Diagnóstico Pulsátil

Diagnóstico Pulsátil
Esther Frankel
Diagnóstico Pulsátil
Esther Frankel
En Biosíntesis observamos la historia evolutiva del cuerpo, comprendiendo el significado de
sus capas germinativas y
su desarrollo, desde la concepción en adelante, en términos de
la morfología dinámica de la persona que pide ayuda terapéutica. Analizamos y buscamos
comprender esta persona, desde su proceso formativo a las estructuras corporales; desde la
historia de la vida intrauterina a la morfología dinámica del cuerpo.
1. Morfologia Dinámica
Las tres capas embrionarias (endodermo, mesodermo y ectodermo) se diferencian y forman,
respectivamente las tres regiones principales del cuerpo: abdomen, columna y cabeza.
Los órganos internos del tronco, pulmones y órganos abdominales pueden ser considerados
la principal reserva de energía del endodermo.
El centro organizacional de los principales músculos y de la estructura ósea del esqueleto,
es la columna, con sus extensiones en los brazos, piernas y cabeza. La columna y estos
miembros son los principales órganos ejecutivos del mesodermo.
Los principales órganos ectodérmicos con excepción de la piel están concentrados en la
cabeza: ojos, oídos, nariz, lengua, cerebro.
1.1 Las capas germinativas del embrión
En el centro del cuerpo está el tubo gastrointestinal, formado a partir del endodermo.
Embriológicamente, los pulmones son una derivación germinativa de ese tubo. Las funciones
respiratorias y del sentimiento pueden ser consideradas como las actividades más centrales e
internas del cuerpo. Es por medio de esos sistemas de órganos que el cuerpo genera energía para
mantenerse vivo. En terapia queremos que una persona se vuelva más "centrada", le pedimos por
ejemplo, que se acueste y tome consciencia de su respiración y de los movimientos
peristálticos de sus vísceras.
La segunda capa germinativa del cuerpo se forma a partir del mesodermo. El sistema
cardiovascular y los sistemas esqueleto-musculares son derivados de esa capa.
Ella es responsable de los niveles de presión de los fluidos en el cuerpo, y del grado de tensión
y relajamiento muscular. El corazón bombea sangre a través del cuerpo para cárgalo de energía
disponible para la acción. Los músculos, durante los movimientos hechos por el cuerpo, como
andar o correr, descargan esas acciones y la acción rítmica de esos músculos desempeña el papel
de bomba venosa para auxiliar la sangre a volver al corazón. Las posiciones de "estrés" bioenergéticas actúan inicialmente sobre esta capa, tonificando músculos flácidos, relajando los
tensos, y mejorando el flujo circulatorio a través del cuerpo, en un proceso llamado "Grounding".
La tercera capa germinativa está formada a partir del ectodermo. Ella constituye el tubo más
externo, esto es: la piel. La información que percibe la piel, los órganos sensoriales y la
totalidad del sistema nervioso, llega al cerebro. Éste gobierna el sistema perceptivo, el flujo de
información que entra y sale del cuerpo.
El trabajo terapéutico que estimula la conciencia sensorial, el contacto de ojos, y las maneras de
encontrarnos los unos a los otros es llamado por Boadella "Facing". Según Keleman hay un
salto cualitativo cuando quedamos erectos y enfrentamos el mundo con nuestra parte delantera
del cuerpo; quedamos más sensibles y discriminados. La posición cara a cara en el acto del amor
expresa esta oportunidad ampliada de maximización del contacto.
Aunque en el cuerpo ya formado y completo, las capas embrionarias están organizadas en esta
secuencia, las camadas no se desarrollan de esa manera.
El ectodermo y el endodermo se forman como los dos lados del disco embrionario. El ectodermo
empieza a desarrollarse antes, con el desdoblamiento de la parte de atrás, la cual forma en su
inicio, el canal neuronal. Podemos justificadamente considerar los sistemas ectodérmicos como
los más primitivos en la orden de importancia durante el desarrollo. Los tejidos del mesodermo
son los últimos a formarse en esta secuencia.
Podríamos decir que la capa endodérmica corresponde al proyecto de la vida, la capa
ectodérmica al proyecto espiritual de la persona y que la capa mesodérmica es la estructura, los
adoquines
para
que
estos
proyectos
se
realicen
en
esta
vida.
2. Impedimentos del flujo energético y sus consecuencias en la coraza de los grandes
contenedores de energía.
Según Boadella, si concordásemos con Freud, diríamos que el origen de la neurosis ocurre en el
período edipico. Con Melanie Klein buscaríamos el origen en el primer año de vida del niño o
con Frank Lake (1988) y Francis Mott buscaríamos su origen en la vida intra uterina. Pero lo
que realmente nos interesa aquí es que en algún momento de la evolución del ser humano existe
una quiebra de la unidad del organismo. Esta perdida de la unidad afecta la integración funcional
de las tres capas germinativas del cuerpo.
2.1 Reservas, flujos y puentes. Formación de los Cortes.
Boadella hace la distinción de tres tipos de centros de reservas energéticas: el centro de reservas
abdominal – pélvico, el centro muscular y el centro cerebral.
1- Centro de reservas abdominal – pélvico
Este reservorio incluye la barriga, las nalgas y los órganos de descarga genitales. La intensidad
de la descarga genital depende de cuanta energía puede ser acumulada en este centro. Como
ejemplo de este disturbio en este punto podemos citar: colitis ulcerativa crónica y colitis
espásmica crónica. Gerda Boyesen (Boyesen, M.L. 1974) en su trabajo con la psicoperistalsis
estudió mucho
este reservorio, describiéndolo como sistema abierto o cerrado. Según esta
autora las vísceras pueden absorber y almacenar tensión nerviosa.
2- Centro de reservas musculares
Este reservorio incluye músculos y tejidos, presión osmótica de los fluidos del cuerpo en los
tejidos musculares, en los procesos hipertónicos e hipotónicos. Los músculos pueden volverse
tensos cuando están conscientemente sosteniendo el impulso, y la persona, en este caso siente la
tensión en los músculos.
3- Centro de reservas cerebral
El cerebro y la cabeza contienen impulsos poderosos, examinan y evalúan la descarga muscular.
Según Rossi, (1993) uno de los sucesores de Milton Erikson, en el día a día el cerebro trabaja
información que vivenciamos en forma de palabras, imágenes y emociones en los impulsos
neuronales del córtex cerebral. Algunos de esos impulsos neuronales son entonces transformados
en hormonas en el sistema límbico-hipotalámico-pituitario, la base del cerebro, que opera como
un eslabón de comunicación mente-cuerpo.
Esas hormonas actúan entonces como "mensajeros moleculares" que atraviesan la corriente
sanguínea, donde pueden captar "receptores" en todas las células del cuerpo. Este sistema
mensajero receptor de moléculas (llamado tradicionalmente de sistema "neuro endocrinológico"
en los manuales de medicina) es lo que actualmente se reconoce como eslabón de comunicación
que carga y transporta información entre los indicadores ambientales, nuestro cerebro y nuestro
cuerpo, hasta el nivel celular.
2.2 Los grandes bloqueadores: nuca, garganta y diafragma
La nuca, la garganta y el diafragma (figura 1) son los tres centros reserva de energía entre los
cuales puede haber una mayor conjunción (puentes) o disfunción (bloqueos).
Figura 1 – Los grandes bloqueadores: garganta, nuca y diafragma
La cabeza está conectada a la columna por la base del cuello. Si el cuello está tenso el flujo de
conexión entre el ectodermo y el mesodermo queda interrumpido. Hay una disociación entre el
pensamiento y la acción. Si una cantidad más grande de energía queda retenida arriba del
bloqueo en el cuello, hay una tendencia de una mayor identificación con el pensamiento en
detrimento de la acción. En un caso extremo, eso ocasionaría un patrón de comportamiento
compulsivo u obsesivo. La persona obsesiva pierde un tiempo enorme planeando acciones, pero
la energía que la haría moverse está presa en la cabeza. El relajamiento de las tensiones del
cuello normalmente permite que la actividad corra por la columna en la forma de movimientos
expresivos. Muchos dolores de cabeza son generados por tensiones en el cuello y pueden ser
aliviados cuando la energía es distribuida.
Si la energía es retenida debajo del bloqueo del cuello, puede haber una hiperactividad sin un
planeamiento previo de las acciones, un típico patrón de movimiento impulsivo. El cuerpo puede
estar sobrecargado mientras la cabeza recibe una carga insuficiente de energía. La persona no
piensa. El relajamiento de la tensión del cuello permite que la energía fluya del cuerpo para el
rostro, ojos, voz y cerebro, ocasionando un mayor reflejo y consecuente comunicación.
La unión entre la cabeza y el abdomen está en la garganta. Aquí, la región ectodérmica de la
cabeza se une a la región endodérmica del abdomen. El pensamiento y el sentimiento se integran
a través de la función expresiva de la voz: lenguaje exploratorio fluido, distinto del lenguaje
explicativo, nivelado y mecánico.
Cuando un niño aprende a engullir sus sentimientos, la garganta bloquea las acciones para
mantener los sentimientos presos. La energía emocional queda presa en el tronco y no tiene
válvula de escape para el rostro. Una persona así siente la presión de las emociones fuertes, pero
también siente que se desprestigiara si muestra esas emociones. El rostro se mantiene impasible,
sin expresión, contrastando con la presión emocional interna. El caso opuesto ocurre cuando
mucha emoción es expresada a través del rostro, pero poco contacto es mantenido con el centro
del cuerpo. Es como si la emoción fuese devuelta para aliviar la presión interna.
El patrón de comportamiento de engullir emociones y el no permitir que ellas se expresen en el
rostro es típicamente masoquista. El patrón de bombear la energía para la voz y para el rostro es
típicamente histérico, pero una persona en un estado de histeria puede preferir chillar en vez de
expresar sus sentimientos a través del lenguaje, con su nivel superior de percepción del ego. Así,
el trabajo de disolver el bloqueo de la garganta puede ayudar a la persona que engulle sus
sentimientos en vez de dejarlos subir como una catarsis; y, en el caso de la persona que es "hipercatártica", ayudar a evidenciar las funciones integradoras del lenguaje.
La tercera unión primaria del cuerpo es aquella existente entre la columna y el abdomen, entre el
eje mesodérmico de la columna y la energía endodérmica del tronco. El puente es el diafragma,
que es la principal bomba respiratoria del cuerpo. Cuando el diafragma está libré, tiene la
función de ser el principal regulador de la respiración y, también, hace un masaje efectivo en los
órganos internos. El diafragma está anclado en la columna a través de la vértebra lumbar
superior. Un diafragma tenso actúa como una cuerda atada a la espina y así la espina siente que
está siendo estirada. Eso quiebra la integración entre la respiración y el movimiento. Para el niño
patear, dar patadas, es respirar y respirar es dar patadas.
Una vez más existen dos patrones de ruptura. En uno de ellos la persona se mueve
mecánicamente con poca emoción y con poco cambio visible en la respiración. En el patrón
opuesto, la persona aumenta el ritmo de su respiración, normalmente en un estado de ansiedad,
pero no encuentra una forma de traducir la energía, movilizada por la respiración, en
movimiento. La respiración es hiperactiva y el sistema muscular es poco activo. Eso muchas
veces ocurre con la oxidación excesiva de la sangre.
Los tres puentes son la nuca, la garganta y el diafragma. El diafragma puede ser considerado
como la parte de abajo del cuello, embriológicamente se origina allí y crece para abajo durante el
desarrollo fetal. El nervio frénico que controla el diafragma pasa por la 3ª y 4ª vértebra cervical.
El relajamiento del cuello y la movilización de los tejidos de esa región son normalmente
seguidos de relajamiento del diafragma.
Si la energía queda estancada en esos reservorios, sufre estancamiento y resistencia a descargarse,
encontraremos tres tipos de coraza: coraza cerebral, coraza muscular y coraza visceral.
2.3 Coraza Cerebral, Coraza Muscular y Coraza Visceral
En la Biosíntesis reconocemos tres formas de coraza:
a) Coraza visceral
Quiebra o disfunción en la peristalsis o en la respiración. Tendencia de hiper ventilación o hipo
ventilación y a un sistema cerrado en el abdomen (síndrome de vísceras irritadas). Formas
extremadas, disposición para asma o colitis.
b) Coraza Muscular o coraza de los Tejidos
El tonos muscular puede sufrir disturbio en dos direcciones: hipotonía (flaqueza, falta de carga
energética) o hipertonía (aprieto, carga en exceso). En casos extremos habrá tendencias para
dolores reumáticos o enfermedades cardiovasculares (hipertensión, tensión cardiaca). Según
Lowen (1977) sólo existe este tipo de coraza en los caracteres rígidos, o en estructuras de
carácter que incluyen, como parte de su mecanismo neurótico una habilidad de disminuir la
sensibilidad al dolor. Esto excluye todas las estructuras pre-genitales.
c) Coraza Cerebral
Puede manifestarse en la forma de disturbios de los ritmos cerebro-espinales, o de disturbios de
los procesos de carga bio-eléctrica del cerebro (corriente trans-encefálica), o del flujo de las
hormonas del cerebro. Puede ser vista como si fuesen disturbios de la visión y del contacto
ocular. La tendencia para el pensamiento obsesivo o para el pensamiento esquizofrénico
desordenado serán serias manifestaciones de la coraza cerebral. Y, más específicamente las
corazas:
- Coraza ectodérmica cerebral
El esquizoide con su énfasis en el pensamiento tiende a desarrollar una coraza ectodérmica
cerebral.
- Coraza ectodérmica cutánea
En el histérico su hambre de toque es grande, tiende a desarrollarse una coraza ectodérmica
cutánea: "toca mi piel y demuéstrame que estoy vivo".
3. Embriología y Sistema Nervioso
A pesar de que el sistema nervioso tiene su origen en el ectodermo, el ser humano tiene tres
sistemas nerviosos principales, cada uno de los tres sistemas parece tener una relación funcional
con las capas embrionarias y la interacción de estos sistemas puede ser usada como base para la
discriminación caracterológica.
1- Sistema Vegetativo
Regula el flujo de la vida emocional. Se separa en simpático (desgaste de la energía)
y parasimpático (recuperación de la energía).
Una persona bajo la influencia del simpático tiene tendencia a sobrecargarse (over-charge), ser
explosivo e impulsivo. De otro modo, una persona bajo la influencia del parasimpático tendrá
resistencia a construir una carga y confrontarse en una crisis, tendrá tendencia a flaquear,
pasividad, retirada del conflicto y tendrá formas más extremas a la depresión.
2- Sistema Sub-cortical o Extra-piramidal
Regula la postura. Cuando el tonos muscular es hipertenso, el cuerpo es llevado a la acción y es
rígidamente defendido contra el colapso. La persona está identificada con la acción y el mundo
material. Alternadamente cuando el tono muscular es hipotónico, el cuerpo se sentirá vago y
mostrará tendencia a flaquear o colapsar. La falta de confianza en el "ground" puede llevar a la
tendencia para una vida imaginativa súper desarrollada, acoplada a un sentido olvidado de la
realidad externa.
3- Sistema Sensorial Cortical
Regula la formación de límites. La persona con limites flacos (under-bound) tendrá dificultad
para impedir, discriminar el estímulo sensorial que entra. El o ella serán fácilmente invadidos
con información (visión, sonido, sentimientos de los demás, influencias psíquicas). Tendrá una
tendencia a focalizarse de menos. La persona con excesos de limites (over-bound) no dejará que
una impresión no deseada llegue a ella y desarrollará una forma de vida obsesiva y focalizada en
exceso.
Según la Biosíntesis, podremos clasificar los diferentes caracteres a nivel de la combinación del
desequilibrio y equilibrio entre esos tres sistemas vistos desde arriba (figura 2).
Figura 2 – Patrones pré-natales del carácter
Joyce McDougall también habla de histeria arcaica, hablando del conflicto del derecho de existir, más
que sobre el derecho a las satisfacciones libidinales normales de la vida adulta. Aquí, las ansiedades
están conectadas al temor de perder su identidad subjetiva o hasta la vida.
Bibliografía
Boadella, D. Dynamic Morphology. in Embryology and Therapy, Collected papers from Energy and
Character. Abbotsbury Publications, Dorset, November, 1984.
Boadella, D. Correntes da Vida: Uma introdução à Biossíntese, Editora Summus, São Paulo, 1992.
Boyesen, M.L., Psycho-Peristalsis: The abdominal Release of Nervous Tension, Energy and Character,
Vol. 5, No 1, 1974.
Keleman, S. The Human Ground - Sexuality, Self and Survival. Center Press, Berkeley, 1975.
Lake, F. Clinical Theology. London, Darton. Longman and Todd Ltd, London 1988.
Lowen, A., O Corpo em Terapia. Editora Summus, São Paulo, 1977.
McDougall, J., Teatros do Corpo – O Psicossoma em Psicanálise, Ed. Martins Fontes, Julho,
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Rossi, E. L., The psychobiology of mind-body healing - New concepts of therapeutic hypnosis. Springer
Verlag, 1993.