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Por Eduardo J. Ramilo | Delegación Regional Patagonia | Parques Nacionales
“Muchos son los atractivos que
nos empujan a la montaña,
desde el simple hecho de
poder disfrutar el paisaje
desde arriba, tener
un día de aire libre y sano,
descubrir
lugares,
ver aves, fauna en
general, plantas,
flores, hasta
la realización
de actividades más especializadas,
como la de
montañistas
y escaladores,
que llegan con
otros desafíos”.
Cualquiera sea la finalidad que nos
llevó a la montaña, en la zona andino-patagónica
la visita nos puede deparar una sorpresa especial,
encontrarnos con el huemul.
El huemul es así, una sorpresa, no habrá horario
ni un sitio determinado seguro para encontrarnos
con él. Sólo podrían informarnos: en aquella zona
pueden encontrarse con un huemul, vayan atentos.
A diferencia de otros ciervos que se ven en grupos
grandes, el huemul suele estar solo o en grupos
familiares chicos de no más de dos a cuatro individuos, y eso nos dificulta detectarlo. Además, su
primera actitud de defensa al vernos o escucharnos
es quedarse inmóvil, y aprovechando la coloración
del pelaje que no lo destaca mucho en el ambiente,
confiar justamente en que nosotros no lo veamos.
Si ya estamos escalando una pared o caminando un
alto filo pelado muy alejado de la vegetación no nos
vamos a cruzar con un huemul. Pero, en los campamentos previos, esperando el día ideal para salir, o
mientras avanzamos por un valle, ladera, morena,
yendo al lugar que queríamos visitar, puede ser
el momento indicado para un encuentro con un
huemul.
En los parques nacionales donde
es más factible ver huemules
y los visitantes dejan opiniones escritas sobre su
experiencia, llama la
atención el impacto
que el encuentro
con un huemul
tiene sobre las
personas, las descripciones de fascinación y emoción
sobre el momento que
pudieron disfrutar superan
cualquier otro comentario, hasta algunos dejan una copia de una
orgullosa “selfie” con un huemul.
El huemul adquirió las capacidades necesarias
para vivir en un ambiente y condiciones climáticas
que a nosotros nos exigen un numeroso y buen
equipamiento, por eso puede aparecer en lugares
donde no esperamos encontrarnos con nada. Su
estructura física, patas cortas y fuertes con un gran
desarrollo de la grupa, le da las mejores condiciones para trepar, bajar, saltar en terrenos irregulares,
como también andar en nieve profunda; y el pelaje
grueso, denso y largo, retiene una capa de aire en
su interior que favorece el mantenimiento del calor
corporal en los meses de clima más severo. Todas
estas características le permiten también cruzar ríos
y lagos con relativa facilidad. El pelaje invernal lo reemplaza a comienzo del verano por uno más corto
y de un tono pardo más oscuro. Este cambio o muda
se produce con la caída de grandes mechones que
dejan en el pelaje franjas de muda o zonas que
parecen peladuras, lo que muchos han confundido
1. Hembra adulta sobre una morena frente a una pared vertical. PN Los Glaciares |
con heridas o alguna enfermedad.
Qué hacer en un encuentro con
un huemul?
A veces el encuentro sucede repentinamente y a
poca distancia, incluso en nuestros senderos, y el
huemul se sorprende tanto como uno. En esos casos
lo mejor es parar y quedarse quieto, moviéndonos
suavemente sin intentar acercarse; que el huemul se
quede quieto mirándonos en vez de salir corriendo
no significa que está tranquilo, está alerta y con un
cierto grado de stress. En algunas áreas con huemul,
bien protegidas y controladas, pero muy visitadas
por personas los ejemplares parecen estar muy habituados y muestran actitudes de indiferencia ante
nuestra presencia, incluso a poca distancia, siguen
comiendo, transitando, etc., haciendo lo suyo, pero
en otros lados podemos encontrarnos con un huemul que no ha tenido contacto con muchos humanos y todavía no sabe muy bien cómo actuar, y se
asusta más fácilmente. Igualmente, en ambos casos,
no hay que intentar acercarse y tratar de disfrutar
su presencia desde donde estamos, idealmente no
menos de 30 metros.
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UN ENCUENTRO CON EL
HUEMUL EN LA MONTAÑA
seguramente no exentas de otros riesgos. Además,
los perros pueden matar huemules fácilmente. Su
comportamiento de caza es distinto al de los depredadores naturales (el puma y el zorro), y el huemul
no sabe defenderse eficientemente de ellos.
Pueden pasar muchos minutos antes que el huemul
decida moverse, entonces conviene rodearlo, preferiblemente por ladera abajo, y si no tenemos otra
opción que seguir por donde veníamos, ir despacio
hasta que reaccione con nuestra proximidad.
Algunas otras características, su
distribución y su situación.
Lamentablemente la compañía del perro, tan común en muchas de nuestras actividades diarias, no
es una buena idea al salir a la naturaleza de paseo
o para realizar actividades de montaña, y menos si
queremos ver fauna y huemules en particular. El
huemul ve al perro como un enemigo y, al detectarlo se aleja y abandona los mejores sitios para
sus actividades diarias pudiendo terminar en áreas
con condiciones ambientales menos apropiadas
(más altas, frías, con vegetación más pobre, etc.), y
Es un ciervo mediano, el macho adulto apenas llega
a un metro de altura a la cruz y 1,60 m de largo, y
pesa no más de 90 kg. Posee astas sencillas, bifurcadas, de no más de 30 cm de largo que las voltea y
renueva todos los años hacia fines de julio, y cuando
van creciendo (a partir de agosto) están recubiertas
de felpa. Además, el macho presenta una mancha
negra en la cara, más notable en la época de apareamiento (brama) formando una “Y”. La hembra es
parecida algo menor y sin astas. Además de lo ya
E. Ramilo | 2. Macho y hembra adultos en el P.N. Los Glaciares |
A. Isoardi
comentado sobre su aspecto robusto y pelaje, otras
características del huemul son el gran tamaño de
sus orejas y la cola muy corta. Se alimenta principalmente de hojas, brotes y flores de árboles y arbustos,
y herbáceas, seleccionando las más nutritivas.
Es uno de los dos ciervos originarios del Sur de Chile
y Argentina. Hace unos 100 a 150 años ocupaba en
forma continua un área mucho más extensa de la
Región de los Bosques Patagónicos. En Argentina,
como extremo Norte se menciona su presencia en
el sector limítrofe entre Mendoza y Neuquén, y hacia el Sur llegaba hasta el Estrecho de Magallanes.
Esa continuidad les permitía a todos los grupos de
huemules conectarse entre ellos a través de valles,
ríos y lagos. También ocupaban algunos sectores de
la estepa, aunque cerca de la Cordillera, donde el
terreno aún se presenta quebrado.
tividades en la zona aparecieron modificaciones
en el ambiente (destrucción del bosque nativo, su
reemplazo por pinos, sobrepastoreo, etc.), nuevos
peligros (como los perros, transmisión de enfermedades del ganado, caza furtiva) o competencias por
el alimento y espacio (ganadería, ciervos europeos
introducidos). Las dificultades que fueron encontrando los huemules para habitar montañas, laderas
y valles en buen estado de conservación y sin mayores riesgos y barreras artificiales (rutas, alambrados,
poblados, etc.) que les impidieran transitar de un
sector a otro, hizo que las poblaciones de huemul se
fueran fragmentando, y actualmente, lo encontramos en grupos reducidos en algunas áreas protegidas nacionales y provinciales, o bien en lugares más
aislados que todavía mantienen sus características
ambientales sin grandes modificaciones.
Al ir aumentando la presencia de gente y sus ac-
Por estas razones se encuentra “en peligro de extin-
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distancia está, y cualquier cosa que nos llame la
atención, algún peligro o problema que veamos,
perros, ganado, etc. En los Parques Nacionales con
presencia de huemul puede solicitarse una ficha
para completarla con los datos principales de un
encuentro.
Para saber más sobre el huemul
se puede consultar en:
ción” y Argentina y Chile están realizando muchos
esfuerzos para su conservación implementando
distintos programas educativos, de investigación
y monitoreo. Existe un Plan Nacional Huemul y un
Programa Conservación del Huemul de la Administración de Parques Nacionales. Además ha sido
declarado Monumento Natural Nacional y de las
Provincias de Neuquén, Río Negro, Chubut y Santa
Cruz, lo que le da la máxima protección legal en
todo el territorio que ocupa.
Pero para proteger al huemul y tener la posibilidad
de seguir encontrándolo en nuestras recorridas es
necesario y fundamental nuestro aporte como ciudadanos y amantes de la montaña:
> Recomendar a la gente que visita áreas con
huemules las actitudes buenas y amigables con el
ambiente y la fauna para favorecer la permanencia
y tranquilidad de los huemules en el lugar.
> Conocer las leyes y normas que protegen al huemul y su ambiente.
> Informar o denunciar inmediatamente a la autoridad de aplicación que corresponda (Intendencia de
un parque nacional o Guardaparque; Dirección de
Fauna Provincial, etc.) ante:
. El menor indicio o sospecha de que
pueda haber presencia de cazadores;
. Presencia de perros asilvestrados o
domésticos que deambulen por la zona habitual de
huemul;
. Gente realizando actividades no autorizadas y perjudiciales para el huemul y el ambiente
(vehículos 4 x 4, heliesqui, parapentes, etc.).
. Presencia de huemules en lugares
peligrosos (rutas, cercanías de viviendas, etc.) o en
situaciones comprometidas, que esté acorralado
entre un alambrado y una ruta, enganchado en un
alambrado o con dificultades para traspasarlo, etc.
> Informar cualquier encuentro con el huemul, tratar de sacarle fotos, registrar el día, la hora, el lugar,
idealmente con las coordenadas o con un croquis,
mapa o bien, sacando una foto lo más panorámica posible, también lo que hace, qué come, a qué
3. Familia completa disfrutando la montaña en compañía del huemul a una distancia adecuada para evitar mayores interferencias |
morena cerca del sendero. Proximidad excesiva, se recomienda alejarse al menos 30 m. |
N. Jeunesse
G. Vicidomini | 4. Encuentro sobre la
Plan Nacional Huemul:
www.ambiente.gob.ar/huemul
En este sitio se pueden bajar planillas o fichas
para el registro de un encuentro con huemul.
Programa Conservación del Huemul de Parques
Nacionales: [email protected]
Las fotografías 2, 3 y 4 fueron obtenidas por visitantes en la Zona Norte
del Parque Nacional Los Glaciares y
entregadas al personal de Guardaparques con la informacióndel registro, un material de gran importancia
para el conocimiento de la población de huemules y suprotección.

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