2. ORDENANZA DE CONSAGRACIÓN Esto es lo que les harás

Transcripción

2. ORDENANZA DE CONSAGRACIÓN Esto es lo que les harás
Estudios del Maestro Ezequiel Ataucusi Gamonal
2. ORDENANZA DE CONSAGRACIÓN
Esto es lo que les harás para consagrarlos, para que sean mis
sacerdotes: Toma un becerro de la vacada, y dos carneros sin
defecto. Ex. 29:1.
Luego tomarás del carnero la grosura, y la cola, y la grosura que
cubre los intestinos, y la grosura del hígado, y los dos riñones, y la
grosura que está sobre ellos, y la espaldilla derecha; porque es
carnero de consagración. Ex. 29:22.
Y tomarás el pecho del carnero de las consagraciones, que es de
Aarón, y lo mecerás por ofrenda mecida delante de Jehová; y será
porción tuya. Ex. 29: 26.
Después tomó aquellas cosas Moisés de las manos de ellos, y las
hizo arder en el altar sobre el holocausto; eran las consagraciones
en olor grato, ofrenda encendida a Jehová. Lv. 8:28.
Y tomó Moisés el pecho, y lo meció, ofrenda mecida delante de
Jehová; del carnero de las consagraciones aquella fue la parte de
Moisés, como Jehová lo había mandado a Moisés. Lv. 8:29.
3. VESTIRÁS A AARÓN
Y las vestiduras santas, que son de Aarón, serán de sus hijos
después de él, para ser ungidos en ellas, y para ser en ellas
consagrados. Ex. 29:29.
Después hizo que trajeran el otro carnero, el carnero de las
consagraciones, y Aarón y sus hijos pusieron sus manos sobre la
cabeza del carnero. Lv. 8:22.
4. COMERÁS DEL CARNERO DE LAS CONSAGRACIONES
Y comerán aquellas cosas con las cuales se hizo expiación, para
llenar sus manos para consagrarlos; más el extraño no las comerá,
porque son santas. Ex. 29:33.
Y tomarás el carnero de las consagraciones, y cocerás su carne en
lugar santo. Ex. 29:31.
Y dijo Moisés a Aarón y a sus hijos: Hervid la carne a la puerta del
tabernáculo de reunión; y comedla allí con el pan que está en el
canastillo de las consagraciones, según yo he mandado, diciendo:
Aarón y sus hijos la comerán. Lv. 8:31.
Y si sobrare hasta la mañana algo de la carne de las
consagraciones y del pan, quemarás al fuego lo que hubiere
sobrado; no se comerá, porque es cosa santa. Ex. 29:34.
5. NO SALDRÁN DEL TABERNACULO
De la puerta del tabernáculo de reunión no saldréis en siete días,
hasta el día que se cumplan los días de vuestras consagraciones;
porque por siete días seréis consagrados. Lv. 8:33.
Ni saldrá del santuario, ni profanará el santuario de su Dios; porque
la consagración por el aceite de la unción de su Dios está sobre él.
Yo Jehová. Lv. 21:12.
Ni aun por su padre ni por su madre, ni por su hermano ni por su
hermana, podrá contaminarse cuando mueran; porque la
consagración de su Dios tiene sobre su cabeza. Nm. 6:7.
6. NINGUNO ENTRE A LA CASA DE JEHOVA
Y les dije: Vosotros estáis consagrados a Jehová, y son santos los
utensilios, y la plata y el oro, ofrenda voluntaria a Jehová Dios de
nuestros padres. Esd. 8:28.
Y ninguno entre en la casa de Jehová, sino los sacerdotes y levitas
que ministran; éstos entrarán, porque están consagrados; y todo el
pueblo hará guardia delante de Jehová. 2 Cr. 23:6.
LA EXPIACION
ARTÍCULO 40.- Definición de Expiación. La palabra hebrea para
expiar es ka·fár o kaphar, significaba en un principio “cubrir” o,
“borrar” los pecados.
El hombre tiene necesidad de que se le perdone o expíen los
pecados debido al pecado heredado, Sal 51:5; He aquí, en maldad
he sido formado, Y en pecado me concibió mi madre. Ec 7:20;
Ciertamente no hay hombre justo en la tierra, que haga bien y
nunca peque. 1 R. 8:46; Si hubieren pecado contra ti, (porque no
hay hombre que no peque) Ro. 3:23, Por cuanto todos pecaron, y
están destituidos de la gloria de Dios; del que sólo el hombre es
responsable, no Dios. Dt. 32:4,5. Él es la Roca, cuya obra es
perfecta, Porque todos sus caminos son rectitud: Dios de verdad, y
ninguna iniquidad en él: Es justo y recto.
La corrupción no es suya, a sus hijos le mancha de ellos.
Generación torcida y perversa. Adán perdió la vida eterna en
perfección, y transmitió el pecado y la muerte a su generación. Ro.
5:12. 1 Co. 15:21,22.
De consiguiente, vino la reconciliación por uno, así como el pecado
entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, y la
muerte así pasó a todos los hombres, pues que todos pecaron.
Para hacer expiación por lo que Adán y su generación había
perdido, tenía que proveerse una ofrenda por el pecado que tuviera
el valor exacto de una vida humana perfecta. Y casi todo es
48
purificado según la ley con sangre; y sin derramamiento de sangre
no se hace remisión. Entonces Moisés tomó la sangre, y roció
sobre el pueblo, y dijo: He aquí la sangre de la alianza que Jehová
ha hecho con vosotros sobre todas estas cosas. He. 9:22. Mt.
26:28. Ex. 24:8.
Sacrificios de expiación. Dios mandó a los israelitas que
ofrecieran sacrificios como ofrendas por el pecado para hacer
expiación. Lv. 16:3. Con esto entrará Aarón en el santuario: con un
becerro por expiación, y un carnero en holocausto.
El sacerdote de Israel ofrecía sacrificios de animales para la
purificación del santuario, a favor de sí mismo, de los demás
sacerdotes y levitas y por la nación de Israel. Los sacrificios de
animales tenían que ser sin tacha, lo que indicaba que debía ser
perfecto. Además, el que se diera la vida de la víctima y se
derramara su sangre muestra el valor que tenía la expiación.
Porque la vida La sangre fue dada para expiar vuestras personas
de la carne en la sangre está: y yo os la he dado para expiar
vuestras personas sobre el altar: por lo cual la misma sangre
expiará la persona. Lv. 17:11.
1. LEY DE LA EXPIACION POR EL PECADO
Habla a Aarón y a sus hijos, diciendo: Esta es la ley de la expiación:
en el lugar donde será degollado el holocausto, será degollada la
expiación por el pecado delante de Jehová: es cosa santísima. Lv.
6: 25.
Cuando alguna persona cometiere falta, y pecare por yerro en las
cosas santificadas a Jehová, traerá su expiación a Jehová, un
carnero sin tacha de los rebaños, conforme a tu estimación, en
siclos de plata del siclo del santuario, en ofrenda por el pecado. Lv.
5:15.
Todo lo que en su carne tocare, será santificado; y si cayere de su
sangre sobre el vestido, lavarás aquello sobre que cayere, en el
lugar santo. Lv. 6:27.
Y pagará aquello de las cosas santas en que hubiere pecado, y
añadirá a ello el quinto, y lo dará al sacerdote: y el sacerdote hará
expiación por él con el carnero del sacrificio por el pecado, y será
perdonado. Lv. 5:16.
Entonces Moisés tomó la sangre, y roció sobre el pueblo, y dijo: He
aquí la sangre de la alianza que Jehová ha hecho con vosotros
sobre todas estas cosas. Ex. 24:8.
Y ellos dijeron: Si enviáis el arca del Dios de Israel, no la enviéis
vacía; más le pagaréis la expiación: y entonces seréis sanos, y
conoceréis por qué no se apartó de vosotros su mano. 1 S. 6:3.
Y casi todo es purificado según la ley con sangre; y sin
derramamiento de sangre no se hace remisión. He. 9:22.
Más no se comerá la expiación alguna, de cuya sangre se metiere
en el tabernáculo del testimonio para reconciliar en el santuario: al
fuego será quemada. Lv. 6: 30.
Dando en esto a entender el Espíritu Santo, que aún no estaba
descubierto el camino para el santuario, entre tanto que el primer
tabernáculo estuviese en pie. He. 9:8.
Lo cual era figura de aquel tiempo presente, en el cual se ofrecían
presentes y sacrificios que no podían hacer perfecto, cuanto a la
conciencia, al que servía con ellos. He. 9:9.
Consistiendo sólo en viandas y en bebidas, y en diversos
lavamientos, y ordenanzas acerca de la carne, impuestas hasta el
tiempo de la corrección. He. 9:10.
Mas estando ya presente Cristo, pontífice de los bienes que habían
de venir, por el más amplio y más perfecto tabernáculo, no hecho
de manos, es a saber, no de esta creación. He. 9:11.
(Porque los otros cierto sin juramento fueron hechos sacerdotes;
mas éste, con juramento por el que le dijo: Juró el Señor, y no se
arrepentirá: Tú eres sacerdote eternamente Según el orden de
Melchisedec). He. 7:21.
2. OFRENDA DE EXPIACION POR LA CULPA (CONCIENCIA)
Las ofrendas por la culpa también eran ofrendas por causa del
pecado, pues si no se peca no se incurre en culpa alguna. Se
presentaban con motivo de pecados especiales por los que una
persona había contraído culpabilidad, y diferían ligeramente de las
demás ofrendas por el pecado en que al parecer servían para
satisfacer o restablecer un derecho. O bien se había violado un
derecho de Jehová, o un derecho de su santa nación; por lo tanto,
la ofrenda por la culpa se presentaba para justificar a Jehová por el
derecho que se había violado, recuperar ciertos derechos de pacto
para el pecador arrepentido y obtener alivio del castigo por su
pecado.
2.1 Las personas habían pecado sin darse cuenta, sin pensar o por
descuido, y desearon corregir el mal cuando se llamó se les
llamó la atención del asunto. Por otro lado, los pecados de que
se trataban, no eran pecados cometidos sin darse cuenta o por
descuido, sino pecados debidos a las debilidades y los deseos
carnales, no a una rebelión deliberada y presuntuosa contra
Dios.
Y HABLÓ Jehová a Moisés, diciendo. Lv. 6:1.
Cuando una persona pecare, e hiciere prevaricación contra Jehová,
y negare a su prójimo lo encomendado o dejado en su mano, o bien
robare, o calumniare a su prójimo. Lv. 6:2. Ex. 22:7-13.