalidad es una
grave consecuencia de la adicción a drogas y
su estudio ayuda a describir la historia natural
de la adicción a la heroína. En Europa, se han
realizado tres clases de estudios de mortalidad sobre adictos a drogas. Los primeros
están basados en los certificados forenses de
defunción y recogen la frecuencia de muertes
atribuibles al consumo de drogas y sus causas
y son un buen indicador para estimar la magnitud del consumo de drogas en una zona y
sobre los patrones de consumo (Torralba et
al., 1996). El segundo grupo estudia la mortalidad de una cohorte identificada al inicio del
tratamiento (Bargagli et al., 2001; Frischer et
al., 1997; Fugelstad et al., 1997; Gossop et al.,
2002; Oppenheimer et al., 1994; Perucci et al.,
1991;Tunving, 1988) o en otras circunstancias
(Ghodse, Oyefeso y Kilpatrick, 1998; Muga
et al., 1990; Ortí et al., 1996). Por último, la
mortalidad se ha estudiado junto a otras variables para caracterizar la historia natural de la
enfermedad (Cottrell, Childs-Clarke y Ghodse,
1985; Edwards y Goldie, 1987; Haastrup y
Jepsen, 1984, 1988; Stimson, Oppenheimer
y Thorley, 1978). Aunque en los estudios de
cohortes de adictos a opiáceos se observa
que la mortalidad se mantiene en una franja
entre el 1% y el 3% anual (Barr et al., 1984;
Chapple, Somekeh, y Taylor, 1972; Cottrell,
Childs-Clarke y Ghodse, 1985; Darke y Ross,
2002; Darke, Ross y Hall, 1996; Haastrup y
Jepsen, 1984, 1988; Gossop et al., 2002; Joe,
Lehman, y Simpson, 1982; Joe y Simpson, 1987;
Revista Española
de
Drogodependencias
285
Indicadores sanitarios y sociales de la evolución de una cohorte de adictos a heroína...
Maddux y Desmond, 1980, 1986; Stimson,
Oppenheimer y Thorley, 1978; Vaillant, 1966,
1973; Tunving, 1988), la influencia del AIDS,
los cambios en los patrones de consumo y las
diferencias socioculturales invitan a considerar
que la frecuencia y las causas de muerte en
los países del sur de Europa son diferentes
a las descritas para los adictos a la heroína
de países anglosajones en las décadas de los
setenta y de los ochenta.
En España, la infección por VIH tiene una
gran repercusión en el colectivo de adictos a
drogas por vía parenteral con una prevalencia
que oscila entre el 40% y el 80% de adictos a
drogas infectados (Egea et al., 1996; Rebagliato
et al., 1995) y en la salud pública en general,
con una tasa de 176,2 casos de sida por millón de habitantes (la más alta de Europa) y
una elevada mortalidad por sida (European
Centre for the Epidemiological Monitoring of
AIDS, 1996; Ministerio de Sanidad y Consumo,
1997). La tuberculosis es una enfermedad infecciosa crónica que tiene un papel decisivo en
el diagnóstico y desarrollo del sida. Es probable
que el consumo de drogas y la marginación
social que conlleva haya motivado un resurgir
de la enfermedad que había descendido hasta
la década de los ochenta (Caylà et al., 1998;
Caylà et al., 1996). Al ser una enfermedad de
declaración individual obligatoria nominal sujeta a un sistema de vigilancia epidemiológica
activa es posible estudiar su repercusión en
grupos de población como los adictos a drogas. La recaída en el consumo de drogas puede
solucionarse sin ayuda externa, prolongarse en
diferentes niveles de intensidad o desencadenar un nuevo episodio de tratamiento. El inicio
de un nuevo tratamiento indica que el adicto
considera que el consumo de drogas no está
bajo su control y que han decidido pasar a la
acción para superarlo.
286
Revista Española
de
Drogodependencias
En los estudios de seguimiento y de evaluación de tratamientos las actividades delictivas
son una de las variables utilizadas para medir
la evolución social. Sin embargo, el informe
verbal de las actividades delictivas tiene un
elevado riesgo de sobreconocimiento porque
estas conductas no son apreciadas socialmente y porque pueden provocar la intervención
policial y judicial. También es difícil tener un
registro de estas actividades porque la gran
mayoría no son detectadas y cuando lo son,
lo hacen en diferentes registros policiales no
conectados entre sí. Es por ello que la mejor
información disponible sobre la actividad
delictiva es una medida indirecta, el historial
de entradas y salidas de prisión.
Así, esta segunda fase del proyecto EMETYST pretende describir la mortalidad, morbilidad y la evolución social de una cohorte
de adictos a heroína desde 1985 hasta el año
2000, mediante el estudio de los registros
oficiales de mor talidad, sida, tuberculosis,
tratamientos de drogas e ingresos en prisión.
En este informe se ofrecen los resultados
preliminares del seguimiento a los diecisiete
años.
Método
Participantes
Entre el 1 de marzo y el 30 de julio de 1985,
138 adictos a heroína solicitaron tratamiento
por primera vez en uno de los cuatro centros
colaboradores del Proyecto EMETYST en
Cataluña (Hospital del Mar, Dispensario de la
Cruz Roja y SPOTT, de la ciudad de Barcelona,
y el Centro Municipal de Drogodependencias
de L’Hospitalet de Llobregat) y aceptaron
participar en un estudio de evaluación de tra-
30 (3 y 4) 2005
Xavier Sánchez-Carbonell, Marta Beranuy, et al.
tamientos. En este seguimiento, se excluyeron
tres pacientes debido a insuficiente información sobre su identidad por lo que la muestra
la formaron 135 adictos a la heroína.
Fuentes de datos y procedimiento
Estudio longitudinal de una cohorte mediante el linkage de registros oficiales. Los
casos dudosos se comprobaron uno por uno.
El estudio se inició en mayo de 1985 y la fecha
de censura se fijó el 31 de diciembre de 2002,
por lo que el periodo de seguimiento fue de
diecisiete años. Se consultaron y se entrecruzaron entre sí los siguientes registros:
Registre de Mortalitat de Catalunya. Servei d’Informació i Estudis (SIE). Direcció
General de Recursos Sanitaris. Departament de Sanitat i Seguretat Social de la
Generalitat de Catalunya. Centraliza la
información sobre defunciones en Cataluña. En esta investigación se ha utilizado para
identificar el estado vital de la cohorte y la
causa de defunción según los 17 grandes
grupos de la clasificación de la OMS. El SIE
facilita las estadísticas sobre mortalidad a
Cataluña necesarias para calcular el exceso
de mortalidad.
Registre de la SIDA. Centre d’Estudis Epidemiològics sobre la SIDA de Catalunya
(CEESCAT). Depar tament de Sanitat i
Seguretat Social de la Generalitat de Catalunya. Centraliza la información epidemiológica sobre sida en Cataluña. Se utilizó para
identificar los casos de sida y la enfermedad
indicativa de sida y para identificar casos de
tuberculosis, como enfermedad indicativa
de sida, no contemplados en otros registros.
30 (3 y 4) 2005
Registre de Tuberculosi. Programa de
Tuberculosi. Depar tament de Sanitat
i Seguretat Social de la Generalitat de
Catalunya. Centraliza la información sobre
tuberculosis de Cataluña; su cobertura se
reduce a residentes en Cataluña. Registro
informatizado desde el año 1991; los casos
diagnosticados con anterioridad no han
sido identificados. En esta investigación,
fue uno de los tres registros utilizados para
identificar los casos de tuberculosis.
Registre del Programa de Prevenció i
Control de la Tuberculosi de Barcelona. Ser vei de Epidemiologia. Institut
Municipal de Salut de l’Ajuntament de
Barcelona. Centraliza la información sobre
tuberculosis de la ciudad de Barcelona y
notifica los casos al Registre de Tuberculosi
del Departament de Sanitat i Seguretat
Social; su cobertura incluye los residentes
en la ciudad de Barcelona y a no residentes
diagnosticados en los centros sanitarios
de la ciudad. Fue uno de los tres registros
utilizados para identificar los casos de
tuberculosis.
Registre de Notificació Individualitzada
de Nous Casos (RNINC). Xarxa d’Atenció
al Drogodependent. Departament de Sanitat i Seguretat Social de la Generalitat
de Catalunya. Centraliza la información
sobre tratamientos para la adicción a drogas y alcohol en Cataluña. Su cobertura son
los episodios de tratamientos en servicios
ambulatorios, comunidades terapéuticas,
unidades de desintoxicación hospitalaria y
centros de día. Informatizado desde 1987,
excepto para los programas con metadona
cuya informatización se inició en 1991. Se
utilizó para conocer los tratamientos para
Revista Española
de
Drogodependencias
287
Indicadores sanitarios y sociales de la evolución de una cohorte de adictos a heroína...
Sistema d’Informació sobre Drogodepen-dències a Barcelona (SIDB). Pla
d’Acció sobre Drogodependències de
l’Ajuntament de Barcelona. Recoge
información sobre inicios de tratamiento
para la adicción a drogas, urgencias debidas
a consumo de drogas, reacciones agudas
adversas relacionadas con el consumo de
drogas, tuberculosis y sida; su cobertura
incluye los residentes en la ciudad de
Barcelona y/o a los episodios ocurridos
en la ciudad de Barcelona, que se nutre
de un sistema de vigilancia epidemiológico
activa. Se utilizó para identificar los inicios
de tratamiento previos a la informatización
del RNINC.
dades infecciosas de glándulas endocrinas y
trastornos de inmunidad, que incluyen sida)
con 32 casos (23 hombres y 9 mujeres) y
al XVII (envenenamientos, accidentes y suicidio, que incluye sobredosis) con 10 casos
(9 hombres y 1 mujer). Los otros 17 casos
(10 hombres y 7 mujeres) correspondían
a los capítulos: digestivo (4 casos), tumores,
circulatorio y respiratorio (3 casos de cada)
y otras causas (4 casos). Desde 1999, la causa
básica de muerte se codificó de acuerdo a
la ICD-10, 3 casos fueron codificados como
enfermedades infecciosas y parasitarias (2
hombres y 1 mujer) y 1 mujer fue codificada
como enfermedad del sistema nervioso (Tabla
3). Como el sida se codificó en el capítulo III
en ICD-9 y en el capítulo I en ICD-10, es
posible atribuir alrededor de 35 muertos (55
%) al sida (Tabla 3).
Resultados
Sida
Al inicio del tratamiento en 1985, el 71% de
los adictos a heroína eran hombres, su edad
media era de 23.6 años (desviación típica de
3.48) y convivían mayoritariamente con su
familia (73%). En el último año el 70% había
trabajado algún día y el 22% había permanecido algún día en prisión. Su edad media al iniciar
el consumo de heroína fue de 18.7 años (desviación típica de 3.24) y el 47% había estado
en tratamiento previamente (Tabla 1).
A lo largo de estos diecisiete años, 40
hombres (41,7 %) y 19 mujeres (48,7 %)
fueron diagnosticados de sida (Tabla 2). De
estas personas, a 31 de diciembre de 2002,
habían fallecido el 69,5 % (29 hombres y 12
mujeres). La Tabla 4 muestra la enfermedad
indicativa de sida. La causa más frecuente de
enfermedad indicativa de sida fue Pneumocistis carinii pneumonia (15 casos), seguida
de tuberculosis (ocho casos de tuberculosis
diseminada o extrapulmonar y tres casos
de tuberculosis pulmonar) y toxoplasmosis
cerebral (5 casos).
la adicción a drogas posteriores al episodio
de tratamiento que identifica la cohorte.
Mortalidad
A lo largo de estos diecisiete años, fallecieron 44 hombres (45,8%) y 19 mujeres (48,7%)
(Tabla 2). Entre 1992 y 1995 se produjeron
34 muertes. De acuerdo a la ICD-9, utilizada
hasta 1998, las causas más frecuentes de
muerte pertenecían al capítulo III (enferme-
288
Revista Española
de
Drogodependencias
Tuberculosis
Desde el principio del studio, 24 adictos
(17,8 %) fueron diagnosticados de tuberculosis (Tabla 2). Cuando se linkaron los registros
de sida y de tuberculosis, se observó que
30 (3 y 4) 2005
Xavier Sánchez-Carbonell, Marta Beranuy, et al.
21 personas estaban coinfectadas de sida y
tuberculosis.
Readmisión a tratamiento
Hasta el 31 de diciembre de 2002, 60 hombres y 24 mujeres (62,2% en total) empezaron
un nuevo tratamiento para abandonar las
drogas (Tabla 2). Así, al final de este periodo
de diecisiete años, solo 32 adictos vivos no
habían sido readmitidos a tratamiento durante
el seguimiento.
Prisión
En el período comprendido entre el 1
de marzo de 1985 y el 31 de diciembre de
2002, 58 adictos ingresaron como mínimo una
vez en un centro penitenciario, de éstos 41
eran hombres y 17 mujeres. Cuando fueron
encarcelados por primera vez tenían una
edad media de 26,9 años (desviación típica
de 4,8), sus edades oscilaban entre 18 y 41
años y la moda fue 26 años. Los años en que
se produjeron más primeros ingresos fueron
1986 (13 casos) y 1991 (10 casos). De los 58
adictos que ingresaron en prisión, 18 lo hicieron una sola vez, 20 dos veces, 10 ingresaron
3 veces y 9 entre 4 y 8 veces. Un adicto entró
en 10 ocasiones. En total, protagonizaron 151
episodios de ingreso. De las 72 personas vivas
al final del seguimiento, 29 habían ingresado
en prisión y 43 no habían ingresado nunca
en prisión. A lo largo de estos diecisiete años,
estos 54 adictos permanecieron en prisión
41.365 días (más de 113 años), su media de
permanencia fue 766,02 días y la mediana
o percentil 50 fue 285 días (se desconoce
la duración de 1 episodio de ingreso de 4
personas). Una persona de la cohorte ha pasado hasta el momento 4.238 días en prisión.
30 (3 y 4) 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
289
Indicadores sanitarios y sociales de la evolución de una cohorte de adictos a heroína...
Al contar los adictos en prisión cada 31 de
diciembre, se encontró que los años con más
reclusos EMETYST se concentraron entre
1990 y 1994; el 31 de diciembre de 1991, 16
adictos estaban ingresados en prisión.
Discusión
Al inicio del tratamiento en 1985, la cohorte EMETYST era un grupo eminentemente
masculino, en la primera mitad de la veintena,
que consumía heroína por vía intravenosa y
que convivia con su familia de origen. Dado
que compartían muchas características con
adictos que solicitaron tratamiento en otros
centros especializados en la década de los
ochenta (Garcia y Ezquiaga, 1991; Guardia,
Masip y Viladrich, 1988; Martínez, De la Fuente
y Arteagoitia, 1987; Melgarejo et al., 1988;
Mar tínez et al., 1987; Muga et al., 1990),
se puede asumir que la evolución de esta
cohorte puede ser representativa de la del
resto de España (con la posible excepción de
los adictos de Andalucía, que se iniciaron en el
consumo de heroína fumada en la década de
290
Revista Española
de
Drogodependencias
los ochenta, antes de la epidemia de sida).
Mortalidad
Es una grata sorpresa comprobar que el
53 % de los adictos está vivo diecisiete años
después de solicitar tratamiento cuando la
impresión de los profesionales de los centros especializados de tratamiento era más
pesimista. Entre 1985 y 1990 la mortalidad se
mantiene en la franja comprendida entre el
1% y el 3%, lo que se ajustaría a lo observado
en los estudios de cohortes de los setenta
y los ochenta para aumentar drásticamente
después, posiblemente debido al impacto del
sida en los adictos a heroína de España.
Esta interpretación se confirma al estudiar
la distribución temporal de las causas de
muerte. Se observa la importancia creciente
del grupo III, muy posiblemente debido al
sida, porque sólo ocasionalmente se clasifica
alguna muerte en este capítulo en este grupo
de edad de la población general. Obsérvese
como ha evolucionado la situación desde
30 (3 y 4) 2005
Xavier Sánchez-Carbonell, Marta Beranuy, et. al
1991 en Cataluña cuando Muga et al. (1990)
en un seguimiento de adictos a drogas por vía
parenteral que habían recibido tratamiento en
un hospital general, notificaron que de los 11
fallecidos, 10 murieron después de la administración parenteral de drogas y 1 debido a
endocarditis bacteriana. Por esta misma razón,
la importancia de las causas de muerte difiere
de la de otros países europeos (Ghodse, Oyefeso y Kilpatrick, 1998; Gossop et al., 2002).
La relación entre sida y mortalidad en los
consumidores de drogas por vía parenteral
ya ha sido descrita previamente (Perucci et
al., 1991; Selwyn, 1991; Ortí et al., 1996) pero
no se había reportado una magnitud del 50%
en un país de la Unión Europea.
Aunque la mayoría de los miembros de
la cohorte vivían en la ciudad de Barcelona,
el periodo de mayor letalidad de la cohorte
no coincide con el periodo 1987-1989 de
máxima mortalidad por reacción aguda adversa a drogas, entendida como sobredosis
farmacológicas, reacciones alérgicas y reacciones tóxicas por adulterantes, en la ciudad
de Barcelona (Brugal et al., 1995). Ello podría
deberse a que la reacción aguda adversa a
drogas junto al resto de causas externas es
responsable sólo de la tercera parte de las
causas de muerte de nuestra cohorte.
Al comparar los datos de mortalidad a los
diez años se observó con la literatura europea
se observó que: a) la tasa de mortalidad anual
era casi el doble que las de cohortes de Gran
Bretaña y similar a las de cohortes de los
países nórdicos; b) la tasa de supervivencia, en
comparación con la población general, era más
baja que sus iguales en otros países europeos;
y c) que la cohorte EMETYST tenía la tasa más
alta de muertes atribuibles al sida (Bargagli et
30 (3 y 4) 2005
al., 2001; Engstrom et al., 1991; Frischer et al.,
1997; Fugelstad et al., 1997; Haastrup y Jepsen,
1988; Gossop et al., 2002; Oppenheimer et al.,
1994; Perucci et al., 1991; Sánchez-Carbonell y
Seus, 2000; Segest, Mygind y Bay, 1990).
Sida
El sida tiene una influencia decisiva y dramática en el estado de salud de los adictos
a heroína que iniciaron tratamiento en la
década de los ochenta. El sida es la primera
causa de muerte de los adictos a heroína
(Muga et al., 1999; Sánchez-Carbonell y Seus,
2000). La tuberculosis pulmonar o extrapulmonar es la enfermedad indicativa que se
diagnostica con más frecuencia, sobre todo en
adictos a drogas, seguida de la neumonía por
Pneumocistis carinii (Ministerio de Sanidad y
Consumo, 1997; CEESCAT, 1999). En nuestra
cohorte se invierte el orden, la neumonía es la
enfermedad indicativa de sida más frecuente,
seguida por la tuberculosis, situación similar a
la observada por Caylà et al. (1993) hasta el
año 1991 en la ciudad de Barcelona. En la cohorte EMETYST todos los casos de sida cuya
enfermedad indicativa es la tuberculosis son
hombres, tendencia compartida con el resto
de categorías de transmisión. Con los nuevos
tratamientos antiretrovirales se ha reducido
extraordinariamente el número de casos de
sida por lo que sería conveniente introducir
un sistema de vigilancia epidemiológico de la
infección HIV (Sánchez-Carbonell y Vilaregut,
2001).
Tuberculosis
En España y Cataluña la tuberculosis es una
enfermedad endémica que nunca ha llegado
a estar totalmente controlada. Aunque alguRevista Española
de
Drogodependencias
291
Indicadores sanitarios y sociales de la evolución de una cohorte de adictos a heroína...
nas estimaciones elevarían la tasa a un rango
entre 40 y 60 casos por 100.000 habitantes
(Colaborative group for the study of tuberculosis in Spain, 1995), en Cataluña la tasa de
incidencia declarada fue de 37.03 casos por
100.000 habitantes en 1997 (Programa de
Prevenció i Control de la Tuberculosi, 1999). El
impacto de la tuberculosis en nuestra cohorte
es dramático y si se extrapolasen nuestros
datos a la población general se alcanzarían los
12.000 casos por 100.000 habitantes. Además
se debe considerar que, a pesar de existe un
tratamiento preventivo y terapéutico, su cumplimiento es difícil, sobre todo para adictos a
heroína no controlados y en una situación
social marginal. Otro elemento a considerar
es que el ingreso en prisión, tan habitual en
adictos a drogas, incrementa el riesgo de padecer tuberculosis y el de coinfección (Bellin,
Fletcher y Safyer, 1993; Martin et al., 1995). La
asociación sida y tuberculosis en el colectivo
de adictos a drogas de Cataluña define una
situación que limita su calidad de vida, supervivencia con repercusiones sobre la salud
pública que exige medidas urgentes de control
(Sánchez-Carbonell y Vilaregut, 2001).
292
Revista Española
de
Drogodependencias
Readmisión a tratamiento
La recaída es un fenómeno frecuente y
esperable en la recuperación de los adictos
a drogas. En España en 1997, de las 52.440
personas que iniciaron tratamiento por
consumo de sustancias psicoactivas, 32.568
(62.10%) habían seguido tratamientos previos
(Observatorio Español sobre Drogas, 1999).
Hubbard y Marsden (1986), Oppenheimer,
Sheeman y Taylor (1990), Seamen, Gore y
Brettle (2000), Simpson, Joe y Bracy (1982) y
Wille (1981) también han observado elevadas
tasas de readmisiones a tratamiento pero
los estudios no son comparables debido a la
variedad de definiciones operacionales y de
duraciones del periodo de seguimiento. Iniciar
un nuevo tratamiento es la consecuencia de
un uso continuado de drogas, conlleva un
estado de salud deficiente e implica cambios
conductuales para superar el problema.
Aunque el riesgo de recaída disminuye conforme aumenta la duración de la abstinencia,
las primeras readmisiones a tratamiento se
producen durante todo el periodo (SánchezCarbonell y Vilaregut, 2001). El tratamiento es
un exponente de la recaída pero también es
un protector de la mortalidad (Bartu et al.,
30 (3 y 4) 2005
Xavier Sánchez-Carbonell, Marta Beranuy, et al.
2004; Ghodse, Oyefeso y Kilpatrick, 1998) y
de la mejora general. La adicción a drogas
debe contemplarse como una enfermedad
con elevado riesgo de cronificarse (O’Brien
y Mclellan, 1996).
Ingresos en prisión
Juntamente con las readmisiones a tratamiento, el ingreso en prisión es el fenómeno
más frecuente en la biografía adictiva y señala
un nuevo reto por lo que implica para el adicto, su familia y la representación social. Es más,
se calcula que más del 50% de los ingresos
en prisión tienen problemas de consumo de
drogas (Silvosa, 1999).
Como la media de edad de las 58 personas
cuando realizaron su primer ingreso fue de
26,85 años, la carrera delictiva de la población
EMETYST coincide con la juventud y primera
madurez, al igual que sucede con otros colectivos de adictos estudiados (Caixal y Roca,
1999) y con el resto de la población delincuente (Redondo, Funes y Luque, 1994). La
incidencia del ingreso en prisión presenta una
elevada variabilidad. Las dos incidencias más
elevadas se encuentran separadas por cinco
años, en los años 1986, un año después del
inicio del tratamiento, y 1991. Por otro lado,
los años en el que a fecha de 31 de diciembre había más adictos ingresados en prisión
fueron 1990, 1991 y 1992. Si comparamos
este dato con las readmisiones a tratamiento
observamos como estas también tienen una
incidencia muy alta alrededor del año 1992
(26 readmisiones a tratamiento). Aunque no
estamos en condiciones de explicar a que se
debe esta circunstancia, se pueden establecer
hipotesis tentativas que, nos llevan a señalar la
importancia del contexto social para explicar
las consecuencias físicas, psicológicas y sociales
30 (3 y 4) 2005
de la adicción a drogas: a) evolución natural
de la enfermedad; b) ‘mayor celo’ policial y
judicial a fin de mejorar la seguridad ciudadana durante los Juegos Olímpicos de 1992;
c) los adictos a heroína fueron los primeros
en consumir cocaína y en padecer sus consecuencias; y c) la lentitud de la justícia que
juzga a una persona varios años después de
haber cometido el delito.
Por otro lado, un 26’7% del total de la
cohorte vuelve a prisión mientras que la
reincidencia de los 57 adictos que ingresaron
al menos una vez en un centro penitenciario
se eleva al 63’2%. Estudios análogos recogen
cifras similares, exceptuando Roca y Caixal
(2002) que observaron una reincidencia
del 38’82%. Por su parte, Morentín y Gostín
(1998) a partir de una muestra de 578 detenidos, obtuvieron que los sujetos diagnosticados
de trastorno de abuso o dependencia a la
heroína alcanzaban una reincidencia media del
56’5 %; el 78’5 % del total de reincidentes eran
abusadores o dependientes, mientras que en
el grupo de no reincidentes el porcentaje solo
alcanzó el 34’7%. En consecuencia, parece que
son mayores las posibilidades de reingresar
en prisión de un adicto a la heroína respecto a otro tipo de presos. También parece
confirmarse que aunque muchos procesos
adictivos tienen un correlato delictivo y legal,
otros consiguen limitar las repercusiones de
su consumo.
Limitaciones y consideraciones
La técnica utilizada en esta investigación ha
sido la consulta de registros oficiales. Aunque
la entrevista personal o telefónica ha sido la
técnica más utilizada para obtener información
en los estudios de evaluación de tratamientos
y de seguimiento de adictos a drogas, utilizar
Revista Española
de
Drogodependencias
293
Indicadores sanitarios y sociales de la evolución de una cohorte de adictos a heroína...
registros oficiales presenta una serie de ventajas sobre la entrevista (Sánchez-Carbonell,
Forcén y Colomera, 2004): a) es más eficiente, b) los datos de los registros oficiales son
fiables; c) los datos son comparables entre
sí y con los de otras enfermedades; d) los
datos de los registros oficiales son sensibles;
y e) los datos de los registros oficiales son
fiables. Por otro lado, este tipo de estudio
requiere algunas condiciones mínimas, además de la existencia del propio registro y de
la calidad del mismo, comportando siempre
una serie de limitaciones (Sánchez-Carbonell,
Forcén y Colomera, 2004): a) tanto si es a
nivel estatal, federal o municipal, este tipo
de investigación solo es posible si se cuenta
con el apoyo institucional; b) es conveniente
que el registro tenga una cobertura de un
territorio con significación ecológica para
el estilo de vida del adicto; c) se han de
extremar los mecanismos para preservar la
identificación y la confidencialidad; d) debido
a la gran cantidad de acontecimientos vitales
y sucesos no controlados no es aconsejable
establecer relaciones causales entre variables;
e) los registros oficiales ofrecen medidas de
tipo indirecto; f) se ha de estar muy atento a
la subestimación de casos.
Otras limitaciones están relacionadas con
los indicadores. En las muertes clasificadas
en el grupo III de la ICD-9 no se ha podido
distinguir los trastornos endocrinos, nutricionales e inmunológicos entre sí, ni dentro
de estos últimos los debidos al sida. Siempre
existe un riesgo de subnotificación de algunas
enfermedades socialmente estigmatizadas
como es el sida (Buehler et al., 1990; De la
Fuente et al., 1995; Ortí et al., 1996). El indicador tuberculosis ha estado subnotificado en
los primeros años de seguimiento: la ciudad
294
Revista Española
de
Drogodependencias
de Barcelona tiene una elevada cobertura
desde 1987, pero en el resto de Cataluña la
informatización del registro se inició en 1991.
El indicador tratamiento tiene un elevado
riesgo de subnotificación: a) un adicto puede
empezar tratamiento en un centro no adscrito
a la red oficial de Cataluña (una comunidad
terapéutica evangelista, por ejemplo) y b) una
persona puede usar repetidamente drogas y
no solicitar tratamiento. Otro problema del
indicador tratamiento es que la recaída no
es un estado permanente, es posible reiniciar
el uso de drogas pero también es posible
superar la recaída. Nuestro análisis prima el aspecto acumulativo pero no permite saber, por
ejemplo, cuantos adictos estaban abstinentes
al final del seguimiento. En cuanto al indicador
ingresos en prisión se debe considerar que:
a) el número de denuncias no coincide con
el número de delitos reales (Jarvis y Parker,
1989; Morentin y Gostin, 1998; Otero, 1994;
Roca y Caixal, 2002) ;b) no se tiene acceso al
tipo de delito cometido por el recluso; c) Una
persona puede cumplir más de una condena
en el mismo ingreso y, a la inversa, el mismo
delito puede provocar dos o más entradas; y
d) los cumplimientos alternativos al ingreso
en prisión suponen, afortunadamente, la reducción del ingreso en prisión de los adictos
(Sánchez-Carbonell, Valls y Alvarós, 1996;
Silvosa, 1999).
Conclusiones
Esta investigación ha servido para poner
a punto una metodologia de estudio para
conocer la evolución sanitaria y soacial de cohortes identificadas. El seguimiento mediante
registros es una técnica novedosa y de bajo
coste que puede ofrecer información valiosa
y comparable sobre la evolución sanitaria y
30 (3 y 4) 2005
Xavier Sánchez-Carbonell, Marta Beranuy, et al.
social a largo plazo de los adictos a drogas
en distintas regiones de España y de Europa
durante periodos prolongados.
Se ha podido mostrar datos sobre el deficiente estado de salud y la elevada mortalidad de los adictos a heroína, en gran parte
debido a la influencia del sida, subrayando las
diferencias en las evoluciones de los adictos
debidas a las condiciones sanitarias determinadas por el país de residencia (Ghodse,
Oyefeso y Kilpatrick, 1998). Aunque se pueden
plantear diferentes hipótesis para explicar esta
circunstancia, la política sobre tratamiento de
adictos, especialmente, la limitación del uso
terapéutico de agonistas (Villalbí y Brugal,
1999; Sánchez-Carbonell y Seus, 2000) y el
uso de la vía intravenosa (De la Fuente et al.,
1999) son las más verosímiles. La adicción a
drogas es una enfermedad con elevado riesgo
de cronificación (O’Brien et al., 1996) que
30 (3 y 4) 2005
genera numerosas complicaciones infecciosas
y sociales, con un coste social muy alto. Los
indicadores sociales y sanitarios tienden a
mantenerse, lo que parece confirmar la vieja
teoría del proceso de maduración y estabilización de los procesos adictivos (Hanlon et al.,
1990; Maddux y Desmond, 1980).También es
posible que, incluso con trastornos tan graves
como la adicción a heroína, muchos adictos
consigan mantenerse al margen del deterioro
causado por las enfermedades infecciosas y de
la marginalización que representa el ingreso
en prisión. Un indicador social que permitiría
aportar una información muy valiosa es la
historia de vida laboral.
En la primera fase del proyecto EMETYST,
la técnica de recogida de datos utilizada fue la
entrevista personal mediante un cuestionario
estandarizado aplicada en el seguimiento a los
Revista Española
de
Drogodependencias
295
Indicadores sanitarios y sociales de la evolución de una cohorte de adictos a heroína...
6, 12 y 24 meses. En la segunda fase, la técnica
de recogida de datos ha sido el linkage de los
registros oficiales de mortalidad, sida, tuberculosis, readmisiones a tratamiento e ingresos en
prisión (y todavía estamos buscando la manera
de conseguir datos sobre la historia de vida
laboral), aplicada en el seguimiento a los diez
y diecisiete años. En la actualidad estamos
desarrollando la tercera fase del proyecto
que consistiría en entrevistar en profundidad
a algunos de los adictos supervivientes estos
veinte años para conocer y comprender la
vivencia subjetiva y describir los efectos de la
adicción a drogas en las áreas personal, familiar,
relacional, laboral, sanitario y expectativas de
futuro (Beranuy et al., 2004).
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Agradecimientos
Esta investigación ha sido posible gracias a una beca del Programa de Recerca de la
Facultat de Psicologia i Ciències de l’Educació i l’Esport Blanquerna y a una ayuda del
Centre d’Estudis Jurídics i de Formació Especialitzada. Los autores agradecen la información facilitada por Departament de Sanitat y Seguridad Social, Generalitat de Catalunya
(Servicio de Información y Estudios, CEESCAT, Programa de Tuberculosi i Òrgan Tècnic de
Drogodependències) y por el Ajuntament de Barcelona (Servei d’Epidemiologia: Programa de
Prevenció i Control de la Tuberculosi, Registre de la SIDA y Sistema d’Informació de Drogues)
y Pla d’Acció sobre Drogodependències. En todo momento pudimos contar con el soporte
de M. Capdevila, A. Coll y C. Virgili. Agradecemos los comentarios a partes de manuscrito
300
Revista Española
de
Drogodependencias
30 (3 y 4) 2005
Originales
20 años de prevención familiar en España
(1985-2005)
Emiliano Martín González
Jefe del Departamento de Familia (Ayuntamiento de Madrid)
Resumen
La familia tiene una importancia fundamental en la prevención de drogodependencias.
La evidencia científica y la opinión de los organismos públicos demuestran la necesidad
de trabajar con la familia para afrontar este problema.
Sin embargo, la revisión de los programas realizados en España durante los últimos veinte
años muestra que, a pesar de los avances producidos, existen pocos programas de calidad
y la extensión de estos programas entre la población es muy insuficiente.
El análisis de la evolución de estos programas en diferentes fases y la identificación de
sus puntos fuertes y débiles permiten extraer los cambios necesarios para mejorar la
calidad de los programas, la participación de los padres y la investigación.
Palabras Clave
Familia, prevención, drogodependencias, revisión de programas.
Summary
The family has a fundamental importance in the drug-dependency prevention.The scientific evidence and the opinion of the public organization shows the necessity of working
with the family to face the problem.
However, the review of the programmes carried out in Spain during the last twenty years
shows that, despite of the progress making, there are few programmes with quality and
not enough for all the population.
The analysis of the evaluation of these programmes in different phases and the identification of there strong and weak points allow us to obtain the necessary changes for a better
quality of the programmes, the participation of the parents and for the research.
Key Words
Family, prevention, drug-dependency, review of the programmes.
Correspondencia a:
[email protected] Apartado Postal 477. 46080 Valencia.
30
30(3
(3yy4)
4)2005
301-321. 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
301
20 años de prevenciòn familiar en España (1985-2005)
Résumé
La famille a une importance fondamentale pour la prévention de la toxicomanie.
L´évidence scientifique et l´opinion des organismes publiques démontrent le besoin de
travailler avec la famille pour affronter ce problème.
Néanmoins, la revue des programmes compris en Espagne pendant les vingt
dernières années montre qui, malgré les avances produits, il a peu de programmes de
qualité et l´extension des programmes parmi la population est très insuffisante.
L´analyse de l´évolution de ces programmes dans phases différentes et
l´identification de ses points forts et faibles ils permettent d´extraire les changements
nécessaires pour améliorer la qualité des programmes, la participation des parents et la
Most Clé
Famille, prévention, toxicomanies, revue de programmes.
Introducción.
Valorar las dos últimas décadas de la historia
de las drogas en nuestro país, sea cual sea la
vertiente que se adopte, resulta una empresa
compleja y en gran medida ambivalente. Por
una parte, podría afirmarse que, a fin de
cuentas, ha transcurrido un período de tiempo
relativamente corto y que el fenómeno ha
sufrido mínimas evoluciones sustanciales, al
menos en su percepción social; de hecho, los
grandes estereotipos que han contribuido a
perfilar la representación social de las drogas
y de sus consumidores desde sus inicios en la
segunda mitad de los setenta siguen estando
plenamente vigentes (diferenciación drogas
blandas-drogas duras, fuerte asociación de
éstas últimas con la marginalidad, aceptable
imagen de las sustancias psicoestimulantes
frente a la más negativa de las depresoras, permisividad en amplios sectores de la población
hacia el cánnabis y el alcohol…). Sin embargo,
para los profesionales que hemos vivido esta
breve pero intensa historia y hemos tenido la
fortuna de implicarnos en diferentes tareas y
302
Revista Española
de
Drogodependencias
responsabilidades, la crónica de estos últimos
veinte años no resulta tan sencilla. Analizado
pormenorizadamente, es difícil encontrar un
fenómeno social que haya sufrido tantas y
tan aceleradas transformaciones, que haya
generado tal entramado de estrategias desde
las instituciones públicas y las organizaciones
sociales, que haya movilizado tantos recursos
humanos y materiales, que haya concentrado
tanto interés de los ciudadanos… y todo ello
en un espacio tan corto de tiempo.
De aquí que resulte tan complicado focalizar la atención en el análisis de cualquiera de
las estrategias aplicadas -en nuestro caso, la
prevención en el ámbito familiar- sin necesidad
de interconectarlas permanentemente con la
evolución en paralelo de las restantes estrategias de intervención o intentando buscar
la correspondencia de cada fase examinada
con los importantes acontecimientos y las
profundas transformaciones sociales vividas
por nuestro país durante este período.
Por tanto, para llevar a cabo la revisión de
los programas de prevención de drogode30 (3 y 4) 2005
Emiliano Martín González
pendencias en el ámbito familiar, debemos
situar en ese contexto histórico la evolución
de las políticas sobre drogas en función de las
constantes transformaciones del problema y
de las demandas apremiantes de la sociedad,
el papel desempeñado por la prevención en
estas circunstancias y, dentro de éste, el más
específico de las intervenciones dirigidas a
las familias. No obstante, antes de proceder a
desglosar cada una de las fases de este proceso evolutivo y de identificar las fortalezas
y debilidades de la prevención familiar en
nuestro país, comenzaremos destacando la
importancia de la prevención familiar, tanto
desde un punto de vista científico, mediante
las principales aportaciones de la investigación
y las evidencias disponibles en este ámbito,
como institucional. De igual modo, nos detendremos brevemente en una cuestión tan
fundamental como el grado de implicación de
los padres en los programas preventivos.
1. La necesidad
de intervenir
preventivamente sobre la
familia.
Si hubiera que resumir con un enunciado
sencillo los principales avances de la ciencia
preventiva en materia de drogodependencias, cabría afirmar que los programas de
prevención más efectivos son aquellos de
naturaleza multicomponente y de carácter
integral que actúan simultáneamente en
diferentes niveles entre los que destacan la
familia, la escuela y la comunidad.Y, entre estos
tres niveles, la familia tiene un peso decisivo.
De hecho, entre los numerosos factores que
aumentan la probabilidad de que los jóvenes
adquieran una pauta de consumo de drogas
(lo que denominamos factores de riesgo), los
30 (3 y 4) 2005
diferentes autores que han investigado este
tema subrayan por su singular importancia
los factores de riesgo familiar. En una amplia
revisión realizada por Becoña (2002)1 , existen
múltiples coincidencias a la hora de referirse
a factores como: la conflictividad intra-familiar,
que genera un aumento del estrés en los
miembros de la familia y tiene que ver con
un mayor consumo de drogas de los padres y
mayor dificultad de control; la baja frecuencia
de realización de actividades conjuntas entre
padres e hijos, que redunda en un menor
aprendizaje de actividades pro-sociales y un
menor seguimiento de las actividades de los
hijos; un estilo educativo parental inadecuado,
caracterizado por una extrema permisividad
o autoritarismo; el consumo de drogas y actitudes favorables hacia ellas en los padres, que
tiene una influencia evidente en la forma de
disfrutar el ocio o enfrentarse a los problemas
personales o interpersonales…
De igual modo, Cuijpers (1998)2 atribuye
una “fuerte evidencia” a la calidad y eficacia
preventiva de las medidas de tipo comunitario
que complementan la intervención escolar
entre las que destacan las intervenciones dirigidas a la familia, las campañas en los medios
de comunicación locales y comités encargados
de movilizar acciones de apoyo comunitario.
Parte, para ello, de los meta-análisis realizados
por Tobler y colaboradores (2000)3 y de los
estudios comparativos que analizan los efectos
con o sin este componente.
Por otra parte, desde un punto de vista
institucional, si nos atenemos al texto de
la Estrategia Nacional sobre Drogas 20002008 (Plan Nacional sobre Drogas, 2000)4 ,
vemos que refleja con una literalidad absoluta
no sólo el gran interés que tiene la familia
para las instituciones que se ocupan de los
problemas relacionados con las drogas en
nuestro país sino también el diagnóstico de
Revista Española
de
Drogodependencias
303
20 años de prevenciòn familiar en España (1985-2005)
situación y los objetivos que deben seguirse.
En efecto, la Estrategia destaca como prioritaria la prevención en los ámbitos escolar,
familiar, laboral y comunitario y en el espacio
de la comunicación social. Y precisa aún más:
“Las intervenciones con las familias tenderán
a fomentar las habilidades educativas y de
comunicación en el seno familiar, incrementar
el sentido de competencia de los padres y su
capacidad para la resolución de problemas, así
como concienciarlos de la importancia sobre
su papel como agentes de salud. También
deben perseguir la implicación de los padres
en otras iniciativas escolares o comunitarias
desarrolladas en su entorno”.
A pesar de todo ello, la implantación y el
desarrollo de la prevención familiar en nuestro
país son a todas luces insuficientes. No es éste
el lugar más idóneo para analizar las causas
que subyacen al escaso interés, cuando no al
más absoluto olvido, del ámbito familiar entre
muchos agentes preventivos de nuestro país.
Tal vez el mejor referente de lo que se viene
afirmando lo constituya la última Memoria del
Plan Nacional sobre Drogas, correspondiente
al año 20025 . En ella se estima una participación de 14.465 padres y madres en el total
de Comunidades Autónomas. Sin ánimo de
restar la más mínima importancia al ingente
esfuerzo que esto supone, no cabe duda de
que se trata de un porcentaje muy pequeño
si lo ponemos en relación no ya con el total
de la población potencialmente destinataria
(existen unos siete millones de escolares no
universitarios en nuestro país) sino simplemente con el número de participantes en
programas escolares durante ese mismo año
que alcanzó la cifra de 755.371 alumnos. Y, lo
que resulta más clarificador aún, que constituyendo una prioridad clara y manifiesta de la
Estrategia Nacional, tan sólo algo más del 50%
304
Revista Española
de
Drogodependencias
de los Planes Autonómicos estén aplicando
este tipo de programas.
Sin embargo, las Memorias del Plan recogen también datos de sumo interés como
el hecho de que los objetivos de algunos de
estos programas sean en los últimos años de
rango taxonómico superior a etapas anteriores. Se expone que, así como en otras etapas
el objetivo más común de los programas era
que los padres adquirieran conocimientos de
todo lo relacionado con las adicciones, estos
últimos años, junto a este mismo objetivo, se
ha planteado de forma muy generalizada el
que los padres desarrollen actitudes, hábitos
y valores positivos hacia la salud, detectando
y actuando sobre los factores de riesgo e
incrementando los factores de protección. Es
decir, existen algunos programas centrados en
la familia que se están aplicando en nuestro
país y que ya alcanzan un adecuado nivel
de calidad. Aunque uno de los déficits más
relevantes que sigue existiendo es la evaluación, que tan sólo en el 29% de los casos se
orienta a la valoración de los resultados. Pese
a este tipo de déficits de carácter metodológico, el principal problema que expresan
las Comunidades Autónomas con absoluta
unanimidad es la “dificultad para captar y
mantener la participación de los padres”. Con
lo que no hacen más que confirmar lo que
es una realidad en otros países que nos han
precedido en la aplicación de estos programas
y que queda perfectamente explicitado en la
Estrategia Nacional sobre Drogas cuando se
afirma: “Es necesario mejorar el acceso a las
familias y lograr incrementar su participación
en los programas que se desarrollan. Para ello
los programas deben estar orientados a dar
respuesta a las necesidades e inquietudes de
los padres, más que centrarse en la formación
sobre drogas, y deben estar adaptados a sus
30 (3 y 4) 2005
Emiliano Martín González
circunstancias”.
2. La dificultad de
triangular familias,
drogas y prevención.
Por tanto, si queremos analizar la situación
en que se encuentra actualmente la prevención familiar de drogodependencias en nuestro país, hemos de identificar sus principales
fortalezas y debilidades, lo que nos permitiría
extraer propuestas de futuro que nos permitieran avanzar y convertir en realidades
lo que hoy son tan sólo buenos deseos, con
excepción de unas pocas concreciones. Un
planteamiento ambicioso y complejo sin duda,
dadas las graves carencias del tema. Para ello
comenzaremos por situar nuestra reflexión
en los tres vértices del triángulo que acotan
el marco de análisis de este estudio: las familias, las drogas y la prevención. Se trataría, en
primera instancia, de valorar la capacidad, el
potencial si se quiere, que tiene las familias
españolas para hacer frente hoy al fenómeno de las drogas. En segundo lugar, estimar
la importancia que las familias atribuyen a
esta grave problemática y, lo que es aún más
relevante, determinar el grado de implicación
que muestran los padres ante la posibilidad de
aplicar medidas preventivas para anticiparnos
a estos consumos.
Ante el temor de que algunas valoraciones
posteriores pudieran llevar a falsas interpretaciones, es conveniente situarse de antemano
en una posición alejada de ciertos derrotismos
que insisten una y otra vez en la crisis de la
familia y en su incapacidad para ejercer la
función socializadora que le exigen los nuevos
tiempos. Con los datos disponibles, puede afirmarse que, pese a la intensidad de sus trans-
30 (3 y 4) 2005
formaciones y del contexto cambiante donde
se inserta, la familia actual goza de buena salud
(Iglesias de Ussel, 1997)6 . Las supuestas crisis
a las que se alude recurrentemente no son
más que las manifestaciones de los notables
esfuerzos que ha precisado para adaptarse
a un entorno variable cuyas exigencias son
cada vez más complejas. De hecho, todas las
encuestas recientes realizadas en nuestro país
muestran que la familia sigue siendo la institución más valorada por los españoles y, según
recoge Vielva (2001)7 , la familia representa hoy
para el 99% de los españoles adultos y para
el 70% de los jóvenes, uno de los valores más
importantes, por encima del trabajo, amigos,
tiempo libre, religión y política. Por tanto, a la
vista de la evidencia disponible, cabría atribuir
a la familia un indiscutible potencial para afrontar cualquier tarea educativa y socializadora
y evidentemente la prevención de cualquier
conducta inadaptada entra de lleno en este
tipo de cometidos.
Si enfocamos el tema desde el segundo
vértice, esto es, la importancia que se atribuye
a las drogas en el seno de las familias españolas,
en una primera aproximación, las cosas no
difieren sustancialmente. El problema de las
drogas lleva más de veinte años provocando
preocupación y temor entre las familias españolas. En un estudio muy reciente, no orientado a investigar el fenómeno de las drogas sino
los estilos de vida familiares (Alberdi y Escario,
2003)8 , cuando se les pregunta a los padres
acerca de los problemas que consideran la
amenaza más potente sobre el futuro de sus
hijos, sitúan sin dudas y en primer lugar a las
drogas. Ciertamente, es difícil imaginar una
familia donde este asunto no se haya suscitado
con temor en alguna ocasión y, desgraciadamente, no son escasas aquellas que, en uno u
otro momento, han tenido que enfrentarse al
Revista Española
de
Drogodependencias
305
20 años de prevenciòn familiar en España (1985-2005)
hecho de que alguno de sus miembros se ha
visto afectado por este problema.
No obstante, según nos vamos aproximando a la cuestión de fondo, comienzan a aflorar
numerosas inconsistencias o contradicciones.
La primera de ellas se refiere a la valoración
que hacen los padres sobre los consumos de
drogas de sus hijos, tendente a minimizar la
gravedad del tema, sobre todo si se trata del
consumo de drogas legales. Según FernándezHermida y Secades (2002)9 , el 96% de los
padres con hijos con alto consumo de alcohol
infraestiman este consumo. Otra tiene que ver
con el grado de conocimiento que tienen los
padres sobre los consumos de cualquier tipo
de droga que llevan a cabo sus hijos pues es
preciso tener en cuenta las condiciones en
que se producen la mayor parte de los consumos juveniles, en contextos de diversión y
en horario nocturno, muy alejados del control
del mundo adulto, lo que explicaría en parte
el hecho de que, según recogen estos mismos
autores, tan sólo el 4% de los padres de los
hijos experimentadores con cánnabis sabían
que éstos lo habían probado.
Tal vez éstas y otras muchas contradicciones
se encuentren en la base del extrañamiento
que viven muchas familias españolas respecto
al fenómeno de las drogas y que se concreta
en un reconocimiento formal del problema
que éstas representan, al tiempo que se evita
su plena asunción como cuestión educativa
y su afrontamiento con lo que conlleva de
esfuerzo y compromiso en la vida cotidiana.
Una de las manifestaciones más claras de
esta falta de implicación familiar se materializa en la escasa participación de los padres
en los programas de prevención familiar de
drogodependencias. Antes de abordar esta
cuestión central de la participación de los
padres, es preciso destacar un hecho que han
306
Revista Española
de
Drogodependencias
constatado numerosos autores en diferentes
estudios: la desorientación y la incertidumbre
con las que los padres están enfrentándose a
su propio modelo educativo y a la forma de
relacionarse con sus hijos. Pérez y Cánovas
(2002)10 estiman en un 42% el porcentaje de
padres que se encuentran en esta situación.
En un estudio de la FAD y el Plan Nacional
sobre Drogas (2002)11 , se recoge que el 33%
de los padres siente que no educa bien o
que no sabe cómo hacerlo y alrededor del
40% de los padres confiesa no manejar bien
los conflictos de convivencia con sus hijos.
Ante esto, la reacción para determinados
sectores consiste en negar o en proyectar
en otros agentes educativos la mayor parte
de la responsabilidad sobre el abordaje del
problema. Así, Pinazo y Pons (2002)12 sitúan
en un tercio el porcentaje de padres que no
reconoce que las malas relaciones familiares
constituyen un factor de riesgo para el inicio y
mantenimiento del consumo de drogas y, en el
citado estudio de la FAD y el PND, cuando se
les pregunta a los padres qué cosas les ayudarían más a resolver las dificultades con las que
se encuentran en la educación de sus hijos,
el 60% de los padres piden más implicación
de los profesores, el 49,2% que los medios
de comunicación fueran más educativos y,
descendiendo hasta el 26%, otros aspectos
como que su pareja se comprometa más,
que hubiera más y mejores recursos para el
ocio y el tiempo libre (6,7%) o que el sistema
educativo tuviera más recursos (1,3%). En
síntesis, los apoyos necesarios para realizar
correctamente su función educativa tendrían
que proceder más de agentes externos (profesores, medios de comunicación…) que de
aquellos que supongan un mayor compromiso
de su entorno más inmediato.
3 La implicación familiar
30 (3 y 4) 2005
Emiliano Martín González
en los programas
preventivos.
La cuestión de la implicación familiar en la
prevención es uno de los elementos nucleares
pues constituye un requisito imprescindible
para llevar a cabo cualquier estrategia preventiva. En la práctica, la mayoría de los profesionales que han trabajado en este ámbito
plantean éste como el principal obstáculo para
desarrollar sus proyectos. Algunos estudios
empíricos (Pinazo y Pons, 200213 ; Ferrer
y Aneyto, 199114 ; Ongil, 199015 ) parecen
demostrar que la mayoría de los padres se
muestran dispuestos a participar en actividades preventivas, pero no a dedicar mucho
tiempo a las mismas. Además, son las madres
las que parecen más dispuestas a participar
en estos programas. De aquí que diferentes
autores y agencias preventivas hayan tratado
de diseñar, durante los últimos años, estrategias que incentiven la presencia y participación
de los padres (Pinilla, 199716 ; Ferrer y Aneyto,
199117 ) utilizando técnicas como el envío
previo de material audiovisual al hogar de los
alumnos destinatarios del programa, cuidar las
estrategias de las convocatorias o diversificarlas en función de los grupos destinatarios.
Muchas más estrategias se pueden encontrar en la literatura científica. Por citar algunas,
podemos hacer mención a las que recogen
Pinazo y Pons (2002)18 o Laudeman (1984)19 ,
que propone que sean los profesionales de
la educación quienes impliquen a los padres
y en especial a los que denomina “apáticos”,
mediante llamadas telefónicas, contactos personales previos, envío de notas escritas, visitas
domiciliarias, etc. Otras técnicas propuestas
por este autor para aumentar la motivación de
tales padres son emitir anuncios por la radio
y planificar las sesiones cuidadosamente para
no coincidir con momentos que faciliten las
30 (3 y 4) 2005
excusas para la inasistencia (horario laboral,
actividades religiosas, acontecimientos deportivos, etc.). Por su parte, Rosenwald (1985)20 propone organizar learning parties llevadas
a cabo en un medio neutral como un centro
cívico para favorecer la participación de otros
recursos comunitarios y practicar también la
invitación personal, servir bebidas no alcohólicas, potenciar el diálogo en pequeños grupos
entre padres e hijos, agrupando a padres con
adolescentes que no sean sus hijos, y moderar
la intervención con especialistas en prevención y educación para la salud. Incluso se ha
valorado la posibilidad de incentivar económicamente a los padres para que participen. Así,
Grady, Gersick y Boratinsky (1985)21 pagaron
a los padres para compensarlos de los gastos
de desplazamiento y cuidado de los hijos, pero
no consiguieron más que la participación de
una cuarta parte de los padres convocados.
La idea fundamental que subyace a este
tipo de experiencias y que cabe plantearse,
por encima de cualquier otra consideración, es
que se debe promover la participación de las
familias teniendo en cuenta sus necesidades,
sus actitudes y sus expectativas ante los programas de prevención, además lógicamente,
de su grado de disponibilidad para participar
en estas actividades.Y, en este sentido, existen
notables carencias en cuanto a este tipo de
información en la población española.
Bien es cierto que se han realizado en
nuestro país diferentes estudios sobre diversos aspectos que relacionan la familia y
el consumo de drogas. Entre ellos destacan
los que se centran en los factores familiares
de riesgo (Recio, 1992;22 Ruiz Carrasco et
al., 199423 ; Muñoz-Rivas y Graña, 200124 ). La
mayoría de estos estudios y otros, como la
Encuesta Escolar del Observatorio Español
Revista Española
de
Drogodependencias
307
20 años de prevenciòn familiar en España (1985-2005)
sobre Drogas (que se realiza cada dos años),
recogen información directa de los alumnos,
por lo que la información sobre las opiniones
y actitudes familiares responde realmente a la
percepción de los adolescentes y no la opinión
que pudieran tener los propios padres sobre
las cuestiones que se suscitan.
También existen algunos estudios más
específicos que se han dirigido directamente
a los padres (CEAPA, 199825 ; Vielva, Pantoja
y Abeijón, 200126 ; Pinazo y Pons, 200227 ) y
recogen aspectos sumamente interesantes
para aproximarse a la cuestión que nos
ocupa, pero todos ellos resultan parciales
e insuficientes para abordar el tema que
nos ocupa por unas u otras razones. Así, el
estudio de CEAPA (1998)28 aborda aspectos
tan relevantes como las percepciones de los
padres ante el fenómeno, el tiempo libre de
los hijos, el clima familiar y sus expectativas,
etc. pero todo ello referido exclusivamente
al fenómeno del alcohol. Por otra parte, el
trabajo de campo se realizó en el año 1997
por lo que refleja una situación que ha sufrido
importantes transformaciones tras los ocho
años transcurridos.
El mencionado estudio de la FAD y el Plan
Nacional sobre Drogas (2002)29 reúne dos
investigaciones, una cuantitativa dirigida a los
hijos y otra cualitativa en la que participan
directamente los padres. Trata temas tan determinantes para conocer la familia como la
comunicación, los valores, discrepancias y conflictos en la familia… No obstante, la cuestión
de las drogas se toca muy tangencialmente
y, en cualquier caso, no recoge elementos
que puedan tener una cierta aplicabilidad
preventiva.
308
Vielva, Pantoja y Abeijón (2001)30 llevan a
cabo dos interesantes estudios en los tratan
de conocer las normas, comportamientos, hábitos y valores inculcados en la vida cotidiana
Revista Española
de
Drogodependencias
por las familias a sus hijos adolescentes. El primero es de carácter cuantitativo, consistente
en la aplicación de escalas y cuestionarios, con
el objeto de analizar las relaciones familiares
entre padres e hijos adolescentes. En el segundo, mediante una metodología cualitativa,
se aborda el tema de la educación que los
padres dan a sus hijos y de los valores que
les transmiten. Los aspectos más relevantes
son el hecho de recoger el punto de vista
de la triada familiar (padre, madre e hijos) y
la comparación entre familias con hijos consumidores de drogas y otros que no lo son.
Abordan, por tanto, aspectos de contenido
fundamentalmente socializador y educativo.
Pero, de los estudios mencionados, uno de
los más interesante sin duda es el de Picazo
y Pons (2002)31 . Describe las actitudes de los
padres respecto a la prevención así como su
posición y opiniones en cuanto a su implicación en programas preventivos. Aunque está
referido exclusivamente a padres con hijos
escolarizados en centros públicos y privados
de la Comunidad Valenciana, sin embargo,
tanto en sus aspectos metodológicos como
en sus contenidos sugiere nuevas vías de
investigación y representa una de las aportaciones más útiles para los planificadores de la
prevención familiar.
De todo ello se extrae la necesidad de
incidir en investigaciones que continúen los
pasos que ya se comenzaron a dar desde
hace años con otros destinatarios de la prevención. Hay que tener en cuenta que ya se
disponen de datos de esta naturaleza referidos
a otra población de “mediadores” tan decisiva
como los profesores. En efecto, además de un
estudio de la FAD (1998)32 , el Observatorio
Español sobre Drogas ha introducido en su
Encuesta sobre Drogas a la Población Escolar,
desde el año 2000, un cuestionario dirigido a
30 (3 y 4) 2005
Emiliano Martín González
los profesores, destinado a conocer su experiencia y opiniones respecto a la incidencia del
problema de las drogas en el centro escolar,
el nivel de conocimiento de los programas de
prevención de drogodependencias, su participación en actividades, su grado de disponibilidad, etc. Por lo tanto, resulta imprescindible
lograr un nivel de conocimiento similar acerca
del medio familiar.
4. Evolución histórica de
la prevención familiar en
España.
Llegados a este punto, llevaremos a cabo
un repaso de la evolución que la prevención
familiar ha seguido en nuestro país durante los
últimos veinte años y comparemos el punto
de partida con la situación actual. Agruparemos esta evolución en tres grandes etapas: la
década de los ochenta, que marca el inicio de
las experiencias preventivas en nuestro país,
coincidiendo con las fases de “configuración
del problema de las drogas” y de “articulación
de las respuestas institucionales” ante este
fenómeno en España (Martín, 2000)33 , entre
las que destaca sin duda la aprobación del Plan
Nacional sobre Drogas en 1985; la década
de los noventa, que representa la etapa de
los “grandes cambios” no sólo en las sustancias consumidas con más frecuencia y en los
patrones de consumo correspondientes sino
también en la conceptualización y naturaleza
de las políticas adoptadas por las instituciones
públicas y privadas que intervienen en este
ámbito, y, finalmente, la situación actual, ordenada lógicamente por la Estrategia Nacional
sobre Drogas (2000-2008) que define el marco de actuación de las políticas nacionales.
30 (3 y 4) 2005
a) La década de los ochenta:
Esta década, diferenciada claramente en dos
mitades por la aprobación del Plan Nacional
sobre Drogas y marcada en su segunda parte
por la creación de los Planes Autonómicos sobre Drogas, está caracterizada por la creación
en nuestro país de los primeros dispositivos
asistenciales, procedentes tanto de la iniciativa
social como de los entres locales y autonómicos. La presión de las demandas asistenciales
ante una carencia objetiva de recursos adecuados, hizo que la prevención en su conjunto
tuviera una presencia más bien escasa que,
en cualquier caso, se centraba en el medio
escolar y algunas experiencias de interés en
el ámbito comunitario. Las pocas actividades
preventivas dirigidas a los padres y madres
tenían las siguientes características:
- Se trataba de iniciativas puntuales y sin continuidad en el tiempo, ligadas, en la mayoría
de las ocasiones, a programas realizados en
el ámbito escolar.
- Poseían un marcado carácter informativo
y ponían el énfasis en las sustancias ilegales
que constituían, en aquella época, el centro
de interés de los problemas de drogas.
- Su formato más habitual eran las charlas (realizadas por “expertos” ajenos al
contexto familiar en muchos casos y por
ex-adictos o miembros de las fuerzas de
seguridad en no pocas ocasiones).
- Una característica común era la inexistencia
de evaluación y, coherentemente, la no
adecuación a las necesidades y exigencias
de las familias.
Uno de los testimonios más gráficos de
esta etapa es sin duda el “Dictamen para
la planificación de la prevención escolar de
la prevención de drogas en la comunidad
Revista Española
de
Drogodependencias
309
20 años de prevenciòn familiar en España (1985-2005)
escolar” (Aguado, Comas y Martín, 1986)34 ,
realizado a solicitud del Ministerio de Educación y Ciencia que reconocía literalmente
que “el papel de los padres queda en muchas
ocasiones claramente diluido, su formación
se aborda de modo puntual y discontinuo y
su participación no recibe los incentivos que
precisaría”.
b) Década de los noventa:
Durante estos diez años el fenómeno de
las drogas sufre sus mayores transformaciones.
Los noventa configuran un escenario más diverso y complejo que el existente en la etapa
anterior. Los cambios más profundos tienen
que ver con la aparición de nuevas drogas y
nuevos patrones de consumo, lo que diversos
autores han valorado como un auténtico cambio de ciclo en las crisis de drogas en nuestro
país. Se trata de consumos de fin de semana,
fuera del ámbito familiar, en espacios o locales
públicos y con la única motivación de divertirse. En el caso concreto del alcohol existe con
frecuencia una búsqueda intencionada de la
embriaguez, con cambios en las horas de salida
de los jóvenes y consumos en la vía pública,
características que contribuyen a amplificar
el fenómeno. Pero se produce además un
aspecto que conviene resaltar, estos consumos
no encierran generalmente posiciones contraculturales o comportamientos marginales
como sucedía en el modelo anterior. Lo que
se comenzó a gestar en la década pasada no
eran simplemente nuevas formas de relacionarse con las drogas sino nuevos modos de
estar en sociedad que afectan a sectores muy
importantes de jóvenes relativamente bien
integrados en otras esferas de la vida. Es lo que
Howard Parker y su equipo de la Universidad
310
Revista Española
de
Drogodependencias
de Manchester (1998)35 se plantean en una
de las escasas investigaciones longitudinales
sobre el consumo recreativo de drogas en
un país europeo: ¿Qué ha podido pasar para
que tan sólo en una década podamos estar
hablando de la normalización del consumo recreativo de drogas? Para estos investigadores,
lo central en este proceso de normalización
es la extensión de una actividad, considerada
como desviada, desde los márgenes hacia el
centro de la cultura juvenil, donde se une a
otras actividades como la conducta sexual de
riesgo y la conducción de vehículos.
Todo ello explica que, en la segunda mitad
de la década, comience a hablarse con insistencia de una prevención que aborde este
fenómeno de los consumos recreativos, que
conlleve la necesaria implicación de la familia,
que introduzca la generación de alternativas
de ocio, en suma, de nuevas formas de concebir y de impulsar las estrategias preventivas.Y
no cabe duda que los esfuerzos desplegados
en esos años, aunque insuficientes, han contribuido a asentar unas bases sólidas capaces
de posibilitar un proceso de generalización de
la prevención. Estos avances se han evidenciado ante todo en los programas escolares
habiendo afectado muy tangencialmente a
los programas familiares. No obstante, sí se
han apreciado algunos cambios cualitativos
en estos últimos, tales como:
- Ligero incremento de la continuidad en las
intervenciones, esto es, existencia de acciones preventivas con padres que, a partir de
una mínima estructuración, mantienen una
cierta persistencia.
- Desarrollo, a partir de las actividades informativas convencionales, de nuevos módulos de carácter formativo que introducen
30 (3 y 4) 2005
Emiliano Martín González
sesiones de entrenamiento en habilidades
parentales.
- En coherencia con todo lo anterior, algunas
intervenciones se adoptan con una visión
más amplia de la prevención y apuntan
una nueva forma de organización como
programas multicomponentes.
- Aunque las limitadas experiencias de
programas familiares están centradas básicamente en una evaluación de proceso,
comienzan a aparecer algunas excepciones
de evaluación de resultados.
- Aparecen materiales informativos y didácticos dirigidos expresamente a padres y que
van más allá de los tradicionales folletos
informativos.
c) Situación actual:
Resulta incuestionable el desarrollo de
nuestro país en determinados ámbitos de la
prevención. Concretamente, los avances en
el ámbito de la prevención escolar, protagonizados tanto por las administraciones públicas
como por las organizaciones sociales, han sido
reiteradamente ponderados por organismos
internacionales como el Observatorio Europeo de la Droga y las Toxicomanías (OEDT).
Efectivamente, los esfuerzos realizados por
investigadores, técnicos, voluntarios, etc. en el
campo de la prevención escolar han llevado al
OEDT a situar a España entre los países más
avanzados en prevención:“En España, Irlanda y
Reino Unido se ha desarrollado un control de
la calidad claro, las políticas de prevención se
basan en evidencias y se tiene la intención de
reforzar esta línea” (OEDT, 2003)36 . Algunos
reconocidos expertos llegan a afirmar que
“…en el país (se refiere a España), el nivel
metodológico de sus programas es bastante
30 (3 y 4) 2005
alto: descripciones claras, utilización de los
modelos más conocidos, interés por la evaluación, aplicación de modelos más recientes…”
(Burkhart, 2002)37 . Basta acceder al programa
EDDRA sobre buenas prácticas en la Unión
Europea para comparar la cantidad y calidad
de los programas españoles, superiores a la
mayoría de los restantes países miembros.
Pero esta situación de la prevención escolar
no es en absoluto extrapolable a otros ámbitos de la prevención y, entre los más deficitarios, se encuentra sin duda el familiar. Resulta
significativo que en un informe de la reducción
de la demanda realizado hace diez años por la
propia Delegación del Gobierno para el Plan
Nacional sobre Dogas (GID, 1996)38 , no se
llegara ni tan siquiera a recoger la prevención
familiar como un ámbito sectorial objeto de
estudio. Pero éste no es más que una pequeña
muestra del escaso interés que este ámbito
de la prevención ha suscitado durante años
en nuestro país.
Pero, a pesar de todo, esto no significa que
no se haya avanzando en este campo. Así,
según un análisis de los programas recogidos
en la base de datos de Idea-Prevención en
los últimos años, se explicita que “se están
produciendo cambios cualitativos, existiendo
programas de prevención familiar con mayor
potencia metodológica” (Martínez-Higueras,
2002)39 . Esta misma valoración se extrae
del análisis de las memorias de actividad del
Plan Nacional sobre Drogas y los informes
del Observatorio Español sobre Drogas que,
como se apuntaba anteriormente, confirman
la existencia en nuestro país de algunos programas centrados en la familia que alcanzan
un adecuado nivel de calidad. Lo que se
deduce, en primer lugar, de la naturaleza de
los objetivos de algunos de ellos que son de
rango taxonómico superior a los de etapas
Revista Española
de
Drogodependencias
311
20 años de prevenciòn familiar en España (1985-2005)
TABLA 1: Comparación de los programas de prevención familiar y escolar. España,
Fuente: Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas
anteriores; así, mientras anteriormente el
objetivo más común de los programas era
que los padres adquirieran conocimientos de
todo lo relacionado con las adicciones, en los
últimos años se han introducido de forma muy
extendida el desarrollo de actitudes, hábitos
y valores positivos hacia la salud, detectando
y actuando sobre los factores de riesgo e
incrementando los factores de protección.
Sin embargo, sigue manteniéndose el déficit
de evaluación y persiste el grave problema
de la extensión, tanto en la oferta como en
la demanda, esto es, un muy reducido número
de programas desarrollados y una muy escasa
participación de padres. Esta exigua extensión
de la prevención familiar lo es en sí misma
pero también si la comparamos con otros
ámbitos de prevención más desarrollados
312
Revista Española
de
Drogodependencias
como el escolar. La comparación que se
recoge en la tabla siguiente, a partir de datos
de la Delegación del Gobierno para el Plan
Nacional sobre Drogas, son muy significativos
a este respecto.
Sin embargo, un elemento que abre nuevas
expectativas es el hecho de que la prevención
en general, y específicamente la prevención
familiar, hayan quedado recogidas de forma
explícita como una de las máximas prioridades
de la Estrategia Nacional.
En síntesis, los principales rasgos que definen la situación presente de la prevención
familiar de drogodependencias se resumirían
de este modo:
- Existencia de más programas estrictamente
familiares y, aunque predominan los de tipo
universal, comienzan a aplicarse algunos
30 (3 y 4) 2005
Emiliano Martín González
selectivos e indicados, lo que representa
un enriquecimiento en las estrategias preventivas hacia la familia.
- Aparición de notables cambios cualitativos
y disponibilidad de los primeros programas
con importante desarrollo metodológico
y adaptados a nuestra realidad.
- La mayoría de las actuaciones están impulsadas por unas pocas entidades locales
y ONGs. La implicación de los Planes
Autonómicos sobre Drogas es desigual,
existiendo un importante impulso en unos
y una notable ausencia en otros.
- Se dan intervenciones planteadas con
mayor continuidad en el tiempo.
- La mayoría de las intervenciones planteadas
como programas realizan evaluación de
proceso y algunas incluso evaluación de
resultados con diseños cuasi-experimentales.
- Por último, actualmente se realizan simultáneamente diferentes tipologías de
actividades que se resumen en el cuadro
siguiente y que van desde las actividades
independientes (ya sean meros folletos informativos o programas con desarrollo de
contenidos) hasta las acciones integradas
que contemplan el desarrollo de los mismos contenidos tanto en la familia como en
la escuela, pasando por las intervenciones
sumativas que añaden a la intervención
escolar contenidos complementarios específicos para la familia.
Los programas disponibles en nuestro país
podrían agruparse del siguiente modo:
Introducir aquí la Tabla 2 (en archivo adjunto).
Entre los programas pertenecientes a la
categoría de “sumativos” merecen una especial
referencia programas como el “Entre todos”
que desarrolla la Asociación Proyecto Hombre
(2000)40 , compuesto de dos módulo, escolar
y familiar, y el programa “Construyendo salud:
promoción de habilidades parentales (2000),41 promovido por CEAPA como desarrollo del
Programa Constuyendo Salud. En el grupo
de programas “integrados” cabe destacar el
programa “Alfil” (1998)42 que es un programa
selectivo para hijos de alcohólicos puesto en
marcha por Socidrogalcohol y, más recientemente, el programa “Protego”(2004)43 , creado
por PDS, también de carácter selectivo, que
posee un amplio desarrollo e incide en el
entrenamiento en habilidades educativas de
los padres.
Tipología de las intervenciones familiares
Tomado de Acero, A (1997)
30 (3 y 4) 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
313
20 años de prevenciòn familiar en España (1985-2005)
5 Debilidades y fortalezas
de la prevención familiar.
A partir de las valoraciones anteriores,
cabría realizar un catálogo de puntos débiles
y puntos fuertes de las experiencias españolas
en prevención familiar de drogodependencias
durante las dos últimas décadas. Entre los primeros, podemos enumerar los siguientes:
- Baja calidad de los programas: Sin obviar
los avances producidos a nivel metodológico en algunos programas, siguen existiendo
notables carencias en la calidad de los
programas y principalmente si tenemos
en cuenta:
· Los contenidos, marcados por una cierta
rigidez, pese a que en los últimos años se
hayan incorporado algunos componentes
de habilidades de comunicación parental
junto a los tradicionales de información.
· La presentación se sostiene básicamente
en charlas, folletos y otros materiales y, en
mucha menor medida, en programas con
soporte documental.
· La escasa evaluación de resultados y la
aún insuficiente valoración de procesos.
· Problemas de accesibilidad que se reflejan
en una participación de los padres muy
limitada.
- Insuficiente cobertura de las intervenciones
de prevención familiar, evidenciada aún
más si se compara con la participación en
programas escolares que, siendo reducida,
sí es al menos significativa.
- Distorsión en la percepción del fenómeno
de las drogas entre los padres que siguen
centrando su preocupación en cier tas
drogas ilegales (heroína, cocaína, drogas
de síntesis…) mientras valoran de forma
diferente con una actitud más permisiva las
314
Revista Española
de
Drogodependencias
institucionalizadas, que son precisamente
las más utilizadas por la población juvenil
como son el alcohol y el tabaco, a las que
cabría añadir el cánnabis que desempeña
un papel más próximo a estas últimas que
al resto de las ilegales.
- Paradigma educativo imperante. Las profundas transformaciones experimentadas
por la familia y por la sociedad en su conjunto, debidos a multitud de variables socioeconómicas y culturales, afectan también
a la esfera de la educación y, por tanto, de
los valores sociales, del establecimiento de
normas, del tipo de relaciones entre padres
e hijos…Como plantea Vielva (2001)44 y
recogíamos anteriormente, este contexto
de cambios permanentes, de continuos
reajustes, ha traído consigo un cierto clima de desconcierto que se traduce en la
pérdida de una serie de valores y principios
claros que sirvan de referencia a las familias.
Entre sus consecuencias, encontramos la
incomunicación, el deterioro o mal ejercicio de la autoridad (bien diferente del
“autoritarismo”), la renuncia de algunos
padres a ejercer su función educadora, la
pérdida de peso de la familia frente a otras
agencias socializadoras… Todo ello incide,
de uno u otro modo, en la disposición de
las familias ante la prevención de drogodependencias.
- Prioridad institucional y social. Este aspecto admite una doble valoración; por una
parte, como se expone a continuación,
puede considerarse una fortaleza por su
reciente reconocimiento social e institucional; por otra, esa posición meramente
declaratoria no se ha traducido aún en
medidas suficientes. Un ejemplo muy claro
se percibe en la deficiente financiación
que, desde las instituciones, se dedica a la
30 (3 y 4) 2005
Emiliano Martín González
prevención. Según la última memoria del
Plan Nacional sobre Drogas (2002)45 , el
gasto en prevención representa un 17,97%
del total del gasto invertido en nuestro
país en políticas sobre drogas. Aunque la
tendencia es ascendente (dos años antes,
cuando se aprobó la Estrategia Nacional,
era del 15,94%), no cabe duda que resulta
absolutamente insuficiente el espacio que
ocupa la prevención y, más específicamente,
la dirigida a la familia que, como se recogía
anteriormente, posee un exiguo grado de
cobertura.
- Escasa investigación. Las dificultades de
la actividad investigadora en materia de
prevención de drogodependencias se
acrecientan en el caso de la prevención
familiar. La limitación de modelos aplicados suficientemente estructurados no
permite tan siquiera desarrollar estudios
de evaluación de eficacia como se realizan
en el ámbito escolar. A pesar de todas las
debilidades enunciadas, sí existen puntos
fuertes sobre los que se pueda soportar un
proyecto de consolidación y expansión de
la prevención familiar. Entre las principales
fortalezas se encuentran:
- La reciente evolución de los programas
en calidad y diversidad. Pese a su corta
trayectoria, los mencionados avances en
calidad y diversidad de los programas de
prevención familiar demuestran que es
posible incrementar este proceso en los
próximos años.
- Sinergias derivadas de los avances significativos en otros ámbitos preventivos (escolar y comunitario). Construir la evaluación
de la prevención familiar a partir de otros
ámbitos puede parecer contradictorio
pero no lo es. El indiscutible avance de
los programas preventivos en el ámbito
escolar (reconocido internacionalmente)
30 (3 y 4) 2005
y, en menor medida, en el comunitario,
representan los mejores y más eficaces
referentes de la prevención familiar en dos
sentidos estratégicos: primero, porque la
prevención familiar puede desarrollarse
siguiendo la estela de los programas escolares y comunitarios como ha entendido
muy bien la Estrategia Nacional al formular como objetivo que ambos tipos de
programas deben incluir necesariamente
estrategias dirigidas de modo específico a
las familias, y segundo, porque el proceso
que se ha seguido en el desarrollo de la
prevención escolar es muy sencillo de replicar en el ámbito familiar, a saber, adaptar
a nuestra realidad modelos, instrumentos
y materiales basados en la evidencia y que
se han demostrado eficaces tras muchos
años de aplicación en otros países.
- Apoyo institucional y social. Tal y como
se exponía anteriormente, existe también
una faceta positiva del apoyo social e institucional hacia la prevención familiar. Ante
todo, se ha ido generando en los últimos
años en nuestro país un elevado nivel de
consenso político, social e institucional hacia
las políticas de apoyo a las familias. Aunque
nuestro país se encuentre en los últimos
puestos de la Unión Europea en el desarrollo de políticas familiares, algo comienza
a moverse y, en los últimos tiempos, desde
todos los niveles de la Administración
Pública están surgiendo leyes, planes, servicios, medidas…que denotan una nueva
sensibilidad hacia las necesidades familiares.
Este contexto ambiental representa una
fortaleza indiscutible para los programas
de prevención familiar. Por otra parte, la Estrategia Nacional sobre Drogas 2000-2008
define un marco inequívoco que favorece
el impulso de estos programas situándoles
Revista Española
de
Drogodependencias
315
20 años de prevenciòn familiar en España (1985-2005)
entre los más prioritarios junto a la escuela,
los medios de comunicación, la comunidad
y el medio laboral.
- Solidez y capacidad adaptativa de la familia. En coherencia con el punto anterior y
no obstante las crisis constantes a las que
se ha visto sometida, muchos estudiosos de
los temas familiares coinciden en afirmar
que la familia sigue siendo la institución de
referencia para la mayoría de los jóvenes
españoles. Así, según el último informe de
la Fundación Santa María (Elzo, 1999)46 , el
70% de los jóvenes consideran a la familia
como una institución muy importante en
sus vidas y el 53% opinan que es el lugar
donde se dicen las cosas más importantes
en cuanto a ideas e interpretaciones del
mundo. Además, en contra de lo que podría
pensarse, esta valoración tan positiva que
les lleva a colocar a la familia por delante
de cualquier otra instancia socializadora,
se ha venido incrementando hasta duplicarse prácticamente en una década.
Esto demuestra la enorme capacidad de
adaptación de una agencia socializadora
que, como reconoce la Declaración de
Derechos Humanos de la ONU (1948),
“es el elemento natural y fundamental
de la sociedad” y, por tanto, un vehículo
de prevención irrenunciable y de gran
potencialidad.
6. Perspectivas de futuro
de la prevención familiar
de drogodependencias.
A la vista de todas las fortalezas y debilidades enumeradas, cabría extraer una serie de
retos que sería necesario asumir de modo
apremiante para garantizar una evolución
316
Revista Española
de
Drogodependencias
profunda y eficaz y entre los que, de modo
sintético, destacamos los siguientes:
- Mejora de la calidad y diversificación de los
programas, teniendo en cuenta de modo
especial:
· Los contenidos de los programas, dotándolos de una mayor adaptación a las distintas
poblaciones y a los cambios constantes a
los que se ven sometidas. En este sentido,
resulta indispensable la aplicación de programas selectivos e indicados además de
continuar desarrollando los de naturaleza
universal.
· La amplitud y desarrollo de los componentes siguiendo la estela de los programas
más recientes teniendo en cuenta el estado
de los conocimientos que nos aporta la
investigación científica que incide en componentes informativos, actitudinales y de
aprendizaje de habilidades.
· La presentación de los programas, incorporando nuevas metodologías y nuevas
técnicas.
· La generalización de la evaluación incidiendo en la valoración de los resultados.
- Incremento de la participación familiar en los
programas haciendo hincapié en:
· La percepción objetiva y equilibrada a cerca
de la severidad del fenómeno de las drogas
y de la vulnerabilidad de las poblaciones, especialmente de los niños y adolescentes.
· La adaptación a las necesidades y expectativas de los propios padres.
· La toma de conciencia sobre los beneficios
que producen los programas preventivos.
· La eliminación del mayor número de
barreras que obstaculicen la participación
de las familias (accesibilidad física, flexibilidad horaria, métodos atractivos…). A la
30 (3 y 4) 2005
Emiliano Martín González
vista del estado de la investigación en esta
materia, parece evidente que resulta del
máximo interés disponer de una información actualizada capaz de reunir aquellas
opiniones y actitudes de los padres españoles respecto a las drogas y la relación de
éstas con los estilos de vida de sus hijos,
muy especialmente de los ligados al ocio.
Por otra parte, sería necesario conocer las
necesidades y expectativas de los padres
de cara a la prevención para poder impulsar políticas más adecuadas y, por lo tanto,
más eficaces. Finalmente, es fundamental
identificar sus niveles de disposición a participar efectivamente en estos programas y
conocer sus obstáculos reales para buscar
procedimientos capaces de removerlos a
la hora de implantar los programas.
- Impulso a la expansión de los programas
mediante:
· La vinculación y la creación de alianzas estratégicas con otros ámbitos e instituciones
implicados en las tareas preventivas y que
poseen una trayectoria dilatada en este
campo (escuelas, proyectos comunitarios,
servicios sociales y de atención primaria de
salud, organizaciones sociales...).
· Las intervenciones conjuntas padres/hijos
que, según diversas investigaciones, resultan
eficaces y pueden ser más atractivas.
· La transferencia de metodología mediante
el intercambio de experiencias, metodologías y evaluaciones, buscando la universalización de los conocimientos y modelos
basados en la evidencia científica.
- Potenciación de la sensibilización y, lo que
es más importante, de la implicación tanto
de las instituciones que intervienen en
drogodependencias como de la sociedad
en su conjunto.
- Necesidad de priorizar las intervenciones en
30 (3 y 4) 2005
familias vulnerables y multiproblemáticas.
- Incremento de la investigación:
· Evaluando la eficacia de los diseños de
intervención preventiva familiar.
· Mejorando la adaptación de las intervenciones a las necesidades reales mediante el
desarrollo de instrumentos de análisis de
los contextos familiares.
Para concluir, resulta inevitable realizar una
reflexión colectiva sobre la necesidad de impulsar los programas de prevención familiar
de drogodependencias en nuestro país si
realmente pretendemos que la prevención
alcance a amplias capas de la población. A
la luz de la revisión llevada a cabo sobre los
últimos veinte años de políticas sobre prevención familiar en España, el balance puede
resultar desesperanzador y, en algunos aspectos, es posible que lo sea. Pero no debemos
dejarnos llevar por análisis erróneos, además
de injusto sería ilógico contribuir a la desmovilización de un segmento de organizaciones,
técnicos y voluntarios que han asumido esta
difícil tarea en circunstancias adversas. Esta
situación no puede achacarse a la carencia de
conocimientos o de programas sólidos, como
ocurría veinte años atrás, ni mucho menos a
un supuesto fracaso de la prevención. Existen
pocos programas de prevención familiar porque la intervención en este ámbito no se ha
abordado con la decisión y la contundencia
que requiere. Por otra parte, tampoco hemos
de olvidar que estas carencias en prevención
familiar no pueden haber sido ajenas a una
realidad incontestable: España se encuentra en
los últimos lugares europeos en el desarrollo
de políticas familiares.
Cuando se apliquen propuestas viables y
con apoyos suficientes, mediante programas
de calidad, con una cober tura razonable
y la necesaria persistencia, estaremos en
condiciones de valorar el grado de eficacia y
Revista Española
de
Drogodependencias
317
20 años de prevenciòn familiar en España (1985-2005)
eficiencia de la prevención. En consecuencia,
y como se ha expuesto reiteradamente a
lo largo del texto, no cabe hacer tabla rasa
de todo lo realizado en estos últimos veinte
años en el ámbito familiar. Aunque lenta e
insuficientemente, sí se han producido avances,
disponemos de un bagaje de conocimientos
basados en la evidencia científica, unos pocos
modelos de intervención sólidos y adaptados
a nuestra realidad que pueden servirnos de
referentes y, lo que es más importante, un
buen número de profesionales con un elevado
nivel de formación y, aunque parezca sorprendente, también de motivación. Ahora cabe
generar sinergias que permitan rentabilizar
los avances alcanzados en otros ámbitos de
la prevención como el escolar y, finalmente,
acogerse a las nuevas sensibilidades que, tanto en las instituciones como en la sociedad
civil, comienzan a despuntar en nuestro país
a favor de las políticas familiares. Puede que,
con todo ello, este reto se convierta en una
realidad que se plasme en la próxima revisión
de programas de prevención familiar...antes de
que transcurran otros veinte años.
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Drogodependencias
30 (3 y 4) 2005
Emiliano Martín González
30 (3 y 4) 2005
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Drogodependencias
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Originales
El nacimiento de la memoria escrita: Descripción
de las revistas pioneras en drogodependencias.
Leonor Cano, Enrique Cano, Mercedes Sánchez, Francesc Verdú
Miembros del Comité de Redacción Revista Española de Drogodependencias
Resumen
El veinte aniversario del Plan Nacional Sobre Drogas constituye un acontecimiento
relevante en el campo de las drogodependencias porque, entre otros objetivos, con su
consenso e implantación se conocen, por primera vez, las necesidades generadas por
el consumo de drogas y se marcan unas líneas directrices de trabajo, a nivel nacional,
en todos los aspectos que configuran la problemática de las drogodependencias referente al tratamiento, a la reinserción, a la prevención, a la formación e investigación, a la
información y comunicación que permite transmitir los avances en la materia a toda la
población española. Además establece la coordinación de las distintas administraciones
propias del Estado, de las Autonomías y las Locales.
Nuestra aportación en este trabajo pretende realizar un acercamiento a las revistas
especializadas en alcohol y otras drogas que aparecen entre los años 1976 y 1990, señalando su importancia como vehículo de comunicación científica en el campo de las
drogodependencias y referente de los avances en la materia como consulta obligada del
profesional del campo.
Se ha utilizado para ello, las revistas objeto de estudio, documentos publicados o no
(actas, documentos internos, informes etc.) y la descripción oral de algunos profesionales
con conocimiento directo de la aparición y trayectoria de las revistas.
Palabras Clave
fuentes de información, documentos primarios, drogodependencias, revistas especializadas,
alcohol, memoria escrita, toxicomanías, alcoholismo.
Summary
The twenty anniversary of the National Plan On Drugs constitutes an excellent event
in the field of drug additions because, among other objectives, with its consensus and
implantation are known, for first time, the necessities generated by the drug consumption
and work directives lines are marked, at national level, in all the aspects that form the
problematic of the drug additions referring to the treatment, reintegration, prevention,
formation and investigation, information and communication that allows to transmit
the advances in the matter to all the Spanish population. In addition it establishes the
Correspondencia a:
apartado de correos 477 Valencia e-mail: [email protected]
322
Revista Española
de
Drogodependencias
30 (3 y 4)30
322-338.
(3 y 4) 2005
Leonor Cano, Enrique Cano, et al.
coordination amongst the different Public Administrations:the State, the Autonomies
and the Locals.
Our contribution in this work tries to make an approach to the specialized magazines
in alcohol and other drugs that appear between years 1976 and 1990, being indicated to
its importance as vehicle of scientific communication in the field of the drugs addition
and referring of the advances in the matter as it consults forced of the professional of
the field.
It has been used for it, the magazines object of this study, published or not documents
(internal records, documents, information etc.) and the oral description of some professionals with direct knowledge of the appearance and trajectory of the magazines.
Key Words
information sources, drugs additions primary documents, specialized magazines, alcohol,
written memory, drug addiction, alcoholism.
Résumé
Le veinte anniversaire du Plan National Sur les Drogues constitue un événement significatif
dans le domaine des dépendances aux drogues parce que, entre d’autres objectifs, avec
leur consensus et implantation on connaît, pour la première fois, les nécessités produites par la consommation de drogues et on marque des lignes directrices de travail, au
niveau national, dans tous les aspects qui forment la problématique des dépendances aux
drogues relative au traitement, à la réintroduction, à la prévention, à la formation et à la
recherche, à l’information et à la communication qui permet de transmettre les avances
dans la matière à toute la population espagnole. Il établit en outre la coordination des
différentes administrations propres de l’État, les Autonomies et des Locaux.
Notre contribution dans ce travail prétend effectuer un rapprochement aux revues
spécialisées en alcool et d’autres drogues qui apparaissent entre les années 1976 et
1990, en indiquant son importance comme véhicule de communication scientifique dans
le domaine des dépendances aux drogues et relatif des avances dans la matière comme
consultation obligée du professionnel du domaine.
On a utilisé pour cela, les revues objet d’étude, les documents publiés ou non (actes,
documents internes, rapports etc..) et la description orale de quelques professionnels
avec connaissance directe l’apparition et la trajectoire des revues.
Most Clé
sources d’information, documents primaires dépendances, revues spécialisées, alcool,
mémoire écrite, toxicomanie, alcoolisme.
30 (3 y 4) 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
323
El nacimiento de la memoria escrita: Descripción de las revistas pioneras...
Estos veinte años transcurridos de 1985 a
2005, traen al presente un sinfín de hechos y
situaciones acaecidos antes de la implantación
del Plan Nacional sobre Drogas y, también durante el mismo. La diversidad de acciones desarrolladas, ha contribuido de manera decisiva
al desarrollo de los aspectos fundamentales
de la problemática de las drogodependencias.
Todas las Comunidades Autónomas a través
de los Planes Autonómicos de Lucha contra
la Droga han diseñado la forma de abordar
el problema atendiendo a la idiosincrasia y el
interés de su Comunidad. La importancia de
la difusión de información, sobre lo realizado
en el campo científico en cada una de las
comunidades, así como el intercambio de
conocimientos, ha estado siempre presente en
el marco de las necesidades del Plan Nacional
sobre Drogas siendo uno de los aspectos
relevantes a tener en cuenta en el transcurso
de estos años.
Sirva como ejemplo la primera Ley de Drogodependencias del País Vasco promulgada en
1988, en ella, se encomendaba al Gobierno
Vasco, entre otras funciones, la mejora de los
recursos documentales y la responsabilidad de
garantizar a todos los organismos públicos y
privados y a todas las personas interesadas,
el acceso a esos recursos documentales. A
partir de aquí el desarrollo y acceso a los
mismos ha sido progresivo y constante a nivel
nacional. A ello, cabe añadir que la necesidad
de investigar y realizar una práctica profesional
con cierta rigurosidad y eficacia en materia de
drogodependencias, exige a los profesionales
una actualización constante de conocimientos
(formación-organización documental-práctica
profesional) hecho, que ha favorecido la generación de literatura y, por ende, el avance
y el intercambio de conocimientos en la
comunidad científica.
Los cambios producidos en la vía principal
324
Revista Española
de
Drogodependencias
de transmitir información científica la comunicación formal, es decir, la que se sirve de
los canales institucionalizados de la comunidad
científica ha cambiado con el paso del tiempo
para ajustarse a las necesidades y medios de
cada época.
Conviene recordar aquí que los libros, los
congresos y las revistas en los años setenta
se convierten en los principales canales de
difusión de la información. A ellos, acuden los
profesionales de diferentes disciplinas para
conocer intereses sobre su especialidad. En
el caso del alcohol y demás drogas, como
veremos más adelante, los profesionales que
trabajan en este campo, también acuden a
los mismos canales en busca de la información
que necesita su especialidad.
El crecimiento exponencial de la literatura
científica y especializada unido a los cambios
tecnológicos en la materia que nos ocupa,
exige recurrir a la clasificación de recursos
documentales a la hora de recuperar información sobre un tema específico.
Dado que el propósito de nuestro trabajo,
enmarca de manera formal en la clasificación
realizada por Alcaín y Ruiz-Gálvez (1996)
la seguimos para describir lo que aquí nos
ocupa.
Las fuentes de información pueden ser de
diferentes tipos dependiendo del punto de
vista que se adopte. Atendiendo al soporte
también difieren en su tipología: documentos
impresos, documentos en soporte magnético.
La tipología más utilizada es la que divide los
documentos según presenten la información
en forma original o no y los divide en documentos primarios, que presentan la información original e incluye, entre otros: libros,
publicaciones periódicas (revistas, periódicos),
actas congresos, informes, documentos de
formación; documentos secundarios son
30 (3 y 4) 2005
Leonor Cano, Enrique Cano, et al.
el resultado del análisis de los documentos
primarios como boletines de índices, boletín
de sumarios; y por último documentos de
referencia, estos documentos, también pueden considerarse como primarios, ya que el
material se publica completo: tesis doctorales,
glosarios, centros de documentación y tesauros. En las tres modalidades encontraremos
materiales impresos en papel o almacenados
electrónicamente.
El objeto de esta comunicación no es describir de forma exhaustiva los contenidos de
las tres categorías, tan sólo vamos a referirnos
a los documentos primarios, más concretamente, a las revistas especializadas en drogodependencias en un intento de acercamiento
histórico sobre la aparición e importancia de
dichas fuentes en el periodo 1976-1990.
(No olvidamos la importancia de la labor
que realizan otras publicaciones especializadas
aparecidas en nuestro país en años posteriores, aunque no se mencionen en este trabajo,
pues no es posible atender a todas en este
trabajo)
DOCUMENTOS PRIMARIOS DE
INFORMACIÓN: LA REVISTA
CIENTÍFICA
El proceso de creación científica no estará
completo sin la denominada publicación
como apunta en 1978 Price “la publicación
es la que proporciona el proceso conectivo,
la evaluación y quizás el asentimiento en la
comunidad científica”
De entre los distintos tipos de documentos
científicos: libros, revistas, actas (ponencias y
comunicaciones en congresos científicos), son
las revistas las que se han impuesto como principal vehículo de comunicación científica por
su mayor rapidez en la difusión, en detrimento
30 (3 y 4) 2005
de los libros y otras publicaciones. (Montoro
y Carbonell, 1989).
Las revistas científicas constituyen el sistema de diseminación de la información de
la actividad científica de mayor importancia
tanto cualitativa como cuantitativa (Carrizo,
1994). Desempeñan un importante papel en
el proceso de comunicación científica, porque
constituyen la principal vía para la validación
del nuevo conocimiento y hacen posible su
difusión dentro de la comunidad de investigadores y de profesionales del campo.
El avance en la investigación y la práctica
profesional de cualquier problemática lleva
al investigador a publicar sus trabajos en las
“mejores” revistas de su especialidad con el
fin de obtener la mayor difusión y visibilidad
posible de sus trabajos. También, porque ello
les confiere mayor prestigio en la comunidad
científica (Bordons; Felipe; Gómez, 2002).
En este sentido, cabe recordar que los
profesionales que ya trabajan la problemática
generada por el alcohol y otras toxicomanías
en los años sesenta, recogen esta preocupación por la transmisión de comunicación en
diferentes documentos y actas de congresos,
reuniones y encuentros mantenidos. En ellos,
se constata la necesidad de comunicar su especialidad a través de un boletín que aglutine
la información y práctica profesional que ya se
tiene en torno a la problemática del consumo
de alcohol y demás drogas (Anónimo, 1976).
La aparición de las revistas especializadas en
la temática del alcohol y demás drogas no es,
sino es el logro conseguido por los profesionales del campo por el empeño de transmitir
conocimientos de un ámbito profesional escasamente conocido, y por aquellos tiempos
demonizado.
Nos referiremos a continuación a las principales revistas especializadas aparecidas en
el periodo de 1976 a 1990.
Revista Española
de
Drogodependencias
325
El nacimiento de la memoria escrita: Descripción de las revistas pioneras...
REVISTAS ESPECIALIZADAS EN
DROGODEPENDENCIAS
De entre todas las publicaciones periódicas
especializadas en problemas de alcohol y
demás drogas existentes actualmente, sólo
vamos a hacer referencia a tres de ellas atendiendo al orden cronológico de aparición y,
su importancia como primeras fuentes documentales en un periodo (1976-1990) de
escasa literatura científica especializada en el
tema que nos ocupa.
Las revistas en las que vamos a centrarnos
son: La Revista Española de Drogodependencias, Comunidad y Drogas. Cuadernos
Técnicos de Estudios y Documentación y
COMUNIDAD Y DROGAS.
CUADERNOS TECNICOS DE
ESTUDIOS Y DOCUMENTACION
Adicciones.
En su trayectoria, todas ellas, han recogido
las inquietudes, experiencias y contenidos más
relevantes de los investigadores del alcohol y
otras drogas. En cada uno de sus volúmenes
publicados guardan los cambios y, también la
evolución de los principales aspectos de la
problemática. Sus contenidos, en fin, permiten
mirar con perspectiva crítica y, por que no,
constructiva de lo conseguido, o no, en este
problema multicausal (complejo) y difícil (no
existe una única solución).
Nos referiremos, en primer lugar, a las revistas Comunidad y Drogas. Cuadernos Técnicos
de Estudios y Documentación y Adiciones.
Para en segundo lugar centrarnos en la Revista
Española de Drogodependencias.
Nombre de la Revista: Comunidad y Drogas.
Cuadernos Técnicos de Estudios y Documentación.
Año de inicio: Septiembre de 1986
Carácter: Trimestral. Con edición de monográficos
Idioma: Catellano
Indexada: No consta
Edita y Distribuye: Ministerio de Sanidad y
Consumo. Delegación del Gobierno para el
Plan Nacional sobre Drogas.
Ciudad de impresión: Madrid
NIPO; 351-86-055-7
Depósito legal: M-31.656-1986
Soporte: Papel
Precio del ejemplar 500 Ptas. (IVA incluido);
Extranjero 25 dólares USA
Deja de publicarse en 1992
326
Revista Española
de
Drogodependencias
30 (3 y 4) 2005
Leonor Cano, Enrique Cano, et al.
ANTECEDENTES
De esta revista hay que señalar que son
escasos los documentos publicados donde
situar los antecedentes de su creación. Sin
embargo creemos que el proceso de inicio
siguió una trayectoria similar a la que más
adelante se describirá sobre las otras revistas
objeto de estudio. Intentaremos, no obstante,
con la información disponible situar al lector
en aquellos elementos más relevantes de la
revista.
En la Presentación inicial de la publicación
(Nº 1 Septiembre de 1986), se exponen, entre otros, los fines y objetivos del nacimiento
de la revista, la justificación institucional de
su aparición y el interés del Plan Nacional
sobre Drogas sobre el contenido de las
publicaciones.
El nacimiento de la revista es uno de los
objetivos prioritarios establecido en el texto
del Plan Nacional sobre Drogas que dice:
desarrollo de “instrumentos de formación,
investigación y cooperación técnica”, útiles a
cuantos profesionales y responsables institucionales trabajan en este campo.
Los objetivos de Comunidad y Drogas se
describen como: un instrumento de información-formación-investigación, capaz de aportar “algo más y mejor” al conocimiento del
problema y al abordaje del mismo, así como
desarrollar una plataforma de encuentro en
la que contrastar enfoques diversos y abrir
nuevas líneas de investigación y publicación. Así
mismo, esta revista quiere ser enlace entre el
rigor científico, con la pluralidad de puntos de
vista, y la difusión profesional –cabe esperar
que estos profesionales fueran capaces de
transmitir los hallazgos y actualizaciones en la
materia a toda la población, objetivo no fácil
y de suma actualidad- al tratar los temas más
actuales y prioritarios en las políticas que las
30 (3 y 4) 2005
distintas administraciones públicas desarrollan
en colaboración con la iniciativa social.
La justificación institucional de su nacimiento responde a:
1. La experiencia de otros organismos nacionales e internacionales.
2. La ausencia en nuestro país de una publicación sectorial que abarque la problemática
asumida por el Plan Nacional sobre Drogas.
Todo ello, es lo que avala este proyecto
para iniciar la publicación.
El interés de la revista es:
1. Publicar trabajos que aborden los diferentes aspectos de las drogodependencias
en su vertiente preventiva, asistencial, rehabilitadora, de inserción, jurídica u otras y
comparativa de políticas con otros países.
2. Que además, los trabajos tengan un carácter multidisciplinario como corresponde a
la diversidad de factores implicados en la
problemática.
3. Que su difusión sea de máxima cobertura,
puntual y continua.
4. Vehículo de aportación de datos sobre el
consumo –indicadores- y la problemática
en general
ESTRUCTURA DE LA REVISTA
La Revista, se configura con diferentes
elementos. A saber:
a)un Director que recae en la figura del
ilustrísimo señor delegado del Gobierno
para el Plan Nacional sobre Drogas (en
aquel entonces D. Miguel Soláns),
b)un Consejo de Redacción configurado por
nueve miembros, de los cuales cuatro son
funcionarios de la Delegación y el resto son
destacados profesionales de diferentes disRevista Española
de
Drogodependencias
327
El nacimiento de la memoria escrita: Descripción de las revistas pioneras...
ciplinas (médicos, psicólogos y sociólogos)
con amplia experiencia en el campo de las
drogodependencias.
c) Además de un Secretario de Redacción.
El Consejo de Redacción se reúne una vez
al trimestre para programar el contenido de
la revista y su línea editorial.
En cuanto a su estructura reúne los siguientes apartados:
a)presentación, estudios y experiencias,
documentación, miscelánea y notas bibliográficas. Una característica de esta revista
es dedicar un espacio denominado: escriben en este número… a los autores que
han colaborado en el número y, se incluye
breve currículum de los que publican en
el número, excepto para los que son
funcionarios. A ellos sólo les acompaña el
nombre y apellidos y el Departamento al
que pertenecen.
b)Dispone de un espacio denominado: Nota
a los colaboradores, en él se informa a
los colaboradores sobre las normas para
publicar en la revista.
Es necesario destacar que en el primer número se publican cuatro trabajos originales de
los que señalamos el estudio de EDIS (Equipo
de Investigación Sociológica) denominado:
“Perfil básico del problema de las toxicomanías en España del autor José Navarro”
(síntesis de un estudio anterior realizado por
el mismo equipo investigador en 1984).
Además de la publicación trimestral de
la revista, se editan monográficos. Estos,
recogen temas de candente actualidad. De
entre todos ellos, señalamos la Monografía
número 11 de Junio de 1990 denominada:
328
Revista Española
de
Drogodependencias
Tesauro de Drogodependencias. Se publica
para atender las necesidades de recuperar
información especializada y cada vez más
compleja que solicitan los usuarios del Centro
de Documentación. (Se recuerda aquí, que el
Plan Nacional sobre Drogas cuenta con un
Centro de Documentación a disposición de
los profesionales)
El Tesauro de drogodependencias, es un documento muy importante en este momento
ya que supuso la indización de 7.000 referencias especializadas en drogodependencias
de la Delegación del Gobierno para el Plan
Nacional sobre Drogas (ELEUSIS). Esta herramienta, cubrió un vacío en la documentación
española que era preciso cubrir.
La distribución de la revista se realiza a los
centros de drogodependencias, centros de
documentación, bibliotecas y suscriptores de
pago. Con una tirada de tres mil ejemplares
por número, en 1991 había publicado 16
números ordinarios y 12 monográficos con
temas de total actualidad.
La fuerza institucional de esta publicación
impregnó de contenidos a los profesionales
del alcohol y demás drogas ya que dio un
gran impulso a la difusión de la información
generada durante los años de su publicación
dando a conocer, entre otros aspectos, los
temas de investigación, servicios, acontecimientos, documentos técnicos, implantación
de programas, así como políticas seguidas en
otros países.
Esta revista deja de publicarse en 1992.
ADICCIONES
Nombre de la Revista: Adicciones.
Año de inicio: 1989
30 (3 y 4) 2005
Leonor Cano, Enrique Cano, et al.
Carácter: Trimestral. Con edición de monográficos y Suplementarios
Idioma: Castellano. Publica artículos en inglés.
Edita: Socidrogalcohol.
Ciudad de impresión: Palma de Mallorca.
Valencia.
I.S.S.N.: 0214-4840
SVPF: 89010R
Depósito Legal: V-1543-1989
Soporte de impresión: Papel.
Indexada: Addiction Abstracts, CAN, C.I.C.,
CVDD, EMBASE/Excepta Médica, ETOH
(NIAAA), Family Studies Database (NICS),
IBECS), IME, INDID, INIST-CNRS, ISOC,
PSICODOC, PsycINFO, Tobacco and Health
Abstracts, TOXIBASE
Precio suscripción: España 36 Euros; Extranjero: 55 Euros
ANTECEDENTES
Los antecedentes de esta publicación, estamos seguros de que son diversos y numerosos
y, además, compartidos por un grupo numeroso de profesionales expertos en el campo
del alcohol y demás drogas e interesados en
el intercambio y difusión de la información
científica. Por ello y, dado que la edición de
esta revista la realiza una de las primeras
asociaciones científicas de ámbito nacional
nacida a principios de los años setenta, en sus
actas a nivel interno, entendemos, quedará
recogido todo tipo de información acerca de
su creación y su gestación desde mucho antes
de su aparición. También, la configuración de
su estructura inicial y, por qué no, su forma
de financiación, elemento común a este tipo
de publicaciones.
Nuestro acercamiento, por tanto, a los
orígenes de esta revista se hará a partir de
aspectos publicados en otros documentos.
Intentaremos, no obstante, situar al lector
en aquellos elementos más relevantes de la
30 (3 y 4) 2005
revista.
El nacimiento de la revista, se debe a la
inquietud de los profesionales que pertenecen a la Sociedad Científica Española de
Estudios sobre Alcohol, el Alcoholismo y las
otras Toxicomanías (Socidrogalcohol) creada
en 1970. Es una de las primeras sociedades
científicas creadas en España para el estudio
del consumo de alcohol y demás drogas.
Desde su inicio, se mantuvo la idea de crear
una publicación que sirviese de vehículo de
comunicación en el campo científico de las
drogodependencias (Anónimo, 1989)
Sus objetivos pretenden:
a)publicar trabajos de investigación en todos
los aspectos del alcoholismo y otras toxicomanías
Revista Española
de
Drogodependencias
329
El nacimiento de la memoria escrita: Descripción de las revistas pioneras...
b)estar abierta a todo tipo de profesionales
que tengan contenidos a difundir.
Entre los intereses de la publicación se
desea que, ésta, fuese el lugar de encuentro
de los profesionales interesados en todas las
facetas de los problemas derivados del uso
y abuso de las drogas, abierta a conocer la
etiología, las complicaciones, los abordajes
terapéuticos, las respuestas comunitarias,
etc.(Torres, 1989). Se pretende dar la máxima
difusión entre los sanitarios y los profesionales
comprometidos con la resolución del problema de las drogas.
La labor de la dirección y coordinación
de la publicación recae por mandato de su
Asamblea en la persona del Dr. Amador
Calafat, que continúa en la dirección dieciséis
años después.
ESTRUCTURA DE LA REVISTA
En el momento de su aparición, la Revista
Adicciones se configura con la descripción de
los miembros que forman la sociedad científica que le da entidad jurídica. Estos son:
a)La Junta Directiva con las siguientes figuras:
presidente, vicepresidente 1º y 2º, secretario, vicesecretario, tesorero, cuatro vocales
y colaboradores. Además de los siguientes
miembros propios de la publicación.
b)Un director, una secretaría técnica, comité
de redacción con 17 miembros y 16 Juntas
Autonómicas.Todos los miembros componentes de la estructura son profesionales
del campo del alcohol y otras drogas.
Actualmente, algunos elementos han
cambiado en su estructura. En el último
número publicado (Vol. 17, nº 2. 2005) de su
contraportada han desaparecido las Juntas
Autonómicas para dar paso al Comité Editorial. También, aparecen en este número dos
editores asociados.
330
Revista Española
de
Drogodependencias
Los trabajos se seleccionan por el comité
de redacción compuesto por profesionales
especializados en diferentes temas del campo.
Su publicación, o no, la decide dicho comité
siempre y cuando los trabajos cumplimenten
las normas de publicación de la revista.
La estructura de la revista en su inicio
cuenta con los siguientes apartados:
a)editorial, sección de originales, sección en
breve, boletín informativo de socidrogalcohol, sección de otras noticias y normas de
publicación, además de una presentación
con motivo de la aparición de la revista por
ser el primer número publicado. Un total
de cinco artículos originales se publican en
el Volumen 1 número 1 de 1989.
b)Actualmente, mantiene prácticamente las
mismas secciones de su inicio a la que
se añaden las denominadas: sección internacional (europea y latino-americana),
artículos de revisión, informes breves y
cartas al director.
Dispone de normas de publicación desde
su inicio para la presentación de los trabajos.
Está adherida, entre otros, a las guías éticas
de publicación de las revistas de adicciones.
Los artículos que publican tienen un resumen
en castellano y en inglés con palabras clave
que permiten su recuperación en diferentes
recursos documentales.
En 1991, la revista, aparece indexada en
las siguientes bases de datos: CIC,TOXIBASE,
INDID e IME En 1993, vol. 5. núm. 2 se añaden
las bases de datos C.A.N e ISOC, el resto
de bases de datos donde aparece indexada
actualmente se irá completando en los años
siguientes.
Adicciones, también, es plataforma de publicación de las Actas de las Jornadas Anuales
de Socidrogalcohol. Se publican en números denominados Suplemento. Sirva como
ejemplo los volúmenes 13 Suplemento1 y
30 (3 y 4) 2005
Leonor Cano, Enrique Cano, et al.
15. Suplemento 1 de 2001 y 2003, respectivamente, En ellos, se recogen las Actas de las
XXVIII Y XXX Jornadas de Socidrogalcohol
de Santander y Valladolid.
Desde hace unos años, la revista admite
la publicación de artículos en inglés con la
traducción al castellano o un resumen amplio
del mismo.
Durante sus diecisiete años de edición, la
revista Adicciones ha cambiado de formato y
color iniciales con el que se da a conocer.También ha incorporado imagen a la portada.
La distribución de la revista se realiza a los
miembros de Socidrogalcohol y suscriptores.
Se inicia su publicación con una tirada de
3.000 ejemplares por número. Actualmente
mantiene una tirada de 2.000 ejemplares por
número. La edición de Adicciones cuenta con
subvención del Plan Nacional sobre Drogas
y Toxicomanías (Enero, 1976); Drogalcohol,
Abril 1976); Revista Española de Drogodependencias. Enero 1987.
Carácter: Trimestral. Con edición de mono-
y la colaboración de varios laboratorios farmacéuticos.
Esta publicación que nace en tercer lugar
respecto a las otras revistas, aquí, tratadas,
no cabe duda que fue muy bien recibida por
los investigadores de la comunidad científica.
Sin embargo, también, hay que señalar que
su aparición también gozó de la agenda y
parámetros de las dos revistas nacidas con
anterioridad.
REVISTA ESPAÑOLA DE
DROGODEPENDENCIAS
Nombre de la Revista: Revista Española de
Drogodependencias
Año de inicio: 1976
Cambio de nombre: Boletín de Alcoholismo
gráficos
Idioma: Castellano.
Edita y Distribuye: A.E.S.E.D. En su inicio lo
realiza la Excma. Diputación Provincial de
Valencia (hasta 1987) y la Asociación Drogalcohol, (desde 1987 al 2000)
Ciudad de impresión: Valencia
Número Registro: 5034 Generalitat Valenciana
I.S.S.N. : V-2397-1976
SVPF: 89010R
Declarada de Utilidad Pública en virtud de
la Orden de 28 de febrero de 2004. BOE
núm.72.
Depósito legal: V-1543-1989
Soporte de impresión: Papel.
Indexada: Biological Abstracts, CDD-DDZ,
CINDOC IME, PSICODOC, Pascal, REDOC,
TOXIBASE
30 (3 y 4) 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
331
El nacimiento de la memoria escrita: Descripción de las revistas pioneras...
Precio suscripción: España 48 Euros; Extranjero: 63 Euros
ANTECEDENTES
Con motivo del primer Seminario Nacional sobre Alcoholismo y Toxicomanías que
en 1967 organiza el P.A.N.A.P (Patronato
Nacional de Asistencia Psiquiátrica) en la
Coruña, se pone de relieve la necesidad de
intercambiar información y disponer de una
revista que aglutine los conocimientos e inquietudes de los profesionales del alcoholismo
y otras toxicomanías. Esta necesidad sentida y
manifestada por los profesionales en todos los
encuentros y reuniones profesionales unido a
un grupo de laboratorios farmacéuticos que
apoyan la iniciativa y una favorable disposición
administrativa de la Excma. Diputación de
Valencia posibilitan finalmente la aparición de
la revista en enero de 1976, bajo el nombre
de Boletín de Alcoholismo y Toxicomanías. Se
trata de una publicación monográfica sobre
alcohol y otras toxicomanías que va a ser la
primera revista específica dedicada al tema
que aparece en la comunidad científica española. (Cano, Tortosa, Montoro. 1985).
Nace y se edita desde el Ser vicio de
Alcoholismo y Toxicomanías del Hospital
Psiquiátrico Provincial de Bétera de la Diputación de Valencia y, en ella colabora todo el
equipo de profesionales que configuran dicho
servicio, además de otros profesionales de
reconocido prestigio a nivel nacional, todos
ellos, miembros de Socidrogalcohol. No hay
ninguna colaboración periodística.
En abril de 1976, La revista cambia de
nombre denominándose Drogalcohol debido a que existe otra publicación anterior
registrada con el mismo nombre propiedad
de un médico naturópata catalán. (Herrero,
2000). Vuelve a cambiar de nombre en ene-
332
Revista Española
de
Drogodependencias
ro de 1987, por el de Revista Española de
Drogodependencias (en adelante RED) que
conserva en la actualidad.
De forma sucinta los objetivos de la revista
son:
a)dar a conocer los avances producidos en
el campo del alcoholismo y las toxicomanías,
b)desarrollar el intercambio de la práctica de
ideologías y experiencia con otros equipos
profesionales de España, de la América
de habla hispana, Europa y cualquier otra
parte,
c) ampliar el conocimiento teórico-práctico
sobre los aspectos preventivo-asistenciales.
La orientación de la revista es fundamentalmente sociogenetista, su marco teórico principal ha sido la Psicología y Psiquiatría Social.
La amplia multicausalidad de la drogadicción
hizo que posteriormente se admitan enfoques
biológicos, conductistas, etc. El mensaje que
se ha querido llevar a la comunidad científica
española, ha sido que el alcoholismo es la drogadicción nacional por excelencia (Herrero,
2000). También, facilitar una comunicación
interdisciplinar y promocionar que otras
profesiones ajenas, aparentemente al campo
sanitario, intervengan en drogodependencias.
Objetivo que mantiene el actual equipo de
la revista, (Freixa, 2003)
Dos características queremos señalar
sobre los antecedentes de esta publicación.
En primer lugar, explicar lo que la mayoría de
profesionales han considerado el número 0
de la revista. Fue el IV Congreso de Alcohólicos Rehabilitados, celebrado en Valencia en
1975, en el Colegio Mayor del aún entonces
poco desarrollado Campus de la Universidad
Politécnica de Valencia el que permitió anun-
30 (3 y 4) 2005
Leonor Cano, Enrique Cano, et al.
ciar la próxima publicación del Boletín y se
ensayó su formato mediante la publicación
de la “Memoria-Resumen del IV Congreso de
Alcohólicos Rehabilitados” en septiembre de
1975.Todo ello ocurre a los pocos días de que
el Gobierno de España en pleno (un Consejo
de Ministros, concretamente el 20 de junio,
posiblemente el último que asistiera el general
Franco) reconociera que existían los enfermos
alcohólicos, tomando además el acuerdo de
prevenir y de especializar para curar. (Cano;
Tortosa; Montoro, 1985; y Herrero, 2000).
En segundo lugar, es que en la mencionada
publicación se ensayó la maqueta de lo que
sería posteriormente la revista. Emilio Bogan
(director de la revista hasta su fallecimiento)
con su estilo expresionista y con su funcional
reducción de líneas creó el logotipo de la
portada: el hombre levantándose en un cuadrado azul índigo incluido en una superficie
rojo magenta portada que perdura hasta el
segundo cambio de nombre en 1987, por el
de Drogalcohol.
A este respecto el Dr. Herrero (2000),
profesional del primer equipo de la revista, con
motivo del veinticinco aniversario de la Red
recuerda que en el año 2000 y coincidiendo
con su veinticinco aniversario, un facsimil del
número uno (enero 1976) fue reproducido
y repar tido por un conocido laboratorio
español y por una sociedad científica con
fines similares a los nuestros en un merecido
homenaje realizado en el municipio de Alcoy
al Dr. Miguel Ángel Torres. El Dr. Herrero, recomienda que los lectores busquen la perfecta
reproducción de nuestro primer número de
hace veinticinco años y comprueben las diferencias con lo que él mismo vive y describe.
Entre los intereses de la revista señalamos
la ambición de ser el medio de comunicación
periódico prioritario a nivel nacional ya que
30 (3 y 4) 2005
desde el principio solicita la ayuda de los
profesionales de “toda la Península” , puesto
que el problema del alcoholismo y de las
toxicomanías invade toda nuestra geografía, Se forma el Consejo Científico con los
mejores profesionales de la especialidad y
procurando colaboraciones de alta calidad y
procedencia diversa con “compañeros de los
cuatro puntos cardinales”. El nombre familiar
que se utiliza ‘por parte de todos los que
colaboran en la publicación para denominar
la revista es “El Boletín”. (Bedate, 2000).
Tanto el Consejo Científico como el Comité
Editorial lo configuran los profesionales que
intervienen en la problemática, todos ellos,
miembros Socidrogalcohol.
El tercer cambio de nombre de la revista se
realiza por recomendación de los documentalistas, pues, consideran que el nombre “Drogalcohol” es ambiguo, impreciso y, no describe
bien la materia principal de su contenido y no
hace mención a la procedencia geográfica de
la misma. Asi, es como en enero de 1987,
surge el nombre de Revista Española de Drogodependencias, que entonces pareció el más
adecuado. Este cambio de nombre dio su fruto
de inmediato ya que el esfuerzo realizado con
los cambios introducidos se vio compensado
al ser incluida la revista en las siguientes bases
de datos nacionales: el Indice Médico Español
(IME) e internacionales Biological Abstracts y
Pascal. (Bedate, 2000).
Los diferentes cambios institucionales
habidos a mediados de los años ochenta
promueven por parte del director (Dr. Bogan)
de la revista la creación de la Asociación Drogalcohol en 1987. En este momento puede
decirse que la revista comienza una nueva
etapa ya que gran parte de los profesionales
que hasta ese momento configuran el comité
de redacción de la revista dejan de hacerlo
Revista Española
de
Drogodependencias
333
El nacimiento de la memoria escrita: Descripción de las revistas pioneras...
y un nuevo equipo se encarga de la edición
de la RED.
En 1987, y, debido a las confusiones de
los profesionales que se observan entre el
nombre Drogalcohol y la sociedad científica
Socidrogalcohol hace necesario insertar una
nota firmada por la Redacción en el Vol.12.
Núm.4 1987 de la RED para aclarar que la
revista es totalmente independiente de Socidrogalcohol aunque algunos de sus redactores
puedan pertenecer o haber pertenecido a
Socidrogalcohol.
La asociación Drogalcohol, en el año 2000
y por consenso de sus miembros pasa a denominarse AESED (Asociación Española de
Estudio en Drogodependencias), nombre que
mantiene actualmente. La RED es el Organo
Oficial de (AESED).
La revista, inicialmente se distribuye de
forma gratuita hasta 1984. En enero de 1985,
se incluye en la revista (Vol. X. Núm.) una hoja
de suscripción del “Boletín” por un importe
de 1.000 ptas la suscripción anual. En 1987, se
incrementa el precio a 3.000 ptas, hasta llegar
al precio actual.
ESTRUCTURA DE LA REVISTA
El su primer número El Boletín de Alcoholismo y Toxicomanías, aparece configurado
por: Un director cuyo nombre es Dr. Emilio
Bogani,(fallecido) un Secretario de Redacción,
Comité de Redacción compuesto por nueve
miembros y un Consejo Científico con quince
miembros.
Todos los componentes de la mencionada
estructura son profesionales del alcoholismo
y toxicomanías del momento. Muchos de
ellos pertenecen al Servicio de Alcoholismo
y Toxicomanías de la Diputación de Valencia,
el resto a diferentes ciudades españolas. La
334
Revista Española
de
Drogodependencias
selección de los trabajos y decisión para
publicarlos corre a cargo de dicho comité
siempre y cuando los trabajos cumplimenten
las normas de publicación de la revista.
Una nota sobre esta configuración es
resaltar la presencia de tres psicólogos que
ya, en estos años intervenían sobre la problemática.
La estructura de la revista en su inicio
cuenta con los siguientes apartados:
Sumario, editorial, originales, (espacio
sin denominación específica) y, un espacio
de normas para los colaboradores. Un total
cuatro artículos originales se publican en el
primer número de enero de 1976.
La colaboración de laboratorios farmacéuticos se refleja en este primer número con la
publicidad de los medicamentos: Antabus Lefa
y Reglution Lefa. La página ocupada para dicha
publicidad se denomina: espacio reservado
para la lucha contra la cirrosis hepática e
intoxicación etílica. Colaboración que se
mantendrá a lo largo de los años
La larga y continuada trayectoria de la publicación ha hecho que, esta, cambie, suprima
o añada diferentes aspectos de su estructura
primera. Sin embargo hoy, mantiene, prácticamente, las mismas secciones que cuando
inicia su aparición.
La Editorial, es un aspecto a señalar. Será un
espacio exclusivo del Director durante largos
años aunque aparece sin firma durante casi
una década. En ella, recoge aquellos aspectos
más relevantes del momento en relación con
los problemas y las políticas institucionales que
se siguen con el alcohol y demás drogas, los
debates más polémicos así como las controversias. Su descripción lleva al lector a seguir
con mucha fidelidad las diferentes etapas del
problema del alcohol y otras drogas.
30 (3 y 4) 2005
Leonor Cano, Enrique Cano, et al.
La reducción de presupuestos por parte
de la administración en materia de drogodependencias hace crecer la preocupación por
la continuidad de la revista. Las gestiones de la
dirección de la RED promueve que en 1981,
la Excma. Diputación Provincial de Valencia
asuma en su totalidad los gastos de publicación y, por primera vez puede suprimirse la
publicidad de productos farmacéuticos como
fuente de ingresos para la publicación.
Al inicio de los años ochenta la revista está
consolidada y prestigiada como el órgano de
expresión de referencia de los profesionales
de la especialidad estrechamente vinculada
a Socidrogalcohol, pero sin embargo tiene
dificultades para ser incluida en los índices bibliográficos y, por lo tanto la circulación de los
artículos queda restringida a los suscriptores y
a los potenciales lectores de las hemerotecas.
Con el fin de homologarla con el resto de las
publicaciones científicas fue necesario introducir profundas reformas y, separar claramente
la sección de los “trabajos originales y de
investigación” en donde los requisitos para
ser incluidos en los índices bibliográficos de
los “trabajos de divulgación y comunicaciones
breves” o las “cartas a director” donde tendrán
cabida las colaboraciones interesantes por su
contenido pero sin la estructura formal de
de los originales.
A partir de 1985 se implantan las nuevas
normas de publicación lo que supone un
gran esfuerzo para el Comité de Redacción,
pero sobre todo para los autores de artículos
porque se ven obligados a cambiar sus hábitos
literarios. (Bedate, 2000).
Las nuevas Normas insertas en la revista
en enero de 1985, promueve que los artículos publicados aparezcan con un resumen en
castellano e inglés además de palabras clave
que permitan su recuperación posterior en
otros recursos documentales.
30 (3 y 4) 2005
La inclusión posterior del resumen del artículo en francés tiene otra connotación que
por su interés resumimos aquí. El Dr. Emilio
Bogani, director de la revista, en una nota redactada por él en el Vol.16 Núm. 1 de 1991,
explica:…” en este mismo año tiene lugar las
primeras Jornadas Nacionales de la SEAM. El
Alto Comité de Estudios e Información sobre
el Alcoholismo de Francia nos honra con su
presencia y nace una colaboración fructífera
aportándonos material y textos premonitorios de cuanto se pretende instaurar a nivel
de la Comunidad Europea en materia de
Alcoholismo. A ello se debe la traducción de
comunicaciones, medidas impositivas-fiscales
y legislativas de este ejemplar”.
En este misma redacción rinde homenaje
al Dr. Pierre Bouquet, “autor de múltiples
trabajos, en cantidad y calidad, documentos
rigurosos, que al menos, todos los técnicos
en alcoholismo debiéramos conocer”. A partir
de este año, los artículos contarán con tres
idiomas en su resumen: castellano, inglés y
francés. (Bogani, 1991)
Con casi una década de existencia, en enero
de 1985, como respuesta a exigencias actuales
de publicación, la RED realiza un cambio de
formato que se mantendrá hasta finales de
1986. También se añaden nuevos elementos
a la estructura primera. En concreto se añaden los términos: secretario de redacción,
revisión, comité de honor, secretario de red
internacional. Así mismo, esta nueva estructura
permite informar a los futuros colaboradores
que para el envío de nuevos artículos lean
con atención las exigencias de las normas
internacionales de publicación con el fin de
ajustarse lo más posible a ellas. Es un medio
para incluir la revista en la base de datos del
Índice Médico Español (IME)
Actualmente, la estructura se configura con
Revista Española
de
Drogodependencias
335
El nacimiento de la memoria escrita: Descripción de las revistas pioneras...
los espacios siguientes: editorial, originales,
comunicaciones breves, sección jurídica, cartas al director, novedades editoriales, noticias,
cursos y congresos e índice anual de autores
que han publicado durante el año. Este índice sólo aparece en el último número del
volumen anual.
Asimismo, la revista actualmente está indexada en: Biological Abstracts, CDD-DDZ,
CINDOC, INDICE MEDICO ESPAÑOL
(IME), Pascal, REDOC, Toxibase y Psicodoc.
A partir del año 2000 la RED ha incorporado imagen a la portada de diferentes
monografías.
La distribución de la revista se realiza
a los miembros y suscriptores de AESED.
Actualmente mantiene una tirada de 1.000
ejemplares por número. Su edición se mantiene con socios, suscriptores y en los últimos
años con algunas subvenciones puntuales de
Comunidades Autónomas y, recientemente
del Plan Nacional sobre Drogas.
También, es plataforma de publicación de
las Actas de las Jornadas de AESED. Sirva
como ejemplo la publicación de la Monografías sobre las I Jornadas Nacionales de
Documentación en Drogodependencias
desarrolladas en el año 2001(Vol.26. núm.3,
4). También del número 100 de la revista
con motivo de sus veinticinco años (Vol.25.
Núm.4, 2000)
El intercambio de la RED, desde su aparición en 1976 con otras publicaciones, aglutina
un fondo documental que lleva al Dr. Emilio
Bogani (director) a la creación de un Centro
de Documentación en Drogodependencias
en 1991, que permita a los profesionales
acceder a la misma y conocer los últimos
avances del campo del alcoholismo y otras
drogas. En un primer momento, el acceso a
336
Revista Española
de
Drogodependencias
la misma información está restringido a los
socios y suscriptores de la revista. En 1993,
las gestiones administrativas realizadas por
AESED (Asociación Española de Estudio en
Drogodependencias, entonces Drogalcohol)
lleva a la firma, en un primer momento, de un
Convenio con el Ayuntamiento de Valencia,
Fundación Empresa ADEIT y Drogalcohol.
Este convenio se mantendrá con el Ayuntamiento de Valencia y AESED, hasta el año
2003.
Se pone a disposición de los profesionales
el Centro de Documentación REDOC, con
el fondo bibliográfico de la RED. Crea la Base
de Datos Bibliográfica de Drogodependencias
RED y se vacían revistas especializadas desde
los años sesenta como es el caso de la Revista
Alcohol Santé. Cubre un vacío importante en
la documentación especializada en la Comunidad Valenciana hasta que en el año 2003, el
convenio es denunciado por el Ayuntamiento
de Valencia aludiendo motivos competenciales
de la Administración Local otorgados por la
Ley de Drogodependencias de la Comunidad
Valenciana: que obviamente es un sin sentido, una artimaña político administrativa de
cambio de gestor, afortunadamente el centro
sigue funcionando con el dinero público como
cabía esperar.
La muerte del Dr. Emilio Bogani en 1997,
deja sin dirección la revista que es asumida
por el actual director Dr. Francés Freixa por
deseo expreso de la Junta Directiva de AESED
en 1998.
Un último aspecto queremos resaltar de
esta publicación: el eclecticismo sereno que
mantiene a lo largo de su trayectoria y, que
queda muy bien reflejado en algunos estudios
bibliométricos (Freixa, 2001) realizados a
partir de la producción científica publicados
en la revista (Cano, Tortosa, Montoro, 1985;
30 (3 y 4) 2005
Leonor Cano, Enrique Cano, et al.
Quiles, Espada, Méndez, 2000).
La revista Española de Drogodependencias
cumple en el año 2006 su treinta años de
publicación ininterrumpida.
CONCLUSIONES
Sobre lo expuesto, y como profesionales
con experiencia en el campo del alcohol y
otras drogas, colaboradores de la Revista
Española de Drogodependencias durante
largos años, permítasenos extraer algunas
conclusiones al uso:
En líneas generales y según las referencias
verbales y escritas hechas sobre las revistas
aquí mencionadas, parece que estas publicaciones han mantenido un protagonismo muy
importante durante los años de su publicación
acorde a su año de aparición y compromiso
inicial adquirido con el campo de la difusión.
Siendo referentes de los profesionales y de
sus instituciones en el ámbito nacional e
internacional. (el objetivo es informar y dar a
conocer)
Su aparición en los distintos contextos, ha
facilitado una recogida de información valiosa
y única sobre lo acaecido en el campo del
alcohol y otras drogas. Han cumplimentado
su reto y compromiso inicial adquiridos y
cubierto de manera excepcional el vacío de
intercambio de información existente entre
los profesionales del campo. (saber donde
obtener información)
El objetivo general de estas publicaciones
se ha cumplido al transmitir la información
científica sobre la problemática del alcohol y
otras drogas de manera especializada. Además
de recogerla de manera impresa en los diferentes volúmenes publicados en las propias
revistas. (soporte en papel)
30 (3 y 4) 2005
Una de ellas ha sido referente antes y
durante la implantación del Plan Nacional
sobre Drogas, vehículo de comunicación
científica entre los profesionales del campo
contribuyendo al construcción y memoria
histórica de la problemática (sensibilización
y referente)
Se hace necesario aquí señalar a la propia
Revista Española de Drogodependencias por
muchas razones, pero especialmente, por ser
la primera revista especializada en el campo
y, por el reto que supuso para su fundador y
los equipos que han colaborado en su mantenimiento posterior durante casi tres décadas.
Esta publicación, por el año de su aparición
(1976) año en que todo estaba por hacer, es
la pionera y, por tanto, la primera en transmitir
temas de vanguardia, descripción de políticas
institucionales en materia de tratamiento y
prevención, creación y nacimiento de equipos
profesionales, de programas de prevención, de
atención, inserción e investigación, desarrollo
de colegios invisibles, difusión del trabajo con
alcohólicos rehabilitados, avances farmacológicos, y un sin fin de temas sociales que en
definitiva han sensibilizado a nuestra sociedad
ante la problemática. (profesionalización y
continuidad)
Puede afirmarse que esta revista, dentro
del eclecticismo mantenido a lo largo de su
trayectoria, ha sido un medio fundamental
para plantear retos, defender tesis, provocar
discusiones, forzar debates, denunciar hechos
pero, sobre todo ha sido protectora de la
integridad y cumplidora de su compromiso
inicial de difusión y debate. (formación crítica
y constructiva)
En suma, de lo expuesto cabe al menos
realizar una afirmación: el Plan Nacional sobre
Drogas durante sus veinte años de trayectoria
ha contado con material escrito y/o documentos de excepción que fueron y son vehículo
Revista Española
de
Drogodependencias
337
El nacimiento de la memoria escrita: Descripción de las revistas pioneras...
de comunicación científica entre los profesionales del campo del alcohol y otras drogas,
en unos años muy importantes de la historia
política de nuestro país (no queremos dejar
de mencionar “in memorian” a quien tuvo la
visón política de construir lo que somos en
parte en nuestros días: al Ministro Dr. Ernest
Lluch, que sin su magistral intervención el Plan
Nacional Sobre Drogas no hubiera visto la luz.
Recordando su frase: “un problema no existe
y no se resuelve hasta que no se convierte en
un objetivo político”) han sido y son referentes de relevancia en los índices bibliográficos,
bases de datos y demás fuentes documentales
siendo los contenidos publicados objeto de
estudio para los investigadores. (estructura
necesaria)
Por último, la importancia de estos veinte
años radica, además, en el hecho de que estas
revistas, han impregnado de conocimiento a
los profesionales del campo informándoles
sobre los múltiples acontecimientos ocurridos
entre 1976 y 1990, periodo que coincide
con el inicio más especializado de la atención
a los problemas del alcohol y otras drogas
y, también con la resolución de problemas
establecidos por el Plan Nacional sobre Drogas. Entre ellos, sirvan como recordatorio la
eclosión de las epidemias de heroinomanía y
del SIDA, la proliferación de los programas de
mantenimiento con metadona, los programas
de desintoxicación hospitalaria, la aparición
desde el inicio de la problemática de un
movimiento asociativo como punta de lanza
de la creación de recursos especializados, la
normativa de planes organizativos desde las
distintas administraciones, la creación de las
comunidades terapéuticas y centros de día,
los programas con prescripción de antagonistas, la formación en todos sus ámbitos y modalidades, la investigación, el abordaje urgente
338
Revista Española
de
Drogodependencias
del tabaquismo y los programas de prevención
específica e inespecífica entre otros.
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Revista Española
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Drogodependencias
339
Originales
Globalización, drogas y derechos humanos
Amando Vega
~¿Qué es la ley, señorito?
El viejo carraspeó banalmente:
-Bueno, supongo que la leyes eso que se ha inventado para que los hombres no hagamos nunca lo que nos da la gana. ¿Me explico o no
me explico, hija?
Ella levantó los hombros y sonrió..
- ¿Es mala la ley, señorito?
DELIBES, M., La hoja roja, (1979)
Resumen
Cada día es mayor el número de persona, profesionales o no, que piden una reflexión
abierta en la cuestión de las drogas y su legislación. Se entiende que el denominado
“problema de las drogas” esta cargado no sólo de contradicciones, de tópicos y de
intereses ocultos sino también de injusticias, exclusiones y sufrimientos de todo tipo.
Estamos tan preocupados por la sustancia, que olvidamos los derechos más elementales
de las personas implicadas en su consumo y su producción.
La complejidad del fenómeno de las drogas difícilmente se dejar atrapar entre las redes
de cualquier teoría o explicación, por la variedad de elementos personales y sociales
implicados en esta cuestión. La complejidad de las drogas está íntimamente unida a la
complejidad de la vida misma, por lo que no resulta fácil dar respuestas a todos los
problemas que este fenómeno provoca en nuestra sociedad y, menos, con criterios
eminentemente represivos. La denominada guerra contra las drogas no hace más que
complicar los problemas, sobre todo, de aquellas personas que ya sufren la exclusión
social, lo que provoca que la política vigente en relación con las drogas cada día esté
más cuestionada entre la población mundial. Y, en este sentido, cada día es mayor el
número de personas, profesionales o no, que piden una reflexión abierta en la cuestión
de las drogas.
Palabras Clave
Globalización, derechos humanos, consumo, producción, exclusión social, reflexión, drogas.
Correspondencia a:
340
Revista Española
de
Drogodependencias
30 (3 y 4)30340-352.
(3 y 4) 2005
Amando Vega
Summary
It’s noticed that before the worrisome drug consumption between the youngest population, we resorts to the police and the Civil Guard in order to avoid the consumption
and the traffic in the surroundings of the educative centers.That send us to the previous
times of the national plan, where this type of measures were proposed, without they
materialized, to be understood that it was a police problem, nonsocial. It is impossible to
be denied that the drugs are presents in our society, even with an increasing consumption
between the youngest population. The preventive plans in march, nevertheless, do not
seem to have obtained the proposed objectives.
It is evident, then, the necessity of revision of the performance plans considering the new
reality of the phenomenon of drugs within the framework of the effective globalización
and within the respect of the human rights of the consuming and nonconsuming people.
The political plans do not have another mission that to organize the efforts of the society
to face the social problems of the most effective and healthful form for all. In this sense,
the globalizacion and the movement of the human rights constitute new challenges for
the national plans. And cannot be confused the drugs policy with the security policy.
Key Words
Preventive plans, globalización, human rights, consumers, policies drugs.
Résumé
Il attire l’attention que devant la préoccupante consommation de drogues entre la
population plus jeune, on recourt à la policier et à la garde civile pour éviter la consommation et le trafic même dans l’environnement des centres éducatifs. Ce qu’il remet à
ce qui est préalables du plan national, où proposait déjà ce type de mesures, sans qu’ils
coagulent, par lesquel être compris qu’on était devant un problème social, non policier. Il
ne peut pas refuser que les drogues suivent des présents dans notre société, même avec
une consommation croissante entre la population plus jeune. Les plans préventifs mis
en marche, toutefois, ne paraissent pas avoir obtenu les objectifs proposés. La nécessité
une révision des plans d’action est évidente, donc, en tenant compte de la nouvelle
réalité du phénomène des drogues dans le cadre de la globalisation en vigueur et dans
le respect des droits humains des personnes consommatrices et non consommatrices..
Les plans politiques n’ont pas une autre mission qui organiser les efforts de la société
pour faire face les problèmes sociaux de la manière plus efficace et sain pour tous. En
ce sens, la globalisation et le mouvement des droits humains constituent de nouveaux
défis pour les plans nationaux. Et on ne peut pas confondre la politique sur les drogues
avec la politique de sécurité.
Most Clé
Plans préventifs, globalisation, droits humains, consommateurs, politiques drogues.
30 (3 y 4) 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
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Globalización, drogas y derechos humanos
1.- ¿DÓNDE ESTÁ EL PROBLEMA?
El denominado “problema de las drogas”
esta cargado no sólo de contradicciones,
de tópicos y de intereses ocultos como de
injusticias, exclusiones y sufrimientos de todo
tipo.Y así surgen preguntas a las que no resulta
fácil responder, como las que Galeano ( 2000:
134-135) lanza:
Si se prohíbe la industria de la droga, industria asesina, ¿por qué no se prohíbe la
industria de armamentos, que es la más
asesina de todas?
¿Con qué derecho los Estados Unidos
actúan como policías de la droga en el
mundo, si ese país es el que compra más
de la mitad de las drogas que se producen
en el mundo?
¿Por qué los medios masivos de comunicación hablan tanto de la droga y tan
poco de sus causas? ¿Por qué se condena
al drogadicto y no al modo de vida que
multiplica la ansiedad, la angustia, la soledad
y el miedo, ni a la cultura de consumo que
induce al consuelo químico?
Si una enfermedad se transforma en delito, y ese delito se transforma en negocio,
¿es justo castigar al enfermo?
El Consejo Nacional del Sida (CNS) francés
ha publicado un esclarecedor informe en el
que recomienda la «despenalización» del
consumo de todas las drogas «ante la ineficacia de las acciones represivas en términos
de salud pública» (Frade, 2001), El CNS es
un organismo consultivo creado en 1989
por un decreto presidencial y compuesto
por científicos, representantes religiosos y
miembros de asociaciones de prevención y
asistencia. Tras dos años de discusiones, de
los 23 expertos que lo componen, 20 votaron a favor del documento presentado, uno
342
Revista Española
de
Drogodependencias
se declaró en contra y dos se abstuvieron.
El texto justifica su recomendación por «la
ampliación de los riesgos sanitarios a la que
puede contribuir la acción represiva». Uno de
los acentos más importantes del documento
está en la amplitud de su concepto de legalización, al entender la despenalización del
consumo de drogas referida no sóla al uso
personal sino también al aprovisionamiento
del consumidor, el transporte de sustancias y
su posesión. Y dice textualmente el Consejo
Nacional del Sida:
«El mantenimiento de una política que oscila
entre tratamiento y represión, imputable al
estado de la legislación francesa sobre los
estupefacientes y a los prejuicios contra
los usuarios de drogas, constituye hoy un
obstáculo al despliegue de la estrategia de
reducción de riesgos»,
El organismo sugiere, además de la despenalización del consumo en el ámbito privado,
la exclusión de cualquier pena de cárcel por
uso de estupefacientes ya sea en público o
en compañía de otros consumidores. El CNS
reclama disposiciones legislativas que garanticen el tratamiento y las medidas de reducción
de los riesgos y perjuicios ligados al consumo
de drogas «sea cual sea su contexto, y en
particular en las prisiones».
Hay que reconocer que el discurso sobre
las drogas están cambiando. Conocer el sentido y alcance de este cambio, permitirá su
comprensión y asignarle el valor que merezca,
pues tanto puede reducirse a un mero juego
de términos que ocultan todavía más el problema como constituir un nuevo “paradigma”
que permita y estimule un cambio de actitudes
y de prácticas ante el complejo fenómeno de
las drogas .
Precisamente en abril de 2003, tuvo lugar
30 (3 y 4) 2005
Amando Vega
en Viena una revisión de la estrategia sobre
drogas establecida por la ONU en 1998 con
la mirada puesta en los próximos diez años,
ocasión aprovechada por la Coalición Europea de ONGs para lanzar una campaña por
una política de drogas más justa y eficaz. Esta
Campaña pretendía lanzar la alarma social
sobre el hecho de que en Viena la ONU y los
Gobiernos intentarían, de nuevo, cubrir la verdad con mentiras e información manipulada,
como así ha sucedido una vez más.
Los objetivos propuestos por esta Coalición
son básicamente tres y todos siguen teniendo validez:
-Mostrar los daños de, la prohibición (salud,
economía, seguridad de la comunidad,
derechos Humanos)
-Mostrar que existen políticas alternativas que
se pueden implementar en .Europa
-Mostrar los pasos que Europa puede dar en
Viena para cambiar él curso de la historia
Como señala la Coalicción se necesita ir
más lejos para reducir los daños que no se
pueden disminuir en el actual marco jurídíco.
Hay una escalada de la “guerra a las drogas”
en los países productores. Se ha producido un
aumento de la militarización de las estrategias
de erradicación, especialmente en Colombia,
lo que ha llevado a violaciones a los derechos
humanos y degradación medioambiental. El
desarrollo alternativo para sustituir los cultivos
ilícitos por productos agrícolas legales está en
crisis debido a su subordinación a medidas
represivas centradas en la erradicación forzosa. En otras palabras, es hora de un cambio
(Transnational Institute, 2001).
Conscientes de esta realidad, un grupo de
profesionales de diferentes ámbitos y países
30 (3 y 4) 2005
nos reunimos cada cierto tiempo en el Instituto Internacional de Sociología Jurídica (IISJ)
de Oñati, Gipuzkoa (España) para reflexionar sobre el fenómeno social de las drogas,
reflexiones que han quedado plasmadas en
diferentes publicaciones: Normas y Culturas
en la construcción de la «Cuestión Droga»
(Hacer, 1996); Los agentes sociales ante las
drogas (Dykinson, 1998), y Drogas: cambios
sociales y legales ante el tercer milenio (Dykinson, 2000). El último workshop tuvo lugar
del 20 al 22 de julio de 2001, bajo la coordinación de tras profesionales: uno del propio
País Vasco, otro de los Estados Unidos, y el
último de Alemania. Arana, Husak y Scheerer,
motivados por la misma curiosidad acerca de
la evolución de las normas legales, y especialmente por las de tipo prohibicionista en la
sociedad mundial, pidieron a varios colegas
que aunaran esfuerzos para elaborar otras
preguntas y respuestas relacionadas con este
aspecto de la globalización.
2.- POLÍTICAS SOBRE DROGAS,
DERECHOS HUMANOS Y
REDUCCIÓN DE RIESGOS
Fruto de aquel encuentro ha sido el libro
“Globalización y drogas. Políticas sobre drogas,
derechos humanos y reducción de riesgos”,
que aquí se comenta, que recoge en sus
diferentes capítulos del libro las versiones
revisadas de las ponencias expuestas en este
workshop.
«¿De qué forma los derechos limitan la política sobre drogas» es la cuestión que plantea
DOUGLAS HUSAK. Para este experto, cada
vez se habla más de políticas sobre drogas, a
la vez que se descuida la perspectiva de los
derechos de los consumidores. Y desde la
teoría criminal y la filosofia moral analiza dos
cuestiones fundamentales relacionadas con
Revista Española
de
Drogodependencias
343
Globalización, drogas y derechos humanos
los derechos que protegen el consumo de
drogas: ¿qué es un derecho? y ¿cómo decidir
si el consumo de drogas está protegido por
un derecho? Para Husak existe una sustancial
diferencia analizar este tipo de consumos desde una perspectiva basada en los derechos o
desde una perspectiva de costo-beneficio.
Para poder llegar a entender el actual régimen prohibicionista en materia de drogas,
señala Sebastian SCHEERER en su trabajo
sobre la “Prohibición de las drogas en las
sociedades abiertas”, es preciso analizar el
proceso de formación y la estructura del
sistema normativo actual. Gran parte de los
conocimientos y creencias básicas en la fase
de elaboración del discurso prohibicionista
han quedado hoy en día obsoletos. La política
de drogas en las sociedades abiertas es una
cuestión compleja que debe respetar las libertades civiles, producir los resultados deseados
y convencer como una respuesta racional a
una evaluación racional de la naturaleza del
problema y las ventajas y riesgos relativos a
las distintas opciones políticas. En este sentdio
defiendo que ha llegado el momento de abrir
un debate haciendo hincapié en el valor de
la diversidad y la tolerancia en una sociedad
abierta, y de relacionarlo con el derecho de los
consumidores de drogas actualmente ilegalizadas, quienes han de luchar por conseguir la
abolición de los regímenes de prohibición.
Para Harry O. LEVINE, la prohibición global de drogas es un continuum que va desde
la prohibición punitiva de drogas (política
de drogas en EE.UU.) hasta la prohibición
tolerante de drogas (política del cannabis de
los Países Bajos). La prohibición de las drogas
se ha adoptado a escala mundial, entre otras
cuestiones, porque resulta muy práctica para
todo tipo de gobiernos. Gobiernos y políticos
de diversas ideologías se han visto seducidos por la prohibición de algunas drogas y
han puesto en marcha diferentes cruzadas
344
Revista Española
de
Drogodependencias
antidroga. Sin embargo, desde hace más de
dos décadas asociaciones de consumidores y
diversos trabajadores socio-sanitarios están
tratando de proporcionar a los consumidores
una serie de servicios destinados a reducir los
efectos dañinos del consumo y de la política
prohibicionista. La reducción de daños es un
movimiento que desplaza las políticas relativas
a las drogas desde el extremo punitivo hasta
el extremo más tolerante y abiertamente
normalizado de las mismas. De hecho, la
reducción de daños ha sido el primer movimiento internacional popular en retar a la
demonización de las drogas, así como a las
formas más punitivas de la prohibición.
Martín BARRIUSO bajo el título “La prohibición de drogas, del tabú moral a la desobediencia civil, analiza la situación actual del
debate sobre políticas de drogas y los retos
que plantea, para repasar luego someramente
la actividad de los últimos diez años del movimiento antiprohibicionista —especialmente el
cannábico- con no pocos resultados positivos
como el asociacionismo de usuarios, la práctica
de la desobediencia y la colaboración con
otros colectivos de diversos países afectados
negativamente por la prohibición. A partir de
ahí, muestra líneas estratégicas que pueden
servir al conjunto del movimiento antiprohibicionista para superar la actual situación y
tratar de construir un modelo de mercado
legal que provoque la menor cantidad posible
de efectos colaterales negativos para todos
los eslabones de la cadena de producción,
transformación, venta y consumo de drogas
ilícitas.
«La globalización de las políticas en materia
de drogas como obstáculo para la profundización en la democracia», es el tema tratado
por Xabier ARANA, como reflexión sobre los
efectos que la globalización de las políticas en
30 (3 y 4) 2005
Amando Vega
materia de drogas en la democracia. La globalización de las políticas prohibicionistas en
materia de drogas hay que enmarcarla dentro
de la potenciación de una cultura autoritariorepresiva que abarca aspectos económicos
(ayudas económicas), políticos (limitación de
soberanía) y militares (intervención y ayudas
militares a algunos Estados).Y, en esta línea, la
globalización de la política prohibicionista en
materia de drogas está proporcionando un
buen caldo de cultivo para la globalización
de la corrupción. Los sobornos, la seducción
y/o la perversión, los daños y los beneficios
a gran escala, encuentran en la globalización
económica y en la globalización de las políticas
de drogas un marco idóneo para proporcionar
grandes rentabilidades -económicas y políticas-, legitimando el poderío de los grupos que
controlan la internacionalización de la economía y dejando al margen derechos políticos y
sociales de muchas personas.
Eric JENSEN trata el problema de la «Sanciones no penales por delitos de drogas en
los EE. UU: Erosionando el Tejido Social». La
política de control de drogas en los EE.UU.
ha ido más allá de las medidas tradicionales
de las sanciones penales en la denominada
«red de seguridad» de la política de bienestar
social, e incluso en el campo de la financiación
de la educación post secundaria. Las nuevas
fronteras de castigo extienden el ámbito de
la política penal fuera del ruedo de la justicia
penal de manera que la persona condenada
por un delito de drogas no sólo soporta
la carga de tener que desembarazarse de
los estigmas nocivos de drogodelincuente
y criminal, sino que además, si procede de
un entorno social deprimido (lo que sucede
en la mayoría de los casos) ven cómo se les
niegan las disposiciones básicas de ayuda
disponibles en las sociedades occidentales, la
30 (3 y 4) 2005
oportunidad de recibir respaldo económico
para mejorar sus oportunidades de vida y,
en muchas jurisdicciones, el derecho al voto.
Estas políticas funcionan para debilitar los
vínculos que unen a las personas condenadas
a la sociedad convencional incrementando las
probabilidades de que se vena implicadas en
el futuro en actividades criminales.
Rosa DEL OLMO, en su ponencia «Derechos Humanos y Drogas: El ejemplo de la
Región Andina», deja constancia de la permanente y crónica falta de protección de los derechos humanos, de manera particular en las
poblaciones de menos recursos en esta región,
situación agudizada en los últimos tiempos
(en parte gracias a las políticas represivas
antidrogas ), con la creciente indiferencia de
la opinión pública frente a estos hechos. Para
esta crimonóloga existen evidentes contradicciones entre las políticas de protección de los
derechos humanos y las políticas de control
de drogas. Ambos sistemas se han venido
expandiendo en la última década, aunque de
manera diferente: el sistema de protección de
los derechos humanos pretende abarcar cada
vez más nuevos derechos que en otras épocas
estaban rezagados, o enfrentados entre sí, para
formar un todo integral, es decir, un conjunto
de derechos indivisibles e independientes; el
sistema de control de drogas pretende invadir
espacios que no lo son propios. En consecuencia los derechos humanos pueden ser violados
en todas las instancias del llamado Derecho
de Drogas, el cual, se adecua perfectamente
a la globalización.
Para Iván OROZCO, como se puede ver
en su trabajo «Droga y Guerra Civil en
Colombia», el impacto del régimen global de
prohibición de ciertas drogas es uno de los
elementos fundamentales en la explicación de
varios de los fenómenos más graves de violencia política que han azotado a Colombia en las
Revista Española
de
Drogodependencias
345
Globalización, drogas y derechos humanos
últimas décadas: narcoterrorismo y paramilitarismo. Las enormes ganancias que se generan
en el seno de la economía ilegal de las drogas
son el gran motor que impulsa hoy carro de
la guerra civil colombiana en la vertiginosa y
alocada carrera de su escalamiento, ampliación, ensuciamiento y de su transformación.
A través del despliegue simultáneo de una
guerra civil vertical entre el Estado y las guerrillas, y de una guerra horizontal entre éstas
y los grupos paramilitares, el país se encuentra
en una encrucijada histórica. En este línea, el
Plan Colombia está atravesado por múltiples
ambigüedades y ambivalencias. Desde su
concepción inicial delata su origen ambiguo en
una mezcla entre imposición y acuerdo en la
relación entre los gobiernos de EE.UU. y Colombia: un proyecto altamente heterogéneo
de desarrollo, de fortalecimiento institucional
y de paz, y simultáneamente una estrategia
altamente militarizada de erradicación y de
sustitución de cultivos ilegales. El Plan Colombia ha servido para fortalecer al ejército y, a su
vez, para debilitar las negociaciones de paz. El
tránsito de la Administración Clinton a la Administración Bush parece implicar un primado
creciente de la lógica interna norteamericana
de guerra a las drogas, ahora regionalizada, en
detrimento de las necesidades colombianas
de apoyo a la paz negociada.
«Del uso al abuso. La Guerra Mundial y
la creación de un «problema de Drogas « en
el Estado Español» es el tema tratado por
Juan Carlos USO, donde las consecuencias
políticas y socioeconómicas derivadas de la
neutralidad observada por el Estado español
ante los dos grandes conflictos bélicos que
asolaron Europa durante el siglo XX han
sido estudiadas y analizadas prácticamente
en todas sus repercusiones. En este sentido,
hay un aspecto relacionado con la I Guerra
Mundial ( 1914-18) que curiosamente ha
346
Revista Española
de
Drogodependencias
pasado desapercibido a historiadores, sociólogos, economistas y demás cientificos sociales
o, al menos, no suele mencionarse en los
tratados y manuales al uso. El autor se refiere
al papel desempeñado por la denominada
Gran Guerra como posible detonante del
consumo de drogas en España al margen de
usos terapéu- ticos convencionales, es decir,
como un fenómeno de masas.
Jean-Paul GRUND ofrece su aportación
bajo el título «Cambiando los Regímenes Prohibicionistas en la antigua Unión Soviética: Una
situación desastrosa en la sanidad pública».
En la Unión Soviética los consumidores de
drogas estaban fuerte- mente reprimidos por
parte del Estado mediante severas condenas
de cárcel y por medio de tratamiento obligatorio. Actualmente, aun existiendo ligeros
movimientos hacia un enfoque más humano
en el tratamiento, el sistema sanitario apenas
está preparado para asumir el desarrollo de
la epidemia del VIH y el enfoque global hacia
los consumidores continua siendo principalmente represivo. La situación de los derechos
humanos en lo referente a los consumidores
de droga no ha cambiado realmente a mejor
con enorme aparato de represión del Ministerio del Interior centrado cada vez más en el
«problema de las drogas», considerado como
amenaza a la “seguridad nacional” del país. La
reciente introducción de leyes de drogas más
represivas en varios países de la región sugiere
que el aventurarse en la Guerra internacional
a las drogas resulta atractivo par los gobiernos
de los países donde el legado de la burocracia
comunista es aún tangible en diferentes áreas
de la política pública.
3.- REDUCCIÓN DE RIESGOS Y
POLITICAS SOBRE DROGAS
30 (3 y 4) 2005
Amando Vega
Las personas que sufren patologías orgánicas y de trastornos psicosociales asociados al
consumo de sustancias entre aquellos, pero
que no piden o no desean recibir tratamiento
para su consumo de drogas, necesitan también
respuestas acordes con sus necesidades, lo
que. ha provocado una reorientación de las
prácticas y políticas de drogodependencias en
la mayoría de los países.
Existen, sin embargo, no pocas resistencias
a la hora de asumir la política de reducción de
daños cuando de drogas ilegales se trata. Así
la Junta insta a los gobiernos a que apliquen
políticas encaminadas a disminuir la incidencia
de esa modalidad de consumo de drogas JIFE
(2002), para señalar de forma explícita:
Establecer locales de inyección de drogas,
en que los toxicómanos se administran
sustancias que han obtenido ilícitamente, va
en contra de lo dispuesto en los tratados
de fiscalización internacional de drogas.
Hace alusión después a que en abril de
2002 se inauguró en Zurich (Suiza) un local
de inhalación de drogas, ya que los adictos
que inhalan drogas no están autorizados a
utilizar instalaciones destinadas a los que se las
inyectan, para afirmar a continuación:
La Junta reitera que los locales de inyección
de drogas (o cualesquiera otras instalaciones
similares que existen en algunos paísesdesarrollados) pueden incluso facilitar el uso
indebidode sustancias, son contrarios a los
tratados de fiscalización internacional de
drogas e interfieren con las obligaciones de
las autoridades de represión. Por consiguiente,
la Junta alienta a los gobiernos a que amplíen
los servicios de tratamiento de toxicómanos
que sean compatibles con las buenas prácticas
médicas y con los tratados internacionales,
en vez de facilitar y secundar el uso indebido
de drogas (y posiblemente el tráfico ilícito)
30 (3 y 4) 2005
mediante el establecimiento de locales de
inyección y similares. Pero ¿por qué no se
acepta una política que incluya estrategias de
reducción del daño? La respuesta viene de
Machín y otros (2003):
“Porque implica, entre otras cosas, reconocer un fracaso de la omnipotencia
imaginaria de los políticos de acabar
con todas las dependencias y con todas
las drogas (ilícitas) y renunciar, por lo
tanto, al paradigma dominante. Implica
además un cuestionamiento de las estrategias mismas de prevenci6n que están
orientadas al intento de quitar placer al
consumo mediante la estigmatizaci6n
del consumidor. Es claro que cuando
criticamos el paradigma hegemónico no
estamos afirmando que deben desaparecer por completo los mecanismos de
control social, o que el abuso de ciertas
sustancias no tenga efectos negativos,
etc. Serían otras tantas simplificaciones.
Lo que proponemos es que avancemos
hacia «una mayor comprensión de los fenómenos involucrados y promover una
aproximación más humana, orientada
socialmente y sobre todo más eficiente,
donde el primer interés es el proteger la
salud de los usuarios y mejorar la realidad psicosocial».
Hay que reconocer que la inclusión de la
perspectiva de reducción del daño en la política de drogas no es la solución, porque tal
cosa no existe, pero puede conribuir en gran
medida a disminuir situaciones de sufrimiento
social. Y no olvidar nunca que la reducción
de daños reconoce la libertad individual en la
búsqueda del propio bienestar, incluyendo el
derecho individual al consumo de drogas. En
este sentido, se presentaronvarios trabajos en
el encuentro de Oñati como a continuación
se puede constatar.
Revista Española
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Drogodependencias
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Globalización, drogas y derechos humanos
«Principios de la política en materia de
drogas.-¿Reducción de daños o derechos
humanos? ¿Puede conducir la reducción de
daños a una reforma cuyo enfoque se base
en los derechos humanos? El caso de la política antidroga en Canadá», es la cuestión
analizada por Patricia ERICKSON y Andrew
HATHAWAY. Los objetivos de la reducción
oficial de daños perseguidos por la estrategia
nacional sobre drogas canadiense durante diez
años se contrastan con la evolución actual de
la nueva ley relativa a este mismo tema, The
Contro//ed Drugs and Substances Act (1997).
El fracaso de la reforma de la política relativa
a las drogas en Canadá no significa necesariamente que el fracaso afecte a la tentativa de
reducción de daños. Estos autores consideran
que la reducción de daños está a punto de ser
definida como una «medicalización» orientada a las necesidades de los adictos, mientras
que se ignoran las de los consumidores de
sustancias controladas y sus proveedores. Al
mismo tiempo entienden que los principios
fundamentales de la reducción de daños
podrían conducir a un enfoque de la política
antidroga basado en los derechos humanos,
principios que han resultado desplazados por
un discurso que pone énfasis en los costes
sanitarios y en los daños sociales potenciales
que podrían surgir a raíz del consumo de
drogas con una defensa más liberal y de
elección personal.
«Prohibición o Políticas sociales. La reducción de daños y riesgos en la época de la
globalización» es la cuestión analizada por
Iñaki MARKEZ y Mónica Poo. Para ellos el fenómeno de la globalización está interviniendo
en la cuestión de las drogas en todos y en
cada uno de los procesos que acontecen, en
la oferta y en la demanda, en la producción,
distribución y comercialización a través de
348
Revista Española
de
Drogodependencias
recursos transnacionales. Las políticas sobre
drogas que dominan en la actual Unión Europea se relacionan con la reducción de la
demanda. Pero también contemplan aspectos
relacionados con la reducción de la demanda
y con la reducción de daños como las actividades y programas de reducción de daños
y riesgos, los tratamientos de sustitución, el
debate y las medidas sobre la despenalización,
la prevención entre usuarios de drogas, la
evaluación de programas y políticas, etc., sDe
todas formas, si queremos medir la eficacia de
los programas es necesario precisar qué daños
o riesgos puede producir la sustancia y cuales
queremos reducir a través de estos.
«La Reducción de daños en la Política preventiva: Aproximación pedagógica» es el tema
tratado por Amando VEGA quien muestra
la contradicción de recurrir a la prohibición
como principio básico de lso programas preventivos, cuando precisamente la educación
pretende formar para la toma de decisiones
libres. Bajo el pretexto del «pleno desarrollo
del individuo», la educación ha sido y es, en
muchas ocasiones, una simple inculcación de
los valores y normas establecidos por el programa global de drogas. De todas formas, nada
hay más ajeno a la educación que la represión
o la manipulación de cualquier tipo, aunque
las intenciones sean saludables.. Desde esta
perspectiva, este trabajo contrasta las diferencias entre los planteamientos educativos y los
represivos, para intentar mostrar principios y
estrategias de una auténtica educación sobre
las drogas, que asuma tanto la abstinencia
como la reducción de daños, dentro de una
visión positiva tanto de las drogas como de
la capacidad de las personas para actuar de
forma saludable.
José Luis DOMtNGUEZ, Blai GUARNE
y Lola VALLES analizan las «Resistencias y
30 (3 y 4) 2005
Amando Vega
contradicciones en la convivencia del prohibicionismo con las políticas de reducción de
daños (El caso de los Programas de Intercambio de jeringuillas en las prisiones catalanas».
A pesar que la implementación del programa
PIJ en el ámbito comunitario de Catalunya ha
proporcionado evidencias muy favorables para
su aplicación en los centros penitenciarios, y
que la valoración de Instituciones Penitenciarias del programa piloto desarrollado en los
Centros Penitenciarios de Bilbao y Pamplona
ha sido positiva, la aplicación del programa PIJ
parece haber topado en el ámbito penitenciario catalán con la oposición y el recelo del
colectivo de funcionarios de prisiones y ha
conseguido paralizar la respuesta Institucional.
Las políticas prohibicionistas en materia de
drogas cuentan entre sus resultados simbólicos con una forma de concebir la cuestión
droga basada en la idea de amenaza. Desde
la perspectiva de la resistencia sistémica se
resalta como dicho problema puede llegar a
afectar al frágil equilibrio económico, funcional
y simbólico de las instituciones que forman
parte de los sub- sistemas penal, sanitario,
asistencial, educativo, laboral, etc. La idea de
seguridad que los funcionarios de prisiones
anteponen ante los PIJ está determinando los
términos del debate institucional y relegando
a un segundo plano los conflictos reales que
se mueven tras la presencia del consumo de
drogas en las instituciones penitenciarias.
experiencias profesionales - la criminología, la
economía, ciencias sociales, trabajo social- posibilita una visión interdisciplinar que no siempre se encuentra en trabajos sobre la cuestión
de las drogas, lo que ayuda a introducirnos
con respeto en este complejo fenómeno de
las drogas y todas sus consecuencias, incluidas
las provocadas por los regímenes globales de
prohibición.
4.- HACIA INTERVENCIONES
GLOBALES JUSTAS
Esta nueva perspectiva implica dotar a los
individuos y grupos sociales de los recursos
personales y comunitarios necesarios para
afrontar tales situaciones. ¿No es esto lo que
exige la promoción de la salud?. Precisamente, la promoción de salud no sólo pretende
desarrollar las habilidades personales para la
salud sino también desarrollar comunidades
saludables, con todo lo que esto implica de
políticas comprometidos para el desarrollo
Estos diferentes trabajos responden no sólo
a los diversos intereses de los participantes
sino a su procedencia de los entorno más
dispares, lo que favorece que hayan podido
ofrecer una visión más global del mundo de
las drogas.Y al mismo tiempo, la diversidad de
30 (3 y 4) 2005
Se comprende mejor así que la respuesta
a la cuestión de las drogas o es global o no
es respuesta, como sostiene Del Olmo(2002).
Esta intervención global implica ante todo redefinir qué se entiende por droga y, al mismo
tiempo, iniciar la deconstrucción de las políticas actuales y la evaluación de los tratados
internacionales vigentes. Incorporar además
las diferentes dimensiones del fenómeno de
las drogas, pero con su especificidad, e invertir
los recursos en programas dirigidos al individuo y a programas de desarrollo.
Esta intervención global sobre drogas
implica también rescatar el concepto de seguridad humana frente al de seguridad nacional,
donde el punto de referencia sea el individuo
y sus comunidades, en lugar del territorio
o los gobiernos y contemplar situaciones
relacionadas con la gobernabilidad, la participación democrática, la pobreza, el desarrollo
y los problemas de salud y educación, todo
vinculado al negocio de las drogas y a otros
problemas de cada país.
Revista Española
de
Drogodependencias
349
Globalización, drogas y derechos humanos
social. En este sentido, si se asume la importancia de la salud de todas las personas, habrá
que disponer de recursos que faciliten no
sólo la prevención del abuso de drogas sino
también la inserción de los dependientes en
la comunidad con dispositivos que permitan
mantener o reconstruir los lazos sociales,
lugares que posibiliten la autonomía de las
personas y su capacidad de gestionar los
problemas a los que tienen que enfrentarse
en su relación con las drogas.
Habrá que superar el planteamiento determinista pues, como señala Klaue (1999), limita
gravemente cualquier esperanza terapéutica.
Entiende que una vez que un consumidor ha
tomado una droga peligrosa éste quedará enganchado por ésta con pocas posibilidades de
volver a tener el control. Supone también que
una política social que propugna la prohibición
total, es la mejor respuesta a la cuestión de
las drogas, ya que el individuo es ser pasivo e
indefenso ante la “droga”.
En esta perspectiva, es interesante la propuesta de “una ética para la vida” de Bauman
quien recalca en este sentido: “Imaginar la
posibilidad de otra forma de convivencia no
es el fuerte en nuestro mundo de utopías
privatizadas, conocido por su inclinación a reconocer las pérdidas cuando ya se produjeron
y a sustituir la administración de la crisis por
elucubraciones políticas. Este mundo nuestro
es menos capaz, todavía, de reunir la voluntad
y la decisión necesarias para hacer realidad
cualquier alternativa a «más de lo mismo».
La normalización legal de todas las drogas
resulta una medida racional encaminada a
resolver aquellos problemas que escapan a
los estrictamente derivados de su consumo,
como son la delincuencia o la inseguridad
ciudadana, la adulteración de las drogas
ilegales con el consiguiente aumento de
350
Revista Española
de
Drogodependencias
enfermedades y muertes, su elevado coste,
las connotaciones mafiosas del comercio, el
desmesurado incremento de efectivos represivos, las cárceles repletas de toxicómanos, la
mitificación de estas sustancias, etc. Vivimos y
viviremos en una sociedad donde el consumo
y el consumismo son pilares que la sustenta.
Por eso tenemos que aprender a convivir
con las drogas.
La normalización de las drogas, permitiría
tratar sin imposiciones ni dramatismo de ningún tipo todo lo relacionado con las drogas,
en una búsqueda comprometida de la verdad,
más allá de los estereotipos, sin dejar de lado
las consecuencias negativas del mal uso de las
drogas. Este tratamiento normalizado de las
drogas, favorecería no sólo la recuperación
de los que tienen problemas por consumo
y su inserción social, al no estar marginados
en la sociedad, sino también su prevención, a
través de acciones educativas coherentes con
la cuestión de las drogas y siempre dentro
del respeto a los derechos humanos de las
personas.
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Drogodependencias
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352
Revista Española
de
Drogodependencias
30 (3 y 4) 2005
Originales
Fuentes de información sobre drogodependencias
en España: una visión histórica.
José del Val Carrasco
Centro de Información y Documentación de la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas
Resumen
Un elevado número de profesionales sitúan la adicción a las drogas como objeto de su
análisis. Obligados a actualizar permanentemente sus conocimientos para la correcta
ejecución de las actuaciones en las que participan, se encuentran con el problema básico
de acceder a un ingente volumen de documentación.Y para ello cuentan con muy poco
tiempo disponible. De ahí la necesidad de acudir a las diversas fuentes de información
sobre drogodependencias: Centros de documentación y bibliotecas, páginas web, y revistas científicas y bases de datos bibliográficas.
Palabras Clave
Fuentes documentales, Centros de documentación, Internet.
Summary
Nowadays, there are a great number of skilled researchers considering drug addiction as
a main point to be analysed in depth. In fact, they feel obliged to a never-ending updating
process to work properly and professionally within the projects they are linked to; the
reason is the high volume of documentation available in relation to this subject. And,
what is worse, they have very little spare time. That is why there is an important need
to access the different sources of information on drug addiction, that is, Documentation
centres and Libraries, Websites, Scientific journals and Bibliographic databases.
Key Words
Documental sources, Documentation centers, Internet
Correspondencia a:
José del Val Carrasco, Centro de Documentación e Información. Plan Nacional sobre Drogas.
Dirección. C/ Recoletos, 22. 28071 Madrid. E-mail: [email protected]
30(3(3yy4)4)2005
353-366. 2005
30
Revista Española
de
Drogodependencias
353
Fuentes de información sobre drogodependencias en España: una visión histórica.
Résumé
Un grand numéro de professionnels placent les drogues comme l’objet de son analyse.
Lié pour mettre à jour de manière permanente son leurs connaissances pour l’exécution
correcte du fonctionnement dans lequel ils participent, ils rencontrent le problème de
base d’acceptation à un énorme volume de documentation. Et pour cela ils comptent sur
un peu de temps disponible. De là le besoin de venir aux sources diverses d’informations
sur toxicomanies: les Centres de documentation et bibliothèques, pages Web et magazines
scientifiques et les bases bibliographiques d’informations.
Most Clé
Internet, nouvelles technologies, web, email, téléphone cellulaire, www
Un elevado número de disciplinas académicas y, por ende, de profesionales, sitúan
la adicción a las drogas como objeto de
su análisis: médicos, psicólogos, psiquiatras,
educadores, trabajadores sociales, profesores
y estudiantes universitarios, enfermeros, sociólogos, farmacéuticos, periodistas, juristas,
criminólogos…, sin olvidar, por otra parte, la
demanda de información y/o documentación
que formulan ciudadanos interesados en el
ámbito de las toxicomanías.
Nos encontramos ante colectivos de especialistas volcados en su trabajo cotidiano que,
obligados a actualizar permanentemente sus
conocimientos para la correcta ejecución de
las actuaciones en las que participan, se encuentran con el problema básico de acceder
a un ingente volumen de documentación, que
se halla dispersa en múltiples fuentes y que en
muchos casos carece de suficiente relevancia.
Y para ello cuentan con muy poco tiempo
disponible.
Además, la realización de búsquedas bibliográficas sistemáticas y la obtención de los
documentos de nuestro interés (bien originales o fotocopias) aún exige desplazamientos
físicos a distintos centros de documentación
y bibliotecas situados, en muchas ocasiones,
fuera del lugar de residencia.Y, en el mejor de
354
Revista Española
de
Drogodependencias
los casos, se trata de bibliotecas no especializadas en drogodependencias (mayoritariamente
de carácter universitario), centradas en una
determinada disciplina.
Incluso cuando es posible formular dichas
búsquedas en bases de datos disponibles en
CD-ROM o en direcciones de Internet, éstas
o no están actualizadas o exigen algunos conocimientos informáticos o documentales a la
hora de formular una estrategia de búsqueda
exitosa que concluya con la obtención de los
documentos más relevantes sobre el tema
concreto en el que se está interesado.
De ahí la necesidad de acudir a diversas
fuentes de información sobre drogodependencias, siendo las principales: Centros de
documentación y bibliotecas, páginas web,
y revistas científicas y bases de datos bibliográficas.
1.LOS CENTROS DE
DOCUMENTACIÓN
ESPECIALIZADOS EN
ADICCIONES
Se crean para que los profesionales que
actúan en este ámbito de la realidad puedan
formular y satisfacer con exhaustividad sus ne-
30 (3 y 4) 2005
José del Val Carrasco
cesidades documentales, con el consiguiente
ahorro de un tiempo del que normalmente
no disponen.
A finales de la década de los 60 se fundan
en Europa occidental los primeros centros de
documentación sobre drogas con el carácter
multidisciplinar descrito: el ISDD (Institute for
the Study of Drug Dependence), en el Reino
Unido, y el NIAD (Netherlands Institute for
Alcohol and Drugs), en Holanda. A lo largo
de los años 70 van creándose, según este
modelo, otros centros de documentación en
Norteamérica y Europa.
En España, la creación de estos centros
de documentación es mucho más tardía. El
primero en constituirse como tal es el de la
Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas -DGPNSD-, en julio de
1986 (el Real Decreto 1677/1985, de 11 de
septiembre, de Coordinación Interministerial
para la ejecución del Plan Nacional sobre
Drogas, establecía en su art. 5.f), como una
de las funciones del Gabinete Técnico -órgano
de apoyo del Delegado del Gobierno-, la de
«desarrollar servicios de Documentación»).
1.1. Centro de Documentación
e Información del Plan
Nacional sobre Drogas
Su pertenencia a la Administración Central
del Estado (Ministerio de Sanidad y Consumo) le permite situarse como centro de
documentación e información de referencia
sobre drogodependencias a nivel nacional,
dado que dispone de una situación privilegiada
para la localización y recopilación de la documentación relativa a las drogodependencias,
caracterizada por su dispersión dado que
tiene su origen en muy diversos ámbitos: Administraciones públicas (central, autonómica y
30 (3 y 4) 2005
local), Universidades, fundaciones privadas y
organizaciones no gubernamentales (ONG’s),
organismos extranjeros de carácter nacional,
organismos internacionales, editoriales privadas…
Dado que la DGPNSD es un organismo
de la Administración Central, con sede en
la ciudad de Madrid, ha decidido realizar un
esfuerzo para acercar y hacer accesible un
cúmulo de información y documentación a
una amplia diversidad de usuarios, al margen
de la mayor o menor proximidad geográfica
de éstos. Por ello ha apostado seriamente por
las nuevas tecnologías de la información, dado
sus innegables virtualidades. Para no primar las
consultas de documentación y/o información
de aquellas personas que pueden personarse
en la sede de la Delegación del Gobierno en
Madrid, se opta por permitir realizar éstas
indistintamente a través de correo postal, fax
o correo electrónico ([email protected])
o desde cualquier lugar de la página web de la
DGPNSD (www.msc.es/pnd/index.htm).
Sus fondos bibliográficos, abarcan documentación sobre todo tipo de sustancias
adictivas, tanto las «legales» (tabaco y alcohol)
como las «ilegales» (cannabis, opiáceos, cocaína, drogas de síntesis...), así como las políticas
gubernamentales, tanto de España como
de otros países (principalmente de Europa
Occidental e Iberoamérica), en relación con
la prevención, tratamiento y asistencia, reinserción social, etc. de las drogodependencias.
También cuenta con documentación sobre
la actividad desarrollada por los Organismos
internacionales competentes en esta materia:
Naciones Unidas, Unión Europea, Consejo de
Europa, etc.
La tipología de los documentos incluidos en
Revista Española
de
Drogodependencias
355
Fuentes de información sobre drogodependencias en España: una visión histórica.
su fondo es muy variada. En la labor de recopilación de documentación, el Centro posee,
en primera instancia, una amplia colección
de revistas científicas específicas de drogodependencias, actualizada permanentemente,
entre otras: Adicciones, Addiction; Addiction
Abstracts; Addictive Behaviors; The American
Journal of Drug and Alcohol Abuse; American
Journal on Addictions...
Además, el fondo o depósito bibliográfico
del Centro se nutre de todas aquellas monografías relativas a las adicciones de las que
se tiene noticia (obtenidas bien por compra,
por intercambio con otras instituciones, o por
donación), así como por la «literatura gris»
(documentos no editados: informes, dictámenes…) y los folletos que por su condición de
centro de documentación de referencia en
España recibe de muy distintas procedencias.
Debido a la creciente importancia de los materiales audiovisuales, recopila también todos
aquellos vídeos y CD-ROM cuya temática está
relacionada con las drogodependencias.
Todos sus servicios sean gratuitos: realización de búsquedas bibliográficas, reprografía,
envíos postales, resolución de las consultas de
información…
Acceso a su base de datos bibliográfica (de
más de 20000 referencias) y a sus últimos
boletines trimestrales de documentación
desde la página web: www.msc.es/pnd/centro/index.htm
Su dirección es: C/ Recoletos, 28071 Madrid. Teléfono: 91 8226100. Fax: 91 8226090.
E-mail: [email protected].
1.2. Otros centros de
documentación y bibliotecas
Tras la creación del centro de documentación del Plan Nacional sobre Drogas, van
356
Revista Española
de
Drogodependencias
surgiendo a lo largo del territorio nacional
otros centros que pueden clasificarse de
acuerdo a la siguiente tipología:
1.2.1. Algunos Planes autonómicos sobre Drogas
creen oportuna la creación de centros de
documentación específicos:
· En 1987 se crea el Centro Andaluz de Documentación sobre Drogodependencias
como medio para suministrar información
a los profesionales del Plan Andaluz sobre
Drogas, profesionales que trabajan en el
ámbito de las drogodependencias y ciudadanos en general. Tiene como principal
objetivo el de facilitar información sobre
sustancias y conductas adictivas y así
contribuir a incrementar la eficacia de las
intervenciones preventivas, asistenciales y
de integración social que se desarrollen en
Andalucía. Elabora con carácter cuatrimestral un Boletín de documentación.
Su dirección es: Avda. Hytasa, nº 14, Edificio
Junta de Andalucía, 41006 Sevilla.Teléfono:
95 5048326. Fax: 95 5048346. E-mail: [email protected].
· En 1992 el Centro de Documentación de
Drogodependencias del País Vasco nace
como una sección del preexistente SIIS
Centro de Documentación y Estudios,
especializado en el ámbito de los servicios
sociales. Durante estos 13 últimos años ha
reunido más de 28000 documentos relativos al fenómeno de las drogodependencias, con un ritmo anual de 2000 nuevas
referencias. Elabora con carácter mensual
un Boletín de documentación.
Su dirección es: C/ Reina Regente, 5 bajo,
20003 Donostia-San Sebastián. Teléfono:
943 423656. Fax: 943 293007. E-mail: do-
30 (3 y 4) 2005
José del Val Carrasco
[email protected]. Página web: www.
siis.net/
· En 2003 se crea el Centro de Documentación sobre Drogas y Otros Trastornos
Adictivos (Agencia Antidroga de la Comunidad de Madrid) a partir de los fondos
bibliográficos preexistentes del Centro de
Documentación de la Fundación de Ayuda
contra la Drogadicción (FAD). Acceso sus
boletines quincenales de documentación
desde la página web: www.madrid.org/
web_agencia_antidroga/biblioydoc/ffbiblioydoc.htm.
Su dirección es: C/ Castelló 123, 28006
Madrid. Teléfono 91 5900046. Fax: 91
5900048. E-mail: docudrogas@docudrogas.
e.telefonica.es.
· En 2004 se crea el Centro de Documentación sobre Drogodependencias y Otros
Trastornos Adictivos “Dr. Emilio Bogani
Miquel” como resultado de la colaboración entre la Consejería de Sanidad de
la Generalitat Valenciana, la Concejalía de
Sanidad y Consumo del Ayuntamiento de
Valencia y el Instituto de Historia de la
Ciencia y la Documentación “López-Piñero” (Universidad de Valencia – CSIC). Su
objetivo es recopilar y facilitar el acceso a
documentación específica en drogodependencias y otros trastornos adictivos tanto
a los profesionales que trabajan en este
campo, como a la población general, así
como orientar y prestar apoyo a aquellos
profesionales que soliciten información
en este ámbito. Su fondo documental
está compuesto por el proveniente de la
Asociación Drogalcohol (anterior al año
1993), la Biblioteca personal del Dr. Emilio
Bogani y del recibido en el Ayuntamiento
de Valencia por donación, suscripción o in-
30 (3 y 4) 2005
tercambio gratuito. En la actualidad su base
de datos bibliográfica cuenta con más de
30000 documentos relativos al fenómeno
de las drogodependencias.
Su dirección es: C/ Navarro Sangrán 4
bajo. 46004 Valencia.Teléfono: 96 3525478,
extensión 2006. Fax: 96 3981808. E-mail:
[email protected]. Página web: www.
cendocbogani.org/
1.2.2. Bibliotecas del ámbito de las ciencias de la salud
con un importante fondo de documentación
relativa a las adicciones, entre las que destaca:
· Biblioteca del Departamento de Salud de la
Generalidad de Cataluña (especializada en
temas de salud pública y gestión sanitaria).
Creada en el año 1979, cuenta con un
importante número de documentos sobre
alcohol, tabaco y otras drogas.
Su dirección es: Travessera de les Corts,
131-159. 08028 Barcelona. Teléfono: 93
227 29 39. Fax: 93 227 29 90. E-mail:
[email protected]. Página web:
http://www.gencat.net/salut/depsan/units/
sanitat/html/ca/biblioteca/index.html
1.2.3. Las entidades privadas sin ánimo de
lucro y Organizaciones No Gubernamentales que intervienen en drogodependencias
carecen centros de documentación propios
(normalmente disponen de meros depósitos
de libros y revistas que pueden ser consultadas por sus miembros, y son atendidas por
personal no especializado) como es el caso
de la Federación Nacional de Alcohólicos
Rehabilitados de España (FARE) o Proyecto
Hombre.
La debilidad financiera de muchas de las
ONGs que intervienen en el ámbito de las
adicciones explica que los escasos centros de
documentación propios, creados para el mejor
Revista Española
de
Drogodependencias
357
Fuentes de información sobre drogodependencias en España: una visión histórica.
cumplimiento de sus objetivos, hayan dejado
de ser gestionados por dichas ONGs con el
paso del tiempo: así el creado en 1988 por la
Fundación de Ayuda contra la Drogadicción
–FAD-, tras perder la financiación de la Obra
Social de Caja Madrid, ha pasado en 2003 a
ser gestionado por la Agencia Antidroga de
la Comunidad de Madrid, el creado en 1991
en Valencia por la Asociación Drogalcohol
(más tarde denominada Asociación Española
de Estudio en Drogodependencias -AESED-)
ha pasado en 2004 a ser gestionado en colaboración por varias instituciones públicas, y el
Centro de Documentación especializado en
prevención del abuso de drogas creado por
Idea-Prevención en 1995, tras su desaparición
en 2004, ha cedido sus fondos bibliográficos
al Centro de Documentación e Información
de la Delegación del Gobierno para el Plan
Nacional sobre Drogas.
2. PÁGINAS WEB
Lo que tecnológicamente conocemos por
Internet (la triple www) empezó a funcionar
hace sólo once años, en 1994, y en este período ya ha reunido a unos mil millones de
usuarios en todo el planeta. Ninguna innovación tecnológica o social ha tenido nunca un
crecimiento tan espectacular. Hasta tal punto
que los últimos informes del Proyecto de las
Naciones Unidas sobre el Desarrollo (PNUD)
incluye como uno de los indicadores para
calcular el desarrollo humano de cada país el
número de accesos a Internet por cada mil
habitantes.
Internet tiene como gran virtualidad la
de permitirnos acceder de forma inmediata
(desde nuestro domicilio, Universidad, lugar
de trabajo…) a una ingente cantidad de
documentación y/o información generada
358
Revista Española
de
Drogodependencias
en cualquier país del mundo sin necesidad
de desplazarnos a bibliotecas, centros de
documentación…
Pero, por otra parte, hay más información
en Internet (incluso de un tema tan concreto
como las drogodependencias) de la que podemos consultar aun dedicando muchas horas
al día a localizarla y gestionarla. Basta con formular una búsqueda en Google, el buscador
más popular, sobre “drogas” y obtenemos más
de 2.160.000 páginas en español.
Además, en muchas ocasiones es el azar
quien nos permite encontrar documentación
relevante que nos interesa pero que no buscábamos, y que sin la red nunca hubiéramos
encontrado, mientras que frecuentemente nos
sentimos frustrados dado que nos resulta muy
difícil hallar aquello que estamos buscando
(y ello a pesar de la aparición de buscadores
cada vez más potentes -sistemas automáticos
de recuperación de contenidos de sitios web
con base de datos propia-, metabuscadores
-motores de búsqueda que no disponen de
base de datos propia, utilizando las de otros
buscadores donde efectúan la consulta de
forma simultánea- y buscadores temáticos).
De ahí la necesidad de realizar clasificaciones de páginas web, como la presente, en la
que se incluyen 91 direcciones de Internet
en España, ordenadas alfabéticamente, con
contenidos relevantes en el ámbito de las
adicciones:
Clasificación por tipología del
sitio web:
- Centro asistencial privado: 5, 16, 45, 55, 56,
58.
- Centro de investigación: 19, 57, 59, 63, 76,
86.
30 (3 y 4) 2005
José del Val Carrasco
NOMBREDIRECCION
1. ABIERTO HASTA EL AMANECER
http://www.abiertohastaelamanecer.com/
2. ACCIÓN FAMILIAR
http://www.accionfamiliar.org/
3. AGENCIA ANTIDROGA DE LA COMUNIDAD DE MADRID
http://www.madrid.org/web_agencia_antidroga/index.htm
4. ALDAMA
http://www.aldama.org/
5. ANAT
http://www.dragonet.es/users/anat/
6. ASOCIACIÓN ANDALUZA DE PROFESIONALES EN DROGODEPENDENCIAS (APRODA)
7. ASOCIACIÓN ANTIDROGA VIEIRO
http://www.vieiro.org
8. ASOCIACIÓN BETEL
http://www.betel.org/
9. ASOCIACIÓN BIENESTAR Y DESARROLLO (ABD)
http://www.abd-ong.org/ http://www.aproda.com/
10. ASOCIACIÓN DE AYUDA A FAMILIAS DE DROGODEPENDIENTES (ADAFAD) http://www.adafad.org/
11. ASOCIACIÓN DE COOPERACIÓN JUVENIL SAN MIGUEL
http://www.asociacionsanmiguel.org/
12. ASOCIACIÓN DE DEPORTISTAS CONTRA LA DROGA (ADCD) http://www.adcd.org/
13. ASOCIACIÓN DE ENTIDADES DE CENTROS DE DÍA DE
DEPENDENCIAS (ASECEDI)
http://www.asecedi.org/index.htm
14. ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE ESTUDIOS EN
DROGODEPENDENCIAS (AESED)
http://www.aesed.com/
15. ASOCIACIÓN PATIM
http://www.patim.org/
16. CAT BARCELONA, CENTRE D’ASSISTENCIA TOXICOMANIAS http://www.cat-barcelona.com
17. CENTRO DE DOCUMENTACION SOBRE
DROGODEPENDENCIAS Y OTROS TRASTORNOS ADICTIVOS
“DR. EMILIO BOGANI MIQUEL”
http://www.cendocbogani.org/
18. CENTRO DE INVESTIGACIONES SOCIOLÓGICAS (CIS)
http://www.cis.es/
19. CENTRO NACIONAL DE EPIDEMIOLOGÍA (CNE). VIGILANCIA
EPIDEMIOLÓGICA DEL SIDA Y VIH EN ESPAÑA
http://cne.isciii.es/htdocs/sida/sidavih.htm
20. CENTRO PROVINCIAL DE DROGODEPENDENCIAS DE
CÁDIZ
http://www.dipucadiz.es/cpdcadiz/
21. COLECTIVO LA HUERTECICA
http://www.lahuertecica.com
22. COMISIONADO PARA LA DROGA DE LA JUNTA
DE ANDALUCÍA
http://www.juntadeandalucia.es/igualdadybienestarsocial/
23. COMITÉ NACIONAL DE PREVENCIÓN DEL TABAQUISMO (CNPT) http://www.cnpt.es/
24. COMUNICACIÓN E INFORMACIÓN COMUNITARIA
SOBRE DROGAS (GOBIERNO DE LA RIOJA)
30 (3 y 4) 2005
http://www.larioja.org/infodrogas/
Revista Española
de
Drogodependencias
359
Fuentes de información sobre drogodependencias en España: una visión histórica.
NOMBREDIRECCION
25. CONDUCTAS ADICTIVAS
http://www.conductasadictivas.org/
26. CONTROLA CLUB
http://www.controlaclub.com/
27. CRUZ ROJA ESPAÑOLA
http://www.cruzroja.es/
28. CSI-CSIF DE LA COMUNIDAD VALENCIANA
http://www.valencia.csi-csif.com/drogas/adicciones.htm
29. CUANDO TE PASAS NI TE ENTERAS
http://www.cuandotepasasniteenteras.com/
30. DEPARTAMENTO DE SANIDAD Y SEGURIDAD SOCIAL
DE LA GENERALITAT DE CATALUÑA
http://www.gencat.net/sanitat/depsan/units/sanitat/html/es/dir86/index.html
31. DIRECCIÓN DE DROGODEPENDENCIAS DEL GOBIERNO VASCO http://www.gizartegaiak.ej-gv.net
32. DIRECCIÓN GENERAL DE ATENCIÓN A LAS
DROGODEPENDENCIAS DE LA COMUNIDAD
AUTÓNOMA DE CANARIAS
http://www.gobiernodecanarias.org/sanidad/dgad/
33. DIRECCIÓN GENERAL DE DROGODEPENDENCIAS DE
LA COMUNIDAD AUTÓNOMA DE VALENCIA
http://www.tra.gva.es/espa/home/framedrogas.htm
34. DROGOMEDIA
http://www.drogomedia.com
35. EDEX KOLEKTIBOA. CENTRO DE RECURSOS
COMUNITARIOS
http://www.edex.es/
36. EDICIONES DOYMA
http://www.doyma.es/
37. EL JUEGO DE LA VIDA
http://www.soloeninternet.com/
38. EN COMPAÑÍA: PROGRAMA DE APOYO A LA
INTERVENCIÓN SANITARIA PARA EL TRATAMIENTO DEL TABAQUISMO
39. ENERGY CONTROL
http://www.atenciontabaquismo.com/
http://www.energycontrol.org/
40. FEDERACIÓN EXTREMEÑA DE ATENCIÓN AL
DROGODEPENDIENTE (FEXAD)
http://www.bme.es/fexad/
41. FEDERACIÓN NACIONAL DE ALCOHÓLICOS
REHABILITADOS DE ESPAÑA (FARE)
http://www.faare.org/
42. FORO SOBRE DROGODEPENDENCIAS
http://forofad.fad.es/
43. FUNDACIÓN ANDALUZA PARA LA ATENCIÓN A LAS
DROGODEPENDENCIAS (FADA)
http://www.juntadeandalucia.es/fundaciondrogodependencias/
44. FUNDACIÓN DE AYUDA CONTRA LA DROGADICCIÓN (FAD)http://www.fad.es/
360
45. FUNDACIÓN INSTITUTO SPIRAL
http://www.institutospiral.com/
46. FUNDACIÓN MARBELLA SOLIDARIA
http://www.fundacionmarbella.org/
Revista Española
de
Drogodependencias
30 (3 y 4) 2005
José del Val Carrasco
NOMBREDIRECCION
47. FUNDACIÓN PARA EL ANÁLISIS, EL ESTUDIO Y LA
PREVENCIÓN DE LAS ADICCIONES (AEPA)
http://www.fundacionaepa.org/
48. FUNDACIÓN SALUD Y COMUNIDAD
http://www.fsyc.org/
49. FUNDACIÓN SECRETARIADO GENERAL
GITANO. RED SASTIPEN
http://www.fsgg.org/sastipen/
50. FUNDACIÓN VIVIR SIN DROGAS
http://www.fvsd.org/
51. GIRASOL FUNDACIÓN
http://www.girasolfundacion.es/
52. GRUPO IGIA
http://www.grupigia.com
53. GRUPO INTERDISCIPLINAR SOBRE DROGAS (GID)
http://www.grupogid.org/
54. GUÍA PARA REDUCIR LOS RIESGOS ASOCIADOS AL USO DE DROGAS
55. INSTITUTO BITÁCORA
http://www.euskalnet.net/osasunekintza/
http://www.institutobitacora.org/
56. INSTITUTO DE FORMACIÓN Y TRATAMIENTO DEL
ALCOHOLISMO Y OTRAS DROGODEPENDENCIAS (ITAD)
http://www.irinfo.es/itad/
57. INSTITUTO DE INVESTIGACIÓN DE DROGODEPENDENCIAS (INID)
http://inid.umh.es/
58. INSTITUTO DETOX
http://www.indetox.net/
59. INSTITUTO DEUSTO DE DROGODEPENDENCIAS (IDD)
http://www.idd.deusto.es/
60. INSTITUTO PARA EL ESTUDIO DE LAS ADICCIONES (IEA)
http://www.lasdrogas.info/
61. KOLOKON.COM PORTUGALETE
http://www.kolokon.com
62. LA AVENTURA DE LA VIDA (OSASUNKUME)
http://www.laaventuradelavida.net/es/default.shtml
63. LABORATORIO FARMACÉUTICO ZAMBON
http://www.zambon.es/areasterapeuticas/04drogodependencias/index.htm
64. LAS DROGAS.NET: DIRECTORIO DE RECURSOS
EN INTERNET SOBRE DROGODEPENDENCIAS Y ADICCIONES http://lasdrogas.net
65. METROPOLI.INFO
http://www.metropoli.info
66. MINISTERIO DE SANIDAD Y CONSUMO - VIH/SIDA
http://www.msc.es/Diseno/informacionProfesional/profesional_prevencion.htm
67. NARCÓTICOS ANÓNIMOS ESPAÑA
http://www.na-esp.org/
68. NIÑOS Y PADRES CONTRA LA DROGA (NYPACOLD)
http://www.nypacold.com
69. NUEVA FRONTERA
http://www.nuevafrontera.org/
70. OBSERVATORIO MALAGUEÑO DE ADICCIONES DE LA
ASOCIACIÓN CÍVICA PARA LA PREVENCIÓN
http://www.omaweb.org
71. PLAN MUNICIPAL CONTRA LAS DROGAS (MADRID)
ServMuni/servsociales/drogas/html/indexcal.html
http://www.munimadrid.es/principal/ayuntamiento/
72. PLAN MUNICIPAL DE DROGODEPENDENCIAS Y OTROS
30 (3 y 4) 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
361
Fuentes de información sobre drogodependencias en España: una visión histórica.
NOMBREDIRECCION
TRASTORNOS ADICTIVOS (VALENCIA)
http://www.valencia.es/pmd
73. PLAN NACIONAL SOBRE DROGAS
http://www.msc.es/pnd/index.htm
74. PLAN PROVINCIAL DE DROGAS DE LA DIPUTACIÓN
DE VALLADOLID
http://www.diputaciondevalladolid.es/accion_social/ppd/ppd/index.htm
75. PLAN REGIONAL DE DROGAS DE LA COMUNIDAD DE
CASTILLA LA MANCHA
http://www.jccm.es/sanidad/salud/index.htm
76. PROGRAMA «ALCOHOL,COGE TU PUNTO»
http://www.ub.es/sacu/alcohol/alcoholcast.html
77. PROGRAMA DISCOVER
http://www.discover.edex.es/
78. PROYECTO AMIGÓ CASTELLÓN
http://www.proyectoamigo.org
79. PROYECTO HOMBRE
http://www.proyectohombre.es
80. PUNTO OMEGA
http://www.puntomega.es/
81. RED IBEROAMERICANA DE ONG QUE TRABAJAN EN
DROGODEPENDENCIAS (RIOD)
http://www.riod.org/
82. SECRETARÍA TÉCNICA DE DROGODEPENDENCIAS DE LA
COMUNIDAD AUTÓNOMA DE EXTREMADURA
http://www.sobredrogas.info
83. SERVICIO INTERDISCIPLINAR DE ATENCIÓN A LAS
DROGODEPENDENCIAS (SIAD)
http://www.asociacionsiad.com/
84. SERVICIO PROVINCIAL DE DROGODEPENDENCIAS DE GRANADA
http://www.dipgra.es/spd/cuerpo_spd.htm
85. SOCIDROGALCOHOL, SOCIEDAD CIENTÍFICA ESPAÑOLA DE
ESTUDIOS SOBRE EL ALCOHOL, LAS TOXICOMANIAS Y
OTRAS DEPENDENCIAS
http://www.socidrogalcohol.org/
86. SOCIEDAD ESPAÑOLA DE INVESTIGACION SOBRE CANNABINOIDES (SEIC) http://www.ucm.es/info/seic-web/
87. SOCIEDAD ESPAÑOLA DE TOXICOMANÍAS (SET)
http://www.setox.org/
88. TARDIS: EL MUNDO DE LAS DROGAS
http://tardis.imsb.bcn.es/
89. TU PÁGINA DE OCIO, SINDROGAS.ES
http://www.sindrogas.es/
90. TU SALUD.COM
http://www.tusalud.com
91. UNIÓN ESPAÑOLA DE ASOCIACIONES Y ENTIDADES DE
ATENCIÓN AL DROGODEPENDIENTE (UNAD)
362
Revista Española
de
Drogodependencias
http://www.unad.org/
30 (3 y 4) 2005
José del Val Carrasco
- Empresa privada: 37, 77, 90.
- ONG/Fundación privada: 1, 2, 4, 6, 7, 8, 9,
10, 11, 12, 13, 14, 15, 21, 23, 26, 27, 29, 35,
38, 39, 40, 41, 42, 44, 47, 48, 49, 50, 51, 52,
53, 54, 60, 62, 64, 67, 68, 69, 70, 78, 79, 80,
81, 83, 85, 87, 91.
- Organismo oficial: 17, 18, 19, 66, 73, 89.
- Organismo oficial de carácter autonómico:
3, 22, 24, 30, 31, 32, 33, 34, 43, 65, 75, 82.
- Organismo oficial de carácter municipal: 46,
61, 71, 72, 88.
- Organismo oficial de carácter provincial: 20,
74, 84.
- Publicación periódica: 25, 36.
- Sindicato de trabajadores: 28.
A comienzos de 1996 no había en España
ninguna dirección de Internet específica sobre
drogodependencias, pese a la existencia de
numerosas intervenciones desde instituciones
tanto públicas como privadas en este ámbito
de actuación. Las primeras páginas web aparecieron en 1996: Idea-Prevención, Instituto para
el Estudio de las Adicciones (IEA), y Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre
Drogas. A las que se irían sumando en 1997
y 1998 las de la Fundación de Ayuda contra
la Drogadicción (FAD), la Coordinadora de
ONGs que intervienen en Drogodependencias, Edex, Socidrogalcohol, Comisionado para
la Droga de la Junta de Andalucía, Dirección
de Drogodependencias del Gobierno Vasco,
Fundación Vivir sin Drogas, Tardis...
La mayoría de las webs incluidas en la relación han surgido a partir del año 2000, creadas
fundamentalmente por Organizaciones no
Gubernamentales y fundaciones privadas sin
ánimo de lucro.
La variabilidad y volatilidad de los contenidos en Internet, a diferencia del texto impreso,
30 (3 y 4) 2005
dan a los recursos de la red un carácter de
provisionalidad que le resta utilidad y requiere
del usuario no sólo la localización de nuevos
contenidos de interés, sino también la visita
periódica de aquellos lugares que tiene seleccionados, dado que además de cambios
en el contenido de las páginas, se producen
igualmente cambios en la dirección en la que
están alojadas. Este último hecho, si bien no
se da con la misma frecuencia que en los primeros años de existencia de la red y afecta en
menor medida a las páginas más prestigiosas,
hace imprescindible revisar con frecuencia
las páginas web con contenidos relevantes
en adicciones.
Así, si comparamos la clasificación actual (91
páginas web) con la elaborada por el autor
en octubre de 2002 (es decir, en tan sólo dos
años y medio de diferencia), se aprecian los
siguientes cambios:
- Han aumentado un 25% con respecto
a las 73 recogidas entonces, entre otras:
Asociación de entidades de centros de
día de dependencias (Asecedi), Centro de
documentación sobre drogodependencias
y otros trastornos adictivos “Dr. Emilio Bogani Miquel”, Comunicación e información
comunitaria sobre drogas (Gobierno de La
Rioja), Drogomedia, Guía para reducir los
riesgos asociados al uso de drogas, Kolokon.com Portugalete, Servicio interdisciplinar de atención a las drogodependencias
(SIAD), etc.
- 18 direcciones cambian de dirección
URL (26 %): Comisionado para la Droga
de la Junta de Andalucía, Dirección de
Drogodependencias del Gobierno Vasco,
Dirección general de Drogodependencias
de la Comunidad Autónoma de Valencia,
Grupo Igia, Plan Nacional sobre Drogas...
- 8 desaparecen (11 %): Coordinadora
Revista Española
de
Drogodependencias
363
Fuentes de información sobre drogodependencias en España: una visión histórica.
de ONG que intervienen en drogodependencias, Deporte y Vida, ¿De verdad
sabes lo que te «metes»?, Idea-Prevención,
Itaca-España, Plan Riojano de Drogodependencia, Programa de prevención de
drogodependencias en centros educativos
de la Comunidad de Madrid, y RET. Revista
de toxicomanías.
La volatilidad es tan grande que incluso una
web especializada en el tema, “Directorio de
recursos en Internet sobre drogodependencias y adicciones” (http://lasdrogas.net), aún
incluye enlaces a páginas web que han dejado
de estar operativas en el último año: ¿De verdad sabes lo que te «metes»?, Itaca-España,
RET. Revista de toxicomanías...
3. REVISTAS CIENTÍFICAS
Y BASES DE DATOS
BIBLIOGRÁFICAS
3.1. Revistas científicas
Las revistas científicas constituyen el sistema
de difusión de la información de la actividad
científica más eficaz, tanto cuantitativa como
cualitativamente. Así, pueden considerarse la
fuente de información científica más utilizada
dada su periodicidad, la continua actualización de los temas abordados en los artículos
publicados, el aporte intelectual de autores
muy diversos, y la garantía de la calidad de los
contenidos (fruto de la selección realizada por
comités editoriales formado por expertos).
Una descripción exhaustiva de las principales revistas especializadas en drogodependencias excede el carácter sintético de este
artículo. No obstante, pueden destacarse las
siguientes publicaciones periódicas editadas
364
Revista Española
de
Drogodependencias
en España:
- Adicciones: nace el año 1989, como
iniciativa de la sociedad científica Socidrogalcohol. Con periodicidad trimestral, está
especializada en problemas de toxicomanías, alcoholismo y otro tipo de adicciones
(http://www.socidrogalcohol.org, acceso a
los resúmenes de los artículos publicados
en la revista desde 1998)
- Coloquios en drogodependencias: nace
en 1996, editada por el laboratorio
farmacéutico Zambom España (http://
www.zambon.es/areaster apeuticas/
04drogodependencias/01coloquios/
02seleccion/index.htm, acceso al texto de
los artículos publicados en los distintos
números de la revista)
- Conductas adictivas: revista de carácter
científico que se edita en formato electrónico. Su primer número es del año 2001.
Promovida por la Sociedad Española de
Toxicomanías –SET- (http://www.conductasadictivas.org/, acceso al texto de los artículos publicados en los distintos números
de la revista)
- Prevención del Tabaquismo: es el órgano
de difusión del Área de Tabaquismo de la
Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica –SEPAR-, se edita desde 1999
con periodicidad trimestral (http://www.
atenciontabaquismo.com/atenciontabaquismo/rev_prev_tab/index.html, acceso
al contenido íntegro de la revista)
- Revista Española de Drogodependencias,
editada por la Asociación Española de estudios en drogodependencias –AESED- con
una periodicidad trimestral (http://www.
aesed.com/, incluye el acceso a una parte
de los contenidos del último ejemplar de la
30 (3 y 4) 2005
José del Val Carrasco
revista, así como a un índice por autores de
los artículos publicados desde su creación
en 1976)
- Salud y drogas: editada desde el año 2001
por el Instituto de Investigación de Drogodependencias –INID-, de la Universidad
Miguel Hernández con una periodicidad
bianual (http://inid.umh.es/, acceso a texto
completo, desde la sección “Revista”, a
los artículos publicados en los distintos
números).
- Trastornos Adictivos: editada desde 1999,
con una periodicidad trimestral, es el órgano Oficial de la Sociedad Española de
Toxicomanías –SET-(http://www.doyma.es
-punto de acceso revistas-, incluye a texto
completo los artículos publicados desde su
creación).
Por otra parte no cabe olvidar que existe
una gran cantidad de prestigiosas revistas
científicas de temática diversa (medicina, psicología, psiquiatría, educación, sociología…)
en donde aparecen en ocasiones artículos
relevantes relativos a las drogodependencias:
Medicina Clínica, Revista Española de Salud
Pública, Revista de Estudios de Juventud…
3.2. Bases de datos bibliográficas
Además de las bases de datos bibliográficas
de los centros de documentación especializados en drogodependencias, existen otras
bases de datos de interés especializadas en
ciencias de la salud entre las que destacan:
- MEDLINE: es la fuente de información más
conocida y utilizada en medicina en todo el
mundo desde que hace años la National Library of Medicine (http://www.nlm.nih.gov),
el organismo público norteamericano que
la produce, permite su consulta de forma
gratuita. Incluye en la actualidad referencias
30 (3 y 4) 2005
de más de 4600 revistas internacionales, si
bien no incorpora los artículos de ninguna
revista científica española específica de
drogodependencias (http://www.ncbi.nlm.
nih.gov/entrez/query.fcgi?DB=pubmed)
- Índice Médico Español: es, desde 1964, el único repertorio nacional que recopila, analiza
y difunde los trabajos de investigación publicados en revistas biomédicas españolas
sobre todas las disciplinas básicas, las especialidades clínicas y las áreas relacionadas
con aspectos asistenciales, organizativos y
metodológicos de la medicina. Realizado
por el Instituto de Historia de la Ciencia
y Documentación López Piñero (Universidad de Valencia y Consejo Superior de
Investigaciones Científicas –CSIC-). La base
de datos IME es la versión automatizada
del repertorio Índice Médico Español, la
mayor base de datos bibliográfica sobre
publicaciones existente en ciencias de la
salud en español. La consulta a la base de
datos IME, que contiene más de 250.000
registros procedentes de 350 revistas
españolas (entre las que se incluyen las
más impor tantes en el ámbito de las
drogodependencias: Adicciones, Conductas adictivas, Prevención del Tabaquismo,
Revista Española de Drogodependencias y
Trastornos Adictivos) se realiza a través del
Unidad de Distribución de Bases de Datos
del Consejo Superior de Investigaciones
Científicas (CSIC). Más información en:
http://ime.uv.es/info/index.htm
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Álvarez, F.J. y Aleixandre, R. (2001). Bases
documentales en drogodependencias. En:
Giner, F. y Cervera, G. (coord.). Trastornos
adictivos. Drogodependencias: clínica y traRevista Española
de
Drogodependencias
365
Fuentes de información sobre drogodependencias en España: una visión histórica.
tamientos psicobiológicos (85-113). Valencia:
Direcció General de Drogodèpendencies de
la Generalitat Valenciana.
Beneit, J.V.; Carabantes, D. y García, C.
(2003). Drogodependencias e Internet: utilidades prácticas y guía de vaoración de recursos
web en español sobre drogodependencias.
Madrid: Agencia Antidroga.
Del Val, J. y Martín-Pinillos, F. (2003). La
respuesta de la sociedad ante el problema
de las drogas. Fuentes de información en
drogodependencias. En: Lorenzo, P.; Ladero,
J.M.; Leza, J.C. y Lizasoain, I. Drogodependencias: Farmacología, Patología, Psicología,
Legislación (587-608). Madrid: Editorial Médica
Panamericana.
Marina, P.A. (1996). La información sobre
drogas en Internet. Idea-Prevención, 12, 6373.
366
Revista Española
de
Drogodependencias
30 (3 y 4) 2005
Originales
La prevención del consumo de drogas en España:
evolución y propuestas para la reflexión.
Carlos Alonso Sanz
Servicio Sociosanitario. Consejería de Sanidad. Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Resumen
El presente trabajo hace una revisión de la prevención realizada en España en los últimos
años, con algunas referencias a las influencias recibidas de otros países y con especial
atención a la efectividad de las actuaciones puestas en marcha.
Se concluye que, aunque la prevención ha avanzado notablemente en los últimos años,
el conocimiento acumulado es todavía claramente insuficiente. Por ello se subraya la
necesidad de que los profesionales dedicados a la prevención mantengan una actitud
crítica respecto a las intervenciones realizadas y que se reclame un impulso decidido a
la investigación en este campo. Igualmente se sugiere la necesidad de que la prevención
se haga más participativa y de implicar a la comunidad en su diseño y ejecución.
Palabras Clave
España, evolución, prevención, consumo de drogas, propuestas, reflexión, actitud crítica,
intervenciones.
Summary
The present work does a revision of the prevention made in Spain in the last years, with
some references to the received influences of other countries and with special attention
to the effectiveness of the performances beginning. One concludes that, although the
prevention has advanced in the last years remarkably, the accumulated knowledge is
still clearly insufficient. For that reason the necessity that is emphasized the professionals dedicated to the prevention maintain a critical attitude with respect to the made
interventions and that an impulse decided to the investigation in this field calls to each
other. Also the necessity that is suggested the prevention becomes more participativa
and to imply to the community in its design and execution.
Key Words
Spain, evolution, prevention, consumption, proposals of reflection, critical attitude, interventions.
Correspondencia a:
Servicio Sociosanitario. Consejería de Sanidad. Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Avda. de
Francia, 4. 45071. TOLEDO. Tno.: 925 267753. [email protected]
3030(3(3y y4)4)2005
367-381. 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
367
La prevención del consumo de drogas en España: evolución y propuestas para la reflexión.
Résumé
Le présent travail fait une révision de la prévention effectuée en Espagne durant les
dernières années, avec quelques références aux influences reçues d’autres pays et avec
une attention spéciale à l’efficacité des activités mises en marche. On conclut que, bien
que la prévention ait notamment avancé durant les dernières années, la connaissance
accumulée est encore clairement insuffisante. Pour cela on souligne la nécessité que les
professionnels consacrés à la prévention maintiennent une attitude critique en ce qui
concerne les interventions effectuées et qu’on réclame un élan décidé à la recherche
dans ce domaine. On suggère également la nécessité que la prévention soit rendue plus
participante et d’impliquer à la Communauté dans sa conception et exécution.
Most Clé
L’Espagne, l’évolution, la prévention, consommation de drogues, proposées de réflexion,
attitude critique, interventions.
INTRODUCCIÓN.
En las dos últimas décadas se ha avanzado
notablemente en materia de prevención del
consumo de drogas. Aunque esta afirmación
inicial -como después veremos- no debe
hacernos caer en el optimismo, es innegable
que las investigaciones realizadas, fundamentalmente en Estados Unidos, y las iniciativas
y programas puestos en marcha nos han
permitido acumular una gran cantidad de conocimiento y experiencia de innegable valor.
Esta situación contrasta con la ignorancia
y el desconcierto con que se afrontaba este
problema en los primeros años de la década
de los 80. Posiblemente por este motivo, la
percepción que el conjunto de la población
tiene de la utilidad de las medidas preventivas
actualmente en marcha es muy alta, si bien
es cierto que tiende a disminuir. Por ejemplo,
según los datos de las sucesivas Encuestas
Domiciliarias realizadas en España, el 92,1 %
de las personas de 15 a 64 años consideraban
que la educación sobre drogas en las escuelas
es muy importante para resolver el problema
de las drogas ilegales. Aunque este porcentaje
ha bajado al 88,8 % en 2001, sigue siendo muy
368
Revista Española
de
Drogodependencias
importante y es la medida más respaldada por
la población (Observatorio Español sobre
Drogas, 2003)
Similares conclusiones pueden señalarse
en relación a las campañas publicitarias sobre
los riesgos de las drogas, respaldadas por el
80,5 % de los sujetos en 1997 y por el 76,6
% en 2001.
Es posible que la elevada valoración de
estos tipos de medidas preventivas encuentre
su justificación en dos creencias que parecen
apoyarse y confirmarse mutuamente. Por un
lado, la disminución de la alarma social asociada al consumo de drogas ilegales que tuvo
lugar en los años 70 y 80 y que dio lugar a
una enorme proliferación de actuaciones con
ánimo preventivo cuyo efecto -probablemente- nunca podremos valorar con exactitud.
La reducción de los problemas asociados al
consumo de heroína ha llevado a muchos a
creer que el fenómeno de las drogas está bajo
control y que el consumo de estas sustancias
ha disminuido notablemente.
Paralelamente ha arraigado en el ámbito
estrictamente técnico la creencia -quizá
30 (3 y 4) 2005
Carlos Alonso Sanz
transmitida también a la población- de que es
posible una prevención eficaz con un esfuerzo
mínimo, generándose así un discurso esencialmente optimista en relación a las posibilidades
de las actuaciones preventivas en marcha.
para desarrollar nuevas formas de afrontar el
problema y para el sostenimiento de un esfuerzo investigador que permita avanzar hacia
intervenciones cada vez más efectivas.
Lamentablemente estas dos creencias son
esencialmente falsas y están configurando
una percepción social de la prevención y de
la situación del consumo de drogas que poco
tiene que ver con la realidad. Por un lado, los
datos muestran que el consumo de drogas,
lejos de disminuir, se convierte cada día en un
problema más grave y, por otro lado, que los
programas preventivos no son tan efectivos
como nos gustaría creer.
ALGUNOS APUNTES
HISTÓRICOS
Partiendo de este análisis inicial, a lo largo
de este artículo se establecen tres consideraciones sobre la prevención en España:
• En primer lugar, que sabemos muy poco
sobre la efectividad de las intervenciones
preventivas que realizamos y que no hay
razones para mantener el optimismo reinante en círculos técnicos.
• En segundo lugar, que es preciso hacer una
revisión en profundidad de las actuaciones
preventivas.
• En tercer lugar que es imprescindible
introducir nuevas formas de plantear la
prevención y realizar una apuesta decidida
por la investigación en este campo. De lo
contrario, estamos condenados a repetir
hasta la saciedad actuaciones cuya utilidad
desconocemos.
Este planteamiento no pretende ser derrotista. Por el contrario: la prevención ha avanzado lo suficiente como para tomar conciencia
de sus propias carencias. Es precisamente
el reconocimiento de las grandes lagunas
que presenta nuestro conocimiento en este
campo lo que puede movilizar los recursos
30 (3 y 4) 2005
Para establecer la situación de la prevención en España y fijar algunas indicaciones
que permitan avanzar en el futuro conviene
hacer un pequeño repaso de la evolución de
la prevención en los últimos años.
Los primeros años: del
desconcierto a la
prevención indiscriminada.
En los años 70 y 80, marcados por los graves
problemas asociados al consumo de heroína
y por una alarma social creciente, se produjo
una enorme proliferación de actuaciones con
ánimo preventivo cuyo efecto -probablemente- nunca podremos valorar con exactitud.
Ya en 1985, cuando se publicó el primer
Plan Nacional sobre Drogas, la prevención
tenía un papel preferente y muchos de los
principios de actuación que allí se establecieron siguen estando aún vigentes: la necesidad
de no disociar drogas legales e ilegales, de
trabajar en medidas generales que permitan
reducir la marginación y mejorar las condiciones de vida de la población, la conveniencia
de que la prevención escolar se enmarque en
la educación para la salud o la necesidad de
que toda la sociedad mantenga un mensaje
coherente en relación a las drogas (Ministerio
de Sanidad y Consumo, 1985)
La llamada a la participación de los agentes
sociales dio lugar a una intensa y muchas
Revista Española
de
Drogodependencias
369
La prevención del consumo de drogas en España: evolución y propuestas para la reflexión.
veces desorganizada actividad en la que administraciones, asociaciones, afectados, particulares, etc, desarrollaron -con mejor o peor
fortuna- actuaciones centradas a menudo
en la información, los efectos -negativos- de
las drogas y en el recurso al miedo como
estrategia básica para promover el cambio
de conducta.
Paralelamente, sobre todo desde las instituciones, la prevención más oficial desarrollada
en el ámbito educativo se centró en la educación para la salud como estrategia global,
dando lugar a programas de carácter muy
general en el que sus diversos componentes
(educación afectivo-sexual, nutrición, higiene,
etc) convivían en régimen de igualdad y se
convertían a menudo en contenidos preferentes dentro de programas de prevención.
El impulso a la investigación y
los grandes programas de
prevención.
Durante la década de los 80 se desarrolló
en EE.UU. una intensa actividad investigadora.
Se pusieron en marcha los grandes programas,
especialmente los basados en el modelo de la
influencia social. El DARE, el LST, el STAR, etc,
son algunos de los más relevantes.
Aunque ello no se ha correspondido propiamente con un período de la prevención
en España, su influencia ha sido tan relevante
para el desarrollo de programas en nuestro
país que, inevitablemente, sus hallazgos y
sus resultados son una referencia necesaria
para valorar el estado de la prevención en
España.
El programa que mejores resultados ha
obtenido a través de los numerosos estudios
de evaluación realizados y el que ha ejercido
370
Revista Española
de
Drogodependencias
mayor influencia en la prevención realizada en
España es el programa LST (Life Skills Training).
Aplicado por Botvin, Baker, Dusenbury et al.
(1990) consta de 12 unidades que incluyen
información, toma de decisiones, influencia
de los medios de comunicación, cambio de
conducta autodirigido, manejo de ansiedad,
habilidades de comunicación, habilidades
sociales y asertividad.
La utilidad del enfoque de la prevención
desarrollado por este programa ha sido avalada también por otros trabajos. Por ejemplo
Tobler (1999), tras estudiar los resultados de
120 programas de prevención aplicados en
Estados Unidos y Canadá, concluye que los
programas interactivos -y particularmente los
de “habilidades globales para la vida”- sí son
eficaces para prevenir el consumo de drogas,
especialmente de sustancias ilegales.
Otros programas emblemáticos, como el
Proyecto Midwestern de Prevención, conocido también como Proyecto STAR (Students
Taught Awareness and Resistance) (Ver Pentz,
2001) han obtenido también buenos resultados en EE.UU. mediante la combinación de
programas escolares basados en el modelo
de la influencia social junto a otros componentes que incluyen medios de comunicación
(anuncios, videos), programa de organización
para padres, programa de organización para
las comunidades y cambios en la política sobre
uso de drogas.
Esta estrategia de trabajo preventivo, basada en el modelo de la influencia social, ha sido
especialmente relevante como modelo de
prevención en España, especialmente en las intervenciones diseñadas para el ámbito escolar.
Sin embargo, los resultados aportados por la
investigación no son concluyentes. De hecho,
otros muchos programas similares se desarrollaron y evaluaron con resultados dispares.
30 (3 y 4) 2005
Carlos Alonso Sanz
Algunos sí consiguieron modificar el consumo
de drogas como el proyecto S.H.O.U.T. (“Studens Helping Others Understand Tobacco)
evaluado por Elder, Wildey, De Moor et al.
(1993), mientras que otros consiguieron
resultados mínimos o nulos como el A.M.P.S.
(“Alcohol Misuse Prevention Study”) que fue
evaluado por Shope, Dielman, Burchart et al.
(1992). En otros casos la intervención resultó
efectiva en relación a algunas sustancias pero
no en relación a otras, como es el caso del
proyecto “Alert”, aplicado por Ellickson y Bell
(1990). Por último, lo que ocurre con cierta
frecuencia, los resultados son inicialmente
positivos pero desaparecen con el tiempo.
Al respecto es especialmente claro el ejemplo ofrecido por el programa DARE (Drug
Abuse Resistance Education), el cual -aunque
inicialmente mostró algunos resultados positivos (De Jong, 1987), revisiones posteriores
indican que su efectividad era prácticamente
nula (Ennett, Tobler, Ringwalt et al., 1994).
Otras revisiones señalan también que
el efecto de los programas basados en el
modelo de la influencia social es bastante
limitado, aunque se defiende la continuidad de
los programas y la posibilidad de mejorarlos
para incrementar sus resultados (Rooney y
Murray, 1996).
Más preocupantes aún son las conclusiones señaladas por Foxcroft, Lister-Sharp y
Lowe (1997) quienes, tras una revisión de los
estudios de evaluación de los programas de
prevención del consumo de alcohol realizados, señalan que no han encontrado ningún
factor que distinga claramente los programas
parcialmente efectivos, de los inefectivos y
de los contrapreventivos, y concluyen que la
falta de evidencia fiable significa que ningún
tipo de programa de prevención puede ser
recomendado.
30 (3 y 4) 2005
Esta disparidad de resultados hace que
realmente todavía no sepamos cuáles son los
factores que explican la efectividad de unos
programas y no de otros.
Además, las evidentes diferencias culturales
entre Estados Unidos y España nos obligan
a ser muy prudentes a la hora de valorar la
utilidad de este enfoque como modelo de
intervención preventiva.
La prevención en España
Mientras en EEUU se desarrollaba una
intensa actividad investigadora, en España se
mantenían dos grandes líneas de actividad
preventiva.
• En primer lugar, el planteamiento más
estrictamente educativo, que integra (hasta
confundirla) la prevención en la Educación
para la Salud. No hay duda de que ello ha
dado lugar a intervenciones educativas muy
meritorias,, pero cuya efectividad desconocemos por completo. Al mismo tiempo generó
también dos efectos no deseados:
- Por un lado, durante años se realizaron
actividades bajo el epígrafe de prevención
(y con financiación de procedente de ésta)
que tienen poco a nada que ver con la
prevención del consumo de drogas pero
que encuentran su conexión última con
ésta en el marco general de la Educación
para la Salud.
- Por otro lado, la prevención asumió
un planteamiento de generalidad que la
convirtió en algo difícilmente evaluable.
Su integración en el medio educativo hizo
que también se contagiara de los métodos
de evaluación más comúnmente utilizados
en este ámbito, centrados básicamente en
aspectos cognitivos.
• En segundo lugar, se comenzó a desaRevista Española
de
Drogodependencias
371
La prevención del consumo de drogas en España: evolución y propuestas para la reflexión.
rrollar una enorme cantidad de materiales
educativos y algunos programas de gran
envergadura cuya efectividad nunca conoceremos.
«Entre Todos»; Acero y Jiménez, 2004) parecen débiles en relación a variables -como el
consumo de alcohol- en que se había mostrado eficaz el programa original.
Posteriormente, ya en la década de los
90, se inició tímidamente la actividad investigadora en España. Aunque ciertamente no
ha sido muy intensa, sí nos permite disponer
de algunos programas evaluados: «Tú decides» (Calafat, Amengual, Mejías et al., 1989),
PASE (Villalbi, Aubá y García, 1992), «Tabaco,
alcohol y educación» (Alonso y Del Barrio,
1997, 1998), «Construyendo Salud» (Luengo,
Romero, Gómez et al., 1999), «En la huerta
con mis amigos» (Bañón, López, Villanueva et
al, 2003), «Barbacana» (García del Castillo,
López, Fernández et al., 2003), «Entre Todos»
(Acero y Jiménez, 2004), etc.
Paralelamente, también en la década de los
90, se ha producido un importante desarrollo
de los programas de alternativas de ocio
como estrategia preventiva. Estas actuaciones,
desarrolladas sobre todo en fin de semana
y, posteriormente, en horario nocturno,
constituyen un tipo de programas de base
comunitaria y que se ejecutan en espacios de
ocio y que centran su objetivo primordial en
el desarrollo de actividades de carácter lúdico,
incompatibles y a la vez alternativas al uso de
drogas (Martín y Moncada, 2003).
Aunque estos estudios muestran importantes diferencias de calidad metodológica,
ponen de manifiesto que los resultados
de los programas son muy modestos o, en
algunos casos, casi nulos. Espada, Rosa y
Méndez (2003) realizaron un meta-análisis de
las evaluaciones realizadas en España desde
1985 hasta 2002 y, tras valorar los únicos 9
informes científicos que cumplieron los criterios de rigor metodológico, concluyen que los
programas aplicados en el contexto escolar,
aunque se mostraron eficaces para prevenir
el abuso de drogas, obtuvieron efectos de
pequeña magnitud.
Además, para establecer la efectividad de
las intervenciones sería necesario contrastar sus resultados en distintas aplicaciones.
Por ejemplo, incluso en un programa como
«Construyendo Salud», que ha informado
de resultados razonablemente positivos, son
necesarias nuevas investigaciones para valorar
su efectividad (especialmente a largo plazo)
ya que los últimos datos de otros programas
que han versionado su contenido (programa
372
Revista Española
de
Drogodependencias
Aunque distintos autores han apoyado la
utilidad de los programas de alternativas de
ocio realizados en otros países, especialmente
cuando se dirigen a poblaciones de riesgo tales
como minorías, sectores marginales o desfavorecidos (Lence, Gómez y Luengo, 1997), los
escasos intentos de evaluación realizados en
España no han podido probar su capacidad
para prevenir el consumo de drogas, la cual
es puesta en duda incluso por los mismos
participantes en esos programas (Martín y
Moncada, 2003).
Otra fuente de innegable valor para el
estudio de los programas de prevención
desarrollados durante los últimos años es la
base de datos EDDRA (European Monitoring
Centre for Drugs and Drug Addiction, 2005).
Si analizamos su contenido, de los 52 programas realizados en España que se reseñan, la
mayoría no tienen datos claros de evaluación
de resultados. Si excluimos los 19 que tienen
un carácter asistencial o de reducción de
riesgos, cuyos datos de evaluación -dada la
naturaleza de los programas- son más bien
30 (3 y 4) 2005
Carlos Alonso Sanz
descriptivos, de los 33 restantes sólo un tercio
señala resultados sobre variables intermedias
y finales. La mayoría, es decir el 70 % restante
de los programas que podríamos definir como
universales o selectivos, no incluye ningún
dato claro de evaluación de resultados (eso
ocurre en 15 de los 33 programas) o señala
únicamente resultados sobre las variables
intermedias (7 programas).
Además, entre los programas que sí indican
resultados, hay que admitir que -al menos en
base a la información que se refleja en la base
de datos- algunas evaluaciones parecen plantear problemas metodológicos y, en general, la
mayoría informa de resultados débiles sobre
las variables finales (indicadores de consumo
o variables asociadas).
Tampoco podemos olvidar que incluso en
programas que han realizado evaluaciones
rigurosas y que informan de resultados razonablemente positivos sobre variables finales,
no siempre los resultados de las variables
intermedias se producen en la dirección prevista, de manera que se hace difícil explicar los
resultados sobre el consumo en función de la
intervención realizada. Por ejemplo, programas
aceptablemente eficaces como «Construyendo salud» indican que, a pesar de los buenos
resultados obtenidos sobre el consumo de
drogas, algunas de las variables intermedias
que el programa pretendía modificar no han
variado en la dirección prevista.
Todo ello configura un panorama de la
prevención que, aún mostrando algunos
avances, está muy lejos de ofrecer modelos
de intervención bien establecidos. En estas
circunstancias, decir que en España la prevención está firmemente consolidada con una
base científica clara parece excesivamente
optimista.
30 (3 y 4) 2005
A parecidas conclusiones nos lleva el análisis
del informe publicado recientemente sobre la
situación general de la drogadicción en España
(Trinidad, 2003). Según este análisis, el 41,62
% de los programas de prevención realizados
corresponden al ámbito escolar y el 39,43
% al ámbito comunitario, el cual «está poco
definido y en él se incluyen actividades muy
dispares como la formación de mediadores, el
apoyo al movimiento asociativo, la formación
de profesionales, actividades desde los medios
de comunicación, entre otras» (pág. 31).
Este mismo informe señala que «es difícil
comprobar el efecto de las actuaciones preventivas ya que en la evaluación aún faltan
herramientas adecuadamente validadas y
contrastadas y los efectos de la prevención
se aprecia a muy largo plazo». Sin embargo,
continúa «se ha avanzado mucho en los
últimos años y se ha empezado a creer en
la prevención, dejando atrás las charlas de
los expertos en los colegios y elaborando
programas validados e integrados en el marco
general de la Educación para la Salud» (pág.
32-33).
Si la mayoría de los programas están poco
definidos y si la prevención es difícilmente
evaluable ¿De dónde parte este convencimiento íntimo de que la prevención, tal como
la estamos realizando, realmente funciona y
de que -a muy largo plazo- obtendremos los
resultados esperados?
En apoyo de esta misma valoración, el
Catálogo de Programas de Ocio Saludable publicado recientemente (Arbex, 2003), recoge
57 programas preventivos de ocio saludable
de toda España. De ellos, sólo 7 contemplan
indicadores de resultado relacionados con el
consumo de drogas. Prácticamente ninguno
de estos 7 ha realizado ninguna evaluación
Revista Española
de
Drogodependencias
373
La prevención del consumo de drogas en España: evolución y propuestas para la reflexión.
de la eficacia del programa sobre el consumo
de drogas (sólo uno hizo un pequeño estudio
sobre un período temporal de 3 meses, demasiado corto para establecer conclusiones).
Acero (2004), en una reciente publicación
-»Guía práctica para una prevención eficaz»señala en su primer párrafo: «El campo de
la prevención de las drogodependencias
ha avanzado mucho en conocimientos y
experiencias en las últimas décadas. Por ello
disponemos en la actualidad no sólo de esos
conocimientos acerca de la etiología de los
consumos de drogas y de las bases teóricas
que los sustentan, sino también de programas
adecuados para conseguir que los adolescentes no se inicien en el consumo de drogas,
retrasen la edad de inicio o consuman de un
modo menos peligroso» (pág. 9)
Otros muchos autores expresan opiniones
similares a éstas y parece claro, por tanto,
que en el ámbito más estrictamente técnico
se ha propagado un discurso lleno de un
optimismo injustificado. Es posible que ello
esté dificultando el desarrollo de un planteamiento más crítico y contribuya a evitar que
se reclame con urgencia el apoyo decidido a
la investigación, única forma de mejorar las
intervenciones.
Establecimiento de criterios
básicos de intervención en
prevención.
En 1996, la Delegación del Gobierno para
el Plan Nacional sobre Drogas creó un grupo
de trabajo que elaboró los «Criterios básicos
de intervención en los programas de prevención de las drogodependencias» (Delegación
del Gobierno para el Plan Nacional sobre
Drogas, 1997).
En este documento se establecen una serie
374
Revista Española
de
Drogodependencias
de directrices y recomendaciones que deben
cumplir los programas de prevención y que,
efectivamente, cabe suponer que contribuyen
a mejorar su calidad (deben estar basados en
teorías contrastadas, deben cumplir unas mínimas exigencias metodológicas, deben partir
de un análisis de necesidades, deben explicitar
claramente los objetivos, etc).
Sin embargo, aún admitiendo la conveniencia de estas recomendaciones, hemos de reconocer que el cumplimiento de los criterios
no garantiza en absoluto su efectividad.
Importar el modelo americano.
En 1998 la Delegación del Gobierno para el
Plan Nacional sobre Drogas aplicó en España
el programa «Construyendo Salud».
La aplicación de este programa a los alumnos de 6º curso de Educación Primaria de
63 centros educativos de 12 Comunidades
Autónomas (con otros 60 centros de grupo
control) ha supuesto un hito en la historia de
la prevención en España, por un doble motivo:
en primer lugar, se llevó a cabo la implementación a gran escala del programa más avalado
por la investigación, en condiciones bien
controladas. En segundo lugar, se realizó una
investigación evaluativa a gran escala y -además- sus resultados fueron positivos (Luengo,
Romero, Gómez et al., 1999) aunque, como
hemos dicho repetidamente, éstos deben ser
valorados con prudencia.
LA SITUACIÓN EN LOS
ÚLTIMOS AÑOS.
En los últimos años la investigación evaluativa en prevención del consumo de drogas
parece haberse reducido considerablemente
en todo el mundo.
30 (3 y 4) 2005
Carlos Alonso Sanz
Los buenos resultados obtenidos por algunos programas basados en el enfoque de la
influencia social han contribuido a consolidarlo
como la estrategia preventiva básica, al menos
en el ámbito escolar.
Paralelamente, en España los problemas
vinculados al consumo de drogas han ido
pasando a segundo plano. Parecía que el
fenómeno estaba en clara recesión gracias a
los programas de prevención, cada vez más
generalizados.
Sin embargo, en los últimos tiempos el
consumo de drogas ha vuelto a estar de
actualidad. Nuevamente las instituciones con
responsabilidad en el tema han puesto de
manifiesto que el alcohol sigue siendo un
problema grave, que el consumo de cannabis
aumenta sin cesar, que el consumo de cocaína
también se incrementa de forma preocupante
incluso entre la población escolar, etc.
En apoyo de esta valoración, las conclusiones de la último informe del Observatorio
Español sobre Drogas, en base a las Encuestas
Domiciliarias de 1995-2001 señalan que (Observatorio Español sobre Drogas, 2003):
- «Aumentó bastante el consumo de psicoestimulantes (cocaína, éxtasis y anfetaminas) y cannabis, debido principalmente a
los jóvenes de 15-34 años»
- «Aumentó ligeramente el consumo de
alcohol, tabaco y tranquilizantes/somníferos
sin receta, sobre todo en los últimos años
de la década»
- Al mismo tiempo, descendió el consumo
de heroína y fue incierta la evolución del
consumo de alucinógenos, inhalables volátiles y crack, aunque siguen siendo drogas
poco extendidas entre los españoles.
Al mismo tiempo, los datos publicados
30 (3 y 4) 2005
por el último eurobarómetro indican que
los jóvenes españoles (15-24 años) están
a la cabeza de Europa en consumo regular
de cannabis y en segundo lugar en consumo
experimental de cannabis y de otras drogas
(Eurobarometer, 2004).
En cuanto a la población escolar, si observamos los resultados de las últimas encuestas (Ministerio de Sanidad y Consumo,
2005) vemos que hay poco margen para el
optimismo. El consumo de alcohol en vida
está prácticamente estabilizado desde hace
10 años (83,7 % en 1994 y 80,6 % en 2004)
y, tras un descenso inicial, ha aumentado notablemente en los últimos cuatro años (76 %
en 2000 y 80,6 % en 2004). El consumo en
los últimos 12 meses y en los últimos 30 días
sigue un patrón similar.
El consumo en vida de tabaco está también estabilizado (34,1 % en 1994 y 33,1 %
en 2004). Los consumos de cannabis, por el
contrario son más que alarmantes ya que el
consumo en vida se ha incrementado en más
de 20 puntos porcentuales en 10 años, pasando del 20,8 % al 42 % en 2004. El consumo
de cocaína en vida ha aumentado también
en más de 6 puntos en 10 años, pasando del
2,4 % al 8,5 %.
Paralelamente, el porcentaje de estudiantes
que piensan que el consumo de las distintas
drogas puede causar bastantes o muchos
problemas va disminuyendo lenta pero inexorablemente.
La búsqueda de la calidad.
Ante esta evolución de los consumos, en los
últimos años cada vez se menciona con mayor
insistencia la necesidad de promover la mejora
continua de la calidad en las intervenciones de
prevención del consumo de drogas.
Revista Española
de
Drogodependencias
375
La prevención del consumo de drogas en España: evolución y propuestas para la reflexión.
Este concepto, acuñado en el ámbito industrial, necesita ser adaptado para aplicarlo
a la intervención social. En principio, la mejora
continua de la calidad, aplicada a los programas de prevención, podría definirse como la
actividad de evaluación y retroalimentación,
repetitiva y periódica, destinada a aumentar
la capacidad de tales programas para lograr
sus objetivos de prevención (eficacia), para
optimizar el aprovechamiento de los recursos
(eficiencia) o para reconstruir la historia, aplicación o localización de todos los elementos
del programa que deben estar bajo control
(trazabilidad) (Alonso, Salvador, Suelves et
al., 2004).
Para ello, la intervención debe incluir un
ciclo continuo de actividad que implica planificar la intervención, realizarla, comprobar los
resultados en función de los objetivos planteados e introducir las acciones correctoras
que sean necesarias, repitiendo después todo
el proceso.
Aunque los tímidos intentos que se han
realizado para dotar de mayor calidad a las
acciones preventivas son siempre bienvenidos,
trabajar con calidad en prevención exige, cuando menos, aplicar tres principios, ninguno de
los cuales estamos en condiciones de asegurar
actualmente:
- Por un lado, utilizar programas eficaces,
cuya efectividad haya sido suficientemente
contrastada.
- Por otro lado, aplicarlos con rigor, tal como
han sido diseñados y asegurando que todos
las personas que trabajan en ellos se ajustan
a las indicaciones del diseño.
- En tercer lugar, evaluar los resultados y
modificar los programas en función de
éstos.
· Las dificultades para llevar a cabo la primera de estas indicaciones son muy numerosas
ya que:
- Como ha quedado establecido anteriormente, no sabemos mucho sobre los
componentes que realmente explican la
efectividad de los programas. Parece que
los programas multicomponentes son más
efectivos, pero otros que no tienen estas
características dicen serlo también.
- No sabemos por qué algunos programas
son efectivos y otros, con una estructura y
composición similares, no lo son.
- Sabemos aún menos de la efectividad del
enfoque educativo más puro, centrado en
la Educación para la Salud y orientado al
desarrollo de la salud como valor.
- En general, los programas escolares no
parecen tan efectivos, especialmente si
se aplican aisladamente (con algunas excepciones). Los resultados son demasiado
limitados, parciales y confusos como para
dar por definitivo el modelo de intervención vigente.
- Es necesario investigar más sobre la modificabilidad de las variables intermedias.
Casi nunca se evalúan los cambios en estas
variables, con lo cual no sabemos si su falta
de efectividad se debe a que el modelo
de intervención es erróneo o a que las
actividades previstas no son adecuadas
o suficientes para modificar las variables
intermedias.
- En España no se han realizado grandes
programas multicomponentes similares al
programa STAR. No sabemos si el componente comunitario de este tipo sería viable
y tampoco qué efecto tendría en nuestra
cultura.
• La segunda de las exigencias señaladas
376
Revista Española
de
Drogodependencias
30 (3 y 4) 2005
Carlos Alonso Sanz
tampoco es fácil de cumplir porque, excepto
las escasas aplicaciones que forman parte de
estudios de evaluación, el control sobre la
aplicación de los programas es mínimo. No
se garantiza en absoluto que los programas
lleguen a los destinatarios con los contenidos,
duración y metodología con que han sido
diseñados.
• En cuanto a la tercera exigencia, la evaluación es todavía una actividad casi inexistente y
los resultados se utilizan -cuando son positivos,
aunque sea mínimamente- para avalar la continuidad del programa y no para su revisión
y modificación.
Un buen momento para la
reflexión.
El momento presente, tras veinte años de
aplicación de planes o estrategias nacionales
sobre drogas, es un momento especialmente
adecuado para retomar la reflexión sobre este
tema por varias razones:
En primer lugar porque se está tomando
conciencia de que el fenómeno de las drogas
no es un problema resuelto. Ello facilita el debate público y la participación de la sociedad
en la búsqueda de respuestas.
En segundo lugar porque esta convicción
llega sin la angustia que acompañó al fenómeno en los primeros años. Ello permitirá una
reflexión serena sin la urgencia exigida por la
necesidad de soluciones inmediatas.
En tercer lugar porque disponemos de
un gran conocimiento acumulado, que no
es definitivo, pero que sí permite orientar la
investigación futura.
No cabe duda de que la normalización
de los problemas asociados al consumo de
drogas ha sido un gran logro de las políticas
30 (3 y 4) 2005
puestas en marcha en España y ha permitido
un afrontamiento razonado de la situación.
Sin embargo, en cierto modo, esta misma
estabilización del problema ha conducido
también a una normalización de los consumos, creándose una situación de equilibrio
que sólo se rompe cuando las circunstancias
-generalmente asociadas a acontecimientos
negativos- ponen nuevamente este tema de
actualidad. Cuando eso ocurre, se plantea un
debate desenfocado y centrado en medidas
inmediatas y radicales. Por ello es necesario
romper de manera intencional y constante
ese equilibrio mediante el cuestionamiento reflexivo y organizado de los comportamientos
de la comunidad relacionados con las drogas,
para lo cual es necesario poner en marcha
estrategias que mantengan la atención de la
comunidad enfocada sobre este tema y que
faciliten la reflexión colectiva sobre el problema, sobre las soluciones que se consideren
deseables y sobre los esfuerzos individuales y
colectivos necesarios para conseguirlas.
Esta reflexión, si se produce de una manera
organizada y con la partipación de toda la
sociedad, puede ser el motor de un nuevo
planteamiento de la prevención en el que
la intervención comunitaria sea el elemento
vertebrador de la acción preventiva.
Al respecto, conviene no perder de vista la
experiencia acumulanda a través de las intervenciones de «lucha contra el tabaquismo».
Vemos con estupor cómo medidas restrictivas
que afectan considerablemente a la vida de
muchas personas y, más aún, a los intereses de
importantes sectores económicos, son aceptadas de buen grado y sin apenas resistencia.
Aunque es evidente que los problemas
derivados del consumo pasivo de tabaco son
un argumento de gran peso para poner en
marcha medidas de este tipo, quizá la clave de
su éxito esté en que la población general ha
Revista Española
de
Drogodependencias
377
La prevención del consumo de drogas en España: evolución y propuestas para la reflexión.
tomado la iniciativa y ha asumido esta cuestión
como algo propio. De alguna manera, cada
ciudadano se ha convertido así en un agente
de prevención.
Una nueva orientación para la
intervención comunitaria.
blecer programas de prevención selectiva,
debidamente coordinados con los de prevención universal, dirigidos a los grupos de
población en situación de mayor riesgo y que
incluyan educación de calle o intervenciones
específicamente diseñadas para los grupos
de riesgo.
Ya hemos visto que el conocimiento actualmente disponible acerca de la prevención
universal del consumo de drogas no permite
diseñar estrategias que garanticen el logro de
sus objetivos.
Estas actuaciones no son muy diferentes de
las que se vienen realizando en la actualidad.
Sin embargo, quizá la mejora de su efectividad
no tenga tanto que ver con el «qué hacer»
como con el «cómo hacerlo».
Este escaso desarrollo de intervenciones de
prevención eficaces es especialmente patente
en el ámbito comunitario, donde el diseño
de las estrategias preventivas se realiza más
en base a la intuición que a partir de bases
científicas bien establecidas.
Al respecto, parece posible que el eje capaz
de articular una intervención efectiva sea la la
movilización social. Es fundamental que la prevención sea sentida por la comunidad como
una necesidad. Por el contrario, delegar esta
función en las instituciones lleva a la población
a no implicarse en ella.
A pesar de esta falta de resultados incuestionables, los datos procedentes de la
investigación parecen indicar que los programas multicomponentes son la alternativa
más razonable para organizar la prevención
del consumo de drogas en el ámbito comunitario.
Estos programas se caracterizan por la integración de diferentes estrategias preventivas,
de manera que se produzcan sinergias entre
las diferentes actuaciones. Entre los elementos
que los constituyen cabe citar los programas
escolares, campañas en medios de comunicación y similares, intervenciones en medio
natural (en bares, en lugares de encuentro,
etc), programas de prevención familiar, movilización social (formación de líderes, creación
de asociaciones, foros de debate, etc), medidas normativas y programas de intervención
en el tiempo libre.
Al mismo tiempo, parece necesario esta-
378
Revista Española
de
Drogodependencias
De acuerdo a este principio, es posible
que las siguientes estrategias redunden en
una mejora de la capacidad preventiva de las
actuaciones señaladas anteriormente:
• Mantenimiento de un debate social
permanente sobre el tema de drogas. Parece
imprescindible que las drogas estén de actualidad ya que ello facilitará el posicionamiento
personal y el debate social a todos los niveles:
políticos, líderes comunitarios, profesionales,
padres, jóvenes, etc. Este debate debe establecer en cada caso
- La valoración que la comunidad hace del
consumo de drogas y de los objetivos
preventivos. Los objetivos de los programas no pueden ser la abstinencia total
para todas las sustancias y para todas las
personas. Cada comunidad debe decidir lo
que es aceptable ya que, de otro modo, los
objetivos preventivos no serán asumidos
como propios.
30 (3 y 4) 2005
Carlos Alonso Sanz
- La implicación que la comunidad está
dispuesta a asumir en la prevención que
propone. En la medida que el logro de
determinados objetivos preventivos sea
sentida como una necesidad por la comunidad, ésta deberá establecer los esfuerzos
de todo tipo (económicos, sociales, personales) que está dispuesta a realizar para
responder a esa necesidad.
· Implicación comunitaria: Las actuaciones
a realizar tienen que ser demandadas por la
comunidad y realizadas con la participación
de la comunidad. Los programas diseñados
por las instituciones no parecen tener mucho
calado en la sociedad. El agente principal de
la acción preventiva tiene que ser el propio
ciudadano. Concienciarle de ello y facilitarle
esta labor serán los mecanismos básicos de
la acción preventiva.
· Las actuaciones han de dirigirse a toda la
comunidad. Los programas de prevención no
pueden tener como población diana exclusiva
(probablemente, ni tan siquiera preferente) a
los jóvenes. La población adulta debe asumir
un papel precursor en el establecimiento
de modelos de comportamiento ajenos al
consumo de drogas. Si se consigue establecer
una cultura adulta de rechazo a las drogas,
posiblemente ello repercutirá sobre el comportamiento juvenil.
· El ámbito de actuación tiene que ser
necesariamente reducido (Ayuntamiento o
comarca). En cada población diana (barrio, localidad, etc) hay que lograr el consenso social
necesario para que las intervenciones tengan
calado en la sociedad. Parece obvio que los
planteamientos consensuados serán diferentes
en cada caso por lo que las intervenciones de
carácter general deberán reducirse al mínimo
en beneficio de las actuaciones locales.
30 (3 y 4) 2005
Naturalmente este planteamiento implica
riesgos. La descentralización de la prevención,
en la medida que supone dar mayor margen
de actuación a las entidades locales, implica
un menor control sobre los objetivos y sobre
los procedimientos puestos en marcha para
conseguirlos.
Por este motivo, la investigación debe
convertirse en un elemento esencial de las
políticas preventivas. Las nuevas iniciativas
deben basarse siempre en el conocimiento
disponible que, aunque incompleto, es nuestra
única referencia para guiar la acción. La evaluación de sus resultados permitirá diseñar
nuevas formas, cada vez más efectivas, de
intervención.
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Revista Española
de
Drogodependencias
381
Originales
La legislación más relevante en materia de
adicciones.
Mª Elena Cobas Cobiella
Profesora Asociada de Derecho Civil.
Departamento de Derecho Civil Universitat de Valencia.
Resumen
El presente trabajo tiene como objetivo, exponer sucintamente, y acotada cronológicamente, la legislación más destacada en materia de adicción, con especial referencia
al alcoholismo, tabaquismo y drogas. Igualmente se expondrán aquellos elementos
comunes y principios que identifica la legislación estatal, y las legislaciones autonómicas en la materia.
Palabras Clave
toxicomanía, drogas, tabaco, alcoholismo, adicción, drogodependencia.
Summary
The present work has as objective, to expose succinctly, and limited chronologically,
the legislation most important in the matter of addiction, with special reference to the
alcoholism, nicotine poisoning and drugs. Equally there will be exposed those common
elements and principles that the state legislation identifies, and the autonomic legislations
in the matter.
Key Words
Toxicomania, drugs, tobacco, alcoholism, addiction, drug dependency
Résumé
Si desous a pour but d’exposer succinctement,et acôté chronologiquement,la législation la
plus importante en matière de drogodépendance,en faisent plus atention à l’ alcoolisme,le
tabac et les drogues.On exposera aussi les éléments en commun et les principes énoncés
par la législation d´état et les législations autonomes sur le tème.
Most Clé
toxicomanie,drogues,le tabac,l’alcoolisme,dépendance,drogodépendance.
Correspondencia a:
Apartado postal 477. 46080 Valencia. España
382
Revista Española
de
Drogodependencias
30 (3 y 4)30382-399.
(3 y 4) 2005
Mª Elena Cobas Cobiella
INTRODUCCION.
Un tema de candente preocupación a
nivel nacional y de las diversas comunidades
autonómicas lo constituye el problema de la
adicción, en cualquiera de sus manifestaciones, tabaco, alcohol y el consumo de droga
en general.
El gobierno, las autonomías, las organizaciones no gubernamentales, así como diversas
entidades sociales han tenido y tienen una
respuesta destacada en el ámbito normativo,
dentro del conjunto de estrategias a desarrollar con vistas a ofrecer una atención más
especializada y coherente al fenómeno de las
drogodependencias, que abarca la prevención,
la asistencia a enfermos, la elaboración de
normas legales directamente relacionadas
con el tráfico y consumo de drogas ilegales,
hasta en la actualidad y acorde con los nuevos
tiempos, la utilización por parte de las organizaciones criminales, de las nuevas tecnologías
de la comunicación ( Internet, telefonía digital,
entre otras).
Para el desarrollo del trabajo se identifican
grupos de adicciones. tomando como marco
de referencia, aquellas de mayor relevancia:
drogas en un sentido más estricto: heroína,
drogas de síntesis, cocaína, cannabis; alcohol y
el tabaco, con vistas a poder presentar de una
forma sintetizada la legislación y normativa en
general de mayor importancia en los últimos
tiempos en la materia que nos ocupa. Para lo
cual hemos estructurado el trabajo en dos
grandes grupos: la legislación más importante
a nivel estatal y a nivel autonómico, en relación
al tema.
Dada la magnitud y proliferación de normativa respecto a la drogodependencia, se ha
elegido para la conformación de este trabajo,
30 (3 y 4) 2005
la legislación de mayor relevancia o importancia para este tema, que permita ofrecer
una visión de dónde venimos y hacia dónde
nos encaminamos. Este ha sido el propósito,
esperamos haber podido cumplirlo.
I. LEGISLACION ESTATAL SOBRE
DROGAS.
La nota o principios característicos de la legislación estatal de la materia, desde sus inicios
han estado encaminados al establecimiento y
posterior actualización de las sustancias que
pueden ser consideradas como drogas, por su
contenido y predisposición a crear adicción, la
ordenación a nivel nacional de las facultades y
actividades de las entidades públicas y privadas
a la prevención de la drogodependencia, así
como promover la asistencia e integración
social de las personas drogodependientes.
La atribución de competencias y funciones
en la materia a desarrollar por las distintas Administraciones públicas ( Autonómica y Local)
constituye otro de los pilares básicos de la
ordenación legislativa, así como la creación de
organismos para el seguimiento y prevención
de estas actividades.
De forma tal que podemos resumir los
ámbitos de actuación legislativa en grandes
esferas, las cuales se organizan en:
1) Constitución Española, de 27 de diciembre
de 1978.
2) Normativa administrativa básica.
3) Regulación de la producción, usos, consumo
y tráfico lícitos.
4) Regulación de la producción, usos, consumo
y tráfico ilícitos: normas administrativas y
penales
5) Regulación de venta, consumo y publicidad
Revista Española
de
Drogodependencias
383
La legislación más relevante en materia de adicciones.
de bebidas alcohólicas y tabaco.
6) Normativa sectorial.
7) Administración de Justicia y Normas Procesales.
8) Órganos competentes de la Administración
General del Estado.
1) Constitución Española de
1978.
Regula entre los principios rectores de la
política social y económica, el derecho a la
protección de la salud, así como la competencia de los poderes públicos de organizar
y tutelar la salud pública a través de medidas
preventivas , y de las prestaciones y servicios
necesarios. Igualmente establece el marco de
competencias de las Comunidades Autonómicas en la esfera de la sanidad y la higiene1 .
2) Normativa administrativa
básica.
Dicha normativa regula diversas esferas
de actuación entre las que se encuentran: la
planificación y ordenación de actividades (Plan
Nacional de Drogas), los estupefacientes, las
sustancias psicotrópicas, las sustancias químicas
catalogadas, los bienes decomisados por tráfico de drogas y otros delitos relacionados, el
blanqueo de capitales y medidas para evitarlo.
Dentro de ésta se encuentran:
el cual constituye la adecuación a la realidad
actual del fenómeno de las drogas, a partir
de la creación de un modelo de intervención,
que permite que el Estado disponga de unas
determinadas estructuras de intervención, y
pueda desarrollar redes asistenciales y programas preventivos.
La Estrategia Nacional sobre Drogas tendrá
como finalidad actualizar el Plan Nacional
sobre Drogas, orientando, impulsando y coordinando las diferentes actuaciones en materia
de drogas que se desarrollen en España en el
período 2000-2008, sirviendo además como
marco de referencia para el establecimiento
de la necesaria cooperación y coordinación
entre las diferentes Administraciones públicas
y las organizaciones no gubernamentales, que
se dedican al fenómeno de la drogodependencia2 .
Las líneas de actuación del Plan Nacional
de Drogas se concretan en un documento
base , que trata las principales estrategias a
desarrollar, metas y objetivos en general3 ,
tomando como premisa que la década de los
años noventa se caracteriza por la aparición de
nuevas drogas y patrones de consumo, con la
relevancia que han adquirido las denominadas
drogas de síntesis ( éxtasis y similares).
Como novedades previstas en la estrategia
aparece el establecimiento de un observatorio
de seguimiento del uso de las nuevas tecnoTal como se recoge en el artículo 2 del citado
Real Decreto 1911/1999, de 17 de diciembre.
3
La estrategia está estructurada en los siguientes
apartados: análisis de la situación; evolución y
principales logros del Plan Nacional sobre Drogas; metas y objetivos de la Estrategia Nacional,
áreas específicas de intervención; ámbito normativo;
investigación y formación; funciones y órganos de
la estrategia nacional sobre drogas, evaluación y
sistemas de información, y financiación.
2
2.1. Planificación y ordenación de actividades.
Se encuentra como norma a significar el
Real Decreto 1911/1999, de 17 de diciembre,
por el que se aprueba la estrategia nacional
sobre drogas para el período 2000- 2008,
Vid., artículos 43.1, 43.2 y 148 de la Constitución
Española.
1
384
Revista Española
de
Drogodependencias
30 (3 y 4) 2005
Mª Elena Cobas Cobiella
logías por las organizaciones de traficantes,
y el diseño de un Plan de Modernización
Tecnológica para los Cuerpos y Fuerzas de
Seguridad del Estado en materia de comunicaciones, tratamiento de datos y recursos
materiales.
Respecto al ámbito normativo, la estrategia
plantea la modernización de la legislación
en la materia, con el objetivo de adaptarse
paulatinamente a la situación cambiante de
las drogas, para lo cual se reestructuran y
se asumen funciones por la Delegación del
Gobierno, las Comunidades Autónomas
disponen de leyes para regular los aspectos
preventivos, asistenciales y de reinserción
en sus respectivos ámbitos territoriales, se
establecen normas estatales para favorecer la
prevención y aumentar los medios disponibles
para ello, se dictan leyes encaminadas a la
represión del tráfico de drogas y delitos, y se
controla el blanqueo de capitales4 .
2.2. Estupefacientes.
Resulta extensa la normativa en este tema5 ,
pero resulta importante mencionar la Orden
de 20 de mayo de 1983 dictada por el Ministerio de Sanidad y Consumo6 , que regula los
tratamientos con metadona, estableciendo
una metodología para desarrollar un plan de
deshabituación para los toxicómanos dependientes de opiáceos 7 .
2.3.- Sustancias psicotrópicas.
Se destaca el Real Decreto 2829/1977, de
6 de octubre8 , que regula la fabricación, distribución, prescripción y dispensación de sustancias y preparados psicotrópicos, teniendo
en cuenta el interés del Ministerio de Sanidad
y Seguridad Social, de efectuar un adecuado
control de las sustancias psicotrópicas. En
dicho cuerpo normativo se determinan las
30 (3 y 4) 2005
condiciones y reglas a que estarán sujetas las
diversas personas o entidades que forman el
ciclo completo en lo que respecta a dichas
sustancias , teniendo en cuenta la fabricación,
la elaboración de especialidades farmacéuticas
que las contengan, la distribución, la prescripción, la dispensación, así como las posibilidades
y requisitos de importación o exportación de
unas y otros.
Sin olvidar, por su importancia la extensa
normativa que existe en la materia, entre las
que destacan: la Orden de 14 de enero de
1981, por la que se desarrolla el Real Decreto
2829/1997, que regula las sustancias y preparados medicinales psicotrópicos.9 2.4.- Las sustancias químicas catalogadas.
La Ley 3/ 1996 de 10 de enero10 referida
a las sustancia químicas, establece las medidas
de control de sustancias químicas catalogadas
susceptibles de desvío para la fabricación
ilícita de drogas11 . Se sustenta la misma en el
4 En este sentido tenemos diversas normas como: Real
Decreto 1885/1996, de agosto, de estructura orgánica básica del Ministerio del Interior; Real Decreto 783/1998,
de 30 de abril, por el que se establece en la Delegación
del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas el
Observatorio Español sobre Drogas; Ley 10/1995, de
23 de noviembre del Código Penal; Ley 3/1996, de
10 de enero, sobre medidas de control de sustancias
químicas catalogadas susceptibles de desvío para la
fabricación ilícita de drogas; Ley Orgánica 5/1999, de
13 de enero, de modificación de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que amplia el concepto de entrega
vigilada a los precursores y a las ganancia obtenidas
en el tráfico de drogas y regula además la figura
del agente encubierto. En lo que respecta al control
de blanqueo de capitales, el Real Decreto 925/1995,
de 9 de enero, desarrolló la Ley 19/1993, de 28 de
diciembre, sobre determinadas medidas de prevención
del blanqueo de capitales y ya más recientemente Real
Decreto 998/2003, de 25 de julio, por el que se modifica
el Real Decreto 1449/2000, de 28 de julio.
Revista Española
de
Drogodependencias
385
La legislación más relevante en materia de adicciones.
tratamiento multidisciplinar que se le viene
concediendo a estos problemas, que extiende
el control por parte de los poderes públicos
no sólo a los estupefacientes y sustancias psicotrópicas, sino a los productos químicos necesarios para la fabricación o transformación
de los mismos, con vistas a reducir cada vez
más la oferta, pero teniendo en cuenta que
dichos productos químicos se destinan a la
fabricación industrial de diferentes derivados
de importancia, por lo cual su control sólo se
dirige a evitar únicamente el posible desvío
para la fabricación ilícita de drogas 12 .
2.5.- Los bienes decomisados por tráfico de drogas y
otros delitos relacionados.
Se centra el tratamiento normativo en la
regulación del destino, así como el tratamiento
de los bienes que se decomisan, como consecuencia de provenir de delitos vinculados
con la droga.
Se destaca la Ley 17/2003, de 29 de mayo13 ,
que regula el Fondo de bienes decomisados
por tráfico ilícito de drogas y otros delitos
relacionados, que por demás complementa
lo previsto en el Código Penal, que establece,
en materia de comiso por delitos de tráfico
ilícito de drogas, que los bienes, efectos e insLey 7/1967, de 8 de abril, de 17 de diciembre,
por las que se actualizan las normas vigentes sobre
estupefacientes adaptándolas a lo establecido en el
Convenio de 1961 de Naciones Unidas; Orden de 20
de diciembre de 1988, que incluye ciertas sustancias
activas en las listas I y IV anexas a la Convención
única de 1961; el Real Decreto 5/1996, de 15 de
enero, que modifica el Real Decreto 75/1990, de 19 de
enero de 1990, que regula los tratamientos con opiáceos de personas dependientes de los mismos y de
ampliación de su anexo y la Orden de 7 de febrero de
2000 por la que se incluyen determinados principios
activos en la lista I.
6
Publicada en el BOE 28 mayo 1983, número 127,
pág 14976 (Ministerio de Sanidad y Consumo).
5
386
Revista Española
de
Drogodependencias
trumentos definitivamente decomisados por
sentencia se adjudicarán al Estado14 .
Esta nueva norma amplía de forma expresa
el ámbito de los bienes decomisados que se
integran en el fondo, al permitir que los bienes,
efectos e instrumentos decomisados por delito de contrabando, cuando el objeto de éste
sean drogas tóxicas, estupefacientes, sustancias
psicotrópicas o sustancias catalogadas como
precursores, pasen a formar parte del fondo
señalado, a tenor de lo que regula el artículo
5.3 de la Ley Orgánica 12/1995, de 12 de
diciembre, de Represión del Contrabando,
que impone la adjudicación al Estado de tales
bienes, efectos e instrumentos.
Se introduce además una declaración de supremacía de los tratados internacionales, pues
se admite en cumplimiento de aquéllos , tanto
la entrega a Estados extranjeros de bienes
decomisados en España a instancia de dichos
Estados. También se amplía el ámbito de los
beneficiarios del fondo, como consecuencia
de la creación de la Unión Europea.
2.6.- El blanqueo de capitales y medidas para evitarlo.
La diferente normativa en la materia contempla el Real Decreto 998/2003, de 25 de
julio, que modifica el Real Decreto 1449/2000,
de 28 de julio por el que se modifica y desaEn este sentido se establece un plan terapéutico
que incluye: una evaluación de la situación física,
psíquica, familiar, laboral y social del enfermo; un
informe sobre naturaleza y dosis de las sustancia
tóxicas consumidas al iniciarse la drogadicción;
las pautas de asistencia médica; los controles
analíticos que permitan apreciar la deshabituación
del enfermo, así como todas las medidas sanitarias
y asistenciales necesarias para el tratamiento del
paciente (artículo 2 de la Orden).
8
Publicado en el BOE 16 de noviembre 1977,
número 274, pág 24978 (Ministerio de Sanidad y
Seguridad Social).
7
30 (3 y 4) 2005
Mª Elena Cobas Cobiella
rrolla la estructura orgánica básica del Ministerio del Interior, y se crea el Consejo Asesor
del Observatorio de seguimiento del uso de
las nuevas tecnologías por las organizaciones
criminales de traficantes de drogas ilegales, de
blanqueo de capitales procedentes de dicho
tráfico ilegal y de otros delitos conexos.
Prevé el citado Decreto los efectos negativos que las nuevas tecnologías están produciendo en el mundo de la criminalidad, en este
sentido diseña las políticas y actuaciones que
impidan o dificulten su utilización con fines
ilícitos15 . Entre las que se destacan la recepción,
difusión, intercambio, tratamiento y evaluación
de la información sobre el uso ilícito de las
nuevas tecnologías y conocimientos científicos
y técnicos para la comisión de delitos, bien de
tráfico ilícito de drogas, como de blanqueo de
capital procedentes de aquéllos, así como la
cooperación con otras entidades y organismos nacionales o extranjeros.
3) Regulación de la producción,
usos, consumo y tráfico
Tenemos así, la Orden de 30 de mayo de 1984, que
incluye la pentazocina en la Lista III del Anexo I del
real Decreto 6-10-1997; la Orden de 20 de diciembre
de 1988, que incluye determinadas sustancias activas
en la Lista II Anexa al Convenio de 1971, y la Orden
de 12 de julio de 2001, por las que se modifican los
modelos normalizados contenidos en los anexos III,
V, VII y CII del Reglamento de la Ley 3/1996, de 10
de enero, sobre medidas de control de sustancias
químicas catalogadas susceptibles de desvío para
la fabricación ilícita de drogas, aprobado por Real
decreto 86571997, de 6 de junio.
10
BOE 12 enero 1996, número 11, pág 806. (Jefatura
del Estado).
11
Tal como señala el artículo 1: “ La presente Ley
regula las medidas de control sobre las sustancias
químicas catalogadas para evitar su desvío a la
fabricación ilícita de drogas tóxicas, estupefacientes y sustancias psicotrópicas”.
lícitos.
En el citado apartado se regulan aspectos
como: el cultivo, la fabricación, comercio,
prescripción, dispensación e inspección, regulación de tratamientos con opiáceos y la
farmacovigilancia. Tema que ha generado una
profusa normativa desde el año 1963 hasta
la actualidad, encaminada a reglamentar la
restricción e inspección técnica del tráfico de
estupefacientes, la normalización de recetas
médicas y modelos oficiales de receta especial
para medicamentos que incluyan sustancias
psicotrópicas o estupefacientes, así como la
elaboración y control de calidad de fórmulas
magistrales y preparados oficiales16 .
La Ley 25/1990, de 20 de diciembre, Ley
de Medicamento17 nace como una necesidad
universalmente sentida; habida cuenta que la
Organización Mundial de la Salud ha instado
de forma reiterada a los Estados miembros
de la urgencia de establecer una política
de envergadura en relación al tema de los
medicamentos, tomando como presupuesto
el hecho innegable de que la industria farmacéutica requiere un marco legal que constituya
su referencia.
9
30 (3 y 4) 2005
El objetivo primordial de la ley es contribuir
Tal como señala el artículo 1: “ La presente Ley
regula las medidas de control sobre las sustancias
químicas catalogadas para evitar su desvío a la
fabricación ilícita de drogas tóxicas, estupefacientes y sustancias psicotrópicas”.
12
Recientemente se modificó el Anexo I. En virtud
de Real Decreto 559/2001, de 25 de mayo, BOE 26
mayo 2001, número 126, pág 18610 (Ministerio de la
Presidencia), incluyendo en la categoría 1 del mismo
la sustancia denominada norefedrina.
13
BOE 30 mayo 2003, número 129, pág 20820 (Jefatura del Estado).
14
La Ley 36/1995, de 11 de diciembre creó el
Fondo de Bienes decomisados por tráfico de drogas y otros delitos relacionados, y dada algunas
deficiencias se aprueba la referida Ley 17, para
solventar las mismas.
11
Revista Española
de
Drogodependencias
387
La legislación más relevante en materia de adicciones.
a la existencia de medicamentos seguros,
eficaces, de calidad correctamente identificados y con información apropiada, para lo
cual establece el principio de intervención
pública, sometiendo la comercialización de
medicamentos a autorización sanitaria y
registro previos que a estos efectos tienen
carácter constitutivo, y que indica los medicamentos que son legalmente reconocidos y no
clandestinos. Además regula una lista cerrada
de medicamentos legales; señala los criterios
que rigen el proceso de evaluación y define
procedimientos de laboratorios y protocolos
al respecto.
4) Regulación de la
producción, usos, consumo
y tráfico ilícitos: normas
administrativas y penales.
El Código Penal, aprobado por la Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, regula
en su capítulo III del título XVII del Libro
Segundo los delitos contra la salud pública
donde se sanciona como delito el cultivo,
la elaboración y el tráfico de drogas tóxicas,
estupefacientes o sustancias psicotrópicas,
así como en general cualquier otra actividad
(incluida la posesión), que de una forma u otra
El artículo primero: modifica el Real Decreto
1449/2000, de 28 de julio, por el que se modifica y desarrolla la estructura orgánica básica del Ministerio
de Interior; el artículo segundo: regula las actuaciones del Observatorio de Seguimiento del uso de las
nuevas tecnologías por las organizaciones criminales
de traficantes de drogas ilegales, de blanqueo de
capitales procedentes de dicho tráfico ilegal y de
otros delitos conexos; el artículo tercero : crea el
Consejo Asesor del Observatorio de seguimiento del
uso de las nuevas tecnologías por las organizaciones
criminales de traficantes de drogas ilegales, de blanqueo de capitales procedentes de dicho tráfico ilegal y
de otros delitos conexos.
15
388
Revista Española
de
Drogodependencias
se encamine a promover, favorecer o facilitar
el consumo ilegal de unas u otras, teniendo
en cuenta , a efectos de la aplicación de penas
por el citado delito, la distinción entre drogas
que causan grave daño a la salud y drogas
que no causan grave daño, de acuerdo a lo
preceptuado en el artículo 368. También se
tipifica como delito, la adquisición, conversión
o transmisión de bienes que provengan de
delitos de tráfico de drogas.
Merece especial mención la Ley Orgánica
15/ 2003, de 25 de noviembre, por la que
se modifica el Código Penal, que introduce
importantes medidas encaminadas a favorecer la rehabilitación de aquellas personas,
que hubiesen cometido el hecho delictivo a
causa de su dependencia de drogas, alcohol o
sustancias psicotrópicas, por lo cual se permite
obtener el beneficio de la suspensión cuando
las penas impuestas sean hasta de cinco años,
y no sólo hasta tres como estaba regulado
anteriormente.
Se aborda también la responsabilidad
penal de las personas jurídicas, al señalarse
que cuando se imponga una pena de multa
al administrador de hecho o de derecho
de una persona jurídica, por hechos que se
relacionan con estas actividades, será éste
responsable del pago de manera directa y
solidaria, regulándose además la posibilidad
de que si el delito se ha cometido a través de
una sociedad u organización, ésta pueda ser
clausurada, suspendida en su actividad, disuelta
o intervenida o privada de otros derechos
o beneficios en general, como por ejemplo
los fiscales.
También se modifica el ámbito y alcance del
comiso y se extiende el mismo a los bienes,
medios e instrumentos con los que se haya
preparado el delito, así como a las ganancias
provenientes del mismo, entre otras modifi-
30 (3 y 4) 2005
Mª Elena Cobas Cobiella
caciones18 .
5) Regulación de venta,
consumo y publicidad de
bebidas alcohólicas y
tabaco.
El Real Decreto 192/1988, de 4 de marzo, sobre limitaciones en el uso del tabaco
para protección de la salud de la población.
regula en su articulado la condición del tabaco como sustancia nociva para la salud, a
partir de lo cual se establecen el conjunto
de prohibiciones que en el uso del tabaco
tienen que tenerse en cuenta, con vistas a la
protección de la salud. Señalando el carácter
preponderante del derecho a la salud de los
no fumadores, respecto sobre el derecho de
los fumadores a consumir labores de tabaco
en determinados lugares19 .
El objetivo central de dicho Decreto, es la
adopción de medidas necesarias para disminuir dicho hábito, considerado como uno de
los principales agentes causados de morbilidad y mortalidad en la población adulta20 , así
como proteger el derecho a la salud, de los
no fumadores.
Orden de 7 de mayo de 1963, sobre cultivo y recolección de plantas destinadas a la producción de
estupefacientes; Orden de 17 de enero de 1980 sobre
funciones y servicios de las oficinas de farmacia;
Orden de 30 de abril de 1986, sobre normalización
de recetas médicas y modelos oficiales de receta
especial para medicamentos que incluyan sustancias psicotrópicas o estupefacientes; Real Decreto
2236/1993, de 17 de diciembre, por el que se regula
el etiquetado y el prospecto de los medicamentos
de uso humano y Real Decreto 175/2001, de 23 de
febrero, por el que se aprueban las normas de correcta elaboración y control de calidad de fórmulas
magistrales y preparados oficiales.
17
BOE 22 diciembre 1990, número 306, pág 38228
(Jefatura del Estado).
16
30 (3 y 4) 2005
Posteriormente dicho Real Decreto fue
modificado por el Real Decreto 1293/ 1999
de 23 de julio21 , como consecuencia de una
mayor conciencia social del respeto a los no
fumadores, con lo cual se establece la prohibición absoluta de fumar sin distinción, en los
vuelos comerciales con origen y destino en
el territorio nacional22 .
Entre otra normativa a destacar por su
importancia en el marco jurídico tenemos: la
Ley 13/1998 de 4 de mayo de Ordenación
del Mercado de Tabacos y Normativa Tributaria, el Real Decreto 2668/1998, de 11 de
diciembre, por el que se aprueba el Estatuto
del Organismo autónomo Comisionado para
el Mercado de Tabaco, el Real Decreto 1079/
2002, de 18 de octubre, por el que se regulan
los contenidos máximos de nicotina, alquitrán
y monóxido de carbono de los cigarrillos, el
etiquetado de los productos del tabaco, así
como las medidas relativas a ingredientes y
denominaciones de los productos del tabaco; el Real Decreto 548/2003, de 9 de mayo
por el que se crea la Comisión Intersectorial
de Dirección y el Comité Ejecutivo para el
desarrollo del Plan nacional de prevención y
control del tabaquismo 2003- 200723 .
En estos momentos se encuentra presentado un Proyecto de Ley regulador de la
venta, el suministro, el consumo y la publicidad
de los productos del tabaco24 , cuyo objetivo
primordial será la sistematización de la regulación existente en materia de tabaquismo,
dado el carácter disperso y asistemático de
la misma25 .
6 ) Normativa sectorial.
Regula la normativa sectorial diversos
aspectos como la sanidad y el consumo, el
régimen penitenciario, el régimen civil, el
Revista Española
de
Drogodependencias
389
La legislación más relevante en materia de adicciones.
régimen laboral y de seguridad social, tráfico
y seguridad vial y se extiende a extranjería, temas de seguridad ciudadana, fuerzas armadas,
sistema educativo entre otros.
Merece destacar algunas normas de trascendencia como: la Ley 26/1984, de 19 de
julio ( Ley General para la Defensa de los
Consumidores y Usuarios); la Ley 14/1986,
de 25 de abril( Ley General de Sanidad),
Ley 30/ 1981, de 7 de julio, (por el que se
modifica la regulación del matrimonio en el
Código Civil y se determina el procedimiento
a seguir en las causas de nulidad, separación y
divorcio) ; el Real Decreto Legislativo 1/1995,
de 24 de marzo, (por el que se aprueba el
Texto Refundido de la Ley del Estatuto de
los Trabajadores), así como la Ley 19/2001,
de 19 de diciembre, (de reforma del texto
articulado de la Ley sobre tráfico, circulación
de vehículos a motor y seguridad vial, aprobado por Real Decreto Legislativo 339/ 1990,
de 2 de marzo).
La Ley General de Sanidad señala entre
sus derechos fundamentales el de proteger
la salud, para lo cual se regulan en la misma
todas las acciones que permitan hacer efectivo el derecho a la protección de la salud
reconocido en el artículo 43 y concordantes
Orden de 7 de mayo de 1963, sobre cultivo y recolección de plantas destinadas a la producción de
estupefacientes; Orden de 17 de enero de 1980 sobre
funciones y servicios de las oficinas de farmacia;
Orden de 30 de abril de 1986, sobre normalización
de recetas médicas y modelos oficiales de receta
especial para medicamentos que incluyan sustancias psicotrópicas o estupefacientes; Real Decreto
2236/1993, de 17 de diciembre, por el que se regula
el etiquetado y el prospecto de los medicamentos
de uso humano y Real Decreto 175/2001, de 23 de
febrero, por el que se aprueban las normas de correcta elaboración y control de calidad de fórmulas
magistrales y preparados oficiales.
17
BOE 22 diciembre 1990, número 306, pág 38228
(Jefatura del Estado).
16
390
Revista Española
de
Drogodependencias
de la Constitución y reconoce que las Comunidades Autónomas podrán dictar normas de
desarrollo y complementarias de la presente
Ley en el ejercicio de las competencias que
les atribuyen los correspondientes Estatutos
de Autonomía.
En dicho cuerpo legal se orientan las
actuaciones de las administraciones públicas
sanitarias encaminadas a la promoción de la
salud, a impulsar el interés individual, familiar
y social por la salud mediante la adecuada
educación sanitaria de la población, a garantizar que cuantas acciones sanitarias se
desarrollen estén dirigidas a la prevención de
las enfermedades y no sólo a la curación de
las mismas, así como a asegurar la asistencia
sanitaria en todos los casos de pérdida de la
salud y a promover las acciones necesarias
para la rehabilitación funcional y reinserción
social del paciente26 .También prevé el control
de la publicidad, al regular en su artículo 27 la
posibilidad de limitar todo aquello que pueda
constituir un perjuicio para la salud.
En lo que concierne a la Ley General para
la Defensa de los Consumidores y Usuarios en
su artículo 5, se establece la regulación para la
protección de la salud física de los consumidores y usuarios, señalándose que como garantía
de la salud y seguridad de las personas, se
prohibirá la utilización de cualquier aditivo
que no figure expresamente citado en las
listas positivas autorizadas y publicadas por el
Ministerio de Sanidad y Consumo, entro otras
muchas medidas de protección de la salud.
7) Administración de Justicia y
Normas Procesales.
Hace referencia a aquellos órganos judiciales
con incidencia en materia de drogas, así como
a la normativa procesal en la materia.27 30 (3 y 4) 2005
Mª Elena Cobas Cobiella
8) Órganos competentes de la
Administración General del
Estado.
Se estructuran en órganos de coordinación,
estableciendo las normas las diversas competencias de los mismos.
II. LEGISLACION SOBRE
DROGAS. PRINCIPALES NORMAS
AUTONOMICAS.
Respecto a la normativa autonómica todas
desarrollan determinados parámetros claves,
en cuanto a la ordenación legislativa del tema
de la drogodependencia en sus diferentes manifestaciones, teniendo como objetivo central
el establecimiento y regulación de medidas y
acciones encaminadas a la prevención, asistencia, incorporación y protección social de las
personas afectadas tanto por el uso y/ o abuso
de sustancias que podían generar dependencia
u otros trastornos adictivos.
Los parámetros comunes a las Autonomías
se refieren a el reconocimiento de la competencia en esta materia a nivel de los Estatutos,
a partir de lo cual desarrollan la normativa
específica sobre drogodependencia, que en
Vid., artículos 369, 371, 374, 376 del citado cuerpo
legal.
19
Vid., artículo 1 del citado precepto.
20
Se establece además una estricta protección a la
infancia y juventud, al prohibir la venta de tabaco
en establecimientos sanitarios, en los escolares, o
en los destinados preferentemente a la atención de
la infancia y la juventud ( artículo 4.1). Se prohíbe además vender o entregar a los menores de
dieciséis años labores de tabaco así como productos
que le imiten o induzcan al hábito de fumar y sean
nocivos para la salud.
21
BOE de 7 de agosto 1999, número 18, número
29320 (Ministerio de Sanidad y Consumo).
18
30 (3 y 4) 2005
materia administrativa abarcan: la prevención y
asistencia de drogas, la acreditación de centros
de atención a drogodependientes, así como a
la convocatoria y regulación de convenios de
colaboración para el desarrollo de programas
asistenciales y de reinserción en este tema.
También desarrollan normas administrativas
respecto al alcohol y al tabaco, con vistas a la
protección de la salud , regulando el régimen
jurídico de los espectáculos públicos y actividades clasificadas, así como el establecimiento
de acciones en el ámbito escolar para la
información sobre tabaquismo y consumo
de alcohol, entre otras. Finalmente dedican
un apartado a la regulación de subvenciones
y otras medidas de fomento, que permitan
el desarrollo de programas de ayuda para
personas adictas, con fines de rehabilitación
y reinserción social.
Las Autonomías desarrollan en sus respectivos Estatutos28 , a partir de lo previsto en la
Constitución Española, las competencias que
ostentan, de desarrollo legislativo y ejecución
en materia de sanidad e higiene, promoción,
asistencia y restauración de la salud, dentro
de las que incluyen la relativa a la drogodeFueron modificados los artículos 6 y 7 del
citado cuerpo legal, estableciendo la prohibición
absoluta de fumar en todos los vehículos o medios
de transporte colectivo, así como en los transportes
ferroviarios y marítimos excepto en cubierta al
aire libre.
23
Ley 13/1998, de 4 de mayo, BOE 5 de mayo de
1998, número 107, pág 14871 ( Ministerio de Sanidad
y Consumo); Real Decreto 2668/ 1998, de 11 de
diciembre, BOE, de 23 de diciembre de 1998, número
306, pág 43242; Real Decreto 1079/2002, BOE número 25, de 19 de octubre de 2002, pág 36814; Real
Decreto 548/ 2003, de 9 de mayo, BOE número 11,
pág 18216 ( Ministerio de Sanidad y Consumo).
24
Proyecto de Ley 121/000036/2005, de 26 de abril,
BO Cortes Generales-Congreso de los Diputados 9
mayo 2005, número 36-1, pág 1.
22
Revista Española
de
Drogodependencias
391
La legislación más relevante en materia de adicciones.
pendencia, como una de las problemáticas
claves de la comunidad, dentro de la familia
y la sociedad.
1) En materia de drogas.
La prevención, asistencia e inserción social
en materia de drogodependencias ha sido
altamente desarrollado por las Autonomías,
teniendo en cuenta determinados principios
básicos sobre los cuales se construyen las
legislaciones: como la consideración de que
la drogodependencia y otros trastornos
adictivos son enfermedades comunes que
repercuten en la esfera biológica, social y familiar, con lo cual un drogodependiente debe
ser considerado como cualquier otro enfermo,
sin que pueda ser discriminado; la necesaria
promoción activa de hábitos saludables y de
una cultura de la salud que incluya el rechazo
al consumo de drogas; la prioridad de las políticas y actuaciones dirigidas a la prevención del
consumo de drogas; el análisis multidisciplinario de este tema y por tanto de las labores de
control y prevención; la indispensable inserción
social y finalmente una conciencia social para
abordar el problema de la drogodependencia,
tal como regula el Decreto Legislativo 1/ 2003,
de 1 de abril, de la Generalitat Valenciana29 ,
en su artículo 1: “ La presente Ley tiene por
objeto establecer y regular, en el marco de
las competencias que estatutariamente corresponden a la Generalitat y dentro de su
ámbito territorial , un conjunto de medidas
y acciones encaminadas a la prevención,
asistencia , incorporación y protección social de las personas afectadas tanto por el
uso y/ o abuso de sustancias que puedan
generar dependencia por otros trastornos
adictivo”..
La Ley 5/2002, de 27 de junio de la Comunidad de Madrid, como norma a resaltar,
392
Revista Española
de
Drogodependencias
establece la condición de paciente a las
personas drogodependientes o con otros
trastornos adictivos, y señala expresamente
en su articulado los derechos y deberes de
los pacientes, sobre la base de determinados
principios: la igualdad de acceso a los dispositivos asistenciales, el respeto de su personalidad,
dignidad e intimidad, el derecho a la asistencia
dentro de la red pública y los centros privados
concertados, a la información y a recibir un
tratamiento adecuado30 .
Se definen igualmente en las normas que se
entiende por drogas, incluyéndose los estupefacientes, las sustancias psicotrópicas, las bebidas alcohólicas, el tabaco o cualquier sustancia
de uso industrial que pueda producir efectos
nocivos para la salud, los sujetos protegidos,
los criterios de actuación para desarrollar las
acciones de prevención, como desarrollar
la formación y educación para la salud y se
regulan además los derechos y garantías de
las personas drogodependientes31 .
También se hace referencia a la reducción
de la oferta, a través de las limitaciones a la
publicidad, venta y consumo de bebidas alcohólicas y tabaco.
2) En materia de tabaquismo.
Tomando como premisa que el tabaquismo
es uno de los factores causales más relevantes
de muerte en la población y que constituye
un problema de salud pública, las Autonomías
han aprobado normativas de carácter adminisDicha ley se articula en cuatro capítulos
dedicados a la regulación de las disposiciones
generales, las limitaciones a la venta, suministro
y consumo de los productos del tabaco, la regulación de su publicidad, promoción y patrocinio y
el régimen de las infracciones y sanciones.
26
Tal como se regula en el artículo 6 de la citada ley.
25
30 (3 y 4) 2005
Mª Elena Cobas Cobiella
trativo, con el objetivo de preservar la salud y
de proteger a los no fumadores.
En este sentido se destacan la Ley Foral
6/2003, de 14 de febrero32 dictada por el
Parlamento de Navarra, de prevención del
Vid., Ley Orgánica 6/1985, de 1 de julio del Poder
Judicial; Ley Orgánica 5/2000, de 12 de enero,
reguladora de la responsabilidad penal de los
menores; Ley 5/1998, de 24 de marzo, que crea la
Fiscalía Especial para la prevención y represión del
tráfico ilegal de droga y Ley 1/2000, de 7 de enero,
Ley de Enjuiciamiento Civil.
28
Estatutos de Autonomía: C.A. De Andalucía, Ley
Orgánica 6/1981, de 30 de diciembre; C.A. De Aragón, Ley Orgánica 8/1982, de 10 de agosto; C.A de
Asturias, Ley Orgánica 7 /1981, de 30 de diciembre (
reformada sucesivamente por Ley Orgánica 1/1994,
de 24 de marzo y Ley Orgánica 1/1999, de 5 de enero
); C.A de Islas Baleares, Ley Orgánica 2/1983, de
25 Mancha, Ley Orgánica 9/1982 de 10 de agosto (
reformada por Ley Orgánica 7/1994, de 24 de marzo
y por Ley Orgánica 3/1997, de 3 de julio); C.A de
Castilla y León, Ley Orgánica 4/1983, de 25 de febrero ( reformada por Ley Orgánica 11/1994, de 24 de
marzo y Ley Orgánica 4/1999, de 8 de enero); C.A de
Cataluña, Ley marzo; C. A de Galicia, Ley Orgánica
1/de Ceuta, Ley Orgánica 1/1995, de 13 de Orgánica
4/1979, de 18 de diciembre; C.A de febrero ( reformada por la Ley Orgánica 9/1994, de 24 de marzo y por
Ley Orgánica 3/1999, de 8 de enero); C.A de las Islas
Canarias, Ley Orgánica 10/1982, de 10 de agosto
( reformada por Ley Orgánica 4/1996, de 30 de
diciembre); C.A de Cantabria, Ley Orgánica 8/1981,
de 30 de diciembre( reformada por Ley Orgánica
2/1994, de 24 de marzo); C. A Castilla La 1981, de 6
de abril; C.A de Madrid, Ley Orgánica 3/1983, de 25
de febrero, (reformado por Ley Orgánica 10/1994, de
24 de marzo y Ley Orgánica 5/1998, de 7 de julio);
C.A de Melilla, Ley Orgánica 2/ 1995, de 13 de
marzo; C.A de Murcia, Ley Orgánica 4/1982, de 9 de
junio ( reformado por Ley Orgánica 4/1994, de 24 de
marzo y Ley Orgánica 1/1998, de 15 de junio); C.A
de Navarra, Ley Orgánica 13/1982, de 10 de agosto;
C.A del País Vasco, Ley Orgánica 3/1979, de 18 de
diciembre; C.A de la Rioja, Ley Orgánica 3/1982, de
9 de junio ( ampliado por Ley Orgánica 3/ 1994, de
24 de marzo y reformado por Ley Orgánica 2/1999,
de 7 de enero y C.A de Valencia, Ley Orgánica 5/
1982, de 1 de julio.
27
30 (3 y 4) 2005
consumo de tabaco, de protección del aire
respirable y de la promoción de la salud en
relación al tabaco, cuyo objetivo central es la
adopción de medidas reguladoras de actuaciones dirigidas a establecer un adecuado nivel de
protección de la salud frente a los riesgos derivados del consumo de tabaco, a la prevención
del inicio de su consumo y a la promoción de
hábitos saludables para la mejora de la calidad
de vida de la ciudadanía.
Otras Comunidades desarrollan también la
protección de la salud, a través de normativas
relativas a la promoción, venta y consumo de
productos del tabaco, regulando los límites
máximos de nicotina y alquitrán, prohibiendo
la publicidad en favor del tabaco o que potencie o favorezca el hábito de fumar. Igualmente
establecen limitaciones en la venta de tabaco,
a menores de 16 años, y establecen prohibiciones de fumar en el ámbito laboral, o en
hospitales u otros centros sanitarios33 .
En las diferentes normativas autonómicas se
establece que siempre la venta y suministro de
D.O Generalitat Valenciana 3 abril 2003, número
4473, pág 9837 (Conselleria Bienestar Social).
30
BO. Comunidad de Madrid 8 julio 2002, número
160, pág 5, BOE 24 julio 2002, número 176, pág
27225.
31
Vid., Ley 9/1998, de 22 de julio, BO. Canarias
28 julio 1998, número 94, pág 8405, BOE 19 de
agosto 1998, número 198, pág 28350, Parlamento de
Canarias.
32
BO, Navarra 21 febrero 2003, número 23,pág 1558,
BOE 21 marzo 2003, número 69, pág 11031.
33
Vid., Decreto 113/ 1993, de 12 de mayo, por el
que se establecen normas de protección, venta y
consumo de productos de tabaco, de la Comunidad
Autónoma Gallega; Ley 18/1998, de 25 de junio,
Parlamento Vasco, BO, País Vasco 14 julio 1998,
número 131, pág 13065. En otro caso se desarrollan
planes sectoriales para la prevención y control del
tabaquismo, tal como regula el Decreto 85/1992, de
28 de mayo, aprobado en la Comunidad Autónoma
de Castilla y León.
29
Revista Española
de
Drogodependencias
393
La legislación más relevante en materia de adicciones.
tabaco a través de máquinas automáticas sólo
podrá realizarse en establecimientos cerrados,
debiendo hacer constar en su superficie frontal la prohibición que tienen los menores de
edad de adquirir tabaco, y a la vista de una
persona encargada de que se cumpla la citada
prohibición.34 3) En materia de alcohol.
La Ley 17/1997, de 4 de julio, de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas,
de la Comunidad de Madrid, previene en su
articulado, que los menores de 16 años que
accedan a los establecimientos, espectáculos
y actividades recreativas, no se les pondrá
vender, servir, regalar ni permitir el consumo
de bebidas alcohólicas35 .
Con posterioridad se dictó la Ley 5/2000,
de 8 de mayo36 , por la que se eleva la edad
mínima de acceso a las bebidas alcohólicas,
con vistas a paliar el acuciante y grave problema que genera el alcoholismo juvenil y la
que introdujo modificaciones a la Ley 6/1995,
de 28 de marzo, de Garantías de los derechos
de la Infancia y la Adolescencia de la Comunidad de Madrid ( artículos 31.1d y 100.3, y a
la Ley 17/1997, de 4 de julio ( artículos 25.3
y 37.10).
La Ley 4/1997, de 10 de abril de medidas
de prevención y control de la venta y publicidad de bebidas alcohólicas para menores
de edad37 , dictada en Extremadura, establece
determinados criterios encaminados a la
prevención y desarrollo de hábitos saludables, prohibiendo el consumo de alcohol por
menores de 18 años de edad, al restringir su
venta y limitar su promoción y publicidad. Por
último regula un régimen sancionador de las
conductas contrarias a los preceptuado en
la misma, estableciendo el marco de com-
petencias de las distintas Administraciones
intervinientes.
Alguna normativa autonómica prohíbe el
consumo de bebidas alcohólicas a personas que se encuentran prestando servicios
como conductores de vehículos de servicio
público, personal sanitario, personal docente
, miembros de cuerpos armados, entre otros
38 . También se regula la necesidad de que
las ordenanzas municipales, establezcan los
criterios que regulen la localización, distancia
y características que deberán reunir los establecimientos de venta y suministro de bebidas
alcohólicas39 .
III. CONCLUSION.
A manera de conclusión cabría señalar
brevemente que el consumo de drogas como
fenómeno cada vez más cambiante, ha generado y genera cada día una mayor preocupación
social, lo cual se evidencia con fuerza en el
orden legislativo, el cual no ha permanecido
ajeno o indiferente a dicha problemática.
Aparece regulado en la Ley 5/2002, de 27 de junio
de la Comunidad de Madrid.
35
Tal como regula el artículo 25 de la citada
Ley. En alguna norma se prohíbe la venta de
bebidas alcohólicas a menores de 18 años, tal como
regula la Ley 18/1998, de 25 de junio, Parlamento
Vasco, BO, País Vasco 14 julio 1998, número 131,
pág 13065, en su artículo 20. En igual sentido,
se regula en el Decreto Legislativo 1/2003, de 1
de abril de la Generalitat Valenciana, artículo 18,
así como en la Ley 1/2002, de 11 de marzo, D.O
Generalitat de Catalunya 19 marzo 2002, número
3598, pág 4910, BOE 9 abril 2002, número 85, pág
13402, que modifica la Ley 20/1985, de 25 de julio
de 1985, de prevención y asistencia en materia
de sustancias que pueden generar dependencia.
y en la Ley 15/2002, de 11 julio, DO. Castilla La
Mancha 24 julio 2002, número 90, pág 11006, BOE
18 septiembre 2002, número 224, pág 33112, Cortes
Castilla - La Mancha.
36
Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid número
111, de 11 de mayo de 2000.
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Revista Española
de
Drogodependencias
30 (3 y 4) 2005
Mª Elena Cobas Cobiella
Sin entrar en consideraciones sobre el contenido de la legislación en la materia, resulta
un importante esfuerzo realizado tanto a nivel
estatal, como a nivel autonómico las numerosas normas, con independencia de su rango,
para paliar, prevenir y en definitiva reprimir si
fuere necesario, la adicción en cualquiera de
sus manifestaciones, con especial incidencia en
los jóvenes, los que a nivel legislativo gozan de
un especial tratamiento.
A lo que cabe añadir, que el tratamiento
de estos temas requiere una intervención
multidisciplinaria, de lo que no escapa la legislación, la que en mayor medida cada vez más
ofrece enfoques donde intervienen diferentes
disciplinas, con objetivos claves como la prevención, la asistencia de la drogodependencia
y finalmente la inserción social de las personas
con trastornos adictivos.
IV.- REFERENCIA LEGISLATIVA.
Normas Estatales.
1.- Constitución Española de 1978.
2.- Real Decreto 1911/1999, de 17 de diciembre, por el que se aprueba la estrategia
nacional sobre drogas para el período
2000- 2008.
3.- Real Decreto 1885/1996, de agosto, de
estructura orgánica básica del Ministerio
del Interior.
4.- Real Decreto 783/1998, de 30 de abril,
por el que se establece en la Delegación
del Gobierno para el Plan Nacional sobre
Drogas el Observatorio Español sobre
Drogas.
5.- Ley 10/1995, de 23 de noviembre del
Código Penal.
6.- Ley 3/1996, de 10 de enero, sobre medidas de control de sustancias químicas
catalogadas susceptibles de desvío para la
30 (3 y 4) 2005
fabricación ilícita de drogas.
7.- Ley Orgánica 5/1999, de 13 de enero, de
modificación de la Ley de Enjuiciamiento
Criminal.
8.- Real Decreto 925/1995, de 9 de enero,
que desarrolla la Ley 19/1993, de 28 de
diciembre, sobre determinadas medidas de
prevención del blanqueo de capitales.
9.- Ley Orgánica 12/1995, de 12 de diciembre
reguladora de la represión del contrabando.
10.-Real Decreto 998/2003, de 25 de julio,
por el que se modifica el Real Decreto
1449/2000, de 28 de julio.
11.- Ley 7/1967, de 8 de abril, de 17 de diciembre, por las que se actualizan las normas
vigentes sobre estupefacientes adaptándolas a lo establecido en el Convenio de
1961 de Naciones Unidas; Orden de 20
de diciembre de 1988, que incluye ciertas
sustancias activas en las listas I y IV anexas
a la Convención única de 1961.
12.- Real Decreto 5/1996, de 15 de enero, que
Publicada en el Diario Oficial de Extremadura
número 57, de 17 de mayo de 1997. En igual sentido
la Ley Foral 10/1991, de 16 de marzo, de Navarra.
38
Ley 18/ 1998, de 25 de junio, Parlamento Vasco
(mencionada anteriormente). Ley 5/2001, de 17 de
octubre, BO. La Rioja octubre 2001, número 127,
pág 4551, BOE 6 noviembre 2001, número 266, pág
40147, artículo 38.
39
Vid., Ley 3/2001, de 4 de abril, BO. Aragón 11
abril 2001, número 43, pág 2525, BOE 17 mayo
2001, número 118, pág 17468 ( Cortes de Aragón),
la cual regula en su artículo 7 lo siguiente: “ Las
corporaciones locales establecerán en sus correspondientes ordenanzas municipales los criterios que
regulen la localización, distancia y características
que deberán reunir los establecimientos de venta y
suministro de bebidas alcohólicas, así como su venta
y consumo en la vía pública. Dichas corporaciones
serán responsables de su cumplimiento dentro de su
ámbito territorial”.
37
Revista Española
de
Drogodependencias
395
La legislación más relevante en materia de adicciones.
modifica el Real Decreto 75/1990, de 19 de
enero de 1990, que regula los tratamientos
con opiáceos de personas dependientes de
los mismos y de ampliación de su anexo.
13.- Orden de 7 de febrero de 2000 por la
que se incluyen determinados principios
activos en la lista I.
14.- Orden de 20 de mayo de 1983, que
regula los tratamientos con metadona.
15.- Orden de 30 de mayo de 1984, que incluye la pentazocina en la Lista III del Anexo
I del real Decreto 6-10-1997.
16.- Orden de 20 de diciembre de 1988, que
incluye determinadas sustancias activas en
la Lista II Anexa al Convenio de 1971.
17.- Orden de 12 de julio de 2001, por las que
se modifican los modelos normalizados
contenidos en los anexos III, V, VII y CII del
Reglamento de la Ley 3/1996, de 10 de
enero, sobre medidas de control de sustancias químicas catalogadas susceptibles de
desvío para la fabricación ilícita de drogas,
aprobado por Real decreto 86571997, de
6 de junio.
18.- Real Decreto 2829/1977, de 6 de octubre, que regula la fabricación, distribución,
prescripción y dispensa de sustancias y
preparados psicotrópicos.
19.- Orden de 14 de enero de 1981.
20.- Ley 3/ 1996 de 10 de enero. referida a las
sustancia químicas, establece las medidas de
control de sustancias químicas catalogadas
susceptibles de desvío para la fabricación
ilícita de drogas.
21.- Real Decreto 559/2001, de 25 de mayo,
que modifica el Anexo I incluyendo la sustancia denominada norefredina.
22.- Ley 17/2003, de 29 de mayo, que regula
el Fondo de bienes decomisados por
396
Revista Española
de
Drogodependencias
tráfico ilícito de drogas y otros delitos
relacionados.
23.- Orden de 7 de mayo de 1963, sobre
cultivo y recolección de plantas destinadas
a la producción de estupefacientes.
24.- Orden de 17 de enero de 1980 sobre
funciones y servicios de las oficinas de
farmacia.
25.- Orden de 30 de abril de 1986, sobre
normalización de recetas médicas y modelos oficiales de receta especial para
medicamentos que incluyan sustancias
psicotrópicas o estupefacientes.
26.- Real Decreto 2236/1993, de 17 de diciembre, por el que se regula el etiquetado
y el prospecto de los medicamentos de
uso humano.
27.- Real Decreto 175/2001, de 23 de febrero, por el que se aprueban las normas de
correcta elaboración y control de calidad
de fórmulas magistrales y preparados
oficiales.
28.- Código Penal, aprobado por la Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre.
29.- Ley 26/1984, de 19 de julio (Ley General
para la Defensa de los Consumidores y
Usuarios).
30.- Ley 14/1986, de 25 de abril (Ley General
de Sanidad).
31.- Ley 30/ 1981, de 7 de julio, (por el que
se modifica la regulación del matrimonio
en el Código Civil y se determina el procedimiento a seguir en las causas de nulidad,
separación y divorcio).
32.- Real Decreto Legislativo 1/1995, de 24
de marzo, (por el que se aprueba el Texto
Refundido de la Ley del Estatuto de los
Trabajadores).
33.- Ley 19/2001, de 19 de diciembre, (de re30 (3 y 4) 2005
Mª Elena Cobas Cobiella
forma del texto articulado de la Ley sobre
tráfico, circulación de vehículos a motor y
seguridad vial, aprobado por Real Decreto
Legislativo 339/ 1990, de 2 de marzo).
torial de Dirección y el Comité Ejecutivo
para el desarrollo del Plan nacional de
prevención y control del tabaquismo
2003- 2007.
34.- Ley Orgánica 15/ 2003, de 25 de noviembre, por la que se modifica el Código
Penal
42.- Ley Orgánica 6/1985, de 1 de julio del
Poder Judicial.
35.- Real Decreto 998/2003, de 25 de julio,
que modifica el Real Decreto 1449/2000,
de 28 de julio por el que se modifica y
desarrolla la estructura orgánica básica del
Ministerio del Interior, y se crea el Consejo
Asesor del Observatorio de seguimiento
del uso de las nuevas tecnologías por las
organizaciones criminales de traficantes de
drogas ilegales, de blanqueo de capitales
procedentes de dicho tráfico ilegal y de
otros delitos conexos.
43.- Ley Orgánica 5/2000, de 12 de enero,
reguladora de la responsabilidad penal de
los menores.
44.- Ley 5/1998, de 24 de marzo, que crea
la Fiscalía Especial para la prevención y
represión del tráfico ilegal de droga.
45.- Ley 1/2000, de 7 de enero, Ley de Enjuiciamiento Civil.
46.- Ley 25/1990, de 20 de diciembre, Ley de
Medicamento.
36.- El Real Decreto 192/1988, de 4 de marzo,
sobre limitaciones en el uso del tabaco para
protección de la salud de la población
47.- Proyecto de Ley 121/000036/2005, de 26
de abril, BO Cortes Generales-Congreso
de los Diputados 9 mayo 2005, número
36-1, pág 1.
37.- Real Decreto 1293/ 1999 de 23 de
julio.
NORMAS AUTONOMICAS.
38.- Ley 13/1998 de 4 de mayo de Ordenación del Mercado de Tabacos y Normativa
Tributaria.
39.- Real Decreto 2668/1998, de 11 de diciembre, por el que se aprueba el Estatuto
del Organismo autónomo Comisionado
para el Mercado de Tabaco.
40.- Real Decreto 1079/ 2002, de 18 de octubre , por el que se regulan los contenidos
máximos de nicotina, alquitrán y monóxido
de carbono de los cigarrillos, el etiquetado
de los productos del tabaco, así como las
medidas relativas a ingredientes y denominaciones de los productos del tabaco.
41.- Real Decreto 548/2003, de 9 de mayo
por el que se crea la Comisión Intersec-
30 (3 y 4) 2005
1.- Estatutos de Autonomía de:
C.A. De Andalucía, Ley Orgánica 6/1981, de
30 de diciembre.
C.A. De Aragón, Ley Orgánica 8/1982, de 10
de agosto.
C.A de Asturias, Ley Orgánica 7 /1981, de 30
de diciembre (reformada sucesivamente
por Ley Orgánica 1/1994, de 24 de marzo
y Ley Orgánica 1/1999, de 5 de enero).
C.A de Islas Baleares, Ley Orgánica 2/1983,
de 25 de febrero (reformada por la Ley
Orgánica 9/1994, de 24 de marzo y por Ley
Orgánica 3/1999, de 8 de enero).
C.A de las Islas Canarias, Ley Orgánica
10/1982, de 10 de agosto (reformada
por Ley Orgánica 4/1996, de 30 de diRevista Española
de
Drogodependencias
397
La legislación más relevante en materia de adicciones.
ciembre).
C.A de Cantabria, Ley Orgánica 8/1981, de 30
de diciembre (reformada por Ley Orgánica 2/1994, de 24 de marzo).C. A Castilla
La Mancha, Ley Orgánica 9/1982 de 10
de agosto (reformada por Ley Orgánica
7/1994, de 24 de marzo y por Ley Orgánica
3/1997, de 3 de julio).
C.A de Castilla y León, Ley Orgánica 4/1983,
de 25 de febrero (reformada por Ley
Orgánica 11/1994, de 24 de marzo y Ley
Orgánica 4/1999, de 8 de enero).
C.A de Cataluña, Ley Orgánica 4/1979, de 18
de diciembre.
C.A de Ceuta, Ley Orgánica 1/1995, de 13
de marzo.
C. A de Galicia, Ley Orgánica 1/1981, de 6
de abril.
C.A de Madrid, Ley Orgánica 3/1983, de 25
de febrero, (reformado por Ley Orgánica
10/1994, de 24 de marzo y Ley Orgánica
5/1998, de 7 de julio).
2.- Decreto Legislativo 1/ 2003, de 1 de abril,
de la Generalitat Valenciana.
3.- Ley Foral 6/2003, de 14 de febrero.
4.- Ley 17/1997, de 4 de julio, de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas, de la
Comunidad de Madrid.
5.- Ley 5/2000, de 8 de mayo, por la que se
eleva la edad mínima de acceso a las bebidas
alcohólicas, de la Comunidad de Madrid.
6.- Ley 9/1998, de 22 de julio, de la Comunidad Canaria.
7.-Decreto 113/ 1993, de 12 de mayo, por
el que se establecen normas de protección,
venta y consumo de productos de tabaco, de
la Comunidad Autónoma Gallega.
8.- Ley 18/1998, de 25 de junio, Parlamento
Vasco.
9.- Decreto 85/1992, de 28 de mayo,
aprobado en la Comunidad Autónoma de
Castilla y León.
10.- Ley 18/1998, de 25 de junio, Parlamento Vasco.
C.A de Melilla, Ley Orgánica 2/ 1995, de 13
de marzo.
11.- Ley 1/2002, de 11 de marzo, D.O
Generalitat de Catalunya.
C.A de Murcia, Ley Orgánica 4/1982, de 9 de
junio (reformado por Ley Orgánica 4/1994,
de 24 de marzo y Ley Orgánica 1/1998, de
15 de junio).
12.- Ley 20/1985, de 25 de julio de 1985, de
prevención y asistencia en materia de sustancias que pueden generar dependencia.
C.A de Navarra, Ley Orgánica 13/1982, de
10 de agosto.
C.A del País Vasco, Ley Orgánica 3/1979, de
18 de diciembre.
13.- Ley 15/2002, de 11 julio, Castilla La
Mancha.
14.- Ley 5/2001, de 17 de octubre, La
Rioja.
15.- Ley 3/2001, de 4 de abril, Aragón.
C.A de la Rioja, Ley Orgánica 3/1982, de 9
de junio (ampliado por Ley Orgánica 3/
1994, de 24 de marzo y reformado por Ley
Orgánica 2/1999, de 7 de enero
C.A de Valencia, Ley Orgánica 5/ 1982, de 1
de julio.
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Mª Elena Cobas Cobiella
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Drogodependencias
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Originales
Internet y las nuevas tecnologías: evolución de
la página web del Instituto de Estudios de las
Adicciones. www.lasdrogas.info
Jesús A. Lacoste Marín
Resumen
Instituto para el Estudio de las Adicciones
Se realiza una descripción y valoración del nacimiento y aplicación de las nuevas tecnologías en el campo de las adicciones, con especial detalle en la página web del Instituto
para el Estudio de las Adicciones www.lasdrogas.info. Se analiza la evolución desde su
creación y los contenidos que pone a disposición de toda la comunidad profesional
y de la sociedad en general como contribución para la atención y prevención de las
drogodependencias.
Palabras Clave
Internet, Nuevas Tecnologías, Web, email, teléfono móvil, www
Summary
It is made a description and valuation of the birth and application of the new technologies
in the field of the addictions, with special detail in the Web page of the Institute for the
Study of the Addictions www.lasdrogas.info. One analyzes the evolution from its creation
and the contents that make available of all the professional community and the society
in general like contribution for the attention and prevention of drug addiction.
Key Words
Internet, New Technologies, Web, email, cellular telephone, www
Résumé
C’est fait à une description et à une évaluation de la naissance et de l’application des
nouvelles technologies dans le domaine des penchants, avec le détail spécial dans le page
Web de l’institut pour l’étude des penchants www.lasdrogas.info. On analyse l’évolution
de sa création et du contenu qui rendent disponible de toute la communauté professionnelle et de la société en général comme la contribution pour l’attention et la prévention
du penchant de drogue.
Most Clé
Internet, nouvelles technologies, web, email, téléphone cellulaire, www
Correspondencia a:
Avda. Marítima 25. Edif. Jardín del Mar. 38190 Tabaiba – Tenerife. Telf.: 902 153644. Fax: 922 683135. Email: [email protected]
400
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Drogodependencias
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400-410.
(3 y 4)2005
2005
Jesús A. Lacoste Marín
INTRODUCCIÓN
Cuando en el año 1985 el parlamento
español aprobó la creación del Plan Nacional
sobre Drogas yo cursaba los últimos cursos
de la carrera de Psicología en mi añorada
Universidad de Salamanca. Eran tiempos duros
en términos de adicción si lo valoramos por
la incidencia social que tenía el consumo de
heroína o el impacto sobre la sociedad en
forma de atracos a farmacias, tirones en plena
calle o simplemente inseguridad ciudadana
asociada al consumo de un determinado
tipo de sustancias. Entonces en España los
ordenadores eran pocos, se usaban aquellos
discos flexibles de 5+ y los discos duros más
grandes eran de 20 megas (hoy lo normal
son 80 gigas). En los años sucesivos a medida
que cambiaba la realidad del fenómeno de las
drogodependencias, también la informática y
las nuevas tecnologías iban evolucionando e
iniciaban el fulgurante despegue que ahora
disfrutamos.
En el año 1995, sólo diez años tras el
nacimiento del PND, cuando la red Internet
en España era tan sólo una utopía y Bill Gates era un incipiente genio informático que
disponía de un sistema operativo (Windows) muy similar al de los ordenadores Mac,
la información relacionada con las drogas,
las drogodependencias y las adicciones en
general estaba concentrada en los Centros
de Documentación de las Bibliotecas de
las Universidades. Sin embargo, en Estados
Unidos, Internet ya era una realidad tanto a
nivel técnico como por número de usuarios
y para esa fecha existían numerosos web site
dedicados a las drogodependencias.
En esa época, con un viejo ordenador 386 y
un MODEM cuya velocidad máxima era 9600
bds se empezó a gestar la web que hoy todos
30 (3 y 4) 2005
conocen como www.lasdrogas.info. Entonces
eran escasos los programas comerciales para
crear páginas web y el navegador Internet
Explorer estaba en una fase inicial. Mis primeros pasos en Internet sólo eran para usar el
correo electrónico con un programa llamado
Pegasus que funcionaba directamente sobre
el sistema operativo MSdos.
Con el nacimiento de la red Teleline por
parte de Telefónica se fue abriendo el abanico
de posibilidades y por fin pude acceder a VER
páginas web. Entonces una hora de conexión
costaba casi tanto como ahora la cuota mensual de un acceso ADSL.
Y fue en ese momento, cuando descubrí la
web del National Clearinghouse for Alcohol
and Drug Information (NCADI) en www.
health.org y empecé a pensar en hacer algo
parecido pero adaptado a nuestro entorno
y, por supuesto, en español. La posibilidad de
poder contribuir de una forma sencilla a la
prevención de las drogodependencias mediante la creación de un servicio transmisor y
generador de información me abrió un nuevo
mundo que yo imaginaba ilimitado. Compré
un nuevo MODEM de 14.400 bds y contraté
un acceso total a Internet en uno de los ISPs
(Internet Service Provider) que nacieron en
España: Arrakis. En el espacio que dicha empresa daba a sus clientes (10 Mb) comencé
a crear unas primeras páginas que sólo eran
simples adaptaciones al español de contenidos
existentes en otras web de gran impacto en
Estados Unidos y Canadá.
En 1996 junto con otros compañeros y
amigos creamos la Asociación Instituto para
el Estudio de las Adicciones como plataforma
sobre la que asentar esa idea primaria de
ofrecer un nuevo canal de comunicación e
información y con la finalidad de trabajar en y
desde Internet en pro de la prevención de las
Revista Española
de
Drogodependencias
401
Internet y las nuevas tecnologías: evolución de la página web del Instituto de Estudios de las Adicciones...
drogodependencias. Así nació nuestra primera
dirección en Internet www.arrakis.es/iea. Por
aquel entonces, los nombres de dominio eran
caros, su uso poco extendido y difícil de obtener. Sin embargo, no existía en España ninguna
otra página web sobre este tema.
Al mismo tiempo, creamos una lista de discusión a través del correo electrónico llamada
INFODRO. Pero todavía había pocos usuarios
de Internet y el uso del email muy reducido
al ámbito universitario y la Red Iris.
Al año siguiente, Internet había eclosionado
y florecieron todo tipo de empresas, servicios,
páginas…. pero la página del IEA seguía siendo
líder, gracias sobre todo a que habíamos sido
pioneros en el uso de la red. A partir de ese
momento comenzaron otras instituciones y
organizaciones a crear sus propias páginas
web. Entonces, firmamos un convenio de colaboración con la Fundación de Ayuda contra
la Drogadicción (FAD) para aunar esfuerzos
en esta materia y poder sacar más provecho
de nuestra experiencia de trabajo en la web.
De esta manera, durante varios años, nuestras páginas fueron comunes y compartimos
recursos y trabajo.
En 1999, en pleno apogeo de la burbuja
de Internet y las empresas puntocom, la
web del IEA fue declarada de Interés para la
Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas. Era la primera vez que el
PND (Plan Nacional sobre Drogas) otorgaba
este distintivo a una página web, puesto que
anteriormente sólo se había concedido a
publicaciones o congresos.
Nuestro trabajo continuaba, el número de
visitantes a la página web crecía continuamente y el éxito de la web era una evidencia, lo
cual se concretó en la concesión en el año
2000 de un Accesit en los Premios Reina
402
Revista Española
de
Drogodependencias
Sofía contra las Drogas, modalidad Medios
de Comunicación Social. Una vez más, fuimos
pioneros, pues fue la primera vez que una
página web obtenía esta alta distinción.
Pero llegó la crisis de la nueva economía
y la burbuja de las empresas de Internet y la
FAD decidió retirar su apoyo económico y
rescindir nuestro acuerdo de trabajo conjunto
en Internet. En ese delicado momento, nuestra
apuesta fue continuar con el proyecto que ya
estaba sobradamente consolidado, era líder en
el mundo en español y una referencia clara en
materia de adicciones. Muchas empresas, de
todo tipo y condición, desaparecieron pero
el Instituto para el Estudio de las Adicciones
logró el respaldo de la Dirección General
de Drogodependencias (ahora Dirección
General de Atención a la Dependencia) de
la Generalitat Valenciana, con su director
general –Bartolomé Pérez Gálvez- al frente
y completamente decidido a contribuir al
mantenimiento de la página web. Desde entonces su apoyo se ha mantenido constante
y ha permitido que la web haya mejorado de
forma continua tanto en calidad de los contenidos como en la aplicación de los últimos
avances técnicos en la creación y desarrollo
de páginas web.
Además, desde 2004 contamos también
con el apoyo económico de la Dirección General de Atención a las Drogodependencias
del Gobierno de Canarias y casi desde el inicio
con el soporte tecnológico de la empresa
SoyDigital.com.
El objetivo último del IEA siempre ha sido
el de unir la tecnología y la información sobre
adicciones y fruto de ello han sido los paulatinos avances que hemos ido incorporando en
la propia web, así como la creación de nuevos
servicios: en 2002 creamos el primer y único
directorio de recursos web sobre drogode-
30 (3 y 4) 2005
Jesús A. Lacoste Marín
pendencias en Internet: www.lasdrogas.net.
Hoy día agrupa a más de 1.500 direcciones
web de todo el mundo clasificadas en más
de 100 categorías y permite el acceso rápido
y directo a cualquier web sobre drogas existente en el mundo.Tan sólo existe un servicio
similar impulsado por la European association
of libraries and information services on alcohol
and other drugs (ELISAD) a nivel europeo
(www.elisad.uni-bremen.de).
La más reciente novedad que hemos
creado ha sido el servicio de información a
través de teléfonos móviles (www.lasdrogas.
info/movil) con el que pretendemos crear un
nuevo modo de comunicación con y para los
jóvenes. Hoy día, el teléfono móvil se ha convertido en un utensilio de uso generalizado
por toda la población y nuestro objetivo ha
sido acercarnos a los jóvenes por medio de
los mensajes SMS.
Hoy día, la web del IEA www.lasdrogas.
info es un punto de encuentro y consulta
para cientos de miles de personas de todo
el mundo y nuestra lista de distribución de
información INFODRO agrupa a casi 7.000
personas. Colaboramos con Instituciones y
Asociaciones en la difusión y promoción de
todo tipo de actos y eventos y servimos noticias sobre drogodependencias a casi 100.000
personas todos los meses.
CARACTERÍSTICAS Y
CONTENIDOS DE LASDROGAS.
INFO
Web lasdrogas.info
En la página web se puede obtener mucha
y variada documentación relacionada con los
riesgos derivados del uso de drogas: Existe un
apartado de noticias de actualidad renovado
30 (3 y 4) 2005
diariamente, información sobre novedades
legislativas, novedades editoriales, publicaciones y revistas profesionales, reportajes monográficos (sobre el botellón, ocio nocturno,...),
agenda de eventos y congresos, artículos de
opinión, etc.
Las sede web www.lasdrogas.info de Internet ofrece un completo dossier para que los
jóvenes, padres, profesionales, etc. estén totalmente informados acerca de cada una de las
sustancias capaces de genera una adicción.
Existen dos grandes secciones: profesional y
general. En la sección PROFESIONAL se agrupan los contenidos exclusivamente dirigidos
a psicólogos, médicos, psiquiatras, educadores
y resto de profesionales que intervienen en
drogodependencias. En la sección GENERAL
se puede encontrar documentación de uso
masivo por parte de cualquier persona preocupada por el problema del consumo de
drogas y las adicciones.
Información sobre sustancias
En la dirección www.lasdrogas.info/drogas
se pueden encontrar información acerca de
las siguientes drogas:
-
Alcohol
-
Anabolizantes (doping)
-
Anfetaminas
-
Cocaína y Crack
-
Extasis y drogas de diseño
-
Haschis, cannabis, marihuana
-
Heroína
-
Inhalantes
-
LSD
-
Metadona
-
Metanfetamina
-
Tabaco
De cada una se incluye: descripción, cómo
se usa/consumo, efectos, reducción de riesgos/daños, legislación y argot. Además, de
Revista Española
de
Drogodependencias
403
Internet y las nuevas tecnologías: evolución de la página web del Instituto de Estudios de las Adicciones...
forma complementaria, se añaden noticias de
actualidad sobre la droga indicada, un foro de
discusión y participación abierto al público,
novedades editoriales, criterios diagnósticos
y un sistema para recibir un resumen de la
información en el propio teléfono móvil (este
servicio sólo es válido en España).
El objetivo es facilitar el acceso a información y así fomentar el diálogo sincero en torno
a las drogas tanto entre los propios jóvenes
como entre éstos y sus padres o profesores.
Frente a las drogas la única opción no válida es darle la espalda o tratar de ignorarlas.
Actuar y pensar sin tener en cuenta que las
drogas son una realidad de nuestra vida cotidiana es una forma evasiva de enfrentarse
ante una situación potencialmente peligrosa.
Todo lo contrario, es necesario ‘plantar cara’
y tomar un postura firme y consolidada ante
las drogas y para ello, la primera condición
necesaria (pero no suficiente) es la adquisición
de los conocimientos básicos. Sin información,
nuestra opinión será sesgada y fuera de la
realidad. Hablemos de las drogas, hablemos
de sus efectos, de sus riesgos….
Canales temáticos
Hay cuatro canales con información específica para colectivos diferenciados: Canal
Padres/Madres; Canal Niños/Jóvenes; Canal
Profesores y Canal Pacientes.
Base de datos de Centros
Es una base de datos en Internet con todas
las Direcciones y Teléfonos de Interés de Centros, Asociaciones e Instituciones relacionadas
con las Drogodependencias.
Con este directorio, el Instituto para el
Estudio de las Adicciones (IEA) a través de su
404
Revista Española
de
Drogodependencias
web www.lasDrogas.info pretende ofrecer a
los usuarios una forma más fácil de encontrar
y ponerse en contacto con el Centro, Organización,... más próximo a su localidad.
Se accede a través de la dirección URL en
Internet http://www.lasdrogas.info/centros/
Una vez se entra la página, el usuario únicamente tiene que seleccionar qué tipo de
información está buscando en función de unas
categorías genéricas:
• Unión Europea
• Plan Nacional sobre Drogas.
• Planes Autonómicos sobre Drogas
• Centros de Atención y Tratamiento.
Dentro de la sección de ‘Unión Europea’
ofrecemos un listado de los principales organismos y organizaciones vinculados con esta
materia con competencias a nivel europeo. En
las categorías de ‘Plan Nacional’ y ‘Planes Autonómicos’ el usuario encontrará la dirección
completa de la institución correspondiente
encargada de las drogodependencias a nivel nacional o dentro de cada Comunidad
Autónoma.
Dentro de la última categoría, Centros de
Atención y Tratamiento, se puede acceder a
un listado completo y riguroso de todo tipo
de centros de tratamiento en España. Estos
datos se pueden encontrar desde diferentes
modalidades:
• A través del mapa de España, seleccionando la provincia de interés
• A través de las Banderas de las Comunidades Autónomas
• A través del Buscador: desde esta opción la
búsqueda permite encontrar centros según
el tipo (Centros ambulatorios, Centros de
Día, Comunidades terapéuticas,…)
Los datos que la web ofrece en cada caso
30 (3 y 4) 2005
Jesús A. Lacoste Marín
son: nombre completo del recurso seleccionado, dirección postal, teléfono y fax, email
y web (si la hubiere) y un indicativo de si es
público o privado. Esta información, además de
verse en pantalla de forma ordenada, también
se puede obtener impresa.
Base de datos de Noticias de
Actualidad
Disponemos de la mayor base de datos
de noticias relacionadas con las drogodependencias y las adicciones. Cada día se insertan
un promedio de tres noticias que hacen referencia a las novedades que se publican en
medios de comunicación y revistas científicas.
Dichas noticias se muestran directamente en
la página de inicio del web pero también se
pueden consultar directamente en la base de
datos, permitiendo realizar búsquedas por año,
fecha de publicación o palabra clave.
Base de datos de Legislación
Esta base datos recoge todo tipo de registros publicados en cualquier Boletín Oficial
(del Estado, de las Autonomías y de la Unión
Europea) que esté relacionado con las adicciones; desde el nombramiento de cargos públicos hasta la convocatoria de subvenciones,
premios, subastas de bienes decomisados a
narcotraficantes, resoluciones, decretos, etc.
Artículos de Opinión
Más de cien artículos se incluyen en esta
sección donde un destacado especialista
expone su visión en torno a un problema o
situación concreta. Los temas y autores son
muy diversos siendo éstos últimos de España
o del extranjero. También es posible buscar a
partir de autor o palabra clave puesto que son
almacenados en base de datos de tal forma
que todos los artículos publicados son de fácil
acceso en cualquier momento.
Escaparate
La sección ESCAPARATE está dedicada a
exponer todo tipo de materiales, productos,
herramientas, libros,… relacionados con
las drogodependencias. También incluye un
apartado destinado a la formación: se informa
y ofrecen todo tipo de detalles sobre cursos
de formación relacionados con las adicciones
y las drogodependencias.
Revistas Científicas
Esta base de datos se actualiza conforme
aparece publicado un nuevo registro en alguno
de los Boletines oficiales. Permite el acceso
al texto completo de la orden, convocatoria,
decreto,…
En la sección Profesional existe una base de
datos que almacena información de todos los
números de las principales revistas científicas
sobre drogas y adicciones que se publican en
el mundo y tienen versión electrónica. De esta
manera, cualquier profesional puede tener
acceso a los sumarios de su revista de interés
o conocer lo último que se ha publicado en
los últimos números de las revistas más importantes del sector. Incluso se puede filtrar
información seleccionando por el nombre de
la revista o el año que nos interese.
Se puede consultar seleccionando alguno
de estos criterios: año de publicación, fuente
de publicación, ámbito de aplicación o palabra
clave.
Servicio de información sobre
drogas para teléfonos
móviles
30 (3 y 4) 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
405
Internet y las nuevas tecnologías: evolución de la página web del Instituto de Estudios de las Adicciones...
Permite obtener información sobre los
diferentes riesgos asociados al consumo de
drogas desde el teléfono móvil.
web relacionadas con el fenómeno de las drogodependencias y las adicciones en español
en el mundo.
Puesto que está muy de moda el uso del
móvil entre los jóvenes pretendemos usar los
teléfonos como vehículo para hacerles llegar a
los chicos/as la información sobre las drogas.
El web, accesible desde la dirección www.
lasdrogas.net contiene más de 1.500 enlaces
a páginas web de todo el mundo relacionadas
con el tema de las drogas. Se han clasificado
en 10 categorías permitiendo así de una forma
fácil y rápida que cualquier persona pueda
encontrar la información o web que busca.
Las categorías permiten clasificar las páginas
web por países, tema tratado, Comunidad
Autónoma (en el caso de España), etc.
Para ello se han creado dos modalidades
de interacción
1.- Personalización del móvil con logos relacionados con la salud, la prevención del uso
de drogas o la toma de conciencia sobre
los riesgos del consumo de drogas.
Es un mensaje de apoyo o recordatorio
ante determinadas situaciones.
(válidos para teléfonos Nokia)
2.- Acceso a información sobre drogas desde
el teléfono móvil. Mediante el envío de un
mensaje SMS se obtiene una información
específica sobre una gran variedad de
temas. De esta manera a través del simple
envío de un mensaje SMS una persona
obtiene automáticamente la información
o datos que precisa en torno a cualquier
tipo de sustancia, direcciones de centros
oficiales de atención a drogodependencias,... Es un sistema que sirve información
bajo demanda. Está operativo 24 horas al
día y 365 días al año. Válido para cualquier
tipo de móvil.
El objetivo de este servicio es poner la
información (básica) al servicio de todos los
chicos/as usando una tecnología de moda y
mediante el “instrumento” que más valoran/
usan los jóvenes hoy día. Es información bajo
demanda. Cada mensaje tiene un coste para el
que lo envía de 0.30 Euros (unas 50 ptas).
Web www.lasdrogas.net
Para facilitar la navegación, el visitante puede
optar por entrar a la categoría de su interés o
bien realizar directamente una búsqueda en
la propia base de datos donde se almacenan
todos los datos. Desde la opción de búsqueda
avanzada puede seleccionar su criterio de
análisis a partir de una palabra clave, tema,...
La configuración básica del Directorio está
creada en español y once (11) idiomas más
(inglés, francés, alemán, italiano, portugués,
ruso, polaco, finlandés, holandés, sueco y thai)
por lo que cualquier persona desde cualquier
parte del mundo podrá beneficiarse de este
novedoso servicio.
Permite además de la búsqueda por categorías, acceder de forma directa a la lista de
los enlaces más visitados por los usuarios, los
web más votados, los recomendados por el
editor (el IEA) o el acceso a la lista de enlaces
nuevos.
Además, se permite que el visitante del directorio mantenga una relación activa con el
programa ya que le autoriza:
- a realizar comentarios sobre cada uno de
los web incluidos
- a realizar una evaluación según su propia
lasdrogas.net es un Directorio de páginas
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Revista Española
de
Drogodependencias
30 (3 y 4) 2005
Jesús A. Lacoste Marín
opinión (pueden valorar a cada web en un
gradiente que va desde la opción ‘malo’ a
‘genial’)
- a enviar propuestas de nuevos enlaces y/o
categorías.
Esta información, junto con las recomendaciones del editor, convierte a las www.lasdrogas.net en un recurso activo y muy dinámico
que tiene en cuenta la opinión directa de
todos los visitantes.
Lista de correo INFODRO
La lista de correo INFODRO, activa desde
1996, agrupa hasta hoy día 28-06-2005 un
total de 6.988 personas procedentes de todo
el mundo.
En la página web http://www.elistas.net/lista/
infodro puede acceder a toda la información
relativa a la lista: miembros, fecha, mensajes
enviados, etc.
Las actividades del Instituto para el Estudio
de las Adicciones (IEA) se centran en:
- Gestión, administración y actualización
diaria de las páginas web www.lasdrogas.
info y www.lasdrogas.net
- Gestión, administración y envío de información a la lista INFODRO. Se envía:
• 1 boletín semanal con información de
actualizaciones del web www.lasdrogas.info
• 1 boletín quincenal con información
sobre novedades legislativas
• 1 boletín mensual con información
sobre los próximos eventos, congresos, jornadas,…
Suscribirse a la lista INFODRO es totalmente GRATIS y permite estar informado/a con
toda la información semanal así como recibir
las novedades legislativas y la programación
de eventos directamente en nuestro buzón
30 (3 y 4) 2005
de correo electrónico.
Para suscribirse, tan sólo es necesario enviar
un email a [email protected] indicando en
el mensaje SUSCRIBIR A INFODRO.
Comités Científico y de Honor
Forman par te del Comité de Honor
destacadas personalidades del campo de las
adicciones de todo el mundo: el Presidente
del Observatorio Europeo de las Drogas; el
Presidente de la Comisión Mixta CongresoSenado para el tema de las drogas; máximas
autoridades de Argentina, Bolivia, Colombia,
Chile, EE.UU., México, Panamá, Perú, Portugal,
Uruguay y Venezuela; los representantes
autonómicos de 13 CC.AA.; los presidentes
de las más importantes Asociaciones de profesionales de toda España y los directores de
Yahoo! Iberia y Google-España.
Ver listado completo en: http://www.lasdrogas.info/chonor/miembros.html
El Comité Científico lo conforman, en
este momento, 54 profesionales que abarcan todas las áreas de trabajo (prevención,
tratamiento, investigación, docencia,…) de
reconocido prestigio procedentes de España,
Italia, Finlandia, Portugal, EE.UU., Chile, Reino
Unido, Argentina, Perú, Colombia, México y
El Salvador.
Ver listado completo en: http://www.lasdrogas.info/ccientifico/miembros.html
RESULTADOS: ANÁLISIS DE
VISITAS
Como ya he indicado, el Instituto para el Estudio de las Adicciones es la entidad creadora
y editora de las páginas web en Internet
1)
www.lasdrogas.info
Revista Española
de
Drogodependencias
407
Internet y las nuevas tecnologías: evolución de la página web del Instituto de Estudios de las Adicciones...
2) www.lasdrogas.net (activo desde
noviembre de 2002)
Además, administra la lista “INFODRO”
de distribución de información sobre drogodependencias en Internet vía correo
electrónico.
Las tablas 1 y 2 muestran el número de
visitas recibidas por los web www.lasdrogas.
info y www.lasdrogas.net, respectivamente. El
número de visitas a ambos web se incrementó
en 2004 en relación al año anterior entre
un 235 y un 86%, y alcanza un promedio de
117.678 usuarios y 673.105 páginas visitadas
mensualmente.
DISCUSIÓN
Difícilmente podíamos imaginar hace ahora nueve años que partiendo de la nada….
íbamos a llegar a crear la principal web sobre
drogas en español en el mundo, pero las estadísticas de visita son un claro reflejo del éxito
que nuestro trabajo diario viene cosechando,
y ello pese a que España todavía figura en
la cola a nivel europeo en el desarrollo de
la sociedad de la información y el número
de usuario de Internet sigue siendo bajo: en
este momento se estima que el número de
usuarios de conexión a Internet mediante
ADSL ronda los cuatro millones de personas
(Asociación de Internautas, 2005)
TABLA 1: Visitas recibidas por el web www.lasdrogas.info. Año 2004
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Revista Española
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Drogodependencias
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Jesús A. Lacoste Marín
TABLA 2: Visitas recibidas por el web www.lasdrogas.net. Año 2004
Vivimos en la sociedad de la información
(Castells, 2000) o como el gurú del MIT,
Nicholas Negroponte sugirió a principios
de los noventa, vivimos en un ‘mundo digital’
(Negroponte, 1995), por eso, cada día cobran
más sentido las iniciativas que utilizan Internet
como canal de comunicación. El web del IEA
o lasdrogas.info como también se le conoce
apuesta claramente por este presente-futuro y
es hoy día una referencia y portal de consulta
tanto para profesionales como para periodistas o padres/madres o jóvenes que buscan
información actual y de calidad.
No ofrecemos información corporativa
sino que el web se ha convertido en un canal
de transmisión de documentación accesible
para muchos millones de personas de habla
hispana en todo el mundo. De hecho según
30 (3 y 4) 2005
las estadísticas de visita, la web recibe usuarios
de los cinco continentes.
Hoy día no hay evento, congreso, jornada
o libro que no se publicite en lasdrogas.info.
Toda la actualidad se da cita en este web. No
obstante, estamos en un contínuo proceso de
cambio y renovación ya que este campo de las
Nuevas Tecnologías ofrece nuevas aplicaciones
y recursos continuamente. Por ello, uno de
nuestros principales compromisos ‘morales’
con los visitantes es mantener siempre un
nivel alto tanto en la calidad de los contenidos
como en la aplicación de las novedades tecnológicas que supongan una mejorar y avance
en el desarrollo de la propia web.
No obstante, hay que tener en cuenta
Revista Española
de
Drogodependencias
409
Internet y las nuevas tecnologías: evolución de la página web del Instituto de Estudios de las Adicciones...
que Internet y las nuevas tecnologías pueden
ser usadas con fines opuestos. De hecho, la
Comisión de Estupefacientes de las Naciones
Unidas, en su 42 período de sesiones, celebrado en Viena del 16 al 25 de marzo de 1999
elaboró un documento titulado “La oferta y
el tráfico de drogas, incluidos los informes de
los órganos subsidiarios de la Comisión, y los
efectos de las redes de comunicación, como
la Internet, sobre el problema de las drogas”
(Naciones Unidas, 1999) en el que señala que
“el crecimiento exponencial del acceso a servicios de la Internet y el carácter no regulado
de este sector de las comunicaciones internacionales vienen causando preocupación, ya
que la Internet podría ser explotada por los
traficantes de drogas en la realización de sus
nefastas actividades. Todavía no hay pruebas
de que éste sea ya un factor importante en
los más altos niveles del tráfico, y la naturaleza
insegura de los servicios de la Internet podría
limitar su uso por las grandes organizaciones
delictivas. No obstante, los riesgos que plantea
el uso de esos servicios para el suministro de
drogas ilícitas o la incitación a fabricarlas es
algo que los Estados deben seguir vigilando
de cerca”.
Por otra parte, es de vital importancia
destacar que actualmente no hay ningún
órgano nacional/internacional encargado de
vigilar y estudiar las amplias repercusiones
de Internet, ni de elaborar normas para su
uso. Proliferan las páginas web sobre drogas
pero no existe ningún sistema que acredite
o avale la información que ofrecen, siendo
esta situación una clara inducción a la duda
para el lector/internauta no profesional. El
informe SEIS(2002) «Luces y sombras de la
información de salud en Internet» recoge las
ponencias y conclusiones de la reunión organizada por la Sociedad Española de Informática
de la Salud (SEIS) celebrada en Pamplona el
18 de junio de 2002 y expone la situación en
materia de páginas web relacionadas con la
410
Revista Española
de
Drogodependencias
salud, entre las que se encuadran la web sobre
drogas. La conclusión, de dicho estudio es
rotunda: existen algunas iniciativas para crear
un sistema o sello que otorgue credibilidad y
fiabilidad a las páginas web pero ninguna goza
del consenso universal por lo que la situación
de incertidumbre para el lector persiste.
BIBLIOGRAFÍA
Asociación de Internautas (2005): Noticia
publicada el 16-06-2005. http://www.internautas.org/html/2982.html
Castells, M. (2000): La era de la información.
Vol. 1 La sociedad red. Madrid: Alianza Editorial.
2ª edición.
Informe SEIS. Sociedad Española de Informática de la Salud (2002). Accesible en http://
www.seis.es/informes/2002/default.htm
Naciones Unidas (1999): Comisión de
Estupefacientes. 42 Período de Sesiones. Documento E/CN.7/1999/9 Negroponte, N. (1995): El mundo digital.
Barcelona: Ediciones B
30 (3 y 4) 2005
Sociedad
Veinte años de intervención en drogodependencias:
una perspectiva desde Proyecto Hombre Valencia.
Juan Manuel Ferrer Angulo (*), Ángel Turbi Pinazo (**), José A. Rovira Rodas(***)
(*) Psicólogo. Director Técnico del Área de Rehabilitación de la Fundación Arzobispo Miguel Roca. Proyecto Hombre Valencia.
(**) Psicólogo. Director Técnico del Área de Prevención de la Fundación Arzobispo Miguel Roca. Proyecto Hombre Valencia.
(***) Psicólogo. Subdirector del Área de Rehabilitación de la Fundación Arzobispo Miguel Roca. Proyecto Hombre Valencia. Coordinador del Centro de Día de Valencia.
Resumen
A lo largo de estos últimos veinte años, la realidad del consumo de drogas en nuestro
país, y su evolución y cambios de paradigmas, ha sido una constante. En función de dichos
cambios a su vez ha ido evolucionando la realidad de las intervenciones en este campo.
Este artículo pretende ser una breve visión de esta evolución de veinte años desde la
perspectiva de una organización como Proyecto Hombre en Valencia, evolución que
también lo ha sido de esta misma organización, ya que hace precisamente veinte años
iniciamos nuestra andadura con este propósito en la ciudad de Valencia y para toda la
comunidad, para convertirnos en el referente que pretendemos ser hoy día.
Palabras Clave
Consumo de drogas, intervención en drogodependencias, cambio de paradigma, evolución,
organización, Proyecto Hombre.
Summary
Throughout the latter twenty years, the reality of the consumption of drugs in our
country, and its evolution and changes of paradigms, has been a constant. Depending on
the above mentioned changes in turn it has been evolving the reality of the interventions
in this field. This article tries to be a brief vision of this evolution of twenty years from
the perspective of an organization as Proyecto Hombre in Valencia, evolution that also
it has been of the same organization, since it does precisely twenty years we initiate our
gait with this intention in the city of Valencia and for the whole community, to turn into
the modal that we try to be today.
Key Words
Drug consumption, intrevention in drog addictions, shift of paradigm, evolution, organization, Proyecto hombre
Correspondencia a:
Fundación Arzobispo Miguel Roca. Proyecto Hombre Valencia. C/ Padre Esteban Pernet 1-3. 46014 Valencia. Tel 96 359 77 77 Fax 96 379 92 51. e- mail. [email protected]
3030(3(3y y4)4)2005
411-419. 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
411
Veinte años de intervención en drogodependencias; una perspectiva desde Proyecto Hombre Valencia.
Résumé
Tout au long de ces dernières vingt années, la réalité de la consommation de drogues
dans notre pays, et son évolution et changements de paradigmes, a été une constante.
En fonction de ces changements à son tour a évolué la réalité des interventions dans ce
domaine. Cet article prétend être une brève vision de cette évolution de vingt années
du point de vue d’une organisation comme Projet Homme en Valence, évolution qu’il a
aussi étée de cette même organisation, puisqu’il y a précisément vingt ans nous entamons
notre marche avec ce but dans la ville de Valence et pour toute la Communauté, pour se
transformer nous ce qui est relatif que nous prétendons être de nos jours.
Most Clé
Consommation de drogues, inttervention dans de dépendantes de les drogues, changement de paradigme, évolution, organisation, Proyecto Hombre.
1.- Introducción
En tiempos de transiciones políticas, intentos golpistas, crisis económica, paro, tensiones
sociales, “movida”, contracultura, televisiones
en color y búsquedas de identidad, emergió
casi sin darnos cuenta, sin referencias, sin explicaciones, sin experiencia, y a menudo, sin
respuestas, un fenómeno que se convertiría
en uno de los problemas que más preocupaba
a la joven, desorientada y convulsa sociedad
democrática española de principios de los
80: “la droga”.
Durante más de una década y al ritmo de
“princesas de labios de fresa”, perros callejeros, jeringuillas – “chutonas” -,“litronas”, tirones
y héroes muertos por sobredosis, la heroína
- “el caballo” -, se extendió entre la juventud
sin importarle condición ni estatus, cebándose
en mayor medida en los más desfavorecidos,
en aquellos que vivían ya situaciones de precariedad social. Mientras tanto, Rock Hudson
fallece de SIDA en 1985 y precediendo unos
pocos años a la Expo Sevillana y a la llama
olímpica de Barcelona, se dispara la alerta
sobre el contagio de esta enfermedad entre
los consumidores de drogas por vía endovenosa. Con todo esto, en la sociedad se va
412
Revista Española
de
Drogodependencias
conformando una idea de la drogodependencia unida consustancialmente a marginación,
delincuencia, jeringuillas, “mono” y SIDA.
Corrían estos años ochenta cuando, por
iniciativa e impulso de la Diócesis de Valencia,
Cáritas se responsabilizó de dar la necesaria
cobertura legal y económica a un programa
de rehabilitación y reintegración social de drogodependientes en la Comunidad Valenciana.
El Centre Valencià de Solidatitat-Proyecto
Hombre abría sus puertas el 15 de diciembre
de 1985, con todas las ilusiones de encender
una luz de esperanza en el abismo de las
drogas, pero, al mismo tiempo también con
todos los miedos, temores e incertidumbres
ante el futuro.
2.- Los inicios
Durante toda la década de los ochenta se
conceptúa claramente la realidad de los consumos de drogas como un problema social;
problema que, con el impacto que producen
algunas de ellas, va a generar una intensa
alarma social y un fuerte rechazo, de ciertos
tipos de consumos, por amplios sectores de la
población. En los dos o tres años posteriores
30 (3 y 4) 2005
Juan Manuel Ferrer Angulo, Angel Turbi Pinazo, José A. Rovira Rodas
la presencia social de las drogas se intensifica,
y aumenta, al tiempo, la alarma social de la
población. .
En este clima de preocupación social
se produce una fuerte implicación de las
autoridades públicas. Podemos resumir las
características de este periodo en:
• «Protagonismo de la “heroína” como mito
de una potencialidad social considerable
que se asocia a una serie de factores y
efectos, lo cual contribuye a que éstos
aparezcan y se reproduzcan por contagio
social y funcionen como un estereotipo de
gran impacto y efectividad.
• Aumento del consumo de cocaína, aunque
con resultados más enmascarados, dado
que la cocaína tiene un período de “silencio
clínico” de tres a cinco años, y es a partir de
esta etapa cuando aparecen los problemas
de salud.
• Polémica en torno a la peligrosidad de los
efectos del cannabis para la salud y su aceptación entre los jóvenes como producto
menos peligroso, convirtiéndose entre los
adolescentes y los menores, junto con el
alcohol, en un factor multiplicador de riesgo
para el consumo de otras drogas.
• Asociación entre el consumo de drogas
ilegales y el aumento de la inseguridad
ciudadana, identificando drogadicto-delincuente y droga-factor de criminalidad en
un discurso más ideológico que científico
ya que, normalmente, las drogas vienen a
reforzar procesos de desviación social ya
existentes.
• Tendencia a identificar o circunscribir el
consumo de drogas, y especialmente las
drogas ilegales, al ámbito juvenil.
Como puede verse, se apunta aquí al prota-
30 (3 y 4) 2005
gonismo de la heroína en aquellos momentos,
al consumo creciente pero enmascarado de la
cocaína, a la polémica en torno a la peligrosidad del cannabis sobre la salud, a la asociación
ideologizada del consumo de drogas ilegales y
la inseguridad ciudadana, y a que el problema
de la toxicomanía afecta, además de a los
jóvenes, a todos los grupos sociales.
No obstante, a pesar de su carácter minoritario, el consumo de heroína, como mucho
en torno al 1%, con sus graves consecuencias
sobre los consumidores (muertes por sobredosis y adulteración, desestructuración
personal y familiar, procesos de marginalidad y
exclusión, etc.), junto a la comisión de delitos y
generación de inseguridad ciudadana, y al tratamiento sensacionalista que dan a esta situación determinados medios de comunicación,
hacen que el problema social de las drogas
gire en torno a esta sustancia, y que de un
modo muy singular se definía como:“la droga”.
Todo esto, unido a su carácter epidémico y a
la gran cantidad de recursos asistenciales que
demanda, hace que se convierta en la “crisis
de la heroína” (Gamella, J., 1997).
Sin embargo, las subsiguientes investigaciones apor tan nuevo conocimiento que
trasciende esta visión sesgada del problema.
En 1987 se realiza el primer estudio empírico
en España en población laboral (EDIS-UGT,
1987). En él se observa ya que entre población normalizada se dan también consumos
de distintas sustancias, incluso en algunas de
ellas con prevalencias aún más altas: tabaco
diario un 54%, un 16% de consumo abusivo
de alcohol, y en el período de los últimos
doce meses: un 13% de cannabis, un 3.2%
de cocaína, un 1.9% de anfetaminas y un
4.2% de tranquilizantes.. Estos datos suscitan
nuevas expectativas de racionalización de los
estereotipos de marginalidad dominantes. En
Revista Española
de
Drogodependencias
413
Veinte años de intervención en drogodependencias; una perspectiva desde Proyecto Hombre Valencia.
el editorial del número siete de la revista del
Plan Nacional (Comunidad y drogas, 1988)
con el título “Toxicomanías de la normalidad”
se hace una reflexión al respecto, y que, entre
otras cosas, señala que «Atender a la realidad
drogodependiente de nuestra sociedad comporta ya variar los enfoques, entrar en nuevas
consideraciones, tener en cuenta cómo los
usos y abusos se imbrican cada vez más con
la normalidad, con la cotidianidad.»
Pero en aquellos momentos lo cierto es
que las diversas consecuencias de los consumos de heroína, iniciados unos años antes,
arrecian duramente. Las tasas de mortalidad
y atención hospitalaria urgente se disparan y,
junto a ello, surge con fuerza una nueva pandemia: el contagio por HIV en la población de
drogodependientes
Todas estas circunstancias desfavorables,
más la intensa alarma social, con más de un
50% de la población que considera las drogas
uno de los tres problemas más importantes
del país, junto al paro y el terrorismo (en 2001
la mención de las drogas y el alcoholismo es
tan sólo un 16.5%), hacen que la conceptuación de las drogas como problema social, se
resista a abandonar el sesgo adquirido de
marginalidad, exclusión y criminalidad. Habrá
que esperar a los primeros años noventa para
que, con la consolidación de los cambios que
se dan en los consumos —nuevas sustancias,
nuevos patrones de consumo, disminución
de la heroína—, aparezca un nuevo paradigma. No obstante, el año de 1987 anticipa ya
uno de sus aspectos claves: la conversión de
un problema político, la intensa inseguridad
provocada por la heroína, en otro de salud
pública.
Es en este marco cuando en 1985 se crea
en Valencia el Centre Valencià de Solidaritat
con la intención de poner en marcha el pro-
414
Revista Española
de
Drogodependencias
grama terapéutico Proyecto Hombre y dar
respuesta a la cruda realidad de la toxicomanía
en nuestro entorno que alcanzaba en aquellos momentos una dimensión inesperada. La
iniciativa parte de la Iglesia Diocesana y se
encauza a través de Cáritas. Tras un período
de formación en Roma de los primeros terapeutas surgidos del voluntariado se inicia
la actividad del centro. Progresivamente se
van abriendo las tres fases del programa, y se
habilitan las infraestructuras necesarias para
atender las crecientes necesidades y retos que
nos plantea la sociedad valenciana respecto al
problema de la drogadicción. En diciembre se
abre la acogida, en junio del 86 la comunidad terapéutica y en marzo de 1987 la fase
de reintegración. El creciente número de
usuarios nos obliga muy pronto a ir habilitando nuevos locales más amplios y residencias
adecuadas para desarrollar satisfactoriamente
la labor terapéutica.
El trabajo a realizar por la persona drogodependiente en el programa Proyecto Hombre
consistía fundamentalmente en un proceso de
maduración y crecimiento personal que le
permita volver a sentirse a gusto consigo
mismo y que le ayude a integrarse y resocializar en un entorno constructivo donde
la relación con las personas y el entorno
lo enriquezcan. Para ello era fundamental
que retome actitudes, relaciones y valores
satisfactorios para él mismo. En este proceso
de maduración cada persona es protagonista
de su evolución y es capaz de integrarse
en un entorno satisfactorio construido con
esfuerzo.
El programa terapéutico educativo Proyecto Hombre se construye entonces para
ayudar a las personas que quieren abandonar
las drogas a que ellas mismas realicen todo
este proceso de cambio y lo enriquezcan con
30 (3 y 4) 2005
Juan Manuel Ferrer Angulo, Angel Turbi Pinazo, José A. Rovira Rodas
el entorno propio. Los objetivos se organizan
y se escalonan en fases, con el fin de facilitar
su consecución. Cada estructura terapéutica
se adecua y se organiza sobre la base de los
objetivos planteados y las características de
los usuarios. Los grupos de auto-ayuda eran
la piedra angular de la forma de hacer en Proyecto Hombre, y la terapia de confrontación el
instrumento terapéutico más frecuente.
3.-Los Cambios En Los
Consumos Y Un Nuevo
Paradigma
En los primeros años noventa se van a consolidar una serie de cambios en los consumos
y en las valoraciones sobre los mismos que,
poco a poco, van a ir modificando la realidad
del fenómeno de las drogas en España y su
conceptualización como problema social. Los
cambios más relevantes que se observan son
los siguientes: el estancamiento y después
un descenso del consumo de heroína; el
surgimiento del éxtasis y de otras drogas de
síntesis; el cambio de ciertas pautas y perfiles
de consumo de algunas sustancias, en especial
el tabaco, el alcohol y el cannabis; el liderazgo
de los psicoestimulantes como principal modelo de policonsumo, desplazando al de los
narcóticos; y, una vez estigmatizada la heroína, un uso más festivo y lúdico (Elzo, J. et al.,
2000) (Calafat, A. et al., 2000) de las restantes
sustancias. En los perfiles de los consumidores
habituales de las distintas sustancias, se encuentran jóvenes con situaciones problemáticas, principalmente,“por contradicciones del
sistema de integración”, pero también otros
en situaciones bastante normalizadas, con
estudios y trabajo, y muy especialmente en
los consumos aún no tan habituales.
El uso de drogas, incluido el uso experimen-
30 (3 y 4) 2005
tal o habitual de drogas ilegales, no constituye
una conducta subterránea, sino que representa valores sociales positivos y explícitos, son
objetivos esenciales para cualquier joven: tener
amigos, sentirse parte de la colectividad, tener
relaciones sexuales y de pareja .Sin embargo,
por sus propiedades las drogas entrañan ciertos riesgos, pueden incluso producir exclusión,
en especial el alcohol y algunas ilegales.
Hacia 1987 se puede establecer un cambio
de tendencia en el problema social de “la
droga” en España. Entonces comienza a fraguarse una nueva configuración de las pautas
más comunes de usos de drogas en nuestro
país. En primer lugar, en esos años puede
datarse un punto de inflexión en la “crisis de
la heroína”, que va transformándose de un
problema eminentemente sociopolítico (de
“seguridad ciudadana”) en un problema de
salud pública. En segundo lugar, ese año se
inicia la popularización de “nuevas” pautas
de consumo de drogas, algunas de las cuales venían extendiéndose desde años atrás,
aunque alcanzarán desde entonces el centro
del escenario público. Tres de esas pautas se
han masificado y han generado considerable
alarma social aunque en ningún caso “crisis
de drogas” comparables a la causada por la
heroinomanía:
1. La extensión entre los jóvenes de formas
de uso excesivo de bebidas alcohólicas,
caracterizadas por frecuentes intoxicaciones
y unos cambios notables en las pautas y
motivaciones de ingesta de alcohol respecto
a generaciones anteriores.
2. La expansión e intensificación del uso de
cocaína entre sectores de la población que
desconocían previamente esa droga y que
no usaban heroína.
3. La más reciente popularización de ciertas
Revista Española
de
Drogodependencias
415
Veinte años de intervención en drogodependencias; una perspectiva desde Proyecto Hombre Valencia.
drogas de síntesis producidas en laboratorios clandestinos y entre las que destacan
ciertos derivados anfetamínicos de anillo
sustituido, como la MDMA o “éxtasis” y
sus congéneres, que, además de efectos
estimulantes, producen otros que podríamos considerar psicodélicos o de distorsión
perceptiva.»
Con las necesarias cautelas, se puede
apreciar un descenso bastante probable de
los consumos en población general, respecto
a 1980 y 1985, en el tabaco diario, el alcohol
abusivo, el cannabis y la heroína. Dadas las
menores diferencias, no es posible establecer
conclusiones sobre la cocaína y los alucinógenos. Los consumos de éxtasis y otras drogas
de síntesis son, como ya hemos dicho, de
aparición más reciente, por lo que en términos
netos sería un incremento en relación a los
estudios anteriores, aunque entre 1995 y 1999
parece apreciarse un cierto descenso de estas
drogas en población general.
El aumento progresivo del consumo de
drogas por las mujeres, especialmente las
jóvenes, más allá de los tradicionales psicofármacos, es un hecho probado y probablemente
irreversible. Y según se ha investigado en un
reciente estudio específico en el colectivo femenino (Navarro, J., 2000) esta incorporación
se produce desde la normalidad. Obviamente,
con la presencia de factores de riesgo, pero
en situaciones en general no desestructuradas, e incluso funcionalmente en procesos de
igualdad en el mundo laboral y de integración
social y política de la mujer.
Este proceso de normalización de los consumos de drogas tiene, sin duda, un aspecto
positivo: la descriminalización del tema. Pero
no debemos confundirnos: los consumos de
drogas, especialmente los abusivos, no son en
416
Revista Española
de
Drogodependencias
sí mismos un hecho positivo. El aumento del
consumo de varias sustancias en los escolares,
las altas prevalencias de consumos abusivos
de alcohol entre los jóvenes, los consumos
en población laboral, la incorporación de la
mujer, la presencia relevante de la cocaína
y las drogas de síntesis, y su liderazgo en el
hoy principal modelo de policonsumo, el de
los psicoestimulantes, son hechos de consecuencias aún imprevisibles. Ciertamente, los
consumos de drogas han sido conceptuados como problema social, y de un primer
paradigma de marginalidad y exclusión se
ha pasado a otro de mayor normalidad y
tolerancia, pero sigue siendo un problema
social, tanto por los factores de riesgo que
en muchas ocasiones están en la base de los
consumos, incluidos los asociados al proceso
de integración laboral y social de las mujeres,
como por sus repercusiones en el conjunto de
la sociedad. Aunque, en honor a la verdad, hay
que decir que, afortunadamente, desde hace
algunos años, organismos públicos y entidades
privadas ya estamos trabajando en esta línea,
con análisis y planteamientos actualizados,
así como con actuaciones más acordes a las
nuevas necesidades y desafíos.
En ese sentido, en Proyecto Hombre al
esquema tradicional del programa (Acogida
– Comunidad - Reintegración), se añadieron
otras vías de tratamiento. En 1990 se crea el
Grup de Suport donde el tratamiento no
suponía el alejamiento del residente de la
estructura familiar. Entre 1990 y 1995 funcionó la comunidad breve de l’Hort seguida de
una reintegración más corta y abierta que la
tradicional. En 1995 los evidentes cambios en
el perfil de los adictos que demandaban tratamiento obligan a una nueva reestructuración
de las líneas terapéuticas. Se pone en marcha
el programa Encontre destinado a reorientar
30 (3 y 4) 2005
Juan Manuel Ferrer Angulo, Angel Turbi Pinazo, José A. Rovira Rodas
la educación de adolescentes que han tenido
contactos con las drogas y que añade al trabajo directo con los jóvenes un intenso trabajo con padres y educadores. Igualmente en
1995 se abre Vesprada orientado a atender
a los «consumidores de nuevo perfil» que en
muchas ocasiones conservan una estructura
familiar y social a pesar de su consumo (pareja e hijos, mantienen su puesto de trabajo,
relación familiar menos deterioradas, vínculos
importantes con el mundo positivo, etc.) y que
precisan un tratamiento más abierto.
Con el paso de los años y ante el crecimiento que experimentó el Centre Valenciá
de Solidaritat, se propuso la creación de un
marco jurídico distinto, que permitiera asegurar la continuidad de las acciones que desde
la Iglesia Diocesana se realizasen en el campo
de las adicciones. Fruto de este análisis nació a
finales de 1995 la Fundación Arzobispo Miguel
Roca (FAMR) que empezó a desarrollar su
labor en enero de 1998. Desde su inicio y
hasta la actualidad acoge en su seno tanto
las tareas de rehabilitación de drogodependientes llevadas a cabo por el CVS “Proyecto
Hombre”, como las de Prevención ejecutadas
por la Unidad de Prevención Comunitaria
“Arzobispo Miguel Roca”.
Por otro lado, el voluntariado y el voluntarismo empiezan a dejar paso a la profesionalización y la especialización. Los tratamiento
ya no se circunscriben al tradicional Proyecto
Hombre necesariamente; se impone la individualización del tratamiento y la multidisciplinaridad. Así pues, la fundamentación teórica
de la intervenciçón en la FAMR, se asienta en
una aproximación multicomponente de base
cognitivo-conductual en la que se integran
elementos del modelo transteórico de cambio en conductas adictivas, de la teoría del
aprendizaje social, condicionamiento clásico y
30 (3 y 4) 2005
operante así como del enfoque de prevención
de recaídas.
3.- El siglo XXI.El nuevo siglo se inicia con las mismas
inquietudes y con nuevos retos. Continuando con el diseño de nuevas estructuras
que se ajusten a la demanda de las actuales
circunstancias, a lo largo del 2002 empiezan
su andadura en nuestra casa dos nuevos
servicios llamados constituirse como buques
insignia del tratamiento de las dependencias
en la Comunidad Valenciana. Por un lado, la
Unidad de Deshabituación Residencial para
Mujeres “Julián Álvarez Subirats”, servicio
que atiende a mujeres con o sin hijos que
necesitan un entorno de convivencia diaria
controlado durante su proceso de rehabilitación, y por el otro, la Comunidad Terapéutica
Intrapenitenciaria, ubicada en el módulo I del
establecimiento Penitenciario de Picassent,
servicio que atiende a internos del mismo que
soliciten realizar un tratamiento de deshabituación de drogodependencias en el propio
establecimiento.
Por otro lado, más allá de las adicciones
que podrían considerarse «clásicas» el final
del siglo XX y el principio del XXI han traído
a las sociedades occidentales, inmersas en la
posmodernidad, nuevas adicciones que no
están relacionadas con el consumo de sustancias sino con la práctica de determinada
actividad, como el sexo, Internet, el teléfono
móvil, la obsesión por el cuerpo sano, las
compras, el trabajo... provocados por el miedo
que impone la llamada «sociedad del riesgo»
en la que vivimos. Muchas de estas adicciones
se instalan entre los jóvenes y adolescentes;
para atender esta creciente demanda, el Servicio de Atención a Jóvenes y Adolescentes,
Revista Española
de
Drogodependencias
417
Veinte años de intervención en drogodependencias; una perspectiva desde Proyecto Hombre Valencia.
programa de Intervención Temprana, no se
limita tan sólo a las dependencias químicas,
sino que pretende facilitar la superación de
problemas derivados de cualquier conducta
adictiva a dichos perfiles, además de ofrecer
formación, información y asesoramiento a
sus familias.
Este servicio se adscribe a un área de
nuestra acción en reciente pujanza: el Área
de Prevención, constituida por la Unidad de
Prevención Comunitaria “ A. Miguel Roca”,
dedicada a la prevención universal, y por el
citado Servicio de Atención a Jóvenes y Adolescentes (Encontre), dedicado a la detección
precoz y la intervención temprana.
En la actualidad, 62 profesionales, psicólogos,
médicos, abogados, educadores, trabajadores
sociales, dues, y más de ochenta voluntarios
inician diariamente junto a 950 personas un
viaje hacia la integración. Nuevos retos nos
esperan, y para superarlos contamos con las
siguientes acciones y programas:
- Unidad de Deshabituación Residencial
Julián Álvarez Subirats Programa integral
para el tratamiento de mujeres con trastorno adictivo y apoyo a sus familiares.
- Comunidad Terapéutica Intrapenitenciaria.
Programa de tratamiento de deshabituación de drogodependencias en el Establecimiento Penitenciario de Picassent
- Servicio de Atención Directa. Servicio,
cuyo propósito es recibir, acoger, informar,
asesorar y derivar al programa o recurso
más adecuado a todas aquellas. personas
o familias interesadas o no en nuestros
servicios.
- Centro de día de Valencia. Programa
Vesprada. Programa de tratamiento de
deshabituación de cocaína en régimen
418
Revista Española
de
Drogodependencias
ambulatorio
- Centro de día de Valencia Programa Centro de Actividades Albada Programa de
tratamiento de deshabituación y reinserción
de politoxicómanos de larga evolución en
régimen de centro de día.
- Centros de día de Gandía y de Sagunt
Programa de tratamiento de deshabituación
y reinserción de toxicómanos en régimen
tanto ambulatorio como de centro de día.
- Servicio de Atención a Jóvenes y Adolescentes Encontre Programa de intervención
temprana a adolescentes y jóvenes en
régimen ambulatorio
- Servicio de Viviendas Tuteladas. Servicio
facilitador de la deshabituación y la reinserción a través de un recurso residencial
controlado
- Unidad de Prevención Comunitaria Arzobispo Miguel Roca.
20 años después de la puesta en marcha
del CVS las condiciones sociales que lo impulsaron son muy diferentes. Hoy, la Fundación
Arzobispo Miguel Roca entiende junto con
el conjunto de la sociedad, que las conductas
adictivas en general y las drogodependencias
en particular, son más un problema de salud
que un problema social y desde luego, esto supone un cambio de perspectiva, ya que tanto
en nuestra Comunidad Autónoma como en el
conjunto del Estado el acceso al sistema público de salud es un derecho de los ciudadanos y
un deber de las administraciones. Es por ello
que trabajamos en fuerte colaboración con
los recursos sanitarios públicos, intentando ser
eficaces en nuestras acciones, a la vez que no
renunciamos a atender al más desfavorecido
desde una forma de entender la prevención y
el tratamiento de las adicciones basada en una
30 (3 y 4) 2005
Juan Manuel Ferrer Angulo, Angel Turbi Pinazo, José A. Rovira Rodas
posición conceptual concreta y distintiva.
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Revista Española
de
Drogodependencias
419
Sociedad
Las asociaciones ante las drogas: a propósito de
los 25 años de agipad.
Amando Vega, Iñaki Martínez
Resumen
La celebración de los 25 años de Agipad, Asociación guipuzcoana de investigación y
prevención del abuso de las drogas, constituye una ocasión más para dejar constancia del trabajo realizado por las asociaciones ante la cuestión de las drogas. Al mismo
tiempo, invita a reflexionar sobre su papel en tiempos de crisis del estado de bienestar
y de globalización económica, entre las que destaca sus funciones representativas y
prestacionales.
La acción representativa guarda conexión con la política, con el actuar para plantear las
necesidades y demandas de un grupo de población, buscando darles satisfacción, por
medio del cambio de la realidad existente La gestión de servicios, da respuesta a las
necesidades de unas determinadas personas con problemas, a través de una organización
concreta.
En este artículo, se defiende la necesidad de ambas funciones, pues desde la lectura social
de la realidad de las personas con problemas de drogodependencias atendidas por las
asociaciones, se ve la necesidad de contemplar la complejidad de factores y dinámicas
implicados, lo que exige respuestas acordes con las necesidades sin caer en actuaciones
simplistas y parceladas. Las asociaciones tienen que recuperar su función representativa,
más allá de los intereses propios, para conseguir de planes de actuación política que
defiendan los derechos de las personas.
Palabras Clave
Población, problemas de drogodependencias, globalización, demandas, asociaciones, función,
Summary
The celebration of the 25 years of Agipad, Guipuzcoan Association of investigation and
prevention of the abuse of drugs, constitutes one more occasion to put record of the
work made by the associations in the drugs question. At the same time, it invites to
reflect on their paper in the days of crisis of the state of well-being and the economic
globalización, where it emphasizes their representative and functions of attendance.
The
representative
Correspondencia
a: action guard connection with the policy, with acting to raise the
Martínez Aldanondo, Iñaki. e-mail: [email protected]
420
Revista Española
de
Drogodependencias
(3 y 4) 2005
2005
30 (3 y 4)30
420-434.
Amando Vega, Iñaki Martínez
necessities and demands of a population group, being looked for to give satisfaction them,
by means of the change of the existing reality.The management of services gives answer
to the necessities of certain people with problems, through a concrete organization.
In this article, the necessity of both functions is defended, because from the social
reading of the reality of the people with problems of dependence of drugs attended by
associations, we see the necessity to contemplate the complexity of implied dynamic
and factors, which demands answers acorded with the necessities without falling in
simples and limited actions.The associations must recover their representative function,
beyond the own interests, in order to get plans of political action that defend the rights
of the people.
Key Words
Population, problems of drug addictions, globalización, associations, function, drugs.
Résumé
La conclusion des 25 années d’AGIPAD,Association de Guipúzcoa de recherche et prévention d’abus des drogues, constitue une occasion pour rendre compte du travail effectué
par les associations devant la question des drogues. En même temps, il invite à réfléchir
sur le rôle en des temps de crise de l’état de bien-être et de globalisation économique,
parmi lesquelles il souligne ses fonctions répresentatives et prestationalles.
L’action répresentative garde conexión avec la politique, avec agir pour poser les necessités et les demandes d’un groupe de population, cherchant leur donner satisfaction
au moyen du changement de la réalité existante. La gestion des services repond aux
necessités de certaines personnes avec des problèmes, par le biais d’une organisation
concrète.
Dans cette article, on défend la nécessité des deux functions, donc depuis la lecture sociale
de la réalité des personnes avec des problèmes de drogue-dépendances assurées par les
associations, est vue la necéssité de considérer la complexité facteurs et dynamiques
impliqués, ce qui exige des reponses en accord avec les necessités sans tomber dans
des activités simplistes et parcellées. Les associations doivent récupérer leur fonction
représentative, au-delà des intérêts propres, pour obtenir des plans d’action politique
qui défendent les droits des persones.
Most Clé
Population, problèmes de dépendants de la drogue, globalisation, associations, fonction,
drogues.
30 (3 y 4) 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
421
Las asociaciones ante las drogas: a propósito de los 25 años de AGIPAD
INTRODUCCIÓN
La celebración de los 25 años de Agipad,
constituye una ocasión más para dejar constancia del trabajo realizado por las asociaciones dedicadas ante la cuestión de las drogas. Al
mismo tiempo, que invita a reflexionar sobre
el papel de éstas en tiempos de crisis del
estado de bienestar y de globalización económica, entre las que destacan sus funciones de
representación y prestación de servicios.
Resulta expresivo, en este sentido, que
el Premio Gipuzkoa Giza Eskubideak 2005
adjudicado a AGIPAD se justificara con las
siguientes razones ( Egokilan.net, 2005):
-Sus 25 años de defensa y promoción de los
derechos humanos de las personas drogodependientes y sus familias.
-Su compromiso práctico y real, desde la
misma calle, con la defensa de las personas
que han sufrido la drogodependencia, subrayándose la especial dureza del contexto
histórico en el que surgió, año 1980, así
como su concepción no problematizadora
de la droga como tal, sino de sus usos y
abusos.
-Al mismo tiempo, se ha puesto en valor no
sólo esa labor diaria sino los objetivos de
la misma, que no han sido otros que: la
defensa de un derecho humano básico
como la dignidad de toda persona, independientemente de su condición. Desde
la confianza plena en el ser humano y sus
posibilidades AGIPAD, no ha trabajado
sólo a favor de la recuperación física de
la persona drogodependiente, sino que
ha luchado por su redignificación, comprometiéndose por el máximo desarrollo
personal y autonomía de ésta.
Las asociaciones, desde su contacto real
422
Revista Española
de
Drogodependencias
con los problemas de las personas dependientes, están en una situación privilegiada
para valorar el fenómeno de las drogas en
toda su complejidad y así comprender la
realidad de las personas con problemas de
drogodependencias.
EL PAPEL DE LAS
ASOCIACIONES
No es fácil analizar la cuestión de las asociaciones relacionadas con las drogas, ya que
no existe un modelo de organización de este
tipo de asociaciones. Las organizaciones de
personas con problemas de drogas surgen de
la existencia de unas necesidades no atendidas
por la administración. Y es en los previos de
Plan Nacional cuando aparecen con toda
su fuerza, un capítulo que requiere una investigación más profunda. Precisamente las
asociaciones de personas afectadas unidas a
profesionales e instituciones de diferente tipo,
tuvieron mucho que ver con la elaboración del
Plan Nacional sobre Drogas (PNSD), aprobado en 1985, tras un proceso de reflexión y
debate(PNSD, 2005).
Cuando se analizan las asociaciones relacionadas con las drogas, se pueden ver, entre
muchos aspectos y elementos, sus funciones
de representación y de prestación de servicios.
No se trata, por supuesto, de una disyuntiva,
pues, muchas veces, se dan ambas funciones
en una misma organización, aunque con diferentes grados de aplicación.
La acción representativa guarda conexión
con la política, con el actuar colectivamente
para plantear las necesidades y demandas
de un grupo de población, buscando darles
satisfacción, a través de cambios en la realidad
existente, participando en los procesos de
30 (3 y 4) 2005
Amando Vega, Iñaki Martínez
decisión que ordenan la vida en comunidad.
La gestión de servicios, por su parte, da respuesta a las necesidades de unas determinadas
personas con problemas, a través de una
organización concreta.
Para algunos el papel genuino las organizaciones de personas con limitaciones es el
político, el que dimana de su carácter representativo. La prestación de servicios, en este
esquema de pensamiento, tendría un papel
secundario. En una jerarquía de papeles, la
representación prevalecería sobre la prestación de servicios
Esta idea obedece acaso a la comprobación de que la mayoría de organizaciones
de personas con limitaciones han surgido y
surgen con un propósito político, de acción
política, al menos, de intervención agrupada
para cambiar la realidad, un estado de cosas
que en relación con la discapacidad es de
ordinario intolerable.
Otra comprobación, que abona y refuerza la anterior, es que las organizaciones de
prestación de servicios, normalmente, han
surgido, no desde el seno de las personas con
limitaciones, sino desde otras instancias ajenas,
que focalizan su atención en la discapacidad
por diversos motivos: altruismo, benevolencia,
caridad, humanitarismo, solidaridad, responsabilidad pública.
No se puede negar por otra parte, que
puedan existir abusos varios. Así la Dirección
General de Drogodependencias del Gobierno de Canarias, al pretender conocer con
exactitud el número de personas que reciben
tratamiento o están adscritas a algún tipo de
programa, ha arrojado un dato preocupante:
los censos estaban inflados, posiblemente
para que las subvenciones a esos centros
no se vieran mermadas. Las ayudas públicas
30 (3 y 4) 2005
permanecían estables desde hacía años, sin
concreción de los programas ni del número de
personas atendidas. De los aproximadamente
15.000 toxicómanos que tenía censados la
Dirección General de Drogodependencias
como receptores de tratamiento, la revisión
de los datos ha arrojado un descenso de
7.000. (Canariasahora.com, 2005).
Existen, por otra parte, asociaciones creadas con el fin de proteger los propios intereses
ante las actuaciones de la administración, aunque parezcan comprometidas, por ejemplo,
con la prevención. Así la Fundación Alcohol
y Sociedad, cuyo patronato está compuesto
por los siguientes miembros: Allied Domecq
España, S.A, Asociación Española del Brandy,
Bacardi España, S.A, Diageo España, S.A, Larios
Pernord Ricard, S.A, Federación Española de
Bebidas Espirituosas (http://www.alcoholysociedad.org/). Con su Programa Pedagógico
‘Adolescencia y Alcohol’ dice promover
la erradicación del consumo de alcohol
entre los adolescentes…con dos sesiones
impartidas por monitores de nuestra organización, aplicadas de una manera teórica
y práctica, que resultan muy amenas para
los alumnos/as..
Entre los objetivos de esta Fundación, como
se puede ver en su web, conviene resaltar el
que resalta los propios intereses comerciales
de la misma:
Obtener el reconocimiento de que un consumo moderado, sensato y responsable
es un placer y una experiencia social
y festiva, muy respetable y de honda
tradición, que corresponde a hábitos
de consumo saludables y que forman
parte de la memoria histórico-cultural
de nuestro país.
Estos objetivos muestran una relación clara
con los contenidos que tan machaconamente
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de
Drogodependencias
423
Las asociaciones ante las drogas: a propósito de los 25 años de AGIPAD
utiliza la publicidad actual, donde la propia
responsabilidad, el placer, la convivencia, la
fiesta, el arte, la cultura, la tradición y la salud
aparece asociados a los productos alcohólicos.
Su interés no es otro que conseguir que el
consumo del alcohol sea rentable para sus
empresas. No es que los directivos de estas
empresas pretendan que los niños beban: lo
que buscan conscientemente es familiarizarles
con tales productos, poner las bases para una
demanda futura creando a tiempo una actitud
favorable y unas expectativas determinadas.
El patrocinio y el mecenazgo son estrategias
con gran auge en los últimos años, debido a la
rentabilidad que aportan a la empresa. El patrocinio normalmente pretende satisfacer un
doble objetivo: uno, de rendimiento comercial
y otro, de imagen. Ofrece una nueva dimensión de la empresa y una relación diferente
con sus públicos, ya que no se considera sólo
la dimensión de cliente o comprador, sino
otras más humanas, esto es, el hombre como
amante del arte, de la cultura, del deporte...
Los actos de patrocinio son actos institucionales que transmiten la cultura de la empresa
y hacen compartir su visión del mundo.
De todas formas conviene resaltar que la
mayoría de las asociaciones, fundaciones, etc.
no tienen esas potentes empresas detrás y
su esfuerzo está centrado en dar respuestas
a las necesidades relacionadas con las drogas.
Como no falta asociaciones que tienen asumido su papel «reivindicativo». Así Enlace (2005),
la confederación andaluza de asociaciones,
asume que:
Podemos llevar nuestras reivindicaciones
ante las administraciones implicadas,
contemos o no en ellas con espacios
donde expresarlas; y podemos divulgarlas ante la opinión pública a través de
manifestaciones, intervenciones en los
424
Revista Española
de
Drogodependencias
medios de comunicación, publicación
de folletos y revistas, ... todo ello, con
el objetivo de avanzar en la línea de la
transformación social.
De todas formas, como Enlace (2005)
reconoce, existe una pérdida de la fuerza
reivindicativa dentro de las asociaciones, motivada por diferentes factores como:
- la propia dinámica de las asociaciones,
marcada por un aumento progresivo en
el volumen de trabajo frente a la escasez
de recursos humanos y económicos para
hacerle frente.
- un menor compromiso social, como consecuencia del actual sistema de valores
imperante, que se traduce en una menor
participación a nivel general de los movimientos sociales.
- la “dependencia” económica de la administración, que puede provocar “miedo”
a perder determinados recursos y limitar
nuestra función reivindicativa.
Y es aquí, donde se plantea esa cuestión
clave que tanta importancia en un momento
en el que se están reivindicando los derechos
sociales:
¿A las asociaciones les corresponde la
acción representativa o la gestión de
programas?
Los 25 años de Agipad, la Asociación Guipuzcoana de Investigación y Prevención del
Abuso de las Drogas es una muestra más del
trabajo realizado por este tipo de asociaciones,
no sin dificultades, un trabajo muchas veces
desconocido o infravalorado.
Estas asociaciones se merecen las mejores
felicitaciones y reconocimientos, como así se
ha hecho con Agipad con el premio Gipuzkoa
Derechos Humanos 2005. Dar a conocer
30 (3 y 4) 2005
Amando Vega, Iñaki Martínez
su trabajo, constituye una tarea que a todos
corresponde, y con este espíritu se presentan
a continuación algunos datos sobre la historia
y los servicios que Agipad desarrolla, siguiendo sus propias publicaciones (Agipap, 2005,
Azurmendi, 2005).
CRÓNICA DE 25 AÑOS: AGIPAD
Los orígenes de AGIPAD están vinculados a
los problemas de una familia, a los problemas
de muchas familias, como sucedió con otras
asociaciones. Hace 25 años apenas se prestaba
atención a los problemas, entonces nuevos,
relacionados con las drogodependencias. Y
fue precisamente la iniciativa de una serie de
familias que optaron por buscar soluciones la
que determinó la creación de AGIPAD.
La vida de la familia Ibarreta-Fanlo cambió,
como la de otras muchas, cuando a finales
de los años 70 se dieron cuenta de que uno
de sus hijos tenía problemas con las drogas.
Pero en aquel tiempo no existían recursos
para hacer frente a un problema que comenzaba a manifestarse en la sociedad. En
esas circunstancias, Fernando Ibarreta Elícegui
y Elvira Fanlo Nicolás decidieron actuar. Lo
recuerda Fernando Ibarreta (1926-2001) en
una entrevista.
«Después de remover Roma con Santiago,
incluido el Teléfono de la Esperanza,
conseguimos un despacho con teléfono
cedido por la Cruz Roja y mi mujer y yo,
con la ayuda de una asistente social,
dedicamos el verano de 1980 a atender
a las personas que se encontraban en
nuestra misma situación».
En apenas unos meses, el proyecto de AGIPAD fue tomando forma. Su acta fundacional
data del 25 de septiembre de 1980, y en ella
sus fundadores se mostraban preocupados
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por «la gravísima situación en la que Guipúzcoa se ve inmersa por el constante aumento
del consumo de drogas, que degradan la dignidad humana y que daña el futuro de nuestra
comunidad, especialmente entre la juventud»
y acordaban «constituir una Asociación que
se denominará Asociación Guipuzcoana de
Investigación y Prevención del Abuso de las
Drogas». En el grupo fundador había tanto
madres y padres de drogodependientes
como profesionales -médicos, psicólogos,
abogados...- y personas comprometidas con
una tarea hasta entonces desconocida.
En diciembre de 1980 se presentaron ante
el Gobierno Vasco los diez o doce padres que
se habían puesto en marcha unos meses antes,
diciendo que no querían ser una asociación
clandestina y sí una herramienta de trabajo a
las órdenes de las autoridades de Euskadi. El
Consejero, que no estaba muy puesto en
el tema, les remitió al doctor Aya Goñi, quien
les sugirió hacer un estudio epidemiológico,
tal como se había hecho en Bizkaia y se
estaba haciendo en Alava, para conocer el
problema.
Aquellos primeros tiempos, como recuerdan dos de los integrantes de la primera
Junta Directiva de AGIPAD, fueron momentos
dolor y la preocupación, pero también falta de
información, de carencia de medios, e incluso
de miedo a tratar abiertamente el tema. Y
recuerdan también el alivio que supuso poder hablar, poder compartir, poder empezar
a entender qué estaba sucediendo. Todo ello,
en medio del creciente clima de alarma social
que despertaban las cuestiones relacionadas
con las drogodependencias, vinculadas en
aquel momento prácticamente en exclusiva
al consumo de heroína, con todas las connotaciones que conllevaba.
Su carácter pionero, su orientación claraRevista Española
de
Drogodependencias
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Las asociaciones ante las drogas: a propósito de los 25 años de AGIPAD
mente profesional y su vocación de servicio
integrado en la entonces incipiente red
asistencial socio-sanitaria pública no sólo se
han mantenido en lo sustancial a lo largo de
los últimos 25 años sino que determinaron
también sus primeros pasos.
A los dos años de su constitución formal,
AGIPAD comenzó a trabajar en unos locales
cedidos por la Caja de Ahorros Provincial
(hoy Kutxa) en el barrio donostiarra de Egia,
al tiempo que crecía el número de socios y
se asentaba su estructura profesional, desarrollando un trabajo riguroso dentro de un
ámbito en el que prácticamente todo estaba
por hacer. Muchas de las líneas de intervención
que, en el curso del tiempo, terminarían convirtiéndose en los programas y servicios con
los que actualmente cuenta AGIPAD, comenzaron a tomar forma en aquellos locales. Se
trabajaba ya en el ámbito de la prevención, se
prestaba atención ambulatoria a los drogodependientes, se atendía y ayudaba a sus familias...
En 1982 se creó la Comunidad Terapéutica
Haize-Gain a instancias de la Diputación Foral de Gipuzkoa, en un viejo caserío cedido
por el Ayuntamiento de Oiartzun. Es la más
antigua de las Comunidades Terapéuticas en
funcionamiento en el País Vasco, y una de las
primeras del Estado.
Entre 1985 y 1990 se fueron estructurando
los programas y servicios de AGIPAD, al mismo tiempo que la Asociación se fue integrando en organismos nacionales e internacionales.
A principios de los noventa la Comunidad
Terapéutica Haize-Gain inauguró edificio, y
poco después la sede central se trasladó al
barrio de Amara, a un local cedido igualmente
por Kutxa, disponiendo así de mejores instalaciones para atender a los usuarios.
En este momento, y de acuerdo con la
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Drogodependencias
última memoria de Agipad (2005), se desarrollan cinco servicios, que se presentan a
continuación.
1. Servicio de prevención
El servicio de prevención de Agipad se
orienta al trabajo con población general con
acciones destinadas a potenciar los factores
de protección ante los consumos de drogas
y a fomentar actitudes y hábitos saludables, y
también con grupos o segmentos de población vulnerables, con actividades orientadas
a reducir los riesgos y fomentar actitudes
responsables ante los consumos de drogas.
Para ello, a lo largo del año se llevan a cabo
tamto programas de prevención universal
como de prevención selectiva en el ámbito escolar, familiar, comunitario y de ocio y
tiempo libre.
Los programas de prevención universal se
han desarrollado con grupos de padres y madres, de diferentes municipios de Gipuzkoa. En
esta misma línea, se ha trabajado con profesores de diversos centros escolares. Los programas de prevención selectiva se han orientado
al trabajo con adolescentes y jóvenes de
diversos centros de enseñanza gipuzkoanos.
El trabajo preventivo se ha completado con
una asesoría a diferentes ayuntamientos en
prevención de drogodependencias, además de
otras actividades preventivas concretas.
En 2004 el servicio de prevención ha
trabajado con 430 padres y madres, con 210
profesores escolares, con 500 adolescentes y
jóvenes, y se ha trabajado con 120 mediadores
sociales.
2.- Servicio de atención para la
inserción psicosocial de
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Amando Vega, Iñaki Martínez
drogodependientes.
El tratamiento ambulatorio de Agipad trabaja con el objetivo de ofrecer información,
orientación y /o tratamiento de personas afectadas por los distintos usos y dependencia de
las drogas para conseguir una incorporación
social progresiva y la mejora de su calidad de
vida. Este servicio está dirigido a personas
que requieren información y orientación,
a personas que dependen de las drogas, a
adolescentes y jóvenes con problemas en
relación al consumo de drogas y a familias con
menores en situación de riesgo.
Para cumplir con sus objetivos este servicio
desarrolla programas concretos de información y orientación a personas con problemas
asociados al uso/dependencia a drogas; derivación y coordinación con diversos programas
y recursos comunitarios; tratamiento personalizado de drogodependientes; atención y
tratamiento de adolescentes y de sus familias
con problemas asociados al consumo de
drogas; intervenciones en situaciones judiciales relacionadas con las drogodependencias;
atención a menores en riesgo hijos/hijas de
padres/madres drogodependientes; intervenciones en crisis y recaídas, etc.
Desde este servicio se han atendido en
2004 a 242 personas. Se han realizado un
total de 1.920 sesiones de tratamiento y un
total de 199 sesiones informativas. Además
de sesiones de supervisión, clínicas, interservicios con servicios sociales de base, judiciales,
servicios sociales de la Diputación, servicios
socio-sanitarios, etc.
3.- Comunidad terapéutica
Haize-gain
El programa de la Comunidad Terapéutica de Haize-gain se orienta al trabajo con
personas drogodependientes: personas con
consumos problemáticos de drogas, alcoholismo, patología dual y metadona. Así como a
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sus familiares y acompañantes.
Las principales actividades desarrolladas
por este servicio son la información y orientación de cara al tratamiento, la elaboración
de un diagnóstico y oferta de tratamiento
individualizada, el tratamiento intensivo psicoterapéutico-educativo y relacional en régimen
residencial o de Centro de Día en Comunidad
Terapéutica, trabajo en red con los recursos
comunitarios de tratamiento e inserción,
inserción social adecuada a cada usuario y
usuaria en régimen residencial y Ambulatorio,
intervención y terapias familiares.
En el año 2004 se han atendido desde
esta estructura de trabajo a 155 usuarios de
drogas, a través de un diagnóstico diferencial y
modalidades de tratamiento diferentes (Residencial, Centro de Día y Ambulatorio). Lo más
destacable de este año ha sido que la cocaína
y las drogas de síntesis son el bloque central
de la demanda de tratamiento (51%) con un
aumento significativo de las demandas por
alcoholismo (20%). Destaca que la patología
dual está presente en los diferentes tipos de
consumo, la mitad de los usuarios han tenido
ingresos en psiquiátricos en algún momento
de su historia y casi hasta el 80% han necesitado de apoyo farmacológico durante el
tratamiento. Por último, hay que destacar que
se está configurando un nuevo proyecto: el
Programa Haurtxoak, para tratamiento de
padres/madres drogodependientes con sus
hijos pequeños.
4.- Servicio de intervención
familiar para la reinserción
del drogodependiente
El equipo de inter vención familiar de
Agipad trabaja con el objetivo de informar,
apoyar y capacitar a las familias que tienen
un miembro que hace usos problemáticos de
drogas. Se trabaja desde diferentes espacios
de intervención con personas afectadas por
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de
Drogodependencias
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Las asociaciones ante las drogas: a propósito de los 25 años de AGIPAD
la problemática de las drogodependencias
interviniendo desde encuadres de trabajo
grupal y espacios de intervención familiar
individualizados; ofertando, asimismo, la posibilidad de participar en talleres especializados
que inciden sobre aspectos de interés que
refuerzan el proceso de tratamiento. Estos
diferentes encuadres de trabajo están enfocados a la consecución de modificaciones en
las interacciones de los miembros de la familia,
tanto en su comunicación como en la mejora de habilidades y aspectos que facilitan el
proceso de reinserción social, lo que permite
una mejora de su calidad de vida.
Este servicio de Agipad trabaja con personas presas preventivas y penadas de la prisión
de Martutene de San Sebastián y que presentan problemas de drogodependencias.
Esta labor abarca a la familia, no sólo interviniendo con los padres, sino incorporando a
los pacientes identificados, lo que incrementa
la eficacia de la inter vención implicando
activamente a la familia en los aspectos psicoterapéuticos del tratamiento. Los espacios
de intervención con las familias que acuden a
la asociación son los siguientes: intervención
familiar grupal, intervención grupal multifamiliar, intervención familiar individualizada, taller
de habilidades parentales, intervención grupal
con familiares de consumidores que no están
atendidos en un programa terapéutico, grupos
de formación, terapia familiar y de pareja,
talleres especializados, etc.
En el año 2004 se ha atendido a 177 reclusos y a 12 reclusas con problemas asociados a
drogodependencias, 127 con historia clínica y
62 desde una demanda de orientación y asesoramiento dentro del centro penitenciario.
El equipo de intervención familiar ha atendido en 2004 a 188 familias. Se han beneficiado
de su trabajo en intervenciones un total de
437 personas.
5.- Servicio de atención a la
población reclusa con
problemas derivados del
consumo de drogas
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de
Drogodependencias
En el desempeño de su trabajo se ofrece
tratamiento individual a personas reclusas con
problemas de drogodependencias: tutorías,
psicoterapia, intervención en crisis, etc. Se
hacen controles de orina como marco de
contención, orientación y asesoramiento a
las familias de las personas presas con problemas de drogas, y orientación y derivación
a tratamientos en el exterior, con el objetivo
de dar continuidad al proceso terapéutico
iniciado en prisión.
Aquí lo más destacable es el aumento significativo de la población inmigrante atendida,
pasando del 21 al 38%. En relación al tipo de
delito, aumentan las agresiones del 9 al 20%,
se constata la tendencia del aumento del
consumo de cocaína (50%) y la disminución
del consumo de opiáceos (14%). Por último,
hay que destacar que para el 48% de las personas atendidas, la prisión ha sido el espacio
donde han realizado el primer contacto con
un tratamiento de drogodependencias y que
el 12% de las personas ha accedido a la red
asistencial de drogodependencias, bien por vía
judicial o penitenciaria.
MIRANDO AL FUTURO
Este veinticinco aniversario coincide, precisamente, con uno de esos momentos de
cambio y readecuación que se hace extensivo
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Amando Vega, Iñaki Martínez
a todos los estamentos que integran AGIPAD
y que se enmarcan en gran medida en el
proceso que ha acompañado a la elaboración
del Plan Estratégico 2004-2007, como señala
la publicación conmemorativa de lso 25 años.
Cambios organizativos, como la conversión
del departamento de administración en un
servicio con entidad propia o la implantación
de nuevas formas de trabajo, y cambios formales evidentes en su renovada sede, que tienen
como objetivo reforzar lo sustancial: la misión
y los valores de AGIPAD.
La redefinición de esos valores fundamentales ha constituido parte del profundo proceso
de reflexión que ha llevado a cabo Agipad en
los últimos meses.Valores como, por ejemplo,
la ya mencionada flexibilidad y la profesionalidad, basada tanto en la capacitación técnicoprofesional como en las buenas prácticas, sin
olvidar el compromiso social plasmado en la
respuesta a las demandas sociales.
Guían también el quehacer de Agipad valores como el trabajo en equipo con carácter
interdisciplinario y participativo, la autonomía y la creatividad que puede conducir a
desarrollar alternativas para las necesidades
emergentes, todo ello enmarcado en una estrategia de mejora continua, en el marco de un
Sistema de Calidad Total. Todos estos valores,
claramente explicitados, y compartidos por el
conjunto de la organización, desembocan en
la verdadera razón de ser de esta avocación:
los usuarios.
La carta de valores de Agipad concede el
máximo protagonismo a los derechos de los
usuarios, entre los que pueden destacarse la
confidencialidad que se aplica estrictamente
a todas las relaciones que el usuario establece
con la Asociación, el respeto por la dignidad
humana como valor fundamental, la transparencia, la universalidad que implica la no
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exclusión y la empatía, traducida en capacidad
de escucha y análisis.
Pero, aunque con el paso del tiempo hayan cambiado también algunas expresiones
y formulaciones, y se hayan incorporado
nuevos matices al conjunto del trabajo, en lo
fundamental la Asociación sigue manteniendo
los rasgos que la definen y diferencian.
El Plan Estratégico de Agipad, elaborado
con una amplia participación de todos sus
estamentos y con el apoyo técnico de una
consultoría externa, es el instrumento clave
en el proceso de resituación de la Asociación
en un entorno que, en los últimos 25 años, ha
experimentado grandes cambios. Aprobado
por la Junta Directiva en verano de 2004 y
con un horizonte de aplicación que se extiende hasta el año 2007, el Plan, derivado de
un exhaustivo análisis de la situación actual y
las perspectivas de futuro y basado tanto en
la reflexión interna como en el análisis del
entorno, ha establecido una serie de líneas
estratégicas básicas que, a su vez, se plasman
en una relación de objetivos estratégicos,
acompañados de sus correspondientes planes
de acción.
Precisamente en la Mesa Redona celebrada
con motivo de la celebración de los 25 años,
Javier Elzo recordó los profundos cambios
que ha experimentado en todos los sentidos
el fenómeno de las drogodependencias. “Hemos pasado del paradigma del yonki tirado en
la calle, que se pincha y atraca farmacias de
hace unas décadas, en la que la droga tenía
también algo de rompedor, de contracultural,
a identificar la droga con la fiesta, a banalizar
la droga – ha indicado- y, del mismo modo, ha
cambiado la forma de afrontar la cuestión”. Si
inicialmente se hizo hincapié en la prevención
orientada a que no se consumiera droga,
“a finales de los ochenta se bajó la guardia
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de
Drogodependencias
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Las asociaciones ante las drogas: a propósito de los 25 años de AGIPAD
en este sentido y se impuso la tendencia a
reducir los daños. A decir aquello de: ya que
consumen, que les cause el menor daño
posible”. Javier Elzo, con apoyo de los datos
obtenidos en los diferentes estudios Escuela
y drogas, manifestaba que “no tenemos que
bajar la guardia y renunciar al objetivo finalista
de que se consuma lo menos posible y, al
ser posible, nada. Tiene que haber medidas
alternativas, pero no podemos quedarnos
ahí, porque eso apuntala e institucionaliza el
consumo de droga”.
J. A. Pérez de Arróspide, quien fue Secretario de Drogodependencias del Gobierno
Vasco y en la actualidad preside la Fundación
Vivir sin Drogas, también comentó la evolución experimentada por la prevención en las
últimas décadas: “Entre 1975 y 1985, ante un
fenómeno emergente que generó gran preocupación y alarma social, asumieron las tareas
de prevención los profesionales de la salud, y
la prevención alcanzó su mayor protagonismo
en la década siguiente, entre 1985 y 1995,
cuando se pusieron en marcha programas de
prevención comunitaria, se trabajó con padres
y madres, se pusieron en marcha campañas
y se produjo una considerable movilización
social. A partir de 1995, sin embargo, la prevención entró en crisis. Dado que no existía
la presión y la sensación de urgencia de años
precedentes, la preocupación institucional bajó
mucho, tal como lo hizo la implicación de los
padres y madres y la presión social».
José Luis Arrese –uno de los primeros
profesionales que colaboró con AGIPAD y
director en la actualidad del Instituto Vasco de
Innovación Sanitaria, se refirió a la evolución
que ha experimentado el tratamiento de los
drogodependientes, señalando que las condiciones en las que se abordaron las primeras
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Revista Española
de
Drogodependencias
experiencias han determinado su evolución,
“dada la tendencia de las organizaciones y los
sistemas a mantener las propiedades iniciales,
aunque hayan desaparecido las razones que
las causaron”. En ese sentido, recordó que
inicialmente las características de los drogodependientes –mayoritariamente dependientes
de la heroína- indujeron a la sociedad a crear
recursos que los alejaran, que redujeran
su visibilidad, algo que se materializó en las
comunidades terapéuticas conver tidas en
centros de internamiento y alejamiento. Ha
señalado también que, en contraposición a
aquel modelo, la CT Haize-Gain, creada por
Agipad en 1982, fue pionera al entender la
comunidad como un instrumento terapéutico
integrador no orientado exclusivamente a la
abstinencia, sino a la inserción social del drogodependiente.Tras recordar que los modelos
de asistencia han ido evolucionando a medida
que se comprobaba que los anteriormente
existentes dejaban de dar respuestas adecuadas, ha afirmado que, aunque el futuro es
impredecible en este sentido, es partidario
de buscar soluciones “mirando más allá de lo
inmediato y lo evidente, forzando la periferia
intelectual, tanto en lo personal como en lo
profesional”.
Agipad, precisamente, se quiere mover en
esta línea. Entre sus objetivos estratégicos, merecen especial mención los relacionados con
su misión, centrados fundamentalmente en la
adaptación e innovación de sus productos y
servicios. Se prevé, así, articular nuevas ofertas
vinculadas a problemas emergentes, como
los relacionados con drogodependientes con
hijos, el consumo problemático de alcohol, los
adolescentes, la elaboración de nuevos materiales preventivos, la patología dual, etc.
Esos nuevos pasos exigen, según consta
en su documentación conmemorativa, la
30 (3 y 4) 2005
Amando Vega, Iñaki Martínez
adopción de medidas de orden organizativo y
funcional, como la mejora de la coordinación
entre servicios, la definición de funciones y
competencias de los diversos órganos de
gobierno y dirección, la generación de más
recursos económicos o la habilitación de
nuevas formas de trabajo, dotadas de los
medios humanos, materiales y organizativos
adecuados. Sin olvidar que uno de los retos de
futuro es mejorar su proyección pública a fin
de integrar a toda la comunidad en la compleja
tarea que aborda diariamente la Asociación
Todo ello, acompañado por un compromiso
firme con la calidad.
CONSIDERACIONES FINALES
Agipad, como se puede ver por la orientación profesional asumida, pretende caminar en
esa misma línea mejorando en la oferta de sus
prestaciones y servicios, sin olvidar su función
de representación. Es la línea de trabajo por la
que han optado otras asociaciones.
Las organizaciones de acción representativa
han ido, progresivamente, incorporando la
prestación de diferentes servicios, por una
simple razón: porque quien estaba obligado
en primer término a ofrecerlos, el Estado, los
poderes públicos, se habían desentendido de
tal deber.
Otros factores que ha favorecido este cambio vienen señalados por Enlace (2005):
cierto desprestigio de lo político, sobre
todo en su vertiente reivindicativa y combativa;
cierto conservadurismo que parece instalarse en todo los ámbitos de la sociedad,
ciertos excesos del propio modelo representativo -no sólo en la esfera política- que parece
adolecer de retoricismo, de ineficacia, que
esconde incapacidad o miedo para cambiar
30 (3 y 4) 2005
la realidad manejando uno mismo las pobres
herramientas disponibles. Cierta moda también de la necesidad de adelgazamiento del
Estado, al que se le imputa ineficiencia, y cierto
halago interesado de la sociedad civil articulada, que por su cercanía con los ciudadanos,
se presume que gestiona mejor.
La instalación de la gestión en el seno de
la representación va desencadenando otras
consecuencias, como las que recuerda Enlace
(2005), y que aquí se recoge literalemtne,
generando espirales de cambio:
- el surgimiento de una clase o «casta» técnica, profesionalizada, pues para gestionar las
organizaciones que prestan servicios se requieren personal capacitado, solvente, que
hay que contratar en el mercado, «casta»
que exige sus espacios de poder y decisión,
con intereses no siempre idénticos a los de
sus «patronos»;
- el descuido de los aspectos representativos por parte de los dirigentes políticos,
ante el peso de la gestión, del «día a día»,
que resulta absorbente, asfixiante a veces,
elementos todos que priman el conservadurismo…;
- la generación en la base representativa de
una conciencia más de beneficiario, usuario
o cliente, en detrimento de la de militante,
de miembro activo y corresponsable de la
dirección;
- las bajas tasas de participación de personas
con limitaciones en organizaciones representativas, que ponen en entredicho su
mismo carácter representativo, y cuando
son miembros, la débil intensidad de su
participación y de su sentimiento de pertenencia;
- el nacimiento de nuevos y diferentes nódulos de relaciones con las autoridades y
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de
Drogodependencias
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Las asociaciones ante las drogas: a propósito de los 25 años de AGIPAD
poderes públicos -que suelen al final concertar con las organizaciones esa gestión,
mediante ayudas, subvenciones, etc.-, que
generan dependencias políticas, tutelajes,
coacciones indirectas.
Como ventajas de esta forma de actuar,
conviene señalar que la gestión suele desembocar en profesionalización de la dirección,
con lo que eso supone de mejora en la
eficiencia, atenuando modelos de gobierno
voluntaristas que solían abocar al fracaso, por
pura incapacidad. Asimismo, las organizaciones
con prestación de servicios comienzan a dar
satisfacción a nuevas generaciones de personas con problemas y sus familias, que buscan
servicios tangibles y de calidad.
De todas formas, es evidente que las asociaciones que están en contacto directo con las
personas con problemas de drogas y con sus
familias, disponen de información de primera
mano no sólo para comprender su situación
personal, sino también los condicionantes s
sociales que favorecen situaciones problemáticas relacionadas con las drogas. Y de hecho,
las asociaciones están desarrollando un labor
de puente entre las personas «afectadas» y
la sociedad a la que pertenecen unos y otros.
Están asociaciones conocen bien el fracaso
de la escuela, las dificultades de encontrar un
trabajo, las carencias de las familias, etc. ¿Pueden limitarse simplemente a dar respuesta a
sus problemas relacionados con las drogas,
dejando de lado los condicionantes sociales?
Como señala Enlace en su estudio (2005),
hay que señalar el reconocimiento del trabajo
de las asociaciones en el área psico-social por
parte de las personas entrevistadas quienes
destacan el apoyo psicológico y emocional,
aludiendo a la “cercanía”, la “confianza”, el
“afecto”, ... que sienten con las personas de la
asociación, así como a la mejora de la autoesti-
432
Revista Española
de
Drogodependencias
ma, al cambio de actitudes, al autocontrol, a la
mejora de la comunicación, etc., que perciben
en sí mismos/as gracias a su relación con la
asociación. También destacan una mejora de
las relaciones familiares y sociales, la ocupación del tiempo libre y la ayuda que recibe
su familia de la asociación. Resalta también el
apoyo al abandono del consumo de drogas y
al tratamiento y las actuaciones de reducción
de daños.
Tras el apoyo psico-social y el referido a
aspectos relacionados con el consumo de
drogas -que conforman las dos grandes ayudas
de la asociación percibidas por las personas
con las que trabajamos-, aparece el trabajo
jurídico-penal de las asociaciones, re?ejando el
importante papel de estas en el seguimiento
de los procesos judiciales y penales, con el
objetivo de que se desarrollen con las máximas garantías.
Pero, las personas atendidas son conscientes de que para dar soluciones a la
“problemática de las drogodependencias”,
hace falta “más dinero, más implicación y más
recursos de drogodependencias por parte de
la Administración”, ; “trabajo”, señalado por el
20,9% y “legalización de las drogas”. ¿Pueden
desentenderse la asociaciones de todas esas
cuestions que tiene relación con el «problema» de las drogas?
Más allá del modelo ideal, la fuerza de
los hechos y de las tendencias sociales, el
modelo mixto parece ser el más coherente.
Seguirán existiendo organizaciones de acción
representativa, organizaciones con prestación de servicios, en estado de pureza, pero
mayoritariamente, las organizaciones son y
serán mixtas, en ellas se combinarán ambos
aspectos.
Hay que dejar constancia de que el Plan
de Acción 2005-2008 entre las actuaciones
30 (3 y 4) 2005
Amando Vega, Iñaki Martínez
recoge:
«Establecer cauces operativos de trabajo
para favorecer la participación y colaboración del movimiento asociativo
que realiza programas de prevención
y atención en el ámbito de las drogas y
las dependencias, con la Delegación del
Gobierno para el PNSD.
Pero las asociaciones no están para « tapar
agujeros del desmontaje del escaso estado de
bienestar logrado ». A los poderes públicos
corresponde responder y promover las condiciones para que la libertad y la igualdad del
individuo y de los grupos en que se integra
sean reales y efectivas, así como remover
los obstáculos que impidan o dificulten su
plenitud (art. 9.2 de la Constitución), no a los
voluntarios o las asociaciones.
Las asociaciones tienen un papel que desempeñar, pero nunca a costa de eliminar lo
«social» de la definición de Estado. No pueden
ser « herramientas en un intento de pacífica
involución del estado del bienestar hacia
uno «moderno» de corte neto neoliberal
(Segovia, 2000).
En este sentido, no se puede perder de
vista, como señala Enlace (2005: 106) que las
drogodependencias constituyen:
una expresión más de una realidad que
tiene otras muchas manifestaciones
(léanse conflictos escolares, desestructuración familiar, dificultades o no acceso
al empleo, otras adicciones, etc .), es
decir, las situaciones de vulnerabilidad
y/o exclusión social que viven cada
vez más personas y grupos de nuestra
sociedad. Las respuestas sociales e institucionales a dichas manifestaciones
van normalmente dirigidas a paliar sus
consecuencias más visibles y terminan
estigmatizando y culpabilizando a estas
30 (3 y 4) 2005
personas y grupos de la desigualdad
social de la que suelen ser víctimas.
Y partir de este planteamiento, hay que
entender con esta federación, que:
no existe otro camino más que un análisis
profundo de las causas que generan
estas situaciones de vulnerabilidad y/o
exclusión social, que contemple la complejidad de factores y dinámicas implicados, y que se traduzca en las políticas
que pretenden darle respuesta, sin caer
en actuaciones simplistas y parceladas.
Agipad, hace 25 años, se presentó como
asociación «de investigación y prevención del
abuso de las drogas» Y precisamente su plan
de trabajo se apoyó en una investigación previa del fenómeno. Las asociaciones no pueden
perder su espíritu crítico y deben continuar
analizando lo que sucede en relación con
las drogas, para actuar siempre de la forma
más coherente posible. Las asociaciones, en
este sentido, tienen abierta una posibilidad
de recuperar su protagonismo en la movida
política, siempre que se actúe con una mirada
amplia, más allá de los intereses propios, en
función de su conocimientos en relación con
el fenómenos de las drogas y de la aplicación
de los planes de actuación con la mirada
puesta en la defensa de los derechos de las
personas sean o no consumidoras.
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Pérez Bueno, L.c. (2004), El papel de las
organizaciones de personas con discapacidad:
¿acción representativa o gestión de programas?. Ponencia pronunciada en Santa Cruz
de la Sierra, Bolivia, el día 1 de abril de 2004,
en el marco del Seminario Taller «2004, Año
Iberoamericano: Una Oportunidad para las
personas con discapacidad», organizado por
el IMSERSO-RIICOTEC-AECI-RIADIS).
Plan Nacional Sobre Drogas (2005), Estrategia nacional sobre drogas 2000-2008.
434
Revista Española
de
Drogodependencias
30 (3 y 4) 2005
Anexo
Catálogo de publicaciones 2005.
Plán Nacional Sobre Drogas.
SUMARIO
1. Colección “Actuar es posible”
2. Monografías
3. Memorias e informes
4. Documentos Técnicos (Encuestas...)
5. Comunidad y Drogas. Cuadernos Técnicos
de estudios
6. Folletos.
ISBN: 84-7670-319-8
NIPO: 351-91-055-5
73 págs. Agotado.
3.
Actuar es posible. Actuaciones de los
médicos forenses y de los Servicios Sociosanitarios de los juzgados ante el consumidor
de drogas. Madrid, 1992.
Formato: 19,5 cmx26,5 cms.
ISBN: 84-7670-342-2
NIPO: 351-92-018-9
1. COLECCIÓN “ACTUAR ES
POSIBLE”
La Delegación del Gobierno para el Plan
Nacional sobre Drogas tiene como máxima
prioridad de actuación la prevención y atención frente al consumo indebido de drogas
en sus diferentes ámbitos, por esto, surgió la
colección “Actuar es posible” que ha editado
por el momento nueve manuales para que
sirvan como instrumento de ayuda a los
profesionales de los diferentes campos de
actuación a los que van dirigidos.
1.
Actuar es posible. El farmacéutico
ante las drogodependencias. Madrid, 1991.
68 págs. Agotado.
4.
Actuar es posible. El profesional de
atención primaria de salud ante los problemas
derivados del consumo de alcohol. Madrid,
1994.
Formato: 19,5x26,5cms.
ISBN: 84-8150-040-2
NIPO: 060-90-045-3
108 págs. Agotado.
5.
Actuar es posible. La prevención
de drogas en la comunidad escolar. Madrid,
1996.
Formato: 19,5x26,5 cms.
Formato: 19,5x26x5cms.
ISBN: 84-8150-130-1
ISBN: 84-7670-251-5
NIPO: 060-96-041-0
NIPO: 351-90-051-0
121 págs.
78 págs. Agotado.
2.
Actuar es posible. El profesional de
atención primaria ante los problemas derivados del consumo de drogas. Madrid, 1992.
Formato: 19,5x26,5 cms.
30 (3 y 4) 2005
6.
Actuar es posible. La prevención
del consumo de drogas en la familia. Madrid,
1997.
Formato: 19,5x26,5 cms.
ISBN: 84-8150-171-9
Revista Española
de
Drogodependencias
435
ANEXO
NIPO: 126-97-021-0
125 págs.
7.
Actuar es posible. Servicios sociales
y drogodependencias. Madrid, 1998.
Formato: 19,5x26,.5
ISBN: 84-8150-176-X
NIPO: 126-98-003-2
125 págs.
8.
Actuar es posible. Educación sobre
alcohol. Madrid, 1998.
Formato: 19,5x26,5 cms.
ISBN: 84-8150-205-7
NIPO: 126-99-029-3
125 págs.
9.
Actuar es posible. Medios de comunicación y drogodependencias. Madrid, 2000.
Formato: 19,5x26,5 cms.
NIPO: 126-00-015-0
180 págs.
2. MONOGRAFÍAS
En este apartado el catálogo incluye publicaciones de carácter unitario cuyo autor
es unas veces institucional y otras no, y que
responden a las prioridades contempladas por
la Delegación del Gobierno para el PNSD.
1.
El tratamiento de las drogodependencias y las comunidades terapéuticas.
Domingo Comas. Madrid, 1988.
Formato: 24x17 cms.
ISBN: 84-7670-072-5
345 págs. Agotado.
2.
La integración social de drogodependientes. Gregorio Rodríguez Cabrero. Madrid,
1988.
Formato: 24x17 cms.
436
Revista Española
de
Drogodependencias
ISBN: 84-7670-120-9
310 págs. Agotado.
3.
Nosotros, los adolescentes y las
drogas. Jaime Funes Artiaga. Madrid, 1992.
Formato: 24x16,5cms.
ISBN: 84-7670-240-X
120 págs. Agotado.
4.
Drogodependencias e incorporación
social. Propuestas para pensar y actuar. Madrid,
1991.
Formato: 26,5x19,5 cms.
ISBN: 84-7670-315-5
61 págs. Agotado.
5.
Infección por VIH en usuarios de
drogas. Madrid, 1991.
Formato: 24x16,5 cms.
ISBN: 84-7670-280-9
188 págs. Agotado.
6.
Problemas de drogas: Valoración de
necesidades locales. Drug Indicators Project.
1985. Madrid, 1991.
Formato: 24x16,5 cms.
ISBN: 84-7670-309-0
259 págs.
7.
El paciente heroinómano en el hospital general. J. Cadafalch y M. Casas. Madrid,
1992.
Formato: 24x16,5 cms.
ISBN: 84-7670-348-1
NIPO: 351-92-008-7
350 págs.
8.
Pautas de actuación ante problemas
de salud asociados al uso de drogas por vía
parenteral. Madrid, 1994.
Formato: 22x29,5 cms.
30 (3 y 4) 2005
Catálogo de publicaciones 2005. Plan Nacional Sobre Drogas
ISBN: 84-8150-039-9
ISBN: 84-8150-202-2
12 págs.
NIPO: 126-99-026-7
9.
Metodología de evaluación de los
programas de prevención del consumo de
drogas. Seminario de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo. Cuenca, 1995.
Formato: 24x16,5 cms.
ISBN: 84-920522-1-X
178 págs. Agotado.
10. Drogas de síntesis en España. J. Gamella. Madrid, 1997.
Formato: 24x16,5 cms.
ISBN: 84-8150-151-4
202 págs.
14. Manual de educación sanitaria. Programa de formación de formadores para la
prevención. Patricia Insúa. Madrid, 1999.
Formato: 24x16,5 cms.
ISBN: 84-8150-203
NIPO: 126-99-025-1
401 págs.
15. Bases teóricas que sustentan los programas de prevención de drogas. E. Becoña.
Madrid, 1999.
NIPO: 126-97-011-9
Formato: 24x16 cms.
388 págs. Agotado.
NIPO: 126-99-033-2
11. Prevención de las drogodependencias. Análisis y propuestas de actuación. Madrid,
1998.
Formato: 24x16,5 cms.
ISBN: 84-8150-172-7
NIPO: 126-97-020-5
96 págs.
12. El consumo abusivo de alcohol en
la adolescencia: un modelo explicativo desde
la psicología social. J. Pons y otros. Madrid,
1999.
Formato: 24x16,5 cms.
ISBN: 84-8150-204-9
NIPO: 126-99-028-8
310 págs.
13. La prevención del consumo de
drogas y la conducta antisocial en la escuela:
Análisis y evaluación de un programa. Mª
Ángeles Luengo Martín y otros. Santiago de
Compostela, 1999.
Formato: 24x16,5 cms.
30 (3 y 4) 2005
308 págs.
16. Talleres de sexo más seguro y de
consumo de menos riesgo. Programa de formación de formadores para la prevención de
los problemas de salud asociados al consumo
de drogas. (Carpeta que contiene manual y
dos vídeos). Madrid, 1999.
17. Estrategia Nacional sobre Drogas.
2000-2008. Madrid, 1999.
Formato: 17x24 cms.
NIPO: 126-99-041-3
128 págs.
18. SIN. Juego para la prevención de las
drogodependencias (Soporte CD). Madrid,
1999.
ISBN: 84-8150-203. NIPO: 126-99-251-1.
19. Salir de marcha y consumo de drogas. Madrid, 2000.
Formato 21x 29’7 cms.
ISBN: 84-8150-220-0. NIPO: 126-00-029-4.
234 págs.
Revista Española
de
Drogodependencias
437
ANEXO
20. Drogas: más información menos
riesgos. Madrid, 2001.
NIPO: 126-01-022-0. 88 págs.
21. Legislación española sobre drogas
(Soporte CD). Madrid, 2001.
NIPO: 126-01-032-2.
22. Inter vención familiar en la prevención de las drogodependencias. Madrid,
2002.
Formato: 24x 16’5 cms.
ISBN: 84-8150-241-3. NIPO: 126-02-0306
384 págs.
23. Bases científicas de la prevención
de las drogodependencias. E. Becoña. Madrid.
2003.
Formato: 24x16’5 cms.
ISBN: 84-8150-240-5. NIPO: 126-035-3
480 págs.
24.
Drogas: más información menos
riesgos. Nueva edición. Madrid, 2003.
NIPO: 126-03-035-8. 88 págs.
25. Evaluación diagnóstico de los planes
autonómicos sobre drogas. Madrid. 2003.
NIPO: 126-03-038-4
26. Guía clínica para el tratamiento de
la adicción, L. Caballero, Madrid, 2005.
(En preparación)
27. Evaluación 2003 de la Estrategia
Nacional sobre Drogas 2000-2008. Madrid,
2005.
(En preparación)
28. Investigación sobre drogodependencias en España. Madrid, 2005.
(En preparación)
438
Revista Española
de
Drogodependencias
3. MEMORIAS E INFORMES
Bajo este epígrafe se presentan las Memorias anuales editadas por el Plan Nacional sobre Drogas desde 1986-1998 que
contienen las actividades desarrolladas por
las instituciones que componen el Plan (Administración Central, Planes Autonómicos y
Organizaciones no Gubernamentales).
Igualmente, se presentan los Informes del
Observatorio Español sobre Drogas, editados
hasta la fecha. Estos informes de carácter
periódico pretenden contribuir al análisis y
conocimiento de la situación de los consumos de drogas y las políticas de actuación en
nuestro país.
1.
Memoria Plan Nacional sobre Drogas, 1998. Madrid 1999.
Formato: 30x21 cm.
ISBN:
NIPO: 126-99-036-9
288 págs.
2.
Memoria Plan Nacional sobre Drogas , 1999. Madrid. 2000.
Formato: 30x 21 cms.
ISBN: 84-8150-221-9. NIPO: 126-00-036X.
280 págs.
3.
Memoria Plan Nacional sobre Drogas, 2000. Madrid, 2002.
Formato: 30 x 21 cms.
ISBN: 84-8150-233-2. NIPO: 126-01-047-1
268 págs.
4. Memoria Plan Nacional sobre Drogas,
2001. Madrid, 2003.
Formato: 30x21 cms.
ISBN:
NIPO:
30 (3 y 4) 2005
Catálogo de publicaciones 2005. Plan Nacional Sobre Drogas
5.
Memoria Plan Nacional sobre Drogas, 2002. Madrid, 2004
Formato 30 x 21 cms.
ISBN: 84-8150-249-9
NIPO:126-03-041-8
6.
Memoria del Plan Nacional sobre
Drogas, 2003. Madrid, 2005.
(En preparación)
7.
Informe nº 1 del Observatorio
Español sobre Drogas. Madrid, 1998.
Formato: 21x29,7 cms.
ISBN: 84-8150-185-9
NIPO: 126-98-017-6
96 págs.
8.
Informe nº 2 del Observatorio
Español sobre Drogas. Madrid, 1999.
Formato: 21x29,7 cms.
ISBN: 84-8150-195-6
NIPO: 126-99-012-3
126 págs.
9.
Informe nº 3 del Observatorio Español sobre Drogas. Madrid, 2000.
Formato: 21x 29’7 cms.
NIPO: 126-00-020-5. 126 págs.
10. Informe nº 4 del Observatorio Español sobre Drogas. Madrid, 2001.
Formato: 21x 29’7 cms.
ISBN: 84-8150-227-8. NIPO: 126-01-020X.
174 págs.
11. Informe nº 5 del Observatorio Español sobre Drogas, Madrid, 2002.
Formato: 21x 29’7 cms.
ISBN: 84-8150-241-3. NIPO: 126-02-030-6.
12.
Informe nº 6 del Observatorio
Español sobre Drogas, Madrid, 2003.
30 (3 y 4) 2005
Formato: 21x29’7 cms.
ISBN:
NIPO:
13. Informe 2004 del Obser vatorio
Español sobre Drogas, Madrid, 2005.
(En preparación)
4.
DOCUMENTOS TÉCNICOS (Encuestas, informes...)
En este apartado se recogen diversos tipos
de documentos técnicos realizados por la
Delegación del Gobierno para el PNSD que
forman parte de la denominada literatura
gris y que se refieren a Encuestas, informes,
indicadores, estadísticas y que pueden ser
consultados en la Biblioteca del Centro:
1.
2.
1998.
Encuesta domiciliaria, 1997.
Encuesta a la población escolar,
3.
Criterios de acreditación en prevención, 1997.
4.
Plan de Medidas para luchar contra
las drogas, 1997.
5.
Legislación básica sobre precursores.
PNSD, 1998.
6.
Indicadores de tratamiento, urgencia
y mortalidad. Informe año 1997.
Observatorio Español sobre Drogas.
7.
Indicadores de tratamiento, urgencia
y mortalidad. Informe año 1998. Observatorio
Español sobre Drogas.
8.
Indicadores de tratamiento, urgencia
y mortalidad. Informe año 1.999.
Observatorio Español sobre Drogas.
9.
Indicadores de tratamiento, urgencia
y mortalidad. Informe año 2.000.
Revista Española
de
Drogodependencias
439
ANEXO
Observatorio Español sobre Drogas.
10.
1998.
14.
15.
2000.
Encuesta a la población escolar,
Encuesta domiciliaria, 1999.
Encuesta a la población escolar,
16. Indicadores de tratamiento, urgencia
y mortalidad. Informe año 2001.
Observatorio Español sobre Drogas.
17. Indicadores de tratamiento, urgencia
y mortalidad. Informe año 2002.
Observatorio Español sobre Drogas.
18. Catálogo de centros de asistencia a
drogodependientes. 2004.
19.
Catálogo de vídeos. 2004.
20. Encuestas domiciliarias sobre abuso
de drogas 1995-2003. Madrid, 2005.
(En preparación)
22. Encuestas estatales sobre uso de drogas
en enseñanzas secundarias 1994-2004.
(En preparación).
23. Sistema Estatal de Información sobre Toxicomanías SEIT 2003. Madrid, 2005.
5. COMUNIDAD Y DROGAS.
CUADERNOS TÉCNICOS DE
ESTUDIOS Y DOCUMENTACIÓN.
Especializada en estudios sobre drogodependencias, comenzó a editarse en 1986 y
consta de números ordinarios y monográficos.
Recoge en sus páginas, aportaciones de especialistas sobre distintos aspectos relacionados
con las toxicomanías.
No se edita en la actualidad.
Los números ordinarios abarcan del 1 al 16
y están en su mayoría agotados.
440
Revista Española
de
Drogodependencias
Monografías
1.- Enfoque relacional en toxicomanías.
Varios autores. 1987.
Formato: 17x24 cm.
109 págs. Agotado.
2.- La imagen de la droga en la prensa
española.
B. García, J. Menor y A. Perales. 1987.
Formato: 17x24 cm.
ISBN: 84-7670-066-0
83 págs.
3.- Modificaciones penales y atención
de personas con drogodependencias. Varios
autores. 1988.
Formato: 17x24 cms.
ISBN: 84-7670-092-X
141 págs.
4.- Incorporación social de colectivos
marginados. Varios autores. 1988.
Formato: 17x24 cms.
ISBN: 84-7670-1268
126 págs. Agotado.
5.- Drogodependencias y atención
primaria. Varios autores. 1988.
Formato: 17x24 cms.
ISBN: 84-7670-127-6
110 págs.
6.- La persona con drogodependencias
ante la ley penal. Varios autores. 1989.
Formato: 17x24 cms.
ISBN: 84-7670-154-3
180 págs.
7.- Bibliografía comentada sobre drogodependencias. C. Álvarez-Vara y D. Comas
(Coordinadores). 1989.
Formato: 17x24 cms.
30 (3 y 4) 2005
Catálogo de publicaciones 2005. Plan Nacional Sobre Drogas
ISBN: 84-7670-163-2
166 págs.
8.- Droga, televisión y sociedad. PereOriol, Costa Badía y J. M. Pérez Tornero.
Formato: 17x24 cms.
ISBN: 84-7670-190-X
99 págs.
9.- Cumplimiento de la pena en prisión:
Alternativas para drogodependientes.
Varios autores.
Formato: 17x24 cms.
ISBN: 84-7670-203-5
114 págs.
10.- Drogas en la adolescencia: Demandas y Servicios de atención. Varios autores.
1990.
Formato: 17x24 cms.
ISBN: 84-7670-218-3
135 págs. Agotado.
11.- Tesauro de drogodependencias. R.
Mosquera, F. Rodríguez e I. Molowny. 1990.
Formato: 17x24 cms.
ISBN: 84-7670-226-4
166 págs. Agotado.
12.- Atención a reclusos con drogodependencias. Varios autores. 1990.
Formato: 17x24 cms.
ISBN: 84-7670-298-1
164 págs.
13.- Los grupos de autoayuda y las intervenciones en los problemas relacionados con
el alcohol. Varios autores. 1991.
Formato: 17x24cms.
ISBN: 84-7670-298-1
81 págs. Agotado.
14.- Medios de comunicación en el
30 (3 y 4) 2005
“problema de las drogas” y la percepción de
soluciones. Varios autores. 1991.
Formato: 17x24 cms.
ISBN: 84-7670-310-4
171 págs. Agotado.
15.- Formación en prevención de las
drogodependencias para Asociaciones de
Padres de Alumnos. Varios autores. 1992.
Formato: 17x24 cms.
ISBN: 84-7670-335-X
90 págs. Agotado.
6. FOLLETOS
1. Los escolares y la salud. (Recoge los resultados del primer estudio español sobre
hábitos de los escolares en relación con la
salud). 1986. Madrid, 1988. Agotado.
2. Los escolares y la salud (Avance de los
resultados del segundo estudio español
sobre conductas de los escolares relacionados con la salud). 1990. Madrid, 1991.
Agotado.
3. Puedes intervenir. Las drogodependencias.
Un problema común. Madrid, 1991. Agotado.
5. Un esfuerzo común. Madrid, 1991. Agotado.
6. Cómo participar en la prevención. Semana
Europea de Prevención sobre Drogas.
1992. Madrid, 1992. Agotado.
7. Cuídate el cuerpo. Madrid. 1994. Agotado.
8. Entre todos podemos hacer más. Semana
Europea de Prevención sobre Drogas.
1994. Madrid, 1994. (Versiones en español
e inglés). Agotado.
9. Plan Nacional sobre Drogas (Folleto
Revista Española
de
Drogodependencias
441
Idice 2005.
INDICE POR AUTORES
A
ACAMBI, Asociación de Cáncer de Mama
de Bizcaia : Afectadas por cáncer de mama
reclaman la legalización del cannabis. Vol 30
(nº 1 y 2).
Alonso Sanz, Carlos: La prevención del
consumo de drogas en España: evolución y
propuestas para la reflexión. Vol 30 (nº 3 y
4).
Arana, Xavier : Mediante la profundización
en los derechos de las personas consumidoras,
hacia la normalización del cánnabis : génesis
de un Manifiesto. Vol 30 (nº 1 y 2)
B
Baeza Avalone,V.:Tráfico de drogas blandas
o que no causan grave daño en la salud. Vol
30 (nº 1 y 2) .
Barriuso Alonso, M. : Adiós al guetto: El
discreto encanto de la normalidad. Vol 30
(nº 1 y 2).
Bas, Encarna : Intervención socioeducativa
de los educadores sociales en una sociedad
interdependiente: formación pre-grado en
drogodependencias. Vol 30 (nº 1 y 2).
Beranuy, Mar ta: Ver Sánchez-Carbonell,
Xavier.
C
Cobas Cobiella, Elena: La legislación más
relevante en materia de adicciones. Vol 30
(nº 3 y 4).
Colomera, Patricia: Ver Sánchez-Carbonell,
Xavier.
Cano, Leonor: El nacimiento de la memoria
escrita: descripción de las revistas pioneras en
drogodependencias. Vol 30 (nº 3 y 4).
Cano, Enrique: Ver Cano, Leonor
D
Del Val Carrasco, José: Fuentes de información sobre drogodependencias en España: una
visión histórica. Vol 30 (nº 3 y 4).
F
Fernández Ruiz, J: Ver Ramos, J A.
Forcén, Marina : Ver Sánchez-Carbonell,
Xavier
Freixa, Francesc: Salud Pública y bebidas
alcohólicas. Vol 30 (nº 3 y 4).
Ferrer Angulo, J.M.: Veinte años de intervención en drogas: una perspectiva desde
el Proyecto Hombre de Valencia. Vol 30 (nº
3 y 4)
G
Gamella, Juan F.: Comercialización sin legalización: Políticas públicas y consumo/comercio
de cánnabis en España (1968-2003). Vol 30
(nº 1 y 2).
J
Jiménez, Mª Luisa : Ver Gamella, Juan F.
L
Lacoste Marín, Jesús A: Internet y las nuevas
tecnologías: evolución de la página Web del
Instituto de estudio de las adicciones www.
lasdrogas.info.
Landa, Natalia : ver Lorea, Iñaki.
López-Goñi, Jose Javier : ver Lorea, Iñaki.
Lorea, Iñaki : Cannabis, cerebro y adicción.
Vol 30 (nº 1 y 2).
M
Márquez, Iñaki : Ver Arana, Xavier.
Martín, Emiliano : 20 años de prevención
familiar en España (1985-2005). Vol 30 (nº
3 y 4).
Martínez, Iñaki : El Cannabis y la reducción
442
Revista Española
de
Drogodependencias
30 (3 y 4) 2005
Índice 2005
de riesgos y daños. Vol 30 (nº 1 y 2).
Ver Vega, Amando. Vol 30 (nº 3 y 4).
N
Nateras, Alfredo : Ver Sánchez, Alejandro.
R
Ramos, J A. Historias del cannabis. Vol 30
(nº 3 y 4.)
Rovira Rodas, J.A.: Ver Ferrer Angulo, J. M.
Romaní, Oriol: La cultura del cannabis treinta años después...unas reflexiones personales.
Vol 30 (nº 3 y 4).
recursos para la acción educativa. Vol 30 (nº
1 y 2).
Globalización y Derechos humanos: nuevos
retos para los planes nacionales. Vol 30 (nº
3 y 4).
Las Asociaciones ante las drogas: a propósito de los 25 años de AGIPAD. Vol 30 (nº
3 y 4).
Verdú, Francesc: Ver Cano, Leonor.
Virgili, Carles : Ver Sánchez-Carbonell,
Xavier
S
Sánchez, Alejandro: Los contextos del uso
de marihuana en Latinoamérica y culturas juveniles urbanas en Méjico. Vol 30 (nº 1 y 2).
Sánchez, Mercedes: Ver Cano, Leonor.
Sánchez-Carbonell, Xavier : Indicadores
sanitarios y sociales de la evolución de una
cohorte de adictos a heroína: 1985-2000.
Proyecto EMETYST. Vol 30 (nº 3 y 4).
Suelves, Joseph Mª : Drogodependencias: de
la epidemiología a la intervención. Estrategias
y oportunidades. Vol 30 (nº 3 y 4).
T
Tirapu-Ustárroz, Javier : Ver Lorea, Iñaki.
Turbi Pinazo, A.M.: Ver Ferrer Angulo, J. M.
U
Urios Aparisi, C. : Algunas prácticas en
torno al uso terapéutico en Catalunya. Vol
30 (nº 1 y 2).
V
Valverde, Mikel : Salud pública y política a
propósito de un plan antidroga. Vol 30 (nº
1 y 2).
Vega Fuente, A.: Cánnabis en las escuelas:
30 (3 y 4) 2005
Revista Española
de
Drogodependencias
443
SOLICITUD
SOLICITUD DE
DE INSCRIPCIÓN
INSCRIPCIÓN
CUOTA SOCIO: (España); 60´00
; 89
año (extranjero).
Si no desea hacerse miembro de AESED, pero quiere recibir la Revista Española
de Drogodependencias deberá dirigirse igualmente a la misma dirección anterior,
indicándolo en la SOLICITUD DE INSCRIPCIÓN.
SUSCRIPCIÓN: (España); 48´00 ; 63
año (extranjero)
SOLICITUD DE INSCRIPCIÓN
444
A.E.S.E.D.
RECONOCIDA POR LA GENERALITAT VALENCIANA EN MARZO DE 1987
DECLARADA DE UTILIDAD PÚBLICA: ORDEN INT. / 751 / 2004 DE FEBRERO
SOLICITUD:
Ser socio de A.E.S.E.D. España: 60,00 ./año - Resto: 89
Suscripción a Revista Española de Drogodependencias (4 números/año)
Envío España: 48,00 /año - Envío Resto: 63
DATOS PERSONALES:
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FORMA DE PAGO:
Domiciliación bancaria. Muy Sr. mío: Le ruego sirva cargar en mi c/c. y hasta
nuevo aviso, los recibos que le sean presentados por AESED en concepto de
inscripción anual, a mi nombre.
Entidad bancaria:
C/Pza.:
Población:
c/c/c. nº
Titular:
Firma:
Revista Española
de
Drogodependencias
Fecha:
30 (3 y 4) 2005

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