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Periódico de Ibiza y Formentera
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DOMINGO, 24 DE JULIO DE 2016
LAS FRASES
Especial SUMMERTIME
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«Falta voluntad y creer que somos «Deberíamos tener una «Actualmente, por culpa de la falta
sede donde se ofreciera de control se está deteriorando el
un destino ideal para la práctica
formación pública»
de los deportes acuáticos»
tejido empresarial del sector náutico»
Judit
Gargallo
Gerente de la Estación Náutica de Sant Antoni y Sant Josep
«Las administraciones y gran parte
de la población no son conscientes
del potencial existente en el mar»
—¿Se podría decir que Eivissa es un
destino náutico?
—Ibiza no es un destino náutico reconocido internacionalmente. A nivel nacional sí que estamos en la mente de los navegantes, pero más allá de España y sus
cercanías los turistas náuticos no piensan en nosotros, ya que como destino
no estamos atendiendo el producto turístico. Las instalaciones existentes en el
destino están limitadas. El turismo náutico engloba diferentes productos, por un
lado tenemos la navegación que lo podríamos relacionar con el alquiler de embarcaciones y aquellos turistas que vienen a pasar unos días; y por otro encontramos los deportes acuáticos y toda la
oferta de actividades relacionadas con el
mar.
Hasta el momento no se ha gestionado el destino para que sea competitivo
en el producto de turismo náutico. Como
ya he comentado las instalaciones son limitadas, tenemos muy poca oferta disponible de amarres y/o boyas reguladas
en la isla. Además las administraciones
que están relacionadas como pueden
ser Demarcación de Costas y Capitanía
Marítima están faltos de recursos humanos, por lo que las tramitaciones que las
empresas tienen que realizar son lentas,
y normalmente no llegan a tiempo para
empezar la temporada el 1 de mayo. En
cuanto a los inspectores para ordenar y
hacer cumplir con la ley son escasos, lo
que permite que cada año haya más
oferta ilegal en el mar y en la costa de
Ibiza. En cuanto a los dispositivos disponibles en el mar para el control son inexistentes. Además contamos con muy
pocas escuelas del mar donde se debería crear cultura de mar, no hay escuelas
municipales para
la práctica de los
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asegurarnos
las administraciode que cuenta nes y gran parte
la población
con todas las de
no son conscienautorizaciones» tes del potencial
existente en el
mar para el desarrollo del destino, además la gente que disfruta del mar también lo preserva, sobretodo en la práctica
de los deportes ya que existe una educación medioambiental, que permite adoptar una actitud sostenible y de preservación con el entorno.
El destino náutico sí que permite alargar la temporada, siendo el buceo el producto estrella que nos permitiría estar
abiertos durante más meses. Desde
nuestra asociación realizamos propuestas a las administraciones para adecuar
el destino y ser competitivos en el turismo náutico, ya que realmente lo podemos ser, simplemente falta voluntad y
creer que somos un destino ideal para la
práctica de los deportes acuáticos, además de ser el mejor destino del Mediterráneo para navegar durante una semana por las pitiusas.
—¿Cómo se podría potenciar el sector
náutico?
—Por un lado soy partidaria de regular
el fondeo para tener un mayor control
sobre todas las embarcaciones existentes en la isla durante toda la temporada.
Por supuesto permitir el fondeo libre ya
que es un derecho, pero habilitar más zonas donde los barcos puedan estar seguros durante la pernocta. Incluso, poder
habilitar espacios con pantalanes flotantes, evitando nuevas construcciones de
puertos, para poder atender a la demanda y generar a la vez mayor demanda.
Crearía escuelas municipales del mar,
se debería ofrecer formación náutica y
deberíamos tener una escuela náutico
pesquera competente para facilitar la
obtención de las titulaciones, además de
contemplar formación universitaria en
biodiversidad marina, arquitectura marina, ciencias medioambientales marinas y
potenciar el Mestre d’aixa para la reparación y construcción de embarcaciones
sobretodo especializarnos en madera sin
descuidar la fibra.
Habilitaría con más personal tanto
Costas como Capitanía marítima, y no
sólo durante la temporada sino durante
todo el año. Las administraciones locales
y de la comunidad deberían reivindicar
al Gobierno central un cambio en las leyes para que se ajusten a la realidad que
se vive en la isla. Las leyes a las que están supeditadas las actividades de las
que hablamos no contempla en amplitud la actividad náutico-turística, son leyes de Marina Mercante y de Demarcación de Costas, donde todo lo que les requieren son para actividades más
complejas, no se adaptan a la realidad de
este sector y por lo tanto es más costoso, y más difícil de cumplir.
Marcaría como prioridad el control.
Hay que destinar los dispositivos que sean necesarios para erradicar la oferta ilegal existente. Actualmente por culpa de
la falta de control se está deteriorando el
tejido empresarial del sector náutico. Y
esto no se puede permitir, la administración no puede permitirlo. Actualmente
hay más oferta ilegal que legal. La competencia desleal está perjudicando al
destino y a los productos turísticos relacionados con el sector náutico.
—¿Hay intrusismo en el sector?
—Es el problema más grave que hay
en el sector. Cada día recibo múltiples
avisos de mis asociados informándome
de empresas «pirata», la verdad que es
preocupante y así lo transmitimos a todas las administraciones competentes.
Existe mucho intrusismo en el alquiler
de embarcaciones: primero de todo encontramos que muchas embarcaciones
en lista 7ª que son de particulares y por
lo tanto no pueden realizar una actividad
comercial, están publicitándose a través
de distintos canales (físicos y online) y
sacando clientes, dado que los precios
que ofrecen son inferiores. También encontramos embarcaciones en lista 6ª
(que sí son para actividades comerciales)
pero estas carecen de puerto base, o de
boya autorizada por Costas. Además
muchas de estas embarcaciones estarán
despachadas para ser chárter sin patrón
y en cambio ofrecen patrones sin que
estos cuenten con las titulaciones que se
requieren para el alquiler con patrón.
También hemos detectado mucho in-
‘
trusismo en las playas con la oferta de
kayak de mar y stand up paddle, deportes que se han puesto de moda y es relativamente fácil contar con una furgoneta
y un remolque y desplazarse por toda la
isla. Normalmente se publicitan por internet. Estas «empresas ilegales» para poder salir al mar necesitan contar con una
autorización de Costas y del Ayuntamiento para el
uso del canal en
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lectores, que en
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caso de accidente si tienen seguro pero no tienen las autorizaciones que
corresponden para la práctica de la actividad, el seguro no cubrirá los daños
ocasionados a los clientes, por lo que antes de contratar a una empresa deberían
asegurarse de que la empresa cuente
con las autorizaciones. Sabemos que esto es muy difícil y por ello dirigimos a todo aquel que esté interesado a nuestra
aplicación IBIZA APP que al menos las
empresas que allí constan sabemos que
cuentan con las autorizaciones.
—¿Qué dificultades encuentran las empresas de este sector en Eivissa para llevar a cabo su actividad?
—Los tiempos eternos en las tramitaciones para obtener autorizaciones y
permisos. Y la competencia desleal.
—¿Cree que se ha conseguido atraer a
otro tipo de turismo ?
—Personalmente, creo que no se ha
conseguido. La fiesta sigue siendo el producto estrella, aunque no hay que olvidar que los recursos naturales de la isla
son un gran atractivo para el turismo. En
cuanto al deportivo, se están realizando
muchos eventos, pero creo que todavía
no somos un destino para el turismo deportivo. Y en cuanto al lujo, me reservo
mi opinión, ya que lujo es calidad en los
servicios y no que los precios sean muy
por encima del valor del servicio. No somos un destino 5 estrellas, sobretodo en
la profesionalidad del sector.
—¿Qué balance hace del inicio de temporada?
—Está resultando una temporada un
tanto extraña. Mayo fue muy bien pero
junio y julio peor que la temporada pasada. Existe demasiada oferta de fiesta y
esto va en detrimento a la oferta náutica.
Así que hago un llamamiento a las administraciones que empiecen a gestionar el
destino para que seamos competitivos
en otros productos turísticos que no sean la fiesta. Tenemos fiesta en Ibiza durante todo el día, y eso que no hay «afterhours».