/La Prensa Austral, jueves 22 de agosto de 1996

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/La Prensa Austral, jueves 22 de agosto de 1996
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Marino Muñoz Lagos
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La poesía salta en las líneas que escribe el
contento o la tristeza que amenazan al poeta
Marcelo Novoa en su libro "Arte cortante" (Red
lntemacionaldelLibro,SantiagodeChile, 1996),
que parte de lo puramente onírico para alcanzar alturas que sólo se dimensionan con la
memoria.
En un breve libro de poco más de cincuenta
páginas nos entrega su mensaje en prosa y
verso, sobre asuntos del amor, de la vida y la
muerte. Veamos, por ejemplo la luz de esta
lectura en el fragmento que acompañamos:
"En la reiterada noche de los borrachos, una
pareja de amantes difumina sus contomos
bajo la lluvia; aves sobre el mar a oscuras,
girando como si volteasen páginas, imágenes
para descoser con el cuchillo de la peor certidumbre: hangar negro, que sé yo, hondo pulsar."
Marcelo Novoa nació en Viña del Mar en
1956 y es profesor de literatura. Junto a otros
escritores fundó en Valparaíso la Editorial
Trombo Azul. Ha publicado dos librosanteriormente: "LP, cuentos, 1987, y "Minorías", poemas en prosa, 1988. Más adelante publicará
una novela cuyo título no lo ha pensado.
Una novela de navegaciones y de amor
preconcebido, es la que nos ofrece el escritor
nacional Pablo Huneeus en las ciento sesenta
páginas de "Amor en alta mar" (Editorial Andrés Bello, Santiago de Chile, 1996). Se trata
de unir el puerto de Carelmapu con la isla
Mocha, a bordo de una goleta que bautizaron
Seneida, y cuya eficiencia no era del todo
conocida.
Los mares del sur, tranquilos o caprichosos, pusieron a prueba la pericia de sus tripulantes: Daniel y Ceciliagozaban de la aventura
y en el manejo de la goleta, don Romualdo era
un eficaz colaborador. Como escolares en
vacaciones realizaron la derrota sin mayores
peripecias que aquellas que suelen oponer el
mar o los vientos que soplan con fiereza en
estas alturas.
Según confesión final del escritor Pablo
Huneeus, esta novela la escribió veintisiete
años después de haber efectuadoesta travesía. Una libreta entregada por un amigo
estudiante indicaba los pormenores marinos
y técnicos de la navegación. Ponerle la sazón literaria y agregándole la niña de los
sueños, hicieron de la novela "Amor en alta
mar" una suerte de periplo encantado.
Al revés de este desafío marítimo y con
los pies bien puestos en la tierra, el poeta
Pablo Barattini Vidal nos entrega el libro de
poemas titulado "La hoguera"(Puerto Aisén,
1996), en cuyas páginas nos da a conocer
sus últimas composiciones, luego de haber
publicado sus poemas en "Los versos malditos" (1994), "La trampa" (1995) y "Epitafio"
(1995).
Este hombre soñador y terrenal combina
sus emocionescon lo que la vida le ha entregado a través de sus múltiples experiencias.
En las páginas iniciales de "La hoguera" nos
muestra su autobiografía lapidaria, "pero el
ingenioy la pacienciale llevanacavar un túnel
en el tiempo por donde finalmente logra escabullirse, huyendode la penitenciaríauniversitaria y perdiéndoseen la atemporalidad donde permanece prófugo hasta nuestros días."
Treinta y tantos poemasdan forma a este
libro que Pablo BarattiniVidal ha escrito en su
escondido y hermoso PuertoAisén, abriendo
generosamentelas puertas de su casa a los
forasteros, entre los que nos contamos nosotros.