Nuestro objetivo es crear espacios verdes más

ENTREVISTA CRISTÓBAL CATALÁN GERENTE DE GREEN LINE
REMITIDO
“Nuestro objetivo es crear espacios verdes
más sostenibles y autosuficientes”
Green Line es una empresa especializada en proyectos de paisajismo y jardinería,
pero desde una perspectiva ecológica y sostenible. Green Line trata de asegurar
el máximo respeto al medio ambiente y a las personas, creando espacios con
naturalidad.
¿Cuáles cree que son los problemas actuales que perjudican el medio ambiente?
Excesos en los consumos de energía,
la escasez de agua, la alta contaminación
atmosférica y el agotamiento de los recursos, entre otras cosas, son los factores
que a mi juicio deterioran nuestro entorno y ponen en riesgo el bienestar de
generaciones futuras.
¿Y en qué contribuye su empresa a mejorar estos aspectos?
Contribuimos de forma responsable
a la conservación del medio ambiente,
desarrollando proyectos de una manera
respetuosa. Nuestro objetivo es crear espacios verdes más sostenibles y autosuficientes. Cuando planificamos un jardín, estudiamos las zonas a ajardinar y
los usos que se les quiere dar, así como
los objetivos que deseamos que cumpla.
¿Eso pasa por escoger una vegetación
sostenible?
Como es natural, las especies elegidas se seleccionan en función de los deseos del cliente, pero siempre le asesoramos sobre su ubicación más adecuada.
Aconsejamos realizar un estudio de asoleo, edáfico, hídrico y climatológico,
además de la componente ornamental
de las mismas. Evitamos las plantas que
sabemos que enferman con facilidad o
que son muy exigentes con las condiciones ambientales. De este modo disminuimos la aparición de plagas y enfermedades y, por tanto, el consumo de fitosanitarios o su posible reposición.
Cuando realizamos reformas en los
jardines, nos gusta ofrecer una segunda
oportunidad a ejemplares que han de
ser eliminados, procurando aplicar la
Norma Granada, reubicándolos en
nuevos espacios o cuidándolos en nuestras instalaciones, hasta conseguirles un
nuevo lugar, otro destino.
Siempre que el proyecto lo permita,
planteamos praderas de césped con especies distintas a las habituales, como
las bermudas híbridas, cuyos consumos
de agua se reducen en un 40 % frente a
las primeras, aportando además un
gran dinamismo al entorno.
¿Se puede ahorrar en el mantenimiento
de un jardín?
Claro que sí, verde no es sinónimo
de caro. Existen varios mecanismos que
nos ayudan a conseguirlo. Se pueden
instalar sistemas de riego inteligentes,
alimentados mediante paneles solares y
baterías que funcionan con energías
limpias y renovables. Estos riegos están
compuestos por sensores enterrados en
el suelo que miden el nivel de humedad
de la tierra y controlan la apertura y cierre de válvulas. De esta manera solo se
riega la zona necesaria y el tiempo mínimo. Esto contribuye notablemente al
ahorro de agua y a evitar situaciones de
estrés hídrico en las plantas.
Hablo de sensores que simulan raíces de plantas y son capaces de detectar
las carencias de nutrientes que provocan deficiencias de desarrollo en la vegetación. Este sistema permite un aporte de abono más eficiente y reduce el
uso de productos fitosanitarios al tener
unas plantas más sanas.
También, sistemas de riego por goteo enterrado para céspedes (aparte de
la habitual aplicación por goteo para estratos arbóreos y arbustivos en superficie). Al estar localizado, se convierte en
un aporte hídrico más eficiente, ya que
se aplica directamente en el sistema radicular disminuyendo la dosis de aplicación de riego, obteniéndose un ahorro de un 40% frente a la aspersión habitual.
Otra opción es la depuración de las
aguas de origen doméstico, denominadas aguas grises: pueden ser incorporadas al sistema de riego, después de una
depuración específica, según necesidades y consumo: www.edar-cat.com .
Otra posibilidad interesante son los
depósitos enterrados y de superficie para la recogida de aguas pluviales que
pueden incorporarse directamente al
sistema de riego.
Hay más medidas que podemos llevar a cabo, como por ejemplo la adición
al sustrato de tierra de polímeros retenedores, que absorben y almacenan el agua
que normalmente se pierde por evaporación e infiltración. Así se logra una
mejor gestión del agua a pie de plantación, optimizando los recursos hídricos
y reduciendo de esta manera la frecuencia de riego hasta en un 50%. Esta agua
almacenada en los polímeros, queda a
disposición de la planta de tal forma que
sus raíces pueden acceder fácilmente a
ella en el momento que la necesiten.
¿Y qué medidas toman respecto al ahorro de energía?
Utilizamos las lámparas LED, con
consumos de un 80 % menos como mínimo frente a las halógenas.
Elementos con un elevado consumo
energético, como bombas de calor para
piscinas, se alimentan mediante la instalación de paneles solares, alimentados
de forma limpia.
¿Qué piensa de los productos fitoquímicos?
Son más fuertes y más rápidos, pero
se deberían usar lo menos posible. No
son buenos ni para el medio ambiente
ni para el ser humano. Incluso, en ocasiones, hasta las plantas pueden llegar a
estresarse y paralizar su desarrollo. Nosotros, como norma, utilizamos productos ecológicos, a base de cobre, azufre,
aceites vegetales, etc.
Utilizamos abonos tradicionales, de
los que ya usaban nuestros abuelos,
cuando comíamos tomates con gusto a
tomate…ja, ja, es broma.
Existen abonos orgánicos y a base de
algas marinas, totalmente ecológicos,
muy buenos, eficientes y que vienen totalmente libres de semillas de otras especies, que parece que es lo que preocupa a
la gente. El mantenimiento ecológico es
más laborioso, pero no perjudica a nadie, más bien beneficia.
La comodidad de utilizar únicamente productos químicos acaba pasando
factura.
Actualmente, somos punto SIGFITO, es decir, recogemos sin ánimo de lucro, envases de productos fitosanitarios
para darles un tratamiento medioambiental correcto.
¿Qué materiales utilizan en la elaboración de jardines?
Procuramos utilizar siempre materiales de origen natural, como por
ejemplo las maderas, que exigimos
que cuenten con los certificados de
origen. Como alternativa a este producto natural proponemos el uso de
maderas tecnológicas, compuestas por
virutas de madera, procedente de limpieza de bosques mezclados con una
resina polimérica, en una proporción
mayoritaria de madera. De este modo,
se contribuye a reducir la tala de nuestros bosques por lo que favorece a evitar el cambio climático y reutiliza un
subproducto que tiene poca salida al
mercado.
Otros materiales que usamos son los
porcelánicos, que mediante la aplicación
de dióxido de titanio, le confieren al material unas propiedades bactericidas, autolimpiables, de eliminación de malos
olores y con la capacidad de realizar la
fotocatálisis descomponiendo los gases y
transformándolos en oxígeno.
¿Y cómo se puede aplicar todo esto a las
piscinas?
Bueno, no sé si conoce las biopiscinas, que generan un medio de aguas libres de sustancias químicas gracias a sistemas de filtración biológica, intentando
reproducir de manera natural la misma
filtración que se produce en los ríos y lagos. Se puede disfrutar de aguas cristalinas todo el año con un mínimo mantenimiento.
También son muy decorativos los estanques naturales, en los cuales, el agua
es depurada por plantas y permite la vida
de peces, tortugas y otros animales.
En Green Line transmitimos nuestro
interés en la creación de espacios naturales y ecológicos. Por eso, estamos en
constante cambio y crecimiento, en todos los enfoques de la cultura verde, como son los jardines, huertos en casa, cubiertas verdes, jardines verticales, reciclaje, estanques, energías bio y autosustentables, limpieza, reutilización del
agua y suministro de toda clase de materiales para jardinería y paisajismo.
A modo de resumen, se podría decir
que nuestra filosofía es crear espacios
únicos.
www.green-line.es