REFLEXIONES SOBRE EL OFICIO DE SOCIÓLOGO

Transcripción

REFLEXIONES SOBRE EL OFICIO DE SOCIÓLOGO
REFLEXIONES SOBRE EL OFICIO DE SOCIÓLOGO.
Guillermo Páez Morales, Sociólogo.
[email protected]
Colaboración para El Trompe.
Al escribir, los sociólogos tendemos a hacerlo en un tono solemne esperando íntimamente que
nuestros posibles lectores comprendan lo profundo y complejo de nuestro tema de estudio o de la
reflexión particular que hacemos. En ocasiones como la presente, pretendo compartir algunas
reflexiones con mis pacientes lectores -al menos quienes se hayan tomado la molestia de seguirme
hasta aquí- en torno a nuestro oficio, por ahora mediante tres preguntas como abrebocas para
iniciar un diálogo que espero sea de interés para todos (o al menos para alguien).
1. ¿Acerté al estudiar Sociología?
Aunque la respuesta varía para cada quien en particular y llega a ser similar para muchas
profesiones, podemos intentar responderla ubicándola en dos alternativas: A) Una alternativa que
podemos denominar simple y B) una más elaborada.
A) ALTERNATIVA SIMPLE. En este caso las posibles respuestas incluyen infinitas posibilidades:
costos, disponibilidad, inclinaciones personales, presiones familiares (escasas en nuestro
caso), oportunidades laborales esperadas, factores personales (aptitudes, limitaciones),
entusiasmo e idealismo, deseos de transformar el mundo, querer ayudar a los
necesitados, entre otras más. Puede tomarse igualmente desde el sentido de vocación o
llamado1 (WEBER: 2007); por la utilidad de la misma (si se la coloca al nivel de otras áreas
del conocimiento y de la práctica profesional); por la necesidad del ejercicio profesional
particular; ante el interés de aportar algo a la sociedad en que se vive (presente y futura) y
otras razones de un gran abanico de posibilidades. Desde el punto de vista individual si lo
reflexionamos, lo más honesto sería que cada quien reflexione sobre “cómo uno llegó a
ser lo que es, antes que decir porqué, en nombre de cuál destino, proyecto o vocación”
(DUBET, 2012: 9) escogió su profesión.
B) ALTERNATIVA ELABORADA: Con respecto a esta opción, podemos decir con Lucas Rubinich
(en LAHIRE, 2006:25) que “la sociología es una de las raras ciencias que, para superar los
malentendidos, está obligada a pasar tanto tiempo explicando y justificando su actitud
como ofreciendo los resultados de sus análisis”2.
Si nos fijamos bien, cada uno podrá responder esta pregunta en cualquier de las alternativas lo
cual ayudará a cada quien en afirmarse en la opción que le parezca más adecuada.
1
Beruf entendida por Max Weber como profesión, vocación o llamado.
Si algún lector busca una respuesta más elaborada y profunda, remitimos a los textos indicados y a otros
como por ejemplo a BOURDIEU, CHAMBOREDON, PASERON. (2003) El oficio del sociólogo; NISBET, Robert
(1978) La sociología como forma de arte; o a manuales como los de GIDDENS, Anthony. (1991) Sociología.
Primera Parte; MACIONIS J.; PLUMMER, K. (1999) Parte 1, entre otros.
2
2. Estudiar sociología en Colombia.
Existen análisis de la historia y desarrollo de la sociología en Colombia, por lo que en vez de
repetirla, remitimos a algunos de ellos3 que analizan sus antecedentes y surgimiento como
disciplina académica. Esta aparece en el primer semestre del año 1959 simultáneamente en tres
universidades: Nacional, Javeriana y Pontificia Bolivariana, en años de cambio y agitación social,
intelectual, económica, religiosa y política. Desde entonces, las Facultades y Departamentos de
sociología se han mantenido activos, reactivándose algunas tras breves períodos de suspensión y
apareciendo varios nuevos.
De estas dependencias podríamos decir, mirándolas comparativamente que todas ellas compartes
contenidos académicos y curriculares semejantes en su parte básico (el núcleo de la disciplina) y
contenidos o énfasis específicos de acuerdo a la naturaleza de la institución a la que pertenecen.
Esto ha permitido que entre sus miembros (directivos, profesores, alumnos) se hayan establecido
diálogos, intercambios y colaboración permanente lo que ha enriquecido a la disciplina y ello
puede verse en actividades como Seminarios, Cátedras, Congresos, Encuentros que además de
denotar la vitalidad de una disciplina que cada vez tiene más auge en el país, permite ver con
optimismo el futuro de la misma que en algunas ocasiones se vio opacado por recelos mutuos
producto de desconocimiento entre los actores, sus acciones y logros, asuntos que se han
superado actualmente.
Un anhelo de los profesionales en sociología del país ha sido por largo tiempo lograr una mayor
organización gremial a través de una entidad legalmente constituida que ofrezca respaldo y
reconocimiento profesional a sus miembros (a través de la expedición de una ley de la posesión
de una tarjeta profesional que respalde la actuación de las y los sociólogos ante las entidades) tal
como lo poseen otras profesiones, tarea pendiente que tarde o temprano habrá que realizarse.
3. La práctica del profesional de la sociología.
Esta inquietud no es solo relacionada con nuestra profesión sino con muchas otras, si vemos los
resultados de la acción comparada con las expectativas que se hacen entre quienes las observan,
bien para ser parte de ellas o bien a la espera de sus actividades profesionales. Es además una
inquietud que tiene muchas respuestas posibles. Con respecto a la utilidad de la sociología,
propongo el siguiente párrafo extraído de la obra ya cita de DUBET (2012:10):
“…las sociedades modernas necesitan sociología porque son modernas, porque saben que
son consecuencia de su propia acción, porque el mundo se abrió, porque las culturas y
sociedades que se rozan cada vez más unas con otras deben conocerse y reconocerse todo
el tiempo”.
3
CATAÑO, Gonzalo. (1986) La sociología en Colombia: balance crítico. RESTREPO F. Gabriel. (2002)
Peregrinación en pos de Omega. ASOCIACIÓN COLOMBIANA DE SOCIOLOGÍA (1997) La sociología en
Colombia. Estado académico.
Respondida esta inquietud, podemos pasar a una segunda relacionada más con nuestra realidad
inmediata: ¿Sirve la sociología como profesión? La respuesta como dijimos es contundente: sí
sirve; en el caso de América Latina y de Colombia en particular, su necesidad es cada vez más
contundente. No quisiera aparecer solo como diciendo lo obvio, pero sabemos que es así. Lo que
en la actual situación se requiere en un reconocimiento mayor de la profesión no solo a nivel
público sino que el convencimiento debe empezar por nosotros mismos de los que es y representa
nuestra profesión y todo lo que implica la práctica de la misma4, convencimiento que implica
convencernos de nuestra función, la necesidad de estudiar esta globalizada sociedad mundial y
dentro de ella nuestra realidad colombiana que cambia rápidamente, que requiere prepararse
para una era de posconflicto después de décadas de luchas internas, que requiere nuevos y más
profundas propuestas y alternativas para su desarrollo, planes concretos y realizables para ser
realizados con nuestros recursos y nuestra cultura, entre otros.
Para concluir:
La propuesta inmediata que hago desde aquí es la de establecer un diálogo para intercambiar
ideas, dar opiniones, resolver inquietudes y hacer propuestas creativas que recojan -ese es su
valor- opiniones de profesores, alumnos y egresados así como de quien tenga interés por estos
temas, sin temor al que eventualmente caigamos en lugares comunes o que estas no sean
valoradas en su intención inicial. Este medio, el Boletín El Trompe, es un inicio que debemos
aprovechar.
BIBLIOGRAFÍA CITADA.
ASOCIACIÓN COLOMBIANA DE SOCIOLOGÍA (1997) La sociología en Colombia. Estado académico. Bogotá,
Errediciones.
BOURDIEU, CAMBOREDON, PASERON. (2003) El oficio del sociólogo. México, Siglo XXI.
CATAÑO, Gonzalo. (1986) La sociología en Colombia: balance crítico. Plaza y Janés.
DUBET, Françoise. (2012) ¿Para qué sirve realmente un sociólogo? Buenos Aires, Siglo XXI.
GIDDENS, Anthony. (1991) Sociología. Madrid, Alianza.
LAHIRE, Bernard (Dir.) (2006) ¿Para qué sirve la sociología? Buenos Aires, Siglo XXI.
MACIONIS J.; PLUMMER, K. (1999) Madrid, Prentice Hall.
NISBET, Robert (1978) La sociología como forma de arte. Madrid, Espasa-Calpe.
PAEZ MORALES, Guillermo. (2012) “Vivir la sociología”. Apuntes de Clase. Universidad Santo
Tomás.
RESTREPO F. Gabriel. (2002) Peregrinación en pos de Omega. Bogotá, Universidad Nacional de Colombia.
WEBER, Max. (2009) La ciencia como profesión. La política como profesión. MDRID, Espasa-Calpe.
4
Ver: PÁEZ MORALES; G. (2012) denominados “Vivir la Sociología”.

Documentos relacionados