Miguel Santillana. La deuda agraria y el Dr. Liquid Paper

Transcripción

Miguel Santillana. La deuda agraria y el Dr. Liquid Paper
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BAJO LA LUPA
miércoles 28 de enero del 2015 Gestión
Miguel E. Santillana
Investigador Principal - Instituto del Perú - USMP
E
l proceso de la Reforma
Agraria (RA), iniciado el
24 de junio de 1969, no
culmina. El Gobierno del
Gral. Juan Velasco -dizque buscando “la justicia social”-, expropió las tierras para entregarlas a
los campesinos, que pagarían por
ellas. Ante la imposibilidad de pago por parte de los beneficiados,
el Estado peruano asumió el total
de la deuda.
La RA fue un acto político pues
se anuló al grupo de poder más
poderoso de su tiempo en el país:
los hacendados que concentraban
la tierra. Sin embargo, los beneficiados por la reforma fueron pronto abandonados a su suerte pues
el objetivo económico fue la modernización de la sociedad peruana mediante un proceso de industrialización. Para ello se debía
subsidiar la canasta de alimentos
de los obreros en las ciudades y,
por lo tanto, se hizo un control de
precios que benefició a las zonas
urbanas en detrimento del campo. Resultado: destrucción del
campo y pobreza generalizada.
Una reliquia viviente del proceso
son las cooperativas azucareras
en Lambayeque que sobreviven
por normas especiales de “protección patrimonial” sancionadas en
el Congreso regularmente.
Los ideólogos de izquierda
fundamentaron el robo de tierras
(Juan Velasco Alvarado nunca
habló de confiscación pero es lo
que ha sucedido en la práctica)
aduciendo que los terratenientes
se las habían birlado a los indígenas durante la Conquista y la República. A los expropiados de
1969 se les hizo padecer un “karma histórico”.
Ante la incapacidad de pago de
los beneficiarios, el Estado asumió
la deuda frente a los expropiados
pero dejó de honrarla por la crisis
económica derivada de la crisis de
la deuda y el colapso del Estado populista: la inflación licuó la deuda.
Es por ello en marzo del 2001, el
Tribunal Constitucional (TC) emitió una sentencia, ordenando el pago de los bonos de acuerdo a la teoría “valorista” (reconocimiento del
pago del principal e intereses sin
inflación).
Desde entonces, los sucesivos
gobiernos (ATM, AGP y OHT) trataron de hacer “perro muerto”. Es-
La deuda agraria
y el Dr. Liquid Paper
En marzo del 2001 el tribunal constitucional emitió una sentencia
ordenando el pago de los bonos, reconociendo el principal y los
intereses sin inflación. hasta el momento no se hace efectivo.
LUCERO DEL CASTILLO
El proceso que se inició en 1969 aún no termina, pese a que ya hay un fallo del Tribunal Constitucional.
ta deuda no está registraba como
deuda interna, lo cual es un delito
(¿sanciones?). Todo ello demuestra
“mala fe” por parte del Estado.
La batalla por una resolución
El Colegio de Ingenieros del Perú
(CIP) solicitó el 2011 al TC una “acción de cumplimiento” (ejecutar la
sentencia del 2001). El juez ponente del caso fue el Dr. Gerardo Eto.
En julio del 2013 había firmado un
proyecto de resolución para la aprobación y firma de los demás magistrados del colegiado. Este proyecto
fue firmado por el Dr. Carlos Mesía.
El proyecto confirmaba la teoría
“valorista” y la modalidad como venía haciéndose en el Poder Judicial,
es decir, de acuerdo al Código Civil.
La resolución firmada por ambos
magistrados se filtró al Gobierno.
Aparecen en escena la “dupla de
oro” conformada por el Dr. Eduardo
“Una reliquia viviente
de la reforma agraria
son las cooperativas
azucareras en Lambayeque que sobreviven
por normas de ‘protección patrimonial’”.
Roy Gates (asesor presidencial) y el
Dr. Daniel Figallo (ministro de Justicia) que interactúan con los magistrados, tratando de influir en la
resolución final. Los magistrados
rechazaron esta injerencia.
Ante el rechazo, el mismísimo
Ollanta Humala apareció en RPP
el 9 de julio del 2013 criticando a
los magistrados del TC por la
próxima “acción de cumplimien-
to”. “Este TC debe de abstenerse a
dar fallos sobre temas sensibles,
porque ya está de salida. Temas
sensibles como el de los bonos de
la RA”, afirmó.
Guerra declarada: bombardeo
mediático desde el Congreso y diversos sectores del Ejecutivo al TC
y sus magistrados. El presidente del
TC, Óscar Urviola Hani -en los últimos minutos de su independencia-,
tildó de “ignorante” a Daniel Figallo. Sobre el entonces presidente del
Congreso, Víctor Isla, dijo: “el ladrón piensa que todos son de su
condición”.
Dr. Liquid Paper entra en acción
Se busca una salida. El TC aceptó
“coordinar” una resolución, entre
Urviola y el ministro de Economía,
Luis Miguel Castilla. Urviola sacaba una resolución favorable, pero
estableciendo un mecanismo de
“actualización” de los bonos impuesto por el MEF, que en el fondo
no actualizaba nada y convertía
la deuda en cero. Entonces, el
MEF no tenía de qué preocuparse,
el TC quedaba bien ante el público. Al final no se paga nada.
El problema era que la “fórmula cero” del MEF tenía que aparecer como si fuera “idea original”
del TC. Algo muy difícil porque la
fórmula había sido tomada de un
proyecto del MEF del 2011, hecho
público. Castilla aprovechó el momento para sorprender a Urviola;
este se creyó el cuento y aceptó resignado la presión del Gobierno.
Por su parte, el asesor presidencial, Dr. Roy Gates visita el despacho de varios magistrados como
lo consigna la edición del diario
Perú 21 del jueves 11 de julio, que
toma declaraciones del Dr. Urviola: “Asimismo, confirmó las visitas del asesor presidencial Roy
Gates a magistrados del TC para
ver el tema de los bonos de la deuda agraria, señalando que ello demostraría el interés de Palacio”.
La “fórmula cero” fue apadrinada por Urviola con nueva propuesta de resolución en la sesión
del 16 de julio del 2013. Votaron
a favor Urviola, Álvarez y Eto. Este último retiró su firma del proyecto original y se adhirió a la imposición del MEF. El magistrado
Mesía objetó esta situación pues
el nuevo proyecto se presentó ese
día, no se les había dado tiempo
para estudiarlo y evaluarlo. Urviola, presionado por el Gobierno,
dispuso que se vote. Esa misma
tarde la resolución, con tres votos
a favor, ya estaba en la página web
del TC y publicitada oficialmente
para beneplácito del Gobierno.
Ante la presión por publicar la
resolución final, no se dan cuenta
que Mesía no había presentado su
voto singular respecto al nuevo
proyecto y se había retirado. Ante
ello, Urviola desesperado, autorizó que a la propuesta que Mesía
había firmado conjuntamente con
Eto, se le borre con liquid paper la
firma de Eto y que se le introduzca
términos no autorizados por Mesía, para aparentar que se trataba
de su voto singular. Urviola suplantó el voto de Mesía.
¿Quién puede justificar este acto? Óscar Urviola es presidente
del TC…

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