CAPÍTULO 36 MONADOLOGÍA

Transcripción

CAPÍTULO 36 MONADOLOGÍA
Mónadas. Las Mónadas son los verdaderos átomos de la Naturaleza. Monadología.
CAPÍTULO 36
Libro tercero de spaXium-EUROAMERICANA EDITORES- copyright por Mágnum Astron
El hombre debe buscar lo que es y no lo que cree que
debería ser
Más vale el sereno concepto de un sabio que el eterno decir
de toda la humanidad
AHORA HABLAREMOS DE LO QUE EN FÍSICA ES
APOSTASÍA
MONADOLOGÍA
Tiene que haber sustancias simples puesto que las hay compuestas.
La Mónada (TETRAEDRO) es la única entidad simple a partir de la
cual se forman todas las aparentes partículas subatómicas,
incluyendo a los condicionales quarks y leptones, que ya se sabe
que no son las últimas sino que hay otras partículas más pequeñas
como los jets y otras que las componen… y así debe de ser
sucesivamente hasta llegar a:
Las Mónadas: los verdaderos átomos de la Naturaleza.
La monadología descubierta por los sabios hace miles de años
coincide exactamente con la ciencia de de los Tetraedros —medidos
en la escala de Planck— algo demasiado más pequeño que
cualquier partícula elemental prevista.
La misión de la Mónada es hacer que todos los eventos
físicos de la naturaleza sucedan.
En cada Monada o Tetraedro se encuentran siempre todas las leyes
físicas y todos los principios que
gobiernan la vida, con sus atributos
de conciencia voluntad, y la
capacidad
de
sentir
sensaciones.
La materia existe como
posibilidad dentro de la
conciencia y no al contrario.
El Tetraedro es un pedazo de
Universo hecho vida. Somos
parte de la gran una Unidad;
estamos conectados a todo el Universo; por tanto: No estamos
solos.
LA MÓNADA, no puede perecer, mutar o variar por ningún medio
físico: es inmutable. Es por esta cualidad que nuestro verdadero Ser
—el observador— no puede perecer por medios naturales como el
impacto de un meteoro, una explosión atómica, ni en el interior de la
estrella más caliente.
Tales eventos son estados naturales para las unidades simples las
cuales son, precisamente, las que originan todos los eventos
cósmicos y atómicos, sin que por ello experimenten ningún
cambio.
Por tan evidente razón, ninguna Mónada puede ser exterminada (o
muerta) por causa física alguna. Esto concuerda exactamente con el
Bhagabad Guita donde Krisnha dice que el cuerpo puede ser
muerto pero el alma no.
Obviamente el cuerpo físico es una proyección, una información y
puede desvanecerse quedando lo real: Aquello que originó la
proyección.
¿Cómo desafiar la muerte? —cual muerte, todas las criaturas son
eternas: quien sabe analizar el atardecer de su vida se da cuenta que
pronto viene un nuevo amanecer. Todos los seres se modifican a sí
mismos… unos evolucionan y otros involucionan.
La Mónada es el Ser individual dentro de la Unidad o Espacio
absoluto. Es el Ente que ve y escucha por medio de los sentidos.
TODAS SON EXACTAMENTE IGUALES… No envejecen aunque el
cuerpo cambie durante el transcurso de la vida
Por ese motivo siempre nos sentimos o nos sentiremos el mismo Ser
aunque nuestro cuerpo envejezca, enferme o llegue entrar
en un nuevo cuerpo, ya sea bacteria, animal o humano.
No importa los años ni los cambios tan drásticos que pueda tener el
cuerpo cuando pasa de niño, a joven o a viejo… en nuestro sentir
seguimos siendo los mismos: PRUEBA INEQUÍVOCA DE QUE
LA MATERIA NO ES LA QUE ORIGINA NUESTRO SER
CONCIENTE.
¿Que existe la reencarnación? Sin lugar a dudas: una persona de
90 años ha tenido al menos 9 cuerpos totalmente diferentes en su
vida… pero su Ser sigue siendo el mismo que cuando poseía el cuerpo
de un niño; o sea que ya reencarnó en el de un anciano.
No nos damos cuenta de los cambios de cuerpo porque se hace día a
día en porciones elementales. Pero, que hemos cambiado de cuerpo 0
sea reencarnado en esta misma fase de la existencia… ¡LO HEMOS
HECHO!
Nuestra Mónada —la cual es el Ente que somos verdaderamente—,
nunca cambia, nunca perece; pero se confunde con el cuerpo del cual
recibe la información exterior y, por este hecho, se involucra y se
apega a él.
La Mónada o alma individual, puede dejar de manifestarse cuando
por voluntad propia deja de vibrar; más no quiere decir que se
aniquile… simplemente deja de exteriorizarse en el Universo ilusorio
quedando en reposo en el Tetraedro que en sí Es…
…y en ese estado se identifica con
El Todo, como gota que después de
haberse evaporado deja su estado gaseoso
y cae al mar identificándose con el.
Cuando la Mónada deja de de revelarse en
este
universo
holográfico-fractárico,
ingresa de nuevo al Universo Cuántico no
sigue siendo afectada más por las leyes
físicas como la gravedad, ni las fuerzas
eléctricas o electrostáticas ni las
mecánicas ni termodinámicas.
Entra en lo que han llamado Nirvana, Non plus ultra o Samadi.
Al dejar de proyectarse mediante su energía intrínseca en el mundo
ilusorio, deja de existir para éste y se funde en el Espacio,
aparentemente vacío desde la perspectiva del universo material,
relativo e ilusorio.
EL INCOMPRENSIBLE ARCANO DE LA “CREACIÓN”
Y es aquí donde se resuelve el enigma más acuciante que
desde tiempos inmemoriales han tratado de resolver
esclarecidos pensadores, y sobre el cual se han tejido las
más descabelladas teorías, casi todas religiosas:
¿Quién creó el Universo?, ¿Cuándo?, ¿de qué lo creó?,
¿porqué lo creó ¿siempre ha existido?, ¿cuándo terminará,
es finito o infinito? Todas las preguntas caben aquí.
Lo importante del caso es que, escudriñando el misterio con la Teoría
spaXium, arroja una sola respuesta… la única posible, la
verdadera, y cualquier persona inteligente que se encuentre desligada
del fanatismo científico y el religioso —ambos extremos
viciosos— puede comprenderla, así de fácil:
EL UNIVERSO ILUSORIO LO
ESTAMOS
CREAMOS
NOSOTROS MISMOS cada vez
que la Mónada —que somos
nosotros—, por voluntad y
ansias de individualidad se
manifiesta desde su Tetraedro, y
emerge utilizando su propia
energía. La energía en el
Tetraedro viviente se llama
deseo.
Es ahí cuando los físicos
comprueban que del Espacio
inmanifestado
aparecen
y
desaparecen partículas cuánticas supuestamente materiales que se
suman a las ya existentes, producto de todos los seres que existen en
lo que llaman Creación, mas, son ellas las que están creando la
“Creación”.
La conclusión es que EL UNIVESO SE ESTA CREANDO Y
DESAPARECIENDO EN CONSTANTE AGITE… por tanto, nunca
comenzó, nunca terminará, un solo ser no lo hizo, tampoco
apareció de la nada, Y MENOS DE UNA VEZ como en una
absurda y polvorienta explosión.
El Universo carece de fecha de inicio y fin. SE
DESARROLLA EN UN ETERNO AHORA… y opera en un
presente continuo.
EL UNIVERSO ES EL RESULTADO DE LA VOLUNTAD
INDIVIDUAL
Es la suma de legiones de entes, que unidos en cúmulos
vibrantes de miríadas de Mónadas, desatan tensiones y
descansos de tensión en el Espacio, éstas se comunican
formando trenes de ondas de luz-radiación que al
enrollarse proyectan las evanescentes partículas.
Cada que un ser muere deja de proyectar el ladrillo de la
naturaleza material que le corresponde, y cada ser que nace
aporta una nueva ilusión al proyectado mundo apócrifo.
Más, las Mónadas —que siempre son— no dejan de ser en ambos
casos, permanecen impertérritas. Palabras sobran cuando la verdad
habla en el irrefutable idioma de la sencillez.
Aquí se acabaron todas las disertaciones sobre la creación o el fin del
Universo —ya era hora—, ¡pero surgió una perspectiva diferente
mediante la cual podemos separar conceptos muy arraigados sobre el
origen de las cosas.
LA MATERIA SE CREA Y SE DESTRUYE… la energía no se crea
ni se destruye (ya sabemos que existe la energía y la materia
no)… pero no necesariamente la energía —que es
real— se tiene que manifestar:
La energética llama está latente en la cabeza de la cerilla y permanece
latente hasta que es despertada tras un roce. La energía, como tigre
dormido, reposa inofensiva en la bala; mas puede ser despertada su
destructora potencia con un inofensivo gatilleo.
Toda la energía del Universo duerme en las Mónadas como
energía interna y cada una guarda su parte, hasta que es
despertada por la voluntad individual y conveniencia. Lo hace
produciendo una mayor y una menor presión entre sus umbrales de
tensión… tal excitabilidad es su idioma natural o forma de
manifestarse.
Al vibrar se forma una onda que se propaga como información de
Tetraedro en Tetraedro: entre miríadas de ellos forman un tren de
ondas; éstos se enrollan en figuras de luz radiante y saltan a la
existencia material como partículas.
TRAYECTORIAS REALES DURANTE LA FORMACIÓN DE
PARTICULAS EN UNA CAMARA DE BURBUJAS EN EL
ACELERADOR DE HADRONES
Ahí es cuando los físicos cuánticos notan como aparecen partículas de
la “nada” y tiende a enrollarse; algunas otras pueden desaparecer
en el Espacio ignoto: la materia se está construyendo y
desapareciendo en forma irregular de acuerdo a voluntades
monadales.
Ese incesante desparecer y resurgir es lo que hace que el Universo
sea inestable. Cada vez que ingentes estratos de materia se forman,
lanzan mareas gravitacionales que afectan el movimiento
de planetas y galaxias; aparecen cúmulos globulares,
estrellas estallan y otras se comprimen.
EL UNIVERSO ESTÁ EN EBULLICIÓN, prueba inequívoca que
algo brota y desaparece haciéndole ajustar constantemente sus
fuerzas gravitacionales y termodinámicas.
Si en el Universo no estuviera en constante “creación y destrucción”,
desde hace miríadas de eones ya se hubiese aquietado por completo
por acción de las leyes termodinámicas que todo lo compensan:
los planetas estarían fríos, las estrellas no irradiarían su luz y las
Galaxias fueran cúmulos absolutamente esféricos.
EL
UNIVERSO
ILUSORIO
SE
ESTA
CREANDO
Y
DESAPARECIENDO EN CONSTANTE CAMBIO… MAS, AL SER
ILUSORIO, NO ES PROPIAMENTE UNA CREACIÓN SINO UNA
PROYECCIÓN HOLOGRÁFICA, CINEMÁTICA Y FRACTÁRICA
desde el mundo cuántico.
todo lo que existe, todo lo que vemos es una proyección, no
una realidad.
¿Ante tan desconcertantes descubrimientos, qué podemos pensar?
¿Es real o irreal el mundo?
Si es una proyección fantasmagórica, ¿al quedarnos quietos
frente a una locomotora en marcha realmente nos mataría?
Obviamente: un fantasma matando a otro fantasma, eso
ocurriría… mas, la Mónada que es real permanecería inalterable.
¿Qué es la
realidad?
¿Alguna
vez
has
tenido un sueño del
que estabas seguro
que era una realidad?
¿Qué
tal
si
no
hubieses
podido
despertar
de
ese
sueño,
y
cómo
hubieses entablado la
diferencia entre el
mundo de los sueños
y el mundo de la
realidad?
Conclusión
La verdad es que esta vida no es nuestra verdadera vida, y nuestro
cuerpo no es nuestro verdadero Ser.
Existe otra realidad —que si es la verdadera— y es la que todos los
buscadores sinceros tratamos de encontrar. No obstante,
Si no renunciamos a lo que creemos ser nunca
llegaremos a ser lo que realmente somos.
Auque la vida no es un problema para ser resuelto sino un misterio
para ser vivido, en tanto el mundo siga girando, y ya que la vida
presente es el sueño del Espíritu, debemos aprender a
desenvolvernos dentro de esta ilusión y estar atentos y
receptivos:
Porque “LOS SUEÑOS SON REALES... MIENTRAS DURAN”
CAPÍTULO TOMADO DE LOS LIBROS:
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