Un paseo por San Carlos 16pp
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Un paseo por San Carlos 16pp
a Cómo y con qué se pinta La base material de las imágenes A lo largo de la historia, los grupos humanos han pintado sobre distintas superficies, con diversos materiales y utensilios. Han usado aquello que estaba a su alcance. Molían minerales y plantas y los combinaban con grasas de animales, agua y otras sustancias naturales. De esta manera, al paso del tiempo se desarrollaron diversas técnicas pictóricas. Es importante señalar que para que el artista consiga satisfactoriamente el resultado que desea, debe seleccionar los materiales que mejor expresen su intención. Ningún material es superior a otro: la calidad de la obra depende siempre de la habilidad y del ingenio del artista. A las superficies sobre las cuales se pinta se les llama soportes. Existen soportes rígidos, como los Escenas de la vida de San Lázaro, s.f. Anónimo catalán (siglo xiv). Temple sobre tabla, 150 x 192 cm. Escuela española. Pliego 001-016.indd 9 4/24/09 1:09:35 PM La última cena, s.f. Pieter Janz Pouburs (1523-1584). Óleo sobre tela, 64.5 x 119.3 cm. Escuela neerlandesa. muros, tablas, láminas metálicas y cerámica. Hay otros flexibles, como el papel, la tela y la piel. Generalmente se utilizan telas de fibras naturales, como algodón y lino. Los lienzos que regularmente vemos en los museos están hechos con un bastidor de madera en el que se tensa la tela y se sujeta con pequeños clavos. L a obra pictórica se crea cuando, por o Cuando se pinta sobre las paredes de los edificios, se habla de pintura mural. Una técnica muy usada en la pintura mural es el fresco, que consiste en aplicar la pintura sobre el aplanado o enlucido del muro antes de que éste seque. Este proceso lo apreciamos en el cuadro inconcluso La última cena, de Pieter Janz Pouburs. El pigmento es lo que da el color. Se obtiene de compuestos minerales pulverizados, como el lapislázuli, el cadmio o el óxido de hierro. El aglutinante es el vehículo que contiene el pigmento y que permite su aplicación y adherencia al soporte. En algunos casos se les agrega alguna otra sustancia para darles carga, o para que sir- medio de distintos materiales, se plasman imágenes que expresan ideas Para que la pintura se adhiera al soporte y la superficie sea lisa y homogénea, se debe aplicar una preparación llamada imprimatura, que puede ser blanca o de color. Una vez lista, se pasa el dibujo y se aplica la capa pictórica. La última cena (detalle). 10 Pliego 001-016.indd 10 4/24/09 1:09:39 PM El retrato de Angelita Armendáriz, 1884. Mariano Benlliure Gil (1862-1947). Acuarela sobre papel,102 x 67.5 cm. Escuela española. va como mordiente, es decir, para facilitar que se una el aglutinante con el pigmento. Si observamos El retrato de Angelita Armendáriz, de Mariano Benlliure Gil, vemos que la pintura tiene un terminado liso y transparente. La pincelada es visiblemente acuosa. La técnica que se usó para esta obra es la acuarela —que es la mezcla más sencilla—, consistente en agua y pigmento. u otro aglutinante orgánico. Se aplica por medio de delgadas capas sucesivas que se denominan veladuras. El terminado es liso y luminoso, y el secado es rápido. Un ejemplo es el cuadro anónimo Escenas de la vida de San Lázaro. La pintura al óleo es la mezcla del pigmento con aceite, generalmente de linaza. También se le agrega algún barniz y cera para darle consistencia. Su aplicación es muy flexible, puede ser por empastes o por veladuras. Su secado es lento. El terminado es brillante y facilita los efectos de textura y de pincelada, tal como lo podemos notar en el cuadro Los jugadores, de Joos van Craesbeeck. A veces, después de la capa pictórica, los artistas aplican una capa de barniz como protección o para dar un terminado más brillante. o Antes del siglo xx los pintores preparaban sus soportes y elaboraban sus propias pinturas moliendo los minerales y mezclándolos con distintos aglutinantes. Actualmente existe una industria dedicada a la fabricación de pinturas sintéticas. L as sustancias con las cuales se pinta son básicamente una mezcla de pigmentos Otra técnica que se ha usado desde la antigüedad es el temple, que consiste en la unión del pigmento con yema de huevo Los jugadores, ca. 1630. Joos van Craesbeeck (1606-1654) (atribuido). Óleo sobre tabla, 162.5 x 131 cm. Escuela flamenca. 11 Pliego 001-016.indd 11 4/24/09 1:09:40 PM c Ordenando el espacio Cuando el artista inicia una pintura, tiene que decidir cómo va a organizar los distintos elementos que la conformarán. Para ello se vale del conocimiento del dibujo y la geometría. A esta organización se le llama composición. La composición de un cuadro permite que en conjunto la obra nos cause cierta impresión. La composición puede parecernos ordenada o desordenada: algunas pinturas nos dan idea de equilibrio y reposo, mientras que otras son dinámicas y llenas de acción. La disposición de los elementos en una pintura nos sugiere la lectura del cuadro, es decir, la dirección y la secuencia en que miramos cada uno de los objetos representados. Esto se logra al ubicar cada elemento siguiendo líneas rectas o curvas. De esta forma, el artista jerarquiza los componentes. Por ejemplo, situará al objeto o personaje de mayor relevancia en el lugar que más atraiga nuestra atención. El uso de estructuras geométricas proporciona orden a la imagen Adoración de los Reyes Magos, s.f. Anónimo (siglo xvi). Óleo sobre tabla, 101 x 93 cm. Escuela neerlandesa. En algunos cuadros, los elementos se acomodan siguiendo un patrón de figuras geométricas 12 Pliego 001-016.indd 12 4/24/09 1:09:43 PM regulares, como círculo, óvalo, triángulo, cuadrado, etcétera. En otros, se usan figuras irregulares. La utilización de estructuras geométricas regulares consigue dar orden a la imagen, mientras que las irregulares hacen que la obra tenga más movimiento. En diferentes épocas de la historia del arte se ha preferido algún tipo de composición en especial. Por ejemplo, durante el Renacimiento se pretendía que las imágenes tuvieran un orden cerrado, simétrico y estructurado. En épocas posteriores —como en el manierismo y el barroco— se prefirieron las composiciones más audaces, abiertas, e irregulares. Veamos el cuadro Adoración de los Reyes Magos, de autor desconocido. Al centro está la Virgen con el niño Jesús. Al observar con detenimiento notamos que el cuadro es simétrico. Si trazamos una línea vertical a la mitad, notamos que los elementos más importantes tienen una correspondencia similar en el lado opuesto. Las líneas de los edificios en ruinas del fondo enfatizan la geometría de la composición. La estructura arquitectónica rectangular ofrece un marco para la Virgen con el niño y el Rey Mago que está en adoración. Ahora tracemos triángulos sucesivos cuyo vértice superior sea la estrella de Belén. Notaremos La coronación de la Virgen, s.f. Andrea Dall’Aste (1673-1721). Óleo sobre tela, 65.5 x 62 cm. Escuela italiana. que las figuras están distribuidas sobre el lienzo en relación con estos triángulos. Esta composición nos ofrece una idea de estabilidad y equilibrio. La coronación de la Virgen, de Andrea Dall’Aste, está realizada en un formato circular. Podemos notar que la imagen tiene dos ejes principales: uno horizontal y otro vertical. Los elementos están ordenados según la forma de un triángulo cuyo vértice se corresponde con la túnica del Padre Eterno. Todos los elementos están acomodados en diagonales de izquierda a derecha. Esto permite que, aunque la cabeza de la Virgen está en el centro del cuadro, la mayor importancia está en la figura de Cristo —en el lado izquierdo—, quien sostiene la corona. o En el Renacimiento se comenzaron a aplicar fundamentos científicos en el arte. Luca Pacioli, en su obra La divina proporción, propone principios matemáticos para ordenar las figuras dentro del espacio pictórico. 13 Pliego 001-016.indd 13 4/24/09 1:09:44 PM e Color y emoción Rojo fuego y azul melancólico El color es un valor plástico esencial por el cual el artista nos comunica una experiencia sensorial y emotiva. En general, podemos decir que los colores están divididos en dos grandes grupos: fríos y cálidos. Entendemos por colores fríos los más apagados y los relacionamos con estados pasivos La boda de Sara y Tobías, ca. 1622. Giovanni Biliverti (1576-ca. 1644). Óleo sobre tela, 183.5 x 147 cm. Escuela italiana. como el reposo, la tranquilidad o la tristeza. En este grupo están los grises, azules, verdes y violetas. Los colores cálidos son dinámicos y atractivos; los relacionamos con la sensualidad, el movimiento, el entusiasmo y la alegría. Los rojos, naranjas y amarillos pertenecen a este grupo. El pintor debe considerar cómo va a combinar los colores en su obra. Si utiliza únicamente colores fríos o sólo colores cálidos, la pintura poseerá un carácter más pasivo; en cambio, al contrastar colores de los dos grupos, el carácter de la obra será activo y provocador. En La boda de Sara y Tobías, del artista de la escuela italiana Giovanni Biliverti, los personajes destacan del fondo sombrío por sus atractivos colores. La capa azul de Tobías contrasta con su cálida vestimenta amarilla. El ángel del centro porta una túnica roja bermellón que contrasta con la capa verde oscuro. Los colores básicos o primarios son el rojo, el azul y el amarillo. 14 Pliego 001-016.indd 14 4/24/09 1:09:46 PM De vuelta al trabajo, s.f. Manuel Benedito y Vives (1875-1963). Óleo sobre tela, 65.5 x 62 cm. Escuela española. Si estos colores se mezclan por pares, se obtienen los secundarios. De combinar rojo y azul resulta violeta; del azul y el amarillo resulta el verde, y del rojo y amarillo, el naranja. De igual forma, al mezclar los colores secundarios resultan los colores terrosos o terciarios, como los cafés, los ocres y los grises. Entre más mezclados estén los colores, se vuelven más apagados. Cuando a un color se le agrega blanco para aclararlo o negro para oscurecerlo, se está realizando una gradación. Por medio de las gradaciones se obtiene la ilusión de volumen en los objetos. Si observamos nuevamente la pintura La boda de Sara y Tobías, vemos que en el vestido de Sara hay zonas que se encuentran en la sombra y son casi negras, y que se aclaran progresivamente hasta obtener zonas casi blancas. Esto nos produce la ilusión de que la tela cae sobre el cuerpo de Sara, con lo que se percibe claramente el volumen de su pierna ligeramente flexionada. En De vuelta al trabajo, Manuel Benedito y Vives no utiliza el color para hacer una imitación de la naturaleza, sino que a través de él expresa la emoción que le causó la escena. En este cuadro, perteneciente a la corriente fauvista, notamos que las formas están dadas por colores llamativos. El artista muestra una preferencia por los colores cálidos como el naranja y el rojo. Estos colores contrastan con el tenue azul del cielo. Hay una ausencia del uso del negro y los colores se usan planos, sin degradación. Los volúmenes se lograron por medio de contrastes cromáticos. Las sombras están sugeridas con colores fríos como el azul y el violeta. o En la pintura veneciana se usó la modulación cromática, que consiste en variar poco a poco un color hasta llegar a otro distinto. Por ejemplo, el azul se modula agregando progresivamente pequeñas cantidades de verde, hasta obtener un verde puro. 15 Pliego 001-016.indd 15 4/24/09 1:09:48 PM l Ilusiones y engaños al ojo La sensación de espacio lograda en una superficie de dos dimensiones —es decir, una superficie plana como la de una pintura— es una ilusión. Se trata de un truco que engaña a nuestro ojo y nos hace creer que en el cuadro que estamos viendo existe un espacio como el que nosotros habitamos. Esta ilusión no se logró de la noche a la mañana. La necesidad de reproducir la vida real hizo que los artistas buscaran el modo de obtener imágenes que nos hicieran creer que sus obras eran una ventana más al mundo. En diversas épocas esta ilusión se ha utilizado en el arte; ya en las pinturas clásicas de Grecia y Roma podemos ver el uso de trucos para lograr la sensación de espacio. En la Edad Media se dieron controversias religiosas que cuestionaban la importancia que las imágenes estaban tomando, y se promulgaron una serie de reglamentos en contra de ellas. En ese momento se perdió parte de la tradición naturalista que la pintura tenía hasta entonces. Podemos decir que es hacia principios del siglo xiv cuando el naturalismo vuelve a tomar un papel determinante para los artistas, cuyas búsquedas para lograr mayor realismo desembocan en la etapa que conocemos como Renacimiento. La Anunciación, ca. 1530. Anónimo (siglo xvi). Óleo sobre tabla, 54.3 x 108 cm. Escuela flamenca. 16 Pliego 001-016.indd 16 4/24/09 1:09:50 PM En la obra anónima La Anunciación podemos ver claramente algunos de los medios de que se valen los pintores para lograr esta idea de espacio y profundidad. El pintor ha puesto en la escena un piso cuadriculado que le permite, al ir haciendo más angostos los mosaicos, dar idea de que existe profundidad; igualmente, la ventana que está al centro de la imagen aumenta la sensación de la tercera dimensión, porque en ella vemos un paisaje del mismo modo que nuestro ojo lo vería en condiciones reales de lejanía, es decir, más pequeño. La sombra que el ángel proyecta diagonalmente en el suelo, así como los rayos que acompañan a la paloma, ayudan a crear la profundidad. En esta pintura podemos claramente trazar un punto de fuga desde el centro del paisaje, que ayuda a darle hondura a la escena y rige la composición en forma triangular. Podemos notar que el artista, además de realizar una obra de tema religioso (quizá parte de algún retablo), está haciendo una demostración de sus aptitudes compositivas. Estos trucos se repiten a lo largo de la historia del arte y los podemos identificar fácilmente. Otro ejemplo es la pintura de finales del siglo xvii titulada Palacio, de Jacob Ferdinand Saeys, quien también se vale del piso para crear Palacio, ca. 1690. Jacob Ferdinand Saeys (1658-1725). Óleo sobre tela, 57 x 72.5 cm. Escuela flamenca. la sensación de profundidad, pero principalmente utiliza la arquitectura para este fin. Elementos como las diagonales de los escalones, de la posición del edificio y de la sombra que éste proyecta le permiten al artista lograr profundidad en lo plano. Las dimensiones monumentales del edificio son acentuadas por el tamaño de los personajes que aparecen en la escena. El punto de fuga que se puede situar en el extremo derecho, casi al centro, es —también en este caso— la herramienta principal del pintor para lograr la ilusión de profundidad. Como vemos, los artistas se valían de trucos para lograr el efecto de la tercera dimensión en una pintura. Comprendieron el funcionamiento de la mirada y, analizando el modo en que vemos, dieron con las claves que permiten engañar al ojo. o El punto de fuga es un punto en la superficie del lienzo a partir del cual se trazan —fugan— líneas que establecerán el orden de la composición. 17 Pliego 017-032.indd 17 4/24/09 1:10:45 PM e Ilusiones de movimiento En la pintura, a diferencia del cine, la imagen permanece quieta. Los personajes se mantienen fijos sin que exista la posibilidad de que el espectador vea cambios en la escena. Entonces, cuando los pintores han buscado representar acción y movimiento, ¿cómo han resuelto el problema? Uno de los recursos, muy usado sobre todo en el manierismo y el barroco, es presentar a los personajes realizando actividades que requieren movimiento corporal. Generalmente se prefieren los temas donde se pueda hacer uso de estas actividades, como batallas, persecuciones, danzas, etcétera. Las figuras se distribuyen en grupos asimétricos en los que cada una toma distintas posturas. Por este medio, la pintura adquiere una narrativa dinámica. Si el artista abusa de este recurso, la escena puede verse demasiado teatral y los personajes pueden parecer artificiales. Otro recurso es el uso de la línea y la pincelada. El dibujo se construye prefiriendo las líneas La cacería de venados, s.f. Peter Paul Rubens (1577-1640). Óleo sobre tela, 215 x 480 cm. Escuela flamenca. 18 Pliego 017-032.indd 18 4/24/09 1:10:47 PM ondulantes e irregulares sobre las rectas y las regulares. Al aplicar el color, el artista deja la pincelada visible, siguiendo las distintas direcciones de su cuadro. En las obras de Peter Paul Rubens nos sorprende el buen manejo de estos recursos. Observemos la pintura La cacería de venados. Todas las figuras están en fuga de un extremo al otro del cuadro. Las ninfas persiguen con sus perros de caza a las presas, en una vertiginosa carrera. Podemos notar, en la tensión de los músculos y en la expresión de los rostros, que todos los personajes están envueltos en una extrema actividad física. Algunas cazadoras clavan sus lanzas sobre el venado que, dolorido, cae al suelo. Otras se valen del arco y las flechas para acorralar a sus presas. Los perros se lanzan feroces sobre los animales heridos. L as líneas ondulantes y las pinceladas sueltas dan la impresión de acción en la imagen Si observamos con mayor detalle, veremos que la pincelada es suelta. La rubia cabellera de la diosa Diana se dispersa en el aire, en dirección contraria a la carrera. Por medio de líneas arremolinadas, las túnicas parecen flotar. Salto de obstáculos, s.f. Alfred Dedreux (1810-1860). Óleo sobre tela, 42.5 x 64.5 cm. Escuela francesa. Notamos que el pelaje de los perros está hecho con finas pinceladas que simulan el movimiento. También las nubes y los árboles están pintados con la misma soltura que los personajes. Esto hace que el paisaje complemente la acción de la escena. En el cuadro Salto de obstáculos, Alfred Dedreux suspende la escena en un preciso instante: justo antes de que el movimiento se complete. Es como si fuera una fotografía instantánea. Los caballos están en diferentes momentos de una secuencia: uno está por brincar, otro está saltando en el aire, otro casi toca el suelo, y uno más ya saltó y cayó. Podemos adivinar cómo estaban todos los caballos en el instante inmediatamente anterior. Así también, anticipamos lo que va a suceder justo después. No obstante, nos queda la duda de cuál de ellos logrará saltar con éxito. o Con la aparición de la fotografía, a mediados del siglo xix, fue posible observar los componentes del movimiento. Éstos tienen una duración tan corta que no pueden percibirse con el ojo. Al pasar rápidamente una secuencia de varias fotografías, se crea la idea de movimiento. 19 Pliego 017-032.indd 19 4/24/09 1:10:48 PM l Emociones capturadas La expresión de emociones se puede lograr de muy diversas maneras en una pintura. El artista puede valerse de medios plásticos como el color y la pincelada o utilizar las poses y los rostros de los personajes. La expresión facial se ha utilizado con mayor énfasis en ciertas épocas y géneros, como en la pintura barroca. El rostro es una de nuestras máximas “herramientas” de expresión; nuestros gestos, movimientos y arrugas pueden evidenciar si nos encontramos tristes, contentos, desesperados, etcétera. Los artistas, al pretender transmitir la emoción de un personaje, han estudiado con detenimiento cuáles son las claves que nos permiten ver, en el cuerpo de otra persona, su estado anímico. Estas emociones pueden apreciarse en obras de gran intensidad expresiva, como las que veremos en este capítulo: San Pedro arrepentido y Episodio del diluvio universal. El artista puede utilizar las poses y los rostros para impresionar al espectador San Pedro arrepentido o Las lágrimas de San Pedro, s.f. Anónimo (siglo xvii). Óleo sobre tela, 70 x 54 cm. La pintura San Pedro arrepentido o Las lágrimas de San Pedro es una copia anónima de una obra de Guido Reni, uno de los más 20 Pliego 017-032.indd 20 4/24/09 1:10:51 PM Episodio del diluvio universal, ca. 1852. Francesco Coghetti (1804-1875). Óleo sobre tela, 221 x 250 cm. importantes artistas italianos del barroco. La pieza no pierde valor por tratarse de una copia: debemos recordar que muchas de estas reproducciones se hicieron como ejercicios por quienes estudiaban artes plásticas o para que sirvieran de modelo en las academias de arte. Si observamos con detenimiento, notaremos que el rostro del santo representado es muy expresivo. Su ceño fruncido y arrugado, su mirada dirigida al cielo y la tensión del cuello reflejada en sus músculos nos hablan de un momento desesperado, de un momento de arrepentimiento (como bien lo dice el título de la obra). El pelo un tanto revuelto y la barba despeinada le dan a la imagen del santo una sensación de desorden, quizá de desesperación. Las manos entrelazadas son también un elemento importante: la energía con que se estrechan alude a la fuerza con que San Pedro está sintiendo su pesar; aun así, no debemos dejar de ver que no están del todo logradas, como puede verse en las arrugas. El rostro es una de nuestras máximas “herramientas” de expresión: delata nuestras emociones Cada persona puede darle una lectura distinta a esta obra, pero es indudable que el pintor ha logrado transmitir una idea: el santo está arrepentido y sufriendo. o Es interesante ver de qué herramientas se valen los pintores para expresar emociones en sus obras. Estas herramientas varían de acuerdo a la época y en muchas ocasiones no logran su cometido, pues hay algo en los rostros o en los cuerpos que no llega a convencer. 21 Pliego 017-032.indd 21 4/24/09 1:10:53 PM La composición del cuadro también colabora con el impacto que quiere causar el pintor. El fondo, oscuro, nos obliga a centrar toda nuestra atención en el personaje retratado: no hay ningún otro elemento que nos distraiga. Rostros y cuerpos están dispuestos para impresionar al espectador Muy distinto es el caso de Episodio del diluvio universal —otra copia—, que llegó a la Academia de San Carlos con fines didácticos. Se trata de una escena con varios personajes, con un aco- Episodio del diluvio universal (detalle). Episodio del diluvio universal (detalle). modo muy estudiado, que aparecen de cuerpo completo y que de modo muy distinto también expresan emociones. Rostros y cuerpos están dispuestos de tal modo que logren impresionar al espectador. Las dos figuras centrales bien podrían ser parte de un conjunto de escultura clásica; sus posturas dramáticas han sido logradas por medio de torsiones y equilibrio de pesos, la figura pálida y lánguida del joven es impactante. La expresión en el rostro del anciano que se encuentra sumergido en el agua es muy real, casi opuesta al dramatismo teatral del resto de las figuras. Incluso la mujer y el niño podrían ser parte de otra escena, pues no logran expresar el dolor de la muerte después del diluvio. De hecho, el niño parece estar simplemente dormido. Nuevamente, toda la atención de la pintura se centra en los personajes, ya que el fondo sólo funciona como un telón. 22 Pliego 017-032.indd 22 4/24/09 1:10:56 PM l l Hablando con el cuerpo Los gestos son parte fundamental de nuestros procesos de comunicación. Al hablar usamos nuestras manos y ciertas expresiones faciales para enfatizar y calificar nuestras palabras. Pensemos en el lenguaje de los políticos: su impacto no sólo radica en la voz, sino que se sustenta en movimientos corporales, por ejemplo, en el uso que se les da a las manos. En la antigüedad clásica el estudio de la retórica iba de la mano con el de la gestualidad. Incluso existen tratados en los que encontramos una especie de guía de interpretación de gestos y ademanes. Los gestos son fundamentales en la comunicación Este lenguaje del gesto resultó de una gran relevancia para los artistas, ya que les permitía expresar determinadas ideas y dis- La Anunciación, s.f. Willem van Herp (1614-1677). Óleo sobre lámina, 61 x 81.5 cm. 23 Pliego 017-032.indd 23 4/24/09 1:10:58 PM o La diferencia de significado entre gesto y ademán es mínima. El gesto es el movimiento del rostro o de las manos que expresa algo, mientras que el ademán es el movimiento del cuerpo o de alguna parte específica que igualmente expresa algo. cursos por medio de una simple postura del cuerpo o de alguna de sus partes. Veamos la obra La Anunciación, de Willem van Herp, y pongamos atención en las manos de los personajes principales. El ángel, con su dedo índice derecho levantado, sugiere acción; por lo tanto, podemos asumir que está dirigiendo unas palabras a la Virgen. Ella, por su parte, acerca su mano derecha al cuerpo, denotando tanto sorpresa como atención, incluso quizá cierta desconfianza. La postura de su mano aparece como una especie de protección ante las noticias que está recibiendo. La Anunciación (detalle). En la parte superior del cuadro aparece Dios Padre realizando un ademán que encontramos en muchas otras piezas, un gesto de poder y de bendición. Como vemos, estos gestos en los cuerpos de los personajes nos permiten notar que, además del lenguaje pictórico, el artista se vale de otras herramientas para lograr un discurso más rico. En la pintura religiosa se repiten los ademanes una y otra vez, lo que los convierte en una convención Estos ademanes se volvieron convenciones; los tratados clásicos servían como referencia. En la pintura religiosa los veremos repetirse una y otra vez, como en el gesto del ángel de La Anunciación que estudiamos en el capítulo dedicado a la perspectiva. El juicio entre la virtud y el vicio, de Francesco Podesti, es otro ejemplo muy claro del uso del gesto. El personaje central, un arcángel que se convierte en representante de la justicia, usa un ademán con clara referencia al mundo clásico. La escultura griega y romana están llenas de piezas que usan este tipo de gestos. Se trata de una pintura de mediados del siglo xix, época en que el 24 Pliego 017-032.indd 24 4/24/09 1:11:00 PM