Embarazo sano - Odontología para bebés

Transcripción

Embarazo sano - Odontología para bebés
No descuides...
la salud
de tu boca
¡Puede afectar al embarazo!
Si cuidas tu boca a lo
largo de estos nueve
meses, tus dientes,
muelas y encías no
sufrirán, ayudarás a
que tu hijo nazca sano,
y podrás demostrar a
todo el mundo lo
contenta que estás con
una sonrisa perfecta.
Texto: Caridad Ruiz
E
s inevitable. Cada vez que te
encuentras a alguien y te pregunta: “Pero... ¿estás embarazada?”, en tu boca aparece una
amplia y hermosa sonrisa, que deja a la
vista toda tu dentadura. Desde luego,
este gesto no trasmite la misma felicidad si debes cerrar la boca o taparla
con tu mano para que tus dientes no
se vean, porque el embarazo ha hecho
estragos en ellos y no pones remedio.
Es cierto que la gestación va a suponer
una dura prueba para tu salud bucodental. Para superarla, sigue leyendo:
con la ayuda de la Dra. Camila Palma,
especialista en odontología maternoinfantil y profesora de la Maestría de
Odontopediatría, en la Universidad de
Barcelona, vamos a resolver todas tus
dudas. Con sus consejos podrás lucir
una sonrisa de oreja a oreja y, sobre
todo, ayudar a que tu hijo nazca sano.
¿Es verdad que el
embarazo pone en riesgo
mis piezas dentales?
Acude al dentista para que revise cómo
se encuentran tus encías y dentadura,
por si fuera necesario algún tratamiento.
Seguro que has oído más de una vez
que a tu boca le sienta fatal el embarazo. Y te preguntas si es cierto el mito
que dice que cada embarazo cuesta
un diente. La respuesta ni es un sí, ni
es un no: depende de la atención que
prestes ahora a tu higiene dental.
En contra de la creencia popular, no se
ha demostrado una relación directa entre la caries y el embarazo. Sin embar-
go, la gestación propicia una serie de
cambios en la conducta alimentaria y
a nivel bucal que pueden promover la
formación de caries:
■ Ciertas bacterias aumentan durante
el embarazo.
■ En el embarazo, la saliva se vuelve
más ácida y se disminuye el potencial
de remineralización (menor cantidad
de calcio y fosfato).
■ Se ingieren más alimentos debido a
una mayor necesidad energética.
“Por todas estas razones (el aumento
de la frecuencia y la cantidad de los alimentos, de las bacterias y de la acidez
salival, así como la poca atención que
se presta a la salud oral) el riesgo de
caries de la futura madre puede verse
elevado”, explica la doctora Palma .
¿Si no cuido mi boca,
perjudicaré a mi bebé?
Desde hace más de una década,
diversos autores han señalado una
posible asociación entre la periodontitis materna (enfermedad de las encías
y huesos que soportan el diente, de
origen bacteriano) y los partos prematuros y/o bebés con bajo peso al nacer.
“Sin embargo, aún no resulta claro si
esta enfermedad es la causa o forma
parte de otros factores maternos. Lo
que sí resulta evidente es la necesidad
de extremar los cuidados dentales y
de las encías en la madre durante el
embarazo, como medida para reducir
los partos prematuros y la cantidad de
bebés con bajo peso al nacer”, afirma la
especialista. Por eso, aconseja que “toda mujer embarazada o que planee un
embarazo acuda al dentista para recibir
la información y cuidados preventivos
adecuados. Se ha comprobado que la
reducción de caries y gingivitis en la
mujer no sólo mejora su propia salud,
sino que reduce el riesgo de transmisión de bacterias a su futuro hijo. Las
madres que participan en programas
preventivos y educativos tienen hijos
con menos caries”, añade.
¿Mi bebé consigue el calcio
para sus huesos de mis
dientes?
Existe la creencia popular que el bebé
roba el calcio de los dientes de su madre para poder construir sus huesos, sin
embargo no es cierto. “El bebé nunca
obtiene calcio de los dientes de la
madre. Cuando el bebé necesita calcio,
lo obtiene a través de la dieta materna,
pero nunca de sus dientes”, señala
Camila Palma. Por lo tanto, que tu hijo
crezca dentro de ti no tiene por qué
influir en la salud de tus dientes.
¿Por qué me duelen
tanto las encías?
Del 60 al 75% de las gestantes padecen
gingivitis. Consiste en una inflamación
de las encías que se encuentran más
enrojecidas, sensibles y con tenden-
cuidado con
los vómitos
Los vómitos que padecen muchas
mujeres en el embarazo pueden ocasionar un desgaste del esmalte de
sus dientes, lo cual aumenta el riesgo
de caries y la sensibilidad dental. En
estos casos se recomienda:
■ Realizar enjuagues bucales diluyendo una cucharada de bicarbonato sódico en un vaso de agua para
neutralizar el ácido, inmediatamente
después del vómito.
■ Si sufren de sensibilidad dental,
lo mejor es que visiten a un odontólogo para conocer las medidas
terapéuticas. Existen colutorios y
pastas dentales especiales, pero es el
odontólogo quien debe recetarlos.
Una medida
básica pero eficaz:
lavarse los dientes
varias veces al día
8 CONSEJOS PARA
TI Y TU BEBÉ
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Cuando planees tu embarazo o
sepas que estás embarazada, visita a tu dentista para que realice un
examen bucal y te indique el riesgo
de enfermedad periodontal y caries,
y las medidas preventivas a seguir.
Si padecías gingivitis o periodontitis antes del embarazo,
debes visitar al dentista para que te
indique el procedimiento a seguir.
Si padeces de reflujo o vómitos,
el esmalte de tus dientes puede
erosionarse. El dentista puede indicarte cómo neutralizar los ácidos
del estómago y evitar las caries y/o
la sensibilidad dental.
Debes mantener una higiene
oral minuciosa: cepillarte después de cada comida o merienda
y pasarte el hilo dental entre los
molares cada noche. Si tu dentista
lo indica, puedes utilizar enjuagues
de flúor o clorhexidina, así como
chicles a base de xilitol.
Tu alimentación puede influir
en el crecimiento y desarrollo
de los dientes de tu bebé. Es muy
importante mantener una dieta
equilibrada y evitar el consumo de
dulces, zumos industriales, patatas
embolsadas, bollería y refrescos,
especialmente entre las comidas.
Cuando nazca tu bebé, podrás
evitar que padezca caries en un
futuro. Aprovecha el baño para limpiarle las encías con una gasa, un
pañito humedecido o un dedal de
silicona. Cuando le salga el primer
diente de leche, es indispensable
limpiarle la boca después de la
lactancia o el biberón.
Para no transmitir a tu bebé las
bacterias de tu boca, que se
contagian a través de la saliva,
evita hábitos como compartir cucharas, limpiar su
chupete metiéndolo
en tu boca, etc.
Antes de que tu
bebé cumpla un
año, llévale al Odontopediatra para que
te informe de cómo
evitar las caries.
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Fotografías: cortesía de la doctora camila palma, © 2009 jupiterimages corporation y archivo m&B
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cia al sangrado espontáneo o ante
estímulos, como cepillarse los dientes o
masticar. La causa está en las hormonas. El elevado aumento de progesterona y estrógenos afecta, en especial, a
las mucosas, entre ellas, las encías; “sin
embargo, el mecanismo por el cual las
hormonas aumentan la inflamación
de éstas se desconoce. Lo que sí se
ha determinado es que si una mujer
presenta gingivitis antes del embarazo,
la enfermedad se agrava durante la
gestación”, señala la especialista.
cindibles en las mujeres que antes del
embarazo ya presentaban gingivitis o
periodontitis.
¿Qué cepillo uso, eléctrico
o manual?
Un pequeño porcentaje de embarazadas presenta un crecimiento localizado
de la encía, generalmente entre los incisivos superiores, llamado granuloma
del embarazo. “Es una lesión vascular,
benigna y sin síntomas, de causa desconocida, que sangra fácilmente y que
disminuye o desaparece tras el parto”,
afirma la doctora Palma. A veces, es
necesario eliminarlo quirúrgicamente.
Si la técnica de cepillado es correcta, el
cepillo dental eléctrico ha demostrado
ser más efectivo en la eliminación de la
placa bacteriana (causante de la mayoría
de enfermedades bucales). Por ello, es
importante que la mujer embarazada
reciba del profesional sanitario las indicaciones sobre cómo realizar un buen
cepillado. Algunas normas básicas son:
■ Éste debe durar tres minutos y los
movimientos han de ser cortos y suaves.
■ El cepillo se debe mantener en un ángulo de 45º, haciendo que los filamentos
se desplacen sobre la línea de las encías.
■ Hay que cepillar bien cada diente
antes de pasar al siguiente.
■ Se deben eliminar los restos de
comida que se han quedado entre los
dientes con hilo o seda dental o cepillos
interproximales.
¿Cómo debo cuidar mi
boca en el embarazo?
¿Puedo hacerme un
tratamiento odontológico?
Todas las mujeres que están embarazadas deben tener unas estrictas medidas
de higiene bucal, que incluyan:
■ Cepillado efectivo y frecuente (mínimo, dos veces al día).
■ Uso de hilo dental diario o cepillos
interproximales y colutorios de acuerdo
a las indicaciones del profesional.
■ Todas las embarazadas deberían ir
al dentista. Estas visitas son impres-
La evidencia indica que no existe
ningún inconveniente en realizar tratamientos dentales durante el embarazo,
aunque la práctica habitual limita los
tratamientos que no sean de urgencia al
segundo trimestre.
■ En relación a la anestesia, se puede
utilizar en embarazadas con seguridad.
■ Respecto a las radiografías, el haz de
rayos no se dirige hacia el abdomen y la
cantidad de radiación es muy pequeña;
por lo que el riesgo de dañar al feto es
1.000 veces menor que el riesgo natural
a padecer un aborto espontáneo.
■ Si la madre tiene una infección, lo
ideal es que no se administre ningún
fármaco, especialmente durante las
13 primeras semanas; sin embargo, a
veces no es posible. “Afortunadamente,
la mayoría de fármacos utilizados
en odontología (a excepción del
metronidazol y la aspirina), pueden
ser utilizados con relativa seguridad.
La penicilina y amoxicilina son antibióticos efectivos, pero
más
siempre requiere una
información
sobre tu salud
consulta previa con el
bucodental en
www.
ginecólogo”, explica la
embarazo
doctora Camila Palma.
sano.es
Me ha salido un bulto en la
encía, ¿es grave?
Aunque estés embarazada, puedes
someterte a
algunos tratamientos.

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