EL PODER DEL PENSAMIENTO POSITIVO

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EL PODER DEL PENSAMIENTO POSITIVO
Aquello que nos decimos a nosotros mismos afecta de manera
importante a la forma en como vemos e interpretamos la
realidad, como afrontamos los problemas, nuestras expectativas
y sobre todo la calidad de nuestras vidas y nuestra actitud
para abordar proyectos, sueños e ilusiones.
Aunque nos cueste creerlo, somos o nos convertimos en lo
que pensamos. Si nuestro discurso interior es negativo pues
eso somos: personas pesimistas que transmitimos y
contagiamos a nuestro alrededor de energía negativa. Por el
contrario, si nuestros pensamientos son positivos, todo a
nuestro alrededor es fuente de optimismo, posibilidades infinitas
y
nos transformamos en personas creativas, alegres,
simpáticas que emanamos energía positiva.
Los pensamientos, tanto positivos como negativos, son los
precursores de ideas, sentimientos y emociones. Por lo que en
función de como sean estos en tu mente, recogerás emociones
positivas o negativas. Nuestra mente subconsciente es una
recopilación de todo lo que pensamos. Por eso los
pensamientos más corrientes crean las actitudes inconscientes
y los comportamientos
más arraigados.
Para comprender mejor cómo funciona el pensamiento positivo,
necesitamos recurrir a una imagen simbólica de nuestro
subconsciente. Imagina que tu cerebro es como una nuez
grande dividida en dos mitades, la superior y la inferior. La
diverrisa
c/ Falcó 34 Urbanización El Serrat 08480 L’Ametlla del Valles (BARCELONA)
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parte superior es la mente consciente, la que contiene tus
pensamientos instantáneos. La parte inferior es el
subconsciente, en él residen los diversos programas innatos
que necesitas para vivir, como la respiración, la digestión, las
emociones, así como otros muchos programas que has creado
tú como, las creencias, caminar, hablar, escribir, conducir, etc..
Imagina ahora, que estás aprendiendo a ir en bicicleta. Cada
vez que te montas, pones en marcha un pensamiento
consciente de la parte alta de tu cerebro: Pedalear, mantener
el equilibrio, corregir con el manillar derecha, izquierda, freno,
etc. Durante varias semanas necesitarás tener ese pensamiento
consciente hasta que se haya implantado el programa
automático, (hábito/ habilidad), con el que utilizarás la bicicleta
sin detenerte a pensar en cada uno de los movimientos
necesarios para desplazarte y mantener el equilibrio. Ese
programa quedó establecido en la mitad inferior de tu cerebro,
el subconsciente. “Tienes ahora un nuevo programa
subconsciente”.
Esto explica cómo el ciclista avezado, es capaz de sortear
caminos de todo tipo, sin
ni siquiera ser consciente de que lo
está haciendo. El subconsciente hizo todo el trabajo. Todo
pensamiento consciente repetido durante una temporada, se
convierte en un programa. Por tanto, ¿qué ocurre cuando has
pensado conscientemente durante una y otra vez “soy un
fracasado” “Todo lo malo me pasa a mi” “Seguro que me
equivoco”? Sin pretenderlo siquiera, te has implantado un
programa automático. Conseguirás arruinar tu vida sin el menor
esfuerzo.
diverrisa
¿Cómo encaja todo esto con el pensamiento positivo? Muy
fácil. Tenemos
un promedio de más de 50.000 pensamientos
al día. De éstos, para la gran mayoría de las personas,
muchos de ellos son negativos: Estoy gordo. Estoy perdiendo
memoria. No tengo dinero para pagar mis facturas. Nada de lo
que intento me sale bien.
Soy un desastre. Todo me sale
mal. Por que siempre me pasa a mi? Ya lo he fastidiado, Que
tonto soy, Siempre pillo el carril de los lentos, Seguro que no
lo consigo. Esto es muy difícil. Mejor lo dejo. No vale la pena
esforzarse...
Seguro que te estás viendo... así que un buen número de
nuestros pensamientos tienen signo negativo, ¿qué clase de
actitud subconsciente va a establecerse? Una actitud, sin
dudarlo, predominantemente negativa. De esta manera
saboteamos nuestra vida, nuestra alegría y nuestra salud, sin
darnos apenas cuenta de que lo estamos haciendo.
Por eso hay muchas personas que se preguntan cómo han
caído en el desánimo, cuando son ellos mismos quienes han
creado las pautas automáticas con sus pensamientos
reiterados. Lo mismo que nos programamos para conducir un
coche sin pensarlo, también lo hacemos para llegar con retraso
a todas partes. o abandonar un proyecto por falta de interés.
Luego le echamos la culpa a la crisis o al vecino.
Nos han enseñado con demasiada frecuencia a desconfiar de
nosotros mismo y de los demás, La gente malpensada va llena
de comentarios derrotistas, que va repitiéndose continuamente.
Incluso cuando les va bien. Siempre piensan que los logros
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son producto de la casualidad y nunca reciben con
agradecimiento todo lo bueno que la vida les da y terminan
diciendo: “Lo bueno siempre dura poco”. “No puede ser cierta
tanta felicidad”. “Seguro que esto acaba mal”.
En cambio la gente que hace pensamiento positivo, con miras
hacia el éxito y con voluntad de salir adelante, va por la vida
con afirmaciones muy distintas: “Todo va a salir bien”.
Tenemos muchas posibilidades”. “Si tengo confianza en mi
puedo lograrlo”. “La buena suerte siempre es para quien la
busca”. “Hay que tener empeño e ilusión”. “Hay que ser
valiente y constante”.
Y si algo malo les sucede, que a veces pasa, la gente positiva
no se hunde, muy al contrario, su pensamiento es de confianza
y esperanza y entonces se dicen:
“No hay mal que por bien
no venga”.
“No hay mal que cien años dure”. “Siempre hay que buscar el
lado positivo de las cosas”. ¿Que puedo aprender de este
fracaso? “La próxima vez todo va a estar mejor”. “Un fracaso
menos, ya estoy más cerca del éxito”. “Pase lo que pase hay
que salir adelante”.
La gente negativa ve las situaciones difíciles como en una
película, se miran a sí mismos como los perdedores, los
derrotados, los últimos de la fila, las víctimas, mientras que la
gente positiva se enfoca así misma como luchadores,
emprendedores, dueños de su destino, creadores continuos de
su propio guión.
diverrisa
Si acaso piensas que estas en el grupo de aquellas personas
que todavía no practican el pensamiento positivo, no te apures
ni te deprimas. La buena noticia es que puedes cambiar y
empezar ahora mismo a practicar y a cambiar tu vida de
manera espectacular.
Empieza por explicarte las cosas de una
manera diferente, con mayor optimismo, con más cariño y
respeto hacia ti mismo, con esperanza, con ilusión.
Una vez que has entendido cómo funcionan los esquemas
subconscientes, te das cuenta de que nadie tiene por qué ser
un amargado. Tu realidad depende en gran medida de tus
pensamientos conscientes. A partir de que te ocupes en
modelar tu mente, los nuevos pensamientos conscientes
crearán nuevos programas subconscientes. Del mismo modo
que implantas una pauta subconsciente para conducir sin
esfuerzo un coche o practicar un deporte, también es posible
desarrollar una pauta subconsciente que te encamine a la
práctica habitual del pensamiento positivo. Pero se necesita
establecer un cambio de enfoque y pensar conscientemente en
positivo de manera disciplinada y dedicar algún tiempo a ello.
Mantén conversaciones positivas contigo mismo y en poco
tiempo veras la diferencia en tu actitud personal, en tus
acciones y en tu vida. Para ello es necesario que cambies
algunos hábitos de tu pensamiento, quizás al principio te
notarás algo incómodo/a, es normal, pero a medida que vayas
practicando, lograrás adquirir una nueva manera de pensar que
desbancará la anterior. “No se puede pensar positiva y
negativamente a la vez” es como reírse de un chiste y llorar
de pena al mismo tiempo. “Imposible”
diverrisa
La forma más común de hacerlo es crear de forma voluntaria
y consciente afirmaciones positivas en nuestro pensamiento y
obligarnos a formular frases con sentido positivo a pesar de
que no nos apetezca hacerlo, porque creamos todo lo contrario.
No importa, nuestro subconsciente no reconoce si el
pensamiento es real o auto-impuesto. Lo importante es que el
pensamiento positivo se dé y que adquiramos la habilidad y el
hábito de hacerlo, formulando, siempre que seamos
conscientes, pensamientos y afirmaciones de carácter positivo.
ESTRATEGIAS DE PENSAMIENTO POSITIVO
Para desarrollar el hábito de pensar de forma positiva,
podemos seguir los siguientes pasos:
1 - Toma el hábito de anotar aquellas situaciones de la vida
cotidiana que te desencadenan emociones negativas (miedo,
ira, estrés, envidia, pena, mal humor) y te hacen sentir mal.
Hazte alguna de estas preguntas:
¿Cuál es la situación concreta que me ha hecho sentir mal?,
¿Cómo me he sentido/ me siento?.
¿Que es lo que he pensado? (Imágenes, consecuencias,
recuerdos, etc),
¿Qué conclusiones he sacado de esta situación?,
.
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Si no puedo responder a esto, también puedo preguntarme:
¿Qué intuyo que puedo haber pensado
sobre esto que me
haya hecho sentir mal, aunque no esté del todo seguro/a? o si
le hubiera ocurrido lo mismo a otra persona, ¿qué podría haber
pensado él/ella? Al principio puede no ser fácil responder a
estas preguntas, pero es cuestión de práctica. A medida que te
vayas habituando a reflexionar sobre estas preguntas, las
respuestas irán saliendo cada vez de forma más fluida.
2 - Pregúntate:
¿Qué
tipo de pensamiento he aplicado?,
¿En que medida he deformado, exagerado o minimizado
la realidad para llegar a dichas conclusiones?,
¿Qué evidencias -hechos objetivos- tengo de que las
cosas son tal como yo las interpreto y no de otra forma?,
¿Qué elementos, cosas, o circunstancias no he tenido en
cuenta?
3 - Piensa:
¿De qué otra forma más positiva podría enfocar la
situación?,
¿Puedo hacer algo, por pequeño o insignificante que sea,
para mejorar la situación o que me haga sentir mejor?,
¿Qué le diría a una amiga/o para ayudarla en una
situación similar?.
5 - Evita preguntas victimistas o que te debiliten del estilo de:
¿Por qué me tiene que pasar esto siempre a mí? o
¿Qué voy a hacer ahora?
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o afirmaciones del tipo “Esto es insoportable”, “Ya no
aguanto más”.
En su lugar, plantéate preguntas que te aporten sentimientos
de optimismo y esperanza, o que te permitan opciones
alternativas:
¿Qué puedo hacer para resolver esto?,
¿Qué otras opciones tengo que todavía no he planteado?,
¿Cómo puedo contradecir mis conclusiones más
pesimistas?,
¿Qué puedo sacar de positivo de esta situación?,
¿Qué puedo aprender de ella?, etc.
AFIRMACIONES POSITIVAS PARA TRANSFORMAR
NUESTRA ACTITUD MENTAL
Las afirmaciones son pensamientos positivos que repetimos de
forma consciente para anclarlos en nuestra mente inconsciente.
A través de la repetición de frases positivas (afirmaciones)
alimentamos nuestro subconsciente con un repertorio de ideas
positivas y
productivas que nos encaminaran a tener
emociones positivas y a tener actitud proactiva para realizar
acciones productivas.
Nuestra mente es increíblemente poderosa, pero si no le
damos un objetivo claro, andará gastando toda su energía en
dar vueltas y más vueltas a pensamientos recurrentes, saltando
de idea en
idea sin saber que hacer. Por el contrario, si
ponemos en ella -en la mente- ideas claras y propósitos
definidos, nos ayudará a tener una emoción positiva y a crear
una actitud que nos impulse a la acción.
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Aquí te ofrezco algunas de las afirmaciones que me han sido
útiles y que espero que también lo sean para ti. Sin embargo
es muy importante que crees tus propias afirmaciones, ya que
si lo haces, su poder es mucho más efectivo y maravilloso.
Pruébalo, hazte unas tarjetas y escribe una afirmación en cada
una de ellas, llévalas contigo, léelas, Toma una de ellas al
azar de vez en cuando, cómo si fuera tu carta de la suerte.
Memorízalas. Amplia tu repertorio. Cuelga algunas de ellas en
lugares visibles donde puedas verlas mientras trabajas, tomas
café o te aseas y verás que fácilmente da un giro positivo
toda tu vida.
1. Desde este instante puedo cambiar mis pensamientos y
hacerlo con ilusión y esperanza.
2. Desde ahora estoy preparado para iniciar una nueva vida
positiva.
3. Soy capaz de hacerlo. Realmente puedo lograrlo. Quiero
inténtalo ahora y llevar conmigo pensamientos positivos y una
vida positiva fruto de esos pensamientos.
4. El pensamiento positivo afecta todo lo que hago e impregna
de elevadas vibraciones todo lo que me rodea. Mi mente atrae
a lo positivo.
5. Agradezco lo que tengo y lo que soy. La vida positiva se
inicia ahora desde donde estoy.
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6. PUEDO y QUIERO. Puedo ser mejor, quiero ser mejor.
7. SOY CAPAZ. Yo soy capaz de ser mejor y lograr éxito en
mis metas positivas, para la nueva vida que desde ahora
iniciaré.
8. Vivo en el presente y construyo mi futuro con valentía e
ilusión. No hay edad para el cambio,
9. QUIERO iniciar el cambio y comenzar desde este instante a
vivir una vida positiva, pensando cada día más y más cosas
positivas.
10. Me permito cometer errores mientras estoy aprendiendo.
Sólo quien intenta ser mejor, vivir mejor y aprender más,
comete errores. Cada error es una enseñanza que nos permita
avanzar.
11. Perdonar deja una sensación de libertad maravillosa. Estoy
en paz conmigo y con los demás
12. Vivo en el presente, el mejor lugar del planeta está donde
yo estoy en este instante.,
13. Soy fuerte y puedo vencer cualquier obstáculo.
14. Tengo confianza en mi mismo y puedo confiar en los
demás.
15. Quiero y voy a cumplir mis metas. Me merezco tener éxito.
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16. Tengo la vida que deseo tener. Y mejoro cada día.
17. Tengo la capacidad y la voluntad para triunfar. Soy capaz
de lograrlo.
18. Nada sucederá en mi vida mientras yo no lo quiera.
19. Me libero de las experiencias negativas. El pasado me
sirve para aprender.
20. Soy dueño/a de mis emociones. Yo decido empezar a ser
feliz.
21. Merezco salud, amor y felicidad.
22. No hay problemas sino oportunidades.
23.Cada dificultad es una oportunidad que la vida me da para
mi personal desarrollo.
24. La enfermedad puede ser un obstáculo para el cuerpo,
pero no para la voluntad y la capacidad de emitir buenos
pensamientos.
25. Si persevero y soy constante en mis deseos, los lograré.
SOY CAPAZ Y ME LO MEREZCO.
26. Las penas y las nostalgias se marchan, YO DECIDO hacer
mi mundo positivo
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27. Cuando me preparo para lograr lo mejor, la fuerza interior
actúa más allá del tiempo y del espacio, con el fin de que lo
consiga.
28. Al despertar, soy agradecido por el nuevo día, y al mirarme
al espejo pienso
y creo que será un buen día para mi.
29. VISUALIZO las cosas que ya son, imaginándolas como
quiero que sean mejores. Mi familia . Mi trabajo, Mi ....
30. Quiero pensar en positivo y en un mundo mejor.
31. Mis
metas son justas, lógicas y nobles, sin importar en el
lugar en que ahora esté, pues ese es precisamente el mejor
lugar para iniciar el cambio positivo en mi vida.
32..Yo construyo mi propia vida. Me preparo para mañana
trabajando bien hoy.
33.
QUIERO HACERLO. PUEDO HACERLO. SOY CAPAZ.,
SOY IMPORTANTE. DECIDO HACERLO YA.
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