1ª abril 2016 - Diócesis de León
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1ª abril 2016 - Diócesis de León
iglesia en León SUPLEMENTO DEL BOLETÍN OFICIAL DEL OBISPADO DE LEÓN • 1.ª quincena de abril 2016 EL BAUTISMO DE 22 NIÑOS EN LA PARROQUIA DE SAN ISIDRO, SIGNO DE GOZO PASCUAL PARA TODA LA DIÓCESIS D Pascua plena, alegría misericordiosa Si hay un momento en el que se vive plenamente la alegría misericordiosa de este Tiempo de Pascua que se iniciaba en el pasado Domingo de Resurrección y que se prolongará en toda la Diócesis hasta Pentecostés ése es el de la incorporación a la Iglesia de León de cristianos neófitos que desde la madurez y la reflexión piden el sacramento del bautismo con un sonoro sí como el que se pudo escuchar en veintidós ocasiones el pasado Domingo de Pascua en la Parroquia de San Isidro Labrador. El obispo da la bienvenida a estos cristianos neófitos formados en la fe gracias a la labor que viene desarrollado el Servicio Diocesano para el Catecumenado Allí el obispo Julián López preguntó uno por uno a los veintidós niños y niñas del grupo que este año han completado su periodo de iniciación cristiana gracias al Servicio Diocesano para el Catecume- nado si querían el bautismo. Uno por uno, en la capilla lateral donde se encuentra la pila bautismal de esta Parroquia de San Isidoro, los jóvenes catecúmenos fueron pronunciando sus síes y recibiendo el agua bautismal para, ya como nuevos cristianos, unirse a la comunidad que participaba en la celebración eucarística y recibir también la primera comunión. Todo en una jornada especial, cargada de emoción, y que según explica Mar Casado, catequista de los niños y jóvenes que acuden al Servicio Diocesano para el Catecumenado, “resulta muy gratificante porque todos son niños ávidos de Dios, como esponjas, que preguntan y participan de manera espontánea, reciben con mucho agrado todo lo que se habla de un Dios Padre, de un Jesucristo amoroso que nos salva”. Mar Casado recuerda que este año han sido veintidós los niños que se han incorporado a la fe gracias a la labor que viene desarrollando desde hace ya una década el Servicio para el Catecumenado “que no hace tantos años ni existía y que está dando respuesta a una realidad con un número creciente de personas adultas que quieren recibir el bautismo y niños en edad escolar que lo piden también, una nueva realidad a la que hay que dar respuesta”. “Niños que voluntariamente, con decisión y con plena consciencia, quieren incorporarse a la Iglesia y de los que se aprende mucho”, subraya Mar Casado, quien de su experiencia como catequista quiere resaltar que “estos niños nos recuerdan la importancia de poder conocer a Jesucristo, de poder rezar, de haber recibido la fe, algo que para nosotros puede parecer cotidiano pero que demuestra cómo hay que valorar algo que desde chiquitines hemos tenido siempre y a lo que con el paso de tiempo parece que damos menos importancia”. Las lágrimas de emoción de los padres y tutores y la alegría de estos veintidós niños, que ya forman parte de la Iglesia de León y que ahora proseguirán su vida de fe en sus respectivas parroquias, es un signo de gozo pascual para toda la Diócesis y una demostración para este Año Jubilar de la Misericordia de cómo se ha vivir una “Pascua plena de alegría misericordiosa”. además en Iglesia en León 2 Editorial “Una alegría misionera” Carta del Sr. Obispo 3 “Cincuenta días de gozo en el Espítitu Santo” 4-5 Actualidad diocesana · Tres experiencias de “Iglesia en misión”... · El obispo invita en la Misa Crismal... Mirador 6 “La Mayéutica de Jesús” Agenda 8 Editorial 2 Desde mi pueblo Misericordiosos como el Padre o “¿el que la hace que la pague?” A mi modo de ver venimos de un pasado, largo en el tiempo, donde hemos ido poco a la Revelación, (lo que Dios ha querido descubrir de sí mismo) para conocer cómo es Él. Y así nos imaginamos a Dios a nuestro aire. Por ejemplo, hemos supuesto que Dios reacciona ante las ofensas como tantas veces hacemos los humanos: “esta me la pagas”, “ya te pillaré…”, incluso con un regusto de justicia conmutativa que nos parece incuestionable: “el que la hace, que la pague”. Claro que luego viene el temor a que nos las cobren a nosotros algún día. Apareció poco el amor, el perdón, la Misericordia, la ternura, la paternidad de Dios. O sí, pero a la vez lo de “de Dios no se ríe nadie…”: la revancha, la venganza…, el supuesto “equilibrio” restaurador de la falta. Dice san Juan Pablo II que hay que ir a esa Historia de Salvación para descubrir todos los matices de la Misericordia de Dios en sus acciones con los hombres. “La misericordia se siente superior al Hay que leer juicio”. (St. 2,13) más la Palabra de Dios. Claro que si todavía piensas que perdonar (amar) no es cosa de ¡hombres! sería bueno que hablaras con alguno de los que creemos que sí lo es. Nicolás G. León iglesia en León SUPLEMENTO DEL BOLETÍN OFICIAL DEL OBISPADO DE LEÓN Publicación quincenal - 1.ª quincena de abril de 2016 - N.º 448 Edita: Secretariado de Comunicación Social de la Diócesis de León. Director: José M.ª Martínez Llamazares Plaza de Regla, 7-24003 LEÓN • Teléfono: 987 21 96 80 Ext. 227 E-mail: [email protected] • Web: www.diocesisdeleon.org Impresión: Printed 2000 • Depósito Legal: LE-28-1960 Una alegría misionera El papa Francisco nos invita a hacer de la Pascua fuente de alegría, personal y comunitaria, que se proyecte en el envío a evangelizar. La realidad nos convence de que “hay cristianos cuya opción parece ser la de una Cuaresma sin Pascua”, tocados de una tristeza que brota de un corazón cómodo, avaro y estéril. Esta amargura nos acecha cuando carecemos de vida interior, cerrada a la escucha de Dios y al amor a los demás, y nos llevará a ser seres “resentidos, quejosos, sin vida”. Para superar este riesgo, al que conduce la sociedad moderna, los creyentes debemos “renovar ahora mismo el encuentro personal con Jesucristo o, al menos, tomar la decisión de dejarnos encontrar por él”. En él, abrazado a la Cruz, la suya y la nuestra, y vencedor de la Muerte, la suya y la nuestra, encontraremos el norte de nuestra vida, el consuelo en nuestros dolores y fracasos, la esperanza que nace del sentido sobrenatural de la existencia. Él, a pesar de nuestras infidelidades, “nos vuelve a cargar sobre sus hombros una y otra vez”, como hermosamente se expresa en el logotipo de este Año Santo de la Misericordia. “No huyamos de la resurrección de Jesús, nunca nos declaremos muertos, pase lo que pase”. Nuestra alegría nace de la victoria de Cristo sobre el pecado y la Muerte y de la luz que ilumina el sentido pleno de la vida. De este estado interior de sabernos salvados nace el impulso para evangelizar con alegría, ya que la misión no puede ser realizada por evangelizadores “con cara de funeral”. Es tiempo de hacer que “la alegría sea misionera”, que la Iglesia salga de sí misma, con una pastoral decididamente echada a los caminos. En esta misión, que es envío y tarea, estará “la fuente de las mayores alegrías para la Iglesia”. programas diocesanos EL ESPEJO DE LA IGLESIA. Viernes 13:30 a 14:00 h. INFORMATIVO DIOCESANO. Domingos 9:45 h. www.cope.es prensa DIARIO DE LEÓN. Sábados. Página de Religión dedicada la vida de la Iglesia. LA NUEVA CRÓNICA. Domingos. Artículo de Antonio Trobajo. televisión SANTA MISA. Diario 11 h. Domingo 12 h. www.13tv.es Carta del Obispo 3 Cincuenta días de gozo en el Espíritu Santo Q ueridos diocesanos: Os prometía, al final de mi carta anterior, explicar que la cincuentena pascual es también el tiempo del Espíritu Santo. Decía esto porque muchos piensan que, hasta que no llega Pentecostés, la tercera persona de la Santísima Trinidad está poco menos que ausente en la celebración y en la vida cristiana, como si tuviera que esperar a que el calendario señalase el momento de regresar al primer plano de la fe y de nuestra vida espiritual. Esta idea es consecuencia de un cierto desconocimiento, todavía, de los actuales libros litúrgicos, comenzando por el más importante de todos que es Leccionario de la palabra de Dios, al que acompañan el Misal y la Liturgia de las Horas. Nos olvidamos que Jesús resucitado, cuando se aparecía a los apóstoles, les deseaba la paz y soplaba sobre ellos diciéndoles: “Recibid el Espíritu Santo” (Jn 20,22). Nuestro olvido del Espíritu obedece también a que los cristianos occidentales tenemos una visión casi matemática de la fe y de la liturgia, fruto sin duda de nuestra manera de pensar, muy amiga de la exactitud y de la lógica. Los orientales, en cambio, contemplan los divinos misterios que se celebran en la liturgia y viven las fiestas de una manera más integradora y global, aunque a nosotros nos parezca abigarrada y confusa. Lo que quiero decir, sencillamente, es que debemos dejarnos guiar mucho más por la pedagogía de la Iglesia que, como buena madre y maestra, nos va iniciando progresivamente en lo que celebramos en el año litúrgico. Ahora estamos, pues, en lo que se denomina “tiempo de Pascua” o “cincuentena pascual”. La primera expresión, evocando precisamente las apariciones de Jesús Resucitado, indica que este tiempo es un desarrollo de la gran solemnidad de la Pascua. La segunda expresión recuerda que la celebración pascual comprende cincuenta días, frente a la cuaresma o cuarentena que desemboca en la Semana Santa. Dentro de la cincuentena pascual, actualmente en el domingo VII de Pascua, se celebra la ascensión del Señor a los cielos que fue la última de sus apariciones, culminando todo ese tiempo con la solemnidad de Pentecostés, la fiesta de la manifestación estruendosa del Espíritu Santo que lanzó a los apóstoles a cumplir el mandato de Jesús de predicar el evangelio, bautizar, etc. Pero el Espíritu Santo ya es evocado desde el momento mismo de la Pascua, puesto que brotó del costado de Cristo “dormido en la cruz” en los símbolos del agua y de la sangre que manaron de su costado abierto (cf. Jn 19,34). En esos símbolos los Santos Padres vieron también la referencia a los sacramentos del bautismo y de la eucaristía. En este Año Jubilar de la Misericordia la cincuentena pascual debe recordarnos que el Espíritu Santo es el don de Dios anunciado y prometido por Jesús, por ejemplo, a la mujer samaritana: “Si conocieras el don de Dios…” (Jn 4,10ss.), a los apóstoles: “Cuando venga él, el Espíritu de la verdad…” (Jn 16,13ss.; cf. 14,16.26; 15,26), a todo el pueblo: “El que tenga sed, que venga a mí y beba… refiriéndose al Espíritu que habían de recibir todos los que creyeran en él” (Jn 7,37-39). Por eso el Papa Francisco, al invitarnos a celebrar y acoger la misericordia del Señor durante este año, decía que hemos de “sabernos acompañados por la fuerza del Señor Resucitado”. Esa fuerza es “el Espíritu Santo que conduce los pasos de los creyentes para que cooperen en la obra de salvación realizada por Cristo” siendo “guía y apoyo del pueblo de Dios para ayudarlo a contemplar el rostro de la misericordia” (MV 4). Vivamos, pues, la cincuentena pascual con profunda alegría invocando al Espíritu Santo creador y renovador. † Julián, Obispo de León Día a día 4 Tres experiencias de “Iglesia en misión” para la nueva evangelización El objetivo central del Plan Pastoral Diocesano que ha iniciado este curso un recorrido de cinco años en la Diócesis, configurar “una Iglesia misionera en salida”, ha tenido dentro del ciclo de formación permanente el aliciente de conocer tres experiencias de nueva evangelización puestas en marcha en las diócesis de Alcalá de Henares y Astorga, y por parte del equipo misionero de la Familia Redentorista. En una mesa redonda desarrollada en el Seminario se fueron exponiendo estas iniciativas en una sesión que abrió el testimonio de Miguel Castro, un joven misionero redentorista que explicó el programa de trabajo que esta comunidad viene desarrollando dentro del plan “Misión Parroquial Redentorista” con acción directa en parroquias concretas. A este modelo de misión parroquial popular se unió una propuesta surgida hace siete años entre laicos en la Diócesis de Alcalá de Henares, el Grupo Kerigma, como comunidad de evangelización en la calle y con una dinámica que según explicó Carlos Cortés “ha sido una experiencia de aprender a evangelizar evangelizando y haciéndolo en la calle”. Y desde la Diócesis de Astorga se explicó la propuesta del proyecto Alpha, una iniciativa que echó a andar hace cuatro años y que promueve la participación de personas alejadas de la fe a unos encuentros que se desarrollan compartiendo cenas para que generar vínculos de amistad. Cien alumnos de Religión en el Encuentro Regional Un grupo de cien alumnos de Religión de centros públicos de la Diócesis participó el pasado día 17 en el III Encuentro Regional de la Escuela Pública de la Diócesis de Castilla y León. Una jornada que se desarrolló con el lema “Sigue las huellas en… Salamanca” y que para estos escolares de 4º curso de ESO estuvo dedicada a rastrear las huellas de Santa Teresa, Fray Luis de León y Francisco de Vitoria en relación con tres destacadas efemérides: el V Centenario del nacimiento de Santa Teresa, el VIII Centenario de la fundación de la Orden de Predicadores (Dominicos) y el próximo V centenario de la fundación de la Universidad de Salamanca. Tres referencias históricas de la Iglesia en oración, cultura y sensibilidad social que inspiraron el recorrido de estos cien estudiantes leoneses por la villa del Tormes. San Isidoro acoge las IX Jornadas de Museólogos La Real Colegiata de San Isidoro ha acogido las IX Jornadas de Museólogos de la Iglesia en España, en las que más de cuarenta especialistas han abordado el tema “Museografía para los museos de la Iglesia”. El obispo Julián López fue el encargado de dar la bienvenida a todos los participantes y destacó que “los museos son un lugar clave para la formación en la fe”, una apreciación que compartió el obispo de Zamora, Gregorio Martínez, que acudió a estas jornadas en su calidad de vocal de la Comisión Episcopal para el Patrimonio. En el marco de estas jornadas también se celebró la asamblea de la Asociación de Museólogos de la Iglesia, que ha elegido como vocal a la directora técnica del Museo de San Isidoro, Raquel Jaén. ENSEÑAR AL QUE NO SABE Las últimas generaciones de nuestro primer mundo -dicenestán más preparadas. Es verdad que en nuestro país todos tenemos derecho a recibir una educación adecuada. Pero, hay algo evidente: de sabiduría del Dios cristiano andamos todos bastante deficientes. Para un cristiano de esta España nuestra, enseñar al que no sabe es, como en tiempos de Pablo, “predicar a Cristo crucificado: escándalo para los judíos, necedad para los gentiles; pero para los llamados –judíos y griegos–, un Cristo que es fuerza de Dios y sabiduría de Dios” (1Cor 1,23-24). Siendo conscientes de que “uno sólo es nuestro maestro, el Mesías” (Mt 23,10). Me han llamado enormemente la atención unas palabras del discurso del papa Francisco a los catequistas de todo el mundo, reunidos en un encuentro internacional, el 27 de septiembre de 2013: “Una de las periferias que más dolor me causa y que vi en la diócesis que tenía antes, ¿saben cuál es? La de los niños que no saben santiguarse. En Buenos Aires hay muchos niños que no saben santiguarse. ¡Ésta es una periferia! Hay que abordarla. Jesús está ahí, y te espera, para ayudar a ese niño a santiguarse. Él siempre nos precede”. Teodoro Valbuena de la vida Diocesana El obispo invita en la Misa Crismal al presbiterio a “actuar con entrañas de misericordia” La celebración de la Misa Crismal en la jornada de Miércoles Santo fue el acto central de una jornada jubilar del presbiterio en el marco del Año de la Misericordia que reunió a todos los integrantes del clero diocesano en torno al obispo Julián López para participar en un ritual en el que todos tuvieron ocasión de renovar las promesas que hicieron el día de su ordenación. Con una procesión por el claustro del primer templo de la Diócesis se iniciaba esta jornada jubilar que había tenido sus prolegómenos con una reflexión espiritual sobre el Año de la Misericordia. A continuación tuvo lugar una procesión de todo el presbiterio por el claustro de la Catedral con la que se abrió una celebración eucarística en la que el obispo pronunció una homilía en la que remarcó la importancia de “tomar conciencia de que hemos sido ungidos con el óleo de la misericordia y ésta es una realidad que nos exige vivirla y manifestarla en nuestro ministerio”. El obispo Julián López insistió durante toda la homilía en la idea de que la actitud misericordiosa debe extenderse a todo el ministerio sacerdotal: “todo sacerdote está llamado a ser un fiel y ardoroso enviado de Cristo, a ser y actuar siempre con entrañas de misericordia”. Llamada desde la Universidad a la “responsabilidad social de las profesiones” Las XV Jornadas de Humanismo y Universidad organizadas por la Escuela Universitario de Trabajo Social “Nuestra Señora del Camino” se han convertido en esta última edición en un foro desde el que se ha hecho una llamada a la responsabilidad social de las profesiones. Un mensaje que centró la conferencia de apertura que pronunció el profesor y ex rector de la Universidad Pontificia de Salamanca, Ángel Galindo, y en el que profundizó la profesora Margarita Alonso “desde la idea del otro, de hacer por el otro más allá de lo que plantea la norma para ser socialmente responsable”, en una orientación cada vez más demandada y que tiene su origen en los planteamientos de la ética cristiana “y en las iniciativas solidarias que ya planteó la Doctrina Social de la Iglesia”. Jornada por la Vida, en Botines y en la Catedral La Diócesis se suma el día 4 de abril a la celebración de la Jornada por la Vida, que se traslada a esta fecha por haber coincidido la fiesta de la Anunciación con el tiempo de Semana Santa. Y ese día 4, con el lema “Cuidar al vida, sembrar esperanza” tendrá lugar una concentración en la Plaza de Botines, con testimonios y lectura de manifiestos en defensa de la vida, a la que seguirá una marcha-peregrinación hasta la Catedral, donde se desarrollará una oración comunitaria por la vida. 5 Misericordia para un “futuro con esperanza” El obispo de León, Julián López, recibía el pasado Martes Santo a un grupo de 14 internos del Centro Penitenciario de Villahierro y del Centro de Inserción Social-CIS “Jesús Haddad”, que participaron como braceros en la tradicional Procesión del Perdón. El prelado legionense saludó uno por uno a estos internos y explicó que “como cada Martes Santo esta cita se desarrolla por iniciativa de la Cofradía del Santo Cristo del Perdón y este año, Año de la Misericordia, significa mucho para estas personas privadas de libertad, más o menos tiempo, que hoy pueden encontrarse a gusto en la sociedad. Y deseamos que el tiempo que les corresponde todavía sea breve y que pueda reinsertarse nuevamente”. Un deseo que el obispo de León quiso poner en relación con “la palabra misericordia que no significa solamente perdón, significa fundamentalmente, afecto, acogida, condescendencia con la persona, invitación a seguir trabajando por su propia perfección. En lugar de mirar atrás, esta palabra nos invita a mirar adelante y esto es lo que yo personalmente desearía para todos los internos que nos visitan hoy: que su vida continúe, que miren al futuro con esperanza”. Estos 14 internos, clasificados en segundo o tercer grado penitenciario, se encuentran dentro del Programa de Tutela Externa de Permisos y Salidas Penitenciarias que gestiona Cáritas Diocesana de León en el Centro Penitenciario de Villahierro, en Mansilla de las Mulas. Mirador 6 RINCÓN LITÚRGICO EL CIRIO PASCUAL (I) Es uno de los signos litúrgicos que evidencian la Pascua en el Espacio litúrgico. Verdaderamente es un elemento indispensable no sólo para el Tiempo Pascual sino durante todo el año. Se hace necesario cuidar este signo en pro de dar a la asamblea litúrgica un “Rostro Pascual”. El origen del uso del Cirio Pascual no está muy claro; parece que podría estar en unas columnas de cera que el emperador Constantino mandaba encender la noche de Pascua y así lo cuenta Eusebio de Cesárea en la vida de Constantino. Se sabe que en los antiguos cirios se colgaba una tira de pergamino, fijada en el cirio, donde se anotaban las fiestas movibles dependientes de la Pascua. San Jerónimo cita ya en el año 384 el canto del cirio para la consagración de éste, e igualmente recuerda que compuso versos para el canto del Cirio. En el IV Concilio de Toledo se afirma que eran pocas las Iglesias en occidente que no hubieran introducido todavía el rito de la bendición del Cirio. Una pista para entender su significado en la liturgia nos la da la peregrina Egeria (siglo IV): en su diario dice que en el oficio Vespertino en la Anástasis (Santo Sepulcro) de Jerusalén se sacaba una luz del Interior del Santo Sepulcro. Esta misteriosa luz que se enciende de manera misteriosa en el Santo Sepulcro podría ser el origen de la primera parte de la Vigilia Pascual, el llamado lucernario. Allí se bendice el fuego y se prepara el Cirio que luego será consagrado con el Pregón Pascual que cierra esta primera parte de la Vigilia. Manuel Santos Flaker L La Mayéutica de Jesús (I) a palabra mayéutica se emplea para referirse al método de enseñanza de Sócrates (S. V a. C.), que consistía en hacer preguntas, bien formuladas, que lograran en el interlocutor dar a luz las verdades que, sin saberlo, anidaban en su interior. Este vocablo está formado a partir de maieía, que significa el oficio de partera (que, por cierto, era el de la madre de Sócrates). Y ello se debe a que él pensaba que la técnica de preguntar para obligar a reflexionar era como asistir en un parto: ayudar a alumbrar la verdad. Hay ciertos paralelismos entre la figura de Sócrates, tal como nos lo presenta Platón, que es quien relata casi todo lo que sabemos de él, y la figura humana de Jesucristo: vocación, misión, enseñanza oral (ni el uno ni el otro escribieron nada, que sepamos), oficio de maestro y de debelador del error y de la hipocresía, persecución de las autoridades y condena a muerte. El primero que los señaló fue san Justino (S. II), el fundador de la filosofía cristiana, y más tarde san Agustín (S. V) y después los filósofos y teólogos cristianos medievales, en particular, santo Tomás de Aquino (S. XIII). A pesar de esos rasgos comunes, las diferencias entre ambos personajes, son fundamentales, sobre todo porque Sócrates es un buscador de la verdad (que no es poca cosa), que piensa, sí, que esta habita en el interior del hombre, pero Jesucristo es él mismo la Verdad, y su enseñanza no es sólo para que el hombre halle la verdad, sino para que entre en comunión a través de Él, con Dios, sumo Bien y suma Verdad. Pero no pretendía yo ahora desarrollar estas semejanzas y diferencias, sino sólo fijarme en la “mayéutica” de Jesús. Pues, en efecto, el Señor, cuya predicación es sanadora y salvadora y dirigida a toda clase de gentes, es un gran pedagogo, el gran Pedagogo o Maestro, que conoce a cada uno y le enseña según su condición, y siempre con amor. “Las preguntas de Jesús, hechas a todo tipo de personas, tienen en común que son para hacer pensar y, sobre todo, para lograr el diálogo y el encuentro entre el Señor y las diferentes personas” Algunos han contado cuántas preguntas hace Jesús en los evangelios: no es fácil establecer el número, porque a veces hay preguntas dobles o reformuladas pero, en cualquier caso, desde luego pasan de doscientas. Las preguntas de Jesús, hechas a todo tipo de personas, son de varias clases (que intentaré clasificar en una segunda entrega), pero me parece que todas tienen en común que son para hacer pensar y, sobre todo, para lograr el diálogo y el encuentro entre el Señor y las diferentes personas, para comunicar el designio de salvación de Dios. Jesús no es un maestro al uso, y así lo percibían sus paisanos, que se admiraban de que no enseñara como los demás rabinos, sino que lo hacía con autoridad, con la autoridad de quien es auténtico, de quien no sólo enseña contenidos, sino que se da, entrega su propia persona, de quien no sólo posee la verdad, sino que es la Verdad, porque en Él habita la Divinidad, es Dios mismo hecho hombre para llevar a los hombres a Dios. Juan Ignacio Sánchez Pérez Vida y Evangelio 7 R E F L E X I Ó N S O B R E E L E VA N G E L I O D E L A M I SA D O M I N I C A L 3 de abril de 2016 (DOMINGO II DE PASCUA) 10 de abril de 2016 (DOMINGO III DE PASCUA) Jn 20,19-31 Jn 21,1-14 “Al anochecer de aquel día, el primero de la semana, estaban los discípulos en una casa, con las puertas cerradas por miedo a los judíos. Y en esto entró Jesús…” “Después de esto Jesús se apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Y se apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás, apodado el Mellizo…” ¡Señor mío y Dios mío! Pescar y comer A pesar de que habían recibido ya la noticia, de parte de las mujeres, de que Jesús había resucitado, el Evangelio de hoy retrata a una comunidad de discípulos todavía encerrada y atemorizada. No era fácil creer en aquella resurrección cuando habían visto, con sus propios ojos, cómo expiraba en la cruz y era sepultado. De hecho, los judíos no creían en la resurrección de alguien antes del final de los tiempos. El Señor resucitado se hace presente entre ellos el día primero de la semana, el domingo, que va a ser ya el día de la comunidad cristiana frente al sábado judío, que queda superado. Les desea la paz y les muestra las marcas de las manos y el costado: no es un fantasma ni un ser diferente, sino el mismo Maestro y Señor al que han visto clavado en cruz. Pero es, al mismo tiempo, distinto: su cuerpo está ya glorificado y no se somete a las limitaciones impuestas por el tiempo y el espacio. “Recibid el Espíritu Santo”. Jesús exhala sobre ellos y les llena del don pascual, el Espíritu. Recuerda al soplo del Espíritu de Dios en la creación del mundo porque, ciertamente, se trata de una nueva creación. Igual que el Padre envió a su Hijo, ahora Jesús les envía a ellos, llenándoles del mismo Espíritu para que continúen su misión y perdonen los pecados en su nombre. La incredulidad, ¡tan nuestra!, del apóstol Tomás termina con una maravillosa confesión de fe: ¡Señor mío y Dios mío! Jesús proclama dichosos a los que crean sin haber visto, a los que descubran su presencia en la Palabra viva, la comunidad y los sacramentos. Es lo que nos toca a nosotros ahora… Este domingo es para nosotros el tercer encuentro con el Señor resucitado gracias al relato evangélico de Juan. Sucede en un contexto muy distinto al anterior: aquí no hay habitaciones cerradas, sino el espacio abierto del lago. Pero también hay sorpresa y una transformación interior de los testigos. El grupo de discípulos, encabezados por Pedro, se disponen a pescar… ¿qué mejor podían hacer que volver a las redes y las barcas después de que con la muerte del Maestro sus proyectos se hubieran ido al traste? Pero, aunque son pescadores experimentados, no capturan nada aquella noche. Sin el Señor en medio de ellos la pesca de la comunidad resulta infecunda; esa parece ser la enseñanza para nosotros. Cuando Él aparece en la orilla y les habla y ellos se fían de su palabra, “echad la red a la derecha de la barca y encontraréis”, la red se pone a reventar de pesca. Saltan a tierra y descubren emocionados que el Señor mismo les ha preparado un banquete de pez asado y pan, como aquel que dispuso para la multitud en la multiplicación milagrosa de panes y peces. Él mismo se lo reparte: “Vamos, almorzad”; aquí resuena el “Tomad y comed, tomad y bebed” de la última cena de Pascua y de cada Misa. Es una hermosa imagen de la Iglesia: somos enviados por Jesús a echar las redes, confiando en su Palabra, para la salvación de la humanidad y convidados a la mesa por Él para reparar las fuerzas gastadas por la misión en el banquete pascual de la Eucaristía. De la Eucaristía a la misión evangelizadora y de ésta, de nuevo, a la Eucaristía. Rubén García Peláez De la Exhortación Apostólica “Evangelii Gaudium” 8. Sólo gracias a ese encuentro —o reencuentro— con el amor de Dios, que se convierte en feliz amistad, somos rescatados de nuestra conciencia aislada y de la autorreferencialidad. Llegamos a ser plenamente humanos cuando somos más que humanos, cuando le permitimos a Dios que nos lleve más allá de nosotros mismos para alcanzar nuestro ser más verdadero. Allí está el manantial de la acción evangelizadora. Porque, si alguien ha acogido ese amor que le devuelve el sentido de la vida, ¿cómo puede contener el deseo de comunicarlo a otros? Fe y Cultura 8 agenda Viernes, 1 de abril: - Comienza Cursillo prematrimonial (Parroquia El Salvador, León, 17 h.). Sigue días 2, 3, 9 y 10 - Jornada Encíclica Laudato Si, Delegación Apostolado Seglar (Seminario Mayor, León, 20 h.) Sábado, 2 de abril: - Retiro-Convivencia de Pascua Profesores Religión (Seminario, 10:30 h.) - Celebración Pascua Equipos Ntra. Sra. (Parroquia Renueva, 18:30 h.) - Convivencia Gente CE Chicos (Seminario Mayor, 11 h.) Domingo, 3 de abril: DOMINGO II DE PASCUA (DOMINGO DE LA DIVINA MISERICORDIA) - Misa Acción Gracias Semana Santa-Jubileo Cofradías y Hermandades (Basílica Virgen del Camino, 13 h.) Lunes, 4 de abril: SOLEMNIDAD DE LA ANUNCIACIÓN DEL SEÑOR - Convivencia del Clero de 30 a 50 años (Seminario Mayor, 11 h.) - Jornada por la Vida (Plaza Botines, 18:30 h.; Catedral, 19 h.) Martes, 5 de abril: - Presentación Exposición AQVA-Las Edades del Hombre (Obispado, 11 h) Miércoles, 6 de abril: - Inauguración Exposición “Jubileo de la Misericordia” (Palat del Rey, 19:30 h) Jueves, 7 de abril: - Cursillo animación-Instituto Humanitate (Seminario, 10 h.) - Comienza Cursillo de Cristiandad (PP. Claretianos, 19:30 h.). Hasta el día 10. Sábado, 9 de abril: - Escuela Formación “Beato Antero M.” (Seminario Mayor, 10 h.) - Convivencia Gente CE Chicas (Seminario Mayor, 11 h.) - Jubileo Arciprestazgo Ntra. Sra. Mercado (Parrroquia San Martín-Catedral, 18 h.) Domingo, 10 de abril: DOMINGO III DE PASCUA - Cine universitario (Col. Ntra. Sra. Carmen-Vedrunas, 19 h.) Lunes, 11 de abril: - III Sesión Asamblea Clero (Seminario Mayor, 10:30 h.) - Encuentro formación Hospitalidad Lourdes (Sede propia, 19 h.) - Mesa sobre Refugiados, Centros Cultura Popular (Sierra Pambley, 19 h.) Martes, 12 de abril: - Conferencia Proyecto Esperanza, Delegación de Enseñanza (IES Juan del Enzina, 19:30 h.) Jueves, 14 de abril: - Conferencia Florentino Alonso “Profetas de la Misericordia” (Instituto Bíblico y Oriental-San Isidoro, 20 h.) Viernes, 15 de abril: - Oración por las Vocaciones-Jornada mundial (Seminario Mayor, 18:30 h.) Una escultura... Felipe Magdaleno, la “mirada sonora” a San Isidoro Después de más de dos décadas apartada en un recoleto rincón del Parque del Cid, la escultura con la que la ciudad homenajeaba en 1993 a Felipe Magdaleno ha completado un corto pero simbólico viaje para situarse a la vera del rumoroso sonido de la fuente de San Isidoro. Y así la “mirada sonora” de quien en 1962 fundara la Coral Isidoriana y quien durante muchos años fuera maestro de capilla de la Colegiata isidoriana se proyecta hacia un templo en el que sigue resonando la maestría de Felipe Magdaleno. Una memoria musical que también se proyecta en el Coro Santa Cecilia de la iglesia de Renueva y los coros que promovió desde su responsabilidad pastoral como párroco en Villamoros, Mansilla Mayor y Villasabariego. Una “mirada sonora” junto al rumor armónico de la fuente que surte agua frente a la Colegiata y que recuerda cómo el caudal musical de la Coral Isidoriana sigue fluyendo 54 años después de que Felipe Magdaleno fundara una agrupación que contribuye desde la voz a realzar el culto en San Isidoro. Una revista... “Pregón” con manos de misericordia Dos manos que parecen impetrar la gracia de la misericordia, dos manos que parecen asirse al madero que es árbol de la vida, dos manos que se dirigen a lo alto por la senda de la sangre. Una interpretación sencilla pero cargada de simbolismo a cargo del artista y papón Manuel López Becker abre desde la portada las 116 páginas del segundo número de la revista “Pregón”, la publicación de referencia para hermandades y cofradías que tras una larga ausencia, por iniciativa de la Junta Mayor de Semana Santa, se recuperaba el año pasado junto con la guía de procesiones “Guión”. Una revista que en este segundo número de su nueva época rinde homenaje a los desaparecidos Norberto Cabezas y Fernando Llamazares, que desde sus respectivas dedicaciones al fotoperiodismo y a la divulgación histórica apoyaron siempre la Semana Santa. Homenajes para un cuidado contenido que en esta revista “Pregón” proyecta con manos de misericordia el mensaje esencial del Triduo Pascual: la conmemoración de la pasión, muerte y resurrección de Jesús. ...y la Tira de Lolo