Las Superchicas en los Cómics

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Las Superchicas en los Cómics
 Regina Orea Gardea Noviembre del 2014 Taller de Investigación Documental Las Superchicas en los Cómics Sexualización, feminismo, y estética Abstract En ésta investigación se realiza un análisis del papel que tienen los personajes femeninos en las tiras cómicas de superhéroes. Se pretende mostrar cómo a través de los años y aún en la época moderna, la mujer es dispensable, un objeto que busca atraer la atención por medio de simple atractivo visual y una simple herramienta para manipular a favor de la historia de los personajes masculinos. Índice Introducción………………………………………………………………. Resultados……………………………………………………………….. Discusión…………………………………………………………………. Conclusión……………………………………………………………….. Bibliografía……………………………………………………………….. Introducción Esta investigación busca hacer un análisis detallado de la figura de la mujer en las historietas, más específicamente en los cómics que involucran superhéroes. El material presentado en ésta investigación se centra principalmente en los dos gigantes de los superhéroes: Marvel Comics y DC Comics debido a su popularidad y a su gran influencia en el universo de los superhéroes. Básicamente han marcado la pauta de lo que la gente busca en éstos personajes, y los moldes creados por ellos han sido durante años, la estructura madre y raíz de ésta corriente de entretenimiento. Desde el inicio de los tiempos, ha habido una gran desigualdad entre los géneros masculino y femenino. Esta investigación no pretende abordar los fundamentos sociológicos y biológicos de ésta falta de equidad entre hombres y mujeres, pero si pretende arrojar un poco de luz en la materia de la representación tan polémica que tienen ambos géneros en las obras literarias, especialmente los cómics. Michelle Perrot, autora del libro “Mi historia de las mujeres”, plantea de manera muy clara las razones por las cuales la representación de las mujeres en el papel, desde antaño pudo haber sufrido. Ella comienza hablando de una falta de información, y sobre todo, una falta de registros en la historia de las mujeres. Se habla de nombres tachados, de diarios quemados, y de archivos destruidos por múltiples razones. Eso obviamente deja dolorosos huecos en lo que es una línea constante de historia que va siendo escrita. Perrot, después toma un ángulo mucho más interesante. Las mismas palabras, la misma sintaxis que se ha usado desde que se crearon los idiomas, tiende a hacer de menos a las mujeres, a hacerlas invisibles. ¿A qué se refiere ésto? “El ejemplo que se da es el de las palabras de carácter mixto, por ejemplo que el plural de varios hombres y mujeres inmediatamente se vuelve “ellos”” (Perrot, 25). Ahí se ve sin lugar a dudas la jerarquía en la que vivimos, en la que sociedades enteras se han ido formando. Cuando se intenta hacer algo “asexuado” y equitativo, realmente no hay manera, porque la base de nuestro lenguaje en éste caso ya está establecido. Cuando se habla de humanos, se está generalizando una vez más. Y también cuando se quiere referir a un ser humano por medio de “hombre”. Por ejemplo: “La tierra es del hombre”, “...el futuro del hombre.”, “...Los hombres libres”, etc. Otro ejemplo que pone Perrot con respecto a lo mismo, es la tradición de que a la hora de contraer matrimonio, se espera que una mujer tome el apellido de su esposo. En cierto sentido, en el momento que ésto sucede, la mujer pierde su nombre y hasta una gran parte de su identidad. Lo anterior contribuye a la pérdida del linaje femenino. La pérdida del apellido hace que resulte más difícil trazar el árbol genealógico de una mujer. Como se está hablando de letras, todo lo mencionado anteriormente es clara evidencia de cómo la influencia de la mujer ha ido perdiendo fuerza, y en cierto sentido la sigue perdiendo. Intentando recordar las clases de historia de los primeros años de la vida, los nombres de las mujeres que contribuyeron al éxito de la humanidad son una cantidad muy reducida con respecto a la cantidad de sujetos masculinos. Hoy en día, los movimientos feministas están muy en boga. Principalmente porque la gente comienza a darse cuenta de que en ésta época de modernidad, ya es mucho más fácil poder encontrar la voz dentro de nosotros, y hay un sinfín de caminos para expresar aquello que pensamos o sentimos. La diferencia entre hombres y mujeres comienza a desvanecerse porque la gente comienza a reconocer la equidad de género y la adopta en su forma de vida. Por ejemplo, la sociedad mexicana que es mayoritariamente patriarcal, poco a poco va siendo un poco más flexible y cambiando. Se está haciendo un esfuerzo por erradicar frases derogatorias como “no seas niña”, “llorar no es de hombres”, etc. Sin embargo, todavía hay muchas cosas por resolver, muchos giros que dar y cambios que hacer. La reprogramación de la sociedad no se va a dar de la noche a la mañana, si no que va a ser un proceso lento y arduo que requiere de la cooperación de todos los habitantes del planeta. Resultados En enfoque de éste trabajo es principalmente desde el punto de vista del movimiento social conocido como feminismo. El feminismo, por su significado encontrado en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, se refiere a lo siguiente: feminismo. (Del lat. femĭna, mujer, hembra, e ­ismo). 1. m. Doctrina social favorable a la mujer, a quien concede capacidad y derechos reservados antes a los hombres. 2. m. Movimiento que exige para las mujeres iguales derechos que para los hombres. El nombre de ésta doctrina es un poco desorientador, debido a la relación que tiene con la palabra “femenino”, ésto hace que la definición general (e ignorante) caiga en el error de que el feminismo realmente se refiere a una noción de superioridad de las mujeres sobre los hombres. Lo anterior hace que sea muy necesario resaltar de manera muy clara que el feminismo no significa que las mujeres sean mejores que los hombres. El feminismo declara y busca la completa equidad entre hombres y mujeres. Michelle Perrot, la mayor influencia para éste texto, es de profesión historiadora y de ideología feminista. Ella se especializa principalmente en la historia del siglo XIX, y estudió en prestigiosas universidades francesas como la Sorbona (que abandonó en los años sesenta) y la Universidad de París VII­ Denis Diderot. Amiga y colaboradora del renombrado sociólogo, psicólogo, filósofo y librepensador Foucault, Perrot se especializa en el estudio de las mujeres en la historia, y también del estudio de la clase obrera. También ha incursionado en el estudio y apoyo de causas como la cultura de la paz o la lucha en contra del sida. Mientras que sus estudios no han sido centrados específicamente en el tema de la representación gráfica del entretenimiento, las bases de sus conocimientos (como se mencionó en la introducción de ésta investigación, han sido clave para el análisis del problema) ¿Cuál es éste problema? El primer cómic de superhéroes surgió hace ya más de ochenta años, y desde entonces, éste tipo de entretenimiento no ha hecho más que popularizarse y crecer. Antes los cómics eran sólo en formato librillo, a veces tenían que esperar días o semanas para ver las tiras publicadas una por una en los periódicos. En éste periodo de tiempo, Marvel Inc. ha creado aproximadamente 7,000 personajes y contando, lo mismo con DC cómics, cuyo número de personajes se encuentra en alrededor de 10,000 (y más en puerta y en proceso de creación). Cualquiera puede brincar a los famosos nombres de Superman, Batman, Spiderman, Hulk, Wolverine, etc, con la mera mención de la palabra superhéroe. Pero cuando se pregunta por superheroínas, la primero que viene a la mente es solamente la contraparte femenina de éstos superhéroes. La regla se ha hecho básicamente, el superhéroe hombre debe de tener su compañera femenina: (generalmente conocida como su pareja, aunque raras veces se ve a un superhéroe y a su contraparte involucrados románticamente) Superman ­ Superchica ­ La Mujer Maravilla. Batman ­ Batichica. Y aun, las menos populares: Si hay un Spiderman, tiene que haber una Spidergirl. Y la hay, pero el conocimiento de ella no pasa del enunciado anterior. Cuando uno se pone a pensar en la existencia de las superheroínas, el imaginario comunal consta de lo mismo: hermosas mujeres, con diminutas caderas y sorprendentes cuerpos curvilíneos, melenas lustrosas, extremidades musculosas y caras esculpidas por los mejores artesanos renacentistas. Predomina la imagen de los colores primarios en pequeñas y ceñidas faldas, unos escotes que no dejan nada para la imaginación y poses fantásticas, muy características de todos los superhumanos, pero que al mismo tiempo hacen dudar al ojo del lector sobre las capacidades anatómicas. En general las apariencias de los superhéroes están muy sexualizadas bajo el estigma o el arquetipo de que los cuerpos esculturales y definidos son sinónimo de fuerza y de salud. Se resaltan los músculos hasta un extremo donde verlos en una persona normal sería bastante alarmante. superhéroes vs. cómo se verían en el mundo real (bodybuilders) Ésto en caso de los superhéroes masculinos, porque en los femeninos se puede apreciar otro tipo de peculiaridad. Los superhéroes/supervillanos y superheroínas/supervillanas hay miles, Marvel simplemente tiene más de 7,000 personajes. La mayoría masculinos. Y dentro de éstos miles de superhombres, se puede apreciar una gran variedad de personalidades e historias, pero sobre todo de apariencias. Estéticamente hablando, casi ningún personaje es igual a otro. Sus uniformes son diferentes, sus rasgos también. El color de piel, los ojos, estaturas y la complexión tienen infinitas variantes. Ejemplos anteriores: Daredevil, Red Skull, Kingpin, Capitán America, Thor, Falcon, Batroc. Pero, ¿Qué se puede observar en los personajes femeninos que aparecen en las tiras cómicas? ¿Hay algún tipo de patrón o qué se está intentando encontrar? La respuesta es simple: Todos los personajes femeninos son iguales. Es cierto, al igual que en los hombres, los trajes, el color de piel, las facciones del rostro y las historias son completamente únicas, pero en materia de cuerpo y de atractivos físicos, es como si sólo se usara el mismo molde. La icónica Black Widow y Peggy Carter, de la saga de Capitán América La representación de los cuerpos es llevada hasta un extremo que puede ser concebido como vulgar, y aquí entra el “double standard” de la apariencia de un hombre fornido y poco vestido, contra una mujer fornida e igualmente, poco cubierta. Black Widow vs. Kelly Kelly (WWE Divas) La concepción de la sociedad está todavía muy atrasada en cuanto a la equidad física y los cuerpos de las personas, tanto ficticios como reales. La triste verdad es que la mujer no es dueña de su cuerpo, sino que está vilmente controlada por la sociedad, por los medios de comunicación que le ordenan cómo verse, y de ahí cómo sentirse en cuanto a su cuerpo. Básicamente, si la sociedad dictó que la mujer ideal tiene que ser (poniéndolo metafóricamente con colores) morada, morada es lo único que se va a aceptar. Si hay una mujer lila, no es aceptable, porque es otra sombra de morado, pero no es morado como tal. Y si hay otra mujer fuchsia, tampoco está bien, es demasiado rosado, no es morado. Y no tiene relevancia alguna que los colores fuchsia y lila, al igual que el morado, sean igual de útiles y de bellos. Discusión Éste tema ha sido banquete de polémica durante varias ocasiones, en específico ya más entrado el siglo XXI. Porque es en este siglo (como se mencionaba anteriormente), cuando los tabúes entorno a las son desaparecidos por ellas mismas, que comienzan a demandar un trato más justo y que son socialmente más vistas a el “nivel” de los hombres. Se han hecho diversos movimientos en busca de más equidad en los cómics, pero hay dos que son los más importantes del siglo, que se dieron en la últimas décadas de éste siglo, gracias al boom de las redes sociales y el internet. La primera es una página de internet llamada “Women in Refrigerators”. Fué creada en 1999 por un grupo de fanáticos de los cómics. Ésta página se crea como un espacio de sátira para criticar las múltiples veces en las que los personajes femeninos elaborados con bastante esfuerzo y profundidad han sido usadas como “plot devices” (o sea, simples herramientas en las que son asesinadas, heridas, maltratadas, degradadas o desaparecidas) para contar, apoyar, influenciar o simplemente abrillantar la historia de un personaje masculino, que obviamente revuelve en torno a él. La segunda es un blog de Tumblr, basado en el anterior “Women in Refrigerators”, éste blog se llama “The Hawkeye Initiative” y también es de un humor satírico y negro, irónico. El propósito de éste blog es demostrar como las superheroínas están sexualizadas de una manera anti­natural en la manera gráfica de demostrarla. Lo anterior se comprueba de manera infalible por medio del uso principalmente del super­arquero “Hawkeye”, siendo dibujado imitando las poses en las que las superheroínas generalmente son dibujadas. Hawkeye Initiative es el epítome de ésta investigación, es la pieza clave que demuestra que realmente hay un estigma torcido en el universo de los superhéroes. Claramente se puede apreciar que la pose de los hombres no se ve normal, mientras que la de las mujeres sí. Ésto prueba lo que dice Gloria Steinem, una de las más influyentes líderes del movimiento moderno feminista. Ella dice que el problema de los cómics es que “están hechos por hombres, para hombres.” (Steinem, 167) O sea, que ellos dibujan y crean lo que ellos quieren ver, sin tener en cuenta la destrucción de género a la que pueden dar pie. Una de las cosas más criticadas en la película de Avengers, es el traje del personaje de Black Widow. Ha sido catalizador de mucha polémica en lo que respecta a la sexualización de la superheroína. Pero cabe mencionar que mientras no parece ser muy práctico para la batalla, el traje no está diseñado para ser pieza clave en el sex appeal de Natasha Romanov. Así como tampoco está diseñado para eso el traje de Capitán América. El disfraz de Hawkeye es mucho más revelador. Aunque preferiríamos que el traje de Black Widow tuviera más secciones de armadura visible, no es más pegado o más provocador que ninguno de los otros. Los tacones no son de aguja, sino de plataforma, cosa que también ha sido muy criticada. Sin embargo, casi no son mostrados en pantalla, por lo que Scarlett Johansson los usaba probablemente para estar más a la estatura de sus coprotagonistas. Y cuando Natasha no está en su “catsuit”, su ropa de civil no son más que jeans y chamarras de cuero. Nada particular. Pero como se menciona anteriormente, con la liberación y la “invasión” de la mujer en las áreas a donde pertenece (todas) también ha habido un giro, casi imperceptible en donde mujeres están ya trabajando en compañías publicitarias de cómics, encargándose de la creación, dibujo, entintado, etc. de sus propios personajes y contribuciones. Todavía se tienen que ateñir en cierto sentido a lo que el público (predominantemente masculino) pide, por lo que no son cien por ciento libres de crear a las mujeres que ellas quieren ver, pero poco a poco se está dando un cambio, mientras avanza el tiempo y la modernidad. Bibliografía Perrot, Michelle. Mi Historia De Las Mujeres. 3rd ed. Vol. 1. Buenos Aires: Fondo De Cultura Económica, 2008. Impreso. Conroy, Mike. 500 Comic Book Villains. 1st ed. Vol. 1. Hauppage: Barron's Educational Series, 2004. Impreso. Roach, David A. The Superhero Book. Ed. Gina Renee Misiroglu. 1st ed. Vol. 1. Canton: Visible Ink, 2004. Impreso. Steinem, Gloria. Ir Más Allá De Las Palabras. 1st ed. Vol. 2. Sant Adrià De Besós: Paidós, 1996. Impreso. "The Hawkeye Initiative." The Hawkeye Initiative. Web. 28 Nov. 2014. <http://thehawkeyeinitiative.com/>. "The Objectification of Women in Comic Books by The Objectification of Women in Comic Books | Fantasy Magazine." The Objectification of Women in Comic Books by The Objectification of Women in Comic Books | Fantasy Magazine. Web. 19 Nov. 2014. <http://www.fantasy­magazine.com/non­fiction/articles/the­objectification­of­women­in­g
raphic­novels/>. "Women in Refrigerators." Women in Refrigerators. Web. 8 Nov. 2014. <http://lby3.com/wir/>. 

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