Leer más… - La Presentacion
Transcripción
Leer más… - La Presentacion
. ACTO PENITENCIAL Tu que has puesto la salvación del género humano en el árbol de la Cruz. SEÑOR TEN PIEDAD Tu que padeciste por nosotros para que sigamos tus huellas CRISTO TEN PIEDAD Tu que, cargado de nuestros pecados, subiste al leño para que nosotros, muertos al pecado, vivamos en la justicia. SEÑOR TEN PIEDAD ORACIÓN COLECTA Señor, Padre nuestro, nos has convocado esta mañana para celebrar aquella misma memorable Cena en que tu Hijo antes de entregarse a la muerte, confió a la Iglesia el banquete de su amor, el sacrificio nuevo de la Alianza eterna; te pedimos que la celebración de estos santos misterios nos lleve a alcanzar plenitud de vida y de amor. Por nuestro Señor Jesucristo. Amén. LECTURA DE LA PALABRA (Jn 13, 115) Jesús lava los pies a sus discípulos 13 Antes de la fiesta de la Pascua, sabiendo Jesús que su hora había llegado para pasar de este mundo al Padre, habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el fin . 2 Y durante la cena, como ya el [a] diablo había puesto en el corazón de Judas Iscariote, hijo de Simón, el que lo entregara, 3 Jesús, sabiendo que el Padre había puesto todas las cosas en sus [b] manos, y que de Dios había salido y a Dios volvía, 4 se levantó* de la cena y se quitó* su manto, y tomando una toalla, se la ciñó. 5 Luego echó* agua en una vasija, y comenzó a lavar los pies de los discípulos y a secárselos con la toalla que tenía ceñida. 6 Entonces llegó* a Simón Pedro. Este le dijo*: Señor, ¿tú lavarme a mí los pies? 7 Jesús respondió, y le dijo: Ahora tú no comprendes lo que yo hago, pero lo entenderás después. 8 Pedro le contestó*: ¡Jamás me lavarás los pies! Jesús le respondió: Si no te lavo, no tienes parte conmigo. Simón Pedro le dijo*: Señor, entonces no sólo los pies, sino también 9 las manos y la cabeza. 10 Jesús le dijo*: El que se ha bañado no necesita lavarse, excepto los pies, pues está todo limpio; y vosotros estáis limpios, [c] pero no todos. 11 Porque sabía quién le iba a entregar; por eso dijo: No todos estáis limpios. Jesús, ejemplo supremo de humildad 12 Entonces, cuando acabó de lavarles los pies, tomó su manto, y sentándose[d] a la mesa otra vez, les dijo: ¿Sabéis lo que os he hecho?13 Vosotros me llamáis Maestro y Señor; y tenéis razón[e], porque lo soy.14 Pues si yo, el Señor y el Maestro, os lavé los pies, vosotros también debéis lavaros los pies unos a otros. 15 Porque os he dado ejemplo, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis. ORACIÓN DE LOS FIELES: CELEBRANTE: Queridos hermanos y hermanas, antes de celebrar la Cena del Señor, pidamos al Padre que todos los hombres compartamos el amor que significa y realiza este sacramento de unidad y de paz. GUÍA: A cada una de las intenciones responderemos orando: “SEÑOR, ESCÚCHANOS Y HAZNOS SERVIDORES DE VERDAD " Por la Santa Iglesia, para que todos los hombres encuentren en ella la expresión de la caridad, oremos... Por nuestro querido Santo Padre Francisco, nuestro Obispos, sacerdotes y diáconos, para que, fortalecidos por tu Espíritu, sepan llevar el Evangelio de la cruz a todos los hombres y así descubran que la redención nos viene de Cristo, oremos.. Por nuestra patria, para que todos los que habitamos esta tierra, hagamos realidad en nuestras vidas el mensaje del Evangelio y transformemos nuestra nación en una patria nueva, de amor, de justicia, de libertad y de paz, oremos... Por todos los jóvenes, para que respondan comprometidamente al llamado de tu Hijo a ser los ministros sagrados, por cuyas manos Él se multiplique como Pan de Vida hasta la consumación de los tiempos, oremos... Por todos los católicos, que la comunión del Cuerpo de tu Hijo nos enseñe a compartir nuestros bienes con los más necesitados y que, imitándolo podamos no sólo entregar lo que tenemos, sino lo que somos, nuestra persona que se pone al servicio de los demás para que tengan vida y la tengan en abundancia, oremos... ORACIÓN DEL PADRE NUESTRO COMPARTIR Gracias Señor, porque en la última cena partiste tu pan y vino en infinitos trozos, para saciar nuestra hambre y nuestra sed... Gracias Señor, porque en el pan y el vino nos entregas tu vida y nos llenas de tu presencia. Gracias Señor, porque nos amaste hasta el final, hasta el extremo que se puede amar: morir por otro, dar la vida por otro. Gracias Señor, porque quisiste celebrar tu entrega, en torno a una mesa con tus amigos, para que fuesen una comunidad de amor. Gracias Señor, porque en la eucaristía nos haces UNO contigo, nos unes a tu vida, en la medida en que estamos dispuestos a entregar la nuestra... Gracias, Señor, porque todo el día puede ser una preparación para celebrar y compartir la eucaristía... Gracias, Señor, porque todos los días puedo volver a empezar..., y continuar mi camino de fraternidad con mis hermanos, y mi camino de transformación en ti...