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Transcripción

Sheepfold Gleanings
MATOT/TRIBUS
Números 30:1 al 32:42
Jeremías 2:4 – 28; 4: 1-2
Mateo 5:33-37
Santiago 4:1 al 5:20
El primer capítulo en este estudio de Números 30 está dedicado completamente al tema de ‘votos y
juramentos’.
Cuando llegamos a creer en Yeshua, el Mesías/Ha Mashiach, como nuestro Señor y Salvador, fue por
medio de un voto y de un juramento. Dijimos, ‘sí, ven y rige y reina en mi vida’. Y de esta manera
somos ‘scion’ (empalmada, unida, juntada, adherida, incrustada, implantada, insertada) a Su Reino, a
Su Pacto y principios o mandamientos que gobiernan Su Reino en los cielos y la tierra.
Yeshua dijo, que ‘nos amemos los unos a los otros’. Luego de esto, pasó a describir lo que es ‘amar
a tu prójimo’ , que se traduce como: caminar en ‘Sus Mandamientos’.
“Un mandamiento nuevo os doy: que os améis los unos a los otros; que como Yo os he amado, así
también os améis los unos a los otros. ‘En esto conocerán todos que sois Mis discípulos, si os tenéis
amor los unos a los otros. En ese día conoceréis que Yo estoy en Mi Padre, y vosotros en Mí, y Yo en
vosotros. El que tiene Mis Mandamientos y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama será
amado por mi Padre; y yo lo amaré y me manifestaré a él. Si alguno me ama, guardará Mi palabra;
y Mi Padre lo amará, y vendremos a él, y haremos con él morada. Si guardáis Mis mandamientos,
permaneceréis en Mi amor, así como Yo he guardado los Mandamientos de Mi Padre y permanezco
en Su amor. Este es Mi mandamiento: que os améis los unos a los otros, así como Yo os he amado”.
(Juan 13:34; 14:17-20; 15:10,17).
1 de Juan 2:9-11 – ‘El que dice que está en luz, y aborrece á su hermano, el tal aun está en tinieblas
todavía. El que ama á su hermano, está en luz, y no hay tropiezo en él. Mas el que aborrece á su
hermano, está en tinieblas, y anda en tinieblas, y no sabe á donde va; porque las tinieblas le han
cegado los ojos’.
¿Cuáles son los Mandamientos de Yeshua?
Cuando Yahweh habló en el Monte Sinaí fue a través de SU BOCA, Yeshua el Mesías / Ha Mashiach,
La Torá Viviente Encarnada. Yeshua es la voz/la bca de Yahweh. Los principios hablados en el
Monte Sinaí fueron los Mandamientos de Yeshua!! (Juan 5:46-47)
Mediante SU PALABRA (Yeshua) Yahweh creó el universo y todo lo que en él existe. La presencia
física de la ‘Palabra de Yahweh es Yeshua’ (Juan 1:1, 14). Amar a nuestro prójimo es amar a
Yeshua, caminando en ‘Su instrucción de amor’ (Su Torah), obedeciendo de ese modo Sus
mandamientos. Haciendo esto, Yeshua viene y nos llena con Su Presencia.
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Yeshua está en el Padre y el Padre está en El. Y Yeshua está en nosotros - de allí la fuerza que creó el
universo VIVE ahora en nosotros. Por lo tanto, cuando hablamos lo que la Biblia le llama ‘votos o
juramentos’ tiene el poder de bendecir o maldecir.
La Palabra de Yahweh concebida en nuestro espíritu, formada en nuestra lengua y hablada a través
de nuestra boca se convierte en una fuerza creativa (Isaías 66:1; Proverbios 23:7 Juan 15:7)
Nosotros somos lo que hablamos. Lo que decimos se vuelve hacia nosotros; cosechamos lo que
sembramos de nuestros propios pensamientos y nuestro hablar. Si sembramos ‘semillas
saludables, segaremos bendiciones y buena cosecha. Si nuestros pensamientos y nuestro hablar son
pobres, invitaremos a la pobreza a venir en ciertas áreas de nuestras vidas (física/ espiritual/
emocional /financiera). Nos atamos a nosotros mismos sea con las bendiciones o con las maldiciones.
Somos contados para Yahweh por las ‘palabras’ que decimos. El es tan fiel a las maldiciones como
para las bendiciones.
Si algo sucede en nuestras vidas que nos causa pena o dolor (físico/ espiritual/ emocional), esto no
tiene ningún derecho o efecto negativo en nuestro futuro a menos que nosotros lo permitamos.
Nosotros podemos cambiar nuestro estatus, eligiendo perdonar, y a través del arrepentimiento, y
tornándonos (teshuvah) de la pena y continuando adelante. Todos los días y a cada momento
realizamos elecciones, dependiendo en que reino caminemos. Bendiciones o Maldiciones - La
elección depende de nosotros.
Santiago 1: 20- 22 “Porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios. Por lo cual, dejando toda
inmundicia y superfluidad de malicia, recibid con mansedumbre la palabra ingerida, la cual puede
hacer salvas vuestras almas. Sed hacedores de la Palabra y no solamente oidores que se engañan a sí
mismos.”
Marcos 7:21-23 – ‘Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, los
adulterios, las fornicaciones, los homicidios, Los hurtos, las avaricias, las maldades, el engaño, las
desvergüenzas, el ojo maligno, las injurias, la soberbia, la insensatez. Todas estas maldades de
dentro salen, y contaminan al hombre.
Juan 14:23-24 – ‘Respondió Yeshua, y díjole: El que me ama, Mi Palabra guardará; y mi Padre le
amará, y vendremos á él, y haremos con él morada. El que no me ama, no guarda Mis Palabras: y la
palabra que habéis oído, no es mía, sino del Padre que me envió.
Números 30:2 Los Votos
“Cuando un hombre, una viuda o mujer divorciada hace un voto juramento a Yahweh, ligando su
alma con obligación mediante un compromiso, no quebrantará su palabra sino que hará todo lo que
salió de su boca”.
Si una mujer continúa viviendo bajo el cuidado de su padre y hace una declaración / voto inapropiado
de acuerdo a la Torah, su padre puede prohibírselo/cancelarlo. Igualmente, esto es válido para una
mujer casada, ya que su esposo puede responder por ella a Yahweh y anular el voto. El voto no habrá
de ser una atadura sobre ellos. Pero si estos hombres no responden entonces el compromiso sigue
vigente sobre su mujer.
Números 30:16: “Estas son las ordenanzas que Yahveh mandó a Moisés entre el varón y su mujer, y
entre el padre y su hija durante su juventud en casa de su padre”
La palabra ‘voto’ en el hebreo es ‘neder’ (strongs 5088), que significa ‘cosa prometida, prometer,
voto, atar, aprisionar o uno que dedica un objeto o criatura a Yahweh’. La palabra ‘juramento’ en el
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hebreo es sh’vuah (Strong H7621/TWOT 2319a) que significa juramento, solemne, conjurar,
execración, una obligación puesta sobre uno mismo en lugar de ser impuesta sobre un objeto. Sh’vua
viene de la raiz de la palabra ‘shevá’ (TWOT 2318) que significa completo, siete
¿Qué le sucede a una persona si dice un voto/juramento y no tiene una cubierta? ¿Qué sucede
cuando las palabras que se han hablado no se han cumplido u honrado? ¿Qué sucede si una persona
que hace el voto/juramento no tiene la intención de guardarlo primeramente, o que hay, si luego de
pensarlo piensa que no lo debe llevar a cabo? Las Escrituras hablan claramente que nosotros estamos
atados por las palabras (votos y juramentos) que salen de nuestras bocas. Tendemos a pensar que los
votos son solamente para ciertas ocasiones importantes como un voto o un juramento en un
matrimonio. Lo que no hemos sido enseñados es que un compromiso hecho con nuestra boca a
YHVH es un voto y un juramento.
Las Promesas:
En esta época existen muchas personas que hacen votos todo el tiempo sin la mínima intención de
cumplirlos. Decimos cosas como: ‘te llamo en cualquier momento’, ‘ya nos vemos’, ‘voy a hacer
esto o aquello, o, ‘lo vas a tener a tiempo’, ‘esta es una promesa’, ‘te llamaré’, ‘nos encantaría ir’, ‘allí
estaremos’, ‘planeo hacer lo siguiente’, ‘sí lo haré’, ‘puedes contar conmigo!’ etc. Muchas de estas
expresiones se convierten en comentarios aceptables para finalizar algo, en lugar de ‘promesas
sinceras’
Somos hijos de de Yahweh, y ya que las promesas son como principios/pactos, una vez que han sido
dichas, se unen al reino de Yahweh puesto que somos embajadores de El. Si las promesas son vanas, y
nosotros hablamos algo que nunca intentamos cumplir, representamos mal a Yahweh y Su Reino.
Comentarios como estos se llaman mentiras y no son un fundamento para construir el Reino de
Yahweh.
Santiago 3:9-10 – ‘Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos á los hombres, los
cuales son hechos á la semejanza de Dios. De una misma boca proceden bendición y maldición.
Hermanos míos, no conviene que estas cosas sean así hechas’.
Cuando los votos y las promesas son quebradas, la gente puede estar tan dolida por la dependencia de
otros y por ponerse en posición embarazosa habiendo acarreado responsabilidades extras. Romper los
votos y las promesas tiene que ver con no valorarse a sí mismos, así como no respetar a otros, los
cuales son actitudes de falta de amor. La falta de respeto es una forma de idolatría propia, de rebelión
y de propia decepción en el corazón. La falta de honor por si mismos y por los otros se convierte en
una fortaleza que crea fruto de falta de confianza, falta de honestidad, de lealtad, y de falta de
confiabilidad en otros, y es contraria a la enseñanza de las Escrituras – nuestra palabra no es más una
obligación o un vínculo nuestro. No existe relación profunda o santidad que pueda ser edificada
sobre expresiones, promesas o excusas vanas. Si nuestra palabra no es una obligación nuestra,
somos inestables y poco fiables en nuestros caminos (llamados de doble ánimo). Para aquellos que
caen en esta dificultad de mantener un compromiso, pueden aprender que lo que sigue a través de sus
palabras trae sanidad a ellos mismos y a aquellos que están tratando con la dureza de corazón
(Santiago 4:8-10).
Efesios 5:28: ‘Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que
ama a su mujer, a sí mismo se ama.
Mateo 7:24-27 – ‘Cualquiera, pues, que oye estas mis palabras, y las hace, le compararé a un
hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca. Y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron
vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca. Y todo el
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que oye estas mis palabras y no las hace, será comparado al hombre insensato, que edificó su casa
sobre la arena; y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra
aquella casa; y cayó; y fue grande su ruina’.
Proverbios 8:36 – ‘Mas el que peca contra mí (Yahweh), defrauda su alma: Todos los que me
aborrecen (a Yahweh), aman la muerte’.
Excusas:
Si no existe una evidencia física para equiparar nuestras palabras, entonces se le llama excusas; y a las
excusas realmente se le pueden llamar mentiras. Muchos de nosotros mentimos tanto que ellas se han
convertido en una reacción normal y un modelo de comportamiento. Las excusas se convierten en un
estilo de vida y en una cubierta aceptable. Para otros esto es un pecado evidente que salta a la vista
(votos y juramentos quebrados) en las Escrituras. Si nuestra intención es buena pero somos adictos a
las excusas tenemos un problema de raíz espiritual. Si tenemos la incapacidad crónica de poder
terminar proyectos y promesas hechas tenemos igualmente un problema de raíz espiritual.
Necesitamos entonces retroceder y honrar el voto o la promesa que hemos hecho, y pedirle a Yahweh
que nos muestre nuestros pecados secretos.
Las excusas, las promesas vanas e incumplidas son mentiras, y representan mal a Yahweh cuyo
Espíritu mora en nosotros. En ciertas culturas, si un padre le tiene que pedir a su hijo que le haga
coro, esto es considerado una falta de respeto, ya que el padre se ha tomado el tiempo y la paciencia de
enseñar a sus hijos, y espera que ellos tomen la iniciativa en respetar sus palabras obedeciéndolas.
Tomar la iniciativa es lo que trae honra al padre. Y es lo mismo para nosotros. Yahweh ya nos ha
declarado Su Palabra. Cuando tomamos la iniciativa de caminar en Su palabra, esto le da honra a El.
Cuando caminamos en Sus Escrituras se dice que estamos caminando en Su sendas rectas llamadas de
justicia.
Deuteronomio 6:25 – ‘Y tendremos justicia cuando cuidáremos de poner por obra todos estos
mandamientos delante de Yahweh nuestro Elohim como Él nos ha mandado’.
Si nuestras palabras no imparten las características de Yeshua lo estamos representando mal a El. Este
diseño de comportamiento es llamado en las Escrituras ‘fuego extraño’. Nuestra palabras no son más
nuestro vínculo, y nos asombramos luego acerca de dónde están las bendiciones de Yahweh. Muchos
no se dan cuenta de que cuando hacen un voto o juramento y luego no lo cumplen, se atan y
aprisionan a si mismos, evitando así las bendiciones de Yahweh. Necesitamos dar marcha atrás y
hacer los votos correctos y arrepentirnos a Yahweh por no haberlos cumplido. La Escritura señala
la seriedad de nuestros pensamientos y de nuestro hablar. Hemos sido hechos a la imagen de Yahweh
– el es nuestro Padre. Para imitar a Yahweh como un hijo imita a su padre, debemos hablar como El
y actuar como El. Todos nosotros hemos perdido la marca y hemos fallado en cumplir nuestra
palabra a Yahweh y a otros. (Proverbios 10:11; 12:14,18; 13:3; 14:13; 15:2,4,14; 16:23-24; 21:23)
Lucas 8:15 – ‘Mas la que en buena tierra, éstos son los que con corazón bueno y recto retienen la
palabra oída, y llevan fruto con paciencia’.
Se dice que cumplir una ‘promesa’ es el depósito principal de las bendiciones y de la
prosperidad, . Romperlo es la privación principal, y cada vez que no ‘cumplimos’ una promesa,
destruimos nuestra estima propia. ¿Cómo podemos sentirnos bien si no guardamos nuestras promesas?
Tal vez podemos decir ‘si’ cuando queremos decir ‘no’, pero el deseo de agradar a otros o de sacar el
rostro (llamado orgullo) estorba o no se ve bien. Tal vez nos hemos comprometido falsamente sin
sentirnos culpables, o porque queríamos ser igual o simplemente porque a través de tu vida nunca
‘aprendiste’ a decir ‘NO!’ Y luego, te conviertes en un ‘adicto a las promesas’, cuya vida termina en
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un acto de malabares de promesas sin fin, imposibles de cumplir. Juntamente toda la familia y los
amigos terminan en la línea trasera, ya que la persona termina teniendo muy poco tiempo para
comprometerse con ellos con tanto que hacer – y a la familia no se le debería dar las sobras de la mesa
de nuestras vidas, sino servirles un banquete festivo.
Santiago 4:1 – ‘De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras
concupiscencias, las cuales combaten en vuestros miembros?
1 de Juan 1:5-7 - ‘Y éste es el mensaje que oímos de Él, y os anunciamos; que Dios es luz, y en Él no
hay ningunas tinieblas. Si decimos que tenemos comunión con Él, y andamos en tinieblas, mentimos,
y no practicamos la verdad; mas si andamos en luz, como Él está en luz, tenemos comunión unos con
otros, y la sangre de Yeshua Ha Mashiach, su Hijo nos limpia de todo pecado.
Mirando profundamente la palabra ‘juramento’ en hebreo, y a la raíz ‘siete’, podemos apreciar que
nuestro hablar está atado al Espíritu Eterno de Yahweh quien vive en nosotros. Nuestro hablar debe
reflejarlo a El. De lo contrario hacemos ‘votos’ y ‘juramentos’ que no cumplimos (llamado mentira),
representándole mal a El, atándonos a nosotros mismos a las consecuencias llamadas
‘maldiciones’.
El único impedimento de victoria en nuestro caminar o de ganar nuestra completa herencia en Su
Reino es nuestra propia alma. No es la esposa o el esposo, los hijos o los padres, los vecinos o colegas
los que son responsables. La Palabra de Yahweh señala el dedo a uno mismo. Las promesas vanas y
todas las excusas que hemos hablado para protegernos vienen del campo del enemigo. Lo que sale de
la boca impíamente es lo que nos ata. Necesitamos decidir a qué reino queremos servir, ya que
nuestras acciones revelan ya sea los principios de Yahweh o nuestas propias preferencias.
Si podemos referirnos a cualquiera de estos ejemplos en este estudio, entonces necesitamos
simplemente reconocer y tomar responsabilidad por el pecado de haber perdido la marca, arrepentirnos
/hacer Teshuva, y retornar a los principios de Dios.
Santiago 1:12-15 – ‘Bienaventurado el varón que soporta la tentación; porque cuando hubiere sido
probado, recibirá la corona de vida, que el Señor ha prometido a los que le aman. Cuando uno es
tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado con el mal, ni Él
tienta a nadie; sino que cada uno es tentado cuando de su propia concupiscencia es atraído, y
seducido. Y la concupiscencia, cuando ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo
consumado, engendra muerte’.
Santiago 1:19b-27 – ‘todo hombre sea presto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse;
porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios. Por lo cual, dejad toda inmundicia y
superfluidad de malicia, y recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar
vuestras almas. Mas sed hacedores de la palabra, y no solamente oidores, engañándoos a vosotros
mismos. Porque si alguno es oidor de la palabra, y no hacedor, éste es semejante al hombre que
considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego se olvida
cómo era. Mas el que mira atentamente en la perfecta ley de la libertad, y persevera en ella, no siendo
oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Si alguno parece
ser religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es
vana. La religión pura y sin mácula delante de Dios y Padre es ésta: Visitar a los huérfanos y a las
viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo.
Santiago 2:14-26 - ‘Hermanos míos, ¿qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras?
¿Podrá la fe salvarle? Y si el hermano o la hermana están desnudos, y tienen necesidad del
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mantenimiento de cada día, y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos; pero no les
da lo que necesitan para el cuerpo, ¿de qué aprovechará? Así también la fe, si no tiene obras, es
muerta en sí misma. Pero alguno dirá: Tú tienes fe, y yo tengo obras; muéstrame tu fe sin tus obras, y
yo te mostraré mi fe por mis obras. Tú crees que hay un Dios; bien haces; también los demonios creen
y tiemblan. ¿Mas quieres saber, oh hombre vano, que la fe sin obras es muerta? ¿No fue justificado
por las obras, Abraham nuestro padre, cuando ofreció a su hijo Isaac sobre el altar? ¿No ves que la
fe actuó con sus obras, y que la fe fue perfeccionada por las obras? Y se cumplió la Escritura que
dice: Abraham creyó a Dios, y le fue imputado por justicia, y fue llamado: Amigo de Dios. Vosotros
veis, pues, que el hombre es justificado por las obras, y no solamente por la fe. Asimismo también
Rahab la ramera, ¿no fue justificada por obras, cuando recibió a los mensajeros y los envió por otro
camino? Porque como el cuerpo sin el espíritu está muerto, así también la fe sin obras está muerta’.
Santiago 3:13-18 – ‘¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? Muestre por buena conducta sus
obras en mansedumbre de sabiduría. Pero si tenéis celos amargos y contención en vuestro corazón,
no os jactéis, ni seáis mentirosos contra la verdad. Esta sabiduría no es la que desciende de lo alto,
sino terrenal, animal, diabólica. Porque donde hay celos y contención, allí hay confusión y toda obra
perversa. Mas la sabiduría que es de lo alto, primeramente es pura, luego pacífica, modesta, benigna,
llena de misericordia y de buenos frutos, imparcial y sin hipocresía. Y el fruto de justicia se siembra
en paz para aquellos que hacen paz’.
Santiago 4:1-10 – ‘¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras
concupiscencias, las cuales combaten en vuestros miembros? Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis
de envidia, y no podéis alcanzar, combatís y guerreáis, y no tenéis porque no pedís. Pedís, y no
recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites. Adúlteros y adúlteras, ¿no sabéis que la
amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quisiere ser amigo del mundo, se
constituye enemigo de Dios. ¿Pensáis que la Escritura dice en vano: El espíritu que mora en nosotros,
codicia para envidia? Mas Él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da
gracia a los humildes. Someteos, pues, a Dios. Resistid al diablo, y huirá de vosotros. Acercaos a
Dios, y Él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad vuestras manos; y vosotros de doble ánimo,
purificad vuestros corazones. Afligíos, y lamentad, y llorad. Vuestra risa se convierta en lloro, y
vuestro gozo en tristeza. Humillaos delante del Señor, y Él os exaltará’.
En el libro llamado ‘Colgado por la Lengua’ el autor describe ‘tú eres lo que dices ser’ (Marcos
11:23). Lo que sale de tu boca determinará tu ‘futuro’. Dios sabe el futuro, porque EL habló el
futuro dentro de la existencia. El puso igualmente tu futuro en tus manos, de modo que TU PUEDAS
HABLAR tu salvación en el ‘futuro’. Tú en realidad hablas de tu propio futuro. Es por ello, que
me entreno a mí mismo controlando mis palabras, o sea, estoy controlando mi ‘futuro’. Tus
palabras son espíritu y son vida – una vez que tú las dices, ellas se vuelven vida! Tú obtienes lo que
‘hablas’. No puedes levantarte por encima de lo que haz permitido, pensando o hablando. Piensa lo
que ha sucedido en tu vida pasada y la vida que has estado llevando. Pregúntate lo siguiente: Qué es lo
que me ha estado sucediendo? Luego haz una pausa y piensa acerca de lo que haz estado diciendo o
pensando durante toda tu vida. Vas a encontrar que lo que has estado hablando o pensando se ha
convertido en realidad. El principio espiritual de ‘la siembra y la cosecha’ siempre va a funcionar.
Lucas 6:37-38 dice, que todo lo que damos lo recibiremos de regreso con creces. Si criticamos a las
personas, cosecharemos crítica. Si juzgamos a las personas, seremos juzgados. Si bendecimos a las
personas recibiremos bendiciones en retribución. (Fin de la nota).
Mateo 5:33-37 Yeshua dijo: “También habéis oído que se dijo a los antepasados: "NO JURARAS
FALSAMENTE, SINO QUE CUMPLIRAS TUS JURAMENTOS A Yahweh. Pero yo os digo: no
juréis de ninguna manera; ni por el cielo, porque es el trono de Dios; ni por la tierra, porque es el
estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es LA CIUDAD DEL GRAN REY. Ni jurarás por tu
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cabeza, porque no puedes hacer blanco o negro ni un solo cabello. Antes bien, sea vuestro hablar:
"Sí, sí" o "No, no"; y lo que es más de esto, procede del mal.
Existe una provisión muy amable en las Escrituras hecha por un padre o un esposo, la cual puede
abolir un voto hecho por su hija o por su esposa después de haberlo escuchado. Sin embargo, ya que
no hay ninguna ‘cubierta’ del hombre para una mujer joven, una esposa, una viuda o una mujer
divorciada, el ‘voto’ o ‘juramento’ que hayan declarado las ataría. Las palabras del hombre lo
atarían a el, ya que el es el responsable directo ante Yahweh. Un ‘voto’ o ‘juramento’ hecho a
Yahweh que era obligado por un compromiso no podía ser quebrado. Todas ellas son para honrar las
palabras y ajustarse a ellas del mismo modo que Yahweh honra Su Palabra hacia nosotros!
(Números 30: 2,9).
Aquellos que han hablado votos y juramentos inocentemente y no los han cumplido, podemos venir
a nuestro Padre Celestial, quien es nuestra cubierta y nuestra redención, y arrepentirnos por nuestro
comportamiento pasado. Yeshua ha pagado el precio y ha muerto nuestra muerte para que podamos
vivir y caminar rectamente, y obedecer Su enseñanza e instrucción que nos trae VIDA! El es la mejor
Torah!
Renunciar a los votos y promesas que hemos hecho personalmente delante de Yahweh es lo que
tenemos que hacer en la Fiesta de la Luna Nueva/Rosh Chodesh cada mes, que significa como un mini
Yom Kippur. El rompimiento de votos y juramentos corporativos se hace en Yom Kippur (el Día de la
Boda) una vez al año. Cada año declaramos la verdad de lo que Yeshua ha hecho eternamente por
nosotros. ‘Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús/Yeshua Ha
Mashiach,, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Porque la ley del
Espíritu de Vida en Cristo Jesús /Yeshua Ha Mashiach me ha librado de la ley del pecado y de la
muerte. (Romanos 8:1-2).
Romanos 6:15-18 Pablo dijo: “¿Entonces qué? ¿Pecaremos porque no estamos bajo la ley (del
pecado y de la muerte), sino bajo la (ley de la vida llamada) gracia? ¡De ningún modo! ¿No sabéis
que cuando os presentáis a alguno como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien
obedecéis, ya sea del pecado para muerte, o de la obediencia para justicia? Pero gracias a Dios, que
aunque erais esclavos del pecado, os hicisteis obedientes de corazón a aquella forma de doctrina a la
que fuisteis entregados (a la Torah); y habiendo sido libertados del pecado, os habéis hecho siervos
de la justicia (de la enseñanza e instrucción de Dios). Selah!!!!
Números 31: 1-18 Venganza contra los Madianitas
Yahweh le dijo a Moisés: Haz la venganza de los hijos de Israel contra los madianitas, después serás
recogido a tu pueblo. Entonces Moisés habló al pueblo, diciendo: Armaos algunos de vosotros para la
guerra y vayan contra Madián y hagan la venganza de YHVH en Madián” (Números 31:1-3)
Lot sobrino de Abraham fue engañado por sus dos hijas, llevándolos a un hecho incestuoso, dando a
luz sus propias hijas, dos hijos, Amón y Moab. El resultado fue muchísima impureza y discordia, tal
como lo podemos ver con sus descendientes en las Escrituras. Sin embargo, vemos también la gracia
de Yahweh obrando a través de estos dos grupos de personas, ya que de los descendientes de Moab
provino Ruth, quien se casó con Boaz, y el producto de los ancestros de Amón fue Naama esposa de
Salomón y madre de Roboam (Génesis 19:30-38; Ruth 1,4; 1 de Reyes 14:21)
Yahweh no tomó venganza sobre los ‘edomitas’, quienes eran descendientes del hermano mellizo de
Jacob, Esaú, cuando le obstruyeron y rechazaron el paso a Israel a través de su tierra. Sin embargo,
Yahweh sí tomó venganza con los ‘moabitas’ cuando ellos se unieron con los ‘madianitas’ y evitaron
el paso a los israelitas a través de su territorio. Ellos no solo pelearon en contra de Israel sino que
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los engañaron, tentándoles a pecar. El pecado de Moab ingresó al campamento, tratando la misma
esencia de la moral de Israel y la vida familiar, tratando de quitarles su identidad. Yahweh tomó
entonces venganza sobre Moab y ordenó a Israel a hacer guerra en contra de ellos - todas las personas
fueron muertas (Números 21:23; 25;1-3)
Durante la batalla, los israelitas tuvieron éxito matando a todos los hombres incluyendo a ‘Baalam’.
Sin embargo, las mujeres que siguieron el consejo de Baalam y que causaron que la moral decayese en
el campamento de Israel, fueron capturadas en lugar de ser matadas, y fueron llevadas al campamento
junto a sus niños, sus bestias, sus ganados y todos sus bienes. Cuando Moisés vio que el mandamiento
de Yahweh no se había llevado a cabo, ordenó matar a todos los jóvenes varones así como a todas las
mujeres que habían dormido con un hombre, mientras que solamente las mujeres vírgenes fueron
conservadas y mantenidas vivas. (Números 31:1-18)
Números 31:19-24 Purificación del Campamento
Los ‘Hijos de Israel’ habían estado en contacto con la ‘muerte’, de modo que Moisés ordenó a los
hijos de Israel purificarse así mismos, permaneciendo fuera del campamento por siete días. Ellos
entraron dentro de el Mikvah/el agua de la purificación, para un cambio de estatus, del reino de la
muerte al reino de la vida antes de regresar a la congregación (Números 19). Yahweh nos hace
entender que el tocar a un ‘muerto’ tenía una relación directa al tocar la ‘muerte espiritual’,
llevando ambas contaminaciones a nuestras vidas. Los moabitas llevaron muerte física y espiritual al
campamento de Israel. Existe una muerte espiritual para aquellos que han tocado el espíritu de
Balaam y las prácticas inmundas de los moabitas. Los israelitas necesitaban separarse y purificarse de
esto con la finalidad de mantener el campamento limpio. Los individuos contaminados aplicaban el
‘agua de la purificación’, El Agua de Vida, y fueron purificados por dentro y por fuera.
Yeshua dio cumplimiento a la ‘ceremonia del agua de la purificación de la vaca alazana’ en Su
muerte. La escritura no dice que al cumplir esta ceremonia Yeshua eliminó el beneficio de la
aplicación ritual de este día (juntamente con los beneficios de las Fiestas de Yahweh, con el festival de
Luna Nueva, el Shabbat y otras aplicaciones físicas de Su Palabra). Por el contrario, la Torah llena del
Espíritu de Yahweh tenía que continuar para llevar a cabo la bendición.
Romanos 3:31 “¿Anulamos entonces la Torah por medio de la fe? ¡De ningún modo! Al contrario,
confirmamos la Torah”.
Hoy en día cuando entramos en el ‘mikvah’ (baño de limpieza) en el Nombre de Yeshua, nuestro
estatus cambia del reino de la muerte al reino de la vida. La mini forma del ‘mikvah’ llamada
‘rachatz’ en el hebreo, es cuando nosotros nos lavamos las manos de manera ceremonial. Podemos
verlo en Santiago 4:7
Santiago 4:7 “Por tanto, someteos a Dios. Resistid, pues, al diablo (al reino de lo
inmundo/inclinación a la impiedad) y (este) huirá de vosotros.”. Laven (limpien) sus manos y
purifiquen (aplicación física de agua). (Strong G48) sus corazones”. (Juan 2:6)
Al hacer esta aplicación física de obediencia a los mandamientos de Yahweh, santificamos y
purificamos nuestros corazones, y cambiamos nuestro estatus del reino de lo inmundo al reino de la
pureza. Tenemos que aplicar el Agua de Vida (Yeshua) de manera física y espiritual a nuestros
cuerpos.
Tal como hemos aprendido en la ‘parasha de Balak’ (www.sheepfoldgleanings.com), dos estudios
antes, que el espíritu de Balaam el día de hoy aún está con nosotros (2 de Pedro 2:1-22; Judas,
Apocalipsis 2:14). Cuando entramos en contacto con el ‘reino de la impureza’ o aún si sospechamos
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que nos hemos contaminado, estamos llamados a una limpieza espiritual con la aplicación del agua
física. ‘El agua’ representa el ‘agua de la purificación’, un ‘mandamiento eterno’ a través de las
generaciones, para todos aquellos que han pecado (Números 19). Esta agua simboliza igualmente la
muerte y resurrección de Yeshua. Hoy en día la aplicación del agua es parte del proceso, mas no para
salvación, sino para santificación, ya que Yeshua es nuestra agua de santificación que trae VIDA!
“Yeshua es el Mismo de ayer, hoy y siempre” (Ezequiel 16:9; Ezequiel 36:25; Zacarías 13:1; Juan
3:5; Hechos 22:16; Tito 3:5-7; Hebreos 10:22; Hebreos 13:8; 1 de Juan 5:6)
La Casa de Israel y la Casa de Judá juntas conforman el sacerdocio de Yeshua (Hebreos 8:8-10).
Los pasajes arriba descritos son para los creyentes que están aprendiendo a caminar en santidad. Las
aplicaciones de los mandamientos de Yeshua son esenciales para entender y caminar en Su Reino. El
sacerdocio de Yeshua es saber la diferencia entre lo limpio y lo inmundo, lo santo y lo profano, y
acerca de los Shabbats, las Lunas Nuevas y las Fiestas de Yahweh y para servir a Yahweh, mientras
ellos enseñan esto a otros. Ellos entienden cómo ministrar las cosas santas de una manera santa. Ellos
aprenden a caminar en santidad y justicia cuando sus corazones responden a la santificación y a la
circuncisión impartida en la Palabra de Yeshua.
El sacerdocio de Yeshua hoy en día no camina más en los pecados (iniquidades) de sus antepasados,
sino que ha aprendido a mudarse de sus ropas inmundas (trasgresiones) para sumergirse /Mikvah a sí
mismos en las aguas de la purificación, y vestirse de manera santa como testimonios por medio de los
frutos de arrepentimiento , llamado el fruto del Espíritu
Números 31:25-54 Dividiendo el Botín – La Ley de Reciprocidad
Esta sección tiene que ver con dividir el incremento de ‘nuestro campamento’. Solamente después de
que todo había sido purificado, los israelitas procedían a dividir los despojos. Los despojos eran
divididos entre los hombre que iban a la guerra y la comunidad israelita. Antes de tomar posesión de
los bienes, el ejército pagaba ‘tributo a Yahweh’ a través de Eleazar el Sumo Sacerdote. Lo mismo era
ofrecido a Yahweh por la comunidad israelita y a los levitas.
El ejército de Yahweh era dirigido en la batalla por Fines, el hijo de Eleazar y por los levitas. Ellos no
tenían heredad de tierra entre los hijos de Israel. El sacerdote y los levitas, eran los tenedores del
Tabernáculo, eran los maestros morales de la comunidad. Este ‘tributo’ dado a ellos era una ‘Ofrenda
de Acción de Gracias’ que bendecía a toda la comunidad. Esto es lo mismo para nosotros el día de
hoy. Nuestro ‘tributo’, llamado la ‘ley de reciprocidad’ debe ser una prioridad en nuestras vidas.
Definición: Reciprocidad: dar o tomar mutuamente en intercambio. Mostrar, sentir o dar de retorno o
en respuesta. Retroceder y adelantar alternadamente. Dar y tomar algo mutuamente. Complementar o
equiparar. Retornar en especie o grado.
Lo que recibimos de otros necesita ser retornado en especie o grado como reciprocidad, sino ‘la ley’
no es cumplida en ellos o en nosotros. Esta se estanca y no tiene vida sino hay reciprocidad. Solamente
uno que fue sanado de lepra regresó y dio gracias a Yeshua. Existen muchos ministerios el día de hoy
que han servido por años sin haber recibido las gracias o las ofrendas – una de las muchas razones por
las cuales miles dejan la Iglesia cada año.
El Mar Muerto en Israel está sin vida. No tiene vida porque el agua no fluye, solo flota. Este
permanece como un testigo para nosotros. Nos hemos convertido en una sociedad de cultura veloz,
que está enfocada en sí misma. Nos damos por bien servidos y creemos que lo merecemos lo que otros
libremente nos dan a través de su arduo trabajo y esfuerzo al enseñarnos el Evangelio, la Palabra de
Yahweh, la cual ha transformado nuestras vidas para mejor. Ellos necesitan ser retribuidos e
inculcados físicamente con la ley de reciprocidad. Y esto no para allí, debemos retornar las
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bendiciones a los miembros de nuestras familias, a nuestros amigos y a aquellos que nos sirven en la
comunidad. Esta es una ley universal y un tributo santo delante de Yahweh – para bendecir a otros.
Números 32 – Las Tribus de Transjordania
Las tribus de Rubén y de Gad vieron que la tierra al oriente del Jordán era conveniente para el
ganado. Ellos le dijeron a Moisés, a Eleazar y a la comunidad de líderes: “Si hallamos gracia en tus
ojos, dése esta tierra a tus siervos en heredad, y no nos hagas pasar el Jordán”
Los Rubenitas y los Gaditas no habían visto la Tierra Prometida, pero estaban seguros que esta
tierra al oriente del Río Jordán era mejor que la Tierra que Yahweh les habìa preparado para ellos. Las
dos tribus debieron haber tenido una conversación seria acerca de esto antes de acercarse delante de
Moisés. Ellos hicieron sus propias decisiones y lo tomaron en sus propias manos tanto para sus vidas
como también para las vidas de las futuras generaciones. Cuántos de nosotros hemos tomamos
decisiones que estamos seguros que YHVH habría de aprobarlas?
Moisés recordó cuando la primera generación de Israelitas espió la tierra y les tomó cuarenta años de
consecuencias por el mal reporte que habían hecho. El no quería que hubiera ninguna dificultad en esa
generación cuando estaban cercanos a entrar en ‘La Tierra’. Vemos que Rubén y Gad fueron muy
cómodos con Moisés y el resto de las tribus, ofreciendo ayuda a sus hermanos antes de retornar a la
tierra que ellos querían. Moisés estuvo de acuerdo, pero no hemos leído preguntándole a Yahweh
primeramente. Moisés hizo igualmente esta decisión, añadiendo a las familias de Maquir y Jair de la
Tribu de Manasés para que ocupasen la tierra al este del Jordán juntamente con Rubén y Gad.
La decisión de estas dos tribus y media tuvieron consecuencias más tarde, ya que fueron las primeras
tribus en ser deportadas en el exilio ocho años antes que las otras tribus (1 Crónicas 5:25-26)
Shabbat Shalom
Carl y Julie Parker
Reference:
Hung by the Tongue por Francis P. Martin
La lengua: una fuerza creativa, por Charles Capps.
Greater Works por Rabbi Ralph Messer www.torah.tv
Theological Wordbook Of The Old Testament por Harris, Archer, Waltke. Moody Press
Sheepfold Gleanings escrito por Carl and Julie Parker
Mail: 6655 Royal Avenue; P.O. Box 94014; West Vancouver, BC; V7W 2B0 CANADA
Website: www.sheepfoldgleanings.com
Email: [email protected]
Translation: Rosa Maria Anders
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