Una abuela con un gran corazón

Transcripción

MAYO 2012
N.° 287
7-10
AÑOS
EXPERIMENTO
¿Cómo «beben»
los árboles?
URA REVISTA
ULT
SI
EC
Una abuela
con
un gran corazón
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EL RINCÓN
DE LA MAGIA
AMIGOS
ANIMALES
¡Bienvenidos,
pequeñines!
EL CUENTO
DEL MINISTERIO
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Cuento escrito por Marie-Christine Hendrickx
e ilustrado por Grégory Elbaz. Traducción de Pilar Garí.
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Hola, soy Buenamina,
la
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Me encanta pasearme
M
por la revista
y enterarme de todo.
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EL CUENTO
EL MES QUE VIENE EN
MES:
A Jonás, que vive en Nueva York, le encanta el campo.
EL CUENTO:
LOS JUEGOS:
EnPeligro,
su colegio,
organizan
un
viaje
a
un
centro de multiaventura
robot ordenador
Estrellas
del rock
en el que van a hacer arborismo, un recorrido entre los árboles.
Jonás sueña con ir, pero hay un problema: el dinero.
Una abuela
con un gran corazón
EL RINCÓN DE LA
MAGIA: Ver... para creer
AMIGOS ANIMALES:
Insectos
EL EXPERIMENTO:
¿Por qué son así los dientes?
EL CÓMIC DE ANATOL
LAPIFIA: Aventura en el
mar
Leoleo. Fotos portada: B.I.B (plátano), Juniors (lobeznos), Frédéric Didier/Naturimages (niño). Edita: Bayard Revistas, S. A. Calle Alcalá, 261-265. 28027 Madrid.
Tel.: 91 405 70 10. Consejero Delegado: Emmanuel du Boisbaudry. Redactora Jefa: Consuelo Cuevas. Redactora: Blanca Lara. Directora de Arte: Lucía Molina. Maquetación:
Mar Martín. Directora Comercial: Marta Tobella. Tel.: 93 218 24 76. E-mail: [email protected]. PUBLICIDAD: Jefa de Publicidad: Cristina Cuadrillero. Tel.:
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Pedro Calderón. ISSN: 0214-2627. Depósito legal: M-12657-2012. © J’aime lire, Bayard Presse. Redactora Jefa: Marie Lallouet. Distribución: SGEL. Imprime: Sucesores
de Rivadeneyra, S. A., Madrid. Impreso en España/Printed in Spain.
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Difusión
controlada
por
3
EL CUENTO: Una abuela con un gran corazón
M ay
WELCOME
TO
THIRD
GRADE
capítulo
1
Para qué soñar...
¡Qué rabia! Llevábamos meses hablando
del viaje al centro de multiaventura y la profesora, Mrs.* Smith, nunca nos había hablado de
dinero. Hoy ha repartido a todo el Grade 3**
la hoja de inscripción y resulta que la estancia de tres días cuesta... ¡100 dólares! Y dice
que no es caro para todas las actividades
que incluye.
Mi sueño es hacer un recorrido por los árboles. Cuando era pequeño, vi cien veces en
vídeo El libro de la selva y, desde entonces,
sueño con vivir en el bosque como Mowgli y
colgarme de una liana.
4
* Mrs. es una abreviatura de Mistress, que significa «señora».
** En Estados Unidos, es el equivalente a tercero de Primaria.
5
Pero ¿cómo voy a ir al centro de multiaventura si no tengo dinero? Ni siquiera voy a
leerle la hoja de inscripción a la abuela. Ayer
la oí hablar por teléfono con mamá: hablaban de dinero y mi abuela le contaba que
acababa de pagar el alquiler y que le quedaba lo justo para dar de comer al timoun*.
El timoun soy yo, Jonás. Voy a cumplir
nueve años y nunca he estado en Haití, como
mi madre o mi abuela. Yo nací en Nueva
York y nunca he salido de la ciudad.
Vivo con mi abuela en Douglass Street*,
en el barrio de Brooklyn. Mi madre no vive
con nosotros: trabaja fuera y se pasa casi
todo el día en su trabajo, por eso no puedo
irme con ella. Así que mamá manda dinero
a la abuela para que cuide de mí.
6
*Timoun o ti-moune quiere decir «niño» en la lengua de Haití, el país
de origen de la familia de Jonás.
* Street es «calle» en inglés.
7
«Más vale que me olvide del viaje», me
repetía a mí mismo al salir del cole.
Cuando llegué a casa, la abuela esperó,
como siempre, a que guardara mis zapatos
en su sitio. Y enseguida notó que me pasaba
algo. Nunca se le escapa nada:
—¿Algo no anda bien, timoun?
—No, no, nada.
Pero insistió y, al final, le hablé del viaje
y de lo que costaba. Entonces me pidió que
le leyera la hoja del colegio y, mientras me
escuchaba, movía despacio la cabeza.
Jonás sueña con ir al centro de multiaventura
y hacer arborismo. Pero su abuela no tiene
dinero para pagar la estancia...
capítulo
2
Una mala idea
A la mañana siguiente, llegué de mal humor al colegio. En cuanto oí hablar del viaje, me entraron ganas de gritar: «¡Cierra el
pico!». Mike también tenía cara de pocos
amigos. Seguro que él tampoco podía ir por
culpa del dinero. A principio de curso, a
Mike le faltaba la mitad del material escolar
de la lista...
8
9
A mí, el primer día de clase, no me faltaba nada, y la abuela había limpiado tan bien
la mochila que muchos niños creyeron que
era nueva.
Pero estaba claro que Mike no podía pagar el viaje. ¡Mejor! Es el más grande de la
clase y siempre nos está fastidiando.
De todos modos, yo ya estaba harto del
cole, siempre escuchando a Mrs. Smith, sin
poder cambiar de canal, como cuando ponen una peli aburrida en la tele...
Después de comer, ya no pude aguantar
más y me largué. ¡Me escapé del colegio!
WELCOME
TO
THIRD
GRADE
Caminé por Wilson Avenue* y me colé en
el videoclub. Nadie me preguntó qué hacía
allí. Tuve cuidado de no pasar por la plaza
del mercado al que va la abuela a comprar
la verdura. Luego, paseé por el parque, me
columpié, me subí a un árbol y me entretuve
un rato mirando a la gente.
10
* Avenue quiere decir «avenida» en inglés.
11
Pero empecé a aburrirme. Además, me
di cuenta de que era jueves y me estaba
perdiendo la clase de ciencias.
Cuando volví a casa, me preguntaba si
el director habría llamado a la abuela para
decirle que me había ido.
Abrí la puerta y grité, como siempre (bueno, a lo mejor un poco más bajo):
—¡Soy yo!
Ni rastro de la abuela. Me tomé el trabajo
de guardar los zapatos en el armario antes
de ir a la cocina. Allí estaba mi abuela, lavando verdura en el fregadero.
12
Se volvió y me miró directamente a los
ojos. Lo sabía todo, seguro, pero siguió lavando las verduras sin decir ni una palabra.
Normalmente, cuando la abuela se enfada
conmigo, repite los nombres de todos los vivos y los muertos de nuestra familia para que
sean testigos de lo que dice o para que la
ayuden. Así me aprendí los nombres de mis
antepasados. Esta vez, hubiera preferido una
buena regañina antes que el silencio.
13
Me sentí muy mal. No podía decir nada
para defenderme, porque mi abuela no me
preguntaba nada. Me marché a mi habitación a jugar con el videojuego que me regaló
mi madre la última vez que vino.
Al rato, la abuela me llamó para cenar.
Al acabar, vi un poco la tele. La abuela llamó a una prima suya. Habló de todo: de la
familia de Haití, del precio de la leche y de
las medicinas... pero no dijo nada de mi escapada del cole. Nada...
14
Después de haberse escapado del colegio
por la tarde, Jonás tiene miedo de la reacción
de su abuela. Pero ella no dice nada...
3
capítulo
La abuela echa raíces
Al día siguiente, después de desayunar,
cuando me estaba vistiendo para ir al colegio, la abuela se puso el abrigo. Extrañado,
le pregunté:
—¿Adónde vas, abuela?
Se colocó bien el sombrero delante del
espejo y me contestó:
—Voy al colegio, contigo.
¡Oh, no! ¿Y si pretendía hablar con Mrs.
Smith o incluso con Mr. Brown, el director
del cole? ¿Y para qué se llevaba el carrito
de la compra?
15
En clase, Mrs. Smith no dijo nada de mi
escapada de la tarde anterior. Me enteré de
que, en ciencias, me había perdido el montaje de un circuito eléctrico.
Por fin llegó el recreo. Salimos al patio y
echamos a correr. Íbamos a empezar un
partido de baloncesto, cuando un chico me
dio un codazo, señalando en dirección a la
calle. Me volví y vi a la abuela junto a la
verja, exactamente en el mismo sitio en que
nos habíamos despedido por la mañana.
Era inútil preguntar a mi abuela: seguro
que no iba a decirme nada más. Salimos
juntos. Por el camino, me crucé con varios
compañeros que no se acercaron a mí. Es
que la abuela tenía una cara tan seria que
no se atrevieron. Me acompañó hasta la
entrada del patio de los mayores. Entonces, le dije:
—Bye*, abuela.
16
* Es la forma familiar de decir «adiós» en inglés. Se pronuncia «bai».
17
De repente, lo entendí todo: ¡la abuela
se había instalado allí para que no me escapase del colegio! Me sentí raro y, sobre todo, avergonzado. No sabía qué hacer. Ir a
pedirle que volviera a casa no serviría de
nada...
Empezó el partido de baloncesto. Fallé
varios pases porque no tenía la cabeza en
el juego. Por primera vez en mi vida, sentí
alivio al oír el timbre del final del recreo.
Estaba sentada en su sillita plegable de
tres patas, la que usa en verano para ir a
ver los fuegos artificiales en el puente de
Brooklyn*. No me lo podía creer. ¡Seguía allí
plantada! Me miró sin pestañear. Todos mis
compañeros se volvieron hacia ella y dijeron
en tono de burla:
—¡Tu abuela ha echado raíces!
—Está vigilando a su chiquitín. ¡No le
quita los ojos de encima! Qué mono es...
18
* Famoso puente colgante que une Manhattan (el centro de Nueva
York) con el barrio de Brooklyn.
19
A mediodía, no tenía hambre. Tampoco
tenía ganas de armar jaleo en la mesa con
los demás. Una idea fija me daba vueltas en
la cabeza: «¿Seguirá la abuela ahí fuera?».
Al acabar de comer, todos me empujaban porque caminaba muy despacio. Casi
no me atrevía a volver la vista hacia la calle... La abuela seguía allí, en su sillita. Me
sentía muy mal. Necesitaba estar solo y me
quedé en cuclillas, contra la pared.
20
Mike me vio y vino hacia mí, con cara
de burla:
—¿Qué, ya no puedes huir, renacuajo?
¡Dichoso Mike! ¡No lo aguanto! ¿Cómo
se atreve a decir nada? ¡Pero si él llega tarde al cole la mitad de los días! Menos mal
que pasó de largo. No era el mejor momento para empezar una discusión con él.
21
Por fin pasó la tarde. Encontré a la abuela
esperando delante de la verja. Al verme salir,
cerró la sillita. Parecía cansada. Volvimos a
casa sin decir una palabra.
Nada más llegar, supliqué:
—Abuela, por favor, no vuelvas al colegio. Te he entendido. No lo haré más...
La abuela se volvió y, viendo que me
echaba a llorar, abrió los brazos y me abrazó con fuerza. ¡Qué bien me sentí! Como
me estaba sorbiendo los mocos, me ofreció
su gran pañuelo de tela.
22
Sin dejar de abrazarme, me dijo:
—Timoun, algún día te enseñaré el tesoro
de tu abuelo Diosdado...
¿El tesoro de mi abuelo? No lo entendía.
Hace mucho que mi abuelo se fue al país
sin sombrero*, como dice la abuela. Pero yo
notaba el calor de su abrazo y estaba muy
bien. Sentía curiosidad, pero no quería preguntar nada.
* Los haitianos dicen «irse al país sin sombrero» para explicar
que alguien ha muerto. Es porque los muertos no llevan sombrero.
23
Después del cole, Jonás promete
no volver a escaparse. Su abuela lo abraza
y hacen las paces...
capítulo
4
3C
Por la mañana, tuvimos gimnasia. Cuando
Mr. Córdoba, el profesor, empezó a hablar
de las actividades deportivas del centro de
multiaventura, me marché al servicio.
¡Qué noticia!
Al día siguiente, como me esperaba, mis
compañeros me hicieron un montón de preguntas sobre la abuela. Yo no tenía NI PIZCA
de ganas de hablar del tema. Ni siquiera
contesté cuando Mike me soltó:
—¡Tu abuela es muy rara! Mi madre nunca
viene al cole. Por lo menos, a mí me dejan
en paz...
24
El resto del día pasó como siempre. Pero,
por la tarde, al acabar las clases, me esperaba una sorpresa: la abuela estaba a la
puerta del despacho del director.
25
El lunes llegó la gran noticia. Mrs. Smith
nos explicó que la excursión al centro de
multiaventura se mantenía, pero que había
cambiado el precio: ahora costaba 45 dólares en lugar de 100. ¡No podía creérmelo!
En cuanto sonó el timbre, volví corriendo
a casa y grité:
—¡Abuela, abuela, tengo un notición!
La abuela se acercó:
—¡Qué gritos! Pero ¿qué pasa?
Con la respiración entrecortada por la
carrera, le leí la carta del colegio.
La abuela llevaba su mejor sombrero, el
de la plumita azul. El director le estaba dando la mano. Los dos parecían contentos.
No sería por mi desaparición del otro día,
eso desde luego...
Por el camino, la abuela no quiso contestar a mis preguntas. Pero estaba de buen
humor, y eso era lo más importante. Pensé
que, al final, ya me enteraría de su secreto.
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28
Mientras leía, noté que la abuela sonreía
con cara de misterio. Y, de pronto, lo comprendí: recordé a la abuela con su sombrero
de las grandes ocasiones, dando la mano,
muy sonriente, al director...
—¿Vas a ser tú la que cocine, abuela?
—A mí me parece una buena idea, ¿no?
—me contestó.
Me daba vueltas la cabeza: no sólo podía
ir al centro de multiaventura sino que, además, ¡también vendría mi abuela!
29
¡Sorpresa! La abuela se ha ofrecido
para hacer de cocinera en el centro
de multiaventura. Jonás va a poder ir...
capítulo
5
A la mañana siguiente, la abuela vino
con nosotros al autobús. Al final, se apuntó
toda la clase, menos Angélica, que tiene un
montón de alergias. Su madre se preocupa
mucho por ella. Pero lo suyo no era un problema de dinero.
El nuevo Mowgli
Dos semanas después, el día antes del
viaje, estábamos tan nerviosos que el director tuvo que entrar en la clase a pedir calma.
También nos advirtió que dejáramos los videojuegos en casa, porque eran inútiles para sobrevivir en el bosque.
30
31
Los monitores eran supersimpáticos, sobre todo el de mi grupo, que se llamaba
Thunder*. Todos nos pusimos motes. Yo
elegí Mowgli. Me gustó todo: el tiro con arco, la carrera por el bosque y la equitación.
Montamos en caballos, ¡no en ponis! Pero
lo que más me gustó fue el arborismo: el
recorrido por los árboles, con escaleras,
puentes colgantes, redes, cuerdas...
* Thunder significa «trueno» en inglés.
Mike también vino. No me hizo mucha
gracia verlo subir al autobús. Pero me sentí
protegido por la presencia de mi abuela, que
se sentó justo detrás del conductor y me indicó con un gesto que me marchara al fondo, con mis compañeros.
El centro de multiaventura fue guay. Estábamos en medio del bosque, lejos de la carretera. No se oía ningún motor, sólo el viento entre los árboles y, por la noche, el croar
de las ranas toro*.
32
* Es una especie de rana muy grande que vive en Norteamérica.
Puede llegar a pesar 1 kilo.
33
El descenso en tirolina era larguísimo.
Hasta Mrs. Smith hizo el recorrido con todos. Algunos alumnos tenían un poco de
miedo, pero gritamos para animarlos y al final todos lo atravesamos. Al terminar el recorrido más difícil, Thunder me dijo:
—Mowgli, creo que te has ganado de
verdad el mote.
34
Entonces, se me ocurrió algo: le pregunté qué había que hacer para ser monitor,
como él. Thunder me contestó:
—Sigue haciendo deporte y trabaja mucho en el cole para llegar a la High School*.
Luego añadió, como si pudiese leerme el
pensamiento:
—Si tienes un objetivo, lo conseguirás.
* Corresponde, más o menos, a 3.º y 4.º de la ESO y 1.º y 2.º
de Bachillerato. Los alumnos tienen entre 15 y 18 años.
35
A las horas de las comidas, devorábamos lo que cocinaba mi abuela. Teníamos
mucha hambre, ¡y todo estaba riquísimo! La
abuela hizo arroz con jamón y judías pintas,
pollo con leche de coco y espaguetis. Y no
se olvidó de preparar mi postre favorito: buñuelos de plátano. ¡Se convirtió en el postre
preferido de toda la clase!
La abuela también curó los rasguños y
las picaduras de insectos. Parece que hasta
consoló a un alumno que lloraba por la noche. No sabemos quién fue. El último día, al
acabar de comer, todos la aplaudimos para
darle las gracias.
36
37
De vuelta al cole, al bajar del autobús,
Mike me miró de frente y me dijo:
—Tu abuela es guay, renacuajo.
Viniendo de él, era todo un piropo.
En el centro de multiaventura, la abuela
de Jonás se ha ganado el cariño y el respeto
de todos. Y no sólo por lo bien que cocina...
capítulo
6
El tesoro
del abuelo
La vida en el cole vuelve a ser como
siempre. Hay que prestar mucha atención,
obedecer las normas, esforzarse..., pero en
la clase hay mejor ambiente. Y parece que
Mrs. Smith también tiene más paciencia.
38
39
Una tarde, en casa, recuerdo de repente
la promesa del otro día. Así que voy a buscar
a la abuela, que está sentada en su butaca,
y le pregunto:
—¿Y el tesoro del abuelo?
La abuela sonríe, se levanta, me lleva a
su habitación y saca una maleta del armario.
Dentro hay un cuaderno viejo con el papel
todo amarillo. Nos sentamos en la cama.
—Es el cuaderno de tu abuelo Diosdado.
Cuando era pequeño, en Haití, tu abuelo
nunca fue al colegio. Yo tampoco, por eso
no sé leer. Cuando se hizo mayor, tu abuelo
seguía soñando con ir a la escuela.
La abuela continúa:
—Un día, unos misioneros se instalaron
en el barrio y abrieron una escuela gratuita
para los niños. Los más pequeños iban por
la mañana y los mayores por la tarde. Tu
abuelo pidió asistir él también.
40
41
La abuela añade:
—En total hay veintiséis letras. Tu abuelo
estaba muy orgulloso y decía: «Ya no soy
analfabeto. Conozco todas las letras».
Cojo el cuaderno y paso las páginas con
cuidado. Se nota que mi abuelo se esforzaba. Pero no debía de ser fácil para él, porque las letras están un poco torcidas.
La abuela me sigue contando:
—Le dijeron que no podía ser, pero él
suplicó que le enseñaran a leer. Entonces,
los misioneros organizaron un curso para
adultos, dos tardes a la semana. Y así fue
como tu abuelo aprendió el abecedario. ¡Mira!
La abuela abre el viejo cuaderno donde
aparecen unas letras escritas a lápiz.
42
43
Por la noche, tenemos una sorpresa genial: ¡mi madre viene a visitarnos! Estamos
muy contentos. Mientras cenamos, le contamos todas las cosas divertidas que vivimos
en el centro de multiaventura, como la mañana
en que la abuela montó a caballo y el animal
no le hacía ni caso. Y ella... ¡venga a hacer
gestos! Esta vez, es la abuela la que necesita su enorme pañuelo de tela. Llora de risa.
44
Mi madre también se ríe a carcajadas.
Está feliz con nosotros. Cuando estoy a punto
de irme a la cama, me abraza y me pregunta:
—Jonás, ¿te gusta el colegio?
Miro a la abuela y contesto sin dudar:
—Sí.
Mi madre parece impresionada y mi
abuela sonríe con los ojos.
FIN
45
P. 46
EL CORREO DE
P. 47-51
LOS JUEGOS
Especies
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Fotos: © Istockphoto/Terra Sign (romanesco)/Milan Presse/2009; , © istockphoto/
Steven Allan (torre de Pisa)/Milan Presse/2010; B. I. B. (fotos adivinanzas).
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equilibrio. C
asta dónde lle
H
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s.
á
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o
c
un po
Me encanta esta
sección: descubrir
imágenes sorprendentes,
conocer noticias
curiosas, jugar con
la plantilla mágica…
¡Prueba! Encontrarás
tu plantilla mágica
Cuadrado, ¿sí o no?
Mira bien el cuadrado rosa: parece
un poco raro... ¿Es realmente un
cuadrado? Es decir, ¿tiene los cuatro lados iguales y rectos? ¡Pues sí!
Los círculos negros «engañan» al
cerebro y hacen que parezca que
los lados del cuadrado están curvados. ¡Si no te lo crees, compruébalo
con una regla!
52
Adivinanzas
en la página 3.
Aquí tienes dos adivinanzas.
Para «ver» las soluciones,
pon tu plantilla mágica encima
de las imágenes, con las líneas
en vertical, y muévela muy
despacio de izquierda a derecha.
OR
O PARECE
,
Pequeña
Pe
P
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león.
e
53
5
Texto: © Emily Jaeneke, Bimbo y Leoleo/Sailer/04-2012.
Fotos: © Juniors, Mauritius, zoonar/Sailer/04-2012.
P. 54-58
AMIGOS ANIMALES
¡Bienvenidos,
pequeñines!
Nada patosos
Los patitos recién nacidos,
cubiertos de suave plumón,
ya están deseando
meterse en el agua.
Hay crías por todas partes...
¡es que ha llegado
la primavera!
¿Salimos a jugar?
La primera excursión: a la entrada
de su madriguera, estos conejitos
no se deciden a salir.
¿Veo
triple?
¡Esperadnos!
Los corderitos son muy curiosos:
nacen dispuestos a descubrir
el mundo.
54
Tiempo de cumples
¡Cómo crecen!
Si las ovejas celebrasen
su cumpleaños, en primavera
tendrían fiesta casi todos los días,
ya que la mayoría habría nacido
casi a la vez. A diferencia
de los humanos, que podemos
nacer en cualquier época del año,
muchos animales tienen sus crías
en primavera. En esta estación,
los días son cálidos y hay
mucho alimento. ¡A crecer!
Las ovejas buscan pareja
en otoño para reproducirse.
Cinco meses después,
las hembras traen al mundo
una, dos o tres crías.
Unos veinte minutos después,
las crías ya se mantienen
sobre sus patitas y buscan
la ubre de su madre
para alimentarse. ¡Quince días
más tarde, comen hierba!
Ritmos diferentes
Los conejitos crecen más despacio:
nacen sin pelo y ciegos, y necesitan
el calor de sus padres
y una buena alimentación.
Hasta los dos meses, no pueden
valerse por sí mismos. En cambio,
los polluelos de pato se lanzan
a caminar y a nadar nada más
salir del huevo.
55
Fotos: © iStock, Okapia, Rauchensteiner, Juniors/Sailer/04-2012.
AMIGOS ANIMALES: ¡Bienvenidos, pequeñines!
Los lobeznos son muy traviesos.
¡Menos mal que la loba cuenta
con la ayuda de la manada para cuidarlos!
¡Uhú, uhú, uhú!
Qué serios parecen
estos tres mochuelos...
Madera de acróbatas
Muy bien, ¡zorrito valiente!
Ahora... ¡no te caigas!
Clase
de trepar
Si mamá
vigila, es
más fácil
ser valiente.
¡Todos
afuera
a jugar!
El bosque y los prados
se convierten
en una escuela infantil:
todas las crías salen a jugar...
¡y a aprender!
56
Jugando sin parar
Camuflaje natural
Escondidos...
En enero, la osa trajo al mundo
tres pequeños. En mayo,
los oseznos salen de la osera,
vigilados por su madre.
Los zorritos también se atreven
a hacer sus primeras salidas
fuera de la madriguera.
En otoño, los machos se irán
definitivamente en busca
de su propio territorio.
Las hembras jóvenes se quedan
hasta la primavera siguiente
y ayudan a su madre a cuidar
a los zorritos más pequeños.
Las crías de jabalí, los jabatos,
pasan sus primeros días
en una especie de nido
de hierba. Poco a poco,
empiezan a explorar
el bosque con su madre:
las rayas de su pelaje
son un buen camuflaje
para moverse seguros.
Los cervatillos recién
nacidos viven escondidos
entre matorrales durante
unas cuatro semanas.
Luego, ya pueden seguir
a su madre por el bosque.
Los puntos blancos de su
piel también les ayudan
a pasar inadvertidos.
¡Qué cuco!
El cuco tiene un truco:
pone su huevo en el nido
de otra ave y deja
que críe a sus polluelos.
¡Así se ahorra un montón
de trabajo! Sin embargo,
los mochuelos y los búhos
son unos padres
muy cuidadosos: incuban
sus huevos durante cuatro
semanas y alimentan
a sus crías hasta que
cumplen dos o tres meses
y ya pueden buscar
comida ellas solas.
¿Listos
para
el test?
57
AMIGOS ANIMALES: Test
¿Lo sabes?
Buenamina ha preparado 6 preguntas
sobre las crías de los animales.
Si las contestas bien, obtendrás...
... una palabra clave:
58
L
C
B
En invierno
En primavera
En verano
Las crías de jabalí
se llaman...
Ñ
H
E
Jabalines
Jabalitos
Jabatos
¿Cuándo se lanzan al agua
los patitos?
E
O
P
Nada más nacer
Al cabo de una semana
Al cabo de un mes
2
4
6
Los conejitos
nacen...
Sin pelo y ciegos
R
Z
I
Sin orejas
Sordos
¿Lo sabías?
Sólo por suscribir
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ub Bayard
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Entre otros...
En la piel, los cervatillos
tienen...
A
C
T
Rayas
Manchas blancas
Manchas azuladas
¿Qué ave pone huevos
en un nido ajeno?
El gorrión
S
G
R
El mochuelo
El cuco
Solución: la palabra clave es CRECER.
1
3
5
¿En qué época del año
nacen más animales?
clubbayard
¡Y muchos más!
Más información en www.conmishijos.com/clubbayard
Un huerto
en cuadrados
Hola, me llamo Luis. Tengo 5 años
y he plantado un huerto en cuadrados
para que las plantas crezcan
sin tener que echarles insecticidas.
He hecho mi huerto
dentro de un rectángulo formado
por cuatro tablas de madera.
He removido la tierra
con una azada y he añadido tierra
hasta llegar al borde
de las tablas.
2
60
CUIDO MI PLANETA
Riego el huerto con agua de lluvia.
Y, para protegerlo
de los pulgones,
he puesto unos tiestos
llenos de paja
para que las tijeretas
vivan dentro.
Es que las tijeretas
se comen
los pulgones.
3
1
Luego, con unas cuerdas,
he hecho unos cuadrados
y he plantado una hortaliza diferente
en cada uno. Hay guisantes,
zanahorias, lechugas...
También he plantado capuchinas,
un flores que atraen a los pulgones,
unas
¡así no van a las hortalizas!
5
4
¡Qué lechuga tan fresca!
Me gusta cultivar
sin contaminar la Tierra.
© Bayard Presse - Youpi - E. Chanut (adaptación), Yves Calarnou (ilustraciones) - 2011.
P. 60-61
61
P. 62-65
¿Cómo «beben» los árboles??
Leoleo te propone hacer un arbolito para descubrirlo.
Necesitas:
Palillos
Un rotulador
1. Sujeta con la goma
un puñado de palillos, procurando
que queden muy apretados.
3. En el borde de la copa,
62
pinta una mancha de color
con el rotulador.
Un platito con agua
EL EXPERIMENTO
Coloca bien los palillos
para que estén rectos.
Pon tu arbolito de pie
en el plato lleno de agua.
Un filtro de café
Una goma elástica
Tijeras
2. Recorta la copa
de tu árbol en el filtro
de café.
4. Encaja el filtro
entre los palillos
por donde está la mancha.
¡ HALA!
Ahora, espera unos minutos.
¿Qué crees que pasará...?
63
63
Diez minutos
después...
¡Oh, qué bonito!
El color de la mancha
de rotulador
se ha extendido.
Mira el «tronco»
de tu arbolito
Entre los palillos,
se ve luz.
DE PERFIL
Son como tubitos
muy finos entre los palillos.
DE FRENTE
El agua
pasa por
aquí.
El agua sube por estos tubitos.
A eso se le llama capilaridad.
En un tronco de verdad, de madera, también hay
unos tubitos finísimos. Y por ellos
sube el agua, desde las raíces hasta las hojas.
© Bayard Presse - Youpi - Emmanuel Chanut (idea y texto),
Frédéric Didier/Naturimages y Vario Creative/Photononstop (fotos),
Rémi Saillard (ilustraciones), Patricia Castex (color) - 2011.
EL EXPERIMENTO: ¿Cómo «beben» los árboles?
El agua
que sube
por el árbol
se llama
savia.
Esto es
la corteza.
Esto es
la madera.
64
¡Increíble! El agua ha subido hasta el filtro.
¿Por dónde ha pasado?
65
ños
A
ir
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par
LEOLEO , cada mes,
te trae los mejores
cuentos para reír
y soñar, juegos...
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¡y mucho
más!
7a
de
P. 67-74
EL CÓMIC
Olimpia
Pitágoras
Elenita
Paladín
Jasón
Guasón
Y, de REGALO
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Nombre | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | Fecha de nacimiento | | | | | | |
Calle | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | N.º | | | | | Piso | | | | |
C.P. | | | | | | Población | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | |
Provincia | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | Teléfono | | | | | | | | | |
Colegio | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | C.C. | | | | | | | |
AUTMAY/REW
FORMA DE PAGO:
❏ Por domiciliación bancaria, para lo cual les facilito los siguientes datos:
¡Qué manía tiene la seño
con los controles sorpresa!
Nunca sabes si estudiarte
la lección o no.
Yo tengo un truco
para saberlo y, hasta ahora,
no me he equivocado nunca.
Muy Sres. míos: les ruego carguen en mi cuenta o libreta, hasta nueva orden, las facturas que presentará BAYARD REVISTAS por mis suscripciones.
Titular de la cuenta/libreta: | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | |
o
Código Cuenta Cliente (C.C.C.): Entidad | | | | | Oficina | | | | | D.C. | | | N. de cuenta | | | | | | | | | | |
❏ Por tarjeta de crédito, para lo cual les facilito los siguientes datos:
Muy Sres. míos: les ruego carguen en mi tarjeta, hasta nueva orden, las facturas que presentará BAYARD REVISTAS por mis suscripciones.
Titular de la tarjeta: | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | |
DNI: | | | | | | | | | N.º de tarjeta: | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | Caducidad: | | |/| | | CVV: | | | |
Tipo de tarjeta:
❏VISA
❏ SERVIRED
❏ Por talón que adjunto a nombre de BAYARD REVISTAS.
❏ VISA
ELECTRON
Firma del titular:
www.conmishijos.com. Suscripción para Europa: 76 € mediante talón bancario a enviar, junto con este boletín, a Bayard Revistas, S. A. C/ Alcalá, 261-265. 28027 Madrid. España.
Tel.: 34-91 405 70 43. Suscripción para otros países: 81 € mediante giro postal o mediante cheque a favor de Bayard Revistas, S. A. a enviar, junto con este boletín, a la dirección arriba indicada.
La cumplimentación del boletín deberá ser realizada y firmada por un adulto. De acuerdo con lo dispuesto en la Ley Orgánica 15/1999, de 13 de diciembre de Protección de Datos de Carácter Personal, usted
queda informado y presta su consentimiento expreso e inequívoco a la incorporación de los datos personales que nos facilita a los ficheros de datos personales responsabilidad de Bayard Revistas, S.A., con domicilio social en la calle
Alcalá, número 261-265, 28027, Madrid, con la finalidad de gestionar sus pedidos y la entrega de las revistas cuya suscripción solicite y la de los regalos que, en su caso, le puedan corresponder, así como de remitirle, incluso por
medios electrónicos, comunicaciones comerciales sobre nuestros productos y servicios u otros de terceras empresas u ONG relacionadas con el sector editorial, turístico, venta por correo, alimentación, textil, cosmética y belleza,
hogar, jardín, salvo que nos indique lo contrario marcando con una cruz la siguiente casilla , declarando que no consiente el tratamiento de sus datos personales para fines comerciales. Podrá ejercer sus derechos de acceso,
rectificación, cancelación y oposición mediante comunicación escrita dirigida a Bayard Revistas, S.A., a través de la siguiente dirección de correo electrónico: [email protected]
Asimismo, mediante la firma de este documento y, salvo que nos indique lo contrario marcando con una cruz la siguiente casilla
, usted consiente que Bayard Revistas, S.A., ceda sus datos personales a terceras empresas
pertenecientes al sector editorial, turístico, venta por correo, alimentación, textil, cosmética y belleza, hogar, jardín, así como a ONG, con el único fin de remitirle comunicaciones comerciales, incluso por medios electrónicos, sobre los
productos y servicios relacionados con la concreta actividad que estas terceras empresas desarrollen, vinculada, en todo caso, a alguno de los sectores descritos. Oferta en vigor hasta el 30-06-2012, sólo para España y hasta
final de existencias, en cuyo caso se le enviaría un regalo similar. Bayard Revistas, S.A. le garantiza la continuidad de su suscripción una vez acabado el período escogido. En cumplimiento de lo establecido en
la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios, se le informa de que el presente contrato se renovará, por tanto, por períodos anuales, procediéndose al pago o cargo nuevamente por los
mismos medios por usted escogidos al comienzo de cada anualidad, salvo que usted nos comunique lo contrario. Dicha comunicación de ejercicio de su derecho a poner fin al contrato, deberá usted hacerla
por medio de escrito dirigido a Bayard Revistas, S.A., C/ Alcalá 261-265, 28027 Madrid (España). Existen hojas de reclamación a disposición del cliente.
67
Fecha _ _ /_ _ /_ _
ANATOL LAPIFIA: Control sorpresa
¿Ah, sí? ¿Y cómo
lo haces?
Consulto
a mi pez
rojo.
Mi hermano descubrió
que acierta los resultados
de los partidos
de baloncesto y ahora
lo uso para el cole.
Toni, te presento
a Jasón
y a Anatol.
¿Le preguntamos
si habrá control
de lengua
mañana?
¡Hola, Toni!
¿Cómo? ¿Sabe
hablar?
¿Cuándo has visto
un pez
que hable?
Voy a sacar
el material.
¿Y tú cuándo has visto
un pez que dé el resultado
de los partidos, lista?
¿Pues cómo
lo haces?
68
Venid a casa
y os lo
enseño.
Cojo dos
cucharitas: una roja
y otra verde...
Vale, ya
lo vemos.
Si escoge
la roja, habrá
control.
Ahora, pongo
un poco de comida
en cada una...
69
Al día siguiente...
Mirad, va a escoger.
¡ PLIC!
¿Y qué hace
ahora?
¡Fijo!
¿De verdad creéis
que la señorita
Gulominof nos va
a poner un control
sorpresa?
¡PL
OC!
«Los diferentes tipos de oraciones son
-dos puntos- interrogativa -coma-...
Se
concentra...
...exclamativa -coma- imperativa...
¿Pero
qué
os
pasa?
¡Ya
ha
elegido!
Malas noticias: mañana
hay
control.
Al menos, estamos
avisados.
Pues... sólo podemos
darte su nombre de pila.
Se llama
Toni.
Nos sabemos
la lección
de carrerilla.
Sabemos de buena
fuente que va
a haber control.
¿Y cuál
es esa fuente
tan segura? A ver...
Pues si
vosotros lo decís,
voy a repasar
una vez
más.
¡Hola a todos!
¿Os habéis
estudiado la
lección de lengua?
¡CLING!
¡CLING!
¿Otra vez?
70
71
No, pero como no os
portéis bien, haremos uno.
¡Vaya, pero si ya nos lo
hemos estudiado!
Ya tengo la hoja del
control preparada...
¿Quién ha silbado
con el bolígrafo?
¡ Fiuuuu!
¿Nadie?
Bien, sigamos...
¿?
¿?
¿?
Buenos días, niños...
Sacad papel
y boli...
72
Hoy vamos a escribir
una poesía nueva.
Seño,
¿no hay
control
sorpresa?
¿Lo hacéis a
propósito o qué?
Cuidado,
es mi último
aviso.
¡ Fiuuuu!
73
Este Leoleo
es de:
!
¡Fiuuuu .............
....................
..
..
..
..
..
..
..
..
..
..
..........
!
iuu..uu......................
..¡F..
.
..
.
..
.
..
.
..
..
.
..
.
..
..
..
...............................
u!
¡Fiuuu
!
¡Fiuuuu
EL MES QUE VIENE EN
¡Vosotros
lo habéis querido!
¡Sacad papel
boli!
Hola, soy y
Buenamina,
la
l mascota de Leoleo.
Me encanta pasearme
M
por la revista
y enterarme de todo.
Por cierto: ¡no te pierdas
Po
el superconcurso
de este mes!
EL CUENTO:
Peligro, robot ordenador
LOS JUEGOS:
Estrellas del rock
EL RINCÓN DE LA
MAGIA: Ver... para creer
AMIGOS ANIMALES:
Insectos
EL EXPERIMENTO:
¿Por qué son así los dientes?
EL CÓMIC DE ANATOL
LAPIFIA: Aventura en el
mar
En el recreo...
No está mal tu pez.
Dice siempre
la verdad...
... aunque, esta vez,
¿?
¿?
hemos tenido que
ayudarlo un poco.
¿?
PARTICIPA EN EL CONCURSO DEL
«Superabuelos»
¿?
MES:
TOC
TOC
¿?
TOC
TOC
¡Cuánto quieres a tus abuelos! ¡Y ellos a ti! Haz un retrato
de tu abuelo, de tu abuela o de todos tus abuelos...
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La GANADORA del CONCURSO «Dibujo a Buenamina»
74
es Nadisha Balani Mahtani.
FIN
© Bayard Presse - Jáime lire - Anne Didier y Olivier Muller (guión), Clément Devaux (ilustraciones) - 2011.
Leoleo. Fotos portada: B.I.B (plátano), Juniors (lobeznos), Frédéric Didier/Naturimages (niño). Edita: Bayard Revistas, S. A. Calle Alcalá, 261-265. 28027 Madrid.
Tel.: 91 405 70 10. Consejero Delegado: Emmanuel du Boisbaudry. Redactora Jefa: Consuelo Cuevas. Redactora: Blanca Lara. Directora de Arte: Lucía Molina. Maquetación:
Mar Martín. Directora Comercial: Marta Tobella. Tel.: 93 218 24 76. E-mail: [email protected]. PUBLICIDAD: Jefa de Publicidad: Cristina Cuadrillero. Tel.:
91 405 70 22. E-mail: [email protected]. Directora financiera y Atención al cliente: Marina Vilaplana. Director de Producción y Secretario General: Juan
Pedro Calderón. ISSN: 0214-2627. Depósito legal: M-12657-2012. © J’aime lire, Bayard Presse. Redactora Jefa: Marie Lallouet. Distribución: SGEL. Imprime: Sucesores
de Rivadeneyra, S. A., Madrid. Impreso en España/Printed in Spain.
Suscripciones: Bayard Revistas. Apartado de correos 20 047. 28080 Madrid. TELÉFONO DE ATENCIÓN AL SUSCRIPTOR: 902 411 411.
No está permitida la reproducción total o parcial de esta revista, ni su tratamiento informático, ni la transmisión de ninguna forma o por cualquier medio, ya sea electrónico, mecánico, por fotocopia,
por registro u otros métodos, sin el permiso previo y por escrito de los titulares del copyright.
Difusión
controlada
por
Sumario
Leoleo n.º 287, mayo 2012
P. 3-45
P. 47-51
EL CUENTO:
Una abuela con un gran
corazón
P. 52-53
EL RINCÓN DE LA MAGIA
Imágenes animadas,
fotos...
NUE
¡Participa
en el correo
de Leoleo!
P. 46
LOS JUEGOS:
Especies en peligro
P. 54-58
AMIGOS ANIMALES:
¡Bienvenidos, pequeñines!
VO!
!
P. 62-65
EL EXPERIMENTO:
¿Cómo beben los
árboles?
P. 67-74
EL CÓMIC DE ANATOL
LAPIFIA: Control sorpresa
,
Y, además
CUIDO MI PLANETA: Un huerto en cuadrados P. 60-61

Una abuela con un gran corazón

Transcripción

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